REPÚBLICA BOLÍVARIANA DE VENEZUELA.

UNIVERSIDAD GRAN MARISCAL DE AYACUCHO.

FACULTAD DE DERECHO.
ESCUELA DE DERECHO.

ALEGORÍA DE LAS
CAVERNAS.

Profesor: Estudiantes:
Hugo, Mata García. Amparo, Efrenyer J. C.I: 28.418.396.
Flores, Rubén E. C.I: 27.330.225.
Herrera, Eliannys C. C.I: 29.729.435.
García, Nervianis C. C.I: 28.065.736.
Tovar, Yubetzys De los A. C.I: 27.651.742.
Semestre I.

Anaco, Abril de 2018.

 LA ALEGORÍA DE LA CAVERNA:

Primeramente, Platón supone imaginar o nos contextualiza en que somos como

unos prisioneros que habitan una caverna subterránea. Estos prisioneros se encuentran
desde niños, están encadenados e inmóviles, de tal modo que sólo pueden mirar y ver el
fondo de la caverna oscura. Detrás de ellos, en un plano más elevado hay un fuego que
ilumina la caverna en tinieblas, a su vez entre el fuego y los prisioneros hay un camino
más alto al borde del cual se encuentra una pared o tabique, según vamos percibiendo a
lo largo de la historia. En ese sentido, creen que las voces y sombras que perciben son
todo lo que se encuentra en la caverna. Sin embargo, para su sorpresa por el camino
marchan unas personas, algunos de los cuales hablan, por lo tanto las voces que escuchan
son las de éstos. A medida que las personas se trasladan por el camino, los prisioneros
que se encuentran en la pared (nosotros en tal caso de la suposición de Platón), observan
que en el fondo de la caverna se proyectan sombras de los objetos que trasladan dichas
personas.
Posteriormente, el texto narra que uno de los encadenados es puesto en libertad y
conducido hacia la luz por un camino difícil y complicado. Entonces, Platón y Glaucón
analizan las sensaciones que el liberado experimenta ante la luz del exterior y cómo se
adapta y se acostumbra a ella. Es cuando se pone a deducir que éste sería incapaz de
observar la luz ya que quedaría cegado por un momento, creyendo que no puede mirar
más allá que solo sombras a las que estaba acostumbrado en la caverna. Además de esto,
le dolería moverse por las cadenas que apretaban su tórax y demás extremidades.
De igual manera plantea, que si a la fuerza se le arrastrara hacia el exterior sentiría
dolor y, acostumbrado a la oscuridad, no podría percibir nada. En el mundo exterior le
sería más fácil mirar primero las sombras, después los reflejos de los hombres y de los
objetos en el agua, luego los hombres y los objetos mismos. Luego, contemplaría la
noche, el cielo y la luz de los astros y la luna. Culminaría por percibir la luz del sol, haría
un análisis respecto a él y lo que produce, en este caso, las estaciones y los años. Además
concluiría con que gobierna todo en el ámbito visible y que de algún modo es causa de
las cosas que ellos habían visto.
 En otro aspecto, el cautivo al recordar su antigua morada y a sus compañeros de
cautiverio, se sentiría feliz y los compadecería, porque en el mundo subterráneo los
prisioneros se dan honores y elogios unos a otros, y recompensas a aquel que percibe
con más agudeza las sombras, el que mejor recuerde el orden en la sucesión de la
sombras y al que es capaz de adivinar las que van a pasar. Pero ahora, esa vida le parece
insoportable por la sabiduría que descubrió al salir de allí.
No obstante, cuando el ex prisionero conmovido y compareciente de la ignorancia
en la que viven sus otros amigos prisioneros, decide volver a la caverna, esta vez con
dificultad, pues ya no estaba adaptado a las tinieblas. Motivado por liberar a sus
compañeros, llega y ninguno le cree lo que ha descubierto en el mundo exterior, lo
acusan de mentiroso y lo condenan a muerte.
El significado general de esta alegoría está bastante claro, pues, la caverna
representa al mundo de las apariencias, lo que nos hacen creer. Los cautivos
encadenados simboliza la gente corriente que vive de conjeturas e ilusiones, mientras
que el mundo real sólo está presente para unos pocos y cuando estos quieren iluminar a
la mediocridad se enfrentan ante la burla y el rechazo. Existe en cada uno un motivo que
hace que podamos salir de la oscuridad y llegar al mundo de las ideas y ese algo es la
inteligencia. Es importante resaltar que este mito expresa la forma de enseñar, descubrir
y profundizar en los distintos aspectos de la vida y del conocimiento, en general. Platón
utiliza una escena desalentadora, con el objeto de que se reflexione en cuanto a la manera
en que nos limitamos de nuevos saberes, ya que no profundizamos, ni aclaramos nuestras
ideas para descubrir nuestra propia perspectiva u opinión respecto a ellos.
Por último, debemos tener en cuenta que en el transcurso de la vida no podemos
tener la seguridad de las cosas que creemos que sabemos. Para eso tenemos el mito de
la caverna de Platón, para recordarnos que nunca se es suficiente lo que se cree que sabe.
Debemos tomar el ejemplo de este gran filósofo, pues, parte de su ignorancia y no se
conforma con sólo lo visible.