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El Legendario

Escultor de la
Luz Lunar
Volumen 1
Geomchi Spanish
Nombre original: The Legendary Moonlight Sculptor,

Autor: Nam Hee Seong

Publicado: 15 Enero 2007


LMS es sin duda una de las mejores novelas ligeras que he tenido
el gusto de poder disfrutar. Es un placer traer esta novela cada
semana con la mejor calidad que podemos ofrecer. Quiero hacer
un agradecimiento especial a XeniaXen por ayudarnos a sacar
esta recopilación. A Luz que siempre fue una gran fan de esta
novela. A Yukine por su magia con el photoshop. A Dani y Tars
por su continuo esfuerzo y dedicación. Y a todos los Geomchis
fans de Weed y que, como nosotros, aman esta novela. Muchas
gracias a todos. (Adam)

Quisiera gradecer a Sable el haberme recomendado esta novela.


Tambíen a los ávidos lectores por sus múltiples comentarios. Cada
uno de ellos vale más que una cerveza fresquita. (DaniR)

Agradezco a mi esposa, que el día que se cabree por gastar mi


tiempo traduciendo esto os quedáis sin traductor. ¡Te quiero
cariño! (Tars)
n hombre que fue abandonado por el mundo, un
hombre esclavo del dinero, un hombre conocido
como ‘El Legendario Dios de la Guerra’ en el
popular MMORPG Continent Of Magic.

Habiendo llegado a la mayoría de edad decide alejarse


del juego, pero la idea de conseguir ganar un poco de
dinero por todo el tiempo y esfuerzo invertidos en él,
desencadena algo que jamas podría haber imaginado...

A través de una serie de coincidencias, su legendario avatar


se vende por 3.090.000.000 wons, trayéndole gran felicidad,
solo para hundirlo seguidamente en la desesperación por la
pérdida de casi la totalidad del dinero debido a los despiadados
prestamistas. Con la reciente revelación de ganar dinero
a través de los juegos, se eleva desde el abismo lleno de una
gran resolución y se encamina a la nueva era de los juegos,
encabezado por el primer MMORPG de Realidad Virtual,
Royal Road.

Esta es la leyenda de Lee Hyun en su camino para convertirse


en Emperador, con el corazón lleno de amor por su familia, el
deseo sin límite por el dinero, su mentalidad sorprendente, y
un cuerpo forjado con trabajo duro y diligente.
Índice
Volumen 1
Capítulo 1: El nacimiento de un Jugador Oscuro (p. 6)

Capítulo 2: Aparece la bestia salvaje (p. 32)

Capítulo 3: La petición del Instructor (p. 54)

Capítulo 4: Weed, el Terrible (p. 74)

Capítulo 5: La chica que perdió el habla (p. 118)

Capítulo 6: Durante una barbacoa (p. 143)

Capítulo 7: Maestro de batallas (p. 170)

Capítulo 8: La profesión maldita (p. 202)

Capítulo 9: La ciudad del cielo (p. 230)

Capítulo 10: El papel de Weed en las fuerzas de castigo (p. 258)


TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 1
El nacimiento de un
Jugador Oscuro

Imagina una vida noble, elegante y pintoresca en un entorno de


máxima pobreza, de las que solo se ven en las telenovelas. Sin importar
lo pobre que fuera esa persona, que nunca dejase de mostrar un amor
incondicional hacia el prójimo, e incluso llegando a compartir un pedazo
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de pan con una sonrisa.

Si alguien le asegurase a Lee Hyun que semejante ilusión podía ser


cierta, Lee Hyun le daría una paliza, y después, volvería a golpearlo de
nuevo para rematarlo.
u

La vida era cruel con los pobres. La Ley de Bienestar Laboral aprobada
por el Parlamento hacía ilegal el empleo infantil. Pero, por muy ilegal
que fuese, Lee Hyun había aceptado todo tipo de trabajos inimaginables.

Desde los 14 años empezó a coser en una fábrica. El sueldo era realmente
miserable, pero al menos podía comer gratis. Pero al estar en un sótano
con tan solo un par de ventiladores, su salud quedó gravemente tocada.
Y el daño pulmonar solo le trajo más gastos médicos.

Después fue un trabajo en una gasolinera, y ocasionalmente, él incluso


llegó a tirar de un carrito de mano con el que recogía y vendía productos
reciclados.

Pero sin importar que tan duro trabajase, el dinero que quedaba en su
bolsillo era una miseria. Al ser menor, estaba obligado a trabajar de
forma ilegal. Y sus jefes se aprovechaban de esto para explotarle sin
piedad.

Siguió con esa vida de explotación hasta los veinte años. Gracias a
eso, Lee Hyun conocía mejor que nadie el valor del dinero. Pero ahora
las cosas iban a cambiar. Por fin era considerado un adulto, y había
obtenido el carné que le permitiría trabajar legalmente.

“Tengo que trabajar hasta que mi cuerpo se venga abajo” —dijo,


guardándose el nuevo carné en la cartera—. “Seguramente pueda tener
3 trabajos a la vez.”

Sus padres habían muerto cuando él aún era pequeño, y ahora su


hermana y su abuela eran su única familia.

‘Muy bien, a partir de ahora, vamos a ser ricos.’


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Con esa promesa, regresó a su casa.

“¿Acabas de llegar?”

Su abuela estaba tumbada en la cama, acurrucada bajo la manta. Tras


caerse por las escaleras unos días antes, se dislocó la cadera, quedando
u

incapacitada para trabajar.

Aunque se tomaba sus medicamentos, con los problemas económicos


que sufrían no podía recibir un buen tratamiento en el hospital, así que
solo podía descansar en casa. Y al no recibir un tratamiento, cada noche
gemía de dolor.

Cada vez que entraba en casa, Lee Hyun se sentía angustiado. Era
un hogar sin vida, con una hermana pequeña distante y una abuela
anciana. Ser consciente de ello, seguramente, hacía que se sintiese aún
más incómodo en su propia casa.

“¿Y Hayan?”

“No lo sé. Salió y aún no ha vuelto. Tal vez esté por ahí con malas
compañías, no estoy segura.”
Lee Hayan era su hermana pequeña. Últimamente no la veía mucho.

“Todo irá bien. ¿Qué podría pasarle?”

“Eres su único hermano. Deberías cuidar mejor de ella.”

“Tienes razón” —y, sonriendo sin ganas, Hyun se fue a su cuarto.

Aunque se viese obligado a trabajos físicos o a conducir un taxi, quería


mandar a su hermana a la universidad. Llevaba un tiempo descarriada
del buen camino pero, a diferencia de él, era alegre e inteligente. Él
creía que en la universidad hallaría un buen marido y que podría tener
una buena vida. También quería pagar a su buena y anciana abuela por
todos los sacrificios con los que les había criado.

‘Bueno, mañana a buscar trabajo. Seguramente tendré una entrevista...’


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Rodeado de ruidos, Lee Hyun encendió el ordenador. El viejo equipo


empezó a funcionar entre zumbidos. En cuanto tuvo acceso a internet,
como de costumbre, accedió a un juego. El Continent of Magic. Un
juego clásico de hacía más de veinte años. Un juego online que en su
momento tuvo una legión de seguidores en toda la República de Corea.
u

El juego se mantuvo en la cima hasta hacía tan solo tres años. El viejo
equipo de Lee Hyun, ensamblado con partes encontradas aquí y allá
no soportaba casi ningún juego. Salvo Continent of Magic, ningún otro
juego funcionaba correctamente.

Era el primer juego que había probado pero, sólo mientras jugaba,
podía tener una pequeña sensación de placer.

Su estilo de juego era muy peculiar. No se asociaba con los demás, sino
que se pasaba el día cazando. Tras matar monstruos y subir de nivel, se
desplazaba a zonas de caza más complicadas. Nunca se involucraba en
asedios ni en guerras de clanes.

Disfrutaba del juego subiendo las habilidades de su personaje y


mejorando su equipamiento gradualmente. En una ocasión, estuvo
cazando durante doscientas horas seguidas sin dormir. No era raro
verlo esforzándose todo un mes para subir un nivel, o para derrotar a
un determinado monstruo.

Otros podían preguntarse qué tenía de divertido, pero le encantaba


ver crecer a su personaje y, cuando podía derrotar a monstruos antes
intocables, su placer era inmenso.

En poco tiempo había alcanzado el nivel máximo, el estado definitivo


en el que ya no podía seguir creciendo.

Había sido el primero y el único en tener ese récord en toda la historia


del Continent of Magic. Para cuando se dio cuenta, nadie podía rivalizar
contra la supremacía de su personaje. En las zonas de caza en que
los grupos tenían problemas, él acababa en solitario con todos los
monstruos.
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Tras alcanzar el máximo nivel, derrotó a todos los enemigos finales,


incluidos los Dragones.

Así que Lee Hyun había perdido el interés. Hoy en día, con todos los
avances tecnológicos, el objetivo de los juegos era introducirse en el
u

sistema de Realidad Virtual.

Entre ellos se encontraba uno llamado Royal Road, que estaba


considerado como el máximo exponente de los juegos de Realidad
Virtual. Contando con un mundo completamente implementado, el
juego contenía miles de razas y millones de usuarios. Miles y miles
de trabajos estaban disponibles, y contaba con cientos de miles de
habilidades.

Podías disfrutar de aventuras a tu medida o, incluso, irte a pescar con


los amigos durante días… siempre que no te cruzases con un tifón en el
camino, claro.

La absoluta libertad era increíble, pero lo más impresionante de todo


era el sistema de juego. Royal Road tenía la reputación de generar la
diversión definitiva que cualquier ser humano podría esperar de un
juego.

‘Bueno, para mí todo esto no son más que castillos en el aire.’

¿Qué podía esperar Lee Hyun con un equipo que empezaba a ralentizarse
al cargar una página web medio decente?

Con lo popular que era el juego, instalar el equipo que habilitaba la


Realidad Virtual costaba más de diez millones de wons. De tener tal
cantidad de dinero, iría destinado directamente a los gastos médicos de
su abuela, o a la matrícula de la universidad para su hermana. Y ahora,
para empezar a ganar dinero lo más diligentemente posible, el juego
tenía que terminar.
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¿Está seguro de que desea eliminar su cuenta?

Sí / No
u

Lee Hyun puso el cursor del mouse sobre el ‘Sí’. En ese momento, con
un simple click del ratón, el personaje en que había trabajado con tanto
esmero desaparecería para siempre. En el momento en que empezó a
doblar el dedo, se le ocurrió una idea.

‘¿Podría vender mi personaje por dinero real? Creo que se conoce como
vender la cuenta.’

Recordaba haber leído en un periódico hacía tiempo que la compraventa


de personajes era algo habitual. Y eso significaba dinero. Y ya que él
iba a eliminar la cuenta de todos modos, bien podía intentar vendérsela
a otra persona.

Empezó a buscar por internet una página de compraventa de personajes.


Con una sola búsqueda dio con docenas de sitios y, entre ellas, escogió la
que tenía un mayor volumen de ventas.
‘Así que muestro aquí mi personaje con un precio… ¿y ya está?’

Lee Hyun subió algunas imágenes de su personaje.

Personaje de Continent of Magic con el máximo nivel. Incluye


el mejor equipamiento concedido por los Dragones, valorado en
unos treinta mil millones de marcos.

Decidió iniciar la subasta con el precio inicial de cincuenta mil wons.


Temía que nadie ofreciese si ponía un precio inicial demasiado alto.

El límite de la subasta era de veinticuatro horas.


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Era ilógico esperar mucho tiempo por una gran suma. Y para conseguir
un trabajo necesitaba urgentemente un traje decente, así que tenía
prisa por lograr el dinero.

Normalmente, podía comparar los personajes y objetos de otros, pero


los contenidos de los demás solo podían ser vistos por miembros de pago
u

de la página, algo a lo que Weed no tenía acceso.

Terminó de hacer el anuncio y se fue a dormir. Planeaba levantarse


temprano al día siguiente para ir de inmediato a la oficina de empleo.

Ni una hora después de poner la subasta, los habitantes del ciberespacio


empezaron a calentar la red.

uuu

Al principio, nadie creía en el contenido del anuncio. Era bien sabido


que la última actualización de Continent of Magic había aumentado
notablemente los niveles máximos disponibles.

El nuevo nivel máximo se había puesto en 200.

En todo el servidor nadie había alcanzado aún ese nivel, seguramente


porque era algo imposible para cualquier ser humano.

Y, de pronto, aparecía una subasta en la que se vendía un personaje con


ese mismo nivel.

Este tipo nos toma por tontos.


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¿Qué clase de tonto se entretiene con estas estupideces?

Esto lo han hecho tantas veces que ya no tiene ni gracia.


u

Había muchos comentarios como esos. Algunos aconsejaban que nadie


picase, y otros agradecían el buen rato de risas que habían pasado con
la noticia.

Desde principios del siglo XXI, las estafas por internet ya eran algo
habitual y, por eso, todo el mundo pensó que no era más que otro caso
de publicidad engañosa.

No… Es imposible.
No podría ser verdad.

Los habituales de la red intentaron ignorar la subasta. Pero algunos no


pudieron contener su curiosidad y volvieron a examinar el hilo.

Los foros de subastas exigen que siempre se incluyan capturas de pantalla


del personaje a la venta. Abrieron todos los archivos adjuntos al mensaje.
La información del personaje era impactante. Algunos atributos estaban
al máximo y los elementos equipados eran, simplemente, increíbles.

¿Dónde diablos ha conseguido esas armas?


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¿El conjunto completo de la Armadura de Dragón Rojo y el


escudo de Columna Vertebral del Dragón Rojo? Guau...
u

Dice que se lo otorgó el Dios Negro del Valor.

La gente estaba bastante impresionada. Por alguna razón, no parecía


un simple engaño. Para falsificar esas imágenes hacía falta un gran
esfuerzo.

Este tipo se ha pasado un montón de tiempo con esto…


La interfaz es la del Continent of Magic, pero… ¿de qué
juego ha importado ese equipamiento?

Entre los visitantes el hilo, había algunos diseñadores gráficos. Estos


examinaron la foto con mucho cuidado.

No importa lo bien manipulada que esté la imagen, una


falsificación siempre tiene restos microscópicos. Aunque
para una persona normal parezca real, si se aplica la
última tecnología siempre se pueden encontrar las partes
modificadas.
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Los diseñadores ampliaron diez mil veces la imagen, siguiendo los rastros
de píxeles, estudiando cada sombra y hasta escaneando los archivos de
las imágenes en 3D para demostrar que era falsa. Pero fue en vano. Al
u

final se vieron forzados a reconocerlo.

Las imágenes son reales.

Como diseñador jefe de la compañía LK, garantizo que esta


imagen no ha sido alterada en modo alguno.

En contra de las expectativas, los diseñadores gráficos empezaron a


confirmar la autenticidad de las imágenes.
Entonces aparecieron los verdaderos usuarios de Continent of Magic.
En cuanto vieron las imágenes, empezaron a gritar sorprendidos. No se
lo habían esperado.

Es verdad. Se trata del personaje conocido como Weed.


Es increíblemente famoso.

El equipamiento es suyo, pero no sabía que había alcanzado


el máximo nivel. Impresionante.
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Lee Hyun siempre jugaba solo, evitando intencionalmente las zonas


de caza con mucha gente. Nunca participaba en asedios y, por lo
general, ignoraba las disputas menores. Pero los rumores sobre él eran
interminables.

Había derrotado a krakens y a los Dragones, los cuales se consideraban


u

invencibles, y barrido los territorios de caza de mayor dificultad en


solitario. Que no se asociase con los demás no significaba que no fuese
reconocido. Entre el resto de usuarios era una leyenda viviente. Sólo él
mismo ignoraba que era una estrella.

Entonces, ¿ese equipamiento es real?

En este caso, esto es una ganga…

El precio inicial de la subasta era de solo cincuenta mil wons. Ignorando


tanto el valor del personaje como su equipamiento, sólo su posesión
hacía que el precio fuese exorbitantemente bajo. La gente se apresuró a
hacer sus ofertas. Pasó rápidamente de cincuenta a trescientos mil y, de
forma inmediata, a setecientos mil wons. Al cabo de una hora superaba
el millón de wons.

Ya que ese era el valor de la venta de una sola de las piezas equipadas,
la gente siguió pujando sin miedo. Su valor empezó a dispararse. En
ese momento, algunos empezaron a echarse atrás, al darse cuenta con
impotencia de hasta dónde podía llegar el precio final.

Aunque el número de jugadores de Continent of Magic había decrecido


con el tiempo, tras la integración de todos los servidores en uno y hacerse
gratuito, aún retenía un buen número de usuarios.

Dichos usuarios eran los culpables de haber aumentado la subasta en


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sus primeras fases y, a continuación, fueron los administrativos más


acaudalados los que siguieron aumentando el precio.

Al principio, cuando se lanzó el juego Continent of Magic, mantuvo en


vilo a todo el mundo en la República de Corea durante toda la noche. El
personaje de máximo nivel del juego. Poseer algo tan importante tenía
u

tanto valor como para querer enseñárselo a los demás.

El más astuto de los administrativos llamó rápidamente a su jefe, que


era de una edad similar a la suya.

- ¿Director?

- ¿Por qué me llamas a medianoche? ¿Es que quieres que te despida?

- Eh… ahm… bueno… Director, ¿no era usted un jugador de Continent


of Magic hace tiempo?

- Sí. ¿Por?

- Están subastando un personaje con el máximo nivel de Continent of


Magic. Pensé que podría estar interesado…
- ¡¿Qué?! ¡¿Estás hablando de Weed?!

- Sí. Veo que lo conoce. Tiene nivel 200. Y los atributos y el equipamiento
están mejorados al máximo —continuó dándole más detalles.

- Ahora vas a ofertar treinta millones de wons de tu bolsillo. Yo voy a


conectarme de inmediato para comprobarlo; mientras, intenta poner la
mayor oferta.

Actualmente, las personas en las posiciones claves de las compañías eran


de una generación que había jugado a juegos online en su juventud. Su
entrada en la subasta aumentó una vez más el ritmo de las ofertas.

En los principales portales y las webs relacionadas con videojuegos,


el tema del momento era esa subasta. Mucha gente empezó a buscar
información, y la búsqueda de la palabra ranking se disparó por las
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nubes. Fue entonces cuando comenzó la verdadera subasta.

uuu
u

Y, mientras tanto, Lee Hyun estaba profundamente dormido, sin la


más mínima idea de los acontecimientos.

‘Trabajo duro… cincuenta mil wons diarios. Lavar platos en un restaurante,


treinta mil wons. Para cenar, sobras de un jamón…’

Él estaba ocupado ajustando el plan del día siguiente mientras dormía.

uuu
Con la atención de todo el mundo centrada en un solo personaje, el
precio de la subasta subía como la espuma.

Hasta entonces, nadie había sabido quién tenía el mayor nivel


en Continent of Magic, por lo que todos tenían el deseo de poseer y
demostrar la supremacía de un personaje eterno en el que una vez fuera
el juego más grande.

Finalmente el valor de la subasta superó los cien millones de wons.

En ese momento, la posesión del personaje superaba tanto el valor de


mercado de las posesiones individuales y como de todo el equipamiento.
Algunas personas, lamentándose de su falta de liquidez, abandonaron
la subasta.
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Creo que quien está vendiendo este personaje no es más que


un bicho raro.
u

¿Cómo puede poner un periodo tan corto al subastar un


avatar tan importante?

¿Tan seguro estaba de conseguir el máximo precio posible?

Así se quejaban los que iban abandonando la subasta. Rápidamente el


número de comentarios rebasó los novecientos.

Las ofertas se renovaron automáticamente unas cuantas veces y, cuando


ésta superó los trescientos millones de wons, se sumaron a la subasta un
buen número de empresas.
Pese a ser una simple subasta, estaba claro que no era algo que se iba
dirimir sin disputas. Si se cerraba con una cifra descomunal, muchísima
gente terminaría enterándose por las noticias o por los rumores. Los
efectos publicitarios serían formidables.

El mero hecho de anunciarse en el foro de subastas costaba un montón


de dinero. Además, después de invertir dolorosamente el dinero para
hacer dicho anuncio, la gente ni se molestaba en mirarlo dos veces. Sin
embargo, ¿qué mejor había que continuas noticias sobre el personaje
del nivel más alto siendo vendido por una pequeña fortuna? El interés
y la atención de la gente se concentraba.

Los departamentos de relaciones públicas de cada empresa estudiaron


esta posibilidad. Los medios digitales aumentaron la competición y todas
las cadenas de comunicación querían poseer el personaje. El precio no
era un problema. Organizando unos reportajes centrados en un juego
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que había sido tan famoso anteriormente y luego presentando al mejor


personaje en cuestión, aumentarían notablemente la confiabilidad y la
imagen de la emisora.

La fiera competición disparó una vez más los precios, y el aumento en el


número de visitas hizo que los dueños de la página de subastas sonriesen
satisfechos.
u

Por fin terminó la subasta.

Cinco empresas de videojuegos se habían enfrentado entre sí pero,


alzándose sobre las demás, quien había hecho la mejor oferta y había
ganado la subasta fue CTS Media. Ésta se encontraba en plena expansión,
lo que la hacía resultar muy interesante. Mediante la secretaria del
presidente, la oferta ganadora fue hecha y notificada justo antes del
final del plazo.

uuu
- Hola.

Una llamada de teléfono despertó a Lee Hyun a primera hora de la


mañana.

El trabajo en una constructora del día anterior le había dejado exhausto


y había caído rendido en la cama. Solo había ganado treinta mil wons.
Era menos de la media porque le habían echado por incompetente.

- Hola.

Para su sorpresa, la voz al otro lado de la línea era una hermosa voz
femenina.

- Ehm… creo que ha llamado al número equivocado.


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Lee Hyun, convencido en que nadie en su sano juicio llamaría a su casa,


intentó colgar. Pero…

- Usted ha intentado vender su cuenta a través de internet, ¿verdad?

- Así es.
u

- Le llamo desde la compañía CTS Media. Soy Yoon Nahee, la secretaria


del presidente de nuestra compañía. Hemos ingresado la suma de la
oferta final de la subasta en su cuenta, puede confirmarlo en la web de
subastas, y le rogamos que contacte con nosotros lo antes posible.

- ¿Qué? Un momento… ¿ha habido una oferta ganadora?

- Ajá, así es. Si me permite la pregunta, ¿aún no lo ha comprobado?

- No… estaba un poco ocupado…

Se trataba de Yoon Nahee de CTS Media. La secretaria del presidente


de la compañía, encargada incluso de los recursos financieros, la cual
no era una mujer corriente. A parte de dominar ocho idiomas, era
alabada por todos los que la rodeaban. Pero el hecho de que Lee Hyun
no hubiese comprobado aún el resultado de la subasta, bastaba para
dejarla perpleja.

- ¿De cuánto ha sido la oferta final?

Lee Hyun se sentía incómodo. Esperaba que al menos fuesen doscientos


mil wons para poder pagar las facturas médicas, y por eso había
preguntado; pero la respuesta que oyó por el teléfono le dejó paralizado.

- Tres mil millones noventa mil wons.

Originalmente, el valor del personaje de Weed según los precios de


mercado, era de ciento cincuenta millones de wons. A día de hoy, con los
videojuegos en la cima de la popularidad, sólo su equipamiento podía
llegar a cien millones de wons pero, al ser un juego antiguo, el precio de
mercado se había reducido extremadamente.
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Pero varios factores, como el corto plazo de subasta, la rareza exclusiva


del equipo y su fama, habían hecho que el precio final rebasase los tres
mil millones de wons. La subasta en sí ya era un buen material para las
noticias, algo que era, exactamente, lo que CTS Media quería.
u

Aun así, Lee Hyun respondió con tono áspero.

- ¿Está bromeando conmigo?

- ¿Perdón?

- No puedo creer que me haya llamado para contarme una tontería


semejante. Voy a colgar ahora.

Tras colgar, Lee Hyun sonrió con amargura.

‘¿Cómo sabía ella del foro de subastas? ¿Y cómo obtuvo mi número de


teléfono para gastarme una broma?’

Lee Hyun no se creía nada de esto. Era demasiado absurdo.


Pero, en cuanto accedió al portal de subastas, la suya estaba en la
primera posición de la lista. Muchísima gente había estado comentando
en tiempo real, y la oferta final cuadraba con lo que le habían dicho por
teléfono: tres mil millones noventa mil wons.

Lee Hyun logró no desmayarse sólo por su severa tenacidad.

‘Si esto es un sueño, espero no despertarme nunca.’

Al día siguiente, confirmó que los más de tres mil millones de wons
habían sido efectivamente ingresados en su cuenta. Lee Hyun se
pellizcó en el brazo hasta que pudo ver sangre. ¡No era un sueño! Fue
corriendo a mostrarle a su abuela la libreta bancaria. Pero todavía no
estaba preparado para contarle toda la verdad.

“Abuela, he juntado algo de dinero.”


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“Sí, hijo, sí” —respondió su abuela sin mucho ánimo. Solo habían
pasado 3 días desde que le diesen el carné de trabajo. No podía haber
ganado mucho— “Buen trabajo Hyun.”

“No ha sido difícil, abuela” —dijo pasándole la libreta bancaria.


u

“¿Qué es esto?”

“Mira. Es el dinero que he ganado.”

Tras ver el contenido de la libreta, su abuela se frotó los ojos un par


de veces. La reacción tras ver la cifra inscrita en la última línea era de
desconcierto.

“Tú… ¿has robado? No… esta cantidad de dinero no se puede robar sin
más.”

“Lo que he hecho ha sido vender mi cuenta de juego.”

“¿Tu… cuenta?”
“Es… complicado… De todos modos, ese dinero lo he ganado
legalmente.”

“Entonces… de verdad…” — Su abuela, llena de una creciente emoción,


empezó a llorar—. “Hyun, ¿esto significa que podemos vivir como los
demás? ¿Que ya no tendremos que preocuparnos constantemente por
las facturas del agua y la luz?”

“Por supuesto, e incluso podremos tener nuestra propia casa.”

“Podrás volver al colegio… y Hayan podrá ir a la universidad. Ya no


tenemos que vivir envidiando lo que tienen los demás.”

Su abuela estaba conmovida hasta el punto de empezar a llorar


abiertamente. Y lo mismo le pasaba a Lee Hyun al recordar los amargos
momentos por los que había pasado.
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“Ahora podemos vivir felizmente todos juntos, abuela.”

“Sí, por supuesto.”

Tras los duros tiempos que habían pasado juntos, ambos estaban
u

mucho más animados. Unos días después compraron una casa nueva y
recibieron un buen tratamiento en el hospital. Además de los problemas
de cadera, su abuela tenía infinidad de molestias, y tuvo que ser ingresada
en el hospital. Su hermanita, Hayan, también estaba encantada por los
acontecimientos. Pero esta gran felicidad no duró mucho.

Los hombres de los trajes negros. Las personas a las que menos quería
ver aparecieron en el hospital.

Hombres de negro con zapatos recién comprados, literalmente


invadieron la habitación del hospital. Con sus cuerpos musculados, sólo
cinco de ellos bastaban para llenar la pequeña habitación del hospital.

El resto de los pacientes se asustaron, y con la ayuda de sus cuidadores


abandonaron rápidamente la zona. Sólo quedaban Lee Hyun, su abuela
y los hombres trajeados. Lee Hyun se alegró al ver que su hermana
no estaba allí al llegar este tipo de gente. Pero estos matones nunca
le habían traído buenas noticias. Y no es que esperase algo así en esta
ocasión.

“Lee Hyun, he oído que la suerte le ha sonreído a tu familia…” —dijo


un hombre rubio.

Lee Hyun respondió con rudeza.

“¿Y a ti qué te importa?”

“Tiempo atrás, tu padre nos pidió un préstamo, y hemos venido a


cobrarlo”

“¿A cobrarlo?”
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“Así es. Y ahora que tienes el dinero, supongo que no tendrás problemas
en pagarnos lo que se nos debe.”

Lee Hyun tragó saliva. Al morir sus padres, había heredado una deuda
de cien millones de wons. No habría habido problemas si hubiese
rechazado la herencia pero, por aquel entonces, Lee Hyun era muy
u

pequeño y desconocía las leyes. Además, su abuela, con la inmensa pena


de haber perdido a un hijo, no cumplimentó los formularios necesarios
para rechazar la herencia dentro de los tres meses legales, por lo que el
legado había pasado a los herederos.

De este modo, Lee Hyun había quedado endeudado con los prestamistas
por una cantidad de cien millones de wons. Sabía lo desalmados que
podían llegar a ser, pero ahora tenía un montón de dinero. No había
razones para estar asustado.

“Saldaré la deuda. ¿A cuánto asciende?”

¿Saldarla? Te quedas un poco corto. Bueno, tampoco es que sea un


problema. Al fin y al cabo, nos preocupamos por nuestros queridos
clientes. El dinero que tienes que entregarnos asciende a tres mil
millones de wons.”
Al oír la cifra, la cabeza de Lee Hyun palpitó con rabia.

“Eso es absurdo… Mi padre solo pidió prestados cien millones de wons.”

“Eh, han pasado ocho años desde entonces. Y con el tiempo, los intereses
se van acumulando.”

“Qué absurdo… Pienso llamar a la policía.”

“¿La policía? Piensa por un momento. ¿Crees que la policía se pondrá


de tu lado?”

“La policía es el escudo que protege a la gente.”

“Fua… Jajajaja… JAJAJAJAJA.”


Página 25 u

Los matones se mofaban de su comentario. Sobre todo el rubio que, al


oír una afirmación tan tajante, se llevó la mano a la frente y se tronchó
de risa a placer. El hombre que estaba en silencio tras él hasta ahora,
empezó a hablar. Teniendo en cuenta la atmósfera, parecía el líder.

“Explícale la situación al chico inmediatamente. No queremos


u

problemas innecesarios.”

“Sí, señor Hyung. Lo siento, chico, escúchame bien. Respetamos la ley.


Es un interés legítimo. Según nuestro contrato, el interés es del cincuenta
por ciento al año. ¿Te facilito las cuentas? El primer año asciende desde
cien a ciento cincuenta millones; el segundo a unos doscientos veinte,
el tercero a trecientos treinta, y el cuarto la cifra ronda los quinientos
millones.”

Al oír las cifras, Lee Hyun palideció. La deuda se había quintuplicado en


los primeros cuatro años. Ya habían pasado ocho años, así que rondaría
los dos mil quinientos millones de wons; aunque, siendo sinceros, habían
pasado unos cuantos meses más, por lo que exigir una deuda de tres mil
millones no era algo exagerado.

Lee Hyun, acosado por los miembros de la mafia, desconocía su deuda


exacta. Sin saberlo, había acumulado una deuda astronómica.

¡Era la bancarrota!

Otros, con una deuda tan grande, se declararían en quiebra. Tras una
bancarrota aún podrían contar con algunos miles de wons. Pero él ni
lo consideraba. Declararse en quiebra costaba dinero en papeleo y
consejeros legales. Sólo pagando el papeleo y las tarifas gubernamentales,
podías entrar en bancarrota.

Lee Hyun no podía permitirse una declaración de quiebra. De hecho, aun


teniendo el dinero, no creía que los avaros prestamistas le permitiesen
hacerlo sin más.

“Queremos tres mil millones de wons.”


Página 26 u

“No, ni hablar.”

“¿Ni hablar? Haz lo que quieras. Si no quieres pagar, vendremos a


cobrar mañana. Pero entonces tendrás que pagar un poco más pero…
oye, es tu decisión.”
u

Los hombres vestidos con trajes negros se mostraban confiados.


Confiados en su derecho, confiados en su poder. Además, Lee Hyun
sabía que dentro de lo posible era mejor pagar la deuda. Para empezar,
no tenía alternativa: habían venido sabiendo que tenía el dinero.

Los matones sonreían con malicia.

“Tu pobre abuelita está hospitalizada, pero la verdad es que parece que
está bastante cómoda. Al igual que tu hermanita, la del pasillo. Una
hermanita tan preciosa… estoy seguro que alcanzará una buena cifra si
subastamos su honra…”

“¡Ni se te ocurra ponerle la mano encima a Hayan!”

“Tranquilo. Todavía no hemos hecho nada… todavía. Sólo estamos


hablando, chaval. Pero si una familia de tres miembros fuera
hospitalizada a la vez… esa sería una imagen conmovedora.”

Lee Hyun no era capaz de seguir aguantando estas amenazas camufladas.


No podía hacer nada. Lo imprescindible era que estos hombres se fueran.
En los suburbios había visto el destino de aquellos que no habían podido
pagarles. Si había un pecado capital, era el de pedirle un préstamo a
esta gente.

Sin poder siquiera defenderse con la ley, Lee Hyun tuvo que entregar su
libreta bancaria. Los matones la cogieron y sacaron dos mil novecientos
millones de wons en efectivo en una bolsa, junto con un pagaré de cien
millones de wons que sus padres habían firmado ocho años antes. Desde
el principio, conocedores de toda la historia, habían venido preparados.

“Gracias, y perdón por las molestias.”


Página 27 u

Cuando los hombres empezaban a irse, Lee Hyun grito:

“¡ESPERAD!”

“¿Si, chico, qué es lo que quieres?”


u

“Algún día, os hare pagar por todo esto.”

“¿Perdón?”

“Creéis que ahora que habéis cobrado esto se ha terminado. Pero en el


futuro ajustaremos nuestras cuentas.”

Los hombres estaban a punto de empezar a reír otra vez. Pero al ver la
expresión en los ojos de Lee Hyun, la risa murió antes de empezar. Una
joven bestia salvaje. La crudeza de su mirada les provocó un escalofrío.

“Veo que todavía te quedan agallas. Estamos en la obligación de enseñar


a un chaval tan valiente como tú cómo funciona el mundo” —algunos
de los hombres se empezaron a subir las mangas. Pero Lee Hyun no
mostró ninguna señal de miedo, ni retrocedió.
“Ya basta. Hemos recogido el dinero, no hagan nada innecesario.”

“Pero…”

“¿Es que quieren montar una escena en un hospital?”

“Entiendo, señor Hyung.”

Los hombres salieron apresuradamente del cuarto.

“Y, chico…” —dijo el líder del grupo mirando a Lee Hyun— “Mi nombre
es Han Jinsup de Myongdong. ¿En serio crees que tu audacia funcionará
en un mundo tan corrupto como éste? Si crees que es injusto, consigue
reunir tres mil millones de wons en cinco años y búscame. Entonces te
obedeceré como acato las órdenes del señor Hyung.”
Página 28 u

Los matones se fueron. Y Lee Hyun se sentó en el suelo, sin poder hacer
nada. Al oír los llantos de Lee Hayan en el pasillo, su abuela suspiró sin
fuerzas.
u

uuu

Tras robarle un total de tres mil millones de wons, no le quedaban


fuerzas para hacer nada. Estaba completamente vacío por dentro. Pero,
tras estar tres días en esta situación, se levantó.

Había una esperanza, una posibilidad. Así que no podía sentarse y dudar.
La sombra de una sonrisa cruzó sus labios. Entre lágrimas, Lee Hyun
empezó a sonreír. Había sido sólo un momento, pero la experiencia de
poseer una gran suma de dinero le había mostrado un poco acerca de
cómo giraba el mundo.

‘Eso es. Si lo he logrado una vez, puedo conseguirlo de nuevo.’


Lee Hyun estaba ocupado. Le quedaban noventa millones de wons,
pero eso no significaba que pudiese disponer de ellos. Al estar firmado
el contrato de la nueva vivienda, para la compra tenía que reservar
cincuenta millones de wons. Podía cancelar el contrato, pero eso
supondría una penalización. Prefería morir a pagar dicha penalización.

En definitiva, ¡sólo contaba con cuarenta millones de wons!

Y todo debido al desplome del sector inmobiliario de principios del siglo


XXI.

uuu
Página 29 u

Con parte del dinero restante, Lee Hyun se registró en centros de artes
marciales que impartían aikido, kendo y taekwondo. Se impuso un
horario muy riguroso, llegando a asistir a seis centros cada día. Mientras
destrozaba su cuerpo en varios gimnasios, consiguió dominar las artes
marciales.
u

Los instructores le apodaban ‘La Bestia Salvaje’. Para aumentar su


fortaleza practicaba con la espada hasta el punto en que las manos le
sangraban.

¡Un juego de Realidad Virtual!

Al tratarse de un lugar en el que podías mover tu propio cuerpo,


significaba que podías hacer las mismas cosas que en la realidad.
Entonces, ¿no sería útil aprender artes marciales y estudiar un poco
más sobre el sistema de juego?

Por supuesto, que aprender artes marciales no era una ventaja


absoluta. Pero para ser más fuerte, incluso en el primer nivel, era mejor
aprenderlas.
Imagina poder ser al menos un diez por ciento más fuerte durante el
juego y los tremendos efectos que eso podía aportar. Ese era el motivo por
el que aprendía artes marciales durante el día y por la noche estudiaba
acerca de los juegos de Realidad Virtual. Qué juego tenía más usuarios,
cómo funcionaba el sistema… estudiaba todo a conciencia.

Hizo tablas y análisis sobre cada profesión, ciudad y habilidad y las


colgó en la pared de su habitación. Los informes ocupaban todo el
espacio disponible.

Un año. En ese tiempo, Lee Hyun aprendió artes marciales y aprendió


todo sobre los juegos de Realidad Virtual. Pero no había sido tan solo
un año de preparación, también lo había aprovechado para estudiar con
detenimiento el desarrollo de Royal Road.

El juego cumplía con todas las expectativas y, tal y como su nombre


Página 30 u

indicaba, su gran destino era ser el Emperador del continente. Contaba


con más de tres cuartas partes de la cuota de mercado de los videojuegos,
y más del noventa por ciento de los jugadores coreanos participaban
en el juego. Prácticamente, se podían programar los hechos relevantes.
Particularmente, durante las batallas entre diferentes reinos, se llegaba
a un punto abrumador de audiencia en toda la red.
u

El único juego del mundo en el que se podía conseguir fama, poder y


dinero. Royal Road era el resultado de un ingenioso sistema basado en
la Realidad Virtual.

‘Genial, todo va según el plan.’

La fría mirada de Lee Hyun estaba clavada en el monitor.

Ese día, había comprado por diez millones de wons la cápsula para
conectarse a Royal Road. Era lo bastante cara como para hacer que
le salieran las lágrimas, pero no dejó de convencerse de que era una
inversión. Había terminado con los preparativos. Era el momento de
empezar con el juego. Se sentía como un soldado a punto de entrar en
el campo de batalla.
¿Quiere conectarse a Royal Road?

Sí / No

Cuando apareció el mensaje, Lee Hyun no dudó en gritar.

“¡SÍ!”
Página 31 u
u
TRADUCCIÓN: TheHypnoticCat · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 2
Aparece la bestia salvaje

El escáner ocular del iris ha determinado que usted


es un usuario no registrado. ¿Quiere crear una
Página 32 u

nueva cuenta?

Sí / No

Cuando Lee Hyun se conectó a Royal Road, el primer sonido que llegó a
u

sus oídos fue una voz femenina.

Miró a su alrededor para ver quién le estaba hablando, pero no había


nadie más, estaba flotando en un espacio vacío dentro del universo.
Entonces se dio cuenta de que estaba en medio del proceso de activación
de una nueva cuenta.

“¡Sí!”

Seleccione el nombre de su perso…


“Weed.”

Weed. ‘Mala Hierba’, lo más humilde del reino vegetal. Para Lee Hyun,
eso sonaba lo más apropiado para él.

Seleccione su género: hombre, mujer o neutr...

“¡Hombre!”

Royal Road tiene cuarenta y nueve razas. Puede


Página 33 u

seleccionar su raza de las primeras veintinueve…

“Humano.”
u

Usted puede cambiar su aparien...

“Como soy.”

Su cuenta ha sido activada. Sus estadísticas y clase


se determinarán mientras juega a Royal Road.

“Paso.”
Seleccione una ciudad y un reino en que desea
iniciar.

“¡Ciudadela de Serabourg, Reino de Rosenheim!”

Bienvenido a Royal…

“Paso.”
Página 34 u

Con miedo a perder ni un segundo, Lee Hyun saltó la fase de tutorial y


tomó decisiones rápidas, de acuerdo con su plan preestablecido. 300.000
wons1 de factura mensual por jugar le suponían un gran gasto.
u

uuu

En Royal Road, hay más de un centenar de ciudades principales y miles


de pueblos. Cada nuevo jugador comienza su aventura en una capital
o en una gran ciudad de tamaño similar. Del tipo en la que Weed
comenzaba.

¡Flash!

Con un destello de luz, apareció en la Ciudadela de Serabourg del Reino


de Rosenheim.

1
Los wons son la moneda coreana. 300.000 wons son equivalentes a 300 dólares.
“Esto es...”

Weed se dejó inundar por la visión de innumerables personajes, tanto


de usuarios y como de PNJ2 por igual, y pensó que se había perdido en
medio de Seúl3.

“¿Dónde estoy? ¡Es increíble!”

Asombrado, Weed no daba crédito a sus ojos mientras miraba a su


alrededor. El ruido de los regateos y charlas sonaba en sus oídos. La
visión que se desarrollaba ante sus ojos era exactamente igual que en el
mundo real, con gente muy ocupada yendo y viniendo.

Bajó la mirada a sus pies, que se apoyaban firmemente en el suelo.


Sus sentidos le decían que eran absolutamente sólidos. Desconocidos
pasaban a su lado mientras seguía todavía en las nubes.
Página 35 u

“Míralo. Estoy seguro de que es un novato.”

“Parece que nunca antes ha estado en un juego de realidad virtual.”

Mientras pasaban por allí, algunos usuarios lanzaban observaciones


u

fugaces por encima del hombro. Eso fue suficiente para que se diera
cuenta de algo…

‘Tienen razón. Esto es Royal Road. Un mundo de realidad virtual, y mi


nuevo lugar de trabajo.’

No importaba lo bien que Weed se hubiera preparado; su conocimiento


de la realidad virtual y su investigación sobre el sistema de juego eran
completamente inútiles ante la extraña experiencia que estaba teniendo
ahora.

Estaba desconcertado, pero fue temporal; pronto se calmó, y las

2
Siglas de “personaje no jugador” o “non-playing character” en inglés (“NPC”);
son personajes creados por el juego, no son usuarios.
3
Capital de Corea del Sur.
diferencias también comenzaron a llamar su atención. Sus pensamientos
iban con el sentido del mundo real, sin embargo, la gente de su alrededor
vestía armaduras o chalecos de cuero.

Cerca del lugar donde había aparecido, había un tablón de anuncios


exhibiendo mapas y descripciones del Reino de Rosenheim e instrucciones
para el uso de la interfaz básica.

‘Es hora de que empiece.’

Weed apretó los puños, y comenzó a ejercitar su cuerpo. Se sentó y se


puso en pie, y después empezó a dar grandes saltos, volteretas, patadas
y puñetazos. Giró en torno a su cintura, probando cuidadosamente una
articulación tras otra. Movió los dedos de manos y pies, y giró la cabeza
hacia atrás y hacia adelante.
Página 36 u

A pesar de que un tsunami de comentarios humillantes brotó de otros


usuarios cercanos, Weed estaba decidido a perseverar.

“¿Qué diablos está haciendo ahora?”

“Parece que está moviendo su cuerpo. Supongo que todavía está


incómodo con un juego de realidad virtual.”
u

“Oh, ya veo. ¿Pero cuál es el motivo de hacer un espectáculo en medio


de una calle llena de gente?”

Los sentimientos de humillación que Weed luchaba por ignorar


vencieron a su determinación. ¡Menuda escena había estado haciendo
frente a desconocidos!

‘¡Maldita sea!’ —Weed salió a toda prisa y se dirigió hacia otro lugar.

Los recién iniciados en Royal Road estaban confinados en su ciudad de


origen durante una semana de tiempo real, que eran cuatro semanas
dentro del juego. Esto se debía al distinto flujo de tiempo que había
entre la realidad y la ficción.
La gran mayoría de principiantes aprendían las cosas más básicas
haciendo misiones simples o practicando habilidades artesanales, tales
como sastrería, herrería o cocina, que eran relativamente fáciles de
poder adquirir.

Los creadores del juego alardeaban de su flexibilidad sin restricciones,


casi rozando el caos; en estos momentos, aunque todas las posiciones
de alto rango todavía estaban ocupadas por los NPCs en lugar de los
usuarios, existía la posibilidad, con el paso del tiempo, de poder ocupar
dichos puestos. Por eso era necesario fomentar las relaciones sociales en
Royal Road.

Por otra parte, un número considerable de usuarios trabajaban en la


biblioteca o en otras tiendas para ganar algo de dinero. La Plaza Central
rebosaba con aspirantes a comerciantes que instalaban puestos para
comprar y vender con otros usuarios, y también se formaban muchos
Página 37 u

nuevos grupos en busca de aventuras.

Después de echar un vistazo rápido, Weed no dudó en dirigirse al Salón


de Entrenamiento. La zona estaba abierta a cualquier usuario, siempre
y cuando quisiera ir, y la mayoría de los usuarios lo visitaban para
experimentar con las nuevas habilidades adquiridas.
u

Era casi imposible encontrar a alguien que, como Weed, se dirigiera


directamente al Salón de Entrenamiento tan pronto como se crease un
nuevo personaje. No era sólo que los recién llegados estuvieran más
interesados en conocer cómo era el Reino y la ciudad que los había visto
nacer, sino también porque el trabajo en el Salón de Entrenamiento se
considera más bien ineficaz.

En el momento en que el instructor vio a Weed traspasar la entrada, sus


ojos brillaron con fiereza.

“Joven aventurero, supongo que has llegado al continente Versalles


hace muy poco” —dijo el instructor.

“Sí, señor” —dijo Weed con brevedad. Aún estaba molesto por haber
hecho el ridículo en su primer día.
“Encontrarás el entrenamiento con la espada absolutamente necesario
cuando llegue el momento de enfrentarse a los monstruos. ¿Necesitas
mi guía? Toma cualquier espantapájaros desatendido y golpéalo en la
forma que desees. Te colocas con una espada de madera delante de un
espantapájaros y todo tuyo.”

“Gracias, señor. Con eso será suficiente. No necesito más orientación.”

“Buena Suerte.”

Weed cogió la espada de madera y se dirigió a un espantapájaros que


estaba libre en el rincón más alejado. Entonces comenzó a golpearlo;
una vez, dos veces, tres veces. Sus manos poco a poco se acostumbraban
al peso de la espada de madera y a los impactos de ir golpeando al
espantapájaros.
Página 38 u

En Royal Road, el nivel de un nuevo personaje estaba bloqueado


durante las primeras cuatro semanas, ya que estaba prohibido viajar
más allá de las puertas de la ciudad y cazar monstruos en el campo. Lo
más común era llevar a cabo tantas misiones como fuera posible en ese
tiempo, ganando así puntos favorables de reputación, dinero y creando
tu propia red de contactos personales. Sin embargo, Weed continuó
golpeando en silencio el espantapájaros con la espada de madera.
u

Había cerca de un millar de espantapájaros en el Salón de Entrenamiento


de la Ciudadela de Serabourg, y un suministro ilimitado de espadas de
madera en los estantes, lo que podría ser útil. La zona solía ser frecuentada
por los usuarios que les gustaba poner a prueba sus habilidades. En
este momento, sin embargo, todos los ojos se fijaron en un lugar en
particular.

“Este hombre, definitivamente, tiene nervios de acero.”

“Es condenadamente duro.”

“No puedo creer que cualquier hombre cuerdo vaya tan lejos.”

Weed estaba empapado en sudor. La camisa blanca y el pantalón con


los que había empezado al principio, habían absorbido el sudor y se
habían pegado rápidamente a su cuerpo. Él seguía dando un golpe tras
otro al espantapájaros sin un solo minuto de descanso.

[Fuerza] ha incrementado en 1 punto.

Después de seis horas golpeando al espantapájaros, Weed escuchó


buenas noticias. Sentía como si los músculos de la mano que empuñaban
la espada de madera fueran haciéndose más ligeros.

“[Ventana de Estadísticas]” —murmuró Weed mientras golpeaba al


espantapájaros.
Página 39 u

Nombre del personaje Weed

Nivel: 1 Alineación: Neutral


u

Clase: Ninguna Título: Ninguno

Salud: 100 Maná: 100

Fuerza: 11 Fama: 0

Sabiduría: 10 Inteligencia: 10

Vitalidad: 10 Agilidad: 10

Suerte: 5 Liderazgo: 5

Ataque: 3 Defensa: 0
Resistencia a la Magia de Fuego: 0%

Resistencia a la Magia de Agua: 0%

Resistencia a la Magia de Tierra: 0%

Resistencia a la Magia Negra: 0%

El personaje de Weed era tan débil que no tenía nada notable.


Página 40 u

uuu

Cinco horas más tarde...


u

[Vitalidad] ha incrementado en 1 punto.

[Agilidad] ha incrementado en 1 punto.

Las dos estadísticas aumentaron casi al mismo tiempo.

“Menos mal.”

Weed finalmente dejó la espada de madera y tomó un breve descanso.


Sin comer ni beber, había estado golpeando el espantapájaros durante
casi ocho horas seguidas.

Estaba cansado físicamente y, aún peor, su garganta ardía de sed y su


estómago estaba vacío y hueco.

“[Ventana de Inventario].”

Pronunciando esa palabra clave, imágenes semitransparentes con todas


las pertenencias del inventario de Weed flotaron delante de sus ojos.
Dentro de su inventario había una cantimplora y diez piezas de pan de
cebada. Eso era todo.

