Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La Teoría Del Apego Apego y Su Evaluación PDF
La Teoría Del Apego Apego y Su Evaluación PDF
INTRODUCCIÓN
La teoría del Apego desarrollada por John Bowlby proporciona la comprensión de los motivos
por los cuales las personas desarrollan vínculos a lo largo de su historia, y por qué reaccionan
como reaccionan ante su pérdida. Desde el nacimiento, el niño establece un vínculo con su
cuidador/a para garantizar la seguridad y protección ante el mundo al que acaba de llegar.
En la actualidad, la teoría del apego es una teoría que está propiciando un gran número de
investigaciones. Las consecuencias de las implicaciones de esta teoría son tan amplias como
Desde una vertiente más cognitiva, en la década de los ochenta, Vittorio Guidano se basó en las
ideas de Bowlby como marco de su teoría y dar nombre a una forma de psicoterapia
formulación del desarrollo del sí mismo (el desarrollo de la identidad personal el ser humano la
el que influye factores madurativos, sociales y cognitivos) en el que integra la teoría del apego,
1
través del cual el niño integra los aspectos emocionales y cognitivos en una relación. Guidano y
Liotti (Guidano y Liotti, 2006) consideran la teoría del apego como un nuevo paradigma
integrativo del desarrollo humano, en donde las primeras experiencias y relaciones afectivas
determinan la vivencia emocional que experimenta el niño. Sus estudios y trabajo clínico les
llevan a dos líneas distintas. Por un lado, a la concepción de cuatro organizaciones del
fóbica, obsesiva y desorden alimenticio), los procesos de apego y su relación en el origen de los
Desde la vertiente psicoanalítica, otro autor que coge la teoría del apego como marco integrador
es Jeremy Holmes (Holmes, 2009), quien hace una integración de los conceptos y terapia
psicoanalítica con el apego haciendo que cada una ilumine a la otra. Para él, y siguiendo a
propiciando, al igual que una madre (o padre), la situación a través de la cual explorarse a sí
mismo, el mundo y las relaciones. Y partiendo de las narraciones que hacen de su historia
propiciar la re-narración desde ellos mismo y diferente a la surgida en sus vínculos primarios de
apego. Asemeja la ciencia inmunológica (defensas contra agentes patógenos) a la teoría del
competencia inmunológica.
2
BOWLBY Y LA TEORÍA DEL APEGO
Bowlby nació en Londres en 1907 y falleció en 1990. Estudió medicina y luego ingresó en la
teoría de las relaciones objetales. Buscaba dar respuesta a preguntas como qué es lo que une a
las personas o qué es lo que hace que las relaciones se mantengan más allá del afecto. En sus
inicios, trabajó con niños y delincuentes que habían tenido separaciones prolongadas, o habían
perdido a sus progenitores, observando las consecuencias emocionales que esto producía
(Bowlby, 2006). Además, él mismo también fue separado de su familia a la edad de siete años
Para poder explicar y entender el desarrollo de las relaciones de un niño con otras personas,
diferente a la propuesta del método científico de la teoría del aprendizaje. Para él, la teoría del
comportamiento social y de las relaciones familiares en especies inferiores. Desde este marco,
Las conclusiones a las que llega, le hacen utilizar otros conceptos que para él explican mejor los
resultados. Así, más que sean las necesidades de alimentación las que unen al niño a su madre, y
que esto haga posible la identificación y creación de lazos entre ambos, él postuló que es la
necesidad de protección y seguridad lo que lleva al niño a crear el vínculo, vínculo que llamó
apego. Como se refirió el mismo Bowlby (2006), es la madre en sí y no su seno. Esto es lo que
le hace cambiar el concepto de objeto por figura de apego, pues de esta manera para él expresa
el carácter protector, activo y relacional por parte de la madre frente al otro más pasivo. Por otro
3
lado, el vínculo con la figura de apego sería el que hubiera hecho posible la supervivencia del
bebé, y de la especie humana por extensión, pues dicha figura le protege de los peligros y
amenazas del medio (frente a la necesidad de alimentación). Y para ello, la cría vendría con un
sistema preprogramado, un sistema de conductas como llorar o sonreír, que se desplegaría ante
ciertas circunstancias ambientales, con el fin de conseguir dicha protección; pero el apego,
organizarse. Así, el apego sería una tendencia que lleva a los seres humanos a crear vínculos con
fantasía como origen del desarrollo, defendida por M. Klein como fantasías del niño que van
definiendo las relaciones objetales. Para Bowlby la relación y las experiencias derivadas de
dicha relación serían las que tienen una influencia en el desarrollo (Bowlby, 2006; Wallin,
2012).
