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Entrevista a Raúl Rodríguez Freire

La universidad
Por Nelly Richard “de calidad” y
las ruinas del
pensamiento
Raúl Rodríguez Freire es un destacado académico de la Universidad Católica de Valparaíso que reflexiona sobre las
transformaciones –globales y locales– que afectan a la universidad contemporánea. Sus escritos y esta conversación dejan en
evidencia que la repetición mecánica de la consigna “Educación gratuita y de calidad” es completamente insuficiente para
debatir sobre las ideas de universidad y modelos de saber que se requieren ante las mutaciones económico-culturales del
presente. El complejo desafío es revertir un enfoque tecnocrático que legitima sus estándares como de “excelencia”, cuando
basta indagar en ellos para comprobar que son de mercado, y más allá de lo que muchos se imaginan.
Fotos: Cristóbal Olivares

26 sabía usted que: … La agenda de Piñera está llena de Piñericosas.


“Hay que reparar no solo en la función de la universidad sino en su modo
de funcionamiento, cada vez más en manos de la llamada ‘nueva gestión
pública’ (NGP) a cargo de los famosos expertos, y que ha entrado en el
sistema con una batería conceptual que suele emplearse sin traducción
al castellano, quizás para seducir al provincianismo local”.

E
n su influyente libro titula- tificación y no dependieran de la razón y su identidad personal en una era don- dad y capital transnacional. La oferta de
do La universidad en ruinas económica que los controla. Lo saben de el narcisismo del yo adquiere mayor grados internacionales y, sobre todo, la
(1996), Bill Readings comen- muy bien los agentes del management, resonancia. De manera que el derrumbe educación a distancia (e-learning), nece-
ta el desastre de una univer- para quienes la calidad no se encuentra del modelo implica, también, el derrum- sita de un sistema estandarizado ad hoc.
sidad global ya vaciada de en la cosa en sí sino en su administra- be de uno mismo en tanto empresario El famoso Plan Bolonia para unificar el
tradición y sabiduría, al ha- ción, y su meta estriba en alcanzar la de sí. ¡Y por eso que nada es tan simple! sistema universitario europeo, y su in-
ber sido colonizada por el dispositivo satisfacción del cliente. Por otra parte, ¿Se puede debatir localmente sobre la uni- troducción en América Latina, no tiene
empresarial y su lengua burocratizada: habría que recordar que la Organiza- versidad –y sobre las universidades estatales, otro objetivo que reforzar esta nueva
“excelencia”, “convenios de desempeño”, ción Internacional de Normalización, públicas y privadas– sin tomar en cuenta la división internacional del trabajo inte-
“mecanismos de aseguramiento de la ca- encargada de promover las famosas dimensión globalizada del “capitalismo acadé- lectual, donde universidades globales se
lidad”, “control de gestión”, etcétera. normas ISO, surge apenas terminada mico” que uniforma procedimientos y criterios disputarán (en realidad ya se disputan) a
Raúl Rodríguez Freire y Andrés Maxi- la Segunda Guerra para asegurar la cali- a lo largo y ancho del planeta? los estudiantes/consumidores de los paí-
miliano Tello coeditaron el libro Des- dad en la producción de armamento, y –Si bien existe un amplio espectro de ses “en desarrollo”. ¿Quién, viviendo en
campado. Ensayos sobre las contiendas hoy se aplica sin ningún problema a los universidades en Chile, desde algunas Taiwán, Marruecos o Santiago no querrá
universitarias (Santiago, Sangría Edi- llamados “mercados académicos” globa- con plena vocación “pública” hasta otras tener un título de Yale o Princeton?
tora, 2012): un libro clave que incorpo- lizados. “Calidad”, por tanto, no puede centradas en la acumulación de dinero, Por todo lo anterior, tendríamos que
ra ese diagnóstico de B. Readings para ser una consigna a esgrimir, pero debe- las fuerzas transnacionales presionan reparar no en la función de la universi-
mostrar cómo la relación entre universi- mos reconocer que el sistema ha sido para homogeneizarlas exclusivamente dad sino en su modo de funcionamien-
dad y mercado ha disipado cualquier ilu- muy eficaz en universalizarla mediante en función de la rentabilidad económi- to, cada vez más en manos de la llamada
sión de “autonomía del saber”, pero que, un uso acrítico, pues ¿quién podría es- ca. Estas fuerzas están articuladas con “nueva gestión pública” (NGP), un dispo-
sobre todo, dota de un renovado vigor tar contra la calidad? el llamado posfordismo, pero en nin- sitivo a cargo de los famosos expertos,
intelectual el debate en torno a la uni- Hay otro vocablo hoy plenamente incorpora- gún caso el fordismo ha sido dejado de que están desplazando en relevancia a
versidad y su crisis en Chile. Varios otros do al sistema educativo: lo que los economistas lado: hay universidades que controlan los académicos y obliterando la función
textos posteriores de Rodríguez Freire llaman “capital humano”… la hora de llegada de sus profesores me- del intelectual. Hoy, el acento está puesto
esclarecen el modo en que la gestión aca- –Es un término clave que ingresa a diante huella digital, y la misma idea de en lo procedimental, en el cumplimien-
démica –con sus indicadores técnicos de Chile vía los Chicago Boys y El Mercurio, “crédito académico” intenta controlar to de metas medidas tecnocráticamente.
rendimiento y productividad– ha margi- con el fin explícito de transformar a cada el tiempo de trabajo en la universidad. Esta nueva gestión se ha introducido de
