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Es difícil pensar en algún lugar de trabajo donde no enfrentamos un peligro de lesión ocular debido a objetos
que vuelan, resplandor, líquidos, salpicaduras, radiación ultravioleta o infrarroja u otros peligros. En caso que
no lo hayas notado, los lentes de protección y las antiparras han recorrido un largo camino para protegernos
contra estos peligros.
La OSHA (Occupational Safety & Health Administration de EE.UU.) tiene reglas muy estrictas respecto a los
lentes de protección. Las normas 29 CFR 1910.144 determinan que tipo de lentes de protección tenemos que
usar y cubre la responsabilidad general del empleador. La OSHA especifica a la norma ANSI Z87.1-2003 como
la fuente de orientación para seleccionar los lentes para las actividades específicas, por ejemplo, soldadura,
desbaste, esmerilado o manipulación de productos químicos.
OSHA cuenta con reglas muy rígidas relativas a los an-
teojos de protección. La 29 CFR 1910.133 determina los
tipos de anteojos de protección siendo necesarios y aborda
la responsabilidad general del empleador. OSHA especifica
la norma ANSI Z87.1-2003 como la fuente de orientación
en la elección de los anteojos para las actividades especí-
ficas, por ejemplo, soldadura, desbaste, trituración o mano-
seo de productos químicos.
Los lentes de protección de hoy son producidos virtualmente sin distorsión en las lentes, proporcionando una
excelente óptica y permitiendo que los mismos sean usados por largos períodos de tiempo sin ningún tipo de
queja. Las lentes están disponibles con revestimientos fijados en forma permanente contra empañamiento y
rayones. Disponen de las versiones interior-exterior que permiten moverse fácilmente desde la parte exterior
hacia el interior del depósito con lentes que poseen un revestimiento sutilmente espejado para equilibrar los
niveles de luz. O, qué tal las lentes con tonos para el fácil reconocimiento de los señales de tránsito o para des-
empeñar tareas especializadas en el lugar de trabajo?
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La mayoría de los lentes de protección cuentan con
lentes de policarbonato de graduación óptica. Signifi-
cativamente más resistentes a los impactos y 50 por
ciento más livianas que el vidrio templado, ofrecen
un margen más amplio de protección. El policarbona-
to puede ser moldeado de manera económica en una
variedad de formatos, con excelente claridad óptica y
filtro ultravioleta incorporado. Permite que los produc-
tos cumplan los rígidos requerimientos determinados
por ANSI, CSA y otras normas globales para lentes de
protección.
Los lentes de protección actuales están disponibles en muchas configuraciones para ser usados en
virtualmente cualquier aplicación. Si usas lentes recetados, es posible obtener lentes de protección
recetados (generalmente con protección lateral), o usar un modelo OTG (over the glass: sobre la lente)
que se ajusta sobre los lentes regulares rectados. Uvex by Honeywell, una marca de Honeywell Safe-
ty Products, incorporó recientemente un inserto para lentes recetados que puede ser adaptada a un
receta específica del usuario y se pone directamente en el armazón del Uvex XC®. Ese diseño elimina
el volumen de los lentes de protección OTG sobre los lentes recetados.
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¿Cuál es la razón principal por la cual, de acuerdo al estudio, no los usan? Porque los empleadores
no exigen ni fuerzan el uso de EPP. Otras barreras citadas por los 215 entrevistados incluían “falta de
estilo/comodidad,” “dificultad el desempeño en el trabajo,” “costo de los equipamientos para los traba-
jadores”, “los trabajadores no son informados acerca de la importancia del equipamiento”, “indiferen-
cia” y “desatención”.
Todos tenemos que realizar un trabajo mejor con la protección ocular, por razones obvias.
¿Cuáles son algunas de las cosas que podemos hacer?
Como empleadores tenemos, como mínimo, que hacer cumplir las normas de seguridad. Tenemos que
hacer que la protección ocular este fácilmente disponible para nuestros empleados, capacitarlos en su
correcto uso e implementar un programa efectivo para asegurar que los lentes sean usados.
En Uvex consideramos que es una buena idea ofrecer a los
empleados una variedad de lentes y hacer que ellos elijan los
modelos que desean usar. De esa forma, participan en la de-
cisión y definen una gama de productos que se adaptan a sus
necesidades y a sus diferentes fisonomías.