Está en la página 1de 11

TAREA DE MEDICIÓN

¿QUÉ ES LA PERSONALIDAD?

La Personalidad es el constructo psicológico que hace referencia al cómputo de


características psíquicas de un individuo. Estas características, en continuo desarrollo,
definen la organización psicológica que determina por qué las personas actúan de forma
distinta ante una misma circunstancia o situación. La Personalidad también se pregunta
por las actitudes, pensamientos y sentimientos humanos.

La personalidad, o estructura de personalidad, es el conjunto de rasgos psicológicos que


define todo el universo de sentimientos y cogniciones, que configura los comportamientos
y la manera habitual en que el individuo se relaciona consigo mismo y con los demás.

La psicología contemporánea define la personalidad, por tanto, como un patrón de


funcionamiento consolidado, que se refleja en una generalidad y coherencia de
respuestas en distintos tiempos y contextos por parte del sujeto.

TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD

 Teoría De La Personalidad De Freud

La corriente psicodinámica ha aportado diversas teorías y modelos de personalidad,


siendo las más conocidas las del padre del psicoanálisis, Sigmund Freud. Para él, el
comportamiento y la personalidad están vinculados a la existencia de impulsos que
necesitamos llevar a la práctica y el conflicto que supone esta necesidad y la limitación
que la realidad supone para su cumplimiento. Se trata de un modelo clínico e internalista.

En su primera tópica, Freud proponía que la psique humana estaba estructurada en tres
sistemas, uno inconsciente regido por la búsqueda de la reducción de tensiones y
funciona a través del principio de placer, uno consciente que es regido por la percepción
del mundo exterior y la lógica y el principio de realidad y un preconsciente en el que los
contenidos inconscientes pueden hacerse conscientes y viceversa.
En la segunda tópica Freud determina una segunda gran estructura de la personalidad
compatible con la anterior, en el que la psique está configurada por tres instancias
psíquicas, el Id o Ello, el Yo y el Superyó. El Ello es nuestra parte más instintiva, que rige y
dirige la energía interna en forma de impulsos y de la cual parten todas las demás
estructuras.
El Yo sería el resultado de la confrontación de los impulsos y pulsiones con la realidad,
siendo una estructura mediadora y en continuo conflicto que emplea diferentes
mecanismos para sublimar o redirigir las energías provenientes de los impulsos. Por
último, la tercera instancia es el Superyó o la parte de la personalidad que viene dada por
la sociedad y que tiene como principal función juzgar y censurar las conductas y deseos
que no son socialmente aceptables.
La personalidad se va construyendo a lo largo del desarrollo, en diferentes fases, en base a
los conflictos existentes entre las diferentes instancias y estructuras y los mecanismos de
defensa aplicados para intentar resolverlos.

 Teoría De La Personalidad De Jung

Además de Freud, otros muchos componentes de la corriente psicodinámica han


propuesto sus propias estructuras de personalidad. Por ejemplo, Carl Jung proponía que
la personalidad estaba configurada por la persona o parte de nuestra personalidad que
sirve para adaptarse al medio y que se relaciona con lo que los demás pueden observar y
la sombra o la parte en que se incluyen aquellas partes del Yo que no resultan admisibles
para el propio sujeto.
Asimismo a partir de los arquetipos adquiridos por el inconsciente colectivo y los
diferentes complejos que adoptamos en nuestro desarrollo hacia la identidad se van
generando diferentes tipos de personalidad en función de que las inquietudes se dirijan
hacia el interior o exterior, si son más sensitivos o intuitivos y si tienden a centrarse más
en pensamiento o sentimiento, siendo pensar, sentir, intuir y percibir las principales
funciones psicológicas.

 Teoría Fenomenológica De Carl Rogers

Desde una perspectiva humanista-fenomenológica de enfoque clínico, Carl Rogers


propone que cada persona tiene su campo fenomenológico o manera de ver el mundo,
dependiendo la conducta de dicha percepción.
La personalidad se deriva del auto concepto o simbolización de la experiencia de la propia
existencia, la cual surge de la integración de la tendencia a la actualización o tendencia a
mejorarse a sí mismo con las necesidades de sentir amor por parte del entorno y
de autoestima derivada del contraste entre su conducta y la consideración o respuesta
que reciba esta por parte del entorno. Si existen contradicciones, se emplearán medidas
defensivas tales con las que ocultar dicha incongruencia.

