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LAS OBLIGACIONES CONTABLES EN EL CONCURSO DE ACREEDORES

ANÁLISIS DE RESOLUCIONES.

ENRIQUE SANJUÁN Y MUÑOZ.


OVERVIEW
La visión judicial de la contabilidad, las cuentas y el
concurso.

• Por eso la pericial y los documentos técnicos.


• El juez es experto en juzgar.
PROYECCIÓN DE DICHAS
OBLIGACONES:
CUALQUIER ANÁLISIS QUE SE
HAGA DE ELLO CULMINA SIENDO
SUPUESTOS DE INTERPRETACIÓN
JURISDICCIONAL EN LAS VÍAS:
• MERCANTIL.
• PENAL.
• CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO.
• LABORAL.
EN SUPUESTOS PRECONCURSALES.

• ¿ ALGÚIÉN DUDA DE QUE HAY QUE REALIZAR


UNA ADAPTACIÓN DE ACTIVOS Y PASIVOS?
Situación particular DA 4ª:
Resolución de 8 de junio de 2011, de la Dirección General de los Registros y del Notariado

• Con relación a la primera cuestión, el acuerdo de refinanciación no es el mero


reflejo de una pluralidad de obligaciones independientes; es un negocio jurídico
que responde a un propósito unitario consistente en organizar jurídicamente esa
pluralidad con un nexo causal común: facilitar el saneamiento financiero del
deudor y evitar la declaración de concurso.
• Se establece igualmente un tejido de obligaciones accesorias y adicionales que
unifican el régimen jurídico de las obligaciones principales: normas comunes
relativas a intereses, ordinarios Y de demora, amortización anticipada, imputación
de cantidades, resolución anticipada, cesión de las obligaciones, etc
• Por tanto, la novación de las obligaciones que se integran en el acuerdo de
refinanciación, sin perder su individualidad, pues expresamente se excluye su
extinción, comporta una novación modificativa conjunta que les atribuye un nexo
causal común, en atención de su común finalidad de reestructuración financiera,
lo que unido al acuerdo paralelo de sindicación, a que después nos referiremos,
dota al conjunto de los créditos así vinculados de una fuerte singularidad en
cuanto a la configuración y naturaleza de su titularidad activa, con un relevante
componente colectivo
TRES TIPOS DE MEDIDAS

• 1.º Esperas con un plazo de cinco años o más,


pero en ningún caso superior a diez.
• 2.º Quitas.
• 3.ºConversión de deuda en acciones o
participaciones de la sociedad deudora
BOICAC Nº 102/2015 Consulta 1
• Sobre la correcta interpretación de los
términos “pasivo”, “pasivos financieros” y
“grupo” regulados en el artículo 71.bis y la
Disposición adicional cuarta de la Ley
22/2003, de 9 de julio, Concursal.
• En consecuencia, este Instituto opina que para cuantificar el “pasivo” regulado en el artículo
71.bis.1.b)1º de la Ley Concursal, el pasivo que luciría en el balance de una empresa, en la
fecha del acuerdo de refinanciación, puede constituir un primer punto de partida sobre el
que tal vez sería preciso realizar ajustes para excluir conceptos como los pasivos por
impuestos diferidos, las provisiones y los ajustes por periodificación en la medida que no
puedan calificarse como acreedores en sentido estricto, esto es, titulares de un derecho de
crédito frente a la empresa.
• Por lo que respecta a la valoración del pasivo se informa que de acuerdo con el literal de la
ley parece inferirse que la cuantificación del mencionado porcentaje debe realizarse en
función del importe a que ascienda la deuda en la fecha del acuerdo (en concepto de
principal, de intereses o de cualquier otra cantidad adeudada), para cuya determinación
habrá que estar a los términos de cada contrato, pudiendo emplearse como aproximación el
valor contable o en libros del pasivo en el caso de deudas valoradas al coste amortizado.
• Por ello, y como conclusión, en el artículo 71.bis.1.b)1º de la Ley Concursal el término pasivo
se referiría a la suma del importe adeudado a todos los acreedores, titulares de un derecho
de crédito o exigible de otro modo, y no a la cifra de pasivo del modelo de balance. Esta
interpretación se soporta en la propia literalidad del precepto, en el que se alude a los
acreedores y sus créditos, analizado en el contexto y finalidad de la citada regulación.
• Por último se informa que la necesidad de computar el porcentaje en base consolidada de
tres quintos( para los acuerdos de grupo) no trae consigo la obligación de formular cuentas
anuales consolidadas del grupo o subgrupo que haya suscrito el acuerdo, porque la Ley
Concursal no impone esta obligación.
EN SUPUESTOS AEP. EMPRESARIO
PERSONA NATURAL
• SUPUESTO AEP
• SUPUESTO EXONERACIÓN.
• a) Esperas por un plazo no superior a diez años.
• b) Quitas.
• c) Cesión de bienes o derechos a los acreedores en pago o
para pago de totalidad o parte de sus créditos.
• d) La conversión de deuda en acciones o participaciones de
la sociedad deudora. En este caso se estará a lo dispuesto
en el apartado 3.b).3.º ii) de la disposición adicional cuarta.
• e) La conversión de deuda en préstamos participativos por
un plazo no superior a diez años, en obligaciones
convertibles o préstamos subordinados, en préstamos con
intereses capitalizables o en cualquier otro instrumento
financiero de rango, vencimiento o características distintas
de la deuda original.
Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su
internacionalización

• «Disposición adicional séptima. Tratamiento


de créditos de derecho público en caso de
acuerdo extrajudicial de pagos.
– http://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-
2013-10074
TRATAMIENTO DE LA DEUDA PÚBLICA
EN EXONERACIÓN.

• SENTENCIA AP PALMA DE MALLORCA.


– Inclusión de deuda pública.
• ACUERDOS CONGRESO MERCANTIL 2016
CONSTANCIA DE DICHAS
OBLIGACIONES a efectos concursales
Artículo 6.3 LC: Solicitud de Concurso.

Artículo 33 LC ( Varios apartados de obligaciones de la AC).

Artículo 46. Cuentas anuales del deudor

Artículo 75.1.2º LC ( Informe): 2.º Estado de la contabilidad del deudor y, en su caso, juicio sobre las cuentas, estados financieros, informes y memoria a que se refiere el apartado 3 del artículo 6.
Si el deudor no hubiese presentado las cuentas anuales correspondientes al ejercicio anterior a la declaración de concurso, serán formuladas por la administración concursal, con los datos que
pueda obtener de los libros y documentos del deudor, de la información que éste le facilite y de cuanta otra obtenga en un plazo no superior a quince días.

Artículo 105.1. ( Convenio anticipado) 2.º Haber incumplido en alguno de los tres últimos ejercicios la obligación del depósito de las cuentas anuales.

Artículo 164.2.º1: ( Calificación): 1.º Cuando el deudor legalmente obligado a la llevanza de contabilidad incumpliera sustancialmente esta obligación, llevara doble contabilidad o hubiera
cometido irregularidad relevante para la comprensión de su situación patrimonial o financiera en la que llevara.

Artículo 165.1.3º LC:3.º ( Calificación) Si el deudor estuviera obligado legalmente a la llevanza de contabilidad y no hubiera formulado las cuentas anuales, no las hubiera sometido a auditoría,
debiendo hacerlo, o, una vez aprobadas, no las hubiera depositado en el Registro Mercantil o en el registro correspondiente, en alguno de los tres últimos ejercicios anteriores a la declaración de
concurso.

Artículo 232 LC ( Solicitud AEP) Si el deudor fuere persona casada, salvo que se encuentre en régimen de separación de bienes, indicará la identidad del cónyuge, con expresión del régimen
económico del matrimonio, y si estuviera legalmente obligado a la llevanza de contabilidad, acompañará asimismo las cuentas anuales correspondientes a los tres últimos ejercicios.
AGRAVAMIENTO DE LOS SUPUESTOS
REFORMA LO 1/2015 CP.
Será castigado con una pena de prisión de uno a cuatro años y multa de ocho a veinticuatro meses quien,
encontrándose en una situación de insolvencia actual o inminente, realice alguna de las siguientes conductas…) 259
CP

La misma pena se impondrá a quien, mediante alguna de las conductas a que se refiere el apartado anterior, cause su
situación de insolvencia.

Cuando los hechos se hubieran cometido por imprudencia, se impondrá una pena de prisión de seis meses a dos años o
multa de doce a veinticuatro meses.

Este delito solamente será perseguible cuando el deudor haya dejado de cumplir regularmente sus obligaciones
exigibles o haya sido declarado su concurso.

Este delito y los delitos singulares relacionados con él, cometidos por el deudor o persona que haya actuado en su
nombre, podrán perseguirse sin esperar a la conclusión del concurso y sin perjuicio de la continuación de este. El
importe de la responsabilidad civil derivada de dichos delitos deberá incorporarse, en su caso, a la masa.

En ningún caso, la calificación de la insolvencia en el proceso concursal vinculará a la jurisdicción penal.


• Los hechos a que se refiere el artículo anterior serán
castigados con una pena de prisión de dos a seis años y
multa de ocho a veinticuatro meses, cuando concurra
alguna de las siguientes circunstancias:
• 1.ª Cuando se produzca o pueda producirse perjuicio
patrimonial en una generalidad de personas o pueda
ponerlas en una grave situación económica.
• 2.ª Cuando se causare a alguno de los acreedores un
perjuicio económico superior a 600.000 euros.
• 3.ª Cuando al menos la mitad del importe de los créditos
concursales tenga como titulares a la Hacienda Pública, sea
esta estatal, autonómica, local o foral y a la Seguridad
Social.
CONDUCTAS 1.
• 1.ª Oculte, cause daños o destruya los bienes o
elementos patrimoniales que estén incluidos, o
que habrían estado incluidos, en la masa del
concurso en el momento de su apertura.
• 2.ª Realice actos de disposición mediante la
entrega o transferencia de dinero u otros activos
patrimoniales, o mediante la asunción de deudas,
que no guarden proporción con la situación
patrimonial del deudor, ni con sus ingresos, y que
carezcan de justificación económica o
empresarial.
CONDUCTAS 2
• 3.ª Realice operaciones de venta o prestaciones de
servicio por precio inferior a su coste de adquisición o
producción, y que en las circunstancias del caso
carezcan de justificación económica.
• 4.ª Simule créditos de terceros o proceda al
reconocimiento de créditos ficticios.
• 5.ª Participe en negocios especulativos, cuando ello
carezca de justificación económica y resulte, en las
circunstancias del caso y a la vista de la actividad
económica desarrollada, contrario al deber de
diligencia en la gestión de asuntos económicos.
CONDUCTAS 3
• 6.ª Incumpla el deber legal de llevar contabilidad, lleve
doble contabilidad, o cometa en su llevanza irregularidades
que sean relevantes para la comprensión de su situación
patrimonial o financiera. También será punible la
destrucción o alteración de los libros contables, cuando de
este modo se dificulte o impida de forma relevante la
comprensión de su situación patrimonial o financiera.
• 7.ª Oculte, destruya o altere la documentación que el
empresario está obligado a conservar antes del transcurso
del plazo al que se extiende este deber legal, cuando de
este modo se dificulte o imposibilite el examen o valoración
de la situación económica real del deudor.
CONDUCTAS 4
• 8.ª Formule las cuentas anuales o los libros contables
de un modo contrario a la normativa reguladora de la
contabilidad mercantil, de forma que se dificulte o
imposibilite el examen o valoración de la situación
económica real del deudor, o incumpla el deber de
formular el balance o el inventario dentro de plazo.
• 9.ª Realice cualquier otra conducta activa u omisiva
que constituya una infracción grave del deber de
diligencia en la gestión de asuntos económicos y a la
que sea imputable una disminución del patrimonio del
deudor o por medio de la cual se oculte la situación
económica real del deudor o su actividad empresarial.
CONDUCTAS 5
• Será castigado con la pena de seis meses a tres
años de prisión o multa de ocho a veinticuatro
meses, el deudor que, encontrándose en una
situación de insolvencia actual o inminente,
favorezca a alguno de los acreedores realizando
un acto de disposición patrimonial o generador
de obligaciones destinado a pagar un crédito no
exigible o a facilitarle una garantía a la que no
tenía derecho, cuando se trate de una operación
que carezca de justificación económica o
empresarial.
CONDUCTAS 6
• El que en procedimiento concursal presentare,
a sabiendas, datos falsos relativos al estado
contable, con el fin de lograr indebidamente la
declaración de aquel, será castigado con la
pena de prisión de uno a dos años y multa de
seis a 12 meses.
CONDUCTAS 7
• Será castigado con la pena de prisión de cinco a siete meses el que
estando obligado por ley tributaria a llevar contabilidad mercantil, libros o
registros fiscales:
– a) Incumpla absolutamente dicha obligación en régimen de estimación directa
de bases tributarias.
– b) Lleve contabilidades distintas que, referidas a una misma actividad y
ejercicio económico, oculten o simulen la verdadera situación de la empresa.
– c) No hubiere anotado en los libros obligatorios negocios, actos, operaciones
o, en general, transacciones económicas, o los hubiese anotado con cifras
distintas a las verdaderas.
– d) Hubiere practicado en los libros obligatorios anotaciones contables ficticias.
– La consideración como delito de los supuestos de hecho, a que se refieren los
párrafos c) y d) anteriores, requerirá que se hayan omitido las declaraciones
tributarias o que las presentadas fueren reflejo de su falsa contabilidad y que
la cuantía, en más o menos, de los cargos o abonos omitidos o falseados
exceda, sin compensación aritmética entre ellos, de 240.000 euros por cada
ejercicio económico.
CON CARÁCTER PREVIO AL CONCURSO
• A EFECTOS DE RESPONSABILIDAD.
– Sentencia T.S. 590/2013 (Sala 1) de 15 de octubre
El estado de insolvencia no constituye, por sí, una causa legal que haga surgir
el deber de los administradores de promover la disolución de la sociedad. No
cabe confundir, como parece que hacen la demanda y la sentencia recurrida,
entre estado de insolvencia y la situación de pérdidas que reducen el
patrimonio neto de la sociedad por debajo de la mitad del capital social, que,
como veremos a continuación, sí constituye causa de disolución.

Aunque es frecuente que ambas situaciones se solapen, puede ocurrir que


exista causa de disolución por pérdidas patrimoniales que reduzcan el
patrimonio de la sociedad a menos de la mitad del capital social, y no por ello
la sociedad esté incursa en causa de concurso. En estos supuestos opera con
normalidad el deber de promover la disolución conforme a lo prescrito, antes
en los arts. 262 TRLSA y 105 LSRL, y ahora en el art. 365 LSC. Y a la inversa, es
posible que el estado de insolvencia acaezca sin que exista causa legal de
disolución, lo que impone la obligación de instar el concurso, cuya apertura
no supone por sí sola la disolución de la sociedad, sin perjuicio de que pueda
ser declarada durante su tramitación por la junta de socios y siempre por
efecto legal derivado de la apertura de la fase de liquidación (art. 145.3 LC).
STS, a 09 de julio de 2012 - ECLI:ES:TS:2012:6309 A
ROJ: STS 6309/2012 Nº Sentencia: 434/2012 Nº Recurso:
1818/2009 Sección: 1
Ponente: IGNACIO SANCHO GARGALLO

la Sentencia de 29 de noviembre de 1983 , y en otras anteriores


citadas por esta sentencia, según la cual: i) la suspensión cautelar
de efectos de las cuentas anuales anteriores podría poner en tela
de juicio la validez de las posteriores; y ii) la nulidad de unas
cuentas anteriores no supone la nulidad de las posteriores, pues
en los balances de los años sucesivos pueden corregirse los vicios
detectados en las cuentas anteriores.
• En primer lugar conviene advertir que sobre los efectos de la nulidad del acuerdo aprobatorio de las
cuentas de un ejercicio respecto de las cuentas de ejercicios posteriores, nos hemos pronunciado
recientemente, en la Sentencia 670/2011, de 20 de octubre , con ocasión de la impugnación del acuerdo de
aprobación de las cuentas anuales del ejercicio 2004 de la sociedad HOTELERA PADRÓN, S.A.

