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¿QUÉ ES LA LITURGIA?

Liturgia: Es el ejercicio del Sacerdocio de Cristo en su Iglesia, mediante signos sensibles con los
que el hombre da gloria a Dios y se santifica en comunidad. Liturgia es el culto oficial y público
de la Iglesia. Los actos litúrgicos son: La Santa Misa, el Oficio Divino y los Sacramentos.
Ejercicio: Significa vida, proceso, cambio, movimiento, adaptación al aquí y ahora de la Iglesia
en el caminar de la historia.
Sacerdocio de Cristo: Cristo es el Sacerdote porque se ofrece para salvarnos, enseñarnos,
guiarnos; santificándonos por el bautismo, nos inserta en su Iglesia cuerpo místico y nos hace
participar del sacerdocio común por eso en las misas hay un presidente oficial.
Iglesia: Comunidad de creyentes. Nuevo pueblo de Dios, que marcha hacia Dios. En este
peregrinar unos ya lograron entrar a la meta, otros se purifican para entrar en la gloria los que
aquí tratamos de vivir el evangelio.
Signos Sensibles: Son las cosas que integran la liturgia: la palabra, la escritura, el canto, los
ornamentos, los colores, el tiempo, el agua, el aceite, las flores, las posturas, etc. Todo esto coincide
en ser sensible y revelar algo espiritual, invisible.
Lugares de la liturgia: El lugar por excelencia para realizar un acto litúrgico es el templo
consagrado para la acción sagrada.

¿QUIÉNES FORMAN EL “EQUIPO LITÚRGICO”


Y SUS FUNCIONES?
Representantes de los “5” servicios de un Equipo Litúrgico:
1. Servidor de la Palabra: lector o persona que tenga carisma de proclamar.
2. Servicio del Canto: Persona que tenga el carisma del canto.
3. Servicio del Altar: persona a cargo de un grupo de acólitos.
4. Servicio de la Asamblea: persona que tenga carisma de ordenar y guiar a una asamblea.
5. Servicio de la Iglesia: persona con creatividad y arte.

El número de miembros depende de la comunidad, pero que sean dinámicos, creadores,


responsables y con gran sentido de la liturgia pastoral.

1. SERVICIO DE LA PALABRA:
Los ministros de la Palabra de Dios necesitan formación especial. Deben reunir ciertas cualidades
como: leer bien, buena pronunciación y dicción; saber usar el micrófono. Presentarse con aplomo
al público. Conocer bien la celebración. Y dar testimonio cristiano auténtico y comprometido.
Preparan:
a) Un monitor: Animador general de la celebración. Es la persona que mantiene el espíritu
de participación con las moniciones breves, sencillas y precisas.
b) Lectores de la Palabra de Dios: son dos personas, el de la primera lectura, y el de la
segunda lectura.
c) Salmista: es quien entona el salmo.
d) Lector o lectores para la oración de los fieles.
e)
TAREAS DEL MONITOR O COMENTARISTA
El Monitor deberá cumplir con las siguientes tareas principales:

ANTES DE LA CELEBRACIÓN:
• Preparar la celebración y moniciones junto con el EPL
• Establecer contactos con el Presidente de la celebración y demás servidores.

DURANTE LA CELEBRACIÓN:
3. Explicar o Introducir:
- La ambientación antes de la celebración.
- Introducción a la celebración.
- Las lecturas.
- Dirigir la oración de los fieles.
- Significado de algún signo.
- La presentación de los dones.
- Avisos parroquiales.
4. Indicar, si es necesario, las posturas corporales.
5. Exhortar a la asamblea a tener una buena actitud espiritual.
6. Animar, guiar y coordinar a la Asamblea .
7. Cumplir sólo con sus funciones: no hacer también las del lector, salmista, colector, etc.
DESPUÉS DE LA CELEBRACIÓN:
8. Evaluar su servicio con el EPL

LOS PECADOS DEL LECTOR

1. No prepara la lectura.
2. No cerciorarse, con la debida anticipación, de que el micrófono esté encendido, ni saber a
qué distancia debe usarse.
3. Ir vestido en forma inconveniente.
4. No leer desde el ambón, que es el lugar de la Palabra de Dios.
5. No estar de pie en forma correcta, sino balanceando una pierna o haciendo otros “tics”.
6. No cuidar que el micrófono esté en la dirección y distancias debidas.
7. Dirigir la lectura al ambón o al leccionario y no al pueblo.
8. Decir: “Primera lectura” o “Segunda…” y la frase que sigue (leer lo escrito en rojo).
9. Leer con prisa, en forma confusa, sin proyectar la voz.
10. No hacer las debidas pausas entre las frases y los párrafos.
11. “Decir” las palabras y no el mensaje –No saber de qué mensaje se trata.
12. No dar tiempo a que el mensaje penetre en los oyentes; no hacer un espacio de silencio
después de cada lectura.
13. No hacer una pequeña pausa entre el fin de la lectura y el anuncio de que la lectura ha
terminado: “Palabra de Dios”.
14. Leer él mismo (el lector) el salmo responsorial que debe ser dirigido por otra persona:
salmista o cantor (el salmo debe ser leído por otro lector).