En Royal Road, tienes que conseguir lo que necesitas por tu cuenta. Otros
usuarios hacían dinero realizando misiones fáciles durante las primeras
cuatro semanas, pero Weed no podía prescindir ni de un minuto. Sacó
Página 41 u

un pedazo de pan de cebada y su cantimplora y mordisqueó un bocado


de pan. Mientras comía alimentos, apaciguaba su hambre y su factor de
satisfacción se elevó.

‘Se supone que debo comer cada cinco horas. Será mejor que coma más a
menudo si hago ejercicio intenso, pero no es necesario elevar mi factor de
u

satisfacción al máximo. Todo lo que necesito hacer es permanecer lejos de


la muerte.’

Una vez terminada la comida, Weed cogió con rapidez la espada de


madera por la empuñadura y se puso delante del espantapájaros.

“Lo está haciendo de nuevo.”

“¡Está loco!”

“Creo que tiene un rencor contra eso o algo así.”

“No creo que vaya a parar hasta que rompa en pedazos ese
espantapájaros.”

¿Había sido una ilusión que el espantapájaros pareciera que temblase


en aquel mismo momento? La espada de madera de Weed golpeaba cada
centímetro del espantapájaros. El mismo tipo de preguntas surgieron
entre todos los espectadores.

“¿Por qué diablos está ese tipo golpeando el espantapájaros?”

“No creo que eso le vaya a ayudar en absoluto; si quiere aumentar el


nivel de una habilidad, es mucho mejor salir al campo y utilizarla en un
conejo en vez de un espantapájaros de estos.”

“Mirad lo que está haciendo. No está usando ninguna habilidad. A


mí me parece más como si estuviera golpeando el espantapájaros por
impulso.”

“A lo mejor está incrementando sus estadísticas” —comentó un caballero


de armadura resplandeciente, lo que inmediatamente atrajo la atención
Página 42 u

de todos los demás.

“¿Puedes mejorar tus estadísticas golpeando sólo un espantapájaros?”


—preguntó un explorador de piel oscura.

“¿Eh? Ah, sí, eso es correcto.” —dijo el caballero.


u

“Entonces, ¿por qué no basta con golpear continuadamente un


espantapájaros en vez de sudar duro para elevar tu nivel?” —preguntó
de nuevo el explorador.

El caballero llamado Pluto tenía un nivel muy alto, por lo que había
aprendido gran cantidad de información a través fuentes fiables.
También había sido la única persona que había adivinado correctamente
los motivos de las acciones de Weed.

Si un personaje consume su energía, su [Vitalidad] y [Resistencia] se


desarrollarán como consecuencia de ello; si un mago lanza gran cantidad
de hechizos, su [Sabiduría] e [Inteligencia] aumentarán. Sin embargo,
este aumento era insignificante en comparación con los puntos de
bonificación de estadísticas que se obtenían al aumentar un nivel.
Medio día golpeando a un espantapájaros sin descanso podía dar uno o
dos puntos de estadísticas. Teniendo en cuenta que el número de puntos
de bonificación de estadísticas como recompensa por el aumento de un
nivel era de cinco, lo que estaba haciendo Weed parecía una idiotez.

“Realmente es una tontería.” —dijo una hechicera sacudiendo la cabeza


al escuchar la explicación de Pluto.

Pero él pensaba de otra manera.

“Funciona.” —dijo Pluto.

“¿Perdón?”

“Tú puedes ganar sólo una pequeña cantidad de puntos de experiencia


cuando matas a un monstruo más débil que tu nivel actual. Eso lo sabes,
Página 43 u

¿verdad?”

“Por supuesto.”

“En otras palabras, cuanto más alto sea tu nivel, más difícil es ganar
otro nivel. Pero si mejoras tus estadísticas haciendo un entrenamiento
u

como este en la fase inicial, podrás cazar monstruos con mayor facilidad
en el futuro. Esto traerá consecuencias a lo largo de tu juego.”

“Conoces este método, por lo que supongo que has pasado por el mismo
entrenamiento. Entonces, ¿no haría todo el mundo lo mismo si supieran
de esto?”

“En realidad no. Incluso si la gente lo supiera, nadie lo haría. Centrémonos


en lo importante: ¿hay alguien que quiera golpear continuadamente ese
espantapájaros durante diez horas para mejorar su fuerza un punto?”

“…”

“Hay límites en lo máximo que puedes aumentar tus estadísticas


trabajando con un espantapájaros, que se conoce como el oponente
más débil. En el caso de la [Fuerza], estimo que conseguirías cuarenta
puntos, más o menos. ¿Hay alguien que quiera seguir golpeando el
espantapájaros durante al menos un mes para elevar esos cuarenta
puntos en [Fuerza]? Me enfermaría y me cansaría de eso, y me daría
por vencido en pocos días.”

El público que observaba a Weed asintió al unísono. Era preferible buscar


un arma increíble en vez de pasar las horas golpeando un espantapájaros
sin cesar durante un mes completo con el fin de incrementar tu [Fuerza]
en cuarenta puntos. Un equipo que aumentase la [Fuerza] en cuarenta
puntos sería único; pero, estaría lejos de ser raro.

“Esto sólo funciona para los novatos que no pueden ir más allá de los
muros de la ciudad. Una vez fue popular golpear a los espantapájaros
de esta manera, pero fue abandonado rápidamente porque, cuando
piensas en lo lentos que son los beneficios, se vuelve demasiado aburrido
y laborioso.”
Página 44 u

Weed escuchaba la acalorada discusión que tenían los jugadores que


le rodeaban. Le hubiera gustado poder seguir entrenado en otro lugar,
pero mientras no se le permitiera salir de la Ciudadela, no podía evitar
llamar la atención en el Salón de Entrenamiento.

‘¿Qué los hace llamar a esto aburrido y laborioso?’


u

Weed blandió la espada de madera con toda su fuerza. Si trabajas duro,


tu personaje se fortalece poco a poco. Cuando tu personaje evoluciona,
puede derrotar a monstruos más fuertes y hacer más dinero. Para Weed,
este era el mejor entretenimiento de su vida. Estaba acostumbrado
al trabajo físico de rutina. Durante todo este tiempo, el instructor le
miraba con ojos muy satisfechos.

uuu

Pasaron tres semanas. Weed se conectaba a Royal Road a diario, a


excepción de las horas mínimas de sueño, hasta el punto de la adicción.
Su estado físico, que había cultivado antes de empezar a jugar, le
permitía dormir un máximo de cuatro horas al día. Ahora que volvía a
mirar las últimas tres semanas, se ponía enfermo de incluso pensar en
ello.

Tras entrar en el juego, pasó ochenta horas de media golpeando


monótonamente el espantapájaros, cosa que le agotó mentalmente. Si
no hubiera sido por los mensajes emergentes de aliento, se habría dado
por vencido.v

[Fuerza] ha incrementado en 1 punto.


Página 45 u

[Agilidad] ha incrementado en 1 punto.

Nueva estadística: [Espíritu de Lucha]


u

Nueva estadística: [Resistencia]

En Royal Road, a veces podías aprender nuevas estadísticas diferentes


a las originales.

[Espíritu de Lucha]
Posees una fuerza sobrehumana temporalmente y eres
capaz de intimidar a los monstruos más débiles sólo con
la fuerza de tu mirada.

Está prohibida la distribución de puntos de


bonificación para esta estadística; aumenta de forma
espontánea, dependiendo de las acciones del personaje,
especialmente en luchas prolongadas o enfrentamientos
frecuentes contra monstruos más fuertes que tu nivel
actual.

Los mensajes emergentes relacionados con las habilidades también


Página 46 u

aparecían de vez en cuando. La única habilidad que Weed tenía hasta


ese momento era la de [Dominio de la Espada].

Subes de nivel: [Dominio de la Espada]


u

Principiante — 3 [0%]

Aumenta el poder de ataque con espada un 30%.

Aumenta la velocidad de ataque con espada un 9%.

[Resistencia]

Es probable que se utilice menos energía en combate.

Está prohibida la distribución de puntos de bonificación


para esta estadística.
Cada vez que aparecía un mensaje emergente, Weed se alegraba en
secreto por los progresos que estaba haciendo. Pero lo que le preocupaba
profundamente era el sentimiento de frustración por el que se estaba
retrasando en sus objetivos. Desde hacía tres semanas, se había dedicado
a golpear al espantapájaros: su [Fuerza] se había incrementado sólo en
28 puntos, la [Agilidad] en 25, y la [Vitalidad] en 22.

‘Si no soy capaz de mejorar mi ritmo, voy a terminar perdiendo más de mi


preciosos tiempo en este espantapájaros, incluso después de que eliminen
mi restricción de movimiento. Tengo que terminar esto antes de que pueda
salir de la Ciudadela.’

Los ojos de Weed ardían con determinación.

¡Ruuum!
Página 47 u

En ese momento, el estómago de Weed decidió que era hora de comer.


Aparte del lento progreso con sus estadísticas, estaba atormentado por
el hecho de que se estaba quedando sin pan. Podía correr a una fuente
cercana y llenar la cantimplora con agua, pero el pan era diferente.
Tenía que pagar dinero por él.

¡Snif!
u

De pronto olió un aroma apetitoso que venía de alguna parte. Weed,


balanceando la espada de madera, se detuvo y alcanzó a ver al instructor,
quien estaba sacando su bolsa para el almuerzo.

“Jeje, honorable instructor.” —dijo Weed mientras movía su cola


invisible acercándose al instructor.

“Hmm, ¿precisamente eres el señor Weed? ¿Qué te trae aquí?” —dijo el


instructor alegremente.

“¿No es demasiado solitario almorzar solo? Yo podría hacerle compañía.”


—dijo Weed de forma aduladora.

¡Growl!
Mientras que su estómago gruñía, Weed puso su cara más seria, pero
fue incapaz de engañar al instructor.

“Puedo entender que tengas hambre. ¡Siéntate a mi lado! He traído un


montón de comida, suficiente para alimentar a dos bocas.”

“Gracias, señor.”

“Ya basta de humildad. Es para mí un honor compartir la comida con


alguien que será un gran aventurero como tú, señor Weed. ¡Te aseguro
que tu reputación algún día resonará más allá de los límites de la
Ciudadela de Serabourg! Cuando llegue ese día, por favor, acuérdate de
mí.”

“Sí, señor. Sin duda lo haré.”


Página 48 u

Después de adular ligeramente al instructor, Weed disfrutó de un


almuerzo a su lado. Aun tratándose de un momento poco alegre, Weed
agradecía que, con poco esfuerzo, pudiera llenar su estómago.

No estaba adulando a un hombre de verdad, de todos modos. ¿Dónde


estaba el problema en adular a un PNJ de inteligencia artificial? Además
de las estadísticas que Weed había aumentado al golpear sin descanso
u

el espantapájaros en las últimas tres semanas, había estableció una


afinidad con el instructor. Este efecto complementario era algo digno
de mención.

Mientras Weed se afanaba en devorar el almuerzo, el instructor le


preguntó de pronto:

“Por cierto señor Weed, ¿qué piensa usted sobre el [Dominio de la


Escultura]?”

‘¿[Dominio de la Escultura]? ¿Qué diablos es el [Dominio de la Escultura]?’

Weed masticó un bocado de arroz cocido y se lo tragó antes de que él le


preguntara de nuevo.
“¿Qué quiere decir con [Dominio de la Escultura]?”

“Solamente tengo curiosidad por conocer su opinión. Me pregunto qué


tipo de visión en general tiene sobre el [Dominio de la Escultura]” —
dijo el instructor.

En ese momento, la velocidad cerebral de Weed se puso en marcha y, si


se pudiera que medir en valor numérico, su velocidad se multiplicó por
cinco.

‘Hasta ahora he descubierto que el instructor es un hombre ingenuo y miope.


Él cree sinceramente que la espada es invencible y, para él, la mayor virtud
es ejercitarse lo suficientemente duro para romper a sudar en el Salón de
Entrenamiento. Y ahora me está preguntando lo que pienso de el [Dominio
de la Escultura]?’
Página 49 u

Tan pronto como Weed recopiló sus pensamientos, frunció el ceño.

“¡Honorable Instructor! Ni siquiera puedo creer que lo mencione. Yo


soy un hombre de espada. ¿Pregunta por mi opinión sobre, Dios me
perdone, [Dominio de la Escultura]? Estoy muy decepcionado. Esta es
mi respuesta: nunca, nunca, ni siquiera una vez ha pasado por mi noble
mente el pensamiento de esa humilde artesanía.”
u

A pesar del tono ofensivo de Weed, que podría haberlo enfurecido en


otra situación, el instructor inesperadamente dio unas palmadas de
alegría.

“¡Estaba convencido de que ibas a decir eso!”

“Está fuera de cuestión. Los gustos sobre [Dominio de la Escultura] no


son más que errores terribles de Dios, que no merecen un segundo de
nuestra atención. ¿Por qué yo, un hombre de espada, necesitaría pensar
alguna vez en eso?”

“Me agradan sus ideas, señor Weed.”

Weed tuvo la sensación que, aunque era intangible, en ese momento su


amistad con el instructor había aumentado a un grado más alto.

Esta era la manera de hacer amistad con alguien. No era necesario


derramar sangre junto a ellos. No había que malgastar tiempo o dinero
en ellos. Sólo era necesario acercarse a ellos y hablar mal de algo en la
primera oportunidad, y así ganarse su simpatía.

Weed esperó a que el instructor cambiara el tema de conversación, pero


se frotó la parte trasera de su cabeza y se quedó en el tema.

“Se rumorea que el desconocido que dominó la escultura, una vez talló
la luz de la luna.” —dijo el instructor.

“No lo creo, señor. Un rumor es siempre propenso a distorsionarse.


¿Cómo puede alguien que ha aprendido algo tan inservible como el
[Dominio de la Escultura] tallar la luz de la luna? Tal vez fue una piedra
Página 50 u

en forma de luna.” —dijo Weed alegremente.

“¿Tú también lo crees? Pero eso fue lo que me dijo mi predecesor. Su


honorable nombre es Mellium, actualmente es un Caballero Real...”

La [Escultura] era percibida como una habilidad inútil. No era más


que recortar un pequeño bloque de madera para producir un fino
u

ornamento. Corría el rumor de que si se elevaba el arte más allá de un


cierto nivel, serías capaz de fabricar armas de proyectiles de metal. Pero
era, sin duda, una de esas habilidades obsoletas que nadie se molestaba
en aprender.

“Señor Weed, con eso en cuenta, estas dudas sobre el [Dominio de la


Escultura] me intrigan. Es indudable que el arte no puede competir con
nuestra espada, en ningún caso. Pero, ¿podría averiguar si el rumor tiene
algo de verdad? Le estoy pidiendo este favor porque es un hombre digno
de confianza. Si acepta mi solicitud, yo sería feliz.” —dijo el instructor.

Entonces, un mensaje emergente apareció delante de los ojos de Weed.

¡Ding!
NUEVA MISÓN

[El rumor sobre el misterioso escultor que visitó el Palacio Real]

El rumor que un hombre que ha llegado a dominar el arte


escultural y ha tallado la luz de la luna ha permanecido
circulando en la corte real del Reino de Rosenheim por
mucho tiempo. Estudia el rumor para determinar si es
cierto o no.

Nivel de dificultad: E
Página 51 u

Requisitos

Amistad estrecha con el instructor, reservado sólo para


aquellos que no han adquirido el [Dominio de la Escultura].
u

Ser reconocido como una persona de confianza del instructor,


gracias a una pasión constante por la esgrima.

Weed apenas contuvo un susurro de triunfo. Su instinto le decía que


esta misión era de las más raras de las raras. Esto se debía a que la
misión tenía que cumplir unas condiciones muy improbables con el fin
de poder iniciarla. Amistad estrecha con el instructor, ¿quién hubiera
pensado en eso?

La mayoría de los usuarios en general ni siquiera conocen la ubicación del


Salón de Entrenamiento, y mucho menos lo visitaban cuando adquirían
una nueva habilidad, ya que no era necesario regresar para practicar
con un espantapájaros todas las nuevas habilidades. Además, era muy
raro que alguien estuviera dispuesto a quedarse permanentemente en
el Salón de Entrenamiento golpeando al espantapájaros una y otra vez
para aumentar sus estadísticas de la forma más simple, tal y como Weed
estaba haciendo.

Buscando lo suficiente, era posible encontrar algunos usuarios similares;


pero en el caso de Weed, había pasado la mayor parte de las últimas tres
semanas con el espantapájaros. ¿Quién más podría haberlo soportado
hasta tal punto?

Hablando de estrecha amistad con el instructor, era algo casi imposible


de lograr a menos que alguien como Weed se acercase a él, adulándolo
para que compartiera su almuerzo. Incluso si se cumplían todas estas
condiciones, sería necesario haber comenzado una nueva aventura en
la Ciudadela de Serabourg del Reino de Rosenheim. Y, contra todas las
posibilidades, había que encontrar el momento adecuado para hablar
sobre [Dominio de la Escultura] con el instructor.
Página 52 u

‘Esto es genial. Estaba a punto de ir a la quiebra y morirme de hambre. Con


un nivel de dificultad E, esta misión parece fácil de terminar.’

Weed asintió al instructor.


u

“Es un honor para mí aceptarla. Aunque yo no creo en ninguna de esas


tonterías, voy a averiguar cómo se talla la luz de la luna.”

Has aceptado la misión.

“Se lo agradezco. Le encomiendo esta tarea. Tome este dinero como


anticipo” —dijo el instructor entregándole dos monedas de plata.—
“Le doy un consejo: visite primero la tienda de esculturas y extraiga
información a partir de ahí.”

Un pan de cebada, aunque literalmente no tenía ningún sabor, era


suficiente para llenar el estómago, y costaba tres monedas de cobre.
Dado que una moneda de plata era igual a cien monedas de cobre, era
seguro decir que Weed acababa de recibir el equivalente a sesenta y seis
pedazos de pan de cebada para poder subsistir, y aun le sobraría algo
de cambio.

Estaba seguro que una vez que completara la misión, podía esperar más
recompensas del instructor.

‘¡Genial! No hay que preocuparse por quedarme sin pan por el momento.’

Muchos años de experimentar el hambre de primera mano lo habían


persuadido para evitar el estar desnutrido a cualquier precio.
Página 53 u
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 3
La petición del
lnstructor

En primer lugar, Weed pasó por fuente para llenar su cantimplora de


agua y a continuación se dirigió a la tienda de esculturas. Era su primer
paseo por la calle, que estaba llena a rebosar de jugadores y PNJs.
Página 54 u

“Necesitamos un clérigo de nivel 17 o superior.”

“¡Ey, oíd! Vamos a asaltar la Cueva Lasok. ¿Alguien quiere unirse?”

Había montones de jugadores en la calle, pero ninguno miró a Weed más


que por casualidad. Aunque a él no le molestaba esa actitud. Yendo de
u

un lado para otro con un traje de viajero, sin tan siquiera un pectoral,
demostraba que aún no tenía ni el requisito mínimo de las cuatro
semanas de juego necesarias para abandonar el recinto de la Ciudadela.

Entre las innumerables tiendas establecidas en la capital del Reino de


Rosenheim, la tienda de esculturas tenía un estatus diferente.

La mayoría de los aventureros apenas podía recordar dónde se hallaba


porque no tenían nada que hacer en aquel local. Sólo un número
insignificante de jugadores que habían aprendido el arte de la escultura
lo visitaba periódicamente. Pero la tienda estaba justo al lado de la
joyería de la Calle Central, que era una de las tiendas más visitadas
habitualmente por los nobles del reino.

¡Ding!
Weed entró en la tienda de esculturas.

“Bienvenido a… ¿qué quieres, desconocido?”

El vendedor había empezado el recibimiento de un nuevo cliente con una


amable sonrisa, hasta que se había fijado en la ropa de Weed, momento
en que había cambiado completamente su actitud.

Weed echó una ojeada a la tienda, sólo para descubrir que era el único
cliente. La herrería o el almacén siempre estaban abarrotados, pero este
local apenas atendía a unos pocos clientes al día, eso los días que recibía
alguna visita.

Pero, comparando los ingresos diarios de la tienda de esculturas, no


quedaba por debajo de las otras. En otras palabras, las mercancías se
vendían bastante caras.
Página 55 u

Weed se ajustó el cuello de la camisa y preguntó educadamente:

“Vengo buscando la respuesta a una pregunta que me angustia bastante,


señor.”
u

“Así que lo que quieres es hacerme una pregunta, ¿no?”

“Sí, siempre que pueda dedicarme un minuto de su tiempo.”

“Ahora mismo estoy ocupado, vete por favor” —el vendedor le rechazó
sin más, aparentemente enojado. Como la [Fama] de Weed era cero y no
era conocido, el vendedor tenía todo el derecho de echarle de su tienda.

“Sí, señor. Le veré luego.”

“Adiós” —respondió el vendedor.

Weed se tomó su tiempo para cruzar la puerta. Su mirada pasó


casualmente por las estatuas expuestas en el local.

“¡Qué impresionante!” —exclamó— “La grandeza de esta estatua me


llena el alma. ¿Ofrecéis trabajos de esta calidad a la Corte de Rosenheim?”

El tendero no pudo evitar sentirse atraído por esas palabras.

“¿A qué obra te refieres, desconocido?”

“Esta águila de dos cabezas de oro puro. No me atrevería a imaginar


qué artista ha creado semejante obra, pero es evidente la excelencia
de su maestría. Es indudablemente digna. Está tan llena de vida que
casi la confundo por un ser vivo, y me llena de orgullo poder decir que
he visitado un local que alberga obras de este calibre. Sin duda, ésta es
una tienda que merece y alberga las mejores esculturas. Ha abierto mis
humildes ojos a una belleza divina.”

Tal vez era consciente o no de ello, pero la boca del vendedor iba tomando
la forma de una luna creciente horizontal.
Página 56 u

“¿Te interesa el arte de la escultura, viajero?”

“Si me permite el atrevimiento, diría que, en efecto, así es… Mi mayor


deseo es alcanzar la paz mental observando la belleza de estatuas
notables, y mi espíritu ansía llegar a formar parte del magnífico espíritu
que éstas representan.”
u

“Ven y siéntate a mi lado. Tal vez seas una buena compañía para
librarme de mi aburrimiento.”

“Gracias, señor.”

“¿Te gustaría una taza de té?”

“Si fuese lo bastante amable como para ofrecerme aguamiel, hasta un


simple vaso de agua fría sería suficiente.”

“¡Por supuesto! Claro que tengo.”

Weed se bebió el vaso de aguamiel que le tendió el vendedor, lo que


le ayudó a relajar sus músculos del cansancio acumulado en las tres
últimas semanas.

“Cuéntame ahora qué te tiene preocupado.” —dijo al fin el tendero.

“Sí, señor. Pero antes perdone que le moleste pidiéndole permiso para
admirar las estatuas que tiene en el local antes de entrar en esos temas.
Si bien tengo asuntos que requieren su orientación, es menos urgente
que la necesidad de consolar mi pobre alma, que quiere disfrutar de un
buen vistazo de estas obras maestras de arte.” —dijo Weed.

“Puedes observarlas tanto como gustes. ¿No es esa la razón de ser de


las más hermosas estatuas? ¿Ser apreciadas en toda su gloria?” —el
vendedor asintió encantado con una gran sonrisa.

Weed tenía la impresión de haberse ganado su aprecio, algo inusual por


las pocas visitas que tenía el local y lo alejado que estaba de la atención
Página 57 u

del público en general. Suponiendo que alguien pidiese estudiar los


distintos bienes expuestos en un almacén… al segundo siguiente le
estarían echando a patadas por la puerta.

Weed estudió a placer las estatuas expuestas. Pero con dudosas


intenciones.
u

‘Dudo que el dominio de la escultura ayude a ganar dinero. La más cara de


las estatuas expuestas no supera las treinta monedas plata.’

Las estatuas de calidad estaban fabricadas en piedra o maderas exóticas,


y pese a la impresionante destreza del creador, los materiales en sí
mismos no eran caros. No eran más que maderas esculpidas o piedras
talladas.

Weed sabía que podía ganarse un buen dinero si pudiera crear una
estatua gigantesca de un león o una estatua de bronce, pero no se dejó
afectar por una posibilidad tan remota. ¿Qué tipo de noble tendría el
dinero suficiente como para malgastarlo pidiendo una nueva estatua
cada año? Tendría que llegar a la cima de los escultores para poder ganar
algo con esa profesión. Aunque la ausencia de una fuerte competencia
parecía indicar que no sería muy difícil alcanzar dicha posición.
Aun así, era un mercado pequeño, demasiado como para considerarlo. La
forma segura de hacer una fortuna era convertir a los demás jugadores
en clientes potenciales. Siempre se centran en subir de nivel y exigen un
mejor equipamiento con el que retar a enemigos más poderosos, y así
continuamente.

Armas de fuego, armaduras poderosas, brazaletes encantados y anillos


eran populares entre los jugadores, pero las estatuas, salvo en contadas
ocasiones, no tenían para ellos ningún valor.

Pérdida de tiempo, pérdida de dinero. Su objetivo principal en el juego


era hacer Dinero, con ‘D’ mayúscula. Miró a las obras expuestas un buen
rato e hizo su juicio sobre el [Dominio de la Escultura]. Esa habilidad
era completamente inútil.

Weed se sentó frente al vendedor.


Página 58 u

“Dime ahora, ¿qué es lo que buscas?” —preguntó el vendedor.

“Me interesan unos acontecimientos del pasado. Me han comentado


que alguien logró esculpir la luz de la luna en el Palacio Real hará
unos 50 años. Me gustaría saber si hay algún rastro de verdad en esa
información.” —dijo Weed finalmente.
u

“¡Oh, aquel evento! Es una historia legendaria que ha sido transmitida


entre escultores. También se lo he oído comentar a algunos de mis
clientes habituales de la Corte Real.”

Weed había pensado que lo de esculpir la luz lunar no era más que algo
imposible, una especie de leyenda urbana, pero el dueño de la tienda
de esculturas también conocía la historia que el instructor del Salón de
Entrenamiento le había comentado.

¡Ding!
HAS COMPLETADO LA MISIÓN

[El rumor sobre el misterioso escultor que visitó el Palacio Real]

El rumor que conocía el instructor del Salón de


Entrenamiento ha resultado ser cierto. Un escultor esculpió
la luz lunar y era algo sabido, si bien discretamente, por los
miembros de la Corte Real de Serabourg, aunque aún no se ha
desvelado la identidad del escultor que realizó tal la hazaña.

Recompensa
Habla con el instructor para reclamarla.
Página 59 u

Weed sonrió complacido. Esta era, después de todo, una misión simple
con el más bajo nivel de dificultad, ‘E’. Aun así, de no haberse hecho
amigo del vendedor, la misión podía haber sido bastante más compleja.

Con esto había terminado la misión, lo siguiente era regresar al Salón de


Entrenamiento y recibir la recompensa del instructor. Mientras Weed
u

estaba a la espera del momento indicado para despedirse, el vendedor,


que estaba perdido en sus pensamientos, por fin volvió a hablar.

“Lo que no he oído es cómo se las arregló para esculpir la luz de la luna.”

“¿Los clientes de la Corte Real no se lo comentaron?”

“No, siempre se reservan esa parte. Se niegan a contarme nada al


respecto. Al parecer, la Reina Evane de Rosenheim, cuya alma descanse
en paz, estaba involucrada en el asunto. ¿Puedes hacerme un favor e
investigar sobre este tema para calmar mi curiosidad?”

¡Ding!
NUEVA MISIÓN
[El pasado del Escultor]

Según los rumores, la Reina Evane estuvo involucrada en


unos hechos, en los cuales, un escultor se presentó en el
palacio y esculpió la luz de la luna. El dueño de la tienda de
esculturas se pregunta qué relación había entre ellos.

Nivel de Dificultad: E

Aviso:
Si te descubren investigando sobre este asunto, estarás
expuesto a la hostilidad de los Caballeros Reales.
Página 60 u

Weed cerró los puños temblando de excitación. ¡Era una misión en serie!

Aunque fueran de nivel bajo, los niveles de las recompensas en las


misiones en serie aumentaban progresivamente. Cuantas más fases
de la serie se completasen, más difíciles se iban haciendo; y más fases
u

seguramente harían que fuera demasiado difícil para Weed completarlas


en ese momento. Las únicas misiones que Weed podía completar a estas
alturas eran las que se desarrollasen dentro de la Ciudadela, sobre todo
las de ir preguntando por ahí, recopilando información para otros.

“Aún soy bastante incompetente. Temo no ser merecedor de su petición.”


— dijo Weed.

“Estoy convencido que estarás a la altura de esta tarea. Tu prudencia


te abrirá el camino.” — replicó el vendedor.

“Si está convencido, acepto encantado su encargo.”

Has aceptado la misión.


“Gracias viajero. Deberías buscar a un bardo que conozca las viejas
historias y los chismes que inundan las calles y preguntarle sobre la
Reina Evane. ¡Pero cuidado! Es este un asunto muy sensible, así que
procura no causar un problema que pueda dar lugar a una difamación
de la Familia Real.”

uuu

Conteniendo el repentino impulso de empezar a tararear una melodía,


Weed fue directamente a la taberna que estaba al otro lado de la calle.
Página 61 u

“Buenas tardes” — dijo Weed devolviendo el saludo de la camarera.

Entonces empezó a buscar algún bardo. Tenía que dar con uno que
cumpliese ciertos requisitos. En primer lugar descartó a los bardos
jugadores de la lista de candidatos. Era muy improbable que algún
u

jugador estuviese al corriente de un evento que había ocurrido en el


Palacio Real hacía más de 50 años. Tendría más opciones si buscaba
por un habitante de la ciudad, y a ser posible alguno que fuera anciano.

Supiese o no cantar, todo bardo es una fuente fiable de chismes


mundanos. Weed pasó por muchas tabernas hasta dar con un bardo que
se ajustaba a sus expectativas. Era un bardo de unos cuarenta años, con
experiencia comprada al precio de la juventud y el encanto perdidos.
Aplaudiendo, Weed se acercó al bardo.

“Gracias por una buena balada, señor. Perdone que le interrumpa,


pero quiero hacerle un par de preguntas… ¿Conoce lo que pasó hace
cincuenta años en la Corte Real de Rosenheim?”

El bardo extendió la palma, y Weed no se perdió el significado de este


gesto. Frunció el ceño y su boca empezó a temblar, dejando clara su
intención de no gastarse ni un céntimo.

“Tienes una voz encantadora. Y debes de tener un inmenso talento para


componer tanto la letra como la música de una balada tan inspiradora.
¡Y qué decir de la más que impresionante habilidad con la que manejas
el instrumento…!”

“…”

“Seguro que le rompiste el corazón a un buen número de damas de


Serabourg cuando eras un joven en la cima de tu carrera. Y, por supuesto,
seguro que aún hoy en día sigues robando el corazón de cualquier dama
que desees… Para un bardo, al fin y al cabo, la aventura y el romance
lo son todo. Yo también adoro los romances.”

La palma no se movió y, además, el bardo replicó.


Página 62 u

“Estoy más que cansado de patéticos cumplidos como esos, extranjero.


O me muestras el dinero, o te pierdes.”

Weed no supo cómo reaccionar a continuación.


u

‘¿Tengo que abandonar la misión a medias? Aunque la misión no me


penaliza por dejarla a medias. Pero tal vez consiga una buena recompensa
más adelante, y no me gustaría pensar que he abandonado una misión tan
pronto.’

La mano de Weed se deslizó en su bolsillo, donde pescó una moneda


antes de darse cuenta del error. ¡Dos monedas de plata! Sólo tenía dos
monedas de plata en el bolsillo. Eso era todo lo que el instructor le había
dado como adelanto de la misión anterior.

El bardo cogió la moneda de plata de la mano de Weed.

Había sido un error muy básico el olvidarse de cambiar una moneda de


plata por monedas de cobre por adelantado.

‘¡No puedo creer que haya cometido un error tan estúpido!’


El cuerpo de Weed temblaba de angustia y dolor.

“¡Hum! Esto es un secreto, así que no puedes ir contándolo por ahí.”


—dijo el bardo entre susurros.— “La Reina Evane y el escultor habían
sido íntimos desde la infancia.”

“¿A qué te refieres con ‘íntimos’?”

“¡Tonto! No se me ocurre ninguna otra forma en la que un hombre y


una mujer se puedan considerar íntimos… Se amaban el uno al otro.”

“Entiendo…” —Weed se dio cuenta de por qué tenía que investigar


todo este asunto sin que se enterase la Corte Real.

Dado que el nombre de la respetada difunta Reina se mencionaba en un


asunto escandaloso, los Caballeros Reales estarían más que encantados
Página 63 u

de silenciar a quien fuese necesario con tal de mantener su honor a salvo.

El bardo miró alrededor del local y añadió cuidadosamente:

“Nacieron en la misma aldea, y crecieron contando siempre el uno


con el otro. El chico se llamaba Zahab. La chica siempre llevaba los
u

adornos tallados que él le regalaba desde que era pequeña, soñando en


convertirse en su esposa algún día. ¡Pero el Destino les jugó una mala
pasada! La chica fue elegida para ser la Doncella Real y el chico la dejó
ir. Pero, en su despedida, hubo una promesa del uno al otro.”

“¿Qué promesa?” —preguntó Weed, con curiosidad.

“Zahab prometió mostrarle a la chica la estatua más hermosa bajo el


cielo.”

“Entonces, supongo que no pudo cumplirla. La Reina debe tener una


gran cantidad de estatuas hermosas y magníficas en el palacio.”

“Al contrario, sí que cumplió la promesa. Tras muchos años, Zahab se


presentó en la Corte Real por una misión. Se dice que, al ver la calidad
de su trabajo, la Reina quedó más que conmovida, diciendo que era la
obra más hermosa que jamás se hubiese visto.”

“Entonces, por el amor de Dios… ¿qué estatua le presentó a la Reina?


Su Majestad no alabaría tanto una simple pieza.”

“En efecto. Deberías visitar a la doncella de una dama que presenció


todo el incidente para oír el resto de la historia. Esto es todo lo que yo
puedo contar ya que, al fin y al cabo todo lo que sé lo he oído a través
de otros.”

“¿Esa doncella sigue viva?”

“Sí.” —y el bardo le indicó el camino para llegar a la casa de la doncella.

Weed fue inmediatamente a visitar a la doncella. Ya estaba retirada,


pero cuando Weed le preguntó por la Reina Evane y el escultor le recibió
Página 64 u

con gozo.

“Su Alteza era una dama virtuosa y encantadora. ¿Quieres saber lo que
pasó por aquel entonces?”

“Así es, señora.”


u

“Pues has encontrado a la persona indicada. Yo misma serví a Su Alteza.


Al principio rechazó al señor Zahab cuando éste llegó al palacio.”

“¿Por qué? Si me permite la pregunta.”

“Por su promesa. Cuando eran jóvenes, hicieron una promesa: el señor


Zahab le presentaría a Su Alteza la estatua más hermosa del mundo.
Pero cuando apareció en el palacio, lo que llevaba a la cintura era una
espada, no una herramienta de tallar. A los ojos de todo el mundo, se
aparecía como un apuesto espadachín con un buen manejo de la espada.
Deberíais poder ver lo dolida que estaba Su Alteza. ¡Era indescriptible!
Su Alteza había creído tanto en el señor Zahab que, aunque el mundo
se hubiese vuelto cabeza abajo, sólo su fe en él no habría cambiado y,
por lo tanto, la promesa que tenía con él era lo más sagrado para ella.”
“…”

“Ese día, el Reino de Brent, que limita con Rosenheim, mandó un


grupo de asesinos, demostrando una traicionera ambición por controlar
nuestro Reino, y sólo Freya sabía lo asustada que estaba cuando los
asesinos entraron a la carga atacando a Sus Majestades en el jardín del
Palacio.”

“¡Esas alimañas taimadas!”

“Así es, joven viajero, puedes decirlo bien alto. Un par de los Caballeros
Reales se enfrentaron a los asesinos, pero no pudieron contenerlos… y
estaban a punto de morir a sus manos. En ese preciso momento, el señor
Zahab entró caminando en el jardín. Como era de esperar, en medio de
la batalla la Reina le gritó y le ordenó que se fuese, pero el señor Zahab
se limitó a sonreír…”
Página 65 u

“¿Sonrió en medio de una situación tan comprometida?”

“…y dijo que le mostraría la más hermosa estatua que jamás se


hubiese esculpido en el mundo. Para la sorpresa de todos, la espada
del señor Zahab hizo pedazos la luz de la luna. Era algo de una belleza
sobrecogedora. Estaba cantando una canción mientras esculpía la luz.
u

Aunque no puedo recordar la letra del todo, el título era ‘El Corazón de un
Escultor’. Al oír la canción, la Reina empezó a llorar descontroladamente.
Era, sin duda, la estatua más hermosa que jamás había visto. Aunque,
si el señor Zahab se hubiese limitado a inscribir su nombre en una placa
de madera, para Su Alteza hubiese sido la obra más hermosa del mundo;
pero créeme, la visión de aquel joven esculpiendo la luz de la luna era,
literalmente, una aparición celestial. Los asesinos se retiraron ante la
inconcebible visión ante ellos, y así el señor Zahab cumplió su promesa.
Muchos años han pasado desde aquella noche, pero aún atesoro ese
recuerdo conmovedor.”

En ese momento, un misterioso flashback apareció ante los ojos de


Weed.
uuu

Tchack

Tchack

Un chico tenía un pequeño cuchillo de tallar en las manos. A medida


que el cuchillo se deslizaba de arriba abajo, una pieza de madera
iba tomando forma. Al parecer, estaba tallando la figura de una
muchacha. Una muchacha pequeña y adorable.

Gracias a su habilidad, el pedazo de madera recibía una nueva vida.


Una chica, completamente sonrojada, le estaba observando. Las
manos del chico seguían moviendo el cuchillo de tallar, con gesto serio.

La chica le ama, lo ama todo de él.


Página 66 u

El chico completa la estatua en seguida. Era muy parecida a la chica.

“Por ahora solo puedo tallar un trozo de madera. Pero, algún día, te
mostraré la estatua más hermosa del mundo.”
u

“Gracias, Zahab, no puedo esperar que llegue ese día.”

El chico y la chica, cogidos de la mano, se hicieron una promesa.

A medida que la chica crecía, también aumentó su belleza. Hasta el


punto de atraer la atención del Rey. Con el paso del tiempo se convirtió
en Reina. Pero la chica no era feliz.

La Reina tampoco se alegró el día que Zahab volvió a su lado. Zahab


portaba una espada, no un cuchillo de tallar. Dando un paseo por el
jardín, Su Alteza se dejó llevar por un arrebato de pasión y cogió de
un tirón una rosa espinosa. Su palma empezó a sangrar.

“¿Por qué has olvidado nuestra promesa? Esa promesa lo era todo
para mí…”
Su Alteza se lamentaba por la promesa incumplida.

Esa tarde, los asesinos asaltaron el palacio. El Reino de Brent, tan


hostil como siempre, había enviado unos asesinos. Los Caballeros
de Rosenheim cayeron uno tras otro. Ella y Su Majestad temían la
muerte inminente e inevitable.

uuu

¡Ding!
Página 67 u

HAS COMPLETADO LA MISÓN


[El pasado del Escultor]

La promesa entre el chico y la chica se llegó a cumplir.


La azul luz de la luna se hizo añicos, lo que sirvió para
u

derrotar a los asesinos. El Escultor de la luna, Zahab, con


su habilidad de escultura a la altura de cualquier Maestro,
le presentó su obra más hermosa a su amiga de la infancia.

Recompensa
Vuelve al vendedor para reclamarla.

Has subido de nivel.

Has subido de nivel.


Para su sorpresa, acababa de subir dos niveles por una simple misión, y
eso no era todo. Otro mensaje apareció ante él. Aún más sorprendente
que los anteriores, era una ventana de conversión de clase.

¡Cambio de Clase!

Ahora puede aceptar la clase secreta Escultor de la Luz


Lunar. Si acepta, puede aprender habilidades exclusivas
fuera del alcance de las clases iniciales.

¿Desea convertirse en un Escultor de la Luz Lunar?


Página 68 u

Un infinito número de jugadores estaban ocupados buscando clases


secretas en Royal Road, pero muy pocos de ellos habían logrado dar con
una.

Pero la respuesta de Weed fue:


u

“No la quiero.”

¿Está seguro?

Ahora puede aceptar la clase secreta Escultor de la Luz


Lunar.

¿Desea convertirse en un Escultor de la Luz Lunar?

“No.”
Para Weed, estar escondido en una esquina haciendo figuras que nadie
quería no merecía ni ser considerado. Tenía que admitir que la de
escultor podía ser una clase entretenida, si se entrenaba de la forma
apropiada. Pero él necesitaba una clase financieramente lucrativa para
sus ganancias personales. Cuando Weed recuperó el sentido, la anciana
doncella le estaba observando.

“Ha sido una historia maravillosa. Muchas gracias, señora.”

“No hay de qué. Ha sido un placer contarte esta historia. Por eso, joven
viajero, quiero darte un pequeño recuerdo. ¿Querrías aceptarlo?”

‘¿No sería maleducado rechazar una muestra de buena voluntad?’

Weed no era lo bastante cruel como para rechazar lo que se le ofrecía.


Un hombre debe aceptar cualquier regalo que se le haga con gratitud.
Página 69 u

“Estaré más que encantado de recibirlo, señora.”

La anciana doncella sacó algo enterrado al fondo de un cajón. La forma


era parecida a la de un antiguo escalpelo.

“Este cuchillo de tallar perteneció al señor Zahab. Él se lo dio a Su Alteza


u

y, con el tiempo, acabó en mis manos. Y esta estatuilla de madera fue


tallada por él mismo. Por favor, tómalas.” — dijo, mientras le acercaba
ambos objetos.

“Pienso atesorar vuestro regalo por mucho tiempo.” — respondió Weed.

Cogió los dos objetos que se le entregaban.

¡Ding!

Has recibido un Cuchillo de Tallar.


Has recibido el Legado de Zahab.

Weed pensó que serían objetos poco comunes al haber sido dejados atrás
por uno de los Maestros Escultores. Hasta la talla de madera parecía
tener cierta clase a primera vista.

“Por favor, cuida del cuchillo de tallar del señor Zahab con gran cuidado.”

“Por supuesto, señora.” — Weed calculó que podía sacar un buen dinero
al venderlo.

“La estatuilla te mostrará el sitio en que se halla enterrado el cuerpo de


Zahab. Deseo que su maestría y arte no queden encerrados con él por
Página 70 u

siempre jamás…”

“También es ese mi deseo, señora.”

“Si tan solo pudiese volver a oír la canción de aquel día… Todo el
conocimiento del dominio de la escultura está imbuido en ese cuchillo
u

de tallar.”

“¿Perdón?”

“En el cuchillo de tallar del señor Zahab.”

En ese momento Weed aprovechó para mirar el cuchillo con más atención.
Tenía una sensación en el estómago de que un destino inevitable se
estaba acercando.

NUEVA MISIÓN

[Cumplir la última voluntad de Zahab]


Zahab no ha muerto todavía. La verdad es que ha partido
a un lejano continente a poner a prueba su [Dominio de la
Escultura]. En cuanto adquieras el [Dominio de la Escultura]
deberías buscar a Zahab para aprender la canción ‘El Corazón
de un Escultor’ de su misma boca. Entonces, deberías volver
a cantársela a la anciana doncella. Según los rumores, la
última vez que alguien vio a Zahab, éste estaba cruzando la
Región del Paso Gris.

Nivel de Dificultad: A

Requisitos

Debes completar la misión antes de que la doncella muera.

No se puede cancelar.
Página 71 u

Por aceptar esta misión:

Has aprendido la habilidad [Identificar].

Has aprendido la habilidad [Dominio de la Escultura].


u

Has aprendido la habilidad [Reparar].

Has aprendido la habilidad de [Artesanía].

Una misión en serie con una dificultad de nivel ‘A’, que le otorgaba
cuatro habilidades. Weed no sabía si considerarse afortunado o no.

Por un lado, sabía que era realmente complicado adquirir habilidades


no relacionadas con tu clase. Esas habilidades, como [Identificar] y
[Reparar], que podía aprender sin convertirse en escultor podían resultar
útiles en muchas maneras, pero una misión de nivel ‘A’ iba a estar muy
por encima de sus posibilidades por bastante tiempo, años seguramente.
El nivel medio en ese momento entre los jugadores de Royal Road estaba
sobre 100. Los más avanzados andaban por 300 y poco. La dificultad
de una misión que requiere un grupo bien equilibrado de jugadores de
nivel 300 para completarla se considera de nivel ‘B’.

Eso significaba que acababa de obtener una misión que le exigía tener al
menos nivel 400 para poder emprenderla, ni qué decir para completarla.

Como si eso no fuese ya lo bastante malo. La región del Paso Gris era
una de las diez zonas más peligrosas, habitada sólo por los monstruos
más salvajes. Era una de las diez zonas prohibidas del continente, donde
sólo poner un pie suponía acabar hecho pedazos.

‘¡Maldición! Sólo se pueden tener tres misiones activas al mismo tiempo.


Ahora que una de ellas está ocupada por [Cumplir la última voluntad de
Zahab], sólo me quedan otros dos espacios para nuevas misiones.’
Página 72 u

Pero, al ser una misión en serie, era imposible predecir qué recompensa
le esperaba al final. Y esta cadena le acababa de ofrecer una clase secreta
en tan solo la segunda misión. Aun habiéndola rechazado, le había
concedido cuatro habilidades muy prácticas. No podía imaginarse qué
recompensas podría haber en la última misión.
u

Weed no era tan estúpido como para dejar pasar una buena oportunidad.
Pero aún no tenía claro cuándo o cómo la iba a poder aprovechar. Se
despidió de la anciana doncella y volvió a la tienda de esculturas.

“Oh, señor Weed, agradezco tu esfuerzo por traerme resultados tan


pronto. Me has demostrado que no erré al contar contigo para esta
misión.” — dijo el vendedor.

El vendedor le pagó como recompensa por completar la tarea. Weed


recibió dos monedas de plata, recuperando la moneda que le había
sido virtualmente robada por el bardo. Cuando regresó al Salón de
Entrenamiento, recibió otra moneda de plata, junto con algunos elogios
del instructor. Así pues, hasta el momento había logrado ganar cinco
monedas de plata.
También había subido dos niveles, hasta nivel 3. Distribuyó los puntos
obtenidos equitativamente entre [Fuerza] y [Agilidad].

‘¿Por qué no empezar otra misión?’ —se preguntó.

Weed luchó contra la tentación y, finalmente, terminó cogiendo la


espada de madera de nuevo. Una misión que no se había dado a conocer
al público como la que acababa de hacer era algo inusual. Por eso había
conseguido unas recompensas tan generosas para su nivel.
Página 73 u
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 4
Weed, el terrible

La civilización en el Continente de Versalles se remonta


aproximadamente a un millón ochenta mil años. Por aquel
entonces, humanos, elfos, enanos y orcos vivían juntos.
Página 74 u

Las diestras mujeres enanas hacían de matronas de los niños


orcos. Los pequeños orcos eran bautizados por las elfas, y
las humanas los bañaban en aguas claras. Las cuatro razas
vivían juntas, compensando lo que les faltaba a las otras. Los
cazadores elfos reunían frutas de los árboles, los artesanos
enanos creaban herramientas, y los exploradores humanos
u

salían de caza junto a los guerreros orcos. Dado que había una
abundancia de monstruos mortales en el mundo, los débiles no
tenían elección, pero la supervivencia común se debía a todos.

Los orcos, que maduraban en unos dos o tres años, eran grandes
guerreros por naturaleza. Nacidos con una fuerza antinatural e
instinto de batalla, protegían tanto a humanos como a elfos. Así
los orcos reclamaron el liderazgo de las cuatro razas basándose
su cantidad y fuerza, ya que ninguna de las otras razas podía
compararse con la fecundidad y habilidades de combate de los orcos.

Con el paso del tiempo, los humanos desarrollaron las técnicas


agrícolas, haciendo común el uso de plantas y animales y se
fueron haciendo cargo de la cadena alimenticia, desafiando
gradualmente la supremacía orca. Los elfos, que habían aprendido
la magia espiritual y elemental y vivían en consonancia con la
Naturaleza, se volvieron arrogantes, y empezaron a alejarse de
los orcos, a los que consideraban como unos bárbaros ignorantes.
Los enanos mejoraban día tras día la tecnología del metal, lo
que al final les dio un medio para oponerse a la tiranía orca.

Tras una serie de desacuerdos hostiles y ataques de celos,


la alianza de las cuatro razas se desmoronó. Los humanos
construyeron ciudades, que más adelante se unieron formando
reinos en zonas fértiles. Los elfos se mudaron a los Bosques sin
Retorno, donde el efecto de los elementos y los espíritus se veía
incrementado, ampliando vastamente su dominio de la magia.
Los orcos se dispersaron por todas partes, cazando bestias salvajes
y alarmando a voluntad las zonas civilizadas, disfrutando del
combate sin restricciones. Los enanos se mantuvieron aislados
en las montañas, excavando metales y refinándolos con sus artes.
Página 75 u

Inevitablemente, humanos y orcos empezaron a


enfrentarse por los escasos alimentos, mientras que los
enanos y los elfos se despreciaban mutuamente en un
intento de imponer su supremacía sobre el reino natural.
u

Esta es la historia de la creación del Continente de Versalles: ‘El mito


olvidado de las cuatro razas’.

uuu

Los rumores sobre un extranjero que era diferente a los demás se


dispararon como la pólvora en la Ciudadela de Serabourg. Se hablaba de
una bestia que había estado blandiendo una espada de madera contra
un espantapájaros sin decir una sola palabra durante cuatro semanas
seguidas en el Salón de Entrenamiento.
¡Zas!

¡Pok!

Weed blandía la espada de madera en silencio. Sus ataques al


espantapájaros no mostraban piedad. Cada vez que la espada impactaba
en el muñeco el golpe resonaba con fuerza a su alrededor. Al principio
se conformaba con rozar al espantapájaros. Pero, a medida que
aumentaban su [Fuerza] y [Agilidad], los impactos habían ido ganando
poder.

“¿De verdad es un usuario?”

“¿Crees que es una persona real? No lo creo.”

“Míralo, seguro que no lo es.”


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“¿Puede ser un PNJ?”

“Teniendo en cuenta su repentina aparición…”

“¡Tiene que ser un PNJ relacionado con alguna misión!”


u

Los ojos de algunos jugadores empezaron a brillar entusiasmados


y un puñado le ofrecieron dinero y comida para ganarse su favor,
preguntándose si sería un PNJ de alguna misión. Demasiado orgulloso
como para aceptar que le tratasen como a un simple mendigo, Weed
rechazaba las ofertas, pero eran persistentes.

“Vamos, por favor, acepta esto…”

“¿Quieres otra cosa? Solo dime qué quieres e iré a traértelo.”

“¿No crees que una espada de acero es mejor que una de madera? Puedo
darte una espada larga, ya verás lo útil que resulta.”

Acosaban a Weed con la esperanza de que les ofreciera una misión


especial. Aunque tampoco lo tenían claro, ya que Weed no dejaba de
insistir en que no era un PNJ y los despedía sin más, diciendo que
interrumpían su entrenamiento. Lo más raro de todo era que esa actitud
no hacía más que reforzar sus convicciones.

“No acepta ningún regalo.”

“¿Cómo puede golpear el espantapájaros, no por uno o dos días, sino


por cuatro semanas seguidas?”

“¡Y es un buen amigo del instructor…!”

El instructor, que siempre había menospreciado a los jugadores como


si fuesen una molestia, era amable con Weed, llegando al punto de
compartir su almuerzo con él cada día. Para el público, Weed era
cualquier cosa menos un ser humano. La única forma de diferenciar a
un usuario de un PNJ era cuando mostraba su ficha de juego. Por eso
Página 77 u

los demás confundían a Weed con un PNJ.

Un buen número de jugadores de nivel más alto comprendieron las


intenciones de Weed de mejorar sus atributos. Se le acercaron y le
hablaron amigablemente. Estos tenían las cosas claras, a sabiendas de
que era un jugador.
u

“Si te unes a mi clan, te apoyaremos en todo momento.”

“Nosotros correremos con todos los gastos hasta que llegues al nivel
100.”

Royal Road tenía un concepto de clanes distinto al de los demás juegos


online: había un objetivo mayor…

¡La posición de Emperador!

El objetivo de los clanes con miembros de alto nivel era entronar a un


rey… fundar su propio Imperio en el Continente de Versalles, y gobernar
sobre todos los súbditos. Con los impuestos recaudados cada mes, los
gobernadores y los monarcas podían construir edificios básicos, como
graneros o herrerías, en las ciudades que controlaban, así como usar el
dinero en alistar soldados y entrenarlos.

Si un buen gobernante administra los asuntos de una región, la economía


y la tecnología de ésta avanzan. Y estas innovaciones tecnológicas
propician la aparición de un mejor armamento en las herrerías,
afectando de paso la seguridad pública y la sanidad de la población,
factores determinantes para el tamaño de una población.

El Emperador era la cima de una estructura jerárquica piramidal, con


una autoridad suprema que le permitiría definir las políticas nacionales
y regionales, así como establecer lazos diplomáticos con otros reinos.
Los reyes gestionaban las ciudades y las fortalezas con la intención de
expandir sus propios dominios, atrayendo a inmigrantes que pasaban
a convertirse en nuevos súbditos sujetos a su mandato. Este proceso
a veces generaba problemas internos, y también había que tener en
cuenta la posibilidad de que estallara una guerra.
Página 78 u

En una guerra, los ejércitos reunidos por reyes ávidos de poder se


enfrentan entre sí, liderados por sus respectivos generales. Los jugadores
normales, en las posiciones de súbditos, pretendían que los gobernantes
usuarios fueran sabios y justos. De esta forma, las ciudades en las que
residían se harían más prósperas, y el comercio de bienes se haría más
dinámico, lo que estimularía a los jugadores a tener éxito en el juego.
u

Aun así, Weed rechazaba todas las ofertas.

¡Ding!

[Fuerza] ha incrementado en 1 punto.

[Agilidad] ha incrementado en 1 punto.

[Fama] ha incrementado en 20 puntos.

[Salud] ha incrementado en 100 puntos.


La espada de madera, que hasta entonces no había dejado de moverse,
se detuvo de pronto en medio del aire. Weed cerró los ojos.

‘Lo conseguí.’

Tras cuatro semanas en el tiempo del juego, Weed había mejorado sus
atributos tanto como era posible en el Salón de Entrenamiento. Para su
sorpresa, había ganado algo de [Fama]. Nunca estaba de más tener algo
de [Fama]. Cuanta más [Fama] obtenías, podías comprar más barato
en tiendas o herrerías, y recibir más respeto al hablar o negociar con los
PNJs.

El instructor, que había estado observando su esfuerzo desde la distancia


se le acercó y dijo:
Página 79 u

“Buen trabajo, señor Weed.”

“Gracias, maestro.”

“No esperaba que llegases tan lejos. Pero has superado mis expectativas.
u

Estoy muy orgulloso de ti.”

“Se lo debo a sus enseñanzas, respetable maestro.”

“¡Jajaja! Tienes toda la razón” — dijo el instructor riendo complacido.

Weed sabía muy bien lo que unas simples palabras podían mejorar el
ánimo del instructor.

El instructor le alcanzó una espada a Weed.

¡Ding!

Has obtenido una Espada de hierro resistente.


“¿Qué es esta espada…?”

“Es tuya. Es una recompensa para quienes completan el programa


básico de entrenamiento.”

“Programa básico…” —de pronto se le ocurrió una pregunta.

Había descubierto por casualidad que podía mejorar sus atributos con
los espantapájaros del Salón de Entrenamiento. Mientras exploraba las
comunidades online sobre el juego, dio con un hilo al respecto en un foro
por el que se comunicaban algunos clanes menores. Por eso se había
centrado en mejorar sus atributos lo más posible antes de ponerse en
serio con el juego.
Página 80 u

Weed tenía una buena razón para hacerlo así, aunque reconocía que
podía parecer ineficiente gastar cuatro semanas para mejorar los
atributos lentamente, punto a punto. Por lo que los usuarios sabían,
era mejor dedicar menos tiempo para adquirir un objeto que mejorase
sus atributos con esa misma cantidad de puntos. Pero, para Weed, no
era lo mismo que entrenar duro para mejorar los atributos básicos de tu
personaje. Esto marcaba una diferencia, una gran diferencia.
u

Dependiendo de tu suerte, podías recibir un buen objeto en un viaje,


pero tus atributos básicos se mantendrían fijos, sin importar qué llevaras
equipado. Supongamos que aumentases en cuarenta puntos tu [Fuerza],
y entonces te pusieras un collar que la aumente otros cincuenta puntos.
Los atributos que Weed había mejorado en el Salón de Entrenamiento
se quedarían con él hasta su último minuto en el juego.

Weed reflexionó sobre el significado del último comentario del instructor,


y al fin preguntó:

“¿Sabe cuánta gente ha completado el entrenamiento básico por ahora?”

“En este Salón, dieciséis” —respondió el instructor de inmediato, y


después añadió— “El Continente es vasto, señor Weed. Creo que habrá
unos tres mil ochocientos extranjeros que lo han terminado. Pero, hasta
donde sé, nadie lo ha conseguido tan rápido como tú.”

‘¡Tres mil ochocientas personas!’ —los ojos de Weed brillaban.— ‘Esos


son mis rivales en potencia.’

Su siguiente pregunta rompió el breve silencio.

“Dice que este es el entrenamiento básico. ¿Ofrece algún entrenamiento


más avanzado en este centro?”

“No, pero sí existe en otros lugares.”

“¿Dónde?”

“No sé dónde se encuentran. He oído que sólo están abiertos a aquellos


Página 81 u

destinados a encontrarlos. Debes terminar el nivel básico para acceder


al siguiente.”

“Gracias por esta información, honorable instructor.”

“No hay de qué.”


u

Weed ya había terminado en el Salón de Entrenamiento. Cuando se


estaba dando la vuelta, listo para irse, el instructor le llamó una vez
más.

“Señor Weed, ¿tienes algún plan?”

“¿Cómo dice, maestro?”

“Una fuerza expedicionaria está programada para partir hacia la guarida


de Litvart dentro de una semana. Un colega mío es el comandante de
la fuerza. Su nombre es Midvale. Si no tienes nada mejor que hacer por
ahora, ¿por qué no les ayudas?”

¡Ding!
NUEVA MISIÓN
[Operación de Limpieza en la guarida de Litvart].

El Reino de Rosenheim lleva tiempo sufriendo los ataques


de los monstruos, cuyo número ha aumentado en las
últimas décadas. El Rey Theodarren, recto y benevolente
gobernante del país, ha emitido un decreto real según el
cual un distinguido caballero, Sir Midvale, irá a explorar
y a limpiar de monstruos la guarida de Litvart. Erradica
los monstruos de esa madriguera junto a Sir Midvale y sus
soldados.

Nivel de dificultad: E
Página 82 u

Restricciones

Fallo al morir.
u

La propuesta del instructor era una misión que cualquier otro jugador
se apresuraría en aceptar. El Ejército Real de Rosenheim contaba con
soldados bien entrenados y organizados. El nivel medio de la infantería
era casi de 30 y, por lo general, un Caballero superaba el nivel 150.

En particular, los Caballeros que tenían nombre entre sus filas estaban
considerados como Caballeros con Título. Sus niveles rondaban entre 180
y 220. Una fuerza así podía limpiar cualquier madriguera sin problemas.
Y la guarida de Litvart no sería, probablemente, una excepción. Según
las investigaciones de Weed, la guarida de Litvart estaba infestada de
kobolds con niveles rondando el 20 y goblins de nivel 50.

Todo lo que Weed tendría que hacer si se unía a la misión era mantenerse
con vida, tomase o no parte activa en el combate. Era una oportunidad
de oro ofrecida de buena voluntad por el instructor. Pero Weed sacudió
la cabeza.

“Lo siento, maestro.”

Has rechazado la misión.

“¿Cómo? ¿Hay algo que te preocupa, señor Weed?”

“No es nada, mi problema es que aún no tengo una clase.”

“¡Oh! Por Freya… ¡tienes razón! Me he apresurado. Visítame cuando


quieras. Te haré saber si sé de alguna misión que te vaya bien.”
Página 83 u

El instructor no sólo tenía nivel 200, sino que también seguía en contacto
con los soldados que entrenaba. En otras palabras, tenía su red privada
en el Ejército Real. Y, por fortuna, su posición relativamente humilde
evitaba que le acosasen los oficiales de mayor rango.

De pronto, el instructor bajó la voz y le preguntó:


u

“Señor Weed, ¿ya sabes qué a clase quieres acceder?”

“Aún no lo he decidido. Iré al gremio de información a ver qué me


recomiendan.”

El gremio de información aconseja a los jugadores, según sus atributos


y habilidades. En las primeras fases, la mayoría de los jugadores tienen
un mismo camino, por lo que el gremio de inteligencia los clasifica en dos
grupos: clases de combate (cuerpo a cuerpo o apoyo) y no combatientes,
donde están incluidos los mercaderes, entre otros. En contadas ocasiones,
el gremio desvela una clase secreta. En muy contadas ocasiones, de
hecho.

“Sólo te digo esto porque eres un… una persona digna de confianza,
que ha rechazado la oportunidad de convertirse a una clase tan patética
como la de escultor. Dime, con franqueza, señor Weed… ¿lamentas no
haber aceptado el cuchillo del tallador?”

“¡En absoluto, maestro! Nunca, por nada del mundo, me haría escultor.”

“Hmm… nunca le he dicho esto a nadie… eres el primero. Acércate.”

La voz del instructor se convirtió en un murmullo; le susurraba en el


oído. A Weed se le puso la piel de gallina al sentir el aliento del instructor
en el rostro, que le parecía el de un ogro; pero evitó que la sensación de
desagrado se le notase en la cara.

“Estás buscando una buena clase. Y yo te voy a ayudar. ¿Has oído


hablar de Rodrias, el Sabio?”

“Sí, maestro.”
Página 84 u

“Ve a visitarle. Está reconocido como la Estrella de la Sabiduría, y es


reverenciado por su conocimiento en todos los campos. Él te dirá cuál
es la profesión que mejor se te adapta, mucho mejor de lo que te digan
en el gremio de información. Pero…”

“¿…?”
u

“El problema es que el Sabio es un bicho raro. Peor aún, nunca sabes
por dónde te puede salir. Es malhumorado, desagradable y estrecho de
miras.”

“…”

“Normalmente, no podrías reunirte con él. En primer lugar, ni se


molestaría en escucharte. Pero si le das esto, te hará un favor una sola
vez.

¡Ding!
Has obtenido el Pañuelo de la Reina Evane.

“Gracias, honorable instructor.”

“En absoluto. Me siento responsable de tu decisión, pues es cierto que


muchos espadachines no lo hacen tan bien como los Escultores de la Luz
de la Luna. Rezo a Freya para que consigas una buena clase. Cuídate
del Sabio Rodrias. Es un desvergonzado, así que no deberías contarle
nada hasta que acceda a hablar contigo.”

Weed se despidió del instructor y cuando salía del edificio se le acercó


un hombre inmenso. El gigante se llamaba Python, y se trataba de un
guerrero temerario con una espada gigante.
Página 85 u

“¿Ya te vas?”

“Sí.”

“Hmm… ¿A dónde vas?”


u

“En primer lugar, a buscar una clase; después, a esforzarme en subir de


nivel.”

“Seguro que llegarás pronto a los puestos más altos. ¡No he visto a nadie
más entregado a un juego online! Aunque estoy orgulloso de lo duro que
soy, he de reconocer que tú eres un auténtico hombre de hierro.”

Python era un guerrero de nivel 288. Acababa de adquirir una nueva


habilidad, por eso había venido a experimentarla en el Salón de
Entrenamiento. Cuando llegó, el lugar estaba lleno de usuarios que se
habían reunido para observar a Weed.

Python también era un hombre curioso. Algunos pensaban que Weed


era un NPC pero cuando éste, apretujado entre la multitud, escuchó
que así se podían mejorar los atributos, empezó a golpear el muñeco que
estaba al lado del de Weed.
La fuerza liberada por los ataques de Python había sido sorprendente. Al
haber más gente haciendo lo mismo que él, Python había desviado, sin
pretenderlo, parte de la atención del público que se había concentrado
alrededor de Weed.

Durante la última semana, Python había sido el único jugador con el


que Weed había hablado.

“Gracias por el cumplido.”

“De todos modos, ¡no veo la hora! El día que nos enfrentemos. No me
decepcionarás, ¿verdad?”

“Estarás más que decepcionado.”

“¿Eh?”
Página 86 u

“Al darte cuenta de cuán débil eres; soy mucho más persistente de lo
que piensas.”

“¡FWAA...! ¡UAAAJAJAJAJA...! —Python empezó escandalosamente


a reírse. Con nivel 280 estaba entre los más fuertes del juego, y todo el
mundo le trataba con respeto. Le intrigaba Weed, que podía hacer un
u

comentario así a alguien que era mucho más poderoso que él.

Python entrecerró los ojos, algo más serio, ahora.

“Lo estaré esperando con impaciencia.”

“Cuídate.”

Weed se despidió de él, y se dirigió a la mansión de Rodrias, el Sabio.

‘Rodrias, el Sabio, la Estrella de la Sabiduría, el que todo lo sabe. Él me


indicará qué clase debería escoger.’ —se dijo a sí mismo.
uuu

La mansión del Sabio Rodrias estaba ubicada en la zona norte de


la Ciudadela de Serabourg, y tenía soldados de guardia en todo su
perímetro. En cuanto Weed se acercó a la puerta, dos soldados le hicieron
detenerse.

“¡Alto! ¿Qué negocio te trae hasta aquí, extranjero?”

“Vengo a visitar al Sabio. Tengo algo para él que el instructor del Salón
de Entrenamiento me ha confiado.”

“Pues lo siento. Comprendo que tienes negocios de los que tratar, pero el
Sabio no espera a nadie tan poco conocido.” —le respondió el soldado
Página 87 u

con un tono que indicaba obviedad.

“Pero tengo un artículo que el instructor me pidió que le entregase en


persona.”

“Eso no es asunto mío. ¿Crees que se te permitirá reunirte con Su


u

Señoría sólo porque tienes algo que entregarle?”

“…”

En resumen, se necesitaba una reputación o [Fama] impresionantes


para poder visitar a nobles o reyes, y su fama sólo era de 20, demasiado
baja como para acceder a la mansión del Sabio.

“Yo conozco al instructor. Una vez me entrenó él mismo. Pero aun así,
no puedo dejarte entrar.”

“Ya que insistís en eso, ¿puedo esperar aquí siempre que no entre en la
mansión?”

Los guardias estaban perplejos ante la pregunta de Weed.


“Explícate, viajero.”

“Pregunto si os importa que me siente en la calle a esperar que el Sabio


salga.”

“En absoluto” —dijo el soldado con indiferencia.— “La calle es libre


para todo el mundo.”

Weed asintió ligeramente.

“Gracias por su permiso.”

“No hay que darlas. Pero…”

“¿Sí?”
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“Te digo esto porque eres un conocido del instructor… el Sabio suele
encerrarse durante semanas. Sobre todo cuando un invitado no deseado
llama a su puerta, lo más seguro es que no salga. ¿Aun así estás dispuesto
a esperar?

Liu Bei había visitado a Zhuge Liang tres veces antes de lograr
u

reclutarlo4, y al final resultó ser la clave para fundar una nueva dinastía
en el suroeste de china. Recordando el histórico evento, Weed asintió.

“Sí.”

Weed se sentó frente a la mansión, esperando que el Sabio saliese en


cualquier momento. A veces charlaba con los guardias, y pronto
descubrió que el instructor era muy respetado entre los miembros de
menor rango de la guardia.

“Un hombre que en una ocasión soñó con ser Caballero, y está ahora
perfectamente capacitado para serlo.” —dijo uno de ellos.

4
En el siglo XIV, en la novela histórica del Romance de los Tres Reinos escrita por
Luo Guanzhong, Liu Bei fue retratado como un hombre virtuoso y carismático que
se elevó de un tejedor humilde de paja al emperador.
Mientras tanto, cayó la noche y la mansión del Sabio quedó a oscuras.

‘Mentiría si dijese que contaba con reunirme con él a las primeras de


cambio. Pero no puede quedarse ahí dentro para siempre.’

Weed consideró inútil quedarse de guardia mientras el Sabio dormía.


Así que abandonó su posición y se dirigió hacia las puertas de la ciudad.

La luz de la luna aumentaba la brutalidad de los monstruos en el


Continente de Versalles. Se hacían un cincuenta por ciento más fuertes,
pero a cambio daban un treinta por ciento más de puntos de experiencia.
Esto hacía que los usuarios estuviesen más atentos para evitar morir.

Esa noche marcaba la primera aventura de Weed fuera de la Ciudadela.


En un amplio campo abierto, un puñado de jugadores corría detrás de
zorros, conejos y mapaches; una escena plagada de novatos, a los que
Página 89 u

Weed estaba a punto de unirse.

“Veamos, ¿qué puedo usar como arma?”

Sacó la espada de hierro que le había dado el instructor y la sujetó con


fuerza.
u

“Examinar Espada de Hierro Resistente.”

Espada de Hierro Resistente

Durabilidad: 54/54 [Daño]: 10-14

Recompensa otorgada a los que han completado el programa


de entrenamiento básico. Esta espada de fácil manejo es
mejor que las básicas disponibles en las herrerías.
Requisitos:

[Fuerza] debe ser superior a 40.

[Vitalidad] debe ser superior a 35.

Efectos:

Aumenta la [Fuerza] en 10.

La espada que le había dado el instructor era una de las mejores a las
que podía acceder. La blandió un par de veces, notando que tenía un
equilibrio perfecto, y se sintió cómodo con ella. Weed comprobó su otra
Página 90 u

arma.

“Examinar Cuchillo de Tallar.”


u

Cuchillo de tallar de Zahab

Durabilidad: 948/1000 [Daño]: 40-54

Un pequeño cuchillo de tallar, fabricado especialmente


para obras delicadas. Este cuchillo está muy afilado.

Efectos:

Mejora la posibilidad de golpes críticos.


El cuchillo hacía más daño que la espada, pero Weed escogió esta última.
Por un lado, era más larga y tenía mayor alcance. Con el cuchillo de
tallar le resultaría difícil acercarse al enemigo. La espada era más útil a
la hora de eliminar monstruos.

Además, el cuchillo de tallar no se estropearía fácilmente, debido a su


alta durabilidad. Esa ventaja era importante para Weed, que había
obtenido la habilidad [Reparar], y la espada ofrecía más oportunidades
de mejorar la habilidad al ser comparativamente más frágil, requiriendo
un mantenimiento más frecuente.

‘Genial. Creo que ya estoy listo.’ —Weed lanzó un par de tajos al aire.

‘Mapaches, zorros, lobos, venid a mí. Acabaré con todos vosotros.’

En el momento en que iba a empezar…


Página 91 u

“Perdona…” —alguien habló con Weed, que caminaba en silencio—


“¿Estás solo?”

Weed se dio la vuelta. Vio a una chica guapa detrás suyo con un sombrero
de algodón y una armadura de cuero azulada.
u

‘Una chica’ —pensó Weed.

“Sí, no estoy con nadie.” —dijo Weed, bajando su tono de voz.

“¿Quieres unirte a nosotros para una misión de caza? Tenemos una


maga, una clériga, un arquero y una monje.”

Weed miró más allá de la chica antes de responder. Había dos jugadoras
con túnicas y un chico que supuso que sería el arquero. Al verlos,
comprendió porqué le estaban pidiendo a un extraño que se uniese a
su equipo. Todos eran unos debiluchos, con ropa y armadura de piel,
limitados a ataques a distancia, por eso necesitaban una última pieza,
un guerrero de cuerpo a cuerpo que les protegiese.

‘No está mal. Es mi primer combate y, seguramente, es mejor empezar en


equipo. Siempre es mejor prevenir que lamentar.’ —pensó.

Weed accedió rápidamente.

“Me parece bien.”

“Gracias.”

Weed se unió rápidamente al equipo.

“Encantada de conocerte. Soy Irene, una sacerdotisa de nivel 7. Me


especializo en curación y protecciones divinas.”

“Yo soy una maga de nivel 6, mi nombre es Romuna. Mi elemento


principal es el fuego.”
Página 92 u

Las dos chicas se presentaron primero y entonces le llegó el turno al


chico. Estudió la cara de Weed con curiosidad antes de hablar.

“Pale, arquero de nivel 6. Tienes agallas, saliendo a cazar solo de noche.”

“Jeje, y yo soy Surka, una monje de nivel 7.”


u

Los miembros del equipo le habían dado sus nombres y niveles, y ahora
era el turno de Weed.

“Mi nombre es Weed. Nivel 3…”

“…”

Se hizo un silencio incómodo.

Pale reunió el coraje y preguntó:

“¿Y cuál es tu equipo?”

“Todo lo que tengo es esta espada.”


“…”

Contando hasta el polvo de sus bolsillos, Weed sólo tenía cinco monedas
de plata. Tanto una buena armadura de piel como otros productos
cuestan treinta monedas de plata. Weed no se había molestado en hacer
misiones normales, por lo que no tenía dinero ni para comprar una
armadura de piel.

“¿Y tu clase es…?”

“Sin decidir.” —respondió Weed, sacudiendo la cabeza con dudas.


Sentía que algo andaba mal, aunque no lograba precisar el qué.

“¡Dios!” —Pale, por fin, volvió a respirar. Parecía completamente


perdido.
Página 93 u

“Supongo que es tu decisión tomarte algo de tiempo en elegir una


clase… Por cierto, parecía que ibas a cazar solo. ¿Es tu primera vez
aquí fuera?”

“Sí, soy nuevo en los juegos de Realidad Virtual.”


u

“Ya veo, ¿por qué no me sorprende?”

Al oír la franca respuesta de Weed, Irene y Romuna miraron a Surka


acusadoramente. Como culpándola por haber elegido a la persona
equivocada.

Nivel 3 y con la clase aún por decidir. Como si eso ya no fuese lo bastante
malo, el chico de aspecto lamentable era un novato en la realidad virtual.
A menudo, la falta de experiencia resulta fatal al enfrentarse por primera
vez contra un monstruo. Habitualmente, se pierde la calma, la razón y
la vida, en ese orden.

Lo sabían muy bien porque ya habían pasado por el hecho de ser los
novatos.

Estos animales, a pesar de estar hechos a medida de los novatos que


rondaban la Ciudadela, aún eran relativamente fieros y fuertes. Todo
un desafío para un solo jugador.

“Fiuuu… Creo que tenemos un ligero problema.” —Pale no sabía qué


decir, así que sonrió evasivamente.

Weed decidió poner las cartas sobre la mesa para aliviar la tensión.

“Si creéis que haré más mal que bien, no tengo problemas en dejar el
grupo.”

“Lo siento.” —Surka, reconociendo su error se inclinó en señal de


disculpa. Al fijarse mejor, vio que Weed llevaba un gi5 básico.

‘Había pensado que sería fuerte al tener una espada de hierro. ¡Vaya! ¿De
dónde la habrá sacado? Parece realmente buena…’ —se dijo a sí misma.
Página 94 u

Weed se alejó del grupo y se dirigió en solitario a la zona de caza. Pale y


Surka se sentían culpables por haberle echado del grupo.

“¿Qué deberíamos hacer ahora? ¿Buscar un reemplazo?”

Había reemplazos por todas partes. Lo único que había en abundancia


u

en el Continente de Versalles eran jugadores, hasta monstruos había


pocos…

“Mira, ya nos hemos presentado.”

“Si luchamos como un equipo, no habrá problema, ¿no creéis?”

“Supongo, pero…”

“Vamos a intentarlo, por lo menos.”

Alcanzaron a Weed, que estaba ocupado estudiando a un grupo de

5
Se refiere a un Keikogi, el uniforme de entrenamiento de las artes
marciales.
conejos y mapaches que saltaban cerca de su posición. No sabía nada
de los monstruos en general; ni cuánto daño podían causar o cuáles eran
sus patrones de ataque.

“Perdona” —le llamó Pale,— “si sigues interesado, nos gustaría que
vinieses.”

“Tengo un nivel bajo. Si no os importa, me gustaría ir con vosotros.”


—respondió Weed, con cautela.

“Bien, eso nos basta. Ahora somos un equipo. No hace falta que te
fuerces en primera línea y, si te parece necesario, puedes ponerte detrás
nuestro.”

Pale sugería a Weed que se ocultase en vez de tomar un papel activo en


la caza. A sus ojos, no era más que un completo novato.
Página 95 u

“¿Estás seguro?”

“Sí. Aunque no puedas ganar mucha experiencia, ya que estás


entorpeciendo la labor de tu equipo sin contribuir, tu prioridad actual
es subir de nivel. Mira, pasar del nivel 3 al 6 supone una completa
diferencia, aunque sólo sean tres niveles de diferencia. Si estás al 3 y has
u

puesto todos tus puntos en [Fuerza], tendrás 25. Yo tengo 40. Súmale los
10 puntos por aceptar una clase y la diferencia entre nosotros disminuye
notablemente.”

“…”

Pale no lo había dicho, pero había otras ventajas más importantes


dependiendo de la clase del jugador. Por ejemplo, si se comparan un
arquero y un guerrero armados con una espada, el guerrero puede causar
el doble de daño. Por otro lado, sus flechas harían la mitad de daño que
las del arquero. Por eso les había decepcionado que no tuviese clase.

“Por ahora, ponte detrás y mira cómo acabamos con los monstruos,
amigo Weed. Si ves una oportunidad, aprovéchala y luego apártate
del combate. Serás útil si puedes confundirlos y desviar la atención del
oponente.

Weed asintió.

“Entendido.”

Resuelta la confusión, Weed decidió unirse al grupo e ir a cazar con


ellos. Era un grupo diseñado para cazar monstruos torpes cerca de
la Ciudadela, y sus compañeros ya habían practicado juntos con
anterioridad. Pero se habían dado cuenta que era demasiado arriesgado
dejar que sólo Surka, una monje cuya agilidad para esquivar suplía su
baja defensa, estuviese sola en primera línea. Por eso habían buscado
un nuevo compañero cuerpo a cuerpo.
Página 96 u

uuu

“¡Maldita sea!”

Ahn Hyundo, sucesor de Bonkuk Kumdo, que dirigía una de las escuelas
u

tradicionales de esgrima en Corea, apretó los labios insatisfecho. En el


dojo6, cientos de jóvenes y adultos practicaban Kumdo7 lanzando gritos
de batalla; kihap según el lenguaje de Bonkuk Kumdo.

“¡Hap!”

“¡Hap!”

Ahn podía oír los kihaps y los silbidos de las espadas moviéndose.
Cuando dominas la espada, un sonido te basta para saber el nivel de otra

6
Espacio destinado a la práctica y enseñanza de la meditación y/o las
artes marciales en Japón.
7
El Hankumdo o Kumdo, literalmente significa “Arte del manejo del
sable coreano”.
persona. Ahn estaba considerado como el máximo maestro de Kumdo
a nivel mundial, habiendo sido cuatro veces Campeón del Mundo en la
modalidad Espada Recta.

A medida que iba haciéndose mayor, se fue retirando a su dojo, dedicando


su tiempo y energía a la siguiente generación de practicantes de Kumdo,
pero ni su mano ni su cuerpo habían dejado la espada de lado en ningún
momento.

‘Nunca he visto a nadie con tantas agallas. Tenía que haber entrenado al
chico en condiciones cuando aún estaba aquí. Tiene algo, algo que puede
superar mi talento. Y además tenía el valor necesario…’

Para Ahn, le era suficiente con tener un buen número de aprendices


competentes. Muchos tenían suficiente talento como para aspirar a una
medalla en el Campeonato Mundial que se celebraba cada cinco años.
Página 97 u

Pero un día, vio como todas sus esperanzas se vieron superadas.

uuu
u

Un año antes, un joven de unos veinte años visitó el dojo de Ahn.

“Buenas, soy Lee Hyun. He venido porque me han dicho que éste es el
mejor dojo.”

“Hijo, ¿alguna vez has manejado una espada?”

“No, señor, por eso estoy aquí.”

“Cierto, tienes que aprender. Aprender y aprender hasta que comprendas


la grandeza de la espada; y entonces veremos quién es el mejor.”

Ahn creyó que eso era todo, y se olvidó del joven por un tiempo.
Entonces, una mañana, vio a Lee Hyun blandiendo la espada a plena
luz del sol.

Lee Hyun manejaba la espada durante horas. Sus movimientos


se sincronizaban con su respiración, y la espada creaba un sonido
armonioso. Ya había alcanzado tal estado que un principiante tardaría
meses en alcanzar. Ahn llamó a sus instructores subordinados y les
preguntó sobre el joven que tan devotamente se entregaba a incesantes
prácticas repetitivas.

“Si hablas de ese estudiante, tiene talento. No he visto a nadie tan


obsesionado con el entrenamiento en mi vida.”

“¿Cómo de obsesionado dirías que está?”

“Cuando coge una espada, no la suelta hasta que se la quitamos de las


manos.”
Página 98 u

“¿Tienes que quitarle la espada de las manos para detenerlo?”

“Sí, maestro. Si le dejamos seguir, continúa hasta quedar completamente


sin aliento. En su primer día en el dojo blandió la espada hasta tener las
manos completamente destrozadas y llenas de sangre.
u

“¿Llegó hasta ese extremo…?”

“Sí, maestro. Y pasó exactamente lo mismo el segundo día. Practicó


las técnicas hasta que se le formaron callos en las manos. Su agarre se
volvió firme y sus manos, duras como rocas. Así que no es de extrañar
que haya alcanzado este nivel tan rápidamente.”

“¡Es increíble!” —Ahn ya había escogido a Lee Hyun como su sucesor,


pero no se lo comento a nadie.

Talento y esfuerzo. El alumno tenía ambas virtudes; y lo que realmente


capturó la mente del maestro fueron sus ojos. Cuando Ahn veía entrenar
al aspirante a sucesor, en sus ojos brillaba algo característico: era el
deseo de luchar, que en el hombre moderno había sido desplazado por la
civilización, pero que en Lee Hyun estaba en la forma más pura.
Aún se encontraba en pleno aprendizaje. Ahn creía que era pronto para
contarle sus planes a Lee Hyun, algo que podría hacer peligrar sus
progresos. Por eso, el maestro había tratado a su aprendiz con fingida
indiferencia, motivándole con múltiples objetivos y observando sus
progresos desde la distancia.

Pero, de pronto un día, Lee Hyun dejó de pasar por el dojo.

uuu

De vuelta en el presente.
Página 99 u

“¡Ah…!” —los suspiros de Ahn se hacían más profundos.— “Me


pregunto qué estará haciendo. Tenía que haberle nombrado mi sucesor
cuando aún estaba aquí.”
u

uuu

A cubierto tras Pale, Weed observaba el combate fuera de peligro.

“¡Irene, ayúdame!”

“¡Entendido! ¡[Bola de Fuego]!” —Romuna se metió en el combate.

“Poder divino, guíanos al triunfo. ¡[Bendición]!”

Mientras Surka, la monje, encaraba al zorro cara a cara, Pale e Irene


le atacaban desde la retaguardia. Adoptaban esta estrategia porque el
nivel de Surka era 7, el más elevado de todos ellos, y el resto eran unos
debiluchos con relativamente poca vida y defensa.
El zorro se movía ágilmente de un lado a otro. Esquivaba casi ileso los
puños de Surka, y a veces atacaba de repente, llegando a hacer algunos
críticos, forzando a la monje a retirarse un poco. Teniendo poco [Aguante],
Surka se veía en situaciones límite a menudo. En ese momento, Irene
le lanzaba una curación rápida para reponer su [Vitalidad] y [Aguante]
mientras los demás atacaban al zorro para atraer su atención y alejarlo.

‘No son malos. El trabajo en equipo del cuarteto está muy coordinado.’

Ni reclamaban objetos ni se peleaban por tonterías. Daba la impresión


que la relación entre ellos debía tener un buen tiempo. Quizás habían
sido compañeros en otro juego online antes de migrar juntos a Royal
Road.

Aun así, tenían que aumentar su ritmo cazando zorros de nivel 5.


Mapaches y conejos eran presas fáciles, de los que Surka podía encargarse
Página 100 u

sola. Pero los zorros eran duros, por decirlo de forma suave.

Weed comprendió que el equipo se centraba en zorros en su caza.


Observó el progreso de la batalla un rato… hasta que creyó haber visto
lo suficiente. Su aguda mirada analizó los patrones de movimientos de
Surka y los zorros.
u

Era más fácil de lo que pensaba. Superaban al enemigo en proporción de


cuatro a uno. Los movimientos del zorro eran lentos y predecibles. Lo
observó hasta ganar suficiente confianza y, apretando la empuñadura
de la espada, abandonó su posición en la retaguardia.

Surka le sonrió al ver que se ponía a su lado.

“Atento, amigo Weed.”

“Sí” —su respuesta fue corta.

Los monstruos que buscaban eran, una vez más, zorros.

“Primero atraigo su atención y tú atacas después, cuando ya estén


bastante heridos.”
Surka lanzaba puñetazos a los zorros, que saltaban hacia ella por
reflejo. Romuna, Pale e Irene atacaban desde atrás con flechas y magia.
Cuando la vida del zorro llegó a un tercio, Weed intervino.

Tenía poca experiencia previa en juegos de realidad virtual, pero


estaba acostumbrado a la espada tras cientos de duelos. Además, había
golpeado el espantapájaros del Salón de Entrenamiento miles y miles
de veces. La espada de hierro dibujó un arco plateado en el aire en una
fracción de segundo, dirigida hacía donde estaba el zorro.

Weed había apuntado con tanta precisión que el zorro no pudo esquivar
el ataque.

¡Golpe crítico!
Página 101 u

Una ventana que sólo él veía apareció ante sus ojos. ¡Un golpe crítico!
Con esos golpes, el daño conseguido se doblaba como resultado de un
ataque efectivo, resultado de un movimiento excelente.
u

¡Zas!

El zorro fue cortado por la mitad y desapareció en un destello. Soltó dos


objetos: una piel de zorro y carne.

Se puede convertir la carne en filetes cocinándola en una fogata, y la


piel de zorro es uno de los materiales textiles más comunes. Ese tipo de
proceso de producción requiere el uso de habilidades relacionadas. Los
novatos no solían aprender ese tipo de habilidades, como por ejemplo
[Cocina] o [Sastrería]. Lo más habitual era que esos objetos terminasen
siendo vendidos en los almacenes.

“¡Vaya ataque! Esta vez has tenido suerte.” —sonriendo Surka


recogiendo los objetos.
Pale y Romuna, que habían estado preparando sus ataques más
poderosos por si acaso, estaban encantados con el éxito de su nuevo
compañero.

“Compañero Weed, nos repartiremos el botín cuando terminemos de


cazar.”

“De acuerdo.”

“Entonces atraeré otro zorro. Chicos, preparaos.”

“De acuerdo. Trae un zorro cargado de objetos.”

“Calla. Ojalá pudiera elegirlos.” —gruñó Surka bromeando.

Le dio un puñetazo a un zorro que pasaba y volvió corriendo hacia el


Página 102 u

grupo.

“¡[Bola de fuego]!”

“[Bendición]. [Mano sanadora].”

Surka luchó con fiereza contra los ágiles movimientos del zorro. Pale y
u

Romuna no dejaban de presionar al zorro. La hoja de Weed se puso en


marcha cuando la vida del monstruo estaba alrededor del cuarenta por
ciento. La espada salió de su vaina y golpeó al zorro como un relámpago.

¡Zas!

Por desgracia, esta vez no hubo botín, aunque de todos modos, tampoco
era como si los objetos que solían caer fuesen gran cosa.

Con el tercer zorro, la espada entró en acción cuando tenía la mitad de


la vida.

Esta vez no consiguió un crítico, por lo que el zorro sobrevivió al primer


golpe. Éste fue seguido por una fluida secuencia de ataques. Al morir,
dejó caer un objeto.
“¿Qué?”

“Es extraño.”

“Estamos cazando zorros más rápido.”

“Cuando Weed ataca, casi siempre mueren.”

Un par de zorros después, también lo notaron el resto de sus compañeros.


Desde que Weed se les había unido, el ritmo de caza había subido. En
cuanto sacaba su espada, los zorros desaparecían rápidamente en un
estallido de luz grisácea.

“¡¿Pero qué…?!” —Pale se quedó boquiabierto, incapaz de moverse.


Para poder mantener el ritmo de Weed, la única ocupación de Surka era
atraerlos.
Página 103 u

Aunque no se molestase en disparar flechas, el ritmo de caza apenas


disminuía. Esta situación, que para el grupo era inexplicable, se debía
a los atributos de Weed. Al crear la cuenta, Weed tenía 10 puntos en
[Fuerza], más los 40 obtenidos en el Salón de Entrenamiento. Después
puso los puntos de los dos niveles obtenidos repartidos entre [Fuerza] y
[Agilidad] por igual. Como resultado, tenía 55 puntos en [Fuerza] y 50
u

en [Agilidad].

Además, contaba con otros 10 puntos de [Fuerza] de la espada de


hierro que estaba usando. Para conseguir todos esos puntos de [Fuerza]
dependiendo sólo del nivel, tendría que haber llegado al nivel 11,
invirtiendo todos los puntos en dicho atributo. Y aún más importante
era que su [Agilidad], [Aguante], [Resistencia] y [Vitalidad] también
estaban muy por encima de su nivel. Se necesitaban, al menos, otros
ocho o nueve niveles extra para mejorar tanto un personaje.

Weed, con nivel 3, era rival para un guerrero normal de nivel 30.

Otro hecho más sorprendente era que había subido su [Dominio de la


Espada] a Principiante – 4 con el entrenamiento. Lo que se traducía un
cuarenta más de daño por cada ataque. Su nivel actual en la habilidad
era Principiante – 4 [98%]. En cuanto llegase al nivel 5, el porcentaje de
daño extra sería del cincuenta por ciento. Y, por último pero no menos
importante, la espada de hierro que le había dado el instructor era casi
un objeto de lujo para su nivel actual. En resumen, un zorro no era rival
para Weed.

‘Esa espada tiene que ser un objeto único.’ —empezó a sospechar Pale
poco después. Era la única explicación para la extraña fuerza que
mostraba Weed.

Aún eran novatos, por lo que no se daban cuenta que Weed siempre
atacaba en el momento justo. En las batallas dentro un juego online
de realidad virtual, al estar basadas en movimientos reales, un
conocedor de las artes marciales tiene ventajas obvias sobre alguien sin
conocimientos de lucha. Weed usaba las técnicas de combate entrenadas
durante todo un año, incluyendo el aparentemente inútil juego de pies,
Página 104 u

que era invisible para quien no lo conociese. Por eso, sólo podían pensar
que tenía una espada sublime.

“¡Genial!” —excitada, Surka atraía zorros uno tras otro.

Weed sujetaba con fuerza la espada de hierro. Estaba extasiado,


usando todas las técnicas que había aprendido, que resultaban ser muy
u

productivas.

‘No ha sido un año perdido. ¡Vamos!’ —gritó para sí mismo.

¡Golpe crítico!

Muchos de sus ataques eran críticos. Predecía dónde iba a estar el zorro,
y lanzaba un ataque preciso a esa posición. Todo el año de sudor y sangre
estaba dando sus resultados.

“¡Hap! ¡Hap!” —empezó a lanzar unos gritos secos. Se encontraba


inmerso en la lucha, sin dejar de mirar a los zorros y atacando sin piedad.

Irene y Romuna se rieron al ver lo gracioso que resultaba Weed luchando


con tanta seriedad. De pronto, un zorro le alcanzó con una garra en el
pecho.

“¡[Mano sanadora]!”

El torso de Weed brilló con una luz blanca. Pero, antes de que el hechizo
curativo actuase, se dio cuenta que su [Salud] apenas había disminuido.

“Tal vez…”

Weed le hizo una pregunta a Surka, que corría hacia un nuevo zorro.

“Surka, compañera.”
Página 105 u

“Dime, amigo Weed”

“¿Cuántos puntos de vida tienes?”

“150, ¿por qué?”


u

“Ah… no… por nada. Simple curiosidad.”

El máximo daño de un zorro era 15. Al no tener defensa, Weed había


sufrido todo el daño, pero su vida estaba por encima de los 700 puntos.

“De acuerdo, compañera Surka, ¿qué te parece si a partir de ahora yo


hago frente los zorros?”

“¿Estás seguro?”

“Sí. Tú sigue atrayéndolos. Nuestras amigas Romuna e Irene no pueden


moverse mucho porque se quedan enseguida sin [Aguante]. Señor Pale,
¿puedes atraer a los zorros más lejanos con tus flechas?” —en poco
tiempo, Weed había asumido el papel de líder del grupo.
“Por supuesto.”

“Entonces, por favor, ayuda a nuestra Surka a atraerlos.”

Weed se movía como un salvaje. Cuando Surka volvía, recibiendo daños


del zorro, él actuaba de inmediato. Los que Pale atraía con sus flechas
caían de inmediato bajo sus ataques. Weed alcanzó el nivel 4. Decidió
usar los puntos en [Agilidad].

Cuanto mayor es la [Agilidad], más fácil es esquivar un ataque enemigo


y más posibilidades tienes de impactar. Está directamente relacionada
con la [Precisión] y la [Evasión]. La espada de hierro de Weed era
maravillosa para cualquier novato, gracias a sus puntos de [Fuerza]
extra. Por eso se permitió invertir los puntos en [Agilidad] en vez de
reforzar su personaje.
Página 106 u

La caza continuaba. Excitadas por el buen ritmo, Romuna e Irene no


podían creer su buena suerte. Nunca habían estado en una cacería tan
fantástica.

“Surka, atrae más zorros.”

“Sí, déjanoslo a nosotros. Puedes concentrarte en atraerlos.”


u

“De acuerdo, Unni8.” —Surka estaba ocupada atrayendo zorros. Y


Pale también.

Si Weed hubiese ido de caza solo, habría tenido que vagar buscando
monstruos y descansar a menudo para rellenar el [Aguante] consumido.
En cambio, este equipo le concedía un cebo y una clériga, lo que
claramente aumentaba el ritmo de caza.

Royal Road no es un juego para un solo jugador. Cuando jugaba al


Continent of Magic, siempre estaba rodeado de enemigos. Solía entrar a
una caverna llena de monstruos y luchar sin restricciones. Se mantenía

8
En coreano, hermana mayor o forma cariñosa de referirse una chica a
otra de más edad.
conectado día y noche hasta que se quedaba sin hierbas ni pociones.
Cuando llenaba el inventario, sus movimientos se veían afectados. Los
monstruos le sorprendían constantemente. A menudo luchaba en medio
de un círculo de enemigos.

‘Mataba a muchísimos y, a cambio, también me mataron muchas veces.’

Para él, el juego en grupo era muy distinto a lo que estaba acostumbrado.
Era más efectivo y divertido. Pero su estrategia les falló de repente.

“¡Ahhh!” —Surka había cometido un error mortal. Al ir a atraer un


zorro, sin querer había atraído la atención de un lobo. Intentando huir,
gritó— “¡Chicos, huyan!”

¡Awwwuuuooo!
Página 107 u

El lobo la perseguía a plena carrera, con regueros de saliva goteándole


del monstruoso hocico.

Mientras el grupo reaccionaba, Surka estaba siendo acorralada por el


lobo. Era más rápido que un zorro, y le ganaba terreno rápidamente.
Aparentemente, no había forma de escapar.
u

“¡Yo le ayudaré! ¡Debéis huir! ¡Oh, poder del santo Espíritu, restaura
su salud! ¡[Mano Sanadora]!” —Irene, la clériga, resistiendo el impulso
de huir para salvarse, lanzaba un hechizo de curación tras otro para
rellenar la vida decreciente de Surka.

“¡Maldición!” —tras un momento de indecisión, Pale empezó a disparar


flechas al lobo.

Uno, dos, tres tiros. En cuanto cargaba una flecha, la lanzaba. El [Tiro
Múltiple], su habilidad característica, alcanzó al lobo, pero éste apenas
se dio cuenta.

Ahora que el lobo tenía a todo el grupo como enemigo, cuando acabase
con Surka atacaría a Pale e Irene. Así pues, ¿qué iba a hacer Weed?
Apretó la empuñadura de la espada y avanzó.
‘¿Podré hacerlo? ¡Por qué no! A primera vista, los dientes y las garras del
lobo parecen terroríficas.’

Weed estaba seguro que el lobo se lanzaría contra él, en vez de lanzarle
un simple zarpazo, para empezar a morderle enloquecidamente.

“Tendrás que enfrentarte a mí primero.” —dijo, interponiéndose en el


camino del lobo.

No esperaba que el lobo le entendiese, pero como si hubiera reconocido


al enemigo más peligroso del grupo, el lobo volvió la mirada hacia él de
inmediato.

¡Grroooarrrrr!

El lobo saltó directamente hacia Weed.


Página 108 u

Weed rodó hacia un lado con rapidez, fuera del camino del ataque
del lobo, y atacó con la espada. Los dientes del lobo casi le rajaron la
garganta.

Ese simple rasguño le quitó 80 puntos de vida.


u

“¡Weed, huye! ¡Me he quedado sin maná, no puedo usar [Mano


Sanadora]!” — gritó Irene.

‘¡Torpe! ¿Qué clase de clérigo no sabe administrar su maná?’ —se dijo a sí


mismo.

Ya que Irene sólo se encargaba de curar, siempre debía reservar suficiente


maná para una emergencia. Si no lo hacía, alguien podía acabar muerto
o, en el peor de los casos, todo el equipo podía ser eliminado.

Weed había creído que Irene tendría algo bajo la manga cuando se
ofreció voluntaria para rescatar a Surka. Pero, para su consternación,
todo lo que la clériga tenía, por su naturaleza, era buen corazón.

La situación no le dejó tiempo para criticárselo. El lobo le gruñía.


Tras unas pocas llamas de Romuna, los ataques mágicos dejaron de
llegar desde la retaguardia. Al parecer, ella también se había quedado
sin maná. Sólo Pale seguía disparando flechas desde lejos. El lobo estaba
ensangrentado, pero los inútiles intentos de Pale solo lograban que el
lobo intensificara su agresividad.

“¡Vamos, maldito bicho!” —Weed blandió la espada, encarando al lobo.

¡Awwwuuuooo!

Aullando, el lobo saltó hacia delante. A partir de ese momento, la postura


y los movimientos de Weed cambiaron drásticamente. Sus piernas
estaban firmes en el suelo, mientras que su cintura y sus hombros se
balanceaban hacía adelante y atrás. Como una brizna de paja, Weed
dejó que el fiero lobo le pasase de lado.
Página 109 u

‘Tendría que ser tonto para morir aquí.’

Weed era capaz de predecir el siguiente movimiento del lobo, y la herida


que había recibido no era tan grave como se había esperado.

