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Fernando Ordóñez

Derechos

24/ Derechos humanos


humanos

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Carlos Contrera
Fernando Ordóñez es Doctor en Filosofía y Doctor en Filosofía en Derechos Humanos por la Universidad
de Minnesota (Estados Unidos). Obtuvo una Maestría en Literatura Hispánica por la misma Universidad y es
egresado del Instituto de Profesores Artigas en Filosofía.  Fue Director General del CLAEH y actualmente es
Profesor Adjunto en la Universidad Católica y Asistente en la Universidad de la República. Es autor de varias
publicaciones de su especialidad.
Fernando Ordóñez
Derechos humanos

Í N D I C E

Introducción.............................................................................................5

Derechos humanos: una idea compleja.....................................9


El concepto de persona.............................................................. 11
El concepto de derechos humanos.......................................16
Los derechos humanos y el poder público........................17
El respeto y la garantía
de los derechos humanos.........................................................18

Políticas culturales
de la memoria histórica en el Uruguay.................................. 23
Carlos Contrera

Derechos humanos y gestión pública...................................... 47

Miradas hacia el futuro.................................................................. 55

Bibliografía.............................................................................................61
Carlos Contrera
Entierro de los restos de Ubagesner Cháves Sosa.
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Introducción

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Cuando hablamos de derechos humanos tenemos las miradas sobre los derechos humanos en el Uru-
la impresión de estar ante un tema tan importante guay, un intento de iniciar un diálogo con la inten-
como inabarcable. Y esa afirmación es solo en parte ción de alcanzar consensos.
verdad. Porque como escribió Luis Pérez Aguirre los Un supuesto con el que iniciamos la tarea es que
derechos humanos, como la vida humana, nacen en los uruguayos necesitamos nuevas miradas sobre los
un grito, “un grito escuchado y sentido como en carne derechos humanos: somos una comunidad dividida
propia”.1 Toda respuesta política y jurídica, que luego y requerimos encontrar lenguajes que nos permitan
llamamos derechos humanos, “es posterior a esa ins- hablar de otra manera sobre nosotros mismos. Una
tancia primordial del ‘escuchar’ y ‘sentir’ el grito de manera que no suponga la cancelación del diferente,
quien se ha convertido en víctima, de quien ha sido apostando por una diversidad compleja.
despojado de su dignidad o de sus derechos”.2 Todos
Por otra parte, importa destacar desde el comien-
podemos escuchar esos gritos y responder como so-
zo, que lo que encontrará el lector no es un trabajo
ciedad a esas demandas.
académico, sino un material con fines de difusión, que
Desde ese lugar de escucha y construcción, parti- deja planteados algunos problemas y ofrece muy pocas
mos. El presente trabajo es una invitación a ampliar soluciones. Por cierto no se trata de un texto jurídico
1 Luis Pérez Aguirre, La opción entrañable: ante los despojados de ni de un texto histórico, porque sería muy extenso
sus derechos. Ed. Sal Terrae, Santander, 1992. p. 16. narrar la trayectoria de los derechos humanos en el
2 Ob. cit., p. 17. Uruguay, ya que cada uno de estos derechos podría

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requerir una historia propia. Lo que se ofrece, en pri- concepto “derechos humanos” se plantea en el país a
mer lugar, es un estudio del concepto derechos humanos y partir de las violaciones cometidas por la dictadura,
de su extensión, buscando fundar el marco de nuestro donde la desaparición forzada, nunca resuelta, se ha
análisis. Esto es sustancial para superar reduccionis- convertido en un problema central.
mos y maximalismos en el uso del concepto. Las re- Si bien nuestra concepción de los derechos parte de
ducciones que sería sustancial evitar son aquellas que su afirmación y no desde el hecho de su violación, lo
restringen los derechos humanos a los derechos civiles cierto es que la historia del uso del término no puede
y políticos, tanto como aquellas que no presentan una escindirse de ese pasado. En este punto hemos reto-
perspectiva integral. En este sentido, entendemos que mado un trabajo realizado en 2007 en el marco del
si bien una sociedad democrática admite diferentes Programa de Derechos Humanos del CLAEH.3 Entende-
modelos de persona, no puede prescindir de la dis- mos que el campo de investigación e intervención en
cusión del tipo abstracto de persona que quiere cons- derechos humanos es parte del debate, lo cual requiere
truir, lo que implica definir el modelo de convivencia conectar metodológicamente con trabajos y reflexio-
que se desea y que constituye el trasfondo donde se
nes realizadas en equipo. En el presente fascículo
despliega la dignidad personal, o se la limita.
expandimos esa mirada tanto en el tiempo, como en
También queremos evitar un maximalismo que algunos aspectos que nos interesaba destacar .
percibe una cuestión de derechos humanos en cada
Por último ofrecemos una breve mirada sobre los
reclamo sectorial, sin tener en cuenta la misma in-
posibles usos de los derechos humanos entre los urugua-
tegralidad que atiende de manera dialéctica la ten-
yos. Es una visión personal que se ofrece para el de-
sión entre interés general e interés particular. En
bate de ideas.
esta primera parte hemos recurrido a materiales de
diferentes autores que utilizamos en la docencia en A doscientos años de una fundación azarosa, se-
estas áreas. Este tramo busca ser descriptivo y admite guimos sintiendo que el Uruguay es un entrañable
otras aproximaciones. nosotros que nos sigue convocando en su construc-
ción. La perspectiva de los derechos humanos puede
En la segunda parte nos proponemos analizar los
diferentes usos del concepto de derechos humanos que hemos ser un lenguaje que nos ayude a repensarnos, porque
utilizado los uruguayos de manera general. Para esta tarea pese a mucha retórica y acciones, los más infelices
hemos seguido una lectura que vincula estos usos del siguen sin ser privilegiados y porque los modos de
lenguaje con los derroteros del tema de la desaparición construir derechos son un problema de todos.
forzada en el Uruguay durante la última dictadura. 3 En particular releemos el trabajo realizado en colaboración,
Nuestra hipótesis es que los diferentes momentos del que fuera financiado por la Fundacion Konrad Adenauer–Uruguay:
debate sobre este tema han sido los aspectos determi- Lucía Martorelli, Javier Miranda, Giorgina Santangelo y Fernando
Ordóñez, Itinerarios de los Derechos Humanos en el Uruguay 1985-
nantes para el uso del concepto de derechos humanos 2007: Temas, Actores y Visibilidad Pública. Montevideo: Fundación
entre los uruguayos. De algún modo la expansión del Konrad Adenauer, 2008.

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Manifestación durante la votación de la legalización de la marihuana.

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Derechos humanos: una idea compleja

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Hablar de derechos humanos es hoy un lugar común. Desde la fundación de las Naciones Unidas se
Nadie parece estar dispuesto a sostener, al menos pú- creó un Comité de Derechos Humanos, encargado de
blicamente, una perspectiva que los niegue. El con- elaborar una Declaración Universal, que fue aprobada
cepto, que supone que son derechos inalienables de por la Asamblea General de la ONU el 10 de Diciem-
la persona, se ha desarrollado en un largo proceso bre de 1948. Esta declaración se define como el “ideal
histórico que se aceleró a partir de la Segunda Guerra común por el que todos los pueblos y naciones deben
Mundial. Así pues, la comprensión del término re- esforzarse a fin de que, tanto los individuos como las
quiere de un análisis de las circunstancias en que fue instituciones, inspirándose constantemente en ella,
gestada la Declaración Universal de Derechos Humanos. promuevan, mediante la enseñanza y la educación, el
Ante las atrocidades que trajo el conflicto bélico, los respeto a estos derechos y libertades, y aseguren, por
países aliados firmaron la Carta del Atlántico en 1941, medidas progresivas de carácter nacional e interna-
que prefiguró la creación de las Naciones Unidas en cional, su reconocimiento y aplicación universales
1945. La misión principal del organismo internacio- y efectivos, tanto entre los pueblos de los Estados
nal fue lograr consenso y cooperación internacional Miembros, como entre los de los territorios colocados
para solucionar problemas sociales, culturales, polí- bajo su jurisdicción” (Preámbulo de la Declaración
ticos y humanitarios, y velar por el respeto de los de- Universal). Esto implica que las personas humanas
rechos humanos sin distinción de raza, sexo, idioma poseen derechos no transaccionales al momento
o religión. de entrar al contrato social, y que los gobiernos no

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pueden hacer uso ilimitado del poder que ostentan ni Con el proceso independentista en América Lati-
desconocer estos derechos. na y con un sinnúmero de procesos revolucionarios
La Declaración Universal se ha convertido en una re- en Europa, se comienza a promulgar constituciones
ferencia fundamental en la construcción de un sistema de carácter liberal que protegen los derechos civiles
judicial internacional, que en el contexto de la globali- y políticos, así como buscan la salvaguarda de las li-
zación promete un amplio alcance para la humanidad. bertades de propiedad y de vida. El objetivo primor-
Si bien la expresión “derechos humanos” es de dial de esas constituciones es la limitación del poder,
origen reciente, su fórmula de inspiración france- en lo que es posible ver un decaimiento del absolu-
sa —”derechos del hombre”— se remonta a las últi- tismo político y monárquico. Esta etapa consolida lo
mas décadas del siglo XVIII. Pero la idea de una ley que conocemos como derechos de primera generación.
o legislador que define y protege los derechos de los Las luchas sociales que se desarrollan en Occi-
hombres es muy anterior y entronca, entre otros, con dente como consecuencia de la revolución industrial,
el derecho “ad gentes” desarrollado por los tratadistas demandan un nuevo nivel de derechos. A los sur-
españoles, como consecuencia directa de la expe- gidos en esta etapa se los llama derechos de segunda
riencia colonial ibérica en tierras americanas. generación, que son específicamente derechos sociales,
De todos modos, los historiadores en derechos hu- económicos y culturales, que representan la esperan-
manos remarcan la importancia de las luchas que za de los sectores más sumergidos de mejorar sus
libraron los ingleses para limitar el poder del rey, condiciones de vida, tanto en lo económico, en lo
en un proceso cuyos hitos más significativos fueron social como en lo cultural. Estas ideas comienzan a
la Petition of Rights de 1628, y el Bill of Rights de 1689. plasmarse en las constituciones de México de 1917 y
Estas ideas se reflejan también en las Revoluciones en la de Alemania de Weimar de 1919.
norteamericana y francesa del siglo XVIII; especial- En este proceso han surgido diferentes formas de
mente en la Declaración de Independencia de los Estados clasificar los derechos humanos; una de ellas es la
Unidos, Declaración de Derechos de Virginia de 1776, llamada de “tres generaciones”, en la que se toma en
Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, cuenta su protección progresiva. En esta clasificación
promulgada en París en 1791. se habla de derechos de primera, segunda y tercera
En esos documentos se reconocen varios dere- generación.
chos de los ciudadanos, tales como los correspon- Asociados a los ideales de la Revolución francesa,
dientes a la libertad, a la propiedad, a la seguridad, los llamados de primera generación imponen al Estado el
a resistir la opresión, etcétera. Estos derechos son deber de respetar siempre los derechos fundamentales
comprendidos como inherentes al hombre, aunque del ser humano. Entre otros, el derecho a la vida, a la
este hombre al que se refieren sea exclusivamente integridad física y moral, a la libertad personal, a la se-
el “ciudadano”, lo que excluye a la inmensa mayo- guridad personal, a la igualdad ante la ley, a la libertad
ría de los miembros de la sociedad. de pensamiento, de conciencia y de religión, etcétera.

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Los de segunda generación son los derechos colec- El concepto de persona

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tivos, también llamados derechos sociales, económi- En la actualidad el concepto “derechos humanos” no
cos y culturales. Nacen en el marco de la Revolu- resulta unívoco, ya que no es la única fórmula que se
ción Industrial, como consecuencia de la desigualdad ha utilizado para nombrar los derechos inherentes a
económica. Entre los derechos económicos están el las personas. Entre otras concepciones, y como fruto
derecho a la propiedad (individual y colectiva), a la de la Revolución Francesa, se ha utilizado el concepto
seguridad económica, a la vivienda, etc. “derechos del hombre”. Este supone una naturaleza
humana, de la cual todos las personas participan por
Los sociales incluyen, entre otros, el derecho a la
igual. Asimismo, los llamados derechos individuales
alimentación, al trabajo (a un salario justo y equita-
remarcan la individualidad de cada ser humano des-
tivo, al descanso, a sindicalizarse, a la huelga), a la de una perspectiva liberal, donde el individuo es con-
seguridad social, a la salud, a la educación. Por su cebido como el sujeto central de los derechos.
parte, los culturales tienen diferentes formulaciones,
De todos modos resulta necesario efectuar algunas
pero entre ellos se incluye el derecho a participar en precisiones terminológicas respecto a los derechos
la vida cultural del país, a gozar de los beneficios de humanos y otras áreas y conceptos de las ciencias
la ciencia, de la investigación científica, literaria y jurídicas. Entre estos están los derechos constitucio-
artística.4 nales, que son los reconocidos por la Constitución
Por último, los derechos de tercera generación, o nacional, por tanto sujetos al territorio del Estado.
derechos de los “pueblos” o de “solidaridad”, surgen Asimismo, se habla de la existencia de derechos po-
en las últimas décadas del siglo XX como respuesta a sitivizados, que son los que están formalizados den-
la necesidad de cooperación entre las naciones, así tro de un orden normativo.
como de los distintos grupos que las integran. Se for- Siguiendo los planteos de Luigi Ferrajoli es po-
ma por los llamados derechos de los pueblos: a la paz, sible definir a los derechos humanos como aquellas
al desarrollo económico, a la autodeterminación, a expectativas de prestaciones, o de no lesiones, que
un ambiente sano, etcétera. se atribuyen de manera universal e indisponible, a
todos los individuos en cuanto personas, ciudadanos
A pesar de su diversidad, la aplicación de uno de y/o capaces de obrar. Por tanto los derechos huma-
los derechos no excluye a los demás, de acuerdo con nos son previos a cualquier teorización del contrato
el principio de integralidad. social y se constituyen como un “denominador co-
mún” sobre el que todos los países integrantes de
las Naciones Unidas se han puesto de acuerdo. Esta
4 Mariella Saettone, “El Estado de Derecho y los Derechos Sociales definición es teórica y estructural, ya que prescinde
y Culturales de la Persona”. Revista IIDH , Vol. 40, 2004. http://www.
juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/iidh/cont/40/pr/pr7.pdf. [23 de las circunstancias de este o aquel ordenamiento, o
de marzo 2013]. de si tales derechos se encuentran o no formulados.

11
Pero no es una definición dogmática, es decir, formu- una lógica jurídica de posesión.7 El llamado Descu-
lada con referencia a las normas de un ordenamiento brimiento trastocó la idea de totalidad y planteó el
concreto.5 problema de la relación entre las partes, lo cual su-
La Declaración de Viena de 1993 establece que los puso pensar las formas en que esas partes se iban a
derechos humanos son universales, indivisibles e in- corresponder políticamente. La idea de Imperio en
terdependientes. En este sentido, de acuerdo con J. tanto administrador de diferentes naciones era fun-
cional a la situación, pero un verdadero conflicto en
Donnelly, el modelo de la Declaración Universal aborda
la conciencia moral de las élites españolas emergió
los derechos humanos desde una perspectiva holísti-
concomitantemente con la empresa conquistadora.
ca, entendiéndolos como una estructura indivisible
Este debate contó con grandes hitos, entre otros, el
en la cual el valor de cada derecho es significativa-
sermón del Padre Antón de Montesinos en la isla de
mente comprendido en relación a los otros.6
La Española en el Adviento de 1511 cuando predicó
La universalidad de los derechos humanos nos a los colonos recién establecidos en la isla en estos
parece sostenible desde una perspectiva espacial, en términos:
tanto son reconocidos para todas las personas que “Dijo él, que todos estáis en pecado mortal y
viven en el planeta Tierra en un contexto temporal en él vivís y morís, por la crueldad y tiranía
determinado y evolucionan en la medida en que han que usáis con estas inocentes gentes. Decid,
respondido a necesidades de estos contextos. Tradi- ¿con qué derecho y con qué justicia tenéis en
cionalmente se ha considerado que los derechos hu- tan cruel y horrible servidumbre a estos in-
manos son consecuencia de la teoría ilustrada del dios? …¿Cómo los tenéis tan opresos y fatiga-
siglo XVIII. Esta periodización descuida antecedentes dos, sin darles de comer ni curarlos en sus
por demás valiosos para la conceptualización de los enfermedades, que de los excesivos trabajos
derechos fundamentales, pues desconoce los procesos que les dais incurren y se os mueren, y por
teóricos y prácticos que se desarrollaron a partir del mejor decir, los matáis, por sacar y adquirir
descubrimiento de América, particularmente en Es- oro cada día?…”.8
paña y sus colonias. Al tener que ubicar a América y En este célebre sermón Montesinos inauguraba
a la persona americana en el concierto de ideas que una visión diferente de la conquista colonización,
explicaban el lugar del hombre europeo en el mun- donde el indio tenía un valor en sí mismo, por tanto
do, este conceptualizó lo americano primero desde no podía ser aniquilado en su cuerpo, aunque otro
5 Luigi Ferrajoli, “Universalismo de los derechos fundamentales y 7 José Maravall, “José Antonio Maravall. El descubrimiento de
multiculturalismo”, en Revista Internacional de Filosofía política, Nº. 30 América en la historia del pensamiento político”. Revista de estudios
pp. 57 y ss. políticos, 1952, p. 397.
6 Jack Donelly, Universal Human Rights: In Theory and Practice, Cor- 8 Bartolomé de las Casas, Obras completas, Alianza Editorial, 1989-
nell University Press, Ithaca, 2003, p. 23 y ss. 1999.

