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Cuando la superficie de captura equivalente de una estructura cubre completamente otra

estructura, esta última no se tendrá en cuenta. Si se cubre la superficie de captura de varias


estructuras, la superficie de captura común correspondiente se considera como una única
superficie de captura.
La topografía del lugar y los objetos situados en el interior de una distancia 3H a la
estructura influyen de forma significativa en su superficie de captura. Este factor se tiene en
cuenta a través del coeficiente Ce (ver tabla 1.3).

Tabla 1.3. Determinación del factor Ce

Frecuencia aceptable de impacto de rayos sobre una estructura


Los valores de frecuencia aceptable de rayos se estiman a través del análisis del riesgo de
daños teniendo en cuenta los factores apropiados, tales como:
 El tipo de construcción.
 El contenido de la estructura.
 La ocupación de la estructura.
 La consecuencia sobre el entorno.

Dicho valor se obtiene según la siguiente expresión:

[1.10]
Donde:
C ---- Factor que toma en cuenta los cuatro elementos anteriormente mencionados.
Nc --- Frecuencia aceptable de impacto de rayos sobre la estructura.

[1.11]

Donde:
C1---- Factor que toma en cuenta el tipo de material de la instalación, ver tabla 2.4.
C2 --- Factor que considera la naturaleza del contenido de la instalación en cuanto a
su grado de inflamabilidad, ver tabla 2.5.
C3 --- Factor que toma en cuenta la ocupabilidad de la instalación, ver tabla 2.6.
C4 --- Factor que considera las consecuencias sobre el entorno, ver tabla 2.7.

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Tabla 1.4 Factor que toma en cuenta el tipo de material de la instalación, C 1

Tabla 1.5 Factor que considera la naturaleza del contenido de la instalación, C 2

Tabla 1.6 Factor que toma en cuenta la ocupabilidad de la instalación, C 3

Tabla 1.7 Factor que considera las consecuencias sobre el entorno, C 4

Selección del nivel de protección


Antes de pasar a determinar el nivel de protección es necesario evaluar si se requiere o no
implementar un sistema de protección contra las descargas atmosféricas.

Para la selección final del nivel de protección es necesario determinar el valor de eficiencia
del sistema requerido:

[1.12]

Donde:
E ---- Valor de eficiencia del sistema de protección requerido por la instalación.
160
En la tabla se muestran los diferentes niveles de protección en dependencia de los
valores de E.

Tabla 1.8 Nivel de protección requerido en función del valor de E

1-5 Situación de ocurrencia de DEA en Cuba

Fig 1-13 Comportamiento de la DEA en Cuba

EFECTO EN EL SISTEMA ELECTRICO


En Cuba esa importancia es singular por dos
aspectos:
• Número promedio anual de días tormentas
(Td) : el Td mínimo es 40 (4.02 rayos/km2/ año),
el máximo es 140 (19.2 rayos/km2/año) y el
promedio anual es 100 (12.7 rayos/km 2/año).
Estos valores se encuentran entre los más altos
reportados en la región caribeña y en el ámbito
internacional.
El rayo y sus efectos ...

Como se puede apreciar por la lámina anterior y la presentada al comienzo de este trabajo,
el número de descargas en la superficie terrestre es extremadamente alto y ésta es una de
las causas para considerarlo un fenómeno importante, en América Latina en general, se
considera que estos valores son relativamente altos, por lo que es importante tenerlos en
consideración.
El rayo puede alcanzar temperaturas de 30 000 grados Celsius, temperatura cuatro veces
superior a la temperatura del sol, el diámetro de una descarga del rayo puede estimarse en
unos pocos centímetros y su longitud de descarga vertical puede alcanzar de 5 a 7 Km y de
8 a 16 Km las descargas horizontales, el voltaje entre tierra y nube puede llegar a cientos de
millones de voltios.

1.6 Descargas eléctricas atmosféricas múltiples


Aunque quizás no se razone, es un fenómeno que puede percibirse a través del breve
parpadeo que acompaña a las descargas eléctricas atmosféricas, del 75 al 80 % de las

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descargas tienen más de un impacto y se les denomina descargas múltiples o descargas
sucesivas. La lámina presentada a continuación de la ICE así lo demuestra, las descargas
sucesivas pueden ser un número indefinido que oscila normalmente entre 0 a 3 descargas
hasta inclusive 30 descargas. Las descargas de retorno que aparecen dibujadas, se
representan con el color rojo, para significar que son las de más alto poder, por ser
precisamente la tierra el mayor portador de estas cargas negativas.

