Clin Orthop Relat Res (2008) 466: 1705-1709 DOI 10.

1007
/ s11999-008-0268-6

ARTÍCULO ORIGINAL

Galeazzi lesiones en niños y adolescentes

Tratamiento y evolución

Robert Eberl MD, Georg Cantor MD,

Johannes Schalamon MD, Thomas Petnehazy MD, Michael E.
Hoellwarth MD

Recibido: December 6 2007 / Aceptado: 9 Abril 2008 / Publicado en línea: 29 Abril 2008
La Asociación de Cirujanos de huesos y articulaciones 2008

Resumen Una fractura de Galeazzi se define como una fractura del radio proporciona buenos a excelentes resultados incluso si no se reconoce
asociado con dislocación de la articulación radiocubital distal. El tratamiento en principalmente la lesión Galeazzi.
niños y adolescentes es generalmente posible con reducción cerrada y Nivel de evidencia: Nivel IV, el estudio terapéutico. Ver las Directrices para los autores

fundición. El objetivo de este estudio de forma retrospectiva diseñada fue para obtener una descripción completa de los niveles de evidencia.

describir todas las lesiones Galeazzi tratados en nuestro servicio durante un

período de 3 años. Se revisaron los ciento noventa y ocho pacientes con
fracturas del radio desplazadas solos o ambos huesos del antebrazo. En 26
(13%) casos, se encontró una lesión Galeazzi y estos pacientes formaron el
grupo de estudio. El resultado se evaluó mediante la puntuación GartlandWerley.
Ocho de 26 fracturas (31%) fueron reconocidos inicialmente y clasificados como
una lesión Galeazzi. Fundición después de la reducción de la fractura fue posible
en 22 pacientes. Trece pacientes fueron tratados con inmovilización con un yeso
por debajo del codo y nueve con un reparto por encima del codo. Cuatro
pacientes fueron tratados de forma operativa. Los resultados fueron excelentes
en 23 casos y bueno en tres casos. En los casos de fracturas de antebrazo
distal, una posible lesión Galeazzi debe ser considerado. Sin embargo, la
reducción adecuada de la radio con la reducción concomitante de la
inmovilización conjunta y reparto radiocubital distal
Introducción
Los niños y adolescentes con frecuencia presentan a los departamentos de
emergencia con fracturas del antebrazo [ 17 ]. La fractura Galeazzi, que se
nombra después de la cirujano italiano Riccardo Galeazzi, fue primero descrita
por Cooper en 1822, de acuerdo con Voigt y Lill [ 18 ]. En representación de un
caso especial de fracturas del antebrazo, es clasificada como una fractura del
radio en cualquier nivel asociado con la interrupción de la articulación
radiocubital distal (ARCD) y luxación resultante del cúbito [ 19 ]. El mecanismo
típico de la lesión se describe como una caída sobre una mano extendida en
hiperpronación [ 14 ].

Cada autor certi fi ca que él o ella no tiene asociaciones comerciales (por ejemplo, consultorías,
titularidades de valores, intereses de capital, acuerdos de patentes / licencias, etc.) que podrían
plantear un conflicto de intereses en relación con el artículo remitido.
Cada autor certi fi ca que su institución o bien ha renunciado o no requiere la aprobación del
protocolo humano de esta investigación y que todas las investigaciones se llevaron a cabo
de conformidad con los principios éticos de la investigación.
En los adultos, esta fractura se produce con una incidencia de 2,7% a 6,8%
de todas las fracturas del antebrazo [ 8 , 18 ]. En los niños, los informes sobre la
incidencia de este tipo de lesión difieren sustancialmente de 0,3% a 2,8% [ 17 , 19
]. El pico de incidencia ocurre entre las edades de 9 y 13 años [ 19 ]. Galeazzi
lesiones con frecuencia se infradiagnosticada. En la única serie que informan
los pacientes pediátricos con este tipo de fractura, el 41% de las lesiones eran
ser reconocidos por Galeazzi [ 19 ]. Sin embargo, hay una falta de información
en la literatura reciente acerca de la tasa de lesiones Galeazzi no
diagnosticados en niños.