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problema planteaba su ‘alma’. Por supuesto que los Dentro de un proceso histórico, esta legislación

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derechos castellanos sobre las Indias no eran cues- indiana va reconociendo una serie de derechos a los
tionados en este discurso, pero sí se constituía desde nuevos súbditos reales, aunque estos derechos fueron
el mismo contexto histórico una perspectiva radical- en la práctica desconocidos por las autoridades colo-
mente diferente sobre la presencia europea en Amé- niales, en la medida en que la igualdad con los nati-
rica, que de varias formas sobrevive hasta nuestros vos afectaba directamente los intereses de los colonos
días en el continente. españoles o criollos. De todos modos, esta legislación
La perspectiva que asume Montesinos es, en pri- incorpora una lógica jurídica de derechos a la ya re-
mer lugar, jurídica y en segundo término ética, cues- gistrada lógica de posesión.
tionando el derecho de los encomenderos y el criterio Esta mirada pragmática estaba basada en una
de justicia que ellos utilizaban con los indios. Pero en concepción en desarrollo de la dignidad humana que,
un segundo momento, el discurso interroga a los pa- podemos argüir, se encuentra en la base de los dere-
rroquianos sobre los derechos de los indios que apa- chos fundamentales contemporáneos.
recen como supuestos: éstos deben ser alimentados, A los efectos de seguir con el análisis se impone
sometidos a un régimen laboral que no los aniquile la necesidad de explicitar los fundamentos de estos
y deben ser atendidos en sus necesidades médicas. derechos que estamos usando como clave hermenéu-
Puede argüirse que en verdad el sermón hace hinca- tica de exploración textual e histórica. La caracterís-
pié en el cuidado de la fuerza de trabajo que sustenta tica del análisis histórico y cultural ha estado cen-
el modelo económico imperante; pero ese no es el trada en las perspectivas políticas, económicas y/o
tono del discurso, pues en el final de la cita es posi- jurídicas de cada contexto. Pero para sentar las bases
ble colegir que Montesinos contrapone el valor de la de una hermenéutica desde los derechos fundamenta-
persona del indio al fin económico de la conquista, les debemos recurrir a un abordaje que parta de una
que es la obtención del oro. El fraile dominico opta antropología filosófica. Responder a la pregunta so-
claramente por el valor de la persona que trasciende bre la persona está en la base de toda conceptualiza-
la actividad mercantil, que no niega por cierto, pero ción sobre sus características y por tanto sus posibles
que no prioriza. deberes y derechos.
Esta visión que inaugura en América el discurso Como indica Hernán Vidal, es necesario prestar
de Montesinos encuentra en el devenir histórico su especial atención al artículo tercero de la Declaración
lugar en las concepciones milenaristas y utópicas que Universal de los Derechos Humanos proclamada por
especialmente muchos frailes trajeron a las Indias. las Naciones Unidas en 1948: “Todo individuo tiene
Estos frailes dejaron su impronta en la legislación derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su
indiana que buscó responder a los problemas que ge- persona”.9 En este artículo los términos “individuo”
neraba el contexto americano. El caso de fray Bar- 9 Hernán Vidal, Crítica literaria como defensa de los derechos huma-
tolomé de las Casas es emblemático en este sentido. nos: cuestión teórica, Newark, Juan de la Cuesta, 1994.

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y “persona” cobran especial interés, pues no siempre En este contexto entendemos que lo humano
fueron objeto de derecho todos los individuos dentro siempre se comprende partiendo de su existencia,
de la sociedad. En el marco del derecho romano, por porque la persona no permite ser objetivada en tanto
ejemplo, quedaban excluidos de una representación sujeto, de lo cual la pregunta sobre lo humano siem-
ante la ley los esclavos, que respondían a la voluntad pre nos remite fenoménicamente a una determinada
de los amos. Este concepto de persona que etimo- forma de ser-ahí y en relación. Mientras el ser-ahí se
lógicamente significa “máscara” y se originó en la relaciona con la cualidad de ser-en-el-mundo, la rela-
antigua tradición teatral greco-romana, distingue a cionalidad de lo humano nos abre a la característica
las personas de los objetos y, como tales, las reconoce del ser-con-los-otros.12 En esta correspondencia pode-
como personas jurídicas. mos argüir que lo humano implica la posibilidad del
Asimismo, el artículo tres de la Declaración Univer- encuentro con el ‘otro’, mas “lo humano se descubre
sal conjunta el término “máscara=persona” con los de como el lugar del ser-con y del ser-para-los-otros
“vida”, “libertad” y “seguridad”, de modo que afirma como realización de un anhelo de búsqueda de reci-
que la sociedad debe ser un espacio “en que los poten- procidad… En este horizonte descubre el hombre su
ciales de la humanidad debieran manifestarse con la propia dignidad, la resistencia contra todo intento
posibilidad de que los seres humanos jueguen el mayor de cosificación”.13 En esta perspectiva E. Levinas pro-
número de los roles que constituyen la organización pone que la manifestación del rostro del otro, es decir
social”.10 De modo que todo individuo es valioso para su existencia corpórea, se impone por su propia fuerza
la sociedad en tanto tiene algo que aportar, con la sola e introduce a la persona en la experiencia de lo meta-
excepción de aquellos que se excluyen por el crimen físico.14 Este reconocimiento del rostro del otro no se
o la enfermedad psíquica positivamente demostrada. da solamente de forma psicológica, sino de modo ético,
Se requiere de una larga acumulación cultural para pues el otro me exige ser reconocido, el otro es presen-
que el potencial humano sea implementable a través cia corpórea que me interroga. El reconocimiento de
de valores y normas que se transformen en el sentido la existencia corpórea del otro queda resaltada por la
común de esa colectividad humana.11 mediación de la palabra del otro, que opera como des-
El mismo título de “universal” que asume la de- velamiento del mundo y de la misma persona.
claración evidencia un problema epistemológico in-
La necesaria apertura al otro admite tanto la posi-
soslayable, pues de hecho la comunidad internacional
bilidad del amor y la solidaridad, como el conflicto y la
reconoce una doctrina global de derechos fundamen-
aniquilación. Ya sea el otro un espacio para mi libertad o
tales derivados de la dignidad intrínseca del ser hu-
mano, es decir, derechos no concedidos por la comu- 12 Pablo Peralta, Vivir a tiempo: reflexiones en torno al misterio del
nidad política, sino negociados por la comunidad. tiempo, Delta, Montevideo, 2003.
13 Ibíd.
10 Ibíd. 14 Joseph Gevaert, El problema del Hombre: Antropología filosófica,
11 Ibíd. Ed. Sígueme, Salamanca, 2003. p. 44.

14
su negación, la manifestación corporal del otro cons- sentido y teleología han quedado decantados a través de

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tituye un límite-posibilidad radical de mi existencia, siglos en la acumulación y formulación de normas y
porque en último término siempre lo necesito. principios que han llegado a conformar el Derecho In-
En ese reconocimiento, proyectado sobre una ternacional de Derechos Humanos”.16 En este sentido se
realidad social, es que se desarrollan los derechos puede afirmar que los derechos humanos constituyen
fundamentales, que surgen por tanto del encuentro juicios fundamentales y mínimos, universales y trans-
interpersonal con el cuerpo-rostro del otro, diferen- culturales, que podemos utilizar “para la evaluación del
te pero necesario. De allí que los rudimentos de la comportamiento de Estados, gobiernos y todo tipo de
conceptualización de los derechos humanos estén instituciones burocráticas en la conducción de su polí-
asociados al “Descubrimiento-genocidio” del otro tica hacia los colectivos humanos”.17
americano, y de la necesidad del otro, así como su El profesor Hernán Vidal considera que dada la
normalización en el derecho internacional está in- sistemática violación de los derechos humanos que
trínsecamente asociada al horror del nazismo y a los muestran la historia pasada y la reciente, debemos
procesos sistemáticos de violaciones de los derechos asumir que estas violaciones seguirán ocurriendo.
humanos tan comunes en el siglo XX. De manera que propone abandonar todo discurso
Desde el Siglo XVIII con el ciclo de las revolu- “milenarista” —es decir, de superación definitiva
ciones liberales en Europa y Estados Unidos y desde de la contradicción solidaridad-conflicto— por un
las independencias latinoamericanas fue el Estado- “gnosticismo que acepte que la historia de la es-
nación la institución encargada de implementar el pecie humana está gobernada por formas de disci-
sentido común hegemónico en cada sociedad. De plinamiento inhumano interrumpidas por ciclos de
manera que el mismo Estado ha sido el responsable rupturas esporádicas para crear espacios de libertad
de reconocer o negar los derechos inherentes a los relativa…”.18 Rastrear esos momentos y espacios de li-
ciudadanos. De modo que a los tropos relacionados bertad es también parte de la tarea hermenéutica del
con el otro, debemos adicionar al análisis aquellas investigador y de las disciplinas humanísticas.
formas narrativas de identidad nacional transmitidas En la propuesta de Vidal el disciplinamiento re-
por medio del aparato educacional y la propaganda sulta inherente al ser-en-el-mundo, como resultado
estatal como fundamentos posibles de culturas res- del conflicto entre cultura y civilización, que siempre
petuosas o no de los Derechos Humanos.15 es monumentalizado como ‘mala fe’. Pero tanto los
Este abordaje permite proponer hipótesis sobre los espacios y tiempos disciplinadores como libertarios,
comportamientos esenciales que ha mostrado la especie no son homogéneos, por la misma razón de que el
humana en todo tiempo y lugar a través de su histo- ser humano nunca puede ser totalmente objetivado.
ria; entendidos “como una construcción histórica cuyo
16 Ibíd. p. 26
15 Hernán Vidal, Crítica literaria como defensa de los derechos huma- 17 Ibíd.
nos, cuestión teórica, 1994, p. 25. 18 Ibíd. p. 28

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Esto determina que el sistema imperante nunca pue- Al ser inherentes a la persona, el reconocimiento
de contener de igual manera a todos; lo que significa de estos derechos por parte del Estado no depende de
que el disciplinamiento nunca es total, ni cubre a la la nacionalidad del individuo, ni de la cultura de per-
totalidad de los miembros de esa sociedad. A través tenencia. Como bien establece el artículo 1 de la Decla-
de la imaginación y una infinita capacidad creativa, ración Universal de Derechos Humanos: “todos los seres
la persona humana siempre ha sido capaz de crear humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos
nuevas respuestas en condiciones nuevas y adversas. y, dotados como están de razón y conciencia, deben
Esta capacidad de imaginarse lo distinto está asocia- comportarse fraternalmente los unos con los otros”.21
da a la función que la utopía puede cumplir en una
El reconocimiento de los derechos humanos como
trama histórica determinada, de modo de unir sim-
atributos inherentes a la persona presenta una serie
bólicamente a algunos o varios individuos que pueden
de consecuencias relevantes. En este sentido la De-
desafiar o no las estructuras del contexto. Esas perso-
claración de Viena de 1993 en su numeral 5 establece
nas “libres” y capaces de reconocer nuevas formas de
que “todos los derechos humanos son universales, in-
relacionamiento con el otro, esos espacios de esperan-
za asistémica, también deben ser objeto del estudio. divisibles e interdependientes y están relacionados
entre sí. La comunidad internacional debe tratar los
derechos humanos en forma global y de manera jus-
El concepto de derechos Humanos ta, equitativa, en pie de igualdad y dándoles a todos el
Como afirma Pedro Nikken19 “…la noción de derechos mismo peso. Debe tenerse en cuenta la importancia
humanos se corresponde con la afirmación de la dig- de las particularidades nacionales y regionales, así
nidad de la persona frente al Estado”. En este sentido como de los diversos patrimonios históricos, cultu-
el poder público no puede ser empleado para vulnerar rales y religiosos, pero los Estados tienen el deber,
a la persona; es más: debe ser instrumento para que sean cuales fueren sus sistemas políticos, económicos
las personas puedan vivir en condiciones acordes a su y culturales, de promover y proteger todos los dere-
dignidad. Estos derechos, condiciones de “toda persona chos humanos y las libertades fundamentales”.22
e inherentes a su dignidad, que el Estado está en el En primer lugar establece la limitación del poder
deber de respetar, garantizar o satisfacer son los que del Estado respecto de los individuos. De acuerdo con
hoy conocemos como derechos humanos”.20 la Corte Interamericana de Derechos Humanos, “en
19 En este punto seguimos el aporte de Pedro Nikken, quien se
la protección de los derechos humanos está necesa-
desempeñó como presidente de la Corte Interamericana de De- riamente comprendida la restricción al ejercicio del
rechos Humanos. En mismo es de gran utilidad didáctica para un
desarrollo desde la perspectiva jurídica del tema del concepto de 21 Naciones Unidas (1948). Declaración Universal de los Derechos Huma-
derechos humanos. Pedro Nikken, (2003),  El Concepto de Derechos nos. http://www.un.org/es/documents/udhr/. [12 de marzo 2013].
Humanos. http://docencia.uagro.mx/sites/default/files/Concepto- 22 Naciones Unidas. (1993) Conferencia Mundial de Derechos Humanos.
DH%20Pedro%20Nikken.pdf. [20 marzo 2013]. Declaración y Programa de Acción de Viena. http://www.unhchr.ch/huri-
20 Ibíd. docda/huridoca.nsf/(Symbol)/A.CONF.157.23.Sp [12 de marzo 2013].

16
poder estatal”.23 De modo que el ejercicio del poder la progresividad es una nota característica, porque

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del Estado debe realizarse a favor de los derechos de la “los derechos humanos son inherentes a la persona y
persona y nunca en contra de ellos, y en el desarrollo su existencia no depende del reconocimiento de un
de un Estado de derecho que “debe sujetarse a ciertas Estado, siempre es posible extender el ámbito de la
reglas, las cuales deben comprender mecanismos para protección a derechos que anteriormente no gozaban
la protección y garantía de los derechos humanos”. 24 de la misma”.
Otra consecuencia relevante es la universa-
lidad de los derechos humanos, ya que “no pueden
invocarse diferencias de regímenes políticos, so-
 Los derechos humanos y el poder público
ciales o culturales como pretexto para ofenderlos o
menoscabarlos”.25 Del mismo modo, estos derechos Los derechos humanos implican obligaciones a cargo
resultan transnacionales, pues si “son inherentes a del gobierno. Este es el responsable de respetarlos,
la persona como tal, no dependen de la nacionalidad garantizarlos o satisfacerlos y, por otro lado, en sen-
de esta o del territorio donde se encuentre: los porta tido estricto solo él puede violarlos. Las ofensas a la
en sí misma”.26 dignidad de la persona pueden tener diversas fuen-
La interdependencia de los derechos y su indivisi- tes, pero no todas configuran, técnicamente, viola-
bilidad son dos notas sustanciales de los derechos hu- ciones a los derechos humanos. Este es un punto con-
manos, pues cada derecho es comprendido de manera ceptualmente capital para comprender a cabalidad el
holística como una estructura indivisible, cuyo valor tema de los derechos humanos.
se funda en la presencia de otros derechos.27 Como ya se ha dicho en el breve recuento ante-
Por otra parte, otro elemento a destacar es la rior, durante la mayor parte de la historia el poder
irreversibilidad de los derechos humanos porque podía ejercerse con escasos límites frente a los go-
“una vez que un determinado derecho ha sido for- bernados, y prácticas como la esclavitud y la tortura
malmente reconocido como inherente a la persona eran admitidas y hasta fundamentadas en ideas re-
humana queda definitiva e irrevocablemente inte- ligiosas. La lucha por lo que hoy llamamos derechos
grado a la categoría de aquellos derechos cuya invio- humanos ha sido, precisamente, la de circunscribir
labilidad debe ser respetada y garantizada”. Así como el ejercicio del poder a los imperativos que emanan
de la dignidad humana.
23 Corte I.D.H., la expresión “leyes” en el artículo 30 de la Conven-
La nota característica de las violaciones a los
ción Americana sobre Derechos Humanos, Opinión Consultiva OC-
6/86 del 9 de mayo de 1986. Serie A No.6, §22. Citado por P. Nikken. derechos humanos es que ellas se cometen desde el
24 Ibíd. poder público o gracias a los medios que este pone
25 Ibíd. a disposición de quienes lo ejercen. No todo abuso
26 Ibíd. contra una persona ni toda forma de violencia so-
27 Jack Donnelly, (2003. p. 27.) cial son técnicamente atentados contra los derechos

17
humanos. Pueden ser crímenes, incluso gravísimos, namentales, sino de la conquista de un orden social
pero si es la mera obra de particulares no será una donde impere la justa distribución de los bienes”.
violación de los derechos humanos. En este sentido, “su exigibilidad está condicionada
El derecho internacional y la reflexión académica a la existencia de recursos apropiados para su sa-
son enfáticos en el hecho de que el ejercicio del poder tisfacción. El control del cumplimiento de este tipo
no debe menoscabar de manera arbitraria el efectivo de obligaciones implica algún género de juicio sobre
goce de los derechos humanos, así como la preserva- la política económico-social de los estados, cosa que
ción y satisfacción de todos los derechos fundamenta- escapa, en muchos casos, a la esfera judicial. De allí
les de cada individuo es el horizonte de comprensión que la protección de tales derechos suela ser confiada
de la propia misión del Estado. a instituciones más político-técnicas que jurisdiccio-
nales, llamadas a emitir informes periódicos sobre la
situación social y económica de cada país”.29
El respeto y la garantía La no satisfacción de los derechos económicos,
de los derechos humanos sociales y culturales no manifiesta necesariamente
que el Estado los ha violado. Pero sí demanda de las
La vigencia de los derechos civiles y políticos depende
políticas estatales que puedan demostrar y evaluar el
de un orden jurídico que los reconozca y garanti-
ce, aunque “basta constatar un hecho que los viole y efecto de la adopción de políticas públicas que efecti-
que sea legalmente imputable al Estado para que este vicen estos derechos.
pueda ser considerado responsable de la infracción. Los derechos colectivos representan para el Estado
Se trata de derechos inmediatamente exigibles, cuyo obligaciones de comportamiento: “la acción del Esta-
respeto representa para el Estado una obligación de do debe ordenarse de la manera más apropiada para
resultado, susceptible de control jurisdiccional”.28 que tales derechos —medio ambiente sano, desarro-
Estos derechos se afirman en una dimensión in- llo, paz— sean satisfechos”. Mientras que en cuanto
dividual y se ejercen frente —y aún contra— el Es- a su violación, más bien se está ante obligaciones de
tado y proveen a su titular de medios para defenderse resultado y “en todos estos casos la violación de los
frente al ejercicio abusivo del poder público, ya que derechos humanos ocurrirá en la medida en que la
el Estado está obligado no solo a respetar los derechos actuación del poder público desborde los límites que
civiles y políticos sino también a garantizarlos. legítimamente pueden imponerse a los mismos por
Por otra parte, “la realización de los derechos eco- imperativos del orden público o del bien común”.30
nómicos, sociales y culturales no depende, en gene- En condiciones normales, los límites legítimos a
ral, de la sola instauración de un orden jurídico ni los derechos humanos solo pueden establecerse bajo la
de la mera decisión política de los órganos guber-
29 Ibíd.
28 Nikken, ob. cit., p. 10 y ss. 30 Ibíd.