PECADOS CONTRA EL SALMO RESPONSORIAL


1. Ordinariamente es leído (¿en dónde quedo lo de canto?). Se imaginan a un grupo de
personas recitando las “mañanitas” al festejado.
2. Es leído por el mismo lector de la primera lectura. Una de las reglas básicas de ejecución
litúrgica podría ser el juego de Juan pirulero: “cada quien atienda a su juego”. Una cosa es
ser lector, monitor, y otra cosa es ser salmista.
3. Se canta cualquier cosa. No debe omitirse el salmo o cambiarlo por un canto de
meditación.
4. Cualquiera puede entonar el salmo. Corresponde al salmista o cantor del salmo, cantar
en forma responsorial o directa el salmo. No debe iniciarlo ni el lector, ni el monitor.
2. SERVICIO DEL CANTO:
La música tiene la finalidad de animar, ayudar a la oración, acompañar las procesiones y los
distintos movimientos para que la celebración realmente sea una fiesta y ala vez ser la respuesta
gozosa del pueblo que aclama a su Señor.
La música en la liturgia está en función de la Celebración y se debe interrumpir cuando cumple
con su finalidad, aunque el canto no haya concluido y que se continúe la celebración, pero no
interrumpir la celebración para que el coro termine su canto, esto en cualquier parte de la
celebración.
Se prepara:
a) Director de cantos para la asamblea:
- Preparación de los cantos, con referencia a las lecturas, fiesta que se celebra y año
litúrgico.
- Catequesis de los mismos cantos y ensayo general de la asamblea. Luego los entonan
durante la celebración para que la asamblea no se desafine y comience a tiempo.
b) Director del coro, que cantara las partes variables y las estrofas difíciles. Puede cantar algunos
cantos mientras la asamblea participa en una acción o medita. No sustituye el papel de la
asamblea pero lo completa.
- Ensayo general y particular del coro, para estar siempre renovando su repertorio.
- Preparación de material, sean hojas, folletos, libros, para que toda la asamblea participe.
- Promoción e invitación de músicos e instrumentistas.
- Auxiliares para acomodar instrumentos, recoger material de cantos, equipo de sonido y
amplificación, etc.

DECÁLOGO DEL CANTOR


1. Todo instrumento musical es digno de participar en la liturgia, si se toca debidamente.
2. todo canto en la liturgia debe ser compuesto expresamente para ella.
3. El canto y la música deben estar al servicio de la palabra. Ésta debe entenderse
claramente.
4. Canto, música y letra deben ayudar a la comunidad a expresar su fe cantando.
5. El canto y la música son parte integrante de la celebración litúrgica, nunca motivos de
adorno o lucimiento personal.
6. Deben preferirse los cantos inspirados en los salmos o en la Palabra de Dios a otro tipo de
cantos llamados piadosos o sentimentales.
7. Los cantos que acompañan a una acción litúrgica, entrada, ofrendas, comunión, no
deben prolongarse más allá de estos momentos.
8. El canto debe apoyar y expresar la acción litúrgica que se realiza: procesión de entrada,
presentación de ofrendas, comunión, etc.
9. Los cantos y la música que se toquen deben estar de acuerdo a los tiempos litúrgicos que
celebra la Iglesia.
10. Deben excluirse de la acción litúrgica los cantos y la música compuestos para otros fines,
independientemente de su belleza o nobleza.

3. SERVICIO DEL ALTAR:


Los siguientes ministerios:
1. Incensario o turiferario
2. Acólitos
3. Crucífero
4. Diáconos
5. Ceroferarios o Ciriales
6. Concelebrantes
7. Ministros Extraordinarios de la Comunión
8. Maestro de ceremonias, si las circunstancias lo ameritan.
9. Celebrante principal

4. SERVICIO DE LA ASAMBLEA
La asamblea como comunidad cristiana tiene su función propia y necesita de ministros propios
que la sirvan en el momento oportuno y necesario para promover la participación.
Los ministerios de la asamblea varían según la situación concreta de la asamblea, sea en la
parroquia (urbana, rural), colegio, asilo, etc.
Se sugieren los siguientes ministerios:
a) Equipo de acogida y bienvenida a los fieles.
b) Coordinadores, sea para estacionamiento de autos, o lugar donde dejar sus cosas, o para
cuidar a los niños, o si vienen de lejos: servicio de aseo personal.
c) Acomodación de lugares de las diversas personas y del lugar de la celebración.
- Atención del orden: niños, personas enfermas, ancianas, los que se duermen.
- Cuidar que no se metan animales.
d) Repartidores del material necesario para la celebración: hojas, folletos, etc.
e) Coordinadores de las procesiones
- De entrada
- Procesión del ofertorio
- Procesión de comunión: circulación normal y rápida con orden
- Procesión de salida
- Otras procesiones según la celebración
f) Coordinadores de las colectas o de las ofrendas, de acuerdo a las celebraciones.
g) Otras posibilidades de ministerios que resultarán de las necesidades concretas de cada
comunidad y que el equipo litúrgico irá descubriendo.

5. SERVICIO DE LA IGLESIA
En esta área los ministros deben responder a las necesidades concretas de la Iglesia, que está en
función de la asamblea.
Sus servicios son:
1. Preparar el lugar de la celebración adaptado a la asamblea que va a celebrar.
2. Preparar los recursos materiales para la comunidad: sillas, mesas, tableros, pizarrones, etc.
3. Decoración apropiada: elaboración de carteles, postres, slogan, letreros, etc. Creatividad
de los signos y vivencias de los mismos para:
a) Tiempo Litúrgico
b) Motivo de la celebración: boda, primera comunión, etc.
c) Tipo de asamblea: niños, jóvenes, etc.
4. Preparar los equipos de luz, sonido, ventilación.
5. Arreglo del altar: velas, luces, manteles, libros, ornamentación.
En este último punto, hay que tener mucho ojo con la limpieza:
a) limpieza en todo lo referente a vasos sagrados y vestiduras litúrgicas. Atención a los
colores, según la fiesta que se celebra.
b) Especial cuidado de que se tenga: ambón, leccionarios, misal, sede.
c) Que las flores estén frescas. Es preciso quitar las flores sintéticas o limpiarlas muy bien para
evitar que estén llena de polvo.

