Está en la página 1de 22

El Suelo y su Conocimiento

En las ciencias de la Tierra y de la vida, se denomina suelo a la parte superficial de la


corteza terrestre, biológicamente activa, que tiende a desarrollarse en la superficie de
las rocas emergidas por la influencia de la intemperie y de los seres vivos
(meteorización).

De un modo simplificado puede decirse que las etapas implicadas en su formación son
las siguientes:

 Disgregación mecánica de las rocas.


 Meteorización química de los materiales regolíticos, liberados.

 Instalación de los seres vivos (microorganismos, líquenes, musgos, etc.) sobre


ese sustrato inorgánico. Esta es la fase más significativa, ya que con sus
procesos vitales y metabólicos, continúan la meteorización de los minerales,
iniciada por mecanismos inorgánicos. Además, los restos vegetales y animales a
través de la fermentación y la putrefacción enriquecen ese sustrato.

 Mezcla de todos estos elementos entre sí, y con agua y aire intersticiales.

Evolución

El suelo es el sistema complejo que se forma en la capa más superficial de la Tierra, en


el límite entre diversos sistemas que se reúnen en la superficie terrestre: la litosfera,
que aporta la matriz mineral del suelo, la atmósfera, la hidrosfera y la biosfera que
alteran dicha matriz, para dar lugar al suelo propiamente dicho.

Inicialmente, se da la alteración física y química de las rocas, realizada,


fundamentalmente, por la acción geológica del agua y otros agentes geológicos
externos, y posteriormente por la influencia de los seres vivos, que es fundamental en
este proceso de formación. Se desarrolla así una estructura en niveles superpuestos,
conocida como el perfil de un suelo, y una composición química y biológica definida.
Las características locales de los sistemas implicados — litología y relieve, clima y biota
— y sus interacciones dan lugar a los diferentes tipos de suelo.

Los procesos de alteración mecánica y meteorización química de las rocas, determinan


la formación de un manto de alteración o eluvión que, cuando por la acción de los
mecanismos de transporte de laderas, es desplazado de su posición de origen, se
denomina coluvión.

Sobre los materiales del coluvión, puede desarrollarse lo que comúnmente se conoce
como suelo; el suelo es el resultado de la dinámica física, química y biológica de los
materiales alterados del coluvión, originándose en su seno una diferenciación vertical
en niveles horizontales u horizontes. En estos procesos, los de carácter biológico y
bioquímico llegan a adquirir una gran importancia, ya sea por la descomposición de los
productos vegetales y su metabolismo, por los microorganismos y los animales
zapadores.

El conjunto de disciplinas que se abocan al estudio del suelo se engloban en el


conjunto denominado Ciencias del Suelo, aunque entre ellas predomina la edafología e
incluso se usa el adjetivo edáfico para todo lo relativo al suelo. El estudio del suelo
implica el análisis de su mineralogía, su física, su química y su biología.

Por este motivo, el suelo no es una entidad estrictamente geológica, por lo que la
ciencia que lo estudia, la edafología, esta vinculada a la geología a la biología y a la
agronomía. Adicionalmente el suelo puede ser considerados un recurso natural,
creando así una vinculación a la economía. (ver ecosistema y Sistema ecológico
cerrado).

Tipos de suelo

Existen dos clasificaciones para los tipos de suelo, una según su funcionalidad y otra de
acuerdo a sus características físicas.
Por funcionalidad

 Suelos arenosos: No retienen el agua, tienen muy poca materia orgánica y no


son aptos para la agricultura, ya que no tienen nutrientes.
 Suelos calizos: Tienen abundancia de sales calcáreas, son de color blanco, secos
y áridos, y no son buenos para la agricultura.

 Suelos humíferos (tierra negra): Tienen abundante materia orgánica en


descomposición, de color oscuro, retienen bien el agua y son excelentes para el
cultivo.

 Suelos arcillosos: Están formados por granos finos de color amarillento y retinen
el agua formando charcos. Si se mezclan con humus pueden ser buenos para
cultivar.

 Suelos pedregosos: Formados por rocas de todos los tamaños, no retienen el


agua y no son buenos para el cultivo.

