Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Mictla PDF
Mictla PDF
consignado en los vocabularios o en las "artes de las lenguas continente, más que de
indígenas" formulados con propósitos de evangelización, las conclusiones definitivas o
figuras e interpretación de los Códices, los restos arquelógi atisbo sólo tiene un afán
cos de los museos y los informes verbales que aún persisten de exploración.
en la memoria de muy contados individuos.
Ciertas obras modernas que intentan en nuestros días Míctlan,
hacer una especie de revisión de las mitologías o más bi'en
dicho de los mitos: egipcios, griegos, nórdicos, germánicos, etc. A reserva de tratar a SI
v aun tratan de casos específicos como el de "Los dioses daremos estos tres enunci
perdidos de Inglaterra" (asunto tratado por Brian Branston, estas cuatro palabras: Míc
de reconocida solvencia en materia de mitologías) me ha un solo concepto: el del n
espoleado a reunir aquí algunas referencias que vagan disper mundo inferior, el infien:
sas en libros y en artículos y aun más, considerando q~e las abajo) 'el cual corresponj
etapas históricas que vive la humanidad actual ha oblIgado universo primitivo indígem
a los países del viejo mundo,. por medio de sus hombres más de las sombras, de idénti(
representativos, a 'enfrentarse al estudio de sus mitos arcaico.s marinas.
provistos de nuevas técnicas, revisando y aceptando el testi Por medio de este con
monio de su literatura tradicional, contenido en sagas, can tratado de entender el univ
ciones y aun en cuentos infantiles con objeto de lograr una me de la tierra y, al mismo I
jor visión de sus propios orígenes, pienso que entre nosotros y ocultamiento de los astn
podrían los especialistas ahondar en temas análogos. a éstos como seres vivos.
Con todas la modestia de mis limitaciones, esto es lo que Para esto ha imaginade
me propongo en estas páginas: abordar con un poco de más que la fantasía ha despleg,
aliento el concepto que tuvieron nuestros indígenas del pasado nes irreales que con el tra
acerca del trasmundo. Por lo tanto, tomando los informes d'e pueblo 'en pueblo y de ¡nd
Jos cronistas, lo investigado por los arqueólogos y lo consigna- . cierto grado de verosimili
do por los mitólogos nórdicos (cuyos informes me parecen ser tos que constituyen parte d
los más cercanos al tema que me propongo) ofrezco al lector nidas en los sagas nórdico
los tópicos siguientes: el mundo inferior, su situació~ y entra por todos los países. Tanl
áa, quiénes eran los regentes, mensajeros y otros habItantes de de nuestro país pertenece a
aquellos recintos, quiénes y por qué causas se iba a aquellos to puede ser enfocado con
lugares, qué ofrendas llevaban y con qué objeto, el uso del de mitos relacionados con
número nueve, la relación entre Nith y Hel y, por último, las Quedó ya indicado, perl
similitudes o paralelismos que entrega la comparación de los trabajo serán utilizadas d(
rasgos de este tema, tanto en la mitología de México, como nuestro país y son: los ¡nfe
en la del norte de Europa. dino de Sahagún, ya conten
Con objeto de lograr mi propósito, cada uno de los puntos ya a] través de otros estudi(
enunciados arriba lo presento, apoyado respectivamente 'en y los capítulos relativos qu
los datos que proporcionan las culturas nahoas, maya quiché, de Chichicastenango, o sea
tarasca u otomí de México y nórdica de Europa. El asunto cido por "Popol-Vuh" enl
es netamente folklórico y ofrece un amplio campo a la inves aseguran autores modernos
tigación en otras culturas, tanto del viejo como del nuevo d'e acuerdo con los sagas ffii
RA NÁHUATL EL PLANO o MUNDO INFERIOR 77
en las "artes de las lenguas continente, más que de provocar polémicas, de establecer
sitos de evangelización, las conclusiones definitivas o aportar pruebas concluyentes, este
ódices, los restos arquelógi atisbo sólo tiene un afán aclaratorio o contiene un intento
verbales que aún persisten de exploración.
individuos.
intentan en nuestros días Míctlan, Xibalbá y Hel
: las mitologías o más bien
os, nórdicos, germánicos, etc. A reserva de tratar a su tiempo lo referente al Nith, abor
)S como el de "Los dioses daremos estos tres enunciados principalmente. No obstante,
tratado por Brian Branston, estas cuatro palabras: Míctlan, Xibalbá, Nith y Hel engloban
eria de mitologías) me ha un solo concepto: el del mundo subterráneo, el submundo, el
:eferencias que vagan disper mundo inferior, el infierno (del latín: ínferus, inferior, de
n más, considerando qU,e las abajo) 'el cual corresponde al tercer plano mitológico del
manidad actual ha obhgado universo primitivo indígena: el reino de los muertos, la región
r medio de sus hombres más de las sombras, de idéntica división en otras culturas ultra
estudio de sus mitos arcaicos marmas.
risando y aceptando el testi Por medio de este concepto la humanidad primitiva ha
,al, contenido en sagas, can- tratado de entender el universo, aunque sea en parte, la forma
con objeto de lograr una me de la tierra y, al mismo tiempo el por qué de la aparición
es, pienso que entre nosotros y ocultamiento de los astros sobre el horizonte, considerando
r en temas análogos. a éstos como seres vivos.