nado a las humanidades por considerar lleno en gran parte del sistema universi-
no rentables a la creación y el pensa- tario a partir de una batería conceptual
miento. La universidad tradicional (mo- “Con un 75% de profesores part-time, sin usualmente empleada sin traducción
derna, republicana) se ha visto grave-
mente afectada por la tecnocratización tiempo para investigar y reflexionar, al castellano, quizá como una forma de
seducir al provincianismo local. Así ocu-
del conocimiento. Pero las instituciones
no son bloques homogéneos y, pese a la
en las universidades de hoy el saber rre, por ejemplo, con el benchmarking
(evaluaciones comparativas o sistemas
racionalidad dominante, siempre logran está pronto a ser irrelevante”. de referencia), que inscribe la competi-
abrirse en su interior vías de circulación ción como modelo de relacionamiento y
alternas para la interrogación crítica de a la competencia misma como el fin de
la cultura y la sociedad. cualquier organización.
ser humano en un capitalista o en un Cada vez más y por todos lados, están Tal como muy bien lo has descrito en varios
¿No debería una discusión “cultural” sobre la emprendedor. Al articularse con la edu- apareciendo mecanismos sutiles de de tus trabajos, las nuevas exigencias de mer-
universidad hacerse cargo de desmontar la no- cación, la potencia como “bien de consu- disciplinamiento que entroncan con cado de la universidad flexible precarizan y seg-
ción de “calidad”: una noción que se postula a mo”, un bien que tiene que ver no solo libertades vigiladas. De manera que la mentan la producción de conocimiento. ¿Queda
sí misma como ideológicamente neutra cuando con la inserción del conocimiento en el universidad, tal como existe hoy, tiene algún espacio libre para la teoría y la crítica en
bien sabemos que responde a la visión tecno- mercado, sino también con las compe- muy poco de aquella que, para el caso universidades que demandan cada vez más sa-
crática que rige la economía de mercado? tencias y habilidades que tendrá luego el de Chile, emergió durante la primera beres prácticos?
–Por supuesto, la “calidad” es parte empresario de sí para invertir su propio mitad del siglo XX. No existen ni auto- –En EE.UU., la crisis económica de los
del dispositivo tecnocrático de lo que capital humano. De manera que no solo nomía ni estabilidad laboral ni financia- 70 llevó hacia una transformación de la
podríamos llamar la universidad del hay que replantear el lugar de la univer- miento basal, pilares de la universidad universidad que comenzaba a ser consi-
management o empresarial. Se trata de sidad sino, también, la constitución de moderna. Así las cosas, las radicales derada cada vez más como un espacio
un término que se maneja arbitraria- uno mismo como sujeto, y para ello la transformaciones en curso –pues esta- que sí o sí tenía que ser productivo, ya no
mente y para referir cosas muy distin- ética se vuelve una cuestión de primer mos recién en el comienzo y, por tanto, reflexivo. A la vez que se aumentó la ma-
tas, sin tener la necesidad de definir lo orden. Lo que hace de un profesor un quizá a tiempo de intervenir– respon- trícula, se comenzaron a reducir los pre-
que hace “de calidad”, por ejemplo, a emprendedor, un microcapitalista, es la den a un diseño a escala planetaria que supuestos y a reestructurar departamen-
una carrera académica, a los docentes, al gestión de sí, de su saber o de su capital tiene como meta la configuración de un tos y programas, con el fin de potenciar
casino donde comen los estudiantes o – humano. Es, por ejemplo, lo que sucedió mercado universitario global. De ahí la cursos que los nuevos clientes realmente
dependiendo de la universidad– al lugar con el sociólogo Alberto Mayol, que lue- urgencia con que, por ejemplo, el Ban- necesitaran, como los de composición y
donde estacionan sus autos. Y cuando se go de un par de entrevistas respecto del co Mundial, a través de los ministerios lectoescritura, que terminaron no solo
pregunta qué entender por “calidad”, se movimiento estudiantil gestionó su sa- de Educación, viene entregando dinero desplazando a la teoría sino a la literatu-
nos remite redundantemente a algo tan ber en tanto movimentista o movimen- a cambio de la implementación del lla- ra misma. En Chile, este desplazamien-
técnico como los “mecanismos de asegu- tólogo, de manera similar a como lo hace mado Sistema de Créditos Transferibles. to se dio pocos años más tarde, a partir
ramiento de la calidad” que provienen José Joaquín Brunner respecto de las po- Lo que se busca, aprovechándose de la de la Ley General de Universidades de
de la gestión institucional. Tanto “exce- líticas educativas neoliberales o Manuel vulnerabilidad económica de gran parte 1981, ley que indicaba que, por el bien
lencia” como “calidad” son significantes Antonio Garretón respecto de la transi- de las universidades que se ven prácti- del país, y sobre todo por el de la cali-
vacíos, autorreferenciales, pero que se tología. Todo académico, lo quiera o no, camente obligadas a aceptar las condi- dad de la educación, era necesaria la “li-
presentan como si fueran el resultado pasa a ser un emprendedor en la medida ciones impuestas para poder sobrevivir, bertad de enseñanza”. Libertad que no
de un proceso riguroso y objetivo de cer- en que maneja comercialmente su saber es articular de la mejor manera universi- tenía nada que ver con cátedra alguna,

