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ISSN 2250-7973

COLECCIÓN DossIER DEL ISTLyR

A PARTIR
DEL BOX

Investigación:
“La experiencia de la Escuela de Boxeo
para adolescentes y jóvenes de Barracas”
COLECCIoN DossIER DEL ISTLyR

A PARTIR
DEL BOX

Investigación:
“La experiencia de la Escuela de Boxeo
para adolescentes y jóvenes de Barracas”
Índice

Prólogo 8

Elaboración: Presentación 13
Débora Kantor
Primera parte
Aportes para la producción del informe:
Mercedes Nieto, Damián Feder, Pablo Quatrini El proyecto de investigación 15
1. Breve presentación y objetivos del estudio 16
Trabajo de campo y sistematización de la información: 2. Metodología de trabajo 17
Mercedes Nieto y Damián Feder: alumna y docente de Tiempo Libre y Recreación 3. Encuadre conceptual 18
Bigay Duhay y Marcelo Zanelli: alumna y docente de Pedagogía y Educación Social
Denise Altieri y Pablo Quatrini: alumna y docente de Comunicación Social
orientada al Desarrollo Local Segunda parte
Débora Kantor: Departamento de Investigación del Instituto Superior Contexto y características de la Escuela de Boxeo
de Tiempo Libre y Recreación Información básica 27
4. El contexto 28
Coordinación editorial: Sergio Frugoni
4.1. La Villa 21/24 28
Diseño y diagramación: Florencia Croccia
Fotografías: Escuela de Boxeo de Barracas 4.2. El barrio Tres Rosas 29
4.3. La población 31
Rector: Jorge Cajaraville
Vicerrector: Daniel Schulman 5. La Escuela de Boxeo 32
Regentes: Mariana Bernal, Gabriel Garzón
5.1. El equipo responsable 32
ISSN 2250-7973 5.2. El gimnasio del BBC 33
Buenos Aires, diciembre de 2016. 5.3. Los entrenamientos 35
5.4. Las “guanteadas” 38
Las notas son responsabilidad de los autores y no representan necesariamente la opinión
del ISTLyR. Permitida la reproducción a condición de citar la fuente y enviar copia al ISTLyR.
Tercera parte
Prácticas y significados. Descripción analítica 43
TECNICATURAS EN 6. Prácticas y estrategias clave puestas en juego
• TIEMPO LIBRE Y RECREACIÓN por los responsables del proyecto 44
• PEDAGOGÍA Y EDUCACIÓN SOCIAL
• COMUNICACIÓN SOCIAL
6.1. Apertura y disponibilidad 44
ORIENTADA AL DESARROLLO LOCAL 6.2. Seguimiento y acompañamiento 50
6.3. La grupalidad, las normas y la palabra 56
6.4. Multiplicación y diversificación
de las propuestas 65
Av. Santa Fe 2778, CABA, Argentina 6.4.1. La ampliación de horizontes materiales
Tel. (54 11) 4824.4403
istlyrcomunicacion@gmail.com y simbólicos 66
http://istlyr.caba.infd.edu.ar/sitio/ 6.4.2. La comunicación de la experiencia 71
7. Singularidades de la intervención
vinculadas con el boxeo 78
7.1. La apuesta por la ética pugilística 78
7.2. Contrarrestar las representaciones
negativas acerca del box 82
7.3. Enfatizar lo recreativo, habilitar lo profesional 84

8. Significados que adquiere la experiencia


para los/as adolescentes y jóvenes 90
8.1. Un lugar de pertenencia, un espacio
de referencia(s) 90
8.2. El desahogo y la descarga 95
8.3. La experiencia del cuidado 98
8.4. La gestión del cuerpo 101

Reflexiones finales 105

Anexo
Breve “perfil” de los/as adolescentes
y jóvenes entrevistados/as 114

Bibliografía 118

6 7
Prólogo

Se hace camino al andar

La publicación de “A partir del box”en el marco de la línea editorial del Al igual que en otras ocasiones, para que este proyecto y su publica-
Instituto Superior de Tiempo Libre y Recreación, marca la continuidad ción fueran posibles, han concurrido una serie de actores y circunstan-
de una apuesta iniciada hace ocho años y que hoy ya cuenta con diez pu- cias: Políticas Públicas Nacionales – en esta ocasión del Observatorio
blicaciones en su haber. La intención política institucional, sigue siendo Nacional del Deporte y la Actividad Física – tendientes a promover la
la misma: reconocer, sistematizar y producir colectivamente a partir de sistematización de experiencias y la investigación en este campo, deci-
las propias prácticas formativas y/o de aquellas que se llevan adelante en sión y capacidad institucional para formular un proyecto sólido y para
diversas instituciones, tanto en el campo de la recreación, la educación sostener su desarrollo –en este caso por la Jefatura del Departamento de
social o la comunicación comunitaria. Investigación del ISTLyR - y colegas docentes/graduados convencidos de
Entendemos que la responsabilidad de una Institución Formadora de la necesidad de indagar, pensar y escribir colectivamente.
Educación Superior, no se limita sólo al “dictado de clases”, sino que No fue, ni es magia o voluntarismo, sino la obstinación por articular/
implica un compromiso con la producción de saberes y con su amplia conseguir/generar las condiciones institucionales y laborales que posi-
circulación, tanto para el trabajo formativo que se desarrolla en el Ins- biliten relaciones críticas con el saber, con su producción, apropiación
tituto, como para todos/as aquellos que estén interesados en pensar y y circulación. Entendemos que en cierto clima cultural que banaliza el
debatir en esos terrenos. Un horizonte de mayor democratización de la pensar, que propone relaciones mercantiles con el conocimiento e in-
recreación, la educación y la comunicación requiere de discusiones in- sinúa propuestas formativas tecnocráticas , pensar sistemática y críti-
formadas que nos permitan dar cuenta de las prácticas, los sentidos y camente, investigar, es uno de los aportes que nos corresponde hacer
las disputas que se dan en torno a ellas. como Institución Pública de Educación Superior que quiere hacer una
Junto con la continuidad de intenciones, “A partir del box” inaugura formación de calidad en horizontes de igualdad, de derecho y emancipa-
el género “Informes de investigación”, ya que tiene la particularidad de ción para todos y todas.
ser el resultado de un proyecto de investigación en la que han partici-
pado docentes y estudiantes de las tres carreras que se dictan en el Ins- Jorge Cajaraville
tituto con los consiguientes esfuerzos y beneficios del trabajo conjunto
desde tres marcos profesionales distintos.

8 9
Presentación
E sta publicación es el resultado del trabajo realizado en el marco del
proyecto de investigación “Intervenciones comunitarias con eje en el
deporte. La experiencia de la Escuela de Boxeo para adolescentes y jóvenes
diciembre de 2015, de manera que la realidad que observamos, así como
los testimonios que recogimos y el análisis que realizamos, no aluden a
los cambios que vienen teniendo lugar desde ese momento ni a los efec-
de Barracas”. El mismo fue presentado por el ISTLyR al concurso con- tos de los mismos. Pero dado que sí aluden en forma directa o indirecta
vocado por el Observatorio Nacional del Deporte y la Actividad Física a determinados programas públicos con anclaje territorial y a políticas,
(ONDAF) dependiente del Consejo Nacional de Coordinación de Políti- procesos y recursos vigentes hasta entonces, este informe habrá de leer-
cas Sociales. A partir de la evaluación favorable del jurado y con el apoyo se en diálogo con las nuevas políticas, con las actuales condiciones de
financiero otorgado por dicho organismo, el estudio fue llevado a cabo vida de los sectores populares y con los nuevos escenarios que todo ello
entre julio de 2015 y mayo de 2016 por un equipo integrado por alum- plantea para el trabajo social y educativo.
nas y docentes de las tres carreras, con la coordinación del Departamen-
to de Investigación del Instituto.
Creemos que el estudio realizado es relevante para el ISTLyR dado Acerca de la estructura y el contenido
que la dimensión recreativa de la Escuela de Boxeo, lo concerniente al de esta publicación
trabajo socioeducativo que atraviesa dicha intervención y las actividades
en el área de la comunicación que se promueven desde la misma, dialo- La primera parte del documento recoge los aspectos más relevantes del
gan significativamente con las tecnicaturas que se dictan en el Instituto: proyecto tal como fue presentado oportunamente, a saber: las caracte-
Tiempo Libre y Recreación, Pedagogía y Educación Social, y Comunica- rísticas del estudio, los fundamentos y los objetivos que orientaron el
ción Social orientada al Desarrollo Local. trabajo, la metodología con la cual se lo llevó a cabo y el marco teórico
Cabe señalar que el ISTLyR no cuenta con recursos financieros para desde el cual se han pensado los temas y los problemas clave.
realizar investigaciones y que actividades de este tipo no están contem- En la segunda parte se presenta información básica acerca del contexto
pladas en los planes de estudio ni la definición de tareas de los profe- en que transcurre la experiencia estudiada (la Villa 21/24, el Barrio Tres
sores. En ese marco, desarrollar la investigación propuesta contando Rosas, la población) y acerca del Proyecto de la Escuela de Boxeo (el equipo
con el apoyo de un organismo público, y llevarla a cabo entre docentes responsable, el gimnasio, los entrenamientos y las “guanteadas”).
y estudiantes del Instituto dando entrada a perspectivas y tradiciones La tercera parte, que constituye el “cuerpo central” de este informe,
propias de las tres carreras, constituye un desafío enriquecedor en tér- consiste en la presentación de una descripción analítica. En función de
minos institucionales y profesionales, tanto para quienes se están for- los objetivos del estudio y sobre la base del análisis de la información
mando como para los formadores recogida, el desarrollo se ha organizado en torno a tres ejes: las prácticas
Subrayamos asimismo que la experiencia estudiada resulta interpela- y las estrategias puestas en juego por los responsables del proyecto; las
dora por cuanto las características del boxeo no parecen congruentes con singularidades de la intervención vinculadas con el boxeo y los signifi-
las actividades y con las prácticas que se valoran y se promueven desde el cados que adquiere la experiencia para los/as adolescentes y jóvenes que
ISTLyR, ni con las preferencias y las valoraciones de buena parte de los participan en ella. En esta parte se considera especialmente la voz y la
actores institucionales –incluidos varios/as de quienes hemos llevado a perspectiva de los/as entrevistados/as así como otras evidencias empíri-
cabo la investigación–. El estudio representaba, por lo tanto, una ocasión cas, cuyo análisis se realiza dando entrada a conceptos y aportes teóricos
para confrontar conceptos y preconceptos, para constatar, enriquecer o provenientes de diferentes campos de estudio.
modificar argumentos y para complejizar la mirada acerca de las carac- Por último, se retoman, se articulan y se profundizan algunos puntos
terísticas y de los sentidos que conllevan las propuestas de trabajo que se de la elaboración precedente que condensan temas relevantes; no con la
desarrollan desde distintos campos y en diferentes contextos. intención de formular conclusiones ni de realizar una síntesis abarcativa
Otras consideraciones se imponen en esta presentación aun cuando del desarrollo anterior, sino a fin de presentar reflexiones finales en tor-
no se relacionan en forma directa con la investigación realizada ni con no a ciertos asuntos críticos subrayando evidencias, problemas, hipóte-
la elaboración que presentamos aquí. Nos referimos al cambio de ges- sis e interrogantes sobre los cuales, creemos, es interesante y pertinente
tión del Gobierno Nacional acontecido en diciembre del año 2015. Ca- seguir indagando.
be señalar entonces que el trabajo de campo finalizó precisamente en
13
Primera parte
El proyecto
de investigación
1. Breve presentación y objetivos del estudio 2. Metodología de trabajo

El proyecto consistió en la realización de una investigación cualitativa Se ha realizado un estudio de carácter cualitativo dentro la perspectiva
acerca de la experiencia de la Escuela de Boxeo para adolescentes y jó- del análisis de casos, orientado a producir reflexiones y categorías perti-
venes de la Villa 21-24 (Barrio Tres Rosas) de Barracas, creada en el año nentes para conocer, analizar y enriquecer enfoques y prácticas desplega-
2008 por iniciativa de la Fundación TEMAS que venía desarrollando en das en el marco de proyectos socioeducativos con adolescentes y jóvenes.
dicha comunidad diversos proyectos de intervención social, mayormen- El trabajo de campo se realizó entre los meses de agosto y diciembre de
te destinados a la población infantil. 2015; durante dicho período se mantuvo un contacto sistemático con los
El trabajo en red con las instituciones de referencia de la zona, la co- responsables de la Escuela de Boxeo (EB) a fin de desarrollar las tareas
laboración de distintas organizaciones –como la Sociedad General de de investigación previstas. Se realizaron observaciones de actividades y
Arquitectos y la Federación Argentina de Box– y el apoyo financiero momentos característicos del trabajo en la EB, a saber: entrenamientos
brindado por organismos del Estado –como la Dirección Nacional de (5); meriendas de intercambio y charlas temáticas (4); momentos rela-
Juventud– hicieron posible que a lo largo de 7 años más de 600 adoles- cionados con el área comunicacional (3); encuentros deportivos o “guan-
centes y jóvenes con vidas “difíciles” se acercaran al modesto gimnasio- teadas” (3); reuniones del equipo responsable del proyecto (1); festival
ring emplazado en el corazón del barrio. de cierre (1). Se realizaron también entrevistas a diferentes actores que
Además de entrenamientos y encuentros deportivos, el trabajo socio- se vinculan de manera significativa con la EB, a saber: directora de la
educativo de la Escuela de Boxeo contempla acciones de promoción de la Fundación TEMAS (3); trabajadora social (1); coordinadora de la EB (1);
salud, espacios de diálogo e intercambio, abordaje de problemáticas co- entrenadores (2); adolescentes y jóvenes participantes (7); referente co-
munitarias y articulación con instituciones barriales. En ese marco, los munitaria a cargo del Comedor Amor y Paz (1); médico del CeSAC (1);
y las adolescentes y jóvenes desarrollan actividades en el área de la comu- madres de los/as participantes (2).
nicación tales como la redacción de la sección deportiva del periódico ba- Para el trabajo de campo se conformaron “parejas” integradas por una
rrial “La 21-24”, una página web y un micro radial semanal en la FM 96.1. alumna y un docente por carrera (recreación, educación social, comu-
Teniendo en cuenta dichos antecedentes, hemos propuesto como ob- nicación), de manera que algo de la mirada específica de cada campo
jetivo general de la investigación: analizar las características, los sen- se expresaba en las entrevistas, las observaciones, los registros y las re-
tidos y los efectos más relevantes de la Escuela de Boxeo de Barracas construcciones, al tiempo que de ese modo se resguardaba la responsa-
en tanto intervención socioeducativa destinada a adolescentes y jóvenes bilidad docente dentro del equipo de trabajo1.
que habitan en la Villa 21-24. En cuanto al abordaje de fuentes secundarias, se consultaron y analiza-
ron documentos tales como: presentaciones de TEMAS ante organismos
Los objetivos específicos del proyecto se orientaron a explorar, identifi- gubernamentales de apoyo e instituciones financiadoras; documentos
car y analizar: del proyecto de la EB; fichas de seguimiento de los/as participantes; pro-
• Los fundamentos del proyecto y el encuadre de trabajo que sustentan ducciones de los/as adolescentes y jóvenes (columnas deportivas en el
la Escuela de Boxeo para adolescentes y jóvenes de la Villa 21-24. periódico barrial “La 21-24”; micros radiales en la FM local, página web).
• Los puntos críticos de la intervención en lo concerniente a las estrate- Durante este proceso se mantuvieron reuniones mensuales destinadas al
gias puestas en juego por los responsables del proyecto. seguimiento conjunto del trabajo. Los encuentros constituyeron verdaderos
• Los significados que adquiere la experiencia para los/as adolescentes y
jóvenes que participan de la Escuela de Boxeo.
• Las singularidades de la intervención que se vinculan con la práctica
del box (características, tensiones). 1. “Aprendo mucho haciendo las entrevistas y pensando lo de la comunicación… ¡en me-
• Los efectos y alcances del proyecto en relación con el entorno comunitario. dio del boxeo y de todas las cosas que se hacen ahí!” (Alumna).
“Todo un tema pensar lo ‘recreativo’… Acá el box es recreativo pero en el Instituto cuan-
do hablamos de recreación hablamos de otra cosa. ¿Cómo vamos a tomar eso? ¡Qué lío!
(Docente).

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espacios de intercambio y aprendizaje que permitieron profundizar la mi- Proyectos deportivos, contextos y sentidos
rada y reorientar la tarea en términos sustantivos y metodológicos2.
Promediando el trabajo de campo y sobre el final del mismo realiza- Los espacios y las propuestas de diverso tipo que promueven actividades
mos un análisis preliminar de la información recogida a fin de identi- físicas y deportivas constituyen oportunidades privilegiadas para que
ficar elementos clave, evidencias y temas y problemas significativos a quienes las practican construyan vínculos valiosos consigo mismo y con
tener en cuenta en el momento de la sistematización3. Sobre esa base se los demás, con el propio cuerpo, con el espacio y con el entorno social. Es
definieron ejes y categorías en torno a las cuales se abordó el material sabido que el deporte implica despliegue motor, contexto lúdico, regula-
empírico, prestando atención a las recurrencias y a los aspectos diso- ciones y normas, aprendizajes cognitivos, técnica, táctica, estrategia, es-
nantes provenientes de las diferentes fuentes y a la perspectiva de los fuerzo sostenido, metas individuales y colectivas. Y también se presenta
diferentes actores. como un terreno “fértil” –no siempre cultivado– para la enseñanza y el
La elaboración realizada en torno a los aspectos centrales de la expe- aprendizaje de prácticas solidarias, saludables y significativas en térmi-
riencia estudiada, que consideramos asimismo relevantes para el abor- nos de pensamiento crítico, de movilización y de participación ciudadana.
daje de otras intervenciones con eje en el deporte y/o con adolescentes La intervención socioeducativa que proponemos estudiar encuentra
y jóvenes en contextos comunitarios, se presenta en términos de una definición y sentido dentro una perspectiva que privilegia la promoción
descripción analítica que articula los datos empíricos con aportes teóri- de actividad física y el deporte recreativo en el marco de propuestas for-
cos y conceptuales. mativas integrales y con proyección social. Perspectiva que se diferencia
de abordajes que conciben a la recreación como mero pasatiempo ano-
dino y al deporte como asunto vinculado especialmente o de manera ex-
3. Encuadre conceptual cluyente al “talento” y a la competencia inescrupulosa (Kantor, 2008 b).
Los proyectos de deporte recreativo en contextos comunitarios enfren-
En este apartado presentamos los principales ejes sustantivos y apor- tan otros desafíos a la hora de propiciar oportunidades para entrenar,
tes teóricos considerados para enmarcar el tema de la investigación. para divertirse, para aprender, para generar compromiso, para sociali-
Comenzaremos realizando un breve encuadre acerca de los proyectos zar y eventualmente para competir, ganar y perder –dado que la compe-
sociales y educativos con eje en el deporte. Luego presentamos some- tencia es inherente al deporte–.
ramente una referencia teórica insoslayable para el análisis de proyec- Concebido el acceso al deporte como un derecho del conjunto de la
tos con eje en el boxeo. Se presentan asimismo conceptos y discusiones población y como un espacio valioso para la formación de niños/as, ado-
acerca de la mirada educativa y la perspectiva de derechos, y los propó- lescentes y jóvenes, por lo menos dos cuestiones emergen con claridad.
sitos preventivos que frecuentemente la invaden cuando se destinan a La primera: el Estado tiene obligaciones; la segunda: quienes llevan a
adolescentes y jóvenes “de los barrios”. Por último, dedicamos un apar- cabo trabajos sociales y/o actúan en la formación de las nuevas genera-
tado a los sujetos que intervienen en la experiencia y en el tema que ciones tienen responsabilidades. En este marco, además de programas y
proponemos estudiar: los/as adolescentes y jóvenes, y los adultos involu- políticas gubernamentales y de la oferta privada que se despliega en esta
crados en la tarea formativa. área, o bien, ante la aún escasa presencia del Estado y del sector privado
en numerosos contextos: las iniciativas impulsadas por organizaciones
sociales y proyectos comunitarios contribuyen a ampliar y a enriquecer
las posibilidades de que vastos sectores de la población transiten por ex-
periencias relevantes para sus vidas en áreas diversas. Lo deportivo es,
2. “Estuve muy desconcertada por momentos… ‘¿estará bien esta forma de preguntar, de re- puede ser, suele ser, una de ellas. En el caso que nos ocupa: en un en-
gistrar y de reconstruir?’ ‘¿qué vamos a hacer, cómo vamos a hacer con todo este material?’ De torno de evidente complejidad y precariedad como el que presenta la Vi-
a poco fui viendo cómo era la cosa” (Alumna).
3. “Las incursiones al campo abrían cada vez más aristas del problema, más interés por el lla 21/24, una Organización de la Sociedad Civil, la Fundación TEMAS,
estudio y más necesidad de conversar entre nosotros. Fue muy rico el intercambio en las reunio- propone una alternativa de actividad deportiva para adolescentes y jóve-
nes, el cruce de miradas, las nuevas ideas y las diferentes perspectivas que aparecían en cada nes, quedando claro que es el box en este caso el eje de la convocatoria.
encuentro” (Docente).

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Una emblemática e interesante investigación acerca de las caracterís- responsabilidad que asumen los posiciona y los interpela de alguna ma-
ticas y los efectos de la práctica del box en contextos de marginalidad nera como formadores.
y de violencia social incorporada es la que realizó el sociólogo francés El trabajo con adolescentes y jóvenes en el área deportiva, así como en
Loïc Wacquant en los “barrios bajos” del Bronx (EEUU) a finales de la cualquier otra, implica involucrarse en la educación de las nuevas genera-
década de 1980. El análisis de dicho sociólogo acerca del “orden pugi- ciones. Educación en sentido amplio, educación no escolar, educación al
lista”, la disciplina y el esfuerzo que conllevan la enseñanza y el apren- fin, porque algo del orden de la transmisión aparece en la escena, porque la
dizaje del boxeo, los valores morales que se ponen en juego en torno al noción y la experiencia de proceso ocupan tiempos y espacios, porque algo
ring, el modo en que se construye prestigio y masculinidad, la “ética vinculado a la habilitación del otro se pone en juego, porque una cierta asi-
contradictoria del guerrero pacífico”, la domesticación del dolor y de la metría en la relación es necesaria y constitutiva de los intercambios, porque
violencia, y otros tópicos del trabajo de Wacquant constituyen aportes unos determinados aprendizajes son propósito y resultado de las acciones.
insoslayables para nuestro estudio (Ferrándiz y Feixa, 2005). Y si educar, en cualquier ámbito, siempre, ha exigido lidiar con la com-
La referencia es ineludible en la medida en que aquella investigación plejidad y la dificultad, las condiciones del presente multiplican conside-
ofrece coordenadas pertinentes para analizar lo que significa y lo que rablemente el desafío. Dentro de las muchas cuestiones que encierra
parece estar produciendo el proyecto impulsado por la Fundación TE- la expresión “condiciones del presente”, nos interesa enfatizar algunas
MAS. Proyecto que –no casualmente– reconoce en la obra “Entre las de ellas, a saber: un entorno local y global en que la cultura se presenta
cuerdas” de Loïc Wacquant (2010) una fuente de inspiración. Tan es así cada vez más dinámica y más diversificada; una sociedad fragmentada;
que en los fundamentos de la Escuela de Boxeo como espacio de socia- un tiempo surcado por el mercado de consumo y por la expansión de las
lidad y de construcción de solidaridades entre los jóvenes del barrio, industrias culturales; una circulación de bienes materiales y simbóli-
junto a los argumentos que subrayan la exigencia física y la constancia cos que constituyen referencias potentes para la socialización; un acceso
en el entrenamiento, se cita a dicho autor cuando señala que “el boxeo desigual a dichos bienes, que en unos casos refuerza la inclusión mien-
representa la paradoja de un deporte ultra individual cuyo aprendizaje tras que en otros profundiza la exclusión. Es en este contexto que las
es fundamentalmente colectivo”. propuestas formativas no escolares acusan recibo y se hacen cargo –a
De modo que, aun cuando el estudio de Wacquant remite a ambientes menudo: “como pueden”– de numerosos problemas y demandas socia-
delincuenciales y a la cotidianeidad de los guetos raciales de Nueva York les. Tal es el caso de la Escuela de Boxeo para jóvenes de la Villa 21/24.
(circunstancias por cierto bien diferentes a las de los pibes y pibas de la Los espacios y las propuestas educativas en diferentes ámbitos portan
Villa 21/24), y aun cuando se refiere exclusivamente a varones (mientras de algún modo tradiciones, saberes, fragilidades y potencialidades pro-
que en la Escuela de Box de Barracas también participan mujeres), el pias de la educación popular, el trabajo social, la recreación, la educación
mismo ofrece un marco interesante para abordar los modos en que las no formal, la animación sociocultural, y de la más reciente perspecti-
violencias de diverso tipo se apropian de los/as jóvenes, la impronta del va socioeducativa. De manera que en el marco de proyectos, programas
sufrimiento social sobre los cuerpos juveniles y las razones por las cuales y actividades que se desarrollan en contextos comunitarios confluyen
el boxeo permite “procesar” las condiciones de exclusión y desigualdad. prácticas, representaciones y expectativas de larga data y de nuevo signo.
Son incontestables las consecuencias actuales de las políticas de la
marginación aplicadas en nuestro país hace unas décadas y las con-
Proyectos educativos, prevención secuencias de la inusitada fragmentación social resultante de las mis-
y perspectiva de derechos mas. En dicho escenario, dadas las situaciones acuciantes que aún hoy
atraviesan los sectores sociales despojados de derechos básicos y de
Entrenadores, coordinadores, profesores que se desempeñan a cargo de condiciones de vida digna, y dadas también las representaciones estig-
adolescentes y jóvenes en actividades de diverso tipo se constituyen, por matizantes que suelen recaer sobre ellos, en la valorización del deporte
lo general, en figuras de referencia para ellos/as. Más allá de las deno- así como de otras actividades y propuestas lo que prima, frecuentemen-
minaciones de los “cargos” o los puestos de trabajo y más allá de los te, es su potencial en tanto estrategia de “rescate” y “prevención” (del
rasgos particulares que adquieran las intervenciones en cada caso, la ocio, de las adicciones, de la violencia…).

