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Publicaciones ETSI Aeronauticos Amable Linan Martinez M Rodriguez Fernandez F J Higuera Anton Mecanica de Fluidos 1 ETSIA Universidad Politec PDF
Publicaciones ETSI Aeronauticos Amable Linan Martinez M Rodriguez Fernandez F J Higuera Anton Mecanica de Fluidos 1 ETSIA Universidad Politec PDF
- Sección de Publicaciones -
Mecánica de Fluidos
Lecciones 1 a 22
Tercer Curso
A. Liñán Martínez
M. Rodríguez Fernández
F.J. Higuera Antón
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• Lección 1 .- INTRODUCCIÓN
•Lección 2 .- CINEMÁTICA I
•Lección 3 .- CINEMÁTICA 11
•Lección 4 .- ECUACIÓN DE LA CONTINUIDAD
•Lección 5 .- FUERZAS SOBRE LOS FLUIDOS. ECUACIÓN DE LA CANTIDAD DE MOVIMIENTO
• Lección 6 .- TRABAJO Y CALOR. ECUACIÓN DE LA ENERGÍA
•Lección 7 .- ECUACIONES DE ESTADO Y FENÓMENOS DE TRANSPORTE
• Lección 8 .- CONDICIONES INICIALES Y DE CONTORNO
•Lección 9 .• RESUMEN DE LAS ECUACIONES GENERALES DE LA MECÁNICA DE FLUIDOS
•Lección 1O.- FLUIDOSTÁTICA
• Lección 11 .- MOVIMIENTOS UNIDIRECCIONALES DE FLUIDOS INCOMPRENSIBLES
•Lección12 .-MOVIMIENTOS UNIDIRECCIONALES NO ESTACIONARIOS
•Lección13 .-MOVIMIENTOS CASI UNIDIRECCIONALES DE FLUIDOS INCOMPRESIBLES.
EFECTO DE LA ENTRADA
•Lección 14 .- ANÁLISIS DIMENSIONAL
•Lección 15 .- SEMEJANZA FÍSICA
•Lección 16 .~ LUBRICACIÓN FLUIDODINÁMICA. CASO BIDIMENSIONAL
z.+.02. •Lección 17 .- ECUACIÓN DE REYNOLDS DE LA LUBRICACIÓN
2C. o2 •Lección 18 .ª COJINETES CILÍNDRICOS
o"t . o~ •Lección 19 .- LUBRICACIÓN CON GASES
4 i . "3 •Lección 20 .- CAPAS LÍQUIDAS DELGADAS
U> . O~
12 •Lección 21 .- INTRODUCCIÓN AL MOVIMIENTO DE FLUIDOS EN MEDIOS POROSOS
•Lección 22 .- MOVIMIENTOS A BAJOS NÚMEROS DE REYNOLDS. ECUACIONES DE STOKES
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5~
Lección l. Introducción
Las propiedades de los sólidos, líquidos y gases son consecuencia de su estructura molecular,
en particular de las fuerzas que actúan entre sus moléculas.
La fuerza entre dos moléculas eléctricamente neutras que no forman enlace químico se re-
presenta cualitativamente en la figura 1 como función de la distancia 1!, entre las moléculas. La
fuerza es de repulsión y fuerte para distancias menores que una cierta d0 , de atracción y débil
para distancias mayores que do, y nula para 1!, = do, que es una distancia de equilibrio estable.
Cuando 1!, es mucho mayor que do la fuerzad ecae, primero como g- 7 y finalmente com;--:e-s. Un
valor típico de do para moléculas no muy complejas es 10- 10 metros. Conociendo la masa de una
molécula y la densidad del material, es posible estimar la distancia media entre moléculas. Para
gases en condiciones normales de presión y temperatura resulta ser del orden de 10 d0 , mientras
que para líquidos es del orden de do.
Fuerza de
repulsión
Distancia.e
Fuerza de
atracción
Figura 1 I
En condiciones normales, las moléculas de un gas están tan distantes unas de otras que la
energía potencial debida a la atracción entre ellas es mucho menor que su energía cinética,
excepto cuando ocasionalmente una pasa cerca de otra. Por lo tanto se puede considerar que
las moléculas de un gas se mueven independientemente unas de otras en primera aproximación.
Un gas perfecto es aquél que cumple estrictamente esta condición.
En los sólidos y líquidos cada molécula está inmersa en un campo de fuerzas debidQ a las
demás moléculas. Las moléculas se encuentran tan próximas unas de otras como lo permiten las
fuerzas de repulsión. En los sólidos las moléculas oscilan alrededor de posiciones permanente,
que forman a veces una estructura cristalina periódica. La energía cinética de estas oscilaciones
1
es parte de la energía térmica del sólido, pero la red cristalina permanece intacta hasta que la
temperatura del sólido alcanza el punto de fusión.
La densidad de la mayoría de los materiales sólidos disminuye sólo muy ligerament e cuando
se alcanza el punto de fusión (el aumento de densidad en la transición de hielo a agua es un
caso excepcional). Es notable que tan pequeño cambio en el espaciado intermolecular, que sigue
siendo del orden de d0 , dé lugar a un cambio tan drástico en la movilidad del material.
Desde un punto de vista macroscópico los sólidos tienen una forma permanente y la posición
relativa de sus elementos cambia en una cantidad pequeña cuando se produce una variación
pequeña de las fuerzas que actúan sobre ellos. Un esfuerzo exterior aplicado a un sólido da lugar
a una deformación finita, y la relación entre esfuerzo y deformación es lineal en un cierto rango
de valores del esfuerzo (ley de Hooke).
El conocimiento del estado líquido a escala molecular es todavía incompleto. Parece que
a veces las moléculas están parcialmente ordenadas en grupos que se mueven en bloque, unas
veces formando distribuciones regulares con otros grupos y otras dividiéndose en grupos más
pequeños. La disposición de las moléculas está cambiando continuamente y, como consecuencia,
cualquier fuerza aplicada al líquido (distinta de una compresión) produce una deformación que
aumenta continuamente de magnitud mientras se mantenga aplicada la fuerza.
Macroscópicamente, los líquidos y los gases no tienen una forma definida y ofrecen una
resistencia considerable, sobre todo los líquidos, cuando son sometidos a compresión, pero~
pueden estar en equilibrio bajo esfuerzos tangenciales, sino que se deforman indefinidamente
bajo la acción de tales esfuerzos. Esta propiedad de los líquidos y gases se llama fluidez. Desde
un punto de vista macroscópico, un fluido (líquido o gas) es una sustancia que se deforma
indefinidamente bajo la acción de un esfuerzo tangencial, contrariamente a un sólido, que alcanza
el equilibrio con una deformación finita.
Los líquidos tienen una densidad mucho mayor que los gases (del orden de 103 veces mayor
en condiciones normales), lo cual se traduce en una diferencia en el orden de magnitud de las
fuerzas necesarias para producir una misma aceleración. Sin embargo, la mayor diferencia entre
líquidos y gases es su compresibilidad. Los gases se pueden comprimir mucho más fácilmente
que los líquidos y, como consecuencia, en un movimiento con variaciones apreciables de presión,
es mucho mayor el cambio de volumen específico (densidad) de los gases que de los líquidos.
Existen sustancias que a veces se comportan como sólidos y otras como fluidos, dependiendo
de las condiciones en que se encuentren y de la intensidad y rapidez de cambio de las fuerzas a
que estén sometidas. Tal es el caso de las gelatinas o las pinturas, entre otras. Los fluidos más
corrientes, aire y agua en particular, se pueden considerar como fluidos en el sentido definido
anteriormente.
2
Conocida la densidad, la velocidad macroscópica, v(x, t ), del fluido en el punto xy en el
instante t viene dada por
_, 1 ~ _,
pv =V L..t m a V a, (2)
a
donde Va es la velocidad del centro de masas de la molécula a. La expresión (2) define v(x,t)
como la velocidad del centro de masas de las moléculas contenidas en el volumen V centrado en
x.
Del mismo modo se puede definir la energía total del fluido por unidad de volumen, p( x, t) et (x, t),
obtenida al dividir por V la energía de las moléculas contenidas en un volumen V, incluyendo
aquí la energía cinética de las moléculas, la energía de sus grados de libertad internos (rotación,
vibración y excitación electrónica), y la debida a las fuerzas intermoleculares. Conocida la velo-
cidad v(x, t), puede definirse la energía interna por unidad de masa, e (x, t), como la diferencia
entre la energía total y la cinética: e = et - ~v 2 .
Las magnitudes p, iJ y e definidas de este modo son las magnitudes fluidas macroscópicas.
Para que sean útiles han de cumplir dos condiciones. Por una parte hace falta que no fluctuen
mucho, lo cual solo ocurrirá si V contiene un número muy grande de moléculas; es decir si
V » .e~, donde fe es la distancia media entre moléculas. Por otra parte, V no debe ser tan
grande que las magnitudes macroscópicas, promedios sobre todas las moléculas contenidas en
el volumen V, dejen de reflejar las variaciones del estado macroscópico del fluido. En otras
palabras, debe ser V « L~, donde Le es la longitud que es necesario recorrer para encontrar
variaciones del estado macroscópico del fluido, que depende del flujo que estemos analizando.
Evidentemente estas dos exigencias sólo se pueden satisfacer a la vez si la distancia media entre
moléculas es mucho menor que la longitud característica del flujo. Llamando N al número de
moléculas por unidad de volumen, del orden del cubo de la distancia media entre moléculas
fe, debe verificarse 1/N « V « L~ para que las magnitudes macroscópicas sean funciones
continuas de la posición y del tiempo e independientes de la forma y tamaño del volumen usado
para definirlas.
Tanto la existencia de las variables de estado y relaciones que las ligan como las leyes que
rigen las transformaciones del fluido requieren, de acuerdo con las hipótesis de la termodinámica,
que el fluido siga uría sucesión de estados de equilibrio, lo que implica homogeneidad de presión
y temperatura, así como procesos infinitamente lent os.
, ~
Este no es el caso que se presenta en el movimiento de los fluidos . Sin embargo, al menos para
los gases, la teoría cinética muestra que siempre que el camino libre medio (distancia que una
molécula recorre en media entre dos colisiones sucesivas con otras moléculas) sea pequeño frente
a la longitud característica de las no uniformidades macroscópicas, y siempre que el tiempo
3
entre colisiones sea pequeño frente al tiempo necesario para que las variables macroscop1cas
sufran cambios locales apreciables, existe lo que se llama equilibrio termodinámico local o casi
e uilibrio. Est o es, el fluido parece estar localmente en equilibrio, en el sentido de que para definir
su estado macroscópico respecto a un observador que se mueva con su velocidad macroscópica
local se puede hacer uso de las variables termodinámicas y éstas están relacionadas ent re sí como
lo estarían si todo el fluido estuviese en verdadero equilibrio con la densidad p y energía interna
e locales.
La hipótesis de equilibrio termodinámico local se justifica por el hecho de que una molécula
sufre un gran número de colisiones con sus vecinas antes de alcanzar regiones donde las magni-
tudes macroscópicas son distintas. En las sucesivas colisiones la molécula adapta su movimiento
y energía los de las moléculas de su entorno, perdiendo memoria de su estado inicial: Cada
molécula del gas parece encontrarse, en cada punto y en cada instante, en el mismo estado de
agitación térmica que las moléculas que la rodean; es decir, en equilibrio termodinámico con
ellas. Este régimen del movimiento de los fluidos se denomina continuo o dominado por las
colisiones. En los gases se da cuando el número de Knudsen
>.
K n = L e «1 , (3)
donde A es el camino libre medio y Le es la longitud característica del flujo, introducida antes.
Como puede verse mediante consideraciones geométricas, el camino libre medio es del orden
de 1/ (CJ N), siendo CJ la sección eficaz de colisión, del orden del cuadrado del tamaño de las
moléculas (d6), y N el número de moléculas por unidad de volumen. Así pues, en un gas >. es
mucho mayor que la distancia media entre moléculas (.A/Re = O [(Re/do) 2 ]), y la condición de
equilibrio termodinámico local (3) es más exigente que la condición Re «Le mencionada antes
para que las definiciones de las variables macroscópicas sean de utilidad.
También en los líquidos, aunque sin el mismo apoyo de la teoría cinética, se comprueba
experimentalmente que , siempre que Le sea grande frente al tamaño molecular do, se puede
caracterizar el estado del líquido en cada punto e instante mediante la velocidad macroscópica v,
dependiente del movimiento del sistema de referencia, y las mismas variables termodinámicas que
describen el estado termodinámico del líquido en equilibrio (valores que mediría un observador
que se moviese con la velocidad local v del líquido). Y éstas últimas están relacionadas entre sí
como lo estarían si todo el líquido estuviese en equilibrio con los valores locales de las variables
termodinámicas. Los valores de estas variables son independientes del movimiento del sistema
de referencia.
4 Partícula fluida
4
5 Magnitudes fluidas intensivas y extensivas
Con vistas a extender las definiciones anteriores de densidad, velocidad y energía a otras
magnitudes, llamaremos magnitudes fluidas intensivas a aguellas gue no dependen de la masa
total de fluido a la que se aplica la definición, y magnitudes fluidas extensivas a aguellas gue son
proporcionales a esta masa. Por ejemplo, la temperatura es una magnitud intensiva, mientras
que la energía interna es extensiva. Una magnitud fluida extensiva se puede convertir en intensiva
definiéndola por unidad de masa, en cuyo caso se denomina específica. La energía interna por
unidad de masa es un ejemplo de magnitud fluida específica.
5
Lección 2. Cinemática I
Para describir el movimiento de un fluido como un medio contínuo se pueden adoptar dos puntos
de vista. Podemos considerar la partícula fluida que en el instante inicial t = t 0 está situada
en el punto xo y seguir su evolución con el tiempo. Procediendo de esta forma buscaremos la
posición x de la partícula fluida en un instante t como función del tiempo y de su posición inicial:
x = x(t,xo). La velocidad de la partícula fluida en x = x(t,xo) se obtiene por derivación:
. . . ( . . . ) _ ax (8tt, xo) .
V t,Xo - (1)
Del mismo modo, una magnitud fluida</> vendrá dada por una función <f>(t, x0 ), donde <f>(t 0 , x0 )
es el valor inicial de </> para la partícula que inicialmente está en xo. Ésta es la descripción la-
grangiana, apropiada para seguir la historia de las magnitudes fluidas asociadas a cada partícula
fluida en su movimiento.
Sin embargo, en Mecánica de Fluidos es más usual asignar las magnitudes fluidas a puntos
fijos del espacio, como se ha hecho en la lección anterior al definir p(x, t), iJ(x, t) y e(x, t). Ésta es
la descripción euleriana, en la que las coordenadas x y el tiempo t son variables independientes,
y la especificación de las magnitudes fluidas no está ligada a las partículas fluidas sino a los
puntos del espacio ocupado por el fluido. En la descripción euleriana el valor de una magnitud
fluida en un punto x y en un instante t es el de la partícula fluida que se encuentra en ese punto
en ese instante.
Se dice que un movimiento es estacionario cuando las magnitudes fluidas no cambian con el
tiempo. En un movimiento estacionario la velocidad es iJ = iJ(x) . Un movimiento puede ser
estacionario en un sistema de referencia y no serlo en otro. Por ejemplo, el movimiento del aire
alrededor de un avión en vuelo horizontal, con velocidad constante y en atmósfera en calma, es
estacionario en un sistema de referencia ligado al avión pero no es estacionario en uno ligado a
tierra, ya que la velocidad del aire en un punto cercano a donde pasa el avión primero aumenta,
cuando el avión se acerca, y luego decrece, cuando éste ha pasado.
1
Se dice que el movimiento es uniforme cuando las magnitudes fluidas son las mismas, en cada
instante, para todos los puntos del ca~fluido. -
2 Trayectorias y sendas
La trayectoria de una partícula fluida es la la ley que da su posición como función del tiempo y
de su posición inicial. Si suponemos conocido el campo de velocidad v(x,t), dado por funcion~
continuas de x y t, las ecuaciones que determinan las trayectorias en la descripción euleriana
son
~,(~ de ; EJ>Os _.,
dx
dt
_.(_, )
= v x,t
_. _.
con x = xo en t =O. (2)
La solución se puede escribir en la forma 4 );., •
1
d>t. ; :::. v,. ( ><,t) &it L (_-
X¡ Y..º 1
tJ
x = xr (t,xo) . (3)
Un teorema del análisis matemático nos asegura que la solución obtenida de este modo es
única y uniformemente continua para tiempos t finitos. La continuidad uniforme se pierde para
t ~ oo en el caso de los flujos turbulentos o en los flujos llamados de mezcla caótica.
Se llama senda a la curva recorrida por una partícula fluida en su movimiento. Las ecuaciones
de la trayectoria proporcionan también las sendas. Las ecuaciones de las trayectorias son las
de las sendas en forma paramétrica cuando se utiliza el tiempo como parámetro. Se llama ley
horaria a la ley que da la posición de una partícula fluida sobre su senda en función del tiempo.
~ $t41AS ~ oilt1-lNtt.'Jll d# fa.s ec:~ . k &~ i..f~tfo.ll~S eÍÁMMNIANi.~ el. ti~
3 Líneas, superficies y volúmenes fluidos
.4,.,.:p,: ies-i s de.- Las partículas fluidas que inicialmente forman una línea continua en el espacio, posteriormente
/w.e..d-'t:J C../71'>1.f.M.. VIO -::1 siguen formando una línea continua, denominada línea fluida. Si x = xo (.:\),donde las funciones
xo(.:\) son continuas y;\ E (.:\ 1, .:\2), es una representación paramétrica de la línea continua en el
instante inicial, la línea fluida en cualquier otro instante viene dada por
(4)
siendo x = xr (t, xo) la ecuación de las trayectorias. Por la continuidad de xz¡ respecto a.:\, una
línea fluida inicialmente cerrada permanece cerrada posteriormente.
Análogamente, todas las partículas fluidas que están inicialmente en una superficie conti-
nua del espacio siguen posteriormente formando una superficie, llamada superficie fluida. Si
y
xo = xo (a, (3), donde xo (a, (3) son funciones continuas de a f3 en intervalos dados, es una
representación paramétrica de la superficie inicial, posteriormente ésta tiene por ecuación
2
4 Líneas de traza
En un instante t dado, la línea de traza es la línea formada por las partículas fluidas que en
algún instante O ::; T :S t han pasado por el punto Xp· ...::.i & LT. se va.. J,,a.e;,.fMdo l\.W:Ís ~~ ~ d
~""""
Para calcular las líneas de traza a partir del campo de velocidad, basta resolver el problema Po ·(
dx
dt
_. (_. )
= v x, t con x =
_. _,
Xp en t = T, (6)
Las líneas de corriente son las líneas que, en un instante t dado, son tangentes en cada uno de
sus puntos a la velocidad local del fluido. Indican gráficamente cómo se está moviendo el fluido
en un instante dado. Si v(x, t) es el campo de velocidad y dx es un vector infinitesimal, de
longitud df, que une dos puntos de la línea de corriente, la ecuación de la línea de corriente que
pasa por un punto xo viene dada por la solución del problema
dx v(x,t) _. _, .e
lv(x, t)I con x = x 0 en =O, (7)
d.e
para t fijo, que actúa como parámetro. La solución de este sistema autónomo es única si
lv (x, t) 1=/.O, y la línea de corriente aparece representada por la solución de (7), x = X't(í!, xo, t),
en forma paramétrica con la longitud .e de la línea como parámetro.
Se puede eliminar el parámetro .e si en (7) dividimos dos de las ecuaciones escalares por
la tercera. Por ejemplo, en coordenadas cartesianas (x1, x2, x3), utilizando x 1 como variable
independiente, obtendríamos el sistema de ecuaciones
(8)
cuya solución es
(9)
con xo = (x10, x20, X30). Esta solución representa, de otra forma, la línea de corriente que pasa
por xo.
Por ser v(x, t) contínua, la solución de (7) u (8) existe y es única si lvl =/. O. Por cada punto
del espacio donde v(x, t) sea finita y no nula pasa una única línea de corriente. Solamente en
puntos donde la dirección de la velocidad no está definida pueden cortasen dos o más líneas
de corriente. Esto ocurre donde la velocidad es cero o donde es infinita. Puntos de velocidad
3
infinita donde se cortan infinitas líneas de corriente son los manantiales y sumideros, que son
idealizaciones. Los puntos de velocidad nula, v(x, t) =O, se llaman puntos de remanso.
Las líneas de corriente, las sendas y las líneas de traza coinciden cuando el movimiento es
estacionario. También coinciden estas líneas en un movimiento no estacionario cuando el campo
de velocidad es de la forma v(x, t) = f(t)ü(x), donde f(t) es una función escalar del tiempo t y
el campo vectorial ü(x) no depende del tiempo.
Se llama superficie de corriente a una superficie formada por líneas de corriente. Si f (x) = O
es una superficie de corriente en el instante t, satisfará la ecuación diferencial lineal
v· V j =O. (10)
Para determinar una solución de esta ecuación debe especificarse una línea contínua del espacio,
x = xo(.A), que no sea una línea de corriente, en la que se apoye la superficie de corriente
f (x) = O. Las líneas características de (10) son las líneas de corriente. Conocida la expresión de
estas líneas (9), una representación paramétrica de la superficie de corriente que se apoya en la
línea x = xo(.A) es
(11)
Si la línea de partida es cerrada se obtiene un tubo de corriente.1
Cuando se usa la descripción lagrangiana, el valor, en el intante t, de una magnitud fluida </>
asociado a la partícula fluida que en el instante t = O estaba en xo es </> = </>( t, xo). La velocidad
de variación del valor del</> de esa partícula fluida es ocp (t,xo) /ot .
Si se usa la descripción euleriana los valores de </> viene dados en la forma </> = </> (x, t). En
este caso ocp / ot ya no es toda la variación por unidad de tiempo que experimenta </> siguiendo a
la partícula fluida que pasa por x en el instante t, porque en t + ~t esa partícula se encontrará
en x + ~x, con ~x = v(x, t) ~t, donde el valor de</> es cp(x + ~x, t + ~t). Teniendo en cuenta
esto, la velocidad o ritmo de variación de p siguiendo una partícula fluida es
Al operador
0 0
at + v · V (o) '
( )
4
Cuando la magnitud fluida</> es la velocidad iJ(x, t ), su derivada respecto al tiempo siguiendo
a la partícula fluida es la aceleración del fluido a(x, t ):
__ Dv av __ T"'7' __
a=-=-+v· vv. (14)
Dt 8t
El gradiente de la velocidad es fácil de evaluar en coordenadas cartesianas. Las componentes
cartesianas de la aceleración son
(15)
_. _. Dv
a (x, t) = Dt = at + V
av (v2
2
)
- V X
__
(V X
__
v). (16)
Sea f (x, t) =O la ecuación de una superficie que cambia con el tiempo, pero que en general no
es una superficie fluida. Se llama velocidad normal de avance de la superficie, en un punto x y
en un instante t, a la velocidad con que hay que desplazarse en la dirección de la normal local
a la su erficie f.>ara 2ermanecer sobre la misma.
df = dx · V f + ~{ dt = O.
Si elegimos dx en la dirección de la normal a la superficie tendremos
d x_, = n_,d s Vf d
= 1Vf1 s,
y, para mantenernos en la superficie,
1 \7 f 1 ds + ~{ dt = O,
con lo cual la velocidad normal de avance de la superficie es
ds a¡ /8t
Vn = dt = -1 V j 1· (18)
ª1 +v· v¡ = o
8t '
(19)
5
que es la ecuación diferencial que satisfacen las superficies fluidas . Escrita de otro modo,
~ ~ a¡¡at
V. n = - IVJ = Vn .
1
(20)
Es decir, la velocidad normal de avance de una superficie fluida coincide con la proyección de la
velocidad del fluido en la dirección de la normal a la superficie.
8 Flujo convectivo
Se llama flujo convectivo de una magnitud fluida extensiva cp a través de una superficie ~ a la
cantidad de esa magnitud que atraviesa la superficie con el fluido en la unidad de tiempo.
Sea dO" un elemento de la superficie~ y cp el valor por unidad de volumen de la magnitud fluida
que estamos considerando, evaluada en el centro del elemento dO". Entonces (c/JdO") (iJ · ñ) dt es
la cantidad de cp contenida en el elemento de volumen de la figura siguiente, que es el volumen
de fluido que atraviesa dO" en el tiempo dt. La cantidad de cp que atraviesa dO" por unidad de
tiempo es cpv · ñ dO", y la cantidad que atraviesa la superficie ~ completa es
Flujo de j
cp = cpiJ · ñ dO". (21)
f-::: A ~/ v~C.Ílff' 1{"'io - ~/Vtki.Jl. ¿;
6
El concepto de flujo convectivo se puede generalizar a superficies móviles. Si la superficie :E
se mueve con una velocidad local Ve, lo que implica una velocidad normal de avance Vn = Ve · n,
el flujo a través de :E está dado por 1
La derivada sustancial nos permite calcular la variación de una magnitud fluida por unidad
de tiempo siguiendo a una partícula fluida. Veremos a continuación cómo se puede calcular la
variación de una magnitud fluida extensiva ligada a un volumen fluido finito.
Sea </> una magnitud fluida extensiva, definida por unidad de volumen, y Vc(t) un volumen
variable con el tiempo, limitado por una superficie :Ee(t), de normal n orientada hacia el exterior
del volumen, cuya velocidad normal de avance es Vn = Ve · n. La cantidad de la magnitud
contenida en el volumen Vc(t) es
j </> (x, t) dD,
Vc(t)
1
En el cálculo del flujo convectivo a través de una superficie L:, que puede ser variable con el tiempo, podemos
encontrar la ecuación de la superficie en forma implícita, f(x, t) =O, o en forma paramétrica, x = xs(a, /3, t) . En
este segundo caso han de especificarse los intervalos de variación de los parámetros a y {3 . Además las funciones
x 8 i (a, {3, t) han de ser contínuas, para que la superficie sea contínua, y con derivadas contínuas respecto a a, /3 y
t, para que ñ y Ve estén definidos en todos sus puntos. En este caso
7
Figura 2.- Teorema del transporte de Reynolds
Para calcular esta derivada hay que tener en cuenta que tanto <f>(x, t) como Yc(t) cambian
con el tiempo. Escribiremos
Vc(t)
donde Ve (t + !:lt) =Ve (t) + 8Vi - 8Vi (véase figura 2). Por lo tanto,
J </> (x, t + !:lt) dn- J </> (x, t) dn = J [</> (x, t + !:lt) - </> (x, t)] dn +
Vc(t+~t) Vc(t) Vc(t)
En las dos última$ integrales, extendidas a los volúmenes infinitesimales 8Vi y 8Vi, el elemento
diferencial de volumen dD se puede escribir como dD = ±vn dO" !:lt, donde el signo más es para
8Vi y el menos para 8Vi (debido a que la normal está orientada hacia el exterior del volumen en
ambos casos). Por lo tanto estas integrales de volumen se convierten en integrales de superficie:
Supongamos ahora que el volumen Vc (t) sea un volumen fluido V¡ (t) . En ese caso Vn = v·ñ,
siendo v la velocidad del fluido, y tendremos
8
Podemos ligar la derivada temporal siguiendo a un volumen de control Vc (t ) con la derivada
temporal siguiendo al volumen fluido V¡ (t ) que en el instante t en que que~m-;s calcular la
derivada coincide con Vc (t ); es decir Vc (t ) =
V¡ (t ) y también Ec (t) E¡ (t). Las primeras =
int egrales de los segundos miembros de (24) y (25) coinciden para esta pareja de volúmenes,
puesto que los integrandos y los recintos de int egración son los mismos. Las segundas integrales
de los segundos miembros difieren porque los integrandos son diferentes ya que Vn = Ve · ñ es
distinto de iJ · ñ . Restando a la ecuación (25) la ecuación (24) se obtiene, para todo t ,
:t j
V¡(t)
e/> (X, t) df! = ! j
Vc(t)
e/> (X, t) df!+ j
:Ec(t)
e/> (X, t) (V - Ve) · iiM, (26)
La ecuación (26) permite calcular la variación en la unidad de tiempo de una magnitud fluida
extensiva ligada a un volumen fluido como la variación de esa magnitud fluida dentro de un
volumen de control más su flujo convectivo a través de la superficie que limita dicho volumen de
control.
Como más adelante veremos, las ecuaciones que gobiernan el movimiento de un fluido se
obtienen por aplicación de las leyes de la mecánica y la termodinámica a algún volumen fluido .
Para ello es necesario elegir un sistema de referencia y un volumen fluido para el cual escribimos
las leyes. En principio las leyes de la mecánica y la termodinámica se refieren a volúmenes
que no permiten el paso de masa pero sí el de energía; los llamados sistemas cerrados. Sin
embargo, con frecuencia resulta más útil disponer de estas leyes para volúmenes que no son
fluidos; esto es volúmenes que permiten el paso de masa a través de alguna o todas sus paredes,
y que llamaremos volúmenes de control. La ecuación del transporte de Reynolds nos permite
escribir las leyes de forma que sean aplicables a sistemas abiertos (volúmenes de control).
w= V X v. (27)
Se verifica, evidentemente,
V ·w=O. (28)
U na línea de vorticidad es una línea tangente en todos sus puntos al vector vorticidad local.
Al igual que las líneas de corriente, las líneas de vorticidad deben calcularse en cada instante
de tiempo. Las líneas de vorticidad son las soluciones, para un valor fijo de t, del sistema de
ecuaciones
dx (x, t) w _ _ /)
0, (29)
df lw(x,t)i con x=xo en .i:=
g
Las líneas de vorticidad que se apoyan en una curva contínua cerrada x = x0 ( >..) del campo
fluido forman un tubo de vorticidad.
donde ñ es la normal exterior a la superficie cerrada :E 1 + :E2 + :ET, y la última igualdad resulta
de aplicar el teorema de Gauss a esta superficie cerrada. Como, por la definición de tubo de
vorticidad, es
j w· ñ da= O,
:ET
resulta
j w· ñ da j w· (-ñ) da.
