Está en la página 1de 30

MANTO Y LA CORONA

Ie58]

-e{.n

u¡)
,o
R-
fu,;o
Aquí debería estor tu nombre
r

Cada dia levanto,


entre mi corazó¡ y el sufrimiento
que tú sabes hacer, una delgada
pared, un muro simple.
Con trabajo solícito,
con material de paz, con silenciosos
bienamados instantes, alzo un muro
que rompes cada día.

No estás para saberlo. Cuando a solas


camino, cuando nadie
puede mirarme. pienso en ti: y entonces
algo me das, sin tú saberlo, tuyo.
Y el amor me acongoja,
me lleva de tu mano a ser de nuevo
el discípulo fiel de la amargura,
cuando desesperadamente trato
de estar alegre.

Porque soy hombre aguanto sin quejarme


que la vida me pese;
porque soy hombre, puedo. He conseguido
que ni tú misma sepas
que estoy quebrado en dos, que disimulo;
que no soy yo quien habla con las gentes,
que mis dientes se ríen por su cuenta
mientras estoy, aquí detrás, llorando.
l5
7

Yrl quc inútilnrentc


se! Qué simple he sido, amigal yo pensaba,
me defiendo dc til quc sin traba.io antes de amarte, que te conocía.
me tomas por la fuerza. o nlc sohornas No era verdad. Comprendo. Antes de amarte
con tu sola presencia. Ilstov vcnciclo. ni siquicnr te vi: no vi siquierl
Ni siquiera pocirías cvitu rlo. kr que estaba en mis ojos: quc tenías
Hasta en mi corltra, cstov de partc ¡uya: una luz v un dolor, y una belleza
soy tu aliado mejor cuando ¡nc hicres. Lluc no era de este mundo.

Y porque lo comprcndo, porclue sufio.


porque estoy solo, y vives, dócilmentc
hov aprendo a mirarte. ir csl:lr c()ntiq():
rr saber deslumbrarme.
crédulo, humilde. abierto. antc cl milagro
tlc mirarte subir una escalcra
Cuando coses tu ropa- () cruzar una calle-
cuantlo cn tu casa bordas, inclinhndote
muy adentro de ti, mientras la planclra
se calie¡1ta cn la mcsa.
y parece que sólo te preocup.rs .,
por cl color de un hilo. por el grur'so
cle una aguja. ¿,en qué piensas'l ¿,Qué invisibles
prcscncias te recorren. quc te vuelvcn. llov recibí algo tuyo: unas palabras
mihs que nunca, intocable'J (luc al mismo tiempo nacen
tlcl lugar apartado que visitas,
Como una lumbre quicta v de la más cercana
tr¡ corazón sc cncicncle -r lc compl iu. li'liciclad con que me ocupas.
y hace que el mu¡rdo neccsite
cle las cosa s que hacos. Me dices solamente:
"l-lcgué bien. No lo olvido. Lo:rcompaño".
Mi voluntad. mi san_qre. mis descos v l'irmas con tu nombre.
cor.nienzan hov a darse cuenta:
cn todo lo que haces. sc descubrc Asi que no estoy muerto: quc rcspiro
un secrcto. sc aclara unÍl respucst¿t, . rr ulgún sitio de tu pcnsamiento:
un¿r sombra se explica. (lr.rc una parte tan sólo
l6 l7
de mí se quedó en México, escribiéndote.
4
mientras que lo que soy de verdadero
está contigo en calles, en jardines.
Arrrrc¡ue estés lejos, aunque pienses
Invisible camino al lado tuyo, r¡rrc cstás viviendo a solas,
con los ojos cerrados. esperando ,,tctr¡pre que formas o que rompes algo,
que tú me cuentes Io que miras , rr:rrrtlo algo modificas en las cosas
para verlo tambiéni quiero mirarlo
rllre tc cercan a diario, y al hacerlo
para poder, dentro de mucho tiempo. .,
rcn lcs que estás abandonada.
decirte alguna vez: "¿,te acuerdas r ¡rrt' no hay nadie en tu mundo transformado,
de aquel viaje que hicimos?" rr,
' ¡r;rtleces tú sola. Estoy contigo.
Quiero, además, contarte
que aquí también me estás acompañandot r:rbajo tuyo y mío
I
que tan concretos y evidentes ls rrbrir las ventanas, las opacas
como el lugar en el que aquí descansas. ¡r;ucdcs, asomarnos a las cosas.
como la ropa tuya que dejaste y rr() quedar en paz, no ser felices
colgada en una percha, están conmigo rrr(jntr¿ls haya tristeza, mientras haya
tu voz. tus ojos buenos. tu deseo rr l¡io que no esté hecho, mientras llore

de hacer el bien. Poblados se me alumbran. \rnl:ldo en una calle, entre las gentes,
con tu esperanza. el sueño y Ia vigilia. lln pcrro abandonado,
Porque tú lo mandaste al clespedirnos,
porque soy cosa tuya. he procurado l\' tanto darse en vano, está dolido
rrr corazón que sigue dándose.
no sufrir. He querido que no sicntas
li xlo lo que tú eres, lo que amas,
ningún dolor por causa mía y se despeña
rr('cc en tu corazón, y lo desborda,
en este dedo chico de tu mano
r lc I us manos abiertas.
que es'hoy mi corazón. Porque te quiero
te digo: "No he sufrido."
l't'ro no das en vano yal recibo
Dejo ya de escribirte 1,, t¡ue dejas caer. Tu desventura
para seguir pensando en ti. Comienzo v;r no es completa desde que te amo.
a tralarte de "usted" en mi memoria.
Usted no me ha olvidado;
l( c ina desamparada.
Yo la estoy esperando. Usted lo sabe. ..cñora de las dádivas perdidas:
18
l9
porque te necesito te hago falta. Hoy. por ti, me conmueven
Tu soledad no es sólo tuya, es nuestral las canciones de amor de un limosnero
porque te das existo, que canta en el camión al que he subido.
y solidariamente respondemos y son tesoros míos incomparables
de la suerte del mundo. un cabello robado. un recordado
perflume, unas palabras. un pañuelo
con pintura de labios.

