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INSTITUTO TECNOLÓGICO DE MATAMOROS

INGENIERÍA EN GESTIÓN EMPRESARIAL

EL EMPRENDEDOR Y LA INNOVACIÓN
Unidad II. “Enfoques y técnicas para desarrollar habilidades emprendedoras
y creativas.”
Profesor: Andrés Cahuich Chuc

Nombre: Itza Iveth Hernández Pérez


No. Control: 15260820

Enero-Junio 2017
INTRODUCCIÓN
“El deseo de crear es uno de los anhelos más profundos en el pensamiento del ser
humano”.

El pensamiento es parte esencial del ser humano ya que dentro él nacen, se crean,
construyen y se desarrollan todas las ideas que posteriormente se transforman en
una realidad y que dan paso a la creatividad.

Si bien es cierto, la creatividad es un proceso dinámico de pensamiento, es


el motor que permite generar, desarrollar y conjugar ideas que permiten ampliar
nuestra visión y crear nuevos esquemas de pensamiento.

La creatividad es una habilidad inmersa en la naturaleza del ser humano,


puesto que constantemente el individuo busca realizar cambios en su entorno
inmediato y para ello se apoya de su creatividad, siendo esta un elemento
indispensable para la producción de nuevos conceptos, ideas y perspectivas.

Si bien, el concepto de creatividad es usado coloquialmente en diferentes


facetas de la vida actual, en realidad el término ha sido objeto de investigación de
diversas áreas desde principios del siglo XX; siendo la psicología y la pedagogía las
primeras disciplinas en estudiarlo.

Y es que ya desde entonces se produjo una gran curiosidad por conocer el


proceso de producción de ideas y solución de problemas, esto con una finalidad de
enseñar a pensar de forma original y práctica.

Se asume que la creatividad es la capacidad de producir algo nuevo; sin


embargo, han surgido algunos desacuerdos debido a los distintos caminos que las
investigaciones toman, algunas enfocadas hacia el sujeto, otras hacia el proceso, lo
que hace difícil una noción completa del concepto creatividad.
Algunos investigadores afirman que no existe una definición unitaria de creatividad.
Pero esto no significa que no se dé un común denominador de los distintos
conceptos de esta cualidad. Ese común denominador acentúa la idea de “Algo
nuevo, independientemente de lo nuevo que pueda ser”.

Muchos autores consideran la creatividad como un proceso, un conjunto de


fases a seguir, ciertas características que debe tener una persona y, por supuesto,
un proceso que da como resultado algo que ha de ser nuevo, original y que ha de
servir para resolver algún problema.

En todo caso, se trata de una capacidad existente en todos los seres


humanos, utilizada para la solución de problemas y que precisa de realidades ya
existentes. Con base en algunas investigaciones podría definirse la creatividad
como “el conjunto de aptitudes vinculadas a la personalidad del ser humano que le
permiten, a partir de una información previa, y mediante una serie de procesos
internos (cognitivos), generar ideas creativas para transformarlas y llevarlas a la
realidad”.

Las ideas creativas se desarrollan al abrir nuevos caminos en el cerebro con


la finalidad de volver a configurar los pensamientos existentes y generar
acercamientos creativos ante un determinado desafío.

La creatividad es ante todo un asunto de actitud interna. A fin de pensar


diferente se requieren la apertura y la curiosidad; es decir la mente de un
principiante y una buena toma de conciencia, entrenada lo más posible. “Cuanto
más limitado se encuentre el horizonte de la toma de conciencia, menos ideas
nuevas se generarán y menos accesibles serán para la conciencia”.

Para un mayor entendimiento, en el presente ensayo se abordarán aspectos


más profundos sobre el proceso creativo y las técnicas que se emplean para
desarrollarlo.
DESARROLLO

“La creatividad es ver lo que todo el mundo ha visto y pensar en lo que nadie había
pensado.” Albert Einstein.
Albert Einstein asumía que pensar en lo que nadie había pensado, aun cuando el
todo el mundo lo ha visto, puede ser esta pequeña acción la marque diferencia entre
ser o no ser creativo. ¿Pero como podemos desarrollar la creatividad? ¿Basta
únicamente con pensar diferente o pensar lo que nadie ha pensado? ¿Cómo
podemos lograr el pensamiento creativo?
Para dar respuesta a esta interrogante, es conveniente recordar que todo
aquello que deseamos hacer requiere de un proceso que involucra una serie de
acciones que sirvan como estimulo para lograr nuestro objetivo.
Para tal caso, ¿Cómo podemos lograr la creatividad?
Para ello existen una serie de técnicas o métodos que permiten al individuo
modelar su forma de pensar y que orientaran sus pensamientos a otra dimensión
permitiendo romper los esquemas tradicionales y dirigir sus acciones a la realidad.

