Está en la página 1de 2

SITUACIONES DEL AMAMANTAMIENTO DE UN BEBE.

Como enfrentar si un bebe de 20 meses duerme con nosotros en la cama. Aun así,
se despierta con relativa frecuencia (nunca ha dormido toda la noche del tirón sin
reclamar el pecho) y necesita el pecho para volver a dormirse.

La situación que planteada es una de las más frecuentes que habitualmente recibo,
y que en la mayor parte de los casos se debe a un hábito que se ha consolidado.
Es decir, una situación que se repite del mismo modo durante un tiempo y que
termina por establecerse como lo habitual.

Por ello, se trata de establecer otros hábitos, para lo que necesitaremos mucha
paciencia y calma; constancia y entendimiento.

También hemos de tener en cuenta que los micro despertares son del todo
normales y que se trata de ir ofreciéndole alternativas que la vayan haciendo cada
vez más autónoma a la hora de manejarlos.

No podemos hacer un cambio radical, sino ir poco a poco, a pequeños pasos,


fijándonos pequeñas metas y aprovechando esta situación para ofrecerle a la
pequeña algunas habilidades.

1. Comienzar ofreciéndole otras formas de volver a dormirse antes de recurrir al


pecho, para que vaya contando con más alternativas. Cuéntale durante el día
lo que vais a hacer, los cambios que ocurrirán y por qué es importante para ti
y para ella hacer las cosas de esta nueva forma. Usa un lenguaje claro y sé
breve (y ponte en su lugar empatizando con cómo se siente). Como ya es
mayorcita ofrécele dos opciones que creas que puedan funcionar, por
ejemplo, unas caricias o un besito. Seguramente lo conseguirás unas veces sí
y otras no; pero esto es parte del proceso de cambio y lo verdaderamente
importante es que tu hija vaya adquiriendo poco a poco nuevas alternativas.
2. Cuando vea que ya estas opciones han sido asimiladas y las usa con
frecuencia, dale alguna más en la que no tengas que intervenir tú, por
ejemplo abrazar a un muñequito. Utiliza tu imaginación y el conocimiento de
las preferencias y carácter de tu hija para encontrar opciones que os puedan
ayudar, y trata siempre de que la pequeña participe de ello cuanto pueda,
porque siempre se sentirá más dispuesta a hacer cambios; además de que
estaremos fortaleciendo su sensación de ser tenida en cuenta y ser
importante (sentimiento de pertenencia). Así, en el caso de que le ofrezcas el
muñeco como alternativa podría escogerlo ella (dale dos opciones que tú
hayas considerado seguras. Más opciones sería probablemente demasiado
para su corta edad); también podría escoger en qué lugar ponerlo antes de
irse a dormir para acordarse de dónde está, o quizás “fabricar” entre las dos
una bolsita para guardarlo o una “camita” (ella puede participar pasándote el
material, pegando algún dibujo, colocando algo…) En fin, usa tu creatividad y
divertiros en el proceso de hacer cambios.
3. Y durante todo este proceso revisar también su día porque de que tenga un
buen día también depende una buena noche. Vigila que esté comiendo bien,
que haga las siestas que realmente necesita (si ves que llega demasiado
cansada a última hora de la tarde es seguro que las siestas han sido escasas,
bien por poco tiempo, bien porque necesita alguna siesta más; si por el
contrario llega sin un ápice de sueño quizás haya que revisar si las o la siesta
han sido excesivas) y que la actividad del día la ayude a practicar sus
habilidades y moverse pero sin caer en un sobre estímulo o exceso que la
altere a la hora de descansar.
4. Procurar además que un rato antes de ir a dormir pueda hacer actividades
más tranquilas y que esté en un ambiente que propicie la relajación.
5. Ir poco a poco, con paso seguro, pero con calma.

También podría gustarte