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“AÑO DEL DIÁLOGO Y DE LA RECONCILIACIÓN NACIONAL”

UNIVERSIDAD CATÓLICA LOS ÁNGELES DE


CHIMBOTE
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
ESCUELA PROFESIONAL DE PSICOLOGÍA

MONOGRAFÍA:

“LA AGRESIVIDAD”

AUTORES : SUÁREZ AZPUR, Percy Damián.

TOLEDANO GUZMÁN, Cintia

CURSO : PSICOLOGIA SOCIAL.

CICLO : IV

GRUPO : “C”

DOCENTE : Ps. VIZCARRA CANGALAYA, MARISOL

AYACUCHO - PERU

2018
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I. Dedicatoria.

El trabajo de investigación monográfico lo dedicamos a nuestros

padres y familiares; a quienes les debemos todo lo que tenemos en

esta vida. A la vida, ya que gracias a ello tenemos sus apoyos en

nuestras derrotas y celebraciones en nuestros triunfos. A nuestros

profesores, quienes son nuestros guías en el aprendizaje,

brindándonos las actualizaciones de los últimos conocimientos para

nuestro buen desenvolvimiento en la sociedad.


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II. Agradecimiento.

En primer lugar, agradecer a la vida y de la misma forma agradecer

a nuestros padres por el apoyo incondicional, la tenacidad de ellos y

su lucha insaciable han hecho de ellos, un gran ejemplo a seguir y

destacar, no solo para nosotros sino para la familia en general.

A la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote que nos brinda

la oportunidad de estudiar en sus aulas adquiriendo nuevos

conocimientos y optar por un desarrollo tanto personal como

profesionalmente.

A nuestra docente Ps. Marisol, Vizcarra Cangalaya, que, con

su ayuda y conocimientos, es factible realizar este trabajo que es de

vital importancia en nuestro desarrollo académico.


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III. Resumen.

La agresividad es uno de los problemas fundamentales que enfrenta la sociedad en el

presente. Muchos se preguntan, si el ser humano es hoy más agresivo que en el pasado. La

respuesta no es clara, pero sí lo es el que la historia de la humanidad está llena de ejemplos de

crueldad y agresividad en sus diversas manifestaciones. El presente, sin embargo, enfrenta a

las personas con casos de violencia y agresividad constantemente, dadas las posibilidades que

brindan los medios de comunicación. Esta violencia se manifiesta contra el propio yo y los

otros en forma alarmante. Por otra parte, estas manifestaciones agresivas adquieren formas

propias, según el momento histórico que vivimos.

El ser humano no sólo vive para sí mismo como individualidad, sino que se encuentra

constitutivamente volcado hacia los miembros de su propia especie, siendo en la relación con

los demás donde se descubre y modela como persona. Dicha relación es, por tanto, un hecho

indispensable para el proceso de personalización porque el ser humano existe en la medida

que coexiste con los demás, teniendo en cuenta que desde el momento del nacimiento son los

otros los que, no sólo ayudan a crecer y desarrollarse, sino que van enseñando a descubrirse a

sí mismo, a los demás y al mundo en el que se vive.

Las percepciones de empatía construidas desde ese conocimiento, valoración y aceptación,

nos permiten tener unos límites frente a los demás que normalmente no traspasamos, siendo

caracterizadas dichas percepciones por una evaluación positiva de los seres humanos,

relacionada con sentimientos de responsabilidad personal por el bienestar de los otros.

Cuando predominan estos sentimientos, es difícil hacer daño a las personas porque uno se

siente fuertemente identificado con ellas y porque la evaluación positiva tiende a hacer surgir

una conducta pro social hacia los demás.

Palabras claves: Agresividad, ira, violencia, agresores, victimas, relación interpersonal y

conducta.
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IV. Abstract.

Aggression is one of the fundamental problems facing society in the present. Many wonder, if

the human being is more aggressive today than in the past. The answer is not clear, but it is

that the history of humanity is full of examples of cruelty and aggressiveness in its various

manifestations. The present, however, confronts people with cases of violence and

aggressiveness constantly, given the possibilities offered by the media. This violence

manifests itself against the self and the others in an alarming way. On the other hand, these

aggressive manifestations acquire their own forms, according to the historical moment we

live.

The human being not only lives for himself as individuality, but is constitutively turned

towards the members of his own species, being in the relationship with others where it is

discovered and modeled as a person. This relationship is, therefore, an indispensable fact for

the process of personalization because the human being exists to the extent that it coexists

with others, taking into account that from the moment of birth it is the others that, not only

help to grow and develop, but they are teaching to discover themselves, others and the world

in which they live.

Perceptions of empathy built from this knowledge, assessment and acceptance, allow us to

have limits against others that we do not normally pass, being characterized these perceptions

by a positive evaluation of human beings, related to feelings of personal responsibility for the

well-being of the others. When these feelings predominate, it is difficult to hurt people

because one feels strongly identified with them and because positive evaluation tends to give

rise to pro-social behavior towards others.

Keywords: Aggressiveness, Anger, Violence, Aggressor, Victim, Relationships, Conduct.


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1. Introducción.

