Está en la página 1de 15

Alejandro Magno 2004

LA FORTUNA FAVORECE A LOS AUDACES BABILONIA, PERSIA

Ahora nuestro mundo ha desaparecido destrozado por las guerras. Ahora yo soy el guardián de su
cuerpo, embalsamado aquí, según los usos egipcios. Le sucedí como Faraón y hace ya 40 ańos que
reino. Hola, papá. Yo soy el vencedor. Pero, żqué significa todo eso cuando ya no queda nadie para
recordar la gran carga de la caballería en Gaugamela? żNi las montańas del Hindu Kush cuando
cruzamos con un ejército de cien mil hombres a India? ÉI era un dios, Cadmo, o lo más parecido a
uno que haya visto yo. "Tirano", claman con tanta facilidad. Yo me río. Ningún tirano entregó jamás
tanto a cambio. żY qué sabrán del mundo esos colegiales? Hace falta ser un hombre fuerte para
reinar. Alejandro era más que eso, era Prometeo, un amigo del hombre. ÉI cambió el mundo. Antes
de él, había tribus, y después de él... todo era posible. De repente, se sentía que el mundo podía ser
gobernado por un solo rey, siendo así mejor para todos. 18 grandes Alejandrías construyó. Era un
imperio, no de tierra y de oro, sino de la mente. Era una civilización helenística, abierta... a todos.
żCómo puedo explicarlo? żCómo puedo contar lo que significaba ser joven y sońar grandes sueńos, y
creer, cuando Alejandro te miraba a los ojos, que eras capaz de todo? ˇDe todo! En su presencia, bajo
la luz de Apolo, éramos mejores que nosotros mismos. Es cierto que he conocido a muchos grandes
hombres en mi vida, pero sólo a un coloso. Y sólo ahora, en mi vejez, entiendo quién fue realmente
esa fuerza de la naturaleza. żO no? żLlegó a existir un hombre como Alejandro? Por supuesto que no.
Lo idolatramos, le hacemos mejor de lo que era. Los hombres... todos los hombres, ascienden y
caen... ascienden y caen. En Oriente, el vasto Imperio Persa gobernaba casi todo el mundo conocido.
En Occidente, las en su día gloriosas ciudades-estado, Tebas, Atenas, Esparta, habían caído,
perdiéndolas su orgullo. A lo largo de cien ańos los reyes persas habían sobornado a los griegos con
su oro para combatir como mercenarios. Fue Filipo, el tuerto, quien cambió todo eso. Uniendo tribus
de pastores analfabetos de las tierras altas y bajas, usó su sangre y sus agallas para formar un ejército
profesional que sometió a los enrevesados griegos. Luego volvió su ojo hacia Persia. Se decía que el
Gran Rey Darío en persona, desde su trono en Babilonia, temía a Filipo. Y fue de esas ijadas bélicas
que nació Alejandro, en Pela. [Los sueńos son tuyos] [Para siempre.] [Algunos llamaban a su madre,]
[La Reina Olimpia, hechicera] [Y decían que Alejandro] [Era hijo de Dioniso.] [Otros, de Zeus.] [Pero
no había hombre] [En Macedonia] [Que mirara a padre e hijo,] [Lado a lado,] [Y no tuviera sus
dudas.] [La fortuna favorece] [A los audaces.] [Confía en quienes] [Te den su amor.] [La vida acaba]
[De empezar, hijo.] Su piel es agua. Su lengua es fuego. Es tu amiga. Cógela. Si dudas, te picará.
Recuérdalo. Jamás dudes. Sí. Son como las personas. Puedes amarlas durante ańos, alimentarlas,
cuidarlas... Aún así pueden volverse contra ti. No le hagas dańo. Bien. Ven. Y me llama a mí bárbara.
Filipo se burla de Dioniso cada noche. Sólo las mujeres... conocen a Dioniso. Mi pequeńo Aquiles.
Quédate ahí, Alejandro. Acostado. żQué es lo que quieres? - 6 meses. żMe has echado de menos? -
No, aquí no. ˇPuta orgullosa! ˇSigo siendo tu rey! żRey de qué? żDe pastores? Yo desciendo de
Aquiles, de sangre real. ˇLa sangre de Heracles fluye por mis venas! ˇTú no eres más que una puta
borracha! ˇCierra tu boca vil, zorra con diez tetas del Hades! żA qué dios puedo maldecir por
haberme fijado en ti? żCrees que las personas te respetan? żCrees que no conocen a tus bastardos?
Maldigo tu alma de hechicera. Lo retienes aquí como a tus serpientes. ˇTe dije que no! ˇTe dije que
no! Me obedecerás. No lo haré. Me obedecerás o te mataré con mis propias manos. ˇNo! ˇNo! ˇPara!
ˇPapá! ˇObedéceme! ˇMajestad! ˇNo! ˇEn nombre de los dioses! ˇÉI jamás será tuyo! ˇJamás! En mi
vientre llevé a mi vengador.

8 AŃOS DESPUÉS [En el mundo en el que creció,] [He llegado a creer] [Que fue en la amistad] [Que
Alejandro encontró] [La cordura.] No se necesita mucho para luchar. Cuando estés en las primeras
filas de una batalla, enfrentándote a alguna tribu bárbara del norte, tu valor no se hallará en la pared
tu estómago, Nearco. ˇEstá en el corazón del hombre! No necesitas comer cada día, o hasta estar
ahíto, Ptolomeo. No necesitas quedarte en la cama por la mańana, cuando puedes tomarte una
buena sopa de alubias, Casandro, tras una noche de marcha forzada. Vamos, Alejandro. ˇVamos!
żQuién te respetará como rey? żCrees que será por tu padre? La primera regla de la guerra es hacer
lo que les pedís a vuestros hombres que hagan, ni más, ni menos. ˇBien! ˇEso es! ˇMuy bien,
Hefestión! ˇBien luchado! ˇEso es lo que yo quiero! Vamos, vamos. Lo has hecho bien, pero has
perdido. Ahora, felicitaos el uno al otro. ˇAdelante! żPreferirías que te dejara vencer, Alejandro?
Tienes razón, pero te prometo que algún día yo te venceré, Hefestión. [Más adelante se diría que
Alejandro] [Jamás fue derrotado,] [A no ser por los muslos] [De Hefestión.] Aunque una raza inferior,
los persas controlan al menos las 4/5 partes del mundo conocido. Pero, żes posible que la fuente del
poderoso Río Nilo de Egipto surja de las lejanas montańas de la tierra exterior? En ese caso, un
navegante experimentado podría encontrar su rumbo aquí, por este río, hacia el este, y bajar hasta
las grandes llanuras de India y salir al Océano Oriental, en los Confines del Mundo, y, por esta ruta,
remontar el Nilo, volver a Egipto, hasta el Mar Mediano y regresar a Grecia. Si sólo las ranas pudieran
mirar hacia fuera y aprovecharse de su posición aventajada en el centro, Grecia podría dominar el
mundo. żPor qué será, maestro, que esas tierras de las que hablas sí se conocen en los mitos? India,
adonde viajaron Heracles y Dioniso, todos esos hombres que fueron a Oriente: Teseo, Jasón, Aquiles,
fueron victoriosos. Sus historias se han transmitido de generación en generación. żPor qué? A menos
que algo de verdad hubiera en ellas. Leyendas de Amazonas, żeh? No, Alejandro. Sólo la gente vulgar
cree en esas leyendas, al igual que se cree casi cualquier cosa. Estamos aquí para educarnos en
contra de semejantes alocadas pasiones. Si, como dices, somos superiores a los persas, żpor qué no
les gobernamos? Es, y siempre ha sido, nuestro sueńo griego el ir hacia el Este. El Este tiene la
costumbre de tragarse a los hombres y sus sueńos. żMaestro? - żMaestro? - żSí? Sí, habla de una vez.
żPor qué son los persas tan crueles? Ése no es el tema de hoy, Nearco. Es cierto que las razas
orientales son conocidas por su barbarie y su devoción esclava a los sentidos. El exceso en cualquier
ámbito es la perdición de los hombres. Por eso nosotros los griegos somos superiores. Practicamos el
control sobre nuestros sentidos. La moderación, esperemos. żY qué hay de Aquiles en Troya,
maestro? żNo mostró excesos? Aquiles sencillamente no conoce la moderación. Domina tan por
completo a los demás hombres que incluso cuando se retira de la batalla, loco de dolor por la muerte
de su amante, Patroclo, pone en grave peligro a su propio ejército. ˇEs un hombre profundamente
egoísta! żDirías que el amor entre Aquiles y Patroclo es un amor corruptor? Cuando los hombres
yacen juntos de forma lasciva se someten a las pasiones, y eso no ayuda nuestra excelencia interior.
Como tampoco lo hace ningún otro exceso, Casandro. Entre otros, los celos. Cuando los hombres
yacen juntos e intercambian saber y virtud, eso es algo puro y excelente. Cuando compiten por
extraer lo bueno, lo mejor del otro, ése es el amor entre hombres que puede construir una ciudad-
estado y elevarnos fuera de nuestro estanque de ranas. [Filipo trajo a hombres] [Como Aristóteles
desde Atenas] [Para educar] [A nuestro tosco pueblo.] [Y, con creciente ambición,] [Planeaba la
invasión de Persia.] żNo sabes hacerlo mejor, Clito? ˇVuelve a la falange, yo lo montaré! ˇNadie
montará esa bestia, Majestad! No con tu pierna. Ha recibido demasiadas palizas. Mi noble rey, es un
animal muy fogoso, cierto. Fogoso y digno de... Filipo de Macedonia. Por tres talentos y medio, me
sería imposible sacar beneficios, pero para ti... żPor qué iba a querer yo semejante bestia? ˇYa tengo
esposa! żTe parezco a ti tan vieja? Quieto, aparta. Tranquilo. ˇSujétalo! Los cuellos rotos se regalan.
