Está en la página 1de 17

Revista Facultad de Ciencias Económicas:

Investigación y Reflexión
ISSN: 0121-6805
economía.neogranadina@umng.edu.co
Universidad Militar Nueva Granada
Colombia

Ariza Buenaventura, Efrén Danilo


Luces y sombras en el "poder constitutivo de la contabilidad ambiental"
Revista Facultad de Ciencias Económicas: Investigación y Reflexión, vol. XV, núm. 2, diciembre,
2007, pp. 45-60
Universidad Militar Nueva Granada
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=90915204

Cómo citar el artículo


Número completo
Sistema de Información Científica
Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal
Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
rev.fac.cienc.econ., Vol. XV - No. 2, Diciembre 2007, 45-60

LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO


DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”*
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA**
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA

(Recibido: Octubre 4 de 2007 – Aprobado: Noviembre 10 de 2007)

Resumen
En este documento se presenta una interpretación crítica de las perspectivas dominantes de la con-
tabilidad ambiental. Desde concepciones sociológicas, se esboza el poder constitutivo de la conta-
bilidad para “reflejar-representar-construir” el campo de la realidad social, organizacional y del mer-
cado. Así, se aborda el recorrido de la relación contabilidad-naturaleza desde la época feudal hasta
nuestros días y se presenta una reflexión en torno a posibles “luces y sombras” que tal relación ha
generado y puede potencializar para enfrentar los problemas sociales y naturales de un Desarrollo
Sustentable de base social y comunitaria.
Palabras claves: contabilidad medioambiental; ecología y contabilidad; economía ambiental; de-
sarrollo sostenible.

LIGHTS & SHADOWS IN THE “CONSTITUTIVE POWER


OF THE ENVIRONMENTAL ACCOUNTING”

Abstract
This document offers a critical interpretation of the most dominant perspectives of environmental ac-
counting. On the basis of sociological conceptions, the constitutive power of accounting is sketched
to “reflect-represent-construct” the fields of social, organizational and market reality. Thus, a study
of the relation accounting-nature from feudal times until the present time is made. Also, a reflection
regarding the possible “lights and shadows” generated by such a relation and that may empower it
to face the social and natural problems of a Sustainable Development taking into consideration a
social and community bases is carried out.
Key words: environmental accounting; ecology and accounting; environmental economics; sustai-
nable development.

JEL: M 40, M49.

Ariza, E. (2007). Luces y sombras en el poder constitutivo de la contabilidad ambiental. Revista de


la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Militar Nueva Granada, (XV)2.

* Producto de reflexión de la línea de investigación “contabilidad y medioambiente” perteneciente al grupo de investigación “Contabi-
lidad, Organizaciones y Medioambiente” de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá.
** Profesor Asociado de la Universidad Nacional de Colombia, Coordinador Académico – Programa de Contaduría Pública – Universi-
dad Nacional de Colombia. Contador Público, Magíster en Sociología. Miembro y Directivo de la Universidad Nacional de Colombia
del C-Cinco (Centro Colombiano de Investigaciones Contables). Director del Grupo: Contabilidad, Organizaciones y Medioambiente
de la Universidad Nacional de Colombia. Correo electrónico: edarizab@unal.edu.co.

45
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

1. Introducción 2. La relación contabilidad-naturaleza:


Un proceso por dilucidar
La contabilidad como constructo social (concep-
tual-instrumental) deviene y se enmarca en el des- El presente acápite constituye una aproximación ten-
envolvimiento y cambio de las relaciones sociales diente a identificar algunos rasgos y ámbitos de la
de producción y distribución, enmarcadas a su vez relación contabilidad-naturaleza, que la bibliografía
en relacionamientos culturales e interacciones con contable anterior a 1960 pasó casi de manera des-
la naturaleza. En tal sentido la contabilidad asume apercibida. Su conocimiento nos puede enriquecer y
caracteres específicos según sea incidida pero a su precisar el sentido que tal relacionamiento (contabili-
vez logre incidir el carácter general de cada forma- dad-naturaleza) tomó desde los años 70 del siglo XX,
ción social. Tal capacidad ha sido denominada por y su factible re-direccionamiento.
algunos colegas como el “poder constitutivo de la
contabilidad” (Larrinaga, 1997). 2.1 Cualitativo: el feudalismo del valor de uso
y la relación contabilidad-naturaleza
La dinámica de los años ochenta inter-subjetivizó la
denominada problemática medioambiental que des- La contabilidad feudal, inmersa en el contrato de
bordó los ámbitos medioambientales biofísicos, para servidumbre, centraba su función controladora en el
adquirir matices políticos, económicos y culturales y correcto reparto del producto agrario. Por ello su con-
transitó a ámbitos disciplinares biofísicos-bioquími- ceptualización, su representación y dimensionalidad
cos, políticos, jurídicos, administrativos, económicos, expresaba cualidades-atributos de los objetos y de
educativos, artísticos, filosóficos y morales entre los acuerdos susceptibles de ser referidos en valores
otros. de uso socialmente predominantes. Esta contabilidad
no estaba exenta de la expresión monetaria e incluso
El presente trabajo aborda algunos de los énfasis su utilización para homogenizar la consolidación de
más significativos mediante los cuales el poder cons- los informes feudales se presentaba, especialmente
titutivo de la contabilidad, es permeado por la so- en el momento de consolidarse. No obstante esen-
cietización de la problemática medioambiental. La cialmente la perspectiva y sentido de la contabilidad
misma que, simultáneamente, transmite a diversos feudal giro entorno al valor de uso.
actores sociales, a procesos naturales, a relaciones
humanas-naturaleza, su perspectiva y racionalidad Gramos, centímetros, días, u otros atributos social-
controladora medioambiental. mente significativos, fueron objeto de expresión con-
table. Podemos inferir que el “poder constitutivo” de
Dos son los objetivos de documento, en primer lugar, la contabilidad feudal descansaba en su expresión
pretende aportar una perspectiva histórica al proce- de valor de uso y la fuerza de los indicadores que
so conformador del poder constitutivo de la conta- expresaban la eficiencia y honradez de los procesos
bilidad medio ambiental. En segundo lugar, precisar acorde con la relación insumo-producto (p.e, de una
las luces y sombras que la contabilidad ambiental arroba de trigo, qué tantos panes de libra debía en-
proyecta sobre la sociedad. tregar el panadero).

Este abordaje de las luces y sombras de la conta- La relación conceptual de la contabilidad con la na-
bilidad ambiental se empeña en precisar la confor- turaleza estuvo siempre mediada por la prevalencia
mación del poder constitutivo de la contabilidad sobrenatural que hizo de la humanidad y la natura-
ambiental contemporáneamente, resaltando la con- leza, seres dependientes cuya existencia se justifica-
tradicción en la que se enmarca, en tanto aportes ba como pregoneros y exponentes de esa voluntad
y deudas, certeza-incertidumbre; en fin vida-muerte sobrenatural.
y de un nuevo mundo, que sin poder renunciar to-
talmente a lo que ha sido inexorablemente, ha de Una naturaleza divinizada subyació a la perspectiva
pretender ser diferente. cultural que con motivo de fiestas religiosas estruc-

