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Hemos hablado previamente de que los cambios son inherentes al entorno en que nos
desenvolvemos y a nosotros mismos. En ocasiones, sin embargo, esos cambios no son tan positivos
como quisiéramos o nos afectan en formas que no nos resultan provechosas. Los cambios
reconfiguran, altera, reformulan, modifican nuestra realidad.
En ocasiones experimentamos una serie de necesidades en virtud de los cambios que ocurren en
nosotros mismos y a nuestro alrededor. Cuando crecemos, por ejemplo, debemos ir comprando
ropa que se ajuste a nuestro tamaño y a nuestros nuevos gustos. Así también, cuando las ciudades
crecen, los estados deben generar estrategias que permitan satisfacer las necesidades de sus
habitantes, aumentando el número y tamaño de los centros de salud, creando colegios, etc.
Ahora bien, las necesidades no sólo se originan a partir de los cambios. Al vivir en sociedad, en
comunidad, compartimos intereses, objetivos y también necesidades y problemas. Es clave lograr
identificar prioridades, jerarquizar necesidades, conseguir definir y satisfacer estas necesidades. Las
necesidades son elementos económicos, sociales, culturales (que se relacionan con la supervivencia
y el progreso) que se deben cubrir para que se dé un desarrollo razonable de la vida de las personas.
Esta capacidad de dar respuesta oportuna a las necesidades propias y del medio está relacionada
con la capacidad de detectar oportunamente estas situaciones y de generar respuestas pertinentes
a los requerimientos que surgen desde distintas fuentes.
¿Cómo transformar una necesidad entonces, en una oportunidad? Requiere en primer lugar de
mirar el problema desde distintas posiciones y reconocer entre otras cosas:
• ¿Qué está sucediendo?: ¿Cuál es la inquietud?, ¿Qué es lo que requiere ser modificado?
¿Cuál es el problema? ¿Qué cosa es lo irritante que nos incita a querer cambiarlo?
• ¿Quién está involucrado?: ¿Quiénes son las partes involucradas? ¿A quiénes afecta la
necesidad o el problema detectado? ¿A quiénes beneficiaría un cambio en el estado actual de las
cosas? ¿A quiénes perjudicaría?
Esto nos permite realizar el proceso de pasar desde la identificación del problema o necesidad, hacia
la elección de una o más soluciones que pueden mejorar la situación que hemos detectado. Una de
las características de los emprendedores es justamente lograr ver más allá de los problemas y
necesidades, generando respuestas o alternativas de solución a éstas. Un emprendedor visualiza
cambios en el entorno, identifica necesidades no satisfechas, pero en general tiene la capacidad
para no asumir eso como un obstáculo sino transformar estas necesidades en oportunidades de
emprendimiento.
Somos testigos de grandes cambios que impactan, por tanto, no sólo en la sociedad en general, sino
también, en nuestras localidades más cercanas. Una crisis mundial, por ejemplo, puede ocasionar
que nuestro bazar del barrio cierre por falta de suministros o insuficientes ventas. En un mundo
interconectado, todas las piezas funcionan como un gran dominó. Si movemos una, impactamos en
las otras sin que a veces podamos percibirlo.
El desarrollar, por tanto, la capacidad de detectar oportunidades a partir de los cambios que se
generan en el entorno es clave para generar las transformaciones que nos permitan satisfacer
nuestras necesidades y las del contexto en que nos situamos.
Entonces, ¿Cómo analizar los cambios en el entorno? Existen estrategias diversas, lo primero sería
analizar el contexto desde diversos puntos de vista identificando cambios que han ocurrido en
diferentes ámbitos. Al respecto, una forma útil es identificando las fortalezas, las debilidades,
oportunidades y amenazas que puedan existir en el entorno. Esto se conoce como análisis FODA y
es ampliamente utilizado en las organizaciones para responder adecuadamente a los cambios
internos y externos que aparecen, tomando asimismo las decisiones adecuadas basadas en la
evidencia que existe.
• Debilidades (o limitaciones): rasgos de la comunidad que limitan o son una desventaja para
su desarrollo – Factor interno
De esta manera, esta actividad está orientada a detectar, a través de un análisis FODA, los cambios
que han ocurrido en nuestra ciudad y transformarlos en oportunidades para crear soluciones,
emprendimientos, que mejoren nuestra forma de vivir en ella.
EJERCICIO
1. ¿Cuáles son las fortalezas más importantes detectadas en su ciudad? ¿Cuáles son las
debilidades? ¿Qué oportunidades y amenazas detectaron?
2. ¿Cómo eran antes los edificios? ¿Ha habido cambios en la infraestructura de la ciudad?
3. ¿Qué hace la gente? ¿Hacían lo mismo hace 20 años atrás? ¿Han aparecido nuevos grupos
sociales?
4. Piense en los negocios de la ciudad, ¿siguen existiendo los mismos? ¿Cuáles han
desaparecido? ¿Cuáles son nuevos?
5. ¿Qué servicios nuevos han aparecido en la ciudad? ¿Cuáles siguen haciendo falta o son muy
precarios por el momento?
6. ¿Qué le falta a esta ciudad y qué les gusta de la misma?
Elija a 2 personas de la ciudad que cumplan con alguno de los siguientes requisitos: