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PSICOLOGIA DEL DESARROLLO II

SESIÓN 2
ETAPA DE LA ADOLESCENCIA
(15 A 20 AÑOS)
…Continua

2.1 EL DESARROLLO EMOCIONAL EN LA ADOLESCENCIA

Las hormonas están estrechamente


relacionadas con las emociones, en
especial con la agresión en el muchacho
y la agresión y depresión en las niñas.
Algunos investigadores atribuyen la
creciente emocionalidad y cambio en el
estado de ánimo de la adolescencia
temprana a las hormonas, pero es
necesario recordar que en los seres
humanos la influencia social se combina
con las hormonas pudiendo predominar
dicha influencia.
Los cambios emocionales en los adolescentes lo enfrentan también ante otros
dilemas; las ganas de volar con sus propias alas y el miedo a soltarse de la
mano de sus papás, los cuales se oponen, y tienen que aguantar el mal humor.

La adolescencia es un período de malestar, en el que se plantean grandes


dudas, contradicciones, tanteos, excesos de todo tipo, que son necesarios en
esta etapa que sirve para afirmarse. Ser indulgente (fácil de perdonar), no
llevarles la contraria, ayudarles a describir su personalidad, sus valores de
adulto, esta es la única manera de vivir esta etapa, entre padres e hijos, de una
manera enriquecedora. El camino puede ser más o menos doloroso, rápido, o
frenado por tentativas inciertas. Hay que saber escuchar para poder evitar a
tiempo depresiones u otros extremos como son fugas, afiliaciones secretas o
hasta llegar al peor de los casos: tentativas de suicidio.

Tras el período turbulento de la pre-adolescencia, la conducta de los


adolescentes suele sosegarse. Las relaciones familiares dejan de ser un
permanente nido de conflictos violentos y la irritación y los gritos dejan paso a
la discusión racional, al análisis de las discrepancias y hasta a los pactos y los
compromisos. A partir de este momento, el conflicto se desplaza desde la
ambivalencia afectiva a la reivindicación de ciertos derechos personales, entre
los que destacan las exigencias de libertad e independencia, la libre elección
de amistades, aficiones, entre otros. El adolescente intenta experimentar sus
propios deseos más allá del estrecho círculo de las relaciones familiares. En
este segundo momento de la adolescencia, los intereses afectivos de los
jóvenes abandonan masivamente el ámbito familiar estableciendo nuevas
elecciones de objetos afectivos extra familiares, como es propio de todo adulto.
El problema reside en que la afectividad va más allá de la familia, pero el
adolescente sigue viviendo – y tal vez por mucho tiempo - en el domicilio
paterno.

2.2 EL DESARROLLO COGNITIVO EN LA ADOLESCENCIA

El adolescente es capaz de entender y construir temas y conceptos abstractos.


Entre los 17 a 18 años la capacidad de inteligencia, llega a su totalidad,
osea, el adolescente puede entender todo como un adulto.

Durante la adolescencia también se


producen cambios a nivel del
pensamiento. Es el momento donde
empieza a existir un pensamiento lógico
formal, el cual les permite pensar en ideas
(abstracción) y no sólo en objetos reales
(característico de la infancia). Este tipo de
pensamiento permite al sujeto la
capacidad de reflexionar; se vuelve
introspectivo, analítico y autocrítico.

En un primer momento el adolescente reemplaza los objetos por ideas. Las


ideas se manejan como antes se hacía con los juguetes. Las palabras y la
acción son reemplazadas por el pensar. El intelectualismo es un mecanismo de
defensa que el adolescente utiliza asiduamente. Esto se manifiesta en el
interés de las ideas, la lectura, siendo normal que discuta ideas e ideologías
con su grupo de pares.

A partir de este nuevo tipo de pensamiento formal el adolescente se incorpora


al mundo adulto, liberando su pensamiento infantil subordinado, programando
su futuro y reformando el mundo donde va a vivir. También le permite
incorporarse en la sociedad y un mayor dominio de sus impulsos.

Las funciones cognitivas desarrolladas le permiten independizarse, aunque de


otra parte, se siente enormemente atado a su grupo, y con mayor razón a sus
amigos. Empieza a manifestar una interpretación egocéntrica del mundo,
centrándose solamente en sus habilidades (egocentrismo racional).

En este momento muchos adolescentes muestran una destacada creatividad,


que expresan por medio de la música, el arte y la poesía. La creatividad
también puede expresarse en el deporte, y en el mundo de las ideas,
discutiendo, reflexionando, por ejemplo; sobre moral, religión, ética, labores
humanitarias, etc. El escribir en un diario personal es otra manifestación de la
creatividad en éste periodo.