Es muy nervioso para la batalla. Véndelo para carne. Cómpramelo a mí, padre. Yo lo montaré. żY si
no lo haces? Pagaré yo mismo por él. żCon qué? żTu voz de cantante? ˇTe lo pagaré! Te digo que no
se puede montar ese caballo. Es indomable. Sí que puede ser montado... por mí. Si logras controlar
ese caballo, te lo ofreceré por la mitad de su precio. Ese caballo le matará, Filipo. Partirá al muchacho
en dos. żTú crees? Puede que ella aún consiga convertirlo en músico. No tiene destreza suficiente,
Filipo. Podría lastimarse. Eso tendrá que averiguarlo por sí mismo. Ya es hora. No te gusta tu sombra,
żverdad? Es como un espíritu oscuro que viene a por ti. żLo ves? Somos nosotros. Sólo es un truco de
Apolo. Es el dios... del sol. Pero yo te enseńaré a burlarlo. Tú y yo juntos. Bucéfalo. Así te llamaré,
fuerte y testarudo. Bucéfalo y Alejandro. ˇVamos, cabalguemos juntos! ˇAún lleva dentro algo de
Titán! ˇÁtalo! ˇClito! ˇPor Zeus, te ha vencido, hombre! Ahora, Bucéfalo. Enséńales. Mi hijo. ˇMi hijo!
żTe acuerdas de Aquiles? - Es mi favorito. - żPor qué? Porque amaba a Patroclo y vengó su muerte. żY
su destino? Que debía morir joven, pero con mucha gloria. żTenía elección? Sí. Podía gozar de una
larga vida, pero no alcanzaría la gloria. Tú sueńas con la gloria, Alejandro. Tu madre te alienta a
hacerlo. Pero no hay gloria sin sufrimiento y esto ella no lo permitirá. Algún día yo estaré en muros
como estos. Prometeo, que robó el secreto del fuego y se lo entregó al hombre. Eso enfureció tanto
a Zeus que encadenó a Prometeo a una roca en el Gran Cáucaso y, cada día, su águila le arrancaba al
pobre hombre el hígado a picotazos. Cada noche le volvía a crecer para que pudiera comérselo al día
siguiente. Miserable destino. żPor qué? żQuién puede saberlo? En fin... Edipo se arrancó los ojos
cuando averiguó que había matado a su padre y se había casado con su madre. Lo averiguó
demasiado tarde. Medea. Asesinó a sus dos hijos para vengarse de Jasón cuando éste la dejó por una
esposa más joven. Mi madre jamás me haría dańo. No resulta nunca fácil escapar a nuestra madre,
Alejandro. Durante toda tu vida, ten cuidado con las mujeres. Son más peligrosas que los hombres.
Heracles. Incluso después de haber completado sus Doce Tareas, fue castigado con la locura y
masacró a sus tres hijos. Pobre Heracles. El gran Heracles. Toda grandeza proviene de una pérdida.
Incluso a ti, algún día los dioses te juzgarán con severidad. żAlgún día, cuando sea rey como tú,
padre? No tengas prisas, hijo. Lo arriesgas todo. Mi padre me lanzó a la batalla antes de que yo
supiera combatir. Cuando maté a mi primer hombre me dijo: "Ahora ya sabes". Entonces le odié,
pero ahora entiendo por qué. Los reyes no nacen, Alejandro, se forjan, con firmeza y con sufrimiento.
Un rey debe saber herir a quienes ama. Es muy solitario. Pregúntale a Heracles. A cualquiera de ellos.
El destino es cruel. Ningún hombre ni ninguna mujer puede ser demasiado poderoso o hermosa sin
que le suceda algún desastre. Se ríen cuando te alzas demasiado alto, y aplastan todo cuanto has
construido, por un capricho. La gloria que te dan, al final te la arrebatan. Nos convierten en esclavos.
8 AŃOS DESPUÉS Ya está embarazada... la muy ramera. La desposará en primavera, durante el
Festival de Dioniso. Y, cuando nazca su primer hijo varón, su encantador tío, Átalo, convencerá a
Filipo para que nombre al nińo su sucesor, siendo él mismo Regente. Y a ti... te enviará en alguna
misión imposible contra alguna monstruosa tribu del norte, para que acabes mutilado en una batalla
sin sentido por un asunto de ganado. Yo, que ya no seré reina, seré ejecutada, junto con tu hermana
y los restantes miembros de nuestra familia. Desearía... que a veces pudieras ver la luz, madre. No te
ha arrebatado nada que no haga tiempo que ya no poseas. El único recurso es atacar. Anuncia ya tu
matrimonio con una macedonia. Engendra un hijo de sangre pura. Será uno de ellos, no de los míos,
y no tendrá otra elección que la de proclamarte rey. Aún está Kinane. Eurídice era perfecta. ˇSi tu
padre, ese cerdo, no hubiera copulado antes con ella! No digas nada más sobre mi padre. żMe has
oído? No digas nada. Tienes razón. Perdóname. Las madres amamos demasiado. żA quién voy a
acunar ya por las noches? Desearía que pasáramos más tiempo juntos. Como solíamos hacerlo
cuando eras mi dulce pequeńo. No ha habido nunca tiempo, madre. Desde que era nińo, se me ha
pulido para ser el mejor de todos. Mi pobre hijo, eres como Aquiles, afligido por tu grandeza. Coge mi
fuerza. No debes nunca confundir tus sentimientos con tu deber, Alejandro. Un rey debe tener
gestos públicos para el pueblo llano. Lo sé. Pero este verano cumplirás 19 ańos y las muchachas ya
están diciendo que no te gustan, que prefieres a Hefestión. Y lo entiendo. Es natural en un hombre
joven. Si partes a Asia sin dejar sucesor, lo arriesgas todo. Hefestión me ama... tal como soy... no por
quién soy. żAma? żAma? En nombre de Dioniso... Entiende cómo piensa Filipo, por tu propio bien. Tu
vida está en juego. Tiene espías dentro de tu círculo más íntimo. ˇBasta! ˇYo soy su único hijo digno
de serlo! Mujer enloquecida. ÉI jamás me haría dańo. Aunque Eurídice tuviera un hijo varón no le
dejaría gobernar hasta cumplir los 20 ańos. Sí, y tú tendrías 40. Anciano y sabio, como Parmenión. Y
el hijo de Filipo tendría20. Como tú, ahora, pero criado por él, de su sangre. Ahora jamás te entregará
el trono, Alejandro. Jamás. [Baco creó una bebida con uvas.] [No existe otra medicina igual] [Para
curar el dolor.] Alejandro, ahoga esa tristeza en la bebida. Si sólo la sed pudiera aplacar la tristeza,
Ptolomeo. Sólo hay una cosa mejor que ganar una batalla, hijo, y es el sabor de una nueva mujer. Lo
encontrarías mucho más dulce que la autocompasión. Pausanias, me aburres. Aléjate de mí. ˇTe he
encontrado a la muchacha idónea! - żCómo te llamas? - Antígona. - żCómo te llamas? - ˇAntígona! Te
amo, mi duendecillo. Yyo te amo a ti, Clito. ˇPor favor! ˇNo! Aquí tienes. żNo preferirías sentarte,
Clito? Ya dormiré en la tumba, Hefestión. Mientras viva, prefiero bailar. ˇPausanias! żQuién es tu
nuevo amigo? - Ahí tienes a tu nuevo amigo. - ˇNo, por favor! ˇNo! ˇUn brindis! ˇUn brindis! Brindo
por nuestros amigos griegos, y por nuestra nueva unión, Macedonia y Grecia, iguales en su grandeza.
Y por Filipo, nuestro rey, sin quien esta unión no habría sido posible. Vamos, Átalo, deja un poco de
maldito aire en la sala. Y, por último, brindo por el matrimonio del rey con mi sobrina, Eurídice, una
reina macedonia de la que podemos sentirnos orgullosos. ˇPor Filipo y Eurídice, y por sus hijos
legítimos! ˇAlejandro, no! żY qué soy yo, hijo de can? ˇVenga! ˇCallaos! ˇCallaos todos! ˇCelebramos
mis bodas! ˇNo una trifulca pública! ˇCachorro insolente! ˇDiscúlpate, por Zeus, antes de que me
deshonres! Defiendes al hombre que llama a mi madre ramera y a mí bastardo. żYo te deshonro a ti?
ˇEscuchas como escucha tu madre! Átalo es ahora de mi familia, igual que tú. ˇElige a tu parentela
con más cuidado! No esperes que me quede aquí sentado mientras tú pierdes la vergüenza. ˇMe
insultas! żYo te insulto a ti? ˇUn hombre que ni siquiera merece lamer el suelo que pisa mi madre!
ˇCuestionas a tu reina! żVergüenza? ˇYo no tengo nada de qué avergonzarme, arrogante mocoso!
ˇMe desposaré con la muchacha si quiero! ˇY tendré cuantos hijos desee! ˇNo hay nada que tú ni tu
madre podáis hacer para impedirlo! żPor qué piensas que todo cuanto digo y hago proviene de mi
madre? Porque conozco su corazón, por Hera, y la veo en tus ojos. ˇCodicias demasiado este trono!
ˇYa sabemos que esa loba que es tu madre me quiere muerto! ˇPodéis seguir sońando, muchacho!
Ahora habla el vino. Déjale, puede esperar hasta mańana. ˇAhora! Te lo ordeno. Discúlpate ante tu
pariente. ˇDiscúlpate! No es pariente mío. Buenas noches, anciano. Y cuando mi madre sea otra vez
desposada, te invitaré a las bodas de ella. ˇBastardo! ˇMe obedecerás! ˇVen aquí! żY ése es el
hombre que os llevará de Grecia hasta Persia? Si ni siquiera consigue llegar de un lecho a otro. ˇSal
de mi palacio! ˇEstás exiliado, bastardo! ˇExiliado de esta tierra! ˇAquí ya no eres bienvenido! ˇTú no
eres hijo mío! De repente todo cambió para él. Su padre, el Rey Filipo, fue asesinado y Alejandro, a
los 20 ańos, se convirtió en el nuevo soberano de Macedonia. Y, rompiendo sus tratados con
nosotros, descartando a Alejandro como un jovencito sin experiencia, varias ciudades-estado griegas
se sublevaron, para gran deleite de Persia y tal vez financiadas por su oro. Cierto es que Alejandro
sabía amar como ningún otro, pero la traición le provocaba una grandiosa y temible cólera, y
masacró a varios millares de hombres de la trágica ciudad de Tebas, vendiendo a los supervivientes
como esclavos. Esto, y tal era la intención, dejó a los griegos atónitos y derrotados. Y aunque, al final
trataba a la mayoría de poblaciones con magnanimidad, son éstas excepciones: Tebas, Gaza en Siria,
y luego Persépolis en Persia, y otras, las que son recordadas por aquéllos que odian a Alejandro y
todo cuanto él representaba. A los 21 ańos, Alejandro invadió Asia con un ejército de 40.000
hombres entrenados y, liberando una ciudad-estado tras otra, conquistó toda Asia occidental, hasta
Egipto, al sur, donde fue declarado Faraón de Egipto y adorado como un dios. Fue en Egipto donde el
respetado oráculo de Siwah le declaró... el verdadero hijo de Zeus. Finalmente desafió al propio
Darío a la batalla, en el corazón del imperio, cerca de Babilonia. [Era una locura.] [40.000 de los
nuestros] [Contra250.000 bárbaros.] [Era el día que Alejandro] [Venía esperando] [Toda su vida.]