CONCEPTOS BÁSICOS
En la teoría del apego Bowlby expuso que los seres humanos tienen la necesidad evolutiva de
motivación para satisfacer dicha necesidad, a partir del cual tendería a establecer vínculos con
otros que le rodean (figuras de apego). Las conductas del sistema serían aquellas que ante una
llanto, agarrarse, reptar o la intensa protesta. Esta figura de apego, además, se convierte en la
base segura desde la cual explorar el mundo circundante y a la cual poder volver en momentos
4
ofreciendo protección y apoyo a la vez que le permite la exploración se convertirá en digna de
confianza al tiempo que el niño se sentirá más libre para acercarse al mundo. La disponibilidad
de la figura no se circunscribiría a su mera presencia física, sino que estaría más relacionada con
percibe, y es consecuente, con dicha necesidad. Al mismo tiempo, el niño debe sentir a través de
su experiencia interna subjetiva que está a salvo, seguro. Así pues, en este juego relacional, el
De este modo, tenemos por un lado un sistema conductual de apego que está presente en el niño
le es inherente durante toda la vida apareciendo en menor medida en momentos posteriores que
en la infancia pero sí ante todas aquellas situaciones que sean potencialmente amenazantes o
que pongan en peligro al individuo; y por otro lado, esta necesidad de apegarse que comporta
una forma aprendida a través de los primeros años serán los que se manifiesten cuando se vayan
estableciendo otras relaciones a través de lo que Bowlby denominó modelo funcional de apego.
obtenido de las interacciones del niño con las figuras de apego y estaría constituido por
Un modelo para ir dando significado, sentido y control al mundo relacional del niño. A su vez,
este modelo es el que se despliega ante las interacciones en la vida adulta y también puede ser
objeto de modificaciones por dichas interacciones, pues depende de las situaciones, de las
interacciones y de los modelos que los otros despliegan (Bowlby, 2006; Wallin, 2012).
Aquellas experiencias en la que el niño haya conseguido una figura de apego segura a través de
la que explorar el mundo, sensible a sus necesidades, conlleva una estabilidad emocional dando
(Mikulincer y Shaver, 2012). Así pues, dentro del apego existen varios tipos.
5
TIPOS DE APEGO
En un principio, Bowlby habla de apego seguro y apego angustioso, entendiendo éste último
vividas con los padres en las que éstos actuaran de forma, como el mismo Bowlby mencionó,
convencido que eran las interacciones diarias las que determinaban unas formas u otras. Pero
fue una colega, la doctora estadunidense Mary Ainsworth, quien diseñó un estudio para probarlo
empíricamente (Wallin, 2012), denominado la Situación del Extraño. A raíz de este estudio, la
(Florez y col.).