, limitaciones, esto es lo que Para esto ha imaginado viajes al mundo inferior en los
abordar con un poco de más que la fantasía ha desplegado el vuelo ofreciendo descripcio.
nuestros indígenas del pasado nes irreales que con el transcurrir de los siglos, al pasar de
nto , tomando los informes . de pueblo en pueblo y de individuo en individuo han adquirido
los arqueólogos y lo conSIgna- .
cierto grado de verosimilitud. Tales son las series de rela·
uyos informes me parecen ser
tos que constituyen parte de las mitologías, narraciones conteo
e propongo) ofrezco al lector
nidas en los sagas nórdicos o cuentos infantiles que circulan
inferior, su situación y entra
por todos los países. Tanto lo nórdico como lo procedente
msajeros y otros habitantes de
de nuestro país pertenece a la cultura tradicional y por lo tan
l qué causas se iba a aquellos
to puede ser enfocado como folklore dentro de la categoría
fY con qué objeto, el uso del
de mitos relacionados con las creencias en el más allá.
¡Nith Y Hel y, por último, las
Quedó ya indicado, pero insisto en subrayar que en este
~ntrega la comparación de los
trabajo serán utilizadas dos fuentes principales relativas a
~ mitología de México, como
nuestro país y son: los informes que nos legara Fray Bernar
<lino de Sahagún, ya contenidos en su "Historia de las cosas",
,ósito, cada uno d? los puntos ya al través de otros estudiosos que han espigado en sus obras
¡ apoyado respectIvamente en y los capítulos relativos que informan el manuscrito llamado
~ulturas nahoas, maya quiché, de Chichicastenango, o sea "El Libro del Consejo" más cono
~órdica de Europa. El a,sunto cido por "Popol-Vuh" enfrentando estos datos con lo que
í un amplio campo a la mves· aseguran autores modernos acerca de las mitologías nórdicas
lo del viejo como del nuevo de acuerdo con los sagas medievales.
78 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL EL PLANO
Conviene antes fijar la situación del Míctlan. A Sahagún encuentra rodeado de ríos
es a quien ciertamente debemos la referencia a cuatro lugares chos: Cu zivan: barranco a
de permanencia de los descarnados: pero se llama así también
paz y el Petén.4 bis
"La casa del solo Tonatiuhichan,
I
NÁHUATL EL PLANO O MUNDO INFERIOR 79
~n del Míctlan. A Sahagún encuentra rodeado de ríos que corren entre harrancos estre
~ referencia a cuatro lugares chos: Cu zivan: barranco angosto, estrecho. Zivan es barranco,
ps: pero se llama así también a las cuevas subterráneas en Vera
paz y el Petén. 4 bis
! Se sabe que en lengua maya infierno es Metnal y el dios
~ del dios del maíz: Cincalco
de los muertos es Yum kimi y en el calendario el día señalado
~ua y
a la muerte es Cimi o Kimi; el diablo es Cizim o Kabaz-beaZ:
~ cosa muy mala.5 Por su parte el Popol-Vuh señala como mun
~o rumbos cardinales; mas do inferior el Xibalbá o Chi-XibaZbá. Recinos en sus Notas a
raba un ,quinto punto: ~l cen la Segunda Parte citando al P. Coto, dice que "antiguamente
s cósmICOS, hay que cItar el
~
XibaZbay significaba demonio o los difuntos o visiones que se
creadora: Ometéotl, centro aparecían a los indios" y agrega que, según el Diccionario
1 plano central dedicado al de Motul, X ibalbá era el diablo y xibil es desaparecerse co
1 mundo inferior "noveno y mo visión o fantasma; que los mayas practicaban un baile
~terráneos" donde señorea llamado: Xibalbá ocot, o baile del demonio~ (Tal vez fuese
~nte el Míctlan al que vamos algún baile de muertos o de esqueletos) VTM; y concluye
ngar de muertos. La región localizando y dando carácter al Xihalbá, pues dice: "era la
t propiamente se llama: M icregión subterránea habitada por enemigos del hombre".6 A su
ralpan. Otros vocablos están vez Raynaud, en su nota 53 asienta: XibaZbá, "Lugar del
~ue perseguimos y son: el Desvanecimiento, de la Desaparición, de los Muertos",7 tres
i sopla del norte, Chiconahui conceptos que concuerdan muy bien con nuestro tema: lugar
~ivinidad que se hallaba en donde se desvanecen los espectros, las sombras, donde se des
leo: casa bajo tierra que hizo integran y desaparecen los cuerpos y donde residen los hom
res de la ciudad de Tenochti bres que han dejado de existir. Lugar dividido en varios com
rmhtla; pero son de mayor partimentos, por lo menos en dos secciones, una, las casas de
~ regentes: Mictlantecuhtli y los castigos, y otra, los lugares de tormento, sin contar con
I un patio para el juego de pelota, un jardín, de flores raras y la
~ lugar espacioso, oscurísimo, cámara donde residían los Señores Hun-Camé y Vucub.Camé.
~ se sale ni se puede volver, Por su parte para todas las naciones gothónicas es un tér
~os": Mictlantli;3 según Seler mino común que designa el mundo subterráneo la palabra
~ íchan, "Casa de la noche" Hel, la cual ha sido transformada en su sentido hasta signi
~o: Quenonamican, donde es ficar infierno: Hell. Así encontramos en el antiguo frisio:
Inos informa el Dr. Garibay.4 helle, hille; en el antiguo inglés: heZ; en el noruego arcaico
~ido de lugar o cavidad pro heZ; en el gótico: ludia, siempre referida a un lugar secreto,
Idescendiendo por un camino sellado. Los hombres del norte lo consideraron como una re
~ o también "por unas escale· gión de niebla, frío, escarcha, oscuridad; pero distinguían
9adas en la roca misma-; se entre estos tres vocablos: Niflheim, Niflhel y Hel. Hel se re
~ 55. 78, 80, 83, 85.