 Suelos mixtos: tiene características intermedias entre los suelos arenosos y los
suelos arcillosos

Por características físicas

 Litosoles: Se considera un tipo de suelo que aparece en escarpas y


afloramientos rocosos, su espesor es menor a 10 cm y sostiene una vegetación
baja, se conoce también como leptosales que viene del griego leptos que
significa delgado.
 Cambisoles: Son suelos jóvenes con proceso inicial de acumulación de arcilla. Se
divide en vértigos, gleycos, eutrícos y crómicos.

 Luvisoles: Presentan un horizonte de acumulación de arcilla con saturación


superior al 50%.

 Acrisoles: Presentan un marcado horizonte de acumulación de arcilla y bajo


saturación de bases al 50%.
 Gleysoles: Presentan agua en forma permanente o semipermanente con
fluctuaciones de nivel freático en los primeros 50 cm.

 Fluvisoles: Son suelos jóvenes formados por depósitos fluviales, la mayoría son
ricos en calcio.

 Rendzina: Presenta un horizonte de aproximadamente 50 cm de profundidad.


Es un suelo rico en materia orgánica sobre roca caliza.

 Vertisoles: Son suelos arcillosos de color negro, presentan procesos de


contracción y expansión, se localizan en superficies de poca pendiente y
cercanos escurrimientos superficiales.

El suelo como sistema ecológico

Constituye un conjunto complejo de elementos físicos, químicos y biológicos que


compone el sustrato natural en el cual se desarrolla la vida en la superficie de los
continentes. El suelo es el hábitat de una biota específica de microorganismos y
pequeños animales que constituyen el edafón. El suelo es propio de las tierras
emergidas, no existiendo apenas contrapartida equivalente en los ecosistemas
acuáticos. Es importante subrayar que el suelo así entendido no se extiende sobre
todos los terrenos, sino que en muchos espacios lo que se pisa es roca fresca, o una
roca alterada sólo por meteorización, un regolito, que no merece el nombre de suelo.

Desde el punto de vista biológico, las características del suelo más importantes son su
permeabilidad, relacionada con la porosidad, su estructura y su composición química.
Los suelos retienen las sustancias minerales que las plantas necesitan para su nutrición
y que se liberan por la degradación de los restos orgánicos. Un buen suelo es condición
para la productividad agrícola.

En el medio natural los suelos más complejos y potentes (gruesos) acompañan a los
ecosistemas de mayor biomasa y diversidad, de los que son a la vez producto y
condición. En este sentido, desde el punto de vista de la organización jerárquica de los
ecosistemas, el suelo es un ecosistema en sí y un subsistema del sistema ecológico del
que forma parte
Suelo orgánico

El estudio de la dinámica del suelo muestra que sigue un proceso evolutivo al que son
aplicables por completo los conceptos de la sucesión ecológica. La formación de un
suelo profundo y complejo requiere, en condiciones naturales, largos períodos de
tiempo y el mínimo de perturbaciones. Donde las circunstancias ambientales son más
favorables, el desarrollo de un suelo a partir de un sustrato geológico bruto requiere
cientos de años, que pueden ser millares en climas, topografías y litologías menos
favorables.

Los procesos que forman el suelo arrancan con la meteorización física y química de la
roca bruta. Continúa con el primer establecimiento de una biota, en la que
frecuentemente ocupan un lugar prominente los líquenes, y el desarrollo de una
primera vegetación. El aporte de materia orgánica pone en marcha la constitución del
edafon. Éste está formado por una comunidad de descomponedores, bacterias y
hongos sobre todo y detritívoros, como los colémbolos o los diplópodos, e incluye
también a las raíces de las plantas, con sus micorrizas. El sistema así formado recicla los
nutrientes que circulan por la cadena trófica. Los suelos evolucionados, profundos,
húmedos y permeables suelen contar con las lombrices de tierra, anélidos oligoguetos
comedores de suelo, en su edafón, lo que a su vez favorece una mejor mezcla de las
fracciones orgánica y mineral y la fertilidad del suelo.

Causas de la degradación o destrucción de los suelos

 Meteorización: consiste en la alteración que experimentan las rocas en


contacto con el agua, el aire y los seres vivos

Meteorización física o mecánica: es aquella que se produce cuando, al bajar las


temperaturas que se encuentran en las grietas de las rocas, se congelan con
ella, aumenta su volumen y provoca la fractura de las rocas.
Meteorización química: es aquella que se produce cuando los materiales
rocosos reaccionan con el agua o con las sustancias disueltas en ella.
 Erosión: consiste en el desgaste y fragmentación de los materiales de la
superficie terrestre por acción del agua, el viento, etc. Los fragmentos que se
desprenden reciben el nombre de detritos.

