Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Walker La Guerra de Nicaragua PDF
Walker La Guerra de Nicaragua PDF
Colección
Rueda del Tiempo
WILLIAM WALKER
LA GUERRA
DE NICARAGUA
Traducción de Ricardo Femández Guardia
EDITORIAL UNIVERSITARIA
CENTROAMERICANA (EDUCA)
Primera edición
Imprenta Maria v. de Unes
San Jo~, Costa Rica, 1924.
Segunda edición
Editorial Universitaria Centroamericana
San Jo~, Costa Rica, 1970.
" Para Walker, hombre del sur, los yanquis eran los del norte de
los Estados Unidos, los abolicionistas.
G El reputado escritor norteamericano Richard Harding Davls dice
sobre esto en la revista neoyorquina "Collier's" del b de octu-
bre de 1906:
12 WILLlAM WALKER
'W. 'W.
PREFACIO
1 de marzo de 1860.
CAPiTULO 1
hecho basta por si solo para probar que las ideas co-
munes sobre esta expedición son falsas; y como varios
de los que estuvieron con el coronel Walker en la Baja
California tomaron parte en los sucesos de Nicaragua,
no está por demás investigar los móviles a que obede-
cieron en su primera empresa, móviles tan mal enten-
didos por el pueblo americano.
Cuando salieron aquellos hombres de Calilornia se
proponian llegar a Sonora, y el ser tan pocos los deci-
dió a desembarcar en La Paz. Obligados por este mo-
tivo a hacer de la Baja Calilornia un campo de opera-
ciones hasta poder reunir bastante gente para penetrar
en Sonora, la necesidad de quedarse en la Peninsula
les deparó una organización polltica. La intención de
su jele era establecer tan pronto como le luera posible
una colonia militar --<¡ue no habla de ser necesaria-
mente hostil a México- en la frontera de Sonora, pa-
ra proteger a este Estado contra los apaches. La pri-
mera idea del establecimiento de esa colonia nació en
Auburn, condado de Placer, California, a principios de
1852. Algunas personas contribuyeron alli para enviar
dos agentes a Guaymas a lin de obtener una conce-
sión de tierras cerca de la vieja ciudad de Arispe, a
cambio de resguardar la frontera contra los indios. Es-
tos agentes, uno de los cuales era Mr. Frederlc Emory,
llegaron a Sonora cuando el conde Raousset de Boul-
bon acababa de comprometerse a establecer varios cen-
tenares de franceses cerca de la mina de Arlzona, y
el gobierno del Estado de Sonora esperaba que los fran-
ceses hiciesen el trabajo que los americanos querlan
emprender. De suerte que Mr. Emory y su compañero
fracasaron en su proyecto, y como el conde de Boul-
bon llegó poco tiempo después a Sonora, el plan de
Auburn fue abandonado. El gobierno de Arista, o más
bien Individuos a él pertenecientes, se pusieron a hos-
tilizar a Raousset de Boulbon por hallarse interesados
en un reclamo relativo a la mina cuyo laboreo habla
LA GUERRA DE NICARAGUA 25
a En castellano en el texto.
LA GUERRA DE NICARAGUA 67
La administración de Rivas
• En castellano en el texto.
LA GUERRA DE NICARAGUA 159
• cSquatter sovereigns:t.
LA GUERRA DE NICARAGUA 165
La invasión costarricense
I En castellano en el texto.
T Idem.
LA GUERRA DE NICARAGUA 185
8 En castellano en el texto.
e Esta tropa se componla de 200 hombres. N. del T.
10 Eran en realidad 1.500 hombres. N. del T.
lA GUERRA DE NICARAGUA 189
18 Hay buenas razones para creer que las bajas de Walker su·
peraron al m1mero de 120 consignado aqul. El mismo dice
que salló de Granada con 550 hombres y, segl1n testimonios
fidedignos de la época, regresó con sólo 300. N. del T.
LA GUERRA DE NICARAGUA 199
mar que todo estaba tranquilo del otro lado del lago.
Valle, gobernador militar de Segovia, pronto dispersó
a los legitimistas que trataron de hacer un movimiento
cerca de Somoto Grande; a la vez, Mariano Salazar,
enviado por el gobierno a Matagalpa en calidad de
comisionado, pacificó a los indios de aquel distrito, re-
gresando luego a León con su tropa. De manera que
en pocas semanas fueron restablecidos el orden y la
tranquilidad en toda la República y el gobierno pro-
visional era obedecido en toda ella.
En el departamento Meridional hubo que hacer
algunos escarmientos con legitimistas que vinieron del
Guanacaste con los costarricenses para invadir a la
República. Uno dé los principales fue el de Francisco
Ugarte, que habia sido casado con una hermana de
la mujer del Dr. Cole. El general en jefe supo que
Ugarte Se habla quedado en el departamento después
de la partida del enemigo, y un piquete enviado en su
busca lo encontró y lo tra/'o al cuartel general. Fue
juzgado por un tribunal mi itar que lo condenó a mo-
rir ahorcado. Por ser esta forma de castigo para tales
delitos desusada en el pais -se echaba mano del fu-
silamiento en vez de la horca-, la ejecución de Ugarte
impresionó profundamente al pueblo, inspirando un
miedo saludable a la justicia americana entre los cons-
piradores legitimistas. Como entre Ugarte y sus deu-
dos habla habido algunas cuestiones relativas a la Iu-
toria de sus hijos, asi como tocante a la administra-
ción de los bienes de su esposa, la generalidad de las
gentes del pais atribuyó el arresto del criminal a in-
formes dados por su cuñado el Dr. Cole; y el hecho de
haber prevalecido esta sospecha, indica que no extra-
ñaban que la adhesión a un partido o la supuesta
devoción al interés público, sirviesen de careta para
saciar odios de familia o pasiones personales.
Durante dos o tres semanas después de haber par-
tido Cañas de Rivas, el grueso de la tropa ameriea-
LA GUERRA DE NICARAGUA 207
La defección de Rivas
, Salllng 'oller.
LA GUERRA DE NICARAGUA 223
La Administración de Walker
USe decreta:
"Articulo l"-Todos los actos y decretos de la
Asamblea Federal Constituyente, lo mismo que del
Congreso Federal, se declaran nulos y de ningún valor.
"Articulo 2"-Ninguna de las disposiciones aqui
contenidas podrá afectar los derechos poseidos hasta el
dia en virtud de los actos y decretos que por el pre-
sen te quedan derogados".
Uno de los primeros actos de la Asamblea Fede-
ral Constituyente fue la abolición de la esclavitud en
Centro América, y como ese acto quedó derogado, en-
tre otros, por cl decreto del 22 de setiembre, se supuso
generalmente que éste restableció la esclavitud en Ni-
caragua. Cabe dudar que tal deducción sea estricta-
mente legal; JY.'ro la derogatoria de la prohibición abria
claramente las pu·"tas a la introducción de la escla-
vitud. La mente y el propósito del decreto eran cla-
ros; tampoco pretendió su autor disimular el objeto que
se propuso al emitirlo. Por l"Ste decreto debe ,"uzgarse
la administración de Walker, porque es la e ave de
toda su politica. En realidad. la cordura o la insensatez
de este decreto implican la cordura o la insen-
S8tCZ del movimiento americano de Nicaragua; porque
del restablecimiento de la esclavitud africana depen-
dio la estabilidad de la raza blanca en el pais. Si no
era juicioso el decreto llamado de la esclavitud, Caba-
ñas y Jerez estaban en lo cierto al querer servirse de
los americanos tan sólo para levantar una facción y
derrocar a otra. Sin una mano de obra como la que
proporcionaba esa ley, los americanos sólo habrían po-
dido hacer en Centro América el papel de la guardia
pretoriana en Roma o de los jenízaros en el Oriente,
y para prestar servicio tan degradante estaban mal pre-
parados por las costumbres y tradiciones de su raza.
La diferencia entre el sistema colonial de las Co-
ronas de Inglaterra y de España explica los resultados
248 WILlIAM WALKER
1 Conviene tal vez decir que estos párrafos fueron escritos antes
de que Mr. Seward pronunciase en el senado su discurso ma-
gistral del 29 de febrero de 1860. Por mucho que se pueda
disentir de las opiniones del senador, es Imposible no aprobar
la robustez y el vigor de los pensamientos y del lenguaje. El
autor estima que los hombres del Sur cometen un error al
tratar de deprimir el talento o de menospreciar las intencio-
nes de los jefes del partido antlesclavista. Cuanto más grande
sea su talento y cuanto más puras sus intenciones, tanto más
peligrosos resultan para el Sur. N. del A.
256 WllLlAM WAlKER
4 En castellano en el texto.
288 WILLlAM WALKER
La retirada de Granada
tiempo que Grier fue atacado por detrás, una gran fuer-
za le acometió de frente; de modo que paralizados por
este asalto simultáneo, así como por el número de los
enemigos, los americanos fueron casi todos muertos,
heridos o hechos prisioneros sin gran lucha. La dife-
rente conducta que observaron éstos antes y después
de la deserción de Tejada, es buena prueba del acierto
de la sentencia del gran capitán, citada tan a menu-
do: "En la guerra, la reladón entre lo moral y lo fi-
siro es de tres auno".
El 27 Henningsen sacó a sus heridos de la iglesia
parroquial y la dificultad que hubo pora dar princi-
pio a esta tarea pone de manifiesto la falta de incli-
nación de su gente a toda faena que no fuese la de
pelear. Algunos de los negros de Jamaica que habian
estado trabajando en el vapor del lago y que se co-
gieron por casl,alidad en la población, se utilizaron en
los trabajos de fuerza; los presos de la cárcel tampoco
resultaron del todo inútiles. Después de sacar a los
heridos, se pusieron algunas libras de pólvora en mal
estado debajo de una de las torres de la iglesia y se
dio fuego a todas las casas que quedaban en la plaza
mayor. Al salir de ésta los americanos, el enemigo
trató de acosarlos, pero lo contuvieron unos pocos
rmeros desde las torres de la iglesia hasta que Henning-
sen estuvo listo para retirarse. Una vez todo prepa-
rado, los americanos abandonaron la plaza; al empren-
der la retirada encendieron con un fósforo un reguero
de pólvora que iba hasta la mina colocada debajo de
la iglesia. El fuego llegó a la pólvora, volando al aire
la torre en el momento preciso en que la muchedum-
bre enemiga, demasiado impaciente, penetraba en la
plaza por cuya posesión había luchado tanto.
La ciudad estaba ya casi enteramente destruida
y después de reunir toda su fuerza, Henningsen re-
solvió hacer una nueva tentativa contra la iglesia de
Guadalupe. Ya podia contar con sescnta hombres ap-
312 WIlLlAM WALKER
• En castellano en el texto.
LA GUERRA DE NICARAGUA 327
11 "Border rufflans".
LA GUERRA DE NICARAGUA 345
La defensa de Rivas
2 Walker exagera de tal modo las bajas sufridas por los Aliados,
que las hace llegar a una cifra más o menos Igual al total
de las fuerzas centroamericanas reunidas en Nicaragua.
N. del T.
356 WILlIAM WALKER
13 En espai'ioJ en el texto.
J4 En su versión castellana de la obra de Walker, Carnevalini
pone aqul la siguiente nota:
"Falso. los leoneses peleaban con la misma decisión que las
demás tropas. Muchos quedaron en los campos de batalla y
varios de sus jefes mereclan ascensos y menciones honorlficas
pOr su arrojo. (Nota del Traductor)".
El historiador Montúfar reproduce esta nota a la página 941
de su obra Walker en Centro América; pero por un error
Inexplicable le suprime la palabra "Falso" y le pone al final:
"(Nota de Walker)" en vez de "(Nota del Traductor)".
Extraviado por este error de Montúfar, don Manuel Carazo
Peralta Insertó la misma nota, como si fuera de Walker, en
su traducción de la Historia de los Filibusteros de James Jef-
frev Roche. N. del T.
