Estás fueron las declaraciones de Ifá para Orúnmìlá
Cuando iba a la guerra con los 401 Irumole
Fue aconsejado de ofrecer Ebó
El cumplió
Ifá, por favor se paciente
Edù la paciencia es el lema
Quien sea paciente tiene garantizado el éxito financiero
Quien sea paciente tiene garantizado una buena esposa
Quien sea paciente tiene garantizado los hijos Quien sea paciente tiene garantizado todo el Iré de vida
Quien sea paciente tiene garantizada una batalla victoriosa.
Historia:
En la estancia anterior los 401 Irumole decidieron ir a la guerra.
Orúnmìlá fue a consultar a Ifà y fue aconsejado de ser paciente y no ir junto con los otros Irumole el mismo día. Orúnmìlá cumplió.
Cuando el finalmente decidió ir a la guerra,la otros Irumole ya habían
conseguido la victoria y tomado todos los botines de la guerra. No quedaba casi nada. Orúnmìlá se preguntó que quedaría para el, después de haber llegado tan tarde. Derrepente, el vio a una vieja mujer sentada bajo un árbol. Esta vieja mujer había sido ignorada, porque los Irumole creía que ella no tenía ningún valor utilidad para ellos, por ser muy vieja.
Mientras que Orúnmìlá siguió meditando la situación Esú odara
apareció y le aconsejó tomar a la mujer y llevarla a su casa, como botín de guerra el accedió y cuando regresó a la casa el tomó cuidado de la vieja mujer y le dio mucha comida, ropa y la acomodó cómodamente. Después que pasó cierto tiempo, la mujer le preguntó a Orúnmìlá si el conocía su nombre. Orúnmìlá que nunca se había molestado en preguntar su nombre le dijo que no sabía. Ella le dijo a Orúnmìlá que su nombre era Súúrú (paciencia) y que todo sus hijos habían sido capturado por los Irumole durante la guerra. Ella declaró que sus hijos se llamaban Aje (riqueza), Okùn (cuentas), Idę (latón), Ològínnínginníaso Iràdà (vestimentas valiosas de la tierra de Iràdà) etc.. Ella le dijo a Orúnmìlá que todos ellos pronto volverían a ella.