sabía usted que: ... Los dirigentes de la FIFA metían los tremendos golazos. 27
imaginación teórica y crítica al imponer sumarse. El arte no existe en virtud de
como requisito una forma fija y repetiti- un sujeto creativo (este es un mito mo-
“El 82% de los artículos de va. Cualquier paper repite por lo menos derno y romántico), sino de toda una
humanidades publicados en revistas tres o cuatro veces las “ideas” principales,
y las famosas palabras clave –junto al
fuerza acumulada durante siglos. Rei-
vindicar esa herencia implica reconocer
con evaluación de pares nunca respectivo resumen– pretenden asegu-
rar su rápida recepción y consumo. Pero
que la producción intelectual es común
y que todo el mundo tiene derecho a
son citados, aunque abundan las lo cierto es que ello tampoco ocurre así. ella, cuestión, por cierto, que barre con
autocitas… Entonces, ¿para quién Dos académicos, Asit K. Biswas y Julian
Kirchherr, publicaron hace poco un estu-
la supuesta distinción entre alta y baja
cultura o entre cultura superior y cultu-
se está escribiendo? Para las dio donde señalaban que, para el caso de
las humanidades, el 82% de los artículos
ra popular. En “Un cuarto propio”, Virgi-
nia Woolf señala que las obras maestras
empresas que venden sus bases publicados en revistas que cuentan con no emergen por sí solas, sino gracias al
de datos, a precios exorbitantes, evaluación de pares nunca son citados
(aunque abundan las autocitas)… La pre-
“producto de muchos años de pensar
en común”. Por ello creo que la relación
a las universidades donde gunta que surge entonces es ¿para quién
se está escribiendo? La respuesta no es
entre democracia y literatura debe plan-
tearse en términos distintos a como se
nosotros mismos trabajamos”. muy difícil de encontrar: para las em- venía pensando, porque el lugar del in-
presas que lucran con sus bases de datos telectual con relación al “pueblo” o a los
vendiéndolas a precios exorbitantes a las sectores desfavorecidos sigue siendo
sino con la facultad de crear “Unidades América Latina. ¿Qué lugar le cabe hoy al ensayo universidades donde nosotros mismos problemático. Fue en nombre del “pue-
básicas y superiores productoras de ser- crítico en un mundo universitario invadido por la trabajamos, bases de datos que las agen- blo” que el latín se comenzó a quitar de
vicios educacionales”; en otras palabras, industria del paper, siendo el ensayo el género cias acreditadoras prácticamente obligan la enseñanza, afirmándose que era una
de privatizar la educación. La masifica- predilecto para reflexionar culturalmente sobre a subscribir pues es una de las variables lengua elitista dominada por conserva-
ción de la matrícula responde a una rear- la literatura, el arte y las humanidades? a considerar cuando se mide la “calidad” dores. Pero yo me pregunto ¿por qué el
ticulación del capital y a nuevas formas –Es una pregunta que ronda como un bibliográfica de una universidad. Así las pueblo no puede aprender latín? El latín
de segmentación social en base a niveles espectro el siglo XXI. Y uso la figura del cosas, la escritura del ensayo (y la defensa no le pertenece a una clase, sino a quien
de consumo, más que a objetivos demo- espectro pues como tal retorna cada cier- de las revistas independientes) adquiere quiera aprenderlo. Ha sido precisamen-
cráticos. Por otro lado, la certificación de to tiempo, dado que nuestra época no es un carácter político, al situarse a contra- te cuando el pueblo se ha apropiado de
la calidad, es decir, la acreditación, no la única que se ha visto enfrentada a la pelo de la industria del paper. saberes que supuestamente no le perte-
tiene como una de las variables princi- desconsideración del arte y las humani-
