Consideremos un espacio-tiempo estacionario axialmente sim¶etrico, cuyo ele-
mento de l¶³nea puede escribirse en la forma de Weyl-Lewis-Papapetrou [1] ds2 = ¡f(dt + !d')2 + f¡1[½2d'2 + e2°(d½2 + dz2)]; (2.1) donde xa = (t; '; ½; z) son coordenadas cuasi-cil¶³ndricas y las funciones f, ! y ° dependen s¶olo de las coordenadas ½ y z. La naturaleza cuasi-cil¶³ndrica [7] de Soluciones de las ecuaciones de Einstein mediante ... 59 las coordenadas signi¯ca que ½ = 0 sobre el eje de simetr¶³a y, para z ¯jo, ½ crece mon¶otonamente al in¯nito, mientras que z, para ½ ¯jo, crece mon¶otonamente en el intervalo (¡1;1). La coordenada ' var¶³a en el intervalo usual [0; 2¼). Las ecuaciones de Einstein en el vac¶³o son equivalentes al sistema de ecuaciones diferenciales parciales r ¢ [½¡2f2r!] = 0; (2.2a) fr2f ¡ rf ¢ rf + ½¡2f4r! ¢ r! = 0; (2.2b) 4°;½ = ½f¡2(f;½ 2 ¡ f;z 2) ¡ ½¡1f2(!;½ 2 ¡ !;z 2); (2.3a) 2°;½ = ½f¡2f;½f;z ¡ ½¡1f2!;½!;z ; (2.3b) donde r = ^e½ @ @½ + ^e' ½ @ @' + ^ez @ @z es el operador diferencial tridimensional usual en coordenadas cil¶³ndricas y f^e½;^e';^ezg son los vectores unitarios coordenados. Ahora bien, si à es cualquier funci¶on razonable independiente de ', se satisface la identidad r ¢ (½¡1^e' £ rÃ) = 0 ; (2.4) as¶³ entonces, la ecuaci¶on (2.2a) puede considerarse como la condici¶on de inte- grabilidad para la existencia de la funci¶on à de¯nida por [8] ½¡1f2r! = ^e' £ rà : (2.5) Puesto que esta relaci¶on es equivalente a f¡2rà = ¡½¡1^e' £ r! ; (2.6) la identidad (2.4) implica la ecuaci¶on de campo r ¢ (f¡2rÃ) = 0 (2.7) para el nuevo potencial Ã. Reescribiendo entonces el sistema de ecuaciones (2.2a)-(2.3b) en t¶erminos del nuevo potencial Ã, tenemos: fr2à ¡ 2rf ¢ rà = 0; (2.8a) fr2f ¡ rf ¢ rf + rà ¢ rà = 0; (2.8b) 60 Guillermo A. Gonz¶alez !;½ = ½f¡2Ã;z ; (2.9a) !;z = ¡½f¡2Ã;½ ; (2.9b) 4°;½ = ½f¡2[ (f;½ 2 ¡ f;z 2) + (Ã;½ 2 ¡ Ã;z 2) ] ; (2.10a) 2°;½ = ½f¡2[ f;½f;z + Ã;½Ã;z ] : (2.10b) Como se puede veri¯car f¶acilmente, la condici¶on de integrabilidad del sistema sobredeterminado de ecuaciones diferenciales (2.9a)-(2.9b) es equivalente a la ecuaci¶on (2.8a), mientras que la condici¶on de integrabilidad del sistema so- bredeterminado de ecuaciones diferenciales (2.10a)-(2.10b) es equivalente a la ecuaci¶on (2.8b); as¶³ entonces, la existencia de soluciones del sistema completo de ecuaciones diferenciales (2.8a)-(2.10b) est¶a garantizada siempre y cuando existan soluciones del sistema de ecuaciones diferenciales (2.8a)-(2.8b).