‘Sé que puedo vencer.’ —Weed aflojó la presión sobre la espada a propósito.
u

¡Aihn!

El lobo gimió de dolor. Aunque Weed había sacrificado parte de su


fuerza para obtener más velocidad, el daño de su espada aún era muy
sustancial.

“¡Maldita sea!” —él también perdía vida cada vez que el lobo le
alcanzaba. Sus 700 puntos de vida cayeron a 200.

Weed se encontraba bañado en su propia sangre.

“¡Perdón, amigo Weed! ¡No puedo apuntar bien, es demasiado rápido!”


—la baja [Agilidad] de Pale le hacía imposible acertar al lobo, que se
movía como un relámpago.
“Yo también voy a luchar.” —Surka se le acercó. Había sido herida
cuando huía del lobo, y le quedaba menos de la mitad de sus puntos de
vida.

Tropezando, lleno de temor, Weed dijo:

“Escuchad. Debéis huir a un sitio seguro mientras os cubro la retirada.”

“Pero…”

“Es vuestra única oportunidad. ¡Ahora!”

Pale y Surka se miraron el uno al otro, pero ninguno de los dos dio
señales de huir. Al verlo, Weed murmuró para sí mismo:

‘¡Idiotas! ¿De qué sirve sacrificarse por un desconocido?’


Página 110 u

Pale estaba al borde de las lágrimas. Sabía que Weed podría haberse
salvado si hubiese querido. Podría haber escapado del lobo hasta las
puertas de la Ciudadela, donde los guardias le hubiesen defendido de
la amenaza. Pero, en cambio, había avanzado preparando tanto su
espada como su posición, y se había enfrentado al lobo para salvar a sus
compañeros de equipo, a aquellos que había conocido hacia no más de
u

un par de horas antes.

“Amigo Weed” —los ojos de Surka estaban húmedos. Inocente y


emotiva como era, estaba profundamente conmovida por el heroico
acto de Weed.

Sin retirar la mirada del lobo, Weed dijo:

“Si queréis quedaros, hacedlo. Yo haré lo que pueda para luchar contra
este maldito bicho. Pero tenéis que iros inmediatamente en el momento
en que me mate.”

“Sí.”

“Prometédmelo.”
“Prometido.”

Surka y Pale se alejaron, y Weed empezó un duelo sangriento con el


lobo, que aún representaba una seria amenaza, mientras se movían en
círculos.

La vida de Weed bajó a 150 puntos y, poco después, quedó a 70. La


espada de hierro seguía fallando por centímetros. El lobo sangraba
tanto que parecía que un simple golpe podría tumbarlo, pero Weed
todavía no había logrado dar ese golpe final.

Irene y Romuna se dieron cuenta que finalmente la vida de Weed había


llegado al punto más peligroso, por debajo del diez por ciento. El corazón
de Pale estaba acelerado, y el de Surka brincaba en su pecho. Intentaban
atraer la atención del lobo, pero éste sabía que era a Weed a quien tenía
que matar, e ignoró por completo las otras amenazas inferiores.
Página 111 u

Otro golpe del lobo, y Weed estaría muerto.

Al morir, Weed perdía algunos objetos de su inventario, uno o más


niveles y le penalizarían negándole el acceso a Royal Road las siguientes
veinticuatro horas; y todo por haber arriesgado su vida por un puñado
de desconocidos.
u

El lobo sonrió, sabiendo que tenía ventaja sobre su máximo enemigo.

¡Grroooarrrrr!

Cuando el lobo saltó para matar a Weed con su ataque final, la espada,
que había fallado repetidamente hasta entonces, se clavó por fin en sus
costillas.

Ante los ojos de Weed, estalló una cascada de mensajes del sistema.

Has subido de nivel.


SUBES DE NIVEL
[Dominio de la espada] Principiante – 5.

[Daño] aumenta hasta el 50%.

[Agilidad] aumenta hasta 15%.

Nueva habilidad: [Hoja del Escultor]

Había conseguido tantos puntos de experiencia del lobo, que su nivel


había llegado a 5. Weed sacudió la cabeza, un tanto sorprendido.
Página 112 u

‘¿Qué es esa [Hoja del escultor]?’

“¡[Ventana de Habilidades]!”

Ventana de Habilidades
u

[Identificar] – Principiante 1 [0%]

Permite conocer el verdadero valor de los objetos no


identificados.
Consumo de maná: 30.

[Dominio de la Escultura] – Principiante 1 [0%]

Permite tallar o grabar diversos materiales. Las obras de arte


de alto valor artístico valen una fortuna. Las mujeres se sienten
fácilmente atraídas por ellas.
[Reparar] – Principiante 1 [0%]

Permite reparar armas y armaduras. A partir del nivel 5 puedes


crear nuevas armas y equipo.

[Artesanía] – Principiante 1 [0%]

Afecta a las habilidades manuales, y al [Dominio] de las armas.

[Dominio de la Espada] – Principiante 5 [0%]


Página 113 u

Aumenta el poder de ataque y las posibilidades de impacto al


usar una espada.

[Hoja del Escultor] – Principiante 1 [0%]


u

Permite alcanzar lo invisible, lo intangible.

Consume 50 de [Maná] por segundo.

Según la leyenda, el Gran Maestro Zahab descubrió,


accidentalmente, una gran verdad mientras practicaba
con las esculturas: que la escultura es un medio para
transformarlo todo según la voluntad del escultor. La técnica
secreta de Zahab ha sido transferida a su sucesor.

Weed examinó la ventana de habilidades y sacudió la cabeza sorprendido.

‘Tengo que probar esta nueva habilidad para ver qué diablos es. Gasta un
montón de maná. Con mi nivel no puedo mantenerla más de dos segundos
seguidos.’

A parte de todo esto, el lobo finalmente había muerto.

“¡Ufff!”

Weed se dejó caer en el suelo, con la cara pálida. En ese momento Pale,
Irene, Romuna y Surka fueron corriendo hacia él.

Las primeras palabras que Weed dedicó a sus compañeros fueron:

“Surka, ¿estás bien?”

“Weed, amigo mío…”


Página 114 u

Irene y Romuna estaban a punto de echarse a llorar. Surka no podía


ocultar sus lágrimas. Pale, el único chico del equipo aparte de Weed, no
sabía qué decir, sobrecogido por una oleada de emociones.

Si la vida de un jugador baja del diez por ciento, empezaba a disminuir


lentamente. Al cabo de un minuto, Irene recuperó algo de maná, y lanzó
un hechizo de [Mano Sanadora] para arrancar a Weed de las garras de
u

la muerte.

“Muchas gracias, Irene.”

“Es un placer, amigo Weed.” —la mirada entre Weed e Irene se


intensificó, una señal de que empezaba a sentir algo por él, y lo mismo
pasaba con Surka e Irene. Y lo que más le sorprendió fue el hecho de
que Pale le tratase con un respeto y admiración que hasta el momento
nunca le había dedicado.

“Sigamos.” —dijo Weed en cuanto se encontró mejor.

“¿Estás bien?”

“Claro. Sano y salvo.” —respondió Weed, levantándose la camisa y


dejando su pecho a la vista para demostrar que no quedaban rastros de
las heridas recibidas.

Surka no volvió a cometer el mismo error. El equipo aceptó el liderazgo


de Weed, lo que dio lugar a un sorprendente registro de sesenta zorros
en cuatro horas.

Romuna, Irene, Pale y Surka subieron de nivel, del mismo modo que
Weed, que finalmente llegó al 6. Weed invirtió todos los puntos de
atributos en [Agilidad].

“Fiuuu… Bueno…” —dijo Romuna, sudando mucho como si estuviese


agotada por el excesivo consumo de maná.— “Nosotros tenemos que
irnos. Mañana por la mañana tenemos clase.”

“Deberíamos quedar para cazar otra vez. Estarás por aquí mañana,
Página 115 u

¿no?” —le preguntó a Weed, que asintió ligeramente.

“¿Puedo añadirte a mi Lista de Amigos?” —preguntó Surka.

Pale e Irene sonreían.

“Claro.” —Weed les añadió a su Lista de Amigos y se despidió de ellos.


u

“Esta es tu parte.”

Weed recibió tres monedas de plata cuando distribuyeron los beneficios


de la caza.

Cuando se desconectaron, se fue a cazar más zorros. Por eso odiaba


jugar en equipos. Cuando las cosas se ponían interesantes, la gente se
iba.

Weed siguió buscando enemigos, ya que aún le quedaba una hora hasta
el amanecer. Ignoró las presas fáciles como mapaches y zorros, y dejó
los límites de la Ciudadela para entrar en el bosque, en el que se decía
que había lobos bajo cada sombra.
¡Awwwuuuooo!

Apareció una manada de lobos. Se agazaparon y se acercaron a Weed,


que caminaba solo, con los ojos brillando saboreando el momento.

El sistema de Royal Road permitía a los monstruos subir de nivel


acabando tanto con otros mosnturos, como matando a los propios
jugadores, por lo que los lobos buscaban cazadores solitarios. Cuando
los lobos se percataron de la mirada de Weed, empezaron a temblar por
instinto.

‘Esa mirada…’

‘Este humano no nos considera como enemigos.’

‘Nos considera puntos de experiencia.’


Página 116 u

‘Unos bonitos puntos de experiencia. Buenos objetos. Eso es lo que quiere


de nosotros.’

Los lobos entendieron las intenciones de Weed. Peor aún, la voluntad de


luchar que emitía les hacía temblar de miedo.
u

¡Aiiihnn!

¡Aiiiinn!

Inmediatamente, se dieron la vuelta y empezaron a huir.

“¡¿Cómo os atrevéis?!” —rugió Weed a los lobos antes de empezar su


persecución.

La espada de hierro no conocía la piedad, ni Weed el honor. Apuñaló


despiadadamente por la espalda a los lobos que huían, acorralándolos
sin dejarles escapatoria, y destrozando a todos y cada uno hasta hacerlos
papilla.

“¡Vamos, bastardos!”
El momento en que la hoja cortaba el aire, otro lobo se venía abajo.
Rápido y sin piedad. Las extraordinarias técnicas de Weed con la espada
aterrorizaban a los lobos.

Entonces, ¿por qué había tenido tantos problemas en la lucha contra un


solo lobo cuando estaba rodeado de su equipo? Al borde de una muerte
inminente e inevitable, Weed había acertado con el último ataque
contra el lobo. A los ojos de los demás había sido un golpe de suerte. Y
Weed había tenido mucho cuidado en dejar que esa idea se mantuviese.

El sol empezó a levantarse cuando acabó finalmente con los lobos.


Abandonó el campo de combate y se dirigió hacia la mansión del Sabio
Rodrias.
Página 117 u
u
TRADUCCIÓN: TheHypnoticCat · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 5
La chica que perdió el
habla

“¡Maldita sea, es de día de nuevo!”

Era temprano por la mañana, y Lee Hyun ya se sentía deprimido.


Página 118 u

El Parlamento de Corea del Sur, en su infinita sabiduría, había


aprobado un proyecto de ley no demasiado popular llamado ‘No dejar
atrás a nadie’, que había sido ideado para eliminar a los marginados e
inadaptados de la sociedad.

Esta total estupidez había sido aprobada según la teoría que afirmaba
u

que los nacidos y criados en entornos marginales creaban una mayor


tasa de crímenes violentos y divorcios.

Según esta ley, a partir de los veinte años, todos los ciudadanos coreanos
que procedieran de estos barrios problemáticos, estaban obligados
a visitar a un psiquiatra cada cierto tiempo para realizar un examen
mental.

En resumen, Lee Hyun había sido llamado para ello debido a que había
perdido a sus padres en su infancia y durante su adolescencia había sido
perseguida por los usureros.

Lee Hyun fue al Centro de Rehabilitación ‘Gran Sociedad’.

“Me siento como si hubiera viajado de regreso a los años sesenta.


‘Gran Sociedad’, qué lamentable.” —Lee Hyun murmuraba sus quejas
mientras entraba en el edificio.

El nombre encajaba con esos interiores decorados tan románticamente.


La sala de recepción estaba llena de personas de veinte años que acudían
a realizarse exámenes médicos, por lo que tuvo que perder una hora
esperando turno para inscribirse.

“Ya veo. Por favor, rellene este formulario.”

Una enfermera con un vestido blanco entregó un pedazo de papel a Lee


Hyun.

“¿Qué es esto?”

“Vamos a realizar un análisis completo de su estado mental basado en


sus respuestas a este cuestionario. Si usted cae en la categoría de las
Página 119 u

personas socialmente incapaces, se le ordenará entrar en el centro de


rehabilitación y recibir tratamiento continuado. En ese caso, el gobierno
enviará un cheque mensual a su familia como compensación.”

Qué ley tan inhumana. El gobierno no había hecho prácticamente nada


para apoyar a las personas desfavorecidas que sufrían infancias terribles,
maltratos de sus padres o los que habían sido expulsados de la escuela.
u

Además se encontraban con varios obstáculos si querían ingresar en una


escuela de posgrado al terminar la escuela secundaria. Tampoco podían
ser elegidos para puestos en el gobierno. La Ley contra el Terrorismo
suponía una excusa viable para separar a los indeseables de los ricos.

“Sí, señora.”

Lee Hyun cogió el formulario y lo llenó rápidamente. No levantó el


bolígrafo ni un momento. Lee Hyun había pensado en estas preguntas
durante muchos años, por lo que las respuestas iban saliendo desde su
interior.

“Ya he terminado. ¿Puedo irme ahora?”

“Por supuesto. Tome esto para cubrir el transporte.”


Por lo menos, el gobierno mostraba una pequeña muestra de piedad.
Lee Hyun tomó las monedas y dejó el hospital. Mientras tanto, su
cuestionario comenzó a circular entre los psiquiatras del centro.

uuu

La doctora Cha Eun-Hee, doctorada en psiquiatría, se reía en voz muy


alta. La doctora, cuya actitud le había valido el apodo de ‘Reina de
Hielo’, se reía sin reparos en público. Todo un espectáculo fuera de lo
común para las enfermeras.

“¿Finalmente ha tenido éxito comunicándose con su perro?”


Página 120 u

“Supongo que sí. Nada es imposible para la doctora.”

La Dra. Cha había emigrado a los Estados Unidos con sus padres,
ambos diplomáticos, cuando ella era joven. Se había graduado ‘cum
laude’ en la Universidad de Harvard a la edad de veinte años, y obtuvo
su doctorado antes de cumplir los veintitrés.
u

Combinaba belleza e inteligencia, sin embargo, orgullosa, nunca


demostraba una faceta tan humana hasta ahora, por lo que se convirtió
en un tema en boca de todos. Al final, la enfermera jefe decidió levantar
su cabeza por encima del escritorio.

“Dra. Cha, ¿qué es tan gracioso?”

“Mira esto.”

Riéndose tan fuerte que estaba llorando, la Dra. Cha le pasó a la enfermera
jefe lo que tenía en la mano. Era una sola página de un formulario que
alguien había llenado bajo la ley de ‘No dejar atrás a nadie’. Las siete
preguntas eran cortas con respuestas igualmente breves.
Cuestionario
1. ¿Cuál es su nombre?
Lee Hyun

2. ¿Cuál es su ocupación actual?


Soy un gran villano que acabará con la paz mundial

3. ¿Qué está haciendo?


Rellenar este cuestionario
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4. ¿Cuáles son las tres cosas más memorables, o valiosas, que


ha hecho en su vida?
Llegar al nivel máximo en Continent of Magic

Jugar un juego online durante 204 horas


seguidas, sin comer ni dormir
u

Vender mi cuenta

5. ¿Qué piensa usted de los políticos actuales?


Deberíamos exportarlos a China y Japón

6. ¿En qué momento se dio cuenta que era un miembro


de la sociedad?
Después de ver “El planeta de los simios”

7. ¿Cómo se describiría a sí mismo en una sola frase?


¡¡Soy un Dragón!!
La enfermera quedó desconcertada al terminar de leer el documento.

“¿No me diga, esto… es un extracto de una novela gráfica?”

“No. Parece que uno de los pacientes lo ha rellenado esta mañana. ¿Ves
el sello de confirmación en la parte inferior derecha?”

“Un caso de locura típica.”

“Te equivocas de nuevo. Si fuera un loco, no observaría la sociedad de una


manera tan sarcástica y precisa como lo ha hecho en este formulario.”

Contra el sentido común, la Dra. Cha concluyó que era mentalmente


normal. Desde la perspectiva de un psiquiatra, casi podía oír un grito
de desesperación creciente en esas respuestas.
Página 122 u

“Para ser capaz de ridiculizar la sociedad de tal manera, este joven


llamado Lee Hyun debe haber vivido una vida sin ningún color en un
mundo de crueldad.”

“¡Menos mal!” —la enfermera jefe no pudo evitar suspirar.

No tenía ninguna razón para contradecir la conclusión de la doctora. Sin


u

embargo, pensó que o la Dra. Cha, que se había ganado un doctorado en


psiquiatría en los Estados Unidos y había sido idolatrada en las revistas
médicas más reconocidas a nivel mundial, era superior a lo normal, o
este tipo Lee Hyun era muy inferior a la media.

‘Los dos son simplemente anormales. O ellos son normales, y yo soy la


única loca en la habitación. Tal vez la dura verdad es que el mundo entero
se ha vuelto loco.’ —pensó mientras le daba vueltas la cabeza.

La Dra. Cha recogió el formulario y se levantó.

“La sociedad necesita diferentes clases de personas. Que así sea. Usted no
tiene por qué preocuparse mucho de esto. Por cierto, voy a enseñárselo
a Seoyoon.”
“¿La paciente Jeong Seoyoon?”

“Sí.”

“¿Cree que ella lo leerá?”

“Lo hará. Los que cierran su mente son más propensos a anhelar la
atención del exterior. Sólo espero que ella se ría esta vez.” —la Dra. Cha
cogió el cuestionario que Lee Hyun había completado y salió de la sala.
Su destino era una habitación especial ubicada en el piso 12.

Contaba con el instrumental médico más avanzado y con los mejores


doctores, y estaba equipada con una piscina privada y un gimnasio
cubierto; el coste de la habitación ascendía casi a veinte millones de
wons al día.
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“Hola, Seoyoon. Estoy aquí para verte.”

Sonriendo a su paciente, Cha Eun-Hee entró en la sala. Una niña de


rostro pálido levantó la cabeza de un libro que estaba leyendo. Incluso
entre las supermodelos cuyo aspecto más destacado es su apariencia,
serían eclipsadas por su belleza. Aun así, su rostro estaba vacío de
emoción. Al igual que una muñeca francesa, parecía estar sin vida.
u

‘Dios le dio belleza, más de la que necesitaba para vivir.’ —pensó la Dra.
Cha.

La chica era tan hermosa, que era excesivamente querida por su padre
protector. El tabú que separa la línea entre padre e hija no se había
roto, pero su madre estaba paranoica y desconfiaba de su marido.

Su madre tenía celos de su propia hija, lo que condujo a un abuso


incesante durante varios años, hasta que un día fatídico todo terminó
en tragedia. Desde entonces, la niña había perdido el uso de la palabra.

Antes, cuando era joven, Seoyoon había sido un ángel atrapado en


un cuerpo terrenal. La Dra. Cha, que solía ser una buena amiga de la
familia, siempre había sentido lástima porque ella se viera privada de
su porción justa de amor y de inocencia.

“Echa un vistazo a esto. No estoy autorizada a sacar ningún documento


fuera de mi oficina, pero quería enseñarte esto” —la Dra. Cha le dio a la
niña el formulario presentado por Lee Hyun.

Los ojos apagados de Seoyoon se deslizaban sobre el papel. La doctora


esperaba que fuera a estallar en carcajadas.

‘¿Sabes que, si contra todos los pronósticos te ríes ahora, será la primera vez
en cinco años?’ —pensó la Dra. Cha.

Pero su perfecta cara todavía inmóvil destrozó las esperanzas de la


doctora. La chica miró el cuestionario y tan solo se lo devolvió. La
doctora se sintió afligida al recordar cuán brillante había sido Seoyoon.
Página 124 u

“Está bien... ¿Necesitas algo más?” —le preguntó la doctora.

Seoyoon, suavemente, sacudió la cabeza.

“Entonces, no dudes en llamarme en cualquier momento si necesitas


algo.”
u

La Dra. Cha salió de la habitación en silencio.

“¿Se ha reído?” —preguntó la enfermera. Ella no tenía permitido entrar


en la sala.

Cha sonrió amargamente.

“Otra cosa que no ha funcionado.” —dijo la enfermera.

“No. No puedo encontrar una manera de abrir su mente” —dijo la


doctora.— “Debo rehabilitarla para mantener la fe del presidente en
mí… No, tengo que hacerlo por Seoyoon...”

Incontables psicólogos, psiquiatras y curanderos habían sido


contratados para hacer frente a la condición de Seoyoon, sin ningún
resultado. Ninguno de ellos podía derretir su corazón congelado. Ahora,
casi todo el mundo había abandonado cualquier esperanza para la niña.

La enfermera también lloraba. Era triste que una chica tan bonita no
fuera capaz de hablar ni reír, encerrada sola en su propio caparazón.

“¿No hay ninguna terapia o medicina para ayudarla?” —preguntó la


enfermera.

“Un remedio psiquiátrico no va a funcionar siempre y cuando el paciente


se niega a abrir su mente y aceptar la realidad” —dijo la Dra. Cha.

“Entonces, va a vivir así por el resto de su vida...”

“Tenemos que hacer algo para recuperarla. Sólo necesita una señal, algo
que le lleve a enfrentarse a la realidad.”
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“Pero ya han pasado cinco años. Su conciencia podría haber quedado


atascada desde hace tiempo.”

“Es nuestro trabajo hacer que eso suceda. Sin importar qué pase, voy a
traerla de vuelta” —la resolución de la Dra. Cha era feroz.
u

Ella se había especializado en psiquiatría y entrado voluntariamente en


este hospital para salvar a Seoyoon.

“Hace un año que he comenzado un nuevo tratamiento.”

“Nunca he oído hablar del tema.”

“Por supuesto que no. El motivo es porque tenía que mantenerlo en


secreto. Es Royal Road. Está pasando sus días y noches en el juego, a
excepción de las horas medicación y de asesoramiento.”

“Entonces…“

“Exactamente. Dejémosla empezar de nuevo en un mundo de ficción.


Sacarla de su caparazón, y ella, paso a paso, podrá empezar a interactuar
con los demás. Espero que recupere la fe perdida en las personas y sienta
las emociones que nunca ha sentido antes, por lo menos en la realidad
virtual.”

uuu

De vuelta a casa, Lee Hyun visitó la web de subastas de artículos antes


de iniciar sesión en Royal Road.

Aunque Lee Hyun había comerciado sólo un artículo allí, hasta el


momento su estado era de triple diamante. La cuenta en el Continent of
Magic había sido valorada en más de tres mil millones de wons.
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Sólo esto lo había elevado a la categoría de VIP.

Compro Espada de Hierro con 20 de [Fuerza] por 400.000W.


u

Compro Anillos para guerreros. Oferta.

Compro Botas Azules de Explorador por 300.000W negociables.

Compro Pendientes para magos.

La lista de artículos en demanda era de miles de páginas. Una palabra


clave arrojaba millones de resultados de búsqueda, pero pocos de ellos
llegaban a un acuerdo.

Como muchos usuarios estaban ansiosos por obtener buenos objetos, la


demanda era alta. El suministro no daba abasto. El sistema favorecía a
los vendedores y, cuando uno de ellos publicaba sus artículos, la venta
se efectuaba en minutos.

VENDO

Maza de Espíritu Rojo.

Durabilidad 105/105 [Daño] 96 — 105.


Página 127 u

Aumenta la [Fuerza] en 15.

100.000 wons.
u

VENDO

Anillo de Bendición Brillante (Objeto Raro).

Cura 3 puntos de salud por segundo durante


cinco minutos.

3.000.000 wons.
VENDO

Pendientes del Mesías.

Aumenta la defensa mágica.

Aumenta la potencia de la Magia de


Fuego un 8%.

4.000.000 wons.

VENDO

Martillo del herrero Thomas.


Página 128 u

La probabilidad de éxito en la creación de


armamento aumenta un 15%.

Permite crear mejores armas.


u

5.000.000 wons.

Los objetos en los diez puestos más altos de la subasta tenían precios
escandalosos. Estos eran seguidos por objetos menores, que todavía
ascendían a por lo menos cien mil wons. Este mercado en alza mostraba
la gran escasez de buenos objetos.

Si Weed no hubiera tenido la suerte de obtener la espada de hierro en un


principio, habría repetido misiones simples aquí y allá para conseguir
unas cuantas monedas de cobre cada vez, y correr al taller de un herrero
para comprar una espada barata antes de dirigirse al campo.

De lo contrario, tendría que haber golpeado monstruos con sus puños,


basándose en las estadísticas que había acumulado al golpear el
espantapájaros. En ese caso, su poder de ataque se habría reducido a
la mitad sin los efectos de la esgrima. Si se comparan las armas y el
equipo con atributos especiales, los objetos artesanales fabricados con
[Herrería] y [Sastrería] eran baratos. Artículos relacionados con la clase
escultor no estaban aún disponibles.

Royal Road había empezado tan sólo quince meses atrás. Los usuarios
aún estaban inmersos en subir de nivel y buscar nuevas misiones. Lee
Hyun no había visto a otros artesanos. El 70% del continente todavía
estaba sin descubrir, era por eso que muchas mazmorras todavía estaban
inexploradas, y muchas misiones sin resolver. Con oportunidades
infinitas delante de sus ojos, sólo unos pocos usuarios soñaban con
convertirse en artesanos.

El Reino de Rosenheim era un país relativamente nuevo que había


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sido descubierto tan sólo seis meses antes, de acuerdo con el tiempo del
mundo real. El grupo de expedición que había descubierto primero el
reino había obtenido enormes ganancias monetarias.

Rosenheim estaba muy lejos del centro del continente, pero los
territorios inexplorados y mazmorras por descubrir se esparcían por
todas partes, y los monstruos fuertes abundaban. Esta había sido la
u

razón principal por la cual Lee Hyun había elegido Rosenheim para
comenzar su aventura.

‘¿He empezado demasiado tarde? No, todavía tengo la oportunidad de


ponerme al día.’ —se dijo a sí mismo.

Lee Hyun agitó la cabeza. Mientras que los competidores habían


ido subiendo niveles y teniendo aventuras, en su lugar Lee Hyun
había trabajado y recopilado información durante todo un año para
prepararse. No quería vender su cuenta de nuevo.

El procedimiento de transacción de la cuenta de un juego en línea era


más complicado en un juego de realidad virtual en el que era necesario
un escaneo del iris para verificar la identidad del jugador. Además, Lee
Hyun quería mantenerse en el negocio en lugar de hacer dinero rápido.
Royal Road tenía que mantener a su familia económicamente, al menos
en los próximos cinco años.

‘A este paso, Royal Road dará a mi familia lo que necesita para vivir
durante los próximos cinco años, no, diez años. Así podré darme el lujo
de enviar Hayan a la universidad. La estabilidad es lo primero. Soy un
desertor de la escuela secundaria, pero Hayan merece una mejor vida.’ —se
dijo.

¡Ring!

El teléfono empezó a sonar de repente. Lee Hyun miró a su alrededor


y se dio cuenta que la abuela y Hayan estaban fuera de la casa, así que
cogió el teléfono de mala gana.

- Hola. ¿Con quién hablo?


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- Lee Hyun, ¿Eres tú? Sigues siendo igual de rudo en el teléfono, hombre.
Soy yo, Sanghoon.

- Oh, eres tú. Sanghoon.

Lee Hyun no había oído esa voz desde hacía mucho tiempo.
u

‘Desde que salí de la escuela secundaria.’ —pensó con amargura.

- Hey, ¿qué pasa? —preguntó Lee Hyun.

- Tenemos una reunión de alumnos esta noche.

- No me importa en absoluto todo eso. ¿No se supone que deben asistir


sólo los graduados? Ni siquiera sería gracioso si un desertor como yo se
presentara en la reunión.

- Pero…

- No hay peros que valgan. ¿Sabes por qué dejé la escuela? No quiero
tener nada que ver con la escuela ahora. Eso es todo.
- ...

- Hazme un favor, Sanghoon. No vuelvas a llamarme otra vez.

¡Plaff!

Lee Hyun dejó caer el teléfono y suspiró profundamente. Había sido


una llamada telefónica que no quería en absoluto. Si sólo le hubieran
dado un borrador de memoria al estilo de Men in Black, entonces, sin
dudarlo, habría borrado enteros los tres años de la escuela secundaria.
Los peores momentos y recuerdos de su vida.

En aquel entonces, Lee Hyun había sido golpeado y amenazado por los
acreedores. Tenía que colarse a escondidas a la escuela. Tenía que ir de
madrugada e irse a media noche, como si estuviera jugando al escondite.
Durante un par de días, Lee Hyun había esquivado los usureros, pero
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eran más inteligentes de lo que pensaba. Contrataron mafiosos callejeros


para presionar a los maestros. Incluso el tutor de Lee Hyun le había
pedido que pagara su deuda, justo en frente de sus compañeros de clase.
El profesor se había arrodillado ante él, suplicando entre lágrimas que
no quería involucrarse en esa locura.

‘Fue la gota que colmó el vaso. Dejé la escuela al día siguiente.’


u

Lee Hyun tenía un poco de curiosidad de saber cómo les estaba yendo
a sus amigos en la universidad. Pero mostrar su cara en la reunión sólo
reviviría momentos vergonzosos.

‘La verdad ineludible es que la única cosa que me queda por hacer es jugar
el juego de realidad virtual.’

Lee Hyun terminó el almuerzo y se metió de nuevo en el juego.

uuu
Weed nunca abandonó su rutina diaria de sentarse en frente de la
mansión del Sabio Rodrias, desde el amanecer hasta el ocaso. ¿Quién
más podría ser capaz de pasar en frente de la casa días aburridos como
este?

“¿Qué piensas acerca de ir de caza al valle del oeste? Las Arpías tienen
alto nivel, pero si hacemos equipo juntos, serán pan comido.”

“He oído que se ha juntado una misión de escolta a las caravanas con
destino a la Villa Eline.”

“El precio de la sangre de duende se ha disparado últimamente en casi


el triple de su valor habitual. Me temo que está por llegar una gran
guerra.”

Un montón de conversaciones se colaron en los oídos de Weed. Los


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caballos relinchaban, los carruajes rodaban. Sentado junto a la avenida


principal, Weed podía coger un montón de información. Se enteraba
de lo que estaba pasando en el mundo. Sin este tipo de distracción, se
habría dado por vencido hace tiempo.

Cuando Weed golpeaba el espantapájaros, por lo menos disfrutaba de


la sensación de ser más poderoso. Era una auto tortura que tuviera que
u

quedarse quieto bajo la luz intensa del sol.

‘¿No pasó Buda varios días frente a una pared, meditando?’ —se preguntó
para animarse.

Él estaba pasando por una experiencia similar, determinado a ver al


Sabio Rodrias. Durante los dos últimos días, Weed había quedado con
el grupo de Pale e Irene para ir a cazar juntos. Ellos no eran tan fuertes
como él, por lo que ganaban experiencia más lentamente.

Sin embargo, podían cazar monstruos a su antojo, día y noche. Gracias


a su horario flexible, ellos alcanzaron el nivel de Weed. El treinta por
ciento de bonificación de experiencia durante la noche era técnicamente
anulada por el hecho de que los monstruos eran la mitad de fuertes
durante el día. Por tanto, la caza durante el día era más eficaz para los
jugadores de bajo nivel.

Además, Weed estaba penalizado por no tener una clase decidida, por
lo que no podía aprender casi ninguna habilidad. Se quedaría atrás en
niveles de habilidad si se convertía a una clase en un nivel más alto que
un usuario promedio. Por último, pero no menos importante, el hecho
de que estaba perdiendo un valioso tiempo esperando en el medio de
una calle, ponía a prueba su paciencia.

‘¿Qué puedo hacer ahora? [Dominio de la Escultura]... Esculturas...’

Weed miró a su alrededor. Encontró un trozo de madera que parecía


haber sido arrancada de la rueda de un carro. Recogiendo la pieza de
madera, Weed activó la habilidad de [Dominio de la Escultura].

“Tallar esto.”
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¡Zis! ¡Zas!

Mientras la mano de Weed se movía, la madera era recortada un poco


aquí y allá.

“¿Qué?”
u

Cuando la habilidad terminó de tallar, Weed suspiró. La pieza de madera,


al principio cuadrada, quedó reducida a una pequeña pieza circular.

“Será mejor que lo haga yo mismo.”

Weed cogió otro pedazo de madera y comenzó a cortar con el cuchillo de


grabado. Con su experiencia pasada de haber trabajado en una fábrica
textil, si concentraba sus manos, la artesanía era como una segunda
naturaleza para él.

El cuchillo de tallar era tan fuerte que, con sólo un toque, atravesaba
la madera. Después de algunos intentos de prueba y error, finalmente
talló una pieza de madera en forma de una espada corta.
Has ganado experiencia en [Dominio de la Escultura].

Has ganado experiencia en [Artesanía].

Dos ventanas de mensajes emergentes aparecieron en cascada.

Weed había aprendido algo; que no necesitaba depender de la habilidad


de escultura para tallar un objeto y, que cuando se usa la habilidad, se
tiene que conocer exactamente qué forma se está trabajando.
Página 134 u

‘Será mejor que practique la escultura con más frecuencia.’

Aburrido, Weed reunió varias piezas de madera y comenzó a tallarlas.

‘Es divertido a su manera.’

De repente, Weed recordó que cuando estaba en la escuela primaria,


u

sus profesores de arte lo habían elogiado por ser bueno para las
manualidades. Casi todo lo que Weed tallaba resultaba inútil, pero
algunos de ellos parecían aceptables, incluso a sus ojos.

Pasó las siguientes cinco horas tallando piezas de madera. Le parecía


extraño estar cortando madera con un cuchillo de tallar, pero sentía
que era mejor que pasar el tiempo en vano.

SUBES DE NIVEL
[Dominio de la Escultura] Principiante – 2 [0%]
Permite realizar obras más complicadas.

Disminuye la probabilidad de fallar la habilidad.

La [Artesanía] y el [Dominio de la Escultura] de Weed habían subido


de nivel rápidamente porque, debido a su bajo nivel real, necesitan una
pequeña cantidad de experiencia para alcanzar el siguiente nivel.

“¡Guau!” —Weed estaba impresionado.

A medida que su nivel de [Dominio de la Escultura] subía, varias


ventanas emergentes surgían; mientras tanto, seguía tallando los trozos
de madera.
Página 135 u

Se le daban consejos visuales tales como, cuándo cortar en círculo o qué


patrones estaban disponibles. Weed podía elegir uno de los consejos,
que se procesaban automáticamente. Incluso si se cometía un error, el
[Dominio de la Escultura] lo complementaba para refinar el producto
final.

Ahora, estaba haciendo estatuas de más calidad. Weed talló un zorro


u

que había cazado la noche anterior, y la estatua de un lobo le salió


más fácil de lo que pensaba. Iba colocando las estatuas a su lado de
mirándolas animadamente.

El nivel de la habilidad de Weed era actualmente dos, pero el cuchillo


de tallar de Zahab lo duplicaba a cuatro. El cuchillo era un objeto único
que cualquier escultor se moriría por obtener. El problema es que a
nadie le importaba.

La clase de escultor está cerca de la extinción. Aunque existieran algunos


aspirantes a escultores, sus niveles eran mediocres, por lo que era inútil
esperar un buen precio por el cuchillo de tallar de Zahab.

Cuando Weed terminó sus figuritas:


Has obtenido una nueva estadística: [Arte]

“¿Arte?”

[Arte]

Un regalo en la comprensión y la práctica de la belleza, el


arte hace elegantes las comidas y productos en un sentido
estético y práctico.
Página 136 u

Mejora cuando ves, oyes, hueles, pruebas o tocas cosas


bellas, o al crear obras de arte.

“...”
u

Weed se quedó en silencio. Calculó el futuro potencial prometido por la


estadística [Arte]. Acto seguido, tomó una decisión rápida.

“¡Eliminar la estadística [Arte]!”

La estadística no se puede eliminar.

“¡Maldita sea!”

Un usuario no puede tener estadísticas infinitas. El número máximo de


ranuras para las estadísticas es de quince. Weed encontraba intolerable
que se desperdiciara una de las estadísticas en [Arte]. Como era lógico,
quería llenarlas sólo con estadísticas absolutamente necesarias.

“No se puede evitar.”

Para Weed, no podía importarle menos la estadística [Arte]. Se juró a si


mismo que nunca distribuiría los puntos obtenidos en esta estadística.
Se sentía aliviado al ver que la estadística aumentaría automáticamente,
pero se mostraba escéptico acerca de cómo iba a utilizarla.

Weed siguió tallando piezas de madera. Sin embargo, estaba más


interesado en los efectos secundarios que le otorgaba el [Dominio de la
Escultura] que en la propia habilidad.

“El [Dominio de la Escultura] no sirve para nada. Pero las habilidades


artesanales valen el esfuerzo para mejorar en muchas otras áreas.
Página 137 u

Se aumentará el poder de ataque de las espadas, y el tiro con arco


también se beneficia. También me permite trabajar con materiales más
complicados.”

La [Artesanía] influía en todo.


u

Has ganado experiencia en [Artesanía].

SUBES DE NIVEL
[Artesanía] Principiante – 3 [0%]

Permite aprender habilidades de [Sastrería] y [Cocina].

Aumenta el poder cuerpo a cuerpo y con armas a


distancia en un 3%.

Aumenta el poder de ataque sin armas un 5%.


La [Artesanía] de Weed alcanzó el nivel 3 gracias a que su [Dominio de
la Escultura] le ayudaba a conseguir experiencia rápidamente.

‘Realmente vale la pena.’

Weed se mostró satisfecho con el rápido aumento del nivel de la habilidad


en [Artesanía]. En parte era debido a que las obras de arte que había
creado eran, de hecho, de nivel cuatro gracias al cuchillo de tallar de
Zahab, pero el [Dominio de la Escultura] era el factor principal.

Las habilidades de [Cocina] y [Sastrería], por ejemplo, afectan a la


[Artesanía] en gran medida, sin embargo, no podían competir con el
[Dominio de la Escultura] en delicadeza y destreza.

En pocas palabras, el [Dominio de la Escultura] era esencial para


mejorar su habilidad artesanal. Ni que decir tiene, nadie se molestaría
Página 138 u

en aprender [Dominio de la Escultura] con el fin de mejorar su habilidad


artesanal.

“Yo nunca aprenderé sastrería. ¡Lo odio!”

Weed consideró positivo llegar a dominar las habilidades básicas de


cocina para que pudiera disfrutar de una deliciosa comida usando recetas
u

de internet. Sin mencionar que comprar los ingredientes directamente


a una tienda y cocinarlos con sus propias manos era mucho más barato
que ir a comer en un restaurante de calidad.

Además, Weed podría preservar mejor su [Aguante] mediante el uso


de comidas hechas por él mismo cuando saliera en una misión de caza
de una o más semanas sin poder volver a la civilización. La comida
preparada no puede restaurar el [Aguante] al completo.

Por otro lado, Weed estaba tan atormentado por el recuerdo de haber
trabajado arduamente en una fábrica textil, que estaba decidido a no
aprender la habilidad de [Sastrería].

‘Odio la sastrería más que cualquier otra cosa. Nunca, nunca lo haré.’ —le
dijo.
Absorto en su trabajo con las figuritas, Weed no se percató que estaba
ensombrecido por unas figuras oscuras hasta que sus oídos captaron
una conversación extrañas.

“Mira, es encantador.”

“Parece que son reales.”

“Nunca antes he visto una obra tan real.”

Weed miró en la dirección de las sombras. Había un grupo de gente que


miraba sus figuritas con admiración. Una pequeña y linda chica señaló
con el dedo a la estatua que parecía un conejo.

“Buenos días, señor, ¿está esto a la venta?”


Página 139 u

Weed la habría corregido suavemente diciéndole que él era tan sólo un


adolescente, pero esa sería la forma en que reaccionaría una mujer en
sus treinta años al ser etiqueta de “anciana”.

Pero...

“Sí. ¿Qué puedo hacer por usted, señorita?” —dijo Weed sonriendo
u

educadamente, oliendo el dinero.

“Quiero esta. ¿Cuánto cuesta?”

Le entregó la figurita del conejo, y Weed se puso a pensar rápidamente.

“Cuesta...” —Weed estaba maquinando para pedir un precio justo.

Convertir las figuritas en un beneficio ahora, o dejarlas allí para siempre;


terminarían como un objeto para la basura. Finalmente, levantó dos
dedos.

“Cuesta esto.” —dijo Weed.

“¿Dos monedas de plata? Es más barato de lo que pensaba” —la chica


pagó dos monedas de plata y cogió la estatua.— “Este conejo es muy
bonito. Lo guardaré como recuerdo.”

Estupefacto, Weed se quedó mirando su espalda mientras ella se iba


alegremente. Dos dedos significan dos monedas de cobre. Sólo dos
monedas de cobre. Pero la chica había pagado cien veces su valor.

“Hola, quiero comprar una.”

“Lo mismo digo. Me quedo con los dos zorros de allá.”

Las figuritas de Weed se empezaron a vender bien. Las pequeñas tenían


un precio de dos monedas de platas, y tres las grandes. Las estatuas
de zorro y conejo que él había cazado en los campos alrededores de la
Ciudadela eran más populares que las estatuas en forma de espada o
escudo. Los animales quedaban bonitos, y los clientes los querían como
Página 140 u

recuerdo de su época de novato.

Un usuario de nivel 100 puede fácilmente hacer un par de monedas de


oro al día. Para ellos, dos monedas de plata era una ganga.

Las existencias de figuritas se agotaron rápidamente.


u

“¿Puedes por favor hacer una estatua con forma de zorro? Un zorro con
nueve colas. ¿Puedes hacer eso?”

Weed contempló y asintió. La solicitud no era tan difícil como parecía.

‘La forma estándar de un zorro más otras ocho colas. ¿Por qué no?’

“Sí, señor. Pero usted tiene que pagar más por una versión personalizada.”

“¿Cuánto será?”

“Lo hare por cinco monedas de plata.”

Cuando la palabra ‘cinco’ salió de su boca, Weed supo que podía haber
pedido más, pero el comprador se apresuró a responder:
“Muy bien. La quiero. Entonces, ¿podría hacerla con una forma bonita,
por favor?”

En la Ciudadela había una tienda de esculturas, pero se especializaba


en figuras de tamaño natural, a veces adornadas con oro y piedras
preciosas, que no eran accesibles para la mayoría de usuarios. Puesto
que nadie más estaba interesado en el [Dominio de la Escultura], las
estatuas que Weed tallaba tenían valor de coleccionista.

“Guau, es genial.”

Quienes compraban figuritas estaban emocionados, admirando su


reciente adquisición.

“¿Podría saber tu nombre? Así cuando quiera comprarme otra, te


buscare.”
Página 141 u

“Weed… Escultor Weed. Si alguna vez quiere tener una estatua a su


gusto, no dude en ponerse en contacto conmigo.”

“Gracias. Nos vemos.”

Antes de la puesta del sol, los rumores del escultor se propagaron por
u

toda la ciudad y la gente venía a visitar a Weed.

“Ahí está.”

“Quisiera que hicieras algunas figuritas para nosotros.”

Weed había ganado cuatro monedas de plata durante toda la caza de


la noche anterior, pero ahora, hacer una o dos pequeñas figuritas le
proporcionaba más dinero. Sólo tardaba unos diez minutos para tallar
una figurita. Y los materiales apenas costaban nada; era un comercio
muy lucrativo.

Al día siguiente, Weed se detuvo en un taller de carpintería y compró


madera al por mayor. Comenzó a producir figuritas en masa. A
medida que la habilidad de [Artesanía] y el [Dominio de la Escultura]
aumentaban, piezas más bellas y delicadas eran creadas.

No hace falta decir que, bendecido por su gran habilidad, se vendían


a un precio más alto y a un ritmo más rápido. Obras Magnificas, una
o dos de cada mil, fueron incluso puestas en subasta. Su opinión del
[Dominio de la Escultura] cambió ligeramente en el proceso: un trabajo
a tiempo parcial para asegurar una cantidad satisfactoria de dinero en
su bolsillo.
Página 142 u
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 6
Durante una barbacoa

El Sabio Rodrias estaba afectado por una grave enfermedad.

¡Coff! ¡Coff!
Página 143 u

Habían pasado seis días. Weed continuaba sentado enfrente de la


mansión. Rodrias, en su aislamiento, había sido consciente de la presencia
del intruso desde el primer día. Rodrias pensaba que se olvidaría de él
cuando le vio dedicarse a la venta de sus figuritas.

‘Tengo que descubrir quién es ese hombre y qué quiere de mí.’


u

A pesar de su extrema pereza, al sexto día por fin cedió a su curiosidad


y movió el trasero.

“Saludos, desconocido. Soy Rodrias. ¿Por qué me has estado esperando?”

“¡Increíble! ¡El consejero ha salido!”

“¡Es el Sabio Rodrias, la Estrella de la Sabiduría!”

La multitud que hacía cola esperando para comprar figuritas estaba


asombrada.

Los Sabios tenían algo en común: querían que se les dejara en paz.
Especialmente cuando un desconocido aseguraba tener algo que tratar
con urgencia. Rodrias por fin había aparecido en la puerta de su mansión.

Weed sacó del bolsillo un pañuelo con un pájaro azul bordado y se lo


enseñó al consejero.

“Esta es la razón por la que he estado esperando estos seis días,


Consejero.”

Los ojos de Rodrias se llenaron inmediatamente de lágrimas al verlo.

“Ya veo. El pañuelo de la Reina Evane… Aquí hay demasiados ojos y


oídos. ¿Por qué no entras, viajero?”

“Gracias, señor. ¡Lo siento, chicos! ¡Cierro por hoy!” —sonriendo de


forma triunfal, Weed cerró su pequeño puesto y se levantó.
Página 144 u

“¡No es posible!”

“¡Yo también quiero conocerlo!”

La multitud gritaba enfadada, algunos con un gesto dolorido al verse


privados de participar en un momento histórico, pero ni Weed ni Rodrias
podían preocuparse menos de esa gente. El Sabio Rodrias guió a su
u

invitado por la mansión.

“A partir de este momento, mantente tranquilo. Todo aquel que me


traiga un objeto así tiene el derecho a hacerme una pregunta, sobre la
que meditaré apropiadamente.”

“Sí, señor. Lo sé.”

¡El Sabio Rodrias! Había declarado públicamente que le concedería


una audiencia a quienquiera que le llevase una pertenencia de la Reina
Evane. Y Weed se había presentado con un pañuelo suyo.

“Habla, viajero. Soy todo oídos a lo que tengas que preguntar.”

El tono sincero de Rodrias mostraba la obligación de todo Sabio al ver


a alguien en apuros, pero era sólo una falsa impresión por su parte.
Aunque el pañuelo era un objeto de valor incalculable para él, no tenía ni
la más mínima intención de ayudar a Weed. ¡Pero no debía contradecir
su promesa pública!

Rodrias le había urgido a hablar, añadiendo que meditaría sobre ello. Lo


único a lo que le obligaba su promesa era a conocer qué le preocupaba
a Weed, para así satisfacer sus deseos intelectuales y su curiosidad, y
punto. Ni se planteaba ofrecer una solución fuera cual fuese el problema
de Weed.

El Consejero ya había timado de esa forma a varios jugadores. Siempre


les seguía la corriente y evitaba responder a las dudas que les corroían.
Aparte de su glorioso título de Estrella de la Sabiduría, el Consejero era
conocido como el Callejón Sin Salida de las Misiones. Pero Weed no iba
a caer en un truco tan inocente. Desconfiaba de Rodrias desde el primer
Página 145 u

momento.

El ser humano es débil. Por eso se había pasado un año preparándose


antes de empezar a jugar: una voluntad débil y un cuerpo que busca la
comodidad. Weed no se fiaba de su propio cuerpo, ¿por qué iba a confiar
en Rodrias, a quien no conocía?
u

“¿Sirve de algo que le cuente mi problema?”

“¿Qué quieres decir, viajero?”

“¿Me ayudará tras oír mi historia, Consejero?”

“Eso es…”

“Entonces me niego a contar nada. ¿Para qué molestarme? Solo servirá


para cansarme la lengua.”

Rodrias frunció el ceño. Fingió que su integridad se estaba viendo dolida


por la paranoia de Weed.

“¡Ay, señor Weed! ¡Dígame ya lo que desea! Puede contarme cualquier


cosa que considere oportuna. Me ha traído el pañuelo de la Reina Evane,
lo que le da derecho a abrirme su mente.” —dijo en tono persuasivo.

Eran las palabras que Weed había estado esperando.

‘Te soltaré la lengua.’

Por desgracia para el sabio, Weed era más retorcido que cualquiera de
las personas a las que el consejero había conocido anteriormente. Exigía
una confirmación absoluta.

“Consejero, si le hago una pregunta, ¿me contará lo que quiero saber?”

“…”

“Me mantendré en silencio hasta que oiga por sus labios esa promesa.”
Página 146 u

“Eh… escúcheme, señor Weed…”

“Creo que el pañuelo de la Reina Evane es un objeto de un valor


inestimable. Y, si no me equivoco, es aún más valioso para usted, Sabio.
¿Debería quedármelo?”
u

“¡Quédatelo y desaparece de mi vista!”

“Como desee. Suerte, señor.”