18
noción general de orden público. Pero en situaciones Desde el punto de vista de la forma podemos

24/ Derechos humanos


excepcionales los gobiernos pueden suspender algunas afirmar que las limitaciones a los derechos huma-
garantías. En ambos casos estarán previstas las forma- nos solo pueden emanar de leyes. Se trata de una
lidades requeridas, así como el alcance de tales medidas. materia sometida a la llamada reserva legal, de modo
Las nociones que funden la limitación del derecho que el Poder Ejecutivo no está facultado para aplicar
“deben interpretarse en estrecha relación con el de- más limitaciones que las que previamente hayan sido
recho al que están referidas y deben tener en cuenta recogidas en una ley del Poder Legislativo, como lo
las circunstancias del lugar y del tiempo en que son establece el artículo 30 de la Convención Americana
invocadas e interpretadas”. A propósito de ellas se ha sobre Derechos Humanos, según el cual las restric-
destacado que, tratándose de nociones en que está im- ciones que la Convención autoriza para el goce de los
plicada la relación entre la autoridad del Estado y los derechos por ella reconocidos, solo podrán emanar de
individuos sometidos a su jurisdicción, todas ellas po- “leyes que se dictaren por razones de interés general
drían ser reducidas a un concepto singular y universal, y con el propósito para el cuál han sido establecidas”.
como es el de orden público. La Corte Interamericana Respecto de este artículo, la Corte ha interpretado
de Derechos Humanos lo ha definido como el conjunto “que la palabra ley (...) significa norma jurídica de
de “las condiciones que aseguran el funcionamiento carácter general, ceñida al bien común, emanada de
armónico y normal de instituciones sobre la base de los órganos legislativos constitucionalmente previs-
un sistema coherente de valores y principios”.31 tos y democráticamente elegidos, y elaborada según
De todos modos las limitaciones a los derechos el procedimiento previsto en las constituciones de los
humanos no pueden afectar el contenido esencial del estados parte para la formación de las leyes”.33
derecho tutelado. La misma Corte también ha dicho En el caso de los estados de excepción, los de-
que nociones como la de “orden público” y la de “bien rechos humanos pueden ser limitados de manera
común” no pueden invocarse como “medios para su- excepcional frente a emergencias que signifiquen
primir un derecho garantizado por la Convención” grave peligro público o amenaza a la independen-
y deben interpretarse con arreglo a las justas exi- cia o seguridad del Estado. A este respecto, la Corte
gencias de una sociedad democrática, teniendo en Interamericana de Derechos Humanos ha enfatiza-
cuenta “el equilibrio entre los distintos intereses en do que, dentro del sistema de la Convención, se tra-
juego y la necesidad de preservar el objeto y fin de la ta de una medida enteramente excepcional, que se
Convención”.32 justifica porque “puede ser en algunas hipótesis, el
31 Corte Interamericana de Derechos Humanos (I.D.H)., “La colegia- único medio para atender a situaciones de emergen-
ción obligatoria de periodistas”, (Arts. 13 y 29 Convención America- cia pública y preservar los valores superiores de la
na sobre Derechos Humanos), Opinión consultiva C-5/85 del 13 de
noviembre de 1985, p. 64. 33 Corte I.D.H., La expresión “leyes” en el artículo 30 de la Conven-
32 Corte I.D.H., Ibíd., p.67. ción Americana sobre Derechos Humanos, p. 38.

19
sociedad democrática”.34 Como lo establece tácita- 3. “Todo Estado parte que haga uso del derecho de
mente la Convención Interamericana de Derechos suspensión deberá informar inmediatamen-
Humanos: te a los demás Estados Partes en la presente
1. “En caso de guerra, de peligro público o de otra Convención, por conducto del Secretario Ge-
emergencia que amenace la independencia o neral de la Organización de los Estados Ame-
seguridad del Estado parte, éste podrá adoptar ricanos, de las disposiciones cuya aplicación
disposiciones que, en la medida y por el tiempo haya suspendido, de los motivos que hayan
estrictamente limitado a las exigencias de la suscitado la suspensión y de la fecha en que
situación, suspendan las obligaciones contraí- haya dado por terminada tal suspensión.”35
das en virtud de esta Convención, siempre que La suspensión de garantías está sujeta, además,
tales disposiciones no sean incompatibles con a cierto número de condiciones: estricta necesidad;
las demás obligaciones que les impone el de- proporcionalidad, temporalidad; respeto a la esencia
recho internacional y no entrañen discrimina- de los derechos humanos y publicidad.
ción alguna fundada en motivos de raza, color,  
sexo, idioma, religión u origen social.
2. “La disposición precedente no autoriza la
suspensión de los derechos determinados en
los siguientes artículos: 3 (Derecho al Reco-
nocimiento de la Personalidad Jurídica); 4
(Derecho a la Vida); 5 (Derecho a la Integri-
dad Personal); 6 (Prohibición de la Esclavitud
y Servidumbre); 9 (Principio de Legalidad y
de Retroactividad); 12 (Libertad de Concien-
cia y de Religión); 17 (Protección a la Fami-
lia); 18 (Derecho al Nombre); 19 (Derechos del
Niño); 20 (Derecho a la Nacionalidad), y 23
(Derechos Políticos), ni de las garantías ju-
diciales indispensables para la protección de
tales derechos.
34 Corte I.D.H., “El hábeas corpus bajo suspensión de garantías”
(arts. 27.2 y 25.1 Convención Americana sobre Derechos Humanos), 35 http://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_
Opinión Consultiva OC-8/87 del 30 de enero de 1987, p. 20. Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm

20
Aurelio González

Manifestación contra el golpe de Estado, 9 de julio de 1973


Carlos Contrera
Velatorio del maestro Julio Castro —desaparecido por la dictadura en 1977 y cuyos restos fueron hallados en el Batallón 14—
realizado el 11 de mayo de 2012 en el Museo Pedagógico de Montevideo.
3
Políticas culturales de la memoria histórica en el Uruguay

24/ Derechos humanos


En el Uruguay se debaten desde hace tiempo dife- sión “tengo derecho” como argumentación inapelable
rentes políticas culturales de la memoria histórica, de un deber de la sociedad hacia el individuo, no
desarrollándose desde la vida cotidiana y desde el siempre razonado. Pero esos discursos no asumen en
ejercicio del poder distintos discursos culturales que todos los casos la misma perspectiva de derecho, pues
han ido modificando la expresión “derechos huma- difieren en la definición de los ideales de sociedad y
nos”, que progresivamente se sale del ámbito jurídi- de persona que están implícitos. Estas diferencias de-
co-político y se convierte en parte del sentido común terminan universos discursivos distintos, dificultan-
de la sociedad. do la discusión de modelos consensuados de país, que
De acuerdo con Hernán Vidal “por discurso cul- reconozcan alguno modelo de persona, sin desmedro
tural puede entenderse todo argumento formalizado de la normal diversidad que implica una sociedad de-
que proponga la implementación política de tres ele- mocrática. Porque la definición abstracta de persona
mentos utópico-poéticos: definir la ‘buena sociedad’, prescribe otras definiciones, de lo que en último tér-
la ‘calidad de vida’ y ‘el ser humano ideal’ que la pue- mino significa “ser feliz” en sociedad.
da caracterizar”.36 En el Uruguay de hoy fundamentar Todos estos procesos culturales se despliegan en
un reclamo sectorial o personal en clave de derecho la vida cotidiana a través de los medios y grupos de
es recurrente. Los uruguayos apelamos a la expre- pares, pero es el Estado en su función racionali-
36 Hernán Vidal, Política Cultural de la Memoria Histórica, El Mosqui- zadora de las relaciones humanas, el que despliega
to Comunicaciones, Santiago de Chile, 1997. sus mitos de identidad nacional a través del sistema

23
educativo y del personal burocrático; de allí que am- sido una parte sustancial de las tareas de los aparatos
bos espacios de poder sean zonas de disputa mítica sociales de control y reproducción social; de allí que
para miradas divergentes sobre el modelo de Uru- el dicho popular haya establecido que la historia la
guay y de ciudadanos uruguayos a construir. escriben los vencedores.
En la base de este conflicto están el uso y concep- Aceptando la aparente verdad de este aforismo,
ción de los derechos humanos que se despliegan en la una mirada detenida puede establecer que la historia,
sociedad uruguaya. Y ese proceso está signado entre al ser contada, se ficcionaliza, y junto con el ensayo y
nosotros por la experiencia, todavía reciente, de la su correlato poético que es la épica —que consagran
última dictadura militar, que ha impactado de mane- una versión oficial— suele aparecer una heteroglosia,
ra radical en la construcción de la sociedad nacional, al decir de Mijail Bajtin; es decir: una multiplicidad
y que ha redefinido la idea misma del ser uruguayo. de voces que expresan los hechos desde diferentes
Este proceso se enmarca en procesos mayores de perspectivas, incluyendo la de los vencidos. Estas
una sociedad global, signada por los cambios en to- versiones se desarrollan en los márgenes, suelen ser
das las dimensiones de la vida de las personas, por expresiones de cultural popular, pero constituyen
una sociedad del conocimiento que en su dimensión verdaderas manifestaciones de resistencia que cana-
lizan memorias de lo distinto. Esto es especialmente
tecnológica está transformando radicalmente las for-
cierto en las memorias que se desarrollan en procesos
mas de ser sujeto humano y de ser con otros en el
violentos, bajo contextos autoritarios donde la narra-
mundo. De modo que la cultura global y su penetra-
ción es impuesta como totalizadora de la experiencia
ción en Uruguay han ido transformando la cons-
histórica vivida en la sociedad. Las narraciones de
trucción de subjetividades que gravitan entre noso-
memorias disidentes se canalizan, según Bajtin,37 por
tros. Pero sigue siendo la dictadura uno de los ancla-
las expresiones culturales subalternas que son per-
jes de construcción de las discursividades personales,
cibidas desde el discurso hegemónico como parciales
incluso de manera inconsciente. Ciertos espacios de
o poco significantes y en ningún caso expresión de
socialización tienen como supuesto una perspectiva
toda la sociedad.38
de izquierda o de derecha, donde se establecen a prio-
ri las miradas sobre el mundo en general y sobre el En el caso de las experiencias de violaciones sis-
pasado en particular. temáticas desarrolladas durante la dictadura urugua-
ya, esta lucha por la memoria fue un largo proceso
Toda sociedad narra su historia, en especial sus que lentamente rompió los cercos de las experiencias
violencias ritualizadas, desde la perspectiva de los
vencedores, pero en la historia reciente del Uruguay 37 Iris Zavala, Bajtin y el acto ético: una lectura del reverso, Ed.Letra &
parece difícil determinar quienes son los vencedores, Pixel, Puerto Rico, 2009.

al menos hay que asumir momentos diferentes para 38 En toda esta sección trabajamos sobre la investigación que he-
mos realizado en el marco del Programa de Derechos Humanos del
establecer esa victoria. Es claro que contar la historia CLAEH. Itinerarios de los Derechos Humanos en el Uruguay 1985-2007:
oficial de los conflictos que encierra toda sociedad ha Temas, Actores y Visibilidad Pública, ya citada.

24
privadas de las víctimas, sus familiares y compañe- mediante la cual contaron a la sociedad uruguaya su

24/ Derechos humanos


ros. En primer término se debió superar la indife- versión de la historia. Textos como Testimonio de una
rencia o negación mayoritaria de la sociedad, hasta nación agredida y Las Fuerzas Armadas al pueblo oriental
constituirse, con el advenimiento de los compañeros resultan paradigmáticos de los esfuerzos de la dic-
de las víctimas al gobierno, en un discurso también tadura por legitimar su poder en el plano cultural,
oficial, pero que pretende consagrar una visión posi- luego de haberlo sustentado en el plano político y en
ble de los hechos. el militar. Asimismo, la dictadura buscó incorporar
El periplo histórico uruguayo referido a las vio- en las celebraciones del Estado, hitos que recordaran
laciones sistemáticas de los derechos humanos perpe- la heroicidad supuesta de sus miembros en la lucha
tradas por agentes del Estado, muestra un conflicto contra los “traidores” de la patria, en especial con
pretendido de historias oficiales o puntos finales, que la celebración del 14 de abril, que conmemora uno
buscan de algún modo establecer de manera totaliza- de los momentos de mayor enfrentamiento entre el
dora una verdad definitiva sobre los hechos. ejército y la guerrilla en el año 1972.
Esta larga lucha de memorias se constituyó desde Como en toda narración que implica una vio-
los mismos discursos de la dictadura. Como establece lencia política de base, los discursos de la dictadura
Mariana Achugar: “la narrativa de los militares uru- presentaban una serie de metáforas que equiparaban
guayos se basa en argumentos históricos, legales y cuerpo y nación, guerra y enfermedad, que naturali-
morales, al igual que la de la mayoría de las fuerzas zaban y pretendían volver aceptables las violaciones
armadas involucradas en violaciones a los derechos a los derechos humanos, que aparecían como acciones
humanos en las dictaduras latinoamericanas de los necesarias para “extirpar el mal que afecta al cuerpo
setenta”.39 El discurso de “salvación de la patria” y sus social”. De este modo los otros, en tanto “sediciosos”
elementos esenciales era esgrimido por los “guardia- y “extremistas”, eran representados como anormales
nes de la orientalidad” contra lo que percibían como o desviados, por tanto pasibles de un trato también
una amenaza, calificada como resultado de fuerzas diferente al normal. Como remarca Achugar, esta vi-
foráneas, representantes del marxismo internacional sión implica una idea de guerra que “permite trasla-
y sus aliados nacionales, que presuntamente intenta- dar la responsabilidad al otro y presentar las acciones
ban establecer un desorden revolucionario que trai- de las Fuerzas Armadas como una reacción autode-
cionaba la misma idea del Uruguay. En el contexto fensiva ante su ataque”. En palabras de la Junta de
de guerra interna, las Fuerzas Armadas intentaron Comandantes en Jefe:
justificar el golpe, presentando una imagen aceptable “Frente a la agresión subversiva, que cons-
y heroica de sí mismas. En este sentido, los mili- tituye una enfermedad de la nación uruguaya,
tares elaboraron una estrategia publicitaria masiva debe concluirse que el primer papel de la de-
39 Mariana Achugar, “Las Fuerzas Armadas y su versión de la histo- fensa es, y será siempre, el de proteger las ba-
ria”, Semanario Brecha, 19 de mayo de 2006, p. 22. ses fundamentales de la sociedad, construidas

25
y ratificadas por el pueblo, contra las pertur- pública. Con la restauración democrática existía para
baciones que puedan amenazarlas, porque las muchos la posibilidad de que aparecieran los desapa-
enfermedades del cuerpo social son como las recidos, porque cabía la posibilidad de que hubieran
de los seres humanos: es menester prevenirlas sido deportados, que estuvieran en el exterior o fue-
y atacarlas cuando se manifiestan. La amena- ran objeto de una situación de aislamiento por parte
za más grave contra el cuerpo de la nación de los represores. De allí que a la consigna desple-
es el peligro de intrusión de ideologías extra- gada de “Amnistía general e irrestricta”, se sumara
ñas a la mentalidad popular que, basándose la de “Vivos los llevaron, vivos los queremos”. Esta
en el poder, sea mental o económico, de sus consigna hace pensar en la posibilidad de la reapa-
adherentes, pretende propiciar y justificar la rición con vida de la víctima, cosa que finalmente
destrucción total de lo existente como precio solo se expresa en lo que se relaciona con los niños
de un mañana utópico nunca bien definido. El desaparecidos.
pueblo debe entonces asumir la responsabili- En este punto propongo un itinerario que explici-
dad de su propia defensa para desenmascarar te el uso del término “derechos humanos” en nuestra
y destruir las múltiples formas de tal clase de sociedad de modo de poder analizar sus progresivos
agresiones”. (Citado por Achugar). significados.
El quiebre institucional del 27 de junio de 1973
Este artefacto discursivo buscó en el pasado jus- tiene obviamente su historia. Una sociedad con una
tificar las acciones, pero asimismo, se constituyó en notaria preeminencia del Estado y de los partidos po-
una narrativa oficial de las Fuerzas Armadas uru- líticos y un Estado benefactor que ya no podía asumir
guayas que se mantiene hasta el presente entre la su lugar, terminaría pronto por mostrar la existen-
oficialidad implicada en las violaciones sistemáticas cia de “otro Uruguay”. Asimismo, un contexto in-
de los derechos humanos. ternacional donde afloraban los discursos y prácticas
De todos modos, las sistemáticas estrategias de revolucionarios inspirados en la Revolución cubana,
memoria desplegadas por las víctimas y sus fami- junto con el despliegue de la llamada “guerra fría”
liares fueron erosionando la discursividad militar, entre el mundo comunista y el mundo capitalista,
naturalizando otra versión de lo sucedido que se fueron los ingredientes necesarios para diseñar un
patentiza en el hecho de que las víctimas o sus com- conflicto de proporciones.
pañeros hoy ocupen el gobierno nacional y repre- En este marco el concepto de derechos humanos
senten a la misma nación a través de las institucio- prácticamente no era utilizado en el Uruguay: para
nes del Estado. los sectores conservadores del espectro político este
Durante el proceso militar la distinción entre de- concepto se reducía a los derechos liberales, mien-
tenido desaparecido y preso político quedaba de algún tras la izquierda, de manera más o menos general,
modo confundida para la mayor parte de la opinión propugnaba un cambio radical de la sociedad, donde