 Transporte: consiste en el traslado de los detritos de un lugar a otro.

 Sedimentación: consiste en el depósito de los materiales transportados,


reciben el nombre de sedimentos, y cuando estos sedimentos se cementan
originan las rocas sedimentarias.

Los suelos se pueden destruir por las lluvias. Estas van lavando el suelo, quitándole
todos los nutrientes que necesita para poder ser fértil, los árboles no pueden crecer ahí
y se produce una deforestación que conlleva como consecuencia la desertificación.

Formación del suelo

Artículo principal: Pedogénesis

El suelo puede formarse y evolucionar a partir de la mayor parte de los materiales


rocosos, siempre que permanezcan en una determinada posición el tiempo suficiente
para permitir las anteriores etapas. Se pueden diferenciar:

 Suelos autóctonos, formados a partir de la alteración in situ de la roca que


tienen debajo.
 Suelos alóctonos, formados con materiales provenientes de lugares separados.
Son principalmente suelos de fondos de valle cuya matriz mineral procede de la
erosión de las laderas.

La formación del suelo es un proceso en el que las rocas se dividen en partículas


menores mezclándose con materia orgánica en descomposición. El lecho rocoso
empieza a deshacerse por los ciclos de hielo-deshielo, por la lluvia y por otras fuerzas
del entorno:

1. El lecho de roca madre se descompone cada vez en partículas menores.


2. Los organismos de la zona contribuyen a la formación del suelo desintegrándolo
cuando viven en él y añadiendo materia orgánica tras su muerte. Al
desarrollarse el suelo, se forman capas llamadas horizontes.

3. El horizonte A, más próximo a la superficie, suele ser más rico en materia


orgánica, mientras que el horizonte C contiene más minerales y sigue
pareciéndose a la roca madre. Con el tiempo, el suelo puede llegar a sustentar
una cobertura gruesa de vegetación reciclando sus recursos de forma efectiva

4. Cuando el suelo es maduro suele contener un horizonte B, donde se almacenan


los minerales lixiviados.

Composición

Los componentes del suelo se pueden dividir en sólidos, líquidos y gaseosos.

Sólidos

Este conjunto de componentes representa lo que podría denominarse el esqueleto


mineral del suelo y entre estos, componentes sólidos, del suelo destacan:

 Silicatos, tanto residuales o no completamente meteorizados, (micas,


feldespatos, y fundamentalmente cuarzo).
o Como productos no plenamente formados, singularmente los minerales
de arcilla, (caolinita, illita, etc.).

 Óxidos e hidróxidos de Fe (hematites, limonita, goetita) y de Al (gibsita,


bohemita), liberados por el mismo procedimiento que las arcillas.

 Clastos y granos poliminerales como materiales residuales de la alteración


mecánica y química incompleta de la roca originaria.

 Otros diversos compuestos minerales cuya presencia o ausencia y abundancia


condicionan el tipo de suelo y su evolución.

o Carbonatos (calcita, dolomita).


o Sulfatos (aljez).

o Cloruros y nitratos.

 Sólidos de naturaleza orgánica o complejos órgano-minerales, la materia


orgánica muerta existente sobre la superficie, el humus o mantillo:

o Humus joven o bruto formado por restos distinguibles de hojas, ramas y


restos de animales.

o Humus elaborado formado por sustancias orgánicas resultantes de la


total descomposición del humus bruto, de un color negro, con mezcla de
derivados nitrogenados (amoníaco, nitratos), hidrocarburos, celulosa,
etc. Según el tipo de reacción ácido-base que predomine en el suelo,
éste puede ser ácido, neutro o alcalino, lo que viene determinado
también por la roca madre y condiciona estrechamente las especies
vegetales que pueden vivir sobre el mismo.

Líquidos

Esta fracción está formada por una disolución acuosa de las sales y los iones más
comunes como Na+, K+, Ca2+, Cl-, NO3-,… así como por una amplia serie de sustancias
orgánicas. La importancia de esta fase líquida en el suelo estriba en que éste es el
vehículo de las sustancias químicas en el seno del sistema.

