Sabes...

Tengo un poema borracho,

ebrio de tanto releerlo

, aburrido porque ya no sabe a quien va dirigido,

murmura nombres pasados,

de amores muertos,

cuenta historias como sí hubiesen sido vividas con ella,

contigo, en cambio olvida para que lo escribí,

para no tenerte tan adentro,

porque fluyes por mis venas y a vos no te importa,

este poema va caminando cada noche,

intentando regresar a casa,

y despierta a los vecinos cuando repite alguna canción

compartida,
 o se inquieta cuando alguien tiene tu mismo nombre, ¿Señorita
no podría inventarse otro nombre que no empiece con "C" por
favor? suele decirle a quienes se presentan y tratan de ayudarlo a
andar en dos versos, hay poemas que nacen para no ser leídos,
este por ejemplo, que tu no leerás, está escrito en lápiz sobre un
viejo escritorio de clases, tratando, insistentemente, de que por
alguna ventana decida saltar para que otro lo lea, para que a otro
le duela y no a mi por tu ausencia.