26
se desarrollarían otros valores sociales y por tanto otra ejercicio de la violencia, so pretexto de construir una

24/ Derechos humanos


formulación de derechos. Es interesante, por ejemplo, sociedad más justa, revela además mi espíritu porque
que en el Frente Amplio ninguno de sus documentos importa una negativa a las ciertas posibilidades de
fundacionales hiciera referencia explícita al término lograrlo en paz y más aún, porque supone la acepta-
derechos humanos. Mientras que la derecha esgrimía ción de que, sin ella, pueda haber causa justa. Y más
el término para referirse a la situación cubana, pero lo rechaza nuestra orgullosa condición de urugua-
no a otros conflictos cercanos y lejanos, donde se vio- yos, porque implica negar nuestra historia, nuestros
laban sistemáticamente los derechos humanos. logros y la visión, la inteligencia y el esfuerzo de
En más de un sentido dos miradas respecto del las generaciones que nos precedieron. Ellas sintieron
mundo se enfrentaron de diferentes modos y en distin- desde temprana hora, en el concierto de las jóvenes
tos escenarios, concepciones que conectaban con mun- naciones americanas, la irrefrenable vocación por la
dos exteriores también enfrentados. Ambas explicaban justicia social y así como heredamos lo que en su
el conflicto de manera diferente, pero ambos discur- búsqueda construyeron, recibimos también la mis-
sos connotaban la violencia imperante. En marzo de ma vocación, indisolublemente incorporada a nues-
1971, en el primer acto público del Frente Amplio, el tra formación espiritual”.41
Gral. Liber Seregni explicaba la coyuntura diciendo: Más allá de estas palabras todos los discursos ya
“Y vinieron los últimos tiempos. Los políticos blancos denotaban el enfrentamiento efectivo en las calles y
y los políticos colorados quedaron relegados y la oligar- la salida de fuerza que se esbozaba desde las Fuer-
quía tomó directamente el gobierno. Esto nunca había zas Armadas y sus aliados civiles. Esta perspectiva se
sido tan visible, tan descarnado y tan claro. Los gru- patentiza en el discurso presidencial frente al golpe,
pos económicamente dominantes estaban dispuestos a el mismo 27 de junio de 1973: “Afirmo hoy, una vez
todo para reducir al pueblo oriental y se abrió así una más y en circunstancia trascendentes para la vida del
era de violencia, la que estamos viviendo. La violen- país, nuestra profunda vocación democrática y nues-
cia comenzó desde arriba. La estructura de domina- tra adhesión sin reticencias al sistema de organiza-
ción oligárquica quedó al desnudo; decretó que era ción política y social que rige la convivencia de los
la ‘hora del garrote’ y, como siempre, cínicamente, uruguayos. Y va con ellos entonces el rechazo a toda
culpó del desorden a las masas estudiantiles y a las ideología de origen marxista que intente aprovechar
masas obreras”.40  de la generosidad de nuestra democracia, para pre-
sentarse como doctrina salvadora y terminar como
Por su parte, el discurso de asunción presiden-
instrumento de opresión totalitaria. Este paso que
cial del Juan María Bordaberry en 1972 reflejó, des-
hemos tenido que dar no conduce y no va a limitar
de su punto de vista, la conflictividad del país: “…el
las libertades ni los derechos de la persona huma-
40 http://www.quehacer.com.uy/index.php?option=com_ na.Para ello y para su vigilancia estamos nosotros
content&view=article&id=292:fa-acto-26-marzo&catid=88:unidad-
popular&Itemid=65 41 Discurso ante la Asamblea General 1 de marzo de 1972.

27
mismos; para eso además hemos cometido esas fun- impidan, hasta donde es posible, la repetición de
ciones al Consejo de Estado y más allá, aún por enci- este capítulo aciago de nuestra historia”.43
ma de todo ello, está el pueblo uruguayo que nunca La recuperación de la democracia suponía en el
dejó avasallar sus libertades (...)”.42 país recuperar la institucionalidad, pero también re-
En este discurso que desmantela el Estado de de- construir un nosotros nacional definitivamente daña-
recho, el presidente golpista declara que los derechos do ¿Cómo resignificar nuestras identidades y cons-
de las personas no se verán limitados, pero, claro truir un nosotros inclusivo, después de las desapari-
está, habría categorías diferentes de personas, lo que ciones forzadas, la tortura, de las miles de detencio-
es una patente violación de la Constitución de la Re- nes y destituciones injustas, del uso de la violencia
pública y de múltiples tratados y acuerdos de los que como instrumento cotidiano?
el Estado uruguayo era signatario. Las disputas entre memoria y olvido, son en
En 1976 al asumir de facto la presidencia de verdad la confrontación entre dos relatos del pa-
la república, el Dr. Aparicio Méndez hacía el si- sado, que tiene consecuencias para el presente y
guiente balance del proceso “…sé que tal como es- el futuro del Uruguay.44 La lucha contenida en la
tábamos acostumbrados, por obra de una tranqui- consigna “verdad y justicia” constituía un aspecto
lidad que ganaron en buena ley nuestros mayores, central de las reivindicaciones políticas de varios
está investidura habría provenido de un pronun- grupos de izquierda, mientras que otros, como el
ciamiento electoral. Pero sé también que tanto Movimiento de Liberación Nacional, presentaban
las generaciones actuales, como las venideras una mirada más distante respecto del tema. Al ha-
ber sido actores que usaron la violencia como ex-
dictarán su fallo inexorable contra quienes pu-
presión de su lucha política, necesitaron procesar
sieron al País en esta encrucijada y nos absolverá
una autocrítica —hecha oficialmente en el congreso
a los que aceptamos el reto de la historia y reco-
del MLN-Tupamaros de 1985— que no ha sido su-
gimos la antorcha de sus manos para mantener la
ficientemente debatida en lo público, pese a contar
vigencia del derecho como auténtico instrumento
con una versión oficial de su historia.
de seguridad, orden y consecuente felicidad de la
Nación. Tengo, así, el convencimiento pleno de La demanda de verdad queda planteada como tarea
llegar al poder legítimamente: nada hemos hecho de la restauración de la democracia, pero en una so-
para obtener su titularidad porque le hemos to- ciedad democrática el concepto “verdad” no puede ser
absoluto. Se requiere entonces diálogo y debate, que
mado de los usurpadores para devolverle al pue-
blo, sin odios ni rencores, la carga de su propio 43 Discurso del Dr. Aparicio Méndez al asumir de facto la presi-
destino con nuevas fórmulas institucionales que dencia de la República en 1976. http://200.40.229.134/htmlstat/pl/
discursos/presidentesrou/amendez.htm
42 Juan María Bordaberry, discurso de radio y televisión respecto 44 Elizabeth Jelin, Los trabajos de la memoria, Siglo Veintiuno Edito-
del golpe de estado, 27 de junio de 1973. res, Buenos Aires, 2002.

28
debe ser público y orientado a la justicia, de todas las grandes asuntos a resolver era el de las violaciones

24/ Derechos humanos


memorias. Lo sucedido en dictadura y en la violencia de los derechos humanos durante la dictadura y la
política que la precedió implicó a personas concretas situación de las fuerzas armadas en ese contexto.
y determinadas, y por supuesto, a la sociedad toda. Como establece Lilia Ferro: “Las fuerzas armadas
La discusión de ese pasado sigue siendo necesaria se encontraban en estado de alerta y fuertemente en-
y actual, pues construye subjetividades no siempre frentadas a uno de los partidos mayoritarios, como lo
racionalizadas, que no hacen justicia al pasado y que era el Partido Nacional, por haber impedido la pos-
siguen confrontando a la sociedad uruguaya. tulación de Wilson Ferreira a la presidencia de la
La transición a la democracia en Uruguay fue fruto, República. Para poder gobernar obteniendo las ma-
tanto de la resistencia de los sectores sociales y demo- yorías parlamentarias necesarias, Sanguinetti debía
cráticos, como del desgaste del proyecto económico, al recomponer esta situación reformulando el tablero
que se agregó el fracaso sufrido por la dictadura lue- político dibujado en las negociaciones del Club Naval
go de perder el plebiscito de reforma constitucional de ya que su circunstancial aliado en esa instancia, el
1980, expresión cabal de la resistencia al régimen. Pero Frente Amplio, era ahora su mayor opositor”.45 El
el acuerdo que posibilitó la transición fue finalmente acuerdo de gobernabilidad blanco-colorado supondrá
el resultado de una negociación entre los militares y un giro en la política nacional que permanecerá has-
parte de la dirigencia política —Partido Colorado, Fren- ta el presente al definir campos de influencia y ac-
te Amplio y Unión Cívica— con la autoexclusión del ción políticos. De todos modos, según Ferro “en este
Partido Nacional dada la proscripción de su líder, Wil- contexto político el Parlamento sanciona inmediata-
son Ferreira Aldunate. En términos pragmáticos el de- mente la ley de amnistía que contribuye a la buscada
nominado Pacto del Club Naval posibilitó el llamado a pacificación nacional”.46
elecciones para el mes de noviembre de 1984. La ley de amnistía supuso un debate arduo, ya
Como resultado de esa elección vuelve al gobier- que se enfrentaban visiones discordantes en torno
no el Partido Colorado, de cuyas filas había salido el a la amplitud que debía tener, pero de todos modos,
presidente golpista, pero representado esta vez por la ley excluyó a los militares y policías que hubieran
la fórmula Sanguinetti-Tarigo, que utilizó el eslogan cometido algún tipo de delito de lesa humanidad, que
electoral “el cambio en paz”, al contener dentro de sí ciertamente no reconocían.
expresiones diferentes del espectro político, que iban La liberación de todos los presos supuso tam-
desde la socialdemocracia a la derecha golpista. bién la multiplicación de testimonios directos de las
La presidencia del Dr. Julio María Sanguinetti
contó con todos los desafíos que una transición de- 45 Lilia Ferro, Conjugando el pasado: El debate actual en Uruguay
sobre los detenidos desaparecidos durante la dictadura, Facultad de
mocrática puede tener luego de trece años de ruptura Ciencias Sociales, Universidad de la República, Latin American Stu-
institucional. A las demandas de justicia se suma- dies Association, Chicago, 1998, p. 5.
ban demandas sociales de todo tipo, pero uno de los 46  Ibíd.

29
Carlos Contrera
Presos liberados de la Carcel de Libertad en 1985

víctimas de violaciones claramente condenadas por Pero el proceso judicial se vio interrumpido cuando
el derecho nacional e internacional reconocido por en 1986 el Comandante en Jefe del Ejército declaró
Uruguay. En este contexto, se instala el “problema públicamente que no daría curso a las requisitorias
de los derechos humanos”, con especial destaque del judiciales. De allí que frente a las demandas éticas
tema “desaparecidos” y el particular acento en los ni- que planteaba el problema, se impusieran las de-
ños desaparecidos. mandas políticas, proponiendo una “solución” tam-
Por un lado, el gobierno bregaba por mantener la bién política, a través de la llamada “Ley de Cadu-
estabilidad y la gobernabilidad democrática, mientras cidad de la pretensión punitiva del Estado”, votada
que el Frente Amplio y sectores del Partido Nacional por los colorados y la mayoría del nacionalismo en
consideraban que se debía juzgar a los militares. Por diciembre del 1986.
su parte, los militares se negaban a todo revisionismo. Desde el punto de vista de los militares esta
La exclusión de este tema en las negociaciones ley “salvó la integridad del Ejército y de la cadena
con los militares previas a la transición, generó que de mandos que estaban comprometidos y Wilson
los actores políticos del pacto tuvieran visiones di- Ferreira Aldunate y Julio María Sanguinetti fortale-
ferentes al momento de resolverlo. Asimismo, la cieron el poder civil, que era su fin último”.47
opinión pública fue excluida de la discusión, aun- La ley aprobada suponía la interrupción de los pro-
que demostraría en el futuro ser uno de los actores cesos judiciales en curso, pero el artículo 4º. disponía
centrales en el debate social y cultural del problema. por su parte que “el Juez de la causa remitirá al Po-
Las víctimas procesaron sus denuncias ante la der Ejecutivo testimonios de las denuncias presentadas
Justicia, y el Parlamento abrió una investigación 47 Tte. Gral. Hugo Medina, citado por Diego Achard, La transición en el
referida al asunto de los detenidos desaparecidos. Uruguay, Instituto Wilson Ferreira Aldunate, Montevideo, 1992. p. 29.

30
24/ Derechos humanos
Carlos Contrera
hasta la fecha de promulgación de la ley, referentes a En el mes de enero de 1987 se creó la Comisión
actuaciones relativas a personas presuntamente dete- Pro-Referendum, por parte de familiares de las víc-
nidas en operaciones militares o policiales y desapare- timas del terrorismo de Estado, con el objetivo de
cidas, así como de menores presuntamente secuestra- promover la anulación de la ley por una consulta
dos en similares condiciones”.48 popular. Las firmas requeridas —más de 550.000,
En este contexto, la democracia uruguaya nacía representando el 25% del electorado— se obtuvieron
de un pacto que posibilitaba la salida, pero condi- luego de varios meses de recolección, en un proceso
cionaba el proceso, lo que muestra que los militares arduo y obstaculizado. El llamado a las urnas se hizo
uruguayos fueron eficaces como “comisarios”49, pési- finalmente el 16 de abril de 1989.
mos “fundadores” y muy buenos negociadores de las Luego de una campaña que contrapuso miedos y
condiciones de la transición. alegrías, el electorado uruguayo ratificó la vigencia
Durante este proceso la idea de derechos humanos de la ley (Ver tabla 1, p.32).
estaba centrada en su violación y refería de manera En su evaluación del resultado electoral, la Aso-
explícita a las violaciones de los derechos humanos ciación de Madres y Familiares de Detenidos Des-
durante el período anterior. Hablar de derechos hu- aparecidos —formada en un proceso histórico que
manos suponía, en la vida cotidiana, una toma de cristalizó en 1985— aceptó el resultado, pero ratifi-
postura respecto del pasado. có la oportunidad de haber plebiscitado la ley afir-
mando que: “no dudamos que los valores que de-
48 Lilia Ferro, ob. cit. p. 11.
fendíamos son aceptados por la gran mayoría de los
49 Diego Sempol, “Uruguay y la violación de los derechos humanos
durante la dictadura. Ni verdad, ni justicia”. Puentes, Año 1, Nº. 2, uruguayos, aun cuando los resultados no lo refle-
diciembre del 2000, pp. 54 y ss. jen”. En este sentido Madres y Familiares mantenía

31
Tabla 1. Resultados del Referéndum por la anulación de la Ley de Caducidad
Departamento Amarillo Porcentaje Verde Porcentaje
Montevideo 381.430 42,6% 492.390 55,0%
Canelones 120.999 59,6% 74.612 36,8%
Maldonado 38.079 61,6% 21.701 35,1%
Rocha 30.106 67,5% 13.019 29,2%
Treinta y Tres 22.408 72,2% 7.948 25,6%
Cerro Largo 38.854 75,1% 11.494 22,2%
Rivera 47.136 78,8% 11.126 18,6%
Artigas 30.725 73,1% 10.126 24,1%
Salto 46.441 69,1% 18.841 28,0%
Paysandú 38.517 59,9% 23.912 37,2%
Río Negro 20.669 70,3% 7.936 27,0%
Soriano 35.533 65,1% 17.729 32,5%
Colonia 53.605 69,0% 22.198 28,6%
San José 37.447 67,5% 16.411 29,6%
Flores 12.301 71,6% 4.343 25,3%
Florida 29.781 67,1% 12.959 29,2%
Durazno 26.139 73,9% 7.930 22,4%
Lavalleja 33.496 74,8% 10.024 22,4%
Tacuarembó 38.788 70,1% 14.410 26,0%
Interior 662.236 63,7% 306.719 29,5%
Total 1.082.454 55,9% 799.109 41,3%
Fuente: Banco de Datos del Área de Política y Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Sociales,
Universidad de la República.

