Decidido a triunfar, el llamado es de la historia, De mi patria y de mi hogar. Con sentido de la vida, convencido de mí ser, en mi vida sea válida, la dignidad y el querer; la belleza me rodea, sublimando el valor, confirmando el hombre sea, el valer de la moral, con mi cuerpo y con mi alma, con la ciencia y el saber, forjando mi camino, mi promesa he de cumplir, ¡vida!, ¡presencia!, ¡plenitud!, telesecundarias, ¡adelante!