“El Caballero Carmelo” de Abraham Valdelomar Pinto

AUTOR: Pedro Abraham Valdelomar Pinto

NACIONALIDAD: Peruano

ESPECIE LITERARIA: Cuento.

PERSONAJES PRINCIPALES:

 El caballero Carmelo: gallo de pelea

 El Ajiseco: el rival del caballero Carmelo

El Caballero Carmelo se inicia con la llegada de Roberto, el hermano mayor que se ausentó hace
tiempo de casa. Roberto regresó a casa cabalgando un hermoso caballo y llevando regalos para sus
seres queridos.

Este entregó a cada uno de la familia un regalo; pero el regalo que más impactó fue el que dio a su
querido padre: era un fuerte y hermoso gallo de pelea al cual le pusieron de nombre el Caballero
Carmelo.

Durante tres años, en la ciudad de Pisco todo era hermoso y maravilloso, el Caballero Carmelo salía
victorioso de muchas peleas de gallos, era el orgullo de la familia y su héroe, pero el tiempo pasó y
el gallo perdió su brillo y juventud.

Hasta que un día el padre, dueño del Caballero Carmelo llegó a casa con una noticia aterradora;
había pactado una pelea con otro gallo el Ajiseco, este gallo era joven y lleno de vida.

La familia que era dueña del gallo sintió mucha pena y preocupación porque su gallo estaba viejo y
achacoso y pensaban que ya no podía soportar una pelea con el Ajiseco.

El padre junto con un señor entrenaron al Carmelo por 6 días hasta que llegó el 28 de julio fecha
pactada para la pelea en San Andrés, lugar perfecto, puesto que aquí celebran la fiesta de nuestra
patria con una gran jugada de gallos, donde todos los hacendados y ricos iban. El padre y el hombre
que entrenaba al Caballero Carmelo, lo llevaron a la pelea. Toda la familia estaba atenta de que
pasaría aquél día.

Se inició la pelea, apuestas por aquí por allá, todos despertaban griteríos y saltos, todos daban por
ganador al Ajiseco, era más fuerte y joven y seguro que ganaría.

Un hilo de sangre corría por la pierna del Caballero Carmelo. Estaba herido mas no parecía darse
cuenta de su dolor. Y recordó el Caballero Carmelo sus viejos tiempos en que él era un ganador y
ataco con tan furia que hizo caer al suelo a Ajiseco, pero este se reincorporó y se desato una lucha
cruel e indecisa. Por fin, una herida grave hizo caer a Caballero Carmelo.

¡Bravo !¡Bravo el Ajiseco! gritaron sus partidarios creyendo ganada la prueba.

Nació entonces en medio del dolor, el coraje de todo los gallos pisqueños y se reincorporó el
Caballero Carmelo, como un soldado herido, arremetió de frente y definitivo sobre su rival el Ajiseco
y con una estocada que lo dejó muerto en el sitio, pero el achacoso gallo quedó mortalmente herido
y murió días después, dejando en la profunda tristeza a la familia.