“la convicción… de que la impunidad perjudicará se- perspectiva de consolidar una convivencia democrá-
riamente el futuro del país. Delitos de una gravedad tica lastimada, el Uruguay se encaminó hacia una
nunca conocida en la historia uruguaya no serán etapa de silencios, dejando este tema en el campo de
sancionados, no sólo por imposición legislativa sino lo social y cultural y —muy al estilo uruguayo— re-
por decisión de la mayoría ciudadana”.50 legándolo a la esfera de lo privado o de una sensibili-
La respuesta ciudadana pretendió entonces “exor- dad reconocible solo en pequeños grupos marginales,
cizar los monstruos” de un problema que parecía que no se podían adaptar a los nuevos tiempos.
haber venido desde el mismo “infierno”. Bajo la La nueva realidad derivada del resultado del refe-
50 Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, El Referendum
rendum, y sumada al cambio que significó el triunfo
desde familiares, Montevideo, 1990, p. 10 y ss. del Partido Nacional en las elecciones nacionales y del

32
Frente Amplio en el gobierno de Montevideo, hizo En octubre de 1991, el ex agente de la policía se-

24/ Derechos humanos


muy difícil el replanteo del tema de los desaparecidos creta de régimen de Pinochet, Eugenio Berríos, fue
en los comienzos de los 90. Como establece Javier Mi- sacado en forma clandestina de Chile para evitar su
randa, “se instaló muy consistentemente una visión de citación por la Justicia —que finalmente lo procesa-
la pacificación, sistemática y persuasivamente por los ría en ausencia en el siguiente mes de noviembre—
actores políticos que impulsaron la Ley de Caducidad, en la investigación del asesinato de Orlando Letelier.
que asimilaba consolidación de la democracia, paci-
Según la narración de los hechos presentada por el
ficación e impunidad. Este enfoque de la impunidad
como condición sine qua non de la pacificación matrizó diario La Nación de Chile: “el 26 de octubre de ese
profundamente a la opinión pública y ganó audiencia. año, la Unidad de Operaciones Especiales de DINE,
Incluso entre muchos de quienes se habían opuesto a al mando del mayor Arturo Silva Valdés, lo sacó de
ella durante los años previos.”51 Chile a Uruguay vía Argentina con la chapa de Ma-
Este silencio respecto a la temática de las viola- nuel Antonio Morales Jara”.
ciones de los derechos humanos durante el período En 1992 Berríos se contactó con la embajada de su
dictatorial no fue afectada ni siquiera por el Informe país, manifestando la voluntad de comparecer ante la
29/92 de la Comisión Interamericana de Derechos Justicia chilena. Unos días más tarde se presentó en
Humanos de la OEA, de octubre de 1992. En ese infor- la comisaría del balneario Parque del Plata (Canelo-
me la Comisión entendía que la llamada Ley de Ca- nes), y denunció estar siendo secuestrado por milita-
ducidad era incompatible con la normativa continen- res chilenos y uruguayos y correr riesgo de vida. De
tal e internacional en materia de Derechos Humanos, acuerdo con la narración de los hechos presentada
de la cual el gobierno uruguayo es signatario y asi- por Andrés Capalán: “mientras los policías tomaban
mismo recomendaba tomar medidas para compensar
su denuncia, la comisaría se vió rodeada de vehícu-
a las víctimas y determinar responsables.
los militares, de uno de los cuales descendió el co-
Es paradójico que en medio de este silencio so- ronel Tomás Casella y reclamó a Berríos, alegando
bre los delitos de lesa humanidad perpetrados por que era un amigo suyo y ‘estaba mal de la cabeza’. El
el ejército y la policía uruguayos —muchas veces
oficial policial a cargo ordenó una pericia psiquiá-
coordinados con oficiales de otras naciones del Cono
trica somera e inmediata, durante la cual Berríos se
Sur— ocurriera el único caso de detención arbitraria
desdijo de sus denuncias y dio como resultado que el
y desaparición forzada, luego tipificada como homi-
cidio, que se produjo en Uruguay desde la reinstau- chileno estaba en sus cabales. Puestas así las cosas, se
ración democrática: el caso Berríos. solicitaron directivas al Jefe de Policía de Canelones,
Ramón Rivas, quién ordenó anular la denuncia asen-
51 Javier Miranda, “Derechos Humanos. De la Ley de Caducidad a la tada por Berríos arrancando la página del libro de
Comisión para la Paz”, en Observatorio Político, Informe de Coyuntura
No. 1, 2000. A un año de gobierno del presidente Batlle. ICP-Trilce, Mon- partes diarios… Finalmente, Casella se llevó a Berríos
tevideo, 2001, p. 35. a la casa del coronel Eduardo Radaelli, lugar del que

33
había escapado”.52 Luego, en un proceso que mostró combatido a la guerrilla con todas las fuerzas y re-
las inercias de las coordinaciones represivas del Plan cursos a mi disposición, asumo haber hecho cosas de
Cóndor en plena vigencia del Estado de derecho en las cuales no me siento orgulloso, ni me sentí enton-
ambos países, el cadáver de Berrios apareció el 14 de ces. Asumo haber participado en una guerra, así lo
abril de 1995 en el balneario El Pinar. entendía en ese momento. Después de todo, la situa-
El proceso judicial en Uruguay se topó con dife- ción de guerra es la mayor parte de las veces un esta-
rentes problemas, pero avanzó más eficazmente en tuto jurídico, y la humanidad se ha visto envuelta en
la Justicia chilena. De ese modo, fueron extraditados la violencia, con muertos y heridos, sin que una gue-
por este caso los militares uruguayos Tomás Cassella, rra haya sido declarada. Asumo, por lo tanto, haber
Wellington Sarli y Eduardo Radaelli. Los tres oficia- estado sumergido en la violencia, solamente ahora,
les fueron condenados en Chile en agosto de 2013. desde esta perspectiva, puedo comprender los valores
El año 1996 resultó crucial para el replanteo y normas que imperaban en esa situación y que esta-
político del tema. Al conmemorarse el 20 de mayo ban pautados y determinados por esa violencia”. Es-
los veinte años de los asesinatos de los legisladores tas declaraciones despertaron ingentes debates, pero
Héctor Gutiérrez Ruiz y Zelmar Michelini, y de los su real valor estuvo en el hecho del reconocimiento
militantes políticos Rosario Barredo y William Whi- público de un ex miembro de las Fuerzas Armadas de
telaw, una multitud silenciosa se congregó en el cen- las violaciones a los derechos humanos perpetrados
tro de Montevideo bajo el lema “Verdad, memoria por éstas antes y durante el proceso dictatorial.53
y nunca más”. El número de manifestantes mostró Estos debates signaron un nuevo tiempo donde se
que el tema mantenía una relevancia sustancial para buscaron opciones para destrabar el tema. En 1995,
amplios sectores de la opinión pública. En particular, Rafael Michelini, senador por el Nuevo Espacio, rea-
el reclamo de reincorporar a la agenda pública la lizó una ronda de contactos con militares y políticos
verdad sobre el destino final de los detenidos des- en procura de generar una “Comisión de la Verdad”,
aparecidos. Esta manifestación se sigue realizando, iniciativa que no prosperó.
desde ese año, cada 20 de mayo.
Asimismo, en 1997 la Asociación de Familiares
Otro hecho relevante fue la publicación en mayo presentó un recurso de Petición ante el Poder Ejecu-
de 1996, de una carta del Capitán de Navío (r) Jor- tivo, solicitando el cumplimiento efectivo del artículo
ge Tróccoli en el diario El País titulada “Yo asumo
4º. de la Ley de Caducidad y ante el Comité Interame-
...Yo acuso...”. En la carta el marino confesaba su
ricano de Derechos Humanos de la OEA denunció el
participación en la represión y proponía una lectura
incumplimiento de las recomendaciones del informe
particular de los hechos. En su declaración Tróccoli
se pronunciaba en estos términos: “[asumo] haber 53 Sobre el caso del capitán Tróccoli resulta sustancial el análisis
de Daniel Gil en su libro El capitán por su boca muere o La piedad de
52 Andrés Capalán, “Caso Berríos: la justicia uruguaya entre la es- Eros: ensayo sobre la mentalidad de un torturador, Ed. Trilce. Montevi-
pada y la pared”, Equipo Nikzor, 2004. deo,1998.

34
de 1992 que imponía acciones respecto del esclare- ¡Júntense señores!” Estas visiones desconocen el

24/ Derechos humanos


cimiento de los casos de desapariciones al gobierno hecho irrefutable de que la mayoría de las víctimas
uruguayo. A ambos pedidos el gobierno presidido por directas de la represión no fueron “combatientes”
el Dr. Sanguinetti respondió negativamente. Como en un sentido estricto.
establece Javier Miranda, “el gobierno que a fines de Los meses previos a las elecciones de 1999 mos-
1996 parecía estar dispuesto a estudiar alguna nueva traban que el Frente Amplio podría ser la primera
solución al problema, a fines de 1997 se mostraba ab- fuerza política del país, solo frenable mediante una
solutamente decidido a no atender ni los reclamos de reforma constitucional que estableciera el balotaje
los familiares ni las recomendaciones de la Comisión para la elección de la Presidencia de la República.
Interamericana de Derechos Humanos de la OEA”.54 En la campaña electoral el tema volvió a aparecer
En 1997, el Obispo de San José, Mons. Pablo Ga- y quedó claro que se necesitaban nuevas respuestas
limberti, promovió una iniciativa de mediación, per- al problema.
filando que la Iglesia Católica reconocía la necesidad En este proceso el concepto de derechos huma-
de esclarecimiento del tema de las desapariciones nos dejó de tener una significación unívoca y con
forzadas en el país. En diciembre, el Comité Central referencia a la dictadura y, progresivamente, comen-
Israelita se sumó a la iniciativa de Mons. Galimber- zó a proponerse como una clave de defensa de una
ti, así como diferentes iglesias y sectores políticos agenda centrada en un difuso concepto de dignidad
consideraron pertinente la propuesta, que tendría la de la persona. También es claro que la década de los
virtud de mostrar que existía una nueva y renovada noventa supuso un desarrollo sustancial del derecho
demanda social respecto de la solución de un tema internacional en esta materia, sobre todo a partir del
que no permitía un cierre del pasado que articulara Congreso de Naciones Unidas de Viena realizado en
con el presente. 1993, que clarificó parte del debate sobre los alcances
Otro hito relevante, que muestra una actitud di- y posibles sentidos del término.
ferente, y que se inscribe dentro de la cuestionada El triunfo del Partido Colorado en el balotaje de
teoría llamada “de los dos demonios”, la marca el 1999 también implicaba que la izquierda era en los
Contralmirante (r) Eladio Moll que lanzó en 1998 hechos la primera fuerza política del país y del Par-
una propuesta similar a la realizada tiempo atrás lamento. De allí que pese a la gobernabilidad que le
por el dirigente tupamaro Mauricio Rosencof, bus- ofrecía el Partido Nacional, la administración Bat-
cando poner en contacto a “los combatientes”, pues lle tenía que buscar formas de negociación con una
“es necesario conocer el pasado para fortalecer un oposición en ascenso.
proceso democrático (...). Creo que los combatien-
Desde la asunción al cargo, el presidente Bat-
tes, los militares y los ex guerilleros, tienen que
lle mostró interés en reconsiderar las posturas del
juntarse para buscar una solución a la uruguaya.
gobierno anterior respecto del tema y uno de los
54 Miranda, ob. cit. p. 35.
primeros ecos de esta nueva posición se expresó en

35
el esclarecimiento del caso de la desaparición de la permitirá además, generar las condiciones necesarias
nieta del poeta argentino Juan Gelman. En su dis- para aprobar, en su momento, las medidas legales
curso de asunción anunciaba que: “Como lo hemos que correspondan para reparar las situaciones que
hecho hasta ahora, en los próximos cinco años lle- se constaten”.
garemos a todos los sectores de nuestra nación para Para integrar esa comisión fueron nombrados
escuchar, para informar, para dialogar y sostener Monseñor Nicolás Domingo Cotugno Fanizzi —como
con firmeza y claridad como lo hemos hecho siem- presidente—, José Artigas D’EIía Correa, Luis Pérez
pre con nuestras ideas y puntos de vista, en procura Aguirre S.J., Dr. José Claudio Williman Ramírez, Dr.
de los entendimientos y los acuerdos que aseguren Gonzalo Fernández y el Dr. Carlos Ramela. La comi-
la armonía de los uruguayos y sellen para siempre sión tenía como funciones “recibir, analizar, clasifi-
—sellen para siempre— la paz entre los uruguayos. car y recopilar información sobre las desapariciones
Y esa es nuestra obligación. Si tantas cosas hemos forzadas ocurridas durante el régimen de facto”. Y
pasado y tanto hemos sufrido, y nadie de nosotros debía en principio funcionar por 120 días, que luego
puede decir que alguien es culpable o que alguien fueron prorrogados.
es inocente, y por tanto este no es el resultado de El informe preliminar de la comisión presenta
un mundo maniqueo de malos contra buenos, sino los resultados de las indagatorias que pudo realizar
que todos estamos adentro de la misma historia, es y establece el supuesto destino de los desaparecidos.
a todos nosotros que nos corresponde como respon-
Respecto de las denuncias sobre personas des-
sabilidad primera sellar para siempre la paz entre
aparecidas en el Uruguay, la Comisión entiende que
los uruguayos”.55
ascienden a 39 y puntualiza que “de las 39 denuncias
El hito central de este proceso lo marca la crea- totales, 33 se refieren a situaciones que involucran a
ción de una Comisión para la Paz en agosto de 2000. ciudadanos uruguayos y 6 a ciudadanos argentinos”.
El decreto presidencial establecía que “se entiende En este sentido la comisión “considera confirmadas
necesario para consolidar la pacificación nacional y 26 denuncias —3 anteriores a junio de 1973 y 23 pos-
sellar para siempre la paz entre Ios uruguayos, dar teriores— en función de que existen elementos de
los pasos posibles para determinar la situación de los convicción coincidentes y relevantes que permiten
detenidos-desaparecidos durante el régimen de facto, asumir que estas personas fueron detenidas en pro-
así como de los menores desaparecidos en simila- cedimientos no oficiales o no reconocidos como ta-
res condiciones”. Y se afirmaba que esta actitud era les, fueron sometidas a apremios físicos y torturas
“una obligación ética del Estado y una tarea impres- en centros clandestinos de detención y fallecieron
cindible para preservar la memoria histórica, que finalmente, en definitiva, sea como consecuencia de
los castigos recibidos –en la enorme mayoría de los
55 “El primer discurso del nuevo Presidente. ‘Me comprometo
ante ustedes’”, Tres. Revista de actualidad. Montevideo, 3 de marzo casos– o como consecuencia directa de actos y accio-
de 2000, pp. 18 y 19. nes tendientes a provocar su muerte en algún caso

36
excepcional”. Asimismo “considera que no es posible que permiten asumir que esas personas (...) fue-

24/ Derechos humanos


confirmar o descartar 2 denuncias, en función de que ron detenidas y trasladadas a centros clandestinos
existe información, pero no suficiente a esos efectos”. de detención en los cuales como criterio normal
Por último descarta “en principio 5 denuncias, en y general se dio muerte a las personas detenidas.
función de que no se ha accedido hasta la fecha a in- c. Considera confirmada parcialmente 1 denuncia, en
formación o evidencia que vincule razonablemente función de que existen elementos de convicción
el destino de las personas en ellas referidas con los relevantes que permiten asumir que dicha perso-
temas a cargo de la comisión”. na (…) fue herida y muerta en un procedimiento
En relación a las denuncias de ciudadanos ex- clandestino de detención y existen indicios de que
tranjeros desaparecidos en Uruguay, la Comisión habría sido sepultada en una tumba NN en un
“considera confirmadas 5 denuncias, en función de cementerio de la Provincia de Buenos Aires.
que existen elementos de convicción coincidentes d. Considera confirmadas parcialmente 34 denun-
y relevantes que permiten asumir que [esas] perso-
cias más, en función de que existen elementos
nas fueron detenidas en nuestro país y trasladadas
de convicción relevantes que permiten asumir
a centros de detención en la República Argentina”;
que dichas personas fueron detenidas en procedi-
y “considera confirmada parcialmente 1 denuncia,
mientos no oficiales o no reconocidos como tales
en función de que existen elementos de convicción
y existen indicios de que habrían estado detenidas
coincidentes y relevantes que permiten asumir que
en centros clandestinos de detención.
esa persona fue detenida en la Argentina y trasladada
a nuestro país”. e. Considera confirmadas parcialmente 38 denun-
cias más, en función de que existen elementos
En cuanto a las denuncias sobre ciudadanos uru-
de convicción relevantes que permiten asumir
guayos desaparecidos en la Argentina, la comisión
entiende que el número asciende a 176. Al respecto que dichas personas fueron detenidas en procedi-
plantea las siguientes conclusiones: mientos no oficiales o no reconocidos como tales.
a. “Considera confirmadas 13 denuncias, en función f. Considera descartadas en principio 23 denuncias,
de que existen pericias oficiales y acciones judi- en función de que no existe información o evi-
ciales —ya culminadas o en trámite— que de- dencia que vincule razonablemente el destino de
muestran formalmente que las personas (…) fa- las personas en ellas referidas con los temas a
llecieron y fueron sepultadas en tumbas NN en cargo de la comisión.
cementerios de la Provincia de Buenos Aires. g. Considera descartada 1 denuncia, en función de que
b. Considera confirmadas 41 denuncias más –sin el se comprobó que la persona se encuentra con vida.
respaldo objetivo y formal que presentan los ca- h. Considera descartadas 20 denuncias que sólo fi-
sos referidos en el literal anterior– en función de guraban en listados de organismos de la Argen-
que existen elementos de convicción relevantes tina, en función de que respondían a listados no