396 WILLlAM WALKER
Martes 28 de abril:
y lucgo:
"El capitán Oavis visitó el campo dc los Aliados
con el propósito de hacer un tratado entre éstos y el
general Walker".
Capitulo 1
El .Vesta. y sus pasajeros
La revolución de 1854.-organizac16n del gobierno provislo-
nal.-Motlvos de la contlenda.-las dos constltuclones.-
Demócratas y legitlmlstas.-51tlo de Granada.-Retirada de
Jerel.-Muerte de Chamorro.-la polftica de Honduras '1 la
de Guatemala.-la expedición a la Baja California.-Sus
objetos y prop6sitos.-Su termlnaclón.-Contratas de Cole
con CasteIl6n.-EI contrato de Crabb con Jerez.-Legalidad
de la concesión olorgada a Cole para colonlzar.-Fletamento
del cVesta•.-Dificultades con que tropieza el barco y su
salida flnai.-Su vlaJe.-SltuacI6n de los partidos polltlcos
en junio de 1855.-Llegada del .Vesta. a El Realejo.-Oe-
sembarco de los pasajeros.-Visita de Walker a Le6n.-tas-
tellón y Munoz.-La Falange amerlcana.-Su organlzación.-
La expedición a Rlvas 19
Capítulo 11
Rivas, 29 de junio de 1855
Preparativos para la expedición a Rivas.-Soldados del pals.
Ramfrez y Mariano Méndez.-Máxlmo Esplnosa.-Sallda de
El Realejo.-Desembarque en El Glgante.-Oiflcultades du·
rante la marcha.-Aspecto del campamento.-Escaramuza en
Tola.-La marcha de Tola a Rivas.-ImpresI6n que a los
americanos causa el palsaje.-EI plan de ataque.--Combate
411> WILLlAM WALKER
Capitulo III
La Virgen, 3 de setiembre de 1855
Descontento de los amrrlcanos.-Venta del cVestaJo.-Mar-
cha de Muftoz a Segovla.-Movimlentos de Guardiola.-Pla-
nes de Walker para volver a Rlvas.-José Maria Valle.-Su
amistad con los amerlcanos.-Informes acerca del enemlgo.-
Salida de Chlnandega.-Desesperaclón de las gentes.-EI
cólera.-Valle a bordo del cVesta•.-Zozobra de Cast.eIl6n.-
Combate del Sauce.-Muerte a Mul'toz.-Sallda por mar para
San Juan del Sur.-lIegada a San Juan.-Parker H.
French.-Fuerzas comparadas de los demócratas y le9ltimls~
tas en el departamento Merldlonal.~mbate en La Vlr-
gen.-Buen comportamiento de los naturales del pals.-
Resultado del combate.-El nuevo dlrector.-$e Impone una
contribucl6n.-Fuentes de las rentas pílbllcas.-Oon Gua-
dalupe Sáenz.-Rumores sobre el avance de Corral.-Em-
bascada en el camino del Tránslto.-Cartas Interceptadas.-
Corral dispuesto a tratar acerca de la paz.-lIegada de
Gllman.-Reorganlzaclón de la Falange 77
Capitulo IV
Granada, 13 de octubre de 1855
Hornsby se apodera del vapor ela Vlrgen•.-los demócratas
se embarcan para Granada.-Desembarcan al norte de la
LA GUERRA DE NICARAGUA 417
Capitulo V
La administración de Rivas
la palltlca de Rivas.-Los nombramientos que ~ste hace.-
Conducta del c1ero.-EI decreto de colonlzaclón.-uEI NI·
caragOense".-Allstamlentos mllltares.-la Companla Acce-
soria del Tránslto.-Sus mereenarlos.-Klnney '1 sus proyec·
tos.-Negoclaclones con la compaJUa.-Garrison '1 Morgan.-
Conducta de la compaIUa.-Edmund Randolph '1 Parker Crlt-
tenden.-Revocatorla de la concesión otorgada a la compa-
nla.-La justicia '1 la palltlca de este aeto.-la concesión
dada a Randolph.-De qué modo se llevaban americanos a
Nlcaragua.-Epidemla en Granada.-Una circular de Riva5.-
El general Trinidad Cabal\as.-Su influencia sobre Jerez.-
Renuncias de Jerez '1 Selva.--Conducta de los cuatro Esta-
dos de Centro ArMrlca.-Envlo de una comlsl6n a Costa
Rlca.-Polltlca de los Estados Unldos.-Polltlca de la Gran
Bretana.-EI c6nsul británico en El Realejo.-Auxlllo brl.