 Teoría De Los Constructos Personales De Kelly

Como ejemplo de teoría de la personalidad derivada del cognitivismo y el


constructivismo podemos encontrar la teoría de los constructos personales de Kelly, de
enfoque también clínico. Para este autor cada persona tiene su propia representación
mental de la realidad y actúa de manera científica intentando dar una explicación a lo que
le rodea.
Se considera que la personalidad se constituye como un sistema jerarquizado de
constructos personales dicotómicos que tienen influencia entre sí, los cuales forman una
red con elementos nucleares y periféricos mediante los cuales intentamos dar respuesta y
hacer predicciones de futuro. Lo que motiva la conducta y la creación del sistema de
constructos es el intento de controlar el medio gracias a la capacidad de predicción
derivada de ellos y a la mejora de dicho modelo predictivo mediante la experiencia.

 Teoría De La Personalidad Ideográfica De Allport

“somos entes activos que nos enfocamos hacia el cumplimiento de metas”.


Se trata de uno de los autores que considera que la personalidad que trabaja la
personalidad a partir de elementos estructurales y estables, los rasgos. Para él,
intentamos que nuestro comportamiento sea consistente y actuamos de tal manera que
creamos un sistema a partir del cual podemos hacer equivalentes diferentes conjuntos de
estímulos, de manera que podemos responder de forma parecida a distintas
estimulaciones.
Así, elaboramos maneras de actuar o expresar la conducta que nos permiten adaptarnos
al medio. Estos rasgos tienen diferente importancia en función de la influencia que
tengan en nuestra conducta, pudiendo ser cardinales, centrales o secundarios.
El conjunto de rasgos se integraría en el propium o sí mismo, el cual se deriva de la
autopercepción y autoconciencia generadas y compuestas por de la experiencia de
identidad, percepción la corporalidad, los intereses y la autoestima, la racionalidad y la
intencionalidad.
 Teoría De La Personalidad De Cattell

Considera que la personalidad puede entenderse como función de un conjunto de rasgos,


los cuales se entienden como la tendencia a reaccionar de determinada manera a la
realidad.
Estos rasgos pueden dividirse en temperamentales (los elementos que nos indican cómo
se actúa), dinámicos (la motivación de la conducta o actitud) o aptitudinales (las
habilidades del sujeto para llevar a cabo la conducta).
La dinámica de la personalidad también depende de la motivación, encontrando
diferentes componentes en forma de rasgos dinámicos o actitudes entre los que se
encuentran los ergios (forma de actuar ante estimulaciones concretas como el sexo o la
agresión) y los sentimientos.

 Teoría De La Personalidad De Eysenck

Propone que las diferencias de personalidad se basan en elementos biológicos que


permiten procesos como la motivación o la emoción.
La personalidad es una estructura relativamente estable del carácter, el intelecto, el
temperamento y el físico, aportando respectivamente cada uno de ellos la voluntad, la
inteligencia, la emoción y los elementos biológicos que los permiten.
Eysenck encuentra y aísla tres factores principales en los cuales pueden agruparse todos
los demás, siendo estos el psicoticismo o tendencia a actuar con dureza, el neuroticismo o
estabilidad emocional y la extraversión/introversión o focalización en el mundo exterior o
interior.
Los tres factores del modelo PEN integran los diferentes rasgos de personalidad y
permiten que el organismo reaccione de determinadas maneras a la estimulación
ambiental a partir de respuestas conductuales más o menos específicas y frecuentes.

 Teoría Del Big Five De Costa Y Mccrae

Otra de las grandes teorías factoriales y basadas en un enfoque léxico (partiendo de la


idea de que los términos con los que explicamos nuestro comportamiento permiten tras
un análisis factorial establecer la existencia de agrupaciones de características o rasgos de
personalidad), el Big Five o teoría de los cinco grandes de Costa y Mccrae es uno de los
modelos de personalidad más extendidos.
Mediante el análisis factorial este modelo indica la existencia de cinco grandes factores de
personalidad que todos tenemos en mayor o menor grado. Se trata del neuroticismo o
ajuste emocional, la extraversión como cantidad e intensidad de relaciones personales, la
cordialidad como las cualidades vertidas en la interacción, la responsabilidad o toma de
conciencia, organización, control y motivación hacia las metas y la apertura a la
experiencia o interés en experimentar.
Cada uno de dichos grandes factores se compone de rasgos o facetas. Los diferentes
rasgos están relacionados entre sí, y en conjunto dan cuenta de la manera de percibir el
mundo y reaccionar ante él.

