(José Del Carmen Eliseo Mariátegui La Chira) El problema de la tierra: Mariátegui estudia la cuestión agraria unida ineludiblemente a la del indio, reivindicando el derecho ARGUMENTO de éste a la tierra, para lo cual era necesario sacarlo del estado de servidumbre que suponía el feudalismo de los I. gamonales. Luego, muestra cómo el colonialismo que Esquema de la evolución económica: En este ensayo analiza el destruyó y aniquiló la economía incaica de tipo "comunista", proceso socio-económico peruano partiendo de la economía no supo reemplazarla más que con el feudalismo. ¿Qué le colonial a la que percibe como una compulsiva escisión pasó a la comunidad agraria del ayllu? A pesar de las leyes histórica que tuerce antinaturalmente la espontánea y escritas, de las Leyes de Indias, la comunidad indígena fue fecunda economía incaica. El incario desarrolló una despojada por el feudalismo, cuyas expresiones eran el economía socialista, el trabajo colectivo tenía un carácter latifundio y la servidumbre. Mientras que Europa, por el siglo agrario, con fines sociales en su realización. La economía XVIII, tomaba otro rumbo al fortalecerse y ascender al poder feudal implantada por los conquistadores resulta ajena al la clase que desplazó y liquidó el feudalismo: la burguesía devenir histórico de estos pueblos, iniciándose una dualidad (la revolución francesa fue una revolución burguesa). Pero entre lo oficial impuesto y lo natural indígena negado. La revolución de la independencia hispano-americana colonia utilizó el trabajo colectivo como trabajo forzado en «encontró al Perú retrasado en la formación de su las minas, descuidando el agro y las obras de carácter burguesía...» Si bien se abolieron las mitas, se dejó en pie la público. El esquema virreinal sofrena las inquietudes aristocracia terrateniente, la que si bien ya no conservaba comerciales de las colonias; la independencia surge como «sus privilegios de principio, conservaba sus posiciones de una respuesta a las necesidades del desarrollo capitalista de hecho. Seguía siendo en el Perú la clase dominante». Esta la civilización occidental. La República no logra articular la clase, apoyada por el militarismo gobernante, retardó el escisión producida por la conquista. La dependencia con el surgimiento de una vigorosa burguesía urbana. Y recién se capital extranjero no cede ni siquiera ante la aparición de intentó una reorganización gradual de este problema cuando nuevos rubros de riquezas naturales; por el contrario, con se promulgó el Código Civil (1852), que favoreció la ello se ahonda el carácter centralista, costeño y dependiente formación de las pequeñas propiedades, en desmedro de de la economía peruana. los grandes dominios señoriales y de la comunidad indígena, al mismo tiempo. No obstante, la pequeña propiedad no II prosperó, y por el contrario el latifundio se consolidó y extendió, siendo la única perjudicada la comunidad indígena, El problema del indio: «Todas las tesis sobre el problema indígena, la misma que, pese a todo, logró sobrevivir. que ignoran o eluden a éste como problema económico- social, son otros tantos estériles ejercicios teóricos, —y a veces sólo verbales—, condenados a un absoluto El latifundio de la costa difería del latifundio serrano; el descrédito. No las salva a algunas su buena fe. costeño evolucionó hacia modos y técnicas capitalistas, en Prácticamente, todas no han servido sino para ocultar o tanto que el de la sierra conservó íntegramente su carácter feudal, resistiendo a la transformación industrial y capitalista; desfigurar la realidad del problema». Mariátegui concibe el aún así no logró destruir la comunidad indígena. El latifundio problema del indio no como un asunto racial, administrativo, costeño cada vez más ligado al capital extranjero prefirió jurídico, educativo o eclesiástico, sino como un problema desplazar los tradicionales cultivos alimenticios por el cultivo sustancialmente económico cuyo origen está en el injusto de algodón de exportación, generando un círculo vicioso de régimen de propiedad de la tierra, en el gamonalismo; importación de alimentos y exportación de materias primas. mientras subsista esta forma de propiedad todo intento por solucionar el problema del indio quedará disuelto en el Indistintamente del tipo de latifundismo, éste impedía el estéril denuncia lírica o en la prédica oportunista e desarrollo del capitalismo nacional, ya que los terratenientes inconsciente. Terminar con el gamonalismo, con la obraban como «intermediarios o agentes del capitalismo feudalidad, significa de- volver más que tierras; significará extranjero»; como una barrera para la inmigración blanca; se para la raza desposeída su rendición histórica, la oponían a la renovación de métodos, cultivos, etc.; era recuperación de su esencialidad moral y su auténtica incapaz de atender la salubridad rural; particularmente en la integración a la vida nacional. «La solución del problema del sierra el feudalismo agrario se mostraba del todo inepto indio tiene que ser una solución social. Sus realizadores como creador de riqueza y de progreso. En una palabra, deben ser los propios indios. agrega Mariátegui, «que el gamonal como factor