pales la fortaleza de una planta docente dades. Es más, la emergencia de la Uni-
estable (jornadas completas), despreocu-
pándose así de la precarización laboral.
versidad en Chile se da paralelamente al
debate sobre el latín. Creo que es en la
“Yo tiendo a ver la literatura, el arte
Alrededor del 75% de los académicos de disputa entre Ignacio Domeyko y Anto- y las humanidades como una lengua
la educación superior en Chile son pro- nio Varas (seguida más tarde por Vicuña
fesores part-time, y en la mayoría de las Mackenna y otros “liberales”) por incor- superviviente que, en nuestra época
universidades privadas (y cada vez más
en las tradicionales) la planta se reduce a
porar, quitar o aminorar su enseñanza
donde vemos el duro devenir que les
radicalmente individualista, podría
poco más que los cargos necesarios para esperaba a las humanidades. Para el pri- trastocar lo que le rodea al inscribir
el buen funcionamiento administrativo mero, científico de tomo y lomo, el latín
de una carrera. Así las cosas, ¿en qué era la base de cualquier futuro educacio- una herencia común, la herencia de un
momento un profesor podrá investigar
y reflexionar? En las universidades de
nal. El segundo, abogado y profesor de
filosofía, pero chileno y provinciano a
pueblo al que habría que sumarse”.
hoy el saber está pronto a ser irrelevante. fin de cuentas, se “interesaba” más por
Y la crítica, cuando logra tener lugar, re- el bienestar material de la nación, y lo
presenta una anomalía peligrosa al que- hacía casi en los términos de hoy, al de- ¿Cómo interpretas la cita de Martha necían, pero que asumió como herencia,
rer hacer del lenguaje (segmentarizado fender el lucro en la educación. Señalo Nussbaum en “Sin fines de lucro” (2010) según cuando ha logrado emanciparse política-
en función de competencias y códigos esto para recordar que las humanidades la cual “la democracia necesita del arte y las mente. Cuando se piensan el arte y las
disciplinares) algo más que un medio siempre han estado asediadas… humanidades”? humanidades como algo común, algo
de comunicación, que es a lo que lo han En cuanto a la intención de “Crítica li- –Creo que su defensa de la literatura de lo cual hacerse cargo independiente-
reducido los expertos. teraria y teoría cultural” en el siglo XX y y el arte es liberal (incluso moral), asu- mente de las firmas autorales, es posible
del segundo volumen dedicado al siglo miendo que la literatura y el arte nos atisbar la posibilidad de una democracia
LA DEMOCRACIA DEL ARTE XXI, que ya estamos preparando, tienen hacen mejores personas. Yo tiendo a ver efectiva. Solo así, creo, las humanidades
Acabas de coeditar, junto a Clara María Parra esencialmente como objetivo relocalizar la literatura, el arte y las humanidades tendrían un futuro, aunque ese futuro no
Triana, una impresionante antología sobre “Crí- al ensayo como la forma más relevante como una lengua superviviente que, en necesariamente estará de forma exclusiva
tica literaria y teoría cultural en América Latina” en América Latina para el trabajo del nuestra época radicalmente individua- ligado a la universidad, pues esa herencia
(Ediciones Universitarias de Valparaíso, 2015) pensamiento. El libro está dirigido a los lista, podría trastocar lo que le rodea común no tiene límites de institución ni
en la que se afirma la contribución decisiva alumnos de hoy, bombardeados por un al inscribir una herencia común, la he- territorio, y tampoco les pertenece de ma-
del ensayo cultural a la historia de las ideas en tipo de escritura académica que niega la rencia de un pueblo al que habría que nera privilegiada a las humanidades.

28 sabía usted que: … Al computador de Dávalos le hicieron borrón y cuenta nueva.

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