Es importante puntualizar que la utilización de técnicas de creatividad no


asegura el éxito, pero sirven para alcanzar objetivos próximos a la creatividad,
permitiendo direccionar el pensamiento a nuevos horizontes.

Lo anterior permitirá que el individuo sea capaz de producir pensamientos


creativos logrando de esta manera desarmar los caminos de pensamiento
tradicionales, posibilitando la construcción de nuevas fronteras de pensamiento y
creando una ruptura en los esquemas o modelos habituales, abriendo paso a la
creatividad misma del individuo.
La creatividad, tal y como la hemos definido anteriormente, está dirigida a la
búsqueda de alternativas a la situación existente o a la formulación de soluciones
que den respuesta a problemas que se puedan presentar. La predisposición a
encontrar nuevas soluciones y al cambio, se entiende qué para lograr la mejora,
implica, además, la existencia de una actitud creativa. La creatividad está
relacionada con la utilización de mecanismos y métodos que no responden a
esquemas y lógicas tradicionales.
La complejidad del entorno y de los problemas a los que nos enfrentamos
requiere de nuevas ideas y, sobre todo, de nuevos enfoques. Para tal caso la mente
creativa es quien juega un papel fundamental, ya que es quien busca métodos
diferentes y es capaz de reinterpretar la realidad bajo nuevos marcos lógicos. Todo
ello, con el fin de encontrar nuevas formas de acercarse a la realidad y de dar
respuestas creativas eficaces a los problemas que puedan surgir.

Es evidente que los cambios que se están originando en nuestra sociedad


son cada vez más profundos, afectando en gran medida a la forma en la que
entendemos nuestro entorno (trabajo, telefonía, internet, transportes, etc.).
Al mismo tiempo, estos cambios no solamente están siendo importantes por su
intensidad, sino que también porque se están produciendo a gran velocidad, lo que
requiere de una mayor flexibilidad y capacidad de adaptación por parte de las
regiones, las personas y organizaciones localizadas en ellas.

Para poder asimilar este nuevo paradigma o modelo económico y social en


constante evolución es necesario que nuestras sociedades se preparen y se
encuentren capacitadas para adaptarse a los cambios o, mejor aún, para ser
protagonistas de ellos.
Para superar esta situación, una de las estrategias más extendidas ha
consistido en la aplicación intensiva de técnicas de creatividad que permitan asumir
los retos que los entornos cambiantes exigen.
Existen una infinidad de técnicas que estimulan el proceso creativo en los
individuos, en la sociedad y en las organizaciones, pero en esta ocasión,
enfocaremos nuestro estudio en tres técnicas que se consideran fundamentales y
resultan ser un excelente punto de partida para el entendimiento del proceso
creativo.

“Se necesita creer para crear e investigar desde el interior para innovar”
La técnica CRE-IN es una metodología que permite generar en cada persona
una fuerza creativa e innovadora que ayuda a crear situaciones positivas desde
su interior hacia su realidad cotidiana.
Esta metodología implica el uso de técnicas que tienen que ver con la
búsqueda interna de la paz, la reflexión, la concentración, la pérdida de la
sensación del ridículo, la risa como expresión de alegría y el llanto como descarga
necesaria frente a una situación lógica, lo anterior resulta ser un vehículo de
nuestros sentimientos, de nuestro placer, de nuestra diversión.