[Alejandro, hijo de un dios.] [Era un mito, por supuesto.] [AI menos,] [Empezó siendo un mito.] Lo sé.
[Yo estaba allí.] [Yvi sus ojos.] ˇAhí! En la brecha de la línea persa, atacaremos a su cabeza. żMatar a
Darío? Los dioses por fin le han traído hasta nosotros. Si yo muero, sólo soy un macedonio más. Pero
los persas no pueden ni moverse sin las órdenes de Darío. Aquí mismo le cortaremos el cuello al
ejército persa. Es una locura. No lograrás acercarte a más de cien pasos de él. żHas visto el tamańo
de su fuerza, Alejandro? No si tú los contienes por la izquierda, mi valiente Parmenión, con tu hijo
Filotas, durante sólo una o dos horas mańana, y tú, invencible Antígono, en el centro de la falange.
Perdicas. Leónato. Nearco. Polyperchón. Si los atrapáis con vuestros muros de sarisas aquí en el
centro, su caballería me seguirá hacia la derecha. Y cuando el intrépido Casandro rompa sus líneas,
estirándolas hacia su izquierda, se abrirá un hueco. Entonces yo con mi caballería, nuestro
reverenciado Clito, Ptolomeo y Hefestión, atacaremos por ese hueco y propinaremos el golpe mortal
a la cabeza de Darío. Teniendo suerte, el momento propicio y los dioses, debemos dispersarlos
mańana. Destruir su ejército por completo. O seremos diezmados por bandidos en el camino de
regreso al hogar. Es cierto. Hablas del hogar... y de retirada. Pero entiende, Parmenión, que Babilonia
es mi nuevo hogar. Alejandro, si vamos a luchar, que sea con sigilo. Usa bien tus tropas. Deberíamos
atacarles esta noche cuando menos nos esperan. No he cruzado Asia para robar esta victoria,
Casandro. No. Eres demasiado honorable para eso. Sin duda influenciado por dormir con las
"Leyendas de Troya" bajo tu almohada. Pero tu padre no era admirador de Homero. Las tierras al
oeste del Eúfrates. La mano de su hija en matrimonio. żCuándo ha recibido un griego tales honores?
No son honores, Parmenión. Son sobornos... que los griegos han aceptado durante demasiado
tiempo. żOlvidas que el hombre que asesinó a mi padre yace al otro lado de este valle? Aún no
estamos seguros de que hubiera oro persa detrás del asesinato... ˇEso no importa! Sabes que eso no
es cierto. Tu padre te enseńó a no someter jamás la razón a la pasión. Te lo ruego. ˇReagrupa! Vuelve
hasta la costa, recluta un ejército mayor. Lo haría, si yo fuera Parmenión, pero yo soy Alejandro. Y así
como la Tierra no tiene dos soles, tampoco Asia tendrá dos reyes. Éstas son mis condiciones. Y si
Darío no es un cobarde que se oculta tras sus hombres, mańana se enfrentará a mí. Y cuando se
doblegue ante Grecia, Alejandro mostrará piedad. Por las cadenas de Ares, tiene huevos. ˇTienes que
reconocerlo, Parmenión! Y muchachos, festejad esta noche, pues mańana cenaremos en el Hades. żA
quién oras? A Fobos. żTemor? Un mal agüero. Más aún para Darío. He acabado por creer que el
temor a la muerte es lo que empuja a todos los hombres, Hefestión. Eso no lo aprendimos en la
escuela. Y es la causa de todos nuestros infortunios. - Bien, poderoso Crátero... - ˇMajestad! żEstás
preparado para mańana? Se ha hecho esperar demasiado. Los hombres están nerviosos como
potros. Bien. El miedo hace que los hombres luchen mejor. Que tus centinelas ocupen sus puestos y
descansen bien. Soy conocido por dormir con los ojos tan abiertos como el trasero de un bebé. Sólo
porque podrían robarle su botín. Después de mańana, hasta los más ahorrativos seréis reyes. - Los
dioses están de nuestra parte. - Así es. Mancharemos el suelo de sangre persa, mi rey. Yo siempre he
creído, Alejandro, pero esto parece superarnos. żDudó Patroclo de Aquiles cuando lucharon codo con
codo - en el sitio de Troya? - Patroclo murió primero. Si eso te ocurriera a ti, si tú cayeras, Hefestión,
aunque Macedonia perdiera a su rey, yo te vengaría y te seguiría a la Casa de la Muerte. Yo haría lo
mismo. La víspera de una batalla es cuando más difícil resulta estar solo. Tal vez... tal vez esto sea
una despedida, mi Alejandro. No temas, Hefestión. Estamos en el principio. La sangre hace vivir el
mundo. La sangre hace caer la lluvia. La sangre hace crecer la tierra. Y, en la sangre, nacen y mueren
todos los hombres. La sangre es el alimento de los dioses aquí abajo. Ven, Bucéfalo. Hoy cabalgamos
hacia nuestro destino. ˇCaballería, agrupaos! ˇReagrupaos! ˇFalange, a la derecha! ˇAIto! ˇFalange!
ˇFirmes! Neoptólemo... Recuerdo el día que saltaste por encima de la torre de asalto en Tiros. ˇEras
un gigante! żY hoy? żCómo combatirás? Dexipo, por Atenea, ża qué distancia lanzaste a tu hombre
luchando en los últimos Juegos Olímpicos? żLlegarás tan lejos con tu pica? Y Timandro, hijo de
Menandro, que tan gran soldado fue para mi padre. Aún Iloro la muerte de tu hermano, Adaios, que
tan valientemente murió en Halicarnaso. Desciendes de una familia muy honorable, Timandro. Lucha
por ellos hoy. ˇTodos habéis hecho honor a vuestro país y a vuestros antepasados! Y ahora llegamos
a este lugar tan apartado de Asia donde, frente a nosotros, Darío ha reunido por fin un vasto ejército.
ˇEsos persas parecen ser muy numerosos! Pero mirad otra vez a esa horda y preguntaos... żQuién es
ese Gran Rey que paga a asesinos con monedas de oro para asesinar a mi padre, nuestro rey, del
modo más despreciable y cobarde? żQuién es ese Gran Rey, Darío, que esclaviza a sus propios
hombres para combatir? żQuién es ese Rey... si no un rey de aire? Esos hombres no combaten por
sus hogares. Combaten porque ese rey les ordena hacerlo. Y cuando combaten, se desvanecen como
el aire porque no sienten ninguna lealtad hacia un rey de esclavos. ˇPero nosotros no estamos aquí
hoy como esclavos! ˇEstamos aquí como hombres libres macedonios! Algunos de vosotros, tal vez yo
mismo, no vivamos para ver el sol ponerse hoy tras estas montańas. Pero yo os digo... lo que todo
guerrero ha sabido desde el principio de los tiempos. ˇVenced vuestro miedo y os prometo que
venceréis a la muerte! Cuando os pregunten por qué luchasteis con tanto valor, responderéis: "ˇYo
estuve ahí ese día en Gaugamela... por la libertad... y la gloria... de Grecia!" ˇQue Zeus nos
acompańe! ˇCasandro! ˇCuatro columnas, adelante! żAdónde va? No lo sé, Majestad. Rodeadle,
Beso. ˇHefestión, adelante! ˇFalange! ˇEn marcha! ˇAI frente, en marcha! Comete un error, Farnuces.
Sí, Gran Rey. ˇMantened la fila, hombres! ˇSed valientes, hombres! ˇSeguid por la izquierda,
muchachos! ˇDobladla si debéis, pero no la rompáis! ˇY vigilad la caballería a vuestra izquierda!
ˇAcelerad la marcha! ˇPreparados para repeler los carros! ˇAguantad! ˇAI frente! ˇEn marcha!
ˇContenedlos! ˇCasandro! ˇAdelante! ˇAI frente, hombres! ˇGiro a la izquierda! ˇInfantería, despejad!
ˇFuera! ˇCírculo a la izquierda! ˇMantened posiciones! ˇMantened posiciones! ˇAguantad! Debemos
retroceder hasta el desfiladero, padre. No, aguanta. żDónde está? ˇEstamos demasiado
desperdigados! ˇLlévale el mensaje a Alejandro! ˇRápido! ˇSí, seńor! ˇVamos, macedonios!
ˇCabalgad! ˇCabalgad! ˇPara Alejandro! ˇPortaescudos, separaos! ˇSeparaos! ˇLos portaescudos
están aquí! ˇEntrad por el hueco! ˇPor el hueco! ˇAI frente! ˇAtrás y a la izquierda! ˇAtrás y a la
izquierda! ˇFilotas! ˇPadre! ˇVe y díselo tú mismo a Alejandro! Y si no te escucha, sobrevíveme y
venga esta traición. ˇPresta atención, muchacho! ˇTu padre sigue velando por ti! ˇDarío! ˇBuscad
vuestros caballos! ˇDarío! ˇId! ˇId! ˇNo! ˇPodemos alcanzar esas montańas antes de la puesta del sol!
