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LUIS DE GÓNGORA Y ARGOTE (1561/07/11 - 1627/05/23)

Poeta español:
Obras: Soledades, Fábula de Polifemo y Galatea, Fábula de Píramo y Tisbe
Género: Poesía
Padres: Leonor de Góngora y Francisco de Argote
Nombre: Luis de Argote y Góngora

Nació el 11 de julio de 1561 en Córdoba.

Hijo de Francisco de Argote, licenciado en Salamanca, bibliófilo y humanista que cuidó


de su preparación. Poseía una copiosa biblioteca calificada por el erudito Díaz de
Ribas como la «gran librería», y de Leonor de Góngora, de noble familia.

Influyó en su educación también su tío materno, Francisco de Góngora, racionero de la


catedral de Córdoba, el cual cedió a su sobrino los beneficios eclesiásticos que tenía en
diversas localidades, asegurándole así un modesto bienestar económico, y poder
estudiar en la Universidad de Salamanca, donde se matriculó de Cánones desde el año
1576 hasta el curso 79-80.

Fue racionero de la Catedral de Córdoba en 1585.

Parece ser que en su juventud conoció aventuras amorosas y aficiones como el juego,
según por la amonestación que en 1588 recibe del Obispo. Le gustaban además las
corridas de toros (prohibidas a los clérigos).

Regresó a Córdoba entre 1612 y 1614, escribe el Polifemo y las Soledades, sus obras
más conocidas.

A través del duque de Lerma, por entonces ministro del Rey, en 1617, se le designa
capellán real de Felipe III, para lo cual tuvo que ordenarse sacerdote a la edad de
cincuenta y cinco años.

La muerte de su protector y amigo, el duque de Lerma, al cual le dedicas su Panegírico,


y su conocida afición al juego llevaron a Góngora a una grave situación económica, por
lo que tuvo que ganarse el favor del siempre omnipotente conde-duque de Olivares,
ministro del Rey.

Dos de sus grandes enemigos fueron Quevedo y Lope de Vega, aunque también tuvo
grandes admiradores como el conde de Villamediana o los humanistas Pedro de
Valencia y fray Hortensio de Paravicino. El motivo de la enemistad se radica en el
carácter innovador de su poesía, cabeza del estilo literario conocido por culteranismo,
busca la oscuridad a través de la acumulación de referencias mitológicas, metáforas,
hipérboles, juegos de palabras, cultimos y todo tipo de recursos literarios en una lengua
de sintaxis complicada, llena de hipérbatos y largas perífrasis.

Su obra cultista se inicia en 1610 con la Oda a la toma de Larache y continua con la
fábula de Polifemo y Galatea (1613), las Soledades (1613) y el Panegírico al duque de
Lerma(1617). Su poesía fue revalorizada por la generación poética de 1927.

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