20 21
En los tiempos que corren, cada vez más la mirada social señala a o con sus entrenadores o profesores, y no con la policía. Pero está claro
niños, adolescentes y jóvenes no sólo como extraños y vulnerables sino que esas prácticas pueden coexistir con la participación en proyectos so-
también -o sobre todo– como hostiles, en la medida en que se considera cioeducativos e inclusive con trayectorias escolares regulares, tal como
que están en peligro y/o representan un peligro potencial. Tan es así que señala Duschatzky (2007).
las expectativas acerca de ellos/as y de quienes se proponen intervenir Cabe enfatizar entonces que si adolescentes y jóvenes deben tener a
en su formación giran a menudo en torno a evitar o disminuir el riesgo disposición oportunidades para practicar deportes, espacios recreativos,
de que se conviertan en víctimas o victimarios de situaciones que com- condiciones adecuadas para concluir su escolaridad, propuestas artísti-
prometen la salud, la propia vida, la de los demás y la seguridad indivi- cas, comunicacionales, educación sexual, etc. es porque tienen derecho
dual y social. De modo que, aun cuando educar es otra cosa que prevenir a ello, y no porque de ese modo contribuimos a disminuir males futu-
se constata la omnipresencia y la centralidad de propósitos “preventivos” ros, riesgos individuales y peligros sociales. En función de lo expues-
sustentados en miradas estigmatizantes y discriminatorias acerca de los to hasta aquí, diremos que la prevención podrá ser corolario o incluso
jóvenes y acerca de los más pobres entre ellos (Kantor, 2008). eje y motivo en aquellas situaciones que lo justifiquen, pero de ningún
En este escenario de expectativas y argumentos, cabe insistir en que modo la razón de ser de las acciones que se emprenden en cualquier cir-
la exploración sensorio-motora, la destreza, el movimiento, la coordi- cunstancia. Como señala Efrón (1996, 40), “la voz firme del adulto y las
nación, el esfuerzo y la disciplina que implica el entrenamiento, la in- instituciones que lo respaldan, al existir y autorizar, de alguna manera
teracción en el gimnasio, etc. representan para todos y todas, y por lo previenen; y no porque muestran el camino verdadero, sino porque evi-
tanto también para quienes viven y crecen en condiciones de pobreza, tan quedar fuera del camino”.
algo más y algo diferente que una “estrategia preventiva” aplicable a la
adolescencia “en riesgo” y a la juventud “amenazada” o “amenazante”.
La promoción del deporte, del mismo modo que talleres expresivos, o Adolescencia, juventud y lugar del referente educador
murgas o proyectos de radio, valorados sobre todo y antes que nada
como herramientas para evitar conductas indeseables o para “rescatar”, La adolescencia es la primera gran reestructuración del aparato psíquico
no sólo profundiza estigmas y estereotipos –como señala Martin Cria- que consiste en dar de baja lo anterior, lo conocido, para reinventarse.
do, (2005)– sino que también parece ingenuo y suele resultar ineficaz. Conflictos, trabajos y temores mediante, la adolescencia es el momento
En línea con lo anterior, la “ocupación del tiempo libre” como estra- del estallido hormonal, de la sexualidad, de la genitalidad, del descubri-
tegia preventiva y los dispositivos pensados y gestionados en torno a miento del amor. Es el tiempo de la reapropiación del cuerpo y el espacio
ese propósito, revelan claramente la voluntad de controlar sujetos bajo subjetivo, de la resignificación de los espacios cercanos y de la apropiación
sospecha controlando su tiempo, pero es improbable que puedan dar de lo social; el comienzo del proceso emancipatorio. Es una etapa carac-
cuenta tan claramente de resultados valiosos en términos educativos terizada por la incertidumbre identitaria que habla del temor a no poder
(Nuñez, 2004; Castel, 1984). reencontrarse, a no lograr recomponer la armonía corporal perdida, a no
Ubicados en las antípodas de dichas miradas, preferimos pensar los volver a gobernar el cuerpo insubordinado, a no poder colmar la brecha
fundamentos y los propósitos de una orquesta, una escuela de boxeo que se abrió tanto dentro de ellos mismos como entre ellos y el mundo co-
o un campamento, en términos de derechos y de oportunidades, en- nocido. Todo lo cual genera extrañamiento, confusión, malestar y angus-
fatizando el valor formativo que pueden y deben tener en cualquier tia. La adolescencia duele; duele descubrirse potente y vulnerable. Duele
circunstancia. No desconocemos que hay situaciones acuciantes, y me- en el living confortable y en la vivienda precaria (Kantor, 2008 y 2015).
nos aún que hay contextos de vida precarios que precarizan las vidas En el marco de este estudio, será necesario e interesante indagar el
y condiciones de existencia que propician comportamientos extremos lugar que ocupa la práctica del boxeo, el intenso trabajo físico y corporal
y caminos de desintegración. Por supuesto que es preferible que ado- que éste implica en una etapa en que el cuerpo es el campo de batalla
lescentes y jóvenes integren bandas musicales en lugar de bandas de- de una identidad en construcción. En el contexto de violencias natura-
lictivas, que consuman cine y no sustancias peligrosas, que practiquen lizadas, la fisicalidad, la fuerza y el “aguante” (Míguez y Semán, 2002)
deportes y no actos de violencia, que confronten con sus compañeros cobran sentido como modos de construir y de expresar masculinidad

22 23
por parte de los pibes de sectores populares, fenómeno que impacta propuestas creíbles y sostenidas, por espacios que “hagan diferencia” y
también de manera creciente en las chicas de esos mismos sectores. Los que habiliten recorridos vitales. Quienes están a cargo de la Escuela de
“pibes silvestres”, según la categoría que propone el Colectivo Juguetes Boxeo de la Villa 21/24 (los responsables del proyecto, la coordinadora,
perdidos (2014), construyen identidad, entre otras cosas, en torno a esos los entrenadores) lo saben de sobra. Nos interesa indagar entonces los
valores y esas prácticas. modos en que estos adultos proponen su presencia y gestionan los inter-
Para ellos/as como para todos/as, cortar con el pasado infantil para cambios con adolescentes y jóvenes, no sólo en torno al ring sino en el
poder construir futuro implica cortar con los referentes consolidados conjunto de las actividades que contempla el proyecto.
para dar lugar a nuevas referencias y valores. Y esto coloca los adultos, De manera general, y a modo de cierre de este apartado, diremos que
los educadores, frente a la delicada ecuación continuidad / ruptura; por- las oportunidades (deportivas, artísticas u otras) tan relevantes para la
que sin ruptura no hay crecimiento y sin algo de continuidad no hay educación de adolescentes y jóvenes en general, adquieren significados
inscripción en la cultura. La adolescencia es el momento de salir; que particulares para pibes/as de los sectores sociales más postergados en la
en el tiempo implica ir hacia adelante; hacia la vida futura, y en el espa- medida en que permiten la entrada en escena de referencias simbólicas
cio, significa ir hacia afuera: conquistar nuevos territorios, tanto en el que contribuyen a no tornar únicos e inexorables los contenidos, las ex-
plano simbólico como materialmente. Cabe señalar que en condiciones pectativas y las prácticas a los cuales a menudo empuja la adversidad.
de confinamiento socioespacial como el que presenta la vida en los “ba- En el trabajo social y educativo con quienes viven y crecen en condicio-
rrios bajos” de la CABA, por caso: la Villa 21/24, la salida se dificulta nes de dificultad, con quienes construyen su identidad en “los bordes”,
tanto en el plano simbólico como materialmente. poner a disposición acompañamiento, soporte, estímulos y oportunida-
Ahora bien, en cualquier contexto, hay una especificidad de la adoles- des desprecariza la oferta identitaria. Interesará analizar de qué modos
cencia que es necesario tener presente: la adolescencia –señala Efrón y con qué alcances, con qué tensiones y proyecciones, algo de esto acon-
(1996)– es “la última oportunidad de intervenir antes de lo finalizado tece –si es que acontece– en la Escuela de Boxeo para adolescentes y
de estructurar”. La responsabilidad adulta es clave. Y es la resolución de jóvenes de Barracas.
las tareas de la adolescencia la que abre paso al tiempo de la juventud.
Un tiempo y una categoría que se hallan claramente alterados en virtud
de que las condiciones del presente han decretado la caída del paradig-
ma de la “transición” hacia la adultez (Margulis y Urresti, 1998). En la
era de las industrias culturales y de la primacía del mercado, las cuestio-
nes relativas a la construcción de identidad se vinculan cada vez más al
consumo y cada vez menos a las agencias socializadoras tradicionales.
En ese marco –señala Ehrenberg (2000)– los adultos ya no disponen
de un cheque en blanco para educar y para disciplinar, ni son referentes
o autoridades por el solo hecho de ser adultos (sean padres, entrenado-
res, docentes, etc.). Sin embargo, niños, adolescentes y jóvenes precisan
adultos (siguen precisando adultos) como soporte del proceso de cons-
trucción de identidad. Tanto en la construcción primera como en la gran
reestructuración de la adolescencia o en el momento de la emancipación
definitiva que supone la juventud, el adulto es esa referencia indispensa-
ble para crecer e incorporarse a la cultura, para apropiarse de ella y para
transformarla.
Hacerse cargo de la importancia que adquieren las figuras de referen-
cia adulta en tiempos de cambios profundos y de pasajes a “otra cosa” no
conduce sino redoblar la apuesta por presencias adultas relevantes, por

24 25
Segunda parte
Contexto y características
de la escuela de boxeo
Información básica
4. El contexto Los problemas de equipamiento urbano y de servicios son severos, así
4.1 La Villa 21/24 como los vinculados a las condiciones legales de la tenencia de la tierra.
Debido al plan de saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo está en
La Escuela de Boxeo (EB) que es objeto de este estudio está emplazada marcha o un proceso de negociación en torno a la reubicación y el reorde-
en el barrio Tres Rosas de la Villa 21/24 –una de las más grandes y más namiento de las viviendas. Las familias que tienen casas sobre el camino
pobladas de la CABA– ubicada en Barracas, al sur de la Ciudad, en la de sirga están siendo relocalizadas en otros barrios de la Ciudad, por lo
margen norte del Riachuelo. La villa está delimitada por la calle Luna, el que existen zonas con escombros donde antes había casas precarias. La
Riachuelo, la calle Iguazú, la Av. Iriarte y las vías del ferrocarril General proliferación de basurales improvisados, la inaccesibilidad al agua pota-
Belgrano. El asentamiento precario se ubica en terrenos irregulares, con ble y la falta de cloacas contribuyen a la propagación de enfermedades
tramas urbanas organizadas a partir de intrincados y angostos pasillos, ambientales: infecciones de piel y respiratorias, gastroenteritis, parasi-
donde por lo general no pueden pasar vehículos. Hay casas construidas tosis y las provocadas por mordeduras de ratas son algunas de las más
muy cerca del borde del Riachuelo, en lo que corresponde al camino de frecuentes y son numerosos los casos de niños con Plomo en sangre.
sirga, y en la zona llamada “la loma” se encuentran viviendas construidas En la villa funcionan dos Centros de Salud y Acción Comunitaria (Ce-
sobre rellenos que generaron una pendiente respecto del resto de la villa. SAC) que atienden las necesidades primarias de los habitantes: el CeSAC
Las viviendas parecieran estar siempre en construcción o en remodela- N° 8 y el CeSAC N° 35, que contempla las especialidades de Detección y
ción; aquellas cuyo material lo permite crecen en altura mientras que las Seguimiento de Desnutridos, Procreación Responsable, Adolescencia y
más precarias están construidas con chapas, madera, cartones y bolsas. Embarazo, Control del Niño Sano, Desnutrición y Promotores de Salud.
Dos Escuelas de Educación Media se hallan emplazadas en la zona, am-
Villa 21-24 NHT Zavaleta. Ciudad de Buenos Aires bas con régimen / programa de “Reingreso”: la EEM N° 6 y la EEM N°2.
La EB trabaja en forma articulada fundamentalmente con el CeSAC N°
35 y con la EEM N° 6, y también con la Parroquia de Caacupé.

4.2. El barrio Tres Rosas

Los diversos caminos posibles para acceder al barrio desde la Avenida


Vélez Sarsfield van mostrando aspectos de la relegación y la degradación
del contexto en que viven los/as adolescentes y jóvenes que participan en
la EB y del entorno en que ésta funciona: grandes galpones y edificios
abandonados, paredones, calles cerradas (una de ellas por causa de un
paredón que colocó la empresa Clarín para utilizarla como estaciona-
miento), colchones, personas viviendo en la calle, contenedores desbor-
dados de basura, vidrios y botellas, autos abandonados, postes de luz que
no funcionan… La precariedad se hace más evidente a medida que se
avanza y se torna más pronunciada en ciertos tramos del recorrido. El
ingreso al barrio –el ingreso nuestro o el de otras personas “no locales”–
suscita cuidados y recomendaciones tanto por parte de los habitantes co-
mo del equipo de TEMAS. Ciertos riesgos anunciados se advierten y se
concentran en algunos trayectos y algunas esquinas gobernadas por “los
transas”. En el barrio están presentes la Policía Federal y la Metropolita-
na, la Prefectura y la Gendarmería Nacional. Una de las problemáticas

28 29
más complejas es la comercialización y el consumo de sustancias; un te- 4.3. La población
ma que se trata con reservas y en voz baja. Todos parecen saber quiénes Quienes viven en el barrio Tres Rosas comparten cierta identidad y per-
venden qué y dónde lo hacen; en más de un caso: en zonas bien accesi- tenencia; aun cuando los límites del mismo no son muy claros existe
bles y centrales. Forman parte del paisaje del barrio: niños/as jugando en una suerte de frontera respecto de otros sectores de la villa. Al respecto
la calle, comercios precarios en los frentes de las casas, muchas personas el entrenador Diego señala: “En realidad el barrio está muy sectorizado,
caminando, autos, bicicletas y motos circulando, mercadería en la vere- siempre eso fue como una barrera a romper, es como que “sos del fondo” o “sos
da, almacenes y kioscos que asoman por ventanas pequeñas y enrejadas. de adelante” o “sos de la cancha” o “sos de Alvarado” o “sos de Zavaleta” o lo
A pocos metros de una de las esquinas “densas” que hemos menciona- que sea, o de la loma o de tierra amarilla. Tiene como varios sectores, hace 15
do, se encuentra el comedor “Amor y Paz”, una institución emblemática años atrás era muy fuerte, muy marcado, imagináte que hay gente que le ha
del barrio en la cual, además de un comedor comunitario, funcionan pegado un tiro a otra por ser de otro sector (…). La llegada de la Parroquia
numerosas propuestas y servicios: la juegoteca (dependiente del Gobier- al barrio, que puso varias capillas en diferentes lugares, unificó bastante el
no de la CABA); un consultorio odontológico (gestionado por la Funda- barrio, que más allá de que esté bastante sectorizado… como que podés tran-
ción TEMAS); la biblioteca, y en ella el Programa de Fortalecimiento sitar libremente por cualquier lado, más tranquilo”.
Educativo (a cargo de TEMAS); el plan FINES (Ministerio de Educación La mayoría de los residentes del barrio provienen de países limítrofes,
de la Nación). A través de un pasillo interno el comedor se conecta con principalmente del Paraguay y Perú, y muchos/as son oriundos de San-
el galpón donde funciona el “Circo Social del Sur” y ensaya la murga del tiago del Estero, Formosa, Misiones, Chaco y provincias de Noroeste. Para
barrio “La Pasión que Faltaba”. La salida trasera da hacia la denominada muchos de ellos el idioma guaraní es la primera o la segunda lengua4.
“canchita del fondo”. Todos estos espacios están edificados a espaldas Aun cuando –de acuerdo a todos los testimonios recogidos– en los últi-
del Riachuelo que se encuentra a 100 metros de distancia. En la misma mos años se verificó un mejoramiento en la situación social y económica
línea y a continuación de lo anterior (calle Orma al 2200, Manzana 28 de la población, la falta de trabajo, el empleo precario e informal y de ma-
casa 1) se encuentra el gimnasio donde funciona la Escuela de Boxeo. nera general las condiciones de vida desfavorables, continúan siendo una
realidad, parcialmente atenuada por cierta reactivación así como por la
implementación de programas sociales y los subsidios de diversa índole.
La situación de los/as jóvenes mayores pone de manifiesto los efectos
duraderos y difíciles de remover de la exclusión profunda y prolongada,
mientras que la situación de los más jóvenes deja ver algunos cambios
en sentido positivo5. Dando cuenta de procesos acontecidos en la histo-
ria reciente, de la presencia de la EB en el barrio y de cómo todo ello ha
marcado la crianza y la socialización de sus hijos/as, la misma madre
que cuenta que para el 2001 “ya tenía mis 10 hijos, todos chiquitos, no ha-
bía ni laburo, el padre ya nos había abandonado… y ahí conocí los comedo-
res”, relata que ahora una de las hijas estudia teclado, otro además de
hacer box estudia canto, uno no pudo terminar la escuela “ni siquiera
la de adultos”, otro necesita trabajo pero no encuentra, otro quiere ser
profesor de Educación Física y Nutricionista y una de las más grandes
quiere hacer el curso de entrenadora de box.

4. Para acceder a información estadística acerca de la composición poblacional de la Villa


21/24 puede consultarse: J. Rebón y L. Caruso “La estructura ocupacional de la pobreza:
El caso de la villa 21-24”: http://www.aset.org.ar/congresos/5/aset/pdf/rebonycaruso.pdf
y http://www.catedras.fsoc.uba.ar/salvia/lavbo/textos/7_2.htm
5. Anexo breve perfil de los adolescentes y jóvenes entrevistados/as.

30 31
Sin perjuicio de las singularidades que evidencian las biografías, las coordina el trabajo “extradeportivo” de los entrenadores, lleva a cabo el
trayectorias educativas fragmentarias o inconclusas, el desempleo juve- seguimiento de los procesos y está a cargo de actividades tales como
nil, la violencia intrafamiliar, los conflictos callejeros, las condiciones charlas, meriendas y salidas.
habitacionales deficientes, el consumo problemático de sustancias y las Santiago participa en el proyecto desde el inicio; es “casi” el autor de la
dificultades de acceso a la salud continúan siendo problemáticas que idea original de la EB, en buena medida inspirado por la lectura del libro
aparecen en el horizonte (real y/o temido) de buena parte de la población. de Loïc Wacquant (que ya hemos mencionado y que volveremos a citar
en este documento). Por su parte, Diego creció en el barrio, trabaja en la
EB desde el año 2015 y está por recibirse de Profesor de Educación Físi-
ca. Los dos son técnicos en boxeo con licencia otorgada por la Federación
Argentina de Box (FAB).
Santi y Diego organizan y conducen los entrenamientos y las “guan-
teadas” (actividades de intercambio y exhibición deportiva) y participan
activamente en el desarrollo de actividades extradeportivas que promue-
ve el proyecto. Acerca del perfil requerido para desempeñar esta función
todos señalan que, además de disponer del contenido y el saber espe-
cífico del deporte, es necesaria una sensibilidad y una impronta social
muy clara ya que la tarea –además de entrenar– supone estar atentos y
disponibles para los adolescentes y jóvenes, escuchar, generar vínculo,
trabajar en equipo. Celeste trabaja con los/as coordinadores/as de los di-
ferentes programas de TEMAS y especialmente con la EB. Participa en
diversos momentos y actividades –en el gimnasio o en otros lugares–
realizando un seguimiento de situaciones individuales y actuando de
manera directa en aquellas que requieren acompañamiento y alguna
intervención particular.

5. La Escuela de Boxeo 5.2. El gimnasio del Barracas Boxing Club


5.1. El equipo responsable
El gimnasio es la sede de la EB para adolescentes y jóvenes de Barra-
El equipo de TEMAS abocado al proyecto que dirige Paz –Directora Ge- cas, bautizada “Barracas Boxing Club” (BBC) por los/as participantes.
neral de la Fundación– está integrado por: Celeste, Trabajadora Social A partir de la iniciativa de TEMAS y con la colaboración de la Sociedad
que interviene en el conjunto de iniciativas promovidas por la Funda- General de Arquitectos, el gimnasio fue construido en el año 2008 so-
ción en el barrio; Analía, Coordinadora de la EB; y los dos entrenadores, bre la base del diseño realizado por destacados arquitectos. El local tiene
Santiago y Diego. al frente un paredón de color rojo en el que la palabra “BOX” aparece
El hecho de que quien coordina la EB sea una mujer, Licenciada en calada en la superficie de cemento; detrás del paredón hay una pared vi-
Ciencias de la Comunicación, que no sabe de boxeo, se relaciona con que driada, con lo cual se configura un pasillo estrecho de aproximadamente
los propósitos, el sentido y el funcionamiento de la escuela no se res- un metro de ancho (donde siempre hay niños/as y jóvenes mirado hacia
tringen a la enseñanza y la práctica de dicho deporte sino que se inscri- adentro). En la entrada, un mural hecho con venecitas por los/as pibes/
ben en un proyecto socioeducativo. as, está dedicado a Ayelén, una Coordinadora de la EB y referente impor-
Analía está en el gimnasio todos los días, durante todos los entrena- tante del proyecto, fallecida hace unos años.
mientos, ocupándose de asuntos grupales e individuales. Es ella quien El gimnasio es una construcción de cemento de aproximadamente 7

32 33
mts. x 10 mts., de techo alto y piso de cemento cubierto con baldosas si- 5.3. Los entrenamientos
mil goma. Cuenta con un pequeño vestuario con dos duchas y dos baños
en el primer piso. En la planta baja en torno al ring –cuadrilátero pro- Los grupos y los horarios de entrenamiento se organizan según niveles:
fesional– se encuentran los elementos necesarios para entrenar fuerza, inicial, intermedio y avanzados. Hay tres turnos por día pero estos no se
resistencia y técnica de boxeo: bolsas, banco de pesas, peras, colchonetas, corresponden estrictamente con dichas categorías ya que en algunos hora-
mancuernas, un timer, cabezales, cielo y tierra, protectores, aros, sogas; y rios los niveles se mezclan. La cantidad de asistentes a cada uno de ellos es
un gran espejo empotrado. Pueden observarse asimismo muchos otros muy variable; hemos vistos desde 8 hasta 24 jóvenes entrenando juntos.
elementos que hacen a la vida en el gimnasio y al trabajo deportivo y En los entrenamientos en el BBC la gran exigencia física es
extradeportivo que se realiza alrededor del ring: mesas, televisor, un dis- una constante; eso es tan notable como la inexistencia de que-
penser de agua, bancos largos de madera, repisa con vendas de entrena- jas o “rezongos” por parte de los asistentes, quienes muestran de mane-
miento, equipo de música, yerba, azúcar y elementos de cocina, carpetas ra contundente su disponibilidad y su aceptación a las consignas de los
y cuadernos, una suerte de locker con candado. Detrás del sector de en- profesores. Atentos, concentrados, comprometidos y a la vez distendi-
trenamiento, un espacio notablemente pequeño donde hay una computa- dos, todos realizan lo propuesto; se ayudan, se acompañan, se corrigen
dora, funciona como “oficina” de la Coordinadora; allí mismo o colgados entre ellos y se dan aliento cuando algo se hace pesado o difícil.
en las paredes se guardan también materiales de entrenamiento. Los entrenadores presentan los ejercicios explicando las razones de
Según destacan la coordinadora, los jóvenes y los documentos de TE- cada consigna, observan el desarrollo y realizan marcaciones y correc-
MAS, el equipamiento adquirido inicialmente a partir de un subsidio ciones. Se trabaja en torno a la condición física, a las habilidades motri-
otorgado por la Dirección Nacional de Juventud (DINAJU) es de prime- ces, a técnicas específicas del box, a aspectos de táctica y estrategia y al
ra calidad. El mantenimiento del edificio es un asunto problemático: los cuidado que requieren las diferentes situaciones y movimientos.
días de lluvia el agua filtra por el piso, las baldosas transpiran, abajo del
ring se llena de agua y los baños y las duchas deben clausurarse cada
tanto. La ampliación y la renovación del equipamiento dependen de los
aportes esporádicos que realiza la DINAJU. Tanto ese aspecto como el
mantenimiento del edificio están incorporados a la tarea que los/as ado-
lescentes y jóvenes realizan junto a los responsables del proyecto.
La EB a la que asisten mujeres y varones de 13 a 23 años funciona de
lunes a viernes de 16 hs. a 20.30 hs. y los sábados de 15hs. a 17 hs.

34 35
gimnasio realizando tareas vinculadas con el acompañamiento de los
adolescentes y jóvenes (cuestiones de salud, problemáticas individuales,
etc.) y con el abordaje de situaciones que se presentan en el momen-
to. Siempre, todo el tiempo, se escucha música elegida por los jóvenes,
mayormente: reggaeton. El volumen, “considerable”, no es un elemento
distractivo, al contrario: contribuye a generar un ambiente cálido y ami-
gable. Y cuando la dinámica del entrenamiento requiere estar atentos
al timer (chicharra), se baja el volumen. Permanentemente hay adoles-
centes y jóvenes –y también otras personas– entrando y saliendo del
gimnasio; van a saludar, se quedan un rato, conversan o toman mate
con Analía, “bancan” a sus amigos/as hasta el final del entrenamiento o
ayudan en algunos ejercicios y tareas de diferente tipo.
La llegada al gimnasio y el comienzo del entrenamiento transcurren
en un clima de cordialidad y distensión. Los chicos y las chicas van en-
trando de a uno, de a dos o en grupitos. Es claramente un momento de
bienvenida, de recepción y de encuentro con otros/as compañeros y con
los adultos que están a cargo de la actividad. Algunos/as se dirigen a los
Varones y mujeres comparten espacios y ejercicios, no hay diferencia vestuarios a cambiarse y a dejar sus mochilas en el cuartito donde se
por género en las propuestas. Cabe señalar que, aun cuando cada parti- guardan materiales deportivos, o en los lockers. Después se ubican en al-
cipante pertenece a alguno de los tres niveles establecidos, si alguno/a gún sector del gimnasio: diferentes grupos están cada uno “en lo suyo”
llega en el horario que no le corresponde, se lo incorpora al entrena- escuchando música, hablando con los entrenadores o con la coordinado-
miento indicándole –dentro de las posibilidades que presenta la situa- ra o en un intercambio más lúdico, con bromas y juegos corporales. En
ción– actividades correspondientes a su nivel de práctica. los casos en que la llegada coincide con la merienda del turno anterior,
Algunas características y modos de participar (de los entrenadores y algunos se incorporan a ese momento grupal y luego colaboran corrien-
de los/las pibes/as) son comunes a todos los entrenamientos, no obs- do mesas y bancos para despejar el espacio y poder entrenar. Una vez
tante lo cual se observan rasgos particulares en función del nivel y de que el lugar está listo, comienza la entrada en calor.
la cantidad asistentes al mismo. Los más avanzados o los que hace más El desarrollo del entrenamiento contempla propuestas diferenciadas
tiempo que asisten a la escuela realizan de manera más autónoma las de acuerdo al nivel (del grupo o de cada uno/a) y a los objetivos de los/
rutinas. Las secuencias predeterminadas para trabajar fuerza, resisten- as participantes (recreativo / competitivo). Por ello los ejercicios dife-
cia, velocidad de reacción, parecen ya conocidas por muchos. En este renciados y simultáneos (ya sea individuales, en parejas o en pequeños
marco, cuando los entrenadores no están o se demoran, algunos jóvenes grupos) priorizan aspectos diferentes y contemplan –o no– lo concer-
más experimentados asumen el rol de conducir los ejercicios frente a niente a los “combates” y la “subida al ring”. Cuando se trata de jóvenes
los demás. En los entrenamientos de los niveles inicial e intermedios, que retornan al espacio luego de haber dejado la práctica por un tiempo,
en cambio, debido a la menor experiencia y/o a la mayor cantidad de los entrenadores les arman una rutina especial. Tal variedad de situa-
asistentes (hemos observado hasta 24 participantes dentro del gimna- ciones, propósitos y expectativas no parece generar dificultades para lle-
sio), las intervenciones de los profesores son más marcadas y directivas. var a cabo y compartir el entrenamiento. Lo jóvenes siguen atentos las
El espacio del gimnasio es aprovechado en su totalidad; cada rincón explicaciones, el ritmo pautado de la actividad y las pausas marcadas
alberga algún aspecto del entrenamiento. Administrando tiempos y es- por los profesores; entran y salen del espacio buscando los materiales
pacios, los profesores se las ingenian para que cada asistente tenga un que necesitan (sogas, vendas, guantes, etc.), y colaboran entre ellos ya
lugar y puedan realizarse las rotaciones y los ejercicios propuestos. Du- sea porque la cooperación está prevista en el diseño de los ejercicios o
rante los entrenamientos la coordinadora de la EB está presente en el porque se genera de manera espontánea.

36 37
Llamativamente el ring, que ocupa gran parte del gimnasio, se usa
menos que el resto del espacio (en todo caso, eso es lo que hemos notado
en las observaciones de campo). Quienes “suben al ring” para realizar
ejercicios de ataque y defensa son por lo general los/as que desean sacar
la licencia de boxeador/a. En estas situaciones de “guanteo” o “práctica
de combate” se utilizan cabezales, guantes y protectores bucales. Pero
también se “sube al ring” para realizar ejercicios de fuerza o para prac-
ticar aspectos técnicos, en esos casos el cuadrilátero oficia como una
estación más en el circuito del entrenamiento.
En el momento de finalización del entrenamiento –indicado por los
profesores– se realizan ejercicios de movilidad articular y elongación.
Terminada la rutina, los participantes acomodan los elementos para
dejar el gimnasio ordenando antes de retirarse (o para prepararlo para
merendar, según el horario de que se trate).