Al ver que Weed literalmente cogía el pañuelo y se iba, Rodrias levantó


ambas manos en señal de derrota.

“Espera. ¡Desde ahora te prometo que te guiaré tras oír tu petición!


Como sabes, he prometido una audiencia a quien me traiga una
pertenencia de la Reina Evane. Así que, mientras esté al alcance de mis
posibilidades, haré lo posible.”

“¿Es una promesa entre personas de honor?”

“Por supuesto… pero a cambio, algún día, tendrás que hacerme un


favor.”

Weed consideró la contra oferta de Rodrias, y asintió:

“De acuerdo.”

El consejero sonrió con suficiencia.

“¿Qué te preocupa, Weed? Un asunto trivial no te habría tenido


esperando ahí fuera los últimos seis días.” —Rodrias tenía sus propias
intenciones tras esta pregunta, que demostraba su gran curiosidad.

‘¿A quién le importa lo que tú quieras? ¿Cómo alguien tan patético como tú
se atreve a humillarme al intentar hacer un trato? ¿Mi respuesta? Te la daré,
lo haré. Sera una contestación retorcida, terrible, de lo más inverosímil que
pueda, así me las pagarás.’
Página 147 u

Rodrias estaba lo bastante seguro de conseguir su venganza cuando


Weed formulase su petición.

Si buscaba a alguna persona, le dirigiría al sobrino de un primo de la


suegra de un amigo de la esposa de dicha persona, forzándole a seguir
una cadena de personas. Si buscaba un sitio, le mostraría una tierra
u

lejana con un nombre lo bastante similar.

‘Je je je.’

Consciente o no de las intenciones de Rodrias, Weed por fin expuso sus


intenciones.

“No sé qué clase debería escoger.”

“¿Una clase? Ahora que me fijo, es verdad que no tienes una.”

“Así es, Sabio.”

Rodrias se rio ligeramente. Se trataba de algo mucho más trivial de lo que


se había esperado. Había esperado que le preguntase por la ubicación
de una mazmorra secreta, o sobre las políticas futuras de Rosenheim.

Una buena mazmorra aportaría una considerable fortuna a quien la


descubriese, y el conocimiento de antemano de las políticas era valioso
si se sabía aprovechar. Imagina que sabes por adelantado que el próximo
año la corte planea mejorar las provincias del sur; puedes adquirir
derechos comerciales en esas provincias por adelantado y obtener de
ellas una gran fortuna.

Una recomendación personal sobre la clase a elegir era un trabajo muy


fácil para el Sabio.

“No puedo creer que un asunto tan mundano te preocupe tan


intensamente. No era necesario que lo consultaras conmigo. Mi consejo
es que vayas al Gremio de Información. Has desperdiciado seis días,
Weed.”
Página 148 u

“Me han remitido a usted, ya que es la persona con mejor juicio para
estos asuntos.”

“De acuerdo, ¡voy a recomendarte tu clase ideal! Muéstrame tus


atributos.”
u

“Sí, señor.”

Weed abrió su pantalla de personaje por primera vez desde que había
terminado de mejorar sus atributos en el Salón de Entrenamiento.

“¡Ventana de Estado!”

Nombre del personaje Weed

Nivel: 13 Alineación: Neutral

Clase: Ninguna Título: Ninguno


Salud: 960 Maná: 100

Fuerza: 55 Fama: 20

Inteligencia: 10 Sabiduría: 10

Vitalidad: 50 Aguante: 89

Agilidad: 105 Espiritu de Lucha: 67

Suerte: 5 Liderazgo: 5

Arte: 19
Página 149 u

Ataque: 19 Defensa: 5

Resistencia a la Magia de Fuego: 0%


u

Resistencia a la Magia de Agua: 0%

Resistencia a la Magia de Tierra: 0%

Resistencia a la Magia Negra: 0%

Weed había jugado día y noche, por lo que su nivel había llegado al 13.
Ahora podía acabar con un lobo sin problemas.

“¡Por Freya!” —Rodrias estaba pasmado— “¿Nivel 13, y 960 puntos de


vida? ¡Tienes 50 puntos extra en [Fuerza] y [Vitalidad], y otros 100 en
[Agilidad]! El Salón de Entrenamiento. Está claro que has practicado
allí. Tu fuerza de voluntad es admirable.”
Rodrias estaba a la altura de su reputación como Estrella de la Sabiduría
al entender todo con un único vistazo a sus atributos. Pero sus sorpresas
no terminaban ahí.

“¡Nivel 4 en [Escultura], y 6 en [Artesanía]! ¡Increíble, es increíble! Me


gustaría saber qué clase de viaje has seguido hasta ahora.”

Weed le narró a Rodrias sus experiencias hasta el momento. A medida


que iba contando su historia, Rodrias iba desencajando el rostro, lleno
de incredulidad.

“Has conseguido la más extraordinaria de las misiones gracias a tu


amistad con el instructor. Y… ¿¡qué!? ¿Has heredado la voluntad de
Zahab? ¿Pero has rechazado la posibilidad de convertirte en un Escultor
de la Luz Lunar?”
Página 150 u

Con los ojos completamente abiertos, Rodrias no sabía cómo reaccionar.


Y hay que resaltar que difícilmente hubiese levantado una ceja si alguien
le dijese que uno de los reinos vecinos había iniciado una ofensiva contra
Rosenheim sin una declaración de guerra previa.

‘Zahab, ¿qué eras? ¿Uno de los poderes absolutos ocultos en el Continente?’


u

Rodrias se había cruzado con él varias veces debido a su relación con


la Reina, y había llegado a admirar su dominio en los campos de la
escultura y la espada. Reverenciaba la gran personalidad y sus talentos
como escultor. Rodrias y él se habían hecho amigos. Esto había ocurrido
cincuenta años atrás, se había tratado de la camaradería entre dos chicos
inmaduros. El sabio incluso había intentado convencer a Su Majestad
para que incluyese a Zahab en la corte.

“Has rechazado una clase muy buena. No lo entiendo, ¿qué tipo de


clase quieres?”

“Me vale cualquiera que sea lucrativa.”

Rodrias se quedó en silencio.


‘Quizás este muchacho sea “el Elegido”. El que llevo tiempo buscando. La
voluntad del gran Emperador podría residir en él. Una clase misteriosa,
cuya gloriosa tradición se remonta a las Edades Antiguas.’

Geihar von Arpen, el legendario emperador que había conquistado todo


el continente. Era suya la sangre que corría por las venas del Sabio.

‘Aún tiene que demostrar su valía mediante sus acciones. ¿Podrá superar
la prueba final? De todos modos, será él quien sea puesto a prueba, no yo.’
- se dijo éste.

Rodrias continuó hablando con tono serio:

“Weed.”

“¿Si, señor?”
Página 151 u

“Tengo una misión para ti, aunque tendrás que ser más paciente que
la semilla sin germinar de una flor, más capaz de sobrevivir que una
cucaracha y más insistente que una sanguijuela… si no lo haces, fallarás.
¿Estás cualificado para esta misión?”

“…”
u

“¿Cuál es el significado de esa mirada?”

“No me gusta la forma en que lo ha descrito. Pero puedo decir orgulloso


que estoy preparado para hacer lo que haga falta.”

“Tu confianza me anima. Con esa mirada serías capaz de chupar una
larva hasta extraerle la última gota de su jugo.”

“…”

“Haz lo que te digo, y la misión te conferirá una clase. Pero te aviso,


estarás poniendo tu vida en juego. Eres libre de ignorar mi consejo e irte
si así lo deseas.”

Weed por fin empezó a sentir algo maquinándose tras las palabras de
Rodrias.

“De acuerdo, ¿qué tengo que hacer?”

“¿Has oído hablar de la Guarida de Litvart?”

“Sí, señor.”

La guarida de Litvart era, casualmente, el destino de la misión que el


instructor le había mencionado anteriormente.

‘¿Será coincidencia? Quién sabe.’

“Esto me ahorra meterme en detalles. Con tu propia fuerza, destruye


la maldad que repta en esa caverna. Una vez que el mal haya sido
eliminado, te será concedida la clase que te está destinada.”
Página 152 u

¡Ding!

NUEVA MISIÓN
u

[Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart (II)]

Hay un centenar de monstruos habitando la guarida


de Litvart. Mátalos a todos, del primero al último, y
demuéstrate merecedor de una clase honorable. Si completas
esta misión, se abrirá un camino hacia tu destino.

Nivel de Dificultad: Desconocido.

Requisitos

Sin requisitos.
Weed repasó las instrucciones una y otra vez, hasta la letra pequeña.

‘Este vejestorio está planeando algo.’

Si sus intenciones fueran buenas, no le habría dado una misión


relacionada con la guarida Litvart, una mazmorra subterránea de cinco
niveles que había sido completamente explorada; además la mayoría de
ella había sido expuesta al dominio público.

Había muchos jugadores que cazaban allí, día y noche. Los monstruos
que la infestaban estaban entre los niveles 20 y 50, mientras Weed sólo
tenía nivel 13.

Pero los atributos adicionales mejorados en el Salón de Entrenamiento


Página 153 u

lo habían reforzado tanto que era casi como un guerrero de nivel 40.
Teniendo en cuenta habilidades pasivas como [Dominio de la Espada] y
[Artesanía], estaba convencido que podía acabar sin muchos problemas
con monstruos de nivel 50.

Aunque eliminar a los monstruos de la guarida de Litvart le sería difícil,


desde luego no era algo imposible.
u

‘Hay algo más detrás de esto. Pero seguro que no me miente. No importa
qué me oculte, si termino esta misión, tendré una clase.’

El olor de una trampa era obvio. No se trata de una caza habitual


de monstruos por la guarida. ¿De qué se trataba? Los ojos de Weed
brillaban con intensidad.

“Dime, Weed. ¿Lo tomas o lo dejas? Para tu información, no se me


ocurre ninguna alternativa mejor. No puedo forzarte. Es tu decisión.”

Tras un breve momento de malabarismos mentales, Weed asintió.

“Con respeto, acepto su consejo, Sabio.”


Has aceptado la misión.

“Bien. Vuelve cuando hayas derrotado a todos los monstruos de la


guarida. En el improbable caso de que tengas éxito, tendré algo que
darte. Aunque es obvio que fallarás.”

Rodrias se rio con maldad.

uuu
Página 154 u

Weed fue directamente al Salón de Entrenamiento.

‘Espero llegar a tiempo.’

Sus pasos eran rápidos porque aún estaba a tiempo de llegar para el
u

almuerzo. Cuando entró en el edificio, el instructor estaba a punto de


meter la cuchara en su caja del almuerzo.

“Buenos días, honorable Instructor.”

“¡Me has sorprendido, Weed, amigo! Se te echa de menos por aquí.”

“Yo también le he echado de menos, y por eso he venido.”

“Ven y siéntate a mi lado. Sírvete algo antes de empezar a hablar de


negocios.”

“Gracias, señor.”

Como había llegado a tiempo, Weed almorzó gratis. Las proporciones


del almuerzo eran inmensas, en proporción al cuerpo descomunal del
instructor. Sustraer la porción de Weed era como tomar un vaso de agua
del océano.

“Por cierto instructor, acabo de recordar la misión que mencionó el otro


día…”

“Ah, esa.”

“Sí. Me gustaría unirme al equipo de expedición.”

“Ja ja, sabía que esto iba a pasar, así que les pedí que te reservaran un
puesto. Me alegra que hayas aceptado la misión.”

El instructor le concedió el favor generosamente.


Página 155 u

Has aceptado la misión.

NUEVA MISIÓN
u

[Operación de Limpieza en la guarida de Litvart].

El Reino de Rosenheim lleva tiempo sufriendo los ataques


de los monstruos, cuyo número ha aumentado en las
últimas décadas. El Rey Theodarren, recto y benevolente
gobernante del país, ha emitido un decreto real según el
cual un distinguido caballero, Sir Midvale, irá a explorar
y a limpiar de monstruos la guarida de Litvart. Erradica
los monstruos de esa madriguera junto a Sir Midvale y sus
soldados.

Nivel de dificultad: E
Restricciones

Fallo al morir.

“Te queda un día hasta la marcha de las tropas. ¿Por qué no vienes y lo
pasas en mi casa?”

“Lo siento Instructor, pero tengo que hacer los preparativos para la
misión.”

“Qué pena, y eso que quería invitarte a cenar.”

“¿Cenar?”
Página 156 u

“Sí. Mi esposa ha comentado esta mañana que iba a hacer barbacoa de


cerdo.”

La boca de Weed se hizo agua al pensar en una barbacoa de cerdo. ¡Una


barbacoa sabrosa y picante! La tentación era irresistible.
u

“Si le soy honesto, siempre he querido visitar su casa.”

“Ja ja ja, lo sabía.”

“Jeje” —Weed nunca se avergonzaba de actuar de forma obsequiosa o


humilde.

Pero, sencillamente, estaba cansado del pan de cebada. Royal Road


reproducía todos los aspectos de la realidad, incluido el gusto, hasta el
punto que el sushi hecho con un pescado recién capturado sabía a fresco
y la comida caducada se endurecía y acababa pudriéndose. El pan de
centeno no era una excepción.

Durante los últimos dos meses, Weed sólo había comido pan, y su
lengua estaba teñida por la cebada. Solo con ver cebada le entraban
nauseas. Una barbacoa sería de lo más refrescante. Además, gratis: la
oportunidad no tenía precio.

“Entonces, volveré por la tarde, Instructor.”

“De acuerdo, Weed. Hasta luego.”

Weed acababa de aceptar otra misión en el Centro de Entrenamiento.


Ahora los tres huecos de la ventana de misiones estaban ocupados. La
primera era [La Voluntad de Zahab] que, por ahora, estaba fuera de su
alcance, mientras las otras dos estaban relacionadas.

‘Bueno, el problema es que la misión de Rodrias no es lo que parece, aunque


eso no importa.’ —Weed se preparó para encarar el desafío.

En el peor de los casos, moriría. ¿Qué pasa con eso? No quería morir
Página 157 u

inútilmente, pero siempre tenía que esperar algunas dificultades.

‘Ahora lo que tengo que hacer es prepararme. En primer lugar, tengo que ir
a comprar lo que necesitaré para el viaje hasta la guarida de Litvart.’

Weed se acercó caminando al centro de la Ciudadela. Los peatones que


se cruzaban con él vestían trajes llamativos y mantenían animadas
u

conversaciones. Un grupo de jugadores había montado unas tiendas


callejeras y vendían los objetos que no podían usar o no les interesaban.

Weed se dirigió inmediatamente a la herrería, donde compró un arco y


varios carcajes de flechas.

Arco de Theo el Grande

Durabilidad: 50/50 [Daño]: 5-6

Tiros rápidos: 4
Arco corto fabricado con tendones de orco, burdamente
construido. Tiene poca precisión, pero su notable poder de
ataque es práctico para arqueros novatos.

El arco costaba una moneda de oro y veinte de plata, pero Weed nunca
pagaba el precio completo de nada. Al entregar una figurita de una
mariposa a la cajera, solo tuvo que pagar una moneda de oro. Había
descubierto por accidente que con las esculturas se podía ganar el
corazón de las mujeres.

‘[Dominio de la Escultura]. Solo es útil en ocasiones insignificantes.’

También compró gran cantidad de panes de cebada. Aunque estaba


hastiado de él, era mejor que morir de hambre y, cuando estaba luchando,
Página 158 u

reducía el ritmo al que descendía su vitalidad. Cuando la [Salud] caía


por debajo del treinta por ciento, el jugador se volvía más lento, e iba
perdiendo vida poco a poco.

Su mochila estaba llena con flechas, hierbas y pan. En cuanto comprobó


que todo estaba bien, volvió con el instructor.
u

“Ya he terminado, instructor.”

“Oh, ya veo. Vamos a mi casa, entonces. Tengo a una invitada esperando.”

“¿Una invitada? ¿Ha invitado a alguien más a cenar, Instructor?”

“¿No te lo había mencionado?” — el instructor parecía algo confundido,


pero recuperó la compostura enseguida.— “Es una chica agradable.
Seguro que te cae bien.”

Aunque le sonaba extraño, Weed dejó el asunto de lado y se relajó. El


instructor le cogió de la mano y se dirigió hacia su casa. Su mano era
velluda como la de un gorila.

Weed frunció el ceño.


“¿¡Puede soltarme la mano, Instructor!?”

“Claro que no. Temo que te perderías.”

“¿Perdón?”

Weed y el instructor finalmente llegaron a su destino. Estaba convencido


de que, al abrir la puerta, se encontraría con la más alegre de las familias;
y una chimenea que llenaría de calidez el ambiente. Weed ya sabía que
el instructor estaba casado con una bárbara, un amor de verdad que
superaba la barrera racial, pero que aún no había dado ningún fruto.

Pero, al abrir la puerta, Weed se quedó de piedra al ver a la chica sentada


en la mesa.

‘Increíble.’
Página 159 u

Por un momento, la belleza de la chica le dejó sin aliento. Lo que tenía


ante sí era una imagen idílica. Pero, rápidamente, se recuperó de la
impresión. Al ser una invitada a la casa del instructor, Weed había
asumido que sería una NPC. Pero, al igual que él, era otra jugadora.
Por el aspecto de su aparentemente caro equipamiento, estaba claro
que tenía un nivel bastante alto. Pero eso no fue lo que más dejo en
u

shock a Weed.

El nombre de la chica parpadeaba en letras rojas.

Un usuario puede ocultar su identidad, a veces hasta fingir ser un NPC


si lo desea, pero un asesino, un asesino de jugadores, no disfruta de ese
derecho a la privacidad. Un nombre rojo, y un diamante de sangre en la
frente: la marca de un asesino.

“Venga, venga. Tranquilo, Weed. Ya ves porque no te soltaba la mano.”

Weed trató de escapar, pero su desesperado intento falló al estar cogido


de la mano por el instructor.

“¿Instructor?”
“¿Si?”

“No sabía que estaba tan dispuesto a librarse de mí.”

“Pues ahora lo sabes.”

El instructor le sonrió con malicia, y Weed se relajó un poco. Sabía que,


de quererle muerto, preferiría hacerlo él mismo a dejar el trabajo a otro.

“Por favor, toma asiento, deja que os presente. Este es Weed. Su nivel es
bajo, pero ha superado el entrenamiento básico impecablemente.”

Weed se inclinó ligeramente ante la chica, que le ignoró sin apenas


inclinar la cabeza.

“Esta es Seoyoon. También ha pasado el entrenamiento recientemente.


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Viene a mi casa una vez al mes para cenar con nosotros.”

“Hola. Encantado de conocerte.” —Weed saludó a Seoyoon con


educación pero ella, lívida, no se molestó ni en mirarlo. Era una obvia
muestra de falta de interés no disimulado.

‘¿No quieres hablar con un novato o qué? Si no quieres estar en el mismo


u

cuarto que yo, yo tampoco quiero tener nada que ver contigo.’

En ese momento, el instructor se excusó y arrastró a Weed a una esquina.

“Lo siento. Permite que me disculpe por su rudeza.”

“No, no es nada, Instructor.”

“Es básicamente una buena chica. Es solo que no sabe hablar. Es lo más
próximo que tengo a una hermana pequeña. Parece que no confía en la
gente. La invité porque creí que contigo podría abrir un poco su mente.
Fiiuuu…”

“Está bien. No importa.”


Pese a sus palabras, no se sentía inclinado a darle la mano a Seoyoon. Le
parecía inútil conocer a un asesino, ni qué decir de un NPC.

“Por cierto, ¿le importa si le hecho una mano a la señora Lancer?”

“¿Se te da bien la cocina?”

“En absoluto. Pero aun así, una mano es una mano en la cocina. Ella
puede enseñarme lo que tengo que hacer.”

“Haz lo que quieras.”

Bárbara de origen, la esposa del instructor era enorme. Siguiendo sus


órdenes, Weed cortó pedazos de cerdo y los metió en un tarro con salsa.
Al verle trabajar duramente en la cocina, Seoyoon se acercó también a
echar una mano. Se sentía avergonzada por ser la única sentada en la
Página 161 u

mesa.

Se acercó a Weed, poniéndose a un lado, y observó cómo cortaba la


carne. Se había acercado a ayudar, pero no sabía ni por dónde empezar.
Weed señaló hacia la montaña de platos.

“Por favor, limpia esos platos.”


u

Había dado la instrucción casi contando con que la chica lo ignoraría


pero, para su sorpresa, cogió los platos y se acuclilló en el suelo para
enjuagarlos. Se habían ganado el respeto de la anfitriona con su esfuerzo.

“Estáis haciendo un buen trabajo.”

“Gracias, señora.”

“Tienes buenas manos. ¿Quieres aprender a cocinar?”

Esta proposición era, exactamente, lo que Weed había estado esperando


oír. ¿Por qué otra razón se hubiese ofrecido a ensuciarse las manos?

“Me gustaría, señora. Muchísimas gracias por su amabilidad.”


Has obtenido una nueva habilidad: [Cocina]

Como si se le acabase de ocurrir al ver las acciones de Weed, Seoyoon


también pidió a la esposa del instructor que le enseñase a cocinar.

La habilidad de [Cocina] era una habilidad simple que podías aprender


en cualquier sitio, pagando una cuota a un chef o siendo aprendiz en un
restaurante. Sin duda, una habilidad que valía la pena tener.

Por fin se sirvió a la mesa la gran bandeja de cerdo a la barbacoa. Estaba


perfectamente tostado y el olor era delicioso, casi como si estuviese
delante del plato en la realidad. Weed rápidamente cogió el cuchillo y
Página 162 u

el tenedor.

De pronto, el instructor le llamó la atención con una mirada severa.

“Weed, eres un invitado, así que compórtate con respeto.”

¿Qué clase de anfitrión critica a un invitado en la mesa?


u

Aquí no era el correcto instructor del Salón de Entrenamiento. Aquí era


como un orco vicioso mostrando su avaricia por la comida puesta en la
mesa. Un orco de nivel 200, o superior.

Pero Weed no era de los que sucumben fácilmente al chantaje en frente


de semejante banquete.

“Lamento disentir, Instructor.”

“¿No estás de acuerdo conmigo?”

Weed se sintió de pronto presionado, que era más de lo que podía soportar.
Se sintió ligeramente mareado, y la mano del cuchillo le temblaba.
‘Mierda.’ —tragando saliva, miró hacia un lado.

Giró la cabeza hacia el otro lado para ver como trataba con la situación
la chica de aspecto frágil. Este era un mundo de fantasía. El nivel
mandaba.

No estaba afectada.

‘Tiene al menos nivel 200. Y la mujer bárbara también.’ —pensó.

La esposa del instructor, era una bárbara que adora la ley de la


naturaleza, especialmente la de la supervivencia del más apto; ignoraría
la petición de ayuda de un debilucho.

Dado que los bárbaros eran físicamente superiores a otras razas, sólo
Weed se había visto amenazado por la intimidación mortal que el
Página 163 u

instructor le estaba dedicando con la mirada. Nadie se iba a poner de


su lado.

Pero él era Weed. ¿No era él quien podía convertir a sus enemigos en sus
amigos, y a sus amigos en mártires?

“Honorable Instructor, deje que me explique.” —luchando contra los


u

temblores que amenazaban con incapacitarle, Weed apenas conseguía


abrir la boca.

“¡Qué! Si tienes algo que decir, primero suelta los cubiertos, y entonces
podremos hablar tranquilamente tanto como desees.”

“Su hermosa esposa ha mostrado un conocimiento y una habilidad tan


excepcionales en la cocina que el mero olor me tiene extasiado y, ahora
mismo, en mi cabeza solo tienen lugar pensamientos de qué sabor tendrá.
Una vez que coma este plato, estoy convencido de que se convertirá en
un recuerdo que atesoraré para el resto de mi vida.”

El instructor empezó a reírse con sus carcajadas características.

“¡Es una gran cocinera! Estoy orgulloso de ella.”


“Es normal. Es su esposa, al fin y al cabo. La barbacoa tiene un aspecto
impresionante.”

“Cariño.” —la señora Lancer le dio un ligero codazo a su marido.

Aparentemente, estaba halagada con los dulces cumplidos de Weed.

“Tienes razón, ¿en qué otro sitio podrías probar una comida tan
deliciosa? Adelante, Weed, sírvete.”

Como bien se dice, la mujer es el orgullo del esposo.

El instructor acababa de demostrar que su esposa era uno de sus


puntos débiles. De cualquier modo, la comida estaba estupenda. No
sólo la barbacoa, sino también los acompañamientos que la anfitriona
había preparado con una receta de las provincias norteñas, deleitaron
Página 164 u

el paladar de Weed.

“¡Qué rico! Es demasiado bueno, señora. Es la mejor cocinera que he


conocido. Siento envidia del instructor Lancer, que puede comer unos
platos tan deliciosos todos los días.”

“Cierto, cierto.” —dijo el instructor con una gran sonrisa de aprobación.


u

Weed se aflojó el cinturón y se relajó. El instructor se rio con ganas, y


Seoyoon se terminó el plato en silencio, como una muñeca francesa de
hielo.

Weed pasó la noche en la casa, y a la mañana siguiente se fue a las


puertas de la Ciudadela.

uuu

Sir Midvale y su ejército de treinta soldados rasos, que habían sido


enviados a limpiar la Guarida de Litvart, estaban formando junto a la
puerta.

“Saludos. ¿Eres el señor Weed?” —preguntó el caballero.

“Sí, señor.” —respondió éste.

Un poco de investigación antes de iniciar una misión nunca estaba de


más. Por lo que Weed había reunido en las calles, Sir Midvale pertenecía
a la Orden Roja, la unidad más importante del ejército de Rosenheim,
en la cual realizaba misiones de alta importancia. Había sido ascendido
recientemente, según decían los rumores, a Caballero Real. Era el orgullo
del reino, reconocido como la personificación de la Caballerosidad.

“Nuestro destino está bastante alejado. Son tres horas a caballo.” —


dijo Sir Midvale.
Página 165 u

“…”

Todos los presentes, a excepción de Weed montaban caballos marrones.


Él llevaba su mochila, y nunca se le había ocurrido que hubiese podido
necesitar un caballo. Aunque, de todos modos, tampoco hubiese
supuesto ninguna diferencia. Un caballo era un lujo que costaba, por lo
u

menos, cien monedas de oro.

“Docke me ha pedido un favor. Así que te prestaré un caballo por el


momento.” —dijo el caballero.

“Gracias, mi señor.” —respondió Weed.

“Vance, trae el caballo.”

Un soldado le acercó un potro de aspecto lamentable. Lo llevaba a


la fuerza por las riendas, mientras se resistía con las patas traseras.
Mostraba dos dientes dorados mientras bufaba; el potro parecía bastante
desobediente.

‘Si monto en ese caballo, mi suerte se habrá acabado para los próximos siete
años.’ —pensó Weed.

“Este caballo te será asignado temporalmente hasta el final de la


misión.” —le explicó Sir Midvale.

¡Ding!

Nombre del personaje Trasero

Nivel: 3 Alineación: Neutral

Especie: Caballo Título: Semental


Página 166 u

Salud: 30 Maná: 0

Fama: -300 -
u

Asignado al equipo de asalto destinado a la guarida de


Litvart. Este potro resabido a menudo trata de dejar en
ridículo a quien lo monta. Odia el agua y se niega a galopar
cuando llueve. Necesita un cuidado especial, o podría morir
de una enfermedad.

P.S.: Cuidado, tiende a tirarse pedos muy a menudo.

“…”

La ventana de estado del animal tenía una información frustrantemente


variada. Weed había oído en una ocasión que los caballos de pura
sangre eran difíciles de manejar, pero le parecía increíble que ese potro
de aspecto frágil fuese incluso peor.

“Aunque no estaremos juntos mucho tiempo, vamos a tratar de llevarnos


bien.” —Weed levantó la mano en un intento de acariciar al potro, pero
éste se la mordió inmediatamente— “¿¡Cómo te atreves!?”

Cuando Weed le miró enfadado, el potro se volvió y bajó las patas


traseras.

“Eso es, buen chico.” —dijo Weed con dulzura.

En cuanto hubo subido a espaldas del potro, un curioso olor surgió de su


no precisamente atractivo trasero… de pronto, el potro bajó la cabeza y
lanzó una coz con las dos patas traseras.

“¡Au!” —la acción había cogido a Weed por sorpresa, cayendo al suelo
Página 167 u

miserablemente. El simple ataque le había hecho perder 70 puntos de


salud. La intención del potro no había sido sino la de matarlo.

“¡Maldito Trasero!”

¡Snif!
u

Entre el potro y Weed se acababa de formar una relación. Se miraron al


uno al otro como si intentasen romperse el cuello mutuamente.

‘Nunca te dejaré que te subas a mi lomo, estúpido humano.’ —parecía


estar diciendo el animal.

‘Algún día te mataré de una paliza.’ —decía la expresión de Weed.

Un inusual enfrentamiento entre hombre y bestia. En cierto punto del


desgraciado incidente, Sir Midvale dijo:

“Si estás listo, es hora de ponerse en marcha.”

Sir Midvale y su tropa empezaron a marchar hacia el este. Weed se


montó a lomos del potro en silencio y los siguió.
uuu

Seoyoon también había pasado la noche en la residencia del instructor.


No había podido rechazar la insistente petición de la esposa a que se
quedase a dormir. Por la mañana se cruzó con Weed a menudo. Cuando
abrió la puerta del cuarto de invitados, él estaba pasando por delante.
Pero ninguno de los dos estableció contacto visual, fingiendo ambos no
darse cuenta de la presencia del otro, y evitando darse los buenos días.

Cuando Weed salió de la casa, Seoyoon le siguió, ya que le daba vergüenza


quedarse sola en la casa. Con sus ojos sin vida, miró al espacio vacío en
el que él había estado apenas unos minutos antes.
Página 168 u

‘¿A dónde debería ir ahora?’ —se preguntó.

‘A donde me dé la gana…’ —se auto respondió.

No había ningún lugar que cumpliese con esa definición. Pero eso
significaba que era libre de ir a cualquier sitio.
u

‘Mientras pueda mantenerme alejada de estos dolorosos recuerdos…’

Poco después, Seoyoon empezó a encaminarse hacia la Puerta Sur. No


es que quisiese ir hacia allí. Simplemente quería ir a las zonas salvajes, a
territorio aún sin explorar completamente, donde los monstruos fuesen
salvajes. Había empezado su viaje cerca del centro del continente,
moviéndose hacia la Frontera Oeste en busca de monstruos poderosos
contra los que luchar.

‘Quiero ver monstruos.’

‘Puedo perder la vida si lucho contra ellos.’

‘No tengo que pensar en nada más.’


‘Hasta la dolorosa verdad que nunca nadie me ha amado en toda mi vida.’

‘Para, Seoyoon, no te hundas.’

Aunque Seoyoon no le hablaba a nadie, no era correcto decir que su


don de la palabra hubiese desaparecido. Por debajo de la fría superficie,
sus emociones se alzaban como una tempestad a medida que se hacía
preguntas, y las contestaba. Pero en la superficie, en su cara no había
ningún signo de emoción, como si estuviese tallada en un témpano de
hielo.

Una conversación reiterativa. Decir esto, oír aquello. Ecos de su mente.


Seoyoon sentía menos dolor cuando estaba luchando en medio de un
grupo de monstruos. Por eso buscaba batallas en mazmorras llenas de
enemigos. Siempre ansiaba encontrar monstruos peligrosos, no tenía
miedo a la muerte. Y nunca dejaba que la sangre de la batalla se secase
Página 169 u

bajo sus pies.

Una berserker que se consideraba merecedora de una vida inmersa


en locura y masacres… eso era ella… siempre encontraba la paz en el
campo de batalla.
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 7
MAESTRO DE BATALLAS

La Guarida de Litvart estaba a los pies de las Montañas del Sepulcro,


un viaje de tres horas a caballo desde la Ciudadela. El potro que Weed
montaba se desviaba de vez en cuando de la ruta, y hasta se ponía
Página 170 u

a pastar plácidamente. Tenía que persuadirlo para que reanudase la


marcha.

Cuando llegaron ante la guarida, se encontraron con un soldado que se


encargaría de cuidar de los caballos hasta que regresasen.

“Johnson, cuida bien de los caballos.”


u

“Sí, señor.”

La fuerza disciplinaria dirigida por Sir Midvale dejó los caballos al


soldado, y entró a la mazmorra. Weed por fin se vio libre del potro.

“¡Preparaos para la batalla!”

“¡Posición de batalla!”

El grupo equipó sus escudos de acero y se armó con lanzas y espadas.


En comparación, el equipo de Weed era bastante patético. Una simple
espada de hierro y un arco.

Sir Midvale se le acercó vestido en su cota de mallas.


“¿Es eso todo lo que tiene, señor Weed?”

“Sí, señor.”

“Está pobremente armado para luchar en el frente. Manténgase en la


retaguardia y apoye las acciones de las tropas.”

“Sí, señor.”

Los soldados levantaron sus escudos al frente y marcharon al interior de


la mazmorra. Weed los siguió. Tras avanzar unos metros en el interior de
la guarida, se toparon con cinco kobolds que estaban acampados junto
a una fogata cocinando algo. Sorprendidos por la repentina aparición
de la tropa, los kobolds se apresuraron en ponerse de pie.

“¡Grakht!”
Página 171 u

“¡Enemigos! ¡Humanos atacan!”

Los kobolds eran monstruos de nivel 20 y baja estatura, no medían más


de un metro veinte, y estaban armados con toscos escudos de madera y
espadas de bronce.
u

“¡Matar, matar!”

“¡Expulsar malvados humanos! ¡Destruir refugio! ¡Arriba, bravos


guerreros kobolds!”

Cuando los kobolds cargaron, los soldados se pusieron tensos. Eran


nuevos reclutas recién salidos del campo de prácticas que aún no
habían tenido ninguna experiencia en un combate real. Weed miró a Sir
Midvale, pero el caballero se limitaba a observar sus tropas con mirada
indiferente, como si no le importase el número de bajas.

‘¿No se supone que un caballero debería preocuparse por el bienestar de sus


tropas? Quizás lo que quiera es que adquieran experiencia de combate de
primera mano por sí mismos.’ —pensó Weed.
Los soldados cambiaron rápidamente a una formación lineal y cargaron
contra la oleada de los kobolds. Un par de kobolds lanzaron piedras
con unas hondas, pero los proyectiles apenas molestaron a los soldados.
Superaban en número al enemigo y estaban mejor equipados; los
soldados se impusieron a los kobolds con solo unas pocas heridas. Cada
vez que un kobold era eliminado, una pequeña pieza de metal caía al
suelo.

“Buren, Becker, reúnan el botín.

Los dos soldados señalados por Sir Midvale empezaron a reunir las piezas
de metal. Eran pedazos de cobre o hierro con muchas impurezas de poco
valor, pero aun así eran útiles para crear herramientas de labranza.

Una de las razones por las que el reino creaba este tipo de purgas,
además de servir entrenamiento a los nuevos reclutas y restaurar la
Página 172 u

seguridad del reino, era para recolectar botines de guerra, una ganancia
directa al tesoro.

‘Tengo que empezar a actuar lo antes posible…’ — pensó Weed.

En el siguiente enfrentamiento, sacó el Arco de Theo el Grande y apuntó


al cuello de uno de los kobolds.
u

‘Mantener la respiración. Reafirmar las manos. Apuntar al objetivo.’

¡Shuii!

El alto valor en [Agilidad] y [Artesanía] de Weed guiaron la flecha con


precisión hacia el kobold al que apuntaba.

Has subido de nivel.

Cuando Weed hubo acabado con tres kobolds, ante él apareció una
ventana por el aumento de nivel. Esos kobolds de un nivel superior
a 20 le daban a Weed, que solo tenía nivel 13, grandes cantidades de
experiencia. Todos los kobolds a los que disparaba una flecha caían
inmediatamente porque seleccionaba a aquellos que estaban al borde
de la muerte.

En un alarde de inteligencia, Weed disparaba a las piezas fáciles desde


detrás de los soldados que estaban arriesgando sus vidas en primera
línea. Era una táctica segura pero egoísta. Un pirómano que prende
fuego a una casa corre menos riesgo que aquel que roba las joyas y la
cerámica de la casa del vecino en llamas, ¿no?

Lo que estaba haciendo era muy retorcido, utilizando a sus compañeros


de armas que derramaban sangre y sudor luchando contra los monstruos.
Una buena persona nunca se hubiese aprovechado así de esa situación.
Por otro lado, Weed estaba preocupado que esa forma de actuar pudiese
Página 173 u

volverse en su contra cuando los soldados se diesen cuenta de lo que


estaba haciendo y empezasen a criticarle. Imagina lo molestos que
podrían llegar a estar si un kobold a punto de morir, a falta de un último
ataque, muriese por una flecha salida de la nada.

Así que solo apuntaba a los kobolds que huían en un desesperado intento
de sobrevivir, o cuando un soldado estaba sobrepasado por un grupo de
u

dos o tres kobolds.

Has subido de nivel.

Cada vez que tumbaba a un kobold, Weed sonreía encantado, Mientras


los demás soldados luchaban con esfuerzo, él solo tenía que disparar
flechas a diestro y siniestro desde una posición segura. ¿Había algo más
fácil? Su nivel estaba subiendo más rápido que las acciones de la bolsa.
El plan de Weed de comprar el arco antes de empezar la misión estaba
dando sus frutos.
Al profundizar más en la guarida dieron con un amplio espacio abierto.
Sir Midvale y sus hombres lo rodearon, eliminando kobolds a medida
que los iban localizando, y volviendo a esta posición.

“Descansad y preparad la comida” —ordenó Sir Midvale.

“Sí, señor.” —Buren y Becker se apresuraron en preparar una gran olla


y encender un fuego.

Al ser los más jóvenes del grupo, eran los responsables de llevar a cabo
esas tareas. Weed se acercó a ellos y cogió un cuchillo.

“Os echaré una mano.” —dijo Weed, sonriendo inocentemente.

“Oh, no hace falta.” —respondió Becker.


Página 174 u

“Bueno, la cosa es que me gusta cocinar. Aún soy un novato pero,


¿no sería maravilloso servir a los valientes guerreros que entregan sus
espadas y escudos por el reino de Rosenheim?”

“Es muy amable de tu parte, señor Weed.”

Weed empezó a ganarse el favor de los soldados. Un hombre que se


u

ofrece para realizar las labores manuales siempre era muy bien recibido
en todo viaje. Por una parte, la actitud de Becker y Buren hacia Weed
cambió. No podían evitar que les gustase el modo en que cogía el cuchillo
y cortaba la ternera.

Por supuesto, para todo esto tenía sus propias razones, y no tenían nada
que ver con la benevolencia universal ni nada por el estilo: mejorar su
habilidad de [Cocinar].

Weed cortó y metió la ternera en la olla, y añadió vegetales y especias


para el estofado. Se necesitaban un montón de ingredientes para cocinar
para 32 personas. Weed era consciente que cocinar en grandes cantidades
era el método más rápido de mejorar su habilidad en la cocina.
SUBES DE NIVEL
[Artesanía] Principiante - 7 [0%]

Mejora todas tus habilidades artesanales.

SUBES DE NIVEL
[Cocina] Principiante - 2 [0%]

Mejora el sabor de las comidas.

Aumenta la recuperación de [Aguante].

Aumenta la [Salud] en un 5%.


Página 175 u

Las dos ventanas aparecieron casi juntas. La habilidad de [Cocina] de


Weed aumentó, mientras que la de [Artesanía], que había estado a unos
pocos puntos de subir de nivel llegó finalmente al 7. Desde luego, eran
dos pájaros de un tiro.
u

Weed probó una cucharada del estofado: el privilegio de ser el chef.

‘Excelente.’

Comparar ese estofado con el pan de cebada de las tiendas sería un


insulto. No era tan bueno como la barbacoa de la noche anterior, pero
era satisfactorio para ser su primera vez sirviendo algo. Su alto nivel en
[Artesanía] compensaba su bajo nivel en [Cocina].

“¡Chicos! ¡La comida está lista! ¡Ya podéis venir!”

Los soldados, hambrientos tras las incesantes batallas recibieron una


taza de estofado, que se comieron con avidez.
“Oh, esto está delicioso.”

“No me puedo creer que la comida de una expedición pueda saber tan
bien.”

“Por alguna razón, me parece que cocina mejor que mi esposa.”

Todos felicitaron a Weed. Sus reacciones le dejaron claro que les gustaría
que siguiese encargándose de hacer las comidas.

Rellenó sin cesar los boles vacíos con estofado cada vez que le pedían y,
entre taza y taza, también iba comiendo un poco. Los soldados acabaron
con el contenido de la olla y, cuando el almuerzo hubo terminado, Sir
Midvale se acercó a Weed.

“Señor Weed, ¿le importaría seguir preparando la comida para mis


Página 176 u

hombres?” — preguntó con cordialidad.

Al parecer, hasta un valiente caballero valoraba el contar con un buen


cocinero. Aunque era más probable que, al ser considerado como un
noble, estaría acostumbrado a buenas comidas y no podría considerar
aceptar nada de peor calidad.
u

“Sí, señor, yo me encargaré de las comidas.”

Y así, Weed fue nombrado cocinero oficial del grupo de asalto.

No veía ninguna razón para declinar la petición de Sir Midvale, ya que


le permitía mejorar su atributo de cocina haciendo 32 platos tres veces
al día. Además, no estaba limitado únicamente a la cocina.

“¡Puedo reparar armas y armaduras! Tráiganme lo que tengan roto o


dañado.”

“¿De verdad?”

“¿Seguro que puedes reparar mi espada?”


“Enséñamela… ¡[Reparar]!”

Weed usó su habilidad [Reparar] con las armas y equipamiento que


algunos soldados le llevaron. Hubiese costado una fortuna hacer que un
herrero les reparase todo el equipo en una ciudad. Y si se quedaban con
poca durabilidad, podrían romperse en mitad de una batalla.

“¡Gracias, señor Weed!”

Weed fue aclamado por la tropa. Podía mejorar sus habilidades de


[Artesanía] y [Reparación], y ganaba la confianza de los soldados como
extra.

Sir Midvale, que se había mostrado escéptico con la recomendación de


su amigo de llevarle en la misión, estaba ahora más que satisfecho con
su actuación.
Página 177 u

“Buen trabajo, señor Weed”

“No es nada, señor.”

Weed se mezclaba con el resto de los soldados. A saber qué dificultades


hubiesen sufrido de no estar él allí. Habrían tenido que volver a un
u

poblado cercano de vez en cuando para reparar armas rotas o melladas,


y las comidas les hubiesen revuelto el estómago.

Habrían necesitado pergaminos de identificación para los inusuales


objetos mágicos, que costaban varias monedas de oro por unidad.
Pero Weed podía identificar los objetos allí mismo con su habilidad
[Identificar]. Para los soldados, hubiese sido una tortura volver al
engrudo insípido que Buren y Becker aseguraban que era estofado,
especialmente tras disfrutar la versión de Weed.

“¡Para empezar, no somos cocineros!” — gritaron ambos soldados a la


vez.

Así, entre Weed y los soldados se formó una relación inesperada.


¡Fhus!

Cada vez que una flecha salía despedida, un kobold se volvía gris.

Los kobolds estaban considerados como monstruos relativamente


débiles. Sabían usar herramientas, pero éstas eran muy pobres, como si
hubiesen sido hechas por niños. En el combate básicamente confiaban
en su gran número.

“¡Haaaaaaiaiaia!” — un escuadrón de nueve kobolds cargó a la vez.

‘¡Venid! ¡Mis preciosos puntos de experiencia!’

Con una gran sonrisa formándose en su cara, Weed saludó en silencio


a los kobolds. Disparó flechas por todas partes, ganando experiencia
fácilmente. Los soldados se encargaban de la defensa, de todos modos.
Página 178 u

Todo lo que tenía que hacer era disparar tantas flechas como le fuese
posible.

Has subido de nivel.


u

Has subido de nivel.

Has obtenido una nueva habilidad: [Arquería]

Era un festival de subidas de nivel.

Además había aprendido [Arquería], una habilidad que por lo general


estaba reservada a los arqueros. Pero no era de extrañar, al considerar
que no había hecho nada más que disparar flechas, sin coger ni una sola
vez la espada en todas las batallas. Y con todo, ninguno de los soldados se
mostraba celoso de él. Tras las batallas, él era el más ocupado. Cocinaba
la comida, reparaba equipos y atendía a los heridos.

Sir Midvale tenía unas pocas pociones curativas para emergencias,


pero los soldados del grupo de asalto no contaban con tan costosas
medicinas. Weed les frotaba las heridas con hierbas y se las cubría con
vendas usando su habilidad de [Artesanía].

Has obtenido una nueva habilidad


[Primeros Auxilios]

Te permite detener hemorragias.


Página 179 u

Aumenta la salud de los heridos atendidos.

El número máximo de habilidades que un jugador sin clase podía tener


era de diez.
u

Su habilidad en [Primeros Auxilios], afectada por su alto nivel en


[Artesanía], tenía un efecto impresionante. Y como estaba ocupado
atendiendo todos los días a sus treinta pacientes, la habilidad crecía
casi sin control.

La tropa avanzo por la primera y segunda planta de la mazmorra,


eliminando kobolds, durante una semana. A veces veía jugadores que
miraban a Weed con envidia, al tener el privilegio de unirse a una fuerza
de asalto de PNJs y cazar monstruos con ellos.

Tras una semana de destruir kobolds subió su nivel a 26. La habilidad


[Reparar] llegó a nivel 3, y su habilidad [Cocinar], que ahora se
encontraba a nivel 4, le daba la opción extra de aumentar en 50 los
puntos de [Salud] de aquellos que comían sus platos hasta que su nivel
de satisfacción volviese a descender.
Pero, aun así, algo le molestaba.

“¡[Ventana de Misión]!”

[Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart (II)]

Hay un centenar de monstruos habitando la guarida


de Litvart. Mátalos a todos, del primero al último, y
demuéstrate merecedor de una clase honorable. Si completas
esta misión, se abrirá un camino hacia tu destino.

Nivel de Dificultad: Desconocido.


Página 180 u

Requisitos

Sin requisitos.
u

Monstruos restantes: 100

En la misión que el Sabio Rodrias le había encomendado, el número de


monstruos que tenía que eliminar no había disminuido a pesar de que,
a estas alturas, Weed ya había acabado con cientos de kobolds.

uuu

Tras una semana practicando con los kobolds, la tropa se dirigió al


tercer nivel de la mazmorra: el territorio de los goblins.

Mientras que luchar con los kobolds había estado dirigido a mejorar
la experiencia de los reclutas con combates reales, el enfrentamiento
contra los goblins supondría poner sus vidas en auténtico peligro.

El nivel de los kobolds estaba alrededor de los 20. Los matones kobolds
tenían un nivel 23, y los relativamente más fuertes guerreros kobold,
estaban a 28; pero los kobolds sin rango estaban tan solo a nivel 20.
En cambio, los goblins tenían nivel 50 o superior. Sus armas y equipo
eran superiores a los de los kobolds, tanto en poder de ataque como en
defensa. La fuerza de combate de un goblin era unas cinco o seis veces
la de un kobold.

“Ahora cuidado. Si os encontráis en peligro, retroceded de inmediato.”


Página 181 u

“¡Sí, Comandante!”

Los soldados no podían ocultar su excitación y tensión. Sus niveles


rondaban entre el 23 y el 25 tras la caza de kobolds, pero su confianza
estaba muy baja ante la idea de enfrentarse a un enemigo desconocido
cuyo nivel iba a ser, por lo general, superior al suyo. El único alivio era
que los goblins aparecían en grupos más reducidos que los kobolds.
u

‘Fiu’ — Weed suspiró exasperado. Su estómago se encogía al pensar


que si la tropa se enfrentaba a los goblins en ese momento, seguramente
sufrirían bajas.

‘¿Un tercio? ¿A lo mejor más? Espero que no nos aniquilen.’

Si él hubiese estado al cargo de las tropas, habría estado más tiempo


acumulando experiencia y niveles con sus hombres antes de llevarlos
al territorio de los goblins, por no mencionar que les habría enseñado
cómo luchar contra ellos de forma eficiente.

Pero el mando de la tropa pertenecía exclusivamente a Sir Midvale. Weed


solo tenía dos opciones: o les seguía como hasta ahora, para sentarse y
ver cómo morían inútilmente, o abandonaba la misión y se iba a cazar
kobolds por su cuenta hasta alcanzar el nivel necesario para encargarse
de los goblins. La segunda opción, que le penalizaba abrumadoramente,
estaba directamente descartada.

De hecho, la razón por la que Weed estaba tan preocupado por el


bienestar de los soldados era debido a una razón práctica: no quería ver
cómo morían en vano después de todo el trabajo que le había costado
subir la amistad con ellos.

“Aquí vienen. ¡Preparaos!” — incluso antes de que Sir Midvale terminase


de hablar, un grupo de goblins apareció corriendo por una galería.

“¡Iiigh!”

“¡Humanos, humanos!”
Página 182 u

“¡Ellos mueren!”

Había cinco goblins. El número de soldados se imponía en una proporción


de seis a uno. Weed planeaba disparar una flecha a los goblins para
quitarles algo de iniciativa y buscar oportunidades a continuación: sin
duda, un goblin supondría una tremenda cantidad de experiencia y se
moría por conseguir uno.
u

Pero los soldados quedaron petrificados. Era como si estuviesen


completamente clavados en su posición. ¡Y de los goblins emanaba un
fuerte espíritu combativo! Los soldados temblaban al ver a un enemigo
de nivel 50. Sus espadas apuntaban al suelo, y era difícil no ver cómo les
temblaban las rodillas.