= (31)
2:2 2:1
Vemos pues que el flujo de la vorticidad a través de una sección transversal cualquiera de un
tubo de vorticidad es independiente de la sección elegida. Esta cantidad se llama intensidad del
tubo de vorticidad. El resultado (31) se debe a Helmholtz. Obsérvese que un tubo de vorticidad
no puede terminar en el interior del fluido.
donde :E es una superficie cualquiera, en el interior del fluido, que se apoye en la línea cerrada
L.
Vemos pues que la circulación de la velocidad a lo largo de una línea cerrada es igual al flujo
de vorticidad a través de una superficie que se apoye en dicha línea. La circulación coincide con
la intensidad del tubo de vorticidad construido a partir de la línea cerrada L.
10
Si
fv · dÍ = O
para cualquier línea cerrada, podemos asegurar que la circulación de la velocidad a lo largo de
una línea que una dos puntos del fluido es independiente de la línea. En efecto, si L es una línea
que une los puntos O y P, tendremos
fop = j v· dl,
Lop
y si tomamos otra línea distinta L que también una los puntos O y P, tendremos
Í'op = j v·dl
Lop
ya que Lop + Lpo forman una línea cerrada. Por lo tanto se puede definir una función <p,
llamada potencial de velocidad, tal que 2
rp _,
<p = <po +J
0
v · df, (34)
y se verifica V<p = v, como puede comprobar el lector. Es decir, la velocidad v deriva del
potencial <p y la diferencia del potencial de velocidad entre dos puntos es la circulación a lo largo
de cualquier línea, dentro del fluido, que los una. Por esta razón, los movimientos irrotacionales
se llaman también potenciales. Obsérvese que la velocidad v (x, t) es perpendicular a la superficie
equipotencial <p (x, t) = constante.
-d
dt
f . . f Dv
v·df = -
Dt
·df-.
'
(35)
L L
11
inicial y el parámetro .A identifica las partículas fluidas que forman la línea. Al recorrer la línea
fluida cerrada L, .A variará en el rango .A1 :S .A :S .A2, con x = x¡¡ (t, .A 1) = x1¡ (t, .A 2) por ser la
línea cerrada. El elemento dl en un instante t es
Así pues,
-d
dt
f _,v·df i_ ¡>-2 v (t
dt };.. 1 '
.A) . ax¡¡ (t, .A) d.A
8.A
L
¡>-2 av(t, .A) . ax1¡ (t, .A) d.A + ¡>-2v(t, .A).~ ax1¡ (t, .A) d.A.
};..
1
8t o.A };.. 1 8.A 8t
Como 8v (t, .A) / ot es la aceleración de la partícula fluida .A y oxL (t, .A) / 8t es la velocidad de
dicha partícula, se tendrá
:t f V.
L
dl = L' ii(t, >.). 8X¡~\' >.) d>.+ f V(t,
L
>.). d [V(t, >.)]'
Así pues, en este caso, la circulación a lo largo de cualquier línea fluida cerrada se mantiene
constante con el tiempo e igual a su valor inicial.
12
Lección 3. Cinemática II
A¡tl\:t:,..; s dd '-"'-fP ~ v.t.b"'p/t<&ÚS
1 Introducción
Sea P una partícula fluida que en el instante t se encuentra en el punto x del espacio y Q
una partícula fluida próxima, cuyo vector de posición relativo a P es dX en el instante t (véase
figura 1). La variación de dx en un tiempo corto dt, debida al movimiento relativo de Q a P, es
(iJQ - iJp) dt. Llamando iJ(x, t) a la velocidad del fluido en el punto x y en el instante t y iJ + diJ
a la velocidad en el mismo instante en el punto x + dx, se tiene, aproximadamente,
1
donde Vv está evaluado en el punto x y se han despreciado términos de orden jdx j2 . En
coordenadas cartesianas y notación de subíndices,
(2)
donde se usa el convenio de sumar sobre el índice repetido. Al haber despreciado términos de
orden jdxj 2 , la velocidad relativa dv es proporcional a dx. Esta velocidad relativa se puede
~q N.Nf,tri!f:. v
separar en dos partes ~~~~<?~~~ien,9-.~ el tensor V en sus partes simétrica y antisimétrica:
~ll.e{dJ4 Á::I. pt.>.UiL
~~p~st ~
avj -- (n---)
- V V ·· -
- sij + A ij -- -1 (ªVj
- avi) + -1 (ªVj
+ -- OVi)
- - -- = /ij + Ciij, (3)
axi 'l] 2 OXi axj 2 OXi OXj
k ~~~f. ""
~· ~t-:f. . de modo que
dv = dvs + dva = dx · s + dx. A. (4)
La contribución dva debida a la parte antisimétrica del tensor V v se puede escribir como 1
d__.
Va = d__.
X .
A = 2w
l __. X
d__.
X' (5)
Es decir,
w=\lxv (6)
es la vorticidad del fluido, que ya ha aparecido en la lección anterior. dva en (5) representa una
rotación del fluido en torno a P como sólido rígido con velocidad angular 2 w.
(7)
~a3 a~ -a~
2
1Para cualquier matriz antisimétrica A = ( ) y cualquier vector dx se verifica dx · A =
a2 -a1 O
a X dx, donde a es el vector axil de componentes (a1, a2, a3). En notación de subíndices, aij = Eijkak y
(dx · A)i = Eijkakdxi, donde Eijk .¡:.O sólo si i,j, k son diferentes y su valor es 1 ó -1 dependiendo de que i,j, k
estén o no en orden cíclico.
2
dtdx 1 r11 d dx
~ ~13
dt~~;\
Figura 2.- Desplazamientos de tres aristas de un paralelepípedo de volumen 8V = dx 1dx2dx3
en un tiempo dt.
En la figura 2 se han representado las deformaciones que sufren tres de las aristas de un
paralelepípedo, dx 1, dx2 y dx3. El volumen 8V = dx1 dx2dx3 cambia como consecuencia de
estas deformaciones. El vértice de coordenadas (dx1, O, O) se traslada al cabo del tiempo dt
al punto de coordenadas (dx1 (1+111 dt), dxn12dt, dxn13dt], y análogamente ocurre con los
otros vértices. El volumen 8V del paralelepípedo se convierte en
(9)
3
e
Las superficies <I> constante son cuádricas con centro en el origen (punto x). La velocidad
e
dvs en un punto es normal a la cuádrica de centro en el origen y que pasa por t
Según esto,
un elemento de línea que una el origen con un punto A cualquiera (véase figura 3) se deformará
en la dirección de la normal local a la cuádrica que pasa por A, sufriendo el segmento O A una
---+
deformación en el tiempo dt que se compone de una dilatación AB = [(e· V <I>) e1 dt, donde
---+
e es
el vector unitario en la dirección OA, y un giro alrededor de O, que da lugar al desplazamiento
---+
BC = [V<I> - (e· V<I>) e1 dt. Obsérvese que el giro citado es diferente de un giro como sólido
rígido, puesto que otra línea que una el origen con otro punto de la cuádrica, tal como el E,
---+ ---+
sufrirá un giro diferente, y el ángulo a entre O A y O E cambiará con el tiempo. Compruebe el
lector que el valor medio del giro del segmento O A para los puntos A de una esfera con centro
en el origen es nulo.
Las direcciones principales del tensor S son las de los ejes de la cuádrica asociada, en las que
e
las deformaciones sólo tienen lugar a lo largo de dichos ejes. Si es un vector en la dirección
de un eje principal, el producto escalar e. e,
s tendrá la dirección de esto es: s = o bien e. >-e,
e· (S - >.I) =O, que en notación de subíndices es
(10)
Para que el sistema (10) tenga solución distinta de la trivial, >. debe satisfacer la ecuación
característica
l /ij - >.8ij 1= O, (11)
que tendrá tres raíces reales, (>. 1 , >-2, A3), por ser /ij = /ji· Estas raices se llaman velocidades
principales de deformación. Conocidas las velocidades principales de deformación, el vector de
dirección unitario para cada eje principal, e= Dlel de componentes (e1,e2,e3), se determina
utilizando dos de las ecuaciones (10) junto con et+ e§+ e~ = l. Las tres direcciones principales
son ortogonales por ser S simétrico.
Para un fluido incompresible >. 1 + >-2 + A3 = V· v = O, por lo que alguna de las Ai tiene signo
contrario a las demás y las cuádricas asociadas son hiperboloides.
Las componentes del tensor de velocidades de deformación /ij están completamente deter-
minadas por las direcciones de los ejes principales de la cuádrica asociada y las velocidades
4
principales de deformación (.A.1, .A.2, .As) en las direcciones de dichos ejes. Estas velocidades cum-
plen la condición .A.1 + .A.2 + A3 = {ii = \7 · v, la velocidad de dilatación cúbica unitaria, que es
un invariante del tensor de velocidades de deformación.
Si ~ 1 , ~ 2 y ~ 3 son las nuevas coordenadas con respecto a los ejes principales, el potencial de
velocidades de deformación toma la forma
(12)
cuya solución es
Nótese que dv8 es independiente del sistema de referencia elegido puesto que ya se han
descontado los movimientos de traslación y rotación como sólido rígido.
V · ve = Ll(x) y V x ve = O. (13)
....) 1
'Pe (X = - 47r
J XLl(x')
1 - x' 1 dn
( .,....,)
X '
(15)
donde la integral se extiende a todo el espacio y se supone que Ll (x) tiende a cero en el infinito
suficientemente rápido para que la integral exista. La velocidad que se obtiene calculando el
gradiente de 'Pe es
Ve X
J
. . ( . . ) = 2_ Ll (x') (x - x') dn (_,')
47r x - x_,, ¡s
1 _, X ' (16)
donde se ha hecho uso del resultado Vlx - x'¡- 1 = - (x - x')/lx - x'l 3 , que el lector puede
comprobar mediante un simple cálculo.
Q= J Ll dn
5
se mant enga finita. En este caso el potencial de velocidades es
Q
1Pe = - 47r X 1 --
- X_,Q I '
y
_, Q x - xo
Ve = 47r Jx - Xol 3 .
Este campo de velocidad corresponde a un manantial en xo si Q >O o a un sumidero si Q <O.
El lector puede mostrar que Q es el gasto volumétrico que atraviesa cualquier superficie cerrada
que rodee a xo.
Las formulas generales (15) y (16) dan el potencial de velocidades y la velocidad como su-
perposición de los debidos a una distribución continua de manantiales de intensidad .Li(x) por
unidad de volumen.
µ·
_, (_, _,)
X - XQ
i.{Je = - 47r JX_, - _, J3 .
XQ
También puede comprobar el lector que una distribución uniforme de manantiales alineados
sobre una recta induce un movimiento radial plano con velocidad Ve = Q / (27rr) a una distancia
r de la recta.
Ahora bien, la condición Vv = V x B sólo define B salvo el gradiente de una función escalar
arbitraria, porque el valor de V x B no cambia si añadimos a B un vector V <I>, con <I> arbitrario.
Usando esta libertad, podemos imponer que B verifique la condición adicional V · B = O. Si la
B elegida inicialmente no verificase esta condición bastaría usar en su lugar B = B + V <I>, con 1
\7 2 <!> = - V · B, que sí la verifica. Suponiendo, pues, que V· B =O, la ecuación (18) queda
\7 2 B = -w ' (19)
cuya solución en un fluido ilimitado es, por analogía con (14),
--
B = 47r
1 j 1
w(x')
x - x' dn (x ) , 1
__,, (20)
donde la integral está extendida a todo el espacio y se supone que w tiende a cero en el infinito
suficientemente rápido para que la integral exista. Compruebe el lector que V· B = O.
6
La velocidad ilv =V x B es
__, = 2-
4
j w (x' ) x (x - x') dD ( __,, )
1 X__, - (21 )
Vv 1T X__,, 13 X '
A veces la vorticidad del flujo está concentrada en torbellinos, que son tubos delgados de
vorticidad, y es nula en el resto del campo fluido. Una idealización de estos casos consiste
en suponer que el tubo de vorticidad donde w # O se contrae en una línea L, necesariamente
paralela a w, manteniendo constante su intensidad r, que a su vez se mantendrá constante a lo
largo de todo el torbellino, como se vio en la lección 2 para un tubo de vorticidad cualquiera.
Considerando un elemento de volumen dD en forma de cilindro de base dO" y altura ds alrededor
de un elemento del torbellino, tendremos
rr ¡_ 00
dz r (23)
Vv = 41T -oo (r2 + z2)3/2 = 21Tr'
Otras veces la vorticidad está concentrada en una capa delgada alrededor de una superficie
:E formada por líneas de vorticidad. La intensidad local de la capa en un punto x E :E es
1(x) = Jw(x) ds, donde ds es un elemento de longitud en la dirección de la normal local a :E
y la integral se extiende a través de toda la capa que contiene la vorticidad. Una idealización
de estos casos consiste en suponer que el espesor de la capa tiende a cero manteniendo 1 finita.
Considerando un elemento de volumen dD = dO" ds, donde dO" es un elemento de área de :E, (21)
se reduce entonces a
Vv - 41T
j
__, _ 2_ 1(x') x (x - x') d ( __,,)
1X - x' 13 (} X .
(24)
E
en todos los puntos del fluido. La velocidad ü se determina con las condiciones de contorno en
los límites del campo fluido real.
7
~ = -V
~
1
Lección 4. Ecuación de la continuidad
Esta ecuación es válida aunque el volumen fluido contenga dos fases distintas, líquidas o gaseosas.
Mediante el teorema del transporte de Reynolds podemos escribir la ecuación anterior para
un volumen de control cualquiera; es decir para un sistema abierto. La ecuación toma la forma
dVe
-+
dt
J (. . . . . ) . .
v-v e ·n d o-=0 ' (3)
Ec(t)
donde la integral de superficie representa el flujo volumétrico que atraviesa las paredes del
volumen de control.
Si el volumen de control contiene una sola fase fluida, de modo que p(x, t) es contínua deri-
vable, y está fijo respecto al sistema de referencia (ve = O), la ecuación (2) se reduce a
(4)
y, dado que la integral (5) es nula cualquiera que sea volumen de control Vc fijo al sistema de
referencia,
fJp + V · (piJ) = O (6)
fJt
1
en cualquier punto interior a cada fase fluida. La ecuación (6) es la ecuación de continuidad o
ecuación de conservación de la masa en forma diferencial. Dos formas alternativas de escribir la
ecuación (6) son
ap +v ·Vp+pV · v= O (7)
at '
?tH'-~ Á4~~~
~ewNt.a..1i'lltA.
.. 1
.
~~ +pV· v=o . . J (8)
Observese que la velocidad de variación del volumen de un volumen fluido se puede escribir,
usando el teorema del transporte de Reynolds,
dV¡
dt
=~
dt
J dO= J v·ñd(J"= J Y'· vdO.
V¡(t) 'E¡(t) V¡(t)
Si V¡ es un volumen fluido elemental, que denotaremos como 8V¡ para indicar que 8V¡ -7 O,
1
8V¡ dt
1
- - d<5V¡ = - -
8V¡
j V · v dO = V · v
'
(9)
óV¡(t)
que es otra forma de mostrar que V· ves la variación de volumen de la unidad de volumen fluido
en la unidad de tiempo, o velocidad de dilatación cúbica unitaria. Usando (9), la ecuación (8)
toma la forma
~ Dp + _l_DóV¡ =O o bien
p Dt óV¡ Dt
Es decir, la masa p óV¡ contenida en el volumen fluido óV¡ no cambia con el tiempo.
(10)
Pero
j pv·ñd(J"=O,
¿;T
2
Si el fluido tiene densidad p constante, lo dicho para el flujo másico es cierto, en cada instante,
para el flujo volumétrico Q = G /p. En este caso no es necesaria la condición de que el movimiento
sea estacionario.
2 Función de corriente
Sean O y P dos puntos en el plano del movimiento y L 0 P una curva plana cualquiera que
los una. Definamos el sentido de la normal ii a la curva de modo que ii apunte hacia la derecha
cuando la curva se recorre de O a P. Con esta definición, el flujo que atraviesa L 0 P es
q0 P=
10
top
_,
v·nds.
_,
El cambio de signo en la segunda igualdad se debe a que, con el convenio anterior, ii cambia de
t
signo cuando 0 P se recorre de P a O. La última iguadad es el resultado de aplicar el teorema
de Gauss. 2.: es la superficie encerrada por la pareja de curvas L 0 P y L0 P.
3
Como el flujo no depende de la curva que se use, podemos definir la función 1
(12)
donde x son las coordenadas de P, mientras que O se mantiene fijo y el valor 'l/Jo de la función
en O se elige arbitrariamente.
La velocidad del fluido se obtiene inmediatamente a partir de r¡/J. Así, en coordenadas carte-
sianas (x, y), las componentes de ñ son (dy/ds, -dx/ds) y
de modo que
8r¡/J
U=- (14)
fJy
que cumplen automáticamente la ecuación de continuidad.
La función 'ljJ se llama función de corriente porque las líneas 'ljJ = constante son las líneas de
corriente. En efecto, si P y Q son dos puntos de una línea de corriente,
y se verifica
8r¡/J
pu= 8y ' (16)
mientras que la diferencia r¡/JP - r¡/J 0 es el flujo másico que atraviesa una curva cualquiera que una
los puntos O y P.
Los factores métricos h1, h2 y h3 y las coordenadas x1, x2 y x3 en los casos más corrientes
son:
1
f
Si el campo de velocidad tiene singularidades y la integral </> = iJ · ñ ds -=/:. O sobre una curva cerrada que
rodee una de estas singularidades, la función 1/; estará definida salvo un múltiplo de </>o, en general, una suma de
f
múltiplos de los valores de iJ · ñ ds para cada singularidad. Nótese que 4> tiene el mismo valor para dos curvas
cerradas que se puedan transformar una en otra por deformación contínua sin cruzar ninguna singularidad .
4
a) Movimiento plano
a. l ) Coordenadas cartesianas
hi = h2 = h3 = 1; x1 = x, x2 =y, (x3 = z ) .
b) Movimiento axilsimétrico
Otro caso especial en que la ecuación de la continuidad se puede escribir como la suma de
dos sumandos es el del movimiento unidimensional no estacionario de un fluido compresible. En
este caso se tiene
8p 8 (pu) _
8t + 8x - 0 ' (17)
y de nuevo se puede encontrar una función M(x , t) tal que
8M 8M
p= - y pu= - -¡¡¡· (18)
8x
Esta función se llama función material.
5
l = - 1' I + 2 JA r + ( r-v - ~ ~ )lv.V) I =-p I + "t 1
~ t-¡ , M. 1-t ) -:: -r (Y:, t) · ~
.... .., ..; ' ........... ~
v·? 1
= -t7,.[~(t?Ái;J] + v[(p-v+1r-JCv.v)]
Lección 5. Fuerzas sobre los fluidos. Ecuación de la
cantidad de movimiento
1 Introducción
En esta lección describiremos las fuerzas que actúan sobre los fluidos y escribiremos la segunda ley
de Newton para un fluido en movimiento. Desde el punto de vista macroscópico que adoptamos
en la asignatura, las fuerzas sobre un fluido cuyas moléculas sean eléctricamente neutras pueden
clasificarse en fuerzas de volumen y fuerzas de superficie, o fuerzas de largo alcance y fuerzas
de contacto. Además, en la superficie de separación de dos fluidos inmiscibles aparece un tercer
tipo de fuerza, la tensión superficial, que estudiaremos en una lección posterior.
Veremos cómo las fuerzas de superficie pueden calcularse en función de las componentes en
cada punto de un tensor simétrico, el tensor de esfuerzos.
Las fuerzas de largo alcance son aquellas que decrecen lentamente cuando aumenta la distancia
entre las partes que están interactuando. Tales fuerzas penetran en el interior del fluido y actúan
sobre todas las partículas fluidas. La gravedad es el ejemplo más obvio y más importante. Otras
fuerzas de largo alcance de interés en Mecánica de Fluidos son las fuerzas de inercia, que actúan
sobre un fluido como consecuencia de la aceleración del sistema de referencia. 1
U na consecuencia de la lenta variación de las fuerzas de largo alcance con la posición de las
partículas fluidas es que estas fuerzas actúan por igual sobre todas las partículas dentro de un
pequeño volumen, de modo que las fuerzas de largo alcance son proporcionales al tamaño del
elemento de volumen o a la masa que este volumen contiene. Por esta razón se denominan
fuerzas volumétricas o fuerzas másicas.
Las fuerzas másicas son proporcionales a la masa. Las más usuales, con las que nos vamos a
encontrar en la Mecánica de Fluidos, son, como se ha dicho, la fuerza gravitatoria,§ por unidad
de masa, y las fuerzas de inercia debidas al movimiento del sistema de referencia:
...
-ao - f2
. . . X (.....f2 X X. . .) - dt
dñ X X. . . - 20. . . X V,. . .
donde ao y ñ son la aceleración del origen y la velocidad angular del sistema de referencia. El
segundo sumando de la expresión anterior es la aceleración centrífuga, el tercero es la aceleración
1
Otro tipo de fuerzas de largo alcance son las fuerzas electromagnéticas, que actúan sobre un fluido cargado
eléctricamente o por el que circula una corriente eléctrica. Estas fuerzas son proporcionales a la densidad de carga
o a la densidad de corriente, no a la masa.
1
debida al cambio de velocidad angular del sistema de referencia, y el cuarto es la aceleración de
Coriolis.
La fuerza másica por unidad de volumen es pf:, y la fuerza másica sobre un volumen finito
es
En muchas situaciones las fuerzas másicas son conservativas, esto es, derivan de un potencial:
f: = - V U. Así, por ejemplo, la fuerza gravitatoria deriva del potencial-§· x, y análogamente
ªº .
-ao = - V ( x)' mientras que la fuerza centrífuga deriva del potencial - ~ ( ñ X ñX = X) .( X)
-~D r , siendo r la distancia al eje de giro.
2 2
Al tratar a un fluido como un medio contínuo, es preciso considerar, además de las anteriores,
otras fuerzas que actúan a través de las superficies fluidas, que son las fronteras ficticias entre
partes macroscópicas adyacentes del fluido. El origen de estas fuerzas macroscópicas superficiales
está en la interacción entre moléculas situadas a distintos lados de la superficie y en el intercambio
de moléculas a través de la superficie.
En un gas cuyas moléculas sean eléctricamente neutras, las fuerzas superficiales se deben
al transporte de cantidad de movimiento asociado el intercambio de moléculas a través de la
superficie considerada, pues la agitación térmica hace que las moléculas pasen de un lado a otro
de esta frontera ficticia, aunque sea una superficie fluida.
En los líquidos la situación es más compleja, pues, además de la agitación térmica, hay
otra contribución a las fuerzas superficiales debida a la atracción entre las moléculas situadas
a distintos lados de la frontera macroscópica. Esto es debido a que, aunque son neutras, las
moléculas se polarizan al estar muy cerca unas de otras, ejerciendo una interacción mutua que
es despreciable en los gases.
Si se considera una superficie ficticia en el seno de un fluido, las fuerzas de contacto que el
fluido de un lado de la superficie ejerce sobre el situado al otro lado sólo actúan en una delgada
capa alrededor de la superficie, de espesor comparable al camino libre medio si los fluidos son
gases, o al tamaño de las moléculas si son líquidos. La fuerza de contacto se ve, desde un punto de
vista macroscópico, como una fuerza de superficie, proporcional al área de la superficie elemental
que se considere y dependiente de las condiciones locales del flujo. Llamaremos esfuerzo a la
fuerza por unidad de área. En cada punto x del fluido y en cada instante t , el esfuerzo varía con
la orientación de la superficie, determinada por su normal ñ.
Sea f (ñ) el esfuerzo que el fluido que está del lado al que apunta ñ ejerce sobre el que está
al otro lado de la superficie Se verifica f( - ñ) = -f( ñ), ya que la fuerza ejercida por el fluido
de un lado de la superficie sobre el que está al otro lado es igual y contraria a la ejercida por el
fluido del segundo lado sobre el primero.
2
La segunda ley de Newton establece que la variación en la unidad de tiempo de la cantidad
de movimiento de un volumen fluido es igual a la resultante de las fuerzas que actúan sobre el
volumen fluido. Sea V¡ (t) un volumen fluido que contiene una sola fase fluida. La cantidad de
movimiento por unidad de volumen es pif, mientras que la cantidad de movimiento del volumen
fluido es
y su variación por unidad de tiempo es :t j pV d!1.
V¡
Las fuerzas que actúan sobre el volumen fluido son fuerzas másicas y fuerzas de superficie, sobre
la superficie que limita al volumen fluido. La resultante de las fuerzas másicas se escribió en el
apartado anterior. La resultante de las fuerzas de superficie es
j f(n) dO".
~!
Así pues,
:t j V¡
pV dí! = j pf-;,, d!1 + j T(ií) der.
V¡ ~!
(2)
V
Figura l.- Volumen de control infinitesimal
:t j
V¡
pV dí! = j
V¡
pf-;,, d!1 + f(ií) dA - 7'1 dA1 - 7'2 dA2 - f3 dA3,
3
donde ñ = (n 1, n2, n3) es la normal a la cara de área dA, apuntando hacia el exterior del
volumen fluido, mientras que la normal a la cara de área dA1 es -e1, a dA2 es -€2 y a dA 3 es
-e3. Despreciando términos del orden de dD frente a términos del orden de dA, lo que permite
evaluar todas las funciones f en el origen de coordenadas de la figura 1 y despreciar las integrales
de volumen en la ecuación anterior, se tiene
o bien,
TJ·(ñ) -
- n 'l.· -r''l.J. · ' (3)
Como ñ y f son vectores, Tij deben ser las componentes cartesianas un tensor de segundo ordén,
llamado tensor de esfuerzos. Es decir,
T-+(-+)
n = n-+ ·T. (4)
La integral de superficie del segundo miembro de (5) se puede transformar en una de volumen
utilizando el teorema de la divergencia:
Si en esta ecuación se hace tender a cero el volumen, las integrales del primer miembro tienden
a cero como
3
vfl
, mientras que la integral del segundo miembro tiende a cero más lentamente
(como Vt). Para que se satisfaga la ecuación cualquiera que sea la forma del volumen Vt y la
posición del punto interior O es necesario que
éijkTjk = Ü,
que es equivalente a
Tij = Tji· (6)
Los tres autovalores de la matriz Tij, que son reales por ser la matriz simétrica, se llaman
esfuerzos principales. Las direcciones de los autovectores, que son mutuamente ortogonales, se
llaman direcciones principales de esfuerzos .
2
Eijk -:f. O sólo si i,j,k son diferentes, y su valor es 1 ó -1 dependiendo de que i,j,k estén o no en orden cíclico.
4
4 Ecuación de la cantidad de movimiento en forma integral
:t V¡(t)
j pVdfl = j
E¡(t)
r · 11'.dcr+ j
V¡(t)
p¡-;,. an. (7)
Utilizando el teorema del transporte de Reynolds, la ecuación anterior se puede escribir para
un volumen de control cualquiera, en la forma 4. . r..1.:y:{S de $r<f~ fuUTPl-8 _
d _, v~{~../')CM,
ti=. . CP.Mt . ""1,,v , iAA dt j
pvd[H j
piJ(il-ilc) · ñdo-= T·ñda-+ PfmdD, j (8) j
/p<M111. ¡,.,fk1-to.f. Vc(t) 'Ec(t) 'Ec(t) Vc(t)
pa!"A k....-. ve
donde Ve· ñ es la velocidad normal de avance de la superficie que limita al volumen de control.
:t j
Vc(t)
(X-Xo)xpVdfl+ j
'Ec(t)
(X-Xo) x pii(ii'-iic)·n'.dcr=
Si en la ecuación (8) tomamos un volumen de control fijo , Vc(t) = Vo, de superficie fija, ~c(t) =
~ 0 , podemos escribir
Si no hay singularidades en el interior del volumen ni sobre la superficie que lo limita, las
integrales de superficie se pueden transformar en integrales de volumen en la forma ANt~~·A.Nt':f~
tJs . 'ja Ll\.S$
j fJ ~) dfl+ j V · (pVV) dfl = j V· rdfl+ j pJ:,,dn,
Va ).?ó Y. }(o V Va
o o
donde el integrando de la primera integral del segundo miembro es la resultante de las fuerzas
de superficie sobre la unidad de volumen de fluido . Esta ecuación puede escribirse como
J[ ~V) +
Va
f) V · (pVV) - V · T - l
p¡-;,. d[l = O,
5
y para que se satisfaga cualquiera que sea el volumen Vo es necesario que el int egrando se anule;
es decir
a r: + V · (piJiJ) = V · r + p fm.. (10)
Recuerdese que
8v +V__, · 't'""1'
- v V = -
__, 8v + nv ( 1
-V
2)
-
__,
V X
( 't'""1'
v X V
__,)
= -Dv
8t 8t 2 Dt'
de modo que
Dv = V · T
Pm _,
+ Pfm, 1 (12)
1
o bien
/:;: + pV Gv 2
) - piJ X (V X iJ) = V · 7 + Plm· (13)
La ecuación (12) nos indica que el producto de la densidad por la aceleración de una partícula
fluida es igual a la resultante sobre la unidad de volumen de las fuerzas de superficie más las
fuerzas másicas por unidad de volumen que actúa sobre la partícula fluida.
'"t -=-pf-+t..'
fl . (-p 1) -= - '71'
6
Lección 6. Trabajo y calor. Ecuación de la energía
1 Introducción
Las fuerzas exteriores, superficiales y volumétricas, que actúan sobre un volumen fluido V¡, de
superficie ~ ¡, realizan trabajo sobre él.