El agua en el suelo puede estar relacionada en tres formas diferentes con el esqueleto
sólido:
Tipos de líquido en el suelo.
 la primera, está constituida por una película muy delgada, en la que la fuerza
dominante que une el agua a la partícula sólida es de carácter molecular, y tan
sólida que esta agua solamente puede eliminarse del suelo en hornos de alta
temperatura. Esta parte del agua no es aprovechable por el sistema radicular de
las plantas.
 la segunda es retenida entre las partículas por las fuerzas capilares, las cuales,
en función de la textura pueden ser mayores que la fuerza de la gravedad. Esta
porción del agua no percola, pero puede ser utilizada por las plantas.

 finalmente, el agua que excede al agua capilar, que en ocasiones puede llenar
todos los espacios intersticiales en las capas superiores del suelo, con el tiempo
percola y va a alimentar los acuíferos más profundos. Cuando todos los espacios
intersticiales están llenos de agua, el suelo se dice saturado.

Gases

La fracción de gases está constituida fundamentalmente por los gases atmosféricos y


tiene gran variabilidad en su composición, por el consumo de O2, y la producción de
CO2 dióxido de carbono. El primero siempre menos abundante que en el aire libre y el
segundo más, como consecuencia del metabolismo respiratorio de los seres vivos del
suelo, incluidas las raíces. Otros gases comunes en suelos con mal drenaje son el
metano (CH4 ) y el óxido nitroso (N2O).

Horizontes

Se denomina horizontes del suelo a una serie de niveles horizontales que se


desarrollan en el interior del mismo y que presentan diferentes caracteres de
composición, textura, adherencia, etc. El perfil del suelo es la ordenación vertical de
todos estos horizontes.

Clásicamente, se distingue en los suelos completos o evolucionados tres horizontes


fundamentales que desde la superficie hacia abajo son:
 Horizonte 0, "Capa superficial del horizonte A"
 Horizonte A, o zona de lavado vertical: Es el más superficial y en él enraíza la
vegetación herbácea. Su color es generalmente oscuro por la abundancia de
materia orgánica descompuesta o humus elaborado, determinando el paso del
agua arrastrándola hacia abajo, de fragmentos de tamaño fino y de compuestos
solubles.

 Horizonte B o zona de Precipitado: Carece prácticamente de humus, por lo que


su color es más claro, en él se depositan los materiales arrastrados desde
arriba, principalmente, materiales arcillosos, óxidos e hidróxidos metálicos, etc.,
situándose en este nivel los encostramientos calcáreos áridos y las corazas
lateríticas tropicales.

 Horizonte C o subsuelo: Está constituido por la parte más alta del material
rocoso in situ, sobre el que se apoya el suelo, más o menos fragmentado por la
alteración mecánica y la química (la alteración química es casi inexistente ya
que en las primeras etapas de formación de un suelo no suele existir
colonización orgánica), pero en él aún puede reconocerse las características
originales del mismo.

 Horizonte D u horizonte R o material rocoso: es el material rocoso subyacente


que no ha sufrido ninguna alteración química o física significativa. Algunos
distinguen entre D, cuando el suelo es autóctono y el horizonte representa a la
roca madre, y R, cuando el suelo es alóctono y la roca representa sólo una base
física sin una relación especial con la composición mineral del suelo que tiene
encima.

Los caracteres, textura y estructura de los horizontes pueden variar ampliamente,


pudiendo llegar de un horizonte A de centímetros a metros.

Perfiles del Suelo

El perfil de un suelo es la sección o corte vertical que describen y analizan los


edafólogos con vistas a describirlo y clasificarlo. Este suele tener un metro o dos de
profundidad, si la roca madre, o el material parental, no aparece antes. Este modo de
proceder, no significa que puedan alcanzar mucho mayor espesor en algunas
ocasiones, sino que con vistas a clasificarlos tan solo se utilizan los mencionados uno o
dos metros superficiales, dependiendo de la taxonomía concreta que utilicemos. Como
profesionales solemos incurrir en la manía de pasar a hablar inmediatamente de sus
horizontes constituyentes. Sin embargo, puede darse el caso que un suelo (o medio
edáfico) no atesore más que uno o dos horizontes (a veces muy parecidos), siendo fácil
confundir a los no iniciados. Por tanto, esta es la primera lección que debemos
aprender: no todos los perfiles de suelos tienen que estar necesariamente constituidos
por varios horizontes.

Existen dos razones principales:

1. Que el suelo sea muy joven y no transcurriera el tiempo necesario para que se
desarrollen estas estructuras macro-morfológicas .