‘Idiotas…’ — Weed chasqueó la lengua.

Los goblins no habrían sido fáciles de derrotar ni aunque los soldados


hubiesen estados dispuestos a hacerles frente sin miedo, y ahora
estaban petrificados incluso antes de que empezase el combate. El único
resultado de esta situación era una masacre.

Weed lanzó una mirada a Sir Midvale, que estaba de pie a su lado.
Quedaba claro que el caballero no estaba de humor como para motivar
a sus hombres. “El débil merece morir”. El código de caballería del reino
de Rosenheim era muy despiadado.

Weed avanzó. Se colgó el arco a la espalada y desenvainó la espada de


hierro.

‘Tengo fe en la amistad en que he trabajado tanto’ — se dijo.

Entonces hizo algo que era inimaginable para los soldados que
recordaban cómo había actuado en todas las batallas anteriores. ¡Con
un grito de guerra cargó hacia los goblins!

“¡Hiai!”

¡Clinck!
Página 183 u

La espada de Weed fue rechazada fácilmente, haciendo que se sintiese


inútil. Con sus altos atributos, podía cubrir el hueco entre su nivel y el
de los goblins, pero el menor alcance de la espada era una diferencia
crítica. La espada no era muy efectiva contra los goblins, que estaban
armados con largas lanzas.
u

‘No llevo equipo defensivo. Si me alcanzan, estoy muerto.’

Los goblins bloquearon su espada y, casi al mismo tiempo, contratacaron


con sus lanzas. Se agachó para esquivarlas. Fue necesaria una
combinación de sus increíbles reflejos y su claridad mental para salvar
su vida.

No pretendía luchar en serio contra los goblins, por lo que sus siguientes
ataques no tuvieron mucho entusiasmo.

“¡Muere, humano!”

“¡Tu espada ridícula!”

Con las cinco lanzas de los goblins atacando por doquier, dejó que sus
instintos dirigiesen sus acciones.

Mientras se mantuviese en la distancia adecuada, no corría el riesgo


de verse ensartado por una lanza. Aun así, fingió estar en peligro,
esquivando los ataques por centímetros. A los ojos de los soldados, no
era más que un inútil forcejeo del débil por sobrevivir.

Aunque su nivel había sobrepasado hacía mucho el de ellos, en la mente


de los soldados, él era tan solo el chico de las tareas que se encargaba de
los trabajos manuales como las reparaciones, la cocina y los primeros
auxilios. ¡Y ese mismo chico estaba luchando solo contra los goblins!
Los ojos de los soldados empezaron a recuperar la confianza.

Tras otro par de intercambios, Weed se retiró un par de pasos y rugió


con voz potente.
Página 184 u

“¡Mírenlos! ¡Esos goblins son más débiles de lo que parecen! ¡Les


superamos en número! No estamos solos. ¡Nos tenemos los unos a los
otros! ¡Nuestros camaradas, a nuestro lado, nos protegen las espaldas!”

“¡U-hah!” — los soldados recuperaron inmediatamente la moral.

“¡Sería una vergüenza que nos escondiésemos tras Weed como ratones!”
u

“¡Adelante… luchad!” — cargaron directamente hacia los goblins.

Weed sintió la fuerza que se aproximaba y se retiró de la batalla.

“Los bastardos solo están usando lanzas. Si luchamos en el rango de sus


armas solo nos causará más daño. Usad los escudos. Formad dos líneas.
Avanzad. Reducid los huecos con los compañeros, y evitad que muevan
las lanzas con libertad.”

“¡Sí!”

“¡Haré lo que dices!”

Weed les estaba dando consejos oportunos en un tono amigable. Como su


amistad estaba al máximo, sus órdenes eran aceptadas inmediatamente
por los soldados.

Hicieron retroceder a los goblins con su asalto. Dos tercios de los soldados
llevaban los escudos frente a ellos, y el resto empuñaba sus espadas.
Como las dos primeras líneas cargaban protegidas por los escudos,
los ataques de las lanzas de los goblins rebotaron, sorprendiendo a los
descerebrados enemigos. En cuanto la distancia se hubo reducido, la
tercera línea empezó a atacar con las espadas.

[Carisma] ha incrementado en 3 puntos.


Página 185 u

Weed, que estaba descansando ociosamente, vio cómo su [Carisma]


aumentaba en tres puntos. El atributo de [Carisma] afecta a las tropas
de PNJs, y hace que sea más fácil domesticar una mascota o contratar
mercenarios.

Como los soldados habían sido motivados por la pelea que Weed había
provocado, su liderazgo había sido reconocido.
u

¡Zash!

Los goblins, a pesar de su nivel superior, no podían imponerse a unas


tropas que los superaban en número. La ofensiva coordinada fue
convirtiendo a un goblin tras otro en destellos grises.

Esas tácticas de falange romana habrían sido ineficaces en una batalla


de ejércitos con una cantidad de tropas similar pero, con un muro de
treinta soldados con escudos cargando desde las cuatro direcciones, era
suficiente para devastar a los goblins que solo contaban con sus largas
lanzas.

Y las ocasionales flechas disparadas por Weed desde una posición segura,
servían para aumentar su nivel de desconcierto.
‘¡Cinco goblins! ¡Uno de ellos es mío!’

Weed observó la situación de la batalla y, cuando vio que uno de los


goblins estaba a punto de morir, disparó una flecha certera al cuello del
monstruo.

Has subido de nivel.

Desde que había llegado al nivel 26, los kobolds habían dejado de darle
tantos puntos de experiencia como antes. Aún eran bastantes puntos,
pero insuficientes para Weed.
Página 186 u

En ese sentido, un goblin estaba en una liga completamente diferente.


Cuando Weed mató al goblin, esa muerte aumentó el 37% que le faltaba
para subir al siguiente nivel, además de avanzar un 10% del nuevo nivel.
Con un nivel 50, los goblins eran mucho mejores que los kobolds en
puntos de experiencia.

Weed estaba tentado de besar el trasero del goblin. Solo Dios sabe lo
u

que hubiese hecho de no haber estado rodeado de soldados. Era difícil


encontrar un territorio de caza mejor que este.

“¡Hemos ganado!” — exclamaron los soldados tras haber derrotado


al enemigo, levantando las espadas al aire. Estaban rebosantes de
confianza por haber derrotado sin grandes problemas a sus primeros
goblins.

“Los goblins no son rivales para nosotros.”

“No, ganamos fácilmente porque seguimos los consejos de Weed.”

“Tiene el don de un líder.”

“Es excelente valorando la fuerza de sus oponentes.”


“Si nos dirigiese, nuestras posibilidades de sobrevivir serían muy altas.”

Cuando la batalla hubo concluido, los soldados alabaron a Weed,


dándole palmaditas en la espalda.

¡La diosa de la fortuna le sonreía! Pero Weed dirigió su mirada


cuidadosamente hacia Sir Midvale. Si el caballero se sentía ofendido
porque su posición hubiese sido arrebatada por un simple desconocido,
tendría todo el derecho de ejecutarle sin ni siquiera un juicio, aunque a
Weed le aliviaba pensar que su amistad con el caballero evitaría el peor
resultado.

Sir Midvale estaba mirando el cadáver de un goblin, profundamente


sumido en sus pensamientos, cuando de pronto levantó la mirada y le
dijo:
Página 187 u

“Es un buen soldado, Weed. Puedo ver que tiene gran talento. ¿Qué le
parecería pasar a formar parte de la Guardia Real?”

“¿La Guardia Real?”

“Sería un oficial en el honorable ejército del Reino de Rosenheim. Y


empezaría con la posición de decurión.”
u

¡Ding!

Has recibido una oferta de trabajo.

Si aceptas, asumirás la posición militar de Decurión de


Rosenheim. Tendrás el mando de 10 soldados. Podrás recibir
entrenamiento regular y un ingreso mensual de 50 monedas
de plata.

¿Aceptas la oferta?
Al completar el entrenamiento regular, recibiría seguramente algunas
técnicas básicas de espada y algo de equipo militar, como un arma y un
escudo. Desde luego, no serían los mejores de la ciudad. Seguramente
una espada de hierro, o similar, y una armadura pesada que solo tendría
opciones de defensa.

Weed sacudió la cabeza porque, según sus planes, era demasiado pronto
como para asentarse en una carrera determinada.

“Me honra que tengáis tan alta opinión de mí, señor. Pero no puedo
aceptar. Ser un Guardia Real es algo a lo que sin duda aspiro, pero
preferiría dedicarme a moverme libremente en ayuda del pobre y el
débil, y eliminar a los monstruos que amenazan la paz por el momento.
En mí fluye la sangre de un aventurero, Sir Midvale.”

“Bien, así sea. Si en cualquier ocasión cambia de idea, hágamelo saber.


Página 188 u

Por ahora, por favor, tome el mando de mis hombres.”

“¿Está seguro?”

“Aunque sea mi responsabilidad, está claro que mis hombres están


dispuestos a seguirle, y a aprender de usted. Observaré desde la
retaguardia hasta dónde puede llevarles su liderazgo.”
u

Sir Midvale le transfirió el mando de la fuerza de asalto a Weed.

A partir de ahora los soldados estaban obligados a obedecer sus órdenes,


por lo menos mientras permaneciesen en la mazmorra. Por supuesto, no
esperaba una lealtad absoluta hasta el punto de saltar a un pozo de lava
si se lo pidiese.

Su [Carisma] era demasiado bajo, por lo que contaba solo con la amistad
de los soldados. Aun así, estaba encantado con su nueva posición.

‘¡Genial! ¡Pienso exprimir esta situación al máximo!’ — se dijo.

Weed guardó el arco rápidamente, sacó la espada y la mantuvo en alto.


Era una demostración de su nueva posición. Con el arco hubiese sido
bastante menos impresionante, recordando a sus nuevos subalternos
su comportamiento en las batallas anteriores, que no había sido
precisamente el más honorable.

“¡Escuchad, soldados! Mi nombre es Weed y, a partir de ahora, estoy al


mando. Solo os pido que sigáis mis órdenes con prontitud.”

“¡Sí, Comandante!”

“Mi principal objetivo es someter esta mazmorra sin sufrir bajas. Dad
todo lo que podáis, y ni una sola gota de vuestra sangre se derramará
en vano.”

“¡Sí, Comandante!”

Ahora que Weed había tomado el mando de Sir Midvale, la actitud de


Página 189 u

los soldados hacia él había cambiado drásticamente.

“Buren, Becker.”

“¡¿Sí, señor?!”

“A partir de ahora sois exploradores. Os mantendréis por delante del


u

ejército, buscando enemigos por la zona. Aunque estemos en medio de


una batalla, deberéis seguir prestando atención a cualquier enemigo
que se nos aproxime.”

“¡Sí, Comandante!”

Weed dirigió la marcha de su tropa con los dos exploradores al frente.


Poco después, Buren volvió a él, respirando con dificultad.

“¡Comandante!”

“Habla.”

“¡Buren informando, señor! Siete goblins a las doce. Dos mujeres goblins
y cinco saqueadores goblins.”
Según la base de datos privada de Weed los saqueadores goblin debían
tener nivel 58.

“Buen trabajo, Buren. ¡Soldados, alto!”

Weed instruyó a sus tropas para que se detuviesen en una caverna


abierta y montó algunas trampas. Tras eso se adentró solo por la cueva
en la que Buren había encontrado a los monstruos.

Tal y como Buren le había informado, Weed encontró a los siete goblins
descansando. Sacó su arco y disparó una flecha al más alejado de él.
Antes de que la flecha alcanzase su objetivo, se dio la vuelta y empezó
a correr.

¡Zas!
Página 190 u

“¡Agh, humano!” — los goblins buscaron a su alrededor hasta que


vieron a Weed y se lanzaron en su persecución.

Weed sabía que si le rodeaban los siete no tendría ninguna posibilidad


de salir vivo. Por eso estaba rezando para que sus pies no le fallasen.

¡Pum! ¡Pum!
u

Empezó a sentir escalofríos al ver cómo le iban ganando terreno. Los


goblins, sujetando sus largas lanzas, corrían con pesadas zancadas.

‘Dios, me están dando escalofríos. Esto es lo que yo llamo una cacería


impresionante. No, el mejor trabajo posible para mí.’ — pensó.

Aunque estaba en una situación peligrosa, sus pensamientos seguían


siendo positivos. Estaba solo pero, en cuanto llegase a la zona en la
que se ocultaban sus tropas, estaría a salvo. Corrió como si le hubiesen
prendido fuego en las ropas y llegó a la caverna.

“¡Comandante!” — las primeras caras que vio fueron las de Buren y


Becker.
“Prepárense para la batalla. ¡Se acercan los goblins!”

Mientras el grito de Weed aún resonaba en la amplia caverna, los siete


goblins salieron corriendo de la cueva. En un momento su destino quedó
decidido.

“¿Kugh?” — los goblins, estúpidos y descerebrados por naturaleza,


estaban sobrecogidos por la repentina aparición de los soldados tras las
rocas en las que habían estado escondidos. Aprovechando la distracción
de los monstruos, los soldados les lanzaron las antorchas encendidas.

“¡Esos bastardos están atrapados!”

“¡Presionad!”

“Tienen lanzas. ¡Cuidado con las lanzas! Cualquiera que este herido, sea
Página 191 u

grave o no, que se retire a la retaguardia.”

Si Weed hubiese previsto que iba a estar a cargo de las tropas hubiese
comprado más trampas y cebos. Al no tener nada más, lo mejor que se
le ocurrió fue lanzarles las antorchas a los goblins.

Aun así, los soldados estaban luchando bastante bien. Las técnicas de
u

guerrilla de las tropas separaban a los goblins de forma mecánica en


grupos reducidos, destrozándolos sin piedad. Se reforzaban con algo
inmensurable llamado “moral”.

Tanto para los monstruos como para los NPCs, la moral era siempre
un factor decisivo en combate. Los soldados tenían fe en su nuevo líder:
Weed. Mientras que, confundidos por las antorchas que les habían
lanzado, los goblins empezaban a darse cuenta de que se habían metido
en una trampa; estaban rodeados por un montón de humanos, por lo
que estaban perdiendo el ánimo de lucha.

“¡Tramposos humanos atacan!”

“¡Kiiih! ¡Salvaos!”
“¿Y creen que les vamos a dejar huir?”

Mientras los soldados presionaban sin descanso al enemigo, en los ojos


de Weed se pudo vislumbrar un destello.

“Rodeadlos. ¡Bloquead la boca de la cueva!”

“¡Sí, Comandante!”

“Dejad que los heridos se retiren y reciban los primeros auxilios. Los
soldados con toda la salud que se concentren en la defensa. Los que
hayan sido curados que mantengan la posición.

“A mi señal, preparaos para seguirme en la batalla.” — bajo las órdenes


de Weed, los soldados inmovilizaron a los goblins, dos de los cuales
cayeron bajo sus flechas.
Página 192 u

Ya que había arriesgado su vida, pensaba que se merecía al menos dos


goblins como compensación.

Los goblins, debido a su alto nivel, aguantaron bastante pese a su baja


moral, pero en cuanto Weed ordenó a sus tropas que se dividiesen en tres
grupos y que se turnasen para agotar al enemigo, poco a poco fueron
u

desapareciendo en destellos grises.

Los goblins dejaron de botín nueve monedas de plata, un escudo de acero


y una lanza de bronce. Cuando Buren y Becker, según sus instrucciones,
los recogieron, Weed intervino.

“¡Todos, escuchad! Me enorgullece vuestro valor. Por eso pienso dividir


el botín de un modo diferente al usado hasta ahora.”

“…”

“Recompensaré más a quien muestre más valor luchando contra los


goblins. Con una condición, que no esté tan herido como para no poder
seguir luchando. Mi prioridad es devolveros a salvo con las familias que
os esperan en casa.”
“¡Sí, Comandante!”

En cuanto terminó de hablar, los ojos de su tropa estaban llenos de


admiración.

[Carisma] ha incrementado en 2 puntos.

De haber podido, se hubiese quedado con todo el botín para sí mismo,


pero se controló. Si su amistad con los soldados disminuía, con su
bajo nivel de [Carisma] hubiese podido causar un motín, o incluso un
linchamiento.
Página 193 u

La presencia de Sir Midvale influía aún más en su contención. Dirigiendo


sus tropas, Weed empezó a limpiar sistemáticamente el tercer piso. Pero,
un día, el Caballero Real se le acercó con expresión seria.

“Weed, vamos demasiado despacio. Le recomiendo que se apresure.”

“¿Perdón, señor?”
u

“Estas tropas me han sido prestadas de otros regimientos. No puedo


contar con ellos indefinidamente. Deben terminar la misión en un mes
y volver a sus regimientos originales.”

Weed no sabía nada de ese límite de tiempo. Al parecer, solo los soldados
estaban obligados a ajustarse a él. Aun así, no incrementó el ritmo.
Cuando había seis goblins o más, siempre los atraía a una zona más
abierta con una o dos flechas, para que sus tropas se impusiesen. Y
cuando había menos de seis, los dirigía directamente a la cargar contra
el enemigo.

Weed evitaba las batallas a menos que sus hombres estuviesen


completamente curados, y aún se encargaba de cocinar y reparar las
armas dañadas para mantenerlos en la mejor condición posible.
uuu

Cuando la fuerza de asalto logró imponerse en el tercer piso de la guarida,


Weed había llegado al nivel 37, y sus hombres al 34. Entonces empezó
la verdadera caza.

“¡A la carga!”

“¡Mantened la formación! ¡A la carga!” — bajo sus órdenes, los soldados


avanzaban como berserkers, dominados por la sed de sangre. Los goblins
no eran rivales para ellos.
Página 194 u

“¡Hiai! ¡Hiai!”

“¡Muere, monstruo horrendo!”

“Caras de rana come-queso; os barreré de la faz de la tierra.”

Los soldados presionaban con los escudos por delante. Eran más
u

malhablados que nunca porque Weed les había estado enseñando. A


veces rugían amenazadoramente, y cargaban bajo lo que parecían
unas condiciones imposibles. Sus espadas se volvieron más activas,
penetrando más fácilmente por los huecos que dejaban las lanzas de los
goblins.

Weed seguía manteniendo la misma formación para que sus hombres


contasen con sus compañeros, pero eran más osados y rápidos. Habían
acabado con una multitud de goblins, dejando a su paso miles de cuerpos.

Usando agresivamente las tácticas de Weed, sus tropas aplastaban las


defensas de los goblins con ataques bien coordinados.

Ahora acababan en un momento con un escuadrón de seis goblins,


con el ejército de 30 veteranos cargando brutalmente y devastando al
enemigo.

“Hemos ganado esta batalla. Dejad que distribuya los objetos según los
logros individuales. Hosram y Dale.”

“¡Sí!”

“¿Algún soldado necesita descansar o que repare algo?”

“¡No, Comandante!”

“¡Ninguno!”

“Pues en marcha. ¡Exploradores, informad!”

Buren y Becker, por turnos, exploraban e informaban sobre la ubicación


Página 195 u

y la cantidad de los goblins más cercanos.

“¡Becker informando, Jefe! Ocho goblins a cien metros a las nueve. Un


alquimista, seis guerreros y un goblin normal.”

“¡Adelante!”
u

Los soldados corrieron a un ritmo cómodo, ni lento ni rápido. Galopando,


se recuperaban de la fatiga de la batalla y se preparaban para la nueva.

“¡Hu… humanos!”

“Enemigos, ¡matadlos!”

Los goblins intentaron a resistir, pero casi no pudieron hacer nada. Los
soldados, ahora veteranos curtidos con experiencia, ya se imponían a
los goblins en moral, y las flechas de Weed eran sentencias de muerte.

Su nivel en [Arquería] subió rápidamente, al estar participando


activamente en las batallas, y sus flechas ya no apuntaban solo a goblins
moribundos. Ahora disparaba para ganar la iniciativa y, cuando los
goblins se reunían para escapar de la red de soldados que les rodeaban,
entorpecía sus movimientos con tiros de advertencia. El objetivo
principal era cualquier goblin que pusiese en peligro la vida de alguno
de sus hombres.

Imagina que una lanza de goblin se te viene encima y que una flecha de
tu Comandante le abre un agujero en la cabeza al goblin que la empuña,
¿no te sentirías seguro y más leal a tu líder? Esa lógica se aplicaba a
todos los hombres cuyas vidas habían sido salvadas por las flechas de
Weed en el último momento.

Su tropa cazaba goblins de la forma más eficiente y rápida. Dominaron


el cuarto piso más rápido que el tercero, incluso mantuvieron el mismo
ritmo al llegar al quinto, en donde se enfrentaban a grupos de veinte
goblins en cada combate.

A medida que los soldados iban madurando en sus habilidades, iban


Página 196 u

recibiendo el grado de veteranos, llegando incluso a poder enfrentarse a


los goblins en combates singulares.

Aun así, Weed se mantuvo fiel a sus viejas tácticas de centrarse en


la defensa y superar en número al rival. Algunos de sus hombres se
crecieron y le sugirieron que la cambiase, y empezasen a desafiar a los
goblins a luchas justas en igualdad de condiciones.
u

Pero Weed se mantuvo firme.

“¡Ni se os ocurra pensar que los goblins se merecen un trato justo! ¿Alguna
vez habéis oído hablar de un caballero solicitando un duelo contra un
monstruo? Si lo hubiese, sería un estúpido, por intentar defender su
honor contra un monstruo. Estamos luchando por reinstaurar la paz y
defender a los habitantes de Rosenheim. No os olvidéis que si dudáis en
acabar con un goblin por razones éticas, ¡serán vuestros compañeros los
que paguen las consecuencias!”

El carisma de Weed logró mantener a raya a sus treinta hombres.

Uno que luchó solo contra un goblin se vio negado de su reconocimiento


y fue puesto en la retaguardia en la siguiente batalla. Al principio se
alegró por verse fuera de peligro, pero pronto se dio cuenta de que tenía
que quedarse sentado mientras veía cómo sus compañeros subían de
nivel.

Este ejemplo les sirvió de lección, por lo que las tropas hasta estaban
dispuestas a apuñalar por la espalda si era posible. Habían sido
hipnotizados por la lengua de plata de Weed, que ahora podía enseñar
tácticas avanzadas a veteranos endurecidos por las batallas.

Durante casi todo un mes, Weed dirigió la fuerza de asalto barriendo los
monstruos de la Guarida de Litvart. Cuando aún quedaba una semana,
volvieron a la tercera planta y por el camino aplastaron a los goblins
que se habían regenerado.

En cuanto empezaba un combate, los soldados se abrían en alas, en


una formación envolvente, eliminando a los enemigos en un abrir y
Página 197 u

cerrar de ojos. Y en cuanto terminaban con una batalla, se dirigían


inmediatamente al siguiente.

No murió ni un solo soldado.

Terminaron la misión [Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart]


con el nivel general de las tropas en 57, y el de Weed a 62. Teniendo en
u

cuenta que el nivel medio de los decuriones en el Ejército de Rosenheim


era 40, lo que Weed había conseguido era impresionante.

“Buen trabajo Weed, nos habéis hecho un gran servicio” — Sir Midvale
no ocultaba su admiración — “Si contásemos con otros cinco hombres
con vuestro coraje y lealtad, el Reino de Rosenheim no se vería nunca
más acosado por los monstruos. Por esto y por el derecho que me otorga
mi posición como Caballero Real, en este momento le otorgo el rango de
Centurión. ¿Le gustaría aceptar mi propuesta, señor Weed?”

¡Ding!

Has recibido una oferta de trabajo.


Si aceptas, asumirás la posición militar de Centurión de
Rosenheim. Tendrás el mando de 100 soldados. Podrás
recibir entrenamiento regular y un ingreso mensual de 3
monedas de oro.

¿Aceptas la oferta?

Un oficial al mando de un centenar de hombres, un centurión, está


considerado casi como un Caballero, cualificado para entrar en un
proceso de pruebas anuales de promoción a Caballero en la Orden Roja.
Si se hubiese tratado de cualquier otro jugador, habría aceptado el
puesto encantado, pero Weed no se dejó llevar.
Página 198 u

“No sabéis cuanto me alegra su propuesta, Sir Midvale, pero es más de


lo que podría aceptar.”

“¡Freya no lo permita! Dígame si hay algo más que le interese, Weed.


Estoy convencido de que podremos llegar a un acuerdo.”
u

“Su oferta… supera mis más ambiciosos sueños. Pero lo único que
pretendo es la paz y la prosperidad del Reino de Rosenheim. Mientras
mi espíritu me mueva a ayudar a aquellos que precisen de mi ayuda,
no será aún el momento de asentarme. Si tiene alguna otra misión para
acabar con la amenaza de los monstruos tras las cosechas de otoño, o
si Rosenheim se ve invadido, seré el primero en ofrecer mi ayuda y mis
servicios para dirigir a los valientes soldados del ejército de Rosenheim.”

“Su espíritu es admirable, Weed. Las puertas del Ejército Real siempre
estarán abiertas para usted” — Sir Midvale retiró su propuesta con
gesto satisfecho. — “Ahora que hemos concluido con nuestra misión,
dirigiré a las tropas de regreso a la Ciudadela. ¿Se unirá a nosotros?”

“Antes tengo algo que hacer aquí, señor.”


“¿Puedo preguntarle qué le retiene?” — preguntó Sir Midvale con
curiosidad.

Las últimas cuatro semanas, Weed había hecho 32 platos de estofado


tres veces al día. Su experiencia en [Cocina] le permitía crear grandes
platos en cualquier situación, y Sir Midvale era uno de los que se habían
beneficiado y enamorado de su comida, lo que le había ayudado a formar
una sólida amistad.

“Debo cumplir una misión que me ha sido encomendada por el Sabio


Rodrias” — Weed había asumido que la aniquilación de los goblins
bastaría para cumplir con los requisitos de la misión, pero eso había
sido un grave error de cálculo por su parte.

El número de monstruos que aún tenía que abatir seguía siendo cien,
sin señales de disminuir. De todos modos, el número de goblins en la
Página 199 u

guarida era de cientos en cada planta, sin exagerar.

La misión del Sabio consistía en acabar con todos los monstruos de la


Guarida de Litvart, pero kobolds y goblins no podían ser el objetivo, ya
que superaban en mucho el objetivo impuesto.

“Ya veo, Weed. Una misión del Sabio… Entiendo. Esperaba que
u

regresara con nosotros a la Ciudadela, pero el destino quiere que nos


separemos aquí. Siendo así, le prestaré a Trasero.”

“¿Trasero? ¿El trasero de quién?”

“¿Ya habéis olvidado el nombre del caballo que le trajo hasta aquí?”

“¿No me diga…?” — Weed empezó a sentirse indispuesto. ¡El potro que


le había coceado y le había mordido la mano! Ahora que se acordaba, su
nombre era Trasero. Vaya un nombre tan vergonzoso para un aspirante
a semental.

“El viaje a la Ciudadela le costará un tiempo muy valioso sin un caballo.


Trasero está a su servicio.”
“Gracias, pero no será necesario, señor. No necesito un caballo.”

“Solo le devuelvo el favor, Weed. Por favor acéptelo. Devuélvalo a los


Establos Reales cuando termine con su misión.”

“…”

Sir Midvale se dio la vuelta en cuanto hubo terminado de hablar. Su


actitud implicaba que no había nada más que decir, caso cerrado. El
Caballero tenía buenas intenciones hacia él, pero Weed no quería nada
de eso. ¿Cómo diablos iba a soportar al salvaje potro?

Weed odiaba con toda su alma esta nueva molestia, pero no le quedó
más remedio que aceptar, o volvería a dejar en ridículo al Caballero.

“Comandante, le echaremos de menos.”


Página 200 u

“¡Todos volvemos vivos a casa gracias a usted!”

“Por favor, pase por mi local a saludar cuando regrese a la Ciudadela.”

“Dirijo una posada en la Avenida Central. Siempre será bienvenido.”


u

“Mi familia tiene un restaurante. Mi esposa le servirá una comida


deliciosa, ¡Aunque no tan buena como la suya!”

Los soldados fueron a despedirse de Weed.

Como veteranos de alto nivel, seguramente serían ascendidos en cuanto


volviesen, por lo menos, a decuriones, aunque uno o dos seguramente
podrían optar a una posición incluso mayor.

Weed les dio la mano a sus ex-subordinados. Sus manos eran cálidas, y
mantenía el apretón por un par de segundos.

“¿Realmente tenéis que marcharos?”

“Me gustaría quedarme con usted, Jefe, pero soy un orgulloso soldado
del Ejército de Rosenheim y tengo que regresar a mi regimiento.”

“¡Comandante, le echaré de menos!”

Los ojos de Weed mostraban su pesar. ¡Cuántos problemas había


tenido que pasar para entrenar a esos soldados! Suyo era el mérito de
transformar a los novatos de nivel 20 en veteranos en combate. Ahora
sentía como si el Reino se los estuviese robando.

“¡Chicos, que tengan buen viaje!” — dijo al fin.

“Buena suerte, Jefe.”

“¡Comandante, no se olvide de pasar por mi local!”

Tras las difíciles despedidas con su antigua tropa, Weed se quedó solo.
Página 201 u
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 8
La profesión maldita

Como tenía por costumbre, Rodrias estaba dando un paseo por la tarde.
Disfrutaba observando a sus vecinos y profundizando en sus miserias.
Página 202 u

“¿Cómo estás, Hans?”

“Bien, Consejero”

“¿Cuál es la mejor fruta de hoy?”

“Esta. Por favor, probadla. Son fresas frescas, señor.”


u

“Muchas gracias.”

Su paso era liviano. Esta tarde, para variar, no estaba incordiando a


todo aquel al que veía. Estaba complacido por la publicación de su
último libro.

Al regresar a casa, el mayordomo a cargo de la mansión, le estaba


esperando en la puerta para recibirle. Rodrias le hablaba sin reservas al
sirviente que estaba dedicado a su familia desde hacía décadas.

“¿Qué tal vuestro paseo, mi señor?”

“Excelente. Muy agradable. En estos días no hay preocupaciones, no


hay problemas.”
“Me alegro por ello, mi señor. Por cierto, ¿puedo haceros una pregunta?”

“¿Qué pasa, William?”

“Es sobre el joven señor que tallaba estatuas al otro lado de la calle,
señor.”

“Oh, ¡ese chico!”

“¿Encontró lo que buscaba?”

Rodrias empezó a reír.

“Nunca fue tan fácil.”

“Entonces…”
Página 203 u

“¡Ni por asomo! No podrá dar con el sitio y si, contra todas las
posibilidades, lo encuentra…”

“…”

“¡Le estará bien merecido! ¡Incluso si consigue la clase!”


u

Rodrias empezó a reírse descontroladamente.

uuu

Lo primero que hizo Weed en cuanto estuvo solo, fue comprobar el


estado de su armadura y su inventario.

“Veinticuatro monedas de oro y treinta monedas de plata…”

En vez de recibir la parte del botín que sus hombres habían ido
recogiendo al eliminar kobolds y goblins, que se trataba sobre todo de
armas básicas, equipos y trozos de metal, Weed había pedido dinero en
metálico.

“Las ganancias no están nada mal, y…”

Durante el último mes, Weed había mejorado bastante sus habilidades.


Su habilidad de [Cocina] llegó a nivel 6, y la de [Reparar] a 4. Esta última
era tan útil que algunos jugadores se animaban a escogerla, pero la de
[Cocina] casi nadie la aprendía, salvo entre los cocineros profesionales.

La habilidad [Primeros Auxilios], estaba ahora a nivel 4, lo cual le


permitía tratar heridas menores con un par de vendas. Pero lo que más
había aumentado era su nivel.

Le daban ganas de echarse a reír.


Página 204 u

¡Pffff!

Pero por desgracia, Trasero bufó con desagrado. No tenía más remedio
que cuidar del potro gracias a la ‘cortesía’ de Sir Midvale. El animal, por
ahora no servía para nada, pero Weed estaba obligado a devolverlo sano
y salvo al Establo Real.
u

‘La Guarida de Litvart. Nadie ha descubierto otras mazmorras con este


nombre por el momento. Es aquí. Este es el lugar.’

Maldito Consejero.

Convencido de que había algo detrás de todo esto, Weed se dedicó a


analizar el objetivo de la misión desde todos los ángulos posibles.

‘Tiene que haber alguna entrada oculta en alguna parte de la mazmorra, en


algún sitio donde todavía nadie ha mirado… una cámara secreta.’

Así que empezó a buscar desde la primera a la quinta planta.

Para las clases aventureras, como los arqueros o los exploradores, que
cuentan con diversas habilidades de búsqueda, es fácil dar con accesos
secretos. Pero Weed tenía que usar métodos básicos como confiar en
su vista o pasar la mano por cualquier zona sospechosa para tratar de
encontrar la ‘entrada oculta’.

Había por lo menos 20 jugadores en cada planta de la Guarida de Litvart.


Mientras cazaban monstruos, no podían evitar hacer comentarios sobre
el extraño comportamiento de Weed.

“¿Qué está haciendo ese tío?”

“Parece que esté buscando una entrada. ¿Por qué otra razón iba a
acariciar con tanta ternura los muros de piedra?”

“Ja, ja, ja, ja, menudo idiota. Este sitio no tiene pasajes ocultos.”
Página 205 u

“Esta fue la primera mazmorra explorada completamente tras el


descubrimiento de Rosenheim hace meses. Ya ha sido superada por
miles de aventureros. Lo que está haciendo no tiene sentido.”

“Vaya un bicho raro.”

Se reían de él abiertamente, aunque estaban celosos tras haberle visto


u

moverse cómodamente por los pisos con la ayuda de los 30 soldados


PNJ. No le sorprendía ser el objetivo de las envidias y celos de los demás.

“Pero, por si acaso…”

“Cuidado. Que no sepa que le seguimos.”

Varios le siguieron en silencio, pensando que tal vez hubiese obtenido


algún tipo de información valiosa de los soldados PNJ durante la misión.
O mejor aún, que estaba realizando una misión especial. En ese caso,
hasta se plantearon obligarle a que compartiese la misión.

A sus ojos, ese bicho raro solitario era un arquero de nivel bajo, con
insuficientes habilidades en el combate cuerpo a cuerpo; por ello
se encargaba de las tareas de las tropas y se pegaba a ellos como un
parásito.

Después de una semana sin cambios, los alborotadores se empezaron a


cansar de seguir a Weed en vano; debía estar obsesionado en explorar la
mazmorra, así que terminaron dejándole en paz.

“Vaya loco.”

“Mierda. Estoy cabreado. Qué pérdida de tiempo.”

Pero incluso cuando le dejaron solo, Weed no dejó de buscar.

‘Tiene que haber algo.’

Muchos exploradores habían completado el mapa de toda la región, y


determinaron que no quedaba nada más por encontrar. Eso era también
Página 206 u

lo que decía toda la información que Weed había recopilado. De hecho,


no había dejado de buscar mientras cazaba kobolds y goblins, pero
hasta el momento no había conseguido descubrir nada. Aun así, Weed
estaba convencido de que en cualquier momento daría con algo.

‘Este sitio ha sido registrado por famosos aventureros de todo el continente.


¿Y? Ellos se equivocan. Yo no.’
u

La Guarida de Litvart era un sitio enorme. Vagar por allí con la triste
esperanza de descubrir un pasaje oculto era como esperar un milagro.
Aunque los aventureros tenían una clara ventaja con sus habilidades
de detección, con perseverancia y una buena actitud podía marcar la
diferencia.

Con paciencia, Weed palpaba los muros, buscando cualquier pista

¡Pffff!

Trasero observaba a Weed con desprecio.

Se había traído al caballo a la guarida porque en esta ocasión no tenía


a nadie con quien dejarlo a salvo, pero la desobediente bestia le estaba
empezando a estresar.

‘Antes de seguir con esto, tengo que enseñarle una lección a este caballo.’ —
pensó Weed.

A propósito, guió a Trasero a un nido de goblins, había un guerrero y


tres asaltantes. En cuanto los monstruos vieron a Weed cargaron hacia
él.

Se puso delante del potro para protegerlo, y empezó a luchar contra los
goblins, gritando.

“¡Oh, dios! No, ¡no quiero morir!”

La lanza del guerrero se le vino encima, pero solo le rozó, haciendo que
surgiese un pequeño reguero de sangre de su mejilla.
Página 207 u

“Si… si muero ahora… ¿qué será de mi queridísimo Trasero…?”

Los goblins no dejaban de atacarle.

“¡No! ¡Tengo que resistir para proteger a mi Trasero! ¡Vamos! ¡Vosotros


monstruos abominables! ¡Tendréis que pasar sobre mi cadáver si
u

pretendéis ponerle vuestros dedos sobre él!”

Weed estaba jugando el papel de un valiente caballero defendiendo a los


débiles aún a riesgo de su propia vida.

Pero, cuando miró atrás, vio al potro bostezando y jugueteando con


unas piedrecitas en el suelo. Además, la bestia estaba preparada para
huir disparada hacia la salida de la guarida en el preciso instante en que
su amo cayese muerto.

“¡Maldito seas!”

Weed estaba avergonzado por la situación. ¿Por qué se había puesto en


ridículo por un simple potro?
¡Zas!

Weed acabó con los molestos goblins con un simple movimiento de su


espada.

Estaba tentado en cortar también la cabeza de la bestia, pero perder la


confianza de Sir Midvale era un precio demasiado alto.

¡Pffff!

Trasero le miró con desdén como preguntando por qué había derramado
sangre innecesariamente si podía haber acabado con ellos tan fácilmente.

‘¡Uf! He sido un tonto por actuar así. Calma, calma.’

Weed retomó la tarea de investigar la mazmorra.


Página 208 u

Tres días después, más precisamente el décimo desde que había empezado
su investigación privada, encontró una cavidad en un rincón oscuro del
cuarto piso en donde los asaltantes goblin se regeneraban. Estaba a
unos dieciocho metros por detrás del punto de regeneración. Hasta los
más concienzudos exploradores se lo habrían saltado. La cavidad estaba
ensombrecida por una gran roca saliente, alejada de los ojos humanos.
u

“¿Hay alguien ahí?” — preguntó Weed con precaución.

Mirando alrededor, Weed se aseguró de que no hubiese nadie espiándole.


Los que le habían estado siguiendo durante una semana habían
desaparecido, pero nunca estaba de más mostrarse cauto.

Si esta cavidad resultaba ser lo que Weed había estado buscando, sería
el primero en descubrirla y no quería compartir el crédito con nadie.

Las recompensas por ser el primero en descubrir una nueva zona eran
inmensas. Se ganaba fama, además del doble de experiencia y una
mayor probabilidad de conseguir objetos durante una semana tras el
descubrimiento. Weed se introdujo en el pasadizo con mucho cuidado.
El hueco era lo bastante estrecho como para confundirlo con una fisura
en las rocas, pero su interior se iba ensanchando poco a poco a cada paso.
Pronto llegó a una caverna por la que podía moverse cómodamente. Un
olor húmedo y nauseabundo le asaltó la nariz.

Nervioso, se preparó para el combate. No tenía ni idea de lo que vendría


a continuación, así que sujetó la espada de hierro con la mano derecha,
y las hierbas y vendas con la izquierda.

‘Vamos allá.’

Lentamente, Weed se adentró en la cueva.

En el interior había bastantes bifurcaciones. Escogió el camino de la


izquierda y avanzó por él, solo para dar con un gusano inmenso en un
callejón sin salida.
Página 209 u

“¿Pero qué…? ¿Qué clase de monstruo es ese? Nunca he visto un gusano


de ese tipo…”

Antes de que Weed hubiese podido terminar de hablar, su entorno sufrió


un brusco cambio.

Lo que pensó que era un suelo oscuro resultó ser en realidad una gran
u

cantidad de bichos del tamaño de un dedo meñique.

¡Squirm!

Como Moisés separando las aguas del Mar Rojo, los insectos se separaron,
antes de volverse para atacar a Weed, arrastrándose amenazadoramente.

“¡¿Cómo…?! ¡¿Cómo se atreven?!” — Weed blandió la espada de hierro


como si fuese un remolino.

Cubiertos con desagradables caparazones crujientes, los pequeños


bichos apenas tenían poder de ataque, pero el gusano con aspecto de
reina los creaba más rápido de lo que podía exterminarlos. Realmente
echaba de menos a sus hombres de la fuerza de asalto.
“Acabaría antes con todo este embrollo si los tuviese aquí.”

De repente, la reina exhaló unas humaredas de un color azul claro.


Igual que una gota de tinta en un vaso de agua, el humo se expandió
lentamente por el espacio cerrado, hasta llegar a la zona en la que estaba
Weed.

En el mismo momento en que lo inhaló…

¡Ding!

Has sido envenenado.

Tu vida decrecerá continuamente hasta


Página 210 u

que recuperes el estado normal.

Pillado por sorpresa, Weed comprobó su barra de [Salud].

¡Gasp!
u

¡Su vida estaba descendiendo un punto por segundo!

‘Mierda… ¡No tengo ningún antídoto! Si esto sigue así…’

Desesperado, Weed ignoró a los bichos pequeños y corrió hacia la reina


para golpearla con la espada de hierro. El caparazón del gusano reina se
agrietó, y empezó a manar un líquido amarillento.

“¡Si voy a morir, te llevaré conmigo!”

Weed ignoró completamente a los insectos que le subían por todo el


cuerpo y le mordían. Tanto si le mordían o pasaba el tiempo, iba a morir
de todas maneras.
Dividido entre las dos opciones, decidió que era mejor acabar con la
reina y escapar a toda prisa. Como si sintiesen que su madre estaba
muriendo, los pequeños insectos asaltaron a Weed con más agresividad,
pero su espada de hierro era persistente. El caparazón de la reina era
tan duro que, aunque estaba parcialmente agrietado, apenas lo había
dañado. Mientras, a Weed, empezó a darle vueltas la cabeza.

‘Voy a morir. Si tan solo tuviese una habilidad de combate… ¿Una


habilidad? ¡¿Por qué no lo he pensado antes?!’

¡Poseía una habilidad que aún no había tenido tiempo de utilizar!


Una habilidad de combate que consumía tanto maná que no podía
mantenerla más de un segundo. Tanto si funcionaba como si no, las
cosas no podían ir peor.

“¡[Hoja del Escultor]!”


Página 211 u

La hoja de hierro de Weed brilló con una luz blanca. Temporalmente se


impuso a la defensa de su enemigo.

¡CRACK!

Por fin, el duro caparazón del gusano gigante saltó en pedazos.


u

¡Ding!

Has subido de nivel.

Weed se saltó la ventana de aviso y gritó:

“¡Abrir ventana de información de la misión!”


[Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart (II)]

Hay un centenar de monstruos habitando la guarida


de Litvart. Mátalos a todos, del primero al último, y
demuéstrate merecedor de una clase honorable. Si completas
esta misión, se abrirá un camino hacia tu destino.

Nivel de Dificultad: Desconocido.

Requisitos

Sin requisitos.
Página 212 u

Objetivo

Derrota todos los monstruos en las cavernas ocultas de la


Guarida de Litvart.

Monstruos restantes: 99.


u

Aunque estaba envenenado y moribundo, Weed sonrió.

“¡Lo logré!”

Por fin había dado con la respuesta para el cambio de clase. Eran los
malditos gusanos de esta cueva. Tenía que matar a las reinas, no a los
bichos pequeños.

“Pero antes tengo que curarme del envenenamiento…”

Perseguido por los enfurecidos insectos, Weed salió de la cueva a toda


prisa. Cuando vio que los bichos no podían salir de los límites de su
cueva, empezó a avanzar más lentamente hacia la primera planta con
el caballo.

Cuando un jugador está envenenado, su cara se oscurece.

Weed evitó el contacto con los demás jugadores para ocultar el hecho
de que estaba envenenado, y recargó su [Salud] constantemente
restregándose hierbas por el cuerpo e hinchándose a comer comidas
precocinadas.

Si se ponía a ello, seguramente podría dar con un equipo que contara con
un clérigo. Pero preferiría morir antes que pedir ayuda. ¿Era demasiado
orgulloso como para suplicar por su vida?

¡De ninguna manera!


Página 213 u

No había monstruos venenosos en la Guarida de Litvart. Ni los kobold,


ni los goblins tenían conocimientos sobre sustancias venenosas, y menos
aún de cómo usarlas.

Su ‘salvador’ querría saber dónde había sido envenenado, por qué y


contra quién… y ninguna respuesta le iba a gustar. Preferiría morir que
compartir con los demás la ubicación de la cámara oculta que había
u

encontrado después de tanto sufrimiento. En cuanto llegó a la salida de


la Guarida, saltó encima del caballo.

“Al poblado más cercano. Rápido, o perderé la consciencia y moriré.”

¡Pffff!

La estúpida bestia ni siquiera se movió. Estaba actuando como si


disfrutase de la desgracia ajena o más concretamente por la de Weed.
Por ello, Trasero pretendió estar sordo y empezó a rascar el suelo con las
patas mientras masticaba lentamente un trozo de hierba.

“Si piensas comportarte de esa manera, entonces…”

Por fin se había quedado sin paciencia.


“Me has dejado sin otras opciones.”

Weed sacó el cuchillo de tallar.

Trasero miró aterrorizado el afilado objeto, pero se calmó enseguida


como si supiese que Weed se estaba marcando un farol. En vez de cortar
a Trasero, Weed se hizo un corte en el antebrazo. ¿Había perdido la
cordura hasta tal punto que se había vuelto auto-destructivo cuando su
vida ya estaba en peligro por el gas venenoso?

“Jo, jo, jo.” — Weed sonrió con malicia.

Su visión estaba borrosa por la falta de sangre. A continuación abrió la


quijada del potro a la fuerza y le obligó a beber su sangre.

“¿Lo ves? Ahora que has bebido mi sangre, tú también estás envenenado.
Página 214 u

Llévame al poblado, o los dos estamos muertos. Afortunadamente para


mí, resucitaré en un par de días, pero por otro lado, tú nunca volverás a
la vida, ¿lo comprendes?”

Con esta nueva motivación, el potro por fin empezó a galopar hacia el
poblado, aunque su velocidad tampoco era mayor que en el primer viaje,
llegaron a tiempo. Nada más llegar al poblado, Weed buscó rápidamente
u

un sacerdote que le lanzara un hechizo de curación y lo consiguió justo


cuando estaba al borde de la muerte.

Después de estar curado, compró hierbas y antídotos por un total de


veinte monedas de oro. Aunque sus bolsillos estaban ahora vacíos, no lo
lamentaba.

Weed volvió rápidamente a la Guarida de Litvart, y solo cuando estuvo


convencido de que nadie le seguía, entró a la cueva en la que aguardaban
los gusanos.

Esta vez incluso metió a Trasero en la caverna. Temía que otros jugadores
se lo robasen, y aunque la idea de que otra persona le librase de él era
más que tentadora, no quería saber qué ocurriría si no lograba devolver
el caballo a las Caballerizas Reales. Esto era una prioridad.
“Mantente siempre a mi espalda.”

Trasero balanceó la cola, resignado.

Weed empezó a acabar solo con las reinas gusano. Los pequeños bichos
solo daban una experiencia proporcional a su pequeño tamaño, y la
forma en la que se arrastraban desde todas las direcciones hacía que
fuese molesto acabar con todos ellos.

Del mismo modo que un maestro con la espada no puede detener todas
las gotas de lluvia, Weed ignoró los bichos que cubrían el suelo.

“¡[Hoja del Escultor]!”

La misteriosa técnica de combate de Zahab. Aplastaba el caparazón


de los enemigos con tanto poder que simplemente desintegraba la
Página 215 u

naturaleza de un objeto, independientemente de su resistencia y de su


defensa. A veces se enfrentaba con reinas más grandes y necesitaba dos
o tres ataques, por lo que tenía que defenderse para hacer tiempo y
recargar su [Maná].

A menudo estaba envenenado, mientras era atacado una y otra tres


por los pequeños bichos. Con los puntos de [Salud] siempre decayendo,
u

Weed siempre sobrevivía por los pelos; la muerte nunca había estado
tan cerca.

Cuantas más reinas gusanos mataba, más abatido se sentía. ¿Quién


hubiese pensado que esta era simplemente una misión para un cambio
de clase? La mayoría de los jugadores solían seleccionar su primera clase
antes del nivel 10.

Por otro lado, Weed había alcanzado el nivel 62, y esta cueva estaba
llena de desafíos mortales. No dejaba de preguntarse qué tipo de clase
requería que se tomase semejantes desafíos.

uuu
[Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart (II)]

Hay un centenar de monstruos habitando la guarida


de Litvart. Mátalos a todos, del primero al último, y
demuéstrate merecedor de una clase honorable. Si completas
esta misión, se abrirá un camino hacia tu destino.

Nivel de Dificultad: Desconocido.

Requisitos

Sin requisitos.
Página 216 u

Objetivo

Derrota todos los monstruos en las cavernas ocultas de la


Guarida de Litvart.
u

Monstruos restantes: 1.

Al final del séptimo día de peligrosas y continuas batallas, a Weed solo


le quedaba por matar una más. ¡La Reina de las reinas! ¡Era cinco veces
más grande que la de mayor tamaño que se había encontrado hasta el
momento!

Cuando Weed entró descuidadamente en la sala del trono, fue recibido


en una cordial bienvenida por una densa humareda azul de gas venenoso
que la Reina había estado preparando para él.

En otras condiciones, quizá hubiese dejado que le alcanzase, pero su


instinto hizo que retrocediese de un salto.

¡Shhhhhh!

Los pequeños insectos que fueron alcanzados por el humo se derritieron


en apenas un par de segundos.

“¡Que veneno más terrible!” — el corazón de Weed se estaba acelerando.