El trabajo de las fuerzas másicas es pfm · iJ por unidad de volumen y tiempo. El trabajo por
unidad de tiempo sobre todo el volumen fluido es
Macroscópicamente nos encontramos con que a través de un elemento de área d(J de cualquier
superficie ficticia, de normal local ñ, en el seno de un fluido, existe un flujo de calor por conduc-
ción qn d(J hacia el lado de la superficie al que apunta ñ. El calor qn que atraviesa la unidad de
1
área de la superficie por unidad de tiempo dependerá de la posición x del elemento de superficie
en el espacio y de su orientación ñ. Aplicando la ecuación de la energía a un tetraedro elemental,
como se hizo en la lección anterior para el caso de los esfuerzos, el lector puede comprobar que
qn = if · ñ, donde if es un vector llamado vector flujo de calor.
/ if ·fida-.
E1
Si :E¡ es una superficie fluida cerrada y ñ su normal exterior, la integral anterior es el calor que
abandona el volumen fluido encerrado por :E¡ en la unidad de tiempo.
Otro mecanismo de transferencia de energía entre las distintas partes de un fluido, o entre
éste y su entorno, es la radiación. Este mecanismo es importante cuando existen diferencias
de temperatura apreciables dentro del fluido. Estrictamente, las ecuaciones del movimiento
del fluido están entonces acopladas con las ecuaciones que rigen la transferencia de energía por
radiación, y deben resolverse juntas. La teoría resultante se aplica, por ejemplo, al estudio de los
plasmas en las atmósferas estelares y en la fusión por confinamiento inercial, o al flujo en hornos
y cámaras de combustión. Sin embargo, en este curso introductorio de mecánica de fluidos no
tendremos en cuenta tales efectos. No excluiremos, sin embargo, la posibilidad de que el fluido
reciba energía radiante de una fuente externa; tal energía puede tenerse en cuenta mediante un
calor Qr, por unidad de volumen y tiempo, distribuido sobre el fluido.
A veces también se puede tener en cuenta de un modo aproximado el efecto de las reacciones
químicas en un fluido reactivo, manteniendo el modelo de fluido homogéneo en composición.
Para ello omitiremos la energía de formación de las especies químicas al calcular la energía
interna, e introduciremos la energía térmica liberada por la transformación de energía mediante
las reacciones químicas en el interior del fluido como una aportación exterior adicional de calor,
Qq por unidad de volumen y de tiempo. En lo que sigue Q = Qr + Qq.
La energía total por unidad de masa del fluido es suma de la energía interna e y la energía
cinética !v 2 . Cuando no exista posibilidad de reacciones químicas en el fluido no es necesario
incluir la energía de formación en el cómputo de la energía interna. La energía total de un
volumen fluido es pues
:t / ++ ~v )
VJ
2
d!l = / ñ·r·Vdo-+ / pfm ·Vd!l- / <J·ñdo'+ / Qd!l,
Ef V1 EJ V1
(1)
2
Esta ecuación se puede escribir para un volumen de control Vc(t) cualquiera haciendo uso del
teorema del transporte de Reynolds:
:t j (e+ ~v )
Ve
p
2
dí! +
Ee
j p (e+ ~v 2 ) ( iJ - Ve) · ñ d<T =
=!
Ee
ñ·T·VdO"+ J
Ve
pfrn·vdfl- J
Ee
q · ñdO"+ J
Ve
Qdfl. (2)
Para un volumen de control Ve fijo que no encierre en su interior singularidades de los campos
fluidos involucrados, se puede usar el teorema de Gauss para escribir
y, como esta ecuación ha de verificarse cualquiera que sea el volumen de control elegido,
p~ (e + ~ v 2
) = V · (r · iJ) + p.f:n · iJ - V · q+ Q. , (4)
.,;! J f (e + ~7.) .A.JI.. +Jf .f )(ií-iiJMJ,,- = Jf¡.,.ii d.Q. .....J(i:;;<)-iid6"' -+ f;: ·(Jc P7)tM- + fQ .t J2.
(e (2)
\,e Se. Vl. Sl. Se::.. V(.
('1) Va.M-4~ ~~ ~~á da ~'° di!. &: tMUia -fj,7c_f ~1r'D dl.I vr;lUAl'1~ Je Ch>tn;e
(z.) F4.jo {PhV€c-ñ'vo tk ~fa ~"td pur ~d~d da. va!~~ ~ -/;rt:rll~ di, ~ ~,.u~·e:e t:id ve .
(.3) ~.i::; '1a1o PM ~d~J. tk t:.a-p(J JQ. e~s 11.4~~~ ~á~ca.S So6're d vD!tMtte.t k (ft)-:fn, t .
(4) -¡11:.1»¡·0 ~ 1.-id~~ k ~Po tk 1&.s ~u~~ dl. S«pi.Jf!4 ~o6K t~ ~r,/.Ji~e del ve.
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(G) ~~~ 1"~ -.e~3i~ hi €Jl1vi~ F'" .raAA.t:1~~ ~Jo ~U.:"1 ~~e~ ~ ~tl«4 k ~p
1 Introducción
Para relacionar las nuevas variables termodinámicas con las que ya teníamos, usaremos las
ecuaciones de estado de la termodinámica, que son válidas en las condiciones de equilibrio
termodinámico local de que se habló en la lección 1. Los coeficientes de transporte son funciones
de las variables termodinámicas.
2 Ecuaciones de estado
Se verifica
de= Tds - pdv = Tds - pd (1 / p) , (3)
obtenida por diferenciación de (1). En particular,
De _ T Ds _ D (1/ p) 8e = T 8s _ 8 (1 / p)
y (4)
Dt - Dt p Dt at at P at ·
1
Reservamos el símbolo a para denotar la velocidad del sonido, a = _ (8s/8p)p _
(8s/8p)p -
j(!!.I!.)
{}p B •
1
Para volúmenes finitos definiremos las variables termodinámicas extensivas por integración.
Por ejemplo, como ya se ha visto, la energía interna de un volumen V es
j pedn.
V
Las variables intensivas referidas a volúmenes finitos no tienen sentido cuando sus valores
locales no son homogéneos. Así, no podemos hablar de la temperatura de un volumen fluido
finito cuando ésta varía de un punto a otro del mismo. Por la misma razón, no existen, en
general, ecuaciones de estado para volúmenes finitos.
donde R 9 = R / M, llamada constante del gas, es la relación entre la constante universal de los
gases, R, y la masa molecular del gas, M. Tanto la energía interna como la entalpía de un gas
perfecto son funciones sólo de la temperatura. Las derivadas Cv = de / dT y Cp = dh / dT son los
calores específicos a volumen constante y a presión constante, respectivamente, funciones sólo
de la temperatura que cumplen la relación ep- Cv = R 9 • El gas se llama caloríficamente perfecto
si los calores específicos son constantes. En este caso
2
3 Leyes de Navier-Poisson y de Fourier
(8)
Muestra la teoría cinética que, para los llamados fluidos newtonianos, Tf,j y qi son proporcio-
nales a los valores locales e instantáneos de Vv
y VT. Es decir, en coordenadas cartesianas,
y (9)
Estos resultados se pueden entender cualitativamente si se tiene en cuenta que las variaciones
que experimentan las variables macroscópicas al recorrer distancias del orden del camino libre
medio A. son pequeñas y proporcionales a sus gradientes cuando K n « l. Tales variaciones
son la causa de la desviación del estado del fluido respecto al equilibrio termodinámico local,
porque en las sucesivas colisiones de una molécula, que son el mecanismo por el que adapta su
estado al de las moléculas con las que choca hasta alcanzar el equilibrio termodinámico con ellas,
la molécula en cuestión va encontrando variaciones del estado "medio" de las otras moléculas
antes de tener ocasión de adaptarse totalmente al mismo. Los valores no nulos de Tf,i y qi son
consecuencia de la falta de equilibrio termodinámico local, y las relaciones (9) establecen que
estos efectos son proporcionales a las causas de la desviación respecto al equilibrio (es decir a
V v y VT) cuando la desviación es pequeña (es decir cuando K n « 1). Nótese que, aunque las
variaciones de las variables macroscópicas representan pequeñas perturbaciones del equilibrio
termodinámico local cuando K n « 1, sus variaciones sobre distancias macroscópicas (Le) no
son pequeñas. Nótese también que esta justificación de las relaciones lineales (9) es muy general,
y hace plausible postular tales relaciones en casos para los que no se cuenta con el apoyo de
una teoría cinética bien desarrollada, como el flujo de líquidos. En estos casos los coeficientes
de proporcionalidad Aijkl y Kij deben determinarse experimentalmente.
donde el último término representa una rotación del fluido como sólido rígido con velocidad
angular !w.Este término cambia al cambiar de sistema de referencia, anul~ndose si se elige un
nuevo sistema de referencia que gire con velocidad angular ~w respecto al original, mientras que
3
Tfj es independiente de estos cambios. Así pues, los esfuerzos viscosos no pueden depender de
la parte antisimétrica de Vil y debe ser Aijkl ék lm Wm = O para cualquier w y cualquier pareja
(i , j ). Esta condición requiere Aijkl = Aijlk· Tendremos pues
(10)
El tensor Aijkl toma una forma simple cuando la estructura molecular del fluido es esta-
dísticamente isótropa; es decir, cuando el esfuerzo generado en un elemento de fluido por una
velocidad de deformación dada es independiente de la orientación del elemento. Todos los gases
son estadísticamente isótropos, así como los líquidos simples. Sin embargo, algunas suspensio- 1
nes y soluciones que contienen cadenas moleculares largas pueden presentar alguna dirección J
preferente, porque el alineamiento de estas moléculas puede depender de la historia previa del
movimiento. En lo que sigue consideraremos solamente fluidos newtonianos isótropos. J
Las condiciones de la primera línea expresan que la contribución de una velocidad de deformación
en una cierta dirección del espacio al esfuerzo en esa dirección es igual cualquiera que sea la
dirección considerada. Las condiciones de la segunda línea expresan que la contribución de
una velocidad de . deformación en una cierta dirección al esfuerzo principal en una dirección
perpendicular a la de la velocidad de deformación no depende de cual sea la pareja de direcciones
ortogonales considerada. Usando estas condiciones,
(11)
que se obtiene premultiplicando (11) por la matriz de cambio de ejes, que es una matriz ortogonal,
y postmultiplicandola por su traspuesta. El resultado (12) es la ley de Navier-Poisson.
4
~a.se.i;, N.i.~A:t. .
.¡. ? [( ~v + ~ ~) ( V· v)]
cr~e-s f"e.: a .
que es cero para incompresibles y en aquellos en que µv =O. En estos casos el esfuerzo normal
medio es debido sólo a presión. La t eoría cinética de gases muestra que µv = O para gases
monoatómicos, lo que constituye la ley de Stokes.
Siguiendo un procedimiento análogo al expuesto para los esfuerzos, se puede mostrar que el
vector flujo de calor en un fluido estadísticamente isótropo es de la forma
f q= -kVT, \ (14)
es decir Kij = -k 8ij, donde k es el coeficiente de conductividad térmica del fluido, función su
estado termodinámico local. Este resultado constituye la ley de Fourier. El signo menos en (14)
refleja que el calor fluye en el sentido de las temperaturas decrecientes.
En las ecuaciones de la mecánica de fluidos que hemos deducido hasta ahora no se ha tenido
en cuenta la posibilidad de que exista más de una especie en el fluido. Cuando se tienen
varias especies y la composición del fluido no es uniforme, es preciso especificar en cada punto
e instante la densidad parcial Pi y la velocidad Vi de cada especie, que se definen mediante
expresiones análogas a (1) y (2) de la lección 1 en las que las sumas se restringen a las moléculas
de la especie i. Se cumple, evidentemente,
Si las fracciones másicas Yi = Pi/ p no son uniformes en todo el campo fluido, la velocidad
macroscópica de las moléculas de la especie i no coincide con la velocidad macroscópica del
fluido v, sino que Vi = v + vdi, donde vdi es la velocidad de difusión de la especie i. Se verifica
J
~
Piild, · ñ dir.
Si 'E encierra un volumen V donde PiVdi es regular, la masa de la especie i .q ue abandona por
difusión el volumen V por unidad de tiempo es
J
~
Piild, · ñ dir = JV
V· (piiJd.) dO.
5
donde VÍi (t) es un volumen fluido para la especie i, es decir un volumen limitado por una
superficie cuya velocidad normal de avance es Vi· ñ; Vc (t) es un volumen de control que coincide
con V¡i en el instante t y cuya superficie se mueve con velocidad normal de avance Ve · ñ; y
Wi es el ritmo de producción de la especie i por unidad de volumen y de tiempo, debido a las
reacciones químicas que ocurran en el fluido . Si el fluido es una mezcla inerte, W i = O. En
cualquier caso Li Wi =O, porque las reacciones químicas no cambian la masa total.
(16)
La ecuación de continuidad para todo el fluido se obtiene sumando estas ecuaciones para todas
las especies que lo componen. En términos de las fracciones másicas Yi, y usando la ecuación
de continuidad, (16) toma la forma
(17)
Cuando el fluido es una mezcla binaria, el flujo por difusión está dado por la ley de Fick:
Las expresiones de las velocidades de difusión son más complicadas para mezclas no binarias.
Sin embargo, cuando existe una especie predominante en la mezcla, de modo que las fracciones
másicas de las restantes especies sean pequeñas, puede utilizarse la ley de Fick para evaluar la
difusión de estas especies en la especie dominante, ignorando la presencia de las otras especies
minoritarias.
5 Coeficientes de transporte
En las leyes que determinan estos efectos de no equilibrio aparecen los llamados coeficientes
de transporte: los coeficientes de viscosidad µy µv, el coeficiente de conductividad térmica k y
de coeficiente de difusión másica D. Todos ellos dependen del estado termodinámico local del
fluido.
6
El coeficiente de viscosidad volumétrica aparece en el tensor de esfuerzos viscosos T 1 multi-
plicando a V · v. Su efecto es modificar el esfuerzo normal medio de presión, pero este efecto
no se manifiesta en los líquidos, debido a su escasa compresibilidad en la mayoría de los casos
prácticos. La viscosidad volumétrica juega un papel importante en la atenuación de las ondas
acústicas en los fluidos . Midiendo esta atenuación se puede determinar el valor de µv.
Los datos correspondientes al coeficiente de viscosidad volumétrica µv son muy escasos. Para
gases monoatómicos es µv = O (ley de Stokes), pero para otros gases µ y µv son cantidades del
mismo orden.
En la tabla adjunta se dan los valores de los coeficientes de transporte para algunos fluidos a
la temperatura de 15 ºC y a una presión de una Atmósfera.
U na expresión aproximada para la viscosidad del aire a presiones pequeñas frente a la crítica,
Pe = 36 Atm, la proporciona la fórmula de Sutherland
µ
µo =
(T)2
To
3
l+b
(T/To) + b'
donde µ 0 = 1.176 x 10- 5 kg/ (m · s) ,2 To = 273.1 K y b = 0.4042. Esta fórmula es válida
2
1 kg/ (m · s) = 10 poises.
7
hasta los 2000 K.
T (C) o 10 20 30 40 60 80 100
µ X 10 kg / (m · s ) 1.79 1.31 1.01 0.80 0.65 0.47 0.36 0.28
y la ley de Navier-Poisson (12) para relacionar los esfuerzos viscosos con las velocidades de
deformación
rf; = 2µ7;; + (µv - ~µ) (V · V) Ó;;,
así como la ley de Fourier (14) para relacionar el flujo de calor con el gradiente de temperatura
if= -kV T,
las ecuaciones (19) y (20) toman la forma siguiente:
1 Pm=-
DV V p+ V ·T, +PÍm· 1 ~ (21)
Si la ecuación (21), con DiJ/ Dt escrito en la forma 8iJ/ 8t+ V (v 2 / 2)-iJx (V x iJ), se multiplica
escalarmente por la velocidad iJ, se obtiene la ecuación de la energía cinética
p Dt 1
D ( 2v 2) = _ ,
- V ·
Vp +V ·
__, (V ·T
') + p f__,m __,
·V. (22)
Los términos - iJ · V p y iJ · V· T 1 representan las partes de los trabajos por unidad de volumen y
de tiempo de las fuerzas de presión y viscosidad, respectivament e, que se emplean en aumentar
la energía cinét ica del fluido.
8
Si se toma el rotor de (21 ) , previamente dividida por la densidad, se obtiene la ecuación de
la vorticidad, w = V x v,
Dw /
P----¡¡¡-p = w_, · Vv_, - V ( 1 ) P X Vp + V X P
( 1 V· T ') +V X f_,m· (23)
Para un fluido de densidad p y viscosidad µ constantes, bajo la acción de fuerzas másicas que
deriven de un potencial, esta ecuación se reduce a
Dw _,
Dt = w .
T"1 _,
V V
n2 _,
+ ZJ V w. (24)
El último término de (24) muestra que la vorticidad se difunde como el calor, jugando v el papel
de la difusitividad térmica. La analogía aparece más claramente en movimientos planos, en los
que llamando x 3 a la distancia perpendicular al plano del movimiento, se tiene w = w(x 1 , x 2 )e3
y el término w· V v es idénticamente nulo. En este caso
Dw 2
Dt = v\7 w. (25)
Dw _, T"1 _,
Dt = W · vV. (26)
Esta ecuación es idéntica a la ecuación que da la evolución de una línea fluida elemental 8l, ya
que, como se vio en la lección 3,
La analogía nos indica que cuando p = constante y µ = O el vector w parece estar "congelado"
al fluido. Si en un cierto instante inicial consideramos, en un punto cualquiera x0 del fluido,
un elemento infinitesimal de línea fluida 8l en la dirección de w (es decir 8l = E w con E muy
pequeño), la evolución posterior hará que la dirección y la módulo de w cambien como lo hacen
la dirección y el módulo de 8l sobre la partícula fluida que inicialmente se encontraba en xo. Así
pues, 8l = E w en cualquier instante de tiempo.
7.2 Energía
p.!!_
Dt
(e + !v2
2
) = - V · (pv) +V · (T 1 • v) + pf'm ·iJ + V · (k V T) + Q. (27)
9
Los dos primeros términos del segundo miembro representan los trabajos realizados en la uni-
dad de tiempo sobre la unidad de volumen de fluido por las fuerzas de presión y viscosidad,
respectivamente. Descomponiendo estos términos en la forma
- V . (piJ) = -p V . iJ - iJ . V p y V . (T 1 • iJ) = T
1
: V iJ + iJ . (V . T 1) '
[c. .
interna
~a ..;.....~<1.. l P!/J¡ = -pV ·V+ r/!v + V· (kV T) + Q, 1 (28)
El término -p V · iJ es el trabajo de compresión, o parte del trabajo de las fuerzas de presión por
unidad de volumen y de tiempo que se emplea en hacer cambiar la energía interna del fluido.
V· iJ es la velocidad de crecimient¿ de la unidad de volumen de fluido sometido a la acción de
la presión p. Del mismo modo, la disipación viscosa o función de Rayleigh
( <Pv = T
1
: V il= V . (T 1 • v) - iJ. (V . T 1) ,¡ (29)
es la energía disipada por unidad de volumen y de tiempo por acción de las fuerzas de viscosidad.
El lector puede comprobar que <Pv 2:: O. t>r*'&. t."'Jt!idsá'6cA. se.-;tl~~ pri~va..
Otra forma de la ecuación de la energía se obtiene a partir de la forma integral de esta ecuación
deducida en la lección 6, separando los trabajos de las fuerzas de presión y de viscosidad y
agrupando el primero con el término convectivo. Para un volumen de control Ve fijo en el
sistema de referencia,
= j ñ· T
1
• Vdu+ j p¡-;,, · Vd!!- j q. ñdu+ j Qdí!, (31)
Ee Ve Ee Ve
que indica que podemos olvidarnos del trabajo de las fuerzas de presión si sustituimos el flujo
convectivo de energía interna e por el de entalpía h = e+ p/ p. Esta ecuación es especialmente
util en procesos estacionarios.
J(op/ot) dD,
+ +
Sumando a los dos miembros de (31),
:t j Ve
+ ~ + ~v 2 ) dí!+ j
Ee
+ ~ + ~v2) V. ñ M =
j: dí!+ j ñ · T
1
• Vdu+ j p¡-;,, ·Vd!!- j q. ñM+ j Qdí!.
Ve Ee Ve Ee Ve
Aplicando el teorema de Gauss para transformar las integrales de superficie en integrales de
volumen, y usando la ecuación de continuidad, obtenemos la forma diferencial de la ecuación de
la entalpía total
10
Si las fuerzas másicas derivan de un potencial, fm = -VU con U = U(x, t), operaciones
similares a las anteriores conducen a
pD- ( h+U + -v
1 2) = -ap + -au + v · (T , ·v__) +V. (kVT) + Q. (33)
Dt 2 8t 8t
Dh Dp
p Dt = Dt + cPv + V · (k VT ) + Q, (34)
11
Lección 8. Condiciones iniciales y de contorno
1 Introducción
Los movimientos de los fluidos presentan una diversidad infinita. Las ecuaciones de N avier-Stokes
describen todos estos movimientos, pero lo que realmente distingue unos de otros son las condiciones
iniciales y de contorno que se impongan a las ecuaciones. En esta lección estudiaremos qué condiciones
iniciales y de contorno se pueden presentar.
Nos limitaremos a fluidos de composición homogénea. Además, cuando haya dos fluidos no miscibles
en contacto, admitiremos que no hay flujo másico a través de la superficie entre ambos fluidos.
2 Condiciones iniciales
En las ecuaciones del movimiento aparecen derivadas primeras respecto al tiempo de la velocidad, la
densidad y la temperatura, por lo que deberemos dar las distribuciones iniciales de estas variables:
-+
V= -+
VQ (-+)
X, p = po(x) y T = To(x) en t =O. (1)
Alternativamente, se pueden dar las distribuciones iniciales de dos variables termodinámicas distintas
de p y T, pues todas las variables termodinámicas de un fluido de composición homegénea son conocidas
en función de dos de ellas mediante las ecuaciones de estado.
Cuando el fluido es incompresible, la densidad de cada partícula fluida conserva su valor inicial,
que a menudo es el mismo para todo el fluido. En este caso la distribución inicial de velocidad ha
de verificar V· vo = O. Además, no pueden imponerse condiciones iniciales a la presión, porque esta
variable sólo interviene a través de su gradiente, pero no aparece derivada respecto al tiempo.
No hay que imponer condiciones iniciales cuando buscamos una solución estacionaria.
3 Condiciones de contorno
El número de condiciones de contorno que es necesario imponer para definir completamente un pro-
blema viene determinado por el orden de las derivadas espaciales que aparecen en las ecuaciones
diferenciales que lo gobiernan. Los términos que contienen las derivadas espaciales de mayor orden
en las ecuaciones del movimiento de los fluidos son el término de fuerzas de viscosidad en la ecuación
de cantidad de movimiento y el término de conducción de calor en la ecuación de la energía. El
primero contiene derivadas segundas de la velocidad y el segundo contiene derivadas segundas de la
temperatura.
Existe una gran variedad de condiciones de contorno posibles, dependiendo del tipo de flujos que
estudiemos. En general, las condiciones de contorno son combinaciones de los tres casos siguientes:
1
fIJ-
Cuando el fluido se extiende hasta el infinito, se deben conocer allí la velocidad y dos variables
termodinámicas
iJ---+ Voo, p ---+ Poo y T ---+ Too cuando x---+ oo. (2)
f2.l
Cuando el fluido está limitado por un sólido impermeable, el equilibrio termodinámico local
entre ambas fases requiere que la velocidad y la temperatura sean contínuas a través de la superficie
del sólido. La velocidad y la temperatura del fluido en contacto con el sólido deben coincidir con la
velocidad V 8 y la temperatura Ts de la superficie del sólido
Supongamos que en la superficie se está generando calor a un ritmo qr por unidad de área y de tiempo,
debido a reacciones químicas superficiales o a la absorción de radiación que incida sobre la superficie.
La ecuación de la energía aplicada a un disco similar al de la figura 1, con una cara en el fluido y la
otra en el sólido, proporciona la relación
qr - ifJ · fi + iJs · fi = O,
donde ift = -k¡ V T y ifs = -k8 V T son los vectores flujo de calor por conducción en el fluido y en
el sólido, y ñ es la normal a la superficie dirigida hacia el fluido. Llamando n a la distancia en la
dirección y sentido de ñ, se tiene
qr + k¡ ( ~) f - k, ( ~)' = O. (4)
El flujo de calor por conducción es contínuo a través de la superficie si ésta no emite ni absorbe calor
(qr =O). Una superficie se dice que es adiabática cuando 8T/8n =O.
El esfuerzo que el fluido ejerce sobre el sólido es -pñ+T' ·fi, donde la presión y el tensor de esfuerzos
viscosos del fluido están evaluados en el punto de la superficie donde se quiere calcular el esfuerzo.
Como antes, ñ es la normal a la superficie dirigida hacia el fluido.
fTI La tercera posibilidad que se puede presentar es que el fluido esté limitado parcial o totalmente
por otro fluido inmiscible con él. Sea L: la superficie de separación entre ambos fluidos, de ecuación
implícita f (x, t) = O, que debe determinarse como parte de la solución. Admitiremos que no hay
cambio de fase. En estas condiciones, L: es una superficie fluida desde el punto de vista de cada
fluido . Además, el equilibrio termodinámico local entre los fluidos a ambos lados de L: requiere que la
velocidad y la temperatura sean continuas a través de la superficie. Usando los subíndices 1 y 2 para
designar a los dos fluidos en contacto, estas condiciones pueden expresarse como sigue:
Df = O (5)
Dt .
y
(6)
Además de éstas, han de verificarse otras condiciones que se obtienen estableciendo balances de can-
tidad de movimiento y energía a través de L:. Estos balances se detallan en el resto de esta lección.
4 Tensión superficial
En la superficie entre dos fluidos inmiscibles aparece, macroscópicamente, la llamada fuerza de tensión
superficial, que actúa entre dos partes vecinas de la superficie a través de la línea ficticia que las separa.
2
La fuerza de una parte de la superficie sobre la otra es una tracción perpendicular a la frontera entre
ambas partes y tangente a la superficie. El valor de la fuerza por unidad de longitud de la línea
sobre la que actúa es la tensión superficial, que representaremos por la letra (}. La tensión superficial
depende de la temperatura local de la superficie y de la naturaleza de los fluidos que separa. Si uno de
los fluidos es un líquido y el otro un gas, la tensión superficial depende del líquido. Si los dos fluidos
son líquidos, la te nsión superficial depende de ambos fluidos. El efecto de la tensión superficial es
mantener la superficie en tensión, pues cada elemento de superficie trata de contraerse expandiendo a
sus vecmos.
La entrefase entre dos fluidos inmiscibles, que macroscópicamente tratamos como una superficie sin
espesor, es en realidad una capa de transición cuyo espesor característico es el tamaño molecular do.
Fuera de esta capa, las moléculas de cada fluido se encuentran rodeadas de otras moléculas iguales, y
en media tienen todas la misma energía. Dentro de la entrefase, por el contrario, cada molécula está
rodeada por moléculas de ambos fluidos, y esta circunstancia hace que, si los fluidos son inmiscibles,
la energía media por molécula en la entrefase sea mayor que la energía media por molécula fuera de
la entrefase. Para el sistema compuesto por dos fluidos inmiscibles, es energéticamente desfavorable
mantener muchas moléculas en la entrefase, que es la razón por la que, macroscópicamente, cada
elemento de la entrefase tiende a ser tan pequeño como sea posible, intentando contraerse a cost;d;
expandir a los elementos vecinos, y manteniendo así a los fluidos separados. El exceso de energía en la
entrefase se manifiesta macroscópicamente como una energía superficial proporcional al área. Cuando
aumenta el área de un elemento de la entrefase, aumenta proporcionalmente la energía acumulada en
el elemento, por lo que es preciso realizar un trabajo proporcional al aumento de área, venciendo la
fuerza de tensión superficial que actúa, macroscópicamente, sobre el contorno del elemento.
En la tabla I se dan los valores de la tensión superficial de varios líquidos en contacto con el aire a
la temperatura de 20° C, así como su densidad y la longitud capilar, definida como Re= J2rilfi¡. Con
longitudes del orden de Re, las fuerzas de tensión superficial (rv (}fe) son comparables a las gravitatorias
(,...., pgR~), como se verá en una lección posterior.
Tabla l.- Tensión superficial, (}, densidad, p, y longitud capilar, Re, de varios líquidos a la
temperatura de 20° C.
La tensión superficial del agua en contacto con el aire y en función de la temperatura, puede
3
aproximarse por la relación
sobre el contorno de 8A, que llamamos f f, representa la acción del resto de la superficie sobre el
elemento 8A debido a la tensión superficial ü. En esta integral ñp_ es el vector unitario normal a f f y
tangente a la superficie, dirigido hacia el exterior de 8A. Las integrales de volumen que aparecen en
la ecuación de cantidad de movimiento son despreciables frente a las integrales de superficie porque e
es muy pequeño frente a ..J8.A. Por tanto la ecuación se reduce a
J
L.¡
ñe ·rdA+ f
f¡
añeds =O, (7)
que muestra que la fuerza de tensión superficial está equilibrada por la diferencia de fuerzas de super-
ficie a uno y otra lado de la entrefase.
4
¡\
a
___ j _rj.Bi/2
ñ
FLUIDO 2
Figura 2
Esta fuerza normal debida a la tensión superficial ha de estar equilibrada por la fureza normal debida
a los esfuerzos de superficie sobre las caras de E¡ en contacto con los fluidos 1 y 2, que vale
Así pues,
O" 1 + Ji;
¡¡;;_ 1 ) = n.... · (T2 - T1 ) · n.... = Pl - P2 + n.... · (T2' - T1') · n.
.... 1 . (8)
(
1
(9)
sobre la superficie, cualquiera que sea la pareja de secciones normales que se usen para definir la
curvatura media 1/ R1+1 / R2. La expresión (9) da también un signo a la curvatura media. Como
puede comprobar el lector, V· ñ > Ocuando los centros de curvatura, o al menos el centro de curvatura
de la sección normal de mayor curvatura de las dos consideradas, están del lado de la superficie opuesto
a ñ, y V· ñ <O en el caso contrario.
