| ACCION Y ESPACIO
Autonomijas en la nueva Reptiblica
por
ORLANDO’ FALs BORDA
3
IEPRIACCION Y ESPACIO
A Maria Cristina, a mi hermana Maribel yami familia,
Por tantas cosas del amory de la solidarid. ias mil
ports ad. Gracias mila
Orlando Fals Borda
Bogoté, enero del 2000,
ftulo 1. EL TERRITORIO COMO CONSTRUCCION
Cap!
a SOCIAL,
Eo primero a que deseo invitar es quitar dela mente algu-
nas telarafias concernierites a la idea de espacio. Por regia
general, vemos a éste como una entidad de dimensiones
fisicas (alto, largo, ancho, pequefto, grande) que, una vez
dadas, quedan estéticas o configuradas para resistir los
cambios. Esto es cierto segtin clésicos preceptos mecani-
cistas; pero por sucesivas evoluciones interpretativas que
na-podemos tratar aqui, no se ve hay bajo lamisma éptica.
La situacién no es tan simple. Porque desde Einstein se
sabe que las dimensiones son relativas y que pueden ser
antrépicas, es decir, que su determinacién puede depen-
der del punto de vista del observador calificado.
Para fines de nuestro estudio, que se refiere a espacios/
temposccon expresiones de vida o afectados por la activi-
dad del ser humano, el andlisis mecanicista o newtoniano
no es aplicable. Ac4 es necesario derruir la idea clasica y
concebir eLespacia:como un ente flexible y variante, con
impulsiones que van y vienen, no s6lo por el principio
antrépico'sino por el dela construccién social en el tiem-
po que ha venido enmarcando la explicacién sociolégica
ae 1|
|
ACCION ¥ ESPACIO
~_ Sontemporinea. Esta concepcién mas realista va ligadaa
expansiones y contracciones histéricas y demogréficas re-
lacionadas con necesidades colectivas, De. alli se derivala
iain vivencial y temporal que se experimenta con el
En estas circunstancias, el espacio/tiempo toma la for.
ma de unidades concretas, pero transitorias, de ocupacién
humana, que aqui denominaremos “recipientes” o“conte-
nedores”, pero que a diferencia de los fisicos 0 materiales
son maleables y ajustables. A los referentes politico adma,
nistrativos de los contenedores ajustables,a los cuslesse
les dan limites formales, Uamaremos “tetritorios”.
EVOLUCION Y EROSION DEL ESTADO NACIONAL,
Stendo que el contenedor o recipiente territorial mas.
Portante y visible (por lo menos en mapainundis)¢s efidet
Estado-Nacion, examinémosto primero. Prepinitémerose
écomo se han dstibuido en el mundolosespacios oo.
Braficos entre los Estados? Porregla general, en lo que
Tespecta a Europa de donde esta figura einilisieh at
Binaria (peores repartos se han hecho en Africa y otros
Sitios desde el siglo x1x), elo fue decidide por los gober=:~
rrantes que segtin el Tratado de Westfalia dieron términoa
la Guerra de Treinta Afios en 1648, Sus decisiones tuvieron
Fepercusi6n universal por virtud de las politicas colonia,
Fa e inperaes de entonces, ya que el modelo de Esta:
-Nacids fue do ee
do Nation fue reproducido sin dseusion seriaen me
h
BL TERRITORIO COMO CONSTRUCCION SOCIAL 3
. Con esta iniciativa geopolitica quedaron establecidos
‘dos criterios-guias pertinentes para nuestro estudio del te-
sgitorio come-construccién social: el de las fronteras na-
“@pnales, y el de la soberania. Desde el principio se traté
‘que las fronteras fueran trazadas con cierto cuidado entre
Jasnaciones, con base en accidentes arcifinios o por capri-
“elias dindsticos pero claros, con lo cual terminaron par-
" ‘eialmente los delineamientos porosos del pasado. Los
gobernantes del Tratado determinaron los limites por acuer-
do, pensando en la permanencia de los hitos (si no se res-