El tratamiento estándar en adultos consiste en la intervención quirúrgica

R. Eberl (&), G. Singer, J. Schalamon, T. Petnehazy,
ME Hoellwarth
Departamento de Cirugía Pediátrica, Universidad de Medicina de Graz,
Auenbruggerplatz 34, 8036 Graz, Austria e-mail: robert.eberl@meduni-graz.at
con la placa de fi jación y en algunos casos temporal fi jación trans de la DRUJ
usando agujas de Kirschner [ 2 , 5 ,
9 ]. En la población pediátrica, se han reportado buenos resultados después de la
reducción cerrada y la fundición [ 10 , 19 ]. El oro

123
1706 Eberl et al.
estándar de tratamiento conservador en los niños es aboveelbow fundición en
supinación [ 15 ]. El tratamiento conservador de las fracturas de Galeazzi se ha
demostrado que conducen a resultados insatisfactorios de hasta el 92% en los
adultos. En contraste, los resultados fi nales de tratamiento conservador son
generalmente buenos en niños [ 19 ]. El único informe publicado centrándose en
las fracturas de Galeazzi en los niños muestra el resultado en niños tratados con
un yeso por debajo del codo es peor en comparación con el grupo tratado con
arriba del codo fundición [ 19 ]. Adicionalmente, hay una falta de información con
respecto a cómo el mal diagnóstico inicial de una lesión Galeazzi influye en el
tratamiento y el resultado en la población pediátrica.
Por lo tanto, el objetivo principal de nuestro estudio retrospectivo fue
analizar la incidencia de las fracturas de Galeazzi en niños con una fractura
luxación del antebrazo y reportar el porcentaje de Galeazzi mal diagnosticado
fracturas en este grupo de pacientes. Además, hemos tratado de informar la
proporción de conservadora en comparación con los tratamientos quirúrgicos en
lesiones Galeazzi pediátricos. Para verificar las estrategias de tratamiento, se
evaluó el resultado de todos los niños y adolescentes tratados con fracturas de
Galeazzi.
Materiales y métodos
Se analizaron retrospectivamente los datos médicos de todos los niños que fueron
admitidos para el tratamiento de pacientes hospitalizados después de las fracturas
del antebrazo. Nuestra política local requiere tratamiento de hospitalización en los
casos de grandes fracturas dislocadas, que requieren la manipulación. fracturas
desplazadas mínimamente se redujeron usando sedación consciente en el
departamento de pacientes externos y los pacientes se excluyeron del estudio. De
2004 a 2006, 198 niños con fracturas del antebrazo desplazados Se identificaron.
En la admisión, se obtuvo información sobre el mecanismo de la lesión. Las
radiografías en dos planos, incluyendo el codo y la muñeca, se llevaron a cabo en
todos los casos. Como parte de este estudio, fueron revisados ​estas radiografías
para identificar a todos los niños con lesiones Galeazzi y fueron vistos por tres de
los autores (RE, GS, JS) que fueron cegados a los resultados. Una lesión
Galeazzi se definió como una fractura de uno o ambos huesos del antebrazo en
cualquier nivel en combinación con una luxación de la articulación radiocubital
distal. La localización de estas fracturas y el desplazamiento del cúbito se
registraron. Además, se revisaron los informes médicos iniciales para determinar
si la naturaleza de la lesión fue reconocido en un primer momento la asistencia.
Con los niños bajo anestesia general, la reducción cerrada se realizó y
moldes de yeso se aplicaron para la inmovilización de las fracturas. En
caso de irreductibilidad o inestabilidad persistente, el tratamiento quirúrgico
se realizó con osteosíntesis placa o
enclavado intramedular
dependiendo de la localización de la fractura. Ninguno de los autores era
el cirujano. Seguimientos, incluso
123
Clinical Orthopaedics and Related Research
radiografías, se realizaron 1 y 3 semanas después de la descarga y en el
momento del examen médico nal fi. La duración de la inmovilización con yeso
se elige en función de los signos radiológicos de la curación del hueso.
Extracción de los implantes se realizó 6 a 9 meses después de la implantación.
Todos los pacientes fueron reexaminados 8 a 39 meses (media, 22 meses)
después del trauma por un observador (TP) para completar la puntuación de
Gartland-Werley [ 4 ]. Esta puntuación se basa en un sistema de clasificación
teniendo en cuenta deformidad residual, el dolor, la amplitud de movimiento, y las
complicaciones durante el tratamiento. Los resultados son clasificados como
excelentes puntos (0-2), (3-8 buenos puntos), justo (9-20 puntos), o pobres (21
puntos o más). Los datos se introdujeron en un Microsoft Excel (Microsoft Inc,
Redmond, WA) de hoja de cálculo para el análisis adicional. Debido a las
relativamente pequeño número de pacientes, este estudio es un informe descriptivo
y por lo tanto no se realizó el análisis estadístico. De acuerdo con las directrices del
comité de ética local, no se requiere el consentimiento informado por escrito para
este estudio retrospectivo.
resultados
Nos identi fi cados 26 lesiones Galeazzi en 198 pacientes (13%) que fueron
ingresados ​con fracturas del antebrazo dislocados; ocho de esos 26 fracturas
(31%) inicialmente fueron reconocidos y clasificados como lesiones Galeazzi.
Seis de estos pacientes (3%) tenían fracturas de ambos huesos del
antebrazo, mientras que los 20 pacientes restantes (10%) presentaron una
fractura aislada del radio en combinación con participación DRUJ. Diecisiete
(65%) pacientes eran hombres y nueve (35%) eran mujeres. La edad media
de los pacientes con una lesión Galeazzi fue de 11 años (rango, 4.5-16
años). La edad media de los pacientes sin lesión Galeazzi fue similar a los
12,2 años en los varones y 11,9 años en las niñas. Ninguno de nuestros
pacientes podría proporcionar información fiable sobre el mecanismo exacto
de la lesión. La mayoría de nuestros pacientes tenía dislocación dorsal del
cúbito (n = 19 [73%]) asociado ya sea con una fractura aislada del radio en la
posición palmar o fracturas de ambos huesos del antebrazo. Siete pacientes
(27%) presentaron dislocación palmar del cúbito (tabla 1 ). Todas las fracturas
fueron localizados en el tercio distal del radio o en la frontera de la zona
central hacia las terceras partes distales del antebrazo. Ni una lesión
Galeazzi inversa ni
Tabla 1. Distribución de la dislocación del cúbito en 26 fracturas Galeazzi
Luxación del cúbito hueso fracturado
Radio Radio y el cúbito
Dorsal 13 6
De la palma 7 0
Volumen 466, número 7, julio de 2008 Pediátrica Fractura de Galeazzi 1707