La participación es creativa: la liturgia hace que se pongan en marcha todas las aptitudes de la
persona. La celebración es el lugar donde se manifiestan muchos carismas y hay que facilitar su
despliegue e irán surgiendo nuevas formas de servicio y participación.
AÑO LITURGICO
El año litúrgico cristiano. Decía Pío XII en su encíclica Mediator Dei: es Cristo mismo que vive
en su Iglesia para hacernos vivir la realidad de la salvación que está por siempre presente y
operante.

Es un periodo de tiempo de doce meses. Pero no corresponde al año solar, ni al año escolar. Inicia
a fines de noviembre o principios de diciembre. En él se presenta a los cristianos el Misterio de
Jesús, que nace, y anuncia la Buena Nueva: el Misterio Pascual. Está organizado como un ciclo
anual de los misterios de Cristo y de las fiestas de los santos. Este ciclo anual tiene como finalidad:
hacernos vivir en el tiempo de la Iglesia la realidad de salvación anunciada en el mismo Antiguo
Testamento, de ahí su estrecha relación. Todo el año litúrgico cristiano está centrado en la
Pascua, la pascua de Cristo, es decir, la obra de la redención y la alianza de Cristo sellada en su
muerte y resurrección.
El Concilio Vaticano II al hablar del año litúrgico insiste en que al conmemorar los misterios de la
redención, abre las riquezas de las virtudes y de los méritos de su Señor.

División del año litúrgico. Presentaremos una idea breve y concreta para darnos una idea
general de la división de este ciclo anual.
a) Adviento. Del latín adventus: llegada.
Así inicia el año litúrgico. Su tema central es la Celebración de la Venida del Señor. Recuerda su
venida naciendo en Belén y su venida gloriosa al final de la Historia. Su principal característica es
la esperanza. Adviento es alegre esperanza, interiorización, oración y proyección fraternal.
Notas de este tiempo: No se canta Gloria, el ornamento será morada en señal de penitencia. Son
cuatro domingos de preparación a la Navidad.
b) Navidad y Epifanía. Conmemora el nacimiento de Jesús en Belén. La lección principal es el
amor.
La Navidad celebra estas manifestaciones o epifanías:
- La adoración de los magos.
- El bautismo de Jesús.
- El milagro de Caná.
Es una triple afirmación de la divinidad de Jesús. Su característica principal es la dimensión
universal de su llamada, la buena nueva a todos los pueblos.
c) Tiempo ordinario. Son 34 semanas divididas en dos tiempos las que abarcan este período.
-Primero: después de la Navidad y Epifanía, hasta el miércoles de ceniza.
-Segundo: después de Pentecostés, hasta la solemnidad de Cristo Rey.
En este tiempo la Iglesia vive y continúa celebrando el misterio pascual del Señor Jesús centrado
especialmente en el domingo.
d) La Cuaresma. Su duración es desde el miércoles de ceniza hasta el Jueves Santo inclusive. Es
el tiempo de preparación para la Pascua. Su objetivo es prepararnos a esta fiesta, a través de
volver a nuestro bautismo y la penitencia.
Sus características principales son:
- Volver a nuestro bautismo.
- Práctica de la penitencia.
- Hacer nuestra la Palabra de Dios para cambiar las situaciones de pecado individual y
social.
- La oración más intensa.
e) Semana Santa. Los acontecimientos principales de esta semana son la Pasión, Muerte y
Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
DOMINGO DE RAMOS: En la procesión con los ramos de olivo recordamos la entrada de Jesús
en Jerusalén, donde se desarrollan los hechos de la Pascua. La gente aclamaba a Jesús:
"Hosanna". El color rojo recuerda a Jesús Rey (Mt. 27,28).
f) El Triduo Pascual. Es el centro del año litúrgico, porque en este triduo se realizó la
culminación de la redención humana en Cristo.
Jueves Santo: celebramos la institución de la Eucaristía, la institución del Sacerdocio, la entrega
del mandamiento del Amor y el ejemplo de servicio a los demás.
Viernes Santo: es el día de la pasión y muerte de Cristo.
Vigilia Pascual: Es la más larga espera de la más grande fiesta del año. Nos prepara para el
momento decisivo de Cristo, la Resurrección. Se le celebra con cuatro símbolos sacramentales:
- LA LUZ: Fuera del templo se enciende el Cirio Pascual, símbolo de Cristo resucitado. Todos los
cristianos entran a la Iglesia oscura encendiendo sus cirios, y se canta el Pregón Pascual que es el
anuncio de que Jesús resucitó.
- LA PALABRA: Varias lecturas del Antiguo y Nuevo Testamento explican el significado de la
Pascua de Jesús, su paso de este mundo al Padre; sobre todo la narración de la salida de Egipto
hacia la libertad pasando por el Mar Rojo. El Señor mandó celebrarlo como memorial con el
Cordero Pascual y los panes ázimos. Jesús realizó ésto con la Eucaristía.
- EL AGUA: Con el rito del bautismo llegan a la fe y participan de la muerte y resurrección de
Cristo nuevos hermanos.
- PAN EUCARISTICO: La Eucaristía es el momento culminante, pues hace presente al Señor
resucitado. Hoy suenan las campanas, mudas desde el jueves.
g) Pascua y Pentecostés. Durante cincuenta días, después de la resurrección de Cristo, vivimos
la exaltación de Cristo como Señor del universo, hasta llegar a la entrega del mayor don de
Cristo, su Espíritu Santo.
En este tiempo pascual está invadido por la acción del Espíritu Santo, nuestro abogado,
consolador y defensor. La comunidad cristiana se reconoce a sí misma como comunidad fraterna,
realizada por el Espíritu Santo.
4. Los signos especiales del año litúrgico.
- El ciclo de las lecturas está dividido en tres (A, B, C).
- Los cantos adecuados para cada tiempo.
- Los colores litúrgicos de acuerdo al tiempo en que se esté.
- Las oraciones e himnos propios de cada tiempo.
- Los signos externos en las celebraciones.
5. Rangos o lugares de importancia de las Celebraciones.
a) Solemnidades: de Cristo y de los Santos.
b) Fiestas: de los Apóstoles y de la Virgen María.
c) Memorias Obligatorias: de los santos más representativos.
d) Memorias opcionales: de los santos menos representativos universalmente.
6. Fiestas de la Virgen María:
Enero 1º: Su maternidad (Solemnidad).
Mayo 31: Visitación a su prima Isabel.
Agosto 15: Asunción al cielo.
Agosto 22: María Reina.
Septiembre 8: Natividad de la Virgen María.
Septiembre 15: Nuestra Señora de los Dolores.
Octubre 7: Nuestra Señora del Rosario.
Noviembre 21: Anunciación y presentación.
Diciembre 8: Inmaculada Concepción.
Diciembre 12: Nuestra Señora de Guadalupe.
VASOS SAGRADOS
Se llaman “vasos sagrados” a los diversos recipientes utilizados en la celebración litúrgica…
Algunos de ellos son particularmente importantes, como el cáliz y la patena “en los que se
ofrecen, consagran y se toman el pan y el vino” (IGMR 289).
EL CALIZ: De la palabra latina “calix” (en griego “Posterion”), con el que se designa un vaso
sagrado que se utiliza en la Eucaristía para poner el vino que será consagrado (que se convierte
en Sangre de Cristo). El cáliz se bendice cuando es nuevo o cuando ha sido restaurado.
LA PATENA: Bandejita o platillo, poco profundo, ligeramente cóncavo, donde se deposita el
pan que será consagrado en el Cuerpo de Cristo, en la Eucaristía.
EL COPON: Se llama copón o copa grande, al vaso sagrado que se utiliza para conservar el
Cuerpo de Cristo en el sagrario.
CUSTODIA: En la liturgia se designa con este nombre, a un vaso sagrado en el que se expone el
Cuerpo de Cristo para la adoración de los fieles.
RELICARIO: Recipiente consagrado, destinado para llevar el sacramento de la Eucaristía o
viático a los enfermos.
CRISMERAS: son tres vasos sagrados de metal o de vidrio que contienen el óleo de los enfermos,
el óleo de los catecúmenos y el santo crisma. Los santos óleos son bendecidos por el obispo, junto
con los sacerdotes en la misa crismal del jueves santo.