petaban no habria paz), lo cual dio origen una inesperada
yala larga inconveniente concepcion: la de una fijacién_
territorial limitada, basada en un certo fetichismo que de-
terminaba como natural y permanente la territorialidad del
Estado asi concebida. Esta intangibilidad de limites se exten-
dié por analogia a los componentes internos o pravincias
delos Estados. La resultante territorializacién se represen- ==
#6 asi como una precondicién natural de la existencia so~
cial y politica de los Estados, sin admitir el juego de otras
formulas de construccién social como estrategias histéri-
camente determinadas, tales como las que implican divi-
sién, accesién, centralizacién o limitacién por diversos
factores (sociales, raciales, religiosos, politicos) mes pue-
blos mismos. z
/ Lainterpretacién fetichista y” natural” de la construc-
ifn del Estado tuvo a Dios y a su representante en la Tie
ha, el rey soberano, como referentes centralizadores. Hasta
Gerto punto, fueron también unificantes. Al combinar te-
ritorio con la soberania inspirada en el derecho divino, sei
ACCION ¥ ESPACIO
reforz6 la caracteristica estatica del sistema Westfaliano,
con todo su potencial bélico, nacionalista a ultranza y
etnocéntrico (que luego hemos visto en todo su furor).
Surge este sistema, hoy universal aunque ya més cuestio-
nado, como un modelo mecanicista y lineal que sélo admi-
tecambios sociohist6ricos lentos, sea por dentro o por fuera
de las fronteras del Estado-Nacién. Queda asi et mundo
Tepresentado desde entonces como un gran rompecabe-
zas conformado por piezas nacionales yuxtapuestas.
Enestas condiciones, el cambio geopolitico sdlo se ha
aceptado por conquista, anexién o secesién realizada por
losmismos soberanos, en lo que tiene que ver con el exte-
rior de los contenedores nacionales, En cuanto alinterior
de éstos,el cambio se ha tolerado (a veces con violeticia oa
regahtadientes) slo como ajustes verticales, de arriba aba-
jo, obedeciendo a mecanismos politicas.o imposiciones
personales de los gobernantes o de los grupos dominam
-#es, asi en sistemas centralizados como federales. No seha
Tespetado la voluntad popular, ni se ha tomado encuenta
larealidad de los procesos locales o regionales de naturale
Za econémica, social o cultural, ni los. desplazamientos de-
‘Mograficos inducidos o esponténeos, ni la constru:
de vias oe modifican la orientacion espacial de los habi- *
tantes. ed
~__Lossoberanos modemos,al ignorar estos procesos ellos
sécomprobables y reales- de produccién, reproducciény
transformacicn que se desarrollan enos espacios ocupa-
dos por los pueblos, han cometido un grave error: han
wnegado la historicidad dinémica del propio Estada y de
fu TERLTORO COMO COSSTHUCON SOCAL
“Zoscomponentes, creando tensiones politicas y sociales que
a= la gobernabilidad. —
1 modelo vertical,
{&. Podemos entonces concluir que el de i
P gptosuficiente y mecanicista de Estado-Naci6n, asociado
‘gimaginario newtoniano de espacio/tiempo como un blo-
estdtico e intangible, ha limitado severamente lacom-
ecsome Jos procesos sociales de base implicados en el
“Grdenamiento y uso de los territorios. Como diria Henri
‘Lefebvre, tal modelo es “una forma de violencia dirigida-at
io” smos, pues, que cuestionar los mapas.exis-
Sec ieasio, que slo muestra elfraccionamiento
detespacio terriqueo en un momento dado como reflejo
“Ge una obsoleta construccién sociopolitica, y empezar a
vercémo se puede rearmar el actual rompecabezas geo-
gréfico del mundo, para que éste funcione mejor.