46
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

turó entorno a la fertilidad de la tierra a calidad del en la prevalencia del capital sobre el trabajo y la na-
agua (San Isidro labrador) senderos de cercanía e turaleza, en el relacionamiento social acorde con la
identidad entre la vivencia humana y la natural. De lógica del mercado.
esta manera, partimos de reconocer que “Son las re-
laciones sociales y las políticas las que determinan El nuevo “prometeo” plantea el reto de auto consti-
la forma física de la producción” (Gómez & Posada, tuirse y construir un mundo a su medida e ingenio,
2003). por ello la naturaleza deviene en objeto a descubrir
y dominar. De tal manera que “Los hombres única-
En el ámbito, del feudo como institución, el poder mente en la medida en que viven bajo el mandato
del señor Feudal fraguó un sentido funcional pragmá- de la razón, hacen forzoso lo que es bueno para la
tico a la relación producción-distribución de la natu- naturaleza humana” (Gómez & Posada; 2003).
raleza. La contabilidad, en tal contexto, adoptó los
insumos culturales prevalecientes anteriormente El motor inicial de tal revolución gravitó en la diná-
mencionados y en su función controladora. Adoptó mica del comercio internacional-nacional cuyo rela-
el valor de uso como expresión dimensionadora de cionamiento con la naturaleza se tornaba funcional
la relación social de la producción–distribución de al objetivo de lucro, independiente de la ciudad, de
servidumbre, acorde con valores morales y religiosos la mercancía, del bien agrícola, con que se negociará.
tales como la lealtad, la obediencia, la honradez, en Esto es, que independientemente del valor de uso,
una significación de la naturaleza como un insumo al comerciante le interesaba operar con el valor de
satisfactor de necesidades. cambio, por la vía de su incremento. Los filósofos, los
juristas, los literatos, los teólogos conceptualizaron al
La relación siervo (productor) con el señor estaba respecto, construyendo las bases del método induc-
mediada por servidores (mayordomos-conserjes). En tivo-objetivo que mediante abstracción, encontraba
tal relacionamiento, la contabilidad operaba como los factores comunes de los diversos atributos inhe-
medio para rendir cuentas, para descargar responsa- rentes a la diversidad y complejidad de los objetos y
bilidades y presentada a su superior inmediato, en un procesos, consolidando una expresión de “la ciencia”
fluir simbólico de la cuenta como cosa, que dimensio- que encontraba los principios básicos de la dinámica
naba tiempos, especialidades, insumos, productos y de los objetos de estudio. La hipótesis adelantaba
desempeños. En tal orden la naturaleza devenía fun- tal relacionamiento y el ensayo de laboratorio cons-
cionalmente como insumo o como producto y, como tataba mediante modelización y dimensionalidad lo
tal, dimensionaba a de uno de sus atributos que lo justo o inadecuado del supuesto hipotético.
caracterizaba o que expresaba su uso social.
Para el comerciante y su interés protagónico, cons-
La cuenta cosa y sus indicadores del relacionamiento tructor del ámbito social básico del mercantilismo, el
naturaleza-trabajo, nutrían a la información contable, mercado se constituía en el referente de la construc-
para que, junto con el arreglo institucional (convenio ción del progreso, por la vía de la ampliación de la
de servidumbre) y ciertas valoraciones morales, se inversión inicial. Para ello estuvo acompañado en su
entregará la expresión dimensionada de la naturale- empeño por el Estado, parte del clero (protestante/
za humanizada. católico), parte de la aristocracia y los nuevos forma-
dores de la producción, los trabajadores. De tal ma-
2.2 El énfasis en lo cuantitativo del valor de cambio nera que la actividad mercantil forjó la aparición de
adoptado por la contabilidad en su reencuentro manuales y textos que con el uso de la aritmética
con la naturaleza en la modernidad facilitaron la difusión del léxico y los intereses del co-
merciante.
Inserta en el desencantamiento de la naturaleza y la
sublimación de lo humano, la contabilidad es con- Todo lo anterior incidió para que una de las primeras
frontada a convivir con una transformación natural transformaciones ocurriera en el ámbito de la polí-
y conceptual, que socializó un nuevo orden fincado tica y la jurisprudencia, habilitando a la propiedad

47
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

privada como epicentro de la razón de ser del re- demandó a la contabilidad centrarse en el proceso
lacionamiento social y justificadora del encadena- productivo de la mercancía, a fin de entregarle al ca-
miento de la naturaleza. A la vez se gestó una diná- pitalismo la justificación de un orden social fincado en
mica transformadora, mediante la aceleración de la la creación de nuevo valor, a partir de la sucesión sin
compra-venta de la tierra, promovida por burgueses límites de los periodos contables. La “eternidad de la
y señores, expulsando y excluyendo a siervos y a pe- reproducción ampliada del capital”, la expresa la con-
queños propietarios. tabilidad mediante la sucesión del ciclo contable (ini-
cios-finalizaciones-inicios sin fin), con el ingrediente de
En tal contexto, el poder constitutivo de la contabi- tornarlo un hecho indiscutible de la cotidianidad. En
lidad asimiló el desencantamiento de la naturaleza, este ámbito la contabilidad encontraba a la naturaleza
enfatizando y remozando el carácter funcional de inserta, en sus soportes o referentes sociales (factu-
la naturaleza heredada del feudalismo, pero ahora ras, requisiciones, comprobantes de ingreso y egreso)
claramente anclada en su expresión cuantitativa a la como insumo, como materia prima, como producto, y
propiedad privada, y en tal sentido enfatizó su con- por ende codificada, y expresable en dinero.
sideración de cosa apropiable, acorde a los nuevos
énfasis del contrato de apropiación privado, que del Para la contabilidad del capitalismo industrial la na-
siglo XIV al siglo XVIII expresaron la nueva regula- turaleza no existía como tal, en tanto lo que no se
ción y sentido del relacionamiento social. expresaba en precios de mercado no era un referente
para ella. Se decantaba así el modelo de partida do-
El segundo componente básico de la contabilidad en ble cuyo “poder constitutivo” hizo tangible y asequi-
este periodo fue la ampliación del valor de cambio ble la formalización de la vivencia social reducida a
y de la cobertura y uso, fundado en los precios de la bi-dimensionalidad del valor de cambio adscrito a
mercados, aplicado a bienes muebles e inmuebles la propiedad privada que constituyó la cara y el sello
(la tierra y diversos productos naturales). Así, la an- de la espacialidad y temporalidad del capital.
tigua cuenta expresada como “valor de uso”, mutó
a expresiones del “valor de cambio” y con ello los El poder constitutivo de este modelo radicó en que
énfasis cualitativos, vivenciales que la contabilidad tornó valioso el mecanismo cosificador de la biodi-
feudal expresaba en el relacionamiento naturaleza- versidad, para mutarlo en mercancía (activo), desea-
sociedad, fue reducido a la sola expresión cuantita- ble de obtener, conservar e incrementar, a través de
tiva de la “cosa” objeto de cambio. La naturaleza su principio de dualidad, que simultáneamente liga
es re-significada por la contabilidad como cuasi-mer- el valor de cambio con el valor de uso subsumiendo
cancía, porque aunque no es producida, si puede ser y reduciendo el segundo en el primero y a su vez dar
apropiable y dimensionable. cuenta del tránsito de la propiedad de la mercancía
(uso, tenencia, usufructo, enajenación). Esto fue fac-
En la fase del capitalismo industrial, durante aproxi- tible porque al cosificar la biodiversidad se diluye lo
madamente dos siglos (entre el siglo XVIII y comien- relacional de la vivencia hombre-hombre, hombre-
zos del XX), el modelo patrimonial de contabilidad naturaleza, hombre-biosistema-hombre, enfatizando
fue responsable de entregarle a la sociedad una ima- la unilateralidad de un atributo que como tal se tor-
gen de la arquitectura de la dinámica del capital al na medible, apropiable y en ocasiones reproducible.
interior de la empresa, con sus categorías de activo, Vale la pena resaltar en esta decantación del modelo
pasivo, patrimonio, ingresos, costos gastos, utilida- de partida doble el carácter de cuasi-mercancía del
des, socializados mediante las prácticas de teneduría trabajo y la naturaleza.
de libros y luego los principios de contabilidad, que
constituyeron un entrelazamiento y referente no sólo 2.3 La dinámica expansiva de la contradicción
económico, sino axiológico, cultural y moral. depredación natural – consumismo

La concreción de las categorías Ingresos, Costos, A partir de la segunda década del siglo XX el capi-
gastos, utilidades, en la expresión Y-(C+G) = U, le talismo industrial retomará un impulso y expansión,