 El Modelo Bis Y Bas De Gray

Gray propone un modelo factorial y de carácter biológico en el que considera que existen
dos dimensiones que permiten elementos como la emoción y el aprendizaje, partiendo de
la combinación de los factores extraversión y neuroticismo de Eysenck.
En este caso, se propone que la ansiedad, como combinación entre introversión y
neuroticismo, actuaría como mecanismo inhibidor de la conducta (BIS o Behaviour
Inhibition System), mientras que la impulsividad (que equivaldría a una combinación entre
extraversión y neuroticismo) actuaría como mecanismo de aproximación y motivación a la
acción (BAS o Behaviour Approximation System). Ambos sistemas actuarían en conjunto
para regular nuestra conducta.

 Modelo De Cloninger

Este modelo contempla la existencia de elementos temperamentales, siendo estos la


evitación del dolor, la dependencia a la recompensa, la búsqueda de novedades y la
persistencia. Estos elementos de carácter biológico y adquirido darían cuenta del patrón
conductual que aplicamos en nuestra vida, y dependen en gran medida del equilibrio
neuroquímico del cerebro en lo que se refiere a los neurotransmisores.
También incorpora elementos del carácter que ayudan a situar al propio yo en la realidad,
siendo estos la cooperación como comportamiento social, la autodirección o autonomía y
la auto trascendencia como elemento que nos integra y nos da un papel en el mundo.
 Teoría Del Aprendizaje Social De Rotter

Este autor considera que el patrón de conducta que empleamos habitualmente es un


elemento derivado del aprendizaje y la interacción social. Considera al ser humano un
elemento activo y utiliza un enfoque cercano al conductismo. Actuamos en base a la
existencia de necesidades y de la visualización y valoración tanto de éstas como de las
posibles conductas que hemos aprendido a llevar a cabo. Aunque cercano al
interaccionismo, se sitúa en una perspectiva situacionista
El potencial de conducta es la probabilidad de realizar determinada conducta en una
situación concreta. Este potencial depende de elementos como las expectativas (tanto
de la capacidad de influir en los resultados como en el propio resultado y la posible
obtención de beneficios tras la conducta) y la consideración o valor otorgado a las
consecuencias de realizar la conducta en cuestión, así como de la manera en que la
persona procesa y valora la situación (conocida como situación psicológica).

 El Enfoque Interaccionista

A lo largo de la historia han sido muchos los autores que han una de dos posturas: que la
personalidad es algo innato o bien que se deriva del aprendizaje. Sin embargo existe una
tercera opción, defendida por autores como Mischel, en la que la personalidad es
formada por la interacción entre elementos innatos y los fenómenos que vivimos.
Esta postura explora las características de personalidad a través del estudio de la
existencia de consistencia de la conducta a través de las situaciones, la estabilidad
temporal y la validez predictiva de los rasgos. Las conclusiones indicaron que deberían
emplearse otro tipo de categorizaciones diferentes de los rasgos, pues estos no reflejan
un modelo predictivo totalmente válido al ser de carácter más innatista. Defiende que
resulta más eficiente hablar de competencias, valores, expectativas, constructos y
autocontrol.
Otros autores como Allen reflejan que la consistencia puede variar según la persona, así
como los valores principales y los aspectos que mejor predicen la conducta. De este modo,
los rasgos sí serían consistentes pero solo si se tienen en cuenta aquellos que resultan más
relevantes para cada persona.
MEDICIÓN DE LA PERSONALIDAD

Charles G. Morris (Psicología – Editorial Prentice – Hall Hispanoamericano, S.A.), plantea


los siguientes métodos que permiten medir la personalidad de un individuo:

• Entrevista Personal: Conversación con la finalidad de reunir información del


entrevistado, se emplea en situación única.

• Test Objetivos: Llamados inventarios de personalidad, probar escritos que se aplican a


los sujetos y que se califican atendiendo a un método normalizado.

• Test Proyectivos: Estos Test constan de estímulos ambiguos sencillos que provocan un
número infinito de respuestas.

Cuestionarios. Formados por series de preguntas sobre ti mismo diseñadas a partir de una
actitud positiva hacia ti mismo, estas pueden ser variadas o ambiguas, según sea el caso.