Mc ha: enseñado que soy.ioven:


5 quc puedo. sin temor, verte a los oios
o besarte delante de las gentes.
Como ya n:rda puedo
imaginar por mí Me tengo que reír con toda el alma
cntre luccs
estoy viviendo. y -claó.
ct¡ando recuerdo mi tristeza.
el amor me agobia.
me emborracha. me enf-e rnra-.
Iloy lo sé: soy alegre.
quiero dccir tan sol¿rmcnte Mc contentan el ruido y el silencio.
lus noches me contentan y los días.
lo que me has cnseñaclo. los secretos
que cn mí vas alumbranclo. llr voz. el cuerpo. el alma, me contentan.
las pequcñas vcrdadcs quc tevantas
sobrc mi vicjo tiempo tlc ecrrizlr. ('uando me he despedido
tlc ti. después de un día de tenerte,
Por ejcmplo. de golpe me enseñastc v camino de gusto por las calles.
<¡uc- hay muchas cos¿rs mías cn el mundo: rrv. cómo compadezco-
quc sov rico. Que tengo en todas partes ;r los que tú no amas. que no saben.
lugares c¡ue, por ti, me pertenecen: Y me dan ganas de abrazarlos
Iugarcs, fechas. luces. qt¡e he tomado rr toclos, de gritarles quc la vida
sencillamcnte, porque en ellos t's buena: que tú vives. quc debemos
he p:rsuclo contigo, obliga toriamente ser felices.
y cn cll,rs tc has quedird6 partr sicmprc. ( ) rlc ccharme en el suelo. boca arriba
r'on los o jos cerrados.
Nunca pensé quc hubiera tanta parte v cu¿tndo alguno llegue a preguntarme
clc mi ternura en cosas. en momentos si algo me pasa, contestar: "Es sólo
que cstán y pasan cerc¿¡, ¿r toclas horas. (luc soy feliz porque la quiero."
20 2l
Y tú, que tanto tiempo me ocultaste Mi dicha es ésta. reina triste:
lo que era yo. al sentirme yo soy el testimonio
pensarás que soy bueno o que estoy loco. de tu existencia verdadera.
y desde cerca o desde lejos
me mirarás compadecida. Sólo yo he merecido
y sonreirás tendiéndome la mano. cstar contigo, ser tu voz, tu mano,
tu embajador. tu ejército, tu espadal
el que canta tu gloria.
6 Soy el que te defiende,
que es tuyo frente a todos. que te sigue
a pleno orgullo, frente a todos.
Nadie querría ver dos veces
y te ama callándose, en secreto.
la silla en que te sientas. porque nadie
la mira como es: alta. clarísima:
sustentada a Ia sombra
de una corona límpida de oro. 7

Tú desde allí. asistida Si comparado con mi amor, que nace,


por las virtudes teologales, me voy quedando chico,
miras bullir en torno, enamorada
,,qué soy junto al amor que tú me tienes?
tú misma para siempre
del mundo amante que quisieras, Igual que una palabra
miras bullir en torno tuyo que cercan otras muchas en un libro'
tu corte de mendigos desdeñosos. soy entre lo que dicesl
Y los llamas. Y sufres. cntre lo que tú piensas,
eomo un olor de anís en un armario:
¿,Por qué tú sola encuentras como barca mecida. circundada
esa pared cerrada a tu deseo por agua y viento inalterables,
de repartirte en todos y sin límites? circundada y tranquila, alegre y dócil'
¿lPor qué tú sola, abandonada? cstoy en lo que haces.

¿.Y qué milagro hizo que en medio Y tus palabras y tus pensamientos
de tantos ojos, frente a ti, cerrados. y tus hechos. me prestan un sentido
abriera yo los ojos? y un pasado y un rumbo.
22 23
Náufrirgo. roto. cnronqucciclo.
(lue no es verdad que te haya conseguido:
enccnclí mis hogueras e¡r la orilla
que sigues siendo tú. la inalcanzacla:
más alta. sobre cl mar. y tú las vistc
al pasar. clesdc lejos. y llcgastc que hay muchas cosas tuyas
v cur¿lstc mi scd. fuiste a mis llagas. qlle no puedo tener.
arrop¿lste mi fiío.
v me guardastc inermc y consolaclo Quó delicia delgada. incomprensiblc.
sobre tu corazón. la de verte dc leios,
.Allí en silcnc io.
v soportar los golpes de alegria
que dc mi corazón ascienden
mientras mi amor en vela tc contempla.
rul lccrcarsc ir ti Por vc7 Primcra:
he tocaclo tu ¿rmor v estov dormido.
sicmpre por vez primer¿l. a cada instante.

Y al mismo tiempo. así. iuego a pcrdcrte


)i a descubrirte. y sé que te clcscubro
8 sicmpre mejor de como te he perclido.

Es como si dijeras:
Centímctro a ccntímetro "Cuenta hasta cliez, y búscame". y a oscuras
cabcllo. tcrnur¿t. olor. palabras_ vo empezara a buscarte, y torpementc
-pic-1.
mi amor tc va tocanrlo. te preguntara: "¿,Estás alli?"' y salieras
riendo clel escondite,
Vov descubriclrclo a clia rio, convcnciéndonrc tú misma. sí. en el fondo: pcro envuelta
cle quc cstás.¡unto a mi: ile quc es posiblc cn una luz distinta. cn un ¿lrom¿l
nucvo. con un vestido cliferente.
¡, cicrto: quc no eres,
ya. la I'clicidad imaginacla.
sino la tl icha pcrmancnte,
hallada. c<¡ncretísíma: cl abicrto
aire total en que me picrclo v gano.
I
Y tlespucrs. clué delicia
Hasta más no p<ltlcr csttly colmacltl
la de poncrmc le'jos nucvanrcnte.
c<ln cacl¿t cosa tLly¿t. Sov cl sitio
Mir¿rrte conlo ¿ln tcs
v ll¡¡m¿trtc tir: "trstctl". p¿tr¡l !lu(.si(,¡1tit\ al quc llcg:rs a cliario a visitartc:
a cncontrtlrtc conti-eol
24
25
7

a prceuntarte cómo amaneciste: lumbre. una dolorosa boca triste


a platicar. contigo. de tus cosas. que me dice gimiendo
que te he perdido ayer. Que te he perdido.
El sitio en que te miras.
cantas. ríes, estás a todas horasl Y en pensamiento corro a los lugarcs
una y muchas a un tiempo; donde pudiera hallarte.
túr misma muchas veces. y no estás en ninguno: están vacíos
multiplicada como en una alcoba o tomados por gente que mc mira
con paredes de espejos. con extrañados ojos comPasivos:
oue me mira con lástima. en secreto.
Ya no pretendo ser yo mismo
pa ra que tú me veas; Es de noche. La luz en las ventanas
estoy contento así, me he contentado habla de gentes cálidas. reunid¿tsi
con ser tu mensajero. hombres y niños Y mujercs
tu traductor. tu inté rprete: a salvo de este viento. de cste cluro
el que toma al dictado Io que dices hielo que me sofoca.
para euardarte inalteracla. Y yo estoy detenido ante una casa
de ventanas oscuras. Está en sombras
Con mirarme a la cara. alguien podría
la ventana que amo.
saber si estás alegre o triste.
Inúrtilmente espero. Ya te fuiste.
Esta mañana. Si yo hubiera sabido
como tu voz y tu silencio eran que decías "adiós" al desPedirte
todo lo que escuchaba: como habías ayer, cuando dÜiste "hasta mañana",
dejado en mí una lumbre y un secreto. qué diferente hubiera sido todol
quise escribirte las pa la bra s qué voz hubiera entonces descubierto
que escuchas que te leo. para decir tu nombre.
Ya las conoces: son palabras tuvas. para encerrarte en las palabras mias
más humildes Y fuertes
y ricas y necesitadas.
10
Tú no te hubieras ido
si me hubieras dejado que dijera
Siempre que digo "hoy". en Io más hondo que el alma se me cierra, que me duele
de mí nace una lenta cada gota de sangre
26 27
7