ˇGalopad toda la noche y alcanzad a Darío al alba! ˇAbrevad los caballos! ˇAlejandro! ˇAlejandro, mi
padre está perdido! ˇHan hundido el flanco! - ˇHan alcanzado el tren de equipajes! - ˇParmenión se
desmorona! ˇAlejandro, si le persigues te arriesgas a perder tu ejército! ˇY si le capturamos,
ganaremos un imperio! ˇPuedes huir hasta los confines de la tierra, cobarde, pero jamás llegarás lo
bastante lejos! ˇA Parmenión! Sangra mucho, mi seńor. żPuedo curar de tus heridas? No, Hermolao,
ahora no. Hay heridos más graves. Ocúpate de ellos. Ayúdales. ˇMajestad! Eres muy valiente. żCómo
te llamas? ˇGlaucias, mi Rey! ˇGlaucias! - żY dónde está tu hogar? - En Iliria. Deja tu cuerpo suelto.
Piensa ahora en tu hogar. Vuelve a ser valiente, Glaucias, y seguirás vivo en la gloria. Alejandro... [El
Imperio Persa,] [El mayor que había conocido] [Jamás el mundo, estaba destruido.] [Y Alejandro, con
25 ańos,] [Era ahora el rey de todos.] [Alejandro me dijo] [En una ocasión:] ["Cuando estamos con los
mitos] [Es cuando más solos estamos".] [Y así aconteció,] [En un sueńo tan mítico] [Para todos los
griegos] [Como el de Aquiles] [Derrotando a los troyanos,] [Que en este único] [Momento glorioso,]
[Alejandro fuera] [Querido por todos.] [Pero al final, creo...] [Que Babilonia] [Fue una concubina]
[Mucho más fácil de penetrar] [Que de abandonar.] ˇSikander! ˇSikander! Imaginaos las mentes que
concibieron esto. Con arquitectos e ingenieros así construiríamos ciudades sólo sońadas. Aristóteles
podía llamarlos bárbaros, pero él no había visto Babilonia. Tenemos oro para mantener otras tres
generaciones de ejércitos macedonios. Y Macedonia pronto se corrompería, Casandro. La riqueza en
grandes cantidades atrae a los cuervos. No para los hombres que han luchado, espero. Les
pagaremos bien, Antígono, pero no como a mercenarios por servicios futuros. Hablas como Filipo.
Filipo no vio nunca Babilonia. No, no la vio, Hefestión. ˇHola! Ya sé que me consideras un viejo
estirado. Pero, olvidando nuestras diferencias, que sepas que en este día tu padre se sentiría muy
orgulloso de ti. Gracias, Parmenión. Te ruego que me perdones mi propia ira, mi orgullo. También me
ciegan. Sí, nosotros, los nietos de pastores, ahora gobernamos 5 millones de km. Cuadrados. Pero...
ninguno de vosotros teme que esta gran fortuna pueda conducirnos a todos a la destrucción. Nos
sobrevaloras. Mientras respire Darío, él es el rey legítimo de Asia, y yo sólo el Rey del Aire. ˇPero él
no tiene ningún poder, Alejandro! ˇEstá en las montańas, perdido y sin ejército! Mientras siga
perdido, Filotas, aún se puede creer en él. Sólo se decidirá cuando le encontremos. Al parecer ya has
tomado tu decisión, Alejandro. Debemos acabar lo que no logramos hacer en Gaugamela: Dar caza a
Darío aunque sea en los confines de la tierra. - Ésa no era la misión de tu padre. - Yyo no soy mi
padre. żTan rápido has olvidado que la fortuna favorece a los audaces? Por los dioses, żqué es esto?
No es de extrańar que Darío huyera, cuando le esperaba esto. Yo diría que hay una para cada noche
del ańo. ˇAyúdame, Afrodita! żCómo voy a volver con Lisímaca después de esto? Te aconsejo no
tocar, Leónato. Ya lo hago yo por ti. Mis disculpas. Sí, le veo. Puede que Aristóteles fuera adivino.
żCrees que estas imágenes nos engańan con su belleza y nos degradan el alma? Gran Rey, Alejandro.
La Princesa de las Mil Rosas e hija mayor del antiguo Gran Rey Darío... ˇEstatira! Noble Alejandro...
Vengo a suplicarte por la vida de mis hermanas, de mi madre, de mi abuela. No te equivocas,
Princesa Estatira. ÉI también es Alejandro. Por favor, te suplico por las vidas de mi familia. Véndeme
como esclava, Gran Rey, pero te suplico... Mírame a los ojos, Princesa, y dime: "żCómo desearías ser
tratada?" Como lo que soy... una princesa. Y así será. Tú y tu familia seréis tratados como mi familia.
Viviréis en este palacio todo el tiempo que os plazca. żTienes alguna otra petición que hacerme, mi
noble princesa? No. Todo cuanto deseo ya te lo he... Pedido. ...pedido. Eres ciertamente... una reina.
[Sí, ella sería] [La esposa perfecta para ti,] [Pero tú no haces nada.] [Llevas ya tres meses] [En
Babilonia] [Y me dejas a mí en Pela,] [A merced de tus enemigos,] [De los que muchos tienes.]
[Antípater, acostumbrado] [Al poder que le has otorgado,] [Observo cómo se vuelve] [Cada vez más
fuerte.] [Estoy segura de que] [Se comunica en secreto] [Con Parmenión,] [Que es peligroso.] Pero
ten cuidado sobre todo con los que más cerca de ti están. [Son como las serpientes] [Y pueden
volverse contra ti.] ˇGeneral Crátero! [Casandro es hijo de Antípater.] [Incluso Clito,] [El favorito de tu
padre,] [Y Ptolomeo, tu amigo. Sí.] Desconfía de los hombres que piensan demasiado. [Se ciegan a sí
mismos.] [Sólo excluyo a Hefestión.] [Pero a todos ellos] [los enriqueces] [Mientras dejas a tu madre]
[Y a ti mismo] [En una generosa pobreza.] [żPor qué no quieres] [Nunca creerme?] [Sólo una mente
oscura] [Como la mía] [Puede conocer] [Estos secretos del corazón.] Pues son oscuros, Alejandro,
muy oscuros. Pero en ti, [el hijo de Zeus,] [Yace la luz del mundo.] [Tus compańeros] Serán sombras
en el Inframundo, mientras que tú serás un nombre que perdurará para siempre en la historia, como
la luz más gloriosa y deslumbrante de la juventud, eternamente joven, eternamente inspiradora.
Jamás habrá un Alejandro como tú. ˇAlejandro Magno! [Recuerda, llévame a Babilonia,] [Tal como
me prometiste.] [Puedo ayudarte,] [Pues ellos saben] [Que si te hacen algún dańo] [Deberán
enfrentarse a mi ira,] Como Reina de Babilonia. Me reclama un alquiler muy alto por alquilarme su
vientre 9 meses. Tráela, Alejandro. Le darás una gran alegría. żAlegría? żCuándo yo soy el espejo
agrietado de sus sueńos? Quédate conmigo esta noche, Hefestión. Ya me bańaré yo mismo. Gracias,
Bagoas. Los generales cuestionan tu obsesión por Darío. Dicen que jamás deberías haber sido Rey de
Asia. Naturalmente. Sólo quieren regresar a sus hogares, ricos en oro. Pero yo he visto el futuro,
Hefestión. Ya lo he visto mil veces, en mil rostros. Este pueblo quiere... Necesita un cambio.
Aristóteles se equivocó respecto a ellos. żEn qué? Mira a los que hemos conquistado. Dejan a sus
muertos sin enterrar, aplastan los cráneos de sus enemigos y los beben como polvo. ˇCopulan en
público! żQué pueden pensar o cantar o escribir, si ninguno de ellos sabe leer? Pero como "Ejército
de Alejandro" pueden ir adonde jamás creyeron posible. Pueden ser soldados o trabajar en las
ciudades, las Alejandrías, desde Egipto hasta el Océano Exterior. Podríamos conectar estas tierras,
Hefestión, y a sus pueblos. Algunos dicen que las Alejandrías se han convertido en extensiones del
propio Alejandro. Que atraen a las personas a las ciudades para convertirlas en esclavos. ˇPero si les
hemos liberado de la Persia donde vivían como esclavos! Liberar a los pueblos del mundo. Eso sería ir
más allá de la gloria de Aquiles, más allá de Heracles. Una hazańa que rivalizaría con Prometeo... que
siempre fue amigo del hombre. Recuerda el destino de esos héroes. Grande fue su sufrimiento.
Todos sufrimos. Tu padre, el mío. Todos llegaron al final de su tiempo y, al final, cuando se acaba,
sólo importa lo que has logrado. Una vez dijiste que "el temor a la muerte es lo que empuja a todos
los hombres". żNo existen otras fuerzas? żNo hay amor en tu vida, Alejandro? A veces me pregunto si
no estarás huyendo de tu madre. Tantos ańos y tanta distancia entre vosotros... żQué es lo que
temes? żQuién puede saberlo? Cuando era nińo mi madre me consideraba divino. Mi padre, débil. żY
qué soy, Hefestión? żDébil o divino? Yo sólo sé que tú eres el único en quien confío. Te he echado de
menos. Te necesito. Sólo te amo a ti, Hefestión. A ningún otro. Aún tuerces la cabeza de lado, así. He
dejado de hacerlo. No. Como un antílope escuchando el viento. Aún me emocionas, Alejandro. Y
tienes ojos como ningún otro. Hablo como un estúpido colegial. Eres todo cuanto me importa, y por
el dulce aliento de Afrodita, que estoy celoso de perderte por este mundo que tanto deseas. Tú
nunca me perderás, Hefestión. Siempre estaré contigo. Hasta el final. [La campańa en el noreste] [De
Persia] [Se convirtió en una dura] [Guerra de guerrillas] [Que duró casi 3 ańos.] [Perseguimos a Darío]
[Hacia Bactriana,] [Pero no logramos capturarle] [Por unas horas.] Ya estaba moribundo cuando le
encontramos, seńor. Nos pidió agua, bebió y murió. [El Gran Rey Darío] [Había sido traicionado] [Por
sus propios comandantes.] [Honrando su cuerpo sin vida,] [Alejandro persiguió] [A esos
comandantes] [Hasta tierras desconocidas,] [Cruzando incluso] [El Río Oxo hasta Sogdia.]