Proyectivos. También conocidos bajo el nombre de láminas proyectivas, consisten en


diferentes láminas con manchas de tinta, dibujos o escenas, los cuales se deben
interpretar por ti. Koch, Rorschach y De Apercepción Temática, son los más frecuentes.

De Aptitudes. Tienen como objetivo evaluar la cantidad y calidad de la capacidad


intelectual de un individuo, es decir su nivel de conocimientos en áreas específicas como
verbal, numérica y abstracta, para conocer el tipo de actividades en el cual se presenta
más habilidad.

CLASIFICACIÓN DE LOS TEST DE PERSONALIDAD


Los instrumentos que se utilizan para evaluar la personalidad son clasificados por norma
general en función de los criterios metodológicos que han determinado su construcción.
En cualquier caso, la mayor parte de estas pruebas se basa en la medición numérica de
constructos de personalidad y en la comparación del individuo evaluado con otros.

 Racionales o deductivos

Los test racionales o deductivos se construyen a partir de elementos teóricamente


relacionados con las variables que se pretende medir. Para ello los autores de la prueba se
basan en criterios hipotéticos y se presupone que existe una correlación entre estos y los
ítems del test.
En el año 1914, poco después del estallido de la Primera Guerra Mundial, el psicólogo
estadounidense Robert Sessions Woodworth creó la primera prueba de evaluación de la
personalidad. La “Hoja de Datos Personales de Woodsworth” (PDS) era una prueba de
screening psicopatológico que tenía el objetivo de detectar la predisposición a la neurosis
en soldados.
La PDS estaba compuesta por 116 ítems, que consistían en preguntas de respuesta
dicotómica (“Sí/No”) como “¿Se te pasan por la mente pensamientos que no te dejan
dormir?” y “¿Tienes un fuerte deseo de suicidarte?”. Se trataba de una prueba muy
susceptible de falseamiento por parte de hombres que querían evitar el servicio militar.
Los test de personalidad racional son los menos habituales de todos los tipos, puesto que
enseguida fueron sustituidos por otros basados en criterios empíricos y factoriales, que
dan lugar a instrumentos de evaluación más fiables y válidos. Sin embargo, y como
veremos más adelante, algunos autores combinan criterios racionales con otros distintos.

 Empíricos (basados en un criterio externo)

Los instrumentos de esta clase se centran en valorar la correlación entre las respuestas del
sujeto a los ítems de evaluación y un criterio externo determinado; así, los elementos del
test deben ser útiles para predecir la dimensión relevante.
En estos casos se evalúa a un grupo de sujetos que muestran ciertas características (como
un trastorno psicológico) y se analizan los ítems por tal de escoger los más representativos
de la variable criterio. A partir de estos se construye la prueba definitiva, que se aplica a
otros sujetos por tal de valorar el mismo constructo.
El test de personalidad empírico más conocido es el Inventario Multifásico de
Personalidad de Minnesota (MMPI), desarrollado por Starke R. Hathaway y Charnley
McKinley en el año 1942. El MMPI se utiliza principalmente para evaluar la presencia de
rasgos de personalidad relevantes en la psicopatología, como la paranoia, la depresión o
la introversión social.

 Factoriales o test de rasgos

Las pruebas factoriales de la personalidad son las que han tenido más éxito. Estos tests
evalúan diversos factores, es decir, conjuntos de ítems que correlacionan entre ellos; por
ejemplo, el factor “Cordialidad” estaría compuesto por elementos que evalúan aspectos
como la franqueza, la modestia, el altruismo o la sensibilidad a las necesidades de los
demás.
El Cuestionario Factorial de la Personalidad de Raymond B. Cattell, más conocido como
“16 PF”, ha sido uno de los tests de personalidad más utilizados durante mucho tiempo.
Este test evalúa 16 factores de primer orden (o básicos) que se agrupan en 4 más amplios:
Rebeldía, Autosuficiencia, Autocontrol y Tensión.
No obstante, en la actualidad el test de personalidad hegemónico es el Inventario NEO-PI-
R de Costa y McCrae, que también se basa en criterios factoriales. Esta prueba se enmarca
en el modelo de los cinco grandes factores de personalidad, construido a partir de datos
de investigación y con las aportaciones de muchos expertos distintos.