5.4. Las “guanteadas”

Las “guanteadas” o “guanteos” son encuentros deportivos donde se ejer-


cita y se exhibe el boxeo; forman parte del entrenamiento para ir adqui-
riendo las destrezas necesarias de combate con un oponente, arriba del
ring y con los guantes puestos. La EB de Barracas organiza “guanteadas”
que se realizan en su local o en la “canchita del fondo”, y también parti- del gimnasio y colocarlo en la calle o en la canchita). Cuando se trata de
cipa en las que organizan otros gimnasios. Los/as participantes no ne- peleas entre federados, con puntaje, el reglamento obliga a contar con
cesariamente están federados ni se proponen sacar la licencia, pero eso jueces de la FAB, ambulancia y médico.
no significa que “cualquiera” pueda guantear. Para muchos/as jóvenes Quienes participan del “guanteo” se vendan las manos para luego po-
del BBC –no para todos/as– “subirse al ring” es un momento muy es- nerse los guantes y ajustarlos (encintarlos) a la muñeca; usan protecto-
perado, casi una meta. Para lograrlo se requiere entrenar regularmente, res bucales y cabezales, y hay quienes se protegen también los genitales.
practicar mucho la técnica solo frente al espejo, con el saco, haciendo Los combates se llevan a cabo entre participantes de peso semejante.
ejercicios de esquivas y sombra en parejas, y contar con el apto médico Los entrenadores Diego y Santi (sólo ellos) supervisan los pesos y acuer-
actualizado. Es por eso que –entre quienes desean “guantear”– acceder dan las peleas en que inscriben a los miembros del BBC a partir de la
a ello implica de alguna manera un reconocimiento al esfuerzo y a la evaluación de una serie de condiciones según las cuales determinan
persistencia en el entrenamiento. quiénes pueden subirse al ring y quiénes no. En virtud de los cuidados
En tanto evento importante promovido por la EB, las “guanteadas” se relativos al peso, al género y a experiencias equivalentes, en ocasiones,
ajustan a una serie de normas que regulan lo deportivo y los componen- llegado el momento, algunos/as jóvenes que asisten al evento con expec-
tes competitivos que poseen, dentro de una perspectiva de cuidado. Por tativas, no pueden “guantear” porque no tiene con quién hacerlo.
otra parte, hay una cierta mística alrededor de las “guanteadas”; éstas se Una característica (o una práctica permitida) es que los entrenadores
asocian a actividades y a climas que, más allá de lo deportivo, encuen- dan indicaciones desde las esquinas del ring acerca de cómo moverse
tran sentido en el proyecto socioeducativo que enmarca al BBC. o con qué mano pegar. En diferentes “guanteadas” hemos observado
Los encuentros pueden desarrollarse arriba del ring o en un espacio distintas modalidades en cuanto a la intervención de los entrenadores,
cuadrilátero delimitado que funge de ring (cuando se hace difícil sacarlo la cantidad de rounds, la duración total de la pelea y la finalización del

38 39
combate y el saludo. La lógica o el propósito de exhibición y entrena- disfrutan estando en grupo, permaneciendo sentados o acostados en la
miento se hace evidente en las “guanteadas” sin licencia: no hay ganado- vereda, comprando o vendiendo panchos, interactuando celulares en
res y, según hemos observado, pueden boxear varones con mujeres. En mano o conversando con la coordinadora.
estos casos, los varones practican defensa, las chicas practican la técnica Cada fin de año la EB realiza un “festival de cierre” por lo general en
del ataque y el golpe, y el entrenador interviene de manera más activa. torno a “guanteadas”, y en algunas ocasiones junto a otras iniciativas ar-
Cabe subrayar que –a diferencia de cómo proceden otras escuelas de bo- tísticas y culturales que se desarrollan en forma simultánea o sucesiva.
xeo– el BBC no admite la “hinchada” o “el arengue” a favor del partici- No fue el caso del cierre que hemos presenciado durante este estudio.
pante propio, y menos aún que se lo aliente apelando a la agresión hacia Sin embargo, y a pesar también de los pocos familiares presentes y de
el contrincante. Ante el incumplimiento de esta regla, en una ocasión los escasos contrincantes disponibles para concretar los “guanteos” en
hemos visto a uno de los entrenadores intervenir desde el ring para fre- esa ocasión, los responsables de la EB sostenían las expectativas deposi-
nar la situación, solicitando silencio para poder continuar. tadas en este evento. Mientras tanto, los jóvenes administraban el quios-
Durante el desarrollo de las “guanteadas”, los adultos responsables de la co y el dinero, y circulaban cómodamente por el espacio a la espera del
EB se distribuyen tareas de manera de garantizar no sólo lo deportivo sino cierre de la jornada. Hubo luego momentos emotivos en torno a la pro-
también cuestiones tales como la dinámica general del evento, la relación yección de un video –producido por los adultos– que mostraba escenas
con los que entran y salen, hacer anuncios o conducir por micrófono, re- grupales, más tarde la entrega de regalos y premios a quienes fueron
gistrar de diferentes maneras los momentos claves, etc. Con posterioridad elegidos los “mejores compañeros” del año, y la toma de fotografías de
a una de las exhibiciones que hemos presenciado, los entrenadores plan- todos/as juntos subidos al ring.
tearon la realización de una autoevaluación por parte de los/as participan-
tes: les entregaron por escrito diferentes ítems (técnica, defensa, etc.) para
que cada uno/a calificara su rendimiento colocándose un puntaje de 1 a
10, cosa que hicieron durante la merienda que siguió al “guanteo”.
Como hemos anticipado, lo que sucede en las “guanteadas” trasciende
lo que sucede sobre el ring. La dimensión social de estos encuentros y
lo que se espera de ellos, se pone de manifiesto en la convocatoria y la
presencia de familiares, amigos y vecinos, así como en la organización
de actividades tales como la venta de comida y bebida, de indumentaria
de boxeo (shorts, gorras, vendas, camisetas), rifas y entrega de premios.
Tan es así que, como hemos observado en más de una ocasión, cuando
las expectativas relacionadas con lo deportivo no pueden cumplirse to-
talmente (porque alguna escuela de boxeo no asiste al encuentro, o por-
que no hay contrincantes en similares condiciones a los/as que estaban
preparados/as para “guantear”), el evento se justifica y se percibe que
vale por sí mismo como espacio de intercambio, de acompañamiento a
quienes exhiben sus avances y como incentivo para seguir entrenando.
Cuando se trata de “guanteadas” organizadas por el BBC en su gimna-
sio, éstas constituyen, además, una instancia para la visibilización del
proyecto en el barrio. Es claro que para los/as jóvenes que no suben al
ring, además de acompañar y apoyar a quienes sí lo hacen, lo que vale
por sí mismo es la oportunidad de un encuentro en un ámbito que con-
sideran propio (el BBC) o en otros espacios a los que se trasladan. Con
cierta independencia del interés que les genere el encuentro deportivo,

40 41
Tercera parte
Prácticas y significados
Descripción analítica
6. Prácticas y estrategias clave puestas material y simbólico que ofrece la EB, y el reconocimiento o la legitimi-
en juego por los responsables del proyecto dad que acompañan esas diferentes formas de circular y de pertenecer,
no constituyen necesariamente un rasgo habitual, propiciado o admiti-
La primera parte de la descripción analítica aborda las prácticas y las es- do en proyectos educativos o deportivos con adolescentes y jóvenes. Sí
trategias desplegadas en el trabajo con los/as adolescentes y jóvenes que son un rasgo habitual, en cambio, en las prácticas educativas y sociales
participan en la EB, procurando dar cuenta de los fundamentos, los sen- con chicos/as y adolescentes de sectores populares (ver al respecto Fin-
tidos y los efectos de las mismas. Hemos definido cuatro ejes para el de- negan, 2011). De modo que lo que en otros contextos podría percibirse
sarrollo subsiguiente dado que, de acuerdo a nuestro análisis, en ellos se como una anomalía o un problema, en este caso es ejercido, ofrecido y
concentran las acciones y los significados más relevantes; estos son: aper- percibido como un valor. Acerca de la apertura se habla, se argumenta,
tura y disponibilidad; seguimiento y acompañamiento; la grupalidad, las se la ejemplifica, se la sostiene y se la valora. Por ello, y por lo que hemos
normas y la palabra; y multiplicación y diversificación de las propuestas. podido observar, resulta difícil imaginar la dinámica y los resultados de
la EB sin esta característica / estrategia. En cierto sentido se la ha adop-
tado como un axioma que invierte las condiciones de exclusión: “acá
6.1. Apertura y disponibilidad pueden venir, acá tienen lugar, acá pueden estar, acá los recibimos…”. (Re-
tomaremos estas premisas más adelante cuando abordemos los signifi-
“Apertura” remite aquí a un principio de acogida y hospitalidad que se cados que tiene el BBC para los/as adolescentes y jóvenes participantes).
expresa en la reiterada frase: “no decimos que no a nadie”. De acuerdo a El testimonio de una madre (Carla) da entrada a otros elementos que
sus diferentes puntos de vista, sus vivencias y sus experiencias, la men- refuerzan la idea de que la EB se prohíbe a sí misma el “derecho de ad-
cionan casi todos los entrevistados. Jóvenes, madres, coordinadores, misión”: “No se le cierra la puerta a nadie, ¡ojo! ahí entra cualquier clase de
entrenadores, transmiten con claridad lo que parece ser una clave del chicos, son todos bienvenidos”. La coordinadora de la EB, Analía, contri-
trabajo en el marco del proyecto. “Acá nunca te van a cerrar las puertas, buye a explicar esa referencia a “cualquier clase de chicos” cuando alude
es así –dice Elías–. Yo hasta ahora, hasta el día de hoy, no vi a nadie que le a determinadas situaciones que se presentan a menudo: “en situación de
hayan cerrado las puertas, que no lo hayan dejado entrenar. No. Es un lugar consumo problema, lo más importante para nosotros es que trate de estar en
re-abierto para todo el mundo”. el espacio, porque horas que está en el espacio son horas que no está consu-
Por los motivos que se enuncian y por los sentidos que conlleva, aper- miendo. En general son pibes que entrenan poco y hablan mucho. No pueden
tura “suena” a antídoto, a una forma de neutralizar las clausuras que entrenar, pero algo hacen. (…) Chicos que han ido muy drogados a la escuela
abundan en la vida de los adolescentes y jóvenes del barrio. Tal como he- de boxeo… puede ser nevado, paco, mucho clonazepan”.
mos podido escuchar y observar, la EB se propone recibir y albergar, no La idea de que el gimnasio y el conjunto de propuestas que incluye
solamente (para) enseñar a boxear. Así, el gimnasio, en tanto ámbito o el proyecto “compiten” con la calle reaparece cuando uno de los entre-
espacio físico de referencia del proyecto, es una suerte de casa abierta a nadores establece diferencias y similitudes entre el BBC y otros gim-
y para los chicos y las chicas de la zona. La alusión a las puertas abiertas, nasios: “…el objetivo –dice Santi– es completamente diferente (…) no los
a las entradas y salidas permanentes y al mate siempre listo reaparecen entrenamos para ser campeones ni para competir, están adentro del gimna-
en las entrevistas tanto como en las observaciones de campo. sio para que no estén en la calle”. Y aunque no se dan por satisfechos
Como causa o como consecuencia de la apertura existen muchas for- simplemente con que estén, aunque despliegan estrategias y proyectos
mas de participar en la EB o de estar en su “zona de influencia”. Están para enriquecer ese “estar”, la idea de que es mejor que estén (como sea,
los que ya no entrenan pero siguen yendo, los que nunca entrenaron para lo que sea, pero que estén) está muy presente en el discurso de los
pero siempre andan por ahí, los que cada tanto vuelven, los más chi- responsables del proyecto.
cos que “participan” desde el lado de afuera (esperando tener la edad El discurso centrado en “sacar a los pibes de la calle” es conocido y co-
mínima para entrenar), los que van “sólo a transpirar”, los que quieren rriente; es casi un lugar común que cabe problematizar en virtud de los
aprender a boxear y los que, además, quieren “subirse al ring”, los que significados que frecuentemente adquiere. Se trata de un discurso que
aspiran a sacar la licencia… Las múltiples maneras de habitar el espacio suele sustentarse, por un lado, en el estigma y/o en la apropiación del

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estigma que recae sobre los territorios de la periferia social (Kessler) y, anterior, fallecida) es clara y recurrente. Elías recuerda que “cuando es-
por otro lado, en la culpabilización o la victimización de los/as pibes/as. taba Aye, estaba todo el tiempo internada acá en la oficina o con el teléfono
Poner en cuestión esta mirada que encorseta la función de los adultos hablando con alguien, con un pibe porque estaba en cana, o con un pibe por-
dentro de lo que hemos denominado el “mandato preventivo” (Kantor, que se mandó una cagada, sacando de cagadas a todos los pibes. (…) O sea,
2008) no supone negar la existencia de problemas, riesgos o situacio- este gimnasio, que no tiene ningún gimnasio, es eso: que aparte de ayudarte
nes a prevenir, sino discutir la mirada políticamente sesgada, injusta e en el lado de digamos de entrenamiento y esas cosas, es un lugar donde vos
hipócrita con la cual habitualmente se los aborda (Martín Criado, 2005). podés ir a buscar un refugio. Nerina aporta su mirada: “Yo ví de entrada
Numerosos estudios muestran que las prácticas y las experiencias que como acá se dedicaban a que los chicos no sufran, o sufran menos, [¿y cómo,
suelen engendrarse bajo dicho mandato empobrecen los vínculos y o porque te diste cuenta de eso?] … por cómo te escuchan, porque les in-
la tarea educativa, y a menudo estigmatizan más de lo que previenen teresa que los chicos estén bien, por el acompañamiento. El trabajo de ellos
(Nuñez, 2003). Los responsables del proyecto que analizamos procuran es que los chicos se sientan con cariño. Es poner amor donde no hay amor.
tomar distancia de dicha perspectiva; inclusive lamentan que algunas Yo hace 27 años que vivo en este barrio, ¿sabés las cosas que sé de acá? A mí
familias apoyen la participación de sus hijos/as en el BBC debido al po- Ayelén me abrió las puertas. Cuando yo entré acá a la escuela, Ayelén Merlo
tencial de “rescate” que le atribuyen. Es notable, sin embargo, la recu- me acompañaba siempre. Mi vida era muy a los golpes. Ella me daba paz,
rrencia de argumentos, expresiones y ejemplos que parecen refrendarla. me buscaba psicólogo, me calmaba. Yo llegaba acá llorando sin parar; con
Ello habilita a postular la eficacia que sobre el discurso tiene la opera- los mocos colgando venía yo”.
ción política y cultural que ha contribuido a instalar dicha mirada y di- La disponibilidad es y brinda refugio; y en tanto rasgo evidente de las
cho mandato en los más variados ámbitos de trabajo con adolescentes prácticas desplegadas por los responsables del proyecto, junto a atender
y jóvenes, y en particular en el trabajo con los/as jóvenes de los barrios. “lo que venga”, remite muy especialmente a estar atentos a descubrir –
En cualquier caso, en la EB –a diferencia de lo que suele suceder para abordar– cuestiones de muy diversa índole.
cuando se adopta en forma mecánica y acrítica la perspectiva preven- Refiriéndose a Analía, la actual coordinadora, y a Paz, la responsable de
tivista– la apertura es también de los adultos al rico y complejo mundo TEMAS, Carla tiene claro que “no hace falta tampoco estar inscripto en la
de los/as pibes/as. Así se refiere Diego, uno de los entrenadores, a esta escuela de boxeo como para recurrir a Analía, uno sabe que vos vas, la buscás
otra acepción o dimensión de la apertura: “…esto de poder entrar, que ellos y ella te atiende igual por más que vos no estés en la escuela misma de boxeo.
mismos te van abriendo las puertas que por ahí, vos ves las caras… ‘¿qué te Y Paz me ha ayudado con el tema de mi hijo, ha hecho escritos para que yo
pasó?’, ‘no, y hoy en la escuela… bla, bla, bla’ y te empiezan a contar cosas le presente a un abogado (…). Los padres se sientan contenidos, por eso te digo
de ellos, de la escuela, de la familia de todo y ya es otro vínculo el que se yo que no me imagino no estar la escuela de boxeo, eso no me lo imagino”.
forma…”. Es decir: no se trata solamente de que los/as pibes/as entren o Los testimonios y las observaciones dan cuenta de que el escenario de la
de que estén, toda vez que la intención –para nada secundaria– es abrir tarea de los responsables del proyecto no se limita al gimnasio sino que
otras puertas que las puertas materiales del gimnasio. Así, de la mano se proyecta hacia el barrio, y que los destinatarios no son exclusivamente
de esta doble acepción de la apertura, emerge la disponibilidad también los/as adolescentes y jóvenes sino también –de alguna manera– las fa-
como posición-cualidad-estilo que deviene estrategia. Esto es, la dispo- milias y la comunidad toda. En línea con esa sensación, Leti, la referente
nibilidad no habla tanto (o no habla sólo) de una manera de ser de los barrial histórica y actual, dice estar “súper agradecida a los profesionales y
responsables de la EB cuanto de un enfoque que impregna las prácticas a los técnicos y la gente que ayuda en el proyecto de boxeo, que dejan todo pa-
de los mismos, sobre todo de quien ocupa el lugar de la coordinación, ra ir al barrio y cumplir sus proyectos, a pesar del calor o de la lluvia”. “Si vos
por su disponibilidad para hablar, para escuchar, para aconsejar, y para vieras –añade por su parte Carla– la forma en que la buscan a Ana cuando
salir corriendo a buscar a alguien o a averiguar algo o a comprar algo o a tienen un problema o necesitan solamente que los escuchen porque tienen un
resolver algo o a… Durante el trabajo de campo lo hemos constatado en conflicto en la casa o que tienen una angustia, un problema personal y no
numerosas ocasiones a propósito de las cuestiones más diversas. saben con quién hablarlo y la buscan a ella y lloran con ella (…)”.
En relación con dicha modalidad, para los/as jóvenes más “anti- Las escenas relatadas por Carla –así como otras tantas– nos condu-
guos”, la referencia y la evocación a la figura de Ayelén (la coordinadora cen al análisis que realiza Elizabeth Bautier (1995) acerca del tipo de

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prácticas que desarrollan quienes trabajan con sectores populares en ‘¿y? ¿qué hacemos?’. Lo principal es la escucha, porque es parte del proceso
territorios complejos. Esta autora subraya la necesidad de lidiar per- y es sanador, pero con la escucha también hay que hacer algo, porque si nos
manentemente con lo urgente, lo necesario, lo contingente, lo grave, lo quedamos sólo con la escucha… Vos venís, me contás, yo te escucho, te puedo
aleatorio, lo imprevisible… sin disponer de marcos conceptuales y de abrazar, te puedo contener, puedo preguntarte cómo estás y no pasa nada
campos profesionales de referencia sólidos, suficientes, legítimos y legi- más”. Santi, añade: “yo no soy psicólogo (…) yo lo único que puedo hacer
timados, que puedan orientar con claridad las acciones y las respuestas. es escucharlo y ahí derivarlo a otra parte de la Fundación, pero yo no estoy
En estas prácticas existe un límite muy fino y difuso entre la identidad indagando, yo creo que eso por ahí se percibe (…) el vínculo es genuino; es
profesional y la identidad personal; en virtud de ello y de los diferentes profe, alumno y un vínculo. Ese es mi rol”. La disponibilidad a la escucha
modos en que esta situación es resuelta, Bautier propone tres figuras de no implica que ésta constituya un punto de llegada de la intervención,
profesionales: los “equilibrados”, los “desequilibrados” y los “equilibris- por lo que las respuestas disponibles y el “equilibrio” no dejan de ser un
tas”. Ese límite fino y difuso exige realizar permanentemente un trabajo reto de proporciones.
de implicación y des-implicación personal. “Eso no significa –explica La experiencia que transmiten Celeste y Santiago remite al análisis que
Diker (2012)– que sea una práctica que se pueda realizar des-afectiva- realiza Graciela Frigerio cuando señala que “la escucha”, en ciertas oca-
mente o des-implicadamente. Quiere decir que, de alguna manera, es en- siones, representa más algo que gratifica o que tranquiliza al que escucha
tre el polo de la afectivización del trabajo y el de la despersonalización que algo necesario y productivo para el que habla. En ese sentido, es per-
del trabajo en donde se ubica el “equilibrista””. En sintonía con estos tinente señalar que es el sostenimiento de vínculos formativos y producti-
conceptos y desde otro ángulo del asunto, cuando el Colectivo Juguetes vos más que la mera escucha lo que permite construir el lugar del adulto
perdidos (2014: 93) reflexiona acerca de los avatares del trabajo de los en términos de soporte y de contención real, ya que la sola escucha (la es-
equipos técnicos en los barrios relegados, señala: “por los cuerpos de ta- cucha siempre, la escucha sin criterio y sin límite) puede constituir más
lleristas y docentes pasan más energías e intensidad de las que pueden un problema que una solución para quienes no pueden parar de contar el
‘soportar’. El diferencial de energía es un dato más del laburo cotidia- sufrimiento mientras no encuentran (otros) caminos para salir de él.
no”. Algo de este orden transmite Analía cuando cuenta que prevé re- En línea con lo anterior, y desde otra arista del problema, diremos
cursos y estrategias para protegerse ella: “Lo sostengo bien –dice– porque que la disponibilidad se presenta como correlato de la apertura cuando
hago un montón de cosas por afuera que me sostienen”. ésta (la apertura) no es pensada solamente como garantía negativa, es
En dicho escenario, en la EB, la disponibilidad implica también prever decir, como ausencia de exclusiones para el ingreso (Rinesi, 2015). La
y ofrecer diferentes canales y referencias. Diego relata que cuando “las otra dimensión de la apertura, la que permite que ésta tenga destino y
chicas necesitan hablar algo más femenino, por ahí van y se dirigen a Ana- sentido, es que los adultos se constituyan en verdaderos garantes del de-
lía; o los chicos por ahí me ven a mí como más joven y me cuentan algo a mí recho que tienen los/as adolescentes y jóvenes (del derecho que les asis-
o por ahí prefieren preguntársela a Santi, y entonces es como que pueden ir te, que deberían tener) a contar con espacios y referentes significativos
eligiendo”. En cualquier caso, las referencias a situaciones complicadas para su educación. En el caso de la EB, el espacio ofrecido prescinde de
son aquí moneda corriente. proscripciones pero –como analizaremos más adelante– no prescinde
Durante el transcurso de este estudio hubo pocas visitas al gimnasio, de prescripciones (Schvarstein, 1989). Subrayamos de este modo que –
reuniones, entrevistas o intercambios informales en que no hayamos entre otras prácticas y experiencias– es la construcción de legalidades,
escuchado aludir a innumerables situaciones terribles, difíciles, peligro- la participación de los jóvenes en ese proceso y el papel que en el mismo
sas, ocurridas recientemente, o bien, temidas. Todas ellas constituyen desempeñan los adultos lo que da sentido (educativo) a la ausencia de
marcas en la subjetividad de los/as pibes/as e interpelan las prácticas de exclusiones para el ingreso al gimnasio.
los responsables de la EB: En otro orden de cosas, y a modo de cierre de este punto, diremos que
“La escucha: genial –dice Celeste–, a veces hay mucho tiempo de escu- apertura y disponibilidad in extremis suelen provocar cierto desborde,
cha hasta pensar qué… De hecho yo el otro día hablaba con los promotores con lo cual, paradójicamente, estos dos pilares de la intervención entran
que hacen sus prácticas en los talleres donde muchas veces salen situaciones en tensión con otra de las premisas del proyecto: el encuadre, el encua-
complejas, de violencia, de abuso, y bueno… ellos, sin formación [preguntan] dre claro que se intenta respetar y hacer respetar. Pero cabe postular

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también que no es sino el (particular) encuadre que sostiene TEMAS individual y lo grupal condujo a TEMAS a la revisión y la modificación
–al igual que numerosas organizaciones y proyectos (ver Finnegan, de formas de trabajo. En relación con este asunto se registra uno de los
2011)– lo que habilita y contempla todo tipo de cambios sobre la mar- cambios claros en las estrategias, sobre todo en lo que respecta a las ta-
cha, la consideración permanente de situaciones particulares y las cons- reas de la coordinación: del acento puesto en el seguimiento individual
tantes alteraciones, adecuaciones e improvisaciones. En ese sentido, los al acento puesto en los procesos grupales. “Al principio… mucho segui-
desbordes que atraviesan el trabajo –tanto en este caso como en buena miento individual, y se me escapaba la parte grupal. Demasiado. No sólo
parte de los proyectos de naturaleza similar– se muestran no tanto co- por la escuela de boxeo, sino por mi persona: no iba a durar” (dice Analía).
mo “dificultades” cuanto como rasgo intrínseco de las propuestas que Los testimonios de los responsables del proyecto dan cuenta de que no
giran en torno a prácticas de apertura y la disponibilidad. se trató solamente de la dificultad de sostener el estricto seguimiento
“caso por caso” dada la cantidad, la variedad y la complejidad de las si-
tuaciones que se presentan a diario, también o principalmente, se trató
6.2. Seguimiento y acompañamiento de una opción por reforzar o por priorizar el trabajo en torno a lo gru-
pal. El reconocimiento de la grupalidad como dimensión importante del
El seguimiento de procesos individuales y grupales constituye uno de proyecto es un aspecto que no necesariamente adquiere tal centralidad
los ejes del trabajo que realiza el equipo del proyecto. El seguimiento en abordajes meramente asistenciales o en propuestas ancladas exclusi-
de los aprendizajes relacionados con el boxeo ocupa por cierto un lugar vamente en la enseñanza y la práctica de un deporte6.
relevante. Los entrenadores llevan una “carpeta deportiva, con una ficha Aun así –señala Analía– TEMAS no abandona el seguimiento “más
de cada uno, no de todos, pero sí por ahí de los chicos que vienen con mayor personalizado, al pie del cañón y poniendo el cuerpo. Los jueves cuando nos
continuidad, que sostienen más el entrenamiento y que por ahí están que- reunimos con Celeste –la Trabajadora Social– trabajamos en un archivo
riendo avanzar un poco más…” –comenta Diego–. “Al ser 22 se complica con fichas individuales de los chicos, con datos informativos (escolarización,
(…) pero tratás de hacerlo: ‘mirá, ¿mañana a qué hora te podés venir? ¿podés edad, apto médico, cuando empezó boxeo), cómo se comporta en el espacio
venir a las cuatro para corregir algunas cosas?’”. Pero no es solamente ni de boxeo, vínculos familiares… Con esa información surge del equipo para
principalmente lo deportivo el foco de las estrategias que abordamos en dónde ir, qué proponer y qué hacer. Todo lo cual se retoma en la reunión men-
este apartado. En la visión de los responsables de la EB tanto como en sual que realiza el equipo de TEMAS”. Queda claro, en todo caso, que las
la del conjunto de los entrevistados, acompañar y facilitar los controles prácticas de seguimiento y acompañamiento no están necesariamente
médicos, la trayectoria escolar, la buena alimentación, las búsquedas la- asociadas al trabajo “cuerpo a cuerpo”, pero sí a la mirada atenta para ad-
borales, etc. constituyen aspectos centrales de la intervención. vertir –llegado el caso– la necesidad de intervenir y de qué modo hacer-
La importancia (o la centralidad) que se le atribuye al trabajo en torno lo, sobre la base del registro de información que se considera relevante.
a esos y otros aspectos de la vida de los/as adolescentes y jóvenes queda Numerosas acciones llevadas a cabo por los referentes de la EB giran
reflejada en la referencia al box como “excusa”; en palabras del entrena- en torno al tema/problema de la búsqueda de trabajo: orientan y asisten
dor Santi: “desde la Fundación TEMAS, el proyecto fue presentado como a los/as jóvenes para confeccionar sus CV, para cargar páginas webs labo-
una excusa; el deporte, para lograr hacer otro montón de cosas: que los chicos rales, y están pendientes de las oportunidades que puedan aparecer en el
vayan al médico, que vayan al dentista, no sé… que hablen con la coordi- marco de programas específicos llevados a cabo por el gobierno de la Na-
nadora si tienen algún problema específico en la casa; va más por ese lado ción y de la Ciudad. Y otras tantas acciones se implementan en relación
que los otros gimnasios no van”. Con la mira puesta en el mejoramiento con la escolaridad, apoyándolos/as para que continúen, retomen o fina-
de las condiciones de vida de los chicos y las chicas TEMAS propicia licen el nivel secundario, inclusive en algunos casos en que los jóvenes
(y se inscribe en) un entramado de instancias gubernamentales y no dejan de asistir al BBC. Cabe señalar que desde los inicios de la experien-
gubernamentales. La tarea supone necesariamente el trabajo en red con cia, a diferencia de lo que proponen algunos proyectos socioeducativos
las instituciones activas en el barrio tales como el CeSAC, las escuelas
secundarias, la parroquia y el comedor.
En este marco, manejar y resolver la tensión que se presenta entre lo 6. Desarrollaremos este tema en el apartado 6.3: “La grupalidad, las normas y la palabra”.