La única forma de mantenerse a salvo del gas venenoso era utilizando el


arco desde cierta distancia. Pero sus flechas no podrían penetrar el duro
caparazón del gusano reina. Así que su única opción era aproximarse
sin que le alcanzase el gas venenoso.

La Reina sabía cuál era el dilema de Weed, y estaba preparada con otra
bocanada del gas venenoso, esperando a que se le acercase para rociarlo
Página 217 u

con él.

Como una serpiente de cascabel enroscada, esperando por una


oportunidad, la Reina gusano y Weed, se miraron cara a cara inmóviles.

‘Solo puede lanzar la humareda una vez. Si logro esquivar ese primer
ataque, el segundo será mucho más débil. El ataque inicial será decisivo.’
u

Los ojos de Weed brillaron cuando vio el tesoro acumulado detrás de la


reina.

‘Nunca, nunca me rendiré. Si tan solo tuviese a alguien a quien pudiese


sacrificar con el gas venenoso… Eso es, creo que tengo la manera.’

Sus ojos se entrecerraron hasta ser prácticamente un par de rendijas. Su


mirada estaba dirigida al rostro estúpido de Trasero.

¡Pak!

Weed pateó la grupa del animal. Trasero saltó hacia delante por instinto,
y la Reina gusano le lanzó el gas venenoso por la misma razón.
‘Lo siento, Trasero. Este es tu destino. La vida no es justa, y este es el final
de nuestra relación.’

Weed no se creía capaz de observar el final de la pobre bestia.

En cuanto se aseguró de que el gas venenoso acumulado en la boca de la


reina estaba completamente agotado, se lanzó delante.

“¡[Hoja del Escultor]! ¡[Doble danza]!”

Weed blandió salvajemente su espada hasta que se le agotó el [Maná].

Con la espada de hierro en la derecha, y el cuchillo de tallar en la


izquierda, destrozó el caparazón de la Reina gusano.

Al no tener ninguna habilidad de combate que valiese la pena, esta era


Página 218 u

su mejor posibilidad. La Reina gusano se resistió, pero su gigantesco


tamaño actuaba en su contra, al encontrarse los dos demasiado cerca.

¡IIIIHH!

Por fin cerró sus pequeños y brillantes ojos. En ese momento cayó una
llave de su cuerpo.
u

“¡Esto es!”

Weed recogió la llave, la metió en la cerradura del cofre del tesoro y


rápidamente la giró. En el cofre encontró unos cuantos volúmenes y un
pergamino.

¡Ding!

Al sucesor del Emperador Legendario

Mi nombre es Geihar Von Arpen, primer emperador del


Continente, aquel que terminó con las interminables
disputas que asolaban el mundo.

Mis últimos años han estado lejos de ser satisfactorios.


Nadie ha reconocido mi angustia, ¡mi superioridad!

¿Por qué nadie puede comprender mi profesión? ¿Por qué


todos la desprecian?

Esclavos de sus propios prejuicios, aquellos que poseían


talento han rechazado mi buena voluntad para continuar
con mi legado. Incluso mis propios hijos me discriminan de
esta forma.

¡Ese montón de imbéciles insensibles!

¡No se merecen ser mis sucesores!


Página 219 u

Por eso, voy a confiarte mis secretos.

El Emperador Geihar Von Arpen fue el primer y único hombre, capaz de


gobernar sobre un imperio unificado en toda la historia del Continente
u

de Versalles.

Tras su muerte, el imperio se volvió a dividir, dando lugar a la distribución


actual, pero sus logros fueron registrados como algo legendario.

Weed estaba emocionado.

‘También en aquel tiempo había idiotas. Deberían haber sido más


inteligentes. Es una oportunidad excelente… ¿Quién es el Emperador
Geihar? Ni más ni menos que la primera persona que conquistó todo el
Continente con su propio poder, ¡y esta es su clase! Debe ser tremendamente
buena, y aun así la consideraron superficial.’

¡Ding!
¡Clase Secreta!

Si aceptas, podrás usar las habilidades exclusivas


relacionadas con esta clase. ¿Deseas convertirte ahora?

(Sí / No)

Weed gritó sin dudar.

“¡Por supuesto!”

En ese momento, su personaje quedó envuelto en luz.


Página 220 u

Nombre del personaje Weed

Nivel: 68 Alineación: Neutral


u

Titulo: Ninguno

Clase: Legendario Escultor de la Luz Lunar

Salud: 3.460 Maná: 340

Fuerza: 235 + 20 Fama: 250

Inteligencia: 24 +20 Sabiduría: 16 +20

Vitalidad: 89 + 20 Aguante: 129 + 20

Agilidad: 200 +20 Espiritu de Lucha: 97 + 20


Suerte: 5 + 20 Carisma: 68 + 20

Arte: 29 + 100

Ataque: 170 Defensa: 30

Resistencia a la Magia de Fuego: 0%

Resistencia a la Magia de Agua: 0%

Resistencia a la Magia de Tierra: 0%

Resistencia a la Magia Negra: 0%


Página 221 u

Todos los atributos aumentan en 20 puntos.

El atributo [Arte] aumenta en 80 puntos adicionales.


u

En noches de luna llena, aumentas un 30% todos tus


atributos.

Puedes equipar objetos específicos de la clase.

Puedes adquirir todas las artesanías hasta nivel


maestro.

Concede mejoras extras a objetos producidos o


refinados.

Aumenta el poder de ataque de [Hoja del Escultor].

Disminuye el consumo de maná de [Hoja del Escultor].


Te permite aprender habilidades secretas dependiendo
de tu nivel en [Dominio de la Escultura].

Puedes ganar [Fama] creando esculturas con gran


valor artístico o de extraordinaria belleza.

Weed por fin había logrado la clase por la que tanto había estado
luchando, pero en cuanto vio el nombre de la clase, casi se muere por la
humillación.

“¿Qué? ¡Mierda! ¡Escultor de la Luz Lunar!” — gritó lleno de rabia.


Página 222 u

uuu

Después de todo el sudor y de la sangre derramada, todo volvía al


Escultor de la Luz Lunar.
u

De hecho, era “Legendario” Escultor de la Luz Lunar, con un prefijo


grandilocuente, pero eso a Weed le daba completamente igual. La
maldita profesión de los muertos de hambre, ¡Escultor de la Luz Lunar!

“Por… ¿por qué a mí?”

Las lágrimas no dejaban de brotar de sus ojos.

Aunque estaba oliendo los restos del gas venenoso que la reina gusano
había exhalado en sus últimos momentos de vida, no era eso lo que
había abierto la presa de sus lágrimas.

No le quedaba más remedio que aceptar la maldita clase que nadie


querría: ‘Escultor de Luz Lunar’.
“Debería haberme hecho un guerrero normal.”

Weed, que acababa de reírse de los idiotas que habían rechazado asimilar
la profesión del Emperador Geihar, ahora culpaba al mismo emperador
por engañarle para que se convirtiese en un Escultor de la Luz Lunar.
No le agradaba nada la idea.

‘¿Por qué mi vida es tan difícil?’

Se lamentaba, autocompadeciéndose.

Se había pasado una semana sentado en medio de la calle para estimular


la curiosidad de Rodrias, y más de siete días en la Guarida de Litvart
para dar con esta caverna y aplastar a los desagradables gusanos.
¡Y todos esos esfuerzos se habían desperdiciado al convertirse en un
Escultor de la Luz Lunar!
Página 223 u

Quería ponerse a llorar desconsoladamente.

Pero aun así, había mejorado sus habilidades de [Artesanía] y gracias


a estar sentado delante de la mansión de Rodrias, su [Dominio de
la Escultura] también había subido de nivel a un ritmo aterrador.
También había subido una gran cantidad de niveles mientras estaba
u

en la Guarida… pero todo eso ¡no importaba nada comparado con


convertirse en un Escultor de Luz Lunar!

Solo la cruda realidad de que ahora era un Escultor le importaba en ese


momento. Lo único que quería era gritar lo injusto que era el mundo.

‘Bueno, quizá tenga un lado positivo.’

Tras un largo periodo de crisis, por fin los ojos de Weed empezaron a
recuperar algo de vida al ver lo que se le estaba pasando entre tantas
miserias. Había pensado que no podía caer más bajo pero, a medida que
se iba clamando, fue viendo el lado positivo de la situación.

Los guerreros, exploradores y hechiceros eran las tres clases principales,


lo que significaba que habían sido probadas y estudiadas más que las
demás.

Para los guerreros y exploradores, había una bonificación del 50% en


el poder de ataque al usar un arma correspondiente a su sub-clase. Los
clérigos y paladines podían aprender y lanzar hechizos sagrados que
nadie más podía usar.

Por eso, Weed causaría menos daño con una espada que un guerrero
especializado en la espada de su mismo nivel, y el daño de sus flechas no
podían compararse con las de un explorador.

Pero esta era una clase secreta, cuyos secretos se tenían que descubrir
por uno mismo mediante un proceso de prueba y error. Dependía en
gran medida de cuánto se va aprendiendo. Si la iba desarrollando
apropiadamente, centrándose en los beneficios de la clase y sus
características, podía resultar bien. Si no, terminaría siendo algo
Página 224 u

mediocre, no mejor que una clase común.

Weed rápidamente se concentró en el pergamino. Aún quedaban unos


cuantos párrafos por leer.
u

Al sucesor del Emperador Legendario (II)

Amo las estatuas hermosas. Las estatuas talladas con el


magnífico espíritu de Kvasir nunca me han fallado. Mientras
las ame y confíe en ellas, siempre me serán leales.

¿Quién se creerá esto? Que el triste [Dominio de la Escultura]


es la clave de mi ascenso desde un humilde granjero hasta el
hombre que unió el Continente.

Escucha, mi sucesor en el camino de la escultura.

Te espera un camino muy difícil, un camino que cientos y


cientos de hombres abandonan y que las naciones de los
hombres no harían mucho mejor.
Pero, mi sucesor, te animo a que plantes cara a estos duros
desafíos. La dificultad aporta su propio valor, así como una
gran resistencia.

¡Conviértete en un gran maestro escultor!

Debes aprender los secretos sobre el [Dominio de la Escultura]


que yo no logré adquirir. Ese será siempre el deseo de todo
hombre que ha aprendido el arte de la escultura.

Así que te confío estos pequeños regalos, cuida de ellos.

Emperador Geihar, conquistador de la tierra, mar y


aire con el [Dominio de la Escultura].
Página 225 u

Weed terminó de leer el pergamino y estudió los demás objetos: tres


tabletas y un libro.

Los efectos de las tabletas no estaban indicados en ningún sitio, pero


sabía que habilidad tenía que usar en esa situación.
u

¡[Identificar]!

No has logrado identificar el objeto

No has logrado identificar el objeto

No has logrado identificar el objeto


Medicina del Emperador

Esta píldora fue creada con una mezcla de hierbas poco


habituales por un antiguo emperador para aclarar la mente
cuando fuera consumida.

Efectos

El [Maná] aumenta permanentemente en 200 puntos.

Tras una serie de intentos fallidos, Weed, por fin, logró reconocer
el objeto. Eran objetos raros; no, más que raros; muy valiosos, que
incrementaban la cantidad de [Maná] del usuario permanentemente en
200 puntos.
Página 226 u

Las píldoras emitían una fragancia francamente agradable. Weed estimó


que cada una se podría vender por no menos de diez mil monedas de oro.

Ya que las píldoras aumentaban la cantidad máxima de maná, en vez


de recuperarlo temporalmente como las pociones de maná del mercado,
realmente se merecían un precio desorbitado.
u

‘Muchas gracias, Su Majestad Imperial, realmente aprecio su generosidad.’

Weed guardó las píldoras y cogió el libro.

‘¿Contendrá grandes habilidades? ¡Debería! No creo que vaya a tener más


ataques de mala suerte después de todos los anteriores. No, no soy tan
desafortunado.’

También en esta ocasión Weed solo consiguió desentrañar el contenido


del libro, cuando ya se daba por vencido, tras un montón de ventanas
de fallos.
Libro de Técnicas Secretas con la Espada de la Familia Arpen

El Emperador Geihar Von Arpen inscribió las Técnicas de los


Pasos Perfectos por el bien de la perpetuidad y prosperidad
de la Familia Imperial.

El libro contiene cinco movimientos y un juego de pies.

Todos los miembros de la Familia Imperial fueron, en


principio, caballeros. La habilidad está limitada, en
principio, a los caballeros, pero el Emperador Geihar Von
Arpen consideró a su sucesor en el [Dominio de la Escultura],
por lo que refinó la habilidad para que un escultor pudiese
aprender una versión debilitada de la habilidad.
Página 227 u

Sorprendido, Weed casi dejó caer el libro.

“Este, este color es…”

El Libro de las Técnicas Secretas con la Espada empezó a brillar con


una luz dorada en cuanto lo reconoció.
u

¡Eso significaba que era un libro de habilidades raras! Es más, era un


libro con habilidades de nivel ‘A’.

“Sois tan generoso, su Majestad Imperial. Gracias por concederme un


libro de Técnicas de Espadas de nivel ‘A’” — dijo Weed.

Aunque la verdad era que le decepcionaba un poco que no fuese una


habilidad única o de nivel ‘S’. Aun así, le extrañaba que, siendo ahora
un escultor, pudiese aprender de un libro de técnicas tan avanzadas por
mucho que lo hubiese encontrado.

Las técnicas de nivel ‘S’ por lo general estaban limitadas a ciertas clases,
generalmente guerreros o caballeros. Como no tenía una habilidad de
combate en condiciones, este libro era como si lloviese en medio de una
sequía.

¡Los días de habilidades básicas de espada y arco! Ahora se habían


acabado, un recuerdo del pasado.

Weed puso una mano sobre el libro y gritó:

“¡Aprender!”

¡Ding!

NUEVA HABILIDAD

[Técnica Imperial, espada sin forma]


Página 228 u

ha sido aprendida

El libro de técnicas una vez utilizado, brilló con una luz blanca y se
redujo a cenizas.
u

“Comprobar habilidad: [Técnica Imperial, espada sin forma].”

[Técnica Imperial, espada sin forma]

Esta habilidad está hecha a medida para los escultores por


el Emperador Geihar Von Arpen. A medida que aumenta el
nivel del [Dominio de la Escultura], el poder de ataque de la
habilidad aumenta un 1%.

Se compone de cinco movimientos, una técnica de respiración


y un juego de pies.
“Je, je, je.” — Weed se rio entre dientes.

Los extremos de la boca de Weed se alzaron.

‘¡Esto es genial!’

El Imperio Arpenio había dominado todo el Continente. Al final


había caído hasta quedarse solo en un nombre en la historia, pero la
técnica de la espada que había sido exclusiva de la Familia Imperial
indudablemente valía su peso en oro.

Pero Weed casi se desesperaba al leer la descripción de cada movimiento


en la ventana de la habilidad.

“¡¿Qué diablos?!” — gritó.


Página 229 u

El primer movimiento, que era el que menos [Maná] consumía de los


cinco, utilizaba trescientos puntos. Pero su [Maná] máximo por el
momento era demasiado bajo, las técnicas secretas estaban fuera de
su alcance, incluso después de haberse tomado las tres Tabletas del
Emperador.
u
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - DaniR

Volumen 1
Capítulo 9
La ciudad del cielo

Un Bar. Un lugar que normalmente estaba lleno de risas agradables y


cientos de ruidos había estado en silencio en los dos últimos días por un
simple hombre, Volk.
Página 230 u

Tenía un cuerpo terroríficamente inmenso, pero lo que más miedo daba


era su cara.

No era de extrañar que el bar estuviese tan tranquilo y silencioso,


teniendo en cuenta que alguien cuyo aspecto podría hacer que un orco
huyese del campo de batalla había estado bebiendo de mal humor todo
u

el día; Volk torció el gesto mientras bebía.

‘Quiero pedirle la mano. Necesito encontrar algo especial para ella, si es que
existe.’

Volk quería pedirle matrimonio a una dama. Su descorazonadora


angustia no era visible para los que le rodeaban.

‘Un regalo. He oído que hay un escultor en la Ciudadela de Serabourg. Le


pediré que me haga una. Si consigue hacer algo que me agrade, le daré a
cambio, el objeto más preciado que tengo.’

Dando tumbos, y con esa clase de pensamientos en su cabeza, Volk salió


del bar.
uuu

“¡Guau! Esto está lleno de jugadores.”

De regreso en la capital de Rosenheim después de siete semanas, Weed


sintió como le empezaba a doler la cabeza al ver un desorbitado número
de jugadores.

Era una imagen mareante en la que compradores y vendedores


negociaban activamente entre sí, y donde los nuevos aventureros
buscaban compañeros de viaje.
Página 231 u

“¡Rápido! Trasero vamos a tu casa.”

Weed guió al potro al Establo Real. Éste le siguió obedientemente.


Afortunadamente, la bestia había sobrevivido por poco al gas venenoso
de la Reina Gusano.

Como si supiese por instinto que se había salvado de una muerte


u

inminente más veces de las que se merecía, el animal estaba más que
dispuesto a alejarse de Weed; cuanto antes volviese a su hogar, mejor.

Había un establo destartalado a las afueras del Palacio Real. En cuanto


el jefe de los establos posó su vista sobre el caballo, su gesto se desfiguró
con una mueca.

“Los buenos tiempos se han terminado ahora que este desabrido Trasero
ha vuelto. Oí hablar de usted a Sir Midvale. ¿Nos devuelve esta bestia
que ridiculiza el nombre de su padre, señor Weed?”

Más animado, Weed dejó al animal en una cuadra vacía.

“¿Ha tenido un buen viaje? Sé que esta bestia no causa más que
problemas.”
“No pasa nada. Ya se ha terminado.” — contestó al cuidador.

“Lord Midvale le dejó un mensaje. Quiere que le visite si aún está


interesado en el puesto de centurión. Dice que será suyo en cuanto lo
solicite.”

“Dile que aprecio su oferta.”

El jefe de los establos fue educado con Weed, que era prácticamente un
extraño para él.

Convencido una vez más de que el estatus de una persona dependía


de quiénes sean sus contactos, y de lo que habías hecho por ellos,
Weed abandonó el Establo Real y se encaminó hacia el Centro de
Entrenamiento.
Página 232 u

Allí se reunió con el Instructor.

“Mmmm… Así que eso es lo que te ha pasado…”

El Instructor lamentaba mucho que se hubiese visto obligado a


convertirse a la clase del Legendario Escultor de la Luz Lunar.
u

“Es por mi culpa”

Weed no insistió. Se limitó a bajar la cabeza con un gesto apesadumbrado.

“No, ¿cómo podría nadie culparte? El Consejero se propasó. Aun así, ten
esperanza en que todo acabe bien, amigo Weed.” — dijo el Instructor,
dándole una palmada en el hombro.

“Sí, el Instructor es el único en quien siempre podré confiar…” — dijo


Weed.

“Ja, ja. Por supuesto. De todos modos has vuelto de un gran viaje, y
has completado mi misión.”

El Instructor le recompensó con tres monedas de oro y cincuenta puntos


de contribución en Rosenheim por haber completado la misión de la
Operación de Limpieza en la Guarida de Litvart.

Si acumulabas suficientes puntos de contribución, el usuario conseguía


ventajas en el comercio con el país en cuestión, y si conseguía los
puntos suficientes podías estar cualificado para diversos puestos
gubernamentales.

Pero la actitud del Instructor había cambiado ligeramente. Ya no


consideraba a Weed uno de los suyos, como colega en el mismo camino
de la espada. Eso significaba que la amistad que tanto se había esforzado
en mejorar empezaba a decaer.

Tras visitar al Instructor Weed se pasó por la mansión de Rodrias como


su última visita. Como siempre, el Consejero estaba encerrado en su
estudio.
Página 233 u

“Ja, ja. Así que realmente terminaste la misión. Me estaba preguntando


cómo te habría ido después de estar tanto tiempo sin verte delante de
mi puerta.” — dijo Rodrias.

“Sí, Consejero.”
u

“Mmm… de todos modos, como indica el destino, tengo algo para ti.”

Rodrias le entregó a Weed una estatuilla de madera que le cabía en la


palma de la mano. Tenía la forma de un caballero imperial.

“¿Qué es esto?” — preguntó Weed.

“Es el legado de Geihar Von Arpen el Magnífico. Mi familia sirvió bajo


las órdenes de la Familia Imperial del Imperio Arpenio hace mucho
tiempo. La sangre, y la obligación que la acompaña, han fluido en
mi familia desde entonces. Y yo soy el que ha heredado la obligación
en esta generación. Ahora que te he entregado este objeto, por fin he
completado mi tarea.” — dijo el Consejero.

“Pero, ¿para qué es esta estatua?” — Weed ya había recibido una


estatua de madera con otra forma distinta mientras realizaba la misión
del ‘Escultor Lunar Zahab’.

“Tampoco conozco los secretos de esta estatuilla de madera. Según el


mito, ha habido cinco maestros del arte de la escultura en el Continente.
Por supuesto, no es más que un mito, ya que vienen y van como el
viento. Son conocidos por haber dejado sus habilidades en sus legados,
por lo que tiendo a pensar que esta estatua es, probablemente, una de
ellos. Según el mito, si logras reunir las cinco estatuillas, se te descubrirá
el secreto definitivo del arte escultórico.” — dijo Rodrias.

Aún con dudas, Weed identificó la estatuilla de madera. Como su nivel


de habilidad era aún bajo, solo tuvo éxito en la identificación tras un
par de intentos fallidos.
Página 234 u

Estatuilla de madera

Durabilidad: 1/1.

Esta estatuilla contiene las habilidades del Emperador


Geihar Von Arpen.
u

Requisitos

Poseer [Dominio de Escultura] — Intermedio.

Efectos

Permite adquirir la habilidad única de dar vida a cualquier


estatua.

Cuando identificó la estatuilla de Zahab, también había encontrado la


[Hoja del Escultor] cuyo prerrequisito era tener un nivel 5 o superior en
el [Dominio de la Espada].
“Hay un gran secreto detrás del [Dominio de la Escultura].” — dijo
Weed.

“Dado que eres parte del mundo de las artes escultóricas, te deseo lo
mejor en tu camino para llegar a ser un Gran Maestro en el mundo
de la Escultura. El mundo nunca ha visto un Gran Maestro, pero si
alguna vez llegase a haberlo, no tendría problemas en dirigir el destino
del Continente. Es cierto que te introduje en este camino por maldad y
venganza, pero también es cierto que nada de lo que te he contado es
falso.” — explicó el Consejero.

Weed no le guardaba resentimiento a Rodrias. Eso quedaba ya en


el pasado, y de pronto le había asaltado un repentino interés por la
artesanía.

‘El que crea su propio camino…’ — pensó Weed.


Página 235 u

Por otro lado, según le habían contado, si tenía éxito, le esperaban días
de poder y riquezas.

Rodrias consideraba que había pagado su cuenta con Weed. Al ver el


lamentable estado en que se encontraba tras vagar con frío y hambre
durante siete semanas, el resentimiento había abandonado la mente del
u

Consejero.

“Tengo otra pregunta, Consejero. ¿Los cocineros o los herreros también


tienen un modo de llegar a convertirse en Grandes Maestros?” —
preguntó Weed.

“Supongo. Los dioses son generosos. Recuerda, no todos en el camino


de la Cocina saben aprovechar las oportunidades que encuentran.” —
respondió el Consejero.

“Entonces…”

“¡Debe haber otros elegidos! Ellos seguirán sus propios caminos.


Depende de ellos completarlos o no.”
Cuando Weed hubo oído todo lo que quería escuchar, abandonó la
mansión.

uuu

El corazón de Darius latía con fuerza. Nunca había esperado que llegara
tan lejos mientras resolvía una serie de misiones de aspecto trivial. La
mejor de las suertes, según sus propias palabras.

Había dos hombres en el centro del juego de poderes del Reino de


Rosenheim: el Duque Kanus y el Conde Albrook. De los dos, el Duque,
responsable de los asuntos militares, era el más poderoso. Ese mismo
Página 236 u

hombre estaba bajando una nívea espada hacia él en ese momento.

“Sir Darius, en este momento le concedo el título temporal de caballero


de Rosenheim en reconocimiento a sus servicios a la Corte Real. Le
encomiendo la creación de una fuerza de asalto con su dignidad
de caballero y rescatar a los habitantes de la frontera de su mísera
situación.”
u

“Estoy a su servicio, mi señor. Podéis contar conmigo.” — respondió.

“Sir Darius, le encomiendo esta misión” — concluyó el Duque Kanus.

Darius sintió el leve toque de la espada primero en un hombro, luego en


el otro, y por último, en la cabeza.

Podía ser una sensación terrible en tiempos de guerra, pero estaba


en medio de una simple ceremonia de caballería en el Palacio Real de
Rosenheim. Es más, el portador de la espada era el Duque Kanus.

En vez de ser un momento terrible, para Darius era un momento


importante en el que casi se le escapa un grito excitado. Había tenido
que luchar con el espontáneo exabrupto y las ganas que sentía de
echarse a rodar por la alfombra a pesar de la solemnidad de la ceremonia.
Conteniendo una mueca, no pudo evitar que una sonrisa se le formase
en la cara.

‘Ahora soy el comandante de una fuerza de asalto.’

Darius se consideraba muy, muy afortunado.

uuu

‘Tengo que hacer algo.’ — pensó Weed, con cara seria.


Página 237 u

La naturaleza de la clase escultor con la que se había tropezado era


la siguiente: como su arma principal era una espada, podía usar como
comparación a un guerrero normal como punto de referencia.

En el momento que su clase estaba decidida, un guerrero con espada


obtenía un 50% de bonificación en el [Dominio de la Espada]. Por
otro lado, Weed podía cubrir esa carencia, con las útiles habilidades
u

artesanales.

Gracias a sus mejorados atributos iniciales, ni siquiera un caballero con


su mismo nivel era rival para él. En el caso de jugadores con niveles
de habilidad ligeramente inferiores, estaba convencido de que podría
ganar un duelo contra dos guerreros con espadas de su mismo nivel, al
contar con la [Hoja del Escultor] y la [Técnica Imperial de la Espada sin
Forma].

La [Técnica Imperial de la Espada sin Forma]… Cuando la probó, Weed


se quedó sorprendido por su imponente poder.

La técnica era lo más parecido que conocía a una trampa, ya que


doblaba los reflejos y el poder destructivo, y hasta triplicaba el ritmo de
recuperación de [Maná]. No le extrañaba que el Emperador Geihar la
hubiese elegido como su legado.

Pero los guerreros y caballeros también tenían técnicas de espadas


y métodos de respiración propios. Cuando dominaban un método de
respiración propio de su clase, les causaba un gran efecto, incluso aunque
el nivel de sus técnicas con la espada, fuesen inferiores a la [Técnica
Imperial de la Espada sin Forma] de Weed.

Era de un derecho especial que disfrutaban caballeros y guerreros, las


dos clases estándar especializadas en las habilidades de combate.

En otras palabras, no importaba si Weed aumentaba celosamente sus


habilidades y atributos, o si adquiría más habilidades que se pudiesen
considerar trampas en el juego, sus contrapartidas terminarían
alcanzándole antes o después. Incluso ahora, Weed solo les llevaba una
ligera ventaja si no usaba tácticas cuestionables.
Página 238 u

Obviamente, hubiese sido mucho más débil que un guerrero con espada
normal si no hubiese invertido su tiempo apropiadamente en la habilidad
[Artesanía] y en la [Técnica Imperial de la Espada sin Forma], más los
atributos extra que había ganado en el Centro de Entrenamiento.

‘Pero la clase de escultor tiene un potencial más grande de lo que parece. Si


u

no, el Emperador Geihar no hubiese dominado el Continente, y sería difícil


explicar la fuerza de Zahab.’

uuu

Ciudadela de Serabourg, capital del Reino de Rosenheim.

En frente de la Fuente Central, en medio del bullicioso centro de la


ciudad, había una fila de jugadores observando una serie de estatuillas
en exposición.
“Buenas. ¿Cuánto cuesta esta?” — preguntó una chica.

“Cinco monedas de plata.” — respondió Weed.

“Oh, vaya, es muy caro. ¿Podrías hacerme un pequeño descuento? ¿Por


favor? Te compraré dos piezas.”

La hermosa chica le sonrió, intentando convencerle, pero él no tenía


piedad. Especialmente con respecto al dinero, trataba con igualdad a
hombres y mujeres.

“Con todo el debido respeto, señorita, un descuento sería un insulto a


mi trabajo. ¿Acaso crees que cuando creé esta estatua desconté en mi
pasión en mi arte, y mi devoción a mi trabajo en particular? Una obra
de arte ha de tener un precio justo que represente su verdadero valor,
que no dejará de crecer en tu mente a medida que pase el tiempo.” —
Página 239 u

explicó.

La chica estaba conmovida. Había sido estúpido por su parte regatear


por una obra de arte en la que el escultor había volcado su alma.
Dominada por el remordimiento, cogió unas brillantes monedas de
plata de su bolsillo.
u

“Lo siento. Ten, diez monedas de plata.” — dijo.

“Gracias, señorita.”

Weed sonrió abiertamente, entregándole las dos figuras. Era una sonrisa
de ganador, orgulloso por haber vendido las dos figuras por su precio
original.

Como escultor, con el osado título de “Legendario Escultor de la Luz


Lunar”, en el que se había convertido a pesar de su resistencia, podía
hacer estatuas cuya belleza sería reconocida por las más prestigiosas
revistas de arte.

Su nivel actual de [Dominio de la Escultura] era 4. Desde que se había


convertido a la nueva clase, sus efectos se habían doblado, por no
mencionar que poseía uno de los mejores objetos para su profesión,
hasta el punto que casi era trampa, el Cuchillo de Tallar de Zahab.

Por ahora, la capacidad de Weed, se limitaba a pequeñas figuras hechas


de materiales simples por su inexperiencia con la habilidad. Dada su
simplicidad y su bajo precio eran bastante atractivas para el público en
general.

Algunos de sus admiradores, incluso se alineaban para adquirir las


piezas en las que estaba trabajando en ese momento.

Los conejos y los zorros, que costaban menos de 10 monedas de cobre en


materiales, eran los productos más populares de su puesto, y se vendían
de inmediato, a pesar de costar 5 monedas de plata cada uno.

Weed pensaba que su negocio era honesto. No forzaba a nadie a


Página 240 u

comprarlas. ¿Qué podía hacerle si la gente se agolpaba para comprárselas


al precio establecido?

Weed movió el cuchillo de tallar más rápido. Estaba aumentando su


habilidad de [Dominio de la Escultura] mientras hacía dinero.

Al igual que con [Escultura], las habilidades de [Cocinar], [Reparar] y el


u

resto de las habilidades artesanales pasaban de la fase principiante a la


intermedia al llegar al nivel 10, volviendo a 1 tras la mejora.

En la habilidad de [Cocinar], esta mejora implicaba un fuerte aumento


en las bonificaciones a la [Salud] y el [Maná] al comer las comidas.
En la de [Reparar], el paso al nivel intermedio abría un nuevo árbol
tecnológico de producción y refinado de armas y equipo. Y eso no era
todo.

Cuando el nivel de la habilidad volvía a alcanzar 10, superando así el


nivel intermedio, se desbloqueaba el nivel avanzado para aquel que se
había mostrado merecedor del título de Maestro tras haber alcanzado
el dominio necesario.

Un maestro en cualquier campo, tanto de combate como artesanal,


era reconocido y respetado basándose solo en ese hecho, pero las
habilidades artesanales generales como [Escultura] y [Cocinar] estaban
muy limitadas en ese sentido.

La prioridad de Weed en ese momento era aumentar su habilidad


[Artesanía] del nivel principiante a intermedio.

Su nivel en la habilidad había llegado a 9 mientras se dedicaba a reparar


el equipo dañado y a servir platos de comida a las tropas en la Guarida
de Litvart. Otro nivel, y sus habilidades alcanzarían el nivel intermedio.

El nivel intermedio de [Artesanía] mejoraba el [Dominio de la Espada]


y la [Maestría con el Arco], aumentando el poder de ataque en un 30%.

Esta habilidad era imprescindible para un escultor, cuyo poder de


ataque era muy inferior al del resto de clases, penalizado por los rasgos
Página 241 u

de su clase.

‘La habilidad [Artesanía] es muy práctica.’

A medida que la habilidad aumentaba, todas las habilidades artesanales


se hacían más eficientes. El nivel Avanzado podía hasta eliminar las
restricciones gremiales, permitiéndole acceder a otras artesanías como
u

la [Alquimia] o la [Herrería].

La clase de Legendario Escultor de la Luz Lunar ya era un pase


gratuito a todas las habilidades artesanales relacionadas con las demás
profesiones, pero Weed era consciente de que una mayor habilidad en
[Artesanía] haría que adquirirlas y desarrollarlas fuese más fácil y
rápido.

Quizás los artesanos se iban asemejando cada vez más hasta el punto
de convergir en un mismo punto en su camino hacia la supremacía de
un Gran Maestro.

De hecho, no sería un error pensar que los artesanos desaparecerían si


no existiese la habilidad [Artesanía]. No podrían ponerse a la altura
de los especialistas en combate a menos que hinchasen sus patéticas
habilidades.

“Ahora, ¡ya he terminado un centenar de estatuas!”

Aunque había estado tallando estatuas sin cesar, su nivel en el [Dominio


de la Escultura] estaba estancado en el 98% del nivel 4. Al contrario que
el rápido aumento en la habilidad [Artesanía], el crecimiento de esta
otra se había ralentizado.

‘Espero que aumente de nivel tras otras cincuenta estatuas.’

En ese momento, un cliente se echó de pronto a un lado con un grito, y


a través del corredor que acababa de formarse apareció un hombre alto,
de aspecto terrorífico, que se acercaba hacia Weed.

El hombre parecía estar envuelto por un aura mortal que causaba


Página 242 u

escalofríos incluso a Weed.

‘¿Qué he hecho para que este matón venga a buscarme?’ — se preguntó


conteniendo el aliento.

El hombre miró a su alrededor con los ojos entrecerrados.


u

“¡Ahh!”

“¡Me ha mirado!” — chilló una chica.

El hombre se acercó lentamente a Weed, y cuando estuvo lo bastante


cerca se inclinó miserablemente como un ratón desaliñado.

“Quería pedirte un favor.” — dijo.

“Dispara.” — mala elección de palabras.

“Vengo para comprar una estatua. Pero no he encontrado lo que quiero.”


— explicó, arrodillado ante Weed. — “¿Podrías hacerme la estatua que
quiero? No, te lo ruego, por favor. Hazme la estatua, para que pueda
pedirle la mano a mi dama.”
Weed estaba intentando hacer que el hombre se levantase y se explicase.
Su nombre era Volk.

Volk se había enamorado de una mujer. El principal motivo por el


que había empezado a jugar online era para poder estar a su lado y
protegerla. Por el bien de esa persona, que era una sacerdotisa, había
escogido la clase de paladín para su personaje.

Durante un año haciendo numerosas misiones y peleando en muchas


batallas, ella no había muerto ni una sola vez gracias a su devoción
y sacrificio. También había disfrutado de esta segunda vida con sus
bendiciones y curaciones. El lazo entre ellos había crecido a medida
que pasaban los meses, y al final, cada vez que la veía, se formaba una
sonrisa en su cara. Así que era el momento de proponerle matrimonio.

“Quiero ofrecerle algo que nunca olvide. No una flor, que se terminará
Página 243 u

marchitando. Querría que tallaras unas flores que nunca se marchiten:


¡y mi corazón con ellas! ¡Por favor!” — Volk seguía arrodillado.

Su cara podía ser intimidante, pero no así su corazón. ¿Cuántos hombres


se arrodillarían así ante un desconocido por un amor tan incondicional?

Suspirando profundamente, Weed miró a su alrededor. Muchas mujeres


u

parecían conmovidas. Incluso pese a su ceguera por el dinero, había


podido sentir la profundidad del dolor de Volk.

uuu

La amo. La amo, pero, ¿por qué no lo ve?


Quiero decir lo que pienso.
He intentado repetirlo en mi cabeza miles de veces, ¡TE AMO!
¿Pero por qué no se lo puedo decir a ella?
uuu

Como hombre, Volk contaba con la simpatía de Weed, le cogió de la


mano y le ayudó a incorporarse.

“Para pedir un favor como ese… no tienes que arrodillarte, señor Volk.
Tienes todo el derecho de pedirlo de pie. Soy débil ante ese tipo de
peticiones. Estoy más que orgulloso de poder aceptar tu pedido.” —
dijo amablemente Weed.

Volk empezó a llorar.


Página 244 u

“Gracias, muchas gracias, señor Weed.”

“Para nada. Así que, ¿qué tipo de flores tenías en mente?”

“Por favor, haz siete girasoles. Representarán mi corazón, que la ha


seguido a ella, la luz de mi vida, estos últimos siete años.”
u

“Ya veo. ¿Puedes esperar?”

Weed estudió el montón de madera que tenía a su lado y escogió el trozo


de mejor calidad: madera élfica.

Era una madera muy gruesa y dura, conocida por crecer solo en el clima
cálido del sur. Aunque estaba en una pieza del tamaño de una roca, aún
tenía que pasar por el proceso de ser cortada para hacer las pequeñas
estatuillas.

Esta vez tengo que darlo todo. Weed ya podía tallar zorros o conejos
con los ojos cerrados, pero las flores le suponían un desafío.

‘Si tallase cada flor por separado sería bastante simple pero, ¿cómo podría
unirlas después? Siete girasoles, más un centenar de rosas como mi regalo
particular para la pareja. Será mejor que lo talle todo de una sola vez.’

Weed se formó mentalmente la imagen final, y empezó a trabajar el


trozo de madera muy lentamente.

Volk y las chicas no tenían ni idea de lo que Weed planeaba. No podían


entender por qué había escogido un trozo de madera tan grande para
hacer solo siete girasoles. De todos modos, poco a poco, a medida que la
madera élfica iba siendo tallada, la forma fue empezando a surgir.

Las primeras flores fueron los relativamente grandes girasoles, pero


pronto fueron seguidas por las rosas que los rodeaban.

A medida que las manos mágicas de Weed bailaban, un hermoso ramo


de flores se iba revelando de arriba abajo.
Página 245 u

“¡Guau!”

“Es increíble.”

Los clientes que habían estado esperando pronto se convirtieron en


clientes asombrados, observando la habilidad de Weed.
u

Cada vez que el cuchillo de tallar se hincaba en la madera, o un trozo


de madera era arrancado, la audiencia tragaba saliva, ya que el más
mínimo error podía romper el frágil tallo de una de las flores.

“¡Oh, Dios mío! Déjale terminarlo.”

Este no solo era el deseo de Weed y Volk, sino el de todos los presentes.

Delante de ellos, Weed estaba febrilmente concentrado en las flores. A


medida que el cuchillo de tallar se movía, la madera iba cogiendo forma,
revelando flores, tallos y hojas.

‘El fallo no está permitido en esta ocasión.’ — los ojos de Weed ardían.

De haber estado solo, se habría perdonado algún fallo, pero ahora estaba
rodeado por un denso círculo de espectadores en medio de la calle. Si
cometía un solo error delante de los posibles clientes, su ascendiente
reputación se estrellaría irremisiblemente.

Sabía mejor que nadie que su reputación estaba en aumento, atribuido


en gran medida al hecho de que no había ningún otro escultor conocido
en las inmediaciones, y que había estado haciendo todo lo posible para
que no disminuyese.

¡La fantasía de un seguidor equivalía a dinero!

Weed canalizó su excesiva obsesión por el dinero en una producción


artística, y al final terminó con éxito el ramo.

¡Ding!
Página 246 u

SUBES DE NIVEL

[Dominio con la escultura] Principiante — 5.

Aumenta la belleza y la complejidad de las estatuas.


u

Disminuye la posibilidad de errores al crear


una escultura.

SUBES DE NIVEL

[Artesanía] Intermedio — 1.

Aumenta el [Ataque] de todas las armas y


de los puños en un 30%
El efecto de todas las habilidades de manufactura
aumenta.

Aumenta el efecto de [Maestría con la Espada]

[Arte] ha incrementado en 5 puntos.

[Fama] ha incrementado en 1 punto.

Advertencia: La venta de una obra no puede cancelarlo.

En cuanto Weed hubo terminado el ramo de madera, las dos habilidades


subieron a la vez.
Página 247 u

Como su [Dominio de la Escultura] había estado atascado al 98%


del nivel 4, el primer mensaje no le había sorprendido, pero como la
habilidad [Artesanía] había estado al 94% del nivel 9, le sorprendía que
los hubiese subido del tirón, llevándola al nivel intermedio.
u

Afortunadamente, el atributo de [Arte], que le había estado preocupando


porque no avanzaba, había aumentado en 5 puntos.

“Esto es increíble. ¡Ventana de habilidades!”

Weed comprobó la ventana rápidamente, y se dio cuenta de que su nivel


de habilidad en el [Dominio de la Escultura] no solo había llegado al 100%,
sino que había avanzado un 17% del quinto nivel. Hasta la habilidad de
[Artesanía] había llegado al 5% tras llegar al nivel intermedio.

‘¿Tengo suerte, o no?’ — Weed estaba excitado por su buena suerte, pero
rápidamente entendió qué había pasado.

Las esculturas no se podían hacer de forma automática. El ritmo de


experiencia en el [Dominio de la Escultura] no avanzaba si solo te
dedicabas a hacer producciones en serie de las mismas figuras una y
otra vez, como si fuese una fábrica en cadena.

Solo cuando un escultor se entregaba a la creación de un trabajo original


de alto valor artístico que nunca había intentado antes, el [Dominio de
la Escultura] ganaba un incremento considerable. Eso le recordó que los
primeros zorros y conejos que había hecho habían aumentado bastante
su porcentaje.

Prueba y error, su habilidad había aumentado visiblemente al principio,


pero cuando dejó de intentar hacer nuevas figuras y empezó a crearlas
por hábito, haciendo siempre los mismos productos, su habilidad había
ido dejando de mejorar hasta casi detenerse.

Creía que el aumento de nivel se iba ralentizando a medida que subía de


nivel, pero no se trataba de eso. Estaba tomando el camino equivocado.
Página 248 u

Mientas Weed permanecía sumido en sus pensamientos, Volk y las


mujeres estaban fascinados por el ramo. Un ramo de flores hecho de
madera. Los girasoles y las rosas irradiaban calidez y suavidad, casi
como si fuesen reales.

“Está listo, Volk.” — Weed le entregó el ramo de rosas a Volk.


u

Los girasoles y las rosas brillaban a los ojos del paladín. Para él, eran
una obra de magia.

“Oh, Dios mío… no puedo creerlo… ¿De verdad están hechas de


madera? Tu habilidad puede hacer milagros…” — nuevas lágrimas
empezaron a caer de los ojos de Volk.

“En efecto, Volk. Me has visto haciéndolo, ¿no es así?”

“Es, simplemente, increíble.” — dijo Volk entre lágrimas.

El resto de los espectadores también estaban deslumbrados. No


podría haber realizado el ramo sin el cuchillo de tallar de Zahab, y
especialmente en el momento clave, su [Dominio de la Escultura] y su
habilidad [Artesanía] se habían combinado para dar un efecto aún más
fantástico a su creación.

“He hecho este ramo con todo mi corazón. Ahora ve a por ella con el
tuyo.” — dijo.

Animó a Volk con elegancia. Estaba contento tras haber descubierto un


nuevo secreto mientras creaba el ramo.

“Gracias, muchísimas gracias.” — dijo Volk, sinceramente agradecido,


llevándose las manos al bolsillo para sacar el pago del ramo.

Animado, Weed dijo:

“Son tres monedas de oro.”

Considerando el esfuerzo que le había dedicado, la figura se merecía un


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precio aún mayor, pero estaba satisfecho con esa cantidad. De pronto,
Volk puso un gesto confundido, y empezó a rebuscarse en los bolsillos.

“¿Dónde… dónde están?” — gritó. Su mano, que había estado


registrando los bolsillos, apareció vacía.

Era Weed, en cambio quien empezó a sentir pánico en ese momento.


u

‘¿Está intentado estafarme?’

Weed ya sabía lo que iba a venir a continuación: más concretamente, lo


que Volk iba a decir.

‘Asegurará que ha perdido su dinero en cualquier sitio.’

“Lo… lo siento, señor Weed, he debido haber perdido mi dinero por


algún lado.” — dijo Volk.

‘Porque de entrada ya no lo tenías.’

Volk no esperó por la respuesta de Weed, y gritó:


“Creo que me han robado. ¡Sabandijas!”

‘Y ahí vamos… Pero no te vas escapar con engaños en medio de esta


multitud observando todos tus movimientos. Si eres un experto en este tipo
de negocios, deberías pensártelo mejor antes de intentar estafarme si es que
espera salir de esta ileso.’

“¿Te importa si te doy algo de igual valor a cambio del dinero que falta?”

Volk siguió los pasos que Weed ya había previsto, un truco habitual
entre los que no tienen dinero, pero estaba subestimando a Weed, que
empezaba a emitir un aura terrible.

‘¿Crees que puedes timarme, chacal?’ — pensó.

En ese momento, Volk se volvió a llevar la mano al bolsillo


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“Menos mal. He encontrado dos monedas de oro y noventa monedas de


plata. ¿Podrías descontarme diez monedas de plata?” — preguntó.

“¿Por qué no me das algo que valga diez monedas de plata? ¿Qué tienes?”
— los agudos ojos de Weed estudiaron la figura de Volk. Observó armas,
equipo y adornos.
u

Decenas de miles de objetos identificados en Royal Road estaban


registrados en orden alfabético en una zona de su cerebro. Quería ser
capaz de identificar inmediatamente cualquier nuevo objeto en cuanto
lo adquiriese, estimar su precio de mercado, y alegrarse el doble, o hasta
el triple, en el momento de encontrarlo.

Pero sus ojos no dieron con nada valioso en Volk, que estaba pobremente
equipado. El paladín extrajo un libro de sus ropas y se lo entregó.

“¿Qué tal si te doy esto por las diez monedas de plata?”

Weed rápidamente escaneó el libro.

¡Ding!
La Ciudad Olvidada en el Continente de Versalles, tomo 4.

En el cielo, sobre la región Sur del Reino de Rosenheim,


según los cuentos y leyendas hay una ciudad misteriosa,
que se dice habitada por una raza no humana. La mejor
forma de describirla sería decir que se parecen a Aves.

Siendo una raza de fuertes guerreros, no soportaban a los


monstruos, a los que expulsaban de las provincias del Sur.
Pero hoy, esa raza ya no está, y hasta el camino a la Ciudad
del Cielo, como se la conocía, está hoy perdido.

Ahora su existencia es cuestionable, pero los ciudadanos


de las provincias del Sur aún creen en la ciudad y en sus
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residentes avianos. Los ancianos aún siguen cultivando las


historias sobre esta ciudad en la imaginación de las nuevas
generaciones.

Según una fuente no muy fiable, se necesita una Semilla


Misteriosa para acceder a la Ciudad del Cielo.
u

Weed se sentía engañado. ¿Quién iba a creerse semejante sinsentido


sobre una ciudad en el cielo? Si había una ciudad flotando por el aire,
violando todas las leyes de la física, ya se habría visto desde el suelo.
Por lo tanto, el autor del libro tenía que estar mintiendo al asegurar
su existencia. Si esto no fuese ya lo bastante ridículo, el último párrafo
sobre subir trepando una planta era estrafalario, cuando no abominable.
La historia no era creíble…

Como si notase el escepticismo de Weed sobre el contenido del libro,


Volk se defendió apresuradamente.

“Tal vez no lo creas, pero ese libro fue difícil de conseguir…”


“…”

“Desearía poder darte algo mejor, pero da la casualidad que ese libro es
lo más valioso que tengo.” — dijo mostrando el contenido de su mochila:
una piel de conejo, una escama de serpiente y una espada rota.

Weed podría arreglar la espada, pero solo aumentaba el [Ataque] en


2, por lo que ni un kobold la querría. Tal vez podría venderla por 2
monedas de cobre en una herrería.

“Lo siento, Weed.”

Weed suspiró hondo.

‘Bueno, tampoco pasa nada. De todos modos, he aprendido el secreto


del [Dominio de la Escultura], que nunca hubiese descubierto de haber
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seguido haciendo siempre la misma basura. Le perdonaré por regatearme


diez monedas de plata. No es para tanto.’

Cuando había mencionado las tres monedas de oro, ya se había planteado


que eran negociables. La intención había sido sorprender a Volk para
que jugase con sus normas.
u

El precio de las estatuas no estaba fijo por ningún baremo, sino que
en gran medida estaba determinado por el regateo entre comprador y
vendedor.

Dos monedas de oro y 90 monedas de plata, más un libro tonto. Si a


eso se le incluía el aumento de nivel de sus habilidades, no era un mal
trato. Pero solo Dios sabe qué habría hecho Weed si hubiesen sido dos
monedas de oro con 80 monedas de plata.

“Creo que el libro vale diez monedas de plata. Te deseo la mejor de las
suertes en tu proposición, Volk. Y la dama de la que te has enamorado…”

“¿Sí?” — preguntó Volk.

“Tendrá una maravillosa vida a tu lado.” — dijo con sarcasmo. Con un


marido tan tacaño, por lo menos nunca estaría en la ruina.

“Gracias, amigo Weed.” — tras darle la mano, Volk se alejó lentamente.


Weed le observó mientras se iba.

De pronto, en el equipo de Volk apareció una brillante armadura de


mithril. Sus pantalones estaban cubiertos por unas perneras de mithril.
Hasta sus botas resultaron ser de ese preciado metal, lo que dejó a Weed
tambaleándose.

