Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Desde hace 30 años los gobiernos de diversos países han puesto énfasis en generar
una mejor definición acerca de qué constituye la práctica docente. El interés por
delimitar esta práctica y los criterios de su buen desempeño son el resultado de
reconocer la complejidad del proceso de enseñanza-aprendizaje, además de una
definición del papel que juega el docente en dicho proceso. Una interrogante
fundamental al hablar de evaluación del desempeño docente es: ¿qué aspectos se van
a evaluar?
1. Consideraciones preliminares
El marco parte de dos supuestos fundamentales para lograr una educación de calidad:
1
Fragmentos seleccionados del texto: Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones
Pedagógicas. (2008). Marco para la buena enseñanza (7ª ed.). Santiago de Chile: Ministerio de
Educación/Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas.
1
III. ¿Qué necesita saber el docente?
IV. ¿Qué es necesario saber hacer?
V. ¿Cuán bien se debe hacer?
Así, el docente parte de los contenidos que debe impartir, los cuales deberá conocer a
profundidad, y posteriormente se sitúa en el contexto específico del grupo donde va a
impartir clase y elabora una propuesta pedagógica apropiada. La fase de planeación
comprende cinco criterios:
2
Ø Dominio de la didáctica de la disciplina a enseñar.
Ø Organización de los contenidos de manera coherente de acuerdo con el
currículo y las particularidades de los estudiantes.
Ø Elaboración de estrategias de evaluación coherentes con los objetivos, la
disciplina y el currículo, de tal forma que se permita a los estudiantes demostrar
lo aprendido.
Se mencionó previamente que uno de los supuestos del marco es la empatía con que
los docentes se involucran en el proceso de enseñanza-aprendizaje, lo cual se refleja
en este dominio. El clima que genera el docente no sólo se refiere a la interacción
entre alumnos(as) y docente, sino que incluye también la interacción entre los propios
alumnos(as). Por último, el dominio incluye también un componente académico en el
sentido de que el docente debe garantizar que el ambiente es idóneo para aprender,
además de ser estimulante y profundo, con el fin de comprometer a los(as)
alumnos(as) con su aprendizaje.
3
interesantes y productivas, la consideración de los saberes, intereses de los
estudiantes y el uso de recursos. Lo anterior corresponde a las secuencias didácticas
propiamente dichas.
Por último, esta práctica docente debe considerar a todos(as) los(as) alumnos(as), por
lo que el docente deberá adecuar su práctica a las necesidades específicas de cada
uno(a). Los criterios que contempla este dominio son:
4
Por último, dado que el conocimiento está en constante actualización, el dominio
contempla la necesidad de la actualización profesional. Se espera que el docente
busque activamente los nuevos conocimientos tanto en su materia, como en técnicas
pedagógicas. Los criterios que contempla este dominio son:
3. Conclusiones
El buen desempeño docente, como se ha visto, va más allá del trabajo realizado en el
aula. Implica un compromiso constante y amplio con todos los factores involucrados en
el proceso de enseñanza-aprendizaje (incluido el mismo profesor), por lo que la
evaluación del desempeño deberá ser congruente con toda esta complejidad. Ahora,
bien, para lograr que esta evaluación sea de utilidad, deberá darse en un contexto
formativo que permita al docente perfeccionar su propia práctica.
5