37
actualizados o nombres incorrectos y no a denun- pertenecían a familias biológicas que los habían
cias reales. dado en adopción por motivos que nada tienen
i. Considera aclaradas 3 denuncias recibidas en for- que ver con los temas a cargo de la comisión.
ma directa por la comisión, en función de que se c. Considera en trámite 5 denuncias presentadas por
comprobó que los casos involucraban a personas los propios jóvenes interesados, las que han sido
vivas que ninguna vinculación tuvieron con los elevadas a Abuelas de Plaza de Mayo y el Hospital
temas a cargo de la comisión. Durand de la República Argentina para su segui-
j. Considera que no es posible confirmar o descartar miento, con la tipificación de ADN que se realizara
2 denuncias, en función de que ellas se refieren a pedido de esta comisión.
a personas cuya identidad no pudo ser precisada”. d. Considera descartadas en principio 21 denuncias,
Finalmente el informe aborda las denuncias sobre en función de que no existe a la fecha evidencia
ciudadanos uruguayos desaparecidos en otros países o información que permita suponer razonable-
y establece que de Chile se recibieron 7 denuncias mente que ellas tengan alguna vinculación con
y 2 de Paraguay, denuncias que fueron confirmadas; los temas a cargo de la comisión.”
mientras que la única denuncia proveniente de Bra- El informe final de la comisión, donde se detalla
sil fue descartada. cada caso, fue aceptado como conclusivo en su totali-
Respecto de las denuncias sobre niños desapare- dad en un decreto del Poder Ejecutivo. De este modo,
cidos el informe establece: el Estado uruguayo asumía por primera vez de mane-
“11. Las denuncias referidas a hijos de personas ra explícita las acciones realizadas en su nombre por
eventualmente desaparecidas que recibió la co- funcionarios de las Fuerzas Armadas y de la policía,
misión ascienden a 32. dando por zanjada la disputa sobre la verdad histórica
de los hechos narrados por las víctimas, sus familiares
De ese total, 26 corresponden a denuncias
y compañeros. Pero ese incuestionable valor suponía
efectuadas por terceros y 6 corresponden a jó-
también un intento de punto final por parte del go-
venes que denuncian a la comisión tener dudas
bierno, que alegaba que por esta vía se cumplía con el
sobre su identidad biológica.
artículo 4º. de la Ley de Caducidad que pedía la inves-
12. Las conclusiones son las siguientes: tigación de los casos de los detenidos desaparecidos. Al
a. Considera confirmada 1 denuncia, en función de respecto comenta la Asociación de Familiares:
que dicha persona (…) fue localizada en la ciudad “El decreto reciente del Poder Ejecutivo, por
de Buenos Aires y su identidad biológica confir- el cual el Gobierno acepta las conclusiones del
mada en actuaciones judiciales promovidas por Informe Final de la Comisión para la Paz, asu-
su madre biológica. miendo que las mismas constituyen la versión
b. Considera descartadas 5 denuncias, en función de oficial sobre la situación de los detenidos des-
que se comprobó objetivamente que los jóvenes aparecidos, señala en su considerando IV y en su

38
fundamentación de derecho, que con ello se da Por su parte varias organizaciones sociales esta-

24/ Derechos humanos


cumplimento a lo dispuestos por el Art. 4º. de la blecían su postura frente al informe estableciendo
Ley 15.848. Familiares entiende que, más allá de que “La existencia de investigaciones judiciales en el
que esta afirmación no integra la parte resolutiva marco del debido proceso con consiguiente sanción
de la norma, la misma no es ajustada a la realidad a quienes se hallaren responsables y reparación a las
de los hechos. El Art. 4º. de la ley de impunidad víctimas, unido a una reforma del Estado, es parte in-
cometía al Poder Ejecutivo “investigar” sobre las tegral de los resultados de una Comisión de la Verdad
denuncias presentadas sobre personas detenidas y de una política seria de lucha contra la impunidad.
desaparecidas; por su parte, la Resolución de la La misma debe ir dirigida a consolidar un estado
Presidencia de la República No. 858/2000, por la democrático republicano, único camino para sellar
que se crea la Comisión para la Paz, no cometió la paz entre los uruguayos y prevenir a las nuevas
a ésta llevar adelante una investigación. El Art. generaciones del flagelo del terrorismo de Estado.
1º. de esa resolución dice que la Comisión para Una vez más, hoy debemos enfatizar la importancia
la Paz tendrá por cometido ‘recibir, analizar, de asumir que una verdadera democracia se cons-
clasificar y recopilar información’. En el proce- truye, entre otras cosas, respetando sin concesiones
so de discusión de la redacción de la resolución políticas de ninguna índole, la independencia de los
de creación de la Comisión se excluyó expresa- poderes del Estado y en especial la del Poder Judicial,
mente, por iniciativa del Gobierno, la expresión logrando a su vez el sometimiento real de las Fuerzas
investigación. Como consecuencia de ello, a la Co- Armadas al poder civil y a los lineamientos de un
misión no se le asignó facultades investigativas Estado de Derecho pleno. Sólo así caminaremos hacia
amplias, tal cual lo exigiría el cumplimiento de una verdadera reconciliación nacional”.57
la investigación ordenada en el Art. 4º. citado.
Las reacciones que se generaron frente a los in-
Tan es así que en la Resolución de la Presidencia
formes presentados por la Comisión para la Paz mos-
por la que se crea la Comisión no existe mención
traron que el tema de los “desaparecidos” no estaba
alguna a esa norma de la ley de impunidad. Es
agotado en la agenda pública uruguaya. Esta situa-
más, en forma deliberada, nuevamente por ini-
ción se evidenció durante toda la campaña electoral
ciativa del Gobierno, no se incluyó en el texto de
del 2004, en la que el candidato encuentrista necesitó
la Resolución la mención al Art. 4º. Por lo tanto,
precisar en diferentes ocasiones su posición respecto
no es acorde a los hechos afirmar, como lo hace
de la llamada Ley de Caducidad; en particular sobre
el decreto 448/2003, que “el trabajo de la Comi-
la eventualidad de la promoción de la derogación de
sión para la Paz cumple definitivamente con lo
dispuesto por el artículo 4º. de la Ley Nº. 15.848 de prensa a propósito de las conclusiones de la comisión para la
del 22 de diciembre de 1986”.56 Paz, 21 de abril de 2003.
57 Derechos Humanos en el Uruguay. Informe 2003, Servicio de
56 Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, Comunicado Paz y Justicia, Montevideo, 2003, p. 70.

39
Excavaciones en el predio donde fueron hallados los restos de Ubagesner Chaves Sosa en noviembre de 2005
la ley, reclamo muy presente entre varios actores de de lo hecho, pues se afirmaba que los “camaradas que
Gabriel García

24/ Derechos humanos


la coalición de izquierdas. En este sentido el Dr. Váz- nos han precedido en esta responsabilidad cumplie-
quez manifestó su posición de discrepancia con la ron cabalmente con su deber en el tiempo histórico y
ley, pero afirmó que se aseguraba su vigencia, y en político en el que les correspondió actuar y tutelar el
su totalidad, en alusión al artículo 4º. destino de la fuerza”.58
En los hechos, en el mismo acto de asunción pre- Los militares manifestaron una aparente buena
sidencial (1º. de marzo de 2005) el nuevo Presiden- voluntad y una muestra clara de sometimiento a la
te anunció su voluntad de implementar el artículo lógica política de la coyuntura, pero no aceptaban
4º. de la Ley de Caducidad, que suponía la búsqueda plegarse a un revisionismo que supusiera un acto de
del destino final de los detenidos desaparecidos. Es- arrepentimiento.
tas búsquedas incluían la indagación respecto de los De los datos aportados, pocos indicaron lugares
posibles restos de las personas desaparecidas. Esto precisos, haciendo hincapié en la llamada “Opera-
suponía que el gobierno se comprometía a mantener ción zanahoria” que suponía la exhumación y reu-
la ley, pero también a aplicarla en su totalidad, a di- bicación de los restos. Pero la Fuerza Aérea aportó
ferencia de las administraciones anteriores. referencias que permitieron llegar al hallazgo de los
Desde el comienzo de la administración, la agenda primeros restos humanos en una chacra asociada a
de la Presidencia y las Fuerzas Armadas estuvo mar- esta fuerza. Hechas las pericias forenses se confirmó
cada por este tema. Como Comandante en jefe, el Dr. la identidad de Ubagesner Cháves Sosa, y con poste-
Vázquez pidió a las tres armas, en la figura de sus rioridad fueron identificados los restos del escriba-
comandantes, la elaboración de informes respecto al no Fernando Miranda.
destino final de los detenidos desaparecidos. En agosto El resultado de estos informes debía reorientar
de 2005 las tres armas presentaron sus informes, de- las búsquedas de restos humanos por parte de un
jando en entredicho al menos parte de la información equipo de antropólogos forenses encargado de las ta-
aportada por los militares a la Comisión para la Paz. reas, pero de estas excavaciones no se obtuvieron los
Este cambio en las perspectiva del Ejecutivo era hallazgos esperados.
percibido con suspicacia por las Fuerzas Armadas La falta de resultados obligó a la Presidencia a
y los comandantes no dejaron de manifestar que se buscar nuevas estrategias y mayores pedidos de in-
sometían a los requerimientos presidenciales en el formes, en particular referidos al traslado de deteni-
marco de sus responsabilidades, reconociendo que dos uruguayos desde territorio argentino.Tanto la pe-
“cada circunstancia impone pautas y marca sus rit- ricia jurídica como los testimonios de sobrevivientes,
mos y no perdemos de vista que, en esta coyuntura afirmaban la existencia de un primer vuelo, pero
histórica, estamos haciendo lo que las circunstancias existían indicios respecto de otros posibles vuelos de
imponen”. Este reconocimiento de las circunstancias
no supuso en el discurso militar un arrepentimiento 58 Comandante Ángel Bertolotti, Carta del 8 de agosto de 2005.

41
la Fuerza Aérea con detenidos que luego integraron De forma emblemática el presidente civil que inició
la lista de desaparecidos. el golpe —Dr. Juan María Bordaberry— y el úni-
Estos informes, pese a lo poco aportado en tér- co militar que ocupó la Presidencia en el período
minos de resultados concretos, tienen un valor enor- —Gral. (r) Gregorio Álvarez— fueron encarcelados.
me en tanto son el reconocimiento oficial de las tres La Presidencia de la República también conside-
armas de que personal militar estuvo implicado en ró necesario documentar todos los procesos iniciados
la detención arbitraria y la desaparición forzada de sobre este tema en el período democrático, de modo
connacionales, que no podían ser considerados en que se constituyó un equipo de historiadores que fue-
ningún caso combatientes enemigos. Esto confir- ron encargados de organizar la información sobre
ma los delitos de lesa humanidad cometidos contra este tema existente en la órbita de los poderes Le-
individuos que en todo caso deben ser considera- gislativo y Ejecutivo. El resultado de este trabajo son
dos civiles, eliminando la posible argumentación de cinco tomos de la publicación Investigación Histórica
situación de guerra, aunque de todos modos se debie- sobre Detenidos Desaparecidos, presentada en 2007.59
ron haber aplicado las prescripciones para trato de En esta misma línea el Presidente Tabaré Vázquez
prisioneros en tiempos de guerra. propuso el Día del Nunca Más, que se celebraría en
El secuestro de opositores en el exterior y su re- concordancia con el 19 de junio, fecha del Natalicio
patriación clandestina fue una faceta de la coordi- de Artigas. Esta idea ha sido muy cuestionada por
nación represiva de las dictaduras de la región que las organizaciones de víctimas y familiares, y por
comenzó mucho antes del llamado Plan Cóndor. Des- sectores sociales que han percibido en el gesto un
de 1974 hubo más de un centenar de víctimas del intento de cerrar el tema. En un acto que contó con
traslado forzado por parte del régimen uruguayo, 44 la presencia de líderes de la oposición, el presidente
de ellos pudieron sobrevivir, 65 siguen desaparecidos Vázquez asistió a la Plaza Independencia para rendir
y 5 fueron fusilados. homenaje al Prócer, como modo de vehiculizar for-
mas de reconciliación entre los uruguayos. Sin em-
La nueva perspectiva inaugurada por la Presiden-
bargo, los tres presidentes posteriores al retorno de
cia también tuvo como contrapartida un incremento
la democracia —Julio María Sanguinetti, Jorge Batlle,
en las demandas referidas a procesos judiciales aso-
ambos del Partido Colorado, y Luis Alberto Lacalle,
ciados a estos casos de desaparición forzada, que no
habían prescrito y que eran pasibles de ser reabiertos 59 La “Investigación Histórica sobre Detenidos Desaparecidos” es-
o de superar la posible inclusión dentro de la Ley de tuvo coordinada por Alvaro Rico y contó con la supervision aca-
démica de José Pedro Barrán y Gerardo Caetano. En el equipo de
Caducidad, potestad que tiene por ley el Ejecutivo.
investigadores participaron: Jimena Alonso, Magdalena Figueredo,
Esta nueva dinámica a nivel del Poder Judicial, Carla Larrobla, Fabiana Larrobla, Jaime Yaffé, Gabriel Bucheli, Ma-
determinó que muchos casos implicaran el procesa- riana Iglesias, Vania Markarian, Carlos Demasi, Vanesa Sanguinetti,
Isabel Wschebor, Viviana Ruiz, Graciela Sapriza, Valentina Curto,
miento de varios civiles y militares por violaciones José Luis González y Ariela Peralta. http://archivo.presidencia.gub.
a los derechos humanos durante la última dictadura. uy/_Web/noticias/2007/06/2007060509.htm

42
del Partido Nacional— no tomaron parte en el acto definido ni siquiera dentro de los sectores que tra-

24/ Derechos humanos


por discrepar con su realización. dicionalmente han defendido la necesidad de verdad
Algunos sectores del Frente Amplio manifestaron y justicia. Queda como problema poder establecer si
su rechazo a la propuesta del presidente y convocaron existieron otros pactos o acuerdos entre militares y
a una marcha en contra de la iniciativa, por entender civiles que reafirman la impunidad como criterio.
que Vázquez “plantea la reconciliación de los uru- Cabe destacar que el 20 de octubre de 2009, a
guayos con la impunidad”, debido a que continúan pocos días de las elecciones nacionales, la Suprema
desaparecidos decenas de uruguayos detenidos du- Corte de Justicia consideró por unanimidad que la
rante la dictadura. “Ley de Caducidad de la Pretensión Punitiva del Esta-
La asociación de Madres y Familiares de Urugua- do” es inconstitucional por violentar los artículos 4,
yos Detenidos Desaparecidos y la central obrera, el 82 y 233 de la Constitución de la República y diversas
PIT-CNT, tampoco acompañaron la iniciativa. Los co- normas del derecho internacional aprobadas por el
mandantes en jefe de las Fuerzas Armadas uruguayas Estado uruguayo, pues “la Corporación comparte la
fueron “invitados” por Vázquez a asistir, lo que en la línea de pensamiento según la cual las convenciones
esfera militar es considerado una orden y estuvieron internacionales de derechos humanos se integran a la
presentes en primera fila. Sin embargo, el Círculo Carta por la vía del artículo 72, por tratarse de dere-
Militar, que agrupa a militares retirados, afirmó que chos inherentes a la dignidad humana que la comu-
los sectores radicales “le torcieron el brazo” al man- nidad internacional reconoce”, según reza el fallo.60
datario y convocó a no tomar parte en el acto. Asimismo, en 2010 el Frente Amplio presentó un
El tema ha mostrado una complejidad y una capa- proyecto de ley interpretativa que anulaba los artícu-
cidad de adaptación en el tiempo muy alta, relaciona- los 1º., 3º. y 4º. de la ley Nº 15.848. El artículo 2º. del
da con la circunstancia de que la desaparición es un proyecto decía: “Declárase como interpretación obli-
hecho que pasó, pero que sigue pasando en tanto no gatoria (Código Civil, artículo 12) que los artículos
aparezcan, lo que diferencia el caso del de los otros 1º., 3º. y 4º. de la Ley Nº 15.848, de 22 de diciembre de
grupos de víctimas, presos o exiliados. 1986, presentan una ilegitimidad manifiesta, violan
En el marco del proceso eleccionario del 2009 se los artículos 4, 72, 83 y 233 de la Constitución de la
volvió a someter la Ley de Caducidad a la volun- República y carecen de valor jurídico alguno”.61
tad popular. Impulsado por sectores de familiares y El proyecto fue aprobado ese mismo año por la
organizaciones sindicales, el plebiscito contó con el cámara de Diputados con los votos oficialistas, mien-
tímido apoyo del Frente Amplio. El 48% del cuerpo tras que la oposición votó en contra por unanimidad.
electoral se pronunció por la derogación de la ley, ci-
60 http://www.lr21.com.uy/politica/385131-ley-violo-separacion-
fra inferior a la votación general del Frente Amplio y de-poderes
otros grupos de izquierda en el mismo acto eleccio- 61 http://www.diputados.gub.uy/informacion/pl_47I/0096-
nario. Esto demuestra que el tema no está claramente C0395-10.htm

43
sido vista con gran preocupación por los activistas
en derechos humanos y por sectores del gobierno,
así como por funcionarios de Naciones Unidas es-
pecializados en derechos humanos. El relator espe-
cial sobre la promoción de la verdad, la justicia, la
reparación y las garantías de no repetición, Pablo
de Greiff, recalcó que “ninguna disposición legal o
práctica nacional, incluidas las amnistías, pueden
ser válidamente invocadas por el Estado como ex-
cusas para no avanzar con las investigaciones de
las atrocidades cometidas, de acuerdo con el derecho