Este presente trabajo está realizado con el objetivo de abarcar más nuestro coeficiente

cultural e intelectual en lo que respecta la agresividad como también cultivar una cultura de

respeto, reciprocidad en los niños y adolescente, y más aún como psicólogos es primordial

conocer los factores que conllevan a la agresividad a una persona a partir de ello deducir cual

sería la forma correcta de modificar esta actitud no deseada; por tal razón se realizó este

trabajo para poder tener conocimientos y poder aplicar en nuestro entorno.

La Agresión se puede conceptualizar como un desequilibrio y cobardía o temeridad de

quien la ejecuta. Según la psicología las personas que usualmente agredan son aquellos que

se siente incapaces de mantener relaciones interpersonales saludables, debido a ello debemos

enfocarnos en observar el comportamiento del posible agresor y actuar como un

amortiguador, esto puede ser de varias formas tomando distancia, no enganchándose con sus

improperios y al fin mantenerse sereno mientras más rápido te alejes del escenario.

En el primer capítulo conceptualizaremos las diversas perspectivas histórico, definición de

la agresividad, los elementos fundamentales, como también la tipología de la agresividad.

En el capítulo II desarrollaremos referente a la agresividad y el individuo; dentro de lo

cual están los objetivos de un agresor, las características como también los diferentes factores

relevantes dentro de la agresividad.

Para finalizar la monografía contiene las conclusiones, recomendaciones, la referencia

bibliográfica correspondiente y anexos.


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INDICE

I. Dedicatoria………………………………………………………………………………..2
II. Agradecimiento…………………………………………………………………………...3
III. Resumen………………………………………………………………………………..…4
IV. Abstract...…………………………………………………………………………………5
1. Introducción………………………………………………………………………………6
2. CAPÍTULO I: CONTEXTO HISTORICO Y CONTEXTUALIZACION……………….9
2.1. Teorías y modelos explicativos..................................................................................10
2.1.1. Perspectiva Etológica…….………………………………………………...10

2.1.1.1. Modelo Termohidráulico……………….………………………........11

2.1.2. Perspectiva Sociobiológica.………………………………………………...11

2.1.3. Perspectiva Biológica………………………………………….…………...12

2.1.3.1. Modelos Neuroquímicos………………….………...……….……….12

2.1.3.2. Modelos neuroendocrinos…………………………...……………..12

2.1.3.3. Modelos neurobiológicos……………………………………….........12

2.1.4. Teoría Social- Cognitiva de Bandura…………………………………….…13

2.1.4.1. Mecanismos que originan la agresión………...……………………...13

2.1.4.2. Mecanismos instigadores de la agresión…………………...………...13

2.1.4.3. Mecanismos mantenedores de la agresión……...…………...……….14

2.2. Definición de la agresividad………….…………………..…………………………14

2.3. Delimitación conceptual de la agresión y otros conceptos relacionado………….....15

2.3.1. Agresión vs Agresividad…………………………………………………......15

2.3.2. Agresión vs Ira-Hostilidad…………………………………………………...15

2.3.3. Agresión vs Violencia……………………………………...………………...15

2.3.4. Agresión vs Delito-Crimen…………………………………………………..16

2.4. Elementos imaginarios en diversos tipos de violencia……………..…………….....16

2.4.1. Imaginario de los agresores…………………………………………………..17


8

2.4.2. Imaginario de las víctimas. ………………………………………..………...17

2.4.3. Imaginario de los propios actos de violencia. …………………………….....18

2.5. Tipología de la agresión………………………………...…………………..............18

2.5.1. Naturaleza……………………………………...…………………………….18

2.5.2. Relación interpersonal………………………………………………………..19

2.5.3. Motivación…………………………………………………………………...19

2.5.4. Clasificación clínica………………………………………………………….19

2.5.5. Estímulo e licitador……………………………………………………….….20

2.5.6. Signo………………………………………………………...………….……20

2.5.7. Consecuencias………………………………………………………………..21

2.5.8. Función……………………………………………………………………….21

2.6. Componentes de la conducta agresiva……………………….………………..……21

2.6.1. Componente cognitivo…………………………………...…………………..21

2.6.2. Componente afectivo o evaluativo……………………………………..….…22

2.6.3. Componente conductual……………………………………………………...22

3. CAPITULO II: LA AGRESIVIDAD Y EL INDIVIDUO……...……………………….23

3.1. Objetivos del agresor…………………………….……………………………….…24

3.2. Características de un agresor…………………….……………………………...…..24

3.3. Factores ligados a la manifestación de la agresividad…………………………...….26

3.4. Factores que influyen en la expresión de la agresividad ………………………..….27

3.5. Aspectos jurídico y/o legales de la conducta agresiva……………………….……..28

3.6. Factores de riesgo……………………………………………………………….…..29

4. Conclusiones…………………………………...………………………………………….30
5. Recomendaciones………………………………………………………………………….31
6. Anexos……………………..……………………….…………………………...…………32
7. Referencias bibliográficas..………………………………………………………………..35
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2. CAPÍTULO I:

CONTEXTO HISTORICO Y

CONTEXTUALIZACION.
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2.1. Teorías y modelos explicativos.

2.1.1. Perspectiva Etológica.

Los etólogos interpretan el comportamiento agresivo, tanto animal como humano,

dentro del proceso de selección natural, el cual evolucionó al servicio de diversas

funciones, de ahí su carácter funcional. Dicho comportamiento descansa en

adaptaciones filogenéticas de base fisiológica, que cambian de una especie a otra,

como las secreciones hormonales, especialmente de testosterona, los impulsos

nerviosos centrales y otras variables genéticas.