• En aquella ocasión, resumíamos la doctrina jurisprudencial que se denuncia infringida, haciendo
referencia a que la Sentencia de 29 de noviembre de 1983 «declara que la contienda judicial no puede
evitar la formulación de las cuentas de ejercicios posteriores, si bien la pendencia del litigio "habrá de
reflejarse en las estimaciones realizadas y en la memoria explicativa", y ratifica la doctrina de la sentencia
de 14 de marzo de 1980 , (...) en el sentido de que "la declaración de nulidad de un balance en el extremo
relativo a su aprobación y cuenta de pérdidas y ganancias no supone que los balances practicados en los
años sucesivos adolezcan de dicha nulidad, puesto que en los mismos pudieron ser corregidos los vicios
que le hicieron incurrir en la declarada"; y la sentencia de 8 de julio de 1987 , (...) ratifica lo declarado por la
de 1983 en cuanto a la pertinencia de reflejar la contienda judicial pendiente en las estimaciones realizadas
y en la memoria explicativa. No obstante, la sentencia de 1983 precisa que únicamente en el caso de que el
acuerdo aprobatorio anterior estuviera en suspenso "podría ponerse en tela de julio la nulidad del
último"».
ASPECTOS FORMALES EN CUENTAS
ANUALES Y AUDITORÍA

ARTÍCULO 46 LC.
Vs.
75.1.2º.2 LC.
ARTÍCULO 46 LC
• 1. En caso de intervención, subsistirá la obligación legal de los administradores de
formular y de someter a auditoría las cuentas anuales, bajo la supervisión de los
administradores concursales.
• La administración concursal podrá autorizar a los administradores del deudor
concursado que el cumplimiento de la obligación legal de formular las cuentas
anuales correspondientes al ejercicio anterior a la declaración judicial de concurso
se retrase al mes siguiente a la presentación del inventario y de la lista de
acreedores. La aprobación de las cuentas deberá realizarse en los tres meses
siguientes al vencimiento de dicha prórroga. De ello se dará cuenta al juez del
concurso y, si la persona jurídica estuviera obligada a depositar las cuentas
anuales, al Registro Mercantil en que figurase inscrita. Efectuada esta
comunicación, el retraso del depósito de las cuentas no producirá el cierre de la
hoja registral, si se cumplen los plazos para el depósito desde el vencimiento del
citado plazo prorrogado de aprobación de las cuentas. En cada uno de los
documentos que integran las cuentas anuales se hará mención de la causa legítima
del retraso.
• 2. A petición fundada de la administración concursal, el juez del concurso podrá
acordar la revocación del nombramiento del auditor de cuentas de la persona
jurídica deudora y el nombramiento de otro para la verificación de las cuentas
anuales.
• 3. En caso de suspensión, subsistirá la obligación legal de formular y de someter a
auditoría las cuentas anuales, correspondiendo tales facultades a los
administradores concursales.
ARTÍCULO 75.1.2º 2 LC
• Si el deudor no hubiese presentado las cuentas
anuales correspondientes al ejercicio anterior a la
declaración de concurso, serán formuladas por la
administración concursal, con los datos que
pueda obtener de los libros y documentos del
deudor, de la información que éste le facilite y de
cuanta otra obtenga en un plazo no superior a
quince días.
BOICAC Nº 107/2016 CONSULTA 2
• Sobre el régimen sancionador aplicable por el
Instituto de Contabilidad y Auditoría de
Cuentas a una sociedad de capital por el
incumplimiento de la obligación de depositar
sus cuentas anuales en el Registro Mercantil y
si puede ser denunciado tal incumplimiento.
– Posibilidad de sancionar previo expediente sujeto
a la LPA.
– La denuncia no constituye supuesto de interesado
a quien la hace ,en el expediente.
Sentencia de la Audiencia Nacional (Sala de lo
Contencioso) de fecha 9 de junio de 2006
• Vincula la imposibilidad de depositar cuentas anuales con
la presentación del mencionado certificado. En este
sentido, la sentencia señala que “la obligación de depositar
las cuentas supone que cuando tal aprobación no se ha
producido es necesario la acreditación de tal falta de
aprobación así como su causa”, es decir, “que el depósito
de las cuentas engloba no solo el depósito de las
aprobadas, sino también la comunicación al registro en
aquellos casos que no se hubiesen aprobado comunicando
la razón, y que tal obligación, de depósito o comunicación
de la falta de la aprobación es una sola obligación”.»


Incumplimiento Societario vs. responsabilidad
administradores ( u obligados)
Artículo 283 LSC.
“1. El incumplimiento por el órgano de administración de la obligación de depositar, dentro del
plazo establecido, los documentos a que se refiere este capítulo, también dará lugar a la
imposición a la sociedad de una multa por importe de 1.200 a 60.000 euros por el Instituto de
Contabilidad y Auditoría de Cuentas, previa instrucción de expediente conforme al procedimiento
establecido reglamentariamente, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley de Régimen Jurídico de las
Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.
Cuando la sociedad o, en su caso, el grupo de sociedades tenga un volumen de facturación anual
superior a 6.000.000 euros el límite de la multa para cada año de retraso se elevará a 300.000
euros.
2. La sanción a imponer se determinará atendiendo a la dimensión de la sociedad, en función del
importe total de las partidas del activo y de su cifra de ventas, referidos ambos datos al último
ejercicio declarado a la Administración tributaria. Estos datos deberán ser facilitados al instructor
por la sociedad; su incumplimiento se considerará a los efectos de la determinación de la sanción.
En el supuesto de no disponer de dichos datos, la cuantía de la sanción se fijará de acuerdo con su
cifra de capital social, que a tal efecto se solicitará del Registro Mercantil correspondiente.
3. En el supuesto de que los documentos a que se refiere este capítulo hubiesen sido depositados
con anterioridad a la iniciación del procedimiento sancionador, la sanción se impondrá en su
grado mínimo y reducida en un cincuenta por ciento.
4. Las infracciones a que se refiere este artículo prescribirán a los tres años.”.

Resolución de 6 de julio de 2015, de la Dirección General de los Registros y del


Notariado,
POSIBILIDAD DE EXCENCIÓN POR
PARTE DEL JUZGADO EN CONCURSO
• Por consiguiente, habida cuenta la fase tan avanzada en la que se encuentra el procedimiento, la
falta de tesorería y la imposibilidad por parte de la concursada de generar nuevas fuentes de
ingreso, quedando solamente pendiente de liquidar los últimos bienes para concluir el concurso, la
formulación de las cuentas anuales y el depósito de las mismas ante el Registro Mercantil no aporta
nada al procedimiento concursal, máxime cuando el control y gestión del concurso lo lleva a cabo el
Administrador concursal gozando de los elementos de juicio necesarios para depurar cualquier tipo
de operación sospechosa o responsabilidad de terceros, pudiendo los acreedores personarse en la
pieza sexta de calificación. Además, el informe del artículo 75 de la LC y los sucesivos trimestrales
de liquidación que tiene que presentar cumplen sobradamente la función informativa de las
cuentas. Tampoco se considera que la no formulación de las cuentas perjudique a terceros pues en
la propia hoja registral consta inscrita la declaración de concurso de la mercantil y la apertura de la
fase de liquidación, pudiendo personarse en el procedimiento en cualquier momento. De hecho,
salvo que haya oposición, el próximo asiento registral que se inscribirá será el de conclusión del
concurso y extinción de su personalidad jurídica.
• EXONERAR a la administración concursal de la concursada EUROPARETS SL del deber de formular y
depositar las cuentas anuales de la misma ante el Registro Mercantil.

JUZGADO MERCANTIL Nº 9 DE BARCELONA


Gran Via de les Corts Catalanes nº 111
08014 Barcelona. Asunto: Concurso Voluntario
nº 54/2013 C1 (sección 2ª)
EN RELACIÓN A LA AUDITORÍA
• Revocación: Juzgado Mercantil nº 1 de Cantabria.Concurso 74/2014
(08).AUTO, Santander a 1 de diciembre de 2014.
• De este modo, siendo el propio AC quien solicita la revocación del
cargo para la auditoría de los ejercicios de 2014 y 2015, considero
evidente la “justa causa” (art 264.3 LSC) para la revocación por la
junta general o por los administradores de la sociedad (art 266 LSC)
ya que únicamente devengará más gastos sin ser obligatoria la
auditoría, habiendo desaparecido la circunstancia (ampliación de
capital) en atención a la cual en su día se acordó el nombramiento,
y entrado en liquidación la entidad, sin obstáculo de un eventual
perjuicio a los derechos de los socios a solicitar en los tres meses
siguientes al cierre del ejercicio nombramiento de auditor, ya que
2013 está auditado y 2014 no ha concluido
Argumentos Barcelona Mercantiles
Desde la declaración de concurso y hasta el día de hoy se han devengado un importante número de
créditos contra la masa, careciendo la concursada de liquidez para atender a su pago y por ende, el
informe de auditoría antes reseñado.
Lo cierto es que en el momento en el que nos encontramos la elaboración de un informe de auditoría
nada aporta al procedimiento concursal, máxime cuando la fiscalización de las cuentas anuales las lleva
a cabo el AC quien tiene a su alcance la información necesaria para depurar cualquier tipo de
responsabilidad de terceros o atacar cualquier operación sospechosa, pudiendo los acreedores la
posibilidad de personarse en la pieza sexta de calificación. Además, el informe del artículo 75 de la LC y
los sucesivos trimestrales de liquidación que tiene que presentar cumplen sobradamente la función
informativa de las cuentas. Tampoco se considera que la no formulación de las cuentas perjudique a
terceros pues en la propia hoja registral consta inscrita la declaración de concurso de la mercantil xxxx y
la apertura de la fase de liquidación.
Por otro lado, el gasto contra la masa que supone el citado informe perjudica gravemente el interés del
concurso, entendido como la máxima satisfacción de los acreedores, puesto que va a suponer la
imposibilidad de atender créditos contra la masa, especialmente laborales, devengados con
anterioridad por lo que se alteraría el criterio del vencimiento.
Por todo ello, exonero a la administración concursal del deber de auditar las cuentas anuales del
ejercicio xxxx y siguientes en interés del concurso, procediendo a su depósito en el Registro Mercantil
sin necesidad de acompañar el referido informe de auditoria.
SITUACIÓN CONCURRENTE CON EL
INFORME.

¿Es necesario reformular las cuentas?


Situación Nueva de los Activos y Pasivos: situación
real.
Situación Nueva de Valoración conforme al
artículo 94 LC.
• 75.1.2º LC: Estado de la contabilidad del deudor y, en
su caso, juicio sobre las cuentas, estados financieros,
informes y memoria a que se refiere el apartado 3 del
artículo 6.
• 71.2.5º LC: Valoración de la empresa en su conjunto y
de las unidades productivas que la integran bajo la
hipótesis de continuidad de las operaciones y
liquidación…….
– Resolución de 18 de octubre de 2013, del Instituto de
Contabilidad y Auditoría de Cuentas, sobre el marco de
información financiera cuando no resulta adecuada la
aplicación del principio de empresa en funcionamiento
SITUACIÓN REAL
• En el ámbito contable es preciso proceder a
la reclasificaciones de cuentas de acuerdo
con su vencimiento, para los pasivos, y de
acuerdo con su grado de conversión en
líquido en el caso de los activos.
• RAZONAMIENTOS:……………… ( profesor
Miranda, Pablo Olavide. Sevilla)
1. En situación de concurso determinados créditos, y
conforme a las estipulaciones contractuales, pueden
hacerse líquidos y exigibles, así como como el nacimiento
de nuevas obligaciones que se derivan de aquellas y el
devengo de gastos (ejemplo créditos hipotecarios). Este
hecho daría lugar una reclasificación de pasivos no
corrientes a corrientes.
2. Aquellos activos no corrientes que se considerasen
disponibles para la venta, por no considerarse necesarios
para la actividad, tendrían que reclasificarse a activos
corrientes.
3. Es factible que en la contabilidad se creasen cuantas
específicas para reconocer la clasificación de los créditos
conforme a la LC, concursales, en sus diferentes tipos, y
contra la masa.
4. En la fase de convenio, las reclasificaciones han de ser
recogidas en la contabilidad conforme a las estipulaciones
del acuerdo de convenio. Cabe resaltar el hecho de la
quita, los aplazamientos de deuda acordados y los activos
que serán enajenados por cualquier medio.
5. En fase de liquidación, por su esencia, todos los activos
y pasivos tendrán que ser reconocidos como corrientes.
6. Igualmente, en caso de no estar acordada la
liquidación, pero la AC no considerase viable la
continuidad de la empresa, estaríamos en la misma
situación, y por tanto, procedería la reclasificación de
todos los activos y pasivos a corrientes. Esta cuestión está
estrechamente relacionada con el apartado siguiente.
Afirmación legal= IMAGEN FIEL.
• Si el deudor no hubiese presentado las
cuentas anuales correspondientes al ejercicio
anterior a la declaración de concurso, serán
formuladas por la administración concursal,
con los datos que pueda obtener de los libros
y documentos del deudor, de la información
que éste le facilite y de cuanta otra obtenga
en un plazo no superior a quince días.
ARTÍCULO 94 LC:
• 5. A los efectos del artículo 90.3, se expresará el valor de las
garantías constituidas en aseguramiento de los créditos que gocen
de privilegio especial. Para su determinación se deducirán, de los
nueve décimos del valor razonable del bien o derecho sobre el que
esté constituida la garantía, las deudas pendientes que gocen de
garantía preferente sobre el mismo bien, sin que en ningún caso el
valor de la garantía pueda ser inferior a cero, ni superior al valor del
crédito privilegiado ni al valor de la responsabilidad máxima
hipotecaria o pignoraticia que se hubiese pactado.
– 90.3 LC: El privilegio especial solo alcanzará la parte del crédito que no
exceda del valor de la respectiva garantía que conste en la lista de
acreedores, calculada de acuerdo con lo dispuesto en el apartado 5
del artículo 94. El importe del crédito que exceda del reconocido como
privilegiado especial será calificado según su naturaleza.
• A estos exclusivos efectos se entiende por valor razonable el
definido a continuación.
PREGUNTA FINAL:

• ¿ SOPORTARÍAN UN INFORME PERICIAL LAS


CUENTAS NO REFORMULADAS?
VALORACIÓN DEL PERITAJE.
• El tribunal valorará los dictámenes periciales
según las reglas de la sana crítica

la combinación de
“la lógica interpretativa y
criterios lógicos y de
el común sentir de las
experiencia que debe
gentes“
aplicar el juzgador. MONTERO AROCA”.
FONT SERRA.

Enrique Sanjuán y Muñoz 47


SUPUESTOS DE VALORACIÓN en base a la experiencia.

• — Verificación de presupuestos de obras, del volumen


de obra ejecutada y de las cuotas abonadas por los
copropietarios.
• — Verificación de registros contables para dictaminar
sobre diversos hechos concretos.
• — Dictamen sobre determinados hechos concretos,
previa verificación contable.
• — Verificación de contabilidad de gestión y
determinación del volumen de ventas y márgenes de
beneficio obtenido.
• — Verificación de la contabilidad y opinión sobre
administración judicial ejercida.

Enrique Sanjuán y Muñoz 48


— Dictamen sobre exactitud de determinadas operaciones y respecto
a las cuantías de ciertas certificaciones.
— Dictamen relativo a la realidad de los conceptos figurados en
extracto de cuenta corriente, así como de sus justificantes y del
saldo que arroja.
— Dictamen relativo a la determinación de los saldos deudores o
acreedores de las partes, previo examen de los documentos
obrantes en la litis y de las alegaciones de tipo contable efectuadas
por ambas p a r t e s .
— Dictamen sobre la legalidad de la diligencia de los libros de
contabilidad.
— Dictamen relativo a las operaciones realizadas entre una entidad de
crédito y un particular, determinación de saldo y garantías
prestadas.

Enrique Sanjuán y Muñoz 49


• — Dictamen sobre si es correcto y líquido el saldo de
una cuenta de préstamo, así como si se han
contabilizado adecuadamente las amortizaciones
atendidas.
• — Dictamen sobre determinación del tipo de interés
anual y tipo de interés efectivo en préstamo con
amortización constante.
• — Dictamen sobre balance de fusión y valoración de la
empresa para determinar el valor real de las acciones,
así como su activo y pasivo.
• — Dictamen relativo a determinar si letras de cambio
reclamadas son o no renovación.