48
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

no sólo en el volumen y variedad de mercancías pro- 1964), a partir de la conjunción de sus tres teoremas
ducidas sino en la profundización de la vida urbana, con el principio de dualidad, evidencia que el mode-
teñida de la humarada de altas torres, simbolizantes lo de partida doble ha ganado la fundamentación ló-
del “progreso” conformado en contextos de metrópo- gica y la perspectiva epistémica de simbolizar la crea-
lis depredadoras del ámbito campestre de su habitat ción de valor de cambio, asimilando la sustitución de
y, transformado este último en apéndice proveedor naturaleza y trabajo por capital y viceversa. Lo ante-
de la ciudad originando un desequilibrio espacial en rior se ajusta a las condiciones en las que esto resulte
la relación hombre-naturaleza, en el relacionamiento más rentable, con lo que el poder constitutivo de la
hombre-hombre encubando una geopolítica del re- contabilidad reclamaba cumplir con los cánones de
lacionamiento, sociedad-naturaleza (Norte-Sur). la teoría clásica y neoclásica de la economía, propios
de tal contexto. Con este énfasis sustitutivo la partida
En esta fase, el mundo industrial consumió buena doble expresaba, aunque de manera inadecuada, el
parte de sus recursos naturales, presionando a los primer principio de la termodinámica, nada se des-
países en vías de desarrollo para que por medio de truye, todo se transforma. El modelo expresaba una
la exportación abasteciera a las metrópolis de dichos armonía, merecedora de repetirse infinitamente.
recursos. El norte, poco a poco, se vestía de “traje”
preservador de la naturaleza, mientras el sur profun- 2.4 La consolidación de la capitalización de la
dizaba su comportamiento extractivista. Parte de lo naturaleza en la profundización de la exclusión
anterior es apariencia, pues con el abastecimiento social
por parte del sur, el norte profundizó la depredación
global al incrementar el consumo y originó impactos El cuarto estadio del poder constitutivo de la con-
sobre la naturaleza y la sociedad devastadores. tabilidad ambiental deviene de su desenvolvimiento
en las últimas cuatro décadas ante la erupción de la
La producción de la economía de escala, indexada problemática medio ambiental que desnudo su doble
al incremento salarial, implica la búsqueda incesante adscripción natural y social (a nivel causal y a nivel
de nuevos mercados; la producción en masa gene- resolutorio). La dinámica social y política le asignó al
ra pautas de relacionamiento de las personas con el Estado su intermediación persuasiva y sancionatoria
producto, que van más allá de la satisfacción de las ante la empresa identificada como responsable de
necesidades y que se enfocan en la satisfacción de un porcentaje significativo del malestar ambiental.
los deseos, esta es la base del modelo de consumo
de masas, que con la industrialización se exporta a Un factor de significación societal lo constituyo la
nivel internacional (Ariza, Gómez & León; 2006; estrategia de la globalización que de entrada diag-
2007), (Fernández y Gutiérrez; 1997), mediante las nóstico la problemática medio ambiental como de
políticas de: crédito a particulares, indexación de la espacialidad universal, de largo plazo, y de solución
productividad con la asignación salarial, se incre- a cargo del norte de la mano de la ciencia, la tecno-
mentó el consumo y con ello los impactos sobre la logía y sobre todo de la inversión.
naturaleza, evidenciándose que la perspectiva de de-
sarrollo, como sinónimo de incremento, torna anta- Disciplinalmente el derecho, mediante la regulación
gónico el relacionamiento capital-trabajo-naturaleza. gubernamental de índole pública, como manifesta-
Con lo anterior, en la era fordista el incremento del ción de la regulación con intereses particulares, cobra-
poder adquisitivo del salario exacerbó el consumo rá importancia para la contabilidad pues poco a poco
y los impactos ambientales que ello connotaba. En le asignará responsabilidad informativa y evaluativa
algún momento y lugar del fordismo en los países del comportamiento medio ambiental empresarial.
industriales, la naturaleza empieza a experimentar su
tránsito a mercancía. La economía neoclásica de la mano de Pigou y de
Coase, ante el hecho innegable de las fallas de mer-
La conceptualización epistémica del profesor Mattesi- cado para lidiar con la problemática medioambien-
ch de la teoría general de la contabilidad (Mattessich, tal, pero en su afán de salvar el grueso de su cor-

49
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

pus teórico e ideológico, consideran la problemática Para el anterior fin, lo ambiental se insertó en to-
medioambiental como algo coyuntural y marginal das las políticas de la gestión de la nueva empre-
susceptible de ser incorporado al ámbito del valor sa: dirección económico financiera (evaluar, pagar
de cambio, mediante técnicas de precios sombra, sanciones o invertir en tecnología medio ambiental),
costos contingentes, entre muchos otros instrumen- producción y gestión del medio ambiente hace parte
tos. De esta manera, convierten en estrategias de de la estrategia incrementadora del valor de cam-
apropiación a la naturaleza al darle el empaque de bio(-SGMA-las nuevas tecnologías serán evaluadas
mercancía, proceso al que se denominaría como “la por sistemas de auditoria y verificación ambiental),
internalización de la externalidad medio ambiental”. cultura organizativa y política de recursos humanos
Así se refinó el análisis económico para argumentar (con la implantación de normas medioambientales
la capitalización, la mercantilización abierta de la na- se requiere flexibilidad adaptativa cultural en sus ges-
turaleza y como tal tornarla susceptible de adoptar la tores), políticas de marketing (hacer que los atributos
forma de precios. Por medio de los precios, se busca- ecológicos resulten determinantes en la venta); apa-
ba tener la capacidad de sustituir formas específicas rición de nuevos sectores. Lo ambiental se convier-
de naturaleza, como por ejemplo la de bienes natu- te en opción de nuevas oportunidades de mercado
rales agotables: (formación e información ambiental, certificaciones
y auditorias, tecnología ambiental, círculos de reci-
“El capital hecho por el hombre necesita para su pro- clado, seguros ambientales, y en general diversos
ductividad del capital natural, todo lo que hay que productos y servicios ambientales).
reconocer es que el capital natural consiste en las
existencias físicas que son complementarias al capi- El acrecentamiento del poder y prestigio empresarial
tal hecho por el hombre” (Gómez & Posada; 2003. desborda su incidencia interna, llevándole a intentar
Daly; 1997). societizar un nuevo género de regulación, que tenien-
do un origen privado y persiguiendo unos beneficios
El proceso de capitalización de la naturaleza se en- particulares, quieren fungir como de interés general.
cuentra vinculado a su perspectiva financiarizada Esta regulación de perspectiva y estilo corporativo,
actual, que busca la creación de plusvalías bursátiles no obstante su expresión “voluntaria”, se ha ido so-
(mercados futuros de biodiversidad, reaseguros de breponiendo a la regulación estatal, en tanto que mu-
inversiones de contratos futuros medioambientales). chas de las leyes y decretos gubernamentales contem-
El acrecentamiento del poder económico, político y poráneos provienen del management privado que, a
social de la empresa en este periodo es muy notorio, nombre del tutelaje empresarial, esboza relaciones de
talvez, el de mayor influencia en la contabilidad. “adopción voluntaria” para poder sustituir o incur-
sionar en el mercado. ISO 14.000, con una extensa
La competitividad será el acelerador permanente del parentela de normas previas y posteriores, esboza la
crecimiento del valor de cambio de la mano de la societización del capital corporativo ambiental que
estrategia de calidad total, que le permite a la inclu- desde lo empresarial impactan a la contabilidad (Ari-
sión de las externalidades medioambientales darle el za, Gómez & León, 2007).
tratamiento de capital financiarizado a nivel micro.
Al igual que ocurrió con el surgimiento del mercado En tiempos de la financiarización del capital, es de-
de tierras, la naturaleza se ha convertido en capital cir de la convergencia y monopolización en la gran
sometido a la disciplina de los mercados financieros. corporación con su perspectiva unidimensional, se
Los lagos, los bosques, las costas de los océanos, los convierte todo relacionamiento del hombre y la na-
sistemas biológicos pueden ser ahora activos finan- turaleza en dinero. Ahora con niveles descomunales
cieros y cuando no tienen precios en mercados rea- de ganancias, pero empobrecedor de la biodiversi-
les, se le imputan precios ficticios o valoraciones a el dad y de la dignidad humana en niveles igualmente
aire, el agua, incluso a ecosistemas enteros, convir- descomunales. Todo esto nos lleva a señalar que “A
tiéndolos en parte de los portafolios de una región, pesar de sus apariencias, la producción financiera
de un país (O’connor, 1997). es la mas anti-ecológica de todos los procesos pro-