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se presentan como asuntos frecuentes y severos “si está muy jodido el
caso, si no tiene familia, recurro a Paz y a Celeste para ver si se puede ha-
cer algún tipo de tratamiento ambulatorio o internación” –dice Analía–.
Mientras que el Dr. Daniel apunta: “Nosotros vemos que esta población, si
no fuera por la institución –quiero decir: la escuela de box, TEMAS–… tal
vez estos chicos no llegan acá por su cuenta, o traídos por sus familias. (…).
Una vez que TEMAS los adopta hay una continuidad; entonces lo que hoy
en la primera consulta fue un problema, dentro de dos años que es la tercera,
ya no lo es porque se fue solucionando eso, si se pudo solucionar. Es como que
hay un seguimiento, por ahí una vez por mes o una vez por año, o dos veces
por año, o algo agudo está pasando…”
Es sabido que el acercamiento espontáneo de los/as adolescentes a los
centros de salud es un asunto problemático siempre, y también que la
situación se agudiza o adquiere características particulares en contex-
tos en que las difíciles condiciones de vida suponen a menudo también
la fragilidad de la intervención familiar. En este marco, la expresión
“TEMAS los adopta” utilizada por el médico es elocuente en cuanto al
significado que él le atribuye a la intervención de la Fundación. Pero
aun cuando la familia sí está presente dicha intervención representa un
aporte importante; Isabel desde su lugar de madre, reconoce: “A mí ali-
via muchísimo el tema de que los acompañan a los controles médicos, que se
les facilite esta cosa de ir… Que los chicos por estar en la Fundación tengan
y programas o beneficios gubernamentales, TEMAS no planteó la “cláu- los nutricionistas ahí a disposición de ellos, que los estén controlando cómo
sula” o la “contraprestación” de que para participar en la EB los/as ado- están alimentados, que les enseñen cómo tienen que comer, todas esas cosas
lescentes y jóvenes debían estar escolarizados. Al contrario: convocó y importantes para un chico que se está desarrollando”.
albergó a quienes habían dejado de cursar el secundario o no lo habían Los efectos de las estrategias que despliega el proyecto en esta materia
comenzado y se abocó al trabajo de revincularlos con la escuela. se ponen en evidencia también a través de las consecuencias que aca-
Ahora bien, de acuerdo a lo que surge de los relatos de los/as entrevista- rrea el hecho de dejar de estar en contacto cotidiano con la EB; al respec-
dos/as y de lo que se observa como práctica que ocupa tiempo y concentra to es elocuente el testimonio de Nerina: “Desde que dejé de entrenar, y…
esfuerzos, lo referido a la salud es particularmente relevante. “Esto que te todo me cuesta un poco más (…) todo se hace difícil; los controles, por ejem-
nombraba de la salud –señala Diego– es uno de los objetivos; que los chicos se plo, los controles médicos. Antes la espalda la tenía mejor que ahora; y… me
hagan un chequeo anual para ver si están aptos físicamente, este seguimiento controlaba. Ellos te acompañan, te exigen, te hacen que estés atento a eso”.
de la salud también por ahí con chicos que tienen determinado problema… se Cabe subrayar en este punto que buena parte del tiempo de la reunión
les saca turno con traumatología o con alguna otra especialidad. Hay chicos mensual del equipo de responsables de la EB que hemos presenciado
que por ahí tienen problemas en la mano o lo que sea o problemas de nutri- estuvo destinada a repasar qué jóvenes tenían o no el apto físico, quie-
ción (…) y es un poco también esto de usar al deporte como excusa perfecta, nes no habían ido al turno de control que se les había sacado o a quiénes
‘a ver… ¿vos querés subir al ring? Y… entonces…’” Se advierte aquí algo de lo había que acompañar a la consulta; a decidir si ponían o no un cartel
propio de un proyecto social que aborda la salud –en tanto requisito para con los estudios que debía hacerse cada uno/a; a intercambiar sobre el
entrenar y para “guantear”– dentro de la perspectiva de la facilitación del estado de la situación de un adolescente con problemas de obesidad; a
acceso a servicios, instituciones y derechos. recordarse que debían estar atentos a la evolución de la sinusitis de otro
En este marco, el consumo problemático de sustancias y las adicciones (que en su casa pasa mucho frío y no tiene buena ventilación), y otras

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situaciones semejantes. “¡Para Sergio una espirometría es fundamental; invasivos…a estos es difícil ponerles límites para recortar y preservar el espacio
es asmático! “¡Fernando está gordo de verdad! Hay que verle la presión; yo de los pibes; y están los que ‘ni idea’ de qué hacen sus hijos, ni saben a dónde
hoy traje el tensiómetro” –dijo Santi–. “Además habría que mandarlo a que se van los pibes cuando se van con nosotros, inclusive cuando hacemos salidas
se haga estudios para descartar problemas hormonales” –agregó Analía–. más lejos”. El testimonio de Paz remite a una problemática habitual y cre-
Así, el seguimiento y el acompañamiento no se restringen al regis- ciente en el ámbito educativo: tanto en las instituciones escolares como
tro y/o la derivación sino que implican “tomar cartas en el asunto” y en espacios no formales, expresiones tales como “no se hacen cargo”, “no
trabajar con otros. Para el médico también se trata de “un laburo de ida nos prestan atención”, etc. reflejan la atribución cruzada de (des)respon-
y vuelta” entre el CeSAC y TEMAS; y destaca que, en ese marco, es im- sabilidades respecto al acompañamiento de los/as participantes (alum-
portante respetar la confidencialidad. “Si hay algo puntualmente que TE- nos/as, hijos/as). Asunto que se agudiza, por cierto, cuando se trata de
MAS tiene que saber de la entrevista, primero le pregunto al pibe si lo puedo adolescentes, y que conlleva razones y significados particulares cuando
hablar, si me dice que no, cagué, pero si me dice que sí, le digo ‘bueno ¿puedo los padres y las madres (so)portan el plus de desgaste que generan las
hablarlo adelante tuyo con Analía o querés salir?’, y en general la respuesta condiciones en que viven.
es ‘no, no… ¡adelante mío!’. (…) A mí me ha pasado, cosas que por ahí se En otro orden de cosas, también dando cuentas de tensiones y dificul-
abren acá,y allá [se refiere al gimnasio] no se hablan, entonces por ahí la tades que conlleva el acompañamiento, cabe señalar las complejidades
cosa es: ‘Analía, fijate que este pibe abrió esto acá…’. implicadas en la articulación con organizaciones e instituciones de dis-
El Dr. Daniel no tiene dudas acerca de la evaluación que realizan los tinto tipo y de dependencia diversa, en las que se desempeñan técnicos
responsables del proyecto; la autoridad que les atribuye es contundente: o profesionales con quienes no siempre se comparten miradas acerca de
“Cuando Paz me llama por alguien (…), yo sé que si a Paz le importa, ese los problemas, acerca de las modalidades de intervención y acerca de la
alguien necesita algo en particular. Paz llama y Analía viene, digamos; ella población con que trabajan. Se sabe que a menudo el trabajo conjunto
estuvo hace 15 minutos acá. Es que con TEMAS, con Paz o con Analía, no- es más un propósito que una realidad y depende en buena medida de
sotros tenemos un vínculo, digamos. Vos me mandaste el mail [solicitando las voluntades personales, de los posicionamientos adoptados, y de los
la entrevista] y yo antes de responderte la llamé a Paz”. vínculos que establecen los actores entre sí (“con determinado médico
Ahora bien, el seguimiento y el acompañamiento está lejos de ser un laburamos bárbaro pero con otro es imposible”; “en la escuela tal… de-
asunto libre de problemas no solamente debido a los límites o al alcance pende con quién”; “con tal escuela articulamos mejor que con la otra”).
posible de las acciones frente a la gravedad que revisten algunas situa- Los avatares y los resultados de las prácticas de seguimiento y acompa-
ciones, sino también debido a la eficacia que a veces tienen las estrate- ñamiento que se realizan desde la EB ponen de manifiesto la importan-
gias y/o a cómo éstas son percibidas. Veamos al respecto la situación cia y los límites que las mismas poseen en el marco de la precariedad y la
que narra Isabel, una de las madres: “si, hacen acompañamiento pero… desprotección persistente en los barrios, aun en el contexto de expansión
no en profundidad, porque los chicos tranquilamente les versean ‘si, está to- de derechos. Muestran la importancia y la insuficiencia del trabajo arte-
do bien’ –como hacía Elías o como hacía Javier– que, en realidad, no esta- sanal que despliegan los diferentes actores sociales del territorio –dentro
ban yendo al colegio… Yo tenía que ir a decirles [a los coordinadores] ‘miren o fuera de políticas y programas públicos– y muestran el lugar muchas
que ustedes las cosas no las están haciendo bien’ [y ellos respondían] ‘ah… veces vacante que deja el Estado en orden a garantizar el acceso de la po-
pero no la teníamos esa parte’. No hacen un seguimiento con los padres, yo blación a mejores condiciones de vida a través de políticas estructurales.
creo que lo que más tienen que escuchar, la Fundación, es a los padres”. Es en este escenario que la mediación de organizaciones (por caso
Más allá de la crítica que formula esta madre en particular, la relación TEMAS) adquiere relevancia en la medida en que ofician de cazadores
con los padres y las madres de los/as participantes –de acuerdo a lo que de recursos y distribuidores de oportunidades para los jóvenes. En este
señala Paz– “nunca fue ni es fácil; es tal vez uno de los aspectos más difíci- sentido las acciones de seguimiento y acompañamiento llevadas a cabo
les del trabajo en el proyecto. Están los que no los dejan entrenar y entonces desde los proyectos, del mismo modo que los/as pibes/as, están atrave-
nosotros intervenimos para que ‘aflojen’; los que están chochos porque ven en sados por la tensión que existe entre la “ciudadanía asistida” y la “ciuda-
esta propuesta una oportunidad para el ‘rescate’, cosa que a nosotros no nos danía de pleno derecho” (Ma. del Carmen Fernández (2003).
gusta mucho así pensado, pero al menos los apoyan para esto; están los muy

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6.3. La grupalidad, las normas y la palabra La merienda designa algo más que el momento del refrigerio: es el
dispositivo clave para “hacer grupo”. Es la estrategia de intervención que
No es inherente a una escuela de boxeo dedicarse al fortalecimiento de la con más claridad permite lo otro que no siendo propiamente boxeo es tan
grupalidad entre quienes asisten a los entrenamientos. Tampoco lo es el constitutivo y definitorio del proyecto como el entrenamiento mismo.
trabajo explícito en torno a normas que exceden lo deportivo (lo cual pue- “Los profes siempre les dicen ‘no se va nadie si no meriendan’. Entonces se
de ser un efecto añadido más que un propósito clave) ni la centralidad sientan todos y meriendan y ahí empieza la charla” –cuenta Carla–. “Eso
otorgada a los intercambios y la circulación de la palabra. El hecho de que no fue así desde el inicio del proyecto –señala Paz–, pero ahora ya lo tengo
estas cuestiones ocupen un lugar relevante entre los objetivos y las estra- claro, ya aprendí: ¡la merienda no se negocia!”. “No se negocia” porque es
tegias que sostiene TEMAS habla del proyecto socioeducativo en que se allí donde es posible priorizar la circulación de la palabra, la transmisión
inscribe el BBC. “Me gusta estar acá, en el momento de tirar ideas nos escu- de información, el intercambio, el abordaje de temas y problemas que se
chan, le podemos agregar algo al entrenamiento”. El testimonio de Rodrigo consideran relevantes, en suma: desarrollar e intensificar la dimensión
es claro en cuanto al plus que conlleva practicar box en este espacio. no física-deportiva del proyecto. De manera que un conjunto compacto de
A los responsables de la EB les importa especialmente propiciar la propósitos, acciones y sentidos convergen en la merienda como expectati-
convivencia dentro del gimnasio en torno al conjunto de actividades que va y como experiencia real. Eso es lo que expresan todos los entrevistados.
se promueven. Así, el propósito de “hacer grupo” alcanza a todos/as: a Lorenzo, por ejemplo, señala: “[la merienda…] para nutrir el cuerpo, para
quienes quieren aprender a boxear “por deporte”, a quienes tienen ex- que todos socialicemos, para que los profesores hablen de cosas. Es para bro-
pectativas de profesionalización y a quienes van solamente a entrenar mear digamos, o si quieren dar una información; es para aprender, para so-
o ni siquiera a eso. “Plantear metas colectivas fortalece al grupo” –apunta cializar, para jugar, para… Los profesores además hablan de cosas de boxeo,
Analía– señalando que actividades tales como los viajes o las jornadas de cosas que les pasaron, de experiencias de vida y uno va aprendiendo, va
de mantenimiento propician “muy de a poco” cambios interesantes en tomando todo”. “Cuando hay que hacer una charla de un tema serio, lo ha-
esa dirección. En este marco la merienda se recorta con una importan- cemos, si no: nos sentamos y hablamos de… cosas, boludeces” –apunta Nico–.
cia particular (dos meriendas se realizan cada día; en la primera suelen Es interesante notar que, en la perspectiva de los adolescentes, la merien-
confluir quienes se entrenan en los diferentes turnos y pertenecen, por da como ocasión para reírse, para bardear, para molestarse (en el sentido
lo tanto, a diferentes niveles de entrenamiento). de “joder un poco”) se entrelaza sin contradicción con cuestiones de otro
orden y profundidad, y que ambos aspectos sean valorados como lo son.
La referencia a los aprendizajes que suscita el hecho de entrar en contacto
con las “experiencias de vida” de los profesores habilita a pensar que el in-
terés y el respeto por la merienda, tal como está planteada, radica en parte
en el interés y el respeto que se deposita en el diálogo intergeneracional.
El valor que los responsables adultos le atribuyen a este espacio se re-
laciona también con la necesidad que el mismo conlleva de poner en
práctica determinados comportamientos y, al mismo tiempo, con la
oportunidad que presenta para transitar experiencias básicas, simples,
que muchos/as pibes/as no transitan fuera de la EB. Al respecto dice
Diego: “Hay chicos que… estamos merendando y mientras todos meriendan,
van le pegan a la bolsa y entonces: ‘che, no, vení estamos merendando’… Es
que no tienen ese hábito, porque por ahí están solos en la casa y no compar-
ten por ahí una merienda, un desayuno, un almuerzo, una cena y todos esos
hábitos se van formando y después les empiezan a gustar”.
En ese marco, y sin perjuicio del valor atribuido a los intercambios
ocasionales y espontáneos, son centrales “los temas” y “las charlas” que

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los responsables adultos promueven a partir de sus propuestas y/o de con procesos grupales y aprendizajes en diversos órdenes. En palabras
las que realizan los/as adolescentes y jóvenes. Analía cuenta que “por de Nico: “hay reglas que son para… digamos que son del deporte, ¿no? No
lo general a las ocho y media de la noche (horario en el que termina el dar golpes bajos; no vale pegar cuando alguien está tirado en el suelo. (…) Sí,
entrenamiento) se arman charlas bastantes interesantes en donde yo… no nos dicen como son las cosas, o sea también hay un cartelito que te dice las
estoy anotando pero sí trato de retener lo más posible, y ahí es donde uno em- reglas, o sea: no entrar sin remera, no faltarle el respeto al profesor (…). Más
pieza a armar… Porque tal tema está y vamos a ver cómo podemos encararlo que nada acá el respeto se transmite mucho…Si vos le enseñás a alguien a
para llevarlo a nivel grupal y que vean que no sólo es un problema de unos respetar al deporte sea donde sea ya eso se lo va a llevar consigo directamen-
pocos…”. Construida de ese modo, la agenda abarca desde alimentación te. El trabajo en equipo, o sea, hablar bien, todo eso…”
saludable hasta temáticas de género; desde charlas deportivas a cargo de
los profesores hasta métodos anticonceptivos (en encuentros con una
médica del CeSAC); desde por qué es importante estirar los músculos
hasta la problemática de los noviazgos violentos; desde cuestiones rela-
cionadas con la organización de las salidas hasta evaluaciones de “guan-
teadas” y entrenamientos.
Es importante señalar que el propósito de abordar temas “densos”
(asociados frecuentemente a miradas sesgadas respecto del rescate, tal
como que mencionamos anteriormente) no parece convertir a este espa-
cio en una suerte de coartada para desplegar un discurso preventivo con-
tra riesgos y peligros de todo tipo; más bien pareciera que los temas y los
problemas “densos” tienen lugar en la agenda de las meriendas porque
al formar parte de la vida de los pibes/as entran con ellos/as al gimnasio.
“Lo que nosotros fuimos aprendiendo –relata Celeste– es que no haya na-
da armado: ‘bueno, ahora vamos a…’, eso no funciona, ¡los re-ahuyenta!.
(…) Esta cosa de “EL” taller, a los pibes les genera una distancia. En las
charlas cotidianas también, cuando vos te ponés y la tratás de generar… mu-
chas veces nos ha pasado: ‘otra vez, vamos a hablar de…’, pero si vos lo vas
llevando y lo vas mechando, terminás hablando igual, ellos se van engan-
chando, tienen muy incorporado el espacio del diálogo”.
De acuerdo a nuestra perspectiva, de alguna manera en línea con los
aprendizajes que señala Celeste, no es la tematización intencional de
determinados asuntos o, dicho de otro modo, no es la pedagogización
de la merienda lo que necesariamente obstaculiza el diálogo y la posi-
bilidad de apropiación de ciertos temas, ideas o contenidos por parte Este es un tema que se reitera en las entrevistas y no sólo porque
de los pibes/as. Lo que vulnera el diálogo y la apropiación –tal como nosotros hayamos indagado al respecto; todo indica que el universo
se observa con frecuencia en diferentes proyectos– son determinados gimnasio propicia una socialización en torno a reglas legitimadas. La
dispositivos y formatos (“la” charla, “el” taller, etc.) cuando estos no se ética pugilística y la mística del box contribuyen a generar condicio-
inscriben dentro de un intercambio real y genuino ni lo habilitan de nes para la construcción de un orden normativo necesario y aceptado7.
verdad en el marco del grupo. Normas muy precisas gobiernan por ejemplo todo lo vinculado a las
Retomamos ahora un tema que hemos anticipado: la grupalidad, co-
mo se sabe, no es sin regulaciones. En el BBC las reglas y las normas,
ya sean específicas del deporte o genéricas, “para la vida”, se entrelazan 7. Desarrollaremos estos temas en el apartado 7.1: “La apuesta por la ética pugilística”.

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“guanteadas” y a las salidas, las cuales se integran en el marco regula- de disposiciones subjetivas, adquiridas, hacia la agresión física–. Esta
torio del funcionamiento grupal dejando ver en ocasiones una zona de disposición no es solamente un know how sobre la mecánica de la vio-
‘intersección’ entre ambas esferas: la deportiva y la que no lo es. lencia (…) sino también una inclinación aprendida a resolver conflictos
Los/as adolescentes y jóvenes así como los adultos señalan que nu- interpersonales por medio de la violencia.
merosas normas son (im)puestas desde la coordinación, es decir, hacen En el marco de una investigación realizada en una escuela primaria
parte del encuadre establecido por los responsables, y que otras tantas de “un barrio marginalizado del conurbano bonaerense”, los autores
son establecidas de manera colectiva, se discuten y se consensuan gru- mencionados advierten la existencia de una concatenación de violencias
palmente. En virtud de esto último, los/as participantes de la EB son que “conecta (y disuelve las líneas entre) la calle y el hogar, las esferas
interpelados más como sujetos activos que como “destinatarios”. “Nos pública y doméstica. (…) La cadena hace referencia a las maneras en que
escuchan, decidimos nosotros” –dicen los jóvenes–; “hacen proyectos, dis- distintos tipos de violencia (…) se vinculan y responden unos a otros: un
cuten, deciden ellos” –coinciden las madres–. La experiencia de la par- intento de violación seguido por un linchamiento, un ajuste de cuentas
ticipación en la gestión de la convivencia y de las actividades aparece entre vendedores y consumidores seguido de una pelea entre hermanos,
como un atributo apreciado de la propuesta. Celeste señala que esta un intento de robo seguido por una paliza a un hijo” (Auyero y Berti,
modalidad se fue construyendo con el tiempo: “es algo que TEMAS fue 2013: 110, 111). En un escenario que muestra similares escenas, prácti-
incorporando estos últimos años… esta cosa de involucrar a los pibes en las cas, aprendizajes y disposiciones subjetivas, la construcción de vínculos
situaciones cotidianas y en el arreglo y en la resolución de los problemas”. de respeto se impone como aspecto central y permanente del trabajo.
En cualquier caso, pareciera que los/as adolescentes y jóvenes aceptan Tal vez por esa razón una serie de premisas que podrían estimarse
las normas, las comprenden, las justifican y, con independencia de que muy elementales e inclusive algo ingenuas aparecen con frecuencia en
las cumplan siempre o no, no se generan conflictos importantes en tor- el discurso de todos en tanto normas importantes cuya observancia re-
no a ellas. Al menos no aparece en los relatos la existencia de problemas quiere intervenciones ad hoc: “una regla es no entrar sin remera y otra es
referidos a estas cuestiones, sin embargo –o tal vez por eso– como ya no “guantear” sin autorización del profesor. Y otra, creo, es que no hay que
señalamos: la centralidad del “asunto normas” es evidente. molestar a otros si no te gusta que te molesten a vos. Es una de las reglas
Ahora bien, que los entrevistados no hayan hecho referencia a discu- más importantes que hay” –recuerda Román–. Cabe reiterar aquí que lo
siones importantes relacionadas con la validez de las normas no obsta complicado y lo delicado de la tarea remite a la necesidad de garantizar
para que reconozcan situaciones problemáticas en las cuales éstas se po- el cumplimiento de lo (aparentemente) obvio y sencillo. Así las cosas,
nen en tensión. Un asunto crítico y recurrente es el referido a conflictos instalar y sostener un piso mínimo para el desarrollo de las actividades
y peleas entre los pibes/as. Tanto los entrenadores como las coordinado- y para la convivencia concentra buena parte de la energía. Para ello, la
ras señalan que la relación entre los/as adolescentes y jóvenes es a me- posición de autoridad adulta se presenta como una variable clave; al res-
nudo poco amigable; que son poco tolerantes y poco respetuosos, que la pecto señala Diego: “entrar y no saludar, ir a pegarle a la bolsa, sabiendo
interacción entre ellos/as está surcada por agresiones –unas veces leves que no está permitido… A ver… ¿qué es un entrenamiento? Acá el profe soy
y otras veces fuertes– de los más grandes hacia los más chicos, en oca- yo y el profe es Santiago y van a hacer lo que nosotros les digamos. No puedo
siones de los varones hacia las mujeres, entre pibes “cuando llegan cru- entrar y pegarle a la bolsa y de repente viene otro y se sube ahí arriba [se re-
zados”, etc… “Poca comprensión de la situación del otro” –señala Analía–; fiere al ring]; ¡No!, hay pautas y hay un reglamento y todo está establecido”.
“se discriminan mucho” –agrega Paz–. “Todo el tiempo buscando ese punto El reconocimiento de la asimetría entre adultos y adolescentes y jóve-
de quiebre de los demás para confrontar, confrontar, confrontar (…) Porque nes que predomina en la escena del entrenamiento en clave de “entre-
un poco reproducen lo que viven” –reflexiona Diego–. nador-entrenado/a” parece ser a la vez razón y efecto de una autoridad
Esos testimonios y esas realidades, junto a los relatos que ponen en legitimada en el marco del proyecto general.
evidencia experiencias y prácticas frecuentes de violencia física, remiten La reflexión de Lorenzo es clara en ese sentido: “los profesores, acá por
al análisis que realizan Auyero y Berti (2013): “la violencia no está sólo ejemplo, no dejan que digan malas palabras, no se puede escupir en el piso. Y
“allí afuera” –en forma de episodios que la gente reporta, en el orden ob- si ellos dicen algo respecto al entrenamiento, por más que vos no quieras lo te-
jetivo de las cosas barriales– sino también “aquí adentro” –bajo la forma nés que hacer. Después, si querés entrenar por tu cuenta entrená, pero… si vas

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a entrenar y querés que él te entrene, tenés que hacer lo que él diga, porque si con las reglas escritas y de los señalamientos a cargo de los adultos, las
no para qué le decís que te entrene”. La autoridad reconocida, sin embargo, normas circulan también por otros canales. Lorenzo cuenta que “cuan-
no exime de interpelaciones a los adultos sino todo lo contrario: los par- do alguien llega, obviamente llega con un perfil bajo, muy respetuoso, y
ticipantes de la EB han formulado críticas hacia los responsables y piden capaz que escucha a alguien que viene de hace rato que se le escapa una pu-
reuniones para revisar normas. Según relata Analía, de esos encuentros teada digamos, y los profesores le dicen “Ehhh ya sabés que no podés decir…
surgieron criterios importantes para el grupo y para el desarrollo del Y así, te vas dando cuenta”. Son varios los entrevistados que refieren a
proyecto. Revisiones mediante o al margen de ellas, los/as jóvenes entre- la transmisión de normas de los mayores a los más chicos o de los más
vistados/as acuerdan con las estrategias implementadas por los adultos antiguos a los más nuevos. “Un grande me dijo a mí que primero hay que
para garantizar el cumplimiento de la norma básica de no pelear (o para hacer esto y le dije ‘gracias, gracias por todo’. De eso… ahí aprendí más cosas
abordar el incumplimiento de la misma). Dichas estrategias giran en tor- y de ahí empecé a enseñarles un poco también a los chicos nuevos” –recuer-
no a señalamientos, a conversaciones, a hacer reflexionar y entender, y a da Román–. El hecho de que la propia dinámica de funcionamiento y la
la reparación: “[después de alguna pelea] que los agarren y les digan ‘pedí transmisión entre pares sean destacadas como fuentes de conocimiento
perdón porque te equivocaste’… eso está bien” –subraya Lorenzo–. y de aprendizaje de las reglas vigentes en el espacio es sugerente res-
La perspectiva que sostiene Elías, que contrasta con la del resto de los/ pecto al grado de apropiación y de autonomía que propicia la modalidad
as compañeros/as, confirma la modalidad de intervención predominante de intervención adoptada, tal vez potenciada por rasgos que (como vere-
y sugiere al mismo tiempo los límites que ésta posee: “si dos pibes se quie- mos) se consideran propios del gimnasio de box.
ren pelear, yo prefiero –antes de que se agarren a las piñas en la calle y afue- En otro orden de cosas, cabe mencionar que problemas vinculados con
ra– que se pongan los guantes acá que se saquen la bronca arriba del ring y los robos ponen en jaque con cierta frecuencia no tanto las normas de
ya está; antes de que tengan una charla con Analía o con la coordinadora que funcionamiento –en sentido estricto– cuanto los climas grupales, las es-
esté y le digan todo que sí y después se van y se cagan apiñas en la calle”. Él trategias, los vínculos y la convivencia. Nos referimos a situaciones tales
cuenta que antes, con el entrenador Fabi, cuando venían pibes con ganas como: un adolescente robándole el piloto a un funcionario ministerial
de pelearse porque sí, o para robarse los guantes, por ejemplo “él los subía a quien se había invitado a visitar el gimnasio con el propósito de que
[al ring], les ponía el cabezal (¡el chabón no sabía nada pero Fabi le ponía el facilitara apoyo y financiamiento; el hurto de teléfonos celulares y otras
cabezal!), le ponía los guantes y yo lo tenía que cagar a palos, por mis compa- pertenencias de pibes/as o profesores (por lo cual, desde hace un tiempo,
ñeros; o sea, esa era a veces la idea. Sé que no es algo que…ponéle, yo ahora le todo lo que se puede se guarda en un locker bajo llave); la sustracción de
digo esto a Analía, y Analía lo ve como una barbaridad, pero Fabi lo hacía así guantes de boxeo (con el detalle gracioso de que alguna vez se llevaron
y a mí me parecía lo mejor”. dos guantes de la misma mano y al poco tiempo fueron devueltos); el
El relato de Elías da cuentas de diferentes enfoques para abordar la robo por la noche –rotura de vidrios mediante– de las colchonetas, el
vida grupal “alrededor del ring” y para intervenir en la resolución de los equipo de música, el reproductor de DVD y otros elementos de valor; etc.
conflictos. Las diferencias se vinculan significativamente con el lugar Episodios como los mencionados, de diferente envergadura y trascen-
que ocupa, en un caso, la figura de un entrenador –con una determi- dencia, “pequeños” e internos, o de mayor dimensión y desde afuera,
nada visión, por cierto– y el que ocupa, en el otro caso, la coordinadora que son frecuentes y habituales en ámbitos e instituciones bien diferen-
del proyecto grupal. Pero no se trata sólo de roles y de perspectivas dis- tes, en territorios relegados y precarizados conllevan unos significados
tintas, también se trata de tiempos diferentes. El testimonio habla de que creemos necesario considerar aquí. Es pertinente para ello remitir
un “antes” y un “ahora” con lo cual queda claro que la modalidad de al análisis que realiza Kessler a propósito de la articulación entre ac-
trabajo de TEMAS en este aspecto ha requerido construcción, ensayos tividades legales e ilegales en jóvenes que han crecido y que viven en
y cambios para lograr instalar la centralidad de la palabra desplazando contextos donde el lazo social se ha debilitado, donde se ha desvanecido
así la legitimación del no diálogo y del fracaso de la simbolización que el sentido de la ley y de las instituciones responsables de garantizar su
implican las trompadas como vía para abordar los problemas. cumplimiento, donde el trabajo no permea la experiencia transmitida,
Es interesante destacar que, más allá del encuadre y de los criterios ac- no estructura la vida cotidiana ni constituye un horizonte claro. Según
tuales, más allá de la existencia de espacios de discusión, de los carteles dicho autor, en esas condiciones tiene lugar el desacople entre lo legal

