La victimología es la disciplina científica derivada de la criminología que estudia a las
víctimas de la delincuencia en las diversas fases de victimización. El principal objeto de estudio de esta disciplina es la víctima y sus características, así como su relación con el delincuente y su rol dentro de la situación delictiva.
Clasificación y tipos de víctimas
Víctima no participante: también denominada víctima enteramente inocente o ideal. Su intervención no desencadena el acto criminal; la relación entre el agresor y la víctima es irrelevante. Ejemplos: atentados terroristas, víctimas de un asalto, ser arrollados por un conductor en estado de ebriedad. Víctima participante: desempeñan cierto papel en el origen del delito, interviniendo voluntariamente o no en la dinámica criminal. Ejemplos: caminar a altas horas de la noche en un lugar peligroso, dejar abiertas las vías de acceso al hogar, peleas a golpes, eutanasia, suicidio, homicidio. Víctimas familiares: pertenecen al núcleo familiar del infractor, y se encuentran en una situación de especial vulnerabilidad por su relación convivencial o doméstica con el agresor. Ejemplos: abuso sexual, maltrato físico, violencia psicológica, entre otras. Víctimas colectivas: son aquellas puestas en peligro por bienes cuya titularidad no corresponde a una persona natural, sino a una persona jurídica, a la comunidad o al estado. En estas infracciones destaca la despersonalización, colectivización y anonimato respecto a las relaciones entre el delincuente y ofendido. Ejemplos: delitos financieros, fraudes al consumidor, delitos informáticos. Víctima especialmente vulnerable: aquellos sujetos que por diversos motivos ofrecen una predisposición victimógena específica. Ejemplos: * Edad: niños y ancianos les resulta más difícil ofrecer una resistencia eficaz. * Estado físico o psíquico del individuo: enfermedades y minusvalías. * Raza: victimización de minorías. * Sexo: mujeres y homosexuales son víctimas de ciertos delitos producidos en el entorno familiar y laboral. * Factores sociales: posición económica, estilo de vida, ubicación de la vivienda, trato con grupos marginales. * Profesiones: policías, vigilantes, taxistas, empleados de entidades bancarias y farmacéuticas, prostitución. Víctima simbólica: algunas personas sufren actos dirigidos a menoscabar un determinado sistema de valores, partido político, ideología, secta o familia, a los que pertenece el agraviado, siendo un elemento representativo de los mismos. Falsas víctimas: denuncian el delito que en realidad no ha existido. * Simuladoras: actúan conscientemente poniendo en marcha el proceso con la finalidad de provocar un error judicial. * Imaginarias: creen erróneamente (por causas psicológicas o inmadurez psíquica) haber sufrido un acto criminal.