5
Consideremos ahora el equilibrio de fuerzas tangenciales a la superficie. Las fuerzas de tensión
superficial actuando sobre lados opuestos del elemento de superficie de la figura 2 dan una resultante
en el plano tangente
( ;~ e'i + ;~ e'2) dCi dC2 = V sª dCi dC2,
donde V 8 (j es el gradiente superficial de tensión superficial. Esta fuerza no es nula si (j no es uniforme
sobre la superficie, y ha de estar equilibrada por la fuerza tangencial debida a los esfuerzos de superficie.
Es decir, 1
E~ . t....,,~,,_c.<...1 1 V se5 = n. (Ti - Tz) - [ii. (Ti - Tz) . ii] n. . (10)
Así, si (j = (j(T), se tendrá V 8 (j = (d(j / dT) V 8 T. Una variación de temperatura sobre la superficie
de separación de dos fluidos inmiscibles da lugar a un salto de los esfuerzos tangenciales al pasar de
un lado al otro de la superficie. Esto origina un movimiento en ambos fluidos.
= J
E¡
iie · T · VdA+ JpJ:n ·
V¡
VdfH f aiit ·Vds- Jq. iiedA+ JQrdA,
f¡ E¡ óA
donde el segundo término del primer miembro es la energía almacenada en la superficie a causa de
la tensión superficial, la tercera integral del segundo miembro es el trabajo realizado por la fuerza
de tensión superficial sobre el contorno de 8A¡, y qr en la última integral es el calor generado en
la superficie por unidad de área y de tiempo por efecto de la radiación o de reacciones químicas
heterogéneas. Como 8A¡ es infinitesimal, la primera integral del segundo miembro se puede aproximar
por
Vo· J
E¡
T · iiedA,
donde v0 es la velocidad del fluido en el centro del elemento de superficie fluida. Despreciando las
integrales de volumen frente a las de superficie y haciendo uso de (7), la ecuación de la energía se
reduce a
:t J adA = f aiit · óVds - Jq. ñe dA+ JQr dA, (11)
E¡ f¡ E¡ óA
donde 8v = v - vo.
El primer miembro de (11) es
6
El primer término del segundo miembro de (11) representa el trabajo realizado contra la fuerza de
tensión superficial para aumentar el área de la entrefase, ya que f ñe · 8iJ ds = D (8A ) / Dt. El segundo
término es (qn 1 - qn 2 ) 8A, donde qni = ifi · ñ, (i = 1, 2), y el último término es qr 8A. Por tant o,
Ahora bien, la energía almacenada en la superficie en forma de tensión superficial (del orden de
(5 L~rv pe doL~, donde Le es la longitud característica del campo fluido) es pequeña comparada con
la energía interna en el seno de los fluidos (del orden de pe L~), porque Le » do. La acumulación de
energía superficial representada por el término D(5 / Dt es por tanto despreciable frente a los flujos de
calor por conducción en los fluidos, y se puede escribir, con buena aproximación, qn 2 = qn 1 + qr en la
superficie. Si la superficie no emite ni absorbe calor
(12)
p. ~ ::
7
~ ee ..J- ) 1
)
ee -" ~e ) ( ,.,.e. ~e ) ( >611
[i (?:-re 7 + ~re + v~ -t Yi'e + - 9ne + .J-(le -H +
~ ~ -
t- • ( ~·<1) ( ~~ - "'1) " [ .(~) + l ti +:i/;J +./:e}J.,,/z = "~
:ce
( J..t ::1! ~ ( ee :!:) ~ -!:.. - (.n. vj)..>e -" - =
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(1. il zrJ-¿t - = -b'<l
..,. (~ ·.4) { ....11- '"J + u ' ~J,,.¡Z = ~ :,~ = A4 ! jo+ ( t;·&)- A~ + (!!. ·4) J- = ~ J (s
[(Q+~tf'Jfy.-[(~+ ::eJ.rri]1~+[(!!.·L1J:.i~--.1)+ ~?iz]~+ ~ - """N = :~ J (~
..J.. - ~ + J.f
[ e11 ..)/ [(~ +
~e ~e 7~] Ylz t- 6'/le i~
-.11e :!:.)-ril
, ~ ue +
[r~·4 }(.,¡~ -'11)-i- (~+le 7)*] ~ f + [( ~ - ~ "!ei}IJ-'% + ~~ - e-fJ-= ( ~ + :C, )J (~
~ )~
fii- r-" - )'/\t
( -'1""1 - er.e ~ + [ ( J"e
~e . . •r.e
~ )~ - u + 1e
+ [(~ - ~ t- :e~)~/~~ +h ·<!J<.,/t-'71)+ :e ..1i] ~e+ ~ - .t-J-J.= Ct~ - ~ )J (-'!? {1¡
o = ( ~ )) ·¡j + ~ ~ o ==( ~ .•lp + *( f
:c;e + fii_ J + .J-e ll ( z (~ ~ri + tiG ~ ~ (~ .Y1t + t5e = t~
-:e/\e erie, -¡ (.r,u..7e r,J. -- - ·Ll (~
( ~F 'f)F'.JI' Yf) = ~1' (~fl' 8n tyf\)=~ j:= ~ r =- r.'f = ""' s~ ?_~'? ""11 'í?ff4J::5 .m-11 ~!Y
¡Yf} +- ~·J - /\4> = !fa .LJ : ~~ ( g 'o+ ~ ·t:'.1 - "lP + ~ = %J : r7J<Ír'+~ (t
.t~ + ( ~ 11¡}~ +- ( ~ q¡ )~ + ( rt !(tn + ( I" ,_ H t~ t- '1 ~ti + ( ~~2 + 11 ~ + ~l) ~ + 'W
(,., ~ + 11 ~"z. + <i.J ~ ;- (rJ1~ + r-~e .¡.
cn'Ze) - (f">"...f + /\ ~u-?) J: ( /';;+ º):,)
J'CI +
il\
-5·L1 - (~12)
= · J + (.!!ª) · ~ - -A. ~J
- = (l..+ a):wa J : r:tJ.'4 ?~M"O · ~ (~
iC ~·,\ )(-rlt-"rl) + .(~ +~kc~ + ~ )+ .( ~ +~n~ t- u~)+ J~) +.(~)] rlz : ~
I
/~·d) (ri\- ~)+ ( HJ.fz: ; , •;" 1 (:~lf' )~e - (ji !fJ; - (~ *) "% - = ( .L.ó1")'ó- "' E·A
?!) + ~·A - 1\4' + ~ ·J1 J - :: ~ J : ~'%)....-." ~""<> . ~ ( 5
((~·fi)(~~ -"V/)+~ .lzJ~ + [(~ .. ~}.!]~+ [(~+!;).1]1 + ~ - •"'tL ::;,; (!
[(~+ ~)-ri]3f T rr~ ·Ll)( k ,.,,/J+ ~ vlz]"; + [(~ -t ~).!]~ t ~ - ~o~ ~ J (f
[(~ + !~)Y4_J ~ + [{~+ ~)J/~ + [(~·A)(f/vlz -~)+ ;:~]~e +~ - x~J:. Ja.) (!:
: Jlf>NY •¡_WJ:r.J •7j ( ¡,
__..!:§_ t..,~ xe X 1 :¡¿ ~ r =w .
+ +- ~ (~ == ~ ., ('f +
o ;:.. (trld'Jt. pre filjt + o= ( ~) •4 -r le o tJd : ,.,,.,,
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Lección 9. Reswnen de las ecuaciones generales de la
mecánica de fluidos
1 Introducción
En esta lección se resumen las diferentes formas de escribir las ecuaciones de N avier-Stokes. Se
escriben las ecuaciones en notación vectorial y en coordenadas cartesianas, cilíndricas y esféricas.
También se dan las expresiones de los operadores diferenciales más usuales en coordenadas
curvilíneas ortogonales.
Al deducir las ecuaciones del movimiento, éstas se obtienen en la forma siguiente, llamada forma
conservativa,
~+ V· (pv) =O, (1)
8
r¡:) + v . (pVV) = v . (-pI + T') + pfm , (2)
:t [p (e + ~v 2 )] + +V · [p (e + ~v 2 ) V] = V · (-pü + T1
• V+ kVT) + pfm · V+ Q, (3)
donde I es el tensor unidad. La estructura común a estas tres ecuaciones es
(v
2
-Dv = -av + v_, · V v_, = -av + V - ) - v_, x (V x v).
_,
(6)
Dt at at 2
1
donde el primer miembro es p D( e+ v 2 / 2) / Dt.
Por último, desarrollando los términos de la ecuación de continuidg¡f (1) , se obtienen las
siguientes formas alternativas
1 !fft + pV . V= o y ~ + V. V p + pV . V= º· I (8)
Las fuerzas másicas fm más habituales son las gravitatorias,§, y las fuerzas de inercia debidas
al movimiento del sistema de referencia, -ao - ñ x ( ñ x x) - (dñ / dt) x x - 2ñ x v.
1
En las ecuaciones anteriores T es el tensor de esfuerzos viscosos, cuyas componentes son
(9)
p[ :t (V:) + (V:)] =
V. V -V. V p + V. (\7 . T + fm .V,
1
) p (10)
(12)
=
p~~ p~~ +pv· Vh =: +v· Vp+ V . (kVT) + <Pv +Q. (13)
Dado que de = -p d (1/ p) + TdS, la ecuación de la energía interna (11) se puede escribir en
función de la entropía S, en la forma
DS
pT Dt = V· (kVT ) + c/Jv + Q. (14)
2
En varias de las formas anteriores de la ecuación de la energía aparece la función de disipación
de Rayleigh, <Pv, dada por
<Pv = (V v) : T 1 = V . (T 1 • v) - (V . T 1) • v. (15)
3 .1 Factores métricos
(16)
(18)
o bien
(19)
3
3.2.5 Derivada sustancial de la velocidad, Dv/ Dt
(Dif)
-
Dt i
= -avi
8t
(v
+ [V -
2
2
) - v_, x (V x v)
_, l .
'/,
. (21)
(22)
y 122 y {33 obtenidas por rotación cíclica de los subíndices. Las componentes {ij, con i distinto
de j, son
h2 8 ( V2 ) h1 8 ( V1 )
112 (23)
= 2h1 8x1 h2 + 2h2 8x2 h1 '
la divergencia de la velocidad es
y el rotacional de la velocidad es
4
3.3.2 Ecuaciones del movimiento
Continuidad
Dp 8vi _O
Dt + P8xi - .
Cantidad de movimiento
Energía total
D ( e+-v
p- 8(pvi) 8 [µvj (ºVi
1 2 ) =---+pvifmi+- - 8vj)]
+OXi
- +
Dt 2 axi axi 8x j
a [(µv--µ
+-
axi
2 )
3
avk ]
Vi-
axk
a (k -
+-
axi
8T) +Q.
axi
Energía interna
donde
Entalpía
Entropía
5
3.4 Coordenadas cilíndricas
Las coordenadas se designarán mediante r, e y z , y las componentes de la velocidad por Vr, V()
y Vz. Los factores métricos son hr = 1, he = r y hz = l.
la divergencia de la velocidad es
'T"'1 • __, -
V V- r
~ [a (arrvr) + avae() + a (azrvz) l '
y el rotacional de la velocidad es
~ ree ez
v x v = ~r a¡ar a¡ae a¡az
rV() Vz
Continuidad
. J
1
Componente r de la ecuación de cantidad de movimiento
Energía
p-
De = -p\J · v+ 1 a ( ar) +--
_, [-- 1 a ( ar) +-
a ( ar)] +</>v - \J · qr_, +Q,
Dt r ar rk-
ar r 2 ae k-
ae az k- az
donde
2 2 2
2 [ ( -avr) 1 ave
+ (- - + -vr) ( avz) ] [1 avr a- (ve
- ) ]2} +
r + -az + - - + rar
A- -_
l/-'V µ {
ar r ae r ae r
Continuidad
a(rvr) ave a(rvz) - o
ar + ae + az - .
7
Componente e de la ecuación de cantidad de movimiento
8ve 8ve Ve 8ve 8ve VeVr) _
p ( 8t + Vr 8r + r 8B + Vz 8z + r -
Las coordenadas se designarán mediante r, e y cp, y las componentes de la velocidad por Vr, ve
y Vcp. Los factores métricos son hr = 1, he = r y hcp = r sen e. Las definiciones de los ángulos e
y cp se ilustran en la figura l.
---
... ...
',
Figura 1
V . iJ = 1
r2 sen e
[ª (r vr8rsen B) + 8 (rve8()sen B) + 8 (rvcp)l
2
8cp '
8
y el rotacional de la velocidad es
T'"1
v X
__,
V= -
1
r
er reo r sen o e<p
8/ 8r 8 / 80 8 / 8cp
1
r 2 sen O
[8 (rvcp sen O) _ a (rve)
aO 8cp
l_, _
er
rvcp sen O
1
r sen o
[8 (rvcparsen O) - 8vrl __, 1 [8 (rve)
8cp ee + -:;:- 8r -
8vr] __,
80 e<p'
donde er, ee y e<p son los vectores unitarios en las direcciones r , oy cp locales.
Toe= 2µ ( -:;:1 8v
80(} Vr ) + ( µv 2 ) __,
1
+-;:- - 3µ V. v,
, _2µ (-rsen1_oavcp
T<p<p -
8 cp
+ Vr +vercotanº) + ( µv _ ~3 µ ) T""r . __,
V V,
8 (V(} ) 1 avr
Tr (} = T(} r = µ r 8r -;¡: + -:;: 80 '
I I [ l
, , [ sen O 8 ( v cp ) 1 8v e ]
Tcp 8 = T8 cp = µ -r- 80 sen O + r sen O 8cp '
TI
<p r
= TI
r cp
= µ [ r 8-
8r
(V- r<p) + - 1- 8vr
-
r sen O 8cp
l ·
Continuidad
9
Componente <p de la ecuación de cantidad de movimiento
av<p av<p V(} av<p Vc.p av<p VrVc.p - V(}Vc.p cotan O) 1 ap f
p( 8t + Vr ar +-:;: ae + rsenB acp + r = - rsenB acp + p mc.p+
3
1 a (r T;<p) 1 a (T~<p sen(}) l ªT~'P T~(} cotan(}
+-r3 ar + - -
rsen e ae + -
r sen e acp- + ----'-----
- - r .
Energía
av 'P
µ { [ - 1- - + -
sen- - e a ( v'-P ) ]2 + [---+r-
1 avr a ( v'P) ]2} +
r
sen e acp r ae - sen e r sen e acp ar -r
2 )
2
{ -1 a(r vr) + -1- ¡a(vosenB) + -av'Pl}
2
+(µ V
- -µ
3 r2 ar r Sen (} ae acp
Continuidad
10
Componente cp de la ecuación de cantidad de movimie nto
11
C'l.) f {.,. . ,. - V p =o
- :
1_...
~ . ..v,oru~r> ¡;/.e ~~s ~ei;dl6 : (T=T" :: ae) CA a ==O ~ w= R& TC> ~ f' + et.e.
~• p:> {¿;. :t.fÓp..;lo ~~~S f '1)2 ¿;{65 ( f> / r" ~ dé_ ) CIJr\ ~ =0 -1 W : ~A ~
IH + éle. .
. ~ .íl =íL~
1
Lección 10. Fluidostática
1 Introducción
En esta lección estudiaremos el equilibrio de los fluidos. Deduciremos las condiciones que han de
darse para que un fluido pueda estar en reposo en un sistema de referencia dado, y las relaciones
que determinan las magnitudes fluidas en equilibrio.
Veremos cómo se obtienen las condiciones de equilibrio a partir de las ecuaciones generales
de la mecánica de fluidos al imponer la condición v =O. Entre las condiciones que han de darse
para que exista equilibrio hay unas que se refieren a los cuerpos que limitan al fluido (que han
de estar en reposo), otras que restringen los tipos de fuerzas másicas que pueden actuar sobre
el fluido, y otras que se refieren a los campos de densidad y temperatura.
Por último trataremos el equilibrio de gases, haciendo mención especial del equilibrio atmos-
férico y la Atmósfera Estándar.
Si el fluido está en reposo en el sistema de referencia que se use, las ecuaciones de continuidad,
cantidad de movimiento y energía se reducen a
La ecuación de continuidad (1) exige que la densidad no varíe con el tiempo. Una variación
con el tiempo de la densidad implicaría un movimiento de dilatación del fluido.
1
La ecuación de cantidad de movimiento (2) expresa el equilibrio entre las fuerzas de presión
y las fuerzas másicas 1 . Las fuerzas de viscosidad y la aceleración del fluido son nulas por ser
iJ = O. Las fuerzas másicas que generalmente encontraremos son las fuerzas gravitatorias y las
fuerzas de inercia debidas al movimiento del sistema de referencia:
f_,m =
... ...
g - ao - f2
_, X (f2_, X X--) -
dñ
dt _,
X X,
donde no aparecen las fuerzas de Coriolis por ser nula la velocidad. Si la velocidad angular ñ
es constante, fm deriva de un potencial:
fm = - VU con U = ( -g + ao) · x - ~ ( {Í x x) · ( {Í x x) .
Las ecuaciones (1) a (3) han de complementarse con condiciones iniciales y de contorno
compatibles con la ausencia de movimiento.
Como (1) y (3) contienen derivadas respecto al tiempo, es preciso especificar las distribuciones
iniciales de densidad y temperatura: p = po(x) y T = To(x) en t = O. La solución de (1) es
entonces
p = Po (x) en cualquier instante. (5)
La velocidad de los sólidos que limitan al fluido debe ser nula. Si el fluido está limitado por
otro fluido, éste, a su vez, ha de estar en equilibrio. El balance de fuerzas normales a la superficie
de separación entre dos fluidos inmiscibles en equilibrio requiere que el salto de presión a través
de la superficie esté equilibrado por las fuerzas de tensión superficial
3 Condiciones de equilibrio
La ecuación de cantidad de movimiento (2) para un fluido en equilibrio muestra que las fuerzas
másicas por unidad de volumen, pfm, derivan del potencial -p. Esto restringe por una parte el
tipo de fuerzas másicas que pueden actuar sobre el fluido y por otra la forma de p(x). Tomando
el rotor de la ecuación (2) para eliminar la presión queda
(7)
1
Mientras que el equilibrio de un sólido rígido requiere simplemente que la resultante y el momento resultante
de las fuerzas exteriores sean nulos, el equilibrio de un fluido sólo es posible si la suma de las fuerzas de presión
y las fuerzas másicas es nula para cada partícula fluida.
2
y multiplicando esta ecuación escalarmente por lm para eliminar la densidad se obtiene la
condición
(8)
que ha de cumplir el campo de fuerzas másicas para que sea posible el equilibrio.
En lo que sigue supondremos que las fuerzas másicas derivan de un potencial. En este caso
(7) se reduce a
Vp X vu =o, (9)
que nos indica que las superficies equipotenciales son también superficies de densidad constante.
que, junto con (9) , implica que las superficies equipotenciales son también superficies de presión
constante.
En consecuencia, para que el fluido pueda estar en equilibrio bajo la acción de fuerzas másicas
que derivan de un potencial, p y p han de cumplir una relación
llamada relación de barotropía. Esta relación permite introducir, mediante integración con t
fijo, la función
w(p,t) =
p
¡
dp
- ( t)'
Pl p p,
(12)
Vw= Vp (13)
p '
4 Hidrostática
p + pU = C(t), (16)
3
que determina la presión en función de la posición, que interviene a través de U(x, t) . Para
calcular la constante C (t) hemos de conocer la presión en algún punto del líquido.
donde z es la distancia vertical. Si el plano z = O es la superficie del líquido y sobre ella hay un
gas a presión Pa, entonces C = Pa.
Una vez conocida la distribución de presión en el líquido, podemos calcular la fuerza que el
líquido ejerce sobre una superficie cualquiera en su interior.
y
M= - J(X - xo) X (pñ) dA. (19)
E
F = -pª J
E
ñ dA + pg J
E
zñ dA, (20)
y
M = -Pa J (x - xo) X ñ dA + pg J z(x - xo) X ñ dA. (21)
E E
La fuerza sobre dA es -pañdA, debida a la presión del gas, más pgzñ dA, debida al peso de
la columna de líquido de altura -z. La proyección de esta fuerza en una dirección mes
Si la superficie L: es cerrada, las expresiones (18) y (19) se puede evaluar mediante el teorema
de Gauss. Si L: es la superficie de un sólido sumergido en el líquido, imaginaremos el campo de
presión del líquido prolongado al interior del sólido. Se obtiene a.sí
4
pp-\o . k Ai~~NoúZ.hs
con lo cual observamos que la fuerza ejercida por el líquido sobre un sólido es igual y contraria
a la resultante de las fuerzas másicas sobre el líquido que ocuparía el volumen del sólido si éste
no estuviera presente.
Análogamente,
M= - J
~
(x - xo) X (pñ) dA =!V
V
X [p(x - xo)] dO =
donde x9 es la posición del centro de gravedad del líquido desalojado por el sólido.
Las relaciones (23) y (24), y en particular (25) y (26), constituyen el enunciado matemático
del Principio de Arquímedes
(27)
donde tanto C 1 como C2 han de determinarse por el valor que toma la presión en algún punto
de cada fluido, si bien se da a veces el caso de que conozcamos la presión en algún punto de
uno de los dos fluidos, pero en ningún punto del otro, del que en cambio conocemos el volumen.
Estos datos también permiten determinar las dos constantes C1 y C2.
5
(1/ R 1 + 1/ R2 ) = V · ñ . Esta expresión de la curvatura media es positiva cuando la superficie
es cóncava hacia el fluido l.
La ecuación (28) es una ecuación en derivadas parciales de segundo orden, no lineal, que debe
complementarse con condiciones de contorno apropiadas.
Las condiciones de contorno que encontraremos más habitualmente son las siguientes:
Si la superficie I; entre los dos fluidos está limitada por una superficie sólida, admitiremos que
el ángulo que forman las normales al sólido y a I; en la línea de contacto de ambas superficies es
igual al llamado ángulo de contacto (), que es una propiedad de la pareja de fluidos y el sólido
que los limita (véase figura 1).
Si en una línea coinciden tres fluidos, las fuerzas de tensión superficial de las tres superficies
de separación que confluyen en la línea han de estar en equilibrio (véase figura 2).
{Al Si el número de Bond es pequeño, O'/ Le» (p1 - p2)fmeLe, podemos despreciar las fuerzas
másicas frente a las de tensión superficial a la hora de determinar la forma de la superficie, con
6
lo cual la ecuación (28) se reduce a la ecuación de Laplace
@] Si, por el contrario, el número de Bond es grande, O'/ Le « (p1 - p2)fmeLe, las fuerzas
de tensión superficial son despreciables en la mayor parte de la superficie y la ecuación (28) se
reduce a
(p1 - P2) Us = C1 - C2, (31)
que nos indica que la superficie de separación es una superficie equipotencial.
La ecuación (31) es una ecuación algebraica porque se han despreciado los términos que
contienen derivadas. Por tanto su solución no puede satisfacer las condiciones de contorno del
problema original. Como consecuencia, la aproximación que condujo a (31) no será válida en una
banda delgada alrededor del contorno, donde al menos una parte de los términos despreciados
debe ser tan importantes como los términos retenidos, de modo que a la ecuación resultante
se le puedan imponer las condiciones de contorno reales. Tal cosa ocurre porque la estimación
anterior de la curvatura de la superficie (1/ Le) es incorrecta en la banda delgada junto al
contorno. Llamando fJ al espesor característico de la banda, que es desconocido, y admitiendo
que la desviación local de la superficie respecto a la equipotencial (31) es también de orden 8,
se verificará
u(-k+-k) +~=C1-C2,
(PI -p2)fmc8
u /8
7
y, como el primer término ha de ser del mismo orden que el segundo,
La longitud
El número de Bond, PI9L~/ CJ, representa también la relación entre el cuadrado de la longitud
característica y el cuadrado de la longitud capilar.
Ya hemos visto antes que para que el equilibrio de gases sea posible las fuerzas másicas han de
verificarlm·(V x f'm)
= O. Esta condición se cumple si lm= - \JU, y entonces las relaciones (9)
y (10) muestran que las isobaras son superficies equipotenciales y también isócoras o superficies
de densidad constante. Así pues, la densidad p está ligada con la presión p mediante una relación
de barotropía p = p(p, t), que nos permite introducir la función w(p, t) dada por (12).
p ( p )n (33)
Po = Po '
donde Po y po son la presión y densidad en un punto de referencia, la relación de barotropía es
(34)
n Po P --n-
n-1 ]
]!_ =
Po
(l _ 1
n-
n
U - Uo)
R 9 To
n~i
'
(36)
Cuando las fuerzas másicas son las gravitatorias tenemos U = gz, de modo que la ecuación
(37) nos da una temperatura que disminuye linealmente con la altura: T = To - az, con a =
(g / R 9 )(n - l) / n. Las constantes Po, Po y To son los valores correspondientes a z =O, y Uo =O.
La atmósfera estándar se define en sus primeros 11 km (troposfera) con una temperatura que
disminuye linealmente desde 15 ºC = 288 K en el suelo hasta -56.5 ºC = 216.5 K a los 11 km.
Es decir, a= 6.5K/ km, o bien n = 1/ [1+(aR9 / g)]=1.235, ya que R 9 /g = 29.26m/ K.
Por encima de los 11 km (hasta los 22 km aproximadamente) existe una segunda región (es-
tratosfera) donde la temperatura es uniforme y, como consecuencia, la presión y densidad dis-
minuyen exponencialmente con la altura, como indica la ecuación (32). A esta región le suceden
otras donde la temperatura vuelve a variar.
Conviene hacer notar que el equilibrio mecánico analizado aquí no supone que haya equilibrio
termodinámico; por eso se ha admitido la posibilidad de gradientes de temperatura. Tampoco se
ha hablado de la estabilidad del equilibrio, para cuyo análisis es necesario estudiar el movimiento
que aparece como consecuencia de cualquier perturbación.
9
-V= 4
-
it V= W =O
. c~-t. ~ .
~ f ~.... ,, - ~ -= o --}
~ : f~t -~ -=o
Lección 11. Movimientos unidireccionales de fluidos
incompresibles
1 Introducción
Estas soluciones tienen, aparte de su interés académico, un interés práctico basado en que,
por una parte, nos proporcionan ideas cualitativas del comportamiento de los fluidos y, por
otra parte, son a veces casos límites de corrientes más complicadas para valores extremos de los
parámetros que caracterizan el movimiento.
En esta lección escribiremos las ecuaciones, condiciones iniciales y de contorno que determinan
el movimiento unidireccional de fluidos incompresibles, y las aplicaremos a los casos estacionarios
sencillos de la corriente de Couette y de Poiseuille.
Los movimientos unidireccionales son aquellos en los que el fluido se mueve solamente en una
dirección.
U -=f. Ü, V= W = Ü. (1)
(2)
8p
O= ~ - f)y + PÍmy, (3)
8p
O = ~ - OZ + Pf m z · (4)
1
Las dos últimas ecuaciones (3) y (4) muestran que para que el movimiento unidireccional sea
posible es necesario que exista equilibrio, en las direcciones transversales al movimiento, entre
Jas fuer zas másicas y las de presión. Por ser p constante, es necesario que las componentes
transversales de las fuerzas másicas deriven de un potencial; en caso contrario estas fuerzas
producirían un movimiento t ransversal.
Obsérvese que si el sistema de referencia gira con velocidad angular ñ, est a velocidad angular
debe ser paralela a la velocidad, para que la aceleración de Coriolis se anule. Además ñ debe ser
constante para que las fuerzas de inercia t ransversales al movimiento deriven de un potencial.
En lo que sigue consideraremos que la fuerza másica total deriva de un potencial: ¡: = -\JU ,
con lo cual
8 (p + pU) = O 8 (p + pU) = O
(5)
8y y 8z '
que nos indican que la presión motriz p + pU no depende de las coordenadas transversales al
movimiento, siendo a lo sumo función de x y de t. La componente x de la ecuación de cantidad
de movimiento muestra que 8 (p + pU) / 8x no depende de x, pues u, y por tanto p (8u / 8t) y
µ (8 2u / 8y 2 + 8 2u / 8 z 2), son independientes de x . Escribiremos esta ecuación en la forma
donde
8 (p + pU)
Pe (t) = (7)
8x
es la pérdida de carga, o caída de presión motriz por unidad de longitud en la dirección del
movimiento, función sólo del tiempo.
La ecuación (6) está desacoplada de la ecuación de la energía y puede resolverse sin conocer
el campo de temperaturas, que se obtendrá posteriormente de la ecuación de la energía
(ª
2
[(ªu)2 (ªu)2]
8T + ua;;
pe ( 8t 8T) = k (h2 a2T fii2
T +-¡¡;¡ji+ a2T) + µ + {h ay + Q, (8)
Además el contorno que limita al líquido ha de ser un cilindro de generatrices paralelas al eje
x:
e (y, z) =o, (10)
que han de moverse con una velocidad independiente de x . Las condiciones de contorno son
pues
e
(y , z ) =o: u= Uc (y, z, t)) T =Te (x, y, z, t) . (11)
Para determinar el gradiente de presión motriz Pe (t) es preciso conocer la diferencia de presión
entre dos puntos del líquido como función del tiempo, si bien puede sustituirse este dato por otro
equivalente, como el gasto volumétrico Q (t) en el caso de que el flujo ocurra en un conducto.
Las ecuaciones (6) y (8) son lineales en la velocidad u y en la temper atura T, respectivamente,
por lo que se puede aplicar el principio de superposición. Ésta es la mayor simplificación que se
da en los movimientos unidireccionales de líquidos.