Según la función a la que sirvan, los etólogos identificaron diversas formas de

conducta agresiva, entre ellas las siguientes: Predatoria, afectiva, entre machos,

irritable, de defensa territorial, maternal, instrumental y de fuga. Desde la

perspectiva etológica se han dividido los comportamientos agresivos en dos grupos:

1. Agresión Intra específica: Entre individuos de una misma especie, motivados

por excesos de impulsos (agresión hiperestésica), por la posesión de territorios,

la búsqueda de compañera sexual o ante la falta de fuentes de alimentación

(agresión taxógena).

2. Agresión Ínter específica: Lucha por el territorio ante individuos semejantes.

Esta modalidad es la característica del ser humano.

Para Tinbergen (1951) el hombre dentro de la escala evolutiva habría superado su

propia escala genética, de modo que apenas responde a los estímulos agresivos como

lo hacía en el pasado, o como lo hacen otras especies, principalmente por parte de

los machos. Esto se debe a que, aunque la agresión humana es un impulso primario,

a través de la evolución, la energía “agresiva” habría sufrido momentos decisivos de

neutralización, transformación, canalización y desplazamiento hacia diversos

objetivos.
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2.1.1.1. Modelo Termohidráulico.

K. Lorenz (1963), considera que la motivación que determina el inicio de la

“agresión”, depende de la acumulación de una cierta cantidad de energía de

acción específica, que, combinándose con los estímulos adecuados, puede

desencadenar la conducta agresiva concreta.

Según Lorenz, la única defensa que posee el hombre contra sus impulsos internos,

instintivamente destructivos, heredados genéticamente de nuestros ancestros, así

como contra el medio externo que lo inhibe, y le causa frustraciones, es la

agresividad. De ahí se deduce que la agresividad es un mecanismo de adaptación

que permite al hombre competir por recursos escasos, y en última instancia, por

su supervivencia.

2.1.2. Perspectiva Sociobiológica.

Desde la sociobiología, se considera que todos los comportamientos humanos pueden

ser explicados por la biología junto con la interacción social; considera que el

potencial genético, lo innato, está íntimamente relacionado con el aprendizaje, el cual

permite que los rasgos o predisposiciones se desarrollen en un ambiente específico.

Dentro de esta perspectiva, se considera que la conducta agresiva es, por una parte,

aprendida, especialmente en sus formas más peligrosas de ataque criminal y acción

militar, pero que existe una fuerte predisposición subyacente a dicho aprendizaje, a

caer en una profunda hostilidad irracional bajo ciertas condiciones definibles, de tal

manera que cada contexto llevaría asociada una probabilidad de respuesta. Los pilares

de la concepción Sociobiológica de la agresión humana son los siguientes:

 La agresión humana es adaptativa para la supervivencia y la reproducción del

individuo, es decir, para su selección, siempre que no se supere el nivel óptimo

de agresividad, por encima del cual, la eficacia individual desciende,


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poniéndose en peligro la propia vida. Desde ese punto de vista, los seres

humanos serían innatamente agresivos, lo que se traduciría en diferentes

comportamientos que afectarían a la territorialidad, a las relaciones con el otro

sexo, al intento de dominio del grupo y a la manera de resolver los conflictos.

 La agresión entre humanos es un fenómeno de competencia, tanto por los

recursos limitados como por los de carácter sexual.

2.1.3. Perspectiva Biológica.

2.1.3.1. Modelos Neuroquímicos.

La agresión se ha relacionado con la presencia de distintos neurotransmisores,

especialmente con la Serotonina. Bajas concentraciones de este neurotransmisor

en el cerebro o una disminución de la actividad de las neuronas serotoninérgicas

parecen ser la base de los comportamientos agresivos de animales y humanos.

2.1.3.2. Modelos Neuroendocrinos.

La agresión se ha relacionado con el efecto de las hormonas esteroideas,

especialmente la testosterona, la cual juega un papel crítico en la agresión

intraespecífica entre machos de diversas especies. Esto es debido a que esta

hormona está íntimamente relacionada con la reproducción y el apareamiento.

2.1.3.3. Modelos Neurobiológicos.

En los últimos años, la agresividad se ha vinculado a una disminución de la

actividad cerebral en determinadas áreas corticales, como los pre-frontales, así

como a lesiones en el córtex orbitofrontal; y a ciertas anomalías en la asimetría

cerebral.
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2.1.4. Teoría Social- Cognitiva de Bandura.

La Teoría Social Cognitiva de Bandura (1973; 1986) constituye uno de los

principales modelos explicativos de referencia de la agresión humana. Bandura

defiende el origen social de la acción y la influencia causal de los procesos de

pensamiento sobre la motivación, el afecto y la conducta humana. En su explicación

de la conducta agresiva, Bandura (1975) asume en gran medida las aportaciones

procedentes de la aproximación conductual, a partir del aprendizaje social de la

agresión, diferencia tres tipos de mecanismos, los cuales se describen a

continuación:

2.1.4.1.Mecanismos que originan la agresión

Entre estos mecanismos destacan el aprendizaje por observación y el

aprendizaje por experiencia directa. Las influencias de modelos familiares y

sociales que muestren conductas agresivas y otorguen a éstas una valoración

positiva serán, junto con los modelos procedentes de los medios de

comunicación o los modelos simbólicos transmitidos gráfica o verbalmente,

los responsables de que la agresión se moldee y propague.

