EL ESPIRITU….

Hace mucho tiempo, cuenta la leyenda, existió una tribu a orillas de un rio, ubicada en un región
lejana y desconocida, en la que Cada miembro tenía su labor asignada como se acostumbra en la
mayoría de las tribus, los hombres se dedican a la caza o al cultivo, mientras que las mujeres se
dedican a las labores domésticas, al cuidado de los niños, la preparación del alimento, entre otras
actividades. Políticamente hablando la tribu estaba gobernada por un solo líder, que por lo general
era un anciano al que llamaban “apaaa” que se le adjudicaba sabiduría para gobernar y aconsejar a
los miembros de la tribu, él era quien dictaba sentencia y hacia justicia de acuerdo los mandatos
de los dioses del cielo. a la tribu no les faltaba nada, el alimento se los daba la misma naturaleza, la
protección de un hogar, la construían ellos mismos; no les faltaba ni les sobraba nada, Vivian con lo
justo que necesitaban para vivir. Sin embargo, a lo largo de los años fueron creciendo las
civilizaciones aledañas a la tribu y con ellas el deseo de expansión y posesión. Las civilizaciones
empezaron a conquistar otras sociedades y a apoderarse de los recursos por los que no habían
trabajado ni invertido su tiempo. Las guerras no tardaron en ser el “pan de cada día” las muertes,
la destrucción, el desamparo, las migraciones eran solo una de sus consecuencias. el sufrimiento
empezó a apoderarse del alma humana.

Una mañana al salir el alba, la tribu despertó, pero estaba vez no fue la naturaleza misma quien
cumpliría ese papel, sino el bullicio de las tropas que se acercaban a gran velocidad es sus caballos,
la tribu fue invadida, y sin armas para defenderse fui dominada con gran facilidad. La esclavitud se
apodero de cada miembro, el maltrato y la humillación por parte de los colonizadores era la
norma. La tribu en decadencia no veía esperanzas de librarse de la esclavitud, y con el pasar de los
años aquellos recuerdos de su libertad, de la armonía y la tranquilidad que reinaba en ellos, se
iban desvaneciendo . Pero no ocurría así en la mente de “apaaa” que cada día pensaba en esos
buenos tiempos del pasado, y en pro de aquel bienestar, pensaba en una solución para la situación
en al que se encontraban su tribu.

Cuenta la leyenda que una mañana “apaaa” se levantó, como de costumbre, en medio de la
humillación y los maltratos, y levantando la mirada al cielo para pedir valor a los dioses para
emprender su nueva misión, la misión de rescatar la libertad que hace años les habían arrebatado
por el deseo de poder y expansión de los hombres. Lanzo un grito que resonó en todo el lugar y
abalanzándose sobre los soldados, junto con toda su gente, lucharon para recobrar su vida, sus
tierras, su posesiones, pero lo mas importante para recobrar la paz y la libertad. Aquel día “apaaa”
murió por la causa libertaria, pero parece que aquel buen hombre dejo en la vida de los
sobrevivientes aquel espíritu luchador, pero no aquel que combate por el deseo de poder y
posesión, sino aquel que lucha por la libertad y la paz; por el bienestar y la felicidad. Ese espíritu
hizo morada en los pocos miembros que quedaron, y fue ese mismo espíritu que muchos años
después logro librarlos de la esclavitud. Y cuenta la leyenda que ese espíritu fue apoderándose de
tribu en tribu de los hombres que en medio de la esclavitud habían perdido la esperanza de ser
libres y de llevar una vida en paz.

EL ESPIRITU DE GUNADULE
Asesinatos selectivos

Camilo Zapata

Jose Padilla

Juan Camilo Atehortua

Esneider Quintero