[Combatimos contra ellos,] [Alcanzando] [Las desconocidas] [Estepas de Escitas,] [Donde sólo los
héroes legendarios] [Se habían adentrado.] [Los topógrafos nos dijeron] [Que estábamos] [En las
fronteras donde] [Europa y Asia se encuentran.] [A decir verdad,] [Estábamos totalmente perdidos.]
[Ahí Alejandro fundó] [Su décima Alejandría,] [Poblándola con veteranos,] [Sus mujeres] [Y
cualquiera que se arriesgara] [A la vida fronteriza.] [Incapaz de aceptar la derrota] [Bajo ninguna
forma,] [Alejandro persistió] [En su ánimo de someter] [Toda tribu] [Que se resistiera,] [Hasta el día]
[En que recibió la cabeza] [De su úItimo enemigo] [En rendición.] [Para Alejandro] [No podía haber]
[Ningún pretendiente] [Al trono de Asia,] [Que ahora incluía toda Sogdiana] [Y toda Bactriana.] [Fue
en ésta última] [Donde Alejandro tomó] [Una de sus decisiones] [Más misteriosas.] Sus ojos me dicen
que le gustas, Alejandro. Tal vez demasiado. Según los usos de mi país, aquéllos que aman
demasiado lo pierden todo, y aquéllos que aman con ironía, perduran. Tu padre se estará revolcando
en su tumba. Después de tanto tiempo, la hija de un jefe de las montańas. ˇLa muchacha tiene
carácter! żPor qué lo haces? Tómala sencillamente como concubina. Porque quiero un hijo. Maldito
seas, Filotas. La mitad de tus nobles tienen hermanas que serían magníficas madres macedonias.
Hacer de una asiática mi reina, y no una cautiva, es una seńal de respeto. Eso nos acercará y nos
unirá, lo cual no significa que no despose algún día a una macedonia. żUna segunda esposa? Insultas
a Macedonia. Alejandro, está en juego el honor de nuestro reino. ˇExactamente! żQué ganarás con
ello? Vinimos a castigarles por sus crímenes y ya lo hemos conseguido. Siete ańos lejos del hogar, y
ahora vagamos de una región a otra, persiguiendo nómadas y bandidos, mientras Macedonia acusa
su falta de hombres. żY para qué? żPara construir rutas en Asia? żPara darles a estos pueblos
ciudades? ˇFundar ciudades y ampliar nuestro alcance no es vagar! - żEn qué beneficia a Macedonia?
- ˇEs más rica! - ˇY mira lo que les das! - Respetando tu edad, si hubieras luchado mejor en
Gaugamela cuando tu flanco se hundía... ˇCómo osas, Nearco! General Nearco para ti. ˇAlejandro
estiró demasiado nuestro flanco! ˇNo había nada que mi padre, ni ninguno de...! ˇFilotas! Alejandro,
te conozco desde que naciste. Te respaldé a la muerte de tu padre. Como mínimo, por el amor de
Zeus, y por respeto hacia el Consejo que te eligió Rey, danos un heredero macedonio. Un heredero
macedonio. Te he oído con claridad. Después de las bodas te llevarás dos brigadas de vuelta a
Babilonia, donde cuento contigo, y con Antípater en Grecia, para mantener nuestro imperio y
aprovisionar esta expedición. Yo pasaré el invierno en el norte con mi ejército, en Maracanda.
ˇSuplico a Apolo que te des cuenta de lo mucho que te has apartado del camino de tu padre!
ˇMaldito seas, Parmenión, por los dioses y tu Apolo! Mi padre llevaba la guerra en las tripas, no
seguía un razonamiento marchito como el tuyo. ÉI jamás codició la guerra, Alejandro, ni la disfrutó
como tú. Consultaba a sus pares en consejo, entre iguales, según la costumbre macedonia. ˇNo
tomaba decisiones basadas en sus deseos personales! Conmigo habéis ido más lejos de lo que jamás
sońó mi padre. ˇAnciano, estamos en nuevos mundos! ˇAlejandro, sé razonable! żDebían ser
nuestros iguales? żCompartir nuestras recompensas? Recuerda lo que dijo Aristóteles: "żUna
asiática?" żQué significan unos votos de matrimonio para una raza que jamás - mantuvo su palabra
con los griegos? - ˇMaldito sea Aristóteles! Por Zeus y todos los dioses, żqué te hace a ti tan superior
a ellos, Casandro? żMejor de lo que realmente eres? żPara pensar así tú y los que se parecen a ti?
Alejandro... Lo que más me perturba no es tu falta de respeto por mi juicio, sino tu desprecio por un
mundo mucho más antiguo que el nuestro. Diez ańos después de que su madre insistiera en que
desposara a una macedonia... Que a través de nuestra unión, griegos y bárbaros... ... el hombre más
poderoso del mundo tomó a una muchacha sin ningún significado político. żPor qué? Algunos dicen
que fue para aliarse con las tribus. Otros por el deseo de tener un sucesor. Y aun otros... dicen que
Alejandro se enamoró de verdad. żQuién era realmente Roxana? Dudo que ninguno de nosotros
viera más allá de los pozos de sus negros ojos. ˇAlejandro! "Especial" para ti. En esta gloriosa ocasión,
brindo por este gran ejército que tanto me ha dado. En su honor, para los que partisteis con nosotros
hace ya 7 ańos, declaro a partir de ahora todas vuestras deudas pagadas por la Tesorería Real. ˇTe lo
agradecemos, Alejandro! Y, en honor a mi esposa, mi preciosa esposa, reconocemos a las mujeres
que han compartido el largo y arduo camino con nosotros. Y les concedemos las dotes propias de un
matrimonio adecuado. żY qué hay de nuestros muchachos? Y por último... Por último, los dioses no
nos piden menos. Que vuestros hijos reciban las debidas educación y formación militar griegas, bajo
nuestra tutela, para que sean los nuevos soldados de nuestro Reino en Asia. Lo encontré en Egipto. El
hombre que me lo vendió me dijo que provenía de una época en que el hombre adoraba el sol y las
estrellas. Yo siempre te consideraré... el sol, Alejandro. Y rezo para que tu sueńo ilumine a todos los
hombres. Te deseo un hijo. Eres un gran hombre. Muchos te amarán, Alejandro, pero ninguno tan
pura y... żTú... le amas? Es Hefestión. Hay muchas formas diferentes de amar, Roxana. Ven. ˇNo! No
tienes miedo. Como debe ser. Un hombre busca a una mujer en la cima del mundo y la encuentra. El
mito se torna realidad. Sí... gran hombre. żSikander? A ti ahora mato. ˇHazlo! ˇAcábalo! Yo haría... Yo
haría lo mismo. Moriré loco, por este... amor. Ahora mi vida te pertenece. Tú tendrás mi hijo. żQuién
es esa mujer a quien llamas tu reina, Alejandro? żUna montańesa? żTú, con tu abolengo? Con su
naturaleza tosca y fuerte ya se está haciendo enemigos. No nos confundas. Yo jamás fui una bárbara
como decía Filipo. Somos de la sangre real de Aquiles. Zeus es tu padre. Ya entiendo, te aporta algo
de felicidad. Pero óyeme cuando te digo que actúes, y pronto. Después de siete ańos, la gente se
pregunta: "żQuién es ese Rey Alejandro?" Te he dado pruebas más que suficientes. Antípater socava
día a día tu autoridad. Regresa a Babilonia y refuerza tu centro, o vuelve a casa a Macedonia a
reorganizar, pero no persigas tu sueńo más hacia el Este. Tu vida y la mía dependen de ello.
Recuerda... que sólo pienso en ti. Al igual que también debes afrontar tu glorioso destino, piensa
amablemente en tu madre. Préstame apoyo. Protégeme de tus enemigos cuando no estás. Y
recuerda siempre, que yo soy la que más te ama. Desearía que no fueras sólo un pálido reflejo del
corazón de mi madre. żQuién ha sido? ˇDímelo! ˇHermolao! No encontrarás a otro tan devoto como
yo. La conjura perturbó profundamente a Alejandro. No sólo por la implicación de los jóvenes pajes
que habían compartido su sueńo, sino que, y en un sentido más íntimo, implicaba a Filotas,
compańero suyo de la infancia, y que era Capitán de la Guardia Real de Alejandro. Recuérdame por
quien soy. Y te recuerdo, pero no como tú te recuerdas a ti mismo. Y nos parece que el verdadero
clima de tu alma es la ambición. ˇNo! Ninguno defendió a Filotas. ˇYo no lo hice! Por otra parte, a
ninguno nos gustó nunca. Y, por supuesto, nos repartimos sus poderes entre nosotros. Antes de
morir, le torturamos para averiguar qué sabía su padre, Parmenión, pero nunca lo supimos. żQué
hacer con Parmenión y sus 20.000 tropas que protegían las líneas de abastecimiento? Eso era un
asunto más delicado. żEra inocente o había decidido actuar antes de que su edad mermara aún más
su poder? Estarán divididos. Los hombres seguirán a su rey. Alejandro no estará allí. Alejandro debía
obrar por necesidad. La infantería me seguirá a mí. Selló el campamento antes de que pasaran 4
horas desde las primeras acusaciones contra Filotas. Entonces, id, Antígono y Clito. Y apresuraos.
Tres días cabalgando sin cesar tardaron Antígono y Clito en reunirse con Parmenión. Sus soldados
aceptaron la acusación de culpabilidad contra Parmenión. Entendían que el cabeza de familia era
responsable del comportamiento de todos. ˇClito! ˇAntígono! Parmenión. Recuerdo que Bagoas
comentó en una ocasión que el amor esquivaba a Alejandro tanto como, si no más que, encontrar los
Confines del Mundo. En primavera, Alejandro cruzó al frente de un ejército de 150.000 los puertos
del Hindu Kush, rumbo a lo desconocido. En su sueńo, era la ruta prometida al Fin del Mundo. Ahora
éramos un imperio móvil, que se extendía a millares de km. Detrás de nosotros hasta Grecia, con
cocineros y arquitectos, médicos y topógrafos, prestamistas y esposas, hijos, amantes, rameras... Sin
olvidar a los esclavos, esa columna anónima, sometida y trabajadora, de esta nueva bestia. Arrasado
o ampliado, para mejor o para peor, ningún territorio ocupado volvió nunca a ser el mismo. Aunque
seguía devoto a Roxana, las visitas a su tienda disminuyeron cuando un ańo, y luego dos, pasaron sin
un sucesor, hiriendo el orgullo de Alejandro. Los topógrafos dicen que Zeus encadenó a Prometeo
allá arriba, en una de esas cuevas. Que hay un gigantesco nido de águila justo encima de ella.