económico, está, pues, completamente descalificado». Este concepto conduce a ver en la reunión de los congresos Como a Mariátegui más le importaba seguir (y indígenas un hecho histórico. Los congresos indígenas, proyectar para el Perú futuro) la "comunidad agraria desvirtuados en los últimos años por el burocratismo, no indígena", estudia el destino de ésta bajo el régimen representaban todavía un programa; pero sus primeras republicano. A pesar de la absorción feudalista, la reuniones señalaron una ruta comunicando a los indios de comunidad ha subsistido por el espíritu del indio: a pesar de diversas regiones. A los indios les falta vinculación nacional. las leyes de cien años de régimen republicano, no se ha Sus protestas han sido siempre regionales. Esto ha tornado individualista. contribuido, en gran parte, a su abatimiento. » IV políticos del imperio; la iglesia era el estado mismo. Es lo que se llama Teocracia. Producida la conquista, se impuso El proceso de la instrucción pública: Lo analiza estrechamente el culto católico más que la prédica del evangelio, de modo ligado al económico-social, como no podía ser de otro modo. que el culto pagano de la religión incaica subsistió bajo el Reconoce y analiza las tres influencias en la educación culto católico, fenómeno al que se conoce como sincretismo peruana: la española, la francesa y la norteamericana, estas religioso. El rol de la iglesia católica durante el virreinato fue dos últimas injertadas en la primera. La educación en la de aval del estado feudal y semifeudal instituido. Si bien es colonia tuvo «un sentido aristocrático y un concepto cierto que hubo choques entre el poder civil y el eclesiástico, eclesiástico y literario de la enseñanza», en otras palabras, éstos no tuvieron ningún fondo doctrinal, sino que fueron una educación elitista y escolástica. El desprecio por el meras querellas domésticas. Con el advenimiento de la trabajo, por las actividades productivas fue alentado por los República no hubo cambio en tal sentido. La revolución de la claustros universitarios incluso luego de producida la Independencia, del mismo modo que no tocó los privilegios independencia. La República, que heredó las estructuras feudales, tampoco lo hizo con los eclesiásticos. El radicalismo gonzalez-pradista surgido a fines del siglo XIX coloniales, buscó luego el modelo de la reforma francesa, ya constituyó la primera agitación anticlerical surgida en el en las postrimerías del siglo XIX. Hasta que la reforma de la Perú, pero careció de eficacia por no haber aportado un segunda enseñanza de 1902, empezó a reflejar la influencia programa económico-social. De acuerdo a la tesis socialista, creciente del modelo anglosajón: sería el primer paso para las formas eclesiásticas y doctrinas religiosas son peculiares adoptar el sistema norteamericano, coherente con el e inherentes al régimen económico-social que las sostiene y embrionario desarrollo capitalista del país. Preconizador del produce, y por tanto, su preocupación es cambiar ésta y no modelo yanqui fue el Dr. Manuel Vicente Villarán, cuyas aquellas. prédicas triunfaron con la reforma educativa de 1920, por ley orgánica de enseñanza dada ese año, pero como no era VI posible, según Mariátegui «democratizar la enseñanza de un Regionalismo y centralismo: Este problema, en cierto modo, viene país, sin democratizar su economía, y sin democratizar, por vertebrando todos los demás. Aunque reconoce que existe, ende, su superestructura política» la reforma del 20 devino sobre todo en el sur peruano, un sentimiento regionalista, en fracaso. dicho regionalismo no parece ser más que «una expresión La reforma universitaria merece también la atención de vaga de un malestar y un descontento». En realidad, el problema se plantea entre Centralismo y Federalismo. El Mariátegui. Hasta el Perú alcanzaron los movimientos Centralismo se apoya en el caciquismo y gamonalismo reformistas que se iniciaron en Córdoba, en el año 1918, regionales (dispuestos, no obstante, a reclamarse producto de la «recia marejada post-bélica», aunque en ese federalistas de acuerdo a las circunstancias), mientras que país, en un principio, la ideología del movimiento estudiantil el Federalismo recluta sus adeptos entre los caciques y careció de homogeneidad y autonomía. Los estudiantes de gamonales en desgracia ante el poder central. Ciertamente, América, querían sacudir el medioevalismo también de sus uno de los vicios de la organización política del Perú es y casas de estudio. Sus reclamos se basan en la necesidad sigue siendo su centralismo. Pero entiende Mariátegui que de que los estudiantes intervengan en el gobierno de las toda descentralización que no se dirija a solucionar el universidades y el funcionamiento de cátedras libres, al lado problema agrario y la cuestión indígena, «no merece ya ni de las oficiales, cátedras de limpios y nuevos conocimientos. siquiera ser discutida», porque, advierte, no es este En una palabra, querían que la Universidad dejara de ser un problema meramente político, ni desde este solo punto de órgano de casta, cesara ese divorcio entre su función y la vista ella alcanzaría para solucionar los problemas realidad nacional y tomara