2
3 Movimientos unidireccionales bidimensionales estacionarios
3 .1 Corriente d e Couette
Y >,. U
h - - - - - - - ; .¡ _ ___.,_
¡ - --
~
~-l
~/
V
O--------''----------- - - - -X->
La solución de (12) es
(13)
El gasto volumétrico entre las dos placas, por unidad de longitud en la dirección z perpen-
dicular al plano del movimiento, es
h Uh
q= = -. (14)
!oo u(y)dy
2
(15)
(16)
que habrá que equilibrar con una fuerza exterior igual y contraria, por unidad de área de la
placa, para mantener a ésta en movimiento. El trabajo que realiza esta fuerza por unidad de
tiempo y por unidad de área de la placa es µU 2 / h. Este trabajo se transforma íntegramente
en energía interna del líquido, coincidiendo con la integral de la disipación viscosa a través del
canal
l if>vdy =µ[ (:)2 dy = µ~ •
2
(17)
3
3.2 Corriente plana de Poiseuille
Consideremos ahora el caso en que no hay movimiento relativo de las placas pero existe un
gradiente de presión motriz pe constante. El movimiento resultante se llama corriente plana de
Poiseuille.
cuya solución es
Pe
u= - 2µy (y - h)' (19)
El gasto volumétrico entre las placas, por unidad de longitud en la dirección z perpendicular
al plano del movimiento, es
rh h3pe
q = Jo u (y) dy = 12µ · (20)
Compruebe el lector que el esfuerzo viscoso que el líquido ejerce sobre cada placa es µpehi/ 2.
Este es un problema lineal cuya solución es la suma de las soluciones precedentes. En efecto,
basta con escribir u = Uc + Up con
2
oy 2 =o ,
8 uc Uc
(O) = O, Uc ( h) = U, (22)
y
(23)
cuyas soluciones son las correspondientes al flujo de Couette (13) y la correspondiente al flujo
de Poiseuille (19), respectivamente. Así pues,
(24)
(25)
4
4 Corriente de Poiseuille en un tubo
µ
O=pg+-- d (rdu)
- , (27)
r dr dr
donde r es la distancia al eje del tubo (véase figura 2). Las condiciones de contorno son
(29)
de modo que la caída de presión motriz por unidad de longitud del tubo necesaria para mantener
un gasto volumétrico dado es
8µQ
pg= --4. (31)
7ra
Q a 2 pe Umax
Uo=-=--=-- (32)
1ra2 8µ 2 '
(33)
5
La ecuación de cantidad de movimiento escrita para un volumen de control limitado por dos
secciones normales del tubo, ~ 1 y ~2, situadas a una distancia R, y por la pared del tubo entre
secciones, ~T, es
Así pues
(p + pU)i - (p + pUh 2TJ
Pe= e = --;;' (37)
que coincide con el resultado obtenido anteriormente.
O = Pl ( t) +µ ( :~ + ~:~) , (40)
EJ2v 8 2v
ae + 8r¡ 2 = -l (41)
6
El gasto volumétrico Q de líquido a través del tubo es
(42)
donde la integral
r (éi ) = J
E
vdedr¡ , (43)
- Para un tubo de sección circular podemos tomar D = a, el radio del tubo, y buscar una
solución de la forma v = v (e;) , donde e; = r/a = Je+ r¡ 2 . La ecuación (41) se reduce a
a (c;-8v/8c;-) /8c;- =-<;,con V (1) =o y V (O) <OO. La solución es
-Si la sección es una corona circular b < r < a, se tiene, tomando de nuevo D = a,
v = H 2
1- , - (1- c )
2
::J r= i[ 1- c4 +
1
1~;l (47)
(48)
v = 16 f/ (-lf {
1
_ cosh [~ (2n + 1) 1fTJ]} { cos [~ (2n + 1) 7fe] }) (49)
1f 3
n=O \ cosh [~ (2n + 1) 7fé] (2n + 1)
3
'
2
Para hacer el límite E~ O en (50) es nececesario conocer: L ( 2n~l) 2 = -rr: y L ( 2n~i) 4 = ~:. Sin embargo,
n=O n =O
la solución para E ~ O se da en (25) y (26) con U = Oyh = 2b. De (26) se tiene: Q = 2aq = 2 ª(~~rPe =
(~)~(~)3=?r= ~ €3.
7
-Por último, si la sección es un triángulo equilátero de lado a (D =a), con~= y / a, r¡ = z/a,
se tiene (véase figura 3)
V = (51)
6 Efectos térmicos
6 .1 Corriente de Couette
La ecuación de la energía, en ausencia de calor añadido por radiación o por reacción química es
y 8T
pcU h 8x =k
(8 T+ 8T) + (ª)
2
8x 2 h
2
8y 2 µ
2
' (52)
donde <I>v = µ (du/dy) 2 = µ (U/h)2. Las condiciones de contorno en las paredes son
8T
ay = O; en y = O e y = h, (54)
-En el primer caso la temperatura del líquido no depende de x y la ecuación (52) se reduce
a
o= k a2T
8y2 + µ h
(ª)2 ' (55)
8
Obsérvese que la cantidad adimensional
µU
2
k (T1 - To)
= (µe
k
) (cTo
U
2
) ( To )
T1 - To
= Pr
2
( U )
cTo
( To )
T1 - To '
(57)
Si IT 1 - To 1 /To > > PrU 2 / cTo el efecto de la disipación viscosa es despreciable y la distribu-
ción de temperaturas es, aproximadamente,
y
T - To = (T1 - To) h. (58)
En el caso opuesto IT1 -Tol /To << PrU 2 / cTo, la distribución de temperaturas es
T - To
To
= PrU
2cTo
2
(l _Jt.)h ]¿h' (59)
El producto PrU 2 / cTo suele ser mucho menor que la unidad para los líquidos. Por lo tanto,
para que la disipación viscosa sea importante es necesario que
2
PrU )
(60)
IT1 -Tal rv To ( cTo <<To,
que implica diferencias de temperatura entre las placas muy pequeñas frente To.
k (T1 - To) µU 2
[i/· (-J)] y-O
_= k (dT)
dy y=O h +----;¡¡;:-· (62)
- En el caso en que el flujo de calor en las paredes sea nulo la disipación viscosa da lugar a
un aumento de la temperatura del líquido proporcional a la distancia a lo largo del canal, la
temperatura es de la forma
T (x, y) = Ax + Ti(y) , (63)
donde A es una constante a determinar como parte de la solución. La ecuación (52) de la energía
se reduce en este caso a
(64)
A= 2µU (65)
pch 2 ·
9
Llevando este valor de A a la ecuación para T1 y resolviéndola, resulta, finalmente,
('Y._) ( ~_'Y._)
2
cT1 =_µ e (66)
u2 3k h 2 h '
salvo una constante arbitraria. En resumen
(67)
6. 2 Corriente de P oiseuille
(68)
0 = ~~
r dr
(r dT)
dr
+ µ (4u0
a2
r) 2
, (71)
(72)
La temperatura máxima es
(73)
El flujo en la pared es
q --k -
P - dr (dT) r=a
(74)
-Si la pared del tubo está aislada térmicamente, la temperatura del líquido es de la forma
T = Ax + T1 (r) , (75)
r dr
kd ( dT) +µ (4uor)
pcuA= - - r -
dr
--
a2
2
(76)
10
Multiplicando por r los dos miembros de la ecuación anterior, integrante desde r = O hasta
r = a,y utilizando las condiciones de contorno, se obtiene
{ª
pcA lo rudr
(4uor) dr,
=µlo{ª r --;;:¡.-
2
(77)
de donde
(78)
11
Lección 12. Movimientos unidireccionales no estacionarios
1 Introducción
2 Corriente de Stokes
Se denomina corriente de Stokes al movimiento que toma un líquido incompresible que ocupa
el semiespacio limitado por una placa cuando ésta se mueve en su plano con velocidad
A cos OJ t X
. d2 f
'lWj =V dy 2 ' (4)
1
cuya solución general es
(5)
Si tomamos la determinación Vi,= (i + i) / ../2, la primera solución es inadmisible porque diverge
cuando y --7 oo, de modo que B1 =O. Usando la condición f (O) =A se obtiene, finalmente,
Por lo tanto
(7)
donde el movimiento es una onda transversal amortiguada exponencialmente con la distancia a
la pared y que avanza con una velocidad de fase ../2VW. La longitud ó = JV1W es la longitud
característica de penetración de los efectos viscosos. Para distancias y » ó el líquido apenas se
mueve.
El esfuerzo en la placa es
que está desfasado respecto a la velocidad de la placa. Esta es una característica distintiva del
flujo de Stokes.
Cuando la placa del ejemplo anterior oscila en presencia de otra que está en reposo a una
distancia h de la primera, las condiciones de contorno para la ecuación (2) pasan a ser u= Acoswt
en y =O y u= O en y = h. Aplicando estas condiciones a la solución general (5), se obtiene
Aeh~ -Ae-h~
B1 = y B2 = (9)
eh~ - e-h~ eh~ - e-h~·
El tiempo necesario para que los efectos viscosos afecten a una capa de espesor h es el tiempo
de difusión viscosa h 2 /v. El tiempo característico de variación de la velocidad de la placa situada
en y = O es 1/ w, durante el cual las fuerzas de viscosidad ponen en movimiento al líquido en
una capa de espesor de orden JV!W. Se pueden considerar dos casos extremos:
2
4 Movimiento impulsivo de una placa. Problema de Rayleigh
Vamos a analizar el movimiento generado en un fluido incompresible limitado por una placa
infinita que se mueve paralelamente a sí misma con velocidad constante U a partir de un cierto
instante inicial. El líquido ocupa el semiespacio superior y > O y está en reposo inicialmente
(véase figura 2). Puesto que en el infinito no hay movimiento se tiene pg (t) = O, y la ecuación
de cantidad de movimiento es (2), a resolver con las condiciones
y = O : u = U, y ----+ oo : u = O. (12)
---1..~~~~~~~----
u
... ~~- ~
X
A partir del instante inicial, la viscosidad transmite el movimiento de la placa al líquido. Sea
8 el orden del espesor de la capa donde el movimiento del líquido es apreciable (u del orden de
U) al cabo de un tiempo t. Los órdenes de cada uno de los términos de (2) serán U /t y vU/ 8 2
en esta capa. La condición de que ambas estimaciones sean iguales nos proporciona el resultado
8 ,. .__, JVt. A la vista de este resultado, buscaremos una solución del problema de la forma
u=Uf(r¡), (13)
donde
(14)
r¡ = o: f = 1; r¡ ----+ 00 : f = o. (17)
(18)
3
donde
er f (<;) = Jrr lo <;e-<' de;, (19)
5.0
4.5
1J = _Y_
¡;t 4 .0
3.5
3.0
2.5
2.0
1.5
1 .0
0 .5
o.o
o 0 .1 0 .2 0 .3 0 .4 0.5 0 .6 0.7 0 .8 0 .9 1
u/U
T¡-µ
- ( -8u ) -µU-
8y y=O - .¡¡;t,
(ªf)
-
8r¡ r¡=O
µU
- V'iWt'
que se opone al movimiento de la placa y disminuye cuando aumenta el tiempo en la forma
c1/2.
Supongamos ahora que tenemos la placa del problema de Rayleigh, pero el líquido, en lugar
de extenderse hasta el infinito, se encuentra limitado por una placa fija situada a una distancia
h de la primera placa (véase figura 4).
4
h y
u X
t = O : u (y, O) = O, (20)
y = o : u = u, y = h : u = o, (21)
donde la condición u (oo, t) =O del problema de Rayleigh se sustituye por u (h, t) =O. Podemos
utilizar la distancia h para adimensionalizar la coordenada y en la forma
(22)
8 (u / U)
(23)
a(vt / h 2 )
con v =u/ U y T = vt / h 2 . La ecuación (24) hay que integrarla con la condición inicial (20) y
las condiciones de contorno (21), que, en las nuevas variables, son
~ = Ü: V = 1, ~ = 1: V = 0. (26)
El problema resultante (24), (25) y (26) está libre de parámetros y para obtener su solución es
necesario integrar una ecuación diferencial en derivadas parciales. Sin embargo se puede estudiar
la respuesta para tiempos distintos del característico h 2 /v que corresponde a T rv l.
De forma análoga, la respuesta para tiempos grandes frente a h 2 /v implica que la distancia
de penetración de los efectos viscosos, vz;f,, es grande frente a h y, por lo tanto, entre las dos
placas (O :::;; y :::;; h) los efectos viscosos son dominantes, quedando reducido el problema al de
Couette.
5
Por lo tanto, mediante el estudio de la solución al problema (24) para tiempos pequeños y
grandes frente al característico, h 2 /v, es posible conocer como se inicia el movimiento (problema
de Rayleigh) y como se comporta la solución para tiempos lo suficientemente grandes (corriente
de Couette) .
µU
TJ = - -- (27)
VifVt '
mientras que para tiempos grandes el esfuerzo en es el dado por la solución de Couette
µU
TJ =-h. (28)
Para tiempos del orden del característico del problema, h 2 /v, es necesario resolver la ecuación
( 24) numéricamente con su condición iniciales (25) y sus condiciones de contorno (26), para
determinar la velocidad u (y, t) y el esfuerzo en la pared T ¡ . Pero en particular éste último se
comporta como el dado en (27) para t---+ O, y como la constante dada en (28) para t---+ oo. En
la figura 5 se muestra la solución numérica junto con las dos soluciones asintóticas.
4.o~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
- r
f
h
µU
3.0
2.0 ~
'', Rayleigh
',,,
........
1.0 ---- ~ ................ ___ ....
----:~~~~------
· Couette -
--------- ------------
o .o ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
6
que ha de resolverse con la condición inicial u (y , z, O) = uo (y, z ) y las condiciones de contorno
e
u (y, z, t) =o en el contorno (y, z ) =o.
El contorno C (y , z ) = O proporciona la longitud característica D, de modo que z e y son del
orden de D. A su vez, con pg (t) conocido, se tiene su orden de magnitud, que llamaremos Pfe, y
el tiempo característico del problema te . Si llamamos Ue al orden de magnitud de la velocidad
característica debida al gradiente de presiones, el orden de magnitud de cada uno de los términos
de (29) es
(30)
En este caso la ecuación (30) se reduce al caso del movimiento estacionario en tubos
(33)
B. Si, por el contrario, el tiempo característico, te, es pequeño frente al de difusión viscosa,
D 2 /v, el término viscoso de (30) es despreciable frente al no estacionario. El término de presiones
es ahora tan importante como el no estacionario, de modo que la velocidad característica es
(34)
8u
p Bt =Pe (t), (35)
7
El gasto volumétrico por el tubo es
donde
Qo = j uo (y, z) dydz, (38)
~
es el gasto volumétrico inicial, I: es la superficie encerrada por el contorno del tubo C (y, z) =O
y A rv D 2 su área.
La solución (36) no cumple la condición de velocidad nula en el contorno, debido a que se han
despreciado los términos viscosos en los que intervienen las derivadas con respecto a z e y. Cerca
de la pared del tubo donde han de imponerse las condiciones de contorno los efectos viscosos
en una región de espesor característico ó del orden de la distancia de penetración de los efectos
viscosos durante el tiempo te. En efecto, si en (30) cambiamos D por ó, los efectos viscosos son
del orden de los no estacionarios si ó rv ~· Los efectos viscosos quedan restringidos a una
capa delgada cerca de la pared del tubo de espesor ó « D, que se denomina capa límite. Fuera
de esta región la velocidad es la dada en (36). Puesto que el perfil de velocidades u - uo no es
uniforme dentro de la capa límite, el error que se comete al calcular el gasto volumétrico Q - Qo
es del orden de UcÓD, muy pequeño frente a
8
Lección 13. Movimientos casi unidireccionales de fluidos
incompresibles. Efecto de la entrada.
1 Int roducción
En esta lección analizaremos el movimiento en conductos cuya sección varía con x. También
analizaremos la región a la entrada de un conducto que toma líquido de un depósito donde la
presión motriz P = p + pgz es constante, P = Po, y la velocidad prácticamente nula. Los
distintos regímenes van a depender del número de Reynolds en el tubo.
Sea un conducto cuya sección transversal sufre variaciones del orden de ella misma en
distancias L a lo largo conducto muy grandes frente a la dimensión característica transversal
De, y cuya línea media tiene un radio de curvatura también grande frente a De. En estas
condiciones las componentes transversales de la velocidad son pequeñas frente a la componente
longitudinal, como se deduce de la ecuación de la continuidad.
(1)
ou Bu Bu Bu __ 18 (p + pU)
2
8 u (8 2
u+ 88 u)
2
(3)
at +U u X +Vay + W8 Z
~
!=:l -
.
p
~
8X + V8 X 2 +V 8 y 2
'-v-'
Z
2 '
1
donde t 0 es el tiempo característico de variación de la velocidad en flujos no estacionarios. Los
términos de una cualquiera de las componentes transversales de la ecuación de cantidad de
movimiento son
av av av av __ ~a (p + pU) 82v 2
v a2 v)
at +U ax+ V 8y + W az - p ay + Vax 2 +V ay 2 + az2
(a (4)
'-_,.-' "-.,--' ~
vr/to v~/Dc (6..p)r/pDc vvr/L2 vvr/D~
Dado que L > > De, en los términos viscosos se pueden despreciar las derivadas segundas con
respecto a x frente a las derivas segundas con respecto a y y con respecto a z.
A la vista de los órdenes de magnitud de los diferentes términos de las ecuaciones (3) y ( 4),
nos encontramos con distintas posibilidades que analizamos a continuación.
Si D~/vto y uLD~/vL son pequeños, de las ecuaciones (3) y (4) se obtiene que los términos
de presiones deben ser del orden de
(5)
y por lo tanto
Dc)
(¡;
2
« i. (6)
Vemos que las variaciones transversales de presión son despreciables frente a las longitudinales
y las ecuaciones de cantidad de movimiento transversal se reducen a que la presión no varía
apenas transversalmente al tubo, mientras que la ecuación de cantidad movimiento (3) a lo
largo del tubo se reduce a
a(p + pU)
P.e= - ax ' (8)
El movimiento, por tanto, se comporta en cada sección del conducto como si éste tuviese
longitud infinita y sección constante igual a la local para cada valor de x.
(9)
2
donde el área A (rv n;) es función de X y el factor de forma r puede ser también función de X
si la sección cambia de forma.
¡x dx
(10)
(p + pU)xo - (p + pU) x = µQ (t) lxa A2 (x) r (x,ci ).
(11)
quedando
(flp)r
(flph rv
(Dc)
--¡;
2
« i. (12)
De nuevo, las variaciones transversales de presión son pequeñas frente a las longitudinales 1 .
Dado que los efectos viscosos y no estacionarios son despreciables, las ecuaciones de cantidad
de movimiento se reducen a
(13)
1
p + 2, pv 2 + pU = C. (14)
3
2.3 D~ / vt 0 » 1 y uLD 2 / vL pequeño o de orden unidad.
(16)
(LDc)
2
« 1, (17)
La ecuación de la cantidad de movimiento (3) a lo largo del eje x es, en este caso,
au (x, y, z, t) 1 a (p + pU)
(19)
at p ax
que puede integrarse transversalmente para darnos
dQ A( ) a(p + pU) = O
(20)
p dt + X ax '
ya que de (15) p + pU apenas varía transversalmente.
La presión, de (20) , es
(21)
Si los términos no estacionarios y convectivos son del mismo orden que los viscosos, las
variaciones transversales de presión siguen siendo pequeñas frente a las longitudinales, del orden
de (D / L ) 2 (o del orden de D / L si el tubo está curvado con un radio de curvatura de la línea
media del tubo del orden de L). Sin embargo, en este caso no es posible simplificar el problema
como en los casos anteriores ya que las componentes transversales de la velocidad intervienen
en la ecuación de la cantidad de movimiento a lo largo del eje x y, por lo tanto , es necesario
determinar estas componentes transversales, para poder determinar la velocidad u . Por lo
tanto, es necesario retener las pequeñas variaciones de presión transversal junto con las, también
pequeñas , velocidades transversales y resolver el problema completo. En los casos anteriores,
sin embargo, no es necesario determinar las component es transversales de la velocidad para
determinar la u o el módulo de la velocidad v .
4
3 Región de entrada a un conducto
Las ecuaciones que determinan el movimiento estacionario del líquido son la de continuidad
p =Po
~ X ~
2a
í Ps
t
Ü=O
( L
v = O y P = Po en x -r -oo, (24)
v = O en r = aF (x / a) , (25)
La última de las condiciones (26) expresa que la presión alcanza el valor del régimen de
Poiseuille aguas abajo de la entrada, pero debe añadirse una constante desconocida Pe que
representa la caída adicional de presión antes de alcanzarse el régimen de Poiseuille. Esta
constante debe determinarse como parte de la solución.
Examinaremos en primer lugar la región de entrada del conducto, con la escala a de su radio.
Para ello estimamos los órdenes de magnitud de cada uno de los términos de las ecuaciones de
cantidad de movimiento
pv. 'Vv= - \!P + µtlv . (27)
~ ~ '-y-/
pU'J/a f:::..eP/a µUo/a2
5
Dependiendo del valor del número de Reynolds Re = pUoa/ µse presentan varios casos límites
que veremos a continuación.
Cuando el número de Reynolds es muy pequeño frente a la unidad (Re « 1), los términos
convectivos de la ecuación (23) de cantidad de movimiento son despreciables frente a los viscosos,
quedando
o v
= - P + µ~v, (28)
que ha de resolverse junto con (22) y con las mismas condiciones de contorno dadas en (24),
(25) y (26).
v
La solución de (22) y (23) proporciona la velocidad y la presión P en la región de entrada
cuando el número de Reynolds es pequeño. En particular se obtiene el valor de (Po - Pe) que
es de la forma
Po - Pe = (3 µUo , (29)
a
donde (3 es un coeficiente de orden unidad que depende sólo de la forma geométrica de la entrada
al tubo. Obsérvese que el problema (22) y (28) es lineal. Si se cambia v por -v y (P - Po) por
(Po - P) se obtiene la solución al problema de la salida del flujo del tubo hacia la zona de donde
entraba. Por ello, cuando el número de Reynolds es pequeño la estructura del flujo en la región
de salida, es del mismo tipo que en la región de entrada.
De acuerdo con lo anterior, la caída de presión ~eP en la región de entrada es del orden de
µUo / a, orden de magnitud que se determina directamente de (28) al hacer que sus dos términos
\7 P y µ~v sean del mismo orden. Si comparamos ~eP con la debida al régimen de Poiseuille
~pP rv µUoL / a2 , se tiene
~eP µUo / a a
~pP rv µUoL/a 2 rv L «l. (30)
Como resultado se obtiene que la distribución de presiones es la dada en (26) con Pe = Po,
esto es
p =Ro_ 8µUox (31)
a2 )
Este resultado se puede mejorar en el caso en que a/ L no sea muy pequeño, determinando el
valor de (3 de la solución del problema (22) y (28) con las condiciones de contorno (24), (25) y
(26).
6
3.1.2 Reynolds grande
A las ecuaciones (22) y (33) no se le pueden imponer todas las condiciones de contorno (24),
(25) y (26) debido a que en (33) se han despreciado los términos viscosos, que son aquellos que
tienen las derivadas de mayor orden de la velocidad. Por lo tanto, las condiciones de contorno
que debemos imponer en este caso son: iJ =O y P =Po en x---+ -oo (24), junto con
iJ · ñ = O en r = aF (x /a) , (34)
Es decir, no se puede imponer la condición de adherencia (25) por despreciar los términos
viscosos, pero si se impone la condición (34) de tangencia a la pared. Tampoco se puede imponer
la condición de que la solución tienda a la de Poiseuille, ya que ésta está dominada por los efectos
viscosos que hemos despreciado en (33). Al pedir que el movimiento en el conducto de sección
constante sea unidireccional para x » 1, la velocidad no puede depender de x, como se deduce de
la ecuación de la continuidad, y la presión alcanzará un valor constante PE, a determinar, junto
con u (r). Para asegurar que la velocidad media es Uo (gasto volumétrico Q) debe imponerse la
condición
(36)
1 2
P+ pv =Po, (37)
2
donde se ha impuesto la condición de contorno (24). La condición (35) nos muestra que P es
uniforme aguas abajo (P = PE) y, por lo tanto, de (37) se deduce que la velocidad u también
es uniforme de valor
(38)
1 2
u=Uo y PE=Po-2PU0. (39)
(40)
7
El resultado (39) es así siempre que la toma esté redondeada para evitar el desprendimiento
de la capa límite. Este desprendimiento es inevitable a la salida del tubo, donde el líquido sale
en forma de chorro con una presión igual a la exterior.
2a
Ü=O t
L
Figura 2.- Esquema de la zona de adaptación de un perfil uniforme a la entrada hasta el perfil
parabólico de Poiseuille.
(42)
(43)
De (41) se obtiene Ve rv U0 a/ fa « Uo. En las ecuaciones (42) y (43) puede verse que de los dos
términos viscosos de cada una de estas ecuaciones, los más importantes son los correspondientes
a la difusión transversal, y haciendo que sean del mismo orden que los convectivos en (42) se
obtiene
pUoa 2
f,ª rv - - rv aRe y ~ªp rv pU'J, (44)
µ
lo que nos indica que la longitud de adaptación, fa, es del orden de aRe mucho mayor que a y
que la caída de presión ~aP en esta longitud es del orden de la presión dinámica pU(1 . De (43)
se obtiene
2 3
2 a
~tP rv PVefi rv pUo
2 ( Ve )
- oa rv
2 (
pUo oa ) rv
pU(1
Re3. (45)
~a Uo ~a ~a
8
Por lo tanto, los incrementos transversales de presión, f:l.tP, son despreciables frente a los longi-
tudinales, l!:l.aP, en la región de adaptación.
Las ecuaciones para obtener la solución en esta zona son la de continuidad (41) junto con las
de cantidad de movimiento simplificadas de acuerdo con los órdenes de magnitud anteriores
pu 8u + pv 8u = _ 8P + !!. ~ (r 8u) y
8P
8r =O. (46)
ax 8r 8x r 8r 8r
Las condiciones de contorno para este problema son
u = Uo y P = PE = Po - 21 pU02 en x = O, (47)
ya que en ésta escala (la de fa) , distancias del orden de a son despreciables frente a fa. El resto
de las condiciones de contorno son
Ya se disponía de soluciones aproximadas de las ecuaciones anteriores 2 , pero con los modernos
ordenadores se ha facilitado el problema de obtener la solución3 .
1.0 l
1
1
1
ri a 1
1
1
1
1 1
0.8 - - - - - - i - - - - - - - - - - - - - -t--- - - - - - - - - - - -
' 1
1 1
1 1
1 1
1
1
1
0.6
- _______ ,11_____________ _
1
1
l
1
1
1
0.4
0.2
o.o .___.___._...___.____.__,___.___,___.___.____.___,____.___,_____.__....___.__...__.__._.
O.O 0.4 0.8 1.2 1.6 2.0
u!Uo
Figura 3.- Distribución de velocidad u (x, r) a lo largo del conducto en la zona de transición.
9
7.0
6.0
./
V
.... /
/
:;; 5.0
e:;),, ,,? /
'-.. ~~
~
4.0
/
~
("\\
"'
3.0 ,,-· /
r/
2.0
~""/
I
1.0
o 0.05 0.1 0.15 0.2 0.25 0.3
~ / 2
x=µxpaU 0
Figura 4.- Distribución de presiones a lo largo del conducto en la región de entrada. La línea
discontinua corresponde a la distribución lineal de Poiseuille.
En la figura 4 puede verse que la caída de presión en la región de adaptación está perfecta-
mente definida y vale 2.25 veces la presión dinámica, ~pU6, con respecto a la presión total a la
entrada Po (y 1.25 veces con respecto a la presión estática) y corresponde al punto de corte de
la línea discontinua con x =O. Obsérvese que l6x es la caída de presión de Poiseuille.
Una solución aproximada que describe la distribución de presión a lo largo del conducto es
8µUoL
Po - Pa = 21 K (-)
L pUo +
2
a2 ' (50)
con
-)
K ( L = 2.25 - l.25e
-5.5 (L+VI) y L
- = -µL- (51)
pUoa2 ·
10
Lección 14. Análisis dimensionae
Las leyes de la física establecen relaciones entre cantidades relativas a un sistema físico.
Estas relaciones son también válidas entre las medidas de esas cantidades cuando se emplea un
sistema coherente de unidades. Un sistema coherente de unidades se obtiene partiendo de un
cierto número de unidades fundamentales (dos en cinemática, tres en mecánica) y calculando las
unidades derivadas mediante algunas de las leyes de la física en las que se suprimen los valores
numéricos.
Así, por ejemplo, la relación E = !mv 2 , que define la energía cinética de un cuerpo de masa
m que se mueve con velocidad v, nos permite calcular la unidad de energía [E] en función de la
unidad de masa [m] y la unidad de velocidad [v] mediante la relación [E] = [m] [v] 2 .
j=l
aj, (1)
Q' = Q rr
j=l
p
ujªj. (3)
(4)
*Lección originalmente escrita por el profesor Gregario Millán.
1
Por ejemplo, en el flujo estacionario de un líquido de densidad p y viscosidad µ alrededor de
una esfera de radio R, que se mueve con velocidad V respecto al líquido en ausencia de fuerzas
másicas, la fuerza D que el líquido ejerce sobre la esfera es
D= j [- pñ + ( T
1
• ñ)Jx da, (5)
Ee
cuando las unidades Uj se cambian a las Uj mediante (2) , con [Qi] = TI~=l [ujrij.
Se dice que la relación (4) es invariante si no cambia de forma al cambiar los tamaños de las
unidades fundamentales. Esto es, si al cambiar de Uj a Uj la relación (7) es equivalente a
Las leyes de la física no dependen de las unidades que se usen para medir las cantidades que
intervienen en ellas. Las ecuaciones que expresan estas leyes, y cualquier resultado obtenido
correctamente a partir de ellas, son invariantes frente a cambios de tamaño de las unidades
fundamentales. Desde un punto de vista matemático el requisito de invariancia es una condición
sobre la función f; esta función no puede ser cualquiera.
