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Bacterias Quimiolototroficas
Bacterias Quimiolototroficas
1. Introducción.
Las bacterias oxidadoras del azufre y/o del hierro constituyen un grupo principal de microorganismos
quimiolitotrofos, que son aquellos capaces de obtener energía a partir de sustratos inorgánicos, por lo que la
obtención de ATP y poder reductor de la respiración se realizará a través de un sustrato inorgánico, que en el caso de
las bacterias del hierro, es el hierro II o ferroso (Fe2+), que se transforma en hierro férrico (Fe3+), y en el caso de las
bacterias del azufre, azufre elemental (So), sulfuro de hidrogeno (H2S), tiosulfato (S2O32-) y otros compuestos de azufre
reducidos, para llegar a formar ácido sulfúrico (H2SO4).
La mayoría de bacterias oxidadoras de azufre y/o hierro, usan CO2 como fuente de carbono, fijándolo a través del ciclo
de Calvin, por lo que son quimiolitoautótrofos (= quimiolitótrofos autótrofos). Por el contrario, muchas de ellas
carecen de enzimas implicadas en el ciclo de Calvin y como fuente de carbono utilizan sustratos orgánicos como
glucosa o aminoácidos, (como en el caso del género Beggiatoa), siendo, por tanto, mixótrofos.
En general, las bacterias quimiolitótrofas del azufre y del hierro son aerobias, ya que presentan como aceptor final de
electrones al oxígeno molecular (O2), aunque algunas especies utilizan como aceptor final nitrato (NO 3-), siendo
anaerobios.
Todas las especies quimiolitótrofas del hierro y del azufre son gramnegativas y pertenecen al phylum Proteobacteria, y
dentro del mismo, se encuadran dentro de las clases Alpha, Beta y Gamma. Así pues, los géneros más relevantes que
comprenden a las bacterias quimiolitótrofas del azufre y del hierro son Acidithiobacillus (antiguo Thiobacillus) (clases
Alpha, Beta y Gamma), Achromatium (clase Gamma) y Beggiatoa (clase Gamma).
Realmente, los géneros nombrados oxidan principalmente el azufre, y sólo algunas especies como
Thiobacillus ferrooxidans oxidan hierro, sin embargo, todas aquellas especies que oxiden hierro, también oxidarán
azufre.
Cabe mencionar a una especie relevante oxidadora del hierro, que pertenece al phylum Nitrospirae y al
género leptospirillum, llamada Leptospirillum ferrooxidans que presenta forma espiralada y es gramnegativa.
Los compuestos reducidos del azufre se usan como donadores de electrones, que son: el sulfuro de hidrógeno (H2S), el
azufre elemental (S) y el tiosulfato (S2O32-). Normalmente el producto final de la oxidación es el sulfato (SO42-).
La oxidación del H2S, ocurre por etapas: la 1ª etapa produce azufre elemental (S°), que algunas bacterias lo depositan
dentro de la célula en forma de gránulos intracelulares de reserva energética (como en el caso de Beggiatoa), y
cuando se agotan las fuentes externas de H 2S, utilizan este azufre elemental almacenado, para pasarlo a sulfato
(SO42). En aquellas situaciones donde el azufre elemental está disponible mediante fuentes exógenas, el organismo
crece adherido a partículas de azufre, dada la alta insolubilidad del azufre elemental (S°).
Existen 3 fases o formas para la oxidación del azufre, dependiendo de la fuente de éste. En dos de ellas se produce a
partir del azufre elemental y del sulfuro. El sulfuro o el azufre, es en 1º lugar oxidado a poliazufre-sulfuro por una
sulfuro oxidasa que requiere glutatión (GSH) y forma un polímero de glutatión azufrado. Es la forma en que el azufre
elemental es directamente oxidado.
El sustrato de partida se oxida primero a sulfito (SO32-), y luego el sulfito se oxida a sulfato (SO42-), esta última
oxidación la pueden llevar a cabo, por ejemplo, bacterias del género Acidithiobacillus. Hay dos modos de realizarla:
En este apartado, se tratarán fundamentalmente los mecanismos de obtención de energía en forma de ATP,
siguiendo el proceso de oxidación del hierro por parte de quimiolitoautótrofos aerobios, a partir de sustratos con base
de hierro, un aceptor final de O2, y particularidades bioquímicas exclusivas.