Ainsworth observó el comportamiento de los niños en una situación en la que los padres se
marchaban quedándose el niño a solas con un extraño en una sala de juegos. La madre o el
padre volvían durante unos minutos y se volvían a marchar, y finalmente salían la persona
apego, Ainsworth confirmó que la madre actuaba como una base segura a partir de la cual
(tipos) de apego. Pero el descubrimiento más sorprendente fue que lo principal en el vínculo de
encontró un patrón comportamental diferente que había pasado desapercibido y que fue
incluido. Por un lado estaría el apego seguro, y por otro el apego inseguro, y éste a su vez puede
Apego Seguro. Se caracteriza por una confianza en el cuidador (figura de apego) que estará
disponible y será sensible a las necesidades del infante. Los niños con apego seguro pueden
6
separarse de la madre pues saben que si en algún momento las circunstancias suponen alguna
amenaza sentida por él, la madre responderá atendiendo a su llamada. Y, además, pasada la
amenaza o reconfortado el niño, deja que vuelva a su actividad. De esta forma, el niño va
creando esquemas a cerca de las personas que le cuidan como confiables, al tiempo que ellos
Apego Inseguro evitativo o elusivo. Estos niños, cuando la madre salía de la habitación,
obstante, el pulso cardíaco y los niveles de cortisol aumentan (Wallin, 2012). Según Ainsworth,
estos niños tenían dificultades emocionales. Habían ido aprendiendo que ante la necesidad de
ser protegidos, no solo no lo habían obtenido sino que además habían sentido el rechazo. Ante
esto, y con el fin de evitar frustraciones posteriores, responden con defensas y evitación
intentando negar la necesidad que tienen, construyendo una coraza para protegerse. (Oliva,
1995; Florez y col.). Ante la activación emocional sobrerregulan el afecto a fin de evitar otras
Apego inseguro ambivalente o resistente. En esta ocasión, los niños mostraban mucha
brazos de la madre. Se observó también que los comportamientos de las madres en casa en
ocasiones son responsivos a las necesidades del niño, y en ocasiones no, dependiendo más del
estado en el que ésta se encuentre. Al tiempo, inhiben las conductas exploratorias del niño
cuando éste las inicia interfiriendo en ellas, con lo que el desarrollo de la autonomía se ve
mermado. (Oliva, 1995). En este tipo de vinculación, el niño siente una inseguridad a cerca de la
aferramiento, conductas de mayor demanda de atención. En este tipo de apego, los niños
7
subregulan el afecto expresando mayores muestras de ansiedad con el fin de aumentar el
análisis más exhaustivo de las interacciones que no eran clasificables. Estos niños dan muestras
lado, llorar en su presencia o mostrar movimientos estereotipados. (Oliv, 1995; Fonagy, 1999).
Para estos niños, sus madres (o cuidadores) son fuente de peligro y temor. Estos estudios fueron
llevados a cabo por Mary Main y añadió a la interacción no solo a padres aterradores sino
también a los asustados o disociados, y la estrategia desarrollada por los niños está caracterizada
Posteriormente, un estudio llevado a cabo por Main y col. (Wallin, 2012) demostró
empíricamente el modelo funcional interno de Bowlby, esto es, que la representación mental del
modo de relacionarse con otros y de sí mismo la construyen las personas en sus interacciones de
la infancia con las figuras de apego sirviendo como un marco para percibir e interpretar a los
demás al mismo tiempo que desarrollar conductas. Partiendo de que las representaciones
verbalizaban sino del cómo, por ello se fijó en los procesos narrativos, como por ejemplo lapsus
eran los niños, a los 12 meses a través de la situación del extraño, y a los 6 años a través de las
familia. A parte de las conclusiones a las que llegaron en el estudio, desarrollaron una forma de
evaluar el mundo interior de los padres a través de lo que denominaron la Entrevista de Apego
Adulto, que correlaciona con los distintos tipos de apego de la situación del extraño y que ha
sido probada empíricamente por otros investigadores de todo el mundo (Wallin, 2012; Oliva,
1995).
8
De la Entrevista de Apego Adulto, se extraen cuatro tipos de patrones de apego como modelos
internos de relación, de estado anímico con respecto al apego, y que se corresponden con los
coherente. Son capaces de hablar de sus vínculos de apego relacionando los recuerdos con los
sentimientos y los pensamientos sin que éstos les invadan emocionalmente. La valoración de la
experiencia no estaría determinada por la carga emocional que la experiencia supuso. El punto
crucial sería la capacidad de reflexionar sobre las experiencias tempranas tomando distancia del
recuerdo en sí, y esto a pesar de haber tenido relaciones inseguras con sus figuras de apego. Lo
que se observó es que hablaban de su vida integrando el recuerdo con la relación de apego.