OTROS OBJETOS LITÚRGICOS


VINAJERAS: Se llama vinajeras a los dos jarritos que se utilizan en la Misa para el agua y el
vino, que serán utilizados en la Eucaristía.
PALANGANA Y JARRO: Estos elementos son utilizados, en la celebración eucarística, para el
lavado de manos del sacerdote, antes de la plegaria Eucarística. Este lavado es un rito de
purificación interior.
CAMPANILLAS: Las campanillas son campanas pequeñas que se comenzaron a utilizar dentro
de la celebración a partir del siglo XIII, para anunciar el momento de la consagración. Hoy en
día, son menos necesarias, porque la celebración la podemos seguir más fácilmente, y su uso, ha
quedado limitado a darle a la celebración, un realce festivo y solemne.
TURIBULO O INCENSARIO: “Incienso” en latín es “tus, thuris” o “tus, turis”, de ahí viene la
palabra “turíbulo”. Es un braserillo metálico suspendido por unas cadenas y con una tapa en
cuyo interior se quema el incienso, ya sea en la Misa, en la Adoración al Santísimo, en las
procesiones o en el rezo de las horas.
NAVETA: Se llama “naveta” o “navecilla” (palabra que viene del latín “navicular”), al pequeño
recipiente que contiene el incienso, y que tiene, precisamente, forma de nave pequeña.
ACETRE E HISOPO: El acetre es una pequeña fuente que sirve para contener agua bendita, y
el hisopo es el instrumento que se usa para esparcir el agua. Estos utensilios han de usarse en
bendiciones, en la Misa (en el rito de aspersión con agua), Domingo de Ramos, etc.

ORNAMENTOS SAGRADOS
ALBA: Es una túnica blanca (de donde viene el nombre), amplia, de manga larga que cubre al
celebrante de arriba abajo, por lo que se le llama vestidura “talar”. Generalmente va debajo de
la Casulla. La Ordenación General del Misal Romano señala que “es la vestidura sagrada común
para todos los ministros de cualquier grado” (No. 298).
Simboliza la Pureza e Inocencia que debe observar el ministro en el Santo Sacrificio de la Misa.
AMITO: Del latín “amictus”, de “amicio, amicire”, rodear, envolver. Se llama así a la pieza de
lienzo blanco, rectangular, a modo de pañuelo de hombros, que visten los ministros de la liturgia
debajo del alba. Se ata a la cintura con unas tiras o cintas cruzadas.
CAPA PLUVIAL: Su nombre viene del primitivo uso de defenderse de la lluvia. En la liturgia se
convierte en vestido de ceremonia. Se utiliza en las procesiones con el Santisimo Sacramento.
CASULLA: En latín casulla significa “casa pequeña” o “tienda”. Es la vestidura propia del
sacerdote para celebrar la misa. Debe ir puesta sobre el alba y la estola.
Es de distintos colores: verde, roja, morada, blanca... de acuerdo al tiempo y las fiestas que se
celebran en la Iglesia, también puede ser dorado, plateado en sustitución del blanco.
Simboliza la Caridad, la Santidad y el Poder Sacerdotal, ya que en el Altar, el Sacerdote ya no es
solo un hombre, sino que representa a Cristo.
CINGULO: La palabra latina “cingulum” viene de “cingere”, ceñir. Es una especie de soga cuya
función es ceñir el alba a la cintura. Simboliza la Castidad del Sacerdote.
DALMÁTICA: En la ordenación de diáconos un gesto complementario del sacramento es la
imposición de la dalmática. Los diáconos la visten sobre el alba y la estola cuando ejercen su
ministerio, sobre todo en las celebraciones más festivas.
ESTOLA: la lleva el sacerdote alrededor del cuello y pendiente ante el cuello; el diácono lo porta
atravesada.
Para administrar el Sacramento de la Reconciliación o Penitencia, la estola debe ser de color
morado. Para las celebraciones eucarísticas se usa del color de la Casulla, y haciendo juego con
ésta. Es signo de la dignidad y autoridad sacerdotal, del servicio confiado por Cristo al Sacerdote.
SOTANA: La palabra viene del latín subtana, o subtanea, de subtus, que significa debajo.
Vestidura de color negro que cubre todo el cuerpo. En la celebración litúrgica, se tiende a llevar
alba, que es el equivalente en blanco. Significa estar muerto al mundo, a los intereses terrenos,
para vivir solamente para Dios.
COTA (ó SOBREPELLIZ ó ROQUETE): es como una media alba; es signo de pureza y
solemnidad.