 Mixtos (con criterios combinados)

Ciertos test de personalidad no pueden ser considerados estrictamente racionales,


empíricas ni factoriales, sino que han sido construidos a partir de una combinación de
criterios. Una de las pruebas que mejor ejemplifican este tipo de metodología es el
Inventario Clínico Multiaxial de Theodore Millon (MCMI), de la que se han derivado
distintos test.
El MCMI fue construido mediante el uso de los tres criterios de los que hemos hablado. En
primer lugar este autor se basó en su propia teoría para escoger un gran número de ítems
(estrategia racional), después seleccionó una pequeña parte de estos comparándolos con
criterios externos (empírica) y finalmente identificó las correlaciones entre elementos
(factorial). https://psicologiaymente.com/personalidad/tipos-test-personalidad

¿QUÉ ES UNA EVALUACIÓN PSICOLÓGICA?


La Evaluación Psicológica es un proceso mediante el cual el psicólogo extrae conclusiones
respecto a los problemas de una persona, su inteligencia, su rendimiento, su capacidad de
concentración y trabajo, sus rasgos de personalidad, etc. Normalmente, se realiza por
medio de la aplicación de una serie de tests objetivos y de una entrevista clínica; y culmina
con la redacción de un informe.

¿QUÉ ES UN DIAGNOSTICO?

° El Diagnostico Psicológico es un proceso de investigación específico y pertinente al perfil


y quehacer del profesional Psicólogo, con objetivos y finalidades delimitadas así como
coordenadas diferenciadas.

° El diagnóstico psicológico, sin embargo, se refiere a síntomas o funcionamientos


mentales-emocionales que no tienen una base orgánica observable –– se infieren por los
comportamientos del paciente o por lo que dice que le está pasando.
MANUALES DE CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS MENTALES

 El DSM: Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales es utilizado


por psiquiatras, psicólogos y demás personal de salud para diagnosticar
desórdenes mentales. El DSM es publicado por la Asociación Americana de
Psiquiatría (APA) y abarca todas las categorías de trastornos de salud mental tanto
para adultos como para niños. El DSM se utiliza particularmente en los Estados
Unidos para diagnóstico psiquiátrico, recomendaciones de tratamiento y
propósitos de cobertura de seguros.

 La CIE-10 (clasificación internacional de enfermedades) tiene un carácter


eminentemente descriptivo. Establece diagnósticos con definiciones para cada uno
de ellos. El capítulo V (designado también con la letra F) está dedicado a
enfermedades mentales. CIE-10 es un sistema pensado con finalidad básicamente
epidemiológica, por este motivo es menos precisa y por esto mismo permite
mayor juego en la apreciación clínica (como señalan E. Requena y A. Jarné, en
Manual de Psicopatología clínica).
 El DSM-IV de la American Psychriatric Associatio (APA) funciona por criterios y
surgió como reflejo de la insatisfacción con el sistema CIE. Es mucho más completo
y preciso y se realizó incorporando desarrollos de la experiencia clínica, así como
avances de la investigación.
¿QUÉ ES LA OBSERVACIÓN CLÍNICA?

La observación clínica es un instrumento de diagnóstico médico fundamental, no sólo para


el esclarecimiento diagnóstico, terapéutico y pronóstico, sino para su utilización en
sistemas preventivos y rehabilitatorios.

Se propone un abordaje metodológico para la observación clínica de la movilidad


espontánea del lactante en los primeros ocho meses de vida, considerando a partir de la
propuesta de H. Prechtl una apreciación gestáltica del movimiento, una descripción
cualitativa de sus características, la base postural y refleja sobre la que sustenta y su
evolución. Se pudo comprobar la correspondencia de la observación gestáltica con el resto
de los indicadores utilizados.

HISTORIA CLÍNICA DE ADULTO

La historia clínica es una herramienta que reúne todos los datos disponibles que permiten
explicar el curso de la vida del paciente. La información recogida y ordenada en la historia
clínica es un registro de datos imprescindible para el desarrollo de actividades del
profesional.

La historia clínica psicológica es un conjunto de datos – información – donde se incluyen


datos personales (biológicos, funcionales, emocionales, etc.) familiares, escolares,
sociales, laborales, etc. Estos datos constituyen la base para el psicodiagnóstico y la
orientación. No es una mera recolección de datos, se completará a lo largo de las
entrevistas y el tratamiento con la información más pertinente y operativa para trabajar
con el paciente.

Los datos personales y algunos más se completarán en la primera entrevista, el resto se


completará a lo largo de los encuentros.

Los datos que se van a registrar, se completan con las observaciones y entrevistas
realizadas. Así también como los resultados de las técnicas psicológicas administradas y
los informes del profesional.

También podría gustarte