50
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

ductivos, ya que es la más radical y abstracta de las de la nueva regulación contable que emerge de las
unidimensionalidades de la que es capaz la razón Normas Internacionales de Información Financiera
humana” (Martínez-Echevarría, 1997). – NIIF- y de Contabilidad cuya punta de lanza es
el valor razonable (fair value), atado a la nueva ar-
En la perspectiva neoliberal se ha recrudecido el nú- quitectura financiera, por la que debe transitar la in-
cleo central del problema ecológico: el desarraigo del versión del capital que privilegia la búsqueda de la
hombre respecto de su medio natural que es la co- plusvalía bursátil.
munidad política.
Este operador corporativo de la contabilidad, susten-
La perspectiva del desarrollo sostenible para enfren-
tado en las lógicas de la economía ambiental, de la
tar el problema medioambiental, originado básica-
gestión ambiental y de la nueva “regulación ambien-
mente por la uni-dimensionalidad empresarial, le
tal voluntaria”, está presente en los nuevos campos
apuesta a la tecnología para convertir a la naturaleza
de la contabilidad: financiera, administrativa, de ges-
en dinero y esa mayor composición orgánica de ca-
tión, costos, auditoría, consideraciones educativas y
pital amenazadora de la productividad, ha sido con-
morales, etc.
jurada mediante la denominada elasticidad laboral,
que ha disminuido el poder adquisitivo del salario,
El poder constitutivo de esta contabilidad ambien-
provocando despidos y modalidades de enganche
tal le otorga a lo natural el carácter de “plena mer-
precario, así como afectando las prestaciones socia-
cancía”, vinculada al sentido y alcance de la racio-
les y demás condiciones de bienestar del que se dis-
nalidad del valor de cambio financiarizado. En tal
ponía hasta los años 80.
sentido, los métodos de costeo ambiental, de gestión
La exclusión social afecta a millones de personas tan- ambiental, los análisis de contabilidad administrati-
to del Norte como del Sur, aunque es más dramática vo-ambiental, trabajan para darle una especificidad
en este ultimo. Es la otra cara del malestar medio- y ponderación física, traducible a precios (directa e
ambiental, que torna contradictoria la estrategia im- indirectamente) tranzados en el mercado.
plementada por la empresa a pesar de las significati-
vas utilidades obtenidas en su actividad. Muchas de Con los anteriores elementos se pretende identificar
estas organizaciones siguen empeñadas en despedir el valor agregado que justifica invertir en lo medio-
masivamente a sus trabajadores, originando empo- ambiental vinculándolo al acervo contable tradicio-
brecimiento en la calidad de vida. Es así que: “Desde nal se produce en la actualidad información espe-
el punto de vista de la moderna economía de empre- cífica contable medioambiental de índole financiera
sa, esta es una decisión racional ante modificaciones que hace parte del balance general del Estado de
del sector competitivo y por nuevas leyes. Luego de Resultados, del presupuesto, de informes de costos,
tales decisiones, las acciones de estas empresas expe- entre otros, que a su vez son soporte de las memo-
rimentan alzas. Los inversores esperan que a partir rias medioambientales que pretenden dar a conocer
de estos despidos, la rentabilidad de la empresa me- la políticas, desempeños, e inversiones medioam-
jore” (Martínez-Echevarría, 1997). bientales en que incurre la empresa. Se transmite
entonces una imagen ambiental a la sociedad, sen-
El poder constitutivo de la contabilidad ambiental sibilizando a la opinión pública con una virtualidad
para este periodo deviene de la perspectiva de la medio ambiental, aunque en la realidad lo que se
contabilidad creativa y la adscripción de lo medio- logra es la sostenibilidad del incremento del capital.
ambiental a la impronta de financiarización-capitali-
zación de futuros biodiversos (instrumentos financie- La contabilidad con ello entrega a la sociedad su
ros) y su complemento estratégico del reaseguro de concepto de “medio ambiente capitalizado” y la ins-
la inversión medioambiental. trumentación para tornarlo funcional a la competiti-
vidad y a la calidad total. Esta información persuade
Otro ámbito complementario de este poder cons- al inversor de que “quien contamina no vende”. En
titutivo se expresa en la consolidación corporativa tal contexto, los alcances de la auditoria medio am-

51
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

biental y las memorias empresariales de responsabili- “La generalización del enunciado <<Quien usa los
dad social y ambiental se enmarcan en las exigencias recursos paga>> supone que se deban evaluar las
de la legislación gubernamental y en la adscripción inversiones en términos de: Cálculo del punto ópti-
de la gestión ambiental a la política ambiental instau- mo de rentabilidad, evaluando entre pagar sancio-
rada por la empresa. nes o invertir en tecnología limpia…. En todo caso la
empresa debe implantar un sistema de gestión don-
de la medición de sus costes y los de las alternativas
3. Luces y sombras de la contabilidad tecnológicas resulte posible, de modo que conozca
ambiental contemporánea con exactitud su función de costos marginales y pue-
de calcular el estado óptimo” (Baneglil, 1997).
En este acápite se señala el avance contradictorio
que connota el desenvolvimiento de la contabilidad Con este nivel de conceptualización la contabilidad
ambiental desde 1970, caracterizado por la incorpo- ambiental financiera entrega a la sociedad la estruc-
ración mercantilizada de la naturaleza y por la invisi- tura e imagen de la relación con la naturaleza vía
bilización del problema básico que amenaza la sus- insumo-producto (p.e. en el Estado de Resultados),
tentabilidad de la biodiversidad y su eco-existencia de derechos y obligaciones (p.e. en el Balance Gene-
con la humanidad. ral). Incluso podría elaborarse al respecto Balances
Generales y Estados de Resultados medioambien-
3.1 Los avances de la contabilidad ambiental tales, específicos, haciendo más nítida la imagen
medioambiental como sinónimo de capital y de su
El poder constitutivo de la contabilidad, a nivel mi- lógica de crecimiento ilimitado.
cro-organizacional, incide a nivel macro en la concep-
ción e insumos que soportan los ajustes a las cuentas Este énfasis permea la bibliografía predominante,
nacionales y al patrimonio natural, impulsada por las entre la que se puede destacar, la elaborada por
Naciones Unidas. asociaciones corporativizadas que ejercen gran in-
fluencia académica y profesional, como la Asocia-
A finales del siglo XX y comienzos del siglo XXI la ción Española de Contabilidad y Administración de
contabilidad ambiental ha conceptualizado la natu- Empresas – AECA–. La influencia de la AECA en
raleza como insumos susceptibles de capitalizar, al España, América Latina e incluso en la Comunidad
igual que las inversiones en tecnología y servicios ne- Económica Europea, en asuntos económicos, políti-
cesarios para descontaminar y prevenir los impactos cos, culturales y contables es bastante significativa.
contaminantes, acompañándose en tal empeño de Veamos como concibe tal organismo la contabilidad
procedimientos y técnicas viabilizadoras de la con- ambiental:
cepción de calidad total ”necesarias” para la com-
petitividad. En dicho sentido se definen activos am- “La contabilidad financiera medio ambiental debe-
bientales, inversiones ambientales, costos ambienta- ría reflejar principalmente en las cuentas anuales,
les e ingresos ambientales. En la misma perspectiva, los bienes, derechos y obligaciones relacionadas con
pero en sentido inverso, es decir como “descapitali- la protección del medio ambiente (balance), y los
zaciones financieras”, serán consideradas las indem- gastos e ingresos derivados de la gestión medioam-
nizaciones que por infracciones o compensaciones biental (cuentas de pérdidas y ganancias)” (AECA,
medioambientales deba cubrir la empresa, originan- 1996).
do los pasivos y gastos medio ambientales.
Este énfasis de la “contabilidad ambiental financiera”
El saldo neto de la inversión ambiental que propug- impregna los otros ámbitos de la “contabilidad am-
na la perspectiva contable debe ser positivo (incre- biental”. La perspectiva de costos, identifica aspectos
mento de valor de cambio). Ello es lo que justifica y precios de la producción y la gestión ambiental con
incurrir en costos e inversiones ambientales. En este el propósito de valorar adecuadamente los activos y
sentido es claro el siguiente mensaje de: pasivos, así como el neto ambiental. La de gestión