LIBROS LITÚRGICOS
Son todos aquellos escritos que contienen los textos, gestos, ritos y normas para las celebraciones
litúrgicas.
EL MISAL: Es un libro litúrgico oficial que se utiliza para las celebraciones Eucarísticas.
Actualmente en él se encuentran los textos fundamentales de la Eucaristía: Rito de la Misa,
oración del tiempo, de los Santos, particulares, y oraciones eucarísticas. Durante la Eucaristía el
misal puede ser colocado al no usarse en un lugar apropiado, ya sea en la credencia o en algún
otro sitio. Excepto en el altar durante la liturgia de la palabra o al finalizar el rito de la
comunión.
LECCIONARIO: Es una serie de 3 libros que contiene las Lecturas Bíblicas correspondientes a
cada día para ser proclamadas en la asamblea:
TOMO I. Desde el Adviento hasta Pentecostés.
TOMO II. Tiempo ordinario hasta fin de año litúrgico (traen primero los 3 ciclos de domingos, y
luego los 2 de entre semana; luego, las fiestas significativas de ese período).
TOMO III. Misas rituales (de Sacramentos), de los comunes de santos y por diversas necesidades.
Los domingos comprenden un número grande de lecturas que se leen cada tres años, forman
cada año el ciclo A, B y C. Entre semana hay dos ciclos de lecturas: I igual a años impares, II igual
a años pares.
LITURGIA DE LAS HORAS: Reúne los salmos, antífonas, lecturas, versículos, responsorios,
cánticos, himnos y oraciones, alabanza de cada día. Preces matutinas y vespertinas.
BENDICIONAL: Pone en práctica lo señalado por el Concilio Vaticano II, cómo los
acontecimientos de la vida, santifican y tienen sentido religioso para una persona y la
comunidad.
Por eso se da gracias a Dios y se le bendice porque nos concede una casa, un vehículo, una tienda
de comercio...
LIENZOS
MANTEL: Se llama mantel en la liturgia, como en el uso de la mesa familiar, al lienzo que cubre
el altar, en señal de respeto a la mesa en la que Cristo nos invita a comulgar. Suele ser blanco,
pero admite adornos o franjas de otro color. El mantel debe bendecirse, ya que es la vestidura
festiva del altar.
CORPORALES: El corporal es un lienzo de color blanco cuadrado que se sitúa a partir del
ofertorio en el altar, para colocar el cáliz, la patena y el copón durante la Eucaristía. El nombre
viene del Cuerpo del Señor. Su finalidad es evitar que las partículas de pan consagrado se
pierdan o se dispersen.
PALIA: Es de forma cuadrangular, que, según las rúbricas, debe ser de tela y bendecirse. Sirve
para cubrir el cáliz, evitando que caigan en él partículas de polvo.
MANUTERGIO: Es un lienzo o toallita pequeña de color blanco y forma rectangular con la cual
el Sacerdote se seca las manos en señal de purificación después de haber presentado el pan y el
vino en el ofertorio.
PURIFICADOR: Del latín “purum- facere” que significa purificar. Se llama purificador al pañito
blanco que siempre va doblado en forma alargada, se coloca sobre el cáliz bajo la patena y sirve
para enjugar el cáliz después de dar la comunión o también para enjugar los labios y dedos del
Sacerdote. También sirve para limpiar la cruz cuando es besada.
CONOPEO: Del griego “konopeion”, que viene a ser como un velo o mosquitera. Es el velo que
a modo de tienda cubría el sagrario donde se reserva la Eucaristía. Se solía utilizar una tela de los
colores litúrgicos propios del tiempo o la fiesta. También, en menor tamaño, se utilizaba para el
copón o píxide, igualmente a modo de manto o tienda. Ahora el conopeo es facultativo.
VELO O PAÑO HUMERAL.: Es el velo que se pone sobre los hombros del que lleva al
Santísimo en una procesión. El ritual del culto eucarístico lo prescribe para dar la bendición con el
Santísimo. También se usa cuando la Eucaristía se lleva en procesión, como el Jueves Santo para
la reserva, o el Viernes Santo para volverla a traer al altar, o el día del Corpus, o en la dedicación
de una iglesia.