Enrique Sanjuán y Muñoz 50


LA SITUACIÓN EN CONVENIO

• RECORRIDO HISTÓRICO.
• En cuentas.
• En IS.
TENGAMOS EN CUENTA QUE….
• Sentencia T.S. 590/2013 (Sala 1) de 15 de octubre
– A efectos de responsabilidad.
– Tampoco durante la fase de cumplimiento del convenio puede surgir el
deber de promover la disolución y la consiguiente responsabilidad por
no hacerlo dentro del plazo legal. Lo impide, no la vigencia de los
efectos de la declaración de concurso, que cesan conforme al art.
133.2 LC, sino la propia normativa societaria (en nuestro caso, los arts.
260.1.4.º y 262.2 y 5 TRLSA), que establece el concurso de acreedores
como un límite al deber de los administradores de promover la
disolución, bajo la lógica de que la situación de concurso de la
compañía se rige por una normativa propia, que expresamente prevé
la disolución de la compañía, como consecuencia necesaria a la
apertura de la fase de liquidación (art. 145.3 LC), y que, en caso de
aprobación de convenio, impone al deudor el deber de instar la
liquidación cuando, durante la vigencia del convenio, conozca la
imposibilidad de cumplir los pagos comprometidos y las obligaciones
contraídas con posterioridad a su aprobación (art. 142.2 LC).
BOICAC
• Boicac nº 76/2008 Consulta 1
• BOICAC Nº 90/2012 Consulta 1
• BOICAC Nº 96/2013 Consulta 12
• BOICAC Nº 102/2015 Consulta 6
• Anteproyecto de norma sobre información de
empresas en suspensión de pagos (BOICAC nº 13, 31
de mayo de 1993).(Consulta 2 del BOICAC nº 31/1997 y
consulta 1 del BOICAC nº 76/2008), que, junto el
Tribunal Supremo en su sentencia de 10 de noviembre
de 2011 (Recurso de Casación nº 3549/2007)
• Resolución de 19 de julio de 2013 Empresa en
funcionamiento.
Tratamiento
contable de la
<="" a="" aprobación de un
style="margin: convenio de
0px; padding: 0px; acreedores en un
font-family: procedimiento 102/JUNIO 2015 6 Contabilidad
Verdana; font-size: concursal, en el
11px; border: 0px; que no se fijan
right: 0px;"> intereses para la
deuda remanente.
NRV 9ª.
<="" a="" Ejecución de una
style="margin: garantía
0px; padding: 0px; hipotecaria
96/DICIEMBRE
font-family: constituida a favor 12 Contabilidad
2013
Verdana; font-size: de una sociedad
11px; border: 0px; dependiente. NRV
right: 0px;"> 21ª.
Instrumentos
financieros. NRV
<="" a="" 9ª. Contabilización
style="margin: de un crédito,
0px; padding: 0px; desde la
font-family: perspectiva del 90/JULIO 2012 1 Contabilidad
Verdana; font-size: acreedor, cuando el
11px; border: 0px; deudor ha sido
right: 0px;"> declarado en
concurso de
acreedores.
CONVENIO
consulta 1 del BOICAC 76 y en la consulta 6 del BOICAC 102
Según el ICAC debemos tratar nuestra actuación en dos pasos.
Analizaremos si se ha producido una modificación sustancial de las condiciones de la deuda. Se
entiende que la modificación es sustancial cuando hay una variación de un 10% o más en la valoración
de la deuda actualizada con respecto a la anterior.
Para ello debemos actualizar tanto el valor de la deuda antigua como la nueva al tipo de interés efectivo
de la primera.
Procedemos a su contabilidad. Aquí va a depender del punto anterior
a) Contabilidad si se ha producido una modificación sustancial de las condiciones de la
deuda
Registrará la baja de la deuda original y reconocerá el nuevo pasivo por su valor razonable lo que implica
que el gasto por intereses de la nueva deuda se contabilice a partir de ese momento aplicando el tipo
de interés de mercado en esa fecha. La diferencia existente se considerará ingreso financiero
b) Contabilidad si no se ha producido una modificación sustancial de las condiciones de la
deuda.
No se dará de baja el pasivo financiero original, registrando, en su caso, el importe de las comisiones
pagadas como un ajuste en su valor contable. Se calculará un nuevo tipo de interés efectivo, que será el
que iguale el valor en libros del pasivo financiero en la fecha de modificación con los flujos de efectivo a
pagar según las nuevas condiciones.
El momento en que se contabiliza la operación será en el ejercicio en que se apruebe judicialmente,
siempre que se prevea de forma racional que la empresa va a cumplir con su nueva obligación y que va
a seguir aplicando el principio de empresa en funcionamiento.
La información de la situación del concurso de acreedores deberá anotarse en la memoria. En ella se
especificará la fecha de la sentencia, situación de las deudas del convenio aprobado en cuanto a quitas y
aplazamientos…
Resolución de 18 de octubre de 2013, del Instituto de Contabilidad y
Auditoría de Cuentas, sobre el marco de información financiera cuando no
resulta adecuada la aplicación del principio de empresa en funcionamiento

1. Es una norma complementaria del PGC y por tanto de obligado


cumplimiento para cualquier entidad que deba aplicar el PGC y demás
regulación contable.
2. Viene a resolver como actuar cuando ya no es posible la aplicación de uno
de los principios fundamentales de la contabilidad, como es el de empresa en
funcionamiento, puesto que la aplicación de las normas contables tiene
sentido mientras que la viabilidad de la continuidad de la actividad de la
empresa se mantiene.
3. Es especialmente relevante para el caso de concursos que concluyen con
un proceso de liquidación.
4. Además, es aplicable en los casos en que aun no habiéndose acordado la
apertura de la liquidación, la AC u órganos de administración, considerasen la
no viabilidad y continuidad de la actividad de la entidad, y aunque se las
circunstancias se produzcan con posterioridad al cierre del ejercicio.
5. Por tanto, salvo para la situación descrita en el párrafo anterior, las
empresas en concurso continuarán considerándose en funcionamiento y por
tanto la aplicación de las normas contables en situación de normalidad.
• Roj: STS 1621/2016 - ECLI:ES:TS:2016:1621 Id
Cendoj: 28079110012016100225 Órgano:
Tribunal Supremo. Sala de lo Civil Sede:
Madrid Sección: 1 Nº de Recurso: 905/2014
Nº de Resolución: 229/2016 Procedimiento:
CIVIL Ponente: PEDRO JOSE VELA TORRES Tipo
de Resolución: Sentencia
Roj: STS 1621/2016 - ECLI:ES:TS:2016:1621 Id Cendoj: 28079110012016100225
Órgano: Tribunal Supremo. Sala de lo Civil Sede: Madrid Sección: 1 Nº de Recurso:
905/2014 Nº de Resolución: 229/2016 Procedimiento: CIVIL Ponente: PEDRO JOSE
VELA TORRES Tipo de Resolución: Sentencia

• En consecuencia, todos los acreedores ordinarios y subordinados verán novados sus créditos
respecto a su cuantía y tiempo de pago; quedando extinguidos y aplazados en la parte
correspondiente, conforme al art. 136 LC . Y ello, con la única posibilidad de rescisión de dicho
efecto para el caso de que se declare el incumplimiento del convenio. La quita concursal no
produce la extinción de la obligación, y no puede considerarse la remisión que se acuerde en un
convenio como una condonación, ni como una novación extintiva. Es una novación modificativa,
basada en la renuncia de los acreedores a exigir el pago al deudor (pacto de non petendo ). Como
consecuencia de ello, si el convenio se incumple y se abre la fase de liquidación, desaparecen estos
efectos sobre los créditos ( art. 140.4 LC ). Si el convenio se cumple parcialmente, en la liquidación
se tendrán por legítimos los pagos parciales efectuados, salvo que se probara la existencia de
fraude, contravención del convenio o alteración de la igualdad de trato a los acreedores ( art. 162.1
LC ). Mientras que si el convenio se cumple íntegramente, y así se declara conforme al art. 139 LC ,
los créditos quedarán definitivamente extinguidos. 2.- Aun cuando desde la eficacia del convenio
cesan los efectos derivados de la declaración de concurso, éste no ha concluido como
procedimiento, sino que subsiste en un estado que la doctrina denomina concurso yacente ;
entendido como la situación en que se encuentra provisionalmente el procedimiento entre la fecha
de la aprobación judicial del convenio y el auto firme que lo declara cumplido o caducadas las
acciones de incumplimiento (provisionalidad que puede extenderse en el tiempo en conexión con
los plazos de espera acordados).
Cuentas en liquidación
• Sujeta a la Resolución de Octubre de 2013.
– 1. Cuando la empresa siga el marco de
información financiera aprobado por la presente
Resolución, aplicará las normas de elaboración de
las cuentas anuales del marco general de
información financiera, considerando las
siguientes precisiones y reglas especiales.
• No sujeta a la misma: sigue el mismo régimen.
• 2. Formulación:
• a. Las cuentas anuales se elaborarán con una periodicidad de doce meses, salvo
que la liquidación no se prolongase por un plazo superior al previsto para su
aprobación. En tal caso, o cuando acordada la disolución en un ejercicio o la
apertura de la fase de liquidación en un procedimiento concursal las operaciones
de liquidación concluyan antes del cierre de ese mismo ejercicio, no se formularán
cuentas anuales sin perjuicio de las restantes obligaciones de información que
pudieran venir impuestas por la legislación mercantil.
• La empresa en liquidación, a menos que exista previsión estatutaria o acuerdo
social en contrario, conservará la periodificación contable ordinaria. Es decir,
cerrará sus cuentas anuales en la misma fecha de cierre, prevista en la Ley o en los
estatutos, que la existente antes de que se produjera el hecho o acuerdo de
disolución. Por lo tanto, la existencia de una causa de disolución, legal o voluntaria,
no determina un cierre anticipado ni obliga a formular cuentas anuales a esa
misma fecha. El llamado «balance inicial» regulado en el artículo 383 de la Ley de
Sociedades de Capital es un documento extracontable, como el propio «balance
final de liquidación».
• b. Las cuentas anuales deberán ser formuladas por el empresario, los
administradores o las personas sobre las que recaiga dicha obligación de acuerdo
con la legislación mercantil. Del mismo modo, las cuentas anuales deberán ser en
su caso auditadas, aprobadas por la Junta General y depositadas en el Registro
Mercantil de acuerdo con las normas generales. En cuanto a la supervisión o
intervención de cuentas por los administradores concursales o por los
interventores también se estará a lo previsto en la legislación mercantil.
• 3. Normas comunes. La aplicación del marco de información financiera aprobado
por esta Resolución no origina la obligación de adaptar la información comparativa
del ejercicio anterior.
• 4. Balance. La clasificación entre partidas corrientes y no corrientes se realizará de
acuerdo con los criterios del marco general de información financiera, salvo los
previstos en materia de activos no corrientes y grupos enajenables de elementos
mantenidos para la venta. Por lo tanto, los elementos del inmovilizado intangible,
inmovilizado material e inversiones inmobiliarias no se reclasificarán al activo
corriente.
• 5. Cuenta de pérdidas y ganancias. No serán de aplicación los criterios sobre
«operaciones interrumpidas».
• 6. Estado de cambios en el patrimonio neto. La elaboración del estado de cambios
en el patrimonio neto se realizará de acuerdo con los criterios del marco general
de información financiera.
• 7. Estado de flujos de efectivo. Los flujos de efectivo que se produzcan durante la
liquidación de la empresa se mostrarán de acuerdo con los criterios del marco
general de información financiera. En consecuencia, la liquidación de los activos
relacionados con las actividades que constituían la principal fuente de ingresos de
la empresa, lucirán como flujos de las operaciones de explotación, y las
operaciones de liquidación de los activos no corrientes mantenidos para la venta
como flujos procedentes de las operaciones de inversión.
• 8. Memoria:
• a. El modelo de memoria se ajustará al contenido previsto en el marco general de información
financiera. No obstante, en aquellos casos en que la información que se solicita no sea significativa,
a la vista del escenario de «liquidación» en que se encuentra la empresa, no se cumplimentarán los
apartados correspondientes.
• b. En la nota relativa a los «Aspectos críticos de la valoración y estimación de la incertidumbre», se
informará de los eventos o condiciones que a juicio de la dirección originan que no pueda aplicarse
el principio de empresa en funcionamiento, junto con una referencia expresa a que las cuentas
anuales se han formulado aplicando el marco de información financiera aprobado por la presente
Resolución.
• c. En la nota relativa a la «Comparación de la información», se indicará que la información del
ejercicio no es comparable con la del ejercicio precedente por haberse cambiado de marco de
información financiera.
• d. El epígrafe de la memoria relativo a la aplicación de resultados se ajustará a las reglas aplicables a
la liquidación y división del patrimonio social con respeto a la prohibición legal de realizar
distribuciones a los socios sin la previa satisfacción a los acreedores del importe de sus créditos.
• e. Por último se incluirá una nota sobre la marcha de la liquidación en la que se informe de la mejor
estimación del valor de liquidación de los activos, cuando dicha información sea significativa para
que las cuentas anuales puedan mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y
de los resultados de la empresa, y pueda obtenerse con un adecuado grado de fiabilidad sin incurrir
en costes excesivos.
• 9. Cifra anual de negocios. El importe neto de la cifra anual de negocios se seguirá determinando
con los criterios generales, sin que por lo tanto formen parte de este concepto los resultados
originados por las operaciones de liquidación del activo no corriente.
• 10. Partes vinculadas. En su caso, las informaciones que se solicitan en relación con los
administradores de la empresa deberán entenderse referidas a las personas sobre las que recaiga la
obligación de formular cuentas anuales de acuerdo con la legislación mercantil.
REAPERTURA
1. La LC en su artículo 179 regula las situaciones en que se precisa la
reapertura de un concurso. Concretamente para el caso de personas jurídicas
la reapertura debe venir precedida de la conclusión del anterior por
liquidación o por insuficiencia de masa y se limitará a la fase de liquidación de
los bienes y derechos aparecidos con posterioridad.
2. No existe un periodo de caducidad o prescripción para la reapertura, salvo
en el caso de solicitud de que ejerciten acciones de reintegración, en cuyo
caso será de un año desde la fecha de resolución de conclusión del concurso.
3. Lógicamente, tras la conclusión del concurso inicial, la entidad estará
extinta y por tanto se requerirá la reapertura de la hoja registral en los
diferentes Registros, particularmente del RRMM.
4. En cualquier caso y con independencia de las cuestiones jurídicoformales,
debemos plantearnos si se mantienen las obligaciones contables.
• Sexta. Nueva aplicación del principio de empresa en funcionamiento.
• 1. Cuando una sociedad haya formulado sus cuentas anuales siguiendo la presente
Resolución y, excepcionalmente, en un ejercicio posterior las circunstancias que
motivaron la aplicación de este marco hubieran desaparecido, con efectos desde el
inicio del ejercicio se aplicará retroactivamente el correspondiente marco general
de información financiera.
• Cuando sea impracticable determinar la valoración para algún activo o pasivo, se
tomará como coste atribuido el valor en libros que tuvieran al inicio del ejercicio
en que resulte de aplicación nuevamente el principio de empresa en
funcionamiento.
• 2. Las variaciones de valor que se produzcan con motivo del cese en la aplicación
de las normas de registro y valoración de la empresa en liquidación se registrarán
en la cuenta de pérdidas y ganancias del ejercicio, en los epígrafes que por su
naturaleza correspondan, excepto cuando afecten a partidas que por aplicación
del marco general de información financiera deban ser cargadas o abonadas
directamente en el patrimonio neto, en cuyo caso se imputarán directamente a
éste.
• 3. No serán objeto de adaptación las cifras comparativas en las cuentas anuales del
primer ejercicio en que resulte nuevamente de aplicación el principio de empresa
en funcionamiento.
DGRN
Resolución de 6 de julio de 2016, de la Dirección
General de los Registros y del Notariado
• Es claro que aunque una sociedad sea declarada en concurso de acreedores, subsiste la obligación de auditar sus cuentas.
El artículo 46.2 de la Ley 22/2003, de 9 de julio, Concursal, tras la redacción dada por la Ley 38/2011, dispone que «a
petición fundada de la administración concursal, el juez del concurso podrá acordar la revocación del nombramiento del
auditor de cuentas de la persona jurídica deudora y el nombramiento de otro para la verificación de las cuentas anuales»;
es decir, que a pesar de la declaración de concurso sigue manteniéndose la obligación de someter las cuentas a auditoría,
sin que ni siquiera exista, como ocurría en la redacción original de artículo 46, la exención en el primer ejercicio en estado
de concurso.
• La cuestión se centra pues en determinar si, una vez abierta la fase de liquidación, sigue subsistiendo dicha obligación de
auditoría. Invoca el recurrente en apoyo de la solución negativa un auto del Juzgado de lo Mercantil número 2 de
Pontevedra -de 10 de noviembre de 2008- así como la respuesta a una consulta formulada por el Instituto de Contabilidad y
Auditoría de Cuentas de 12 de marzo de 1993. Pero como resulta del propio auto transcrito se adoptó la solución sin que
hubiera «existido pronunciamiento expreso sobre tal cuestión por la doctrina de la DGRN». En la actualidad este tema ya ha
sido abordado por este Centro Directivo en Resolución de 26 de mayo de 2009, donde se resolvió que «no es cierto
tampoco que una vez abierta la fase de liquidación decae la obligatoriedad de auditar las cuentas. Este Centro Directivo ha
señalado con reiteración que subsiste la obligación de auditoría de las cuentas en fase de liquidación, y ello, dada la
naturaleza esencialmente reversible de la sociedad en liquidación, cuya personalidad jurídica subsiste en tanto no se haya
procedido al reparto del activo sobrante entre los socios y, una vez extinguida, a la cancelación de sus asientos en el
Registro Mercantil».
• Debe señalarse que la Consulta del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas alegada por el recurrente ha quedado
sin efecto por la Resolución de 18 de octubre de 2013, del mismo Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, sobre el
marco de información financiera cuando no resulta adecuada la aplicación del principio de empresa en funcionamiento, de
conformidad con lo establecido en la disposición cuarta 2. B), al señalar que «las cuentas anuales deberán ser formuladas
por el empresario, los administradores o las personas sobre las que recaiga dicha obligación de acuerdo con la legislación
mercantil. Del mismo modo, las cuentas anuales deberán ser en su caso auditadas, aprobadas por la Junta General y
depositadas en el Registro Mercantil de acuerdo con las normas generales. En cuanto a la supervisión o intervención de
cuentas por los administradores concursales o por los interventores también se estará a lo previsto en la legislación
mercantil», aplicable al estar la sociedad en liquidación concursal.
Resolución de 6 de julio de 2015, de la Dirección
General de los Registros y del Notariado,