La experiencia directa del sujeto proporcionará determinadas consecuencias en

su ambiente (recompensas y castigos) que podrán instaurar estas conductas.

2.1.4.2.Mecanismos instigadores de la agresión

Mecanismos como procesos de asociación del modelado con consecuencias

reforzantes (función discriminativa), la justificación de la agresión por el

modelo como socialmente legítima (función desinhibitoria), la aparición de

activación emocional y la aparición de instrumentos o procedimientos

específicos para propiciar un daño.


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2.1.4.3.Mecanismos mantenedores de la agresión

Estos mecanismos se refieren al reforzamiento externo directo (Ej:

recompensas materiales o sociales, disminución de una estimulación aversiva),

el reforzamiento vicario y el auto-reforzamiento.

Bandura destaca también un conjunto de mecanismos de carácter cognitivo que

denomina neutralizadores de la auto-condenación por agresión, que actúan como

mantenedores, entre los que recoge: La atenuación de la agresión mediante

comparaciones con agresiones de mayor gravedad, justificación de la agresión por

principios religiosos, desplazamiento de la responsabilidad (otros ordenan realizar la

agresión), difusión de la responsabilidad (responsabilidad compartida),

deshumanización de las víctimas, atribución de culpa a las víctimas, falseamiento de

las consecuencias y desensibilización graduada (por exposición graduada repetida a

situaciones violentas).

2.2. Definición de la agresividad.

La conducta agresiva es un comportamiento básico y primario en la actividad de los seres

vivos, se trata de un fenómeno multidimensional en el que están implicados un gran

número de factores, de carácter polimorfo, que puede manifestarse en cada uno de los

niveles que integran al individuo: Físico, emocional, cognitivo y social; las

características pueden ser:

a) Su carácter intencional, en busca de una meta concreta de muy diversa índole, en

función de la cual se pueden clasificar los distintos tipos de agresión.

b) Las consecuencias aversivas o negativas que conlleva, sobre objetos u otras

personas, incluido uno mismo.


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c) Su variedad expresiva, pudiendo manifestarse de múltiples maneras, siendo las

apuntadas con mayor frecuencia por los diferentes autores, las de índole física y

verbal.

2.3. Delimitación conceptual de la agresión y otros conceptos relacionados.

2.3.1. Agresión vs Agresividad.

A diferencia de la agresión, que constituye un acto o forma de conducta puntual,

reactiva y efectiva frente a situaciones concretas, de manera más o menos adaptada,

la agresividad consiste en una disposición o tendencia a comportarse agresivamente

en las distintas situaciones intencionalmente.

La agresividad se caracterizaría por su carácter último positivo, al estar implicada en

la búsqueda de soluciones pacíficas a los conflictos, cualidad que la diferenciaría de

otros constructos como el de violencia, de valencia negativa.

2.3.2. Agresión vs Ira-Hostilidad.

Los términos agresión, ira y hostilidad se han empleado frecuentemente de forma

intercambiable debido a la ambigüedad de sus definiciones. La ira constituye un

estado emocional consistente en sentimientos que varían en intensidad, desde una

ligera irritación o enfado, hasta furia y rabia intensas, los cuales surgen ante

acontecimientos desagradables y no están dirigidos a una meta.

La hostilidad, por el contrario, connota un conjunto de actitudes negativas complejas

que motivan conductas agresivas dirigidas a una meta, normalmente la destrucción o

el daño físico de objetos o personas.

2.3.3. Agresión vs Violencia.

Según, Elliot et al. (1989), señala la violencia como “Amenaza o uso de la fuerza

física con intención de causar heridas físicas, daño o intimidación a otra persona”.
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En cambio, eReiss y Roth (1993), define como “conductas emitidas por sujetos que

intencionalmente amenazan o infligen daño físico sobre los otros”.

Habitualmente, los términos agresión o agresividad suelen emplearse para etiquetar

comportamientos “animales”, mientras el concepto violencia suele reservarse para

describir acciones “humanas”. Esto es debido a que los etólogos han detectado

agresiones en toda la escala animal, no así la violencia, casi exclusiva del ser

humano.

2.3.4. Agresión vs Delito-Crimen.

Una agresión puede llegar a constituir en algunas ocasiones, pero no necesariamente,

un comportamiento delictivo o criminal, en función de si es penado legalmente. Para

considerarse un delito, una conducta debe caracterizarse por ser un acto típicamente

antijurídico, culpable, sometido a veces a condiciones objetivas de penalidad,

imputable a una persona y sometido a una sanción penal. Según la RAE (2001), se

trata de un quebrantamiento de la ley o una acción u omisión voluntaria o

imprudente penada por la ley. Por otro lado, un crimen consiste en un tipo de delito,

de gravedad, que implica una acción voluntaria de matar o herir a alguien

gravemente.

2.4. Elementos imaginarios en diversos tipos de agresión.

Según Villanueva, Domínguez, Revilla y Gimeno (1998). “Podemos entender por

violencia aquel estado de las relaciones sociales que para su mantenimiento o alteración

precisa de una amenaza latente o explícita. Y por agresión la materialización de esa

amenaza".

