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CUESTIONARIO
2. Los capitales
(F) El desarrollo comercial de fines del S. XVIII permitió acumular capitales
(V) No dependió del azúcar ni del algodón
(V) Dependió del comercio lanero
(F) Dependió del guano
3. El circuito comercial
(F) Durante el Siglo XIX el sur se convierte en una economía predominantemente
exportadora de lanas
(F) A partir de 1930 el comercio lanero vinculará Arequipa, Puno, Cusco e incluso Bolivia
(F)La hegemonía arequipeña se define a partir de la década de 1880
(V)El Banco de Arequipa se crea en la década de 1870.
4. Quilca, “ era una caleta estrecha en cuyo interior hay siempre gran rompiente ...”
5. “Hace pocos años, Mollendo era una seca y pelada roca y aunque la aridez no ha mejorado mucho,
tiene bastante población. Que está marchando conforme a las necesidades del progreso, que
evidente por el hecho que tiene cuatro hoteles (...), una aduana y una oficina de correo”.
6. El Puerto de Islay, mejor situado que el de arica ha absorbido todos los negocios”
( ) José María Blanco (X) Flora Tristán ( ) Samuel Haig ( ) El Cónsul Británico
MARQUE CON UNA X LA ALTERNATIVA CORRECTA
( ) Fines del S. XVIII (X) Principios del S. XIX ( ) Mediados del S. XIX ( ) Fines del S. XIX
DESARROLLE:
Arequipa fue la sede de las grandes transacciones comerciales. A la ciudad llegaban las mercaderías
europeas y las recuas de mulas del interior transportando lana y los otros productos.
El vizconde de Sartigues, quien estuvo en Arequipa por 1833, observa desde entonces que “el comercio
extranjero es el alma de la población de Arequipa”. El comercio aparecía impulsado por casas europeas.
En los años siguen aparecen nuevas casas comerciales. A las que ya hemos mencionado se añadieron
por ejemplo, Enrique Gibson, fundada en 1868, Jorge Stafford, Bernardo Weis, Lizardo Tejada, F.
Taconnet, José Iturburu, Escomel, Guillermo Harmsen, Sawers Woodgate. Paulatinamente
comerciantes nacionales o emigrantes ingleses, catalanes y vascos fueron desplazando a las casas
británicas.
Mediante el comercio Arequipa comenzó a hegemoniza sobre todo el sur. Pero la consolidación de su
hegemonía solo se definió con la construcción del ferrocarril. En la navidad de 1870 se terminó el
tramo de Mollendo a Arequipa. En 1876 ya estaba en condiciones de operar la línea ferroviaria que unía
a Arequipa con Juliaca. El ferrocarril facilito los intercambios entre Arequipa y el altiplano. Polar retrata
bastante bien la situación cuando sostiene que “el ferrocarril, al romper el aislamiento del oasis, abrió
nuevos horizontes al tráfico comercial y facilito la importación de nuevos fermentos culturales que
iniciaron hondas transformaciones. La aldea agrícola se troco en una ciudad de transito que centralizó y
dirigió todo el comercio del sur del país”
Pero los beneficios para Arequipa y su clase dirigente no fueron equivalentes para otras áreas y otros
pobladores del sur. Con el ferrocarril se inició en ocaso de las grandes ferias rurales, como la de Vilque,
y la ruina de los arrieros. El ferrocarril desplazo a otras rutas que comunicaban a la costra con el
altiplano. La ruta Majes-Caylloma-Cuzco o la ruta Puno-Moquegua, trajinadas constantemente por
campesinos desde tiempos inmemoriales fueron relegadas. Amparados en que la ruta por Moquegua
eran más corta, algunas voces discordantes sostuvieron la necesidad de impulsar un ferrocarril por esa
zona: no tuvieron éxito. En el proyecto del ferrocarril del sur estaba de por medio a hegemonía de
Arequipa.
Solo tardíamente se emprendió la construcción del ferrocarril Moquegua-Puno.