2. Que existan procesos que tiendan a homogeneizar el perfil impidiendo la


emergencia de estas capas. Si este es el caso hablamos de edafoturbación,
por cuanto existen diversos mecanismos que pueden ser responsables de
mezclar los materiales e impedir que se generen. Pero también puede ocurrir
que los materiales se remocen una y otra vez, mezclando y destruyendo una
horizonación previa, si ésta existía. ¿Qué mecanismos?: hielo, procesos
mecánicos relacionados con la propia naturaleza de los materiales edáficos
(especialmente su contenido y tipo dominante de arcilla), la actividad de los
organismos del suelo, etc.

Pero vamos a entrar en detalles. El perfil del suelo, en el sentido amplio del término
puede dividirse en 6 capas y horizontes, sin que esto signifique que no puedan faltar
algunas de ellas. Estas serían según profundizamos desde la superficie:
1. Los horizontes orgánicos desprovistos de materia mineral, llamados a
menudo “0” u “H”

2. Los horizontes órgano-minerales, es decir más o menos ricos en materia


orgánica y mineral. Estos suelen calificarse como horizontes “A”

3. Los horizontes de lavado, en el que los minerales más fáciles de


descomponer por la acción del clima, organismos y materia orgánica,
desprenden partículas (limos arcilla, moléculas orgánicas, nutrientes) al
siguiente horizonte. Se trata de los horizontes “E”.

4. Los horizontes minerales edafizados, es decir muy afectados por los


procesos que ocurren en el suelo, a los que se suelen denominar horizontes
“B”

5. Horizontes poco edafizados en donde puede discernirse la estructura de la


roca o material parental de la que proceden los suelos y que reciben el
apelativo de Horizonte

“C”.

6. La roca madre o material parental, poco o no alterada, a la que


denominamos

“R” o “D.
Textura del suelo

Artículos principales: Textura del suelo y Granulometría

La textura del suelo está determinada por la proporción de los tamaños de las
partículas que lo conforman. Para los suelos en los que todas las partículas tienen una
granulometría similar, internacionalmente se usan varias clasificaciones,
diferenciándose unas de otras principalmente en los límites entre las diferentes clases.
En un orden creciente de granulometría pueden clasificarse los tipos de suelos en
arcilla, limo, arena, grava, guijarros,barro o bloques.

En función de cómo se encuentren mezclados los materiales de granulometrías


diferentes, además de su grado de compactación, el suelo presentará características
diferentes como su permeabilidad o su capacidad de retención de agua. Y su capacidad
de usar desechos como abono para el crecimiento de las plantas.

Estructura del suelo

La estructura del suelo es como el estado del mismo, que resulta de la granulometría
de los elementos que lo componen y del modo como se hallan éstos dispuestos. La
evolución natural del suelo produce una estructura vertical “estratificada” (no en el
sentido que tiene estratificación en ecología) a la que se conoce como perfil. Las capas
que se observan se llaman horizontes y su diferenciación se debe tanto a su dinámica
interna como al transporte vertical.
El transporte vertical tiene dos dimensiones con distinta influencia según los suelos:

1. La lixiviación o lavado la produce el agua que se infiltra y penetra verticalmente


desde la superficie, arrastrando sustancias que se depositan sobre todo por
adsorción.
2. La otra dimensión es el ascenso vertical por capilaridad, importante sobre todo
en los climas donde alternan estaciones húmedas con estaciones secas.

Se llama roca madre a la que proporciona su matriz mineral al suelo. Se distinguen


suelos autóctonos, que se asientan sobre su roca madre y representan la situación más
común, y suelos alóctonos, formados con una matriz mineral aportada desde otro lugar
por los procesos geológicos de transporte.

Estructura molecular del suelo

El modo en el cual se disponen las partículas terrosas, estando en contacto entre ellas,
determina la estructura del suelo. Las partículas arcillosas tienen forma laminar y,
floculando, tienden a colocarse una sobre otra, dando forma a una estructura
compacta, sin o con muy pocos espacios vacíos. Pero, si en el complejo arcilloso existen
coloides orgánicos, el floculado que deriva de estos presenta las partículas minerales
distanciadas entre sí por las moléculas orgánicas, las que siendo de notables
dimensiones, provocan la formación de amplios espacios vacíos que dan al suelo una
estructura de tipo “lacunar”. El floculado por lo tanto puede estar constituido por
gránulos y por grumos más o menos complejos, es decir de aglomerados de diámetros
más o menos grandes que dan lugar a una estructura tipo “granular” o de grumos
bastante rica en espacios vacíos entre las zonas de contacto entre los aglomerados
mismos.