Fig 1-14

BASE DE LA NUBE

70 40 2 30 1
20 ms µs ms ms ms ms

LÍDER LÍDER
DARDO DARDO
2 a 3
km

DESCARGA DESCARGA
RETORNO RETORNO

TERRENO
TIEMPO

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Capítulo 2

SISTEMAS DE PROTECCIÓN CONTRA LAS DESCARGAS ELÉCTRICAS


ATMOSFÉRICAS

2-1 Introducción. El descubrimiento por Benjamín Franklin de que las descargas eléctricas
atmosféricas tendían a escoger como puntos de descargas las zonas más elevadas y
punzantes y que era factible encausarlas hasta la masa terrestre evitando el daño a las
persona o animales que estuviesen bajo su radio de protección, para lograrlo es famosa la
anécdota de que empinó un papalote con un hilo metálico en momentos de inminentes
descargas por condiciones de tormenta y logró que a través del mismo se realizara una
descarga probando su teoría. A partir de entonces, se concibió el famoso pararrayo Franklin
que hoy en día a variado sólo en la calidad de los componentes y sus formas, pero el
principio básico, se ha mantenido incólume.
Como es lógico estudios posteriores con el apoyo de novedosos medios técnicos han
logrado profundizar en esta teoría y ya en los últimos años obligados por la necesidad de
protección de la tecnología digital, se han realizado estudios de variantes de pararrayos que
dejaron de ser pasivos para convertirse en activos o de cebado u otras variantes que
otorgan a los mismos condiciones especiales, aunque discrepadas mundialmente.

MÉTODOS PARA LA UBICACIÓN DE LOS CAPTADORES PASIVOS

Los métodos para la ubicación de los sistemas pasivos son los siguientes:

 Método de la esfera rodante


 Método del ángulo de protección
 Método de la malla

MÉTODO DE LA ESFERA RODANTE


Consiste en hacer rodar una esfera, de radio R, sobre la estructura a proteger,
considerándose como protegidos aquellos puntos que se encuentran en la zona definida por
la superficie de la esfera y la superficie exterior de dicha estructura. Los puntos en que la
esfera toca a las diferentes partes de la estructura y el suelo son susceptibles de ser
alcanzadas por las descargas.
La esfera rodante es un corolario del método electrogeométrico. El cual fue concebido para
el diseño de la protección contra impacto directo del rayo en líneas y torres de transmisión
(para laubicación de los cables de guarda).

163
A pesar de ser un método aproximado, es el más exacto hasta la actualidad para la
ubicación de los sistemas de captura pasivos o convencionales.

El radio R se define como:

Donde:

I: Valor mínimo de la corriente del rayo para cada nivel de protección (kA).
R: Valor del radio de la esfera rodante correspondiente a la corriente mínima del rayo para
cada nivel de protección (m).

Valores mínimos de la corriente del rayo y radios de la


esfera rodante para cada nivel de protección.

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Profundidad de penetración
Como se muestra en la figura siguiente la profundidad de penetración es la distancia p que
penetra la esfera por debajo del punto de contacto de la misma con un grupo de puntas o
cables tendidos. Para que una configuración de captura pasiva garantice la protección
adecuada, la parte inferior de la esfera no puede tocar la superficie a proteger, o lo que es lo
mismo p < x.
Queda entonces determinado que las mallas de Faraday, no pueden colocarse sobre las
cubiertas, sino que deben estar separadas de las mismas y que su altura de separación
depende de la relación entre de p y x.

Las expresiones 1 y 2 establecen la relación entre la profundidad de penetración (p) y la


distancia de separación entre puntas o lados de una malla (d). La primera se utiliza para el
cálculo de p en función de d y R, y la segunda para el cálculo de d en función de p y R.

Expresión No1

165
Expresión No2

Donde:

p: Profundidad de penetración.
R: Radio de la esfera rodante.
d: Distancia entre dos puntas o hilos paralelos.

Las figuras a) y b) muestran las dos variantes más comunes, reflejando como la distancia
d puede ser la diagonal en caso de un arreglo rectangular de puntas o la longitud del lado
más corto en caso de una malla.

Arreglo para 4 puntas Arreglo para un malla o cable tendido

166
La tabla que se muestra a continuación muestra para diferentes separaciones la profundidad
de penetración por niveles de protección.