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y lo legítimo y –en ese marco– las prácticas que se inscriben dentro De manera general, en cualquier ámbito y contexto el manejo de lo
de la “lógica de la provisión”: “todo acto que proporciona recursos para concerniente a las normas es un asunto central y sensible. Buena parte
satisfacer necesidades es legítimo sin que la diferencia entre legalidad o del trabajo educativo se juega en la posibilidad de disponer de encua-
ilegalidad de la acción sea relevante. Más aún, legitimidad y legalidad se dres, criterios y dispositivos para enseñar y aprender a discernir qué es
desacoplan al punto que es más legítima una conducta ilegal proveedo- lo que se debe cumplir (en virtud de razones pertinentes y no arbitra-
ra que una legal que no lo es” (Kessler, 2002: 344). rias) y qué es posible (y por lo tanto necesario desde el punto de vista
El análisis precedente alude de alguna manera al escenario de socia- formativo) debatir, consensuar y decidir en conjunto.
lización de quienes participan en la EB. En función de ello, cabe in- En cualquier ámbito y contexto resguardar el cumplimiento de re-
corporar aquí los análisis más recientes que realiza el propio Kessler, glas que sustentan la convivencia y habilitar la construcción de normas
señalando la necesidad de ubicar aquellas prácticas y sus significados requeridas por un proyecto colectivo propicia valiosos aprendizajes
en el contexto de mayor consumo local y menor privación absoluta que sociales vinculados con la construcción de autonomía. Y en contextos
experimentan actualmente los/as adolescentes y jóvenes de sectores po- desregulados como los que habitan los adolescentes y jóvenes partici-
pulares. En efecto –tomando como base la descripción enumerativa que pantes de la EB, en condiciones de vida que muestran que las normas
propone el “Colectivo Juguete perdidos”– diremos que en los “nuevos vigentes en la sociedad por lo general les juegan en contra, frente a la
barrios” hay más consumo, más mesas de gestión, más dinero, más evidencia de que algunos/as ya abrevan en ilegalidades de diverso tipo, y
programas sociales, más computadoras, más transas, más derechos, más siendo muchos los que están expuestos a conflictos complejos y a legali-
policías, más movimientos sociales activos, más gendarmes, más celu- dades burladas, cabe subrayar el significado que poseen las experiencias
lares, más alternativas de actividad, más “zonas liberadas”, más organi- que propician grupalidad en torno a normas que tienen sentido y en
zación popular, más motos… En ese marco, Las formas particulares en torno a figuras de autoridad respetables.
que se reconfigura la privación relativa en períodos de crecimiento im-
prime nuevos significados y/o torna más problemática la comparación
continua con los pares de otros sectores sociales y sus posibilidades de 6.4. Multiplicación y diversificación de las propuestas
acceso a otros bienes (Kessler, 2013).
En la cotidianeidad de la EB la problemática del robo constituye un El sostenimiento de una oferta amplia y diversa es otra de las claves del
asunto delicado que pone en juego lealtades, temores, naturalizaciones, trabajo en el marco de la EB. Actividades de naturaleza bien diferente
riesgos, y en torno al cual es clave cuidar la información que se pide, son promovidas desde el gimnasio y se desarrollan tanto allí mismo co-
que se (ob)tiene y que se da. De modo que las estrategias que los/as ado- mo en otros espacios con los cuales TEMAS trabaja en forma articulada,
lescentes y jóvenes poseen, que necesitan poseer para manejarse en tales gestionando, liderando o apoyando iniciativas.
situaciones, hacen tambalear en ocasiones los avances vinculados con Cabe señalar que varias de las actividades a las que nos referimos pre-
la responsabilidad individual, el sinceramiento y la resolución grupal existían al BBC. Es más: el proyecto, la idea del BBC, creció junto con
de los problemas. Pareciera que en esos casos vuelven a primar otras los chicos y las chicas que crecían asistiendo al comedor “Amor y Paz”.
leyes, de manera que los códigos callejeros, la astucia y las prevencio- La razón principal de su creación fue que hace aproximadamente una
nes necesarias para moverse y/o para protegerse le tuercen el brazo –al década, a diferencia de lo que ocurría con la oferta existente para la po-
menos temporariamente– al sistema de normas y valores que regulan blación infantil, no había en la zona actividades convocantes para ado-
el espacio de la EB. En esos casos –como hemos podido apreciar duran- lescentes y jóvenes. En palabras de Leti, referente del comedor desde sus
te el trabajo de campo– este tema/problema invade y altera el trabajo inicios: “en ese momento sentimos que había una urgencia, una super urgencia
en el gimnasio. Mientras tanto, los responsables del proyecto, tomando de tener un espacio para los que tenían entre trece y veintipico de años, porque
los recaudos que consideran pertinentes, despliegan las estrategias que veíamos que quedaba esa franja sin que pudieran hacer nada”. En lo que cons-
también ellos/as han debido aprender –y que siguen ensayando– en or- tituye un proceso conocido y habitual, el comedor del barrio Tres Rosas,
den a desarmar silencios naturalizados y a fortalecer posicionamientos surgido como olla popular, se transformó en espacio de referencia para
y acciones colectivas tanto adentro como afuera del BBC. las familias y fue incorporando actividades a partir de apoyos diversos y

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programas gubernamentales. En ese proceso se inscribe el trabajo con
(y de) TEMAS, cuya EB integra hoy de una suerte de “corredor de pro-
puestas” para la población infantil, adolescente y joven que se extiende
a lo largo de menos de 100 metros sobre la calle Orma. “Sí, todos mis
hijos (…) por lo general, las actividades que hacen son todas las que están en
Fundación TEMAS; todo lo que es circo, boxeo, apoyo escolar, violín, se prenden
en todo; títeres, lo que hay… ahí van ellos”. El testimonio de esta madre –al
igual que otros similares– da cuenta de que la EB forma parte de la tra-
ma barrial de alternativas, y también de la saga familiar.
Pero lo que importa en este punto no es solamente ni principalmente el
hecho de que la EB se inscriba en un conjunto más amplio de iniciativas
con las cuales se relaciona, sino la cantidad y la variedad de actividades
que tienen lugar en el marco de la misma, concentrando expectativas,
tiempos y espacios considerables por parte de la coordinación y del gru-
po. Así, Nico relata: “Hacemos cosas junto al comedor, junto a la orquesta,
y está la jornada de mantenimiento también. Venir, arreglar de vez en cuando
el ring, limpiar los guantes, ordenar un poco… Por ejemplo ahora tenemos que
arreglar un tema de arriba, del baño, que es con los caños; es arreglar el lugar, o
sea, mantenerlo”. Rodrigo disfruta recordando los viajes y las salidas a los
museos. Laura cuenta que le gusta ir una vez por semana a la reunión de vencia intensiva y actividades diversas, de eso se trata.
producción del programa de radio. Y Carla (madre de Laura) dice: “La EB Los/as adolescentes y jóvenes del BBC no salen mucho del barrio “por
es como un árbol con varias raíces (…) Es muy completo lo que hacen, no es so- la suya” y/o no salen, no van, sobre todo a cierto tipo de lugares y eventos,
lamente entrenamiento (…) de ahí parten varias cosas, varios proyectos que ellos cosa que sí hacen en el marco del proyecto. El testimonio de Diego pone
mismos tienen ahí adentro. Había viernes de pizza (…) y ahora se armó cena a la luz su propia historia en tanto “pibe del barrio” y su mirada acerca
una vez por mes. ¿Viste el mural que está ahí, en la puerta? Eso lo hicieron ellos”. de lo que estas propuestas significan para los adolescentes que ahora él
En un sentido similar al que hemos señalado a propósito de las prácticas –en tanto entrenador– tiene a su cargo: “yo nunca vi un concierto de una
de seguimiento y acompañamiento, la variedad de propuestas como estra- orquesta en mi vida y sin embargo la vez pasada fuimos a Plaza Francia y lo
tegia de intervención expresa, refuerza y le pone (otros) contenidos a la vi, y los chicos también. Y había chicos que nunca en su vida dijeron ‘vamos
idea del box como “excusa”. En este marco, recogiendo la importancia que a ir a un concierto’ y ni pensaron hasta el día que se mueran ver un concier-
los/as jóvenes entrevistados/as atribuyen a las actividades extra deporti- to, y sin embargo fueron y estuvieron muchos atentos y conocieron, más allá
vas, analizamos a continuación las que consisten en realizar salidas y via- de que les gustó o no les gustó, conocieron, tuvieron la posibilidad, tuvieron
jes, y describiremos luego las que corresponden al área de comunicación. esa experiencia. Está buenísimo que tengan diferentes experiencias, diferen-
tes salidas, que conozcan diferentes lugares”.
Las salidas se presentan entonces como estrategias clave para ofrecer
6.4.1. La ampliación de horizontes contenidos que “hacen diferencia” respecto de lo conocido y lo habitual.
materiales y simbólicos Lugares, instituciones y experiencias en diferentes áreas, aun cuando
parecen, son o podría considerarse que son ajenos y lejanos a su univer-
Salir del gimnasio y salir del barrio son asuntos centrales para el pro- so cultural, pasan a formar parte de lo que adolescentes y jóvenes tienen
yecto: asistencia a eventos culturales, visitas a otros gimnasios o clubes la ocasión de conocer y de disfrutar a partir de su participación en la EB.
para hacer “guanteadas” e intercambios, salidas a parques y a piletas de En relación con la ajenidad y la distancia que acabamos de mencionar,
la Ciudad o de la zona, viajes a lugares más alejados que suponen convi- cabe precisar que “la distancia no alude al kilometraje, es la experiencia

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subjetiva de lo que separa del poder; la distancia es entre el centro –lo le-
gitimado y hegemónico– y la periferia –lo subalterno y devaluado–. (…)
Es la diferencia que existe entre la posibilidad de hacer programa para ir
al teatro el domingo y la eventualidad de estar bajo programa y, en conse-
cuencia, poder ir al teatro un domingo” (Kantor, 2015: 86).
Interesa subrayar entonces que la importancia de estas propuestas
no radica en que lo que se ofrece a los/as jóvenes responda a lo que
ellos demandan, a lo que les gusta de entrada o termina gustándoles;
la importancia –como señaló Diego– radica en que conozcan cosas que
existen y que eventualmente podrían gustarles pero que, en razón de la
naturalización de ciertos estereotipos relacionados con desigualdades,
no suelen pertenecer al horizonte de sus experiencias, de sus expectati- sobre todo determinado tipo de salidas, dan batalla a su modo contra los
vas y de sus preferencias. mecanismos de desigualación que generan –al tiempo que refuerzan–
Cuando Bourdieu (2010) analiza el sentido social del gusto señala que la diferenciación y la jerarquización de las prácticas, de los gustos, de los
ideas o expresiones frecuentes tales como “eso no me interesa” o “eso no consumos culturales, de los circuitos urbanos y –por añadidura– de las
es para mí”, sostenidas por quienes están desprovistos de capital cultu- poblaciones que los frecuentan.
ral “legítimo”, encierran el reconocimiento implícito de la legitimidad En línea con lo anterior, y mostrando otra arista del asunto, las salidas
cultural que los excluye y dan cuenta de un “sentimiento de indigni- adquieren una relevancia particular a causa de lo que puede implicar en-
dad cultural”. En ese marco, las propuestas de actividad que estamos trar y salir del barrio. Es elocuente al respecto un pasaje de la reunión de
analizando, en la medida en que interpelan dichas representaciones, coordinación de la EB en que los responsables procuraban ordenar el cro-
estarían contribuyendo a revertir percepciones y autopercepciones de- nograma de próximas actividades: “Está la “guanteada”; está lo del ensayo
valuadas que derivan de las condiciones de exclusión. Así, las salidas, y de violines en el Colón; tenemos el festival de cierre [de la EB]; también lo de
FILBA [Festival Internacional de Literatura de Buenos Aires] ¡y también
está la Noche de los Museos!…”. Ante esto último Analía recordó y respon-
dió, como advirtiendo: “El año pasado fui sola con 18 pibes. Estuvo buenísi-
mo, ¡bueníiiisimo, de verdad! Pero la vuelta fue te-rri-ble. No sé si lo haría de
nuevo si no resolvemos eso de alguna manera. Mejor dicho: no; no lo haría. Ni
por mí ni por ellos, que tampoco la pasaron bien en ese momento, después de
una noche tan copada. A la vuelta entramos juntos, fuimos organizando to-
do, pero los que viven más lejos se cruzaron con esos… que siempre andan por
ahí y les robaron. Estaban los más chicos, a esos no los podés largar solos; en
fin, es todo un tema. ¡Pero cómo disfrutaron de la salida, eso fue impresionan-
te!”. La recurrente expresión “entrar” (al barrio) pone de manifiesto que
los desplazamientos desde, hacia y dentro del mismo, representan un
problema. A otros barrios se va; a este/os barrio/s, en cambio, “se entra”.
En este contexto las salidas mitigan en parte el confinamiento socioes-
pacial al que están sometidos los/as pibes/as en tanto habitantes de la
villa. Sabemos que reunirse y desplazarse, salir, habitar la nocturnidad,
probarse en otros escenarios y ensayar normatividades propias en tiem-
pos y espacios no gobernados por los adultos constituyen tareas centrales
de la (re)construcción identitaria en la adolescencia (Kantor, 2008). De

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modo que las dificultades existentes para circular por el barrio, para en- hacer, con la EB ya se fueron a Mercedes… Yo no tengo la posibilidad de llevar
trar y para salir, impactan especialmente sobre los/as pibe/as dado que la a mi hija a Mercedes, pero a través de eso ella conoció Mercedes”.
conquista de la autonomía es tributaria de esos ensayos. Salir en grupo, Ahora bien, dentro de la EB viajar no implica sólo “salir” o “irse”, tam-
a cargo de adultos y necesariamente bajo proyecto no reemplaza aquello bién implica organizarse para ello. La energía puesta en organizar estas
que las condiciones de precariedad obturan, pero indudablemente atenúa salidas da cuentas de la importancia que desde el proyecto se le otorga
la consolidación de “subjetividades de geografía recortada” (Efrón, 2003). al trabajo grupal. Toda vez que las salidas propician y requieren partici-
Además de lo señalado, otras evidencias surgen del intercambio recién pación, compromiso, decisiones y normas, éstas constituyen de alguna
transcripto entre los responsables de la EB. La primera evidencia refuerza manera mini proyectos que marcan rumbos e hitos dentro del proyecto
algo que ya hemos señalado: los violines del Colón y la Noche de los Mu- más amplio. En este marco, un punto crítico en los viajes de verano re-
seos como temas de una reunión de entrenadores de boxeo dicen acerca fiere a quiénes pueden participar y quiénes no: ¿está viniendo o falta
de los múltiples andariveles en que se juega la dimensión recreativa y mucho?, ¿vendió o no vendió rifas?, ¿participa en las jornadas de mante-
educativa del proyecto. Segunda evidencia: la intención de diversificar el nimiento o aparece sólo para la salida?, ¿cómo se decide lo qué es justo?,
abanico de propuestas y de no perderse nada implica un despliegue tal y ¿quién/es decide/n al respecto? Estas son algunas de las cuestiones que
complejiza la agenda de manera tal que se torna difícil pensar que ello no hay que dirimir… Tanto los/as jóvenes como las madres y los respon-
compromete el desarrollo de procesos grupales en torno a cada una de las sables de la EB relatan que para participar en los viajes “hay normas
iniciativas. La figura del trabajador “equilibrista” retorna en este punto, claras”; son requisitos básicos la participación más o menos sistemática
quedando planteada asimismo una tensión entre la cantidad y la variedad en los entrenamientos y la colaboración en la recaudación de fondos (a
de ofertas y la sistematización de la tarea y de las experiencias formativas. través de la venta de rifas o de la organización de eventos). Como puede
Otras son las motivaciones y las experiencias que convergen en las verse, en esta línea de trabajo, la premisa de la “apertura” tiene sus lími-
salidas a espacios verdes y a lugares agradables para el esparcimiento. tes. Las salidas hacen diferencia y ponen entre paréntesis el principio de
“Organizamos al aire libre, en el parque, más en contacto con la naturale- “aquí no decimos que no a nadie” ya que son otras las cuestiones que se
za, cambio de aire, mucho mejor –relata Rodrigo–. En el verano una vez priorizan. Lo que manda en estos casos es más el compromiso con una
por semana (…); los días lo ponemos nosotros. Es la mejor parte del año construcción grupal que la acogida como valor supremo.
porque nos cagamos de risa (…). Y a las piletas del parque Pereyra también De manera general entonces, esta línea / estrategia del proyecto per-
en verano una vez por semana. Yo siempre fui, no falté nunca”. Estas acti- mite ejercer el derecho a mezclarse, a ser público con otros, poniendo
vidades permiten a los/as participantes del BBC transitar el período de en discusión la ajenidad edificada sobre la base de las barreras simbó-
receso escolar disfrutando algo de lo diferente, lo lindo, lo necesario, licas que operan en las opciones culturales. Propicia la resignificación
que permite el verano. del espacio público y de lugares diversos en tanto espacios accesibles y
Los viajes que realizan cada mes de febrero son recordados y apreciados disfrutables, y la experiencia del esparcimiento y de la socialidad como
muy especialmente: “Hacía mucho calor, había cancha de fútbol, piscina, resultado del trabajo colectivo.
un buen lugar para comer, buena comida, pizzas, de desayuno te daban café
con… no sé ahí te dejaban dulce de leche, crema de maní que mucho no se ve
por acá” –relata Román–, subrayando el valor agregado que porta la dife- 6.4.2. La comunicación de la experiencia
rencia, la novedad y la interrupción de lo cotidiano. Rodrigo, por su par-
te, enfatiza aspectos vinculados a la convivencia y la diversión: “Cuando Dentro del proyecto de la EB, las actividades de comunicación constitu-
nos fuimos a San Antonio de Areco, que nos fuimos tres días, y nos fuimos de yen una línea de trabajo específica que se desarrolla en forma paralela
noche…. Armamos una fogata, y estábamos contando historias de terror y en a lo concerniente al boxeo. La misma contempla una propuesta radial,
ese momento estaban todos medios ‘cagados’ y Analía se fue para atrás y tiró una gráfica y colateralmente producciones para Facebook. El propósito
un palo y salimos todos corriendo a las carpas. Saltamos hasta la fogata algu- de las mismas fue y es ofrecer otras “puertas de entrada” para que los/as
nos. ¡Estuvo re buena!”. Y Carla valora los viajes desde su lugar de madre: pibes/as se enganchen con el proyecto, con el grupo y con los referentes
“esas cosas que le brindan a los chicos que quizás los padres no lo podemos adultos, y para que puedan participar en algo aun cuando no puedan o

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no quieran entrenar. En palabras de Analía: “Resulta que quizás hay un
joven o una joven que empieza a entrenar y se esguinzó y no puede entre-
nar pero quiere participar del espacio, entonces otra actividad es la radio.
‘¿No podés participar de la grabación? Bueno, participá de las reuniones de
producción’. El joven no queda ‘colgado’”. Así, la propuesta de radio y las
demás actividades comunicacionales vienen a integrarse al abanico de
opciones mediante las cuales TEMAS procura enfrentar una evidencia
que le preocupa en cuanto a contención se refiere: “no alcanza con el es-
pacio de box”. El hecho de que Analía –la coordinadora de la EB– sea Lic.
en Comunicación Social, es sin dudas un elemento clave en el origen y
el sostenimiento de estas propuestas.
El espacio radial consiste en la realización del programa “Detrás de los
guantes” que se emite semanalmente; complementariamente, los/as jó-
venes administran el Facebook del programa, donde suben fotografías y
música. El programa, de media hora de duración, se emite desde la radio
“FM la 96 Caacupé”, cuya señal alcanza hasta el barrio porteño de Con-
greso, que funciona en la parroquia ubicada a pocas cuadras de la EB. La
parroquia facilita un estudio de grabación y la colaboración ad-honorem
de un operador comunitario. Durante nuestro trabajo de campo, el pro-
grama se grababa los miércoles de 13hs. a 13.30hs. y se emitía los viernes
a las 9 de la mañana, y también por Internet8.
En las reuniones de producción –que usualmente se realizan en el participantes como del propio programa (que no se emitió durante va-
gimnasio, durante alguna pausa o mientras se desarrolla otra activi- rios meses) parece ser un rasgo “natural” o en todo caso asimilado en
dad– Analía orienta a los pibes/as en el armado de los segmentos del tanto que condición posible. De modo que se torna difícil acumular ex-
programa, los incentiva para el trabajo y está atenta a que todos/as ten- periencia y avanzar sobre los logros alcanzados; es por eso que –como
gan alguna actividad. “A veces es más importante la preproducción que ir a hemos podido observar– en ocasiones es la propia coordinadora quien
grabar el programa” –señala–, tal vez porque no es posible garantizar la debe armar los segmentos y “estar en los micrófonos porque los pibes no
participación sostenida en todo el proceso y/o porque valora sobre todo estaban duchos”. Es evidente –y la propia Analía también lo señala– que
la presencia de los jóvenes en espacios de discusión y de intercambio reiniciar procesos sosteniendo la decisión de emitir los programas con-
(“que los chicos vayan tirando ideas”) con cierta independencia de lo que lleva más improvisación, más intervención de parte suya y menos auto-
implica el aprendizaje sistemático y la puesta en práctica de la realiza- nomía del grupo, lo cual no responde a los propósitos buscados. “El año
ción integral de un programa radial. pasado sucedió al principio y después cuando vi que se ponían duchos, no
En línea con lo anterior, no hay un equipo estable de chicos y chicas intervine más. (…) pasaron muchos chicos durante el 2014, 18 en total”.
“de radio” sino que se va armando casi espontáneamente, lo cual no se Los audios de los programas emitidos durante los años 2014 y 2015
percibe como un problema: “Por ahí el miércoles que viene quieren estos muestran que el espacio de radio se utiliza principalmente para promo-
tres y se suman tres más, o van dos y se suma algún otro. (…) Están anota- cionar la EB, los horarios y las actividades habituales o especiales tales
dos cinco o seis pero no logramos coordinar los horarios del operador de la como las guanteadas. En los programas es frecuente la realización de
radio y de los chicos”. En este marco, la discontinuidad tanto de jóvenes entrevistas, por ejemplo: a una ex vecina que hoy es bailarina y lleva a
cabo un taller de danza en el barrio, o a integrantes de nuestro equipo
de investigación del ISTLyR.
8. Página web de la radio: la96.listen2myshow.com

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Por otra parte, TEMAS sostiene además un Facebook institucional
(Barracas Boxing Club) destinado a promocionar la EB, en este caso
coordinado por Analía junto a los demás responsables del proyecto y sin
intervención de los adolescentes y jóvenes.
El periódico barrial que TEMAS publica dos veces por año, es otra de
las iniciativas correspondientes al área de comunicación en que parti-
cipan los/as adolescentes y jóvenes de la EB. El periódico se publica en
papel, y en algunas ocasiones en los espacios virtuales de TEMAS (en el
Facebook institucional y en el blog9). En este caso la coordinación está a
cargo de los Promotores de Comunicación Comunitaria: jóvenes de has-
ta 24 años que llevan a cabo esta tarea y reciben un pago por ello, a través
de una línea de promoción y financiamiento del Ministerio de Trabajo,
A partir de la experiencia de la radio, en una ocasión la EB fue convo- que TEMAS gestionó para los jóvenes del barrio. El periódico no está
cada por la Defensoría del Público a participar de una audiencia pública centrado en la EB; en él convergen las múltiples iniciativas que la Funda-
realizada en la Ciudad de Pergamino. Los chicos/as del BBC, en repre- ción (y otras instituciones) desarrollan en la Villa 21/24. De modo que en
sentación de la Ciudad de Buenos Aires, participaron junto a otras ra- las 7 u 8 hojas del periódico, los aportes que realizan los/as adolescentes
dios comunitarias de todo el país en el proceso de intercambio que duró y jóvenes del BBC se suman a los que elaboran –entre otros– los alum-
casi un año y en un evento que se desarrolló en el Congreso. nos del Taller de Aprendizaje Comunitario (TAC), los participantes del
El Facebook “Detrás De Los Guantes BBc” surgió como canal para que Centro Cultural o la Biblioteca de La Casita o los propios Promotores.
los pibes/as propusieran temas, noticias, comentarios deportivos, apor- Dado que las diferentes secciones del periódico están armadas por los
tes humorísticos o de otra índole, para abordar en las reuniones de pro- diferentes colectivos, se advierten criterios y modalidades particulares
ducción y luego en los programas. Y también “para subir música que les en cuanto a diseño y edición, tanto dentro del mismo número como en
interesa, porque lo que nos pasa en la radio, como sale a las 9 de la mañana, distintas ediciones. En ese marco, una gran variedad de asuntos relati-
por el público destinatario, como hay mucha comunidad paraguaya en el ba- vos al barrio son abordados de maneras diversas: con mayor o menor
rrio, ponen mucha polca”. Al respecto la coordinadora cuenta una anécdo- ”profesionalismo”, con firma o sin firma, con fotografías o sin ellas, me-
ta elocuente y algo graciosa: “de vez en cuando el operador, cuando graban diante reportajes o investigaciones, con o sin intervención de un correc-
el programa, les pone algún reggaeton”. Analía subraya que, si bien éste es tor, en forma “suelta” o dentro de una sección.
un espacio promovido por TEMAS pero manejado autónomamente por En ese sentido, el periódico deja ver propósitos (o en todo caso unos
los pibes/as, ella lo “chusmea” cada tanto para ver si se cumplen ciertas resultados) vinculados más a la circulación de información relevante
reglas establecidas: “no pueden subir videos porno, por ejemplo, o hacer co- para los habitantes de la Villa y a la promoción de la participación de di-
mentarios desubicados” como a veces ocurre en sus Facebooks personales. ferentes actores que al interés (o a la posibilidad) de ajustarse a criterios
Las pocas cuestiones que han debido resolverse al respecto se inscriben y cánones propios del género periodístico.
en un clima respetuoso tranquilo y productivo, tanto a la hora de produ- No obstante, durante el trabajo de campo tuvimos la oportunidad
cir como de emitir el programa –cuenta nuestra entrevistada–. de presenciar dos actividades destinadas a capacitar a los jóvenes en
Así, el trabajo en el área de comunicación propone y habilita un (otro) la escritura de una crónica sobre “algo” relacionado con el boxeo (un
espacio de intercambio y de autonomía en un soporte bien propio de guanteo, alguna pelea que pudieran ver en la televisión entre boxeado-
adolescentes y jóvenes, dentro del encuadre institucional con normas res famosos, etc.). En estos “talleres”, desarrollados durante el horario
que los adultos se ocupan de resguardar. (extendido) de la merienda, participaban quienes estaban interesados/
as en profundizar en este formato del género periodístico. Ocho jóvenes
asistieron a este espacio que estuvo a cargo de Mariano, un periodista
9. Fundaciontemas.blogspot.com.ar que colabora con TEMAS hace varios años y que ya había realizado acti-
vidades similares en la EB.
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El trabajo giró en torno a los propósitos y las formas de encarar una Más allá de actividades específicas como la que hemos reseñado y de
crónica, apelando mayormente a ejemplos concretos para lo cual –en cómo éstas puedan “alimentar” la producción de los pibes/as para el pe-
uno de los encuentros– se trabajó con una revista especializada en bo- riódico barrial en el marco de las características y de la estructura varia-
xeo que presentaba una crónica de un knockout técnico. Además, Maria- ble del mismo, la sección correspondiente a la EB no aparece siempre
no mostró en su PC varias peleas para analizar los detalles que permite y, cuando aparece, lo hace bajo diferentes títulos, por ejemplo: “Sección
captar la cámara lenta y sugirió el uso de la tecnología disponible –por deportiva” o “Rancho aparte”. En cualquier caso, importa señalar que
ejemplo: los celulares– para grabar peleas. En cuanto a las ideas que se en ella se presentan notas sobre cuestiones de interés acerca del depor-
comunican y a los modos en que se lo hace, recomendó no utilizar este- te, información para promocionar la actividad de la EB, entrevistas (a un
reotipos tales como “los argentinos pelean de tal forma y los cubanos de boxeador profesional, por ejemplo) y testimonios de jóvenes que asisten
tal otra”, argumentando que la nacionalidad no determina técnicas o es- al BBC. Importa señalarlo porque la participación de pibes/as del BBC
tilos para el combate. Expuso y ejemplificó que la crónica de un evento en dichas producciones y/o la eventual lectura de los mismos por par-
puede centrarse en aspectos diferentes, no necesariamente ni solamen- te de ellos/as mismos, de sus amigos o de sus familiares, vuelve a dar
te en la pelea en sí sino también en detalles que aparecen alrededor de cuenta de una propuesta y una experiencia que se despliega en diferen-
la misma, la ropa del boxeador, el desempeño del árbitro, etc. Las risas tes registros, soportes y lenguajes.
que provocaron algunos ejemplos o comentarios (“a veces los referís la De manera más general, el periódico barrial de TEMAS, abarca asun-
ligan”) daba cuenta de un clima distendido dentro del cual la exposición tos y problemas bien diversos en clave de información, análisis y de-
de Mariano, su lenguaje técnico y los conceptos que desarrollaba, resul- nuncia: la inauguración de una placita, la tuberculosis, las medidas
taban accesibles para los pibes/as presentes que se mostraron atentos de prevención y los mitos acerca de esa enfermedad, los avances de los
e interesados durante el desarrollo de la actividad. En el cierre del en- alumnos del Plan Fines, los reclamos al Gobierno de la CABA por la
cuentro, se les dejó una “tarea”: ver por televisión la pelea del sábado 21 (no) recolección de residuos, la presentación de la orquesta infantil del
de noviembre entre los boxeadores Canelo y Del Coto. Si bien esta pro- barrio, el reportaje al hermano de un pibe asesinado, la próxima “guan-
puesta consistió básicamente en la exposición del periodista invitado, teada”, un proyecto de producción de cortos de animación, la contami-
y la continuidad de la misma no incluyó una ejercitación o una puesta nación del camino de sirga, la fotonovela sobre la historia de un “transa”
en práctica, los participantes del “taller” escribieron una columna en el hasta que lo denuncian, la visita de una poetisa… Es decir: temas, pro-
periódico de TEMAS publicado poco tiempo después. blemas y acontecimientos en que los pibes/as del BBC –tanto como la
población de la zona en general– son actores y protagonistas.
Por todo ello, a modo de cierre de este punto, cabe remarcar que dar
y tomar la palabra en la radio, discutir contenidos para un programa o
para el Facebook, observar y comunicar, poner en palabras la experiencia
del grupo y del gimnasio, mostrar imágenes y mostrarse por medio de
imágenes, escribir(se) y leer(se) con otros e inscribir lo propio en el esce-
nario colectivo y comunitario forma parte del conjunto de experiencias el
proyecto propicia y que los/as jóvenes tienen a disposición cerca del ring.