Por otra parte, también se vuelve extremadamente introspectivo y


ensimismado, y empieza a poner todo en tela de juicio, a rechazar los viejos
límites y categorías. Al hacerlo constantemente excluyen las actividades
tradicionales y se convierten en pensadores más creativos.
Los adolescentes muestran así mismo una creciente capacidad de planear y
prever las cosas. De este modo, el pensamiento de las operaciones formales
requiere la capacidad de formular, probar y evaluar hipótesis.

En general se acepta que no todos los individuos logran dominar el


pensamiento operacional formal. Más aún, los adolescentes y los adultos que
lo alcanzan no siempre lo utilizan de manera constante. Por ejemplo, en
situaciones nuevas y ante problemas desconocidos los individuos tienden a
retroceder a un razonamiento más concreto. Al parecer es indispensable cierto
grado de inteligencia para el pensamiento de las operaciones formales;
intervienen además, factores culturales y socioeconómicos, en especial la
escolaridad.

No obstante, el adolescente en esta etapa también puede presentar ciertos


problemas.

2.3 EL DESARROLLO PSICOSOCIAL EN LA ADOLESCENCIA:


identidad, familia, compañeros, amigos.

Búsqueda de su identidad.

Al mismo tiempo que tienen que asumir las transformaciones de su cuerpo, el


adolescente descubre que tiene que hacer una cosa más y que es muy
importante: hacerse cargo de su vida personal.

El adolescente se da cuenta de que ya no puede seguir siendo el niño o la niña


que obedece a sus papás. Pero aunque no es un niño, tampoco es un adulto, y
entonces entra en la crisis de identidad, porque no sabe quien es; le hace falta
descubrir a cualquier precio cuáles son sus puntos de referencia y para ello
pasará por varias etapas como; la duda, el rechazo, la provocación, las
experiencias, la ansiedad, etc.

En la adolescencia se produce el duelo de la identidad y la lucha por


alcanzarla. Se entiende la identidad como el ser uno mismo en tiempo y
espacio, en relación con los demás y con uno mismo. Es el sentimiento de
seguridad sobre sí mismo. La crisis de identidad es característico en la
adolescencia, y se refiere a la imposibilidad de desarrollar una idea de sí
mismo coherente. Parte de la resolución de la crisis de identidad consiste en
pasar de ser dependiente a ser independiente. Es frecuente que los padres y
sus hijos adolescentes discutan sobre la elección de amigos, pandillas, planes
de estudio y temas relacionados con la filosofía, pues es la forma en que los
adolescentes van afianzando su propia identidad.

Familia.

La familia juega un papel muy importante para que el adolescente pueda tomar
buenas decisiones, los padres deben dar ánimo y orientarlos por ejemplo
respecto que carrera elegir, pero sin mencionarles que es lo mejor que ellos
pueden elegir, para que ellos mismos tomen la decisión.

Los padres deben compensar a sus hijos si es que ellos han tomado buenas
decisiones. El estímulo por parte de los padres es el mejor promotor para que
estos puedan alcanzar todas sus metas.

Compañeros.

El grupo de compañeros entre los adolescentes es un fenómeno esperable.


Permite al adolescente sentirse contenidos dentro de una zona intermedia, que
ya no es la familia ni la sociedad. Le permite al adolescente mantener la ilusión
que pertenece a un sistema que lo protege de la responsabilidad social. Le da
al individuo la ilusión de un cierto manejo omnipotente sobre los objetos.

Amigos.

La mayoría de los adolescentes suelen tener uno o dos mejores amigos y


también varios buenos amigos. El adolescente suele escoger amigos
basándose en intereses y actividades comunes, y en su decisión influyen
mucho la igualdad, el compromiso y la lealtad. Conforme los amigos se vuelven
más íntimos, el adolescente tiende a acudir más a ellos que a sus padres en
busca de consejos, no obstante, sigue recurriendo a sus padres para que los
orienten en cuestiones de educación, finanzas y planes profesionales.

Las personas significativas en el entorno del adolescente.

La influencia de los padres, el padre, la madre, la familia extensa, los otros


adultos y los amigos.