Profundidades de penetración para diferentes distancias de separación entre


puntas.

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Método del ángulo de Protección

Ha existido por mucho tiempo ciertas discrepancias en cuanto al radio de protección de un


Pararrayo Franklin. Se recomienda guiarnos por los datos que aportan las siguientes curvas
de la IEC de la figura 2-4, que nos muestran como el ángulo de protección varía con la altura

Espacio protegido por una punta captadora en


función del nivel de protección
El ángulo  depende del nivel de
protección y de la altura de la punta

(°)

h   80
70
60
50
40
30
20
Nivel de I II III IV
10
protección
0
0 10 20 30 40 50 60
h (m)
ENV 61024-1 : Anexo B, Tabla 3
Fig. 2-4 S1189 1189.ppt / 02.02.98 / ESC

Se observa, como los valores que en etapas anteriores hemos usado considerando sólo el
nivel de protección y fijando 45 0 para el primer nivle y 60 0 para el segundo nivel, son sólo
casos particulares. Lo que sucede es que estos ángulos coinciden con las alturas que
normalmente tiene asignadas estas puntas en la mayoría de los inmuebles, por ejemplo,
para una altura de unos 10 metros (muy común), la punta tiene un ángulo de protección con
respecto a la vertical de 45 grados para I Nivel y 60 grados para II Nivel, pero para alturas
superiores eso no se cumple.

Cualquier otra relación entre la altura y el nivel de protección para definir el ángulo a usar se
puede obtener por esta vía. La figura a continuación define la cobertura de protección de
una punta, sólo que no se le pone valor al ángulo por la variación que sufre ante diferentes
condiciones.

Fig. 2-5

168
Cobertura protección de una punta Franklin

h
E
E

DIN V ENV 61024-1 (VDE V 0185 Teil 100) 1996-08: Abschnitt 2.1.2, Tabelle 3
S1179 1179.ppt / 02.02.98 / ESC

2-3 Método de la Malla o Jaula de Faraday y los ángulos de protección asociados

Es conocido que la forma de la que mejor se protege del efecto de un campo magnético es
estando dentro de una Jaula de Faraday, si se considera la malla, se observa que los
objetos que estén bajo ella se encontrarán protegidos por un principio semejante. Las
cuadrículas de la malla son las que varían de tamaño, siendo menores a medida que el nivel
de protección es más exigente, las cuadrículas de 5 metros están relacionadas con el primer
nivel de protección, la dos figuras expuestas brindan los datos para el tamaño de las
cuadrículas en dependencia del Nivel de protección, el lugar geométrico que abarca su radio
de protección y la efectividad que ofrece, además facilita los radios de la esfera iso -
geométrica para cada nivel.
Fig. 2-6

Determinación del dispositivo captador (Malla)


en función del nivel de protección
Nivel de Esfera Angulo de protección Dimensiones Efectividad
protección Iso- ( ) de malla
geométrica ) 80
r (m) 70
60
I 20 50 5x5 98 %
40
II 30 30 10 x 10 95 %
20
I II III IV
III 45 10 15 x 15 90 %
0
IV 60 0 10 20 30 40 50 60 20 x 20 80 %
h(m)

h: Altura del dispostivo captador sobre


r el nivel del suelo
h
 r: Radio de la esfera isogeométrica
 :Angulo de protección
Espacio protegido
Lit.: ENV 61024-1: 1995-01. 1 + 3
S1151 1151.ppt / 23.01.98 / CG

En esta gráfica se muestra que las Jaulas de Faraday no sólo protegen lo que está
exactamente debajo de ella, sino que de forma perimetral existe un ángulo de protección de
la envolvente que depende de la altura y el nivel de protección que se requiera.

169
Volumen protegido por una malla captadora

 depende de la altura y del nivel de protección

   
h

Vista en planta
ENV 61024-1 : Anexo B
Fig. 2-7 S1184 1184.ppt / 23.01.98 / ESC

CAPTADORES EN LOS LATERALES DE ESTRUCTURAS ALTAS


Se utilizan para proteger la parte superior de las estructuras mayores de 60m de altura y los
equipos instalados en ésta, donde pueden ocurrir descargas en los laterales, especialmente
en las puntas, esquinas y bordes de las superficies.
Se plantea en estos casos que el 20 % superior de la altura de la estructura debe llevar
protección, como se muestra en la figura, debiéndose trabajar con la arquitectura en el la
simulación de esa malla y esos bajantes a través de artificios estéticos.