cuando te vas. Si yo te hubiera clicho


que no vivo. que nada, que Ia noche, C) imaginarte en tln mercado.
pcsada. clcnsa. soia.
o. simplcmente. que rc quicro.
con ocho mescs va cle embarazada.
¿,Porqué no le tlijistc u mi ccsuer¿r c¡uciánclotc del Precitl
dc las paPas quc compras' con
que tlencs
quc era cl últinlo día?
quc hacermc Ia comida'
Pierrso que hoy no he de vcrtc.
y una desorbitada pesadumbrc O clesolacla cntrc cu¿ltro parcdcs
sc me agrupa en los hombros. mc clesnucl¿¡ c\tov cn llt t'llcin¿t-'
de todo Io que. estando. mc regalas. -micntr:l\
tcntlii'ntlonlc tlnll e¿lm
habrtual, sin senticlo. que llo quleres'
Y cuanclo llegas otra vez. v rompes
mis cárceles c'lc agujas incen<liadas. Y tú. qtlc h(ry Ic c()ncedcs como un lujo
mi soledacl clc agu jas frías. (:oscr ;n clrlcetin. une lirltlilla'
y mc ocupas de nuevo remendarás entonces pobremente '
como a tu misma c¿rs¿r cuando vuclves obligatoriamentc' oscur¿l'
de hacer tus compras. tu trabajo. mi ropa vieja: lavarás los traPos
cntonces vuclvo ¿r ser. v te contemplo. sucios que Yo me qultc'
y soy cl vaso que se colma v cantarás cn voz muy baja
dc esa felicidad pacientc y sinrplc. .rna canción quc todos olvitlaron.
verdadera y creciente
y tan honda. que pucdcs confunc.lirla Anudarás de clicha tu garganta
siempre con la tristez¿l. al oír al cartero
quc p¿lsa enfrentc. por la callc.
porquc de él sólo esperas lo
qtle espcras:
11 una carta le'ian a
conociste.
cle alguien que acaso ntrnca
Qué absurclo. quó imposiblc
,,En clóndc. dime.
entonces
pcnsar cn una casa quieta.
csccrnclerías el amor. tu orgullt-r
[Jna c¿¡sa quc quicrc ser alegre.
de cstar Perdidamente loca '
Y vo co¡r un pcrióclico. leycnclo.
sin mirartc. tapánclomc. sin vcrtc tu corazón infatigable'
micntras clcsavunamos.
tu corona clc llamas. ttt costumbre
horas?
cle cstar hacienclo luz a todas
28 29
Pobre de mí que a veces he pensado, lodas. desde la tierra. desde el cielo,
que muchas veces he querido. l)rotará. como el humo
fabricarte una jaula rlc un incendio escondido. como el aire
con mi ternura, mi dolor, mis celos. rnismo que se pudriera,
y tenerte y guardarte allí. segura. todo el dolor. Y no habrá sitio que no duela,
Iejos de todo. mía ¡rorque el dolor ocupará tu sitio.
como una cosa. tierna y desdichada.
t)csde hace mucho tiempo
conozco el sufrimiento que tú causas:
gr¿rndc como la dicha que me has dado
I2 scrá el que me regales.

lintonces, carcomido yo por dentro.


Tan parecido todo, r¡rordido. atroz, deshilachado'
tan iguales por fuera a las de ahora scré una bolsa de pellejo
serán las cosas ese día. llcna de hiel. de dientes. de cansancio:
que pensaré un momento rrna bolsa risible. con miradas
que no hay lugar para el dolor. t¡uc recuerden las mías:
eue nada c()n pa labra s inútiles, silencios:
ha podido herir nada en este mundo
tan trabajosamente conseguido: con movimientos, Pasos.
edificado con el peso de tanta dicha,
fundado en torno solamente Si tú piensas en mí, si tú me buscas
de ti, para ti sola, por ti sólo. :rlguna vez. podrás hallarme
sobre cimientos tuyos fabricado. hundido. huyendo de la sombra
Pero tú no estarás entonces. tlc- cuanto pueda recordarte.

Y desde el centro
de tu lugar vacío. clesde todo. 13
creccrá el sufrimiento insoportable
que hoy imagino nacla más. Del techo. Por vez primera, desde que te amo,
de las paredes. scntí que me dejabas.
de las ta blas del piso dc m i cr¡a rto. Con qué seguridad definitiva
desde todos los cuartos. rne hiciste ver que más que todos
de todos los rincones de las casas cstabas tú remota.
30 3l
/

Y el clolor rnc caló de una mancr¿r Encontré los cimientos


que no podré dccirte. en ti del corazoni hallé el camino
De tu mir¿tda inconvencible para hallar el camino que buscaba,
mc cirvó l:r :rmirrgtrnr conlr¡ un tr:r.ic y toda tú de puertas claras fuiste,
pucsto a raí2. cortado a mi rncclida. de luces entrevistas.
hccho cle espinas hacia adentro. de agitadas antorchas en la ciega
sombra. en las amenazas de la noche.
Y no era tiempo de pedirte
ni de ofrecer. Tú sola lo tenías o tres. o cuántos
Pero de pronto
luzgado todo. v castigabas. -¿',dos
meses pasaron?- sin saber de dónde
Ay, mis brazos inútiles. inírtiles:
viene cerrada contra'mí una manol
mi corazón a tientas, mis recucrdos.
viene una mano armada
contra mí, que se mete
Y no tuve más cosa
dentro de mí. me parle- me revicnt¿t.
que hacer. quc conocerme desvalidcr
t()talmentc. y tratar de quc no vieras
ni mi necesidad de abanclonado
Y el aire se me vuelve
aire de últimos dias; tus palabras
ni mis <rjos humildes
suenan, cansadas. a palabras últimasl
dc perro hericlo que se esconde.
como tus últimas miradas, estas
breves mirldas son con que me miras.
Y todo cn mí sc quedó innlóvil.
ciego sin esper¿lnz¿t
Y yo remonto apresurado,
oscuramente odián«lome.
nadador impotente. enfurecido,
porquc tú lo tlccías. y cr:r eicrto
la corriente del tiempo,
quc- estaba solo. porque lo clccías,
pa ra busca r los días como joyas
y decías Io amargo v sin remedio. que alguna vez miramos como eternos,
y alumbrarme con ellos, regresarlos,
dártelos nuevamente, y que tú sientas
14 que todo empieza aquí: que este momento
es el primero: que no me conoces;
que quieres, todavía. conocerme.
Fundadt¡ sobre piedra.
sólidanrente f irme. cotocado Todo lo que era mío se transforma
en tu amor, me he sentido. en ademán de adiós: todo le grita
32 l3
a mis oídos sordos r'on cualquier cosa que me dieras:
lo que no quieren escuchar: que nada t¡rrc era mcntira
podrá alcanzarte nunca: r
¡ue te neccsitara toda;
que nunca nada tuvo lazos t¡uc cualquicr cosa tuya,
capaces de ligarte. ¡lor pequeña quc fuera, sienclo tuya. ..
Y que. por no tenerla, estoy muriendo.
¿Qué voy a hacer si no me quieres.
si nada sé mirar, si no comprendo:
qué voy a hacer conmigo.
qué voy a hacer, si los hombres no lloran? 15

Dicen que dando lástima, se logra


conseguir el amor. Si yo entre lágrimas l)or estc latlo estoy tranquilo:
te enseñara que sufro, que me dueles, r'rrando por torpe o tristc o por cansado.
algo, tal vez. podría. rr:rcla puecla dccirte,
tc cnscñaré un pocta muerto
Pero quiero decírtelo: r¡rrc desde mí te cantc
Yo no voy a llorar ni a lamentarme .
cl¿rramente. fielmcnte. alegremente,
Como nadie sabrá que me has querido. lo que sov. lo que tcngo. lo qtle es tuyo.
nadie sabrá que me dejaste.
lin otro tiempo dije muchas cosas
Sólo tú y yo conoceremos esto: rle I amor: eran falsas

que he sido el orgulloso, unas. otras tan ciertas


el amador feliz, correspondido. r'or¡r¡ si ya tc hubiera conocido.