Los otros tres patrones de apego se corresponderían con los apegos inseguros. En estos casos,
las formas de relatar la propia vida estaría caracterizada por no haber tal integración entre las
coherencia desaparecerían. El negador, que equivaldría al evitativo por negar las emociones,
negada. Evolutivamente, los niños, ante la falta de apoyo y consuelo físico y emocional en una
autosuficiencia a la vez que otro más inconsciente, del que se tienen que defender de la
se hacen presentes y en las relaciones actuales, como en los recuerdos, cobran un cariz especial
y aumentado. En esta ocasión, las verbalizaciones a cerca de los recuerdos son escasas, no
porque no sean capaces de recodar sino porque las emociones interfieren en ellos. Así, el
recuerdo, más que pertenecer al pasado sigue viviéndose como una preocupación presente
9
relacionada con la relación de apego, y la narrativa se convierte en incoherente, por ejemplo a
través de un lenguaje infantil o vago. El pasado sigue viviéndose con ira, miedo o pasividad. En
este patrón, subyace el miedo al abandono pues la figura de apego a veces está y otras no, lo que
genera angustia. Finalmente, el otro patrón, denominado por Main irresoluto, y relacionado con
figura de apego aterrorizaba o provocaba miedo por su propio miedo o disociación. Y, además,
experiencia por parte de los padres. Por ello, de adultos los discursos tienen lagunas de
recuerdo, incoherencias, pensamientos irreales como creer que con un pensamiento podían
haber matado a alguien. Las narraciones se caracterizan por verbalizaciones contrapuestas como
Como se puede observar, una característica que diferencia un patrón seguro de uno inseguro
viene determinada por la capacidad reflexiva que los individuos desarrollan y que se observa en
sus narrativas posteriores. Este punto clave fue desarrollado por Peter Fonagy (Wallin, 2012)
mente del otro y de la propia, que se desarrolla en las relaciones de apego y a través de la
capacidad de la función reflexiva. Fonagy (1999) añade a la teoría del apego un cambio pues lo
que indicaría un apego seguro, o no, vendría determinado por la asunción de los estados
mentales por parte del niño respecto a la respuesta del cuidador en vez de la creencia acerca del
propósito de dicha respuesta, y que, a su vez, esta capacidad de reflexionar sobre los estados
función reflexiva, capacidad de reflexionar sobre los estados emocionales propios y de los
demás, hito del desarrollo humano después de haber logrado separarse de la realidad inmediata
en donde se produce una equivalencia entre el mundo subjetivo y la realidad externa, o en donde
10
se produce un modo de simulación en el que se disociaría el mundo externo del interno (Wallin,
2012).
Las implicaciones de estos conceptos desde la primera exposición de Bolwby hasta las últimas
aportaciones son de gran magnitud pues no sólo dan explicación del desarrollo desde un punto
de vista diferente sino que también aportan una forma de comprender la psicopatología y la
relación terapéutica, y según este modelo de apego, esta relación íntima entre paciente y
paciente y distinto al finalizar. En este contexto cobra importancia, no solo por sus
implicaciones evolutivas y psicopatológicas sino también por el juego que puede llegar a
Ya en su estudio Main utilizó para investigar los patrones y estilos de apego la Entrevista de
Apego Adulto, el dibujo de la familia y fotografías de niños que se iban a separar de sus padres
Como demostró Main (Wallin, 2012), los patrones de apego pueden evaluarse a través de las
narrativas que demuestran el estado de ánimo con respecto a las figuras de apego, narrativas que
descubren los modelos funcionales internos de las personas, y éstas, a su vez, dejan acceder a
los modelos inconscientes. Por ello, la atención está centrada en la forma del discurso más que
en el contenido. A pesar de que esta entrevista hubiera sido diseñada para la investigación, es
11
terapeuta atiende a cuatro aspectos del discurso, que son la calidad, cantidad, relación y modo.
La calidad tiene que ver con la sinceridad o pruebas que aporta y que confirman lo que se dice.