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7. Singularidades de la intervención quedarme en la esquina tomando hasta las tres de la mañana”.
vinculadas con el boxeo Por todo ello, tal como señala el Dr. Daniel y tal como constatan y
7.1. La apuesta por la ética pugilística lamentan los responsables de la EB: la propuesta no llega a los/as pibes/
as que están en peores condiciones: ellos/as no pueden sostener esos
La valoración de una ética propia del box atraviesa las representaciones ritmos y exigencias. La inestabilidad crónica y la desorganización tem-
acerca de este deporte y acerca de cómo se lo concibe y se lo propone en poral propia de los/as jóvenes cuyas vidas se hallan más deterioradas
el marco del proyecto estudiado. La mayoría de los entrevistados enfa- es incompatible con el rigor del entrenamiento. Complementariamen-
tiza que –a diferencia de lo que suele pensarse– el box no consiste en te, el médico advierte con claridad el impacto que tiene la práctica del
dos personas pegándose. “Tiene otros valores –señala Diego–: esto de la boxeo en aquellos/as para los cuales la propuesta resulta desafiante y
lealtad, de comprometerse con el entrenamiento, (…) de ser responsable, de exigente pero posible, y sobre todo en quienes encaran la carrera de
cumplir un horario, (…) respetar al otro, el cuidado del otro y de uno mismo”. boxeador/a: ¡Sí, totalmente! lo veo en los cambios de hábito, en los cambios
De manera general, para quienes valoran positivamente el box, el de sueño… El tipo que tenías anotado [en la ficha médica] ‘fuma aproxima-
gimnasio es una escuela de moralidad; un sistema solidario de creen- damente 3 porros por semana, chupa todos los fines de semana’ –porque así
cias y prácticas que gira en torno del trabajo individual y el respeto mu- son las historias clínicas más o menos–, ‘chupa todos los fines de semana,
tuo; una comunidad moral –señala Wacquant– en la que el espíritu de se pone en pedo cada 15 días’… y los ves al año siguiente que hubo todo este
disciplina adquiere una centralidad notable. Dentro de esta perspectiva, proceso de profesionalización en el deporte, no fuma, no chupa, te pregunta
la rigurosidad del entrenamiento es asumida a la vez como condición y por alguna dieta energética…”
como oportunidad para que los/as adolescentes y jóvenes afronten de- En rigor de verdad, otros deportes y otras actividades son igualmente
safíos y desarrollen actitudes y conductas que otras actividades u otros incompatibles con descontroles o excesos; sin embargo, en este aspec-
ámbitos no suscitan en ellos/as tan claramente. En esto radica precisa- to se le atribuye al boxeo una potencia y unas cualidades particulares.
mente la apuesta que hizo TEMAS desde el inicio y que –reformulacio- Elías es muy claro al respecto, cuando repasa su trayectoria y su expe-
nes mediante– revalida con el paso del tiempo. riencia: “Yo no tomaba gaseosa antes de una pelea, tenía una dieta, me
Los testimonios recogidos y las observaciones realizadas permiten cuidaba, yo tenía muchísima conducta…” Ahora, ya más grande, con un
constatar el carácter repetitivo, árido y ascético del entrenamiento, hijo y otras responsabilidades no está pudiendo sostener la disciplina:
y también esa suerte de “devoción monástica” –en palabras del autor “estoy perdiendo el control”, dice con un dejo de preocupación. La aso-
mencionado– que permite sostener una disciplina intensiva y agotado- ciación entre entrenamiento, control y cuidados es elocuente respecto a
ra. Algo de esto reconoce Leti cuando destaca que la propuesta cala hon- los efectos que produce la participación sostenida en el BBC. A juzgar
do en los pibes/as del barrio: “adquieren una responsabilidad que genera por los relatos y las reflexiones que aportaron muchos entrevistados, los
un cambio en la vida de ellos en cuanto a lo que es la disciplina, en cuanto alcances que tienen la propuesta y la intervención de los entrenadores
a la salud (…)”. En efecto, del relato de muchos entrevistados surge que en el gimnasio, o la del equipo responsable en el contexto más amplio
a partir de los entrenamientos en la EB tiene lugar la experiencia de la del proyecto, es congruente con la idea de que “el gym funciona práctica-
perseverancia, el sacrificio y el esfuerzo, como nunca antes, en relación mente como una institución que intenta reglamentar toda la existencia
con ninguna otra cosa. El gimnasio se constituye así en un islote de es- del boxeador”. A ello contribuyen el sistema de entrenamiento y el tipo
tabilidad y orden en la medida en que propicia la apropiación progresiva de trabajo físico que se realiza así como “la disposición colectiva y la sin-
de hábitos, prácticas y códigos que contrastan con los que rigen “afuera”. cronización de los cuerpos… cuya sola visión basta para producir efectos
La intensidad de esta creencia compartida por adultos y jóvenes parece pedagógicos duraderos” (Wacquant, 2006: 64; 76).
refrendar la visión de Wacquant acerca de que el gimnasio es un vector La apuesta por la ética pugilística se acompaña de una cierta mística
de desbanalización de la vida cotidiana. El aprendizaje y la observancia que tiene correlato en un conjunto de convicciones, representaciones y
de límites necesarios, en tanto son inherentes a la actividad que se prac- experiencias en torno a la nobleza y a las lealtades dentro del gimnasio,
tica, aparece como un rasgo definitorio. “Mirá, si yo quiero pelear –dice a las diversas formas del cuidado que se ponen en juego y a las reglas
Diego– si quiero “guantear” el sábado en el festival, no tengo que el viernes cuyo respeto se impone por su propio peso. Desde esa perspectiva, claro

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está, se considera que el box no es un deporte violento y que, en razón barrios humildes y que atraviesa a menudo las relaciones interpersonales,
del carácter altamente codificado de la violencia pugilística, propicia la tal como reportan prácticamente a diario los/as participantes de la EB10.
mesura y refuerza el autocontrol y la moderación. Se trata de una vio- En este marco Paz subraya lo que constituye la mayor preocupación de
lencia consentida y controlada. los responsables del proyecto: “El temor permanente por la muerte de algu-
Los /as pibes/as lo expresan a su modo: “pelea sí… así con reglas y técni- no. La muerte está rondando todo el tiempo”. Una experiencia extrema al
cas, como se hace acá” –dice Laura–. Y Nico se explaya: “En el boxeo que respecto marcó a adultos y a jóvenes por igual: “Una vez mataron a dos
nosotros estamos nos enseñan bien a pelear; el boxeo en sí, pero sin pelearnos pibes en la puerta del gimnasio. No eran de los que entrenaban pero da igual,
mal ni nada… Si no tenemos las protecciones no podemos pelear, pero de por acá se conocen todos; eran amigos de los pibes. Fue una situación terrible”.
sí no me parece malo, ni una actividad violenta”. “Violento para mí sería “El límite es la muerte” –enfatiza Analía–. Por el modo en que el boxeo es
que se suban arriba y se caguen a palos hasta que uno no de más. O sea, practicado en la EB y por el efecto que éste parece tener sobre los chicos y
es un deporte de contacto, obviamente hay contacto pero no es violento, de las chicas que participan del espacio, el denominado “noble deporte” esta-
haber golpes obviamente va a ser así, pero no es violento para mí: más si se ría operando en contra de lo que origina el gran temor de los adultos y co-
maneja con las reglas y se maneja como se debe”. rriendo el límite que separa a los/as jóvenes de esas situaciones terribles.
Desde la perspectiva de la ética y la mística que venimos analizando y Ahora bien, las representaciones acerca del boxeo que subrayan la
que fungen de sustento de la intervención socioeducativa estudiada, este matriz no violenta contrastan con la experiencia que relata Elías quien
deporte no sólo no es necesariamente violento, también se lo considera en los comienzos de la EB, en sus primeras peleas (no “guanteadas”
–bajo ciertas condiciones– menos agresivo y menos riesgoso que otros. sino peleas) sintió en carne propia que en el box –igual o más que en
“Todo deporte puede terminar siendo violento si no está bien entrenado, si no cualquier otra disciplina– no todo es juego limpio: “Yo tenía 15, y seguía
te toca un profesor/a que te cuide. Cualquier deporte te puede lesionar, te pue- peleando contra pibes mayores. Yo también… no me daba cuenta que no me
de lastimar” –apunta Analía–. Los entrenadores comparten y refuerzan cuidaban. (…) Es un deporte medio corrupto ya de por sí, en el sentido de
esta idea; Diego dice: “Yo veo siempre que el boxeo es muy leal, porque en el que si te tienen que robar no hay problema (…) Y es un deporte donde hay…
fútbol o en cualquier otro deporte está el que te mete el codo, el que te pega, el mucha maña, en el sentido de que tiene sus partes ilegales, digamos, arriba
que te patea de atrás, te tira la camiseta, en el boxeo vos estás de frente a una del ring (…). Vos tenés que estar cuidando que no te abrace y que cuando
persona, no vale pegar en la espalda, vos subís ahí arriba, te saludas, sabés te abrazás te aprietan con la pera el hombro, (…) hacen también de querer
que él te va a pegar que tenés que defenderte y que vos le vas a pegar, no hay cortarte, meterte el dedo en el ojo. Conocí lo que es el lado malo del boxeo”.
más que eso, entonces es como que ya subís preparado para eso. En el fútbol Esta u otras experiencias similares no anulan para los “defensores” del
yo tengo que meter la pelota en el otro arco, no tiene que venir otro de atrás box –como lo es el propio Elías– la creencia o la certeza que sostienen
y romperme el tobillo y sin embargo pasa. Yo voy a saltar a cabecear una acerca del gimnasio como comunidad moral que impregna valores po-
pelota ¿por qué me tengo que ir con un corte en la ceja porque me metieron sitivos. Veremos a continuación algunas implicancias que tiene para el
un codazo?”. Santi por su parte apunta: “el boxeo es uno de los deportes BBC el tener que lidiar con la imagen de este deporte como violento y
más difíciles que hay… hacerlo bien, claro. Y no solamente eso, es el más duro antisocial cuando la apuesta del proyecto se basa en la ética y la mística
para entrenar, es un deporte que la categoría se da por peso, o sea que tam- que el mismo conlleva.
bién tenés que cuidarte para comer, y la gente eso no lo ve; ve solamente dos
personas que se pegan. En cuanto a las lesiones, el boxeo creo que está en la
posición número 20; y en esquí hay muchísimas lesiones gravísimas”.
En el contexto de lo que hemos analizado anteriormente a propósito de
la concatenación de violencias naturalizadas que suele verificarse en terri-
torios sociales relegados, los aprendizajes relacionados con la regulación
de la violencia interpelan o cambian de signo la violencia como matriz 10. Algunos títulos de los numerosos trabajos que abordan estas problemáticas son
de relación. Una matriz generada por la violencia política, social e insti- por demás elocuentes al respecto, cabe mencionar entre otros tantos: “¿Quién lleva la
gorra? Violencia/ nuevos barrios/ pibes silvestres”; “Jóvenes sin tregua”; “La contracara de
tucional que golpea especialmente a los/as adolescentes y jóvenes de los la violencia adolescente-juvenil: la violencia pública institucional (…)”; “Chicos en banda”.

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7.2. Contrarrestar las representaciones miedo que yo, su nena vaya a boxeo; los hombres no tanto…”. Expresiones
negativas acerca del box tales como “te estás pareciendo a una Raulito, no a una nena” o “el boxeo
es cosa de hombres, que es más fuerte y más resistente a los golpes”, expresan
Para los detractores del box, los valores recién analizados o bien no son con claridad que imágenes, expectativas y estereotipos vinculados al gé-
tales o bien no alcanzan a neutralizar otros sentidos y efectos indeseables. nero intervienen fuertemente en este asunto.
Lo que sustenta las perspectivas contrarias al boxeo no es la violencia Ahora bien, aún en ese contexto de representaciones y tensiones, la
agregada y desleal y tampoco los manejos turbios, sino la violencia re- presencia y la participación de mujeres en la EB –tal como lo expresa
glada e inherente al mismo. Por lo tanto para los/as involucrados en el Lorenzo– está incorporada y naturalizada: “si bien es un deporte de fuerza
proyecto de la EB, sostener la apuesta por la ética y la mística del box im- física las chicas también participan, aunque digan que es vulgar para ellas…
plica necesariamente hacer frente a esas representaciones y “desarmar” Antes sería para hombres, pero está la Tigresa que es una campeona, ya ahí
los argumentos que lo cuestionan. te demuestra que también las chicas boxean. Y acá no se hace diferencia,
La propia coordinadora Analía recuerda que lo primero que pensó como que las chicas pueden entrenar, es más, entrenan al nivel de los chicos.
cuando se acercó a la EB fue: “esto es un asco”, pero que esa idea fue Capaz que en los pesos… si te hacen entrenar con unas pesas o algo así les
cambiando con el transcurso del tiempo a partir de la lectura del trabajo disminuyen, pero después es todo el mismo”. Pero la naturalización y las
de Wacquant y a medida que fue apreciando los significados y los resul- convicciones no obstan para que estos temas continúen “golpeando” en
tados del proyecto que se venía llevando a cabo. silencio, inclusive sobre los propios responsables de la EB: “Igualmente a
Los relatos que ofrecen varios/as jóvenes y las madres entrevistadas mí me da… es como que inconscientemente no me da lo mismo que se peguen
dan cuenta de intensas discusiones sobre este asunto. El temor de las dos chicas, no sé por qué, es rarísimo” –dice el entrenador Santi–. En este
madres, por lo general en razón de un desacuerdo de base (“no estoy marco, es evidente que el hecho de que la propuesta del BBC contemple
de acuerdo que alguien vaya a golpear a otra persona”), refiere sin emba- entrenamientos mixtos (cosa que no suele ocurrir en la práctica deporti-
gues al hecho de que sus hijos/as se expongan a “que los/as arruinen a va en general, y menos aún en los gimnasios de box) se relaciona con la
los golpes”. Ellas valoran la asistencia a los entrenamientos y destacan perspectiva social y educativa del proyecto. Es por eso que –a diferencia
la importancia de las múltiples facetas del proyecto de la EB, pero la de lo que observa Wacquant– en este caso las mujeres, lejos de “alterar el
expectativa de la competencia y, más aún, de hacer carrera profesional orden pugilístico”, son integrantes plenas del orden grupal.
generan en muchos casos situaciones de conflicto. Isabel cuenta que fue En el marco de este estudio cabe subrayar que el “trabajo” dirigido a
a ver pelear a su hijo mayor “una sola vez, porque me insistía, me insistía, desarmar miradas y posiciones como las que hemos puesto de manifies-
me decía ‘pero por lo menos andá a verme’; y yo: ‘no, no, no me gusta, yo to –incluyendo las que remiten a estereotipos de género– es llevado a
no quiero ver a mi hijo que lo estén golpeando’. A mí el boxeo hasta el en- cabo no sólo por los responsables del BBC sino también por los propios/
trenamiento me gusta, más no”. Por su parte Elías recuerda: “el tema es as adolescentes y jóvenes. Queda claro que habiendo optado por la ética
mi mamá ¿viste?… Hace 6 años que yo estoy acá y jamás le gustó que haga y la mística del boxeo, TEMAS optó de hecho por la necesidad de afinar
boxeo, pero bueno igual… yo le dí igual, o sea, no me importó demasiado. estrategias y argumentos capaces de contrarrestar las perspectivas en
Los invité a ella y a su novio [a ver una pelea] y ¡¿para qué?!. Ver 4 rounds de contra del mismo. En otros campos de actividad, las propuestas destina-
3 minutos, que no se terminan más y encima sacando y sacando, pegando y das a adolescentes y jóvenes no conllevan frecuentemente ni con tanta
pegando… Ver eso, para mi mamá fue peor todavía”. En definitiva, los pi- contundencia la necesidad de confrontar con el (dis)valor agregado que
bes/as defienden sus deseos, argumentan y sostienen sus elecciones, las porta la actividad central (aun cuando en más de una ocasión el eje, el
madres contraargumentan y se resisten, y los responsables de TEMAS foco o la modalidad de trabajo ameritarían una mirada crítica).
procuran explicar y persuadir. En la experiencia que abordamos, en cambio, queda claro que rever-
El desacuerdo genérico o la oposición enérgica respecto del boxeo im- tir la carga negativa que acarrea el box supone e implica determinados
pacta más o de diferente manera cuando se trata de mujeres: “es muy aprendizajes por parte de los/as participantes, que deben defenderlo (y
anti femenino el box; para la mujer no me gusta”, dice Isabel. Por su parte defenderse) por la vía de la argumentación. De todas maneras, como ya
Laura, refiriéndose a su mamá (que no es Isabel) dice: “le da un poco de hemos señalado, algunos/as adolescentes y jóvenes adhieren a la ética y a

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la mística del gimnasio sin que ello signifique que les guste o les interese dentro o fuera de proyectos de carácter social y educativo, los equipos
el boxeo, lo cual conduce a pensar una vez más en las singularidades de –federados o no– compiten entre sí, sin que ello signifique una apuesta
este proyecto socioeducativo que se “recuesta” sobre el box pero se juega por la profesionalización. En cambio, en el caso del box, todo indica que
en otros asuntos, que para muchos/as constituyen el principal aporte. “sacar la licencia” (que equivale a “federarse”) preanuncia o supone algún
interés por desempeñarse en circuitos competitivos y tal vez desarrollar
una carrera dentro del amateurismo y/o hacia la profesionalización. La
7.3. Enfatizar lo recreativo, habilitar lo profesional coexistencia en el marco del proyecto de ambas perspectivas, la recreativa
y la competitiva –con o sin proyección profesional–, así como la prioridad
El título de este apartado da cuentas del posicionamiento adoptado por que se le otorga a la primera, queda explícita en numerosos testimonios,
los responsables del proyecto en cuanto al modo de encarar el boxeo: muchos de los cuales refieren a algunas aristas problemáticas del asunto.
priorizar lo recreativo dando lugar a lo profesional. La claridad con que Elías es uno de los jóvenes que encarna con más claridad la expectativa
este principio se explicita no implica la inexistencia de tensiones vincu- de profesionalización: “Yo quiero el año que viene hacerme profesional, pe-
ladas con las expectativas de algunos participantes o entrenadores de ro… hay que ver, yo le estoy dando todo lo que puedo. Ahora bueno, este año
la EB y con la posibilidad de hacerse cargo de igual manera de ambos es el más enquilombado de mi vida, porque nació el bebé, estoy laburando,
términos de la premisa. trato de venir todos los días, no puedo venir todos los días porque el cuerpo a
Excede a los propósitos y a las posibilidades de este estudio ahondar en veces no me da pero… mi idea es no desperdiciar los 6 años de boxeo que me-
las relaciones y las tensiones que operan en la enseñanza, la práctica y las tí. (…) A mí lo que más me gusta es eso, el entrenamiento de boxeo; después
propuestas de trabajo en torno a cualquier deporte entre categorías tales bueno la escuela tiene otros… objetivos, o sea, vas a hablar con Analía, con
como: recreativo / competitivo / profesional / amateur / deporte de base / Diego, bueno, te van a decir que es un lugar para compartir, pero para los chi-
deporte de alto rendimiento. Sin embrago, a efectos de situar y compren- cos, o sea, es más recreativo. Para mí no es recreativo.” Es evidente que para
der ciertas estrategias de intervención y sentidos puestos en juego en la quienes asisten a la EB con la idea de “hacer carrera”, las expectativas y
EB, cabe señalar someramente, que en el ámbito del deporte, la perspec- los significados vinculados con la socialidad y con lo lúdico van cediendo
tiva recreativa no es incompatible con la competencia, que lo competitivo espacio a expensas de lo profesional. En tales casos –señala Celeste– se
no supone necesariamente profesionalismo y que el amateurismo no está torna imprescindible recordar el encuadre y los propósitos del espacio:
necesariamente disociado del alto rendimiento. En este marco, importa “Elías, por ejemplo, es un pibe que interpela mucho. Entrar y que haya col-
particularmente subrayar que lo profesional se diferencia de lo recreativo gada una guirnalda… ‘¿qué es esto? ¡Esto es un gimnasio!’ –dice–, ‘no!, es
en cuanto a la perspectiva de “hacer carrera”, de convertir al deporte en una escuela, no es un gimnasio, no somos la FAB, te equivocaste’. Ahí uno
un actividad rentada y, en el mejor de los casos, en un medio de vida. convive con mucha confianza y uno lo corre: ‘te equivocás Elías’”.
Tanto para los responsables como para los participantes del BBC, ad- Como vemos, garantizar la premisa de lo recreativo exige una custodia
herir a lo recreativo –reiteramos– puede asociarse a ir a entrenar sin permanente a fin de que las prioridades no se inviertan; custodia que de-
depositar tan siquiera un interés especial en el aprendizaje del boxeo, be dirigirse tanto hacia los/as jóvenes cuanto hacia algunos profesores.
pero también puede asociarse a entrenar, aprender a boxear y participar En relación con esto último, surge de los relatos de varios entrevis-
de encuentros deportivos (“guanteadas”) que no implican competencia. tados que la intervención de un entrenador (“el ruso Vladi”) marcó un
Es interesante destacar que, mientras que en otros deportes el en- punto de inflexión respecto a estos temas. “Imagináte que él no quería
cuentro con otros (otro equipo, otro jugador) por más recreativo que sea música en el gimnasio, por ejemplo. Y para mí un espacio para adolescentes
implica competencia, en el caso del boxeo en el BBC el carácter no com- sin música… ¡no existe!, recuerda Paz. “El chabón sabía un montón” –dice
petitivo de la “guanteada” expresa y refuerza la perspectiva recreativa. Nico–, pero la experticia técnica no es lo único ni lo que más valoran los
Desde esta perspectiva, los entrenamientos y los encuentros deportivos responsables del proyecto. Al respecto cuenta Celeste: “La conversación,
se inscriben dentro del conjunto de actividades recreativas (como los al mate, que era algo que la escuela siempre quería, a veces el perfil de los
viajes y las salidas) que promueve la EB. profesores lo modifica. El año pasado con Vladimir… él, al no tener esa for-
Cabe señalar asimismo que en el caso de otros deportes, promovidos mación, era muy difícil exigirle algo que él no entendía; el trabajo del profe

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en la escuela es complicado porque tienen que tener todo el contenido y todo
el saber del deporte, del box, pero una impronta social muy abierta (…). A
los profesores muy rápidamente se les corre el eje y es complejo porque eso es
parte de su especificidad; ahí también fue todo el tiempo aclararle: ‘la escue-
la es recreativa’. Hemos tenido muchas discusiones y muchos debates de los
pibes (…) pero con eso no se transa, el límite es ése”.
Otorgar centralidad a la técnica, dar lugar a lo competitivo o priori-
zar las expectativas de profesionalización, han colisionado en más de
una ocasión con los propósitos del proyecto. Así, la posibilidad actual
de sostener con claridad la perspectiva recreativa es el resultado de una
búsqueda y de una construcción por parte del equipo de TEMAS, un
proceso que ha debido atravesar conflictos y dificultades. El relato an-
terior de Celeste habilita a observar que la tensión recreativo / profesio-
nal en el BBC alude a la expectativa de que los entrenadores –en tanto
tales– sean buenos referentes en el marco una intervención socio edu-
cativa, y también a que es imposible que un entrenador se constituya
en referente en ese sentido si no es bueno “en lo suyo”. Es evidente que
encontrar y consolidar perfiles que puedan resolver favorablemente esa
ecuación constituye un punto crítico de esta intervención (y de aquellas
que trabajan con lógicas y propósitos similares).
Otras situaciones operan como señales de que lo central en el BBC no
es la carrera profesional y –forzando la cuestión– tampoco lo es el boxeo
en sí mismo; éstas son: la existencia de un proyecto marco y la presencia
predominantemente femenina entre los/as referentes. Así lo explica Ce-
leste: “muchas veces les pasa, a los nuevos que se van incorporando, por ahí
por vergüenza no lo dicen, pero hay una mirada rara como diciendo: ‘¿estas
dos qué hacen acá sentadas, mirándonos?’. Esa es la explicación de que la
escuela no es sólo el practicar deporte, no es sólo hacer boxeo, que la escuela
es un lugar de referencia para ellos (…) muchas veces hay que plantear por
qué el coordinador no es varón. De hecho, muchas veces nos cuestionan que
somos muchas mujeres”. Mujeres ocupando lugares de responsabilidad
y de autoridad en el mundo del box que el gimnasio del BBC abre para
los/as participantes es, sin lugar a dudas, algo disruptivo y sugerente en
términos del sentido que TEMAS pretende darle al proyecto.
En este escenario, entre los/as participantes hay quienes no tienen el
objetivo definido de “hacer carrera” pero no descartan esa posibilidad, y
quienes, en cambio, la descartan por completo. Veamos algunos testimo-
nios al respecto: ”Igual yo lo uso como pasatiempo, pero si algún día puedo
llegar a ser un boxeador profesional, bueno, pasará. Es una oportunidad úni-
ca, el día de mañana podés ser uno de los mejores, podés llegar a los juegos
olímpicos, la oportunidad que te dan en el boxeo, que es uno de los deportes

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que más se destaca en el sentido… competitivo” –dice Rodrigo–. Y Nico aña- De todos modos, la experiencia que analizamos encuentra aquí ten-
de: “A mí me han propuesto varias veces sacarme la licencia y todo eso pero yo siones que obligan a redefinirse ya que –como reitera Celeste– con
le dije: ‘la verdad que no, yo quiero entrenar, no quiero ser boxeador’. Cuando frecuencia acecha el riesgo de “perder el eje”: “‘che, tal pibe quiere la li-
hicimos peleas contra otros, iba a pelear, todo así, pero mi intención no es ser cencia’, ‘a ver, boxísticamente está, pero… ¿está? ¿puede?’. También ahí no-
boxeador, no me atrae ser boxeador, me gusta pelear y todo eso pero ser boxea- sotras muchas veces bajamos la cosa “paren, paren, paren”, por suerte este
dor no me atrae y en este momento también tengo otras prioridades”. año no pasa pero otros años ha pasado. El exitismo del boxeo, eso a veces se
Quienes sueñan con un futuro de boxeador/a, como es el caso también pone complejo. ‘¡Ey, ey, ey, nosotras acá no venimos a sacar licencias!’. De
de Laura a pesar de las negativas de su madre, saben que eso significa hecho también ahí hay una cuestión en TEMAS: ver cómo acompañamos
entrenamientos más exigentes, esforzados, agotadores. Desde la pers- o no acompañamos al que quiere ser profesional. La verdad es que desde lo
pectiva de la salud el Dr. Daniel señala lo que implica esa opción y ese profesional nosotros no acompañamos porque no podemos, porque también
cambio: “No es el mismo recorrido, un pibe que va a hacer boxeo dos veces ahí se corre mucho el eje de la escuela, y nos ha pasado (…). Para el resto de
por semana como un deporte extra escolar, al pibe que está yendo 6 días por los chicos se pone injusto; para los dos: para el pibe que tiene licencia que te
semana y empieza a competir. El pibe que ya entra dentro de la Federación de demanda: ‘vamos a pelear, dale’, y está bien, es parte de su proceso, está bue-
Box, ya es la Federación la que pide determinada cantidad y calidad de con- nísimo, pero el resto del grupo queda desdibujado”. El testimonio expresa
troles. (…) El pibe que decide hacer de este juego un deporte, y de un deporte claramente tanto los límites de la intervención de TEMAS en lo relativo
un deporte profesional, los vas a ver recontra comprometidos con su salud”. a la profesionalización en razón de los propósitos que privilegia, cuanto
“Habilitar lo profesional” implica para TEMAS acompañar a quienes la necesidad –que reaparece– de mantenerse alertas a ciertos desplaza-
se inician en ese circuito involucrándose en trámites, viajes, cuidados mientos de sentido que se generan en torno a la habilitación de carreras
especiales, entrenamiento específico… y también alguna expectativa. (en este caso: competitivas). Estos asuntos, al igual que la calidad de lo
Tal vez por eso, aun cuando no duda acerca de cuáles son las priorida- que se ofrece cuando se sostienen propósitos sociales de inclusión, atra-
des y los propósitos centrales del proyecto, Santiago exhibe con orgullo viesan problemáticamente a numerosas iniciativas y proyectos.
la buena performance de los (pocos) jóvenes que están en carrera: “Va- Las madres entrevistadas tienen diferentes perspectivas al respecto de
mos a la Federación de Box y estamos de igual a igual, y hemos ganado acuerdo a las particulares experiencias vividas por y con sus hijos y –co-
peleas. Las que fuimos, las ganamos todas”11. mo hemos mencionado– según se trate de varones o de mujeres. Isabel,
Ahora bien, la competencia tiene sus vaivenes; Elías recuerda, por una por ejemplo, da cuentas de las expectativas desmedidas que la posibilidad
parte: “fui el primer campeón Evita, porque era la primera vez que en los de profesionalizarse generó en Elías quien, a poco de empezar a viajar,
Evita se metía boxeo”; y por otro lado: “fuimos con Santi a Salta… y nada, estimulado por su entrenador del momento, “se la creyó” y ya se veía como
guanteamos, no me fue bien, me fue como el culo… pero guanteando contra un campeón, con fama. “Realmente lo del boxeo lo trastornó bastante, para
un pibe del seleccionado.” En cualquier caso, no parece un asunto menor mí no le hizo nada bien”, señala; y desliza que en ese tiempo dejó de ir a
que la centralidad que el proyecto le otorga a la grupalidad, a otras activi- la escuela. Los responsables de la EB saben que esa situación obedeció a
dades o al seguimiento integral de los/as pibes/as no actúe en desmedro otras razones, y también saben que “con el box solamente no alcanza”.
de los aprendizajes en torno a lo que constituye el eje de la intervención: En cualquier caso, lo que nos interesa subrayar antes de cerrar este pun-
el boxeo. Es decir, lo socioeducativo como encuadre y como propósito e to es que, en su versión recreativa, la EB se instala como un espacio rele-
inclusive el box como “excusa” no obstan para resguardar la calidad de vante en términos de convivencia y de funcionamiento grupal. Y en su
la oferta en lo deportivo. versión competitiva o profesional instala –además– una ilusión que sus-
tenta un proyecto, toda vez que involucrarse en una carrera supone ima-
11. Los asuntos que venimos desarrollando tienen lugar también -con especificidades ginar un futuro posible. En este sentido, la expectativa de la competencia
propias de cada caso- en proyectos centrados en otras áreas o disciplinas. Es habitual es- y/o de la profesionalización estaría operando como vector de estructura-
cuchar que “el objetivo no es formar músicos profesionales” (o bailarines o fotógrafos o…)
toda vez que la intención formativa amplia se antepone a la intención de formar especia- ción personal sobre la base de aprendizajes que habilitan a hacerse cargo
listas (boxeadores o bailarines o fotógrafos o…). Pero es usual también que si algo cercano de las propias aspiraciones.
a eso termina ocurriendo, eso sea leído como un logro o un beneficio secundario que se
vive con cierto orgullo y satisfacción.