El que contigo estuvo llicn lo sé: tú no quieres esas cosasi


n( tomus p:rra ti lo que fue escrito
como si fuera igual que tú. Contigo. '
Que he sido, que seré el que amargamente. rrrtes de que vinicras.
para no traicionarse en tu memoria.
vio que te ibas. supo que te ibas¡ I'cro piensa que todo
pero no te pidió como cualquiera. lo que no he dicho es solamente tuyol
r¡rrc he despertado
Y sólo yo sabré que hubiera sido rlc un sueño largo, oscuro, y que mc encuentro
cabalmente dichoso rontigo en todas partes. que me nacen
34 35
silencios y palabras ordenados cargara en ti la mano,
que iré copiando cuidadosamente y mordiera tu piel, desvencijara
para decirte que te quiero. tus dientes. y la música
que mueves, al moverte. deshiciera.
Y tú sabrás a ciegas que son tuyos
y silencios- porque en ellos Guárdame siempre en la delicia
-palabras
te mirarás ahorai en lo que digan tie tus dientes parejos. de tus ojos.
ya no habrá soledad ni desamparo, de tus olores buenos.
y será la tristeza una palabra, dc tus abrazos que me enseñas
no más, que se recuerde. cuando a solas conmigo te has quedado
desnuda toda. en sombras,
sin más luz que la tuya,
porque tu cuerpo alumbra cuando amas.
16 más tierna tú que las pequeñas flores
con que te adorno a veces.

Amiga a la que amo: no enve.jezcas. Cuárdame en la alegría de mirarte


Que se detenga el ticmpo sin tocartel ir y venir en ritmo. caminando
que no te quite el manto y. al caminar, meciéndote
de la perfecta juventud. Inmóvil como si regresaras de la llave del agua
junto a tu cuerpo de muchacha dulce llevando un cántaro en el hombro.
quede. al hallarte, el tiempo.
Y cuando me haga viejo.
Si tu hermosura ha sido y engorde y quede calvo. no te apiades
la llave del amor, si tu hermosura tle mis ojos hinchados. de mis clientes
con el amor me ha dado postizos. de las canas que me salgan
la certidumbre de Ia dicha. por la nariz. Aléjame.
Ia compañía sin dolor, el vuelo, no te apiades, destiérrame, te pido¡
guárdate hermosa, joven sicmpre. hermosa entonces, joven como ahora.
no me ames: recuérdame
No quiero ni pensar lo que tendría tal como fui al cantarte. cuando era
de soledad mi corazón necesitado. yo tu voz y tu escudo.
si Ia vejez dañina, perjuiciosa v estabas sola. y te sirvió mi mano.
36 37
I
t7 Abre mi corazón sus puertas
para que pases sin llamar. Ahora
cierro los ojos y pido que llegues.
i Qué clichacxtr¿¡ña. nunca vista' nunca Que llegues para siempre y me acompañes.
pensada. dc tan grancle.
ocupará las horas dc este día?

l8
Mientras vienes. cscribo:
me preparo. escribiendo, a recibirte.
Cuanto más tiempo tardas. es más ávido He detenido la respiración
el acto de esperarte, y más heridos. para sentir si tú respiras.
más impacientes, los momentos.
A la vez has quedado tan presente y lejana.
Yo no sé qué belleza Eterna casi.
alumbras, cuando llegas' en las cosas Fuera del tiempo, sola. sin moverte.
usuales. vistas, desPreciadas.
Y me llenó el terror incontenible
Siempre en torno de ti. cuando apareces, de que tc hubieras idol
se aglomera una simPle de que te hubieras muerto en sueños.
belleza. una belleza que dormía y me hubieras dejado entre los brazos
cn los obietos mismos' aguardándote. sólo una imagen cla ra.
un simulacro tibio, una pcrfecta
Eso me da esPeranzas: máscara tuy¿l con los ojos cerrados.
quizá dentro de mí también existe
una llama dormida' una hermosura Pero aquí está de nuevo
desordenada que hallará sentido como una flor brotando- como el alma
con la señal más breve de tu mano' de una rama florida-
dulce. otra vez tu aliento dulce.
Qué poblada de dicha Y en medio de un placer que de tan tierno
debes estar. pues así la derramas.
me acongoja.
Si no hay nada que toques en que algo
de un sobresalto que me empequeñece.
no suri a clestellando gozo'
queriendo hacerse tuyo. mereciéndote. de una paz en tumulto que me ahoga,
39
38
7

vuelvo ¿r ser. y te miro. a medias. el principio dc un gemido


Vives. Estás dormida. cruza tus dientes. ¿,Has llamado?

:l

Nuevamcnte el silencio
Un temor sin objeto.
cxacta cubriéndote,
una sorpresa temerosa -nube
te toma de repente. te sacude no traspasablc atmósfera invisible-
desde los pies hasta la nuca. te ciñe y te separa.

¿,Caminas qué caminos,


¿',Oyes. acaso.en sueños.
que te busca una voz desamparada; qué atarclccida fuente bebes,
qué intcriorcs. pacífieos espe.ios
sientcs. durmiendo. que no cs.iusto
que tú descanses, mientras alguien
abrc tu propir luz. cn quc te mir s:

trabaja. mientras alguien se consume cn qué oro relumbras engarzada?


de enfermedad. mientras alguno,
que túr pudiste amar, está muriendo? Sobre tu sueño flotas
como en lago cle aceite: nada existe
Afuera toclo sigue pareciendo fuera de la quietud que te conduce.
descsperadamente sin sentidol
lo comprende. convulso. Y como un pucnte milagroso.
tu corazón amenazaclo. tan tenue como el júbilo más tenue.
tan pensativo como un niño,
Y quisieras correr compadecida. un movimiento acompasado
pliega las comisuras de tu boca.
tembloros¿r. quemándote
de caridad y dc esperanza
,:
y tlc [c. y recihir cl sulrimiento
de todos en tus brazos débiles.
y con tu manto lleno dc agujeros Todo está bien ahora. Firme
cobijarnos a todos. como de pieclra sobre piedra. el mundo.