‘LAREPUBLICA POSMODERNA Y MECANISMOS GLOBALES
DEESPACIO/TIEMPO > >
‘Antela perspectiva del ocaso del modelo Westfaliano, pre-
guntémonos: équiénes son los actores que disponen hoy
sobre a dstribucién del espacio planetari? Yano son los
Papas ni los reyes soberanos, ni tampoco por si mismos los
dictadores o presidentes actuales. Este papel esté pasando
aha pasado parcialmente a otro grupo de dirigentes con-
formado por grandes empresaros capitalistasy comunica-
dores apoyados por una élite técno-cientifica, todos
articulados desde y por el mundo occidental (euronortea-
mericano) dominante. En esta topografia del poder, otrosACCION ¥ Espact
intereses han entrado a jugar: son los macroeconémicos,
bee BOS MUY definidos no siempre favorables a los pue~
anos podrén Ser actores muy diversos, entre los cuales
no Puede descartarse la ascensién del poder
: Poder popular au-
Como viene sugerido, en el
n en el polo opuesto del modelo
‘Wesfaliano se halla la descuidada dimension dela histo:
‘que los procesos globales
lolaexistencia ¢
« latalycreancio efiniend neia del poder es- 3
Parece claro que en la era posmoderna lai
P idea de Este
‘do ene que replantearse como un ente muy distin ta
TEL TERRITORIO COMO CONSTRUCCION SOCIAL
quenaci6. Ahora existe un espacio social global de natura-
eza irregular, compuesto de niveles, nodos, escalas y for-
amas superpuestas e interpenetrables que se ajustan ala
“ealidad fragmentada y multiple del mundo contemporé-
‘Reo. Estas formas no encajan en el modelo antiguo de blo-
mes 0 recipientes intangibles vinculados entre-si como
[os o como componentes de éstos. Los ajustes y flijos v
de escala institucional hacia arriba, afuera y abajo de las
estructuras sociales y politicas estén creando capas polimor-
“fas de organizaci6n territorial que no convergen unas con
~ @tfas linealmente segtin la antigua escala geografica: Con-
forman un mapa inestable de realidades sociopoliticas de
duracién limitada cuyo aspecto general se acerca a uit
ealeidoscopio oa una ameba en movimiento, que avanza y
etrocede. Son ajustes que llevan a formas distintas de go-
Bierno de la cosa piiblica, quizés ms eficaces, esto es, Hie-
van a concebir nuevas Reptiblicas. Ademas expresan la
olvidada tesis marxista sobre compresién espacio/tiempo
~que “el capital lleva a aniquilar el espacio con el tietipo”= ~
tesis que ha sido retomada, en otros sentidos, por analistas
dela fisica cuantica, la teoria del caos y la complejidad, y la
teoria de sistemas abiertos. Estas ideas, de retorno, se han
incorporadoa las ciencias sociales para aplicarlas al campo
territorial que aqui nos interesa (Wallerstein).
BIOESPACIO Y TECNORREGION
En las inestables circunstancias observadas, los contene-
dores o recipientes emergentes sufren dos impactos.ACCION ¥ ESPACIor
sociopoliticos que pesan en su reorganizacisnas{ en la ciu-
dad como en el campo: la busqueda de la autonomia ad
ministrativa; y la adopcién de formas de democracia
Participativa en desarrollo del concepto autérquico de So-
berania Popular. Estos procesos vienen a corregir fallas se-
culares de autoritarismo y federalismo clasico, ast como la
falta del reconocimiento dindmico dea historicidad; y acer-
can a las nuevas formas de estructura.de gobierno de las
Reptiblicas reconfiguradas y reordenadas.
Los ajustes y flujos institucionales implicados por es-
tos procesos globalizantes a su vez llevan a dar dos pasos
ue constituyen el ordenamiento territorial como politica de
Estado: 1) la creacién de nuevas entidades espaciales fun-
Gionales, tanto a escala interna o subnacional comoa esca-.
la externa o supranacional; y 2) la revisicn, eliminacién 0
desactivaci6n de limites o fronteras. existentes, asi internas
Como externas, que por lo general son herencias defectuo.