El elemento fundamental de este concepto es la amenaza. La amenaza indica la

posibilidad de recibir daños por parte de quien se opone a un determinado estado de las
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relaciones entre personas o grupos, a un determinado estado de cosas, un determinado

reparto de poder en una interacción social.

La violencia física y la violencia simbólica se encadenan como partes del mismo

engranaje y de la misma configuración de sentido, pudiendo establecer entre ellas un

continuo que las unifica y que permite integradas en una dimensión evolutiva del proceso

de violencia entre actores sociales, agresores y víctimas.

¿Dónde estarían los elementos imaginarios en todo este proceso?

Podemos decir que en todos sus momentos; en particular podemos especificar tres áreas

que se pueden identificar en cualquier acto de violencia:

2.4.1. Imaginario de los agresores.

Los agresores mantienen una representación de sí mismos como dañados en su

completud, atacados en su identidad o en ocasiones atacados en su narcisismo.

La fuerza de lo imaginario puede llegar a ser tan enorme que los agresores llegan a

considerarse a sí mismos como víctimas, reservando para las víctimas los

calificativos de provocadores o merecedores del daño. De este modo llegan a

subvertir la lógica de los hechos.

2.4.2. Imaginario de las víctimas.

Las víctimas son investidas de una peligrosidad imaginaria que no poseen; las

ideologías políticas extremistas o fascistas, cuya característica es precisamente

justificar la violencia, son ayudas inestimables para realizar una construcción y una

representación social de las víctimas que las sitúa como merecedoras de violencia.

Se construye a la víctima en primer lugar como absolutamente diferente, en segundo

lugar, como peligrosa y amenazante y, en tercer lugar, se argumenta la necesidad de

actuar contra las víctimas causándoles daño.


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2.4.3. Imaginario de los propios actos de violencia.

Es muy importante considerar el imaginario de la misma violencia. Este imaginario "

tiene que ver con las imágenes de cuerpo fragmentado y todas sus metáforas y

desplazamientos a nivel simbólico. Imaginemos de todo aquello que roe, mina,

castra, disgrega, conduce a la muerte. Pero también de desorden y dislocación,

evitación, desorganización desarticulación ... Es decir, todo aquello que fragmenta, y

desarticula. Algunas de estos imagos tienen eficacia mágica, perturbadora, creadora

de angustia, son lo siniestro, lo localizado en el inconsciente como generador de

angustia.

Es evidente la diferencia entre el insulto y el daño físico, así como entre la

invalidación del otro y su asesinato, pero detrás de ellos pueden existir los mismos

imagos, de lesión a la completud del otro, fragmentándola y desposeyéndola de una

parte en el primer caso o desmembrándola y destrozando totalmente su existencia

simbólica o real en el segundo caso.

2.5. Tipología de la agresión.

2.5.1. Naturaleza.

 Agresión Física: Ataque a un organismo mediante armas o elementos

corporales, con conductas motoras y acciones físicas, el cual implica daños

corporales.

 Agresión Verbal: Respuesta oral que resulta nociva para el otro, a través de

insultos o comentarios de amenaza o rechazo.

 Agresión Social: Acción dirigida a dañar la autoestima de los otros, su estatus

social o ambos, a través de expresiones faciales, desdén, rumores sobre otros o

la manipulación de las relaciones interpersonales.


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2.5.2. Relación interpersonal.

 Agresión Directa o abierta: Confrontación abierta entre el agresor y la víctima,

mediante ataques físicos, rechazo, amenazas verbales, destrucción de la

propiedad y comportamiento autolesivo.

 Agresión Indirecta o Relacional: Conductas que hieren a los otros

indirectamente, a través de la manipulación de las relaciones con los iguales:

control directo, dispersión de rumores, mantenimiento de secretos, silencio,

avergonzar en un ambiente social, alienación social, rechazo por parte del

grupo, e incluso exclusión social.

2.5.3. Motivación.

 Agresión Hostil: Acción intencional encaminada a causar un impacto negativo

sobre otro, por el mero hecho de dañarle, sin la expectativa de obtener ningún

beneficio material.

 Agresión Instrumental: Acción intencional de dañar por la que el agresor

obtiene un objetivo.

 Agresión Emocional: Agresión de naturaleza fundamentalmente emocional

generada no por un estresor externo, sino por el afecto negativo que dicho

estresor activa, produciendo ira y tendencias agresivas.

2.5.4. Clasificación clínica.

 Agresión Pro-activa (instrumental, ofensiva, controlada): Conducta aversiva y

no provocada, sino deliberada, controlada, propositiva, no mediada por la

emoción, dirigida a influenciar, controlar, dominar o coaccionar a otra persona.

 Agresión Reactiva (afectiva, impulsiva, defensiva, incontrolada): Reacción

defensiva ante un estímulo percibido como amenazante o provocador (agresión

física o verbal), acompañada de alguna forma visible de explosión de ira (gestos


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faciales o verbalizaciones de enfado). Respuesta impetuosa, descontrolada,

cargada emocionalmente sin evaluación cognitiva de la situación.

2.5.5. Estímulo e licitador.

 Agresión Predatoria: Por la presencia de una presa natural.

 Agresión inducida por el miedo: Por el confinamiento o acorralamiento y la

incapacidad de escapar.

 Agresión inducida por irritabilidad Por la presencia de cualquier organismo

atacable en el medio, y reforzada por la frustración, la privación o el dolor.