Y tu mano se mueve. Responsable en tu paz. te sientes


y un sonido agitado. una palabra ligada y libre. solidaria.
40 4t
Compre-nclcs la dcsdicha. Dc cualquier moclo. he recobr¿tdo
¿lmas la dicha humilde de las gentes. mi lugar cn el munclo: regresastc'
te volviste acccsible.
Estás dc.jucgos inocentes.
de amablc amor. de alegres voces Mc clcvuclves cl tie mPo.
human¿rs. dc tcrnura simple cl dolor. los caminos. la alcgrílr'
invadida y cercada. la voz. el cucrPo. el alma.
v lrr vitlu v l;t mttetlc. v lo qtte vivc
Y no sabcs si el aire es una playa. más allír tle la mttertc.
si cres leliz porque cumpliste
los t¡rrchlrccres tlcl lrlma tlilrrios: Me lo clevuclves toclo
porque rccién lavatla brilla
cncarcelado en la a Pa riencia
partc en su sitio-
-cacla cle una mu.ier. tir misma. a la que amo'
tu lacultacl clc reralar el gozo:
o porclue ercs hcrmosa: Volviste poco a poco. clcspertaste.
o si la primavera. . . y no tc sorprcnclistc
Algo. que alumbra todo. se refleja. dc encontrarmc contigo.
gravc dc consecuenci¿rs du lces,
cn tu scmisonris¿r. Y casi pudc vcr el irltimo
pclciaño dcl secreto que subías
Todo csth en orclen: c¿rda cos¿r al dormir. pr"rcs a hriste
clcsp¿lcio. muy plácidos- tus ojos
arretllrdir a su fin. Tr¡n neccsrrio -muy
es tu mínimo gesto. como el acto adcntro cle mis o.ios que velaban'
clc entrcabrir una puert¿1.

it
l9
Porquc vo cstuvc solo
qtricro pcnsar quc tú estuviste sola. Yo no qtticro Perderte: Yo no quiero
Que no tc fuistc, quc dormías. quc Por mi c¿tus¿t sc cleshaga
Quc mc clcjaste sin cle'.jarrnc. ni la pirrtL' mí. déhil o Pequcña
y me neccs ita bas de lo quc sola. para mi. construyesl
para poder estar contenta. yo no quiero hacer guerra'
42 43
Y sin embargo, muchas veces no quiere herir. y dañal
a mano armada llego quiere alegr¿lrte. y tc entristeccl
contra mi corazón. y me derramo tiembla buscándote,
cn llr slrngrc la hicl. hlrsta morirnre: y tc pierdc. tc hostigir. lc cn¿li('nit.
y odiánclome hasta el fondo
llamo:r mis fucrztrs. v convicrto 20
tu placcr en rencon en amargaclo
silencio. tus palabras.
Mi cscalcra quc subc. Lentamcntc has llcgado
mi ansiosa voz. mi boca que te llama. a donclc estás. Sin ropzrs. Aquictacla.
en clavo ardicndo. pieciras.
risa clc clicntcs cnemigos. Como un .jarabc irrcmcdiable"
pacicntc y manso. entinlismaclo. oscuro.
Y quicbro cl vaso qrrc me ofreccs tc colma tu dclcitc.
y mc quemo clc sed. m ientrirs el :rgua
itt il va- burlhnclomc. olcndicla.
-in Y tu alma v tu cucrpo entrcmczcl¿rdos
se clcrram¿r. sc m¿tnch¿t. sc atormcnt¿t.
tom¿rn sL¡ exacto sitio: hucles. tocas.
Entonces. asom¿indosc oves. miras entonccs.
por las rcncli.jas tlc la puerta. y encucnlras cl sabor también. y callas.
puedc alcgrarse cl diablo.
Y toclo sc' tc cntrcga. y cn tu mano
Si con mi ¿rmor tc d:rño- reposa el munclo como Lln¿l m¿lnzan¿I.
¡.cómo pueclcs querer que yo tc ame'l v cres. al fin. ducña v scñora.
Miro mi culpa v Ia confieso. in:rtitc¿thlc vr. (lc l() qttc cxistc.
¿,y qué mc valc confcsar mi culpa'l
En ti. ,1qué hcricla cicrro. con hacerlo, Dsstlc ¿rntcs clc n¿rccr t:stabas hecha
de las quc abrí'l Y si ac¿rso p¿r ra ser contemplada.

puedo cerrar alguna. Horas cntcras, días. años.


¿,cómo pedir que me pcrcloncs clesnuda, contemplada. comprendida.
las cicatrices que cn tu amor hc puesto?
País de luna, territorio
Mi corazón, que sicnto de leche y miel y sombra,
como fruta comida de gusanos. eras tú. sin saber: ciudad en tiernas
44 45
Iumbres de gozo. inconquistada: poro a poro te cxtiendes. y cl tlcseo
cerrada alcob¿t cn cl olvido. ticmbla bajo tu piel, sin que lo quicras.
cofre dc siete llaves. inviolado: sc hace visible y brillal
lrlmendrr rlrrr:r: cáscirr¡ dc cspin;rs
y corazón clc a zúca r. cuando más blanda estás. cuando más ccrca'
cntonces algo, alguno.
El amor ha podido conquistarte. rrlguien a quien no miro te recubrc
abrirte. haccrtc tuya. tlc pronto de una exacta
descubrirtc cl placer. d¿rrtc la ros¿r cutícula de espanto.
dc inagotablcs pétalos venciclos. tlc una piel transparcnte que no es tuya.
Como si el aire mismo.
Y al amor has poclido tu capullo de atmósfera, ccrrándose.
amando. consintienclo- tlc mí te defcndiera.
-entregándote,
vencer. tú. la vcncida. lir cntrcgacla.
Y no cs el micdo de que tÚt te vayas
Lo hiciste cosa tllva, tu instrumento cl que siento. ni cl miedo dc tenerte;
mira: cuanclo tc quiero
de podcr. tu coron¿r. tu banclera
ya para siemprc victt¡riosa. yo no puedo pens¿lr en que más tarde
tú podrás no quererme o querrás irte.

Cuando tc quiero, cuanclo cstás. no queda


2L tn mí lugur vacío. no Permitt's
que piense en otra cosa:
ni en el dolor, ni en la amargura,
¿,Qué solccladhiricnte. qué finísima ni en la fuga clel tiempo irrcparable.
desolación tc ciñc a vcccs. clura.
que me puebla dc un simplc, cloloroso No. Lo que es mi enemigo
temblor: cie un evidentc ntiedo? es algo que está fuera de nosotros;
cs algo que te tuvo y que no quiere
Cuando la noche es más solcmne v ciega. pcrderte. que te grita. que se agarra
cuando cn tu cLlerpo hc conseguido dc ti. desesperado. y me combate.
que dcspierte el amor, y plieguc a plie-que.
pétalo a pétalo. Pero mi amor no existe inútilmente.
46 47
7

Estoy en la miseria. me revuelco


como el pez en la arena, en la imposible
Tal vez porque te pierdol porque cada proximidad del mar que creyó suyo.
momento, al acabarse, me conduce,
infalible me acerca Como el pez en la arena.
a morir, a perderte, a que me olvides. luera de ti me oncucntro: me sacaron.