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8. Significados que adquiere la experiencia chicas –tanto como las madres– subrayan el valor del buen lugar para
para los/as adolescentes y jóvenes estar en gran medida por oposición a lo malo del afuera y/o al no hacer
8.1. Un lugar de pertenencia, un espacio de referencia(s) nada. Los/as jóvenes mencionan, por cierto, otras cosas lindas o buenas
que hacen o que les ocurren pero, llamativamente, éstas no dejan de
Cuando analizamos la apertura y la disponibilidad como rasgos clave remitir a la lógica dicotómica “adentro- afuera” en la cual aparecen otros
de las prácticas desarrolladas por los responsables del proyecto, la pers- “adentros” valorados, como la Iglesia o la Casa de la Cultura. Espacios y
pectiva y los testimonios de los/as adolescentes y jóvenes preanunciaban momentos tales como juntarse a charlar por ahí o encontrarse en la plaza
que la EB y todo lo que ésta conlleva constituye para ellos/as un lugar aparecen débilmente en sus discursos.
con características de refugio. En efecto, el gimnasio (y/o el proyecto) es De acuerdo con el análisis que presenta Wacquant, diremos que estas
significado como un espacio “propio” asociado al bienestar y a la disten- percepciones dan cuenta de la doble relación de simbiosis y oposición
ción. “Tenés compañeros, te cagás de risa, está bueno. Es como un verano, que establece el gimnasio de box con la dura realidad del barrio. Dichas
que te metés ahí… y la pasás re bien –dice Román–. Yo acá me río, me argumentaciones y valoraciones representan la contracara (confirmato-
divierto” –señala Nico–. “Desde que empecé boxeo me río más, tengo más ria) de lo que Efrón (2003) denomina “subjetividad de la esquina”. En
amigos, y eso es lindo” –cuenta Laura–. Algo del orden de la calidez trans- vistas del modo como los jóvenes más relegados de los barrios empobre-
mite la expresión “es como un verano”, congruente con las frecuentes cidos se presentan a sí mismos en virtud de las escasas oportunidades
alusiones a la diversión y a la risa. No es evidente que al referir a espa- que tienen y de las pocas actividades que realizan, Efrón advierte, inte-
cios de entrenamiento deportivo se subraye con tanta vehemencia y se rroga, hipotetiza, acerca de la especificidad de esa subjetividad que pa-
le otorgue una importancia tal a climas y rasgos como los mencionados. rece ser, precisamente, su relación con “la nada”. Todo indica que eso es
En relación con ello, expectativas y experiencias vinculadas a conocer lo que quieren evitar(se) los chicos y las chicas que participan de la EB.
gente, buscar novio/a, charlar o joder, ponen de manifiesto que el BBC Acerca del BBC como estímulo para hacer algo (“sano”) y como pro-
es vivido como un ámbito privilegiado para la sociabilidad. Los propósi- puesta que vino a ocupar un lugar vacante, Carla dice: “No me veo en el
tos y las estrategias de TEMAS que giran en torno al fortalecimiento de barrio sin la escuela de boxeo. Donde está fundada la escuela de boxeo había
la grupalidad hallan correlato, por lo tanto, en las representaciones y en muchas piedras grandes, donde los pibes se juntaban a fumar marihuana o di-
las vivencias de los/as jóvenes involucrados/as. Elías, desde su óptica de ferentes cosas, obviamente a chupar, veías pibes con armas y hoy por hoy no las
pibe más grande, subraya: “hay chicos que vienen para…más para buscar ves, ¿por qué no las ves? porque está la escuela de boxeo, más allá que ellos no
eso, para buscar gente, para sentirse…o sea para no estar al pedo, digamos, intervienen directamente para decirle a un pibe ‘no fumes’”. Tratándose de
vienen a boludear ¿qué sé yo? (…) Teniendo todos chicos de la misma edad, adolescentes, dice esta madre, la cosa se complica: “en casa pura pachorra
están pasando prácticamente por lo mismo… se hacen amigos”. Lorenzo, y afuera pueden meterse en cualquiera”. Lorenzo por su parte ratifica: “…ca-
que casi no va a entrenar, también “va”: “… si no es para entrenar, es para paz que en los momentos que no he estado entrenando habré estado acostado
visitar, para saludar, para estar. Para divertirme con ellos, digamos; para o haciendo nada, habré estado mirando el techo como media hora aburrido y
pasar el tiempo (…), y va generando confianza o lazos”. acá es como que te abre un espacio que además de entrenar te entretiene”.
En dicho marco, “pasar y entrenar” constituye una rutina agradable Todo indica que la EB se muestra productiva y eficaz en términos de
que los conecta con algo bueno; Román lo cuenta de este modo: “Todos interpelación y resignificación del uso del tiempo por parte de los/as jóve-
los días antes de hacer algo siempre me vengo a entrenar un poco de boxeo, nes. Asimismo, parece pertinente pensar que las referencias a “la nada”
ya me dicen la hora, le digo ‘¿Diego, no me podés decir a qué hora van a ser que caracterizaría la vida sin el BBC derivan de la contundencia con que
ya las seis?’ y bueno él me dice ‘Romancito ya son las seis’, ‘Bueno, gracias el proyecto carga de sentido y de propuestas la cotidianeidad de los pibes.
por el entrenamiento’ y me voy… Lo que más me gusta es que acá, en vez de Tan es así que, en la medida en que el proyecto de la EB ha pasado a for-
hacer algo malo afuera, siempre vengo a hacer algo bueno acá, porque lo mar parte de sus días, los/as adolescentes y jóvenes sienten la falta cuando
malo a mí no me gusta…” –por breves períodos– no hay actividad y el gimnasio no está disponible.
En el marco de las percepciones acerca de la relación “afuera-adentro” Las palabras de Celeste ponen en evidencia la intencionalidad del pro-
que ya hemos mencionado, es elocuente cuánto y cómo los chicos y las yecto que se plasma en los significados construidos por los/as pibes/

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as: “Para mí lo fundamental de boxeo es sentir un espacio propio: puedo no saliendo… Sin embargo, la sensación generalizada es que allí todos bus-
tener ganas de hacer nada pero voy, me siento, y nadie me va a preguntar can y encuentran (su) espacio y tranquilidad.
‘¿qué estás haciendo acá’?” Queda claro que “hacer nada” es en este caso El uso intensivo del espacio no parece responder solamente a las condi-
sinónimo de estar a gusto y de algún modo también es sinónimo de ha- ciones materiales existentes, algo exiguas para la cantidad y la variedad
cer algo, esto es: estar allí. Complementariamente, entonces, la “nada” de actividades y de personas que alberga. En razón de lo que las limita-
aparece también relacionada con lo que se hace o lo que ocurre adentro, ciones habilitan, éstas no constituyen un problema o no son significadas
toda vez que “ir por ir” es válido y legítimo y sustenta la idea del espacio como tal. Amucharse genera cohesión. El valor cohesivo del espacio y la
propio. “Y… es su lugar, ellos lo sienten así, van, ponen su música, charlan, posibilidad de mantener la dispersión bajo control (Schvarstein, 1989)
(…) lo sienten como su espacio, como un lugar más para ir, para juntarse, junto a un cierto clima doméstico que tiñe lo que allí acontece (la reu-
para recrearse” –señala Diego–. “Los chicos pasan y miran y se quedan a nión, la comida, la charla) indicarían que el espacio porta un valor pro-
tomar mate… y esto está bueno porque es ir tomando como suyo el espacio”, pio e impregna significados que refuerzan los sentidos del proyecto.
señala por su parte Leti dejando ver, además, que lo relativo a la apro- Todo en el BBC ocurre en los escasos metros que separan el ring del
piación del espacio, que era un propósito y fue un proceso, es hoy una espejo frente al cual se realizan los ejercicios de “sombras”; así, el uni-
realidad que muchos jóvenes valoran. verso box, con sus elementos, su estética y sus reglas, es al mismo tiem-
En línea con esa descripción, Nerina cuenta –y agrega otros motivos po escenario y protagonista.
al mate y a la apropiación–: “Me gusta venir a tomar mate con Analía, a Es notable, por otra parte, que la madre cuyo testimonio citamos más
dar una mano, a ver qué hace falta. ¡Porque hay que estar trabajando acá arriba, tan pronto como señala que en su casa no hay mucho lugar, di-
¿eh?! Es muy duro estar recibiendo a estos chicos todos los días… Yo admiro ce que en la EB la hija tiene espacio para tomar decisiones. Clarísimo:
lo que hacen”. “Muchos vienen y están y se toman unos mates charlando o según Carla, en la EB los/as pibes/as tienen (un) lugar puesto que allí
estudiando” –agrega Diego–. “O chicos que por ahí se sienten mal y dicen participan de proyectos y son hacedores de cosas que les interesan. La
‘no, no, hoy me duele la cabeza, hoy no voy a entrenar’, y vienen pero no hija de Carla no tiene en la EB más metros cuadrados a su disposición
entrenan”. Lo que describen los testimonios es a todas luces un ámbito que los que tiene en su casa; lo que tiene allí es un espacio contenedor y
de pertenencia, una suerte de club de barrio a donde se va y por donde productivo a cargo de adultos que escuchan y dan la palabra. El término
se circula con motivaciones diversas, con la particularidad de que en el “espacio” y la carga valorativa altamente positiva que le atribuyen los/as
ámbito de la EB quienes van están a cargo de los responsables del pro- entrevistados/as remite, por lo tanto, menos a la dimensión física y ma-
yecto. Sugerimos entonces que los/as pibes/as eligen ir allí como lugar terial del lugar, que a un significado simbólico relacionado con lo que
de encuentro no sólo con sus pares sino también –y en ocasiones princi- allí se ofrece. Es por eso, creemos, que nadie se queja de la falta de espa-
palmente– con los adultos. cio; lejos de eso: “el gimnasio es un lujo” destacan algunos/as. Así, el tu-
En ese marco, y aportando otros elementos, Carla, en su condición de multo y la “superpoblación” no obstan para que el BBC contraste con el
madre, entiende que lo que TEMAS brinda y lo que los pibes/as buscan hacinamiento que viven muchas/as adolescentes y jóvenes en sus casas.
y encuentran en el gimnasio es “un espacio, que en las casas quizás no En este marco, dos condiciones sustentan los significados vinculados al
lo tengan. Por ejemplo, vos ves, acá en mi casa… ellos no pueden tener un espacio propio y el bienestar, éstas son: la continuidad de la oferta de la EB
espacio propio, donde quizás sentarse y estudiar, ¿por qué? porque somos y la participación sostenida durante años. “Voy ahí desde hace 4 ó 5 años,
muchos. Ella [se refiere a su hija] allá tiene su espacio, el espacio que no casi todos los días –dice Laura–, y sentís como que es tu espacio; o sea: sentís
puede tener en su casa –quizás como muchos chicos– lo tiene allá; decisio- como que no es la escuela de box, es nuestra escuela de box”. Tal vez por eso,
nes que no puede tomar acá –porque obviamente que las decisiones mayores cuando esta joven piensa en el futuro, anticipa: “Voy a estar extrañando
las tomo yo– allá se la escucha y las puede tomar. ¿Por qué? porque ese es mucho boxeo. De vez en cuando voy a ir, ponéle, en el futuro… si es que sigo
su espacio, el espacio para ellos”. En rigor de verdad, hay que decir que abogacía, voy a ir (…)”. El BBC, por lo visto, dado que es un buen lugar pa-
en el gimnasio no hay mucho lugar, más bien todo lo contrario. Sue- ra estar, también lo es para volver. Cabe señalar aquí que la adolescencia
le haber mucha gente, actividades simultáneas, reuniones, música de es el tiempo de las rupturas y el momento de hipotetizar acerca de la vida
fondo, gente sentada, entrenando, escribiendo, mateando, entrando y futura, y que disponer de referencias que sostienen y regulan es condición

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de posibilidad para poder desprenderse de ellas a fin de construir pro- 2004) en tanto figuras de referencia para la construcción identitaria,
yectos autónomos. En ese sentido, el gimnasio como lugar de referencia ofrece elementos que contribuyen a explicar dichas representaciones
oficia de alguna manera de plataforma para salir al encuentro de otros y vivencias. Apuntamos aquí brevemente que, entre otros prestadores
lugares, teniendo con qué hacerlo, y eventualmente a dónde regresar. de identidad (como los antepasados, los genitores, los reales o el grupo
Dentro de la representación compartida de que se trata de un “lugar de pares), “los que asumen las postas”/ los “relevos”, es decir: médicos,
propio” y de una “casa de todos”, no llama la atención las frecuentes animadores sociales, educadores, etc. adquieren especial relevancia en
expresiones y vivencias que remiten a “lo familiar”. Elías –como otros contextos de dificultad existencial o de fragilidad de otras referencias.
tantos– no tiene dudas al respecto: “Mirá, acá, la escuela ésta, lo que tiene La experiencia de los participantes (y de los responsables) del BBC re-
es que somos una familia, es así… Yo ahora porque estoy más grande que los mite indudablemente a la figura de “los que asumen las postas”/ los
chicos, o sea… en el sentido de que no comparto tanto. Pero mi grupo era una “relevos”. No es éste un asunto menor en un momento de la biografía
familia (…). El fin de la escuela es ése, no es sacar boxeadores. (…). ¿Por qué personal en que es necesario tomar distancia de los adultos significati-
sigo viniendo? Porque me gusta el lugar, además siento que esta es mi segun- vos de la infancia para construir nuevas referencias identificatorias so-
da casa; es así. Ya en este lugar me conocen todos, me conocieron todo acá, bre las cuales (re)afirmar la propia identidad. En sintonía con lo que los/
la mayoría de mis amigos, ya te dije los conozco de acá. Pero no, a este lugar as adolescentes y jóvenes explicitan o transmiten, cabe subrayar aquí los
no creo que nunca deje de venir, o sea, ya es mi casa, digamos, me siento bien efectos subjetivantes que producen experiencias de esta naturaleza.
acá”. Nerina, que hace ya tiempo que no entrena, también reconoce en
este espacio un lugar propio y más aún: se reconoce o se presenta como
“del lugar”, atribuyéndole a la EB el estatuto de marca de identidad. Y 8.2. El desahogo y la descarga
sugiere asimismo lo familiar de manera inequívoca a través de la pre-
sencia de su hija, tanto en su relato como durante la entrevista. “¿Ve “Me parece que es real –reflexiona Celeste–, que hay una descarga física
cómo me conocen todos? Yo acá estoy en mi casa. Y mi hija también. Ella real. De hecho los pibes muchas veces te lo dicen: ‘tuve un día de mierda, ni me
creció acá. La conocen todos, y a ella le gusta venir. A los 16 terminé la pri- hablés, no me vengas con la psicología…’ es como un ‘no te quiero escuchar’.
maria (…) Y después iba a entrenar, con mi hija iba, con mi hija de 3 años. Con los más grandes pasa mucho, vienen re-cruzados y cuando termina el día
Yo soy de acá, esto es como mi casa”. te das cuenta que la revirtió. Y también… mucho más allá del entrenamiento,
Resulta significativo que la idea de familia aparezca también en el re- es el espacio”. En línea con lo que observa Celeste, ‘desahogarse’ es un sig-
lato del Dr. Daniel; veamos cómo esta idea aparece no sólo en el discurso nificado claro y reiterado en gran parte de los testimonios que hemos re-
sino también en el modo como él organiza el registro y el seguimiento cogido entre los/as participantes de la EB. Desahogarse es algo más y algo
de los/as jóvenes: “Es muy raro que Analía no venga con ellos. (…) Además diferente que distenderse o que estar a gusto; no alude tanto a estar con
los chicos que vienen de Fundación TEMAS tienen todos la misma historia otros, a socializar o a divertirse cuanto a librarse de malestares y pesares.
clínica. TEMAS, es una familia, por lo cual los chicos de TEMAS tienen la “Me exijo, me desahogo” –dice Rodrigo–, mientras que Nerina desarro-
7289, digamos, es la historia clínica de TEMAS. (…). Todos los chicos de TE- lla y explica: “Lo que pasa es que los chicos están alterados afuera, y llegan al
MAS tienen ese mismo número, entonces vos ya sabés de antemano, cuando gimnasio y se desquitan adentro. Uno se da cuenta… el papá no lo entiende,
ves el número, ya sabés que viene de TEMAS”. tienen problemas, nadie los ayuda, entonces entran y se desquitan. Y cuando
El análisis que realiza Wacquant acerca de la dinámica y de los efectos hacen los ejercicios se descargan, y cuando guantean se tienen que cuidar.
de la vida en el gimnasio de box destaca, junto a los sentimientos de Porque si se desquitan sin cuidarse y agarran los guantes, o mismo cerca de
cofradía y camaradería, la percepción de contar con (o de pertenecer a) la bolsa, se pueden hacer mal. (…) Y todo eso es un refugio, eso es lo que digo.
una “segunda familia”. Ahora bien, de acuerdo a los testimonios de los/ Por eso digo que a lo mejor otra cosa, otra actividad, como usted me preguntó
as adolescentes y jóvenes entrevistados, cabe sugerir que el BBC es sig- antes, no serviría tanto aunque sea más útil. ¿Qué hace un chico si no puede
nificado a menudo como la familia primera, o en todo caso como la más desquitarse ni desahogarse?”
relevante en materia de referencia y de protección. Es notable que la percepción y la idea de refugio reaparezca en este
La noción de “prestadores de identidad” (Kammerer, en Frigerio, caso asociada a la posibilidad de desahogarse, expresión que remite

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inequívocamente a la necesidad de los/as pibes/as (y a la posibilidad que borracho, maltrataba a mi mamá y a mí también; es muy duro crecer así
ofrece la EB) de combatir la sensación de ahogo que atraviesa sus vidas. –continúa Nerina, refiriendo en este caso a su propia experiencia y no
En el gimnasio pueden respirar. ya a la de ‘los chicos’ como en la cita anterior–. En este marco, pegarle a
la bolsa es algo así como una liberación: “(…) yo no venía a entrenar para
boxear bien. A mí no me gusta pegarle a la gente, lastimar. Acá a veces se las-
timan duro ¿eh?! Yo no; yo le pego a la bolsa, no a la gente. Y como le decía: te
desquitás, aprendés (…). Por eso yo me bancaba el dolor que a veces me daba
en el cuerpo por el entrenamiento. Yo hacía box… ¡y al otro día me dolía todo!
Hay que aguantar eso ¿eh? ¡Mucho dolor a veces!.” El relato de esta joven es
elocuente: el dolor que causan el entrenamiento y el boxeo ayuda a sopor-
tar otros dolores, tanto más difíciles de explicar, de admitir y de tramitar.
Entrenarse en la resistencia o en la indiferencia ante el dolor no es
una necesidad de todos pero significativamente muchos mencionan al-
go similar; en palabras de Elías: “Los pibes no tenían dónde descargarse a
veces los muchachos ¿viste? Boxeo…meterlo justo acá a boxeo fue un golazo
porque los pibes de acá necesitan descargarse, muchos. Acá, el barrio… pri-
mero que es un lugar bajo, y digamos, las vidas… Yo conocí muchos pibes
acá, muchísimos, y la vida de cada uno es… todos tienen muchos…Yo, al
lado de ellos, no tengo muchos problemas como para usar boxeo como algo
para descargarme, pero hay pibes que lo usan para descargarse, qué sé yo…”.
La descarga se presenta como una clara expresión del cuerpo a cuerpo
con la vida característico de la adolescencia y de la juventud temprana
(Le Breton, 2011). Los/as pibes/as testean a través del cuerpo los recur-
sos con que cuentan para procesar tanto las circunstancias de dichas
etapas de la vida cuanto las condiciones en que las cursan (retomaremos
este tema en el apartado “La gestión del cuerpo”).
También para las dos madres entrevistadas el boxeo, o mejor dicho
la participación en la EB, permite “sacar la bronca que uno tiene aden-
tro, golpeando la bolsa”; ellas señalan además otras cuestiones. Carla dice
que su hija “iba y golpeaba; golpeaba porque tenía bronca y se descargaba, y
toma decisiones ella en boxeo, se consulta y se aprueban las decisiones (…)”.
Con idéntico sentido, la referencia recurrente al desquite (quitarse Es interesante lo que aporta esta madre, para quien –como ya hemos
algo) y la descarga habla de cuánto y cómo esta propuesta permite re- visto– la participación de los jóvenes en las decisiones es algo impor-
mover, o neutralizar u olvidar transitoriamente, unas cargas difíciles de tante. Lo que ella agrega es que para sacarse broncas no alcanza con la
sobrellevar. Desde esta perspectiva, la posibilidad del desahogo y de la descarga física; o en todo caso sugiere que el hecho de que los/as pibes/
descarga justifica y legitima el box en ese contexto. Al respecto dice San- as sean reconocidos/as como parte de algo potencia y califica el desaho-
ti: “y si, la descarga (…). No es lo mismo estar jugando al fútbol que pegarle go. Por su lado, Isabel enfatiza el sentido y la necesidad de la descarga
a una bolsa, vos pegándole a una bolsa empezás a… Te vienen a la cabeza refiriendo más al procesamiento de la adolescencia que a otros asuntos.
un montón de cosas que las vas sacando, y eso es para mí la gran diferencia “Él lo toma como te dije recién (…) como algo donde él va y desahoga todo
del boxeo”. Lo que los adultos observan e interpretan, los pibes lo expli- su potencial, su energía. (…) En la edad de ellos, que necesitan descargar las
can desde su experiencia: “Yo tuve una infancia terrible: mi papá siempre energías en algún lugar…”.