• Apertura de liquidación. Facultades de la AC:


Entre estas facultades de administración han
de entenderse incluidas las de convocar la
junta de la sociedad, y las de certificar las
actas y los acuerdos de los órganos colegiados,
que corresponderán, por tanto, a la
administración concursal y no a los
administradores cesados (artículos 166 de la
Ley de Sociedades de Capital y 7, 11 y 109 del
Reglamento del Registro Mercantil).
• Respecto del depósito de unas cuentas, producida una declaración de concurso
con posterioridad a la formulación de las mismas y antes de su presentación a
depósito, señaló la Resolución de 6 de marzo de 2009 que: «aunque es cierto que
la Ley Concursal no se pronuncia al respecto y que una interpretación literal del
artículo 46.2 de la Ley Concursal podría llevar a la conclusión de que la sociedad
estaba eximida de la obligación de supervisión de las cuentas por los
administradores, dado que fueron formuladas antes de que se produjera la
tramitación del concurso, entiende este Centro Directivo que el propio precepto se
refiere a la supervisión de las administraciones concursales y que dicha finalidad
quedaría sin contenido si se prescindiera de ella en el presente caso. Apoya esta
interpretación lo dispuesto en el artículo 75 de la propia Ley Concursal para el caso
de que el deudor no hubiera presentado las cuentas correspondientes al ejercicio
anterior a la declaración del concurso, ya que correspondería entonces su
formulación y presentación a la propia administración concursal y, a mayor
abundamiento –y también de conformidad con este precepto–, por ser función de
los administradores concursales el emitir informe sobre el estado de la
contabilidad del deudor y que así ́ tanto los socios como terceros interesados
puedan conocer –pendiente el procedimiento concursal– si la contabilidad llevada
por los administradores no suspendidos por la sociedad ha sido supervisada por
los administradores concursales».
• El mismo criterio ha de ser aplicado al supuesto presente en que las cuentas fueron formuladas y
aprobadas declarado ya el concurso, y una vez aprobado el convenio con los acreedores, lo que
produjo la cesación de los efectos de la declaración del concurso –quedando sustituidos por los
que, en su caso, se hubieran establecido en el propio convenio– pero no la conclusión del mismo.
Es decir, no son cuentas anteriores a la tramitación del concurso de la sociedad, sino cuentas
correspondientes a un período en el que la situación concursal persistía, en fase de convenio
aprobado (artículos 21, 46, 48, 133, 141, 142, 143, 145 y 176 de la Ley Concursal). Si se tiene en
cuenta, además, que, en este caso, la apertura de la fase de liquidación se ha producido a solicitud
del propio deudor, al conocer la imposibilidad de cumplir los pagos comprometidos y las
obligaciones contraídas con posterioridad a la aprobación del convenio (artículo 142.2 de la Ley
Concursal); que, iniciada la fase de liquidación, la administración concursal deberá elaborar un plan
para la realización de los bienes y derechos integrados en la masa activa del concurso, compuesta
tanto por los existentes al tiempo de la declaración del concurso como por los reintegrados o
adquiridos hasta la conclusión del procedimiento (artículos 33.1.f).2.º, 76 y 148 de la Ley
Concursal), y que, por tanto, la determinación de la masa activa precisará también del examen de
las cuentas de la sociedad formuladas sin la anterior supervisión de la administración del concurso;
así como la aplicación del contenido del artículo 46 de la Ley Concursal durante la fase de
liquidación (ver remisión del artículo 147 de la misma Ley), la conclusión resultante ha de ser la
necesidad de constancia del consentimiento, intervención o supervisión de la administración
concursal a los efectos del depósito en el Registro –y la consiguiente publicidad–, de las cuentas en
tales circunstancias formuladas y aprobadas.
DGT
NUM-CONSULTA V1604-10
ORGANO SG de Impuestos sobre la Renta de las Personas
Físicas
FECHA-SALIDA 14/07/2010
NORMATIVA Ley 35/2006, Art. 33
DESCRIPCION-HECHOS Por auto judicial de fecha 9 de febrero de 2009 una
entidad mercantil es declarada en concurso
voluntario de acreedores. El 15 de junio del mismo
año la administración concursal solicita al
consultante (en base a lo dispuesto en el artículo 71
de la Ley Concursal) la reintegración de 62.904,24
euros correspondientes a la devolución de un
préstamo que había efectuado a la sociedad,
devolución efectuada en seis pagos: dos en 2009 y
cuatro en 2010.

CUESTION-PLANTEADA Existencia de una pérdida patrimonial por la


reintegración realizada.
SEl artículo 71 de la Ley 22/2203, de 9 de julio, Concursal (BOE del día 10), determina lo siguiente:
T“1. Declarado el concurso, serán rescindibles los actos perjudiciales para la masa activa realizados por el deudor
Adentro de los dos años anteriores a la fecha de la declaración, aunque no hubiere existido intención fraudulenta.
C2. El perjuicio patrimonial se presume, sin admitir prueba en contrario, cuando se trate de actos de disposición a título
I gratuito, salvo las liberalidades de uso, y de pagos u otros actos de extinción de obligaciones cuyo vencimiento fuere
Oposterior a la declaración del concurso.
N3. Salvo prueba en contrario, el perjuicio patrimonial se presume cuando se trate de los siguientes actos:
- 1.º Los dispositivos a título oneroso realizados a favor de alguna de las personas especialmente relacionadas con el
Cconcursado.
O2.º La constitución de garantías reales a favor de obligaciones preexistentes o de las nuevas contraídas en sustitución
Mde aquéllas.
P(…)”.
LEn el presente caso, ya se ha producido de forma efectiva la reintegración del importe percibido en su día como
Edevolución del préstamo que había efectuado a la sociedad de la que su hijo era socio (titular del 50 por ciento de las
Tparticipaciones). Ahora bien la rescisión de la devolución del préstamo no comporta la existencia de una pérdida
Apatrimonial para el consultante, ya que este mantiene contra la sociedad concursada un derecho de crédito a su favor.
Por su parte, la determinación legal del concepto de ganancias y pérdidas patrimoniales se recoge en el artículo 33 de
la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y de modificación parcial
de las leyes de los Impuestos sobre Sociedades, sobre la Renta de no Residentes y sobre el Patrimonio (BOE del día
29), que en su apartado 1 establece que “son ganancias y pérdidas patrimoniales las variaciones en el valor del
patrimonio del contribuyente que se pongan de manifiesto con ocasión de cualquier alteración en la composición de
aquél, salvo que por esta Ley se califiquen como rendimientos”.
En consecuencia, habrá que esperar al momento del cumplimiento del convenio al que se llegue en el concurso para
determinar la cuantía de su pérdida patrimonial (en función de la cantidad del derecho de crédito que, en su caso,
quede sin ser devuelta por la sociedad concursada) así como el periodo impositivo al que deberá imputarse la misma.
Lo que comunico a usted con efectos vinculantes, conforme a lo dispuesto en el apartado 1 del artículo 89 de
la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria (BOE del día 18).
TEA
• Criterio 1 de 1 de la resolución: 00500/2012/00/00
• Calificación: Doctrina
Unidad resolutoria: Vocalía Tercera
Fecha de la resolución: 09/01/2014
Tras la aprobación del nuevo PGC 2007, cuando en un procedimiento concursal se acuerde una quita de créditos, debe
darse de baja el pasivo financiero original en el ejercicio en que se apruebe judicialmente el convenio, reconociéndose
al mismo tiempo el nuevo pasivo por su valor razonable. De esta forma, se trasladará a la cuenta de resultados un
ingreso equivalente a la quita obtenida, sin que la normativa reguladora del I.Sociedades prevea para este supuesto
corrección alguna al resultado contable. Este criterio será de aplicación siempre que de forma racional se prevea el
cumplimiento del convenio y se pueda seguir aplicando el principio de empresa en funcionamiento.
Con la normativa contable aplicable a este supuesto, desaparecen los ingresos a distribuir en varios ejercicios, de forma
que ya no resulta posible contabilizar así los ingresos de la quita ni tampoco realizar su imputación fiscal a medida que
se perciben los créditos reconocidos en el convenio.
Nota: Ver Consulta núm 1 del BOICAC 76/2008, Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas.

• LIS ART. 11. 13. El ingreso correspondiente al registro contable de quitas y esperas consecuencia de la aplicación
de la Ley 22/2003, de 9 de julio, Concursal, se imputará en la base imponible del deudor a medida que proceda
registrar con posterioridad gastos financieros derivados de la misma deuda y hasta el límite del citado ingreso.
• No obstante, en el supuesto de que el importe del ingreso a que se refiere el párrafo anterior sea superior al
importe total de gastos financieros pendientes de registrar, derivados de la misma deuda, la imputación de aquel
en la base imponible se realizará proporcionalmente a los gastos financieros registrados en cada período
impositivo respecto de los gastos financieros totales pendientes de registrar derivados de la misma deuda.
2. Esta cuestión se encuentra íntimamente conectada con las NRyV establecidas en
el PGC. La Resolución del ICAC 76/2008 determina la forma de registro y valoración
sobre el tratamiento contable de la aprobación de un convenio en un proceso
concursal.
3. La norma contable da lugar a que se reconozca un ingreso en el ejercicio en que
se apruebe el convenio y siempre que se produzca una modificación sustancial de la
deuda original, que se dará cuando la diferencia de una y otra actualizada
financieramente, sea superior al 10%.
4. Contablemente significa que, en caso de ser sustancialmente diferentes, se dará
de baja al pasivo original, el registro del nuevo pasivo por su valor razonable y un
ingreso financiero en la cuenta de pérdidas y ganancias.
4. En caso contrario, no es sustancialmente distinto, no se procederá a la
baja al pasivo original y la aplicación de valoración a coste amortizado dará
lugar a ingresos financiero que se devengarán conforme se realicen los
pagos, por lo que no se genera el total de ingresos financieros en el ejercicio
en que se produzca la reestructuración de la deuda.
5. Desde la perspectiva del IS, y la doctrina de la AEAT, esta situación daba
lugar a que las empresas tuvieran que incorporar estos ingresos financieros
en sus bases imponibles de acuerdo con la normativa contable.
6. Sin embargo, desde la aprobación del RD-ley 4/2014 de medidas urgentes
en materia de refinanciación y reestructuración de deuda empresarial, e
incorporado en la actual Ley 27/2014 del Impuesto sobre sociedades
(artículo 11.13), la legislación fiscal opta por diferir la incorporación de tal
ingreso fiscal durante la vigencia del calendario de pago del resto de la
deuda que establezca el convenio.
4. La imputación temporal se realizará a medida que se vaya contabilizando
el gasto por los intereses generados por la parte de deuda no condonada. Es
decir, que si los ingresos de la quita son inferiores a los gastos financieros
totales, en cada ejercicio deberé imputar un ingreso igual a los gastos
financieros de este ejercicio, hasta llegar a computar el total de los ingresos,
y en caso contrario, si los ingresos de la quita son superiores a los gastos
financieros totales, se deberán imputar anualmente en la misma
proporción que los intereses.
5. Sin embargo, resaltamos que para que se produzca el diferimiento fiscal
de la imputación de los ingresos que se generan, se requiere que se
produzca un aplazamiento de parte de la deuda, ya que, en caso contrario,
es decir, la deuda se extingue completamente, no podrá diferirse la
imputación temporal y el mismo se integrará en la base imponible del
ejercicio en que se perfeccione el acuerdo (dación en pago).
4.2. TRANSMISIÓN DE UNIDADES PRODUCTIVAS.
1. La LC en sus artículos 146 bis y 149 (reglas legales de liquidación) regula la
transmisión de unidades productivas.
2. Como notas generales indicar, que:
el adquirente se subrogará en la posición contractual de la concursada sin
necesidad de consentimiento de la otra parte.
se le cederán los derechos y obligaciones derivados de contratos afectos a la
continuidad de la actividad profesional o empresarial.
la transmisión no llevará aparejada obligación de pago de los créditos no
satisfechos por el concursado antes de la transmisión, ya sean concursales o
contra la masa, salvo que el adquirente la hubiera asumido expresamente o
existiese disposición legal en contrario
3. Un elemento fundamental e efectos tributarios es determinar que se entiende
por “unidades productivas”:
Es aquella en que se pueden identificar un conjunto de medios, materiales
(bienes y derechos) y humanos, organizados con el fin de llevar a cabo una
actividad económica o mantener una actividad productiva. Es decir, elementos
patrimoniales que se transmiten con un mínimo de cohesión y de independencia
respecto del resto del patrimonio empresarial.
La regulación fiscal sobre fusiones y escisiones, expresa que se entenderá por
rama de actividad (unidad productiva) el conjunto de elementos patrimoniales
que sean susceptibles de constituir una unidad económica autónoma
determinante de una explotación económica, es decir, un conjunto capaz de
funcionar por sus propios medios. Podrán ser atribuidas a la entidad adquirente
las deudas contraídas para la organización o el funcionamiento de los elementos
que se traspasan.
4. La regulación contable (NRyV 19. Combinaciones de Negocios) determina como
se configura la base imponible del impuesto de sociedades, por lo que el
transmitente integrará en la cuenta de pérdidas y ganancias la diferencia entre el
valor fiscal de los activos y pasivos transmitidos y su valor de transmisión.
5. Es factible la aplicación del régimen fiscal especial de fusiones, escisiones,
aportaciones de activos y canje de valores cuando haya motivo económico válido,
como lo sería posibilitar una adecuada y ordenada gestión de la sociedad
concursada.
6. En relación al IVA, la Ley reguladora en su artículo 7.1 determina que no están
sujetas la transmisión de un conjunto de elementos corporales y, en su caso,
incorporales que, formando parte del patrimonio empresarial o profesional del
sujeto pasivo, constituyan o sean susceptibles de constituir una unidad económica
autónoma en el transmitente, capaz de desarrollar una actividad empresarial o
profesional por sus propios medios, con independencia del régimen fiscal que a
dicha transmisión le resulte de aplicación en el ámbito de otros tributos.
7. Cuando la transmisión, como unidad
económica, incluya bienes inmuebles, la
transmisión de estos tributará por el ITPyAJD.
8. En todo caso, en operaciones de activos y
pasivos, sin la consideración de
unidad económica, quedará sometida al
gravamen del IVA, como una mera
operación aislada.
Supuestos particulares en
refinanciación.
• Real Decreto-ley 4/2014, de 7 de marzo, por el
que se adoptan medidas urgentes en materia
de refinanciación y reestructuración de deuda
empresarial.
• Disposición final segunda y tercera a efectos
de IS Y AJD.
ANÁLISIS JURISPRUDENCIAL
• Concurrencia responsabilidades concursales y
administradores.
• Régimen de calificación concursal.
• Régimen de responsabilidades AC.
CONCURRENCIA DE
RESPONSABILIDADES
• OJO:
• 48.3 LC:
• Los administradores o liquidadores del deudor persona
jurídica continuarán con la representación de la
entidad dentro del concurso.
– En caso de suspensión, las facultades de administración y
disposición propias del órgano de administración o
liquidación pasarán a la administración concursal.
– En caso de intervención, tales facultades continuarán
siendo ejercidas por los administradores o liquidadores,
con la supervisión de la administración concursal, a quien
corresponderá autorizar o confirmar los actos de
administración y disposición.
Artículo 48 quáter
• . Efectos de la declaración de concurso sobre
las acciones contra los administradores de la
sociedad deudora.
• Declarado el concurso, corresponderá
exclusivamente a la administración concursal
el ejercicio de las acciones de responsabilidad
de la persona jurídica concursada contra sus
administradores, auditores o liquidadores.
50.2 LC.
• Los jueces de lo mercantil no admitirán a trámite
las demandas que se presenten desde la
declaración del concurso hasta su conclusión, en
las que se ejerciten acciones de reclamación de
obligaciones sociales contra los administradores
de las sociedades de capital concursadas que
hubieran incumplido los deberes impuestos en
caso de concurrencia de causa de disolución. De
admitirse, será de aplicación lo dispuesto en el
último inciso del apartado anterior.
51.1 LC.
• Los juicios declarativos en que el deudor sea parte y que se
encuentren en tramitación al momento de la declaración
de concurso continuarán sustanciándose ante el mismo
tribunal que estuviere conociendo de ellos hasta la firmeza
de la sentencia.
– Por excepción se acumularán de oficio al concurso, siempre que
se encuentren en primera instancia y no haya finalizado el acto
de juicio o la vista, todos los juicios por reclamación de daños y
perjuicios a la persona jurídica concursada contra sus
administradores o liquidadores, de hecho o de derecho, y contra
los auditores.
– Los juicios acumulados continuarán su tramitación ante el juez
del concurso, por los trámites del procedimiento por el que
viniera sustanciándose la reclamación, incluidos los recursos que
procedan contra la sentencia.
51 BIS LC
• Suspensión de juicios declarativos pendientes.
• 1. Declarado el concurso y hasta su conclusión,
quedarán en suspenso los procedimientos
iniciados antes de la declaración de concurso en
los que se hubieran ejercitado acciones de
reclamación de obligaciones sociales contra los
administradores de las sociedades de capital
concursadas que hubieran incumplido los
deberes impuestos en caso de concurrencia de
causa de disolución.
60.3 LC.
• Desde la declaración hasta la conclusión del
concurso quedará interrumpida la
prescripción de las acciones contra socios y
contra administradores, liquidadores y
auditores de la persona jurídica deudora.
• También quedará interrumpida la prescripción
de las acciones cuyo ejercicio quede
suspendido en virtud de lo dispuesto en esta
ley.
RÉGIMEN DE CALIFICACIÓN
164.1. No entra supuesto de disolución: Sentencia T.S. 590/2013 (Sala 1) de 15 de
octubre

164.2.1º: Cuando el deudor legalmente obligado a la llevanza de contabilidad


incumpliera sustancialmente esta obligación, llevara doble contabilidad o hubiera
cometido irregularidad relevante para la comprensión de su situación patrimonial
o financiera en la que llevara.