La cantidad con la exposición clara y completa, ni breve ni con excesivos detalles. La relación
con la correspondencia entre la pregunta del entrevistador y la respuesta que emite. Y el modo
De esta forma, los individuos seguros-autónomos muestran una comunicación clara, sincera,
sincero éste es confuso. El miedo, la ira o la impotencia son sentimientos que aparecen en las
relaciones actuales, pudiéndose dar también en la relación con el terapeuta. Los no-resueltos
tienen un discurso caracterizado por lapsus que se observan en cambios de actitud mientras
También se han desarrollado cuestionarios que permiten medir las representaciones de apego.
Uno de ellos, traducido al castellano, es el CaMir (Balluerka y col., 2011) que consta de 75
items a los que la persona contesta según las valoraciones que hace con respecto a su
apego seguro, el preocupado y el evitativo. Presenta varias ventajas como ser administrado a
dimensionales. Aunque es largo, existe una versión castellana reducida realizada por Balluerka
12
El hecho de que en la investigación Main utilizara otras formas de correlacionar el apego adulto
con la infancia a través de pruebas proyectivas, la situación del Extraño y las respuestas a
fotografías de familias, y que los resultados hayan sido corroborados por otras investigaciones,
hace posible que los patrones de apego, el apego y el desapego puedan evaluarse desde otros
Las técnicas proyectivas se basan en las respuestas del individuo, que pueden ser creaciones
gráficas (ej, dibujos) o percepciones ante una consigna emitida de forma verbal, para obtener
inconscientes.
En los test proyectivos gráficos, las realizaciones expresivas hechas por los pacientes ponen de
percepción que tiene del mundo, de sí y de su relación con él. Es un estímulo al que tiene que
dar una respuesta, un estímulo que llama a la imaginación y una respuesta del sí mismo. Ante
una hoja en blanco y una consigna (dibujar una persona, un árbol, una casa, etc.) tiene que
estado anímico, sus conflictos, mecanismos de defensa, o su yo (De Santiago y col., 1999).
El test del dibujo de la familia está indicado a partir de 5 o 6 años. Se pide que dibuje una
familia (no tu familia) para ver el grado de proyección y discrepancia entre la real y la dibujada.
Al término, se hace una serie de preguntas para averiguar los motivos por los cuales se
Los dibujos de familia de los apegos seguros se caracterizan por ser realistas, las figuras
dibujadas suelen estar juntas y con los brazos abiertos. En el apego evitativo, las figuras las
13
ambivalente representan las figuras muy juntas, y éstas muy grandes o muy pequeñas (Wallin,
2012).
A la vista de estos resultados y con los datos disponibles de los patrones de apego, cabe pensar
Así, en el test del dibujo de la figura humana (DFH) se pide primero que dibuje a una persona,
después que dibuje a otra de sexo opuesto, y, finalmente, que narre una historia con las dos
figuras. A través de la interpretación expresiva del dibujo el clínico puede obtener datos que
apunten a uno u otro patrón. Por ejemplo, los brazos representan los rasgos de contacto. Los
brazos cortos están relacionados con el temor a la evaluación del otro y con dificultades
sociales; los brazos largos lo están con la agresividad exterior; y su ausencia puede indicar algún
historia, se obtiene una narrativa que se podría relacionar con los patrones de apego.
Otra prueba proyectiva gráfica útil puede ser el test del árbol. En esta ocasión, el dibujo al no
estar relacionado con personas puede dejar más libertad para la proyección de la persona pues la
y a su término se realizan una serie de preguntas como qué clase de árbol es, dónde está, si está
vivo o muerto, etc. Cada parte del árbol tiene un significado. Las raíces representan la parte
impulsiva, la preocupación por el contacto con la realidad; el tronco está relacionado con el yo,
el concepto de uno mismo y los afectos; y las ramas corresponden a las relaciones sociales, los
recursos para conseguir gratificaciones. A su vez, el tronco está relacionado con la vida y la
biografía de esa persona. Así pues, pueden observarse acontecimientos traumáticos a través de
14
Otro grupo de técnicas proyectivas que puede ser útil son las técnicas aperceptivas en las cuales
mundo interno, estímulos que no tienen significados y a los que debe darle alguno.