4 bIs Popol Vuh, Trad. de RecÍnos. 2' parte, Cap. lI, p. 53 y nota 12, p. 170.
El Diablo. ~..
'Himnos Sacros, pp. 167, 169.
6 Popol Vuh, RecÍnos. 2' parte, nota 6, p. 169.
Situación y entrada
~
n de los mensajeros, cómo los españo
eseahan mucho verlo, angustiábase en
se en alguna cueva, o de salirse de este
frenal, o a cualquier otra parte secreta, FIG. 1. Mictlantecuhtli (Códice Bnrgia.)
le quien confiaba, y ellos le decían:
í infierno y también al paraíso terrenal,
e llama Cincalco, que está cabe a TIa
:grandes secretos, en uno de estos luga·
I 1< . ¡ .
<'. L
-~4ffi,~L
I I I I
1Q Que atravesar en me ,
contrándose una con la
2 9 P a ar el camino por
dolo.
9
3 P asar por donde está
chitónal.
4 9 Atravesar ocho páram
59 Atravesar ocho colla di
6 9 Cruzar por donde el \
7 9 Atravesar a lomo de
8 9 P r esentar sus ofrendas
9 9 Alcanzar, despué ' de I
Chicunaumíctlan .l l
con o o orden:
rlC. 11. Cuatlicuc. (Azteca.)
En la cultura maya se tiene por sabido que la entrada al la entrada de donde se hacf
Metnal o infierno es por los hormigueros. Por lo que toca a Amucutin.Pátzcuaro; los pu
Xibalbá, la entrada es por un camino muy empinado, bajando mismo lugar estaba la puerta
por escaleras muy inclinadas hasta llegar a la orilla de un De acuerdo con la mitolo:
río que corre rápidamente entre los barrancos llamados: Nu que tratan el asunto, la ~
zivan cUl y Cuzivan o sean las cuevas subterráneas 'en la Ve aclara por lo relatado en le
rapaz y el Petén. El punto de partida del camino más exacta para consultar con la pitoni
mente quedaba en el gran pueblo de Carchá a pocos kilóme en el fondo del heZ, a fin d~
tros de Cobán, es decir, geográficamente, descendiendo de las der yel que emprendió el
montañas del interior hacia las tierras bajas del Petén. Mito tratar de rescatarle del pO(
lógicamente el recorrido se desenvolvía de esta manera: mundo. 14 bis
El heZ es una tierra a gral
19 Paso a través del río que corre precipitadamente entre mundos: el de los dioses y
barrancos. son muy vastos, abarca nUf
29 Río que corre entre jícaros espinosos. Significa lugar sdlado; la e
39 Paso a través de un Río de Sangre. más oscuras y profundas. El
49 Paso a través de un río de agua solamente.
una cueva siniestra, espanta
59 Paso de otro río de podre.
picios y desfiladeros, tal con
69 La 'encrucijada de los cuatro caminos: negro, blanco, dico-escandinava. El sendero
rojo y (verde) amarillo. siempre hacia abajo y hacia
7° La sala del consejo de los Señores donde existe un banco otra entrada hacia el Oriente.
de piedra ardiente. Pueden enumerarse las di,
su fin:
Vienen en seguida las casas de castigo de Xibalbá:
1. La entrada es la caVf
1~ La Casa Oscura, llena de tinieblas.
2'" La Casa de las Navajas. espantables precipicios
31'} La Casa del Frío, llena de granizo.
2. Donde está Garmr, pe
4~ La Casa de los Tigres o Jaguares.
sangrentado, en un tire
3. El Río Gjoll, corrient<
5" La Casa de los Murciélagos. 4. El Puente de Gjoll con
Se hace alusión a los lugares de tormento, pero no se men 5. Donde está la doncelll
cionan sus nombres ni sus calidades; pero sí debemos ten'er El sendero desciende n
en cuenta un Patio del Juego de Pelota de los sacrificios y un 6. La Puerta de barras (
Jardín donde crecen flores rojas, blancas, amarillas y negras neamente tras los talon
al cuidado del mochuelo y la lechuza. 13 7. Por encima de la reja
La mitología tarasca proporciona también informes del oxidado que despertará
mundo inferior y de su entrada: Jarcuna o sea Jacona es de la destrucción final.
donde Cupantzieri: el sol, radica y fue por los huesos de su 14 Corona Núñez: Mitología Tarase.
padre. Pátzcuaro quiere decir donde se tiñe de negro, donde 97-100.
todo se torna negro y justamente, donde están las piedras en 14 bis Branston: Gods 01 the Nort.
p. 270; Ap. 2, pp. 271-75.
13 Popol Vuh, Recinos. 2' Parte, Cap. II, p. 56. 15 Patch Howard R.: El otro mund
EL PLANO o MUNDO INFERIOR 83
JRA NÁHUATL
lor sabido que la entrada al la entrada de donde se hace la negrura se le llama Tzacapu
Amucutín-Pátzcuaro; los puréhpechas pensaban que en este
migueros. Por .10 que t~ca a
nino muy empmado, bajando mismo lugar estaba la puerta del cielo. 14
Ista llegar a la orilla de un De acuerdo con la mitología escandinava y con los autores
los barrancos llamados: Nu que tratan el asunto, la estructura del mundo inf~rior se
:uevas subterráneas 'en la Ve aclara por lo relatado en los viajes que emprendieron Odín,
Lrtida del camino más exacta para consultar con la pitonisa Angrbotha, cuya tumba estaba
lo de Carchá a pocos kilóme en el fondo del hel, a fin de evitar la muerte de su hijo Bal
ícamente descendiendo de las der y el que emprendió el hermano de éste, Hermothr para
tierras bajas del Petén. Mito tratar de rescatarle del poder de He.l, la regente de dicho
mundo. 14 bis
nvolvía de esta manera:
El heZ es una tierra a gran distancia, por debajo de los dos
~ corre precipitadamente entre mundos: el de los dioses y el de los humanos; sus dominios
son muy vastos, abarca nueve mundos, regiones o recintos.