Después de que los participantes experimentan una ola de sentimientos, emociones


distintas, estados de ánimo diferentes se da como resultado un crecimiento interior
en cada uno de los participantes

CRE-IN parte de la premisa que si nos miramos hacia adentro y comparamos


nuestro interior con lo que nos pasa en nuestro exterior; si podemos relajarnos y
“volar” o “jugar”, desestructurándonos y perdiendo el miedo a sentir y a gozar de las
pequeñas cosas de la vida, seguramente nuevas ideas surgirán como un acto
creativo e innovador, tal vez no por ser excepcionales o poco comunes sino porque
nos renuevan o nos recrean.
Crear es Creer o podríamos decir Creer para crear. Sólo si creo en mí mismo, sólo
si tengo confianza en lo que siento y lo que espero puedo alcanzar el estado óptimo
para crear.

La confianza y el conocimiento interior es la pieza fundamental y base de todo acto


creativo. Si no creo, no me relajo. Si no creo, no veo mi interior y no dejo que lo
mejor de mí salga hacia mi exterior para que me “ilumine”.

S i no se mira desde el Interior es imposible innovar. La técnica CRE-IN otorga la


oportunidad de prever las dificultades, de reencontrarnos con nuestros mejores
sentimientos.

Cuanto más conflictivo es nuestro momento y cuanto más difícil sea nuestra
situación coyuntural, más necesitamos recobrar nuestra fuerza interior, es mayor la
necesidad de recuperar nuestra autoestima, y más tenemos que relajarnos para
crear soluciones “mágicas” frente a momentos duros (Mágicas no significa ilógicas,
irreales o imposibles. Mágicas es sinónimo de ideas que sólo pueden aparecer si
“dejo que aparezcan”). Si ésto no ocurre, nos deprimimos o nos encerramos en
nuestro propio problema, el cuál empeora día a día y ninguna idea aparece.

Divertirse mientras uno trabaja o estudia. Divertirse aún frente a la tragedia. No es


una postura de “hacer como que no me importa”, no es “fingir que me divierto”, eso
no sirve. Divertirse en momentos difíciles sólo se logra desde el Interior. Si logro
encontrarme a mí misma en mi interior y puedo encontrar allí mi mejor parte, mis
mejores momentos, mis fuerzas más poderosas, mi historia, mis deseos, mi gloria
y mi derrota, sólo ahí podré Crecer e Investigar.

CRE-IN es la metodología que investiga en el interior para innovar pues mientras


más creemos, más crecemos y también más creamos.
Otra técnica a abordar es la técnica llamada “Brainstorming” mejor conocida como
“lluvia de ideas”.

Probablemente es una de las técnicas más conocidas y menos usadas


eficientemente. Osborn fue el desarrollador de esta técnica. Su uso, en sus inicios,
estaba orientado a la búsqueda de ideas novedosas en áreas de la publicidad, pero
hoy por hoy es empleada en la mayoría o gran parte de los ámbitos, pueden ir desde
los más complejos hasta los más sencillos.

Ésta técnica busca la generación de ideas en grupo, la cual constituye una forma
de conseguir que un grupo genere un gran número de ideas en un tiempo no
demasiado prolongado.
La actividad inicia cuando el facilitador invita a los participantes a aportar ideas por
escrito, es este caso el grupo de trabajo aporta ideas sin considerar si son o no
viables, buenas, pertinentes, etc. Es importante precisar que esta fase puede durar
alrededor de 20 minutos. Posterior a ello el grupo se divide en equipos que clasifican
y organizan las ideas.

Los equipos evalúan la organización y clasificación de las ideas, aportando


sugerencias para la mejora.

En una sesión plenaria se consideran las ideas creativas y sus posibilidades de


implementación.

Esta técnica si es ejecutada correctamente puede explotar el potencial creativo de


