Sebastian Horesok.

En los sistemas electorales se presentan constantemente fenómenos políticos, por

una razón y es que los sistemas electorales son fenómenos políticos; esto debido a
que estos en su esencia y existencia tienen naturaleza política.

Un ejemplo de fenómenos políticos en los sistemas electorales, es la legitimidad en

las democracias occidentales, solo mediante elecciones competitivas donde cada
uno de los electores pueda gozar, de libertades e igualdad de condiciones en la
participación, se puede hablar de una fuente originaria de legitimación para el
sistema político. A su vez el sistema de elecciones genera representantes que
crearan las normas jurídicas constitucionales que dan orden al aparato
constitucional de un Estado o también en la creación del mismo. Otro fenómeno
político presente en los sistemas electorales es el de los partidos políticos, esto son
parte esencial del sistema electoral, sobre todo en las elecciones competitivas,
estos son los participantes que buscan mediante el voto, la mayor cantidad de
sufragios para así obtener el poder.

Los sistemas electorales también nos ayudan a analizar muchos fenómenos

políticos, como son la clasificación de las formas de gobierno, mediante este
sistema se puede empezar a teorizar sobre si una forma de gobierno es
democrática, autoritaria, totalitaria. Los sistemas electorales han servido a la
elaboración de las instituciones democráticas, que generan orden y distribución del
poder.

Mediante una elección en forma de referéndum en un caso o en plebiscito, se puede

determinar si se reforma todo el sistema político de un país o todo el aparato
organizacional; tan solo con una simple elección se puede transformar toda una
nación. O el mismo sistema de elecciones en la mayoría de los países del mundo
es el principal modelo para la consecución del cambio político.

Dejándonos en evidencia que por su naturaleza de fenómeno político, el sistema

electoral generara mas fenómenos políticos que determinaran todo el
comportamiento institucional, organizacional y de la sociedad en general.
 Osmel Osuna.

Los sistemas electorales plantean la forma en que los electores pueden

manifestar su preferencia mediante el voto, así como también la manera en que
esos votos pueden transformarse en escaños, por tanto pueden ser analizados
desde un punto de vista técnico, pues establecen toda una serie de pasos y de
formas que determinaran como será la representación de las mayorías y de las
minorías en una elección.

Existen dos tipos de sistemas electorales: El sistema mayoritario y el sistema

proporcional. En el sistema mayoritario bastara que uno de los factores políticos que
este inmerso en la contienda electoral obtenga un número superior de votos para
así obtener una representación mayoritaria, muchas veces este sistema permite que
exista una representación desproporcionada, pues aun cuando la minoría consiga
un número similar de votos podría quedar excluida de la cámara, es decir, no
tendría representación alguna. En el sistema proporcional se da una repartición de
escaños equitativa conforme al porcentaje obtenido en la elección, el problema de
este sistema es que puede permitir que las minorías posean una
sobrerrepresentación o que simplemente no exista un factor mayoritario,
atomizando al cuerpo colegiado y dificultando la gobernabilidad.

La función del sistema electoral está vinculada al sistema de partidos existente,

pues el número de partidos, su tamaño, su fuerza, sus objetivos, su alcance y su
poder determinaran la eficacia del sistema electoral. Los partidos grandes, aquellos
que desean alcanzar una mayoría y arropar un número importante de electores,
siempre van a preferir un sistema mayoritario que les permita alcanzar mayor poder,
por otro lado, los partidos pequeños, aquellos que solo representan a un sector muy
específico de la sociedad, ya sea por razones étnicas, sociales, religiosas, etc,
siempre preferirán y lucharan por una representación justa, aquella que solo puede
alcanzarse con un sistema proporcional que le permita a las minorías tener
representación. En un sistema de partidos plural, ahí donde existe un gran número
de partidos, se corre el riesgo que solo existan minorías y que el poder sea
atomizado y diluido, allí será necesario muchas veces alcanzar una coalición de
partidos que permita la gobernabilidad.

Como solución a los problemas o deficiencias generados por los dos sistemas
electorales mencionados, algunos han propuesto la creación de un sistema electoral
mixto, con elementos de ambos sistemas electorales. Este sistema mixto es
utilizado actualmente en un gran número de Estados, aun sin solucionar del todo
los problemas de representación y sin alcanzar una representación verdaderamente
equitativa. Siempre las democracias serán imperfectas, siempre un grupo
importante de individuos será excluido del sistema, lo ideal es reducir ese nivel de
imperfección para así conseguir una mayor inclusión.