[)s espinosos. Significa lugar sellado; la entrada es por gargantas cada vez
le Sangre. más oscuras y profundas. El principio del camino parece ser
~ agua solamente. una cueva siniestra, espantable, colocada entre rocas, preci
,.uatro caminos: negro, blanco, picios y desfiladeros, tal como conviene a una geografía nór
dico-escandinava. El S'endero es sumamente largo, se dirige
siempre hacia abajo y hacia el norte, y, según parece, tiene
s Señores donde existe un banco otra entrada hacia el Oriente.
Pueden enumerarse las diversas etapas del recorrido hasta
su fin:
le castigo de Xibalbá:
1. La entrada es la caverna Gnipahellir en el fondo de
e tinieblas. espantables precipicios.
2. Donde está Garmr, perro feroz que tiene el pecho en
~e granizo. sangrentado, en un tiro sin fondo se halla encadenado.
:Jaguares. 3. El Río Gjoll, corriente ululante con ecos espantosos.
gos. 4. El Puente de Gjoll con techumbre de oro ardiente.
5. Donde está la doncella Mothguthr guardando el paso.
¡ de tormento, pero no se men El sendero desciende más hacia el Norte.
idades; pero sí debemos tener 6. La Puerta de barras del hel "que se cierran instantá
e Pelota de los sacrificios y un neamente tras los talones de quien entra".15
as, blancas, amarillas y negras 7. Por encima de la reja se halla el gallo de color rojo
huza. 13 oxidado que despertará a los moradores del hel 'el día
rciona también informes del de la destrucción final.
ada: ¡arcuna o sea Jacona es
14 Corona Núñez: Mitología Tarasca. Cap. XXXIV, p. 92; Cap. XXXVI, pp.
ica y fue por los huesos de sU
donde se tiñe de negro, donde 97-100.
14 bis Branston: Gods 01 ehe Nort. Cap. n, Ap. 3, pp. 90·93; Cap. X, Ap. l.
nte, donde están las piedras en p. 270; Ap. 2, pp. 271·75.
15 Patch Howard R.: El otro mundo ... pp. 68-88, 252, 300, 319, 323, 328-29.
. 11, p. 56.
84 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL EL PLANO
guerreros, con escudo, flechas y propulsor (átlatl) o en sus Los regentes de Xibalbá
disfraces de buhos o tecolotes. se les considera como uno
Las figuras femeninas corresponden seguramente con Mie Hun-Camé "Supremo Muert(
tecacíhuatl: "Señora de los muertos" o con Mictlancíhuatl: to" son los Grandes Jefes,
"Señora del mundo de los muertos". Siempre ofrecen aspecto cia. Los jueces supremos
descarnado, a las veces con solo el cráneo sin piel, mostrando butos a cada uno de sus sul
formas de mujer, con la cabellera entremezclada con estrellas tenían antaño la condición «
entre sombras -símbolo de la noche-; en otros casos llevan bIes causaban espanto. Erro
coronas o collares de cráneos. lB bis ban al mal, al pecado y a
En las representaciones de los códices se la ve conduciendo cuhtli nahoa: doblado y c<
a sus dominios los bultos de los muertos, descendiendo entre corazón, negros y blancos a .
las fauces de la diosa Tierra o devorando a sus víctimas. Es como en los relatos mágicos
entonces Chalmecacíhuatl "la sacrificadora". En una figura pues ningún mortal debería
procedente de Tres Zapotes, Ver., su propio cuerpo está trans En el mundo inferior de
formado en chiquihuite dentro del cual va el cadáver, lleva como suprema autoridad He
una capa para envolverlo, viéndose en la parte superior el de Loki y de Angrbotha, l
cráneo característico con enorme tocado de dos alas (fig. 12). calamidades. La suprema dei
Si se considera que son las almas de los fallecidos las que jada dentro del Niflheim I
lleva consigo, adquiere el significado de psieopompus, lo que nueve mundos con autorida(
en relación con el descenso del sol la transforma en crepúsculo el último suspiro en su lecl
vespertino. -papel que correspondía al Hermes griego sombras señorea sola, rodea
(V éanse las figuras de los códices.) 20 sagas que para el recibimier
cos y mesas servidas para d~
18 bis Las numerosas piezas arqueológicas que adoptan figuras de mujer con quiénes le ayudaron. Lo que
mandíbulas de muerto, con cráneo descarnado, tocado, collar o cinturón de lo resumir así:
mismo, en relación con el mundo de los muertos, nos conduce al convencimiento
de que en la cultura prehispánica de México tres conceptos se hallan entremez· Su platón es Hambre; su cucl
clados: Coatlícue: la de la falda de serpientes; Tlaltecuhtli: la diosa de Tierra y Su casa de esclavitud: Flaque2
Mictlancíhuatl. La señora del Míctlan porque éste queda por debajo de la tie El umbral de su puerta: Tropi
rra; Tlaltecuhtli porque a través de sus fauces descienden al Míctlan los dioses, Su jergón: Lecho de enfermo
los astros y los muertos y la de la falda de Serpientes: Coatlícue o sea la Tierra
misma, porque es ella la que guarda los restos humanos y devora la carne,
siendo al mismo tiempo la Vida que brota por encima de la tierra y la Muerte De su imagen no se tiene
que señorea por debajo. Es el mismo concepto que encierra la hermosa escul·
tura huasteca de piedra cuyo frente de ser vivo lleva a la espalda un esqueleto.