LUGARES SAGRADOS
Se llaman lugares sagrados aquellos, en los cuales se realiza la celebración liturgica. Cada uno de
estos lugares tienen su propio significado.
BAUTISTERIO: Se trata del lugar destinado a la celebración del bautismo y en el que se
encuentra la fuente bautismal. En algunos templos el bautisterio está cerca de la puerta
principal. Ello tiene un significado: nos recuerda que el bautismo es la puerta de entrada en la
iglesia, y, así, a la vida de los hijos de Dios.
LAS NAVES DEL TEMPLO: Las naves de un templo son los lugares en que se reúnen a los fieles
como un conjunto de personas para un mismo fin. Este espacio va desde la puerta de entrada
hasta el espacio del presbiterio.
CONFESIONARIO (SEDE PENITENCIAL): El confesionario es el lugar donde se celebra el
sacramento de la Penitencia y de la Reconciliación. Toma el nombre del aspecto más
característico del mismo, la confesión de los pecados ante el sacerdote.
EL PRESBITERIO: Se llama presbiterio al área en torno al altar, un poco elevado y distinto de
la nave. Es un espacio particularmente digno y significativo. El presbiterio quede bien
diferenciado respecto a la nave del templo, sea por su diversa elevación, sea por una estructura y
ornato peculiar”. En el presbiterio existen tres elementos: altar (lugar del sacrificio eucarístico),
sede (lugar de presidencia) y ambón (lugar de la proclamación de la Palabra de Dios).
EL ALTAR: El altar es una construcción elevada sobre la tierra, eso quiere decir precisamente la
palabra latina “altare”. El altar es el centro de nuestra celebración. Es signo de Cristo y, por tanto,
merece toda nuestra veneración: los ministros lo besan, lo inciensan, se inclinan ante él, se ilumina.
AMBÓN: El ambón, es una especie de tribuna elevada, su nombre proviene de una expresión
griega: “Anabaino”, que significa subir. Desde el ambón se proclama durante la Misa; las Lecturas
Bíblicas, el salmo responsorial y también la oración de los fieles.
CÁTEDRA O SEDE: Sirve para designar el lugar de un obispo desde ahí puede enseñar,
predicar y gobernar a su diócesis. De ahí viene el nombre de catedral, templo en donde se
encuentra.
SAGRARIO O TABERNACULO: En latín “Lugar Sagrado”. Caja, recinto y lugar en donde se
conserva la Eucaristía para la adoración de los fieles y para ser llevada a los enfermos.
SACRISTIA: Es el lugar donde se prepara todo lo que se necesita para la celebración: los
ornamentos del sacerdote, los libros, el cáliz, el copón.
LA CREDENCIA: (Este nombre significa donde está todo para el servicio del culto). La
Credencia es la mesita, que se encuentra cerca del Altar (de preferencia al lado derecho), en ella
se colocan las vinajeras, el cáliz, en algunos momentos el misal romano, piscina y manutergio y
otros implementos necesarios e inmediatos a utilizarse en la Eucaristía. También en ella se
realizan las abluciones o purificaciones de los vasos sagrados después de la comunión.

LOS COLORES EN LA LITURGIA


El color en la liturgia, expresa los sentimientos propios, significados y el sentido de lo que, a través
del año litúrgico, la Iglesia invita a vivir, a actualizar. Esto se realiza especialmente, a través del
ornamento, es decir, a través del color de la casulla que el celebrante usa para la celebración
propio de cada tiempo.
VERDE: Simboliza esperanza, frescura, vitalidad. Se usa normalmente con el tiempo ordinario.
Esto es, domingos y días de feria (no de fiesta), fuera de la Cuaresma, Adviento y Pascua.
BLANCO: Simboliza alegría, pureza, luz, inocencia, plenitud. Se usa en la liturgia para celebrar
las fiestas de la Resurrección del Señor, Navidad, Epifanía, Fiestas marianas, fiestas de los santos;
no mártires. El blanco es signo también de victoria y de resurrección.
ROJO: Simboliza sangre, amor, fuego, martirio, heroísmo, sacrificio. Se usa para las fiestas de la
Santa Cruz, Domingo de Ramos, Viernes Santo, Pentecostés, conmemoración de los apóstoles y
santos mártires.
MORADO: Simboliza penitencia, humildad, espera. Se usa en Adviento (cuatro semanas que
preparan a la Navidad) y Cuaresma (cuarenta días que preparan a la Pascua); es el color que
invita al retiro y recogimiento.
NEGRO: Anteriormente se usaba en misas de difuntos, pero en la actualidad es suplido por el
color morado en atención a la sagrada Eucaristía que es el sacramento de la vida eterna. Este
color simboliza dolor, pesar y luto.
AZUL: Se usa en las fiestas de la inmaculada. Ocasionalmente se usa el color azul en fiestas y
Misas en honor de la Santísima Virgen María.
DORADO Y PLATEADO: Subraya la importancia de las grandes fiestas. Se usa en sustición del
blanco.
ROSA: Subraya el gozo por la cercanía del Salvador el Tercer Domingo de Adviento, e indica
una pausa en el rigor penitencial el Cuarto Domingo de Cuaresma.