164.2.6º: Cuando antes de la fecha de la declaración de concurso el deudor


hubiese realizado cualquier acto jurídico dirigido a simular una situación
patrimonial ficticia.

165.1.3º : Si el deudor estuviera obligado legalmente a la llevanza de contabilidad


y no hubiera formulado las cuentas anuales, no las hubiera sometido a auditoría,
debiendo hacerlo, o, una vez aprobadas, no las hubiera depositado en el Registro
Mercantil o en el registro correspondiente, en alguno de los tres últimos ejercicios
anteriores a la declaración de concurso.
Resolución de 15 de junio de 2000, del Instituto de
Contabilidad y Auditoría de Cuentas

• por la que se publica la Norma Técnica de


Auditoría sobre “Errores e Irregularidades”.
Error.
• El término “error” se refiere, en el contexto de esta norma
técnica, a actos u omisiones no intencionados cometidos
por uno o más individuos, sean de los administradores, de
la dirección, de los empleados de la entidad auditada, o de
terceras personas ajenas a ésta, que alteran la información
contenida en las cuentas anuales, tales como:
♦ Errores aritméticos o de transcripción en los registros
y datos contables.
♦ Inadvertencia o interpretación incorrecta de hechos.
♦ Aplicación incorrecta de principios y normas
contables.
irregularidad
• El término “irregularidad” se refiere, en el contexto de esta norma
técnica, a los actos u omisiones intencionados, cometidos por uno o
más individuos, sean de los administradores, de la dirección, de los
empleados de la entidad auditada, o de terceras personas ajenas a
ésta, que alteran la información contenida en las cuentas anuales La
irregularidad puede suponer, entre otros:
♦ Manipulación, falsificación o alteración de registros o documentos. (
en parte 164.2.6º LC)
♦ Apropiación indebida y utilización irregular de activos. (164.2.4º LC)
♦ Supresión u omisión de los efectos de transacciones en los registros
o documentos.
♦ Registro de operaciones ficticias.
♦ Aplicación indebida e intencionada de principios y normas contables.
clases que distingue la norma
No
significativo.

Significativo.

Muy
significativo.

Errores e irregularidades que afecten significativamente a la imagen fiel de las


cuentas anuales,
TS
• QUE SI CABE EN UNA NO ES APLICABLE OTRA
• Si la ley prevé una causa no es aplicable también
en otra:
– Irregularidad contable relevante 164.2.1 LC y no
164.2.2º.
– Identidad de reproches.
• TRIBUNAL SUPREMO Sala de lo Civil Sentencia
núm. 650/2016, 3 de noviembre de 2016
.
STS, a 13 de junio de 2012 - ECLI:ES:TS:2012:4577 A
ROJ: STS 4577/2012 Nº Sentencia: 357/2012 Nº Recurso:
1445/2009 Sección: 1
Ponente: JOSE RAMON FERRANDIZ GABRIEL

El carácter puramente fáctico de las cuestiones planteadas en los dos motivos del
recurso de casación - la nula relevancia para la comprensión de la situación
patrimonial de la concursada de las irregularidades contables declaradas o la
escasa trascendencia económica de los actos de disposición injustificados -
determina la procedencia de desestimarlos. Al fin, los recurrentes incurren en una
petición de principio, en cuanto afirman unos datos de hecho incompatibles con
los que el Tribunal de apelación ha considerado probados
STS, a 09 de junio de 2016 - ECLI:ES:TS:2016:2638 A
ROJ: STS 2638/2016 Nº Sentencia: 395/2016 Nº Recurso:
171/2014 Sección: 1
Ponente: RAFAEL SARAZA JIMENA

«Infracción por indebida aplicación, del artículo 164.2.1º de la LC , sobre la presunción de


culpabilidad del concurso relativa a la comisión de irregularidad en la contabilidad relevante
para la comprensión de su situación patrimonial o financiera, en oposición de la
jurisprudencia del Tribunal Supremo expresada en las sentencias número 994/2011 de 16
de enero , así como las número 259/2012 de 20 de abril o número 298/2012, de 21 de mayo
».

No puede tomarse aisladamente una expresión (que las cuentas faciliten una
«comprensión cómoda») para alegar, como se hace en el recurso, que la sentencia
recurrida está otorgando el rango de irregularidades relevantes a cuestiones de
carácter secundario, cuando la sentencia de la Audiencia Provincial es clara al
establecer que la contabilidad de la sociedad no era «fiable» y no permitía la
comprensión de la situación patrimonial de la empresa
STS, a 05 de junio de 2015 - ECLI:ES:TS:2015:2970 A
ROJ: STS 2970/2015 Nº Sentencia: 343/2015 Nº Recurso:
1646/2013 Sección: 1
Ponente: SEBASTIAN SASTRE PAPIOL

De las tres posibles conductas que el precepto acoge como supuesto de hecho (
incumplimiento sustancial a la llevanza de contabilidad, llevar doble contabilidad, o
haber cometido irregularidad relevante para la comprensión de su situación patrimonial
o financiera ),
Conforme a la interpretación literal y teleológica del precepto, se requiere que las
irregularidades sean relevantes para el conocimiento de la situación patrimonial o
financiera del deudor concursal.
El mero hecho de que exista error o falsedad en determinados apuntes en la
contabilidad no significa, por si solo, que sea relevante para la comprensión de la
situación patrimonial o financiera
• Como ha señalado la STS núm. 994/2011, de 16 de enero de
2012 : [p]or la razón de la trascendencia que se atribuye a
la función informativa de las declaraciones de conocimiento
en qué consisten las cuentas anuales, la distinción entre
error e irregularidad en que, por razón de la
intencionalidad, se basa el primero de los motivos del
recurso de casación,carece de significación para la comisión
del comportamiento que se describe en la norma del
ordinal primero del apartado 2 del artículo 164 de la Ley
22/2.003, de 9 de julio , dado que la realización del tipo
que en ella se describe no exige que el sujeto agente tenga
conciencia del alcance y significación jurídica de su acción u
omisión ni que el resultado del comportamiento sea
querido por él. Lo que no significa que las consecuencias de
la calificación deban ser necesariamente ajenas al reproche
que merecen las manifestaciones culposas o dolosas de la
irregularidad.
STS, a 16 de enero de 2012 - ECLI:ES:TS:2012:525 A
ROJ: STS 525/2012 Nº Sentencia: 994/2011 Nº Recurso:
1613/2009 Sección: 991
Ponente: JOSE RAMON FERRANDIZ GABRIEL
Dicha irregularidad consistió en no figurar, en el balance ni en la memoria
correspondientes a varios ejercicios, una garantía personal que Ediciones del
Prado, SA había constituido, en el año dos mil uno, en beneficio de una
sociedad norteamericana - Rapp Collins KK - y por la que había quedado
obligada a cumplir las deudas de la que entonces era su filial en Japón - Del
Prado Japan Co Ltd. - que hubieran sido causadas por un contrato que ésta
había celebrado con la mencionada acreedora.

Sin embargo, no tiene en cuenta el recurrente que, al específico fin de determinar si


Ediciones del Prado, SA debía haber incluido en sus balance y memoria la obligación de
satisfacer el crédito de Rapp Collins KK, en el caso de que no lo hiciera la deudora
principal, Del Prado Japan, Co Ltd - por exigirlo, para todas " las garantías
comprometidas con terceros ", los artículos 183 y 200 del Texto refundido de la Ley de
sociedades anónimas - la calificación del contrato celebrado por las dos primeras
sociedades mencionadas debía efectuarse de acuerdo, no con la Ley japonesa, sino con
la española, a la que correspondía establecer los criterios por los que se había de regir la
información contable a fin de ofrecer una imagen veraz y objetiva sobre la situación
financiera y patrimonial de la luego declarada en concurso.
SAP Vizcaya, a 29 de septiembre de 2016 - ECLI:ES:APBI:2016:1782
ROJ: SAP BI 1782/2016 Nº Sentencia: 543/2016 Nº Recurso: 154/2016 Sección: 4
Ponente: ANA BELEN IRACHETA UNDAGOITIA

concordantes, conservar los documentos justificantes de las


...
operaciones realizadas, presentar los libros a legalización, se han
consignado partidas de activo que no correspondían -créditos fiscales a
compensar por importe de 58.710,02-, o por importe superior, el
patrimonio neto se ha incrementado ficticiamente en los ejercicios 2012,
2013 y 2014 con la incorporación de partidas de reservas por valor de
96.951,61 euros, 232.503,02 y 191.163,02 euros cuando en los tres
ejercicios hubo pérdidas, sin ningún documento que aporte alguna
explicación de tales anotaciones contables. Tal proceder altera de
manera sustancial la imagen financiera y contable de la empresa hasta el
punto de impedir conocer la verdadera situación de la empresa. Por
tanto, la calificación del concurso como culpable por concurrencia de
una irregularidad relevante contable (art. 164.2.1º) debe
SAP Asturias, a 26 de septiembre de 2016 - ECLI:ES:APO:2016:2400
ROJ: SAP O 2400/2016 Nº Sentencia: 253/2016 Nº Recurso: 422/2015 Sección: 1
Ponente: JAVIER ANTON GUIJARRO
Las alegaciones planteadas en tales términos no pueden ser aceptadas si tenemos en
cuenta que la conducta que estamos examinando es la tipificada en el ordinal 1º del art.
164-2 L.C . en los siguientes términos "Cuando el deudor legalmente obligado a la
llevanza de contabilidad incumpliera sustancialmente esta obligación, llevara doble
contabilidad o hubiera cometido irregularidad relevante para la comprensión de su
situación patrimonial o financiera en la que llevara". Se trata de un tipo de mera
actividad que se consuma con la simple realización de la conducta descrita, a lo que
cabe añadir que, como señala la STS 16 enero 2012 , carece de utilidad distinguir entre
error o irregularidad, pues no importa que el sujeto tuviera o no consciencia del alcance
y significación jurídica de su acción, ni que el resultado de tal comportamiento fuera
querido por él. De ello se deriva la improcedencia de examinar si dicha conducta pudo
tener una mayor o menor relación causal con la agravación de la situación patrimonial
de la situación pues, repetimos, lo único relevante es la comisión del comportamiento
arriba descrito.
irregularidades contables consistentes en amortizaciones con un coeficiente distinto al
correcto para ralentizar su efecto, una sobrevaloración de existencias, la activación de un
impuesto diferido, y deterioros de clientes, todo ello con la consecuencia de incrementar
el valor de los activos y provocar la apariencia de una solvencia irreal.
SAP Barcelona, a 20 de septiembre de 2016 -
ECLI:ES:APB:2016:8022
ROJ: SAP B 8022/2016 Nº Sentencia: 201/2016 Nº
Recurso: 148/2016 Sección: 15
Ponente: JOSE MARIA RIBELLES ARELLANO

En este caso, no sólo los libros de los ejercicios 2008 a 2012 no se


han legalizado, sino que el demandado no ha logrado acreditar
que la contabilidad que llevaba la compañía informáticamente
fuera ordenada y reflejara la verdadera situación patrimonial de
la empresa.

Por otro lado, el acta de inspección levantada por la Agencia


Tributaria el 13 de marzo de 2014 (documento once de los
acompañados con el informe de la administración concursal )
corrobora los incumplimientos contables, al reflejar el inspector
que sólo pudo contar con los libros mayor y diario, viéndose
obligado a contrastar la información contable con las
declaraciones del Impuesto de Sociedades
• SAP Barcelona, a 20 de septiembre de 2016 - ECLI:ES:APB:2016:8022
• ROJ: SAP B 8022/2016 Nº Sentencia: 201/2016 Nº Recurso: 148/2016
Sección: 15
Ponente: JOSE MARIA RIBELLES ARELLANO

El artículo 165.3º de la Ley Concursal , por su parte, presume la culpabilidad, salvo


prueba en contrario, "si el deudor estuviera obligado legalmente a la llevanza de
contabilidad y no hubiera formulado las cuentas anuales, no las hubiera sometido a
auditoría, debiendo hacerlo, o, una vez aprobadas, no las hubiera depositado en el
Registro Mercantil o en el registro correspondiente, en alguno de los tres últimos
ejercicios anteriores a la declaración de concurso". En este caso el incumplimiento de
la concursada es contumaz y reiterado, pues no discute que las cuentas anuales de los
ejercicios 2008, 2009, 2010 y 2011 no se han presentado para su depósito en el
Registro Mercantil. Ni tan siquiera consta que se llegaran a formular, por lo que el
demandado no puede escudarse en la falta de aprobación por parte de la accionista
mayoritaria.

En definitiva, concurre igualmente la causa de culpabilidad del artículo


165.3º de la Ley Concursal ,
SAP Baleares, a 07 de julio de 2016 -
ECLI:ES:APIB:2016:1372
ROJ: SAP IB 1372/2016 Nº Sentencia: 195/2016 Nº
Recurso: 464/2015 Sección: 5
Ponente: MARIA ARANTZAZU ORTIZ GONZALEZ

- Las ventas a la entidad ISLA GRACIOSA S.R.L., filial de la concursada, habiendo dejado de cobrar la cantidad de
2.289.666,86 euros; hace aplicación la Administración Concursal de los artículos 164.1 y 164.2.5º de la Ley Concursal ,
por razón de proceder a venta a sabiendas de que no se cobraría su importe o una parte importante del mismo, y
suponer salida fraudulenta de activos.

- Los pagos efectuados a ESTILSON INSTALACIONES Y MONTAJES S.L. por importe de 1.623.024 euros por
trabajos y servicios no prestados o superfluos, y, para el caso de haberse prestado los servicios, haberse abonado en
exceso 218.000 euros. Incardina la Administración Concursal los hechos en el supuesto del artículo 164.1 y 164.2.5º de la
Ley Concursal por suponer salida fraudulenta de activos.

- La inexistencia del saldo de caja que figura en la contabilidad por importe de 108.424,58 euros. Se hace
aplicación en el informe del artículo 164.2.4º de la Ley Concursal por suponer irregularidad relevante en la contabilidad,
y del artículo 164.2.5º por haber salido fraudulentamente del patrimonio de la concursada.