52
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

determina y analiza la información ambiental cuyo portante sobre su expresión regulada corporativa,
uso estratégico y táctico exprese la protección del en- instancias tales como la ONU, la Comunidad Eco-
torno natural en el que opera la organización (con- nómica Europea, ISO 14000 y varios reguladores
cienciación de la inclusión de externalidades como nacionales e internacionales.
costos privados) lo que incidirá en los precios de sus
productos y en el de los inventarios. Por su parte la La regulación ambiental específica de los aspectos
contabilidad ambiental de dirección estratégica debe contables, constituye una de las expresiones más in-
captar e interpretar información suficiente, relevante fluyentes sobre el particular, en tanto expresa el sen-
y oportuna para apoyar “con criterios medioambien- tido que el poder corporativo quiere transmitirle a
tales, la selección de estrategias producto/mercado, la sociedad que la empresa esta dispuesta a cumplir
la determinación de inversiones, la planificación, la dándole a entender al consumidor y a la comunidad
ejecución y el control estratégico de las decisiones que con ello la problemática ambiental marcha “bajo
empresariales” (Bañegil, 1997). control”.

Este último ítem, así como los precedentes, tornan el Se pretende enfatizar los avances de la contabilidad
dato ambiental contable en información eficaz. Permi- ambiental corporativizada dado su incidencia en el
tiéndonos constatar que en la actual contabilidad am- tejido cultural, centrando la atención en parte de su
biental la capitalización de la naturaleza es un factor im- expresión regulada, la cual tuvo inicios promisorios
portante, otorgando a su poder constitutivo la posibili- en la declaración de Río, que torno público el uso
dad de convertir lo natural en capital. Su modelo torna de la información contable medio ambiental, y reto-
panorámica la forma de aislar a la naturaleza concre- mada por la Comunidad Económica Europea en la
tándola en insumo y mercancía. Con ello se palpa que Directiva 90/313.
si la dinámica de mercado convirtió a la naturaleza en
capital, la contabilidad construye la imagen de la senda El V programa de la Comunidad Europea de Acción
mediante la cual la naturaleza “crea capital”. en materia medio ambiental hacia un desarrollo sos-
tenible, estableció:
Para corroborar lo antes señalado el Reglamento
1836/93 del consejo de la Unión Europea define la • Que la contabilidad debía mantener o mejo-
auditoría medioambiental como un instrumento de rar la consciencia empresarial sobre cuestiones
gestión destinado a la protección del medio ambien- medioambientales.
te y que tiene por objeto: • Asegurarse de que todos los gastos y riesgos
medioambientales son tenidos en cuenta.
a) Facilitar el control, por parte de la dirección, de • Facilitar la función contable de rendición de
las prácticas que puedan tener efectos sobre el cuentas sobre cuestiones medioambientales.
medio ambiente.
b) Evaluar su adecuación a las políticas medioam- Y a las empresas las responsabiliza de:
bientales de la empresa, dependiendo del grado
de compromiso que la empresa quiere abordar • Revelar en sus informes anuales el detalle de
con su política medioambiental. Con tal pers- sus políticas y actividades medioambientales y
pectiva, la profesión contable hizo su arribo a la de sus efectos.
problemática medioambiental y pudo contribuir • Revelar en sus estados contables los gastos de
a la implementación del que contamina paga, sus programas medioambientales.
constituyéndose en un referente conscientizador • Provisionar contablemente los riesgos medio-
de las responsabilidades ambientales inicial- ambientales, así como los futuros gastos medio-
mente societizadas como adecuadas. ambientales.

En la paulatina confección del poder constitutivo El esquema comunitario de gestión medioambiental


contable de lo ambiental, ha jugado un papel im- EMAS de aplicación voluntaria, estableció en el Foro

53
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

Consultivo de Contabilidad, así como en algunas hecha ley o “logo voluntario” defiende los intereses
adaptaciones sectoriales del Plan General de Conta- particulares y omnímodos del inversor corporativi-
bilidad, en España, los siguientes considerandos. Las zado. Ello, a la vez, convierte al ciudadano en con-
condiciones necesarias para la inserción empresarial sumidor verde en el mejor de los casos, con poder
en el marco EMAS, postula la necesidad de publicar de veto, pero excluido de la deliberación en torno al
periódicamente, cada dos años, la denominada me- problema ambiental.
moria medioambiental, si la empresa desea obtener
una certificación de adscripción a EMAS. Los ele-
mentos mínimos a incluir en dicha memoria son: 3.2 Las sombras de lo ambiental contable

• Descripción de la actividad de la empresa en el Es necesario reconocer los avances disciplinares e


centro considerado. instrumentales aportados por la contabilidad y la au-
• Valoración de los problemas medio ambientales ditoria medio ambiental por forjar un sentido, una
más significativos. perspectiva, una representación del relacionamiento
• Resumen de datos cuantitativos sobre los aspec- sociedad-naturaleza, que pondera como mejor y úni-
tos ambientales más significativos. ca opción su tratamiento como capital (valor finan-
• El programa, la política y el sistema medio am- ciarizado). Así como la importancia que han desem-
biental implantado por la empresa. peñado sobre el particular. No obstante lo anterior,
• El nombre del verificador medioambiental acre- es necesario hacer un llamado a ampliar tal punto
ditado que ha evaluado el sistema de gestión y de vista por lo limitado e inconveniente que para la
la declaración. sociedad y la naturaleza resulta tal autismo sensorial,
intelectual, cultural y disciplinal, exhibido por la con-
Con la extensión y especificación a sectores indus- tabilidad y auditoria ambiental corporativizada.
triales se vienen ganando más presencia e incidencia
de la contabilidad medio ambiental, máxime si ello A partir de lo señalado precedentemente, se puede
recae en sectores de tanta relevancia medioambien- inferir que las sombras del poder constitutivo de la
tal y económica como el sector eléctrico, agrícola, el contabilidad ambiental las podemos caracterizar en
cementero, el siderúrgico, entre otros. dos temporalidades, aunque estén ancladas en raí-
ces emparentadas o al menos coincidentes.
Cada vez es más notorio el hecho de que en las regu-
laciones nacionales (leyes, decretos, circulares, etc.) La primera temporalidad, partiendo del tránsito de
se expresen el sentido y el alcance de la regulación la contabilidad feudal a la contabilidad mercantil, en
internacional, impregnadas a su vez por la impron- la relación específica contabilidad-naturaleza, dejó
ta empresarial, que le da nuevas connotaciones a de hacer referencia al ámbito socio-contextual que
lo público, buscando garantizar la estabilidad de la fraguaba unas relaciones con la naturaleza. Tales re-
inversión internacional, y que resulta siendo una ex- laciones permitían a la valoración de uso contable,
presión de la nueva impronta ambiental empresarial dar cuenta de vivencias y valoraciones socio-contex-
según la cual “el que contamina no vende”. tuales, diferentes a las ponderaciones económicas
propiamente dichas. La importancia de esta omisión
Esta impronta del marketing verde corporativo, cada radica en que para la contabilidad, a través de sus
día, cobra más significación por medio de los de- informes e incidencia en la sociedad, la naturaleza
nominados sellos verdes y en la ISO 14000. Tales como relacionamiento social y referencia general
instrumentos hacen que la naturaleza y el problema dejó de existir. Lo anterior estará acompañado por la
medio ambiental exuden tecnología y plusvalía fi- homogenización y la unilateralización que del mun-
nanciera y financiarizada. do efectuó la contabilidad apalancada en el valor
de cambio. A partir de este momento su intimidad
De esta manera, en aras del derecho de inclusión al con el dinero será su fortaleza y simultáneamente su
libre mercado, la regulación corporizada ambiental “talón de Aquiles”.