POSTURAS CORPORALES
La postura uniforme seguida por todos los que toman parte en la celebración, es un signo de
comunidad y unidad en la asamblea, ya que expresa y fomenta al mismo tiempo la unanimidad
de los participantes. Con nuestro cuerpo también alabamos a Dios, y las principales posturas que
debemos tomar toda la asamblea durante la celebración liturgica son tres: de pie, sentados y de
rodillas.
POSTURA DE PIE. Significa la actitud de DISPONIBILIDAD en que debemos estar para dar
una respuesta a lo que Dios quiere de nosotros. También significa RESPETO ante la presencia de
Dios.
Momentos en los que debemos estar de pie:
- Al recibir al celebrante.
- Durante el saludo.
- Durante el Acto Penitencial.
- En el momento del Señor ten piedad.
- En el Gloria.
- Desde el Aleluya hasta que termina el Evangelio.
- A la hora del Credo.
- Durante la Oración de los Fieles.
- En la Oración sobre las Ofrendas.
- Prefacio y principio de la Plegaria Eucarística (oración posterior al Santo)
- Después de la Consagración hasta la Comunión.
- Después de la Comunión cuando el sacerdote dice “Oremos”
POSTURA SENTADOS. Actitud de quien se concentra para escuchar, meditar con calma y
dialogar con intimidad.
Momentos en que debemos estar sentados:
¾ Durante las Lecturas y salmo responsorial.
¾ Durante la preparación de dones “Orad hermanos”
¾ Durante la Comunión (quienes no pasen a recibir el Cuerpo del Señor)
POSTURA DE RODILLAS. Es la actitud del pecador ante la infinita santidad de Dios, significa
también respeto, humillación, pequeñez y de adoración.
Momentos en que debemos estar de rodillas:
Cuando el sacerdote pone las manos sobre los dones hasta que termina la Consagración.

Como nota complementaria podemos mencionar la GENUFLEXIÓN, que consiste en doblar las
rodillas ante la Eucaristía; es una actitud de respeto y de adoración. Esta puede ser de dos tipos:
Doble: debe hacerse siempre que se pase frente al Santísimo, dentro y fuera de la misa, estando
expuesto para adoración de los fieles.
Sencilla: basta con doblar la rodilla derecha cuando se pase frente al sagrario.

POSTURAS DEL SACERDOTE


El sacerdote usa una serie de expresiones externas y posturas corporales para reforzar el sentido
de los signos. Son muy comunes en el sacerdote cuatro clases de posturas:
LOS BRAZOS ABIERTOS Y ELEVADOS: Es una postura de oración que expresa lo más intimo
del ser humano, signo de alabanza, de júbilo, de alegría, de amistad y acogimiento.
LAS PALMAS DE LAS MANOS HACIA ARRIBA: Manos abiertas que piden, que reconocen su
propia pobreza, que esperan recibir el don de Dios. Expresa lo contrario del puño violento, de las
manos cerradas al egoísmo.
MANOS UNIDAS, PALMAS CONTRA PALMAS O DEDOS ENTRELAZADOS: Esta postura
expresa o es una actitud de recogimiento, de meditación, de paz. Es el gesto de uno que se
concentra en algo, que interioriza su sentimiento de fe.
MANOS EXTENDIDAS CON LAS PALMAS HACIA ABAJO: Señal de bendición, de infusión o
comunicación del Espíritu (por ejemplo cuando el sacerdote extiende las manos sobre el cáliz).
4.- RITO DE CONCLUSION
- Saludo y bendición sacerdotal
- Despedida.
NOTAS COMPLEMENTARIAS
1) El acto inicial de la Iglesia para dar culto a Dios colectivamente es la Santa Misa.
2) Están obligados a participar en Misa entera todos los días de precepto (domingos y fiestas
de guardar) todos los bautizados que han cumplido siete años y tienen uso de razón.
3) Participar en Misa entera significa estar presentes desde que empieza hasta que termina
(es decir, hasta que el sacerdote nos diga: pueden ir en paz.)
4) No se vale participar en Misa por partes pues no se cumple con el precepto.
5) El precepto de participar en Misa puede cumplirse el sábado por la tarde o la víspera de
las fiestas de precepto.
6) Quedan excusados de ir a Misa los que tienen algún impedimento fuerte como una
enfermedad, cuidar a un enfermo, etc.
NOTAS COMPLEMENTARIAS:
Podemos mencionar además otras posturas o acciones del sacerdote, por ejemplo:
ƒ En la presentación de los dones el sacerdote eleva un poco sobre el altar el Pan y el Vino
como un gesto de presentación, no de ofrecimiento.
ƒ En la Consagración, después de pronunciar sobre cada uno de los dones la palabra de
Cristo, el sacerdote los eleva un poco con el fin de mostrarlos al pueblo.
ƒ Terminada la Consagración, el sacerdote eleva hacia Dios el Cuerpo y la Sangra de Cristo
–esta vez los dos juntos, uno en cada mano- para que la comunidad le rinda homenaje
de adoración.
ƒ La genuflexión del sacerdote, también tiene la finalidad de adoración a Dios.

LA SANTA MISA
LA SANTA MISA es el sacrificio del Cuerpo y Sangre de nuestro Señor Jesucristo que se ofrece en el
altar en memoria del sacrificio de la cruz. La Misa es la fuente y cumbre de toda la vida cristiana.
La estructura actual de la Misa tiene dos partes principales: Liturgia de la Palabra y Liturgia
Eucarística. Sin embargo, estas dos partes o ritos centrales son acompañados por una serie de
ritos complementarios.