- La falta de provisión por incobrables de los saldos acreedores frente a ISLA GRACIOSA S.R.L. y ESTILSON
INSTALACIONES Y MONTAJES S.L., como irregularidad relevante al amparo de lo dispuesto en el artículo 164.2.1º de la Ley
Concursal
SAP Tarragona, a 22 de junio de 2016 - ECLI:ES:APT:2016:882
ROJ: SAP T 882/2016 Nº Sentencia: 271/2016 Nº Recurso: 475/2015
Sección: 1
Ponente: MANUEL DIAZ MUYOR
Así podemos decir que por "irregularidad contable" se entiende cualquier
incumplimiento intencionado, por acción u omisión, de los principios y normas de
contabilidad generalmente aceptados, siempre que sea de tal entidad o importancia
que por su consecuencia se altere la imagen de la situación patrimonial o financiera
de la sociedad que ofrece la contabilidad
Ahora bien, no basta con que se produzca una alteración de la imagen de la sociedad. Es necesario que sea
relevante y que maquille la situación patrimonial o financiera de la entidad o dificulte su comprensión por
terceros, de manera que cualquier operador económico que se aproxime a la empresa en cuestión se vería
imposibilitado, o al menos con serias dificultades, para hacerse una idea correcta de su situación
patrimonial y financiera, para lo cual también será importante ponderar los importes a los que afecte,
pues si se trata de cantidades despreciables no pueden merecer el calificativo de "relevante", calificativo
con el que la Ley exige un plus de gravedad, carente de justificación y que afecte directamente a las
finalidades de claridad, rigor y precisión que derivan de las normas de contabilidad
La irregularidad sancionable no es meramente formal, sino que debe dificultar la comprensión
de la situación económica, o, lo que es lo mismo, debe ser de tal naturaleza que entorpezca el análisis
estructurado de la contabilidad y la posibilidad de que, de acuerdo con un modo diligente y ordenado de
proceder, se detecte la realidad que subyace, llevando a error o confusión sobre el verdadero escenario
cuya imagen fiel habría de ilustrar la contabilidad.
SAP Madrid, a 17 de junio de 2016 -
ECLI:ES:APM:2016:11333
ROJ: SAP M 11333/2016 Nº Sentencia: 242/2016 Nº
Recurso: 421/2014 Sección: 28
Ponente: ALBERTO ARRIBAS HERNANDEZ

..por la infracción cometida, lo que impide ahora apreciar la nulidad de actuaciones


interesada, todo ello de conformidad con el artículo 459 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
. TERCERO .- Calificado el concurso como culpable con fundamento en la presunción iuris
et de iure de irregularidad relevante en la contabilidad consistente en la indebida
activación de créditos fiscales, la parte recurrente se limita a señalar que la
administración concursal y la sentencia se refieren al nuevo plan de contabilidad (Real
Decreto 1514/2007, de 16 de noviembre) cuando al supuesto enjuiciado le resulta de
aplicación el Plan anterior, esto es, el aprobado por Real Decreto 1643/1990, de 20 de
diciembre, efectuándose la activación de los créditos fiscales en los términos
contemplados en éste para las cuentas y, concretamente,
• La activación de los créditos fiscales está prevista en el apartado 16 de las Normas
de Valoración, que integran la Quinta Parte del Plan General de Contabilidad,
aprobado por Real Decreto 1643/1990, de 20 de diciembre, el cual, como hemos
indicado, resulta de aplicación al supuesto de autos por razones temporales (ahora
contemplada en el apartado 2.3. de norma 13ª de las Normas de Registro y
Valoración que integran la Segunda parte del vigente Plan General de
Contabilidad).

• Las normas de valoración desarrollan los principios contables establecidos
en la Primera Parte del Plan General de Contabilidad y son de aplicación
obligatoria tal y como indica el apartado 2º de la norma 1ª.

• La norma 16ª prevé que la existencia de pérdidas compensables fiscalmente
dará origen a un crédito impositivo que representa un menor impuesto a pagar en
el futuro, añadiendo: "que, de acuerdo con el principio de prudencia, sólo se
contabilizaran en las cuentas NUM000y NUM001los impuestos anticipados y
créditos impositivos cuya realización futura esté razonablemente asegurada, y se
darán de baja aquellos otros sobre los que surjan dudas lógicas acerca de su futura
recuperación.".
• Para la aplicación de esta Norma el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) dictó la
resolución de fecha 9 de octubre de 1997 (BOE de 6 de noviembre de 1997), sobre algunos
aspectos de la Norma de valoración decimosexta del Plan General de Contabilidad, modificada
parcialmente por la de 15 de marzo de 2002, estableciendo en el apartado tercero de la disposición
Primera que: "Los créditos por compensación de bases imponibles negativas, por deducciones y
bonificaciones, y los impuestos anticipadossólo serán objeto de contabilización en la medida en que
tengan un interés cierto con respecto a la carga fiscal futura, teniendo en cuenta que las cuentas
anuales deberán mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los
resultados de la empresa. Por ello, si existen dudas acerca de su recuperación futura, por aplicación
del principio de prudencia, no deberán ser registrados en las cuentas anuales como tales, no
pudiéndose en ningún caso registrar en el activo dichas partidas y corregir su valoración mediante
la dotación de provisiones". Añadiendo el apartado cuarto lo siguiente: "Los créditos derivados de
la compensación de bases imponibles negativas sólo serán objeto de registro contable cuando la
base imponible negativa se haya producido como consecuencia de un hecho no habitual en la
gestión de la empresa, siempre que razonablemente se considere que las causas que la originaron
han desaparecido en la actualidad y que se van a obtener beneficios fiscales que permitan su
compensación en un plazo no superior al previsto en la legislación fiscal para la compensación de
bases imponibles negativas, es decir, siete años con carácter general, y con el límite máximo de diez
años contados desde la fecha de cierre del ejercicio en aquellos casos en los que la legislación
tributaria permita compensar en plazos superiores.".
• De lo expuesto de deduce que la activación del crédito fiscal requiere: a)
que la base imponible negativa se haya producido como consecuencia de
un hecho no habitual en la gestión de la empresa; b) que se considere
razonablemente que las causas que originaron la base imponible negativa
han desaparecido; y c) que razonablemente se prevea que se van a
obtener beneficios fiscales en determinados plazos.

• Ninguno de estos requisitos se cumplía cuando la sociedad activó los
créditos fiscales, sin que se discuta que los informes de auditoría de las
cuentas correspondientes a los ejercicios 2000 a 2005 reflejaban las
oportunas salvedades por la injustificada activación del crédito fiscal que
ya en el año 2000 ascendía a 162 millones de pesetas y que, de
prescindirse de los créditos fiscales, la sociedad ya estaba en causa de
disolución por pérdidas al cierre del ejercicio 2004 con unos fondos
propios de 804.119,61 euros frente a un capital social de 2.025.370 euros,
lo que evidencia la gravedad de la irregularidad contable cometida.
SJM Granada, a 09 de junio de 2014 -
ECLI:ES:JMGR:2014:104
ROJ: SJM GR 104/2014 Nº Sentencia: Nº Recurso:
33014/2010 Sección: 1
Ponente: ENRIQUE SANJUAN MUÑOZ

En la sentencia de 3 de febrero de 2014 señalábamos, que la


cuestión de la irregularidad relevante ( art. 164.2.1º LC ) para la
comprensión de su situación patrimonial o financiera de la
empresa debe partir necesariamente de quién formula las cuentas
(la administración societaria). En el tipo de conducta se requiere:
• 1º. Que exista irregularidad contable; en
relación a ello da igual que la misma sea
cuantitativa o cualitativa o ambas
• 2º. Que el deudor "hubiera cometido"; no deja de ser ciertamente conflictiva dicha
expresión puesto que la misma podría determinar la aplicación, exclusiva, del
supuesto a hechos cometidos con intencionalidad. Sin embargo la interpretación
de la misma debe partir de una interpretación integral con el 164.1 LC y por tanto
entender que se dará en todos los supuestos de "dolo o culpa grave".
Entenderíamos no aplicable la culpa leve precisamente porque en todas las
conductas recogidas en la norma la actuación del deudor que se precisa es de o
intencional o fraudulenta o con culpa lata al menos. De otra forma no se
entendería la distinción entre la presunción de dolo o culpa grave, por ejemplo, de
no formular las cuentas (165.3º LC) o formularlas erróneamente. Esta situación,
como veremos, es contemplada de forma distinta por los tribunales y por el
Tribunal Supremo. Sin embargo no entenderíamos aplicable la misma, por
ejemplo, en el supuesto en que la causa no fuere derivada sino del deber de
vigilancia del administrador (obligado a debida diligencia) cuando se tratare de un
mero error o de un supuesto que no hubiera podido controlar por ser debido a un
error de un tercero (por ejemplo cuando lo comete quien materialmente realiza el
trabajo). Todo ello sin perjuicio de que el mismo puede ser puntual pero debe ser
corregido y no mantenido en el tiempo.
• 3º. Que la misma sea relevante, partiendo de
que la citada relevancia lo es:
– A modo de significativo o importante y no
necesariamente excelente o sobresaliente.
– En relación a la comprensión que otros "en la que
llevara" (que no son los que realizan la acción)
puedan tener de la situación de la sociedad. Esta
cuestión nos lleva necesariamente a distinguir la
misma de otros supuestos para poder delimitarla:
• El artículo 165.3 LC se refiere a las cuentas anuales y no en
sí mismo a la contabilidad. No formular las cuentas o no
someterlas a auditoría necesaria o no depositar las mismas
en alguno de los tres últimos ejercicios.

• El artículo 164.2.1º LC se refiere a la llevanza de la
contabilidad y por ello en tanto:

• La misma hubiere servido de soporte para alguna
operación.

• La misma se traslade en la misma forma a cuentas
anuales.
• La expresión utilizada por el legislador se completa con la ya señalada coletilla final de " en la que
llevara " pareciendo una suerte de abstracción en la que da igual esa comprensión de otros en
sentido concreto para adentrarse en el campo abstracto de la comprensión. Pero dicha referencia
(distinta de los supuestos de publicidad registral por depósito o utilización en operaciones
concretas) también se pone de manifiesto por ser una conducta apreciable incluso para la solicitud
de concurso o posteriormente para la comprensión de su situación. No es - o no puede ser una
conducta abstracta- sino una conducta concreta, determinada y determinable. La misma norma
sanciona el incumplimiento absoluto de llevanza de contabilidad y el incumplimiento sustancial. En
este caso no lo es en referencia a la comprensión sino al mismo deber de cumplimiento. Al añadir
lo ya referido a "relevante para la comprensión de su situación patrimonial o financiera en la que
llevara" se parte de que sí lleva contabilidad y de que de la misma no es posible esa comprensión.
Si ello lo es para una situación abstracta y genérica o lo es para un supuesto concreto parte en
cualquier caso de que su apreciación puede modularse del siguiente modo:

• Por un lado la comprensión de supuestos anteriores a la situación de concurso debe ser
concreta y no abstracta.

• Es en la misma situación de concurso de acreedores donde se puede manifestar de forma
también concreta pero ya generalizada por la necesaria comprensión que el proceso en sí mismo
requiere.

• Y que esa situación lo es en relación a la situación patrimonial o financiera.

• Estamos por tanto ante una irregularidad grave, en el supuesto de la norma, que sea
relevante, causada por quien tiene el control de la acción; y que esa relevancia lo es de modo
significativo para la comprensión de la situación patrimonial o financiera de la empresa en los
términos expuestos.
• 1º. Así la SAP de Barcelona (SAP, Civil sección 15 del 30 de Octubre del 2013 (ROJ: SAP B
11267/2013) Recurso: 260/2013 | Ponente: JOSE MARIA RIBELLES ARELLANO) recoge un supuesto
en donde el informe de calificación de la AC alude a una primera irregularidad en la cuenta
5720000 que no cuadra con los extractos bancarios. Señala, no obstante la citada sentencia - tras la
reproducción del artículo 25 del Código de Comercio - que , sin embargo, como muy bien indica la
juez a quo, la discrepancia lo es con el libro mayor, que no es de llevanza obligatoria. No existe
constancia que el descuadre se trasladara al libro diario. No se discute, además, que en las cuentas
coincide el saldo contable con el que aparece en el extracto bancario (65.800,46 euros), por lo que
en ningún caso la irregularidad habría impedido conocer la situación patrimonial de la empresa. En
la misma se extraen dos parámetros significativos: 1. Por un lado los libros de llevanza obligatoria
para referir que no existe irregularidad relevante (y por tanto haciendo recaer el juicio sobre la
relevancia) cuando el mismo se recoge en otros que no sean los expresamente fijados como
obligatorios en el artículo 25 Cco . Ciertamente que el mayor (sea o no sea obligatorio) no lo recoja
pone de manifiesto que la cuenta cliente o proveedor a la que se refiere no se ha recogido en el
diario o en cualquiera de los libros obligatorios en que deba estar y de los que deriva el mismo. 2.
En segundo lugar que no hay constancia de que se trasladara al libro diario; cuestión esta también
que se debe modular puesto que es precisamente el proceso inverso el que se produce - de ser el
caso- en relación a su constancia y la misma discordancia nos llevaría a apreciar la irregularidad
contable- más aún si cabe- cuando se refleja en uno y no se refleja en otro pues en ese caso la
actitud sería plausiblemente dolosa por la necesaria manipulación que de las cuentas habrá que
hacer para que esto se produzca. Pero al margen de las cuestiones contables lo que se parece
traslucir de la sentencia es que la "relevancia" a la que se quiere referir la AP y el juzgado a quo lo
es por el conocimiento que terceros puedan o deban tener entendiendo que "pueden o deben
"tener ese conocimiento cuando - con carácter abstracto- se ha reflejado en el libro obligatorio
correspondiente. La relevancia- en este caso- lo es por ese posible conocimiento (abstracto y no
concreto) que se pueda tener de los libros contables obligatorios. La Sentencia de 20 de julio de
2012 de la AP de Barcelona (Roj: SAP B 11606/2012 ) fijó como límite de la irregularidad contable la
ausencia de contabilidad, prevista en otro apartado."
• 2º. La SAP de Barcelona (SAP, Civil sección 15 del 22 de Octubre del 2013 (ROJ: SAP B 11253/2013) Recurso:
172/2013 | Ponente: JOSE MARIA RIBELLES ARELLANO) señaló asimismo que una irregularidad es relevante e
incide en la comprensión de la situación patrimonial y financiera- en el caso concreto- por dos razones: de un lado,
se incluye en el activo los resultados de ejercicios anteriores, cuando han de figurar en el pasivo. Y, de otro, los
importes consignados no responden a la realidad, pues han sido desmentidos por las cuentas anuales. En relación
a existencias (quizás también al inmovilizado dado que se refiere a los activos en general) la referida sentencia no
lo acoge en el marco de " irregularidad relevante " sino en un supuesto de "inexactitud grave en cualquiera de los
documentos acompañados a la demanda ". En este sentido señala que la concursada incurrió en la conducta
prevista en el artículo 164.1-2º, que sanciona con la culpabilidad al deudor que " hubiera cometido inexactitud
grave en cualquiera de los documentos acompañados a la solicitud de concurso o presentados durante la
tramitación del procedimiento, o hubiera acompañado o presentado documentos falsos". La inexactitud afecta al
inventario de bienes y derechos, que fueron valorados en 305.281,36 euros -salvado el error en que incurrió la
administración concursal en el valor de los productos terminados-, cuando en el informe se tasan en 35.482,71
euros. La diferencia es sustancial y no se explica acudiendo a los argumentos esgrimidos por las recurrentes, como
la depreciación de activos o diferentes criterios de valoración. En realidad, como afirma la administración
concursal , el problema no es sólo de avalúo de activos, sino de inclusión en el inventario de existencias o
productos terminados que, en verdad, no existían. En sentido inverso la AP de Alicante (SAP, Civil sección 8 del 28
de Febrero del 2013 (ROJ: SAP A 686/2013) Recurso: 657/2012 | Ponente: LUIS ANTONIO SOLER PASCUAL) nos
dice que la inexactitud reflejada en el inventario conlleva una " irregularidad relevante ". La AP de Cádiz (SAP, Civil
sección 5 del 15 de Octubre del 2013 (ROJ: SAP CA 1309/2013) Recurso: 468/2013 | Ponente: CARLOS ERCILLA
LABARTA) analiza un supuesto de existencias de forma diferente a la anterior. En el citado caso no coincidían las
existencias del balance provisional y el activo reflejado en el listado presentado en la solicitud de concurso
resolviendo un supuesto de " irregularidad relevante " porque, añadía, afectaba a la imagen fiel de la sociedad en
concurso dada la situación de fondos propios que ello conllevaba; por tanto en su reflejo en cuentas anuales. Del
conjunto de ambas sentencias podría concluirse que la situación contable afectaría a la causa prevista en el
apartado 2ª referida a la relevancia contable cuando la situación de imagen fiel de la sociedad varía mientras que
podría estar incursa en un supuesto de inexactitud cuando - cumpliendo los demás elementos que el precepto
exige- no afecta a esa imagen de forma cualitativa o cuantitativamente importante.
• 3º. La SAP SAP, Ourense, Civil sección 1 del 18 de Octubre del 2013 ( ROJ: SAP OU 826/2013) Recurso: 381/2012 |
Ponente: ANGELA IRENE DOMINGUEZ-VIGUERA FERNANDEZ define lo que a su modo de ver sería la irregularidad
relevante que conviene analizar: "En cuanto al concepto de irregularidad contable relevante, a efectos de incluir la
conducta del concursado en el art.164-2º-1º LC , se vincula legalmente a la comprensión de la situación
patrimonial y financiera de la empresa por parte de los terceros. Considerándose como tales aquellas que
obstaculicen o impidan tal conocimiento. Así, el citado Art.164-2º 1, establece, expresamente, "en todo caso, el
concurso se calificará como culpable, cuando el deudor legalmente obligado a la llevanza de contabilidad
incumpliera sustancialmente tal obligación o hubiere cometido irregularidad relevante para la comprensión de su
situación patrimonial o financiera en lo que llevara". Considerándose por la doctrina de los tribunales como
incluible en dicho ámbito, aquella que conculca los principios de contabilidad generalmente aceptados, tales
como, prudencia, expresamente alegado por la Administración concursal , registro, correlación de ingresos y
gastos etc. Calificándose, bien atendiendo a un criterio cuantitativo, porque afecten a partidas del activo o del
pasivo en un importe significativo atendiendo al volumen de negocio de la empresa; bien a aspectos cualitativos,
porque de haberse efectuado el apunte contable correspondiente con corrección, ello hubiera determinado que la
sociedad se encontrase incursa en causa de disolución con anterioridad. Generando, en cualquiera de los casos,
confusión e impidiendo de este modo la exacta y cabal comprensión de tal situación patrimonial por parte de los
terceros que con ella contratan. No en vano los artículos 25 y 26 del código de comercio establecen que el
empresario está obligado a formular las cuentas anuales de su empresa, que deben redactarse con claridad y
mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la misma ( artículo 34 del C
de Comercio), lo que se aplica incluso con mayor rigor, si cabe, en materia de sociedades ( artículo 84 de la LRSL,
que se remite al artículo 171 y siguientes del TR de la LSA .)". En este supuesto la principal cuestión radicaba en la
contabilización de una deuda de forma que la mayor cantidad debida hubiera llevado- conforme a los hechos
dados- a una situación de fondos propios negativos y causa de disolución. Si bien en un primer vistazo la referida
AP parece referirse- con las expresiones de la comprensión por parte de terceros o en casos en que produzca
confusión o impida la exacta y cabal comprensión de tal situación por parte de esos terceros que con la empresa
contrata- a supuestos de "relevancia concreta "y por tanto cuando se haya dispuesto de dicha información, otras
referencias - como la que se hace a los principios contables - parecen hacerla genérica sin necesidad de esa
afectación.
• 4º. La AP de Madrid (SAP, Civil sección 28 del 14 de Octubre del
2013 (ROJ: SAP M 15644/2013) Recurso: 335/2012 | Ponente:
PEDRO MARIA GOMEZ SANCHEZ) resolvió igualmente un supuesto
de irregularidad relevante partiendo de un concepto abstracto,
comprensivo de la contabilidad. En el caso concreto se señalaba
que la sentencia apelada apreció la concurrencia de irregularidad
contable relevante en el asiento contable denominado
"regularización" por la que un crédito se reduce ficticiamente en la
suma de 136.759,21. Frente a la alegación de que la misma no es
una irregularidad relevante la AP afirmó que ocultar la suma de
136.759,21 € en la partida de "Deudores" que en el balance de
2008 ascendía a 1.326.547,60 € significa ocultar nada menos que un
10,30 % de su importe y un 8,58 % en relación con el importe total
del activo circulante (1.592.137,22 €), lo que a juicio de esta sala sí
comporta una irregularidad relevante . Por lo tanto parte de ese
análisis abstracto en relación cuantitativa.