 Agresión Territorial Por la defensa de un área frente a un intruso.

 Agresión Maternal Por la presencia de algún agente amenazador para las crías

de la hembra, incluidas otras madres de la prole y la ejercida contra los propios

pequeños.

 Agresión Instrumental Tendencia a comportarse agresivamente cuando en el

pasado esta conducta ha sido particularmente reforzada.

 Agresión entre machos Por la presencia de un competidor masculino de la

misma especie.

2.5.6. Signo.

 Agresión Positiva: Agresión saludable, productiva, que promueve los valores

básicos de supervivencia, protección, felicidad, aceptación social, preservación

y las relaciones íntimas.

 Agresión Negativa: Agresión que conduce a la destrucción de la propiedad o el

daño personal a otro ser vivo de la misma especie. No es saludable porque

induce emociones dañinas para el individuo a largo plazo.


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2.5.7. Consecuencias.

 Agresión Constructiva (Apropiada, Autoprotectora): Acto o declaración en

respuesta a una amenaza para protegerse de la misma.

 Agresión Destructiva: Acto de hostilidad hacia un objeto u otra persona,

innecesario para la autoprotección.

2.5.8. Función.

 Agresión territorial: Para defender el territorio.

 Agresión por dominancia: Para establecer niveles de poder, una jerarquía de

prioridades y beneficios.

 Agresión sexual: Para establecer contacto sexual

 Agresión parental disciplinaria: Para enseñar conductas y establecer límites a

los menores por los progenitores.

 Agresión protectora maternal: Para defender al recién nacido.

2.6. Componentes de la conducta agresiva.

La conducta agresiva, al igual que otros comportamientos humanos, está integrada por

elementos de diversa naturaleza que son imprescindibles para analizar el qué y el porqué

de este fenómeno y para diseñar estrategias de intervención. Estos componentes son tres:

2.6.1. Componente cognitivo.

El componente cognitivo hace referencia a las creencias, ideas, pensamientos,

percepciones. Las personas que se comportan agresivamente se caracterizan por

presentar unos determinados sesgos cognitivos que les dificulta la comprensión de

los problemas sociales y les lleva a:

a) Percibir la realidad en forma absolutista y dicotómica.

b) Atribuir intenciones hostiles a los otros.

c) Realizar generalizaciones excesivas a partir de datos parciales.


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d) Elegir más soluciones agresivas que pro sociales.

e) Cometer muchos errores en el procesamiento de la información y en la

solución de problemas, tanto hipotéticos como en su vida real.

2.6.2. Componente afectivo o evaluativo.

Este componente está relacionado con los afectos, sentimientos, emocionales,

valores y modelos de identificación; la probabilidad de comportarse agresivamente

aumenta cuando la persona asocia agresión con poder, control, dominio y cuando

tiene un fuerte sentimiento de haber sido tratada injustamente, situación que le

genera gran hostilidad hacia los otros. Dicha hostilidad se expresa a través de la

conducta agresiva que está plenamente justificada por ella.

2.6.3. Componente conductual.

Hace referencia a las competencias, habilidades, destrezas de la persona. Existe un

alto consenso entre los investigadores en que las personas agresivas carecen de

muchas habilidades necesarias para interactuar socialmente y para solucionar de

forma pro social los conflictos derivados de dicha interacción.

Por ejemplo, problemas para integrarse en un grupo de forma positiva, falta de

imaginación y creatividad en los juegos, dificultades en la toma de perspectiva,

rechazo por parte de sus pares, etc.


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3. CAPITULO II:

LA AGRESIVIDAD Y EL

INDIVIDUO.
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La agresividad es un estado emocional del individuo que consiste en sentimientos de odio y

deseos de dañar a otra persona, animal u objeto. La agresión es cualquier forma de conducta

que pretende herir física y o psicológicamente a alguien. La Agresividad es un factor del

comportamiento normal puesto en acción ante determinados estados para responder a

necesidades vitales, que protegen la supervivencia de la persona y de la especie, sin que sea

necesaria la destrucción del adversario.

El estudio de la agresividad es muy complejo ya que involucra diferentes conceptos que

obstaculizan su definición; tales como violencia, delincuencia o conducta antisocial; las

cuales hacen difícil un consenso entre ellas. Sin embargo, el término agresividad hace

referencia a un conjunto de patrones psicológicos que pueden manifestarse con diferente

intensidad la cual puede ir desde lo verbal hasta lo físico.

3.1. Objetivos del agresor.

- Causar daño a la víctima.

- Coacción (influir en la conducta de otras personas)

- Poder y dominio (demostrar el poder que tienes en la familia)

- Reputación e imagen (el líder a veces se muestra agresivo dentro del grupo)

- Intimidar al resto que lo observa.

3.2. Características de un agresor:

 Son intolerantes: Las personas agresivas no soportan una falla. Desarrollan una

actitud de molestia ante la circunstancia que les impide ser objetivos y soportar

cualquier equivocación, se alteran y demuestran en todo momento su

incomodidad.

 Son impulsivos: Si dices que no, para ellos es un sí. Siempre hacen su voluntad,

si les quieres evitar te van a perseguir. Estas personas no controlan sus emociones
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y actúan como sienten que deben hacerlo sin pensar las consecuencias de sus

actos.