tánlco a Costa Rlea.-Costa Rica declara la guerra.-Con-
secuencias que esto tiene para el pals 139
418 WILLlAM WALKER
Capitulo VI
La invasión costarricense
Estado de las fuerzas americanas el l' de mayo de 185&.-
Llegada de Golcourla.-EI comnel Padllla.-Proclama del
general en jefe.-Expedlclón al Guanacaste.-Derrota de
Santa Rosa.-Sus consecuenclas.-EI cuartel general en
Rlvas.-EI gobierno se traslada a león.-Arenga dirigida a
los soldados.-e. J. MacDonald.-Golcourfa nombrado Inten-
dente general.-Los americanos en Granada.-Mora en RI-
vas.-Walker marcha sobre Rlvas.~mbate del 11 de
abrll.-Los americanos se retiran.-Resultados del comba-
te.~ombate del Saraplqul.-Nombramlento del padre VlglI
para ministro en Washlngton.-Epldemla en Granada.-
Hornsby llega con reclutas.-EI cólera en Rlvas.-Abatlmlen-
to de los costarrlcenses.-Mora sale de Nlcaragua.-tarta
de Caftas.-EI cólera en Costa Rica.-Expedlción a Chon-
tales.-Ejecuclón de Ugarte.-Efectos de la flebre.-DlfI-
cultades con que tropiezan los amerlcanos.-lo que pasaba
en Le6n 171
Capitulo VII
La defección de Rivas
Una nota del gobierno de San Salvador.-Informes proce-
dentes de los Estados del norte de Centro Arnfrica.-Walker
en León.-Proposlclón de san Salvador.-Efecto que produjo
la recepción de VlglI en Washlngton.-Arresto de Salazar.-
Golcourla y Guerrero.-Decreto sobre elecclones.-Movlmlen-
to en Le6n.-Fuga de Rivas a Chinandega.~nducta de los
amerlcanos.-ferrer presidente provlslonal.-Eleccl6n y toma
de posesión de Walker.-Oecomlso de la goleta cSan Jo·
~».-la .Granada. en comlslón.-EI teniente Fayssoux.-
El gabinete de Walker.-Mr. Wheeler reconoce el nuevo 90-
blerno.-La «Granada. O'uzando.--Captura de Salazar,-
Su ejecuclón.----carta de Mannlng.-Arresto del Dr. L1v1ngs-
ton.--eonducta del ministro amerlcano.-EI Honorable Plerre
Soul~.-la deserción de Turtey y la suerte que ~ste corre.-
LA GUERRA DE NICARAGUA 419
Capitulo VIII
La administración de Walker
Necesidad de una reorganización soclal.-Diferencia de Idio-
ma.-Decreto sobre las propiedades conflscadas.-Decreto
relativo al registro de la propledad.-El decreto de la es-
c1avltud.-los sistemas coloniales de Espana e Inglaterra.-
El sentimiento antlesclavista en Europa y Amérlca.-Cómo
se ha producldo.-Sus efectos en los Estados hispanoame-
rlcanos.-EI negro en la América troplcal.-Polftlca del
decreto.-RelacI6n que tiene con los partidos polltlcos de
los Estados Unldos.-carácter antlanexlonlsta del decre-
to.-M. Ange de Salnt-Prlest.-EI interés de las poten-
cias contlnentales.-EI interés de Inglaterra.-Hostilidad
contra el comercio de esclavos.----carácter verdadero de
este comerclo.-Africa y América.-Experimentos hechos
en Haitf y Jamaica.-Actltud de Jos ~stados esclavistas.-
Su apatfa.-Conducta observada por el Sur.-la politica
que le conviene segulr.-Esfuerzos de los partidos y de las
potencias antlesclavlstas.-EI Interés sudista en Nicaragua 243
