No permitas que nada dañino entre en tu corazón: rencor, amargura, resentimiento, mundanalidad, ni le abras tu corazón a cualquiera que te pueda dañarlo.
SEGUNDO TESORO: TU CUERPO : (1 CORINTIOS 6:20)
No solo agrada al Señor con tu espíritu sino también con tu cuerpo que todo lo que hagas con él sea para la gloria de Dios, y piensa en la mejor ofrenda que puedes darle al señor con tu cuerpo: pureza y dando un buen testimonio (1 timoteo 4:12)
TERCER TESORO: TU TIEMPO (EFESIOS 5:15-16):
Usa con sabiduría tu tiempo porque la juventud es fugaz, estudia, prepárate, pero principalmente dedica tiempo para tu dios (Eclesiastés 12;1)