el verdadero rumbo que le era esenciales. Por otra parte es difícil definir y demarcar en el asignado. Con relación a este problema, Mariátegui nos Perú regiones existentes históricamente como tales. No hace un extenso estudio sobre la reforma en el Perú y la obstante Mariátegui estudia las tres regiones físicas: la reacción en su contra, las ideologías que intervinieron en Costa, la Sierra y la Montaña (que no significan regiones en esta pugna: los conceptos civilistas burgueses de Villarán, el cuanto a la realidad social y económica), afirmándonos que aristocratismo idealista de Deustua, etc. Para Mariátegui, «el la Montaña carece aún de significación socio-económica; en problema de la enseñanza no puede ser bien comprendido cambio, «la actual peruanidad se ha sedimentado en tierra en nuestro tiempo —dice— si no es considerado como un baja» o Costa, y la Sierra es el refugio del indigenismo. problema económico y como un problema social. El error de muchos reformadores ha estado en su método «Las formas de descentralización ensayadas en la abstractamente idealista, en su doctrina exclusivamente historia de la República, han adolecido del vicio original de pedagógica». No se puede desconocer la ingerencia del representar una concepción y un diseño absolutamente factor económico en la estructuración de planes y programas centralistas», dice Mariátegui, y como la descentralización a de enseñanza, en todos los tiempos. que aspira el regionalismo, no es legislativa sino V administrativa, el problema ha permanecido en pie. ¿Qué opina Mariátegui sobre la descentralización? Primero, El factor religioso: La religión incaica fue un código moral antes clarificar el propio concepto del regionalismo, para evitar el que un gamonalismo regional. Luego una definitiva opción entre el conjunto de abstracciones metafísicas. Su iglesia (por gamonal o el indio: «no existe un tercer camino». Porque, lo llamarla de algún modo) fue una institución social y política, más cierto es que «ninguna reforma que robustezca al cuyo culto estaba subordinado a los intereses sociales y gamonal contra el indio, por mucho que aparezca como una satisfacción del sentimiento regionalista, puede ser estimada actitud antiacadémica reclamando sinceridad y naturalismo, esa sinceridad que no se encuentra en los versos de José como una reforma buena y justa». También estudia el Santos Chocano por su excesiva egolatría pero que si problema de la capital, concerniente a todas las capitales de aparece en los ensoñados versos de José María Eguren. América, y sostiene que la suerte de Lima está subordinada a los grandes cambios políticos, como enseña la historia de Son también analizados por Mariátegui: Mariano Melgar, Europa y la propia América. Magda Portal (a quien llamó la primera poetisa del Perú), Alberto Guillén, Alberto Hidalgo y César Vallejo de quien VII dice es el poeta de una estirpe, de una raza, creador El proceso de la literatura: En éste su último ensayo, Mariátegui absoluto, nostálgico pero no retrospectivo. «No añora el renuncia a ser un crítico imparcial: «Declaro sin escrúpulo, imperio como el pasadismo perricholesco añora el virreinato. que traigo a la exégesis literaria todas mis pasiones e ideas Su nostalgia es una propuesta sentimental o una protesta políticas ...». Desde su punto de vista analiza la literatura de metafísica. Nostalgia de exilio; nostalgia de ausencia». la Colonia, «de irrenunciable filiación española», en espíritu y sentimientos, y este colonialismo mental supervive al Virreinato, dando como resultado una literatura mediocre por Y, finalmente, analiza las corrientes de su actualidad, en falta de raíces propias, no habiendo podido «eludir la suerte especial la indigenista, que llena una función histórica en la que le imponía su origen». Explica las razones socio- sociología peruana en evolución y cuyo más amplio sentido económicas por qué ha subsistido ese colonialismo literario, lo lleva a consubstanciarse con «la reivindicación de lo y agrega: «el literato peruano no ha sabido casi nunca autóctono», que, no obstante, no paraliza los otros sentirse vinculado al Pueblo». Aunque destaca en Garcilaso, más Inca que conquistador, el primer destello de elementos vitales de la literatura peruana. Y es literatura "peruanidad", y rescata a Ricardo Palma y a sus Tradiciones "indigenista" y no "indígena" —aclara Mariátegui— porque de las pretensiones del colonialismo, pues estas Tradiciones tienen aún no puede dar una versión verista del indio, sino que «política y socialmente una filiación democrática». Hay que tiene «que idealizarlo y estilizarlo. Tampoco puede darnos esperar hasta la llegada de González Prada para ver anunciada la posibilidad de una auténtica literatura peruana. su propia ánima. Es todavía una literatura de mestizos ...» González Prada significa la ruptura con el virreinato; uno de Mariátegui confía en la suerte del mestizaje, el que debe ser los últimos reductos del colonialismo intelectual es la analizado como cuestión sociológica, no étnica. universidad, de allí emerge la «generación futurista». En tales circunstancias el Movimiento Colónida, encabezado por Valdelomar, surge como una insurrección, como una