Supongo que baja cada noche a picotear el hígado del pobre Prometeo. żRecuerdas qué dijo
Aristóteles de estas montańas? Sí, lo recuerdo. Que cuando alcanzáramos estas alturas, nos
volveríamos y veríamos Macedonia hacia Poniente, y el Océano Exterior hacia Levante. Me temo que
este mundo es más vasto de lo que nadie había sońado. Un mundo de Titanes. Los exploradores han
subido por todos los senderos conocidos. No hay modo de cruzar si no es hacia el sur, a India. De ser
dioses, salvaríamos estos muros hasta el Océano Oriental. Y lo haremos, Alejandro. Dentro de
algunos ańos regresaremos. Pero antes, los hombres deben ver su hogar. żHas encontrado tú tu
hogar, Ptolomeo? Cada vez creo más que será Alejandría. Bueno, al menos hace calor. Y a Thaís... le
encantó. Las mujeres hacen volver a los hombres a casa. Yo no tengo ese sentimiento. Tú tienes
Babilonia, Alejandro, donde tu madre espera que la invites. Sí, tengo Babilonia. Pero con cada
territorio, con cada frontera que cruzo, me despojo de otra ilusión. Siento que la Muerte será la
última. Y aún así, busco cada vez con más fuerza poder alcanzar ese... hogar. żAdónde habrá ido
nuestro águila? Debemos seguir adelante, Ptolomeo, hasta encontrar un Fin. India, la tierra donde
nació el sol, de la que se rumoreaba que era más rica que Persia, no había sido nunca ni explorada ni
conquistada. Desde el principio, Alejandro luchó por unificar un territorio que no tenía centro. Reyes
que conspiraban los unos contra los otros. Un laberinto de tribus empujadas por fanáticos y filósofos
a morir a millares por sus extrańos dioses. Crátero, en el destacamento de avanzada, luchó contra
hombrecillos diminutos con pieles peludas que vivían en las copas de los árboles. Son animales.
Hasta que Hefestión nos convenció de que eran animales que imitaban al hombre, que llevaban sus
propias pieles. Apártalo de mí. Llamaban a esa tribu "mono". Es un mono. Mira, Roxana. Hola,
hombrecillo. żSaben hablar? No, pero cantan. Y luego hubo la lluvia. Nunca antes habíamos visto caer
agua de los dioses durante 60 días y noches. ˇEres mejor que eso, Machatas! żQué dirá tu hijo?
ˇVamos, hombre, cuánto más viejo más fuerte se es! Cierto, mi Rey. Tráeme mi caballo, Alejandro.
Estaré contigo, a tu lado. ˇCuidado con la serpiente! ˇCuidado con la serpiente! ˇSujétala! ˇSujétala
fuerte! ˇClito, trae a los curanderos de serpientes! ˇPauvano! ˇQue alguien traiga a Pauvano! żQué ha
pasado, hijo? Ha sido en el cuello. ˇAh, no! ˇZeus, no! Aguanta, Dimno. Sé valiente. ˇAh, Zeus!
Nuestra búsqueda de oro y gloria se evaporó en cuanto descubrimos que no los encontraríamos. El
mal humor empeoró. Masacramos a todos los indios que se resistían y, con el agua local podrida,
bebíamos el fuerte vino. Mientras avanzábamos hacia el sureste, Alejandro devolvía las tierras
conquistadas a sus derrotados reyes, para convertirios en aliados. Pero eso no era del agrado del
ejército, que empezaba a preguntarse si Alejandro no estaría lanzado en una loca hazańa para imitar
la gloria de Heracles. ˇPor Bagoas! ˇPor Bagoas! Y por el dios de mi madre, Dioniso, quien, según
nuestros aliados indios, viajó hasta aquí antes que Heracles, hará unos seis mil ańos. ˇPor un héroe!
ˇPor un héroe! ˇRoxana! ˇPierdes la compostura! Esos indios son un pueblo bajo y malvado. No
intentas entenderles. Lo intento. Pero una cosa sé, Alejandro. En Persia eres un "Gran Rey". Aquí te
odian. Volvamos a Babilonia. Allí eres fuerte. Hablaremos de esto luego. Sí, luego. Hablar. Iré a verte
esta noche. Y yo te esperaré. Buenas noches, mi Rey. Majestad... ˇBrindo por Bagoas! ˇPor Bagoas!
ˇY por los 30.000 hermosos muchachos persas que entrenamos para combatir en este gran ejército!
ˇY por la memoria de Filipo! ˇOjalá hubiera vivido para ver a sus macedonios transformados en un
ejército tan hermoso! ˇPor Filipo! ˇPor un verdadero héroe! ˇPor Filipo, un verdadero héroe! ˇY por
Clito y su nuevo nombramiento como sátrapa de Bactriana! ˇPor Clito! Una forma muy pintoresca de
describirlo, Ptolomeo, pero todos sabemos que se trata de una pensión y un exilio después de 30
ańos de servicio. żLlamas a gobernar esa importante provincia un "exilio"? żSu Majestad ha dado a
alguno de sus compańeros más cercanos una provincia tan alejada del hogar? Entonces no serás
buen sátrapa, żverdad, Clito? ˇAsí sea! Prefiero pudrirme con harapos macedonios... a brillar con
pompa oriental. No temblaré ni me inclinaré como los aduladores que te rodean. ˇHefestión, Nearco,
Perdicas! Como Gobernador de una de nuestras satrapías más asiáticas, Clito, żno se te ocurre que, si
mis súbditos persas se inclinan ante mí, es importante para ellos hacerlo? żEs que exijo que los
griegos hagan lo mismo? Aceptas ofrendas griegas como hijo de Zeus, żno es cierto? Sólo cuando se
ofrecen. żPor qué no rechazas esos vanos halagos? żQué clase de libertad es ésa de inclinarse ante ti?
Tú te inclinas ante Heracles y era un mortal, aunque hijo de Zeus. żCómo puedes tú, con tu juventud,
compararte con Heracles? żPor qué no? He tenido más logros a mis ańos. He viajado igual de lejos,
probablemente más lejos que él. ˇHeracles lo hizo él solo! żHas conquistado Asia tú solo, Alejandro?
żQuién planeó la invasión de Asia? żNo fue tu padre? żEs que su sangre ya no te vale? Zeus-"Amón",
żno es eso? ˇMe insultas, Clito! ˇTe mofas de mi familia! ˇTen cuidado! Tu padre jamás habría
aceptado a bárbaros como amigos. No nos habría pedido que lucháramos con ellos. żEs que ya no
somos lo bastante buenos? Recuerdo una época en que podíamos hablar como hombres, cara a cara,
sin tanto arrastrarse y babear. Y ahora los besas, tomas a una bárbara yerma como esposa, ży osas
llamarla reina? Parte veloz, Clito, antes de arruinar tu vida. żTu gran orgullo ya no teme a los dioses?
ˇEste ejército... es tu sangre, muchacho! ˇSin él no eres nada! ˇTú ya no sirves al propósito de esta
marcha! ˇApartadlo de mi vista! żQue no sirvo a tu propósito? żA qué servía cuando salvé tu vida de
cachorro en Gaugamela? żCrees que podrás forzarnos a copular con simios marrones para agradar a
tu Alteza? ˇLlamad a la guardia! ˇArrestadle por traición! żQuién está con él? żQuién está con él?
Pongo al Padre Zeus por testigo. Te llamo a ser juzgado ante él. Y averiguaremos hasta dónde llega
esta conspiración. ˇLleváoslo! żHablas de complots contra ti? żQué me dices de Parmenión? Me
obligaste a cometer el acto atroz. żNo tienes vergüenza? ˇHipócrita! ˇDéspota! ˇFalso rey! ˇTú y tu
madre bárbara vivís en la vergüenza! żClito? No. - ˇDejadme pasar! - Nadie puede entrar. ˇSoy la
reina! Quiero verle. He esperado tres días. Dice que a nadie. Tampoco a ti. ˇMe necesita! No. No te
necesita. żY te necesita a ti? Hefestión, cometes una equivocación. El ejército necesita que lo
tranquilices, Alejandro. Sí, como a un viejo amante perdonan, pero jamás olvidarán. Sabes mejor que
nadie que las grandes hazańas las han hecho hombres que tomaron y jamás se arrepintieron. ˇEres
Alejandro! La compasión y el dolor sólo te destruirán. żTan arrogante me he vuelto que estoy ciego?
A veces... esperar lo mejor de cada uno es arrogancia. Entonces Clito decía la verdad. Me he
convertido en un tirano. Eres mortal. Y ellos lo saben y te perdonan porque haces que se sientan
orgullosos de sí mismos. He fracasado por completo. MACEDONIA - 8 AŃOS ANTES Filipo, Rey de
Macedonia y soberano de los griegos. He esperado toda mi vida ver a los griegos arrastrarse con
respeto por Macedonia. Hoy ha Ilegado ese día. Ya empiezan a decir: "Filipo era un gran general,
pero Alejandro es sencillamente grande". Pero si vuelves a insultarme otra vez, te mataré. ˇTe
echaba de menos! ˇEn primavera, a Persia! Tú cabalgarás a la derecha de mi montura. Me siento
honrado, padre. No me lo perdería ni por todo el oro del mundo. Que algún día poseerás. Se nombra
a sí mismo 13ş dios. Ha bebido tanto vino mi pobre Filipo, que ha perdido la cabeza. Majestad. Átalo.
Espero que el príncipe esté disfrutando tanto del espectáculo como nuestro Regente. Tiene mucho
sueńo. ˇPausanias, trae al resto de la guardia! ˇGuardia Real! ˇA la arena! ˇEn marcha! żSin guardia,
Majestad? żEn medio de este gentío? żCon griegos por todas partes? ˇClito! ˇMi Clito! Siempre
podrás confiar en este hombre, Alejandro. Trátale como me tratarías a mí. Y él te protegerá. Sí,
padre. Mi pueblo ya es guardia suficiente, Clito. Deja que estos griegos vean cómo puedo andar entre
mi pueblo y que luego me llamen tirano. Trae a la Guardia Principal sólo después de mi entrada.