La Fig. 1A-B En un niño de 14 años de edad con una fractura de Galeazzi del brazo derecho, una ( UNA)
vista AP y ( SEGUNDO) vista lateral en el momento de mostrar la admisión palmar luxación del Fig. 2A-B (A) Una vista AP y ( SEGUNDO) vista lateral se muestra inmediatamente después de

cúbito y una fractura del radio en el tercio distal. reposicionamiento y yeso de colada del mismo paciente que en la Figura 1. La fundición se
realizó con un yeso por debajo del codo.

una lesión Galeazzi-equivalente con una interrupción de la epífisis cubital distal se de reducción en el DRUJ fue tratada con eficacia con osteosíntesis placa.

encontró en nuestro grupo de pacientes.

Aunque la reducción cerrada y la colada eran posibles en 22 pacientes En el seguimiento, 23 pacientes estaban libres de síntomas. Dos niños

(85%), sólo cuatro pacientes (15%) fueron tratados de forma operativa. informaron dolor ocasional y la debilidad en la muñeca; otro niño tenía una

Reducción se realizó con los pacientes bajo anestesia general en todos los ligera limitación de movimiento del pulgar después de la rotura del tendón

casos. se requiere inmovilización con un molde de yeso por arriba del codo de extensor largo. El DRUJ se mantuvo estable en el seguimiento de todos los

6 semanas en nueve casos (35%). Este grupo consistía en ocho pacientes con niños. El resultado utilizando la escala de Gartland-Werley fue excelente en 23

una lesión Galeazzi diagnosticado inicialmente (CAST en supinación completa) casos y bueno en tres casos. Los niños con yesos por debajo del codo tuvieron

y un paciente con una lesión Galeazzi después de la fractura del radio y el mejores resultados (Tabla 2 ). Un niño experimentó un curso clínico complicado.

cúbito, que fue diagnosticado erróneamente como una fractura del antebrazo y Como consecuencia de estabilización de la fractura intramedular, el paciente

se reconoce en el momento de esta revisión (fundido en posición neutral). tenía hipoestesia en el área de la super fi nervio radial cial sobre el

Trece pacientes (50%) llevaban un molde de yeso por debajo del codo (Figs. 1 , 2 compartimiento extensor primero. En el día postoperatorio 69a, ruptura del

). Otros cuatro niños requiere estabilización quirúrgica; dos niños (8 y 9 años tendón del músculo extensor largo del pulgar se produjo después de un trauma

de edad) se trataron con clavos de titanio elásticos intramedulares utilizando el mínimo. Esta ruptura fue causada por una prominente y afilada extremo

enclavado retrógrado del radio y anterógrada de clavado del cúbito. Estos dos proximal del clavo cerca del tendón. La requerida de transferencia de pacientes

pacientes tenían fracturas de ambos huesos del antebrazo con la fractura del tendón del extensor

ubicado en el cruce de la zona central hacia las terceras partes distales del
antebrazo. La lesión Galeazzi no fue reconocido en la admisión, pero fue
reconocido durante la cirugía. En los dos casos restantes, se requería placa
dorsal fi jación del radio. En ambos casos, la lesión no fue reconocido al Tabla 2. Resultado relacionada con el modo de tratamiento y el reconocimiento inicial de la fractura

ingreso o durante la cirugía. Una niña de 15 años de edad sufrió una nueva de Galeazzi *

fractura del radio y una fractura y dislocación adicional del cúbito. Un niño de Tratamiento Salir El diagnóstico correcto

