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vidaExperimentar la vendimia uruguaya


En marzo las bodegas turísticas uruguayas abren sus puertas para compartir lo mejor de
sus cosechas durante el Festival de la Vendimia. Luego de tener una rápida introducción
respecto a como cortar racimos correctamente y una vez dotados de tijera y canasto, los
visitantes pueden experimentar por su propios medios, el placer de cosechar y formar
parte del proceso de vinificación artesanal.
El 2015 el festival organizado por Los Caminos del Vino, involucra a decenas de
establecimientos. Degustación de vinos y comidas típicas, visitas guiadas,
experimentación de diversos procesos de vinificación como la pisada de la uva, y una
amplia gama de espectáculos culturales forman parte de las alternativas para pasar un
día en familia para el recuerdo.
Los precios de las propuestas son variados y parten en los 180 pesos uruguayos, hasta
llegar a los 2.000, contemplando a todos los “bolsillos” y sin ánimo de dejar a nadie fuera
de la fiesta. Las reservas deben coordinarse en forma directa con el establecimiento que
se quiera visitar. Es clave, no dejarse estar, ya que los cupos son limitados.
Tres establecimientos con estilo propio
 01Bouza Bodega Boutique. Esta bodega boutique fue construida en 1942 a semejanza
de los chateaux franceses y fue pionera en posicionar el
concepto de vino fino. En 2002, fue totalmente restaurada.
 02
Bodegas Carrau.Construida en 1887, Bodega Colón de Carrau es una de las bodegas
mas antiguas del país, y fue recuperada para el inicio del primer proyecto exportador de
vinos finos del Uruguay. Su casa colonial y su hermoso parque viñedo, lo hacen un lugar
ideal para descubrir algunos de los mejores vinos de Latinoamérica, a tan solo unos
minutos de Montevideo.
 03
Bodega Castillo Viejo.Proveniente del seno de una
emprendedora familia vascofrancesa de la
localidad de Hasparren, Don Santos Etcheverry,
fundador de Bodegas Castillo Viejo, sembró una
filosofía de dedicación y esfuerzo que se sigue
vigente en la tercera generación. Acompañar a la
familia en épocas de vendimia, resulta inspirador.
Experimentar la vendimia uruguaya

En marzo las bodegas turísticas uruguayas abren sus puertas para compartir lo mejor de
sus cosechas durante el Festival de la Vendimia. Luego de tener una rápida introducción
respecto a como cortar racimos correctamente y una vez dotados de tijera y canasto, los
visitantes pueden experimentar por su propios medios, el placer de cosechar y formar
parte del proceso de vinificación artesanal.
El 2015 el festival organizado por Los Caminos del Vino, involucra a decenas de
establecimientos. Degustación de vinos y comidas típicas, visitas guiadas,
experimentación de diversos procesos de vinificación como la pisada de la uva, y una
amplia gama de espectáculos culturales forman parte de las alternativas para pasar un
día en familia para el recuerdo.
Los precios de las propuestas son variados y parten en los 180 pesos uruguayos, hasta
llegar a los 2.000, contemplando a todos los “bolsillos” y sin ánimo de dejar a nadie fuera
de la fiesta. Las reservas deben coordinarse en forma directa con el establecimiento que
se quiera visitar. Es clave, no dejarse estar, ya que los cupos son limitados.
Tres establecimientos con estilo propio
 01Bouza Bodega Boutique. Esta bodega boutique fue construida en 1942 a semejanza
de los chateaux franceses y fue pionera en posicionar el
concepto de vino fino. En 2002, fue totalmente restaurada.
 02
Bodegas Carrau.Construida en 1887, Bodega Colón de Carrau es una de las bodegas
mas antiguas del país, y fue recuperada para el inicio del primer proyecto exportador de
vinos finos del Uruguay. Su casa colonial y su hermoso parque viñedo, lo hacen un lugar
ideal para descubrir algunos de los mejores vinos de Latinoamérica, a tan solo unos
minutos de Montevideo.
 03
Bodega Castillo Viejo.Proveniente del seno de una emprendedora familia vascofrancesa
de la localidad de Hasparren, Don Santos Etcheverry, fundador de Bodegas Castillo Viejo,
sembró una filosofía de dedicación y esfuerzo que se sigue vigente en la tercera
generación. Acompañar a la familia en épocas de vendimia, resulta inspirador.

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