170
Se necesita además para estos casos, que los bajantes de pararrayos hacia la masa
terrestre, ubicados a distanciamientos según la tabla 2-1 que se muestra posteriormente y
que establece las distancias según el nivel de protección, en todo el perímetro deberán
además ser unificados entre si, o sea unidos perimetralmente, formando así una
prolongación de la malla para formar un revestimiento Faraday de la edificación.
Erróneamente se piensa que edificaciones altas brindan protección a todo lo circundante,
cuando en realidad si no se toman estas medidas mencionadas, puede no estar protegida ni
la misma estructura contra impactos laterales.

Cuando un pararrayo está sobre la cubierta este tendrá él ángulo de protección alfa de las
figuras 2-6 y 2-4., acorde a la altura efectiva de la punta del pararrayo con respecto a dicha
cubierta, ya que la cubierta en este caso se considerará una extensión del suelo. Los
pararrayos de colocados en los bordes tendrá un cono irregular, cuyo ángulo será hacia la
cubierta el correspondiente a esa altura y hacia el suelo uno mucho más cerrado, referido a
la altura de la punta hasta el suelo, lo cual se aprecia en la figura a continuación mostrada.
Este criterio es algo muy importante a tener en consideración, a la hora de replantearnos un
conjunto de pararrayos para la protección de una determinada instalación. Para poder tener
una claridad bien estructurada del lugar geométrico protegido, debemos hacer un replanteo
en elevación y en planta de los conos de protección de cada uno, tal y como se muestra en
la figura.

171
Para el uso de sistemas de captación aislados a través de mástiles, se debe tener en
consideración el lugar geométrico que son capaces de proteger, proyectando sus ángulos
según las curvas dadas, y refiriendo como ya dijimos la cubierta del objeto a proteger como
una extensión del suelo y por lo tanto representativo de una altura mucho menor y un ángulo
diferente, tal y como se aprecia en la Figura A a continuación mostrada.

Existe una diferencia cuando el lugar geométrico definido por los mástiles está provisto del
hilo de guarda entre mástiles, donde varía la forma del lugar geométrico. En la figura
superior se observa semejante criterio, pero para un objeto suficientemente largo, y este
ejemplo a continuación mostrado, en la figura B, es relativo a un objeto de menor dimensión
donde los conos de protección de los mástiles llegan a interactuar entre ellos

Usando dos mástiles aislados y el método del ángulo de protección Figura A

172
Dos mástiles aislados interconectados por un conductor horizontal Figura B

2-2 El pararrayo Franklin Convencional.

173
Figura 2-1 Partes de un pararrayo

Un sistema de pararrayo esta compuesto por los siguientes elementos (ver figura 2.1).

1. Pararrayo o cabezal captador: Es el elemento encargado de captar la descarga, en


dependencia de su tipo, así será denominado el sistema (Punta Franklin, capacitivo,
radioactivo u otro). Se acopla al mástil asegurando un correcto contacto eléctrico con el
bajante.
2. Mástil: Elemento alargable y adaptable para lograr la altura necesaria al cabezal captador
y así cubrir el radio de acción de la zona a proteger. Deberá estar correctamente colocado o
empotrado mediante 2 ó 3 anclajes según su longitud y así ofrecer una adecuada rigidez al
sistema.
3. Bajante: Es el elemento conductor destinado a encaminar la corriente del rayo desde el
cabezal captador hasta la toma de tierra. Podrá ser de tipo pletina, trenza plana, cable
trenzado o redondo, y la sección mínima ha de ser de 50 mm 2.
Cada pararrayo deberá tener al menos un bajante. En caso de que la instalación tenga más
de 28 m de altura o ésta sea menor que la proyección media de la edificación, se deberán
utilizar dos bajantes, lo cual se explica gráficamente en la figura siguiente:

Figura 2-2 Número de bajantes por pararrayo

174
Para el caso de los pararrayos activos se suele usar el criterio expuesto a
continuación

El trazado del bajante debe ser lo más rectilíneo posible utilizando el camino o trazado más
corto, evitando acodamientos bruscos o remontes. Los radios de curvatura no serán
inferiores a 20 cm ( Fig. 2-3). La trayectoria del bajante debe ser elegida de forma que evite
el cruce o proximidad con líneas eléctricas o de señales.

Figura 2-3

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