2.4 EL DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD

La adolescencia en sí es una etapa muy delicada y clave en el desarrollo de la


personalidad que va a regir la vida del adulto, su desarrollo social, emocional y
desenvolvimiento positivo en la sociedad. Según algunos autores se creía que
el temperamento y el carácter, integrantes principales de la imagen corporal y
la personalidad, estaban determinados biológicamente. Sin embargo, hoy se
entiende que el adolescente además de vivir cambios físicos y psicológicos,
coexiste en la sociedad y es influenciada por esta.
Los valores y normas de comportamiento que haya incorporado el adolescente
a su persona, marcaran su identidad, servirán de brújula en su conducta social
y permitirán adquirir una identidad sólida. La imagen corporal adquiere mayor
importancia cuando el adolescente se encuentra en grupos que dan demasiada
importancia a los atributos físicos tanto del varón como de la mujer. Es
necesario hacer hincapié, que aunque la imagen corporal juega un papel en el
desarrollo de la personalidad, los factores de mayor importancia son el
ambiente donde interactúa el joven, la familia y los valores que se mueven a su
alrededor y la motivación como el motor de las conductas.

2.5 EL DESARROLLO DE LA SEXUALIDAD

Es probable que el aspecto más importante del desarrollo durante estos años
sea la madurez sexual. Los adolescentes sexualmente maduros tienen el
equipo necesario para las relaciones sexuales, sin embargo, en las culturas
modernas, pasan por un largo período de educación o de entretenimiento antes
de que la sociedad los considere preparados para el matrimonio. El efecto
emocional de las experiencias sexuales durante este período puede tener
repercusiones en la escuela, tanto en los estudiantes que intervienen, como en
los compañeros que se enteran de sus experiencias.

Conforme sus cuerpos maduran sexualmente, los adolescentes deben realizar


algunos ajustes emocionales y psicológicos. Su posición respecto a lo que
significa ser hombre o mujer se ha desarrollado durante años, quizás desde su
infancia. Ahora, deben empezar a consolidar su identidad sexual y sentirse a
gusto con ella.

Es posible que los maestros tengan estudiantes de muy diversos tamaños,


madurez, y conocimientos sexuales. Como hemos visto, ser muy distinto a los
demás parece ser una ventaja sólo para los muchachos que maduran antes
que sus compañeros. Para los demás, ser diferente les puede causar
problemas en su desarrollo emocional y social.

Muchos adolescentes se extrañan de que los adultos den tanta importancia a la


relación sexual, pues dicen: "Para mí, el ligue" me va bien; nos basta con
besarnos, acariciarnos, andar tomados de las manos durante horas y horas,
mirarnos a los ojos, apoyarnos en un árbol y cubrirnos con la sudadera de
miradas indiscretas. El resto, para más tarde. El sexo no les interesa tanto si no
salen con alguien, a menudo rechazan la relación sexual hasta que no están
seguros de su pareja, a veces, la posponen hasta el noviazgo, o hasta el
matrimonio, o hasta acabar los estudios, etc., al mismo tiempo que dicen, que
para entregarse a alguien "hay que amar hasta la locura". Y tienen razón.
Hacer el amor no es un acto cualquiera, es uno de los más notables y ricos en
sensaciones, y para que sea satisfactorio se espera que esté acompañado de
una gran dosis de amor, de sensibilidad, de emoción.

Sin embargo, en familias donde reina el desacuerdo, la rigidez o la dejadez, los


adolescentes tendrán antes que sus pares una vida sexual activa, aunque no
por eso plena.
En nuestra sociedad; el amor es fácil, el placer inmediato triunfa en todos los
cines, en todos los rincones de las calles, y en las revistas, por lo tanto no hay
que ser inocente y creer que los adolescentes están protegidos ante los males
por siempre y para siempre.

Sabemos que la relación sexual sobreentiende la plena asunción de nuestro


cuerpo y sus responsabilidades. Se encuentra justificada en la armonía de dos
seres que se consiguen en el tiempo. Sin embargo, los adolescentes no son lo
suficientemente maduros para emprender esta experiencia, conocen de una
forma imperfecta el funcionamiento de su cuerpo y todavía no han adquirido el
sentido de sus responsabilidades ni quieren conocer las consecuencias de sus
actos. Muchas veces el "paso a la acción" da lugar a actos fallidos,
desencantadores, a veces dramáticos por ser prematuros.

Pero encontramos algunos jóvenes que tienden a creer que hace falta haber
tenido la experiencia de una relación sexual para "ser normales", para darse
importancia a los ojos de los demás y para ser aceptado por éstos. La gran
pregunta ¿soy normal? Todavía los asusta.

Si bien no hay edad para tener la primera relación sexual, los jóvenes no
sacarán nada satisfactorio, nada realmente positivo de una relación sexual que
se vive precipitadamente, por solo "ser como los demás" o "saber cómo es"….