Examinemos ahora la dependencia de f en (7) de los factores ue. La relación (4) se dice que
es dimensionalmente homogénea cuando f en (7) es una función homogénea, de grado >.e, de
cada uno de los factores ue separadamente. Esto es
f (,.,, fl~i
1=1
u
•1; , .. ·,
1
/ª"' fl~~ u~·;) = I >-e f (ff Qiuj
1=1 1 j=l
•1;, .. ·, fIP Q~
j=l uj
•n;) ' (9)
Las relaciones dimensionalmente homogéneas son de interés porque aparecen con frecuencia
y son fáciles de identificar como tales. Por ejemplo, cada una de las ecuaciones de conservación
(6) es dimensionalmente homogénea ; todos los sumandos de cada ecuación tienen las mismas
dimensiones.
2
Veamos a continuación que cualquier relación dimensionalmente homogénea es invariante
frente a cambios de tamaño de las unidades fundamentales. En efecto, el teorema de Euler para
funciones homogéneas nos lleva a 1
Ufª
8 Í (
ue
IJP Qi a1j
j=l uj
l • • ·, IJP Q~ anj ) = A¡J,
j=l uj
f, = 1, · ··,p. (10)
Como TI~=l ue>-.e #- O, la transformada de la relación f (Qi, · · ·, Qn) = O, cuando las unidades
fundamentales Uj se cambian a Uj es f (Qi, · · ·, Q~) = O, de modo que la relación es invariante.
2.1 Ejemplo
Si ahora cambiamos la unidad de masa dividiéndola por pR3 , sin cambiar las otras unidades
fundamentales, pR3 pasará a ser la unidad; V/ R no cambiará; µR pasará a ser (µR) / (pR 3 ) =
µ/pR 2 ; D/R pasará a ser (D/R) / (pR 3 ) = D/pR4 . La relación queda
D ( V
pR4 = F l, 1, R' pR2
µ) . (16)
1
Este resultado se obtiene derivando (9) con respecto a ¡ y haciendo ¡ = l.
3
Por último, cambiando la unidad de tiempo de modo que V / R pase a ser la unidad, µ / pR2 pasa
2
a ser (µ/pR 2) / (V/R) = µ / pVR y D / pR4 pasa a ser (D/pR 4 ) / (V/R) = D /pV 2R 2. Por lo
tanto, la invariancia de la relación original implica que
(1 7)
Es decir, la fuerza sobre la esfera escalada con pV 2 R 2 depende sólo del número de Reynolds
pVR/µ:
D (pVR)
pV2R2 =F1 µ . (18)
3 Teorema 7r o de Vaschy-Buckingham
con p unidades fundamentales y con m =rango( aij) ::::; min( n, p), es equivalente a otra relación
entre n - m parámetros adimensionales que son combinaciones monomias de las n medidas
originales.
En el ejemplo anterior n = 5, p = 3 y m = 3.
Para demostrar el teorema supondremos que el menor construido con m las primeras filas y
las m primeras columnas de aij es no nulo: laij 1 =/:-O. Esta condición se impone por conveniencia;
siempre se puede satisfacer cambiando apropiadamente el orden de las filas y columnas de la
matriz . La demostración tiene dos pasos.
para k = 1, · · ·, n - m, los factores 7rk pueden hacerse adimensionales con una elección apropiada
de los exponentes Xki· Las ecuación de dimensiones de Qm+k es
p
[Qm+k] = íl [U1] ª=+k,j ' (22)
j=l
4
mientras que la ecuación de dimensiones del producto que aparece en el segundo miembro de
(21) es
de modo que las ecuaciones de dimensiones (22) y (23) coincidirán, y 7ík será adimensional, si
los m exponentes Xki satisfacen
m
L aijXki = ªm+k,j 1 J = 1, · · ·,p, (24)
i=l
que es un sistema de p ecuaciones lineales para las m incógnitas Xki (i = 1, · · ·, m). La matriz de
este sistema es la traspuesta de aij, cuyo rango es m. Por lo tanto las primeras m ecuaciones son
linealmente independientes y determinan las m variables Xki, mientras que las restantes p - m
ecuaciones son combinaciones lineales de las primeras m ecuaciones y se satisfacen automática-
mente si lo hacen las primeras.
Sustituyendo (21) en (4), con los valores de Xki obtenidos de (24), la relación original toma
la forma
(25)
(26)
Debido a la invariancia de Ji, al hacer este cambio de unidades fundamentales (26) toma la
forma
Ji (1, · · ·, l , 7í1, · · ·,1ín-m) =O, (29)
que es equivalente a
Í2 (7í1, · · ·, 1ín-m) =O. (30)
Ésta es una relación entren - m parámetros adimensionales, como queríamos demostrar.
5
En resumen, la relación invariante original (4), f (Q 1 , · · ·, Qn) = O, entre las medidas de
n cantidades se reduce a una relación equivalente (30), h (7r 1 , · · · , 'lrn-m) = O, entre n - m
parámetros adimensionales 7rk, cada uno de los cuales es una combinación de la forma:
7rk = Qm+kl rr
m
i=l
Q:ki. (31)
La matriz aij es
o 1 o
o 1 -1
aij = 1 -3 o (33)
1 -1 1
1 1 -2
y el determinante formado por las tres primeras filas y las tres columnas es distinto de cero 2
o 1 o
o 1 -1 = -1, (34)
1 -3 o
de modo que m = 3 en este ejemplo. Utilizando (21) tendríamos
(35)
y de (32) y (35),
(36)
Tomando logaritmos, o bien identificando los exponentes de M, L y T, se llega al sistema de
ecuac10nes
a1p = 1; -3a1p + a1v +ªIR= -1; -a 1v = -1, (37)
cuya solución proporciona a1p = 1, a1v = 1 y ªIR = 1, lo que significa que el parámetro
adimensional 7r 1 es
µ
(38)
pVR
(40)
2
Hay otros determinantes de 3 x 3 que son distintos de cero. Elegir uno u otro no cambia el número de
parámetros adimensionales, pero si sus expresiones. Compruebe el lector que los parámetros adimensionales que
se obtienen con dos elecciones distintas son combinaciones monómias unos de otros.
6
cuya solución es: a2p = 1, a2v =2y a2R = 2; siendo
D D
7r2 = pª2p va2v Rª2R = pV2 R2. ( 41)
Para la obtención de este resultado se han seguido los pasos de la demostración del teorema 7r,
construyendo la matriz aij y resolviendo los sistemas de ecuaciones (24) y (28). En la práctica no
se hace de este modo. El número de magnitudes dimensionalmente independientes, y cuáles se
utilizarán, para adimensionalizar a las demás, se determina inspeccionando las magnitudes que
intervienen. Así, en nuestro ejemplo, hay tres dimensiones: longitud, masa y tiempo, y podemos
elegir como magnitudes dimensionalmente independientes el radio de la esfera R, la densidad
p, la velocidad V. Estas tres magnitudes son dimensionalmente independientes porque sólo V
contiene el tiempo en su ecuación de dimensiones y sólo p contiene la masa, por lo que no hay
ninguna combinación posible de R, p y V que sea adimensional. Elegidas las tres magnitudes
dimensionalmente independientes, hay que obtener un número adimensional por cada una de
las magnitudes restantes µ y D. Estos números adimensionales se pueden construir fácilmente
teniendo en cuenta que todos los términos de una misma ecuación tienen las mismas dimensiones.
Así, por ejemplo, la viscosidad aparece en el término viscoso de la ecuación de cantidad de
movimiento y las dimensiones de este término, [µV/ R 2 ] , han de coincidir con, por ejemplo, las
del término convectivo, [pV 2/ R]. Por lo tanto el cociente (µV/ R 2) / (pV 2/ R) = µ/ pV Res un
número adimensional, lo que nos proporcionaría 7r1.
10 2 1
8 "-
1 1
6
"
CD 4
2
' ~~~
C -
D -
D
(tpV 2 )(fd 2 )
10 1
8
6
'"' ~
~
~
4
'~,
2
~ ~._.,,,., DISCO
,....,·- -- -- - - -- -- - - ·- - --
- .. - - - -· -.. -
10º
8 " ._
~
6
4
ESFERA/ -- -
.........
-~
-- -,.
l
2
2 4 68 2 4 68 2 4 68 2 4 68 2 4 68 2 4 68 2
-- 4
--
68
10º 10 1 10 2 10 3 10 4 10 5 10 6
Re=p Vd/µ
Del mismo modo, el número adimensional para la fuerza D se puede obtener de la ecuación
que la determina: [D] = [pR 2 ], donde las dimensiones de la presión se obtienen de la condición
7
[p/ R] = [pV 2 / R], que resulta observando que el término convectivo y el de fuerzas de presión
en la ecuación de cantidad de movimiento tienen iguales dimensiones. Así pues, [D] = [pV 2 R 2 ]
y el cociente D / pV 2 R 2 es el número adimensional 7r 2 .
El número adimensional
D
(43)
es equivalente a 7r2 y se denomina coeficiente de resistencia Cv. De acuerdo con los resultados
del análisis dimensional, este coeficiente de resistencia es una función del número de Reynolds
pV R/ µ. En la figura 1 se han representado los resultados experimentales del coeficiente de
resistencia de una esfera y un disco, situado con su plano perpendicular a la corriente incidente,
ambos de diámetro d = 2R. Obsérvese que el número de Reynolds que aparece en la figura 1
está basado en el diámetro d.
8
Lección 15. Semejanza física~
1 Semejanza física
Permite establecer analogía entre dos fenómenos entre los que existe semejanza física, de
modo que por una simple proporcionalidad podemos predecir cualquier medida posible en un
fenómeno a partir de la medida paralela hecha en el otro fenómeno. Constituye la base de
experimentación con modelos.
Permite, además, como veremos, la reducción del número de variables que determinan un
fenómeno físico.
Sea un fenómeno físico, cuyo conocimiento sea equivalente al de los valores den magnitudes epi,
funciones de la posición x y del tiempo t, determinadas por un sistema de ecuaciones diferenciales
(5)
Las magnitudes x', t', cp~ y Jj son adimensionales y, por lo tanto, independientes del sistema de
unidades de medida empleado.
Puesto que en el sistema anterior las ecuaciones son dimensionalmente homogéneas, cada una
de ellas puede hacerse adimensional multiplicándola por un factor Hp de la forma
HP 1Jatf3 /1
= .{,O O i.{J10 · · · i.{Jno
'Ynj Ó1
10 · · ·
JmO'
Órn (6)
*Lección originalmente escrita por el profesor Gregario Millán.
1
con lo que el sistema (1) se transformará en
(7)
(8)
(9)
en donde los parámetros .eo, to, <¡Jio y fjo, aparecerán agrupados en forma de coeficientes adi-
mensionales
(10)
Sea q el número mínimo de estos coeficientes independientes entre sí y consideremos el conjunto
de fenómenos caracterizados por el sistema (7) a (9), para un sistema dado de valores (10). Tales
fenómenos se llaman físicamente semejantes.
Supongamos que se conocen las funciones lpiA que verifican el sistema (1) con las condiciones
iniciales (2) y las de contorno (3) en un caso particular A. Elijamos los valores característicos
RoA, toA, lpiOA y fjoA, y formemos con ellos los coeficientes característicos (10) . Los valores de
las funciones <¡JiB para otro caso particular B, con valores característicos RoB, toB, lpiOB y fjoB,
que den iguales valores que A para los coeficientes (10), se deducirán de los correspondientes al
x x
caso A sin más que asignar al punto A y al instante t A el punto B y al instante t B tales que
_, RoB _, toB
XB = ¡¡--XA y tB = -tA, (11)
{..OA to A
y hacer
_, t B) = --<piA
lpiB (XB, lpiOB (XA,
_, t A) · (12)
lpiOA
(13)
(14)
(15)
y puesto que
(16)
y
fjB (X'e,t~) = fjA (iA,t~) = fj (X',t'), (17)
2
siendo xA = x~ = x' y tA = t~ = t' , resulta el sistema de ecuaciones y condiciones iniciales y
de contorno siguientes:
L~ ( VJ~, f j , X', t' , ApA ) = O, (18)
: + V · (pv) = O, (22)
OV ...
p 8t + pv .
\7 __.
V V = -
\7
V p+
\7
V . T
I
+ p!__.m' (23)
( ~)
voto
p,oi! + p'V' · V'V' =
8t'
- (~) V'p' +(~)V'· (T')' + (l!ofmo)
pov5 povol!o v5
Plm , (26)
( ~)
voto
p,oe' + p'V' · V'e' =
8t'
- (~) p'V' ·V'+ (
poeo
koTo ) V'· (k'V'T') + ( µovo ) </>v, (27)
poeovo.eo poeo.eo
Por lo tanto , las condiciones necesarias y suficientes para la existencia de semejanza física son:
a) Semejanza geométrica.
3
3 Parámetros adimensionales en el movimiento de fluidos
St = !!!____ (28)
voto
Este número mide la importancia relativa del término no estacionario respecto al término con-
vectivo en las ecuaciones (24) a (26). También puede escribirse como el cociente entre el tiempo
de residencia, tr = fo/vo, u orden de magnitud del tiempo que una partícula que se mueve a la
velocidad característica, vo, "reside" en una región cuya longitud es fo, y el tiempo característico
t 0 . En los movimientos periódicos, el tiempo característico to es el inverso de la frecuencia.
El número de Froude mide la importancia relativa de las fuerzas gravitatorias respecto al término
convectivo. Se generaliza el número de Froude para fuerzas másicas que no sean las gravitatorias
escribiendo
v2
0
F r = -0f • (31)
m0.{.0
El número adimensional
Po
--2, (32)
Povo
representa el valor relativo entre la presión, Po, y la presión dinámica, povfi. Indica la influencia
de los efectos de compresibilidad del fluido en el caso de los gases, y es el parámetro característico
de la cavitación en el caso de líquidos. Algunos autores le denominan número de Euler. Este
número adimensional puede escribirse en la forma ---
Po Po ªB
--2 - --22' (33)
PoVo Poªo vo
Po 1
(34)
PoªB = ::Y'
y por lo tanto se precisa la igualdad de la relación de calores específicos en ambos fluidos.
Aparece, por tanto, un nuevo número adimensional, la relación de calores específicos
e
'= -1!...
Cv
(35)
4
El otro número adimensional que aparece, al descomponer el número de Euler, es el número de
Mach
M = vo. (36)
ªº
Un movimiento se dice que es subsónico cuando el número de Maches menor que la unidad y
supersónico cuando es superior a la unidad.
y la combinación adimensional cpTo / eo, que, para el caso de un gas perfecto y caloríficamente
perfecto, es la relación de calores específicos: epTo / eo = T
que es una combinación del número de Reynolds, del número de Mach y del número adimensional
a5/e 0 , que para un gas perfecto y caloríficamente perfecto, vuelve a ser una función de la relación
de calores específicos: a5 / eo = 1 (1- 1).
A estos números adimensionales que aparecen en las ecuaciones adimensionales habría que
añadir los correspondientes a las condiciones iniciales y de contorno escritas, también, en forma
adimensional.
5
4 Cálculo de magnitudes compuestas
A menudo interesa calcular, además de las magnitudes que dependen del punto y del instante,
otras magnitudes compuestas, como pueden ser la fuerza resultante sobre una superficie, o el
flujo de calor a través de una superficie, etc. Por ejemplo, si se trata de calcular la resultante
en la dirección Xi de las fuerzas de presión sobre una superficie .E, escribiremos
siendo .E = R5.E', dCJ = R5dCJ1 y p = pop', y por lo tanto .E', p' y dCJ' son magnitudes adimensio-
nales.
pi = -
CFi = ----¡j2
Po.{. o
J p1nidCJ t , (45)
:E'
·del que se deduce la fuerza en cada caso particular sin más que multiplicar su valor por el
valor de p 0 f5 correspondiente a ese caso. A menudo se sustituye el coeficiente anterior por otro
referido a una superficie característica, por ejemplo la superficie mojada, o su proyección sobre
el plano normal a ni, y la presión por la presión dinámica ~pov6, pero el principio es el mismo.
Análogamente pueden definirse coeficientes de otras muchas magnitudes fluidas.
La semejanza física permite a menudo ensayar sobre modelos a escala y utilizar los resultados
para predecir valores en el fenómeno a escala natural. Sin embargo, la igualdad simultánea
de todos los coeficientes adimensionales es prácticamente imposible de realizar, por lo que, en
general, se dirige la atención a aquellos más influyentes en el fenómeno estudiado, obteniéndose
diversos tipos de semejanza física parcial. Así por ejemplo, en el estudio de la resistencia
aerodinámica, los números adimensionales más importantes son el número de Reynolds, si la
velocidad no es muy alta, y éste y el de Mach para velocidades grandes, o simplemente el
número de Mach en muchas cuestiones relacionadas con la resistencia de onda. El contraste
experimental decidirá, en cada caso, sobre la legitimidad de la aproximación realizada.
6
Lección 16. Lubricación fluidodinámica. Caso bidimensional.
1 Introducción
Se conoce desde muy antiguo que la presencia de una película de lubricante entre dos super-
ficies que se mueven una respecto a la otra reduce apreciablemente la fricción entre ambas.
A primera vista se podría pensar que el problema principal de la teoría de la lubricaci&n con-
siste en predecir la fricción resultante para una configuración dada. Sin embargo, el problema
real es muy diferente. Las películas de lubricante se encuentran, normalmente, entre dos superfi-
cies sólidas sometidas a fuerzas que tienden a juntarlas. Para soportar esta fuerza, sin que exista
contacto entre ambas superficies, la película de lubricante debe desarrollar un esfuerzo normal
que, salvo casos triviales, es la parte más significativa del tensor de esfuerzos. Esta capacidad
de soportar esfuerzos normales está generada por la propia viscosidad del fluido.
Hay muchos tipos de cojinetes lubricados con fluidos, pero básicamente se dividen en dos:
los cojinetes de empuje, también llamados hi<lrostáticos, y los cojinetes hidrodinámicos.
Pe
Los cojinetes de empuje son, en principio, los más simples. La capacidad de carga de la
película de fluido se crea y se mantiene por medios externos. La superficie que soporta la
carga está "flotando" respecto al resto del sistema y, normalmente, no hay movimiento relativo
entre las superficies, aunque puede haberlo. La figura 1 representa un esquema de este tipo de
cojinetes.
Los cojinetes de empuje con lubricante líquido se utilizan para soportar sistemas muy pesados
como es el telescopio de Monte Palomar con 500 toneladas de peso. Los gases se usan como
lubricantes en sistemas poco pesados como puede ser un giróscopo.
1
movimiento relativo consiste en el desplazamiento de una superficie sobre otra; otras veces el
r:iovimiento relativo es un desplazamiento normal de ambas superficies (a veces pulsante); y en
general es un movimiento transversal y longitudinal de una superficie relativa a otra, como es el
caso de cojinet es formados por un eje que gira en el interior de una carcasa.
En esta lección empezaremos analizando el caso bidimensional para mostrar , mediante uri
ejemplo sencillo, las simplificaciones que se hacen para después generalizarlo al caso t ridimen-
sional.
Vamos a analizar aquí el movimiento que toma un líquido que separa dos superficies sólidas
de dimensión infinita en la dirección z normal al plano del dibujo. Una de las superficies es
plana (plano x - z de la figura 2) y se mueve con velocidad constante Uo en la dirección del eje
x. Admitiremos que la otra superficie puede desplazarse en la dirección del eje y de modo que
la distancia que la separa del plano x - z es h (x , t) , tal como se indica en la figura 2.
Supondremos que h (O, t) rv h (L, t) rv [h (O, t) - h (L, t)] « L, y, para abreviar, al orden de
magnitud de h (x, t) le denominaremos he.
2
El orden de magnitud de las variaciones de velocidad u a lo largo del eje x
~x U rv ju (O, y , t) - U (L , y , t) j ,
son del mismo orden que la propia velocidad Ue, ya que del principio de conservación de la masa
se tiene
u (O, y, t) h (O, t) "'u (L , y , t) h (L, t),
por lo que
u (L, y, t) - u (O, y, t) ~xu h (O, t) - h (L, t)
~~~~~~~-rv~- rv rv 1
u(O,y,t) Ue he .
Del mismo modo, el orden de magnitud de las variac10nes de velocidad u a lo largo del eje y
~y U rv U (X, Ü, t) - U (X, h, t) 1 ,
1
es también del orden de Ue, ya que u (x, O, t) = Uo y u (x, h, t) = O. Si U0 fuese nula (no hay
arrastre de la placa) u sería nula en y = O e y = h y, en este caso, la velocidad Ue es debida a la
variación de h con t, o a la diferencia de presiones impuesta Pe - p 8 •
Análogamente, las variaciones de velocidad v a lo largo del eje y son del orden de la propia
velocidad transversal, que denominaremos Ve, ya que se anula en y = O y vale ah/ at en y = h.
Conocidos estos órdenes de magnitud, la ecuación de la continuidad nos proporciona
~ au av
\l . V = ax + ay = Ü,
Si ahora escribimos las ecuaciones de la cantidad de movimiento según los dos ejes, con
P = p+ pU la presión motriz (con lo que admitimos que las fuerzas másicas derivan del potencial
U) y con µ constante por considerar la temperatura constante, tenemos:
au
at
au
+ U ax
au
+ V ay = -
1 aP
pax
(a
+ V ax 2
2
u+ aayu)
2
2 '
2 2
av av av 1 aP (a v a v)
at +U ax+ V ay= -p ay +V ax 2 + ay 2 ;
donde los órdenes de magnitud de cada uno de los términos de la ecuación de cantidad de
movimiento según el eje x son los siguientes:
donde puede observarse que el término viscoso más importante es a 2u/ ay 2 . Refiriendo todos los
términos al más importante de los viscosos se tiene
au au au IaP
- +u-+v-=-
at ax ay p ax
~ '-v--' ~
h~/vtc pUch~/µL (~LP)h~/ µUcL
3
En la lubricación, salvo en algún caso excepcional, el número de Reynolds efectivo es mucho
menor que la unidad como consecuencia de que he/ L « 1, por lo tanto, para que los efectos
viscosos sean dominantes, es necesario que
pU h 2
_e_e « 1 y que
h2
_e « 1,
µL vte
de modo que la ecuación de cantidad de movimiento en la dirección del eje x queda reducida a
donde el gradiente de presiones según el eje x, tan importante como el que más, es del orden
A p rv µUeL
L.l.L h2 .
e
Resulta entonces que las variaciones espaciales de presión motriz en el sentido transversal son
despreciables frente a las que vamos a encontrar a lo largo de la capa, por lo que en primera
aproximación la presión motriz no varía transversalmente, de modo que diremos que P = P (x, t)
y las ecuaciones quedan reducidas a
(1)
u (x, y, t) = 1µ 8P
ax y (y - h) + Uo ( 1 - h
Y) , (2)
2
u (x, O, t) = Uo en y = O y u (x, h, t) = O en y = h.
4
Si utilizamos ahora el principio de conservación de la masa en forma integral aplicado a un
volumen de control (por unidad de longitud perpendicular al plano del movimiento) formado
por la parte de la película situada entre x y x + dx (zona sombreada de la figura 2), se tiene:
oh
dx ot + q (x + dx, t) - q (x, t) = O,
de modo que
oh oq _
8t +ax - 0' (3)
siendo
fh ~8P ~h
q= JO U(X' y' t) dy = - 12µ OX + -2-' (4)
resultando
oh a ( h 3 8P Uoh) (5)
8t + 8x -12µ& + -2- =o,
que es una ecuación en derivadas parciales de segundo orden para determinar P (x, t), que se
denomina ecuación de Reynolds de la lubricación 1 . La ecuación (5) debe integrarse con las
condiciones de contorno
p (o, t) = Pe y p ( L' t) = Ps. (6)
Las condiciones de contorno (6) se justifican mediante el análisis de las regiones de entrada y
salida de la capa líquida. El análisis de estas regiones, en cuanto a los órdenes de magnitud, es
análogo al efectuado en la lección 13 para la región de entrada en conductos. De los resultados de
esta lección se tienen dos casos bien diferenciados. Cuando el número de Reynolds Re= Uchc/v
es pequeño, la caída de presión en la región de entrada es del orden
en una zona de longitud característica del mismo orden que el espesor he. Esta caída de presión
es muy pequeña comparada con la caída de presión a lo largo de la película líquida, que es del
orden
A p rv µUcL
U L h2 .
e
Cuando el número de Reynolds Re= Uchc / v es grande frente a la unidad (pero Uch~ / vL «
1), hay una longitud de adaptación LE del orden de hcRe que es grande frente a he, pero pequeña
frente a L, ya que
1
Esta ecuación se podría obtener también de la ecuación de la continuidad en forma diferencial 8u/ 8x +
8v/8y = O, que proporciona v = - J~ (8u/8x) dy, y de la condición v = 8h/8t en y = h se obtiene 8h/8t =
-J: (8u/8x)dy , que es idéntica a (5) si se sustituye el valor de u(x,y,t) dado en (2).
5
La caída de presión en esta región es del orden de pu;, que t ambién es pequeña comparada con
la caída de presión a lo largo de la película líquida
D.EP pU-;_ Uch~
D.LP rv µUe Ljh e2 rv vL « l.
Cuando el número de Reynolds es alto , el líquido se descarga en forma de chorro y allí la presión
es igual a la exterior, P8 en este caso.
Obsérvese que la ecuación (5) es lineal en P y que no se necesitan condiciones iniciales puesto
que no aparece oP/at en la ecuación y h (x, t) es conocida.
La solución de la ecuación (5) con las condiciones de contorno (6) proporciona la distribución
de presiones en la capa de lubricante y, por lo tanto, la de velocidades u (x, y, t) dada en (2).
Conocidos estos valores se pueden determinar las fuerzas ejercidas por el lubricante sobre las
superficies sólidas. La componente de la velocidad transversal v (x, y, t) se puede determinar
de la ecuación de la continuidad 2 , pero no es necesario calcularla porque no interviene en la
determinación de las fuerzas.
La fuerza (por unidad de longitud ya que el ejemplo es bidimensional) que el lubricante ejerce
sobre la superficie sólida y = h (x, t) se obtiene de
donde se ha supuesto que actúa una presión Pa sobre el resto de la superficie del patín, fuera de
la capa. La normal ñ está dada por
ñ
(ah/ox) i
= ----;===== ~
- J ah-:- --!
J1 + (ah/ax) 2
-'l
ax
-J
'
donde i y Json los vectores unitarios en las direcciones de los ejes x e y respectivamente. A su
vez
(9)
En la ecuación (10) el término proporcional a µ del integrando es mucho menor que las dife-
rencias de presión, y por lo tanto, la fuerza normal a la capa, Fy (t), es debida a las presiones
exclusivamente, aunque la superficie no sea plana ni esté orientada en la dirección J. Obsérvese
que la fuerza en la dirección del movimiento, debida a la presión y a la viscosidad, es mucho
menor que la componente normal Fy (t). En efecto
4 Ejemplos
Supongamos el caso en que el espesor de la película líquida sólo varía con x, que la variación
del potencial de las fuerzas másicas a lo largo de la película es nulo, y que las presiones a la
entrada y salida son iguales Pe = P8 = Pa. En éste caso el movimiento del líquido está generado
por el arrastre de la placa móvil de velocidad Uo.
El criterio para que los efectos viscosos sean dominantes es, en este caso,
Ll h2
~«l
vL '
y la sobrepresión generada en la capa líquida, de la ecuación de cantidad de movimiento, es
µUoL
fl LP rv ---¡;:2 .
e
h3 a(p - Pa) Uo h
-12µ ax + -2- = q,
donde q es el gasto volumétrico (desconocido) a través de la capa, que consta de dos sumandos.
El primero, proporcional al gradiente de presiones, es el flujo de Poiseuille, y el segundo el de
Couette.
7
Integrando la última ecuación se obtiene
Uo foL h-2dx
(12)
q = 2 foL h-3dx.
(p - Pa) h5 ( 1- f3) f (1 - f)
6µUoL = 1+{3 [1 - (1-{3)f] 2 .
Con el resultado anterior se puede determinar la fuerza sobre la superficie situada en y = h (x)
utilizando las expresiones (9) y (10). Se obtiene
Fyh5 _ -1 [
6µUoL2 - (1 - {3) 2 ln ({3)
(1 -{3)]
+ 2 1 + {3 '
Fxh5 ho ( 1 ) [9 ( 1 - {3) ]·
6µUoL 2 =L 1 - {3 1 + {3 + 5 ln ({3)
1.8 \
1.6 \
~
~ 1.4 \
~
<:::.
1.2 \
\C
:::t
\
~
.........
<:::. 0.8 \
' "'
~
..... 0.6
~
0.4
~ .........._
0.2
o
-- ~-
P= h 1l h o
Figura 3.- Fuerza que soporta el patín en el caso de una variación lineal de h con x. Velocidad
de deslizamiento Uo. La diferencia de presión impuesta es nula.
8
4. 2 Caso en que h = h (x), sin arrastre de la placa.
¡x dx
P - Pa =Pe - Pa - 12µq Jo h 3 , (13)
y el gasto volumétrico es
Pe -pa
q= L . (14)
12µ fo h- 3 dx
p - Pa - 1 - (32 { 1 - [l - (1 - (3) f J 2 . }
[1 - (1 - (3) f J (1 - (32)
2
Pe - Pa -
Las componentes de la fuerza, en el supuesto de que la presión Pa actúe por la parte exterior
del patín, son
Fx ho ( 1 ) Fy 1
(Pe - Pa) L = L 1 + {3 Y (Pe - Pa) L = 1 + {3'
donde (3 = hi/h0 . La componente Fy de la fuerza sobre el patín se representa en la figura 4.