‘¡Lleva un anillo de vida de algodón, un objeto raro que dobla la vida


máxima! ¡Un tesoro de valor incalculable! Por lo que sé, esos pendientes
resisten los rayos. Por lo que había oído, por el momento solo existían en el
catálogo, y que nadie los tenía. Bastardo, estás cargado… no es justo que
times a un pobre escultor.’
Página 253 u

Los objetos con los que Volk estaba equipado eran valiosos más allá
de la más salvaje imaginación de Weed. Algunos bien valían miles de
monedas de oro.

uuu
u

Tras haber terminado el ramo tras arduas horas de trabajo, Weed estiró
los brazos y bostezó. De repente los observadores empezaron a lanzarle
monedas de oro y a gritar…

“¡Quiero el mismo ramo, por favor!”

“Acabo de comprar dos zorros, ¿podría devolverlos y encargar un ramo,


por favor?”

“¡Por favor!”
uuu

Al dejar la Ciudadela de Serabourg, Volk tenía una sonrisa extraña. Su


humorística personalidad traicionaba su temible aspecto. Volk había
pretendido recompensar a Weed honestamente por haberle creado un
ramo tan maravilloso.

¡El libro de la Ciudad del Cielo! La verdad era que se había pasado dos
meses para hacerse con él. Según el contenido del libro, se trataba de un
lugar misterioso en el que aún nadie había puesto un pie en él.

Una de las razones por las que había acudido a Rosenheim era para
visitar esa ciudad. Pero la proposición a la dama que le había robado el
corazón se imponía a todo lo demás. Volk le había dado a Weed el libro
Página 254 u

a cambio del ramo, pero no le importaba.

‘No lo tires. Guárdatelo. Te mostrará el camino si lo buscas, y algún día


podrás llegar a esa ciudad.’

Sujetando el ramo con cuidado, Volk se dirigió el Reino de Brent, donde


su adorada dama le estaba esperando.
u

uuu

¡Un ramo de flores de madera!

Era un regalo perfecto para esas ocasiones en las que un chico quería
pedirle a una chica una cita, por eso los rumores sobre Volk el paladín
y el ramo de madera se extendieron, y el puesto de estatuas de Weed se
convirtió rápidamente en una ubicación famosa.

La mayoría de los jugadores habían considerado las estatuas como un


recuerdo para poner sobre la chimenea u oculto en algún rincón oscuro,
acumulando el polvo, pero el evento de Volk transformó la forma en la
que se veían las estatuas.

Ese día Weed declaró:

“¡Lo siento, pero ya no puedo realizar más estatuas con las mismas
formas!”

Había llegado a esa conclusión, movido por su interés personal, para


subir el ritmo al que aumentaba el nivel de su [Dominio de la Escultura]
y su [Artesanía]. Aun así, el público confundió sus intenciones.

“¡Es un verdadero artista!”

“Cómo mola. Ha dicho que no piensa repetir más estatuas.”


Página 255 u

“En ese caso, el valor de sus estatuas va a aumentar.”

Los clientes hasta entonces le compraban una o dos figuras de conejos o


zorros como recuerdos baratos, pero ahora le pedían diseños originales
para hacer regalos.
u

El número de productos completados quedó por debajo de los dos


dígitos, ya que cada obra le llevaba un par de horas, pero eran mucho
más populares que los producidos en serie: costaban tres monedas de
oro por estatua.

Dado que el negocio no requería muchos costes de producción, era un


negocio muy lucrativo.

Además, los niveles de sus habilidades se dispararon rápidamente.

En solo tres días, su [Dominio de la Escultura] había llegado al nivel 8,


y su [Artesanía] a Intermedio — 4.

Cuando Weed empezaba a quedarse sin pedidos, cocinaba y vendía


comida.
“¡Carne de conejo o de zorro! Si me traes carne, te la cocino. No puede
mantenerse mucho tiempo, por lo que hay que comérsela en el mismo
día.”

Su habilidad [Cocina] concedía un aumento temporal de [Salud] y


[Maná] a los platos que preparaba. Eran los esteroides de los pobres.
Aquellos que tenían problemas para cocinar la carne que habían
recogido mientras cazaban animales salvajes alrededor de la Ciudadela
corrieron hacia él.

“Ten.”

“¿De verdad puedes cocinar?”

“Sí, créeme. Solo pagas especias y salsas. La cosa es que me puedes traer
cualquier tipo de carne siempre que quieras.” — explicó Weed.
Página 256 u

Una comida hecha con [Artesanía]: los platos que Weed servía eran
auténticas obras de arte. Había más jugadores de lo que se pensaba
que aprendían a cocinar porque era útil cuando se acampaba al raso.
¿Pero cuántos cocineros novatos podían aplicar su atributo de [Arte] al
resultado de su trabajo?
u

Con la excepción de los cocineros profesionales, pocos jugadores


invertían tiempo y dinero en la habilidad [Cocina], por lo que los platos
apetitosos eran incluso más raros entre los mejores jugadores. Vendiendo
comida de calidad a bajos precios, el puesto de Weed seguía siendo un
rotundo éxito. Los jugadores lo llenaban con la esperanza de obtener un
aumento temporal de [Salud] y [Resistencia].

Después de pasarse una semana tallando estatuas y cocinando, alguien


le mandó un susurro a Weed.

- Weed, ¿me oyes?

Era Pale, el arquero con el que había cazado zorros y lobos durante las
largas noches iniciales.
- Hola. Cuánto tiempo.

- Genial, estás conectado. ¿Dónde has estado? Te he estado llamando


casi a diario, pero siempre estabas bloqueado.

- Tenía trabajo.

La caverna secreta en la Guarida de Litvart: en su interior, los susurros


estaban bloqueados automáticamente. Pale no insistió en el asunto.

- Ya veo. ¿Ahora tienes tiempo?

Weed miró a su alrededor. Sus estatuas aún eran populares, pero era
exclusivamente una producción por demanda, por lo que las ventas
habían superado su punto cumbre. La gente buscaba regalos similares.
En ese sentido, su declaración de solo hacer trabajos originales se le
Página 257 u

había vuelto en contra.

- Sí.

- Entonces, ¿por qué no te unes a nosotros para la misión de la fuerza


de asalto al Poblado Baran? Hemos decidido coger esta misión todos
juntos, y he estado intentado contactar contigo para ver si te querías
u

venir también.
TRADUCCIÓN: Solostaran · REVISIÓN: AMarauder - Tars

Volumen 1
Capítulo 10
El papel de weed en las
fuerzas de castigo

¡La fuerza de castigo con rumbo a la Aldea Baran!

Localizado en la frontera de la civilización humana, el Reino de


Rosenheim estaba rodeado por monstruos. El Reino había levantado
Página 258 u

muros fortificados y había organizado milicias en las ciudades


fronterizas, pero los ataques anuales de goblins y orcos que asaltaban
los pueblos tras las cosechas de otoño seguían causando estragos, lo que
suponía un quebradero de cabeza en la Corte Real.

La misión de la fuerza de castigo asignada a Darius era una misión de


u

grupo para recuperar el Poblado Baran que había caído bajo el ataque
de los hombres-lagarto. Aquellos que se unían a la fuerza de asalto
compartían la misma misión y ellos, formando un cuerpo de trescientos
jugadores, irían a expulsar del poblado a los invasores.

El tema había estado causando sensación en la Ciudadela de Serabourg


en los últimos días. Hasta los jugadores de otros Reinos estaban llegando
a la Ciudadela para unirse a la misión, haciendo que la ciudad estuviese
más llena de gente que de costumbre.

A todo aquel que tomase parte en la misión se le otorgaban puntos de


experiencia, por no mencionar la [Fama], como reconocimiento por sus
servicios al Reino de Rosenheim. Todo el mundo estaba hablando de
ellos, pero Weed no se había enterado al haber estado ocupando tallando
estatuas en su puesto.
Weed accedió a reunirse con sus antiguos compañeros de equipo. Todos
le esperaban en el centro de la ciudad.

“Me alegro de volver a verte, Weed.”

“¡Guau! Cuánto tiempo sin verte.”

Surka e Irene le dieron la bienvenida. Su equipo había cambiado


notablemente desde la última vez que se habían visto. Surka llevaba una
chaqueta de buena calidad, e Irene un vestido clerical completamente
blanco. En el caso de Romuna, la maga, vestía la típica túnica negra.

Se sorprendieron al ver que Weed aún llevaba el mismo atuendo.

“Weed, ¿dónde has estado?”


Página 259 u

“Es una larga historia…” — antes de que pudiese terminar de responder,


Surka le quitó la palabra y dijo:

“Entiendo. No te has conectado desde hace semanas, ¿verdad?”

“…”
u

“Oh, ¿vas a unirte a la misión de la fuerza de asalto? ¡Por favor, ven con
nosotros, Weed!” — Romuna abrazó su brazo con los suyos, como si
fuesen una pareja.

Pale el arquero les observaba con una expresión dolida que le causó a Weed
un escalofrío. Ya se había fijado en que Pale cortejaba discretamente a
la maga.

Deslizando su brazo del firme agarre de Romuna, Weed preguntó:

“¿Qué niveles tenéis?”

“Yo 48. He muerto cinco o seis veces, por lo que tengo el nivel más bajo
del grupo.” — respondió Surka obedientemente.
“Yo estoy en el 51.” — dijo Irene.

“Igual que yo.” — esta vez era Romuna.

“Y yo 53.” — dijo por último Pale, aún incómodo por la imagen que
acababa de ver.

Weed ya sabía que sus compañeros eran amigos en la realidad, por lo


que siempre estaban cazando juntos, y subiendo niveles a un ritmo
parecido. Aun así, era obvio que habían estado en un buen terreno de
caza, ya que habían subido de nivel más rápidamente que la mayoría de
los jugadores normales.

Le confiaron que se habían retirado temporalmente de la universidad.


Aunque no querían decirle más, él supuso que habían estado jugando a
Royal Road casi sin parar, sin dormir, encerrados en sus cuartos oscuros
Página 260 u

como si fuesen personas aisladas socialmente.

Pale pronto comprobó que Weed se uniría con ellos a la misión de la


fuerza de asalto.

“Han publicado que el nivel requerido es 30 o superior. Esta misión da


un extra a la experiencia conseguida. Y además puedes conseguir algo
u

de [Fama].”

La fuerza de castigo tenía previsto encontrarse muchos tipos de


monstruos. El objetivo principal eran los hombres-lagarto que ocupaban
el Poblado Baran, pero era más que probable que se encontrasen con los
menos peligrosos goblins.

“La misión es un poco arriesgada, pero podemos usar la ayuda de los


PNJs en caso de emergencia. Estoy realmente cansada de las arañas
rojas y de los bandidos.” — dijo Pale con gesto abatido.

Mientras Weed había estado ocupado, sus compañeros habían estado


cazando en una mazmorra cercana. La mazmorra de las arañas, en la
que en cada estalactita se escondían arañas rojas y arácnidos venenosos.
Irene se encarga de los envenenamientos, pero Pale quedó traumatizado
al verse atrapado en una pegajosa telaraña, removiéndose patéticamente
contra las babeantes arañas gigantes.

Weed asintió, comprendiendo exactamente por lo que Pale había


pasado. Él lo había pasado mal luchando contra los gusanos gigantes.

“No estaría mal tomar parte en la fuerza de castigo.”

“Pues bienvenido, Weed. Por cierto…”

“¿Sí?”

“¿Has conseguido una clase?”

Hasta donde el grupo sabía, Weed había estado indeciso sobre qué clase
elegir cuando estaban haciendo sus cacerías nocturnas. Hasta habían
Página 261 u

hecho sus apuestas sobre cuál terminaría escogiendo.

“Tengo una clase, pero…”

“¿Qué clase es? Anda, dínoslo…” — Irene, que normalmente se mostraba


reservada, se le acercó con los ojos brillando. Como sacerdotisa a cargo
de la curación de sus compañeros, se suponía que debía conocer la clase
u

de los demás.

Solo entre los tipos de guerreros ya había muchas posibilidades, por


no mencionar las ramas de clases de combate que se especializaban en
diferentes armas y estilos de lucha. Los tanques tenían una [Defensa]
enorme y una gran cantidad de puntos de [Salud], mientras que los
guerreros puros se enfocaban en subir su [Ataque] y su [Fuerza].

En el caso de Surka y Pale, pertenecían a las clases de apoyo con una gran
[Agilidad], pero con menores puntuaciones en [Fuerza] y [Vitalidad] si
los comparamos con los otros luchadores cuerpo a cuerpo.

Es más, los paladines, también conocidos como caballeros sagrados,


podían usar poderes divinos, incluyendo la [Mano Sanadora] para
curarse, gracias a su atributo exclusivo de [Fe].
Weed se rascó la cabeza, se encontraba incómodo.

“Soy un escultor.”

“¡Guau, mola! ¡Te has cogido una clase de artista!” — Surka empezó a
reírse alegremente, pero el resto no parecía tan complacido. El prejuicio
asociado a los débiles escultores estaba profundamente arraigado en sus
mentes.

De hecho, la clase escultor era una de las clases artesanales que no tenían
nada que ver con las habilidades de combate, por lo que no contaban
con ningún bonificador en [Fuerza] o en [Vitalidad]. Aun así, aceptaron
a Weed como uno de los suyos con todo su corazón. No eran tan crueles
como para volverle la espalda a su antiguo hermano de armas solo
porque se hubiese convertido en miembro de una de las clases menos
deseables.
Página 262 u

“Vamos de camino a Sir Darius para unirnos a la expedición. Ven con


nosotros.” — dijo Pale.

“Pero, es que verás, soy un escultor.” — insistió Weed.

“No te preocupes. Podemos cubrir lo que te falte. Deberíamos


u

apresurarnos antes de que otros jugadores llenen el cupo. El límite del


cuerpo de asalto es de trescientos jugadores y doscientos soldados PNJs
y se llena por orden de llegada.” — explicó Pale.

“Vamos, Weed.” — le insistió Romuna.

“Si piensas que no estás cualificado para ocupar un puesto por ser un
escultor nosotros te ayudaremos. Ven, ¿por favor?” — dijo Surka.

Ahora que había expuesto su clase se había quedado sin excusas para
rechazar la propuesta.

Las mujeres sentían un instinto maternal tan fuerte que no podían


abandonarle, aunque le creyesen débil, y Pale casi le rogó que se les
uniese en la fuerza de castigo para compensarle por lo que había hecho
por ellos anteriormente.

Persuadido por sus insistencias, Weed se dirigió hacia donde las fuerzas
de Darius se estaban concentrando.

uuu

El Duque Kanus estaba manteniendo su encuentro semanal con los


caballeros. Todos los caballeros de la Ciudadela, sin excepción, habían
sido convocados a ella. En la reunión, se discutía cómo expulsar a los
monstruos de Rosenheim, un plan de reclutamiento y otros asuntos
militares de urgencia.
Página 263 u

“Ha hecho un buen trabajo, Lord Midvale, los soldados que se le


asignaron están perfectamente entrenados. Estoy impresionado por ver
que todos han superado el nivel 50.” — dijo el Duque.

“No es obra mía, Su Excelencia” — replicó Sir Midvale.


u

“¿Eh? Yo mismo le confié esa misión. Dígame qué pasó.”

“Si insiste, Su Excelencia.” — respondió el caballero. A continuación


pasó a informar en detalle de los eventos acontecidos durante la misión
en la Guarida de Litvart.

“Mmm… ya veo.” — dijo el Duque Kanus acariciándose su cuidado


bigote.

Los demás caballeros también se mostraban sorprendidos porque un


extranjero, y no un nativo del Continente de Versalles, hubiese hecho
tan buen trabajo. Los PNJs se reconocían como nativos del Continente,
y a los usuarios como hombres libres enviados por Gaea, el Vidente
Sagrado. Tenían emociones, y hablaban y actuaban como si fuesen
reales gracias a una avanzada inteligencia artificial.
“Un buen hombre, desde luego. Lord Midvale, ¿por qué no le reclutó
para el Ejército de Rosenheim?” — preguntó el Duque.

“Le ofrecí dos veces un puesto de oficial, pero ambas veces dijo que quería
mantener su libertad para acabar con los monstruos a su criterio.” —
contestó Sir Midvale.

“Entiendo, un hombre libre.” — comentó el Duque Kanus, impresionado.

“Sí, Su Excelencia. Aunque no pertenece a nuestro Reino, me da la


impresión que es un hombre que volverá a proteger Rosenheim.” —
dijo Sir Midvale.

“Si usted lo dice seguro que volveremos a ver su espada a nuestro lado
algún día.” — dijo el Duque abandonando el tema sobre la Guarida de
Litvart y pasando al siguiente.
Página 264 u

uuu
u

De camino a Darius, Weed se detuvo en una tienda.

“¿Weed, por qué nos hemos parado aquí?”

“Ahora veréis.”

La tienda estaba abarrotada de clientes. Principalmente recaderos de


los diferentes restaurantes de la Ciudadela.

Un chico, vestido con lo que parecía ser un traje de mensajero, gritó:

“¡Quiero unas buenas pechugas!”

“Ja, ja, ja, ja, estás en el lugar equivocado, semental. El burdel está
en la próxima esquina. Esperó que tengas un carné” — respondió el
tendero.

“Joder. ¡Lo que quiero son pechugas de pollo!” — el chico hizo una
mueca de disgusto. Pero el tendero, en cambio, no dejaba de sonreír.

“¿Solo pechugas de pollo? ¿No necesitas huevos también?”

“Ups, me olvidaba. Huevos también.”

“Pues tendrás que esperar a que las gallinas pongan.”

“¿Y el pollo?”

“Cuando los huevos se abran, señor.”

Irene se rio ante el intercambio de palabras entre el tendero y el recadero.


Página 265 u

“Que chico tan gracioso.”

“Supongo que trabaja para un restaurante porque no puede salir de la


Ciudadela estas primeras cuatro semanas.”

“Mala elección. ¿Por qué habrá decidido trabajar en un restaurante,


u

donde no hay gran cosa que aprender?” — para Pale, hacer carrera en
un restaurante no era buena idea.

A los novatos se les recomendaba tomar trabajos bien pagados, o en el


caso de los aspirantes a hechicero, leer y aprender todo lo posible en una
biblioteca. Era así para que pudiesen comprar mejor equipo con el que
cazar más fácilmente y subir más rápido de nivel a la larga.

Pero Weed no estaba de acuerdo con esa opinión.

“Si trabajas en un restaurante, puedes aprender la habilidad [Cocina].


Vale la pena.” — dijo.

“Lo sé, ¿pero de qué sirve aprender una habilidad inútil como [Cocina]?
Si compras pan de cebada procesado, te puede durar un mes.” — replicó
Pale.

“Tiene razón. ¿Para qué aprender cómo cocinar cuando es fácil aumentar
tu nivel de satisfacción?” — preguntó Surka.

Para Weed, Surka y Pale tenían ideas equivocadas y hasta infantiles.


Subestimaban la habilidad de [Cocina] tanto como habían despreciado
el [Dominio de la Escultura], sin saber el gran impacto que las buenas
comidas podían tener sobre los atributos.

‘Esta gente no sabe lo que es una vida de pobre.’ — pensó.

Los ojos de Weed se oscurecieron. Quienes han pasado períodos de


dificultades económicas no subestimarían el significado de la habilidad
[Cocina]. Imagina que te ves obligado a comer solo pan de cebada
cuando estás cazando en el campo.
Página 266 u

Si eres un novato con un nivel bajo, y tienes poco dinero, aguantas


porque no tienes otra opción. Pero en cuanto tu nivel alcanza cierto
punto en que puedes permitirte una buena comida, tu lengua rechaza
automáticamente el pan de centeno.

En realidad, hasta Pale empezaba a tener problemas llevándose el


u

pan de centeno a la boca. En el fondo, toda la gente es igual. Tienen la


misma lista de deseos, y a medida que los van cumpliendo, la lista crece
sola. Particularmente, las necesidades básicas de una casa, las ropas y
la comida son inseparables de la misma vida.

Lo que es más, la habilidad [Cocina] funcionaba en la realidad. A medida


que la habilidad mejoraba, recibes una lista de recetas basadas en los
ingredientes con los que cuentas. Puedes probar nuevas recetas en la
Realidad Virtual que se quedarán en tu cabeza cuando te desconectes.
Si dominas la habilidad al menos hasta el nivel experto, nunca tendrás
que preocuparte por buscar un trabajo, porque cualquier restaurante te
recibiría con los brazos abiertos.

Significaba que la realidad estaba copiada con precisión en este mundo


imaginario. En otras palabras, lo que se aprendía aquí, también
funcionaba en la realidad. Así de detallado y realista era Royal Road.

Por supuesto, la mayoría de los jugadores que no se molestan aprendiendo


habilidades artesanales tanto como Weed nunca comprenderán cómo
era en verdad hasta que lo experimenten por ellos mismos.

‘Me pregunto si alguna vez lo intentarán.’

Weed anticipaba que el valor de la habilidad aumentaría a medida que


los jugadores pasasen del nivel 100. Las comidas que Weed preparaba
con su habilidad de [Cocina] — Principiante tenían un efecto beneficioso
en los puntos de salud. ¿Qué efecto tendrían los platos de un maestro?

‘Estoy seguro que hasta una pareja felizmente casada mataría para poder
probar un plato así.’
Página 267 u

No solo el sabor de la comida, también los efectos adicionales tendrían


que ser algo excepcional. ¡Un duro e insípido pan de cebada de tres
monedas de cobre contra un plato de cocina francesa que mejora tus
atributos! La competición había terminado antes de empezar.

Weed se imaginaba que los platos preparados por un gran chef podrían
venderse por un verdadero montón de dinero. Pensaba que el valor
u

de las estatuas se mantendría estable y que no cambiaría por mucho


tiempo que pasase, mientras que la habilidad [Cocina], mientras fuese
una parte integral de la vida, nunca perdería su influencia en el día a
día.

En algún momento, los más veteranos empezarían a buscar la mejor


comida que pudiesen encontrar, y entonces el valor de los cocineros
profesionales se dispararía. Bueno, puede que algunos ya lo hayan
previsto. Los cocineros son uno de los grupos que más celosamente
protegen sus secretos profesionales. Deben estar creando sus propias
recetas y mejorando su habilidad.

Se volvió hacia sus compañeros con gesto serio y les dijo:

“Entiendo que no apreciéis las habilidades artesanales en general. Las


de combate son importantes. Pero creo que llegará el momento en que
las habilidades de producción terminarán siendo las más importantes.
Todas las artesanías tienen algo en común, y además también mejoran
y ayudan en la capacidad de combate. Os sugiero que las aprendáis, por
lo menos, la de [Cocina]. Al fin y al cabo, es algo esencial en el día a día.”

“…”

“Lo siento.” — dijo Surka con voz baja.

“Olvidaba que eres un escultor, y sin pensarlo empecé a criticar a los


artesanos. Lo siento mucho.” — dijo Pale también.

Surka, Pale e Irene estaban avergonzados.

Pensaban que Weed se había enfadado porque habían estado


Página 268 u

subestimando la habilidad [Cocina], una de las artesanías, en su cara.

“No era esa mi intención. Me habéis malinterpretado.” — Weed sacudió


la cabeza.

No importaba cuánto se esforzase en explicárselo, no lo entenderían


hasta que no lo viesen con sus propios ojos.
u

La tienda tenía un ambiente agradable, ya que la mayoría de los clientes


eran habituales. Weed se abrió camino entre la multitud y se dirigió al
mostrador.

“Buenas.” — dijo.

“Buenas. He oído lo que decías. ¡Creo que tienes razón sobre la [Cocina]!”
— dijo el tendero.

“Gracias.”

“Tu cara me resulta familiar.”

“Es posible. Vine a comprar hace unos pocos días.”


Cuando Weed estaba mejorando su [Dominio de la Escultura] y su
[Cocina] a la vez, había ido a esta tienda para comprar alimentos en
cantidad, por una simple razón, sus bajos precios. La mejor manera de
maximizar los beneficios es siempre minimizar los costes comprando
grandes cantidades de materiales a la vez con un descuento. Weed
siempre había comprado en esta tienda, aunque era la primera vez que
hablaba con el tendero.

“Será eso. Gracias por venir a mi tienda. Por cierto, ¿estás siguiendo el
camino de la [Cocina]?”

“No, mi clase principal no es la de cocinero, pero conozco muy bien su


valor.”

“Está bien. ¿Qué puedo hacer por ti?” — los ojos del tendero refulgieron,
evaluando a Weed.
Página 269 u

Weed ya había comprendido, por su conversación con el recadero, que el


otro tenía que ser también un jugador.

“Especias y salsas.”

“Mmm. Hay muchos tipos de especias. Sal, azúcar y pimienta, y


u

también puedo mostrarte algunas especialidades locales interesantes,


como especias de la tierra de los elfos, y botellas de savia extraída de
ciertas plantas del Norte.” — respondió el tendero.

En el amplio Continente, había una gran cantidad de objetos con


sabores propios que los granjeros cosechaban y eran transportados en
caravanas.

“No busco nada especial, solo lo básico.”

“Perfecto. Solo los tontos que buscan impresionar a los demás hacen
pedidos especiales. ¿Sobre la calidad?”

“Por supuesto, la mejor.”


“¿Cuánto?”

Weed recontó el dinero que tenía. Aún no había vendido alguno de los
metales que tenía, salvo la plata que había reunido de las reinas gusano.

Los estaba reservandolos para el futuro, para usarlos al reparar su


equipo y mejorar su habilidad de [Reparar].

“Tengo veintisiete monedas de oro. Esa cantidad.” — dijo tras hacer


cuentas.

“Muy bien, te daré un pequeño extra.” — respondió el tendero.

Cuando los compañeros de Weed oyeron la conversación entre él y el


tendero sintieron que entre ambos existía una sensación de entendimiento
y respeto, como si un par de viejos compañeros de copas se acabasen de
Página 270 u

encontrar.

De hecho, el tendero era uno de los que habían emprendido el camino


de la [Cocina]. Cuando vio a Weed, comprendió que en la última oleada
había aparecido un buen rival. Weed también reconocía al tendero como
alguien que había empezado antes que él en ese camino, por lo que se
entendían con pocas palabras. Bastaba con el contacto visual.
u

Se guardó las especias en la mochila. Satisfecho con los preparativos


para el nuevo viaje, se dirigió al campamento de la fuerza de castigo de
Darius junto con sus compañeros.

uuu

La fuerza de castigo al Poblado Baran ya era el principal tema de


conversación en la ciudad, por lo que muchos jugadores habían estado
dispuestos a unirse a la misión. Darius estaba sentado en una pequeña
silla, entrevistando a los aspirantes.
“Siguiente.”

“Hola, me llamo Cochran. Arquero de nivel 68. Soy bueno con [Tiro
Múltiple], y mi arma es un Arco de Lassante.”

“Aprobado.”

Los siguientes eran el equipo de Weed, con Pale como cabecilla, que
habló nervioso con Darius. Pale hablaba como representante de su
equipo.

“Todos estamos en el mismo equipo. Niveles 50. Clérigo, maga de combate


especializada en fuego, explorador, monje y…” — Pale tartamudeó al
ir a presentar a Weed porque temía que, al mencionar que Weed era un
escultor, Darius pudiese enfadarse y rechazar al grupo.
Página 271 u

“Mmm… es un equipo equilibrado. Genial. Y él… ¿también pertenece


a tu equipo?”— Darius señaló a Weed, mientras le preguntaba a Pale.

“Sí.”

“Cinco en total. Con eso se completan los últimos puestos de mi ejército.”


u

“Entonces…”

“¿Quieren unirse a la misión de reconquista del Poblado Baran?” —


preguntó Darius, y una ventana apareció ante los ojos de Weed.

¡Ding!

NUEVA MISIÓN

[Fuerza de Castigo al Poblado Baran].

Más allá de las fronteras del Reino de Rosenheim hay un


mundo de bestias salvajes. A pesar de que se construyen
muros y se envía a las tropas para expulsar a los monstruos
que cada año asaltan distintos poblados, esta vez hubo un
fallo en las defensas, y una oleada de monstruos se asentó
en el Poblado Baran.

Con la ayuda de los soldados de Rosenheim, salva la Aldea


Baran de la calamidad, y destroza los monstruos.

Dificultad: D

Recompensa

Libro de Barr Khan.

Restricciones
Página 272 u

Debes completar la misión en 30 días.

Pale habló con una gran sonrisa.


u

“Claro.”

“Yo también quiero unirme.”

“Y yo.”

“Gracias por invitarme.”

“Sí.” — Weed fue el último en unirse.

Has aceptado la misión.


“Muy bien, en marcha.”

Darius se puso en pie de un salto y gritó:

“¡Chicos de la fuerza de castigo, por aquí! ¡Estamos todos! ¡Nos vamos!”

uuu

No hubo ceremonia de partida para la fuerza de castigo enviada al


Poblado Baran. Solo algunas personas que conocían a algún miembro
de la tropa sacudiendo la mano en señal de despedida.
Página 273 u

Trescientos jugadores con atuendos coloridos marcharon hacia la


Provincia sureña por la Puerta del Sur. El destino era la Aldea Baran.
Pretendían recuperar el poblado que había caído bajo las garras de los
hombres-lagarto.

“Je, je. Nunca había estado tan lejos de la Ciudadela. ¡Es como un viaje
escolar!” — dijo Romuna.
u

“Creo que nos teníamos que haber traído algo de comer.” — respondió
Irene.

Las chicas estaban hablando animadamente.

¡Aire fresco y un día soleado! Era un día perfecto para una excursión.
Lobos y leones, aterrorizados por el tamaño del grupo, desaparecían de
su camino, asegurando la seguridad del viaje.

Mientras sus compañeros hablaban relajadamente, disfrutando de la


charla, Weed estaba examinando a los demás grupos, desde qué vestían
hasta su equipamiento.

‘La media de los jugadores en la fuerza de castigo está entre 40 y 60. Por lo
que he oído, el de Darius es al menos 140.’

Darius tenía cinco compañeros, tres guerreros con espada, un ladrón y


un guerrero básico.

‘Supongo que tendrán más o menos los mismos niveles.’

Weed determinó que Darius había formado el batallón con cualquiera


que se presentase y cumpliese con los requisitos básicos hasta tener los
trescientos requeridos.

Había empezado a sospecharlo cuando se presentó para la misión, al


ver la forma relajada en que les aceptaba. En el caso de Weed, ni se
había molestado en preguntar ni su clase ni su nivel.

‘Supongo que quiere acabar con todo esto lo antes posible. Hay un montón
Página 274 u

de recompensas en juego.’

Una sensación de alarma se iba abriendo paso en sus ideas. Había


investigado sobre Darius, el líder de la fuerza de castigo, justo después
de que Pale le propusiese la idea.

Darius tenía una mala reputación. Era un hecho conocido que haría lo
u

que fuese necesario para su propio interés.

“Chicos, escuchad.” — dijo en voz baja.

“¿Eh?” — a Surka le extrañó la actitud de Weed.

“Cuando lleguemos a Poblado Baran no deberíamos confiar en nadie.”

“¿Qué quieres decir con eso?” — preguntó Romuna.

“Que estaremos por nuestra cuenta.” — respondió él.

Pale miró alrededor, como si acabase de despertar tras oír el comentario


de Weed, y se mostró de acuerdo.
“Entiendo lo que quieres decir, Weed.”

“¿Qué pasa? No lo entiendo.” — insistió Surka.

Weed le miró con el ceño fruncido.

“¿Conocemos a alguien más de la fuerza de castigo?”

“No.” — respondió ella.

“¿Quieres decir que si logramos un buen objeto alguien podría matarnos


para intentar quedárselo?” — preguntó Irene.

La pregunta pilló a los demás por sorpresa. Surka y Romuna incluso


parecían asustadas.
Página 275 u

“No es eso a lo que me refiero pero, claro, es posible. Pero no creo que
haya nadie tan descarado como para pasarse tanto delante de todos
estos testigos en la fuerza de castigo. Si recibe la marca del asesino por
matarnos, se convertiría en un enemigo público delante de cientos de
personas, y le matarían en un acto de venganza. Además, Darius no lo
permitiría, porque pondría en duda su autoridad.”
u

“¿Entonces qué es lo que te preocupa?” — preguntó Romuna.

“El problema es que no tenemos a nadie en quién confiar.” — explicó.

Weed llevó a su grupo a cierta distancia del grueso de las tropas para
que no les escuchasen, y añadió.

“A pesar de nuestros bajos niveles vamos a enfrentarnos con un buen


número de monstruos.”

“¡Exacto! ¿No es por eso por lo que se han reunido trescientos jugadores
para la misión, y tomados prestados doscientos PNJs del Ejército de
Rosenheim? Cuando esto termine, habremos ganado experiencia y
fama.” — dijo Surka.
“Y he aquí la pregunta. ¿Cómo lucharemos cuando empiece el combate?”
— preguntó Weed.

“Sí, tenemos un montón de gente, pero somos un puñado de desconocidos


que no sabemos nada los unos de los otros. No conocemos las habilidades
de ese explorador. No sabemos si el mago a su lado es realmente un
mago, o un impostor disfrazado. Imagínate que los hombres-lagarto
nos atacan por sorpresa. ¿Cómo reaccionarán? ¿Cómo podemos hacerles
frente y contraatacar?”

“¿Y qué tiene eso de malo? Se supone que los asaltos son así, ¿no?” —
preguntó Irene.

Al oír la pregunta, Pale meneó la cabeza.

“La mayoría de los asaltos consisten en matar un cierto número de


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monstruos, o acabar con la amenaza en un área definida. No he oído


mucho sobre batallas a gran escala contra los monstruos en campo
abierto como esta misión. Contamos con trescientos jugadores y
doscientos soldados, pero cuando empiece el combate, estaremos
separados en secciones con nuestros compañeros de equipo.” — explicó.

“Eso significa…”
u

“Irene, los números no siempre son absolutos. Trescientos usuarios


y doscientos soldados no garantizan que se pueda contar con un
ejército de quinientos hombres. Si nos imponemos a los monstruos, no
habrá problemas. Pero si nos encontramos con un inesperado giro de
los acontecimientos, nos derrumbaremos como un castillo de naipes.
Deberíamos tener cuidado.” — respondió Weed.

Además, Darius había estado demasiado obsesionado con obtener una


victoria rápida. Al haber muchos jugadores dispuestos a unirse a la
misión, Weed hubiese aceptado jugadores de alto nivel para disminuir
el riesgo de que todo se viniese abajo en una emergencia… aunque en
ese caso el equipo de Weed no se hubiese podido unir.

Pero Darius estaba determinado a hacerse con todos los puntos de


contribución, por lo que había rechazado a cualquier jugador con un
nivel superior a 100. En cambio, había cargado las filas con jugadores
de bajo nivel.

También había ordenado a los soldados de Rosenheim que se quedasen


atrás y siguiesen al cuerpo principal a cierta distancia.

‘Apuesto a que le preocupa que los soldados puedan obtener algunos puntos
de experiencia y la [Fama] que le corresponderían a él.’

Si Weed hubiese liderado las tropas para la misión, hubiese hecho justo
lo contrario. Hubiese descartado a los 300 jugadores, y en su lugar
hubiese aprovechado a los 200 soldados de Rosenheim.

Si hubiese comandado a los PNJs para que destruyesen la banda de


hombres-lagarto, su reputación y su [Carisma] habrían aumentado.
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Hay muchas formas de ganar [Fama] o experiencia, pero el atributo


[Carisma] necesitaba este tipo de oportunidades para crecer más
rápidamente.

Una vez más, Weed avisó a sus compañeros que tuviesen cuidado.
u

uuu

La tropa se detenía de vez en cuando para descansar y comer. Los


jugadores de la fuerza de asalto masticaban la comida seca que habían
comprado, o preparaban almuerzos ligeros. Los soldados de Rosenheim
mantenían un plan de tres comidas diarias.

“¿Qué vamos a hacer con las comidas?” — preguntó Surka.

Pale y Surka miraron a Weed mientras hablaban sobre la próxima


comida. Sabían, por la conversación que habían seguido el día anterior
en la tienda que Weed era bueno cocinando.
Weed se ofreció a demostrarles su habilidad [Cocina].

“Yo me encargaré de nuestras comidas. Pale, ¿podrías cazar algunos


conejos o ciervos? Al menos dos de cada uno.”

“Sin problemas.” — respondió el arquero.

Pale cogió su arco, y poco después estaba de regreso con tres conejos y
dos ciervos. Como explorador especializado con el arco, podía dispararle
a un conejo con una certeza de impacto del 100%.

“Ahora os prepararé un plato delicioso.” — dijo Weed.

Weed encendió un fuego, peló la piel de los conejos y los ciervos, los
atravesó con unos palos y los puso encima del fuego. A medida que los
iba girando lentamente, iba esparciéndoles sal y pimienta.
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“¡Uahh! Qué buena pinta.” — exclamó Surka.

“¿Ya podemos comer?” — preguntó Irene.

Ambas estaban babeando por el olor de las carnes asadas… la tentación


era casi irresistible.
u

Weed ya había cautivado las lenguas y los estómagos de Sir Midvale y


sus hombres en la Guarida de Litvart. Habían devorado sus estofados
como una manada de lobos hambrientos, y hasta rebañaban los pocos
restos que hubiesen podido quedar en las cazuelas.

Comparado con esos días, su habilidad intermedia de [Artesanía]


añadía profundidad al sabor de sus platos, y el atributo [Arte] hacía
que resultasen incluso más apetitosos.

Hasta el palo que atravesaba los ciervos desde la boca hasta los cuartos
traseros para mantenerlos sobre el fuego tenía buena pinta.

“Por favor, servíos.” — dijo cuando vio que ya había torturado suficiente
a sus compañeros con la visión de la comida.
Como dice el dicho, el hambre es la mejor de las especias.

¡ÑAM!

En cuanto Weed les dio su aprobación a los demás, estos se apresuraron


hacia la barbacoa y empezaron a arrancar la carne de los huesos y a
llevársela a la boca.

“¡Ohh… está taaaaaaaan bueno!” — gritó Surka.

“Eres el mejor, Weed.” — dijo Romuna, levantando el pulgar con la


mano llena de grasa. Su boca estaba cubierta de grasa amarillenta.

Aparentemente sucumbiendo a uno de los siete pecados capitales, la


gula, Irene se estaba comiendo un conejo entero, y Pale estaba ocupado
atacando una de las patas traseras de uno de los ciervos. Estaban
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chupando hasta los huesos.

“Gracias, Weed.”

Encantados por la espléndida comida, no dejaban de halagar a Weed


una y otra vez.
u

“No es nada.” — Weed miró alrededor y vio que muchos de los demás
jugadores se habían reunido alrededor de su equipo sin que se hubiesen
dado cuenta.

“Tiene buena pinta…”

“Y que lo digas…”

“¡Qué envidia me dan!”

Entre los miembros de la fuerza de castigo, el apetito de los observadores


estaba siendo aguijoneado, incluso más, al ver a Irene y Romuna quienes
estaban disfrutando como nunca antes.

“¿Les importa si cojo un poco?” — preguntó un hombre.


Weed distribuyó la comida entre los demás.

“Sírvete, pero la próxima vez deberías traer algo de carne.”

“Oh, muchas gracias.” — recibieron agradecidos la comida. Pero esta


se acabó después de que unos pocos se les uniesen.

Weed empezó a trabajar más duro en la siguiente comida, ya que muchos


jugadores se le acercaban con carne y le pedían que se la preparase. De
hecho, algunos sabían cocinar. Se habían visto obligados a prepararse la
comida cuando se les acababa la carne seca cuando estaban realizando
misiones de caza.

Por decirlo de forma simple, el 80% de las tropas eran hombres. Odiaban
las labores cotidianas de la cocina, como pelar patatas y cortar cebollas.
Y lo mismo ocurría con las jugadoras.
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Incluso aquellos que habían aprendido la habilidad [Cocina] preferían


reunir la carne y dársela a Weed para que se la preparase a cocinarla
ellos mismos.

“Lo siento. Te debo una.” — dijo un hombre el segundo día de viaje.


u

“No, no es nada. No te preocupes. Lo hago por diversión.” — respondió


Weed.

“Pero…”

“¿Te resulta incómodo? ¿Y si hacemos un trato? Si quieres compensarme


para no sentirte culpable ni que me debes nada, puedes pagarme por la
comida. Por las especias y las salsas, ¿sabes?” — propuso.

“Eso me gusta más. Así no me sentiría incómodo.”

¡Un gran trabajo secundario!

Weed empezó a cobrar una pequeña tarifa por cocinar. Por supuesto,
era bastante superior a los costes de las especias y las salsas, pero nadie
se quejó porque aún estaba dentro de lo aceptable.

Cuando la tropa se detuvo en una ciudad en el viaje hacia el Poblado


Baran, Weed compró una gran cantidad de alimentos en una tienda
local. Necesitaba actualizar sus recetas para mejorar su habilidad
[Cocina] más rápidamente. Además, los nuevos menús que nunca antes
había intentado hacer, siempre eran bien recibidos por sus clientes.

Siempre estaba ocupado: durante la marcha trabajaba en los alimentos


que había comprado en la tienda, y en los descansos, cocinaba. El
cuchillo de tallar de Zahab, además de para su uso original, era perfecto
para pelar patatas.

‘Bueno, al fin y al cabo tallar y pelar son bastante parecidos.’

Las comidas que preparaba por lo general aumentaban la [Salud]


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de quien la comía en un 5%, y como su [Artesanía] estaba en nivel


intermedio, además daban otros beneficios.

El nivel intermedio de [Artesanía] ofrecía efectos adicionales de un


aumento del 30% en su [Dominio de la Espada], y del 50% en la [Cocina].

Por lo tanto, el efecto final sobre los puntos de [Salud] era el de un


u

aumento del 7%. Podía sonar como algo trivial, pero esa diferencia
podía salvar una vida en medio de una batalla caótica, en la que siempre
podías recibir un golpe por la espalda en cualquier momento.

Unas caras familiares se acercaron a Weed, que estaba concentrado


cocinando. Vestían los uniformes del Ejército de Rosenheim.

“¡Jefe!”

Solo unos pocos PNJs llamarían a Weed con ese título. Dejó de cortar la
carne, levantó la cabeza, y reconoció las caras que tenía delante.

“Son…” — empezó a decir.

“¡Saludos! ¡Saluden al Comandante!”


Eran Becker, Hosram y Dale, los hermanos de armas con los que Weed
había estado luchando en la Guarida de Litvart.

“¿Cómo estáis?” — les preguntó.

“Nos ascendieron a decuriones, Comandante.” — respondió Becker.

Cuando los soldados que Weed había adiestrado a conciencia fueron


ascendidos a decuriones, no pudieron regresar a sus regimientos
originales. Por eso, las autoridades militares les habían asignado los
nuevos reclutas y otra misión.

“Supongo que os han ordenado uniros a la fuerza de castigo del Poblado


Baran.” — dijo Weed.

“Sí, Comandante. Una vez que la misión esté completa, estaremos


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asignados en el poblado para asegurar el área circundante.” — respondió


Dale.

Algunos de los antiguos subordinados de Weed, Buren incluido, habían


sido puestos bajo el mando de Sir Midvale, pero el resto, que eran ahora
decuriones, estaban sirviendo actualmente en la fuerza de castigo.
u

Había sido la nariz de perro de Becker la que había notado el olor de la


cocina de Weed y lo había seguido hasta dar con su antiguo Comandante.

“Je, je.” — dijo Hosram.

“Echamos de menos sus comidas, Jefe.” — añadió Becker.

“Lamento que esta vez no estemos bajo su mando, pero, ¿no nos va a
demostrar que la vieja camaradería nunca muere?” — dijeron los viejos
subordinados con cara de hambre.

“¿Cómo es que conoce a soldados de Rosenheim?”

“Y no son meros soldados. Parecen decuriones.”


“Acaban de llamarle Comandante.”

Surka y Pale no podían ocultar su sorpresa. Un decurión era un puesto


bastante respetable, y los niveles habituales de los decuriones parecían
ligeramente superiores a los suyos.

“Muy bien. Aquí tenéis.”

Weed sirvió sin reservas lo que había estado preparando a sus antiguos
subordinados. No hace falta decir que a partir de ese momento los
alimentos destinados a la comida de los soldados empezaron a desviarse
hacia Weed.

uuu
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A las tropas les llevó exactamente diez días a pie llegar hasta su destino.
Weed había previsto mejorar su habilidad de [Cocina] en el trayecto.
Para alcanzar el nivel intermedio, no solo se requería ser apto con la
habilidad, sino una inconmensurable cantidad de esfuerzo.
u

En los días de la Guarida de Litvart, Weed había estado sirviendo


a 32 hombres 3 veces al día, lo que sumaban 96 servicios cada día,
acumulando un total de unos 3.000 platos de estofado.

A continuación había montado un puesto al aire libre en el que


preparaba y vendía comida en el centro de la Ciudadela. Ahora estaba
alimentando cientos de bocas en el viaje, contaba que al menos había
servido unos 10.000 platos.

Suponiendo que un hombre come 3 veces al día, son 90 comidas al mes,


lo que viene a ser unas 1.080 comidas al año.

Weed había hecho comida suficiente como para que un solo hombre
comiese durante diez años, solo para poder alcanzar el nivel intermedio
de la habilidad [Cocina], así que si no pillas la idea, es que estás muy
perdido.

Cocinar como hobby no era comparable a preparar miles de platos para


ganar experiencia en la habilidad. Aunque el [Dominio de la Escultura]
era lo mejor para mejorar la [Artesanía], Weed temía que pudiese atraer
una atención indeseada si se ponía a tallar estatuas en el camino. Cocinar
podía pasar más inadvertido, generando dinero y ganándose gratitudes,
cuando no respeto, de los demás.

uuu
Página 284 u

Las tropas por fin podían ver el Poblado Baran.

“Ya casi hemos llegado.”

“¿Qué tipo de monstruos crees que habrá? No veo la hora de empezar


a luchar.”
u

Charlando tranquilamente, Irene y Surka recorrían el camino, mientras


que Weed, que ya había terminado de cocinar, levantaba la mirada
hacia el cielo.

No había nada salvo nubes navegando por el cielo azul.

‘Lo sabía. La Ciudad del Cielo no es más que un mito. Me dejé llevar por
una estúpida leyenda. Poblado Baran… el libro decía que era el último
sitio con alguna conexión con la Ciudad del Cielo. Por eso me uní a esta
expedición, pero me equivoqué.’

Una pequeña esperanza se desvanecía

Cuando la tropa se acercó al poblado, Darius gritó:


“¡Alto!”

Había señalado una parada absoluta. Cuando Weed, que se encontraba


en la parte de atrás del ejército se acercó al frente, vio a un anciano con
ropas hechas jirones y una docena de niños tambaleantes junto a la
tropa.

“¿Qué es lo que quieres?” — preguntó Darius; ni siquiera se había


bajado del caballo. Darius y sus compañeros eran los únicos a caballo.

“Saludos, respetable Comandante. Somos los supervivientes del Poblado


Baran.” — explicó el anciano — “Mi nombre es Ghandilva, y era el
anciano de la aldea. Hace poco envié a Jackson con las noticias de la
calamidad que había asolado a mi gente a Su Majestad pidiendo ayuda.
Espero que vos seáis quien nos libere de nuestras miserias.”
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“Así es.” — respondió Darius.

Ghandilva, el anciano del Poblado Baran, y los aterrorizados críos que le


seguían habían escapado del poblado con él cuando había sido invadido
por los hombres-lagarto.

“Muy pronto habremos recuperado el Poblado Baran. Así que ponte


u

cómodo y espera un poco más por las buenas noticias.”

“Me alegro de oírlo, respetado Comandante. Por cierto, tengo una


petición personal…” — dijo Ghandilva.

“¿Cuál es?”

“Por favor, rescatad a mi gente, capturada por esas despreciables


criaturas. Es el último deseo de este humilde anciano.”

Los ojos de Darius adquirieron un nuevo brillo.

“¿Es una misión?”

“Sí, es la misión de mi poblado, respetable Comandante.” — dijo


Ghandilva.

“¿Y qué recompensas puedes ofrecerme?”

Como jugador de alto nivel, Darius no se lanzaba a por la primera misión


que le ofrecían. Había demasiadas misiones por ahí, y muchas de ellas
no eran más que una pérdida de tiempo.

Ghandilva puso una cara derrotada.

“No tenemos nada de valor que ofreceros, señor. Todo lo que puedo
ofreceros es esto…” — mostró unas simples semillas.

“Eso me parecía. ¿Qué recompensas podría esperar de un viejo que


pierde su poblado ante un patético grupo de hombres-lagarto? Ni
tesoros, ni objetos.” — dijo Darius.
Página 286 u

Darius se rio con frialdad. El viejo solo había venido a causar problemas
antes de que empezase a expulsar a los hombres-lagarto del poblado.

“Entonces recuperaré rápidamente el poblado y, si tenemos tiempo libre


después de la batalla, yo personalmente me encargaré de que algunas
tropas sean enviadas a rescatar a los cautivos.” — dijo el Comandante
u

de la expedición. — “No podemos perder tiempo pensando que los


rehenes de los hombres-lagarto puedan seguir aún vivos. No pongas a
prueba mi paciencia, viejo.”

Darius se alejó al trote de malos modos de Ghandilva.

Algunos jugadores de la fuerza de asalto maldijeron el nombre de su


líder en voz baja, pero ninguno se atrevió a adelantarse a ayudar al
anciano. Ghandilva estaba sumido en la desesperación. Pero en ese
momento, alguien cogió sus manos arrugadas.

Era Weed.
Gracias por leernos.

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