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Hay muchas dificultades una de ellas es que ya los padres están ausentes en muchos

aspectos de su desarrollo integral por “x” o “y” motivo, los hijos crecen al lado de otra
persona, por ende siempre debe existir esa necesidad de la presencia actuante de los padres
en todo el proceso formativo, de no ser así conllevara a que se conviertan en niños
problema, teniendo en cuenta de que no existen unas normas o reglas claras, ejemplo es el
comportamiento que presenta un niño de 6 años de edad del grado de primero, el cual
insulta a los profesores, no deja dar clase le pega a sus compañeritos, es irrespetuoso, se le
pasa jugando, esto demuestra que la conducta que genera el niño es por una falta de normas
y reglas dentro del hogar, al preguntarle al niño por sus padres manifiesta que trabajan todo
el día y que esta al cuidado de su abuela después de que sale de la escuela, que sus padres
llegan en la noche es a dormir o a discutir, es poco el tiempo que comparten con él,
podemos ver que no hay unos cuidados paternales o maternales adecuados, cuando se citó a
los padre no se ponían de acuerdo y se culpaban ambos, el padre permisivo frente a los
hechos de su hijo y la madre pasiva no manifestaba ni una palabra, hasta el punto que el
padre le dice a su hijo “si te sigues manejando mal te voy a dar unos correazos”, a lo que el
niño le contesta si lo haces le digo a la policía, con estas palabras lo desarmo, hasta este
punto llega esa ausencia de padres que no han estado en ese acompañamiento y orientación
frente a su hijo lo que conlleva afectar su desarrollo integral, es a partir de estas situaciones
que escuela se enfrenta a la doble función de educar a los niños y de acompañar a los
padres, para rectificar en lo posible las conductas desordenadas que se han permitido desde
hace mucho tiempo; otra situación es en la que le dan todo a sus hijos creyendo que están
haciendo bien, porque el decir es “yo en mi infancia no tuve nada y no quiero que mi hijo
viva lo mismo”, no saben que le están causando un daño mayor con esta clase de
decisiones, o no dejemos de un lado la era tecnológica que por mantener ocupado a sus
hijos hacen de esto medios como el celular o Tablet un medio de distracción para ellos, y
tampoco se imaginan que lo están perjudicando en su desarrollo integral, ya que si bien son
herramientas de mucha ayuda no le estamos dando el mejor manejo.
Para terminar diré que si los padres son autoritarios, no escuchan a sus hijos, no les
reconocen sus virtudes, los sobreprotegemos y los gritamos en vez de hablarles, no podrán
brindarle un ambiente familiar seguro.

Ya que según («La importancia de establecer pautas y límites en la crianza de


nuestro hijos - Colegio Espíritu Santo», s. f.-a) “Son una referencia, un marco de
contención, una guía, que le indican al niño/a qué se puede o se debe hacer y qué no, son
reglas que ordenan sus comportamientos y le permiten una mejor percepción de la realidad,
al reconocer lo incorrecto de lo correcto. Los límites además le brindan al niño/a la
oportunidad de pensar, de tomar la iniciativa y buscar soluciones. Asimismo, favorecen el
desarrollo de la identidad y fomentan la autonomía.” De igual forma es importante hacer
referencia a que “cuando un niño aprende a hablar, también está aprendiendo a respetar
límites, ya que la adquisición del lenguaje implica la aceptación de códigos y reglas”.

Para mi es importante señalar lo que nos describe este artículo(«La importancia de


establecer pautas y límites en la crianza de nuestro hijos - Colegio Espíritu Santo», s. f.-b)
en que “Establecer límites no significa emplear castigos, ser severos o autoritarios, por el
contrario, implica entender cómo se desarrolla el vínculo temprano y qué necesita un niño
pequeño para crecer saludablemente. Es, en primer lugar, una responsabilidad de todo
padre y de toda madre, implica tomar una posición frente a la actitud del niño, renunciar a
esa persona ideal y a los propios deseos de ser siempre buenos, es superar el temor a perder
el cariño del hijo/a y tolerar que el niño manifieste su desagrado”. De aquí la necesidad de
sus padres en el posterior acompañamiento para su desarrollo integral.

Me parece interesante lo que resalta («TRABAJO TEÓRICO-


METODOLÓGICO..pdf», s. f.), que como estrategia los maestros deben acudir a la
estimulación y motivación dentro del aula para mantener el orden, la disciplina y hacer que
los niños cumplan las normas de manera espontánea y no por imposición como se
acostumbra; Por otro lado expone que cuando un niño es motivado por su profesor, es
seguro que desarrolla mayor interés en las enseñanzas, esto va a resultar muy positivo, ya
que se genera en él una empatía y pertenencia de grupo, se socializará y adaptará mejor a
los posibles cambios y lugares, dando como resultado un cambio favorable en la disciplina,
pero todo esto se logra a través del compromiso y responsabilidad que tenga el docente
frente a sus alumnos.

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