16 años de edad presentó 1 semana después de la admisión inicial con

Excelente Bueno Sí No
desplazamiento secundario y la pérdida de la reducción en el DRUJ pesar de
alineación anatómica inicial y por encima del codo inmovilización con yeso. La Por encima del codo fundido 7 2 8 1

pérdida Por debajo del codo fundido 13 0 0 13

una fijación interna 3 1 0 4

* El resultado fue excelente y muy buena incluso con fracturas no reconocidos Galeazzi y la
mayoría de las fracturas de Galeazzi fi cados correctamente identi fue tratado con un reparto por
encima del codo.

123
1708 Eberl et al.
músculo indicis. Sin embargo, el paciente tuvo una ligera limitación de la amplitud de
movimiento (pérdida de 10 para la extensión dorsal, sin pérdida de pronación o
supinación) y hipoestesia persistente en el seguimiento 16 meses después de trauma.
Discusión
En nuestra serie de 198 niños con esqueleto inmaduro con una fractura
desplazada del antebrazo, una lesión Galeazzi se identificó en 26 niños
(13%). Aunque otros han descrito una frecuencia de menos de 5% de las
interrupciones de la DRUJ, en los niños, la tasa de lesiones Galeazzi
vecinos puede ser mucho mayor [ 19 ]. Concordante con Walsh et al. [ 19 ]
La edad media de los pacientes de nuestra serie fue de 11 años, la
mayoría son de sexo masculino. Además, se acepta que la fractura de
radio que acompaña a la lesión Galeazzi se encuentra más a menudo en
la unión de los tercios medio y distal del hueso [ 12 ]. Nuestra con datos fi
rm estos hallazgos con todas las fracturas que se encuentra en el tercio
distal del radio.
Desafortunadamente, nuestros pacientes no pudieron describir el
mecanismo exacto de la lesión. Todo recordado que cae en la mano, pero no
podía recordar la posición exacta de la mano en el momento del impacto.
Aunque Frykman [ 3 ] Producido esta fractura experimentalmente con carga axial
solo, otros [ 14 , 18 ] Asuma esta fractura es una combinación de hiperpronación y
una caída sobre la mano extendida. Proponemos las diferentes direcciones del
desplazamiento son causadas por diferentes mecanismos de lesiones; un
desplazamiento posterior del cúbito es causado por una fuerza longitudinal en el
brazo en supinación, mientras que el desplazamiento anterior es más probable
si la mano está en una posición de pronación.
Una posible razón de la tasa considerable de lesiones Galeazzi pasado por
alto puede ser una falta de información sobre el específico clasificación de las
fracturas en el antebrazo distal. Aunque la mayoría (18 de 26 [69%]) de las
lesiones Galeazzi fi ed retrospectivamente caciones no fueron descritos
principalmente en nuestra serie, el desplazamiento del cúbito fue reconocido y
corregido en todos los niños, y el desplazamiento persistente de la DRUJ
después de la reducción inicial no podría ser encontró. Debido a esta
observación, no se recomienda la realización de un examen minucioso de la
articulación radio-cubital distal antes de la reducción del antebrazo [ 5 ]. Un
examen clínico para identificar la posible inestabilidad antes de la reducción no
tiene consecuencias. Además, el examen clínico en caso de una fractura es
dolorosa y debe llevarse a cabo con el paciente bajo anestesia general para
lograr una información objetiva. En caso de irreductibilidad, se requiere la
manipulación bajo anestesia general para excluir posibles pinzamiento del
tejido blando. Si se sospecha de pinzamiento del tejido blando, un
procedimiento abierto para la exploración de la reducción conjunta y abierta y
una fijación interna son obligatorios.
123
Clinical Orthopaedics and Related Research
En los adultos, las fracturas de Galeazzi por lo general requieren tratamiento
quirúrgico. Numerosos autores indicaron una tasa considerable de
desplazamientos secundarios y pseudoartrosis puede resultar en caso de
tratamiento conservador [ 7 , 10 , 13 , dieciséis ]. Voigt y Lill y Mikic supone la
interrupción del complejo fi brocartílago triangular distal conduce a la inestabilidad
persistente del DRUJ porque las fuerzas musculares no pueden ser controladas
por solamente inmovilización con yeso [ 10 , 18 ]. La reducción abierta con fi jación
de la fractura radial utilizando placas y tornillos, trans fi jación de la DRUJ, y la
inmovilización con un molde de yeso por arriba del codo llevaron a buenos