vez más adelante los arque6
19 Kerényi, c.: The Gods o{ the Greeks. Cap. X. && 1 Y 2, pp. 162 Y siga, figu~a o pintura que la repr
'Página 17l. porClOnan una referencia im]
20 Un pasaje de Sahagún nos informa de cómo al llegar el sol al ocaso, vida, mitad normal", es dec
después de hacer su recorrido ascendente en homhros de los guerreros muertos
'y el descendente en andas llevadas por las mujeres también guerreras "allí le en la región del misterio con su dOJ
salían a recibir los del infierno y entonces despertaban y se levantaban de dor del país de la verde esmeralda, juegan.
mir los muertos que están allí, y tomando al sol los del infierno, las mujeres 21 El Libro del Consejo. Nota 55, p.
se dispersaban",* Por su parte el Dr. Garibay, glosando un pequeño poema a 22 Popal J1uh, Recinos, p. 50.
Piltzintecuhtli, "El Príncipe Niño", nos dice que éste es el sol en sus primeras
23 Popal J1uh, Recinos, p. 100.
,etapas y, describiendo su derrotero del ocaso al amanecer agrega, como entra
24 Branston: Goás 01 the North. (
.. Sahag(ln: Hisloria.,. T. 1, Libro Sexto, Cap. XXIX, p. 596. .. Garibay, K.: Veillte Himlllll... p. 1
EL PLANO O MUNDO INFERIOR 87
ruRA NAHUATL
, propulsor (átlatl) o en sus Los regentes de Xibalbá son dos, aunque frecuentemente
se les considera como uno solo y con caracteres masculinos:
ponden seguramente con Mie Hun-Camé "Supremo Muerto" y Vucub-Camé "Principal Muer.
lertos" o con Mietlancíhuatl: to", son los Grandes Jefes, los que deciden en última instan·
• 21 L .
rtos". Siempre ofrecen aspecto CIa. os Jueces supremos que señalan sus funciones y atri
i el cráneo sin piel, mostrando
butos a cada uno de sus subordinados. 22 Estos, "en verdad no
ira entremezclada con estrellas tenían antaño la condición de dioses. Además sus caras horri
noche--; en otros casos llevan bles causaban espanto. Eran los Enemigos, los Buhos. Incita
Ibis ban al mal, al pecado y a la discordia." Como el Mictlante
i; códices se la ve conduciendo
cuhtli nahoa: doblado y caviloso, "Eran también falsos de
IS muertos, descendiendo entre
corazón, negros y blancos a la vez, envidiosos y tiranos ... ";23
devorando a sus víctimas. Es como en los relatos mágicos su fuerza radicada en el incógnito,
lacrificadora". En una figura pues ningún mortal debería saber sus nombres.
r., su propio cuerpo está trans En el mundo inferior de los normandos solamente aparece
del cual va el cadáver, lleva como s~prema autoridad Hel (con una sola ele), tercera hija
ndose en la parte superior el de Lokz y de Angrbotka, seres maléficos engendradores de
~ tocado de dos alas (fig. 12). calamidades. La suprema deidad: Allfather dispuso fuese arro
tmas de los fallecidos las que jada dentro del Niflheim dándole el dominio absoluto d'e
~icado de psicopompus, lo que
nueve mundos con autoridad sobre todos aquellos que lancen
IJOlla transforma en crepúsculo el último suspiro en su lecho de ancianos. En un mundo de
pondía al Hermes griego 119_. sombras señorea sola, rodeada de espectros. Se sabe por los
ices.) 20 sagas que para el recibimi'ento de Balder tuvo dispuestos ban
cos y mesas servidas para darle la bienvenida' mas no se dice
~cas que adoptan figuras de mujer con quién~s le,ayudaron. Lo que ofrece a sus huéspedes se puede
jamado, tocado, collar o cinturón de lo resumIr aSI:
'muertos, nos conduce al convencimiento
tres conceptos se hallan entremez· Su platón es Hambre; su cuchillo y tenedor: Escasez, Penuria;
; Tlaltecuhtli: la diosa de Tierra y Su casa de esclavitud: Flaqueza de memoria o sea Olvido;
éste queda por debajo de la tie El Il:mbr,al de su puerta: Tropiezo, Peligro oculto;
descienden al Míctlan. los dioses, Su Jergon: Lecho de enfermo: Sus cortinas, Calamidad, Miseria
de Serpientes: Coatlicue o sea la Tierra Palidez. 24
restos humanos y devora la carne,
por encima de la tierra y la Muerte De su imagen no se tiene idea, ni retrato, ni escultura, tal
que encierra la hermosa escul v~z más a~elante los arqueólogos nórdicos encuentren alguna
vivo lleva a la espalda un esqueleto. fIgura o pmtura que la represente. Los sagas en cambio pro
Cap. X. && 1 Y 2, pp. 162 Y sigs,
porcionan una referencia importante: "Su figura es mitad lío
de cómo al llegar el sol al ocaso, vida, mitad normal", es decir, mitad esqueleto o calavera y
en hombros de los guerreros muertos
las mujeres también guerreras "allí le en la región del misterio con su dorada vestidura y, junto con Xólotl, venido
despertaban y se levantaban de doro del país de la verde esmeralda, juegan a la pelota."
al sol los del infierno, las mujeres 21 El Libro del Consejo. Nota 55, p. 192.