9
~
0.9 ~
"""'
~
~
l::I
-........
~
;;;...,
0.8
0.7
"'' '~ "
...........
~ .........
0.6
~ "-..
~ r---.,_
0.5
O.O 0.1 0.2 0.3 0.4 0.5 0.6 0.7 0.8 0.9 1.0
P=h1 l ho
Figura 4.- Fuerza que soporta el patín en el caso de una variación lineal de h con x. Velocidad
de deslizamiento Uo nula. La diferencia de presión impuesta es Pe - Pa·
4.3 Caso en que h = h (x, t), sin arrastre de la placa ni diferencia de presiones.
La sobrepresión que se genera en la capa líquida a causa del aplastamiento es tal que
Si suponemos que no hay variación de las fuerzas másicas a lo largo de la película, la ecuación
(5) se reduce a
8h _ !.___ 8 (p - Pa)] - O [!!___
8t 12µ ax ax - '
a integrar con las condiciones de contorno p - Pa =O en x =O y x =L. Integrando una vez se
tiene
h3 8 (p - Pa) lox 8h
12µ X
--
=-
O 8t
a
- dx + q = I (x, t) + q (t),
10
·i
' (
donde I (x, t) = - fax ~~dx conocida y q (t) es una función del tiempo a determinar. Integrando
de nuevo se obtiene
¡x
dx ¡x
I (x, t) dx
(1 5)
p - Pa = -12µq (t) lo h3 (x, t) - 12µ lo h3 (x, t) '
y q (t) se obtiene de
q (t) =
J0L I (x, t) h- 3 (x, t) dx (16)
J0L h- 3 (x, t) dx
¡x oh dho
I (X' t) = - 1o ot dx = -X dt '
Ldho
q (t) = 2 dt '
(p - Pa) h~ (t) X ( X )
6µL 2 (dh 0 /dt) = -L 1 - L ·
11
Lección 17. Ecuación de Reynolds de la lubricación.
1 Introducción rt.02.
Supongamos que dos superficies sólidas curvadas están en movimiento relativo separadas por
una capa fluida muy delgada (véase figura 1).
1
donde y es la distancia a la misma. La ecuación de la otra superficie es y = h (a, (3, t ), y la
película fluida ocupa la región O < y < h. Supondremos, además, que esta segunda superficie,
que puede ser deformable, se mueve respecto a la primera con una velocidad de componentes
U 0 (a,(3,t ), Up (a,(3,t) y 8h/8t en las direcciones a, (3 e y. Las funciones h, Ua y Up, están
determinadas por el movimiento de la superficie móvil, y se supondrán conocidas a la hora de
analizar el movimiento del fluido. Por último supondremos que la velocidad característica Ue
en el sentido longitudinal a la película y el espesor he característico de la capa satisfacen las
relaciones
2
PeUeh
_ __
h2
e << 1· _e << 1·
he << 1
µL ' vte ' L '
siendo L la longitud característica de la película y Pe el valor característico de la densidad del
fluido. En estas condiciones puede demostrarse que las ecuaciones de cantidad de movimiento
toman la forma
-~ 8P + µ 8 u 0 =O
2
(1)
g a 8a 8y2 ' [D.M. 'fik ~ ti.e ~1"
2
+ µw =o,
1 8P 8 up
-;;8!3 (2)
que expresan el equilibrio entre las fuerzas de presión y de viscosidad por unidad de volumen. En
estas ecuaciones P es la presión motriz (P = p + pU) en el caso de líquidos y la presión estática
(P = p) en el caso de gases. Además g 0 da y g pd(3 son los elementos diferenciales de longitud en
las direcciones a y (3 (véase figura 2). Los parámetros métricos g a y g f3 son funciones conocidas
de a, (3 y el tiempo t.
proporcionan
1 8P y
ua=-- - y(y-h)+Uª-h' (3)
2µga 8 a
1 8P y
up = - - -y (y - h) +U p-. (4)
2µg {3 8(3 h
2
Los flujos volumétricos q a y q f3 a través de secciones transversales a la película en las direc-
ciones a y (3, por unidad de longitud en las direcciones (3 y a, respectivamente, son
(5)
ca-daf
(6)
!j V
pg a9 (Jdadf3dy- j
A(a)
pu a9 (Jd/3dy+ j
A(a+da)
fYU a9 (Jd/3dy-
d
dt
J pg a9 {3dad(3dy
8 (
= dad(3 ot {h )
g a9 {3 Jo pdy = dad(3
8 (9a9{3Ph)
ot ,
V
mientras que usando las definiciones anteriores de q ª y q f3, las integrales extendidas a las super-
ficies toman la forma
J
A(a)
PUa9{3df3dy = 9{3df3 j
A(a)
PUady = 9{3Pdf3 j
A(a)
Uady = pqag{3df3,
3
donde se ha supuesto que la densidad p1 no varía a través de la película.
es decir
8(9a9{3Ph) + 8(pqag13) + 8(pq13ga) =O
8t ªª 8{3 .
(7)
c.~'P'l~C:.tfr... k
(8)
e&.. .M4-'l~ f ::cte
Los gastos volumétricos por unidad de longitud qª y q13 están dadas en las ecuaciones (5) y (6),
respectivamente.
(9)
El flujo qn es
qn = qana + q13n13,
donde q 0 y q13 están dados en las ecuaciones (5) y (6), respectivamente. El gasto volumétrico,
qn, será nulo si el contorno C (a, {3) = O está tapado, por lo tanto
1
En el caso de líquidos la densidad es constante, pero en el caso de gases es necesario que la temperatura
no varíe transversalmente a la capa para que la densidad se mantenga constante, también transversalmente a la
placa.
4
3 Caso de gases. Ecuación de la energía 2~. 02.
Al obtener la ecuación (7) de Reynolds para los gases, hemos supuesto que la densidad no
varía con y (transversalmente a la película). Esto puede justificarse por medio de la ecuación de
la energía:
pe,, ( ~~ + iJ · \JT) = - p\J · iJ +'V· (k'VT) + r/>v ,
donde los 6rdenes de magnitud de los distintos términos , referidos al de conducción, son
,c.;(
"-A
donde se ha supuesto que todos los incrementos de temperatura, longitudinales, transversales y
temporales son del mismo orden 2 D..T.
Dado que el número de Prandtl, Pr = µep / k , y la relación de calores específicos, 1 = ep/ Cv,
son cantidades de orden unidad, el primer miembro de la ecuación de la energía es despreciable
frente al de conducción ya que tanto h~/vte como PeUeh~/ µL son pequeños frente a la unidad.
De acuerdo con estos resultados, la ecuación de la energía se reduce a
D..T ,......,e 2
p Ueh e<<l
__
Te µL '
lo que implica incrementos de temperatura pequeños frente a la propia temperatura. Análo-
gamente le ocurre al término de disipación viscosa, ya que su contribución al incremento de
temperatura es
D..T
- rv -
U'; rvM 2 «1
Te CpTe e '
por ser el número de Mach, Me , pequeño frente a la unidad en este tipo de movimientos.
Dado que los incrementos de temperatura no van a ser, en general, pequeños frente a la propia
temperatura (y si lo son, la temperatura apenas varía), la ecuación de la energía se reduce a
la conducción de calor, que a su vez puede simplificarse porque los gradientes longitudinales de
temperatura son despreciables frente a los transversales. Por lo tanto se tiene
[e . ~a..
~
ay (kªT)
ay =O
'
.'4..;t2.í-vvA
~~t:.fc~
y si k es constante, se obtiene
lT = T0 + (T1 - To)*' 1ú:--.p0 .t.. t.._,...,..:;twa.5
siendo To la temperatura de la superficie en y = O y T1 la temperatura en y = h.
2 Si,
por ejemplo, los incrementos de temperatura transversales a la capa (i:l.T)T fuesen muy p equeños frente a
los longitudinales, (i:l.T)L, la temperatura apenas var iaría con y, de m odo que T sería constante con y en primera
aproximación y, entonces, la densidad también sería constante con y , ya que la presión lo es.
5
Como la presión no varía con y, la variación de la densidad con la coordenada transversal a
la capa está dada por
p 1
p=--
RgTo 1 + ( T1 To- To ) 'J1... '
h
r
Jo
pdy = _P_ {h _ _d_y_ _
R 9 To Jo 1 +(Ti-To)
'J1...'
To h
{h pudy
Jo
= _ P_ r
R 9 To Jo 1 + (T1-To)
udy
'J1...
.
To h
[c . ~AACJ~S
(10)
Cf-Sl.S
í:~ .
6
Lección 18. Cojinetes cilíndricos.
1 Introducción 2B.02
Ri = (R - h) 2 + e 2 + 2e (R - h) cosB.
Desarrollando esta expresión y despreciando términos del orden de e2 , h 2 , eh, todos ellos del
orden de (R - R 1 ) 2 , y teniendo en cuenta que R 2 - Rr ~ 2R (R - R 1 ), resulta finalmente
1h (B) = (R - R1) (1 + ccosB) /
donde e= e/ (R - R 1 ) es la excentricidad relativa. Obsérvese que la línea B =O une los centros
de eje y carcasa.
En esta lección vamos a describir las soluciones correspondientes a cojinetes cilíndricos abier-
tos por los extremos donde la presión es la ambiente. Veremos en primer lugar cuál es la forma
de la solución y la dirección de la resultante de presiones. A continuación veremos las solucio-
nes correspondientes a diferentes límites asintóticos correspondientes a cojinetes poco cargados,
cojinetes largos, cojinetes cortos y cojinetes muy cargados.
1
2 Ecuación de Reynolds y fuerza sobre la carcasa Z'f.ol
{}
{}() [
(1 + ccosfJ) 8p
3
{}()
l( + D)
L
2
3
2
2
(1 + ccosfJ) {} ( 8x /pL ) 2 =
donde D = 2R es el diámetro del cojinete. Esta ecuación se obtiene a partir de la forma general
de la ecuación de Reynolds deducida en la lección anterior, usando fJ y x como coordenadas
sobre la superficie interna de la carcasa, de modo que ge~ R y 9x = 1, y con
ya que U e ~ OR y Ux = O.
Las condiciones de contorno para un cojinete abierto por los extremos son
(p - Pa) (R - R1) 2
'P = 6µf2R 2c '
<p (fJ, 1) = <p (fJ, -1) =o y <p (fJ, r¡) = <p (fJ + 211", r¡) .
donde <p es una función impar de fJ en el intervalo -7r :S fJ :S 7r, como puede deducirse de la
ecuación diferencial, en la que al cambiar fJ por -fJ debe de cambiarse <p por -<p para que la
ecuación diferencial no cambie. En particular esto implica <p (-11", O) = <p (7r, fJ) = O, pues <p es
continua. Del mismo modo puede verse que <p es una función par de r¡ en el intervalo -1 :S r¡ :S 1.
2
Sean Y y Z dos ejes ortogonales en un plano perpendicular al eje del cojinete, con el eje Y
orientado en la dirección () = O y el eje Z perpendicular a la misma. El vector unitario normal
a la carcasa, y orientada hacia el líquido , t iene las component es n y = -cose y nz = -sene , y
las componentes de la fuerza adimensional sobre la carcasa son
fy = j lj1í c<pcos()d()dr¡
_
1
- w y fz =
;·l¡1í c<psenBdBdr¡.
_
1
-w
Al ser <pcos() una función impar de () la componente Y de la fuerza es nula. Por lo tanto la fuerza
sobre el cojinete es perpendicular a línea que une los centros de eje y carcasa, y es de la forma:
fz=f(c,A).
3 - + - - - - - - + - - - + - - - - i -- --+-------t----+----+------+---#-----o---< /1 (( '
f
Figura 2.- Cargas sobre un cojinete sin cavitación. Las curvas corresponden a A » 1 la de
valores más altos, A = 0.5 la intermedia y A « 1 la de valores más bajos.
3
ecuación de Reynolds se reduce a
8 2 <.p 1 8 2 <.p
8()2 + A 2 8r¡2 = -sen() '
con las condiciones de contorno: <p (() , 1) = <p (() , -1) = O y <p (() , r¡) = <p (() + 27r, r¡).
La solución de la ecuación anterior es de la forma, } <p V ( r¡) sen(), ' quedando para V la
ecuación
1 d2 V
A 2 dr¡2 - V = -1,
f = Jr1_1 }_7r
{7r r1 ;·7f sen2BdB
c<psenBd()dr¡ =e J_ V dr¡ -7r
1
(1)
En el caso A » 1 se tiene:
~. {
Cuando A (1 - r¡) rv 1; <p-+ [ 1 - e-A(l-r¡) J sen(),
jp,f rhh dd
Cuando A (1 + r¡) rv 1; <p-+ [ 1 - e-A(l+r¡)] sene,
Las soluciones anteriores describen la distribución de presiones cerca de los bordes, donde
<p debe caer a cero, y en la parte central del cojinete, donde no hay efectos de los bordes y
<p---* sene.
4
ya que el término proporcional a 1/ A2 es muy pequeño frente a la unidad. Dado que no aparecen
derivadas con respecto a r¡, no se pueden imponer las condiciones de contorno en r¡ = ±1, de
modo que la solución que obtengamos no será valida en las proximidades de los bordes del
cojinete. Las únicas condiciones de contorno que podemos imponer son: cp (B) = cp (e+ 27r).
Integrando dos veces la ecuación anterior y usando la condición cp ( -7f, r¡) = cp (7r, r¡) = O
introducida antes (ya que cp es una función impar de e y continua), se obtiene
donde la constante e, que es proporcional al gasto que fluye en la película, se determina con de
la condición de periodicidad
e + cosx
1 1í
-7í (
1 + écosx) 3
dx = .
0, 1o que proporciona 0 = 2+é2
3é
E= 0.5
1.5
!-.
0.5
~
~/ \
cp O.O l./ \
-0.5 ~ ~
~
V~
-1.0 \ ..._i'-.....-V- I"
-1.5
-180 -150 -120 -90 -60 -30 o 30 60 90 120 150 180
e
Figura 3.- Distribución de presiones para un cojinete muy largo, A» l.
7í (2 + c
2
27í 27r )
Ji (e)= (1 - c2)1/2 ; 12 (e)= (1 - c2)3/2 ; h (e)= (1 - c2)5/2
donde
I()
n é =
! 11'
-71'
dx
(1 + éCOSX )n '
() - I ()
con 1n+l é - n é + ~d[In(c)]
n
d
é
5
La carga es
f = 47rc (5)
(2 + c 2) Vl=E2.
Obsérvese que cuando e ----+ O y A » 1, las expresiones anteriores proporcionan cp ----+ sene y
f ----+ 27rc, que coinciden con los resultados dados en (2) y (3).
donde se ha utilizado como variable la magnitud cp / A2 en este límite, en lugar de cp. Cuando
A « 1 el primer término de la ecuación anterior es despreciable, de modo que la ecuación y sus
condiciones de contorno quedan
sene cp
(1 + ccose)3 con A2 = O en r¡ = ±1,
e
donde no se imponen condiciones de contorno según porque se han despreciado sus derivadas
en la ecuación diferencial. La solución nos proporciona la distribución de presiones
(6)
y la carga
27rE~A
2
= (7)
f 3 •
3 (1 - c2)2
Obsérvese que en el límite e----+ O y A« 1 se tiene cp----+ ~A 2 sene (1 - r¡ 2 ) y f----+ ~7rcA 2 , que son
los mismos valores obtenidos en (1).
En los límites anteriores, salvo e « 1, la carga sobre el cojinete tiende a infinito cuando
e ----+ l. Cuando e es exactamente la unidad, la carcasa y el eje del cojinete están en contacto y la
solución es singular para e = 7r, como puede verse de la ecuación de Reynolds y de las soluciones
asintóticas para A » 1 y A « l. Sin embargo, cuando e ----+ 1, las sobrepresiones cp son muy
grandes en las proximidades de e = 7r. Para e= 7r +a, con a« 1, el espesor de la capa toma
la forma
en cuyo caso
h
(R - R1) = 1 + éCOS (7r +a) ;:::: (1 - e) (1 +e)'
6
y
e-n ,...------
~ = r-v 1 ; de = .¡2 (1 - é)d~.
J 2 (1 - é)
Introduciendo estos valores de h y de en la ecuación de Reynolds, se obtiene
3
(1-é)~ {~ [(l e2)3 acp] 2(1-é) (1 +e2) a2cp} = ~ (8)
2)2 a~ + a~ + A2 ar¡2 '
De los dos sumandos del primer miembro de la ecuación (8) de Reynolds, el segundo es
despreciable frente al primero (del orden de (1 - é) « 1) si A es de orden unidad o grande frente
a la unidad. Si llamamos
(1-é)~
'ljJ = 2)2 cp, (9)
3
donde ~ y 'ljJ son de orden unidad, lo que implica e- 7r r'V ~ « 1 y cp r'V (1 - é )-2 » l.
'l/J= (10)
(11)
Obsérvese que el valor anterior de la fuerza coincide con el dado en (5) para A» 1, cuando en
(5) se hace é - t l. Sin embargo no coincide con el valor dado en (7) para A « 1 y con é ---+ l.
Esto es debido a que las soluciones (10) y (11) se han obtenido para A grande o de orden unidad.
Cuando A r-v ~ « 1, si elegimos A = >.J2 (1 - é) con >. r-v 1, la ecuación (8), con 'ljJ
definido en (9), queda
2
La solución se escribe en la forma
_j
'ljJ -
E (A+ x 2 /2) dx
( 2)3
-oo 1 +X
y la constante A se obtiene de
O= roo (A+ X2 /2) dx . A=_!
1-oo (1 + x2 ) 3 ' 6 '
para lo qe se ha hecho uso de las integrales
¡+ 00
dx 7r r 00
dx 31f
1-oo (1 +x 2) 2 =2 Y 1-oo (1 + x2 ) 3 = 8 .
7
que sería la ecuación a resolver con las condiciones de contorno: r¡/J ~ O en ~ ~ ±oo; y r¡/J = O en
r¡ = ±l. Si dentro de este límite hacemos ,\ « 1, la solución es
,A2~ (1 - r¡2)
?/J= 3
2 (1 + e ) '
y la carga sería
f = 7rJ2A2
3~'
que coincide con la expresión dada en (7) si se sustituye A = ,A.j2 (1 - e) y se hace e ~ l.
4 Cavitación
<fJmin =
Para el caso del cojinete infinitamente largo con condiciones Medio-Sommerfeld y <pv ~O , la
fuerza sobre el cojinete es
2c2.¡7r2 - (7r2 - 4) é2
f = (2 + c 2 ) (1 - c 2 ) '
en la dirección
8
Condiciones Medio-Sommerfeld. e = 0.5
1.5
1
1.0 i ~ ~ ...
/~
0.5
v
~ \
cp o.o
_/ \
-0.5
-1.0
-1.5
-180 -150 -120 -90 -60 -30 o 30 60 90 120 150 180
en la dirección
cP =tan - l (7í~)
4c ·
Para obviar este inconveniente, habría que resolver la ecuación de Reynolds imponiendo las
denominadas condiciones de Reynolds (véase, por ejemplo, referencia [1] 3 ). Para el caso de
alargamiento grande, estas condiciones son: <p = <pv y 8<p/8B =O donde se inicia la burbuja de
cavitación, e= 01 a determinar; y <p = <pv donde acaba la burbuja, e= B2 también a determinar.
El valor de <p se mantiene igual a <pv en el interior de la burbuja (B1 ::; e::; B2), y en e = B2 el
gradiente de presiones no es nulo para que exista continuidad del gasto. El gasto volumétrico
adimensional que entra en la burbuja es el de Couette, de valor -cosB1, que debe ser igual al
que sale en B = B2
-cosll1 = -cosll2 + (1 + ecosll2) 3 ( ~:) ,
82
de modo que el gradiente de presiones está dado en e = B2, en función de B1 y B2.
La distribución de presiones en la capa líquida sería como la representada esquemáticamente
en la figura 5, donde deja de ser antisimétrica en e y el valor de <p (7í)
= <p (-7r) es, en general,
distinto de cero, y habría que determinarlo analizando el problema en la proximidad de los bordes
donde ya intervienen los términos en derivadas con respecto a 77. Del empalme de la solución
válida en las proximidades de los bordes con la solución lejos de los mismos, se determina la
3
[1] D. Dowson and C. M. Taylor, ,, Cavitation in Bearings", Ann. Rev. Fluid Mech., 1979, Vol. 11, pp . 35-66.
9
constante <p ( 7r). En las proximidades de los bordes hay que determinar también los límites
laterales de la burbuja de cavitación, ya que ésta debe cerrarse lateralmente, puesto que la
presión en los bordes es la exterior, <p = O (p = Pa ), que se supone mayor que la presión de
vapor.
10
Lección 19. Lubricación con gases. 01- .03. 2e>~2
1 Introducción
En esta lección vamos a estudiar algunos ejemplos de la lubricación con gases, cuando su
temperatura es constante e igual a la de las paredes que limitan la capa.
Analizaremos en primer lugar el caso bidimensional, para tratar después el caso de un patín
rectangular, como ejemplo particular de los movimientos tridimensionales.
2 Patín bidimensional
h(x)
Pa Pa
-------------------------··->·
u X
h 3 8p Uhp _ G
- 12µp 8x + -2- - ' (2)
donde G, el gasto másico por unidad de longitud que pasa por la película, multiplicado por
R 9 TP, es una constante a determinar como parte de la solución.
1
Ad\-~ ~04'\~l:C~~ :
(3)
y (2) queda
8cp + cpH
->.H 3 cp--¡j{ = g, 1 (5)
1
donde
Pah 2 (O) 2G
>. = 6µUL y g = PaUh (O)" (6)
En el caso particular en que H (~) sea de la forma a~ + 1, con a < O constante, la ecuación
(5) puede integrarse sin más que utilizar como variable dependiente el producto A= cpH y como
variable independiente H. En efecto, en estas nuevas variables la ecuación (5) toma la forma
..- - - - - - -- -
- - - - - - - - - - ...,
dA 2 '
• (a>.) Ad (lnH) = (a>.) A + A - g' : (7)
·- - - - - - - - - -- • - - - - - - _I
{A ZdZ
lnH =(a>.) Í1 (a>.) z2 + Z - g' (8)
H(l) ZdZ
lnH (1) = (a>.) f, 1
( >.)
a Z 2 +Z-g
. (9)
1
Las integrales que aparecen en las ecuaciones (8) y (9) son:
ZdZ
2
Znl(a>.)Z +Z-gl 1 j dZ
J (a>.) Z2 + Z - g = 2 (a>.) - 2 (a>.) (a>.) Z2 + Z - g
dZ _ tan_ 1 2a>.Z + 1 )
si -4a.Ag - 1 > O, y
J 1
(a>.) Z2 + Z - g - J-4a.\g - 1
(
J-4a.Ag - 1
ln l 2a>.Z + 1 - J 4a.Ag + 11
si 4a.Ag + 1 > O.
J dZ _ 1
(a.A) Z2 + Z - g - J4a.Ag + 1 2a.AZ + 1+J4a.Ag+1
2
2.2 Límite en que ,\ » l.
Cuando>. » l las sobrepresiones generadas en la capa de lubricante son muy pequeñas frente
a la propia presión, de modo que la solución correspondiente a este límite va a ser la del caso
incompresible. En efecto, para>.» 1 la ecuación (5) toma la forma
:- - ·acp- - - - -.
cp ae =o, . (10)
!--------.!
cuya solución es cp = l. Es evidente que la presión varía poco con respecto a Pa, pero esta
variación no es nula, de modo que escribiremos
(12)
que debe integrarse con las condiciones: 'l/J = O en = O y = l. Obsérvese que (13) es la e e
ecuación de Reynolds correspondiente al caso incompresible. La solución de (13) es
(14)
y el valor de g se obtiene de
fo1 de/ H 2 (e) (15)
g= fol de/ H3 (e) .
8 (cpH) =O (16)
ae '
lo que significa que el flujo de Poiseuille es despreciable frente al de Couette. A diferencia
del caso de los líquidos, la conservación de la masa está asegurada con un flujo de Poisseuille
despreciable, debido a que la densidad no es constante a lo largo de la película y las variaciones
de densidad (que al ser isotermo el movimiento, se traducen en variaciones de presión a lo largo
de la película) compensan las variaciones de espesor de la capa de lubricante. En efecto, la
solución de (4) es
cpH = g, (17)
que en variables físicas toma la forma
3
~=o
La constante g se determina de la condición inicial cp = 1 en =t= O, proporcionando g = l. e
Esto es debido a que la ecuación diferencial (16) es hiperbólica y sólo se le puede imponer la
condición inicial. La distribución de presiones se reduce a
(18)
y 8 se determina haciendo que todos los términos en la ecuación (5) sean del mismo orden, lo
que proporciona: 8 = ,\ « l. Además, el valor de H es constante en esta zona donde <; rv 1 ya
que: H (e) = H (l +A<;)~ H (1). Por lo tanto, la ecuación (5) queda para esta zona
1- - - - - - - - - - - - - - - - -·
(20)
Esta solución cumple ya la otra condición de contorno porque cuando cp ~ 1/H (1) se obtiene
<; ~ -oo. Esto es debido a que hemos tomado g = 1, admitiendo que la capa límite está en
e= l. Obsérvese que para cp = 1 es 8cp/8c;- = [H (1) - 1] /H 3 (1) <O, como muestra la ecuación
(19) (y la figura 2a). Sin embargo, si se hubiese supuesto la capa en = O, se elegiría e;- = U,\ y e
la solución exterior sería cp = H (1) /H (e) con g = H (1). En Ose requiere 8cp/8c;- <O, según e=
se muestra en la figura 2b, pero la ecuación equivalente a (19) sería: cp (8cp/8c;) = cp-H (1), que
proporciona 8cp/8<; = 1 - H (1) > O para cp = 1, de modo que la solución de la figura 2b no es
posible.
~ lJ'..l:f(.!}_________________ +€!~¿:
1
1
1
1
1 (b)
1
1
(a)
1 --------------------------
o 1 º· o {:t) 1
y dado que ñ ~ ig~ - J, con i y J los vectores unitarios en las direcciones x e y , respectivamente,
se tiene
F, = f [-(p-pa)~ - (T~Y)y=hl dx,
1f Fy = (p - Pa) dx. 1
El orden de magnitud relativo de los dos términos del integrando de la primera integral es
(p - Pa) (8h/8x) Pah 2 (O) \
- - - - - - - rv rv /\ << l
(T~Y)y=h µUL '
por lo tanto la fuerza en la dirección del eje x es sólo debida a los esfuerzos viscosos
F, = -1L (T~Y)y=h dx ,
mientras que en el caso de los gase~ con A. rv 1 y en el caso de los líquidos, la contribución a Fx
de la presión y los esfuerzos viscosos es del mismo orden.
3 Patín rectangular
~ + Uhp) + ~ (- h
3 3
(- h p ap p ap) = O (21)
ax 12 µ ax 2 az 12µ a z '
que debe integrarse con las condiciones de contorno
y z
Pa
Pa
a X
5
Figura 3.- Patín rectangular.
-A~
ae
(H3 o<p)
<p ae +
8 (<pH) - AH3
ae
(~)2 ~
b ar¡
(<p o<p)
ar¡
=O
'
(24)
siendo
2
A= Pah (O).
6µUa
La ecuación (24) debe integrarse con las condiciones de contorno
<p 1 en e= o y e= 1 para o ::; r¡ ::; 1, (25)
<p 1 en r¡ = oy r¡ = 1 para o ::; e ::; l .
A <<-{ En el límite A -+ O el problema se reduce al del caso bidimensional visto anteriormente
cuya solución se resume en las ecuaciones (18) y (20). Es decir: <p = 1/ H (e). Para cumplir
la condición de contorno en e
= 1, dilatamos la variable e
análogamente al caso anterior:
<;=(e - 1) /Arv 1, con lo que (24) toma la forma
-~ [H3 (1) <p o<pl + 8 [<pH (1)] - A2 H3 (1) (~) 2~ (<p o<p) =O, (26)
Ek o<; o<; b or¡ ar¡
que para A -+ O se reduce a
En cualquier caso, las soluciones (18) y (20) no cumplen las condiciones de contorno en r¡ = O
y r¡ = 1 ya que se ha despreciado el término en las derivadas con respecto de r¡. Por lo tanto
hay una capa límite en los entornos de r¡ = O y r¡ = 1 de espesor 8 (A) « 1 a determinar. Si
utilizamos la variable X= (r¡ - r¡o) /8(A) rv 1, con 'T]o =O ó r¡o = 1 según que estemos situados
en una u otra capa, la ecuación (24) toma la forma
a (
- Aae H <p ae
3
O<p)
+
o(<pH) A
ae - 82 H
3(ª)2 a ( O<p)
¡; ax <p ax = o,
y para que el término en derivadas con respecto a x sea tan importante como el que más es
necesario que 8 =-/)..y por lo tanto la ecuación, despreciando términos de orden A, se reduce a
6
z
Capa Límite
Figura 4.- Regiones del flujo en el patín rectangular. El crecimiento de las capas límites
laterales es esquemático ya que depende de la función H (e).
e
Obsérvese que el espesor de la capa límite en = 1 es del orden .:\, mientras que las capas
límites laterales (en los entornos de 'f} = O y 'f} = 1) son del orden de fi, mucho mayores que .:\,
como puede verse esquemáticamente en la figura 4. Por lo tanto, a la hora de obtener la carga
{b t
Fy =lo dz lo (p - Pa) dx, (30)
con <p = l / H (e), ésta sería del orden de Paab. Dado que en las zonas de las capas límites
laterales cp ya no es 1/ H (e), pero se mantiene de orden unidad, el error que se comete en el
cálculo de la fuerza es del orden de Paabfi.
7
Lección 20. Capas líquidas delgadas.