Según estudios recientes, (1965) estos aglomerados estarían consolidados por la


lignina, producida por la descomposición de las sustancias orgánicas, la que daría una
cierta estabilidad a los grumos y un cierto grado de resistencia frente a los agentes
disgregantes.
La estructura del suelo es una propiedad que está mudando continuamente, en
función de un complejo de factores físicos, químicos y biológicos.

Como agentes o factores que favorecen una buena estructura de los grumos, desde el
punto de vista de la utilización agronómica del suelo, se puede recordar:

 Las operaciones de labranza de la tierra que introducen sustancias orgánicas, o


la formación de espacios vacíos;
 La acción mecánica ejercida por las raíces de las plantas;

 La variación climática, variación entre hielo y deshielo, o entre períodos secos y


períodos húmedos;

 Las acciones químicas y coagulantes de ciertos iones como el calcio, el óxido de


hierro, etc.

Algunos factores, por otra parte, tienden a destruir la estructura de grumos arriba
mencionada. Por ejemplo:

 El agua proveniente de la lluvia o del riego, puede comportarse como agente


disgregante, por su acción mecánica, o diluyente de sales minerales solubles;
 Algunos cationes como el Na+ actúan como demoledores de la estructura en el
suelo alcalino, por su efecto destructor de los coloides.

La estructura molecular del suelo tiene un papel muy importante en el


comportamiento hidrodinámico del suelo cultivado.

Profundidad del suelo

La profundidad del suelo no es ni más ni menos que el grueso del suelo donde pueden
desarrollarse las raíces, antes de encontrarse algún obstáculo natural como pueda ser:
capas de piedra, zonas friáticas altas, o pavimentos, lógicamente para saber su
profundidad, tan solo es necesario efectuar un agujero en el suelo hasta llegar a la zona
problemática. Cuanto mas gruesa sea la capa del suelo mayor desarrollo tendrán las
raíces y podremos plantar especies de mayor crecimiento.
La estratificación de los suelos

El estrato es la masa de sedimentos depositados en condiciones ambientales más o


menos uniformes, limitada por diastemas en general paralelos entre sí. Acostumbra ser
homogéneo en su composición. En principio se disponen horizontalmente en bloques
tabulares que posteriormente, al ser sometidos a la acción de las fuerzas orogénicas,
pueden plegarse o fracturarse.

La estratificación cruzada (láminas inclinadas)


se da en los depósitos arenosos,
generalmente deltaicos

La aparición de diferentes estratos en el seno de una roca sedimentaria se debe a


cambios experimentados durante el ciclo erosivo, como por ejemplo, la alteración
mineralógica de la roca original a causa de la meteorización o la variación de la
velocidad del agua.

Las superficies que separan los estratos sucesivos (diastemas) se deben a


interrupciones de la sedimentación. Durante la formación de un estrato también
suelen producirse pequeñas modificaciones ambientales que determinan una
laminación interna del mismo; un caso especial es la denominada estratificación
cruzada, que se da en los depósitos arenosos, generalmente deltaicos, en los que
aparecen láminas inclinadas en el interior del estrato; se originan por sedimentación en
capas inclinadas en el frente deltaico o por la erosión del extremo del estrato, con la
consiguiente formación de un plano inclinado que es cubierto por el siguiente depósito
sedimentario.
Bibliografía

Fernando Pizarro, Riego localizado

J. A Luque y J.D Paoloni, Manual de operación de riego (2 edicion)

www.alihuen.org

www.inta.gov.ar

www.jardinsjoan.com

www.natureduca.com

www.monografias.com

es.wikipedia.org
UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MANABÍ

FACULTAD DE INGENIERÍA AGRONÓMICA

TRABAJO DE:

RIEGO Y DRENAJE

PROFESOR:
ING. MILTON PINARGOTE

TEMA:

EL SUELO

GRUPO # 2

INTEGRANTES

CUENCA RICHARD

DE JANON GALO

MOLINA PEDRO

PALACIOS JHONATAN

CUARTO NIVEL
SANTA ANA – MANABÍ

2010

 Se denomina suelo a la parte superficial de la corteza terrestre, biológicamente


activa, que tiende a desarrollarse en la superficie de las rocas emergidas por la
influencia de la intemperie y de los seres vivos (meteorización).