 Utilizan un lenguaje obsceno: La mayoría de los agresores utilizan un lenguaje

obsceno para comunicarse con otras personas o incluso para responder alguna

inconformidad (gritos y groserías forman parte de ese lenguaje que a veces no

requiere el uso de frases).

 Son posesivos: son personas que desean tener el control sobre la vida de los

demás, esto con el único fin de complacer su ego.

 No saben disculpar, son resentidos: Los agresores no perdonan, fingen hacerlo,

pero en cada oportunidad que tienen reviven el momento del error intentando

victimizarse. Tienen resentimientos hacia sus allegados, sus padres o algún

familiar y viven constantemente recordando a las personas que alguna vez le

hicieron algo o evocando momentos de su pasado en los que fueron maltratados,

con la intención de perpetrar un acto similar y vengarse.

 Tienen obsesión de control: Están constantemente supervisando a la familia, a la

pareja, si se encuentra donde debería estar, la cantidad de veces que utiliza el

celular. Dado que son los “jefes”, ellos consideran que todo debe ser aprobado

primero por ellos.

 Son discriminatorios: Las personas agresivas tienen una personalidad

discriminatoria; no tienen límite, su discriminación va contra los animales, los

ancianos, el sexo opuesto, las personas de rango laboral inferior. Consideran que

los ancianos, animales o incluso su pareja no tienen los mismos derechos que

deben ser descalificados y son ellos quienes se toman la atribución de

reprenderlos considerando que están en el deber de hacerlo.


26

 Usan doble personalidad: Es una característica determinante para poder

identificar a un presunto agresor. Los agresores utilizan una fachada cuando son

observados aparentan ser un encanto, conquistadores y seductores, amables y

delicados, pero la verdad es que pueden ser muy violentos.

 Maltrato psicológico: El maltrato psicológico existe y en un tipo de maltrato

muy agresivo, puesto que dejan marcas muy profundas porque te daña

mentalmente, puede ser de manera verbal o gestual o incluso con actos de

silencio. Los agresores suelen usar mucho el maltrato psicológico como un

método intimidante y persuasivo ante cualquier persona.

 Cambios constantes de humor (bipolares): Un agresor puede pasar de la calma

a la ira en cuestión de segundos. En ocasiones estos cambios son motivados por el

consumo de bebidas alcohólicas, medicamentos o algún alucinógeno

3.3. Factores ligados a la manifestación de la agresividad.

3.3.1. Biológicos.

Donde la agresividad es conllevada por aprendizaje y asimilación interna del

individuo.

 Lobotomía (incisión en el lóbulo frontal) reduce la agresividad en el

individuo.

 Factores hormonales: relacionados con los estados agresivos, por ejemplo, la

mujer durante el síndrome pre-menstrual está más irritable y agresiva.

3.3.2. Psicológicos y/o ambientales.

Es una influencia externa de evocación de la agresividad.

 Normas familiares que fomentan la agresividad de sus miembros "muy bien

hijo, así se hace, la próxima vez le pegas un puñetazo en el ojo"


27

 Los padres a veces pueden ser modelos de la conducta agresiva, por ejemplo,

padres que pegan a sus hijos.

 Influencia de la TV y los medios de comunicación en la aceptación de la

conducta agresiva: en las películas el bueno y el vencedor siempre es el que

más caña mete, el que pega mejor, el más fuerte, no el que tiene mayor

capacidad y de diálogo, aunque sería muy difícil establecer una relación

directa entre nº de horas de TV y aumento de la violencia.

3.4. Factores que influyen en la expresión de la agresividad.

1. LA FAMILIA, en la cual el niño aprende las primeras conductas y por cual al verlas

que vienen de parte de sus padres las asocia como buenas, sin importar que están

conlleven agresiones de tipo verbal o física hacia algún miembro de la familia, esto se

ve como una incongruencia ya que la violencia no se radica con más violencia, sino

que fortalece tal comportamiento.

Primero se ve, luego se imita y posteriormente se convierte en la forma de

establecer relaciones interpersonales.

2. El SOCIAL, sea el barrio, comunidad; es donde el menor se forma y por lo cual toda

conducta observada por él, en ese medio lo tomara como una forma correcta de

comportamiento, sin importar que esta genere un aprendizaje violento, ya sea

a través de la forma de comunicarse o de resolver los conflictos que se generan en el

ambiente.

3. LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN, debido a que en sus temáticas son promotores

de violencia, ya que los dibujos animados que se difunde en sus canales es con un alto

contenido de agresiones físicas entre los personajes.


28

4. LAS ESCUELAS, este factor contribuye de tal forma como es el familiar o el social.

Las escuelas pueden llegar a ser verdaderas fábricas de violencia por varias razones,

entre las que destaca:

i. la falta tanto de motivación como de estrategias eficientes para hacer frente a

los problemas de comportamiento del alumnado.

ii. El trato desigual del profesorado a los alumnos, que en ocasiones otorga

privilegios únicamente a determinados estudiantes en detrimento de otros,

con el consiguiente malestar de los menos atendidos.

iii. La existencia de dobles mensajes en el aula, por ejemplo, cuando el profesor

utiliza el castigo como medio para mejorar la conducta de un estudiante en el

aula, lo que, además, en muchas ocasiones genera un “efecto rebote” y más

agresividad en el alumno.