‘2s ocaprichosas de las précticas geopoliticas vertcales de
dirigentes del periodo anterior. Mas adelante volveréa este”
importante punto. =
Para entender cabalment€ estas dos grandes poilticas
teordenadoras en el nuevo contexto de a globalizacién y
dentro de las naciones mismas, se estén empleando dos’ *
conceptos de espacio/tiempo: bioespacio y fecnorregiGn.~
Tanto el uno como la otra inyectan la dimensién histérica
¥ destruyen la concepci6n rigida e intangible de Bloque
lineal de los contenedores espaciales derivada de la era
newtoniana, como se refleja en los limites que muestran
las cartas geogréficas usuales. Bioespacio y tecnorregiéei,
"EL TERRITORIO COMO CONSTRUCCION SOCIAL
elcontrario, se definen como unidades fractales, ajus-
“Zplesy revisables, como reflejo de realidades vivas.
“esos locales y regionales de desarrollo social, econémico
ee ittico que vinculan actividades vitales de produccién
Fe oluccén con los recintos en que se ejecutan y de
arcsec derivan elementos de continuidad social diver-
‘dad cultural. En el campo se trata de zonas Soe
tehomogéneas tales como ecosistemas, nas balelias
uencas hidrogréficas, regiones hist6rico-culturales,
torios étnicos y resguardos indigenas, zonas de reservacam-
ina, parques naturales, provincias, municipios asociadios
Precindasos-caerios Bh dad, con una estractra
ini comple, heteogénea variable losbioespaciosse
consttuyen en barrios lcaidades 0 20as,reuitos. d+
vets0s, distritosy éreas metropolitanas y suburbanas.
estos bioespacios se expresa y palpala vida colectivaeresu
cotidianidad: la relacion terttrio-poblacon-servicioes
fundamental deall depende mucho laconvivenci
prosperidad y la paz ciudadanas y el a manejo que!
é 150s inancieros que reciba. |
: 4 rccnorregin sedefine,segin Luke, por las vineul~
cones ceadas por avancesientificos, enicos informe
tivos que desbordan a nivel macro los limites de los
tertitorios. Surgen all los poderosos mundos de las en
presasmoltinacionaes vncuacioneseconémcnsset>
Tales o regionales, redes comunicativas y de ONGS:¥
Internet, y se forman conjuntos geopoliticos.y alianzas
como los de la Unién Europea, la O&A, la Asociaciém-de&
ia
10
ACCION ¥ EsPACtO}
Naciones del Sudeste Asiatco, la Nafta y el Mercosur ent
dades que van adquiriendo progresiva identidad Yyautori-
dades o personeros propios.
Ambos mecanismos ~el bioespacio y la tecnorregin—
iMvilan a ver el mundo y sus componentes como un juego
aleatorio de niveles que se modifican se integran y se des.
dentes en la ciudad que en el campo, lo que invita a reali,
zar en ella andlisis de sistemas complejos de naturaleza
En cuanto al sentido de los limites de. bioesp.
aquellos naturalmente no pueden ee
como-expresién de una construccién social y quedan por
lomismo sujetos alas revisiones periédicas inducidas oy
4a procesos, Elobjeto de este ejercicio es faciltarlaachar,
nistracion delegada de los territorios mediantesu visual,
zacién directa (sobre el terreno) o figurada (comoen los
mapas). Elbuen gobierno resultante reflejaré la dindmice
¢ impacto de los flujos que'S@ crean en a vida local y en
sus comunidades por las comunicaciones, la interaccién
sociceconémica y la creatividad cultural,
Habra que cuidar que los mites administrativos nose
conciban ni se presten para hacer separaciones ideolégi-
‘. tela.globalizacién actual tampoco suministraré los linea=
smientos finales del mundo.