láminas en las que aparecen unas manchas de tinta. Permite obtener las características
cualitativo y a través de los determinantes se valora la relación del individuo con el medio. Así,
el contacto con el medio se realiza a través de las formas; los sentimientos y la actitud interna
observa el estado de ánimo central y los estados de angustia; y la textura hace referencia a las
necesidades afectivas. Toda esta información podría llevar a entender cómo es la relación de
apego.
Para finalizar con la exposición de instrumentos de medida, haré referencia al test desiderativo,
perteneciente a los test proyectivos de asociación de palabras pues el sujeto responde lo primero
que piensa ante una frase verbal. En este test, se pregunta sobre qué le gustaría, o no, ser si no
pudiera ser una persona y por qué. El individuo debe por unos momentos imaginar de forma
fantaseada su propia muerte y, así, discriminar entre fantasía y realidad para jugar a la propuesta
equiparan aparecen fracasos en cuanto dificultades para reinstalar el objeto necesitado y perdido
y para tolerar experiencias nuevas. La pérdida imaginada estaría relacionada con el desapego: en
qué medida es capaz de incluir simbólicamente la figura de apego para no necesitar su presencia
física, o cómo afecta el duelo. Y ello conlleva, a su vez, la capacidad reflexiva de la experiencia.
15
Al elegir-desear (o lo que no desearía ser) se produce el desapego para volver a apegarse a otros
Esta última cuestión, apego-desapego-apego, podría también ser aplicable a las otras pruebas
a lo que se le pide (ya sea dibujar o ver algo en una mancha), superar la ansiedad que supone
una situación nueva que hay que resolver. De esta forma, si no se puede, o no inicialmente, la
Serán necesarias futuras investigaciones que aporten datos para relacionar las pruebas
proyectivas con los estilos de apego. Esta forma de evaluación puede ser beneficiosa con
pacientes que presenten dificultades verbales y/o narrativas, viniendo a complementar las ya
existentes.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Balluerka, N., Lacasa, F., Gorostiaga, A., Muelas, A. y Pierrehumbert, B. (2011). Versión
reducida del cuestionario CaMir (CaMir-R) para la evaluación del apego. Psicothema, 3
(vol. 23); pp. 486-494.
16
De Santiago, F.J., Fernández, M. J., Guerra, L. R. (1999). Psicodiagnóstico dinámico a través
de las técnicas proyectivas. Salamanca: Amarú Ediciones.
Florez, L., Giuliani, M. F., Giulio, M. Algunas Consideraciones sobre el Concepto de Apego:
Revisión Histórica y Aportes Clínicos.
http://www.seadpsi.com.ar/congresos/cong_marplatense/iv/trabajos/trabajo_350_845.pdf
Fonagy, P. (1999). Persistencias transgeneracionales del apego: Una nueva teoría. Aperturas
Psicoanalíticas, 3. http://www.aperturas.org/articulos.php?id=86&a=Persistencias-
transgeneracionales-del-apego-una-nueva-teoria
http://www.aperturas.org/articulos.php?id=104&a=Apegos-patologicos-y-accion-terapeutica
Holmes, J. (2009). Teoría del apego y psicoterapia. En busca de la base segura. Bilbao:
Desclée de Brouwer.
Mikulincer, M., Shaver, P.R. (2012). Una perspectiva del apego en psicopatología.World
Psiychiatry (Ed Esp) 2012; 11: 11-15.
Oliva, A. (1995). Estado actual de la teoría del apego. Revista de Psiquiatría y Psicología del
Niño y del Adolescente, 2004, 4 (1); 65-81. http://www.psiquiatriainfantil.org/
Spinelli, F. (2000). Teoría del apego de John Bowlby. Ateneo de Estudios Psicoanalíticos de
Rosario, año 0 (1). http://www.centroguidano.com.ar/apego.htm
17