, glosando un pequeño poema a 22 Popal Yuh, Recinos, p. 50.
dice que éste es el sol en sus primeras 23 Popal Yuh, Recinos, p. 100.
ocaso al amanecer agrega, como entra 24 Branston: Gods 01 the North. Cap. n, Ap. 3, p. 96.
mitad ser viviente y agregan los autores que estudian el caso: que andaba a llamar a l·
"así es fácil de reconocer por su aspecto repulsivo y horripi logía tarasca nos menCÍon
lante que la retraen a una antigüedad remota. 25 Esta descrip bajo tierra y son consider
ción verbal puede ser por fortuna ejemplificada y compro los Muertos: Cumiehchú<
bada en América, en nuestro México, por medio de hallazgos gún Gilberti; ellos son:
arqueológicos, lo mismo en el Valle de México que en Oaxaca dreja, y Cuaraqui, la ardi
y aún en el Perú; pues han sido descubiertas varias piezas probablemente el verdade:
que muestran la descripción de la Hel escandinava: caras, del infierno, en tanto que
máscaras y figuras diversas mitad seres vivos, mitad descar ser los mensajeros. 30
nados. En los trabajos de excavación llevados al cabo por Druc Por lo que respecta a )\
ker en Tres Zapotes, se encontraron cuatro figuras que ofre sajeros buhos una especie
cen la división por mitad; son ellas de animales: jaguares, ducta de los hombres: VOl
murciélagos y aves rapaces; probablemente sean moradores y custodios que conducía
del Xibalbá -de los que nos ocuparemos en seguida- lo signándoseles: "Consejeros
curioso es que junto con ellos apareció la figura de Mictlan
cíhuatl sonriente. 26 Chabi Tukur: Buho Flecha
Resulta también de sumo interés observar que, entre los Huraean Tukur: Buho gig
Cakix Tukur: Buho Guaca
indios seneis de California, al tiempo que se baila alrededor Holom Tukur: Buho Cabez
de la pira que sirve para la cremación de un cadáver, sea
entonado un canto, yo diría invocación o súplica a Hel, con Los sagas nórdicos nos
cebida en la forma siguiente: "Hel-lel-li.ly, en forma de ardilla: R@
Hel-lel-lo, mente desd'e la cima del ti
Hel-lel-lu. * 27 mismo o sea hasta el hel
águila de la cúspide y el ,
Por lo que toca a los d~
Mensajeros y otros moradores del mundo inferior Anales de Cuauhtitlan mel
Los Señores del Míctlan tenían como mensajeros al tecolote Míctlan, al servicio del re¡
y la lechuza, ambos considerados como aves de pésimo agüero ron obstáculos a Quetzald
para los enfermos graves pues les presagiaban la muerte. además que en el interior
Algunos códices ilustran el tema con reproducciones del tem parejas que señoreaban en
plo de Mictlantecuhtli, en cuyo sitio principal está entronizado blo del Sol menciona si-ete
un tecolote, tal vez como nahual del numen. Este mensajero que no la tiene:
iba y venía al infierno y por esto le llamaban: Yaotequihua, 1xpuxteque: el que tiene el}
que quiere decir mensajero del dios y de la diosa del infierno Nexoxóchitl: la que arroja.
Nextepehua: el que ciega ce
'" Ignoro a qué grupo étnico de California pertenecen los indios seneís, pues Micapletacalli: la caja o atai
con la clasificación adoptada por Kroeber a base de regiones: Diegueño, Gabrie
lino, Playano, Serrano, o Wintun del norte, central, del sureste o del suroeste, 29 Sahagún: Historia. Libro QUÍI
no es posible 10calizarlo. 28 30 Corona Núñez: Mitología Tar
25 Branston: Ibid., p. 96.
31 Popol Vuá, Recinos. 2" Parte
26 Drucker, Phillip: Ceramic sequences at Tres Zapotes .•• Plancha 62.
página 212.
21 Chavero, E.: México a través de los siglos. Barcelona, p. 121.
32 Branston: Gods 01 the North.
28 En la nota: Kroeber. Handbook of the Indias of California. Véase Mapa.
33 Manuscrito Anónimo 1558, pp
r
~ NÁHUATL EL PLANO O MUNDO INFERIOR 89
¡autores
Í1
que estudian el caso:
aspecto repulsivo y horripi
que andaba a llamar a los que les mandaban ... 2'9 La mito
logía tarasca nos menciona también a tres animales que viven
~edad remota. 25 Esta descrip bajo tierra y son considerados como mensajeros del Mundo de
~lDa ejemplificada y compro los Muertos: CumiehchúclUlro, "lo hondo del infierno", se
6xico, por medio de hallazgos gún Gilberti; ellos son: Uhcumo, el topo; Apatzi, la coma
dreja, y ClUlraqui, la ardilla. De los tres, el topo, Uhcumo, es
~
! He de México que en Oaxaca
o descubiertas varias piezas probablemente el verdadero regente que gobierna lo profundo
la Hel escandinava: caras, del infierno, en tanto que la comadreja y la ardilla vienen a
~d seres vivos, mitad descar ser los mensaj'eros. 30
~ión llevados al cabo por Druc Por lo que respecta a Xibalbá tenía además de cuatro men
raron cuatro figuras que ofre sajeros buhos una especie de espía u obS'ervador de la con
I ellas de animales: jaguares, ducta de los hombres: Voc, el gavilán, los otros eran enviados
~bablemente sean moradores y custodios que conducían a los vivientes ante el Consejo,
f ocuparemos en seguida-o- lo signándoseles: "Consejeros de los varones", sus nombres eran:
~pareció la figura de Mlctlan-
Chabi Tukur: Buho Flecha, rápido como un venablo,
I Huraean Tukur: Buho gigante, de enorme tamaño,
~terés observar que, entre los Cakix Tukur: Buho Guacamayo, con el dorso de fuego, y
~empo que se baila alrededor Holom Tukur: Buho Cabeza, solamente tenía cabeza y alas.S!