Clito, asegúrate de que el vino fluya libremente todo el día. Quiero gustarles. żNo te lo han dicho?
Entraré yo solo. Tú me seguirás con la Guardia Principal. Anda. ˇAnda! Padre, será mejor que entre
contigo. Quieres que el mundo vea que eres mi sucesor. żEs eso lo que quiere ella? Y no pongas esa
expresión dolida. ˇSé un hombre! Y considérate afortunado de haber venido hoy después de tu
escándalo. Por Heracles, por Zeus, por todos los dioses, por una vez, obedece. Sé valiente, padre, y
sigue tu camino celebrando que, con cada paso que das, puedes recordar tu valor. Y ahora nuestro
amado Rey Filipo, en cuyo honor darán comienzo los juegos nupciales. Pausanias, te he dicho... ˇEl
rey vive! ˇAlejandro, hijo de Filipo! ˇQue los dioses bendigan al rey! Eres el rey. ˇQue los dioses
bendigan a Alejandro! Fuera. Sal. żCómo puedes ser tan desvergonzada en público? Así tenía que ser.
No es así como yo quería hacerme rey. Nadie te culpa. ˇYa me están culpando a mis espaldas! ˇEn
secreto! - Las calumnias no dan poder. - żY la vergüenza sí? żQuién mató a mi padre? Dímelo o te
hago juzgar por su asesinato. Pausanias. ˇTenía ayuda! żLe ayudaste tú? No, jamás. żPor qué? żPor
qué iba a hacerlo? Tantos lo deseaban: Griegos, persas, hombres... ˇEstás loca! ˇEstás maldita! ˇHas
soltado a las Furias y no conoces su poder! żQuién exagera ahora? Aunque fuera el deseo de tu
corazón. ˇEs mentira! ˇEra mi padre, le amaba! ˇNo era tu padre! ˇNo tienes ninguna deuda de
sangre - con ese hombre! - ˇMientes y mientes! Sólo has contado mentiras, como una hechicera, -
para confundirme. - Mírate. Mírate, eres todo cuanto él no era. ÉI era tosco, tú eres refinado. ÉI era
un general y tú eres un rey. ÉI no lograba gobernarse ni a sí mismo y tú gobernarás al mundo. Te
maldicen todos los dioses cuando hablas así. Tienes demasiado orgullo y no llevas duelo por tu
esposo. żDuelo... por él? żQué sabrás tú de Filipo? No, Alejandro. Zeus es tu padre. ˇActúa en
consecuencia! Mi primer acto sería matarte a ti. Tú me asesinaste en mi cuna. Me criaste en un saco
de odio, el que sientes por aquéllos más fuertes que tú, el que sientes por los hombres. Te enseńé mi
corazón, Alejandro. Y por Zeus y Dioniso, qué hermoso creciste. ˇMaldigo tu alma de hechicera! Tu
alma es la mía, Alejandro. ˇNo! ˇMe has arrebatado todo cuanto he amado y me has convertido en ti!
ˇBasta! ˇDeja de comportarte como un nińo! ˇEres un rey! ˇActúa como tal! Parmenión está con
nosotros, por una vez. Ejecuta a Átalo, confíscales sus tierras y arranca de raíz - esa familia para
siempre. - żEurídice? ˇJamás! ˇRíete, monstruo! ˇRompecorazones! żCómo lograrás acabar el ańo
así? żNo has aprendido nada de Filipo? No. De ti, madre. La mejor. żQué he hecho para que me odies
así? Algún día lo entenderás, pues sólo te Ilevo a ti en mi corazón. Sé lo que necesitas. Ahora es el
momento. Los dioses te favorecen a ti. Grandes riquezas, poder, conquistas... Todo cuanto desees.
ˇEl mundo es tuyo! ˇTómalo! Tómalo. No volvió a ver a su madre. Mientras él estaba combatiendo
contra las tribus del norte, Olimpia mandó asesinar a Eurídice y a su hijo recién nacido. żMajestad?
Por necesidad, él mandó ejecutar al tío de ella, Átalo. Por supuesto que tenéis temores. Todos
tenemos temores. Nadie había llegado nunca tan lejos. Y ahora estamos a tres semanas del Mar
Circundante, nuestra ruta de regreso. Construiremos una flota de navíos y regresaremos navegando
por el Nilo hasta Egipto. Y desde Alejandría llegaremos a casa en cuestión de semanas. Y allí nos
reuniremos con nuestros seres queridos. Compartiremos nuestros tesoros y relatos de Asia, y
gozaremos de nuestra imperecedera gloria hasta el final de los tiempos. ˇSigamos a Alejandro! żQué?
żSilencio? ˇEstamos contigo, Alejandro! ˇPeucestas! ˇUn héroe! żDónde están esas grandes
Amazonas que osan combatir y matar a los hombres? żAdónde han ido? ˇJamás te abandonaremos,
Alejandro! Meleager, żqué son las tribus que nos aguardan comparadas con las que hemos vencido?
żLisímaco? żAntígono? Me rompéis el corazón. Vosotros... żasustados? żCrátero? Mi Rey, no me
gustan las quejas, no las tolero en mis unidades, pero he perdido a muchos hombres. Jóvenes que
aún no habían yacido con una mujer. Algunos han muerto por enfermedad. Algunos fueron
masacrados en Escitas, junto a las orillas del Oxo. Algunos murieron con honor. Algunos no tuvieron
suerte, pero murieron. Empecé con 40.000 hace ocho ańos, y te hemos seguido a lo largo de más de
15.000 km. Y bajo la lluvia y el sol combatimos por ti. Algunos hemos luchado en 50 batallas. Hemos
matado a muchos bárbaros. Y ahora, cuando miro a mi alrededor, żcuántos de esos rostros veo?
Ahora quieres que combatamos a más de esas tribus de monos locos al Este de aquí. Oímos hablar de
miles de esos monstruos elefantes, de cruzar cientos de ríos más. ˇCrátero! Buen Crátero, żquién
puede hablar mejor que tú, el más noble de los hombres? Sabes que no hay ni una parte de mí sin
cicatriz o sin un hueso roto. Por espada, daga, piedra, catapulta o garrote... ˇHe compartido todas las
dificultades con vosotros! Sí, es cierto, mi rey, y te amamos por ello. ˇPero, por Zeus, han muerto
demasiados! Tú no tienes hijos, Alejandro. Y sólo somos hombres humildes, no queremos disgustar a
los dioses. Nuestro único deseo es ver a nuestros hijos, y a nuestras esposas y nietos por última vez,
antes de reunirnos con nuestros hermanos en esa casa sombría que llaman el Hades. Sí. Tienes
razón, Crátero. He sido negligente. Debería haber devuelto antes a los veteranos al hogar, y lo haré.
Los primeros en irse serán los Escudos de Plata. Y luego todo hombre que haya servido 7 ańos, con
pensiones completas de nuestra tesorería. Y respetados, ricos, amados... seréis tratados por vuestras
esposas e hijos como héroes durante el resto de vuestras vidas. Y disfrutaréis de una muerte
tranquila. ˇPero estás sońando, Crátero! Tu simplicidad acabó cuando tomaste a concubinas y tuviste
hijos persas, y engrosaste tus posesiones con saqueos y joyas. ˇPorque te has enamorado de todas
las cosas de la vida que destruyen a los hombres! żNo lo veis? Y vosotros sabéis tan bien como yo
que, a medida que declinen los ańos y los recuerdos se marchiten, y todas vuestras grandes victorias
se desvanezcan, siempre se recordará que vosotros dejasteis a vuestro rey en Asia, pues yo seguiré
adelante, con mis asiáticos. ˇA los chacales contigo, Alejandro! ˇVinimos por ti y tú nos has
descartado! ˇQueremos ver a nuestras esposas e hijos antes de morir! ˇTengo nietos que nunca he
visto! ˇQuiero ver a mis hijos! ˇHe pagado por vuestros hijos bastardos! ˇNo he tomado nada para
mí! ˇLo único que os pido a cambio es un mes más! ˇVergüenza! ˇEs vuestro rey! żQué diría tu padre?
ˇOs he llevado más lejos de lo que jamás sońó! ˇDemasiado lejos! ˇVolved a casa! ˇCuento con el
valor de los bárbaros! ˇSeguiré hacia el Este! ˇNos quiere muertos para que nadie hable de sus
crímenes! - żQuién ha dicho eso? - ˇNo volveremos a Macedonia! ˇDespreciable cobarde, avanza!
ˇHaz públicas tus acusaciones! - żPara que nos mandes matar? - ˇHijo de Zeus! ˇProfanas la memoria
de tu verdadero padre! żLe mataste a él como mataste a Clito? ˇOcúltate entre la turba, porque te
quitaré la vida...! ˇInsultas mi honor y mi paternidad! ˇArrestadle! ˇY a él! ˇSí! ˇY tú, Demetrio el de la
lengua larga! żMe llamas a mí asesino? ˇEsa sangre no mancha mis manos! ˇY a él! ˇSí, conocerás el
dolor de la traición! ˇTe burlas de mi vergüenza por lo de Clito y me dices que dańaría un solo cabello
de la cabeza de mi padre! ˇDespués de lo que he hecho por vosotros, cerdos! ˇCobardes! ˇTraidores!
ˇVenga! żDónde están vuestras dagas? Siguió su marcha hacia el sur, hacia el Océano Exterior. Al
aplastar el motín y ejecutar a sus cabecillas no hizo nada, a mi parecer, que no hubiera hecho
cualquier general en tiempo de guerra. Pero, claramente, el ejército estaba dividido. Y Alejandro ya
no era querido por todos. Mantened la calma. Juntos somos fuertes como dioses. Cubríos con la
izquierda, pegad fuerte con la derecha. ˇEl miedo es una sandez! ˇUna pérdida de tiempo! ˇJuntad
escudos! ˇJuntad escudos! ˇPosiciones de batalla! ˇEn marcha! ˇEn marcha! ˇTronchadores, preparad
los puńales! ˇSeguidme! ˇMantened la fila! ˇPegad fuerte, muchachos! ˇAdelante, macedonios! żPor
qué os rezagáis? ˇMás rápido! ˇCaballería! ˇDividíos en tercios! ˇReagrupaos y rodead! ˇNo rompáis
la fila! ˇDebemos aguantar! ˇNo! ˇCaballería a mí! ˇSeguid a nuestro rey! ˇCargad! ˇCargad! ˇLa
falange peligra! ˇMeleager, ve a decirle a Farnuces que vuelva al centro! ˇAmintas, busca a Hefestión
en la orilla del río y trae a toda la caballería al centro! ˇDebemos alcanzar a Crátero antes de que sea
demasiado tarde! ˇHefestión! ˇAI centro! ˇAlejandro! ˇVamos, macedonios! ˇCabalgad! ˇCabalgad!
