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Residuos y contaminantes en suelos

La peligrosidad dependerá de las características del emplazamiento. Si el vertedero se ubica

en un lugar controlado, estará aislado del entorno, mientras que en la mayoría de los restantes

vertederos, el residuo está en contacto con el suelo, y las aguas de lluvia producen lixiviados

que percolan y se mezclan con los ácidos procedentes de la descomposición de la materia

orgánica, de esta forma se solubilizan numerosos materiales alcanzando las aguas

subterráneas.

Plaguicidas

Entre los distintos plaguicidas podríamos distinguir entre:

a. Insecticidas:

Utilizados para acabar con las plagas de insectos, pero no todos actúan igual. Algunos actúan

sobre los insectos adultos, otros en las larvas, en los huevos o en todos a la vez. Uno de los

ejemplos más claros es el DDT (diclorodifeniltricloroetano), que tiene una actuación muy

rápida y es muy utilizado; sin embargo, este no se descompone y puede quedar en el suelo

por más de 10 años. Por otro lado, se pueden introducir en la cadena alimenticia y acabar en

el cuerpo humano.

b. Herbicidas:

Son compuestos químicos son capaces de acabar con la vegetación, impidiendo el

crecimiento de las plantas jóvenes y matando a las viejas.

c. Fungicidas:

Este tipo de plaguicida se utiliza para acabar con los hongos y, en la mayoría de las veces,

están compuestas por azufre y cobre.


Actividad minera

Mediante las aguas de relava, la actividad minera produce una gran contaminación al suelo.

Se acumulan elementos como el cadmio, mercurio, cobre, plomo o arsénico, cianuros.

Algunos de los efectos que estos elementos tienen en nuestro organismo son las alteraciones

renales y nerviosas, alterando el carácter de un adulto, y en el caso de los niños provocando

un déficit intelectual.

Acumulación de basura

Cuando la basura se amontona, ya sea en vertederos legales o ilegales, y permanece allí por

un largo tiempo, se da la fermentación de los productos orgánicos, emitiendo gases tóxicos y

filtrándose en el suelo. Así pues, se contamina por bacterias, hongos y patógenos el suelo y

las aguas superficiales o subterráneas que pudiera haber allí. La mayoría de sustancias

residuales que se pueden encontrar en los vertederos o depósitos subterráneos pueden ser:

tetracloruro de carbono, cloro benceno, cloroformo, cloruro de vinilo, cresoles, hidrocarburos

del petróleo y algunos aromáticos; que aparte de ser sustancias tóxicas que no favorecen a las

características químicas del suelo, también afectan al ser humano, llegando a ser algunas,

mortales.

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