resultados funcionales y por lo tanto se recomienda como el tratamiento preferido
en pacientes adultos [ 10 , 13 , dieciséis ]. En contraste con la población adulta, el
tratamiento de Galeazzi lesiones en los niños por lo general tiene un buen
pronóstico después del tratamiento conservador con inmovilización con yeso [ dieciséis
]. Las fracturas en los niños son diferentes de las fracturas adulttype. fracturas
incompletas, fracturas arquear, y estructuras periostio intactas proporcionan
estabilidad residual después de trauma óseo. Además, la mayor elasticidad de las
estructuras ligamentosas en los niños puede compensar el desplazamiento del
cúbito y evitar la rotura de ligamentos en niños con lesiones Galeazzi [ 1 ]. Sin
embargo, no pudimos fi nd estudios de imágenes de tejidos blandos de la
anatomía postraumático agudo de la DRUJ para identificar o excluir una lesión de
ligamentos.
La tasa considerablemente mayor de fractura de Galeazzi en nuestra serie puede
ser atribuido al sesgo de selección (sólo se incluyeron pacientes con desplazamiento
signi fi cante y el tratamiento de pacientes hospitalizados). Otras limitaciones de
nuestro estudio son el diseño retrospectivo y el número relativamente pequeño de
pacientes. Por otra parte, no hemos tenido una estrategia clara para la inmovilización
de fracturas de Galeazzi; Por lo tanto, la decisión de utilizar a continuación- o moldes
por encima del codo seguido las preferencias del cirujano tratante. Sin embargo, si
una lesión Galeazzi se identificó a primera asistencia, todos los cirujanos decidieron
usar por encima del codo arroja para la inmovilización de acuerdo con las directrices
recomendadas [ 1 ]. Por lo tanto, todos los cirujanos trataron de lograr la alineación
correcta de la muñeca. La mitad de las fracturas en nuestra serie se
infradiagnosticada e inmovilizado en una por debajo del codo fundido con un
resultado excelente en todos los casos. Esto se puede atribuir al hecho de que el
tratamiento funcional temprano era posible. Después de la reducción anatómica de la
articulación radiocubital distal, un pozo en forma de debajo del codo fundido permite
pronación y supinación y evita una nueva luxación de la articulación, mientras que la
mayoría de los informes en la literatura médica que describe Galeazzi fracturas en los
niños prefieren el tratamiento con yesos por encima del codo [ 6 , 11 ]. En los niños
mayores y adolescentes con una considerable dislocación e inestabilidad pesar de la
aplicación fundido, estabilización de la fractura operativo puede llegar a ser
necesario. Por encima del codo moldes son útiles con fractura de ambos huesos del
antebrazo, pero no son necesarios en las lesiones típicas Galeazzi. Sin embargo, es
posible que los mejores resultados relacionados con yesos por debajo del codo
puede
Volumen 466, número 7, julio de 2008
atribuirse al sesgo de selección y que los pacientes con yesos por arriba del codo en
nuestra serie tenían lesiones más graves. Consolidación viciosa del radio, la
subluxación de la articulación radiocubital con crecimiento excesivo resultante, lesión
del nervio cubital, o rango de movimiento limitado de pronación y supinación, que
representan complicaciones comunes de las fracturas de Galeazzi [ dieciséis ], No se
encontraron en nuestro grupo de estudio. Todos los problemas a largo plazo o bien
fueron causados ​por problemas técnicos (rotura del tendón por un extremo uña
afilada) o potencialmente eran inevitables (dolor ocasional y la debilidad en la
muñeca). Sin embargo, no se observó inestabilidad a largo plazo de la articulación
radiocubital distal, lo que justifica nuestro enfoque de tratamiento.
fracturas distales del antebrazo en los niños requieren imágenes
radiológicas exacto y adecuado diagnóstico para reconocer una posible lesión
Galeazzi. Especialmente con fracturas del antebrazo desplazados
notablemente, una lesión Galeazzi debe ser considerado por el cirujano
tratante. reducción adecuada del radio con reducción posterior del cúbito en la
inmovilización y DRUJ fundido proporcionan buenos a excelentes resultados,
incluso si la lesión Galeazzi es principalmente infradiagnosticada. inestabilidad
a largo plazo de la DRUJ después de lesiones Galeazzi no se observó en
nuestra serie de pacientes pediátricos.
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