ˇAI centro! ˇAI centro! ˇCoeno, sal de ahí! ˇNo! ˇLos caballos no quieren avanzar! ˇA pie, pues!
ˇAtrás, hombres! ˇAtrás! Vamos, Bucéfalo. Sólo es sol y sombra. Tú y yo juntos, una última vez,
Bucéfalo. żNo es algo maravilloso vivir con gran valor y morir ganando la fama eterna? ˇVamos,
macedonios! żPor qué os retiráis? żQueréis vivir eternamente? ˇEn nombre de Zeus, atacad! ˇAtacad!
ˇAlejandro! ˇAlejandro! ˇEl rey ha caído! ˇAyudad al rey! Fue la más sangrienta de sus batallas. Pura
carnicería. El fin de toda razón. Ya no volveríamos nunca a ser hombres. ˇAlejandro está vivo!
Hombres de Macedonia, volvemos a casa. ˇVolvemos a casa! Su vida debería haber acabado en India,
pero ahí entraríamos en el mito. En la vida real, Heracles murió por una camisa envenenada que le
entregó por error su celosa esposa. Tras mostrar su devoción a los dioses al final de su gran viaje,
Alejandro se despidió de Oriente y encaminó su ejército hacia el oeste, cruzando el gran desierto de
Gedrosia, buscando la ruta más corta de regreso a Babilonia. Hasta hoy, no se han podido contar los
muertos. Fue el mayor error de su vida. Y cuando finalmente volvió a entrar en Babilonia, después de
6 ańos en el lejano Oriente, Alejandro una vez más acaparó la imaginación del mundo desposándose
con otras dos mujeres. Si anoche mismo estaba... Ha sido el agua, Majestad. La mezcló con el vino.
żCómo es posible? żTifus? żDe India? Yo no me preocuparía, Majestad. Sólo necesita unas cuantas
noches de descanso. Pero nada de vino ni de pollo frío... ˇSal, doctor! Me encuentro mejor. Pronto
podré levantarme. Partimos hacia Arabia en primavera y no podría irme sin ti. Arabia... Solías
vestirme como un jeque y agitabas tu cimitarra de madera. Fuiste el único que nunca me dejó ganar.
El único que ha sido en todo momento sincero conmigo. Tú me salvaste de mí mismo. Por favor, no
me abandones, Hefestión. Mi Alejandro. Recuerdo al joven que quería ser Aquiles y que luego le
sobrepasó. Y tú, Patroclo... żY qué ocurrió después? El nuestro es un mito en el que sólo creen los
jóvenes. Pero qué hermoso mito era. Ascendemos... y caemos. ˇAh, Hefestión! Me preocupo por ti
sin mí. No soy nada sin ti. ˇVamos, lucha, Hefestión! ˇMoriremos juntos! Es nuestro destino.
Tendremos hijos con nuestras esposas, y nuestros hijos jugarán juntos como hacíamos nosotros.
Fletaremos mil navíos desde aquí, Hefestión. Rodearemos Arabia, y subiremos navegando por el
Golfo hasta Egipto. Desde allí construiremos un canal a través del desierto, hasta el Mar Mediano. Y
seguiremos hasta Cartago. Y a esa gran isla, Sicilia, y nos pagarán un gran tributo. Y después, la tribu
romana. ˇBuenos combatientes! Les venceremos y luego exploraremos los bosques del norte, y
saldremos por las Columnas de Heracles al Océano Occidental. Y luego, algún día, dentro de menos
de diez ańos, Babilonia, con su puerto de aguas profundas, será el centro del mundo. Crecerán las
Alejandrías, las poblaciones se mezclarán y viajarán libremente. Asia y Europa se unirán. Y
envejeceremos, Hefestión, mirando desde nuestro balcón a ese nuevo mundo. żHefestión?
żHefestión? żDónde está ese médico? No puedo explicármelo, Majestad. No es posible. Lo juro por
Apolo. ˇEjecutadle! ˇLleváoslo ahora y ejecutadle! Ven, ven. ˇMentirosos! ˇTodos le odiabais! ˇTodos
vosotros! ˇFuera! ˇIros ahora mismo de aquí! ˇFuera! ˇSalid todas! ˇArpías! ˇFuera! żOtra vez ebrio?
Sal de aquí. - Ha muerto. - żQuién? Muchos le odiaban, pero no creo que ninguno de ellos habría
osado hacerlo. żHefestión ha muerto? żEstás loco? ˇMonstruo! żEstás loco? ˇMe has despojado de
todo cuanto he amado! ˇQue las Furias a través de los tiempos condenen tu miserable corazón!
ˇObedéceme! Alejandro, llevo un hijo tuyo. ˇAlejandro, llevo tu hijo! ˇAlejandro, mi esposo, mi rey!
ˇTenemos un hijo! ˇMi pobre desafortunado hijo! ˇNo vuelvas nunca a tocarme! ˇNo! Un último
brindis... antes del amanecer. Por mis viejos... amigos. ˇY por los mitos! ˇSí! ˇBien! ˇAcábalo! ˇPor el
próximo amanecer! Descansa tus ojos, hijito mío. Los sueńos son tuyos para siempre. Sí, ven. Ven a
Babilonia. Te espero. Tu único y amante hijo. ˇEspera! ˇEspera! ˇBuitres! ˇTu hijo, Alejandro! ˇSólo
faltan tres meses! ˇPor favor, vive! Alejandro, te lo suplicamos. Dinos quién... gobernará este gran
imperio que nos legas. żA quién quieres tú? No temas. Esto es sólo el principio. El mito se hace
realidad. Iré más lejos que Heracles. Estaré en muros como estos. Cuando se acaba, sólo importa lo
que has logrado. Lo recordaré. Zeus es tu padre. Alejandro, el ejército se dividirá. Las satrapías se
rebelarán. Sin tus órdenes, habrá guerra. Por favor, dilo. żQuién? Yo soy la que más te ama. żQué ha
dicho? Al mejor. Ha dicho: "Al mejor." - No, ha dicho: "A Crátero". - żA Crátero? żPor qué diría: "A
Crátero"? BABILONIA, PERSIA - JUNIO DE 323 A.C. El 10 de junio, un mes antes de cumplir los 33
ańos, el gran corazón de Alejandro finalmente se rindió y, como había prometido, se reunió con
Hefestión. Pero a lo largo de su breve vida logró, sin duda, la mítica gloria de su antepasado Aquiles...
y aún más. Su sacrificio fue una muerte prematura pero, al mantener su parte del trato, no puedo
evitar pensar que también conquistó a la Muerte. La transgresión de Olimpia en el asesinato de su
padre es, a mi parecer, una probabilidad. żLa de él? Un peso. Alejandro estaba demasiado
enamorado de la gloria para robarla. Pero por su sangre, y únicamente por su sangre, era culpable.
ˇNo! El cuerpo permanecerá en Babilonia. A las pocas horas ya nos peleábamos como chacales por su
cuerpo. Las guerras del mundo habían comenzado. Perduraron más o menos durante 40 ańos.
Casandro en Grecia, Crátero y Antígono en Asia Occidental, Seleuco y Perdicas en Oriente, yo mismo
en Egipto, hasta que dividimos su imperio en cuatro partes. ˇCaballeros, no somos salvajes! Casandro
no dejó lugar a dudas sobre sus ansias de poder cuando, 7 ańos después, ordenó la ejecución de
Olimpia. Y, antes de que pasaran doce ańos, consiguió destruir totalmente la estirpe de Alejandro al
envenenar a Roxana y al hijo de 13 ańos de Alejandro, el verdadero heredero del imperio. Pero la
verdad no es nunca sencilla. Y, sin embargo, lo es. La verdad es que nosotros le matamos. Con
nuestro silencio, consentimos. Porque... Porque ya no podíamos más. żQué, por Ares, podíamos
esperar del futuro si no ser descartados al final, como a Clito? żDespués de todo ese tiempo, entregar
nuestra riqueza a aduladores asiáticos a quienes despreciábamos? ż"Mezclar las razas", "armonía"...?
ÉI hablaba de esas cosas, żpero no se trataba en realidad de Alejandro y de otra población dispuesta
a obedecerle? Yo jamás creí en su sueńo. Ninguno de nosotros lo hacía. Ésa es la verdad de su vida.
Los sońadores nos agotan. Deben morir antes de que nos maten con sus condenados sueńos.
Deshazte de todo eso, Cadmo. Son desvaríos de un anciano loco. Escribirás: "Murió de fiebre y de un
estado general debilitado". Sí, Gran Faraón. Podría haberse quedado en casa, en Macedonia, casarse
y tener una familia. Habría muerto un hombre celebrado. Pero así no era Alejandro. Toda su vida,
luchó para librarse del miedo. Y a través de eso, y sólo de eso, se volvió libre... ˇEl hombre más libre
que jamás he conocido! Su tragedia fue la de su soledad e impaciencia crecientes con aquéllos que
no podían entenderlo. Y si su deseo de reconciliar a griegos y bárbaros acabó en fracaso... ˇMenudo
fracaso! Su fracaso se alzó muy por encima de los éxitos de otros hombres. He vivido... he vivido una
larga vida, Cadmo, pero la gloria y la memoria del hombre siempre pertenecerán a aquéllos que
persiguen sus grandes visiones. Y el más grande de todos ellos es aquél al que hoy llaman "Megas
Alexandros". El Alejandro más grande de todos. Downloaded From www.AllSubs.org

También podría gustarte