54
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

El modelo de partida doble, decantado hacia co- tal al tratamiento de las denominadas externalidades
mienzos del siglo XIX, con sus convenciones de consideradas como novedades coyunturales de la
entidad, causación, empresa en marcha, unidad de dinámica del mercado. En tal devenir la contabilidad
medida (la moneda), el periodo de tiempo, si bien ambiental “cosifica” la naturaleza, dándole el trata-
constituyeron un medio de realce de la contabilidad miento de mercancía susceptible de ser reemplazada
y un modo de posicionarse socialmente, expresando por capital, con la impronta que justifica invertir en
la lógica e interés del capital, también es cierto que ella, si aporta directa o indirectamente nuevo valor
marcaron los límites de lo que en tales circunstan- de cambio. De esta manera el sentido que emerge
cias podía abarcar, de lo que podía interpretar, así de la contabilidad ambiental, en última instancia es
como la forma de expresarlo. Por ello, en la etapa el de preservación de la reproducción ampliada del
industrial, el marco referencial preexistente sólo re- capital.
quirió el refinamiento de la contabilidad de costos;
en ella el trabajo y las materias primas (de índole El otro aspecto sombrío de la contabilidad ambien-
agrícola) fungirán como insumos en su carácter de tal en este periodo, muy relacionado con el anterior,
cuasi-mercancías. Ello era factible porque al enfatizar pero que es adecuado tratarlo por separado, radica
en la <<cosa>> insumo, la biodiversidad se diluye, en que el marco de la partida doble adscribe al inte-
las relaciones hombre-hombre, hombre-naturaleza rés propietario empresarial con su énfasis de interlo-
y hombre-naturaleza-hombre, se cosifican. Por ello cución unidimensional y de expansión tecnológica,
el agotamiento de la naturaleza no fue un referente la incidencia medioambiental reducida a insumo
para la contabilidad en el siglo XVIII al XIX, así como productivo la naturaleza acotando los impactos a
tampoco lo fue la penuria de los trabajadores. ámbitos internos a la organización. A la vez, basada
en estándares de mínimos que no dejan de conta-
La segunda temporalidad de la penumbra, o som- minar y haciendo que en última instancia lo que la
bras de lo contable medioambiental, se desenvuel- contabilidad informa es un costo de cumplir con el
ve aproximadamente en las cuatro últimas décadas estándar. De esta manera la contabilidad ambiental
del siglo XX y los inicios del siglo XXI. A la fecha, no da cuenta ni del factor relacional sociedad-natura-
hay serias evidencias que mucho de la problemáti- leza, ni del amplio espectro de la biodiversidad; por
ca medioambiental no ha sido referenciado como tanto no comunica el riesgo que implica degradar la
información a ser transformada en dato contable, base natural para imponer el operar omnímodo del
en contabilidad ambiental no hay preocupación por capital, y con ello condenar a la extinción porcentual
atender este requerimiento social. significativa de la fauna, la flora, los minerales, etc.

La problemática medioambiental tornó a la natura- La otra arista de este tópico es el énfasis de insumo
leza como un referente complejo y sistémico nece- dado al trabajo que, sometido a la elasticidad labo-
sario de ser “comunicado” en su integridad. Asun- ral, experimentó la depredación económica y socio
to complejo para cualquier disciplina, más para la contextual que visualizado por la contabilidad como
contabilidad sembrada en la lógica interpretativa costo a abatir en la competitividad internacional, se
unidimensional del valor de cambio, y refractaria a expresa en despidos de trabajadores, que connotan
la biodiversidad, a la multiculturalidad, a la interdis- enormes pérdidas socio-culturales, económicas, para
ciplinariedad. Esto constituye un problema difícil de el estado nacional. Así pues, el producto de la con-
aprehender y resolver. La interlocución alcanzada tabilidad ambiental y su dictamen evaluativo, resulta
por la contabilidad, en el mejor de los casos, es re- diagnosticando y evaluando la garantía y salud de
formista, centrada en nuevas formas, no en nuevas la sostenibilidad del capital, no de la situación del
perspectivas, no en nuevas relaciones. problema medioambiental.

De la mano de la economía, de la economía de em- A partir de las dos temporalidades y de sus compo-
presa, de la nueva regulación corporativizada, reduci- nentes, se puede inferir que la adscripción de la con-
mos lo complejo del actual problema medioambien- tabilidad a los intereses y perspectivas conceptuales

55
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

del comerciante, el empresario, el socio-propietario, ello requiere tenerse muy presente que tal cambio no
el inversor, entre otros, dotó a la contabilidad de un es un esfuerzo individual, voluntarista, que emerja
carácter instrumental a todo lo largo y ancho de la del insumo de la contabilidad única y exclusivamen-
modernidad. Mediante adaptaciones sucesivas, este te, sino que debe identificar en los nuevos sentires
proceso le permite a la contabilidad, mediante ex- sociales y en otras disciplinas, los cimientos que am-
presiones de formas diferentes, conservar la visión plíen las perspectivas, los haceres de la contabilidad
de un mundo de valor de cambio, un sentido de medio ambiental.
crecimiento ilimitado y su punto de vista de enmar-
carse en la espacialidad y temporalidad de la propie- La contabilidad no se informa del nuevo potencial,
dad privada por excelencia como lo es la empresa y de la nueva racionalidad productiva que implica la
como lo reza la partida doble. inconmensurabilidad, que hace de la información
contable sustentable un proceso-sistema complejo,
La cosificación y unilateralidad de todo cuanto caiga integrado por procesos ecológicos, tecnológicos y
en el espectro de la partida doble es simultáneamen- culturales de distintos órdenes de materialidad, con
te la fortaleza y debilidad del poder constitutivo de la diferentes especialidades, temporalidades y significa-
contabilidad en la modernidad y de la contabilidad ciones, todos los cuales implican diferentes formas
ambiental en la contemporaneidad. de valorar.

En su evolución disciplinal ha imperado el significar La inconmensurabilidad podría ser asimilada como


la moda del <<status quo>>, de la mano del avan- principio epistémico y político que romperá con el
ce material y conceptual del poder dominante, por orden homogenizante dominante, incluyendo enfo-
ello ha sido catalogado como un saber estratégico y ques críticos, en tanto que variables de la biodiver-
es que sus logros más significativos en este periodo sidad ecológica y variadas formas energéticas que
se dieron de la mano de los cambios políticos y eco- no son adecuadamente expresadas por valores de
nómicos promovidos por las clases altas. cambio. Esto implica escapar a la lógica del merca-
do y la propiedad privada para que la contabilidad
Por lo anteriormente expuesto el cuerpo de teoría pueda navegar y comunicar en la perspectiva de la
contable dominante, básicamente no ha implemen- inconmensurabilidad, prestando mucha atención
tado puntos de vista críticos al sistema imperante. De a los sentidos y proyectos del nuevo agente social
esta manera, compartimos lo expresado por algunos constructor de la diversidad y de alternatividad. Ese
colegas que adjetivan las prácticas contables medio actor social que debe ser reinterpretado en valores
ambientales, como usos por parte de las organiza- como los de equidad social, diversidad cultural y sus-
ciones para capturar el debate ecológico y legitimar- tentabilidad ecológica. El estudio y la enseñanza de
se (Puxty (1968); Tinker et al (1991); De Fuentes la contabilidad deberá enfatizar más en el ciudadano
(1993); Larrinaga (1997),(1999). público, que en el cliente inversor.