1.- RITOS DE APERTURA


- Canto de entrada
- Veneración del altar (incensación)
- Saludo al pueblo congregado, señal de la cruz
- Acto penitencial
- Canto Kirye o Señor ten piedad (aclamación a Dios pidiendo misericordia)
- Canto del Gloria (himno antiquisimo con que la Iglesia congregada en el Espíritu Santo glorifica
a Dios Padre y al Cordero, y le presenta sus súplicas)
- Oración colecta: el pueblo es invitado a orar, luego el sacerdote concluye con la invocación a la
Trinidad.
2.- LITURGIA DE LA PALABRA
- Primera lectura (En el Antiguo Testamento, Dios nos habla a través de la historia del pueblo de
Israel y de sus profetas)
- Salmo Responsorial
- Segunda lectura (Se toma del Nuevo Testamento, ya sea de los Hechos de los Apóstoles o de las
cartas que escribieron los primeros apóstoles. nos sirve para conocer cómo vivían los primeros
cristianos y cómo explicaban a los demás las enseñanzas de Jesús)
- Canto del Aleluya
- Proclamación del Evangelio (Se toma de alguno de los cuatro Evangelios de acuerdo al ciclo
litúrgico y narra una pequeña parte de la vida o las enseñanzas de Jesús. Es aquí donde podemos
conocer cómo era Jesús, qué sentía, qué hacía, cómo enseñaba, qué nos quiere transmitir. Esta
lectura la hace el sacerdote o el diácono.
- Homilía: alimento de vida cristiana. Es una explicación de las lecturas con referencias al misterio
que se celebra y particulares necesidades de los oyentes.
- Profesión de fe: Credo
- Oración de los fieles: el pueblo ruega por a) las necesidades de la Iglesia, b) por el mundo y sus
gobernantes, c) por los que sufren, d) por la comunidad local.
3.- LITURGIA EUCARISTICA
a) PREPARACION DE LOS DONES
- Preparación de la Mesa
- Procesión de ofrendas
- Acompaña al Canto de Ofertorio
- Colocación en al altar, y presentación de los dones
- Incensación
- Lavatorio
- Invitación a orar
- Oración sobre las ofrendas
b) PLEGARIA EUCARISTICA
- Acción de gracias
- Aclamación de todos: Canto del “Santo”
- Epíclesis (El celebrante extiende sus manos sobre el pan y el vino e invoca al Espíritu Santo, para
que por su acción los transforme en el cuerpo y la sangre de Jesús)
- Narración de la Institución
- Anámnesis (palabras que dentro de la Plegaria Eucarística siguen al relato de la institución)
- Oblación
- Intercesiones (Ofrecemos este sacrificio de Jesús en comunión con toda la Iglesia. Pedimos por el
Papa, por los obispos, por todos los difuntos y por todos nosotros)
- Doxología final y aclamación del pueblo (El sacerdote ofrece al Padre el cuerpo y la sangre de
Jesús, por Cristo, con él y en él, en la unidad del Espíritu Santo. Todos respondemos: "Amén")
c) RITO DE COMUNION
- Oración Dominical, Padre nuestro
- Rito de la Paz
- Fracción del Pan. (Acompaña el Cordero de Dios)
- Conmixtión (una parte de la Hostia se deposita en el cáliz)
- Preparación privada del Sacerdote
- Invitación y acto de humildad
- Comunión (del Celebrante, luego los fieles).
- Acompaña el canto de Comunión
- Acción de gracias: Oración privada
- Oración después de la Comunión

ELEMENTOS SAGRADOS
Son aquellas realidades naturales elaboradas que utiliza la liturgia en las diversas celebraciones:
EL PAN: Signo del alimento. Es un elemento que la Iglesia siempre ha usado para celebrar el
Banquete del Señor. Alegría, unidad, cuerpo, muerte y resurrección.
VINO: Materia necesaria para la consagración liturgica en la misa, junto con la Hostia y el agua.
(el vino para la misa debe ser de uva, sin elementos químicos).
AGUA: Principio de vida. Nos limpia y es fuente de vida o muerte.
CENIZA: Símbolo de destrucción y penitencia.
FUEGO: Nos hace ver con su luz, calienta y purifica.
ACEITE: Expresa medicina que penetra y permanece.
INCIENSO: Elemento que quemado asciende y perfuma.
LUZ: Presencia divina. Cristo luz sin ocaso, fiesta.
PERFUMES: Presencia del esposo, buen olor de Cristo, oración.
SAL: Purificación, alimento.
RAMOS: Purificación, triunfo pascual.
LECHE Y MIEL: Alimento espiritual, Palabra de Dios en abundancia.
CIRIO: Cristo resucitado, luz sin ocaso, hecho de la cera virgen.
FUENTE: Seno de la Madre Iglesia.
CRUZ: Victoria pascual. Árbol de la vida.
ICONOS E IMÁGENES: de Cristo: reflejo de la gloria del Padre. De los santos: Asimilación de
Cristo.
LECCIONARIO Y EVANGELIARIO: Presencia de Cristo en su Palabra.
VESTIDO: Asimilación a Cristo, nuevo Adán, participación en el banquete mesianico, ministerio
y función de la liturgia.
CAMPANA PASCUAL: Convocatoria, alabanza.

DIEZ REGLAS PARA HACER UNA MALA


HOMILIA EUCARISTICA
(Sirven también para una reflexión o cualquier otro sacramento)

1. Que sea larga (que pase de 15 minutos)


2. Que no la preparen, ni con oración, ni con estudio; no lea con anticipación los textos
litúrgicos y bíblicos de la misa.
3. No se adapte a su comunidad, ni en lógica, ni en lenguaje, ni en vocabulario.
4. Procure que su equipo de sonido funcione mal, y usted no se olvide de pronunciar lo más
confuso que pueda.
5. Haga que su homilía aparezca no como parte integrante de la liturgia, sino como algo
extraño, introducido. Esto se puede lograr de muchos modos. Sugerimos uno: Inicie y
termine su homilía con la señal de la cruz: “En el nombre del Padre…”
6. Hable de todo lo que se le venga a la mente, de lo que sea más fácil o más efectista.
7. Que su homilía no se relacione con la Palabra de Dios proclamada antes.
8. Que no aparezca relacionada con el sacramento que se celebra, con el tiempo litúrgico,
con la fiesta.
9. Que no ilumine la vida real de sus fieles. Que aparezca desencarnada, etérea, celestial.
10. En vez de homilía haga cualquier otra cosa:
- Clase de teología
- Curso bíblico
- Arenga demagógica
- Promoción económica parroquial
- Avisos de ocasión
- Regaño moralizante
- Fervorín
- Pieza oratoria
- Etc, etc, etc.

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