Echado fui, corricio,


Tal vez porque al hablarte estoy hablando.
cxpulsado. cesado, dcscubierto.
sin querer darme cuenta.
Detrás de mí. cn la puerta
con alguien que no es. que ya no tiene
que no sc cicrra todavía.
nada que ver conmigo.
cl relámpago siento clc una espada.
incontrastablei pcro inlusta.
Tal vez porque me dejas. me atosiga
el amor como nunca; y entra y sale Y conmigo combato. Y no conrprc'ndo
en mí, de mí, como si fuera si debo entre gemidos rcgresarmc,
casx. yo. sin paredes:'indefenso rcgresar a peclirte.
lugar expuesto y entregado o si esconderme lejos,
al primero que pasa; predio oscuro cn donde no me mirc naclie.
sin comprador, en venta. ir la¡ner mis hcridas: esconderme
c()mo un enfcrmo avergonzaclo.
Cuiado por el amor. el sufrimiento con cste amor que no perclona,
me visita. Curiosamente que vo no conocía.
hurga por todos los rincones: que he buscado. y que tengo. Y que no puedo.
nada respeta en mí. lo mira todo.

Y yo. con la _qarganta


apretada, sin airei con la boca
sin palabras, reseca; con el peso
del corazón sudando frío.
pienso en ti. T<xlos te aman clesde que te amo.
pero yo sólo tengo la alegría
clc responder por ti. Yo sólo tengo
Nunca creí que amar doliera tanto.
cl poder de sufrir lo que te duele:
48
de tomar Por mi cuenta Qué fragmentada imagcn tuya.
qué parcial y sin forma la que puedo
lo que engendran los hechos de tu vida.
soñari la que me alcanza por las noches.
Tengo mi gozo para construirte
y mi dolor para purificarte. Tú serás para siempre
tú. la mu.jer de cuando estoy despicrto.
Nada puedes hacer con culPa tuYa
porque yo estoy aquí; porque el culpable No basta ahrir los ojos. Es preciso
despertar más y más y más arriba
soy yo. de lo que hiciste.
para podcr sentirte. Porque mucho
se equivoca el que piensa que mi amada
Y yo pago tus deudas,
que son más mías que mi muerte, es sólo la pequeña
para que puedas tú seguir viviendo mujer que va y que viene a todas partes,
y deja en todas Partes
tan inocente y clara
una menuda luz que no existía.
como at dciar la pila del bautismo.
Mi amada. te lo digo. es otra cosa.
¿,Qué tengo, yo. si no rni amor' que pueda
Bien dcspierto hay que estar parr mirartc.
merecer y alcanzar esta ventura?
Para ver, al pasar. que estás vestida
Y el amor te lo debo. De tus manos
con un manto real. en el que ocultas
me llegó como el pan o como el aire.
tu incandescente soledad de lámpara.
y tu fuerza purísima, y el vuelo
De allí he tomado fuerzas
para alegr:rr tu corazón, dulzura de tus alas de pájaro encerrado.
para aliviar tu vida.
Yo no quiero dormir Para soñarte.
y dolor para hacer que no lo sientas.
quiero aprender a despertar del todo.
A mirar lo que nadie, en ningún tiempo'
mirar en ti ha podido.
2tt Lo que eres tú. lo solamente tuyo:
lo quc vive detrás y por cncima
de tu corteza clara.
Es tan amargo, oscuro, Pobre
Más allá de mis ojos. de mis cinco
lo que miro al dormir. que mentiría'
sentidos. necesito estar dcspiert o
no sabes cuánto. si dijera que eres
para emPezar a verte como eres.
la mujer de mis sueños.
51
50
Será el amor como tus brazos.
25 v c()t1 lu\ hftrzos huscarás a ciegas,

Y¿r ss lrccrci¡ tu tiempo, ya la hora


Querida mía: llcgrr rlc ¿rma r. ltr dc cc-rrar los ojos.
No estás aquí. mientras escribo.
ltrisntr:rs re nta rrchan
Pero de tanto que tc vco
hirjo Ios hrazos krs vcstidos ligcros:
se me nublan los oios. Las orcias
la cle cncontrar anrable v nrrcva
de tanto que te escucho.
tu matcria scnsual int r¿r nsll'riblc.
Y te toco. y te huelo. y tc conozco.
¡u ma tcri:rl dc todopocltrosa.
Y como cuando estás Prcselrtc. No cs l¿r tristqztr lo que ticnes.
ocupas cl lugar dc mis Palabras
¡ro la llchrc o la sctl lo quc tc afligc,
¡- de rnis pensamictttos. Dcl aire'. <lcsdc cl centr(| dc tus hrrc.sos
y nada cncuentrr¡ cn n¡í para clecirte
n¿rcr'- de todas partcs. otra cós¿r.
sino las cosas tuvas, conocidas.
Son cl ¿¡mor v nri csperanza.
lus sabitl:rs por ti cuundo tnc quicrcs

Ta¡nbién por tu ventana


se asomará la primavcra.
26
y en ti pondrá la mano. Sorprenclida
tú tle pronto. al scntirtc t n viviente.
pensarás que estás triste. de tan alta Torpcmente. pretendo
que tendrás la alegría: y en tu sangrc saber lo que tú piensns. lo que a solas.
un brillo encontrarás. t¡n salto cuanclo vo no tc miro. r,a formánclose
de agua despierta. u¡r calofrío dentrr clc ti. llenándote dc clulcc
que sin s:rbcr te llcvará a scntirtc pictJ:rd. dc osclrros. ticrnos scntimicntos.
cerca de cstar cnferma. Y torpcmentc sufro. I

Entonccs. con ll lcngtra tibia Sí. t.o sé. Mucha gcntc


te tocarás el palaclar, los labios padece: mucha gcnte !.stá comi(la
mojarás ticrnamente. prrr st¡ tlcbilicl¿trl t su miscrii¡.
y te vcriis tlcspitcitt eon cutitrso Y cstá bicn. pttl's l() quicrcs. Lirrr- su ()paca
ademán cle doncella, quc se halla desvcntur¿r tc siga. ¡., c¡tre tc duela
pof vcz primera hcrmosa y sola.
53
52
de muchos días que alargaron
ser lelizi que tu dicha.
lentamente los minutos. las horas;
como si la robaras. te avergüence.
de muchos lentos días de no verte'
¿,Pero qué parte tuya, cuando sola hoy te digo: "Aquí estoy; he regresado."
estás. a mí me queda?
Quisiera imaginarme
Como hay gente pequcña. que no nos separarnos un momentoi
como no puedo sicmpre esta r contigo. que fuimos juntos, o que nos quedamos
como has tcnido que seguir viviendo juntos. Pero es mentira: me lo prueban
cuando yo no he sabido detenertc,
el dolor que me queda' la tristeza
al hallarte clc nuevo, a[ saludarte. que cierra en mi la mano todavía'
el miedo más horrible
me ocupa toclo. Al preguntar: "¿,qué has hecho?"
Hoy. cuando vengas, naceré de nuevo'
siento que estoy desnudo, que una llave
Aquí. al lugar donde te escribo,
son esas tres palabras
llegarás respirando fuerte'
que abre mi puerta u la desgracia.
el corazón preciPitado
de haber subido aprisa la escalera'
Yo no quiero decirte y toda tú dispuesta
que soy capaz de Padecer, que a veces
como para un Primer encuentro:
hasta el agua que bebo me lastima.
toda de abrazos nuevos Y miradas-
Disfrazo mi dolor, para decírtelo.
Cuando pensaba en ti, que te rnovías
con palabras medidas más o menos
en otro mundo, a más de mil kilómetros.
correctamentei y cuando me preguntas
y era mi corazbn como una fuente
si cs dolor lo que miras
salobre, enferma, oscura' que asolaba
o si es literatura, yo me río; mis ojos y mi lengua'
puedo reír entonces, Y callarme.
con qué terror pensaba en no €ncontrarte
al volver; Porque hubieras
conocido otras gentes, o dejado
que tu amor se dañara.
27
o porque me tuvist€ olvidado.
Pero vendrás ahora,
Después de muchos días y sentiré que eres la misma
de no poder decirte nadal 55
54
me digas que te retrasaste Me enriqueciste tú con el oriente
sin queren cuando llegues dc tus pechos pequeños, con tus piernas
unos minutos tarde. sin quererlo; como lcchos nupciales.
sin darte ct¡enta. como clc costtrmbre. con tu gozo clc rcina embarazada
para sicn:pre a salvo de la mucrtc.