3.5. Aspectos jurídicos o legales de la conducta agresiva.

Es muy importante destacar que los sistemas legales han distinguido entre conducta

agresiva reactiva e instrumental desde la época de los antiguos griegos (McDowell,

1978).

En algunos de los sistemas vigentes se diferencia, por ejemplo, entre homicidio y

asesinato en primer grado. El primero hace referencia a “un crimen de pasión” cometido

por una reacción incontrolada ante una provocación, generalmente de una persona

conocida; mientras que el asesinato en primer grado es “un crimen acompañado de

premeditación”, llevado a cabo con total control de las facultades mentales y con

frecuencia está dirigido hacia personas extrañas.


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Los homicidios son más frecuentes que los asesinatos y son tratados de forma menos

severa, teniendo en cuenta que el acusado puede argumentar varios elementos en su

defensa; además las sentencias más frecuentes suelen ser algunos años en prisión; en

contraste, para el asesinato, la sentencia puede llegar a ser cadena perpetua o la pena de

muerte en algunos países.

3.6. Factores de riesgo.

 Personalidades agresivas y emocionalmente reactivas con poca tolerancia.

 Controles sociales debilitadas.

 Subculturas específicas.

 Guerras.

 Pérdida específica de intuición.

 Incapacidad para cualquier plan de vida.

 Irresponsabilidad, mentiras, insinceridad.

 Gran pobreza de reacciones afectivas básicas.

 Egocentrismo patológico e incapacidad para amar.

 Abuso de alcohol y drogas.


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4. Conclusiones.

 El individuo desde la niñez es modelado en su conducta a partir del entorno donde

convive, iniciándose en la familia y modificado según la adaptación en una sociedad.

 El conflicto lleva fácilmente a la violencia psicológica y física, con actitudes poco

saludables con el que cotidianamente convive cada persona.

 La violencia o todo tipo de agresión es el resultado de la construcción socio-cultural

de cada grupo humano, que principalmente nacen en las familias disfuncionales.

 Toda persona a lo largo de su vida, con respecto a la agresión, muestra lo que

aprendió en su proceso de socialización.

 Las actitudes negativas o temas de agresión, no se pueden desaprender. Con una

adecuada intervención se pueden incorporar nuevas conductas o formas distintas de

actuar para poder modelar una conducta en bien de la persona.

 Cada ser humano, tenemos diferentes responsabilidades y diferentes roles en la

sociedad dependiendo a las edades o etapas de ciclo de la vida, cada quien tenemos

una conducta que nos identifica como ciudadanos, cada sociedad es diferente

partiendo de sus reglas o normas de convivencia.


31

5. Recomendaciones.

 Cada individuo somos capaces de generar cambios en la sociedad, partiendo de un

estilo de vida saludable, practicando la ética, la moral y conciencia social.

 Implementar más espacios de salud mental en las diferentes instituciones públicas o

privadas

 Promover hábitos de vida saludable en el contexto de la salud mental.

 Detectar conductas de agresión y buscar orientación con un especialista (psicólogo,

orientador general).

 Denunciar oportunamente las agresiones ante la autoridad, es necesario aclarar que el

fin de la denuncia es alertar ante las autoridades y prevenir a las víctimas, ya que se

podría buscar una solución si uno lo permite, pero si al contrario uno no permite que

lo ayuden, puede surgir más problemas y se podría hacer hábito las agresiones y durar

por toda una convivencia.

 Concientizar a la población y sugerir que acudan a entidades donde puedan brindar

ayuda en problemas de agresión en todas sus categorías y así podamos ayudar a la

sociedad para ser un país fuera de violencia.


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6. Anexos.
a. Vistas fotográficas de los autores realizando la monografía.
33

b. Culminación de la monografía por los autores:


TOLEDANO GUZMÁN, Cintia.
SUAREZ AZPUR, Percy Damian.
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c. Imágenes relacionadas con la agresividad.

Figure 1: El consumo de sustancias Figure 2: La agresividad infantil


aumenta la agresividad.

Figure 3: Agresividad: Conducta hostil. Figure 4: La agresividad como una política.


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7 Referencias bibliográficas.

 Freud, Sigmund. (1981). Obras completas. Madrid, España: Editorial Biblioteca

Nueva. Recuperado el 24 de octubre del 2018 desde,

https://biblioteca.ucm.es/tesis/19972000/S/4/S4017401.pdf

 Fromm, Erich. (1989). Anatomía de la destructividad humana. México: Editorial

Marcusse.

 Herbert. (1970). Eros y civilización. México: Editorial Joaquín Motiz. Recuperado el

25 de octubre del 2018 desde, http://www.redalyc.org/pdf/3440/344030758001.pdf

 Menninger, Karl. (1952). El hombre contra sí mismo. Argentina, Buenos Aires:

Editorial Losada. Recuperado el 24 de octubre del 2018 desde,

http://tesis.usat.edu.pe/bitstream/usat/350/1/TL_QuijanoSignoriStephanie_RiosF

ernandezMarcela.pdf

 Van Riller, Jacques. (1978). La agresividad humana. Barcelona: Editorial Herder.

Recuperado el 24 de octubre del 2018 desde,

http://www.robertexto.com/archivo4/agresividad.htm#36

 Recuperado el 26 de octubre del 2018 desde,

https://www.um.es/analesps/v18/v18_1/04-18_1.pdf

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