 De un modo simplificado puede decirse que las etapas implicadas en su


formación son las siguientes:

 Disgregación mecánica de las rocas.

 Meteorización química de los materiales regolíticos, liberados.

 Instalación de los seres vivos (microorganismos, líquenes, musgos, etc.) sobre


ese sustrato inorgánico.

 Mezcla de todos estos elementos entre sí, y con agua y aire intersticiales.

Tipos de suelo

 Por funcionalidad:

 Suelos Arenosos: No retienen el agua, tienen muy poca materia orgánica y no


son aptos para la agricultura.

 Suelos Calizos: Tienen abundancia de sales calcáreas, son de color blanco.

 Suelos Humíferos: (tierra negra): Tienen abundante materia orgánica en


descomposición, de color oscuro.

 Suelos Arcillosos: Están formados por granos finos de color amarillento y


retinen el agua formando charcos.
 Suelos Pedregosos: Formados por rocas de todos los tamaños.

 Suelos Mixtos: Tiene características intermedias entre los suelos arenosos y los
suelos arcillosos.

 X caracteres físicos

 Litosoles: Se considera un tipo de suelo que aparece en escarpas y


afloramientos rocosos, su espesor es menor a 10 cm y sostiene una vegetación
baja.

 Cambisoles: Son suelos jóvenes con proceso inicial de acumulación de arcilla.

 Luvisoles: Presentan un horizonte de acumulación de arcilla con saturación


superior al 50%.

 Acrisoles: Presentan un marcado horizonte de acumulación de arcilla y bajo


saturación de bases al 50%.

 Gleysoles: Presentan agua en forma permanente o semipermanente con


fluctuaciones de nivel freático en los primeros 50 cm.

 Fluvisoles: Son suelos jóvenes formados por depósitos fluviales, la mayoría son
ricos en calcio.

 Rendzina: Presenta un horizonte de aproximadamente 50 cm de profundidad.


Es un suelo rico en materia orgánica sobre roca caliza.

 Vertisoles: Son suelos arcillosos de color negro, presentan procesos de


contracción y expansión.

El riego y la aptitud con el suelo


 Recurriendo a la provisión de agua subterránea, significa cuantificar aquellos
factores ambientales que pueden limitar su aplicación: calidad del agua
disponible, caudales, y aptitud de los suelos.

 Regar con agua no apta significa exponer a los suelos a un paulatino deterioro.

 Se definieron así 5 Grupos de Aptitud para riego Suplementario:

 Los 3 primeros Grupos incluyen tierras regables con grados crecientes de


limitaciones, sean estas por impedimentos intrínsecos del suelo.

 El Grupo 4 comprende a las tierras con limitantes suficientemente severas como


para condicionar el suministro de riego a condiciones muy específicas y que
deben evaluarse con detalle.

 Por último, la Grupo 5 incluye aquellos suelos no aptos para ser regados.

Horizontes del suelo

Se denomina horizontes del suelo a una serie de niveles horizontales que se


desarrollan en el interior del mismo y que presentan diferentes caracteres de
composición, textura, adherencia

 Horizonte 0, "Capa superficial del horizonte A"

 Horizonte A, o zona de lavado vertical: Es el más superficial y en él enraíza la


vegetación herbácea. Su color es generalmente oscuro por la abundancia de
materia orgánica descompuesta.

 Horizonte B o zona de Precipitado: Carece prácticamente de humus, por lo que


su color es más claro, en él se depositan los materiales arrastrados desde
arriba, principalmente, materiales arcillosos, óxidos e hidróxidos metálicos, etc.,
situándose en este nivel los encostramientos calcáreos áridos y las corazas
lateríticas tropicales.
 Horizonte C o subsuelo: Está constituido por la parte más alta del material
rocoso in situ, sobre el que se apoya el suelo, más o menos fragmentado por la
alteración mecánica y la química.

 Horizonte D u horizonte R o material rocoso: es el material rocoso subyacente


que no ha sufrido ninguna alteración química o física significativa. Algunos
distinguen entre D, cuando el suelo es autóctono y el horizonte representa a la
roca madre, y R, cuando el suelo es alóctono y la roca representa sólo una base
física sin una relación especial con la composición mineral del suelo que tiene
encima.

También podría gustarte