Carlos Contrera
internacional”.62
En este proceso histórico, desde el 2000 el con-
cepto de derechos humanos ha ido rebasando pro-
Luisa Cuesta, madre del desaparecido Nebio Melo, recibe en gresivamente el debate del pasado para convertirse
agosto de 2013 el doctorado Honoris Causa de la Universidad en una forma de hablar del futuro. La afirmación de
de la República. estos derechos orienta la política pública, suscitando
En el Senado se aprobó con los votos del oficialismo, grandes consensos cuando se trata de la expansión
con exclusión del senador frenteamplista Jorge Sara- de la ciudadanía en el reconocimiento de la situa-
via que se unió en ese momento a la oposición. Al ción de sectores sociales que han resultado vulnera-
ser aprobada con modificaciones la ley volvió a la dos en sus derechos. En este sentido las políticas de
cámara de Diputados, pero en su votación el diputado inclusión han contado con un apoyo ciudadano supe-
Víctor Semproni abandonó la sala, dejando en mino- rior al electorado de izquierda, especialmente entre
ría a la bancada del Frente Amplio. los sectores juveniles.
Finalmente la ley fue aprobada, pero una nueva Cuando se trata de derechos que apuntan a la cali-
instancia de desafío quedó marcada cuando a ini- dad de vida de los ciudadanos, los perfiles ideológicos
cios de 2013 la Suprema Corte de Justicia declaró in- se perfilan más claramente, ya que se redefine el rol
constitucionales los artículos 2º. y 3º. de la Ley de del Estado y su relación con los individuos. Está claro
Interpretación de la Ley de Caducidad de 2011 que que se divide la sociedad cuando se debe pensar en
permitían la investigación de los delitos cometidos la manera de financiar la efectivización de derechos,
por oficiales de las Fuerzas Armadas y policiales du- quedando muchas veces la discusión atrapada entre
rante el gobierno militar. la lógica de la universalización de los derechos sin
Esta decisión vuelve a complicar el proceso ju- una clara medición de impacto.
dicial que busca establecer verdad y justicia para los 62 http://www.ohchr.org/SP/NewsEvents/Pages/DisplayNews.
crímenes cometidos en la dictadura. La situación ha aspx?NewsID=13486&LangID=S

44
Carlos Contrera

24/ Derechos humanos


Marca de la memorioa que recuerda el
acto del Obelisco de noviembre de 1983

45
Carlos Contrera
Penal de Libertad.
4
Derechos humanos y gestión pública

24/ Derechos humanos


La caída del bloque socialista en Europa del Este su- en las relaciones laborales, educativas y sobre todo
puso una crisis de las izquierdas, donde los derechos territoriales. El abandono del “Estado de bienestar”,
humanos han operado como tabla salvadora ante la como proyecto político, supuso un retiro del Estado
deriva de la falta de sentido ideológico. Asimismo, y de la política, que ha provocado un descreimien-
esta sensación de vacío de propuestas de izquierda to en las instituciones democráticas, en poblaciones
estuvo acompañada de una aceleración del proceso que han visto incrementarse la exclusión social y la
de globalización, monopolizado por el Consenso de desigualdad. Este proceso también implicó un incre-
Washington y sus políticas neoliberales. Estas polí- mento exponencial de la violencia; en las Naciones
ticas suponían la radicalización de la autonomía in- Unidas marcó la agenda de la cooperación interna-
dividualista, en medio de un mercado librado a sus cional y su incidencia en las agendas de  los movi-
propias fuerzas. En este contexto los derechos hu- mientos sociales y de los Estados. Esto ha devenido
manos comenzaron a operar como un consenso de en la creación de una perspectiva de las políticas pú-
mínimos que pueden proteger a los individuos, es- blicas desde los derechos humanos.
pecialmente a aquellos que ingresan en desventaja a La relación entre la agenda internacional y los
priori dentro del mercado. programas temáticos desplegados por los gobiernos
Estas políticas neoliberales supusieron una pro- progresistas puede quedar ejemplificado en varios
fundización de la fractura social e implicaron proce- casos. Uno de ellos es la atención a la diversidad ra-
sos de segregación progresivos que se han expresado cial expresada por Naciones Unidas a través de las

47
respuestas a los informes presentados por el gobier- los delitos de violencia contra la mujer en la familia
no uruguayo. En este caso el Comité de Derechos o fuera de ella”.64
Humanos “recomienda que el Estado parte establez- En este sentido podemos ver que parte del itine-
ca programas especiales encaminados a facilitar el rario legislativo del progresismo en Uruguay, ha ar-
adelanto social de las mujeres pertenecientes a la ticulado con agendas y recomendaciones internacio-
comunidad afrouruguaya, quienes padecen de una nales. Como establece Patricia Gainza “el desarrollo
doble discriminación, por motivos de género y de de políticas públicas con perspectiva de Derechos Hu-
raza”. Asimismo, las demandas sobre salud sexual y manos implica como primera condición el reconoci-
reproductiva se patentizan en otro informe que “re- miento del Estado de la obligatoriedad de cumplir los
comienda que el Estado parte examine la situación compromisos internacionales que asumió a través de
de la población adolescente con prioridad y exhorta la firma de Convenciones como la Convención Inter-
al Gobierno a adoptar medidas para que se presten nacional sobre la Eliminación de todas las Formas de
servicios efectivos de salud reproductiva y sexual, y Discriminación Racial (CERD), Convención sobre la
se preste atención a las necesidades de información eliminación de todas las formas de discriminación
de los adolescentes, incluso mediante la aplicación contra la mujer (CEDAW), Convención internacional
de programas y políticas conducentes a incrementar sobre la protección de los derechos de todos los traba-
los conocimientos sobre los distintos tipos de anti- jadores migratorios y de sus familiares, entre otras;
conceptivos y su disponibilidad, en el entendido de y Pactos, como el Pacto Internacional de Derechos
que la planificación de la familia es responsabilidad Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) el Pacto
de ambos integrantes de la pareja. El Comité pide al Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PDCP)”.65
Estado parte que en el próximo informe periódico Plantear las políticas públicas desde una perspec-
se incluya información sobre los efectos de los pro- tiva de derechos supone la “obligación de respetar
gramas para limitar y prevenir los embarazos en la
los Derechos Humanos absteniéndose de provocar
adolescencia”.63 En términos de género se “insta a
violaciones a los mismos, haciendo cesar cualquier
[Uruguay] a que se preste más atención al problema
acción que desde el Estado los provocara y propor-
de la discriminación de facto de que es víctima la
cionando una reparación integral por las violaciones
mujer y a que se apliquen programas para elimi-
que hubiera cometido. Obligación de proteger fren-
nar las desigualdades entre hombres y mujeres en
te a la acción de terceros que causaran el perjuicio
los sectores público y privado. Recomienda que se
tomen medidas jurídicas adecuadas en relación con 64 Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, 17°
período de sesiones (17 de noviembre al 5 de diciembre de 1997).
63 Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, El Comité examinó el segundo informe periódico del Uruguay
26° período de sesiones (14 de enero a 1° de febrero de 2002) El (E/1990/6/Add.10).
Comité examinó los informes periódicos segundo y tercero combi- 65 Patricia Gainza, “Políticas Públicas con perspectiva de Derechos
nados del Uruguay (CEDAW/C/URY/2-3). Humanos: principales desafíos” 4º. Congreso Uruguayo de Ciencia
Política, Facultad de Ciencias Sociales, UDELAR, Montevideo, 2012.

48
sobre las condiciones que garantizan el efectivo goce que están consagrados en las normas. Pero exis-

24/ Derechos humanos


de los Derechos Humanos. En el marco del derecho te una pregunta previa: ¿cuáles deben ser? Y esta es
internacional quienes tienen responsabilidad son los una pregunta que se resuelve en el terreno político.
Estados y por tanto son quienes violan los Derechos Los gobiernos tienen un compromiso mínimo con el
Humanos por acción u omisión. Los actores particu- programa de los derechos humanos ya consagrados,
lares cometen delitos, la no protección por parte del pero nada les impide ir más allá. Y por lo tanto, las
Estado a sus ciudadanos frente a esos delitos cons- políticas públicas deben partir de la pregunta de cuá-
tituye una violación por omisión de su obligación les deberían ser los derechos humanos, no para cues-
de protección. Y por último la obligación de cum- tionar los ya consagrados sino para avanzar más allá
plir, que implica adoptar medidas para garantizar la de estas definiciones. A partir de esta definición que
progresiva realización de los Derechos Humanos de no puede retroceder respecto de lo establecido por la
todas las personas que viven bajo la jurisdicción del normativa, lo que tenemos es una lista de derechos.
Estado, empleando para ello hasta el máximo de los Si la razón de ser de este instrumento que es el
recursos de que disponga”.66 Estado, es poner todos sus recursos y poderes para
La creación de un Ministerio de Desarrollo So- hacer efectiva la realización de sus derechos a todas
cial en marzo de 2005 por ley 17.866, ha consolidado las personas, entonces se debe comenzar por iden-
esta perspectiva en sus aspectos institucionales (Ver tificar donde están los problemas que impiden esa
Recuadro en p. 50). En el ámbito de este Ministerio realización. Los problemas pueden estar en la norma,
funcionan: el Instituto Nacional de la Juventud, el y esto puede ocurrir por un defecto de la garantía
Instituto Nacional de las Mujeres, el Programa Infan- primaria, es decir porque no existe una norma que
cia y Familia, el Instituto Nacional del Adulto Mayor establezca quien es el obligado y a qué está obligado.
y el Programa Nacional de Discapacidad. En este caso lo que habría que hacer es crear legis-
¿Qué quiere decir políticas públicas con enfoque lación y esto es parte de lo que debería contener una
de derechos humanos en el Uruguay de hoy? En for- política pública.
ma esquemática se puede decir que implica identifi- El problema puede estar en el titular de la obligación.
car dónde están los problemas que impiden que los Supongamos que sí está claro quién es el obligado y
derechos humanos sean ejercidos plenamente por a qué está obligado, pero existe un defecto por in-
todas las personas, y asumirlos desde las respuestas cumplimiento. Y esto puede ocurrir porque el titular
de la política pública. En términos de lo que estable- de la obligación no quiere cumplir con su obligación
ce el derecho, el punto de partida sería la pregunta o porque no puede. Si no quiere, lo que corresponde
¿cuáles son los derechos? y la respuesta es que son los es la modificación de esa voluntad y eventualmente
la sanción y la reasignación de los cargos, para ga-
66 Fernando Willat, ¿Qué es la perspectiva de derechos humanos? Ha-
blando de derechos, MIDES, DESC+A. Charlas de formación en derechos rantizar en el marco de la política pública la efectiva
humanos, Libro 1, Montevideo, 2011, p. 18. voluntad de cumplimento de las obligaciones.

49
Cometidos del Ministerio de Desarrollo Social

a)   Asesorar al Poder Ejecutivo y proponer los políticas nacionales en las materias de su competencia.
b)   Sin perjuicio de las competencias de otros ministerios y organismos, formular, ejecutar, supervisar, coor-
dinar, programar, dar seguimiento y evaluar las políticas, estrategias y planes en las áreas de juventud,
mujer y familia, adultos mayores, discapacitados y desarrollo social en general.
c)      Coordinar las acciones, planes y programas intersectoriales, implementados por el Poder Ejecutivo para
garantizar el pleno ejercicio de los derechos sociales a la alimentación, a la salud, a la vivienda, al disfrute
de un medio ambiente sano, al trabajo, a la seguridad social y a la no discriminación.
d)   Diseñar, organizar y operar un sistema de información social con indicadores relevantes sobre los grupos
poblacionales en situaciones de vulnerabilidad, que permita la adecuada localización del conjunto de políti-
cas y programas sociales nacionales.
e)      Diseñar, organizar y administrar un sistema de identificación, selección y registro único de los núcleos
familiares o individuos habilitados para acceder a los programas sociales, sujetos a criterios de objetividad,
transparencia, selectividad, temporalidad y respetando el derecho de privacidad en los datos que así lo re-
quieran.
f)   Implementar, ejecutar y coordinar programas de Atención a la Emergencia Social, mediante la cobertura
de las necesidades básicas de quienes se hallan en situación de indigencia y de extrema pobreza, buscando
el mejoramiento de las condiciones de vida y su integración social.
g)     Proporcionar información y asesoramiento sobre los programas disponibles para quienes se encuentren en
situación de indigencia o extrema pobreza.
h)   Coordinar con los gobiernos departamentales la ejecución de sus cometidos.
i)   Sin perjuicio, en cuanto corresponda, de las competencias del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo y del
Ministerio de Relaciones Exteriores, atender los asuntos internacionales referidos al desarrollo social, así
como la celebración y complementación de convenios bilaterales y multilaterales de cooperación con insti-
tuciones públicas y privadas, nacionales o extranjeras.
j)     Establecer ámbitos de coordinación y asesoramiento con la sociedad civil involucrada en los objetivos de
su competencia.

50
Pero si no puede, esto puede ocurrir por dos ra- (y esta es una forma de responder al problema) me-

24/ Derechos humanos


zones: por un insuficiente desarrollo de capacidades diante planes de acción dirigidos a desarrollar habi-
propias o por inhabilitaciones que le impone el con- lidades de los titulares de derechos. Pero también las
texto. Por lo tanto, como problema, puede abordarse transformaciones que podamos operar en el contexto
por un desarrollo de habilidades y/o por una trans- pueden permitir que la persona que tiene limitacio-
formación de las inhabilitaciones en habilitaciones. nes de determinadas habilidades esté en condiciones
No estamos acostumbrados a pensar a las institucio- de lograr una buena adaptación activa a su realidad,
nes del Estado en términos de sus capacidades, pero o que aquel que teniendo las habilidades y encuentra
ocurre todo el tiempo que hay problemas que tienen obstáculos para ponerlas en juego, se vea liberado
esta causa. Las instituciones violan con frecuencia de estas limitaciones. Y todo esto es parte de lo que
los derechos humanos por acción u omisión. Esto es debe ser diagnosticado para encontrar una respuesta
muy difícil de asumir por las instituciones, porque mediante las políticas públicas.
estamos acostumbrados a hablar de derechos huma- Para construir una política pública con enfoque
nos refiriéndonos exclusivamente a las graves viola- de derechos humanos hay que partir de un diagnósti-
ciones cometidas por las dictaduras. Pero es necesario co de estos problemas, que pueden estar en el marco
diferenciar estas violaciones de las que ocurren en normativo, en el titular de la obligación o en el ti-
cualquier contexto democrático, las que para corre- tular del derecho. Es decir que, partiendo de la lista
girse deben primero volverse visibles, asumiendo de los derechos consagrados, se releva cuáles son los
cuando no hay capacidades suficientes o cuando hay problemas de acceso a niveles esenciales de cada uno
inhabilitaciones, por ejemplo, por la existencia de de ellos, cuáles son las dificultades para una progresiva
poderes fácticos que escapan al control estatal. En- realización del acceso a estos derechos, quiénes son las
tonces lo que corresponde es realizar un plan de ac- personas qué no pueden acceder y por qué causas. Por
ción para desarrollar las capacidades y para transfor- supuesto que el diagnóstico tiene que incluir la adecua-
mar las inhabilitaciones. ción de la institucionalidad, la existencia o no de las
Pero podría ocurrir también que el problema garantías primarias y secundarias, el funcionamiento
estuviera en el titular del derecho, porque estuviera efectivo de las instituciones, la violencia institucional. Y
impedido de ejercerlo por sí mismo, y esto puede una vez que identificamos los problemas, hay que defi-
ocurrir también por insuficiente desarrollo de sus nir un plan de acción correlacionado con el diagnóstico;
capacidades o por inhabilitaciones. La violencia co- un presupuesto que permita asegurar que este plan de
metida por el Estado o por particulares, o las prácticas acción puede realizarse; un sistema de monitoreo con
sociales discriminatorias arraigadas culturalmen- indicadores que permitan ver el cumplimiento de las
te pueden ser formas de inhabilitación. Esto puede obligaciones del Estado respecto a los derechos huma-
resultar más claro al pensar en las discapacidades, nos; una rendición de cuentas donde se diga qué se hizo
pero su aplicación vale más allá de estos casos. Las y qué no y por qué no se hizo, y qué de lo realizado dio
capacidades hasta cierto punto se pueden desarrollar los resultados que se esperaban y qué no. Todo esto con