Y hc tcnirlo crr nris brazos. cn mis ojos.


28 dócilmontc cntregados.
la gloria, r:l hrillo. la bellcza.

Llcno dc conrpasión y celos. En mí, para mi solo. deslumbrado,


he llegado a ccgarme cn el orgullo cicgo tle tanta lumbre.
de contcmplar la pirrpura y el oro Y el prodigio dc todo ha sido mío.
de tu fastuoso amor. Hc conocido
el lujo inagotablc de tus ojos
a punto de ccrrame. el siempre nuevo 29
sabor de trr s¿¡liva. y el suntuoso
sabor quc a natla sabe
sino a ti sola. El trabaio dc amarte
como tri debes ser amada.
A concicncia he luchado es el trabajo solamente mío.
para darte placer. Desde hace mucho ticmpo.
Como el buzo que salva las lucientes cuando de niño, frente al miedo oscuro
arcas de un barco sumergido. dc las noches. buscaba
he dcscubierto cn ti l¿r ardientc una luz que se abricra
luz dc collares húmedos. cor()nas. por encima de mí. quc lre mostrara
ticrnos metalcs pirlidos, las riguczas colmaclas dcl lrumantr
abiert¿rs gcmas increíbL.s.
calor: cuÍrndo sentía quc las cosas
lulgor cle cctros cl¿¡ros cnccrraban sccrstos quc luta mitno
en los plicgues dc seclas intachables. poclría clcscubrirme.
me prcparaba p¿rra i¡m¿rrtc.
Nada tcnía vo. no pedí nadir
en amor pucde pedirse- Y mis enfermedades. mi desdicha.
-nacla
y, así. mc cliste todo. mi soledad quc nada
56 57
quitar, ¿,qué cosa fueron No lo pienses. El mismo
si no lccciones duras soyl el que tú dejaste.
de amor. que me obligaban a buscarte?
Abandonado. solo:
Cuando sentí que estaba solo e nemistado con mi cuerPo'
supe quc tú existías. odiado por mi alma,
Supe de ti también por la segura me fui. sin ti, quedando
presencia dulce de mi madre. cada vez más abierto ¡i sin defensa'

Mis pasos, los primeros, Mi soledad, mi orgullo. ¿,los recuerdas?,


sin que nadie pudiera sospecharlo. ya de nada me sirven.
me llevaban a ti. Cada palabra Desde que tú te fuiste años
-¿,cuántos
que mi boca aprendía, de infierno. cuántos siglos?-
me preparaba a pronunciar tu nombre. no me defienden más.

Cuando jugaba estando solo Como lruta sin cáscara'


jugaba a estar contigo. como ceniza cn Pie son solamente
cuando viene tu ausencia.
Detrás de cada gozo conseguido.
de cada sed saciada. Cuando te retiraste, las Paredes
de cada esfuerzo pleno, se me fueron cayendo: cada hora,
estabas esperándome tranquila. cada minuto más. cada momento.

Ya ves por qué te quiero bien ahorai Ya ves. el mismo soy que está sufriendo
mi amor no cs cosÍr nueva. porque te quiere Y no fe encuentra.
Como a la muerte. irremisiblemente, porque recuerda Y sabe'
desde el nacer te estaba destinado. porque no estás.

¿,Porqué no soy. Por qué no Puedo i

ser yo las gcntes que allá lejos


30
te escuchan. sin saber quién eresl
que sin saber quién cres te acompañan.
No pienses quc soy otro que te preguntan. que te obligan
porque mi corazón ahora, a que pienses cn ellos.
como un muchacho triste. está llorando. a que vivas Por ellos Y me olvides'l
58 59
¿,Por qué no puedo ser tu mano.
Yo no quiero sentirlo asíi no quiero
tu dolor. tu vestido? sufrir por tantas cosas.
¿,Ypor t¡uó n() mc (lciu la memori¡¡ Es algo que mc m¿¡nda. cs mi cnemigo
que te csp,crc tranquilamcnte: más grandel el enemigo agazapado
quc me nruer¿r unos días en mi sangre. quc chupa mis c'ntrañas,
unos tlías- micntras vuelves? que las hincha de cólera. dc micdo.
-sólo
de aborrecibles miclcs de' violencia.
Mi cor¿rzrin. c()rn() r¡ll ¡dolesccntc
que cm bo rraclli nthsc ha qucrido Cuando lo siento. siento fr'ío:
librarsc dc sufl ir. tc cst/¡ ll mando. ya no soy yo, ("comprcndc's'l Y quísiera
quc no eYistisra nadie.
Tc tliee ,,¡trc no prretlc. quL. no guanta. que a nadic conocicras. qtre ninguno
quc si tri no nrc c¡uie rc-s. pudiera vertc y saluda rte.