Capítulo IX
El avance de los aliados
El ejército en setiembre de 185b.-Muerte de Ubaldo
Herrera.-McDonald marcha sobre San JacJnto.-EI ataque
de Cole contra San Jadnto.-Muerte de Cole y de Calla-
han.-Belloso recibe refuerzos.-Los Aliados marchan so~
bre Managua.-Estado de la fuerza americana situada en
Masaya.-Se retira a Granada.-ocupadón de Masaya por
Belloso.-Los americanos atacan.-Ataque de Zavala a
Granada.-Combate del 13 de octubre de 185b.-Conducta
420 WILLlAM WALKER
Capitulo X
La retirada de Granada
Preparativos para la retlrada.-eausas de la demora.-
La fuerza situada en La Vlrgen.-La cGranada. y el cOnce
de Abrll•.-Ascenso conferido a Fayssoux.-Los Aliados
atacan a Hennlngsen.-la defensa de éste.--Carga dada
por O'Neal.-Dlflcultades con que lucha Hennlngsen.-
Destrucción de la c1udad.-P~dlda del fuerte.-Los ame-
ricanos abandonan la plaza mayor.-Se apoderan de la
iglesia de Guadalupe.-Henry y Swingle.-Epidemla en el
campo de Hennlngsen.-Estratagemas de los AlJados.-la
posiciÓn atrincherada de Henry.-EI cólera y el t1fo.-Las
municiones de boca Y guerra.-EI hospital de la Isla de Ome-
tepe.-lo atacan los Indlos.-Notlcla exagerada.-Refuer-
lOS procedentes de San Francisco '1 Nueva Orleans.-Su
organlzaclón.-Oesembarca Waters en Granada.-Socorre a
Hennlngsen.-Embarque de toda la fuerza.-Justlcla '1 po-
Iftlca de la destrucción de Granada 301
Capitulo XI
Operaciones en el San Juan
Ataque de Spencer en el Sarapiqul.-Toma los vapores que
estaban en Punta Arenas.~ducta del caplUn Ersklne del
cOrlon:t.-la fuerza dI! Mora en el San Carlos.--..,;()cupación
LA GUERRA DE NICARAGUA 421
Capítulo XII
La defensa de Rivas
La fuerza que estaba en Rivas en diciembre de 1856.-SI~
tuación de los Allados.-Cargos que se hacen a Belloso.-
los batidores en Nandalme.-Preparativos para la defensa
de Rivas.-Los Aliados avanzan hasta El Obraje.-Escara-
muza en El Obraje.-ocupaclón de San Jorge por los Alla-
dos.-Ataque de Hennlngsen a San Jorge.-Marcha sobre
San Juan del Sur.-los americanos en «La Vlrgen:t.-Ten-
tativa de tomar a San Jorge pOr sorpresa.-Proclama de
Mora.-Canoneo de San Jorge.-La deserción.-Sus cau-
sas.-EI vapor eEsk de S. M. B.:t en San Juan del Sur.-
Sir Robert McClure y el capitán Fayssoux.-EI comandante
Oavis y la corbeta eSto Mary's:t de la marina de guerra de
los Estados Unldos.-Visita de Davls a Rivas.-Encuentros
cerca del Tránsito y en El Jocote.-La Guardia de la Estre-
lla Roja.-Arenga dirigida a las tropas.-Combate del 16 de
marzo.-Notlclas traldas por el eOrizaba:t.-Ataque de los
Aliados a Rivas el 23 de marzo.-Su rechazo y las consecuen-
cias que éste tiene.-Las raciones en Rivas.-Segundo ataque
del 11 de abril.-las mujeres salen de Rivas.-Conducta de
Davls.-Tratado celebrado con Walker.-Captura de la eGra·
nada:t.-Conclusión 353
La Guerra de Nicaragua
se terminó de imprimir
el dfa 7 de setiembre de 1970, en la
Imprenta Trejas Hnos.
de San JoSé de Costa Rica.