ACTIVIDAD

SESIÓN 2: “¿De qué época es este texto?” (Actividad Motivadora)

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Berger, K. (2007). Psicología del desarrollo. Infancia y adolescencia. 7a ed.
España: Médica Panamericana.
Berk, L. (2004). Desarrollo del niño y del adolescente. 4a ed. España: Pearson
Educación.
Cornachione Larrínaga, María A. (2006). Psicología del Desarrollo:
Adolescencia y Juventud. Edit. Brujas. Córdoba-Argentina.
Papalia, D. (2010). Desarrollo humano. Edición: 11ª ed. Madrid: McGraw-Hill.
Papalia, D; Wendkos, S; Duskin, R. (2009). Psicología del desarrollo. De la
infancia a la adolescencia. México: Mc Graw Hill.
Rice, P. (1997). Desarrollo Humano. Estudio del Ciclo vital. México: Prentice
Hall. Hispanoamericana S.A.
Santrock, J. (2006). Psicología del desarrollo: el ciclo vital. Edición: 10ª ed.
Madrid: McGraw-Hill.
Weschler, David (1995) Escala de Inteligencia Weschler para Adultos – WAIS.
España: TEA.

BIBLIOGRAFÍA VIRTUAL.
Autocuidado en el ciclo vital. Pautas de evaluación. Escuela de Enfermería
Universidad Católica de Chile. Disponible en:
http://www7.uc.cl/sw_educ/enferm/ciclo/
ESCALA DE INTELIGENCIA WESCHLER PARA ADULTOS (WAIS)
Ficha Técnica

Autor: David Weschler.


Nombre original: Weschler Adult Intelligence Scale (Wais), cuya traducción al
castellano es la Escala de inteligencia Weschler para adultos.
Año de la publicación: En 1977 fue la primera edición, pero hasta 1995 no pudimos
tener la versión española del mismo. Ésta fue llevada a cabo por TEA, bajo la
dirección de Mariano Yecla y Agustín Cordero.
Forma de aplicación: Se pasa de forma individual; el sujeto debe ir completando la
prueba siguiendo las instrucciones del evaluador.
Duración: Puede variar entre 1 hora y 1hora y media.
Edades: Se recomienda que se aplique a partir del rango de edad de los 15, es decir,
de la adolescencia en adelante.
Finalidad de la prueba: Obtener la puntuación de la inteligencia (C.I.) del sujeto
evaluado en las 3 escalas posibles: verbal, ejecución y total.
Características de la prueba: El Wais está formado por 11 pruebas, elaboradas a
partir de la estrategia racional, divididas en 2 escalas generales que en conjunto
formarían la escala total de la inteligencia. La distribución de las pruebas es la
siguiente:
Escala verbal:
1. Subtest de información. Evalúa la cantidad de información que ha obtenido el
individuo de su ambiente, así como la memoria a largo plazo y la forma de
utilizarla.
2. Subtest de comprensión general. Evalúa la capacidad del sujeto para
comprender situaciones sociales, internalizar normas, adaptación social, etc.
3. Subtest de aritmética. Mide la capacidad de trabajo con los problemas
aritméticos en situaciones cotidianas.
4. Subtest de semejanzas. Evalúa la capacidad de abstraer y formar conceptos
verbales.
5. Subtest de retención de dígitos. Evalúa la memoria auditiva inmediata, atención
y concentración.
6. Subtest de vocabulario. Evalúa el nivel cultural, la expresión verbal y el grado
de familiaridad con el uso de palabras.
Escala Manipulativa o de Ejecución:
1. Subtest de figuras incompletas. Mide la capacidad del sujeto para organizar
visualmente un dibujo y reconocer el elemento esencial que falta en él.
2. Subtest de diseño de cubos. Mide la capacidad de analizar y sintetizar dibujos
geométricos abstractos, estrategias de solución de problemas, integración
psicomotora, rapidez, impulsividad, distracción, perfeccionismo.
3. Subtest de ordenamiento de figuras. Evalúa la percepción visual, la
organización de series de forma lógica, conocimiento de secuencias sociales,
capacidad de formación de hipótesis, flexibilidad y capacidad para captar
relaciones causa-efecto.
4. Subtest de ensamble de objetos. Mide la capacidad de sintetizar un todo a
partir de sus partes, además de la organización visual, la coordinación
visomotora, persistencia, impulsividad.
5. Subtest de símbolos de dígitos. Evalúa la memoria auditiva inmediata, atención
y concentración.
La información que podemos extraer del WAIS es tanto cuantitativa como cualitativa.
Normas de aplicación y corrección: El orden de aplicación de las pruebas sería
siguiendo la forma expuesta anteriormente, es decir, primero la escala verbal con sus
correspondientes sub escalas y a continuación la escala ejecutiva. Solo en casos
excepcionales es admisible alguna variación.

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