Es decir, el poder constitutivo de la contabilidad am- Con ello la contabilidad ambiental como el “ave fé-
biental implica mucho de “ser en sí”, es decir, ser un nix” se revivificará para expresar principios variados
saber estratégico de otros. Al respecto como límites de la valorización de la naturaleza, acordes con los
de la actual contabilidad ambiental se señala basarse nuevos sentidos movilizadores de la sociedad, y en
en conceptos de: “…propiedad privada…en contra- consonancia con nuevos relacionamientos con los
tos explícitos en términos de derecho, obligaciones procesos productivos.
o beneficio...hechos vistos desde la perspectiva del
“hombre económico” (Muñoz, 1997), Lo cual recla- La contabilidad ambiental no se reduce a una me-
ma que desde el deber ser disciplinal en la perspec- dida de masa y energía, ni a un cálculo cuantitativo
tiva del poder constitutivo de la contabilidad como del valor-trabajo. A más ha de involucrar el sentido
“saber para si”, ella, la contabilidad ambiental, debe de la diversidad (cultural-ecológica) para pensar la
superar su adscripción exclusiva al status quo. Para eco-tecnología sostenible, que le permita orientarse

56
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

para modelar un balance entre “la formación nege- denciar que estamos inmersos en uso depredador
entrópica de biomasa a través de la fotosíntesis y la cada vez más significativo de nuestra base trófica.
producción de entropía generada por la transforma-
ción de materia y energía”. La economía ecológica invita a transitar no sólo res-
petando la termodinámica, si no también la perspec-
La contabilidad no debe seguir siendo autista ante el tiva ecológica (ciencia de los vínculos intersistémicos)
grave problema de injusticia que encierra el discurso para lograr un adecuado equilibrio entre los ecosis-
dominante del desarrollo sostenible, que hasta la fe- temas naturales y los sistemas organizativos sociales.
cha le da un sentido moral estrecho a la contabilidad Para lo cual se debe tener en cuenta que su sosteni-
ambiental tradicional. Este cambio de perspectiva bilidad depende de la posibilidad de abastecerse de
implica relacionar a su racionalidad controladora un recursos y deshacerse de residuos, así como de su
énfasis para evaluar las improntas de la solidaridad capacidad para controlar las pérdidas de su calidad.
intrageneracional, relacionando así mismo la distri- Todo ello depende de la configuración y comporta-
bución de costos ecológicos con el acceso de grupos mientos de los sistemas socio-naturales que pautan
sociales excluidos a los recursos del planeta. el desenvolvimiento general.

La visión de “final de tubería” e incluso las técnicas


4. En busca de nuevos referentes más consistentes en el relacionamiento energía-ma-
teria al interior y en contextos vecinos a la empresa,
Los multitudinarios encuentros ambientalistas alter- solo pueden ser sostenibles parcial y limitadamente;
nos a las conferencias oficiales e institucionales del a largo plazo y en contextos ampliados. Tal visión es
desarrollo sostenible, así como las dinámicas de los fuente de contaminación de agotamiento de recur-
proyectos y movimientos campesinos, indígenas y de sos y de discriminación social incluso en sus elabo-
sectores populares, invitan a la academia a identificar raciones más sofisticadas; la “fortaleza” y el “astro-
rumbos diferentes al relacionamiento Norte-Sur en nauta” desnudan los límites y precariedades de la
donde lo ambiental juega un papel significativo. Algu- teoría del desarrollo sostenible (O`Connor, 1997).
nas disciplinas venían trabajando la problemática am- Las dos visiones se tornan complementarias en la
biental y ello ha provocado este encuentro de diná- identificación de los límites espaciales y temporales
mica social y reflexión conceptual. De tal dinámica se del sistema capitalista y su estrategia técnica des-
retomaran algunos enunciados que se considera que contaminadora y tecno reguladora corporativizada
podrán incidir en la futura contabilidad ambiental. que preserva para el norte geográfico y político el
“progreso y bienestar” (crecimiento del patrimonio
4.1 La economía ecológica financiero).

Considera vital insertar la dinámica económica de- El eslogan <<pensar globalmente, actuar local-
terminada por los procesos más generales de la na- mente>> no es sólo la expresión capitalizada de
turaleza, teniendo en cuenta las tres leyes básicas de la naturaleza de la corporación post-fordista, sino
la termodinámica. Esto, dado que la finitud material la reducción del desarrollo sostenible a dimensio-
del planeta y la renovación energética solar, originan nes economicistas y tecnológicas. Ello materializa
un continuo en donde la materia no se destruye ni la imposición de la tecnoregión sobre la bio-región
evidencia creación sino solo se transforma, acompa- diluyendo con ello el sentido político y social que, a
ñada de un cambio cualitativo energético de poten- nivel de discurso, entonó la perspectiva Brudtland,
cial uso a usada. buscando adormecer la consciencia de cambio que
desde el sur se viene promoviendo; un cambio más
Ello nos obliga a reflexionar sobre la imprecisión profundo del relacionamiento social-político-intrage-
conceptual de la economía ortodoxa y su teoría del neracional, intranacional, intracontinental, a nivel de
crecimiento ilimitado del capital (PIB), que crea la los diversos grados de organización social y de estos
ficción de un posible consumismo ilimitado, sin evi- con la naturaleza.

57
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

Diversos tipos de tecnologías duras y blandas como su existir y razón de ser, corresponde a lo disciplinal
equipos descontaminadores, normas reguladoras (la descubrir e inventar su lógica y legalidad cognitiva.
familia ISO 14.000) y diversas expresiones de conta-
bilidad ambiental corporativizada, no son otra cosa A la cabeza de tal esfuerzo interdisciplinar esta la eco-
que la imposición “negociada” de la concepción de logía política revestida de justicia y moral que tornan
la naturaleza capitalizada que la empresa corpora- indispensable la ingerencia de la democracia y ac-
tivizada-financiarizada pretende extender a los con- tuación del partícipe (sociedad civil), reconociendo
sumidores tanto en el Norte como en el Sur. Esta es las dinámicas propias de la naturaleza.
una vía indispensable para enfrentar el problema que
Leff caracteriza: El principio de inconmensurabilidad indica que no
pueden existir precios “ecológicamente correctos”,
“La problemática de la producción, la redistribución sino tan solo precios ecológicamente corregidos,
y la equidad, resultante de la presión sobre recur- por indicadores y normas ecológicas (Martínez Alier;
sos escasos de una población creciente y su desigual 1995). Por ello debemos reconocer que: “Las in-
impacto ambiental, vienen logrando naturalizar los fluencias culturales, sociales e institucionales en la
límites del crecimiento, cuando en realidad derivan valorización de las externalidades no se correspon-
del principio de escasez de la economía, en tanto el den con ningún balance contable de costo beneficio,
agotamiento y alteración ambiental, no son genera- ni es posible asignar tasas de descuento para actua-
dos por la naturaleza, sino determinados por formas lizar preferencia y valorizaciones futuras de las gene-
sociales y patrones tecnológicos de apropiación y raciones” (Leff; 2002).
explotación económica de la naturaleza. La raciona-
lidad intrínseca del crecimiento (capital) destruye las 4.3 La ecología política como estrategia
condiciones ecológicas y culturales de la sustentabili- de cambio
dad al crecer el consumo” (Leff; 2002).
En realidad la justicia ambiental no descansa en va-
4.2 La ecología natural vs. la ecología política lores estrictamente económicos, ni solamente ecoló-
gicos, que identifiquen costos y sentidos movilizado-
La ecología biológica, la visión sistémica en con- res en su defensa. Mas bien, tal sentido de justicia
junción con la ecología humana, enriquecida por se debe basar en la formación y consolidación de
la diversidad y pluralidad sociocultural de la multi- estados de consciencia colectiva, que permiten el
globalidad en la perspectiva glocal, sugiere que la emerger de nuevos actores sociales que idean accio-
ecología debe profundizar su análisis en torno al nes políticas permitiendo desplegar formas de poder
potencial auto organizativo de la naturaleza y la pro- alternos, enfrentados al poder neoliberal dominante.
ductividad primaria de los ecosistemas. El potencial Esto ya que lo que subyace a los conflictos de distri-
neguentrópico de biomasa y de biodiversidad de bución ecológica son estrategias de poder en torno
los ecosistemas, logran concebir las propiedades de al programa prevalente y al alterno. Debemos ir más
conservación y degradación de la materia, concilian- allá de la inconmensurabilidad neo-económica, arti-
do lo diverso de nuestro planeta con la segunda ley culando nuevos movimientos sociales que se relacio-
de la termodinámica. La fotosíntesis ilustra la forma nan con la defensa del ambiente y los recursos natu-
en que la naturaleza transforma la energía y la bio- rales en su lucha por la democracia, la autonomía y
masa y que recupera energía ya usada en biomasa la autogestión.
y nuevo uso.
La categoría de racionalidad ambiental, internaliza
Las comunidades indígenas, las afrocaribeñas y la he- la inconmensurabilidad de los procesos que la cons-
terogeneidad racial y cultural del “rebusque” de todo tituyen (potencial eco-tecnológico, diversidad étnica,
el planeta, vienen reconstruyendo y reivindicando el diversidad cultural). En tal sentido, corresponde asimi-
desarrollo sustentable. Son variadísimas las formas larla como un principio epistemológico y político, rom-
que desde el sentir e interés local ganan día a día piendo con el orden homogenizante dominante. Esto