~remación de un cadáver, sea
rocación o súplica a Hel, con Los sagas nórdicos nos hablan a su vez de un mensajero
bl-lel-li-ly, en forma de ardilla: Ratatuskr, que sube y baja constante
tel-lel-lo, mente desde la cima del árbol Iggdrasill hasta las raíces del
lel-lel-lu. * 27 mismo o sea hasta el hel, estableciendo enemistad entre el
1 águila de la cúspide y el dragón del fondo del abismo. 32
Por lo que toca a los demás moradores del submundo, los
lores del mundo inferior Anales de Cuauhtitlan mencionan a los micteca o gentes del
i Míctlan, al servicio del regente del mismo; los que le pusie.
~ como mensajeros al tecolote ron obstáculos a Quetzalcóatl para que saliese;33 se supone
~s como aves de pésimo agüero además que en el interior de aquellas regiones existían otras
~ les presagiaban la muerte. parejas que señoreaban en infiernos menos profundos, el Pue
~ con reproducciones del tem blo del Sol menciona siete personajes en tres parejas más uno
Isitio principal está entronizado que no la tiene:
~
l del numen_ Este mensajero
to le llamaban: Yaotequihua, 1xpuxteque: el que tiene el pie roto
•dios y de la diosa del infierno Nexoxóchitl: la que arroja flores
•I Nextepehua: el que ciega con ceniza
~ornia pertenecen los indios seneis, pues Micapletacalli: la caja o ataúd del muerto
¡r a base de regiones: Diegueño, Gabrie·
brte, central, del sureste o del suroeste, 29 Sahagún: Historia. Libro Quinto. Cap. V, p. 421.
I 30 Corona Núñez: Mitología Tarasca. Cap. XXXVI, pp. 97, 98, 99.
i S1 Popol Vuh, Recinos. 2' Parte. Cap. 1, p. 50 y Libro del Consejo, nota 12,
[
les Tres Zapotes... Plancha 62.
at pagina 212.
32 Branston: Gods 01 tñe North. Cap. n, Ap. 1, p. 76.
I~iglos.
Barcelona, p. 12l.
En el Popol Vuh se refiere que aquellos que eran llamados ve llanuras correspondiente~
por los Jefes del Consejo de Xibalbá tenían que concurrir con tlan, o los recintos de la M
los útiles necesarios para el Juego de Pelota: cueros (para que marcan nueve ríos o
cubrirse los cuadriles), anillos (para que pasara la pelota), nomhre de una divinidad qu
guantes, coronas, máscaras (rodetes para protegerse la cara) Míctlan: Nueve Viento Chi.
y naturalmente, pelota (del tamaño de una caheza). 39 nomhre del lugar por dond:
Para el Hel nórdico los sagas no mencionan ninguna pren nauh Tlillihuican o sea los
da como presente para la diosa, aunque al muerto se le inci uno negro, sÍtuado sohre lo
neraha junto con su mujer, su cahallo, su perro y ropas que huatlipan. 44
acostumhraha vestir; pero sí se refiere en el viaje que hizo A estos datos dehen agregl
Hermothr, tratando de rescatar a su hermano Balder, que 'en justifica la existencia de u
atención a su fallido regreso, éste le entrega, como recuerdo México al que llama: "gent
para su padre Odín, el anillo "Draupnir", en tanto que su tenecientes a las veinte ciud
esposa Nanna envió a Frigg algunas telas de lino y otros re que formaron parte del Re
galos, así como un anillo de oro para Fulla. 40 autor, en los Códices Vaticall
basados en cuentas de nue1
cual derivan:
E l número nueve
los ciclos nonarios del calenda:
El Códice Vaticano A ilustra en columna vertical las nueve la imagen celeste nonaria,
la serie de nueve deidades o se
etapas por las que tenían que atravesar los muertos o sean los "Nueve Señores" o "Acom
los nueve infiernos o Chiconaumíctlan. Las autoridades en la otras series de nueve: Chiculll
materia nos indican que son nueve los lugares en donde las la unión nonaria,
almas sufren antes de alcanzar el descanso definitivo;41 las nue· los nueve cielos superpuestos,
los nueve mundos inferiores: I
entre' las mortajas y amortajaban al difunto con sus mantas y papeles y daban las nueve aguas o río nonario
al difunto todos los papeles que estaban aparejados poniéndolos ordenadamente las nueve direcciones del dios
ante él diciendo (abrevio el escrito a lo esencial): el dios nonario: Chicunauh·te<
"Veis aquí con qué habéis de pasar en medio de dos sierras que están en· las nueve llanuras: Chicunaul:
contrándose una con otra" y aun las nueVe tortugas cond
"Veis aquí con qué habéis de pasar el camino donde está una culebra guaro
dándolo"
"Veis aquí con qué babéis de pasar donde está la lagartija verde: Xochi· Para los quichés, el nueVl
tónal" más 'especialmente las cosas 1
"Veis aquí con qué habéis de pasar ocho páramos" Nueve eran los nomhres de
"Veis aquí con qué habéis de pasar ocho collados"
"Veis aquí con qué habéis de pasar el viento de navajas: ltzehecayan". 1. Jefe Consejero: Cu Ha,
"Porque el viento era tan recio que llevaba las piedras y pedazos de navajas. 2. Jefe Consejero lugartenier
Por razón de estos vientos y frialdad quemaban todas las petacas y armas y 3. Gran Elegido de los Cavel
todos los despojos de los cautivos que habían tornado en la guerra, y todos sus 4. Jefe de la Lluvia,
vestidos que usaban. Lo mismo hacían con las mujeres, pues les quemaban
todas sus alhajas con que tejían e hilaban y toda la ropa que usaban".38 42 Garibay K.: Veinte Himnos, p.