• 5º. Como elemento simple de prueba la AP de Barcelona (SAP, Civil
sección 15 del 08 de Octubre del 2013 (ROJ: SAP B 11244/2013) Recurso:
231/2013 | Ponente: JOSE MARIA RIBELLES ARELLANO) en su sentencia,
señala que, en el supuesto de la inexactitud "la conducta típica se da
cuando, conocido el informe de la administración concursal , se verifica
que la relación de acreedores presentada por el deudor difiere
sustancialmente de la lista incorporada a dicho informe". En el citado caso
el listado de acreedores presentado con la solicitud - que es el caso-
difería en menos en un 59% del que finalmente resultó del informe. En
este supuesto el balance se hace inocuo a la causa de calificación culpable
cuando es evidente que una de las dos- o las dos- reflejarían igualmente la
citada discrepancia. Nuevamente la razón- que no consta- podría ser el
reflejo que dicha discrepancia tiene a los efectos (cualitativos o
cuantitativos) en la imagen fiel de la sociedad pero sin que podamos
determinar su afectación abstracta o concreta en virtud de esta sentencia.
• 6º. La SAP de Madrid (SAP, Civil sección 28 del 16 de Septiembre del 2013 (ROJ: SAP M 13454/2013)
Recurso: 346/2012 | Ponente: GREGORIO PLAZA GONZALEZ) realiza un análisis de la
sobrevaloración de las obras en curso) resulta ciertamente clarificadora en cuanto trata un
supuesto de causa de disolución y responsabilidad partiendo de lo ya señalado. En tal caso utiliza
como argumentos probatorios el informe de la administración concursal , la auditoría de otros años
de la sociedad y un informe pericial que - según manifiesta- reproduciría dicho informe. En tal caso
y en relación al informe de la AC (fuera del concurso evidentemente) señala que entre los principios
contables se encuentra el de empresa en funcionamiento, de manera que se considera que la
gestión de la empresa continuará en un futuro, por lo que la aplicación de los principios contables
no tiene por objeto determinar el valor del patrimonio neto a efecto de su transmisión global o
parcial, ni el valor de liquidación. Por el contrario, la valoración que se efectúa en el informe
elaborado por la Administración concursal lo es en función de la liquidación de la empresa. Señala
que no tiene sentido la valoración de los activos por su coste ni la aplicación de otros principios
contables y reglas de valoración. La reducción es cuantitativa y cualitativa dado que conlleva un
porcentaje de reducción importante y situaría- conforme a los hechos- a la empresa en causa de
disolución de haberse contemplado en tal sentido. ( En tal sentido y con aprobación posterior la
Resolución de 20 de diciembre de 2013, del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, por la
que se publica la modificación de la Norma Técnica de Auditoría sobre la aplicación del principio de
empresa en funcionamiento).
• 7º. La Sentencia del Juzgado de lo Mercantil de Pontevedra (SJM, Mercantil sección
3 del 11 de Septiembre del 2013 ( ROJ: SJM PO 367/2013) Recurso: 312/2011 |
Ponente: JOSE MARIA BLANCO SARALEGUI) optó por una valoración cuantitativa y
abstracta ( confirmada por la SAP de Pontevedra de SAP Pontevedra, a 13 de
Septiembre del 2013 ROJ: SAP PO 2176/2013 Nº Sentencia: 340/2013 Nº Recurso:
267/2013 Sección: 1 Ponente: MARIA BEGOÑA RODRIGUEZ GONZALEZ ). En esta se
señala que en cuanto a la relevancia , se caracteriza como una situación en la que
cualquier operador económico que se aproximase a la mercantil apelante se vería
impedido de hacerse una idea correcta de la situación patrimonial y financiera de
la empresa, para lo cual también será importante ponderar los importes a los que
afecte, pues si se trata de cantidades despreciables no pueden merecer el
calificativo de "relevante " y que al exigirse por la Ley Concursal que merezca el
calificativo de "relevante " se dispone un plus que supone alguna gravedad,
carente de justificación y que afecte directamente a las finalidades de claridad,
rigor y precisión que derivan de las normas de contabilidad- SAP Baleares 21-4-10 -
. Si bien fue precisamente la prueba la que determinó, por el carácter dudoso del
supuesto y de la cuenta concreta, la declaración de fortuito.
• 8º. La Audiencia Provincial de Asturias (Sección 1ª). Sentencia núm. 422/2010 de 20 diciembre
AC01123- en cuanto a su calificación como irregularidad relevante a los efectos del 164.2.1. LC
señala citando la SAP Barcelona, Secc. 15ª de 19-3- 2007 (PROV 2007, 272870)) que incluso cuando
aceptemos una situación como irregularidad contable, tampoco reunirá el requisito de la relevancia
o gravedad suficiente si la situación patrimonial y financiera de la sociedad no llega a quedar
desvirtuada, lo que así acontecerá cuando el balance refleje con claridad la naturaleza de este
crédito ( SAP Barcelona, Secc. 15ª de 19-3-2007 ); cuando las cuentas estén auditadas y el auditor
haya hecho constar la oportuna salvedad en su informe sin denegar su opinión (SJM nº 1 La Coruña
de 14-3-2007 ); cuando el auditor haya emitido una opinión favorable con salvedades, motivadas
por incertidumbres cuyo desenlace final no es susceptible de una estimación razonable, pues en tal
caso "quien consulte las cuentas, con la memoria y el informe de auditoría puede hacerse una idea
cabal de la situación económico patrimonial de la compañía, e incluso de lo endeble que son las
expectativas de recuperación económica " ( SAP Barcelona, Secc. 15ª de 13-3-2009 (PROV 2009,
411481)), o cuando, a pesar de que el análisis aislado del balance pudiera llevar a equívocos, el
examen conjunto de las cuentas anuales permita conocer la realidad (SJM Jaén de 21-5-2007). En
este caso tanto una como otra parecen optar por una relevancia de comprensión abstracta pero en
función de la información ofrecida. (En el mismo sentido SAP, Civil sección 5 del 02 de Septiembre
del 2013 ( ROJ: SAP IB 1767/2013) Recurso: 60/2013 | Ponente: MARIA ARANTZAZU ORTIZ
GONZALEZ). Su análisis estaría conforme con lo dicho por La STS de 20 de octubre de 2011 que
admite que el valor del informe de auditoría se aproxima al de una prueba pericial, que ha de
someterse a las reglas de la sana crítica. Recuerda esta Sentencia que la anterior de 17 de mayo de
2000 consideró que una opinión técnica denegada no es equiparable a una opinión técnica negativa
o desfavorable, aunque añadía que también es verdad que una denegación de auditoría puede
ocultar la realidad de una auditoría negativa como forma de evitar las consecuencias de esta última
calificación. La posterior STS 8 de febrero de 2013 se apoya en la anterior de 20 de octubre de 2011
para concluir que "no es posible equiparar la denegación de una opinión por el auditor con la
opinión desfavorable, y la denegación no impide necesariamente que las cuentas puedan reflejar la
imagen fiel de la sociedad". Todo ello sería coherente con lo señalado por la SAP, Civil sección 15
del 26 de Junio del 2013 ( ROJ: SAP B 7228/2013) Recurso: 41/2013 | Ponente: LUIS GARRIDO ESPA
• 9º. La SAP de Salamanca (SAP, Civil sección 1 del 29 de Julio del
2013 ( ROJ: SAP SA 460/2013) Recurso: 181/2013 | Ponente: JOSE
ANTONIO MARTIN PEREZ) centra su posición en las cuentas anuales
y no en la contabilidad. Señala que la irregularidad parte de que las
mismas no reflejaran la imagen fiel de la situación económica y
patrimonial de la empresa, tal como se analiza en el informe de la
Administración concursal , de manera que la contabilidad llevaba a
cualquier analista a error grave al aparentar que la situación
patrimonial de la empresa era sustancialmente mejor de la que
realmente tenía. Lo curioso en este supuesto y en otros que ya
hemos señalado al respecto del reflejo de la "imagen fiel" en
relación a las cuentas anuales es que la no formulación de las
cuentas, el no sometimiento a auditoría o el no depósito sólo
constituyen un supuesto de presunción iuris tantum de dolo o culpa
mientras que si se formulan, se someten a auditoría y se depositan
el análisis se deriva a una presunción iuris et de iure cuando -
siguiendo el razonamiento de las sentencias- si reflejan ( no de otra
forma podemos entenderlo) una irregularidad contable que se
recoge en la contabilidad ( para algunos solo en cuanto a libros
previstos en el artículo 25 Cco ).
• 10º. El análisis que realiza la SAP de Las Palmas (SAP, Civil sección 4 del 24 de Julio del 2013 ( ROJ:
SAP GC 1360/2013) Recurso: 598/2012 | Ponente: EMMA GALCERAN SOLSONA) y la que se
antecede, en apelación, de 18/7/2011 por el Juzgado de lo Mercantil nº 1 de Las Palmas de Gran
Canaria, es puramente técnico considerando las "irregularidades" en función del Plan General de
Contabilidad. Se señala en ellas que las irregularidades no superan (o dudosamente lo hacen) el
umbral de la importancia relativa (materiality). Este acertado concepto parte esencialmente de
considerar que la información es "relevante" si su omisión o inexactitud puede influir en las
decisiones económicas sobre la base de los estados financieros (IASB Framework. Se refiere
entonces a la importancia relativa de las transacciones, saldos o errores a modo de umbral o punto
de corte a partir del cual la información (patrimonial y financiera) se convierte en relevante para las
necesidades de toma de decisiones de terceros que hayan de tomarlas. Se trata del principio de
importancia relativa: "6. Importancia relativa. Se admitirá la no aplicación estricta de algunos de los
principios y criterios contables cuando la importancia relativa en términos cuantitativos o
cualitativos de la variación que tal hecho produzca sea escasamente significativa y, en
consecuencia, no altere la expresión de la imagen fiel. Las partidas o importes cuya importancia
relativa sea escasamente significativa podrán aparecer agrupados con otros de similar naturaleza o
función. En los casos de conflicto entre principios contables, deberá prevalecer el que mejor
conduzca a que las cuentas anuales expresen la imagen fiel del patrimonio, de la situación
financiera y de los resultados de la empresa." (REAL DECRETO 1514/2007, de 16 de noviembre, por
el que se aprueba el Plan General de Contabilidad.). La importancia de la irregularidad también es
tratada por SJM, Mercantil 3 del 16 de Julio del 2013 ( ROJ: SJM M 320/2013) Recurso: 545/2008 |
Ponente: JESUS MIGUEL ALEMANY EGUIDAZU quien cita SAP Madrid 28ª 268/2010, 3.12 .
• 11º. En relación a terceros la citadas Sentencia de 16 de julio de 2013 del
Juzgado de lo Mercantil de Madrid recoge los argumentos discrepantes de
las Audiencias: Siguiendo la tesis matizada, en la SAP Barcelona 15ª
250/2009, 16.7 , la falta de legalización de los libros se juzgó irregularidad
relevante porque restaba autenticidad a la contabilidad, en la medida en
que existían menos resortes para asegurar que no había sido manipulada,
siendo corroborada en tal caso la sospecha de manipulación por el análisis
de la información contable. En el mismo sentido, las SSAP Barcelona 15ª
314/2008, 16.9 y, en una quiebra, 308/2009, 14.9 , estimaron que la
omisión de llevanza era relevante precisamente por carencia de los libros
en la proximidad a la presentación del concurso , lo que impedía analizar
las causas de la insolvencia. Las SAP Barcelona 15ª 478/2008, 18.12 ,
citando otras, en caso de quiebra, exige, además, el perjuicio de terceros.
Diversamente, la SAP Madrid 28ª 62/2009, 24.3 , apreció, en las
circunstancias del caso, una irregularidad puramente formal. Termina
optando por considerar que debe poderse conectar la irregularidad con la
desfiguración de la imagen patrimonial o financiera.
• 12º. El reflejo en cuentas anuales (
comparativa) ha sido considerado como
irregularidad relevante para la SAP, Civil
sección 9 del 27 de Mayo del 2013 ( ROJ: SAP
V 2970/2013) Recurso: 181/2013 | Ponente:
MARIA ANTONIA GAITON REDONDO, en
cuanto a las existencias que realmente no se
justificaban por el volumen de operaciones del
ejercicio.
• 13º. La SAP de León (SAP, Civil sección 1 del 22 de Mayo del 2013 (ROJ: SAP LE 921/2013) Recurso:
4/2013 | Ponente: MANUEL GARCIA PRADA)define los conceptos aunque finalmente los termina
mezclando: El incumplimiento y la irregularidad ha de ser sustancial y relevante, respectivamente,
es decir, capaz de impedir el conocimiento o desfigurar la imagen fiel de la sociedad, la real
situación financiera y patrimonial de la misma. Por sustancial, se entiende por la doctrina, aquella
que no permita conocer la imagen fiel de la sociedad. Algunas sentencias han considerado que la
eliminación de falsos activos de la sociedad implica la reducción de los fondos propios por lo que su
contabilización supone una irregularidad relevante ya que afecta la patrimonio neto de la sociedad
contabilizado en las cuentas anuales y afecta a la imagen fiel que han de dar de la misma. La
interpretación que merece el vocablo "relevante" es equiparable a importante, significativo,
descartando, así pues, irregularidades puntuales; ahora bien, un conjunto de irregularidades
contables que individualmente consideradas pudieran considerarse irrelevantes se transforman en
relevantes al ser consideradas en su conjunto. Aclara en este sentido la AP de Lleida (SAP, Civil
sección 2 del 08 de Mayo del 2013 ( ROJ: SAP L 389/2013) Recurso: 246/2012 | Ponente: ALBERT
MONTELL GARCIA) que la irregularidad a que se refiere el art. 164-2-1º no es aquélla que resulte
relevante o determinante para la causación o agravación del estado de insolvencia, sino que la
relevancia conecta directamente con la irregularidad de que se trata y con la posibilidad (o más
bien la imposibilidad) de comprender a través de la contabilidad la verdadera situación patrimonial
o financiera de la empresa.
• 14º. Con cita de la jurisprudencia del Tribunal Supremo la última sentencia citada recoge la
distinción entre error e irregularidad: La STS de 16 de enero de 2012 insiste en la misma idea
sosteniendo el allí recurrente que "...en técnica contable una cosa es el error y otra distinta la
irregularidad, pues, para la existencia de aquél, a diferencia de lo que sucede para la de éste, no es
precisa la intención de ocultar el dato". El TS responde que con esta argumentación, negando la
intencionalidad, rechaza la irregularidad, y , al fin, la calificación del concurso como culpable,
recogiendo a continuación la doctrina jurisprudencial sentada en las SSTS de 6-10 y 17-11-2011 , de
las que resulta que la ejecución de las conductas que se describen en el art. 164-2 determina
aquella calificación por sí sola, esto es, aunque no haya generado o agravado el estado de
insolvencia, tratándose de tipos de "simple actividad", indicando además esta STS de 16-1-2012
que: "...Hay que añadir a ello que, por razón de la trascendencia que se atribuye a la función
informativa de las declaraciones de conocimiento en qué consisten las cuentas anuales, la
distinción entre error e irregularidad en que, por razón de la intencionalidad, se basa el primero de
los motivos del recurso de casación, carece de significación para la comisión del comportamiento
que se describe en la norma del ordinal primero del apartado 1 del artículo 164 de la Ley 22/2.003,
de 9 de julio , dado que la realización del tipo que en ella se describe no exige que el sujeto agente
tenga consciencia del alcance y significación jurídica de su acción u omisión ni que el resultado del
comportamiento sea querido por él. Lo que no significa que las consecuencias de la calificación
deban ser necesariamente ajenas al reproche que merecen las manifestaciones culposas o dolosas
de la irregularidad.
• 15º. Muy interesante por su interpretación sistemática es la SAP de Cuenca (SAP, Civil sección 1 del 23 de Abril del
2013 ( ROJ: SAP CU 250/2013) Recurso: 94/2013 | Ponente: RAMON RUIZ JIMENEZ): El art. 164.2.1º, a que se ha
hecho referencia anteriormente, impone la directa calificación de concurso culpable ante la concurrencia de
ciertas irregularidades contables, siempre y cuando existiese deber legal de llevar tal contabilidad, de acuerdo con
lo dispuesto en los arts. 25 y ss. Cco . No obstante, dentro de la existencia tipificada de irregularidad contable no
basta cualquier defecto en la llevanza de contabilidad, sino un incumplimiento sustancial de tal deber. El concepto
normativo de la sustancialidad en la irregularidad ha de ser colmado mediante una interpretación sistemática, en
primer lugar, poniendo en relación tal requisito con los comportamientos sancionados en el art. 165.3º LC , no
formulación de cuentas anuales, no auditación o no depósito de las mismas en el Registro Mercantil, supuesto
legalmente considerados de menor gravedad, por el efecto jurídico a ello aparejado, que los recogidos en el
precepto comentado. En segundo lugar, se ha emplear un criterio interpretativo finalista, atendiendo a la finalidad
de protección de la norma que impone el deber de llevar ordenada contabilidad, consistente en obtener según el
art. 34.2 Cco " una imagen clara y fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa".
Cuando se altere relevantemente esa claridad y fidelidad en la imagen del curso de la actividad económica
empresarial se estará incurriendo tipo normativamente previsto en el art. 164.2.1º LC . En tercer lugar, puede
emplearse un último criterio de interpretación como es literal, para arrojar luz sobre el alcance de la
sustancialidad que ha de exigirse al comportamiento del concursada para la calificación, siguiendo la línea de
gravedad marcada por los tres comportamientos específicamente allí tipificados, como son la directa y total
omisión de toda contabilidad, la llevanza de una doble contabilidad, una real y otra oficial ficticia, y en tercer
término, la irregularidad relevante que habrá, cuando menos, de poderse equiparar en cuanto a su antijuridicidad
a los anteriores comportamientos. Finalmente, para graduar aquel concepto normativo, se ha de poner en
conexión la gravedad exigible en los hechos para su apreciación con la relevancia del efecto jurídico que genera tal
apreciación, como es la inmediata calificación del concurso como culpable, con presunción iuris et iure de la
causalidad en la insolvencia y de la culpa grave o dolo en el comportamiento. El alcance de tal efecto jurídico, el
cual además es indefectible, ya que el art. 164.2 señala que concurrirá "en todo caso", ha de quedar cubierto por
la gravedad que se requiera para colmar el requisito de la esencialidad en la irregularidad contable, esta
presupone la existencia de una irregularidad contable clara, de acuerdo con las normas de contabilidad, y que
además sea relevante en cuanto impida una comprensión cabal de la situación patrimonial o financiera de la
sociedad. SAP Madrid, sección 28,7-5-2012, y la que SAP Barcelona Sec 15 29 marzo de 2007 ).
• 16º. La STS de 16 de enero de 2012 afirma que
"la intención de ocultar el dato contable
carece de la trascendencia que en el motivo se
le atribuye al fin de poder afirmar la
irregularidad contable y de entender cumplido
el supuesto del artículo 164, apartado 2,
ordinal primero, de la Ley 22/2.003 ".
• 17º. Incluso en supuestos de convenio y al
margen de la calificación fortuita que pudiera
haber sido realizada, la SAP de Asturias (SAP, Civil
sección 1 del 11 de Marzo del 2013 ( ROJ: SAP O
896/2013) Recurso: 243/2012 | Ponente: JAVIER
ANTON GUIJARRO)recoge que ello queda fuera
de ese margen temporal puesto que cuando se
aprueba el convenio con posterioridad no se
reflejó en las cuentas la rectificación de la
irregularidad. Es por ello que en la reapertura de
la calificación entra en dicha calificación culpable.
• 18º. El concepto abstracto es acogido por la AP de Cáceres (SAP, Civil sección 1 del
13 de Junio del 2012 ( ROJ: SAP CC 549/2012) Recurso: 196/2012 | Ponente: LUIS
URELIO SANZ ACOSTA ) introduciendo el elemento de la menor o mayor falta de
información que dicha irregularidad conlleve. Señala que el supuesto relativo a
que el deudor hubiera cometido irregularidad para la comprensión de su situación
patrimonial o financiera, debe analizarse desde la perspectiva de la falta de
información que provocan esas irregularidades contables. La expresión "
irregularidad relevante " incluye los supuestos de falsedad pero también de error
por falta de diligencia, siempre que supongan hurtar la información que debiera
conocerse de la contabilidad y, además, que tal irregularidad sea relevante, lo que
debe ser estudiado conforme al caso concreto, pero que naturalmente devendrá
de la mayor o menos falta de información derivada de esa irregularidad. La
jurisprudencia viene señalando, en efecto, que no basta la prueba de cualquier
irregularidad contable, sino que la misma tiene que ser clara y relevante. Así, la
sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona de 19 de marzo de 2007 señala
que esa irregularidad ha de ser tal " impida una comprensión cabal de la situación
patrimonial y financiera de la sociedad".
• 19º. La Sentencia de la AP de Málaga ( que confirma la de primera
instancia de de marzo de 2008 en el Juicio de Concurso (Apertura de
Sección) N.º 35.6/05 ) de SAP, Civil sección 6 del 13 de Septiembre del
2011 ( ROJ: SAP MA 2450/2011) Recurso: 1026/2008 | Ponente: MARIA
INMACULADA SUAREZ-BARCENA FLORENCIO , señala que la irregularidad
relevante conlleva un estado de desinformación sobre el estado financiero
y patrimonial de la concursada y que no se basa exclusivamente en la falta
de memoria en las cuentas de los años 2002, 2003 y 2004, que
ciertamente se hizo, como se colige del examen de la documental
aportada por la Administración Concursal , sino, también, en otra serie de
hechos acreditados , como el relativo a que las cuentas formuladas no
determinan la situación de pérdidas de la explotación, y se recogen en las
mismas como existencias en caja o efectivos que no existen. En el mismo
sentido de la referida Audiencia SAP, Civil sección 6 del 09 de Febrero del
2010 ( ROJ: SAP MA 320/2010) Recurso: 558/2009 | Ponente: MARIA
INMACULADA SUAREZ-BARCENA FLORENCIO.
• 20º. Por último en este pequeño resumen de lo que hasta ahora han dicho los tribunales conviene
señalar que este juzgador ya se ha pronunciado al respecto y ha mantenido un criterio en relación a
la " irregularidad relevante .". En tal sentido SJM, Mercantil 1 del 13 de Febrero del 2009 (ROJ: SJM
MA 15/2009) Recurso: 455/2006 | Ponente: ENRIQUE SANJUAN MUÑOZ: La Ley Concursal , en el
desarrollo de dicho precepto toma en consideración este incumplimiento sustancial y matiza uno
de sus apartados al referirse a " irregularidad relevante para la comprensión de su situación
patrimonial o financiera". Circunstancia esta última que se motiva bien por el incumplimiento de
criterios técnicos o formales relevantes para dicha comprensión, por errores significativos o bien
porque no se atienda a la realidad económica de la operación encubriéndola bajo una apariencia
jurídica diferente que es la que se ha reflejado. Pero el precepto permite distinguir diferentes
posiciones en los diferentes casos. Partiendo de la obligación del empresario de llevanza de la
contabilidad que recoge el artículo 25.2 Cco (La contabilidad será llevada directamente por los
empresarios o por otras personas debidamente autorizadas, sin perjuicio de la responsabilidad de
aquéllos. Se presumirá concedida la autorización, salvo prueba en contrario) el primer apartado
(cuando el deudor incumpla sustancialmente esta obligación) conlleva un acto negligente del
empresario tanto por dolo como por culpa, incluso leve, y sin existencia de dolo o culpa y cuya
valoración "sustancial" no lo es en referencia o relación al grado de culpa sino al resultado de dicho
incumplimiento en relación a los fines que hemos referido más arriba. Bastará por tanto culpa leve
del empresario en el cumplimiento de la llevanza de su contabilidad para determinar que entramos
en el supuesto sin perjuicio de que el elemento subjetivo a valorar es la afectación sustancial del
incumplimiento de dicha obligación. En el mismo supuesto entraría la llevanza de doble
contabilidad que se incluye en el supuesto y que no exige el elemento culpa tampoco para
determinar dicha afectación. Es decir, si se incumple la obligación de llevanza de contabilidad o se
lleva doble o triple contabilidad es la sustancialidad de dicho incumplimiento, en el primer
supuesto, el que debe valorarse. Si es sustancial a los fines perseguidos por la contabilidad formal y
material entraría en el supuesto culpable. Diferente a este es el supuesto último en tanto a que el
deudor "hubiera cometido irregularidad relevante para la comprensión de su situación patrimonial
o financiera en la que llevara". La expresión verbal utilizada parece exigir cierto grado de culpa al
utilizar el verbo "cometer" en pretérito pluscuamperfecto del subjuntivo (que no de intencionalidad
-matizamos ahora). Deben quedar fuera de dichos supuestos los recogidos en el artículo 165.3º LC
en tanto a obligaciones de formulación de cuentas, sometimiento a auditoría o depósito en el
Registro por cuanto se construyen como presunción de dolo o culpa grave.
Justificación añadida para supuesto de
Responsabilidad concursal
• TRIBUNAL SUPREMO Sala de lo Civil Sentencia núm. 650/2016, 3 de noviembre
de 2016.
Para que se pueda pronunciar esa condena y, en su caso, identificar a los
administradores y la parte de la deuda a que alcanza, además de la concurrencia de
los condicionantes impuestos por el precepto, consistentes en que la formación o
reapertura de la sección de calificación ha de ser consecuencia del inicio de la fase de
liquidación, es necesario que el tribunal valore, conforme a criterios normativos y al
fin de fundamentar el reproche necesario, los distintos elementos subjetivos y
objetivos del comportamiento de cada uno de los administradores en relación con la
actuación que, imputada al órgano social con el que se identifican o del que forman
parte, había determinado la calificación del concurso como culpable, ya sea el
tipificado por el resultado en el apartado 1 del artículo 164 (haber causado o
agravado, con dolo o culpa grave, la insolvencia), ya el de mera actividad que describe
el apartado 2 del mismo artículo (haber omitido sustancialmente el deber de llevar
contabilidad, presentar con la solicitud documentos falsos, haber cometido
inexactitud grave en cualquiera de los documentos acompañados a la solicitud de
declaración de concurso, haber quedado incumplido el convenio por causa imputable
al concursado, etc.).
RESPONSABILIDAD AC.
• SUPUESTOS 36 LC:
Los administradores concursales y los auxiliares delegados responderán frente al deudor y frente a los
acreedores de los daños y perjuicios causados a la masa por los actos y omisiones contrarios a la ley o
realizados sin la debida diligencia.
2. Los administradores concursales responderán solidariamente con los auxiliares delegados de los
actos y omisiones lesivos de éstos, salvo que prueben haber empleado toda la diligencia debida para
prevenir o evitar el daño.
3. La acción de responsabilidad se sustanciará por los trámites del juicio declarativo que corresponda,
ante el juez que conozca o haya conocido del concurso.
4. La acción de responsabilidad prescribirá a los cuatro años, contados desde que el actor tuvo
conocimiento del daño o perjuicio por el que reclama y, en todo caso, desde que los administradores
concursales o los auxiliares delegados hubieran cesado en su cargo.
5. Si la sentencia contuviera condena a indemnizar daños y perjuicios, el acreedor que hubiera
ejercitado la acción en interés de la masa tendrá derecho a que, con cargo a la cantidad percibida, se le
reembolsen los gastos necesarios que hubiera soportado.
6. Quedan a salvo las acciones de responsabilidad que puedan corresponder al deudor, a los acreedores
o a terceros por actos u omisiones de los administradores concursales y auxiliares delegados que
lesionen directamente los intereses de aquellos.
• SUPUESTOS RESPONSABILIDAD SOCIETARIA EN SUPUESTOS DE SUSTITUCIÓN O LIQUIDACIÓN
CONCURSAL.
Resolución de 6 de julio de 2015, de la Dirección General de los Registros y del Notariado,
Artículo 33 LC.
CRITERIO AET-MÁLAGA
• EN RESPONSABILIDAD.
• Conflicto de jurisdicción 1/2016, suscitado
entre la Delegación Central de Grandes
Contribuyentes de la Agencia Tributaria y el
Juzgado de lo Mercantil nº 1 de Málaga/1 Bis.
– https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-
A-2016-5181
CONFLICTO DE COMPETENCIA OBJETIVA. Acción de responsabilidad de administradores concursales. Juzgado del
concurso y Juzgado de lo Mercantil. Se atribuye la competencia al Juzgado que conoce del concurso.