1 Introducción
En esta lección se estudia el movimiento de capas líquidas delgadas con superficie libre bajo
la acción de las fuerzas másicas conservativas, en el supuesto de que los efectos viscosos sean
dominantes. La ecuación que determina la evolución del espesor de la capa líquida es similar a
la de Reynolds de la lubricación fluidodinámica. Las diferencias aparecen en las condiciones de
contorno que hay que imponer al campo de velocidades y se traducen en que la incógnita no es
el campo de presiones, sino la distribución de espesores de la capa.
Para determinar la evolución de la altura h de la capa líquida de la figura 1, que se desliza bajo
la acción de la gravedad sobre un plano inclinado un ángulo a, supondremos que el espesor de la
capa es pequeño frente a la longitud L, que es necesario recorrer para encontrar variaciones de h
del orden de ella misma. En estas condiciones, h/ L « 1, la ecuación de cantidad de movimiento
transversal a la capa se puede reemplazar por
... ~
X
8(p+ pU) =O
(1)
8y '
donde U (x, y, t) es el potencial de las fuerzas másicas. Integrando esta ecuación obtenemos
p+ pU = Pa + pUh,
1
donde Uh = U (x, h, t) es el potencial evaluado en la superficie libre en la que se ha supuesto
que p = Pa, despreciando los efectos de tensión superficial. En el caso de que las únicas fuerzas
másicas sean las gravitatorias: U = -§ · x = g (-xsena + ycosa); y particularizando en la
superficie libre y = h se tiene
uh= g (- xsena + hcosa)'
de modo que
1 p + pU = Pa + pg (-xsena + hcosa) J (2)
Integrando (3) con las condiciones de contorno (4) y teniendo en cuenta (1) se obtiene
y (y - 2h) 8 (p + pU)
u = - - - - ----'-----
2µ ax '
o bien, sustituyendo p + pU de (2) ,
U=
9y (y - 2h) ( ah )
(5)
2v sena - ax cosa
rh gh
3( ah )
q =lo udy = 3v sena - ax cosa . (6)
ah aq - o
at +ax - '
y sustituyendo el valor de q dado en la ecuación (6) se llega a
3
-
ah+ -
at
-
a [gh
ax 3v
( ah
sena--cosa
ax
) ] =0. (7)
2
el caso de la lubricación con líquidos no había que imponer condiciones iniciales a la presión, ya
que no aparecían derivadas de la presión con respecto al tiempo, en el caso de capas líquidas es
necesario imponer la distribución inicial de espesores de la capa.
En la ecuación (7) puede observarse que si la superficie sobre la que discurre la capa líquida 1
es casi equipotencial, o m ás precisamente , si ot << ..f
h
a rv L« 1,
los dos términos dentro del paréntesis de la ecuación (7) son del mismo orden, ya que
oh oh h
sena ~ a rv -cosa ~ - rv - « l.
ox ox L
En ese caso la ecuación (7) es parabólica y necesita dos condiciones de contorno, además de la
distribución inicial de h. Por ejemplo puede imponerse el valor de h o el gasto de la película en
cada uno de los extremos.
Por el contrario, si la superficie sobre la que discurre la capa difiere apreciablemente de un; i
superficie equipotencial, a » h/ L, el término (oh / ox) cosa « sena, y la ecuación (7) se reduce o("" -1
a
oh
ot
o
+ ox
(gh3v sena
3
)
=O. (8)
Esta ecuación es hiperbólica y su solución sólo puede satisfacer la condición inicial y una condi-
ción de contorno.
que expresa que la derivada direccional de h en la dirección del plano (x, t) definida por el vector
f = (gh 2 sena/ v, 1) es nula; es decir: f · (oh/ox,oh/ ot) = O. Si bien esta dirección no es
conocida de antemano en un punto (x, t) genérico, pues la incógnita h aparece en la expresión
de f, el hecho de que h no varíe en la dirección que marca f, llamada dirección característica,
implica que f tampoco varía en esta dirección, y las líneas del plano (x, t) donde hes constante
son, por tanto, rectas de ecuación f constante, llamadas características. El valor de h en cada
recta de esta familia se obtiene a partir de las condiciones iniciales y de contorno. Así, en el
caso de una película ilimitada con h (x , O) = ho (x) , -oo < x < oo, se obtiene
h = ho (x - gh :enat), 2
(9)
como se puede ver prolongando las rectas anteriores hasta cortar al eje x.
lo que proporciona
3
x - (g sen ah 2 / v) t ~
t
X
~ h = ho(~)
3 Ejemplos
Como primer ejemplo, supongamos, con a » h/ L, una distribución inicial de espesores tal
que h = h 1 para x < O y h = ho > hi para x > O. Para instantes posteriores al inicial, la altura
h se mantendrá constante igual a hi sobre las líneas características
ghrsena
X- t<
-
0'
V
gh6sena
X-
V
t>
-
0.
1
Esto es análogo a lo que ocurre en los gases con la formación de ondas de choque, como veremos en lecciones
posteriores .
4
t x - (gh J sen
1
a / v) t = O ( /
x - g h 02 sen a v t
)
= O
I -~ ~ .
D1stn"b uc10n
·- de
alturas en t >O
Figura 3.- Evolución con el tiempo de una distribución de alturas inicialmente discontínua.
Dado que ho > h 1 , las dos características que limitan sendas regiones, que arrancan de x = O
en t = O, se van separando, tal como se muestra en la figura 3. En un instante dado, t > O, la
altura de la capa líquida toma un valor intermedio entre h 1 y h 0 en la cuña de la figura 3 donde
determinado por la condición de que la característica que pasa por este punto procede del origen:
x - (gsena/v) h 2 t = O.
Obsérvese que la solución descrita es autosemejante. Esto se deba a que no existe ninguna
longitud característica según x en el problema.
3 .2 Ejemplo segundo
Como segundo ejemplo consideremos el mismo caso anterior pero con ho < h 1 . En este caso
se forma una discontinuidad finita, cuya velocidad de propagación U se determina utilizando la
ecuación de la continuidad en forma integral, aplicada a un volumen de control que se mueve
con la velocidad U de la discontinuidad (véase figura 4) .
5
y dado que
gh3
v sena, q=
3
con valores distintos de h a cada lado de la discontinuidad, se tiene
Al igual que se hizo con la lubricación, los resultados obtenidos para películas líquidas bidi-
mensionales pueden generalizarse al caso tridimensional, y para fuerzas másicas conservativas
cualesquiera. Suponiendo que se verifican las condiciones
2 2
he « l _e «l· _h e « l
puch
_
L ; µL ' vtc '
8(p+ pU) =O
ay , (11)
p + pU = Pa + pUh, (12)
2
- ~ 8Uh + v8 ua =O· (14)
9a 8a. 8y2 '
Dado que Uh es independiente de y , las ecuaciones (14) pueden integrarse con respecto a y, con
las condiciones de contorno u ª = u f3 = O en y = O y = ªayª
= O en y = h, quedando ª;Y/3
1 auh 1 auh
Ua =- - - - -y (2h - y) ; Uf3 = - - -y (2h-y) . (15)
2vga 8a. 2vgf3 8{3
6
Los gastos volumétricos por unidad de longitud son
+ ~ (- + ~ (- h
3 3
8 (gag13h) h g13 8Uh) ga 8Uh) =O . (18)
8t 8a 3vg a 8a 8{3 3vg /3 8{3
Al igual que ocurría con la ecuación (7) del caso bidimensional, la ecuación (18) es parabólica,
pero puede simplificarse si la superficie sobre la que discurre la película no es próxima a una
equipotencial. Así,
__!_ 8Uh = __!_ 8U [a, {3 , h (a, {3)] = fa+ fy__!_ oh' (19)
9 a 8a 9a 8a 9 a 8a
donde
f a (a, {3 ' h) = __!_ 8U (a, {3, h). f ( f3 h) = ¡8u (a, {3, y)]
8 ' y y a, ' 8 '
9a a y y=h
son las componentes a e y de la fuerza másica cambiadas de signo y calculadas en la superficie.
Como (1 / ga) (8h / 8a) rv hc/L « 1, el segundo sumando de (19) será despreciable frente al
primero a no ser que fa / fy rv he / L « 1 o menor. Aplicando las mismas consideraciones a
(1 / 913) (8Uh / 8{3), puede concluirse que los términos que darán lugar a derivadas segundas de
h en la ecuación (18) son despreciables , si el valor típico del ángulo que las equipotenciales
forman con la superficie sobre la que discurre la película es mucho mayor que he/ L. En este
caso, además, fa y f /3 (definida análogamente a fa) pueden evaluarse en y = O. La ecuación
simplificada sólo contiene derivadas primeras de h y es hiperbólica
(20)
2
Véase ecuación (8) de la lección 17.
7
Lección 21. Introducción al movimiento de fluidos en medios
porosos.
1 Introducción
Los medios porosos que consideraremos son medios formados por partículas sólidas, o por
una matriz sólida, que deja huecos o poros interconectados a través de los cuales pueden moverse
líquidos o gases.
Supondremos que el tamaño o longitud característica de los poros es a mucho menor que la
longitud característica R, en la cual el medio poroso aparece como un medio continuo a través del
cual fluye el fluido sujeto a unas leyes de conservación y a unas leyes constitutivas características
del medio. Estas leyes constitutivas tienen una base experimental y una justificación parcial
procedente de un análisis microscópico, analizando el movimiento a través del medio con la
longitud característica microscópica a.
Nos limitaremos en este análisis a considerar movimientos en los que sólo existe un fluido
en cada región macroscópica del medio poroso y este fluido llena totalmente los poros. Cuando
existen dos fluidos en el medio poroso admitiremos que existe una superficie de separación de
ambos, sin analizar las situaciones en que, por inestabilidad de esta superficie, coexistan en los
poros dos o más fases fluidas. Tampoco retendremos en este análisis los efectos de la tensión
superficial, por suponer que las diferencias de presión, del orden de CJ /a, son pequeñas frente a
las diferencias de presión impuestas al medio.
2 Descripción macroscópica
La porosidad <I> local del medio se define como el cociente Vp / V del volumen de poros Vp al
volumen V de un entorno del punto x donde calculamos la porosidad; <I> es una función continua
de x que puede presentar variaciones en la longitud ,f, cuando el medio es de porosidad variable.
Puede demostrarse 1 que <I> es también el cociente entre el área de poros Ap y el área A de una
superficie plana de tamaño a 2 «A« R2 que pasa por el punto x.
1
Véase:
Bear, J.; "Dynamic of Fluids in Porous Media", Elsevier, 1967.
Polubarinova-Kochina, P. Ya.;"Theory of Filtration of Liquids in Porous Media", in Advances in Applied
Mech., Vol. II, pp. 154-425, Ed. R. von Mises and T. von Karman, Academic Press, 1951.
1
La densidad media local p de define como el cociente de la masa fluido contenida en Vp y el
volumen de poros Vp. El valor medio de la presión p de define como
donde p' es el valor local de la presión, que varía de un punto a otro del poro como le ocurre
a densidad local p'. Los valores medios de la temperatura y otras variables termodinámicas los
definiremos de modo análogo.
Ha de observarse, sin embargo, que los valores medios no cumplen las ecuaciones de estado de
la termodinámica, a menos que las fluctuaciones de presión y temperatura respecto a los valores
medios sean pequeños frente a la propia presión y temperatura (esto es p' - p « p, T' - T « T)
en Vp o salvo en una región muy pequeña de Vp, lo cual admitiremos, ya que se cumple en
muchos casos prácticos.
donde i! es el valor local de la velocidad del fluido, que varía de un punto a otro de cada poro.
De esta manera pv es el vector flujo másico, ya que el segundo miembro de esta relación da
la masa de fluido que atraviesa la superficie A de orientación normal ñ. La velocidad v es la
velocidad local aparente del fluido respecto al medio poroso, que supondremos ligado al sistema
de referencia.
que expresa que la variación de la masa de fluido contenida en la unidad de volumen del medio
poroso se debe a la masa que llega a la unidad de volumen.
Si el número de Reynolds basado en la velocidad característica Ve del flujo a través del medio
poroso, el tamaño característico a y la viscosidad cinemática v, es ave/v « 1, entonces podemos
esperar que exista una relación lineal entre v y las fuerzas de presión y másicas, de la forma
donde K es un coeficiente llamado permeabilidad del medio poroso, que depende de la estructura
del mismo, tiene dimensiones de superficie y es del orden de a 2. La relación (3) constituye la ley
experimental de Darcy. En la forma en que está escrita, se ha supuesto que las fuerzas másicas
derivan del potencial
U = ( iio - g) · x- ~ (f2 x x) · (f2 x x) ,
2
pues con frecuencia las fuerzas de Coriolis y las asociadas a la variación de ñ con t son despre-
ciables; aoes la aceleración del origen del sistema de referencia y ñ la velocidad angular con que
gira el mismo con respecto a un sistema inercial.
P ara valores del número de Reynolds que no son pequeños la relación entre '\lp y iJ deja de
ser lineal. Para medios porosos formados por un relleno de partículas esféricas de radio R rv a
se puede utilizar la siguiente generalización empírica de la ley de Darcy
pv 2 iJ
'\lp = - f 2R !vi'
donde f es un coeficiente de fricción dado por
f
= 1-
~3
~ [ 75
l. +
75µ (1 - ~)
pvR
l '
que conduce a la ley de Darcy para Reynolds bajos y a la relación l'\lpl rv pv 2 / R cuando el
Reynolds es alto.
También en el supuesto de ser ave/a« 1, donde a es la difusitividad térmica del fluido, T'
coincide con Ts, la temperatura de la matriz sólida, que puede variar con Nos limitaremos x.
en esta introducción a considerar situaciones en que Ts es constante, en virtud de la gran
conductividad o inercia térmica del sólido. Por lo tanto, cuando analicemos el flujo de gases a
través de medios porosos, añadiremos a las ecuaciones anteriores (2) y (3) la ecuación
T = Ts =To, (4)
y la de estado
p
- = R 9 To. (5)
p
Podemos ahora resumir las ecuaciones que describen el movimiento de líquidos o fluidos
incompresibles en medios porosos para bajos números de Reynolds como
(9)
que junto con (4) y (5) nos permiten escribir (2) en la forma
8pK . 8p K 2
~tf+.¡_.;da"' +/JAfe>i. /
,
~- = -'\l · (p'\lp)
at µ
o bien -
8t
= ~.6.p
2µ'!!
. (10)
3
3 Condiciones iniciales y de contorno
P = PI ( x) en t = O, (11)
a menos que las condiciones de contorno sean estacionarias y busquemos la solución estacionaria
del problema.
En la superficie de separación f (x, t) =O de dos fluidos dentro del medio poroso, exigiremos
la continuid ad de presiones y la contmmdad de las velocidades normales a la superficie; exigiendo
el principio de conservación de la masa
-+ -+ <I> 8f (12)
v. n = - IV' JI 8t'
donde ñ = V' f /IV' JI es el vector unitario normal a la superficie. En este tipo de problema la
ecuación de la superficie no es conocida de antemano, sino que ha de determinarse como parte
de la solución.
Aire p =pn
.g
A
Aire
Agua
~ p =pn
H1
~
p+pU = Pa+pgH1
p+pU = Pa+pgH2
o X D
Cuando dentro del medio poroso una región está ocupada por un líquido y otra por un gas,
por la mucha menor viscosidad de éste, a la hora de determinar el movimiento del líquido,
podemos despreciar las diferencias de presión en la región gaseosa y escribir p 9 = Pa constante
y por lo tanto para el líquido p = Pa en la superficie de separación.
4
y H 2 diferentes y que termina en la superficie OD impermeable. Nótese que la superficie libre
AB no termina en C sino en B. En la superficie rezumante BC, la presión es Pa y se permite
la salida de líquido (iJ · ñ -f. O) . En la superficie impermeable OD el flujo es también tangencial,
como ocurre en la superficie AB cuando ésta es estacionaria.
4 Ejemplos
Un tapón poroso de longitud L que separa dos regiones ocupadas por un líquido con presiones
motrices P 1 y P 2 , permite el paso de un flujo volumétrico de líquido
En el caso en que el tapón separe a dos regiones ocupadas por un gas a las presiones P1 y p2,
y si la temperatura del tapón y la temperatura del gas son ambas constantes e iguales a To, la
viscosidad µ también es constante y el gasto másico G, por unidad de área del tapón, es
K P1-P2
G=- 2 2)
µ ( 2LRgTo .
Consideremos la presa porosa de la figura 1 y en ella una sección de altura z = h (x) entre
la base y la superficie libre, y de dimensión unidad en la dirección perpendicular al plano x - z.
El gasto volumétrico a través de esta sección es
5
Lección 22. Movimientos a bajos números de Reynolds .
Ecuaciones de Stokes.
1 Int roducción
En esta lección estudiaremos las ecuaciones , condiciones iniciales y de contorno que deter-
minan el movimiento de un líquido, sin superficie libre, alrededor de un cuerpo en condiciones
tales que la aceleración del líquido sea despreciable en su movimiento relativo al cuerpo. En
particular veremos que, en estas condiciones , la fuerza que actúa sobre el cuerpo, a causa de su
movimiento, es proporcional a la velocidad del cuerpo.
La solución correspondiente al caso de una esfera fue determinada por Stokes (1851), así
como la resistencia al avance. Esta expresión de la resistencia fue utilizada por Millikan en sus
experimentos para determinar la carga del electrón; y por Einstein en su teoría del movimiento
Browniano de partículas suspendidas en un líquido, y para determinar el coeficiente de viscosidad
de líquidos midiendo la velocidad de caída de pequeñas esferas (velocidad de sedimentación).
Veremos también la naturaleza singular de las ecuaciones a bajos números de Reynolds (Oseen
1910), para las que Stokes había observado que no hay solución para obstáculos cilíndricos
(paradoja de S tokes) .
2 Ecuaciones
Consideremos un cuerpo, cuya superficie tiene por ecuación C (x) = O, que se desplaza con
velocidad -Ü y gira con velocidad íl, en un líquido en reposo , de densidad p y viscosidadµ, que
se extiende hasta el infinito.
Si utilizamos un sistema de referencia ligado a un punto del cuerpo (por ejemplo su centro de
gravedad) pero sin girar, el líquido se moverá, lejos del cuerpo, con la velocidad Ü y la ecuación
de la superficie del cuerpo será e (x, t) = o, obtenida de e (x) = o mediante rotación con la
velocidad íl. Las fuerzas de inercia debidas al movimiento del sistema de referencia son las
correspondientes al desplazamiento de su origen -dÜ / dt.
Las ecuaciones que determinan el movimiento del líquido alrededor del cuerpo son
\! · iJ =O, (1)
av
ot + V_, . \!_,V = -p1\!p + g_, + dt
dÜ
+ l/
Ll _,
V' (2)
1
Las condiciones de contorno son
donde peo es la presión lejos del cuerpo en la cota z = O siendo positiva en sentido opuesto a la
gravedad.
Las condiciones iniciales se reducen a dar el campo inicial de velocidades v =Vi (x) en t = O,
tal que '\l ·Vi = O.
Dado que la presión aparece en la ecuación de cantidad de movimiento sólo a través de -'\lp,
escribiremos p = Pm + Ph, donde Pm es la presión debida al movimiento y Ph la debida a la fuerza
másica. Es decir, descomponemos la ecuación de cantidad de movimiento en
8v
-+v·
_, n _,
vv=--vp
1n
+-+vw.v
dÜ " _, (4)
8t p m dt '
y
o= -'\lph + pg. (5)
A la ecuación (4) hay que imponerle las condiciones iniciales y de contorno para la velocidad
dadas en (3) y la condición Pm -+ O en !xi -+ oo para la presión. A la ecuación (5) hay que
imponerle la condición de contorno Ph -+peo - pgz en !xi -+ oo.
La suma de las ecuaciones (4) y (5) coincide con la ecuación (2) y la suma de las condiciones
de contorr.io en !xi -+ oo para la presión coincide con la condición de contorno p-+ Peo - pgz .
Obsérvese que la solución de (5) con su condición de contorno es, precisamente, Ph =Peo - pgz.
ff' = - j PmñdA+ j ñ · T
1
dA- j PhñdA, (6)
:E :E :E
donde n es la normal exterior al cuerpo y las integrales están extendidas a la superficie del
mismo. Los dos primeros sumandos de la ecuación anterior representan la fuerza, Fm, debida al
movimiento, mientras que el último sumando representa la fuerza de flotabilidad
-J :E
PhñdA = - J V
\lphdV = -pffVo, (7)
como se vio en la lección de fluidostática y donde Vo es el volumen del cuerpo. La fuerza total
es, por tanto,
_, J
F =- PmfidA+ j n. T I dA - p§Vo = Fm
_, - p§Vo. (8)
:E :E
2
3 Ecuaciones del movimiento en el límite Re << l. Fuerzas y
momentos
La velocidad del cuerpo Ü (t) introduce una velocidad característica, Ue, y un tiempo caracte-
rístico, tu; el tamaño del cuerpo introduce al menos una longitud característica, /!,; y la velocidad
angular ñ (t) introduce un valor característico De y un tiempo característico tn. Admitiremos
que Ue rv Def y que tu rv tn y le denominaremos te. De acuerdo con esto, los órdenes de mag-
nitud de cada uno de los términos de la ecuación de cantidad de movimiento (4), referidos al
término viscoso, son
8iJ _, '7 _, 1 '7 dÜ ¡\ _,
- +v · vV= - - v p + -dt +!!_u'_!!.,, (9)
8t '-v--" p -V-
~ Re '-v-' ~ 0(1)
Re·St (b.p)f/ µUc Re·St
No son necesarias condiciones iniciales y el tiempo aparece como un parámetro. Una consecuen-
cia de las ecuaciones de Stokes es que
Si suponemos que la solución (i11, P1) se ha calculado separadamente para Ü en tres direcciones
mutuamente ortogonales y llamamos (vlk,Plk) (con k = 1, 2, 3) a las soluciones correspondientes;
la solución para una orientación arbitraria de Ü, dada por sus cosenos directores ak respecto a
las direcciones anteriores, será
(14)
y el par
Mli = - J
E
pi(X X ñ)i dA+ J[X
E
X (ñ. r{)L dA = µe 2 cikuk, (16)
1
Obsérvese que el orden de magnitud de ih es U, el orden de magnitud de x es f y, de (11), el orden de
magnitud de p 1 es µU/ f. Por lo tanto el orden de magnitud de F1 es µUf y el de M1 es µU f 2 .
3
donde los tensores Aik y Cik son coeficientes que no dependen más que de la forma del cuerpo.
donde (v 2k, p 2 k) son las soluciones para tres direcciones mutuamente ortogonales y f3k son los
cosenos directores de ñ respecto a estas direcciones .
(18)
respectivamente. Los tensores Bik y Dik sólo dependen de la forma del cuerpo.
(19)
Para el caso de una esfera Aik = 6w8ik, Dki = -8w8ik y Bik = Cik =O. La longitud fes, en
este caso, el radio de la esfera.
Para un disco de radio a (f = a ) que se mueve sin girar con velocidad -Ü en la dirección
del eje x, perpendicular a su plano, la fuerza es
--- 32 -
F1 = µaU, (21)
3
y para una dirección cualquiera de Ü = (Ux, Uy, Uz), con el eje x perpendicular al plano del
disco, se tiene
o
~ )'
16
A= O 332 (22)
( o o 32
3
En el caso de un elipsoide de revolución que se mueve sin girar, la solución fue obtenida por
Lamb. En el caso en que uno de los semiejes (eje x) es mucho mayor que los otros dos, se tiene
,\ O O )
A= O 2,\ O , (23)
( o o 2,\
4
4 Velocidad de sedimentación de partículas sólidas
Si consideramos una partícula sólida que cae sin girar en el seno de un líquido bajo la acción de
la gravedad, de modo que el número de Reynolds de su movimiento relativo al líquido sea mucho
menor que la unidad, la velocidad de sedimentación Üs está determinada por el equilibrio entre
el peso de la partícula y la fuerza que el líquido ejerce sobre ella cuando se alcanza el régimen
estacionario. La fuerza que el líquido ejerce sobre el cuerpo consta de dos partes: La fuerza de
flotabilidad, que actúa en el sentido contrario a la aceleración de la gravedad, y la fuerza debida
al movimiento µR.AjUj. Si la velocidad de sedimentación es Ü8 , tendremos Ü = -Ü8 y por lo
tanto la fuerza debida al movimiento será: -µf.Aj Usj, que unida a la flotabilidad, - pVogi, más
el peso de la partícula pp Vogi, debe dar resultante nula, es decir
(24)
por lo tanto
(25)
La corriente a bajos números de Reynolds alrededor de una esfera fue analizada por Stokes
(1851).
Figura l.- Coordenadas para determinar el flujo a bajos Re alrededor de una esfera.
5
por lo que podemos introducir la función de corriente w tal que
1 8w 1 8w
u = · ue=- - - - (28)
17 77 2 sene 8e ' 77sene 877.
(29)
donde
(30)
(32)
(34)
(36)
que proporciona
2
w = ( -77 - -377 + -1 ) sen 2e (37)
2 4 477 '
u = ue =- (38)
77 277 2773 477 4773 '
6
Conocido el campo de velocidades y de presiones se puede calcular la fuerza, cuya única
componente es en la dirección de Ü, en la forma
F = J[-
¿;
(p) r=a cose + (r;r)r=a cose - (T:e) r=a sene] dA, (40)
donde
(P)r=a = µU el> = _ 3µUcos()
2a ' (41)
a
(T'e) = µ (~ OVr +ave - V()) =µU(~ OUr¡ + OU() - U()) =- 3µU sene (43)
r r=a r 8() 8r r r=a a r¡ 8() 8r¡ r¡ r¡=l 2a '
y
dA = a 2 sen()d()dcp. (44)
Por lo tanto se tiene
F 3 Ua
= _µ__
2
i o
2
1í dcp i1í (cos
o
2
() + sen 2 B) sen()d() = 3nµUa 1·1í sen()d() = 61rµUa,
o
(45)
6 Aproximación de Oseen
A la vista de la solución obtenida para la esfera, podemos observar que el término viscoso
decae como (µU/ a 2 ) r¡- 3 cuando r¡ -+ oo. El término convectivo, que se ha despreciado , es del
orden de (pU 2 /a) r¡- 2 también cuando r¡ -+ oo. Si comparamos ambos términos vemos que son
del mismo orden cuando r¡ (pUa/ µ) rv 1, es decir, parar¡ rv Re- 1 » l. Por lo tanto, a grandes
distancias del cuerpo los términos convectivos se hacen tan importantes como los viscosos y no
sería válida la solución lejos del cuerpo.
En general las ecuaciones a bajos números de Reynolds no tienen solución para obstáculos
cilíndricos, y cuando se quiere utilizar la solución correspondiente a un cuerpo tridimensional (por
ejemplo la esfera) como primer término de un desarrollo para Reynolds pequeños, la siguiente
aproximación se hace infinita para distancias al cuerpo r¡ rv Re- 1 grandes. La razón de que
no exista la solución en el caso bidimensional y la singularidad del desarrollo para el caso
tridimensional se debe a que las ecuaciones no son válidas a grandes distancias .
Para obviar este inconveniente, Oseen (1910) retuvo el término convectivo en la ecuación de
cantidad de movimiento, linealizando en torno a la velocidad Ü, de modo que esta ecuación
toma la forma
p\J (U · iJ) - pU X (\! X iJ) = - \J p - µ \J X (\! X v) , (46)
La validez de esta ecuación aproximada se justifica porque los términos convectivos sólo son
importantes lejos del cuerpo, donde la velocidad ya es próxima a Ü, mientras que cerca del
cuerpo, donde la velocidad difiere apreciablemente de Ü, el término convectivo es despreciable
y la ecuación se reduce a (11).
7
La solución de las ecuaciones de Oseen (10) y (46) para el caso de la esfera fue dada por el
mismo Oseen, que determinó la fuerza:
... ( 1 + 8
F. . . = 67r µa U 3 Re ) . (47)
La solución para un cilindro circular fue obtenida por Lamb . La fuerz a, por unidad de
longitud del cilindro, es
F= 4wµÜ = 4wµÜ (48)
~ - ')' - ln GRe) ln ( 3jJeº)'
donde 1' ~ 0.577· ··es la constante de Euler. El número de Reynolds en las dos últimas ecuaciones
esta definido como: Re = aU / v, donde a es el radio de la esfera o del cilindro.
7 Efect os térmicos
8
donde n es la normal exterior al cuerpo y la integral está extendida a su superficie :E. La relación
anterior puede escribirse
Q = Nuk (T00 - Te) P, (53)
donde
k (T00
1
- Te) f
J -+ -+d
q .n O",
(54)
:E
es el número de Nusselt, que depende de la forma del cuerpo y del número de Péclét, y f, es la
longitud típica del cuerpo.
La solución de esta ecuación para un cilindro circular de radio a (f, = a) proporciona el número
de Nusselt
2
Nu=----- (56)
ln (8/ Pe) - ¡'
(¡ ~ 0.577 · ··). Este resultado fue obtenido por Cole y Rosko 3 .
8 Referencias
Batchelor, G.K., "Fluid Dynamics", Cambridge Univ. Press, 1967, pp. 229-253 .
Happel, J. and Brenner, H., "Low Reynolds Number Hydrodynamics", Prentice-Hall, 1965.
Landau, L.D. and Lifshitz, E.M., "Fluid Mechanics", Pergamon, 1959, pp. 61-71 y 76-98.
Moffatt, H.K., "Flow in which Inertia Forces are Negligible", en "Fluid Dynamics", editado
por R. Balian y J.-L. Peube, (Les Houches), Gordon and Breach, 1977, pp. 170-178.
2
El límite Pe » 1 corresponde a Re» 1 (salvo que Pr » 1). Los movimientos a altos números de Reynolds
se estudiarán en lecciones posteriores.
3
Proceeding of Heat Transfer and Fluid Mech. Institute, Berkeley. Ver también Collins and Williams, J. Fluid
Mech., Vol. 6, 1959 .