Y t¡na ¡.:i¡itia rlc <lcscspcranza Cada palabra entonces que no clices


clescsperacla.un gritrr quc no suen¿r para mí. catla simplc pensamiento
aparecc tle prlrnto que tienes dentro para otros,
dentro cle nrí. Me llcva. me deticne es algo que me quitas.
sin (¡rc vo pueda resistir. Te firistc.
Como si ir manos llcnas rcparticras
Pcro no picnses que sov otro. sin mi permiso. contra mí. jugando.
Debu.lo dc cslc mundo osct¡ro mi solo bien. mi ser. el aire mio.
quc rrc sepulta, atrás de csta dureza y me fucras dejando pobrc
quc mc ticnc amarrado. sin esperanza de pedirte nada.
ptñriis hirlllr rmt si rcsrcs¿ls.
Y soy como el mendigo princiPiante
que escondiera la mano cuando Pasa
y lo saluda el rev quc fuc su amigo.
3l El errcmigo duro. atroz. me obliga
a quererte completa: sola
para partir tu soledadl amarga
Tc kr rligo cn voz ba.ja. c'n voz muy b;rja
para podcr volverte dulcc: triste.
parÍr quc l;rs palahras no te duelan.
para hacer tu alegría.
60
6l
Me l'uerza a que te quiera mía sólo. .tt)
Y entonces otra vez. te ruego-,
-perdóname
entonces me pregunto. ¿,es mi enemigo?
Me jor que nunca. hermosa
serías. Increible. de tan bella.
Ticrna y sin pcnsamientos; habitada
32
por alguien quc construyes.
quc cclilicas por dcntro con lu misma
quietudl que te respira dulcemente
la sangre. que contigo
Algunas veces. al mirarte, comparte el pan. el alma. la ternura.
un filo claro de ternura
me hiere agudamente, me dividc, Entonces, al oírte, el que no sePa
abre mi corazón hasta las lágrimas. pensará que hablas sola.
Habrá en tus ojos defendidos,
Cuando te esfuerzas toda inexprcsivos dc mirar hacia dentro,
por ser feliz y hacernos ser felices. un olvido en silencio
y mueves Ias sutiles herramientas y unrr tristcza esPcritnzada.
de la perfecta gracia.
Sentada muchas horas. Protegida
Entonccs, frente a la amargura, por una lumbre t ransparente.
frente al dolor que llevas, que Ilevamos, mientras tu vientre enorme se acomoda
conmueves como una solita ria sin pedirte permiso.
llama de veladora. que quisiera pesada y dulce sentirás que nada
calentarnos la noche. fuera tit ti tiene imPortancia.
y coserás y tejerás cantando.
Y la tcrnura nitida me obliga
a querer abrazarte. protegerte; Quién te hcsar¿l entonccs. neccsaria.
guardarte, por absurda y débil. inocente. bcllísima, dist¿rnte:
contra mi corazón: cubrirte fundadora del mundo.
con mis manos. convirtiéndome aliada de la vida. constructora.
yo solo, al mismo tiempo,
en tu padre y tu madre y en tu hijo Quién te mir¿tra entonces
mayor. el que te vela cuando duermes. con tus vestidos flojos, aumentadal
62 63
y estoy contento, porque corro
poblad¿r y quieta. inalcanzable. nris riesgos junto a ti. Porque a mi izquierda
mientras enamoracla dcl que- esperas. v a mi derecha estás luchando.
tocada del ¡nisterio. Y porque sé que cuando vuelva
te das y tc recibes. y te salvas. ir descansar mis brazos, a cerrarme
las recientes heridas.
ya no será para estar solo.

34

Conro no cstamos solos cn cl mundo.


y mir mos afircra. y nucstm isla
dc amor está comunica<la
por puentes incontablc-s
con las »cccsitlirtlcs. las tri\tc/ls.
cl dolor <le las gcntes:
como tc sicntes rcclamacla
por una obligación rnhs fucrtc
quc tu mism:r vc nt ura.
va no tc basta quc te cliga,
o tc clllltc () tc ll()r|j quc lc qrticro
para crccrmc quc tc qt¡iL'fo.

Me has pctliclo que piensc


en comhatirl que tomc. p«rr nti orgullo
v por tu ¿rmor. mi siticl.
mi lugar dc soldado cn la amar.€tura
cle los ejérci«rs humanos.

Porque tc quiero y porqr¡e sov. te cscucho:


y porquc t¡uicrtr scr p<rrquc tc quicro.

Estoy aquí. diciénclotc


que no he olvidatlo lo que debo:
64
Hab¡é durado un año en escribirlo, tal vez más. Deié
de escribirlo porque ella me dijo que ya eran muchos poe-
mas de amor. Y entonces escribí 1o último del lib¡o di-
-32- ciendo que ya no era un poema de amor Después siguió
El manto 1 k corona, 1958 la relación; digamos, cambiada ya, durante toda la vida,
hasta que ella murió.
Son signos reales de un ¡eino universal metafísico, c¡¡l
Ér" .r, pocas palabras, la histo¡ia de El ruanto y k
celeste. Una mujer de una belleza que yo juzgué perfcc' "r,
corond.Te digo \¡a cosa, su nombre estaba efectivamente
ta. Muchas ocasiones le diie que era la mujer más pcr'
en la dedicatoria del libro, pero la cambié porque ella se
fecta del mundo; tanto en belleza como en espíritu' Y
casó. Cuando el libro ya estaba editándose, cambié la ¡e-
1o sentía de verdad en mi co¡azón. Era la mujer de uno
dacción de la dedicatoria.
d.e mis mejores amigos, y yo, sin da¡me cuenta, me fl¡l
enamorando de ella. Y a ella le pasó lo mismo conmigo'
Así que de repente tuvimos que entr en amores' EII
.rrr" gr"n artista y tenía un grupo a su al¡ededor -l
mi manera de ver- sirviendo e iluminando siemprc,
Y ellos no sabían lo que estaban recibiendo. Yo le dlll
alguna vez: "Miras bulli¡ en torno tuyo tu turba da
mendigos desdeñosos".
Porque los veía como mendigos que no se daban cucn'
ta de lo que estaban ¡ecibiendo, de la perfección de aquc'
lla mujer. Con ella conocí lo mejor de la felicidad' Pcro
conocí también lo más hondo, lo más negro, [o más pu'
trefacto del sufrimiento' Conocí las dos cosas a la vez Po'
siblemente, la imagen de realeza metafisica no la tenla cn
realidad; tenía sus lualidades enormes y yo la veía asistidt
por las virtudes teologales: la fe y Ia es peranza y la caridrrd
.rt"brn er, ella, la manifestación de eso ante el mundo'
Pero nada puede se¡ así, de tal manera que me hizo sufrl!
mucho también. Todo eso está exPresado en el libro: lo¡
momentos de felicidad y los de desgracia.

96
s7
Poeta, más que por los cuatro costados, por los cinco sentidos,
Rubén Bonifaz Nuño (Córdoba, Veracruz, 1923) tiene la vi¡tud
de hallar la singularidad poética hasta en la realidad más áspe-
ra, En su obra muestra, presentados con un lirismo de muy
alta calida4 los múltiples hilos efectivos con que se entreteie
la vida del ser humano, y en esle aspecto alcanza alturas litera-
rias pocas veces entrevistas por el común de sus colegas.
Como traductor de textos latinos el trabajo de Bonifaz Nuño
es de primedsimo orden, como también lo es el docente y de in-
vesdgación que hasta la fecha ha realizado en la UNAM. La eru-
dición que esto implica no ha sido estorbo, como es frecuente,
para su labor creativa, según se desprende de la iusta apreciación
de Eduardo Lizalde: "su vasta obra de poeta y de traductor de la
poesía latina ha sido posible gracias a un sentido de la poesía
a la vez ascético y apasionado, reticente y desbordado. Para hacer
una obra como la suya es necesario un infalible olfato estético y
unas dotes extraordinarias de critico y de cantor, un ángel coosis-
tente. No es otra la clave de esa pulsación deslumbrante que se
siente correr por sus libros".
I Este volumen conriene El rndnto y k corona (L958) y La
flama en el espejo (1971), libros que ponen de relieve el notable
talento lírico del autor y justifican plenamente las palabras de
Ramón Xirau: "Creo que si algo nos salva, según puedo leerlo
en la espléndida poesía de Rubén Bonifaz Nuño, es el amor."

También podría gustarte