• Auto: COMPETENCIAS Fecha Auto: 14/09/2016 Recurso


Num.: 365/2016 Fallo/Acuerdo: Auto Resolviendo
Competencia Ponente Excmo. Sr. D.: Antonio Salas
Carceller
• Es cierto que el artículo 36.6 LC no indica el órgano ante el
que ha de interponerse dicha acción. Pero esta sala
considera que, indudablemente, quien está en mejores
condiciones para examinar la actuación de la
administración concursal es el juez del concurso. Esto se
refleja en todas las actuaciones relativas a la separación del
cargo- artículo 37 LC-, censura de la rendición de cuentas-
181 LC- y en el ejercicio de acciones de responsabilidad
cuando la beneficiaria de las mismas es la masa concursal-
36.3 LC-.
• De lo dicho anteriormente y en atención a los términos en los que se ha planteado
el conflicto, se colige que en el estado en el que se encontrada el proceso
concursal la AEAT no podía iniciar el procedimiento de declaración de
responsabilidad solidaria contra los administradores concursales, ni declarar la
misma, sino que era preciso aplicar y culminar el trámite especial del art. 176.bis
de la LC previamente dentro del proceso concursal, cuya competencia ostenta el
juez del concurso;
• ahora bien, en modo alguno ello significa que deba atenderse al requerimiento
interesado por el Juzgado de lo Mercantil n.º 1 de Málaga «reclamando la
jurisdicción para conocer de los procedimientos R 2895215221665, R
2895215221663 y R 2895215221667 dirigidos frente a la Administración Concursal
de la sociedad en concurso Auriga Crown Car Hire,S.L., pues como ya se puso de
manifiesto en la sentencia de este Tribunal de 9 de abril de 2013, y ahora
reiteramos, la acción prevista en el art. 36.6 de la LC, excluye la competencia del
juez del concurso. Por tanto, es la AEAT, autotutela administrativa, la que ostenta la
compentencia para el ejercicio de la acción del art. 36.6 de la LC, en este caso, para
la tramitación del procedimiento de declaración de responsabilidad solidaria de los
administradores concursales,
CONCLUSIONES.
• COMPLEJIDAD.
• SUBSISTEN LAS OBLIGACIONES SALVO LO
MODIFICADO POR LA LC.
• DISTINCIÓN EMPRESA EN FUNCIONAMIENTO
Y EN NO FUNCIONAMIENTO.

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