NUEVO ORDENAMEENTO Y NUEVA REPUBLICA
Quiero enfatizar, por dltimo, que el concepto de ordena-
miento territorial que aqui elaboro, sin desconocer los tres
pilares discutidos por los clasicos (el politico-administrati-
vo, el geopolitico y eTambiental), se refiere a politicas macro
de amplia visién estatal basadas en la epistemologia del
territorio y en la humanizacién de las relaciones en el és:
Pacio/tiempo. o
Lamoda corriente sobre el tema, sintomatica del dete-
tioro de la situacién, ha levado a parcelar y oscurecer el
concepto pleno, olvidando sus reales, muy grandes dimen-
siones, ya pensar que con legislaciones parciales sé resuél-
ven los problemas iniplicitos. Nada es mas equivocado v
equivoco) que las denominaciones que se han empleado
en paises como Chile, Pert, Venezuela y Colombia donde,
} Tespéctivamente, se han dictado leyes reducidas sobre
Tegionalizacién, descentralizacion, medio ambiente y uso .
del suelo urbano (Por) llamando a todo ello “ordenamien-
to territorial”. Estos disfraces politicos del ordenamiento6 ACCION ¥ FSPAC
no llegan al fondo de la cuestion, que sigue viva y esperans
do soluciones orgénicas en éstos y otros paises.
Elestablecimiento de Comisiones Permanentes de O1
denamiento Territorial -que reconozean la dimensién his
t6rica y dinémica del problema y que vigile e impong:
con suficiente-poder coactivo, los ajustes emergentes ne:
cesdrios- es urrbuert paso a dar, comolo viene ejecutand.
Francia desde 1965 con la politica oficial delaménagement
du territoire. Otros paises desarrollados, como los Estado:
Unidas donde ha privado la ficci6n newtoniana del limit
recto entre los Estados, han suftido ajustes informalesdesor-
ganizantes como log de las circunscripciones electorale:
acomodaticias identificadas con el gerrymandering. Sem«
jantes autoengarios han producido alli confusignes degol
nabilidad y abusos de poder, como lo han documentad«
los soci6logos de esas latitudes.
Un desarrollo fuerte y completo de estos retos natura.
territorial, hacia muevas formas de manejo y concepcién
de la cosa publica ~res publiog-, hacia una nueva Reptbli-
ca posmoderna coi las autonomias requeridas porlos bio-
espacios. Todavia hay represamientos y peligros.en este
proceso, sin embargo existe cierta conviccién de que la
funci6n principal de las nuevas Replicas podra ser la de
vigilar y canalizar la expansiGn del capitalismo global.con
sus excesos e injusticias, contaminaciones quimicas y gue-
ras regionales, para volverlo a causas sociales y metas
EL TERRITORIO COMO CONSTRUCCION SOCIAL
‘Guhl, Ernesto (1991). Las fromteras politica y los Kites naturales.
v
Ipsmuanistas nivel local. El pueblo, con sus diversas capas
fgociales afectadas por el capitalismo, asume hoy el papel
“deobjetivo y de actor principal. Ya volveré sobre este pun-
comprometedor.
_ Neil (1999). “Beyond State-Centrism? Space, territo-
ality, and geographical scale in globalization studies",
‘Theory and Society, 28 (1): 39-78.
-Eftells, Manuel (1999). “Globalizacién, sociedad y politica en.
aera ela informacién” ,Andlisis Politico (Bogota), 37:3-17.
Bogoté: Fondo FEN Colombia.
Harvey, David (1982). The Limits to Capital. Chicago: University
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Lefebvre, Henri (1986). La Production de l’Espace. Paris: Anthro-
pos,3a.ed.
Luke, Timothy W. (1999). Capitalism, Democracy and Ecology:
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Marx, Karl (1857). Grundrisse: Fundamentos de la critica de la eco-
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‘smith, Neil (1997). “Antinomies of space and nature in Lefe~
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2: 50-51
Soja, Edward (1989). Postmodern Geographies. Nueva York: Verso.
Wallerstein, Immanuel (1998). “EspacioTiempo como base del
conocimiento”, en O. Fals Borda, ed., Participacién popular:
retos del futuro. Bogota: Iepri/ Icfes/ Colciencias, 47-68.
Walter D. Mignolo. 2001. "Introducción". Capitalismo y Geopolítica Del Conocimiento. El Eurocentrismo y La Filosofía de La Liberación en El Debate Intelectual Contemporáneo.