Los principales grupos de bacterias que realizan la oxidación del hierro, presentan un hábitat casi común en el cual
predomina la presencia de oxígeno molecular, agua dulce (un río contaminado), sales inorgánicas de hierro y la
presencia de un pH ácido, o neutro.
Simultáneamente, el ATP se sintetiza a través de las ATPasas de membrana, que translocan protones del medio
exterior a favor de gradiente, sin embargo, la tasa de producción total de ATP es baja, debido al elevado potencial que
presenta el donador de electrones inicial (Fe2+).
La reacción general que acontece es: 2 Fe 2+ + ½ O 2 + 2H + 2 Fe 3+ + H 2 O
Cabe añadir, que pese a que exista un gradiente natural en el paso de protones del medio exterior al interno
a través de las ATPasas, dichos protones han de consumirse rápidamente en la formación de H 2O a partir de O2, para
mantener el pH interno bacteriano entre 6.5-7.
Para finalizar, hay que indicar que las bacterias del hierro, gastan la mayor parte del ATP producido en las reacciones
del transporte inverso del electrón para obtener el poder reductor necesario en la fijación de CO 2 (de ahí su
autotrofía). Por tanto, los grupos de bacterias oxidadoras del hierro necesitan oxidar enormes cantidades de Fe 2+ para
producir la energía suficiente para llevar a cabo los diferentes procesos celulares.
Las bacterias del hierro intervienen principalmente en el ciclo del hierro, que tiene su parte relevante en la oxidación
del mineral pirita (FeS2).
Dicha oxidación (del azufre y/o hierro) tiene lugar en las minas de carbón, cuando las rocas que contienen pirita se
someten a movimiento, la pirita entra en contacto con las bacterias, éstas acidifican el medio, provocando el
fenómeno de "drenaje ácido de las minas", afectando gravemente a ríos y lagos colindantes, y a la fauna y flora del
lugar.
En cuanto al hábitat y ecología de los dos principales grupos de bacterias oxidadoras de hierro, podemos decir, que
ambos son organismos aerobios y quimiolitoautótrofos estrictos, que se desarrollan en ambientes con grandes
cantidades de sulfato, y donde el ácido sulfúrico es el ácido predominante.
- Leptospirillum ferrooxidans: se desarrollan cuando la temperatura oscila entre 30-50ºC y pH entre 1-2.
Se encuentran en las aguas profundas de las minas, envueltas en un biofilm rosado que flota sobre la superficie del
agua que surge de la mina.
Son utilizados para la extracción de metales de los minerales (proceso conocido como biooxidación).
Las bacterias del azufre se presentan en hábitats y ambientes ricos en H2S como manantiales sulfurosos, lechos de
algas en putrefacción, chimeneas hidrotermales, sedimentos sulfurados de agua dulce, etc.
Presentan gran importancia biotecnológica y ecológica, ejemplo de ello puede ser la biominería o la biolixiviación de
minerales como el uranio y el cobre. (Los metales se liberan del mineral por solubilización con el ácido sulfúrico
derivado de la oxidación del azufre en la membrana de las bacterias oxidadoras del azufre como Acidithiobacillus).
Participan también en la desulfuración del carbón ayudando a separar el azufre inorgánico de éste. Lo transforman en
un compuesto soluble en agua para evitar que en la combustión se produzca dióxido de azufre (SO 2), un gas
contaminante, que en la atmósfera da lugar a lluvia ácida.
Por tanto, pueden reducir la contaminación ambiental, la lluvia ácida, así como eliminar otras formas de azufre.
- Brock Biología de los microorganismos 12ª ed. Madigan y otros Pearson-Prentice Hall 2009, Madrid.
- Tesis "Estudio microbiológico de las incrustaciones y corrosiones en captaciones de agua subterránea". Autor:
Agustín J. Senderos Domínguez. Madrid, 2001.
- Bioquímica de los microorganismos. Editorial Reverté S.A. Autor: Ramón Parés i Farràs, Antonio Juárez Giménez.