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De manera general, tanto los/as pibes/as como los adultos reportan entrenamiento y en la competencia, contribuyen a discutir la idea del
con una frecuencia elocuente las broncas y las rabias que es imperioso box como deporte violento. Más aún: al parecer, el box los torna más
“sacarse de encima”, así como los cambios evidentes a partir del entre- cuidados(os) y menos violentos.
namiento, que permite a los/as jóvenes “aplacarse” o tranquilizarse. Es- Los testimonios que siguen son elocuentes al respecto. Luego de afir-
tamos obligados a leer allí –creemos– no sólo o no tanto las virtudes del mar que “el boxeo no es un deporte sangriento” y que le sirve para cuidar-
boxeo y los efectos de la propuesta de TEMAS, cuanto aquello que los se, Nico explica por qué en la escuela no cuenta que practica boxeo: “No,
testimonios no explicitan pero denuncian; sobre todo y antes que nada: no le cuento a nadie porque para mí que piensan si les digo ‘yo sé boxeo’,
las consecuencias del orden social injusto sobre los/as pibes en términos ‘ah… entonces sabés boxear, vení y peleáme’, por eso no quiero decir para
de sensaciones y de necesidades predominantes. En ese marco, asistir al no tener problemas. (…) El boxeo no es para amenazar a otro”. Y continúa
BBC y pegarle a la bolsa para desquitarse se presenta como una manera contando: “para decir la verdad, cuando era chico pensaba, ‘bueno voy a
radical de huida del sufrimiento. ir, voy a aprender a pelear y le voy a pegar a todos’, la primera vez que vos
le preguntas a alguien y…: ‘es para aprender a pelear’. Es bastante común,
en el barrio o en cualquier lado [la idea de que] venís para aprender a pe-
8.3. Le experiencia del cuidado lear. Bah, en realidad sí, era para pelear pero aprendes a no pelear, que es
diferente. O sea, no es lo mismo pelear ahí que estás protegido, que tenés tus
Todo lo que rodea al cuidado constituye un asunto relevante para que los guantes, tus… que pelear acá afuera que te puede pasar cualquier cosa”. Es
valores atribuidos al boxeo (que hemos abordado anteriormente) puedan notable: aprender a pelear enseña a no pelear. Cuando Nico subraya esta
verificarse. Cuidarlos/as y que se cuiden son puntos claves en la EB, por aparente paradoja, además de estar destacando algunos de los efectos
lo que explicar qué pasa si no se cuidan es imprescindible. El cuidado es que para él (y para muchos) tiene la experiencia, está sugiriendo que
estrategia, contenido y resultado esperado, es decir: cuidarlos y enseñarles
a cuidarse es un aspecto central de la intervención; cuidarse y cuidar a los
demás es algo que los chicos y las chicas aprenden y ponen en práctica.
En ese marco, conteniendo unos sentidos que exceden lo estrictamen-
te deportivo, son numerosos los pasajes de las entrevistas y los momen-
tos de actividad que hemos observado en los cuales los/as adolescentes
y jóvenes expresan su reconocimiento hacia el cuidado que reciben por
parte de los adultos y se muestran “entregados” al mismo. De algún mo-
do, lo que se hace y lo que se transmite al respecto en el BBC da sentido
a la experiencia de los/as adolescentes y jóvenes, al tiempo que –como
señala Carla– marca una diferencia respecto de otros espacios e institu-
ciones: “Acá al chico se lo contiene un montón, se lo cuida tanto físicamente
como emocionalmente, allá no, en la Federación de Box no”.
La experiencia de la protección que a su vez habilita a cuidar y a cui-
darse se pone de manifiesto con claridad en la práctica del sparring en la
que prima el principio de reciprocidad, el control de los riesgos y el apro-
vechamiento mutuo de la situación sin sacar ventajas de la situación del
otro. En el caso del BBC, estas características son aún más evidentes
cuando las parejas para entrenar o para “guantear” son mixtas.
En este escenario, los cuidados relativos a la condición física, a la sa-
lud, a los criterios para establecer quiénes, cuándo y cómo pueden subir
al ring o participar en “guanteos”, así como las reglas implicadas en el

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“normalmente” –sin la intervención de la EB en sus vidas– tal vez, se 8.4. La gestión del cuerpo
pelearían mucho más… Algo similar dicen o sugieren los entrenadores:
“los chicos que han tenido problemas o que tuvieron problemas en la escuela, “Para mí no está mal… pero hay chicos que vienen a eso: vienen a entrenar
empezaron boxeo y dejaron de pelearse” (Santi). “El deporte… justo éste, a solamente, no vienen a hacer boxeo”. El testimonio de Elías ratifica que,
ellos les sirve un montón. Esto de saber que yo pegándole a alguien lo puedo aun cuando las rutinas, los ejercicios, el equipamiento, las marcaciones
lastimar, por ejemplo, por ahí, hasta que no hacías boxeo no tomaste con- de los entrenadores, todo, gira en torno al box: ‘entrenar’ –en el BBC– no
ciencia de eso” (Diego). significa necesariamente ‘hacer boxeo’. Cabe pensar que esta opción no
Pero más allá de las apreciaciones acerca de la violencia (que hemos es del todo ajena a la búsqueda de desahogo, pero hay otros elementos
abordado en otros apartados), importa señalar que los cuidados que que convergen en este significado: para muchos adolescentes y jóvenes,
exige el box –al menos en el contexto del BBC– resuenan en otro pla- porque no les gusta pegar y ser golpeado o simplemente porque no les
no, aludiendo a una protección más genérica y más profunda. A ello se interesa este deporte, entrenar (no para boxear) es una manera de aten-
refiere de alguna manera Celeste: “también es parte de la adolescencia der su cuerpo y de estar atentos a su salud. “Yo, cuando entrenaba, estaba
que un otro te venga a cuidar, (…) hay una valoración de ese cuidado y de más gordita –dice Nerina–, comía más. Había cambiado mi cuerpo y me
saber que Santiago no los va a hacer subir al ring con cualquiera, quizás gustaba. Pesaba 4 kg y pico más que ahora. Tenía más ganas, más energía,
sean “guanteadas” recreativas, muchas veces pasa en los festivales que se re- más ganas para todo. Es extraño a lo mejor pero me gustaba tanto… trans-
enojan y es re-entendible porque vienen re-preparados y les faltó el que venía pirar, sudar, hacer soga, pegarle a la bolsa”. Lorenzo, por su parte, cuenta:
y entonces: ‘no vas a guantear’, y ellos te dicen: ‘¡pero no, si había otro!’; “[sin el entrenamiento] yo sería –además de bajito– flaquito. No estaría en el
‘no, yo no te voy a hacer subir a “guantear”, con otro que no sé ni quién es, estado físico que estoy ahora”.
ni de dónde viene’ y en eso se enojan. Pero después hay una cosa de valo- El “uso” del entrenamiento como oportunidad para mantenerse en
ración, porque han visto muchos pibes cagarlos muy a palos arriba de los forma, para cuidar el peso o para desarrollar la musculatura remite cla-
rings, entonces hay una cosa de ‘bueno, me están cuidando’”. Retomando ramente a la centralidad que adquiere el cuerpo en la adolescencia: “Psí-
la reflexión de Celeste, apuntamos que no parece un mero detalle que quicamente se trata de la entrada del mundo adulto en el cuerpo y con
los/as pibes señalen que se sienten cuidados, y que lo hagan refiriendo ello de un salto al abismo en el cual el gran protagonista el cuerpo”, seña-
a las situaciones que mencionan; más bien parece que el box conlleva la Barbagelatta (2010). El cuerpo que se desacomoda en el momento del
unos cuidados tales que, pasando por el cuerpo, alcanzan otras esferas. estallido puberal, la angustia concomitante a las transformaciones físi-
No deja de ser llamativo que en el discurso de los jóvenes las referencias cas, el extrañamiento y el trabajo psíquico que implica volver a gobernar
al cuidado no aparezcan cuando hablan de otros aspectos u otras acti- el cuerpo insubordinado… todo eso entra al gimnasio con los/as pibes/as.
vidades del proyecto sino, por lo general, cuando aluden a las normas Todo eso, en realidad, va con ellos/as a dónde sea que vayan, pero es in-
y a los numerosos implementos que se utilizan para entrenar y para dudable que en el gimnasio se pone en juego de una manera particular.
“guantear” de manera protegida. Es la tangibilidad, la materialidad y la Los testimonios recogidos habilitan a pensar que esa práctica in-
corporeidad que adquiere el cuidado lo que lo vuelve claro y significativo. tensamente corporal más allá del lenguaje y la conciencia que –según
Reaparecen en este punto –por otra vía– el sentido protector de la ley Wacquant– supone el entrenamiento boxístico, opera directamente y con
y la presencia del adulto en tanto garante y en tanto portador de prohi- cierta eficacia sobre los modos en que los/as participantes de la EB tra-
biciones que protegen. En ese sentido, la protección que se materializa mitan la incertidumbre identitaria característica de la adolescencia, que
en los guantes, las vendas, los cabezales o los protectores bucales, así co- conlleva el temor a no poder reencontrarse, a no lograr recomponer la
mo la que brindan los entrenadores cada día o cuando no les permiten armonía corporal perdida. En este marco es evidente que el trabajo de
subir al ring a cualquier costo, tal vez hacen huella en la biografía… no “sombras” frente al espejo, el mirarse y el exponerse, dialoga significati-
sólo deportiva. El cuidado que los pibes admiten, reconocen y aprecian vamente con (la apropiación de) la modificación de los rasgos, de la apa-
remitiría así a la protección en tanto dimensión clave de la responsabili- riencia y de la imagen de sí.
dad adulta frente a los/as que crecen. De otra parte, y en sintonía con lo anterior, el entrenamiento produce
unos efectos tales que justifican ir a transpirar, a hacer pesas, cuerda o

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abdominales soportando dolores y fatigas y sometiéndose a infinitas re- la importancia que los/as entrevistados/as atribuyen a la actividad física
peticiones. Si como sostiene el autor que venimos citando, el dominio de per se no está desligada de otros aspectos de la experiencia que se tran-
los impulsos y la posibilidad de ejercer una vigilancia interior sobre los sita y se comparte en la EB. Pero menos desligada está aún de la gestión
sentimientos son algunos de los efectos que produce el trabajo perceptivo, del cuerpo, en una etapa de la vida en que éste –por diferentes motivos–
emocional y físico que se realiza en el gimnasio, este trabajo desempeña es “el gran protagonista”.
un papel relevante en tiempos de adolescencia, atravesada –como suele
estar– por la inestabilidad emocional, el humor cambiante y la confusión.
Junto a ello, otros elementos entran en la escena y debemos incorpo-
rar en este punto: según el análisis que realizan algunos autores acerca
de los rasgos, las prácticas y los valores predominantes entre los jóvenes
de sectores populares, la fortaleza, más que condición muscular, es una
cuestión de actitud vital que remite a la resistencia y a la entereza emo-
cional. La fuerza –señalan Míguez y Semán (2006: 26)– “es una cuali-
dad que otorga prestigio, por canales alternativos a los convencionales,
a formas de capital (…) accesibles a los sectores desfavorecidos y no tan
presentes en otros sectores sociales”.
Los entrenamientos en el BBC permitirían reafirmar esa fuerza –
atributo físico y moral que parece estar presente en las vidas complica-
das de la mayor parte de los/as adolescentes y jóvenes que participan en
el proyecto. En el entrenamiento riguroso alrededor del ring confluyen
entonces la fisicalidad y el “aguante” propios de los/as pibes/as de los
barrios humildes y el despliegue del capital energético disponible pro-
pio de la adolescencia (Gentile, 2007; Margulis y Urresti, 1998).
Llegado este punto cabe realizar una distinción: para el caso de los
participantes mayores –ya no adolescentes– son pertinentes los senti-
dos vinculados a la fortaleza y el “aguante” así como otros que hemos
analizado, pero no son pertinentes en cambio aquellos vinculados con
la recomposición de la armonía corporal, tarea que de algún modo ya
han “resuelto”. Así, para los jóvenes de más edad, entrenar y (o para)
cuidar el físico puede aludir también a otra situación que numerosos
estudios constatan: el desgaste corporal prematuro como consecuencia
de las condiciones de vida desfavorables. En una época en que –como
señalan Margulis y Urresti– los cuerpos se juvenilizan en los sectores
sociales medios y altos, los cuerpos de los jóvenes de los sectores desfa-
vorecidos se deterioran tempranamente. De modo que la actividad física
sostenida y los cuidados que ésta requiere podrían estar operando en
sentido contrario a esas marcas que la desigualdad inscribe sobre los
cuerpos de los/as pibes/as.
Junto a lo que hemos analizado en este apartado cabe señalar que, da-
do que la participación en los entrenamientos supone la participación –
más o menos activa y constante– en diferentes actividades del proyecto,

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Reflexiones finales
E n este apartado se retoman y se articulan algunos puntos de la ela-
boración precedente, con la intención de subrayar asuntos críticos
evidencias, hipótesis e interrogantes sobre los cuales, creemos, es perti-
no remite a requisitos para el ingreso ni a dificultades para el acceso ya
que, como hemos señalado y como todo/as reconocen, lejos de ejercer el
derecho de admisión, el proyecto de la EB privilegia la apertura y practi-
nente e interesante seguir indagando. ca la hospitalidad a rajatabla. La frontera a la que aludimos aquí es aque-
Un asunto interesante -y en cierta medida polémico- que hemos consi- lla que (según las representaciones de los/as jóvenes y de las madres
derado desde el inicio de esta investigación gira en torno a la asociación entrevistados/as) separa al barrio significado negativamente del gimna-
que suele establecerse de manera “directa” y “natural” entre el boxeo y sio como espacio protegido y protector.
los jóvenes pertenecientes a sectores de bajos recursos. Esta asociación es Sabemos que el barrio, los barrios precarizados, construidos simbóli-
un dato. Sin desconocer los múltiples motivos que hemos analizado por camente y físicamente como el “afuera” (los márgenes urbanos, los bor-
los que el boxeo los convoca y los interpela especialmente, y sin perjuicio des de lo social) van conformando un “adentro” devaluado respecto de
de que el entrenamiento deportivo en gimnasios de box se esté difun- ese “afuera” que expulsa (“los colectivos acá no entran”; “no sabés lo que es
diendo entre jóvenes de otros sectores sociales, parece pertinente leer vivir acá adentro”; “traten de entrar y salir todos juntos”). En este marco es
dicha asociación también en tanto resultado de prejuicios y estereotipos notable como las percepciones que hemos recogido invierten y a la vez
propios y ajenos. Es por eso que, aun habiendo recogido y constatado los reproducen la mirada social hegemónica: en virtud de dichas percepcio-
beneficios que reporta el box en determinadas circunstancias, importa nes, el barrio pasa a ser nuevamente el “afuera” -igualmente devaluado-
sostener la pregunta acerca de por qué ofrecer este deporte para estos/as visto desde el “adentro” valorado que viene a ser el gimnasio.
adolescentes y jóvenes. La misma pregunta puede aplicarse, por cierto, De acuerdo al análisis que realiza Kessler, dichas representaciones
a otras actividades que, por razones que cabría indagar, también suelen serían un derivado de la operación de estigmatización y demonización
considerarse “especialmente” válidas o apropiadas para chicos y chicas de la que el barrio es objeto en el marco de las relaciones de poder y
de similar condición. En ese marco, y aun cuando los motivos de la ofer- dominación social, cultural, política y económica. La operación impacta
ta de TEMAS no giran en torno a estereotipos degradantes sino en torno de manera tal sobre los comportamientos, la identidad y las relaciones,
a las potencialidades de este deporte, cabe interrogamos acerca de si aca- que termina convirtiendo a los discriminados en cómplices del estig-
so la opción del box junto a todo lo que ocurre en torno al BBC, mientras ma. Estos conceptos resuenan significativamente en la experiencia que
contribuye claramente a interrumpir “destinos asignados” no conlleva analizamos, lo cual no implica desconocer las realidades “duras” que
al mismo tiempo la cristalización de un determinado lugar social para viven los habitantes de la villa y que relatan los jóvenes del BBC, ni el
quienes ocupan una posición social, cultural y económica subalterna. hecho de que el gimnasio constituya efectivamente un espacio de ali-
La interrogación anterior alberga la posibilidad de que los efectos del vio o de diferencia. Queda claro, en todo caso, que para nuestros entre-
proyecto EB estén contenidos en una paradoja. Dentro de ella, y en vistas vistados/as, la identificación de cambios favorables acontecidos en los
del esfuerzo que los/as jóvenes (y todos los involucrados en el proyecto) últimos años (que se asocian al mejoramiento de algunas condiciones
deben realizar para desligar al boxeo de la valoración negativa que a me- y a la creación de instituciones diversas, entre ellas la EB), tanto como
nudo lo acompaña, sugerimos que el trabajo que implica desestigmatizar la disminución de la sectorización tajante y antagónica entre diferentes
al deporte alude de alguna manera al trabajo que implica desmarcarse zonas del barrio, o el reconocimiento de una mayor circulación en las
de los estigmas que recaen sobre ellos/as. Lo que nos interesa destacar, calles y de la menor “cantidad de pibes/as consumiendo en todos lados y a
en todo caso, es la particular tensión que atraviesa a las propuestas cu- cualquier hora”, no bastan para desarmar la percepción predominante.
yos contenidos o ejes centrales están amarrados a estereotipos desvalo- En palabras de Kessler: el propio barrio como alteridad amenazante y
rizantes y cuyos propósitos se orientan a la habilitación de recorridos los habitantes colectivamente sospechados.
vitales por fuera de los límites que éstos imponen. Dado que la construcción de otras miradas y de prácticas tendientes
Otra tensión omnipresente, que no es ajena a la anterior, merece un a desmontar esas ideas arquetípicas requiere necesariamente la crítica
lugar especial en estas reflexiones finales; nos referimos a la tensión y la impugnación de la operación política que las genera, cabe la discu-
entre el “adentro” (el gimnasio / el proyecto) y el “afuera” (el barrio). sión acerca del lugar que ocupan intervenciones como las que analiza-
Una frontera simbólica y clara separa a estos dos espacios. La frontera mos en relación con dicha construcción; del lugar que se proponen o no

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se proponen ocupar, y del lugar que logran o que no logran ocupar. proyecto que hemos recogido fue que la EB “no abre los domingos”. En
En ese terreno y en esa dirección, con lógicas, propósitos y alcances idéntico sentido, hace algunos años, ellos/as mismos/as solicitaron que
diferentes a los del proyecto que hemos estudiado, actúan numerosas el gimnasio abriera durante las mañanas “para tener una razón para le-
organizaciones de base y movimientos sociales, con la mira puesta en vantarse”… El gimnasio abrió por la mañana “pero los jóvenes no pudieron
desarmar y desmentir el discurso dominante acerca de lo que ocurre en sostener su presencia en ese horario”.
los barrios precarios y acerca de sus moradores, en tornar visible aque- Esa necesidad y esa cantidad de tiempo “adentro” son congruentes con
llo que el estigma invisibiliza y en transformar la realidad mediante la el uso intensivo del espacio y con el desarrollo articulado o superpuesto
organización colectiva y la participación en la escena política. La mirada de múltiples actividades con lógicas bien diferentes. El efecto cohesivo
y la experiencia transmitida por los jóvenes y las madres que frecuentan que producen estas características es potenciado por el hecho de que
el BBC - según lo que hemos podido relevar- no se inscriben en ese dis- son los mismos referentes adultos quienes reciben a los/as adolescen-
curso y en esas prácticas. La acción que despliega TEMAS participando tes y jóvenes para entrenar boxeo, para organizar y realizar las salidas
en la organización barrial, activando demandas, mediando o reclaman- y viajes, para compartir asados y noches de pizza, para desarrollar las
do frente a organismos públicos por asuntos tales como la relocaliza- actividades de comunicación, para garantizar los controles médicos, pa-
ción de viviendas o la implementación efectiva de diversos programas ra buscar trabajo, para participar en “guanteadas”… de lunes a sábado,
sociales, no permea –o al menos no permea de manera contundente- la invierno y verano, año tras año.
mirada de los/as destinatarios y participantes en el proyecto. Sin con- Algo da a pensar esa modalidad. Por lo pronto, que los signos espe-
siderar que ello constituya un problema o una falencia atribuible a los cíficos de distintos tiempos o de diferentes estadíos, los ciclos y los pa-
sujetos o a la intervención que investigamos, parece pertinente dejar sajes entre los mismos, los hitos que marcan procesos que empiezan y
abierta la reflexión acerca de este asunto en virtud de los significados terminan, no están contemplados o no son subrayados en la propuesta y
que el mismo puede conllevar tanto en este caso como en proyectos no forman parte de la experiencia. Inclusive la existencia de tres niveles
de similar naturaleza desarrollados en “zonas difamadas”. Parece per- para el entrenamiento no es del todo estricta. Al contrario, por decisión
tinente dejar abierta esa reflexión toda vez que –como señala el autor expresa o por imperio de las circunstancias, el continuum se muestra
antes mencionado- la persistencia de la dicotomización entre “afuera” como una de las marcas definitorias del proyecto de la EB.
y “adentro” (en el caso de la EB, inversión mediante) puede contribuir a En función de ello, pareciera que en este caso no se verifica el “triunfo
reforzar la lógica del etiquetamiento y la separación que dichos proyec- de la forma escolar”, ese fenómeno en virtud del cual los espacios edu-
tos intentan remover o mitigar. cativos no formales suelen adoptar y reproducir rasgos típicos de la ins-
En otro orden de cosas, aunque sugestivamente vinculado al “adentro” titución escolar, entre otros: la conformación de grupos homogéneos, la
que representa el proyecto, presentamos a continuación algunos puntos gradualidad, la periodización, la diferenciación de tiempos y espacios y el
críticos de la experiencia en los cuales convergen asuntos tales como: cambio de referentes y de lugares físicos o simbólicos. La exploración y la
el tiempo (el tiempo destinado, ofrecido, interpelado y transcurrido en adopción de modos organizativos propios y adecuados para el desarrollo
el marco del proyecto), el espacio (los usos del gimnasio, las formas de de los proyectos, tanto como la consideración de lo que esos modos orga-
habitarlo) y los adultos a cargo (referentes, responsables, coordinadores). nizativos transmiten, son sin dudas asuntos relevantes en el campo socio-
Por convicción de los responsables de la EB, por demanda explícita educativo. Queda abierta entonces la reflexión acerca de los significados
o implícita de los/as adolescentes y jóvenes y/o por default de otras al- y de los efectos de esa densidad en varios sentidos “indiferenciada” que
ternativas, todos/as reconocen –y es evidente- que se trata de “mucho caracteriza a la experiencia estudiada, y posiblemente a otras similares.
tiempo”. Una considerable masa de tiempo es vivida en el gimnasio y En el escenario que hemos descripto y analizado, en ese micro mun-
transcurre entre las actividades que contempla el proyecto. Lo que des- do intenso con significados abigarrados, la cohesión aparece también
de una mirada externa a la situación podría leerse en términos de cier- en el discurso. Sólo algunos testimonios algo oscilantes, parcialmente
ta saturación o de una intervención algo excesiva en la vida de los/as críticos o “no alineados” matizan o relativizan las ideas predominantes
jóvenes, es percibido por estos/as como necesario, casi imprescindible acerca de la experiencia, pero por lo general terminan refrendándolas.
o apenas suficiente. Tan es así que una de las pocas críticas hacia el En línea con ello, las representaciones compactas en torno al valor que

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tiene el gimnasio como un lugar propio con compañeros/as y adultos dis- decir: protegen, inauguran, conllevan importantes efectos subjetivantes
ponibles, junto a la centralidad atribuida a las normas y a la posibilidad y, al mismo tiempo, reemplazan, sustituyen y vienen a reparar artifi-
de participar en las decisiones, subrayan los modos y las razones por la cialmente una falta. En ese mosaico de sentidos se despliegan también
cuales proyectos de esta naturaleza instituyen. Los/as adolescentes y jó- nuestras prácticas.
venes, las madres y los demás entrevistados/as dan cuenta de una ex-
periencia de peso en cuanto al carácter restrictivo y protector de la ley;
experiencia que –como señalan Frigerio y Poggi– opera en dirección a
una ligazón necesaria para la vida en sociedad. El orden simbólico en que
las instituciones inscriben a las personas y los efectos de estos procesos
sobre la subjetividad de las mismas refuerzan el sentido que –bajo cier-
tas condiciones– poseen este tipo de proyectos. Refuerzan el sentido al
tiempo que complejizan el desafío que enfrentan. La disposición de enfo-
ques político-pedagógicos que permitan abordar las tensiones de diverso
orden que atraviesan las intervenciones, el sostenimiento de la oferta y el
resguardo de la calidad de lo que es ofrecido, se recortan como algunas
de esas condiciones. Diremos brevemente entonces que el sostenimiento
en el tiempo no se compadece con la (menos deseable que habitual) dis-
continuidad de las propuestas ni con intervenciones de frágil o improba-
ble sustentabilidad. La calidad, por su parte, remite a una cuestión clave:
dado que estos proyectos operan en dirección a reponer derechos en el
marco del reparto desigual de bienes y oportunidades, cabe subrayar que
algo de ese orden ocurre, algo del orden de la reposición de derechos ocu-
rre solamente cuando lo que se distribuye es un bien de calidad.
En cualquier caso, queda claro, se trata de instituciones, proyectos,
intervenciones, que inciden en las vidas de aquellos/as con quienes y
hacia quienes trabajan a menudo de manera “artesanal”. Queda claro
también que inciden más en las biografías que en las condiciones es-
tructurales que vulneran derechos y generan barrios (y sujetos) relega-
dos. La lógica del trabajo interrelacional, cuerpo a cuerpo, confrontada
con la escala y la profundidad de los problemas pone en evidencia la ne-
cesidad de macro-políticas. Mientras tanto, mientras no se verifican las
transformaciones que sólo pueden producir las macro-políticas, mien-
tras tienen lugar algunos cambios favorables como consecuencia de las
políticas de expansión de derechos y/o mientras los esfuerzos deban
dirigirse a evitar que dichos cambios retrocedan… los proyectos de esta
naturaleza ocupan un espacio vacante. Son menos un “complemento”
de la formación o una mera opción recreativa, cultural o deportiva que
un horizonte de referencia y de sostén en el escenario de desigualda-
des, precariedades e injusticas. Por lo tanto –y no solamente porque en
su origen los siguientes términos están emparentados–, el proyecto es
protección y es prótesis. Los proyectos, este tipo de proyectos, podríamos

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Anexo
Breve “perfil” de los/as
adolescentes y jóvenes
entrevistados/as

Román (12 años) participa en la EB desde hace un Rodrigo (13 años) asiste a la EB desde los 10 años
año. Cursa el secundario en una escuela de jornada com- (una excepción, debido a que sus dos hermanos mayo-
pleta. Vive con su papá, su mamá y su hermano mayor res estaban participando). Cursa el secundario. Vive con
de 19 años, por quien conoció el boxeo. Practica Futbol su madre y varios hermanos, algunos de los/as cuales
en el Club Barracas Central y hace circo en el galpón al forman parte del BBC desde el inicio. Disfruta particu-
lado de la EB. Entrena todos los días en el nivel “avanza- larmente de las salidas y de las actividades que realizan
do” y está ansioso por subir al ring a guantear. en verano con el grupo de la EB. Quiere sacar la licen-
cia para boxear y participa del programa de radio que se
lleva a cabo en el marco del proyecto. Además estudia
guitarra, y hace bachata y salsa en la Casa de la Cultura
que funciona en el barrio.
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Laura (15 años) hace un año que va al BBC. Cursa 3° Nico (20 años) participa en la EB desde los 14 o 15
año del secundario. Durante un tiempo participó en la años, al principio de manera inconstante porque al mis-
orquesta y en circo. Termina agotada los entrenamientos mo tiempo jugaba al fútbol en Huracán; últimamente en-
diarios pero se esfuerza porque quiere sacar la licencia trena en forma continua. Vive con su madre, su padre, un
para boxear. Vive con su mamá y tres hermanos. Desde hermano más grande y un tío. Estudia Educación Física
que va a la EB se reconoce menos tímida, más suelta, se en la en la UNDAV; se levanta a las 5 de la mañana, tra-
ríe más y tiene más amigos. Participa del programa de baja, y va todos los días al BBC desde las 17:00 hasta las
radio que se lleva a cabo en el marco del proyecto. 20: 30 hs. Le ofrecieron sacar la licencia pero él no quiso.
Lo que le interesa es entrenar, reírse y divertirse. Tiene
Lorenzo (17 años) participa en la EB desde hace 2 intención de hacer el curso para ser entrenador de box.
años; ahora entrena más o menos y no tan seguido como
antes porque está más ocupado, pero pasa a visitar y a Nerina (27 años) asistió a la EB durante algunos años,
saludar. Cursa el secundario en una escuela de jornada actualmente no entrena, pero sigue yendo a saludar y a
completa. Estudia piano y toca el bombo en la murga colaborar. Terminó la escuela primaria a los 16 años, em-
“La pasión que faltaba” que funciona en el comedor del pezó el secundario pero dejó de cursar el año pasado; su
barrio. Vive con su mamá, su papá, un hermano y una plan es retomar y terminarlo. La vida con sus padres y
hermana. Lo que le gusta del boxeo es entrenar, pegarle hermanos, así como la relación con su novio, estuvo atra-
a la bolsa y hacer actividad física. vesada por situaciones de maltrato y violencia. Tiene una
hija de 7 años, vive con ella en una pieza de la casa de
Elías (19 años) entrena boxeo desde los 12 años, cuan- su madre. Participa activamente en el grupo juvenil de
do decidió dejar de practicar fútbol. Dejó el secundario la Iglesia Cristiana, actividad que para ella “reemplaza”
porque necesitaba trabajar; tiene intenciones de retomar de alguna manera a la EB. Hace cursos en la casa de la
el año que viene y terminar el nivel. A los 15 años fue el cultura, busca y hace changas y consigue como puede lo
1° campeón de boxeo en los Juegos Evita. A esa edad sacó necesario para criar a su hija.
la licencia y peleó como amateur en competencias orga-
nizadas por su entrenador (con quién siguió entrenando
en Morón cuando éste dejó de trabajar en el BBC). Viajó
a varias provincias, perdió y ganó por diferentes motivos
(por “arreglo” o por no estar en estado). De chico iba a
box todos los días pero ahora no puede sostener ese rit-
mo: tiene un bebé de dos meses; se levanta a las 4 de la
mañana, trabaja de lunes a sábados 8 horas diarias en la
limpieza en una fábrica, descansa al medio día y luego va
a entrenar. Por ahora vive entre la casa de su mamá y la
de su novia pero ya compró una casa a donde se mudará
próximamente con su pareja y su hijo. Sostiene a la vez
una mirada crítica hacia la EB y un alto nivel de perte-
nencia. Quiere boxear profesionalmente, aunque cues-
tiona –a partir de algunas experiencias propias– ciertos
manejos turbios de este deporte.

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Otras títulos de esta colección del ISTLyR

Janusz Korczak y los derechos de la infancia

Tierras y Cielos. Ludotecas y Juegotecas.


Perspectivas y experiencias

¿Noveles o nobeles? Una experiencia de acompañamiento


a educadores y educadoras sociales

Miradas sobre territorio, comunicación y desarrollo local

Otras títulos del ISTLyR

Revista Itinerarios en Educación / Recreación


Año 1, Número 1, Primavera de 2009

Revista Itinerarios en Género, Educación y Recreación


Año 2, Número 2, Primavera de 2010

Revista Itinerarios en Arte, Educación y Espacio Público


Año 3, Número 3, Primavera de 2012

Con la cabeza en los PyES


Colección Memorias de formación

Productividad y precariedad en las prácticas con chicos,


chicas y adolescentes de sectores populares
Colección Dossier de Itinerarios

Políticas Públicas Socioeducativas


Colección Dossier de Itinerarios
TECNICATURAs EN
• TIEMPO LIBRE Y RECREACIÓN
• PEDAGOGÍA Y EDUCACIÓN SOCIAL
• COMUNICACIÓN SOCIAL
ORIENTADA AL DESARROLLO LOCAL

Ministerio de Educación
Dirección de Formación Técnica Superior

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