51
instancias de participación y garantizando el acceso pú- Esto nos ubica en la perspectiva de ejercer los de-
blico a la información. rechos políticos en un sentido mucho más amplio que
Si logramos que las políticas públicas se constru- aquel al que estamos acostumbrados y, en particular,
yan con esta lógica estaremos aproximándonos mu- obliga a repensar algunos aspectos de lo que implica
cho más a un Estado que cumpla con aquello que le la ciudadanía. Por ejemplo, tener en cuenta que los
da legitimidad, que es hacer efectiva la realización de niños y los adolescentes, o los extranjeros, tienen algo
la dignidad humana de todas las personas. Y esto nos para decir sobre los problemas y las políticas públicas
instala hoy en un proyecto político, porque esto no se que los afectan y sobre cómo debe ser la sociedad a
hace así, ni aquí ni en ningún otro lado. Hay avances la que pertenecen. Todo esto es programático para
parciales, porque es un paradigma emergente que se la educación. Educar en el sentido del compromiso
desarrolla por su pertinencia histórica y por los es- con la dignidad de todas las personas, educar para
fuerzos de muchas personas y organizaciones, pero analizar críticamente la institucionalidad que hoy te-
dista aún de ser un paradigma dominante. Recién en nemos y para valorar y defender la institucionalidad
el año 2000 empieza a tomar peso la idea de políticas de los derechos humanos. Educar para el ejercicio de
públicas con enfoque de derechos humanos, por la la ciudadanía y para el desarrollo del proyecto ético
convergencia del enfoque de derechos humanos con político de los derechos humanos frente a los desafíos
el enfoque de desarrollo. En perspectiva histórica ca- históricos del presente.
torce años no son nada. Como establece Gainza, uno de los primeros de-
Estamos, por lo tanto, viviendo un momento his- safíos que se presentan al pensar el Estado desde una
tórico en el que tenemos el desafío de construir las perspectiva de derechos es educar en Derechos Huma-
políticas públicas con un enfoque de derechos huma- nos a las personas tomadoras de decisiones y a fun-
nos. Y no es solo un desafío para el Estado sino para cinonarios públicos, y saber que esta opción supone
la ciudadanía en su conjunto. Este programa implica un cambio cultural radical, porque implica redefi-
una participación ciudadana que no se limita exclu- nir lógicas de poder. También supone promover una
sivamente a votar cada cinco años. Participar es decir visión social basada en el principio de igualdad y no
cuáles son los problemas que debemos asumir cómo discriminación. Esto obliga a una revisión del con-
sociedad, cuáles son las respuestas que deben darse cepto de vulnerabilidad social que manejamos como
a esos problemas, qué opinión nos merecen las res- Estado uruguayo, integrando otras dimensiones. Como
puestas que se están dando y qué otras podrían im- establece el documento de Reforma Social —aprobado
plementarse, cómo utilizamos los recursos limitados por el Consejo Nacional de Políticas Sociales en 2011—
que tenemos para costear estas medidas. Participar que toma otros aspectos de la pobreza:
no solo en el momento de definir el plan de acción, “La pobreza presenta en nuestro país algunas
sino también en el monitoreo, en el momento de la características relevantes, algunas de larga data
rendición de cuentas y en el de la evaluación. y otras que se han hecho más remarcables luego

52
24/ Derechos humanos
Carlos Contrera

de las transformaciones ocurridas en los años Este documento también define siete desigual-
noventa: los hogares pobres son por lo general dades a ser revertidas: desigualdades por ingresos,
más numerosos, y lo son cuanto más extrema territoriales, intergeneracionales, de género, por
es la pobreza; los niños, niñas y adolescentes origen étnico-racial, por condición de discapa-
están sobrerrepresentados en estos hogares; las cidad y por condiciones de orientación sexual e
personas adultas poseen bajo nivel educativo; identidad de género.
los perceptores de ingresos del hogar son pro- Por último construir políticas públicas con pers-
porcionalmente menos que en los hogares no pectiva de derechos humanos, supone contribuir en la
pobres, y esto se agudiza en la pobreza extrema; consolidación de una sociedad civil autónoma, solidaria
los trabajadores del hogar tienen una inserción e interrelacionada, que no sea mera ejecutora de pro-
precaria o informal en el mercado de trabajo; yectos que debe garantizar el Estado, sino que proponga
residen en las periferias urbanas, en viviendas y desafíe constantemente al Estado y a la sociedad para
con carencias de diverso tipo, propias y del en- que mejore la calidad de la democracia.
torno; y por todo ello se trata de una pobreza
más homogénea y más débil en sus interaccio-
nes con otros sectores sociales”.67
67 Patricia Gainza, ob. cit.

53
Carlos Contrera
Aprobación de la ley de legalización de
la marihuana en diciembre de 2013

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5
Miradas hacia el futuro

24/ Derechos humanos


Las estrategias del silencio y la actitud esquiva res- Sobre nuestro pasado reciente existen diferentes
pecto del pasado nos seguirán afectando en el futuro, versiones que coexisten en el espacio público, inclu-
haciendo que aparezcan, como sombras, esos retazos so con lugares de memoria diferentes.68 El desafío no
del horror que reclama reconocimiento explícito. es eliminarlos, por el contrario, es necesario recono-
Necesitamos políticas de la memoria histórica que cerlos para poder hablar de nuestras violencias del
develen las diferentes perspectivas del conflicto que presente, que no están del todo desconectadas.
vivimos. Para ello necesitamos reconocer todas las En este sentido de recuperación de múltiples me-
verdades sobre el pasado y del uso de la violencia morias, es que la relevancia del tema desaparecidos
como herramienta política. es determinante de otras dimensiones de la cultura.
Porque desde una perspectiva estética y represen-
No hay atajos en la historia y el pasado mal pro- tacional, los presos políticos existían en un lugar
cesado siempre retorna. Como bien suele decirse: “el y tenían rostros concretos, de allí que la demanda
pueblo que olvida su pasado está condenado a re- por su libertad pareciera como más inmediata y por
petirlo”. Para poder hablar de derechos humanos sin tanto fuera objeto de las negociaciones con los mi-
referirnos a la desaparición forzada haciendo hin- litares al momento de la apertura democrática. Pero
capié en la violación de los derechos, debemos poder
68 Eugenia Allier Montaño, “Lugar de Memoria: ¿un concepto para
arribar a la verdad y a la justicia, de modo de poder el análisis de las luchas memoriales? El caso de Uruguay y su pasado
plantearnos la reconciliación como horizonte. reciente”, Cuadernos del CLAEH, Nº. 96-97, Montevideo, 2008.

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los desaparecidos necesitaron tener rostros propios, contemplando las verjas de las plazas
separarse del resto de sus compañeros –igualmen- los timbres de las puertas/ las viajas azoteas
te víctimas de la represión– porque la desaparición ordenando sus sueños sus olvidos
constituía en sí misma otra realidad, no solo por la
quizá convalecientes de su muerte privada…”
evidente falta del cuerpo concreto, sino porque abría
a la posibilidad de ese “limbo” que constituye el no
estar ni preso, ni muerto, ni vivo. (Mario Benedetti)
Para los presos políticos el testimonio se constitu-
yó en el vehículo jurídico, psicológico y político para Desde los familiares y compañeros reconstituir
narrar su historia. Se repiten en este caso las memo- corporalidad es un desafío para poder narrar una
rias de viajes a lugares infernales y las metáforas que historia que siempre resulta incompleta, de allí que
hacen hincapié en lo esencial de experiencias que si se representan cuerpos no hay rostros y si hay ros-
están en los extremos inenarrables de la condición tros no hay cuerpos. Esta estética de la desaparición
humana. Por tanto, la víctima que vuelve “desde si- fue muy trabajada por los familiares, probablemente
lencios duros y fríos”69 puede narrar su experiencia en el comienzo, de manera más intuitiva que razo-
desde el testimonio, la novela, e incluso constituir de nada. Pero luego adquirió formas de presentarse en
manera individual y colectiva una verdadera épica, lo público que evidencian un proceso de reflexión
aun desde la humildad que encierra el extremo dolor. colectivo, como el representar el ícono de una flor
En el caso del detenido desaparecido se carece de con un pétalo faltante.
esa posibilidad, tanto en forma individual como co- Esta estética de lo faltante se constituyó en la
lectiva. Su historia se ha hecho con fragmentos de clave para representar a las víctimas, de allí que
lo que otros detenidos pueden testimoniar, pero son diferentes expresiones artísticas exploraron esta
historias “encapuchadas”, fragmentos de discursos, clave al mostrar brazos, manos, rostros, figuras
gritos y silencios. Únicamente la poesía en tanto gé- superpuestas. Y finalmente en el Memorial de los
nero totalmente abierto podía contener una voz que Desaparecidos, ubicado en el Cerro de Montevi-
solo puede frente a este hecho cavilar y dudar: deo, se optó por un vidrio que permite ver, pero de
manera velada, la ciudad. Porque en la visión de
Montevideo se interponen los nombres de aquellos
“están en algún sitio/concertados que siguen sin estar y que vienen de esa muerte
desconcertados/ sordos “privada” que representan las rocas que enmarcan
buscándose/ buscándonos el monumento.
bloqueados por los signos y las dudas La estructura misma del Memorial supone un
pasaje que no admite la indiferencia, solo se puede
69 Murga Falta y Resto, 1985. mirar, leer e intuir todo el horror allí representado.

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Asimismo, cabe remarcar que desde una perspec- suficiente para “sanar” a una sociedad de la impuni-

24/ Derechos humanos


tiva ética y jurídica la situación de los desaparecidos es dad. Porque para las víctimas y sus familiares “el ol-
paradigmática, ya que, al no ser un caso del pasado (en vido es signo de debilidad y es miedo al futuro”. Los
la medida en que no ha aparecido), es siempre víctima crímenes sucedieron, y mientras estén impunes afec-
de un delito actual y por tanto de un delito “perma- tan la conciencia o la inconsciencia colectiva nacional.
nente”. De allí que un Estado que garantice la impu- Como establece Pérez Aguirre “en el nivel de una
nidad, no reconoce la humanidad del desaparecido, sociedad política en conflicto (…) el perdón y la re-
condenándolo permanentemente a no-ser. De forma conciliación tienen que ser analizados también des-
radical podemos afirmar con Pérez Aguirre que: de categorías sociales y políticas”. Desde el punto de
“la condición de los desaparecidos es un caso vista de los familiares y compañeros las propuestas
extremo de “alteridad” ética: la sociedad les de “punto final” resultan imposibles si lo que se pre-
quita toda cualidad humana. ¡Se les niega su tende son atajos que oculten una parte de la historia.
condición humana! Se procura suprimirles el Solo queda en este contexto el trabajo de la memoria,
último lazo que tenían con la sociedad: se les estrategias para combatir el olvido, que son a la vez,
niega hasta el derecho de estar en un lugar formas de garantizar que lo que sucedió no vuelva a
y una fecha determinadas. Sus familiares son pasar. Porque en último término las mismas pregun-
forzados a vivir en una penumbra habitada tas siguen presentes, y la detención y el castigo de los
de dudas y fantasías. Se les mantiene en un culpables o de algunos de ellos, incluso la aparición
estado de crueldad y tortura permanente. Es de los restos, pueden ayudar a cerrar una experiencia
un caso extremo de maldad (que va más allá tal de horror, cometida a un ser humano cercano y
de lo imaginable en la situación de los niños querido por otro ser humano en muchos casos im-
desaparecidos) puesto que para los familiares pune. Pero también, porque tal experiencia se cons-
es una angustia suspendida en el tiempo, no tituye probablemente en identitaria para la misma
pueden ni saben si están vivos o muertos, y en persona, de modo que la aparición de los restos no
este último caso, no pueden ni enterrar a sus atenúa una cierta ajenidad respecto de unos huesos
muertos que no están y, por lo tanto, tampoco que no recuperan el cuerpo desaparecido y menos los
pueden elaborar el proceso de duelo”.70 incontables sufrimientos que dejó esa ausencia.71
En este contexto podemos aseverar que la recon- En cierto sentido podemos concluir que el tiem-
ciliación resulta imposible sin la verdad y la justi- po podrá reconciliar a un Uruguay que sigue divi-
cia, y la experiencia muestra que el tiempo nunca es dido, solo si se continúa avanzando en esclarecer
los hechos con toda la crudeza que implican y con
70 Luis Pérez Aguirre. “La Impunidad impide la Reconciliación Na- sus consecuencias. Si no, probablemente la sociedad
cional”, Seminario Internacional, “Impunidad y sus Efectos en los
uruguaya deberá esperar otros tiempos históricos
Procesos Democráticos”, Santiago de Chile, 14 de diciembre de 1996.
http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/investig/seminar/
seminar_02.htm 71 Ibíd.

57
Carlos Contrera
para reconciliarse, al decir de algunos implicados: todos los actores ciudadanos. ¿Cuántas generaciones
“esto solo se termina cuando estemos todos muertos”. seguirán fracasando en nuestro sistema educativo?
Pero si el pasado requiere verdad, también la ne- ¿Cuántas personas privadas de libertad toleraremos
cesita el futuro. Y esa verdad supone comprender que como país? ¿Cuánta violencia cotidiana estamos dis-
debemos redefinir el uso de los derechos humanos puestos a naturalizar?
como un lenguaje progresista sí, pero de efectiva En esta dirección parece sustancial fortalecer y
transformación de la sociedad. Poder ubicar los dere- desarrollar en toda su extensión la Institución Na-
chos dentro de un programa más amplio, que atienda cional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo
a la emancipación de las personas, desde un cosmo- creada en 2008 y cuyos miembros asumieron funcio-
politismo subalterno72 e integrador de la comunidad nes en 2012. Este espacio tiene como cometido “la de-
toda, es una de las claves de la tarea en común. Ne- fensa, promoción y protección en toda su extensión,
cesitamos ampliar la mirada para construir diálogos de los derechos humanos reconocidos por la Cons-
efectivos que construyan una agenda compartida por titución y el derecho internacional. Ha sido creada
muchos –ya que la totalidad nunca es posible– pero como instrumento complementario a otros ya exis-
sí entender que nuestras necesidades y deseos son tentes, para otorgar mayores garantías a las personas
iguales y diferentes, como iguales y diferentes somos. en el goce de sus derechos humanos y para que las
Solo si nos atrevemos a un diálogo como comu- leyes, las prácticas administrativas y políticas públi-
nidad nacional abierta al mundo, en especial a la cas, se desarrollen en consonancia con los mismos”.73
región, podremos asumir el desafío fundamental que Este espacio está llamado a gravitar en el desarrollo
nos presenta la pobreza; que engendra en primer de la articulación entre política y derechos humanos,
lugar la violencia que estamos acostumbrándonos a incluso en el nivel presupuestal.
vivir. Discutir de verdad supondrá repensar el dere- Las políticas públicas con perspectiva de derechos
cho de propiedad en su necesaria función social, así humanos son otra clave para imaginar juntos nues-
como pensar las más eficientes metodologías –sin tra sociedad, pues solo abiertos al diálogo podremos
ideologizar simplificando, sin simplificar sin ideolo- seguir construyendo un Uruguay que incluya como
gía– que nos permitan efectivizar derechos con ca- sujetos de derecho a nuestro ambiente y a las futu-
lidad, porque debemos reconocer que nuestra educa- ras generaciones del país. Una comunidad construi-
ción, salud, convivencia ciudadana y tantos derechos da desde el reconocimiento a la persona, que supone
más son de muy baja calidad. miradas nuevas para el pasado y el futuro, pero sobre
Repensar el Estado y la nación en clave de dere- todo, para el presente.
chos es tarea de los partidos políticos, pero también de

72 Boaventura De Sousa Santos, Descolonizar el saber, reinventar el


poder, Ed. Trilce y Extensión de la Universidad de la República, Mon- 73 http://www.parlamento.gub.uy/palacio3/p_institucionDDHH.
tevideo, 2010. asp

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24/ Derechos humanos
Marcha contra el racismo el 19 de diciembre de 2012. Acto de las Mujeres de Negro contra la violencia
doméstica, 19 de diciembre de 2013.

Institución y Asamblea Nacional o incremento del daño; la difusión de derechos y la


de Derechos Humanos educación en derechos humanos.
También, en coordinación con el Ministerio de Rela-
ciones Exteriores, la Institución cumple la función
La Institución Nacional de Derechos Humanos y De- de Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura,
fensoría del Pueblo es un órgano autónomo, creado de acuerdo a lo establecido por el Protocolo Faculta-
por Ley Nº. 18.446 de 24 de diciembre de 2008. Está tivo de la Convención Contra la Tortura y otros Tratos
presidida por un Consejo Directivo, integrado por o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.
cinco miembros: Soc. Mariana González Guyer (Pre-
sidenta de la Institución por el primer año), Dr. Juan La INDDHH convoca una vez por año a la Asamblea
Faroppa, Dr. Juan Raúl Ferreira, Dra. Mirtha Guianze Nacional de Derechos Humanos, una instancia pú-
y Dra. Ariela Peralta. El Consejo asumió sus funcio- blica de participación plenaria, con voz y sin voto,
nes el 22 de junio de 2012. de las organizaciones sociales, organismos guber-
namentales y otras entidades objeto del contralor
de la Institución Nacional de Derechos Humanos y
Las competencias de la INDDHH abarcan, entre otras, Defensoría del Pueblo.
la adecuación de la normativa y de las prácticas ins- También pueden ser convocadas por una mayoría su-
titucionales a las obligaciones y estándares interna- perior al 20% del total de las organizaciones sociales
cionales en materia de derechos humanos; la ase- habilitadas para participar en las sesiones extraor-
soría, opiniones y recomendaciones en relación a los dinarias.
órganos y mecanismos de contralor internacional de
las obligaciones contraídas por el Estado; el conoci- El 18 de marzo de 2013 a instancias de la Institu-
miento e investigación de presuntas violaciones a los ción Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del
derechos humanos a petición de parte o de oficio; la Pueblo, se realizó la Primera Asamblea Nacional de
adopción de medidas provisionales de carácter ur- Derechos Humanos en la sede del Parlamento.
gente con el fin de que cese la presunta violación de Participaron más de 500 personas, 169 organizacio-
los derechos humanos y/o impedir la consumación nes sociales y 63 organismos o entidades estatales

59
vinculadas al Poder Ejecutivo, al Poder Legislativo, Las sesiones temáticas en las que funcionó la
al Poder Judicial y a los gobiernos departamentales y Asamblea fueron:
locales. Asimismo, estuvieron presentes 70 observa- zz Mujeres
dores representantes de organismos internacionales,
delegaciones diplomáticas, universidades, institu- zz Desarrollo y medio ambiente
ciones, redes y organizaciones internacionales. zz Niñas, niños y adolescentes
zz Seguridad ciudadana y privación de

Carlos Contrera
libertad
zz Verdad, justicia y lucha contra la
impunidad
zz Derechos económicos sociales y
culturales
zz Libertad de expresión y comunicación
democrática
zz Toda forma de discriminación

Carlos Contrera
Momumento recordatorio del
holocausto del pueblo armenio.

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