38 Nota. Sahagún: Historia. Apéndice al Libro Tercero, pp. 313 y sigs. 43 Sahagún: Historia. Apéndice al
39 Popol Vuh, Recinos. 2' Parte. Cap. 1, p. 51. 44 Manuscrito Anónimo 1558, p. 3
40 Branston: Gods. Cap. X. Ap. 2, p. 274. 45 Riíck: Chinauhteca y Cempoaltec
41 Caso: El Pueblo del Sol. Los Dioses de la Muerte, pp. 81-82. 46 El Libro del Consejo. Nota 112,
f
I
~URA NÁHUATL
EL PLANO O MUNDO INFERIOR 93
I
~
e aquellos que eran
llamados ve llanuras correspondientes a las nueve corrientes del Míc
albá tenían que concurrir con tlan, o los recintos de la Muerte cortados 'en nueve secciones
ego de Pelota: cueros (para que marcan nueve ríos o circunvoluciones del mismo 42 el
! (para que pasara la pelota), nombre de una divinidad que se 'encontraba en el camino del
~etes para protegerse la cara) Míctlan: Nueve Viento Chiconauhui Ehécátl 43 y también el
~año de u,na cab~za), 3'9 nombre del lugar por donde salieron los chichimecas Chiuc
!s no menCIOnan nmguna pren nauh Tlillihuican o sea los nueve lugares por donde se pone
" aunque al muerto se le ¡nci uno negro, situado sobre los nueve llanos: Chiucnauh ¡xtla
¡caballo, su perro y ropas que huatlipan. 44
b refiere en el viaje que hizo . A: ~stos dato~ debe? agregarse por el Dr. Fritz Rock,45 quien
! a su hermano Balder, que 'en ]U~tl~lCa la eXIstenCIa ,?e un grupo indígena en el antiguo
~ste le entrega, como recuerdo MexlCo al que llama: gentes del nueve": Chiuhnauteca per
~ "Draupnir", en tanto que su tenecientes a las veinte ciudades de los Nonoalca-chichimeca,
tgunas telas de lino y otros re que formaron parte del Reino del Gran Tollan. Según este
p para FuUa.40 autor, en los CódiC'es Vaticano, Borgia y Cospi se hallan ciclos
basados en cU'entas de nueve integrando el tonal-ámatl del
,
r cual derivan: '
ro nueve los ciclos nonarios del calendario antiguo,
t la imagen celeste nonaria,
~ en columna vertical las nueve la serie de nueve deidades o sean:
~ atravesar los muertos o sean los "Nueve Señores" o "Acompañados de la noche"
r,míctlan. Las autoridades en la otras series de nueve: Chicunauh-napaniuhpan, '
~ueve los lugares en donde las la unión nonaría,
los nueve cielos superpuestos,
~l descanso definitivo ;41 las nue
los nueve mundos inferiores: Chicunauh-míctlan,
~unto con sus mantas y papeles y daban
~r donde está la lagartij a verde: Xochi Para los quichés, el nueve es la cifra sagrada que señala
t más 'especialmente las cosas nocturnas, ocultas y misteriosas. 46
~ho páramos"
Nueve eran los nombres de los clanes de los Cavik-Quiché:
¡Cho collados"
ap. 1, p. SI.
;p.274.
7
·TURA NÁHUATL
EL PLANO O MUNDO INFERIOR 97
na del puente
7
98 ESTUDIOS DE CULTURA NÁaUATL
EL PLANO O
~
íyth and Man. Thames and Hud· Quintana Roo. Monografías de Arqueología, Etnología y lingüís
tica Mayas. Centro de la Expedición de Yucatán, por Stephens
Penguin Books. London, 1960. y Catherwood, 1941·42. El Colegio de México, 1951.
ondo de Cultura Econ~mica, Méx~. KERÉNYI, C.: The Cods o/ the Greeks. Myth and Man. Thames and
Hudson. London, 1951.
. UlJ.-México a Traves de los SL'
!Ed de Barcelona. T. 1, p 121.
~edti.Nutall.Feyervary Myer, Vatio
rarasca. Fondo de Cultura Econó
~
I. Trad. de G. Raynoud. Biblioteca
éxico, 1939.
I
kes al Tres Zapotes, Veracruz, Mex.
~. Eth. Bol. 140. Washington, D. C.,
f
~ <k la Literatura Náhuatl. Edit.
~ Nahuas. Universidad Nac. Aut. de
ay: Compendio del Arte de la Len·
Carochi. Puebla, 1910, y Vocabu·
¡
IMundo en la Literatura Medieval .
• México, 1956.
r:hicastenango. "Las Antiguas Histo
Adrián Recinos. Fondo de Cultura
SIMBOLISMO DE
1
Dibl
FOtOgI