cada uno de los participantes porque permite a los participantes aportar ideas de
manera libre y una vez que se valoran y analizan cada una de las propuestas, el
equipo de trabajo puede nutrir esa idea hasta lograr consolidar una idea detonadora
de creatividad.
Por último, tenemos la técnica de los “Seis Sombreros Para Pensar” desarrollada
por Edward de Bono quien proponía la utilización de Seis sombreros que
representan la adopción de “Roles” o maneras de actuar en una situación
determinada.
Esta técnica permite abordar un problema desde diferentes puntos de vista o
enfoques. Por ejemplo, ponerse el sombrero blanco significa actuar objetivamente
proporcionando datos objetivos, el sombrero rojo, significa actuar emocionalmente,
dando pasos a las intuiciones o sentimientos cuando se está trabajando en el
planteamiento o solución de un problema. El papel del sombrero Negro radica en
representar el enjuiciamiento crítico centrado en las desventajas, carencias o
factores negativos.
El sombrero Amarillo, significa adoptar la visión optimista, la visión centrada
en las conveniencias y factores positivos. Mientras que adoptar el color Verde,
significa adoptar el papel de la creatividad, de la generación de ideas.
Finalmente, el sombrero Azul, corresponde al papel del director de la
orquesta, del coordinador de la situación.

La esencia de esta técnica se basa en diferenciar los aspectos emocionales,


optimistas, lógicos, pesimistas, etc., modificando el estilo tradicional de
pensamiento que aborda las situaciones sin diferenciar los puntos de vista.

La técnica “Seis Sombreros para pensar” pretende que el participante asuma


distintos roles dentro de una situación, además de permitirle abordar la situación
desde diferentes perspectivas y sobre todo permitirle desarrollar su pensamiento
creativo.
CONCLUSIÓN
Hemos señalado ya que la creatividad es el medio por el cual el ser humano puede,
en definitiva, subsistir. La creatividad se relaciona directamente con el acto de crear.
Prácticamente todo lo que nos rodea es producto del ser humano, producto de la
imaginación, donde la base principal es la creatividad. Cada invento, cada teoría
científica, cada canción, cada programa de computadora, cada obra de arte son
producto de una inminente habilidad que toma una pequeña idea y la aterriza a la
realidad.

La creatividad está presente en todos lados; cuando una persona tiene un


problema busca la manera de resolverlos, su cerebro comienza a discernir y a
buscar no solo solución a éste, si no causas y consecuencias, busca alternativas
apropiadas para eliminar el conflicto y en caso de no encontrar solución, trata de
diseñar una.

Una de las características más significativas de la creatividad es la


originalidad, ya que distingue a las ideas de las demás y les permite ser únicas.

La creatividad puede surgir en algunas personas de manera espontánea, sin


reflexionar o analizar alguna situación o suceso. Puede surgir al escuchar una
palabra, al mirar algo familiar o al sentir algo. En otras personas surge al llevar a
cabo un análisis, una reflexión o al persistir en encontrar o crear alguna idea original.

En este punto es conveniente mencionar que el desarrollo de la creatividad es muy


importante en la vida, ya que permite confrontar situaciones no esperadas y
encontrar soluciones improvisadas a problemas que surjan de manera espontánea
y de esta manera reaccionar de manera adecuada ante cualquier suceso que pueda
surgir. De igual manera, podremos ingeniar ideas que nos permitan aprovechar
oportunidades y tomar dediciones importantes.
La creación es clave para encontrar soluciones a los retos que se nos presentan
cada día, para mejorar nuestra vida, nuestro entorno y, por consiguiente, nuestra
sociedad. Dado que la creatividad nos aporta soluciones e ideas que permiten
adaptarnos a un entorno en continuo cambio, mejorando también las relaciones
sociales gracias al empleo de nuevos hábitos de comunicación.
Además nos permite salir de la rutina, nos empuja a salir de las zonas de
confort y conformismo, educa a nuestra mente para comprender la realidad desde
distintas perspectivas y facilita la tarea de resolver problemas.

Por ello, es importante conseguir desarrollarla y mantenerla siempre


despierta en nuestro día a día permitiéndonos una mayor calidad de vida. ¿Pero
cómo es posible todo esto?

Para dar respuesta a esta interrogante es conveniente recordar que las


técnicas de creatividad juegan un papel sustancial en el proceso creativo, puesto
que estas resultan ser herramientas que permiten desarrollar y explotar nuestro
potencial creativo.

Por ello muchas organizaciones y empresas integran colaboradores que


sean capaz de aportar ideas creativas, porque posiblemente estas ideas el día de
mañana sean la vertiente que las dirija al éxito.

“Las organizaciones exitosas del futuro serán aquellas que han pensado que la
creatividad es fundamental para liberar todo el potencial de una empresa y de su
gente”.
- Edward Bono.

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