58
LUCES Y SOMBRAS EN EL “PODER CONSTITUTIVO DE LA CONTABILIDAD AMBIENTAL”

torna necesario el emerger de un nuevo programa de d) El modelo de partida doble hizo valioso el me-
desarrollo sustentable, enmarcado en nuevos princi- canismo cosificador de la biodiversidad para
pios de valorización de la naturaleza, nuevas estrategias mutarlo en mercancía (activo-costo) deseable
de reapropiación de los procesos productivos y nuevos de obtener, a través de su principio de duali-
sentidos que movilicen y reorganicen la sociedad. dad, que simultáneamente liga el valor de uso
con el de cambio, subsumiendo y reduciendo
el primero en el segundo. Simultáneamente, al
5. Conclusiones poner el acento en el tránsito (transacción) de la
propiedad de la mercancía (naturaleza-trabajo),
Con la presente aproximación al poder constitutivo diluyó lo relacional, lo cultural, lo ecológico del
de la contabilidad ambiental retomamos parte de la relacionamiento hombre-hombre, humanidad-
referencia bibliográfica elaborada tozudamente por naturaleza, hombre-naturaleza-hombre. Para
algunos colegas que consideramos no han recibido ello unilateralizó la importancia de un atributo
la difusión ni la discusión que tales aportes mere- que, como tal, se tornó supuestamente reprodu-
cen, lo que propicia que siga imperando el <<status cible y/o apropiable y medible.
quo>>.
Es necesario reconocer que la contabilidad ambiental
A modo de reflexión final se pueden inferir las si- es un campo en formación. A pesar de que las con-
guientes consideraciones: diciones imperantes nos puedan conducir al escepti-
cismo paralizante, finalmente este documento invita
a) La interacción contabilidad-ambiente (natura- a reflexionar, teniendo presente que la racionalidad
leza-sociedad), constructora del poder consti- contable como núcleo del poder constitutivo de la
tutivo, no es tan nueva como comúnmente la contabilidad no es la única que construye sociedad,
percibimos. Ella deviene de tiempo atrás así sea sí aporta y sí incide en el cambio social. Para lograr-
inconscientemente o, digámoslo de forma más lo, talvez lo más adecuado sea instalarse en la orilla
benévolamente, en el subconsciente. de los que construyen cambio, con ello se comparte
la perspectiva de Enrique Leff (2003) cuando señala
b) El tránsito del valor de uso (cuenta-cosa), colo- que “es en el contexto de la base comunitaria y en el
quialmente enriquecida por la axiología feudal, nivel local de donde emergen los principios de la sus-
al valor de cambio (cuenta-dinero), implicó un tentabilidad, con sus sentidos de potencial producti-
enriquecimiento de la abstracción contable pues vo, diversidad cultural y participación social”.
permitió homogeneizar a través del dinero lo di-
verso de la naturaleza en el marco de la lógi-
ca del mercado. Esto simultáneamente implicó 6. Referencias
un empobrecimiento al detener-desterrar de su
modelo el ámbito no mercantil de existencia de AECA. (1996). Contabilidad de Gestión Medioambiental. Docu-
la naturaleza. mento número 13. Madrid.

c) La fuerza del modelo de contabilidad por par- Ariza, D & León, F & Gómez M. (2006). “Una aproximación a
los perfiles ambientales de la empresa”. En: Innovar, revista
tida doble, con su representación del mundo de ciencias sociales y administrativas. No 28. Facultad de
reducida a la uni-dimensionalidad del valor de Ciencias Económicas. Universidad Nacional de Colombia.
cambio adscrito a la propiedad privada, son Bogotá (pp. 57-74).
constitutivos del sello y la cara de la espacialidad Ariza, D & León, F & Gómez M. (2007) ¿Es viable la ISO 14000 para
y temporalidad y que en su conceptualización el contexto colombiano?: una aproximación a partir de análisis
de entidad destierra lo bio-diverso de la natura- de casos. Revista de la Facultad de Ciencias Económicas de la
leza a externalidad no significativa; adscrito a su Universidad Militar Nueva Granada, (XV)1, P 183-198.
perspectiva de naturaleza al interés y perspecti- Bañegil, T. (1997). “La empresa como solución”. En: Sociedad y
va que tuviese la empresa. Medioambiente. Editorial Trotta. Madrid (pp. 103-127).

59
EFRÉN DANILO ARIZA BUENAVENTURA

Daly, H, (2002). Economía Para el Bien Común. Fondo de Cultura pañola de Financiación y contabilidad Vol XXVI. No 93. oct.
Económica. México. – dic. (pp. 957-991).

De Fuentes, P. (1993). “Legitimación y contabilidad medioam- Leff, E. (2002). Saber Ambiental. Sostenibilidad, racionalidad,
biental”. Revista Española de Financiación y contabilidad. complejidad, poder. Siglo XXI editores. PNUMA. Serie am-
Numero monográfico sobre contabilidad y medioambiente, biente y democracia. México.
Vol. XXIII No.75, abril- junio, (pp. 317-332). Martinez, J & Schlüpmann, K. (1995). La ecología y la Economía.
Fondo de Cultura Económica. Bogotá. Colombia.
Fernández, K & Gutiérrez, J. (1997). “Consumo y medioambien-
te”. En: Sociedad y Medioambiente. Editorial Trotta. Madrid. Martinez-Echevarría y Ortega, M. (1997). “La empresa como pro-
blema ecológico”. En: Sociedad y Medioambiente. Editorial
Gómez, G & Luís, J & Posada, L & Luís, G. (2003). Cambios Trotta. Madrid.
en las Relaciones Economía – Naturaleza (Desde la Grecia
Mattessich, R. (1964). Edición Argentina – 2002 -. Contabilidad y
antigua hasta nuestros días). Editorial Universidad Nacional
Métodos Analíticos. Editorial La Ley. Buenos Aires.
de Colombia. Medellín.
O´Connor, James. (1997). “¿Qué es la historia ecológica?, ¿por
Larrinaga, C. (1997). “Consideraciones en Torno a la relación qué la historia ecológica?”. En: Ecología Política, No 14 (pp.
entre la Contabilidad y el Medio Ambiente”. En: Revista Es- 115-130).

60

También podría gustarte