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trastornos del espectro autista

Alteraciones de conducta en los trastornos del espectro


autista
Amaia Hervás, Isabel Rueda

Introducción. Los trastornos del espectro autista (TEA) son trastornos del neurodesarrollo que afectan la comunicación so- IGAIN (Instituto Global de Atención
Integral al Neurodesarrollo).
cial y presentan conductas estereotipadas. La comorbilidad asociada a trastornos de conducta es frecuente, comienza en Psiquiatría Infantil y Juvenil; Hospital
la infancia y, en general, continúa hasta la edad adulta. En ocasiones se asocia a agresividad, negativismo, autolesiones y Universitari Mútua de Terrassa;
ruptura de normas sociales. Origina gran disfuncionalidad a la persona con TEA, a la familia, a los profesionales y al entor- Terrassa, Barcelona, España.

no, y es causa principal de tratamiento farmacológico, hospitalización y educación especial. Factores relacionados con los Correspondencia:
síntomas de TEA, comorbilidad y factores sociales se asocian a un incremento de riesgo de problemas conductuales. Será Dra. Amaia Hervás Zúñiga.
Psiquiatría Infantil y Juvenil.
necesaria una exploración detallada que incluya un análisis funcional y una combinación de intervenciones psicoeducati- Hospital Universitari Mútua de
vas, sociales y farmacológicas en muchos casos. Terrassa. Pl. Doctor Robert, 5.
E-08221 Terrassa (Barcelona).
Objetivo. Revisar los factores desencadenantes, causas, evaluación y tratamiento de los problemas de conducta asocia-
dos a TEA. E-mail:
ahervas@mutuaterrassa.es
Desarrollo. Se expone qué se entiende por problemas de conducta en TEA, los diferentes mecanismos clínicos y cognitivos
Declaración de intereses:
asociados, y las estrategias más efectivas para la intervención. A.H. ha impartido conferencias
Conclusiones. El TEA comórbido con problemas de conducta es frecuente, comienza en la primera infancia y continúa a lo patrocinadas por Shire.

largo de la vida. Una detallada evaluación, que incluya un análisis funcional de la conducta a extinguir, y un tratamiento Aceptado tras revisión externa:
con diferentes estrategias psicológicas, educativas sociales y farmacológicas resultan esenciales. 22.02.18.

Palabras clave. Autismo. Conducta. Trastorno del espectro autista. Cómo citar este artículo:
Hervás A, Rueda I. Alteraciones
de conducta en los trastornos del
espectro autista. Rev Neurol 2018;
66 (Supl 1): S31-8.
Introducción y necesidad de recursos terapéuticos [3]. Resulta
© 2018 Revista de Neurología
frecuente que el TEA se asocie a problemas con-
Las personas con trastornos del espectro autista ductuales, entre otros, conductas agresivas, negati-
(TEA) presentan alteraciones en el neurodesarrollo vismo ante órdenes o demandas, ruptura de normas
que comienzan en edades precoces y que persisten sociales y situaciones de emocionalidad negativa.
en mayor o menor grado a lo largo de la vida, debi- Los problemas de conducta incrementan el riesgo
do a diferentes causas, en gran parte todavía desco- de recibir un trato coercitivo con sujeción física,
nocidas. Presentan aspectos en común respecto a la hostilidad verbal y física, un mayor aislamiento en
clínica del autismo nuclear, con alteraciones en la casa y emplazamientos en programas especializa-
comunicación social, patrones de lenguaje-conduc- dos. La familia convive con episodios de agresivi-
ta estereotipada y dificultades en el área sensorial dad, lo que incrementa el estrés emocional y físico
[1]. Es un problema frecuente con una prevalencia de los familiares y, en ocasiones, la percepción de
entre 1/45 y 1% [2]. abandono institucional por la falta de servicios y
La complejidad fenotípica del TEA se manifiesta apoyo recibido [4].
en la asociación con otras alteraciones del neurode- La mayoría de los niños con TEA son educados
sarrollo, problemas psiquiátricos o médicos. Según en escuelas ordinarias, por lo general escasamente
las edades, un 50-70% de las personas con TEA pre- adaptadas a niños con TEA y problemas de con-
sentan asociados otros retrasos en el desarrollo, co- ducta. Las escuelas ordinarias presentan general-
morbilidades con problemas de salud mental o pro- mente un alto nivel sensorial, cambios continuados
blemas de conducta. Aproximadamente un 30% de de actividad, aprendizajes y material poco centrado
las personas con TEA muestran una discapacidad en los intereses del niño con TEA, esfuerzo mental
intelectual asociada y en un 82% de los casos los ni- continuado y situaciones sociales poco gratificado-
ños con TEA requieren adaptaciones educaciona- ras en la relación con otros niños. Las alteraciones
les. En un 25-50%, las comorbilidades son múlti- de conducta de los niños con TEA frecuentemente
ples, presentando estos casos una gran morbilidad se expresan en el ámbito escolar [5].

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Problemas de conducta en personas con TEA el contrario, aquellos que son sociables pero no sa-
ben relacionarse pueden realizar aproximaciones
Entre los problemas de conducta más frecuentemen- inadecuadas, desde tocamientos o acercamientos
te observados en los niños y, en general, en las per- verbales inadecuados hasta comportamientos agre-
sonas con TEA se incluyen: sivos cuando pretenden ser amigables. Las dificul-
– Conductas que amenazan la seguridad propia, tades en pedir ayuda o comunicarse pueden desen-
como autolesiones (golpearse la cabeza, morder- cadenar intensas explosiones emocionales.
se o arañarse), escapismo (huir sin considerar el
peligro) o negativas a comer o a dormir. Comportamientos estereotipados,
– Conductas agresivas verbales o físicas que ame- intereses restringidos y alteraciones sensoriales
nazan la seguridad de miembros de la familia u
otras personas fuera del círculo mas cercano del La inflexibilidad al cambio en su rutina o entorno y
sujeto con TEA o destrucción física de bienes ma- la ruptura de sus rituales puede acompañarse de pro-
teriales. blemas conductuales. Las personas del entorno pue-
– Negativas persistentes a las peticiones de los adul- den tener dificultades en identificar los rituales au-
tos, desde desobediencia hasta extremos máxi- tistas, interpretando que su conducta es un sinsenti-
mos de incomunicación, como es el mutismo se- do cuando en realidad obedece a un comportamien-
lectivo o la catatonía. to compulsivo en el que involucran a los adultos.
– Ruptura de normas o leyes sociales que, en la La hipersensibilidad a estímulos sensoriales di-
mayoría de edad, puede implicar la comparecen- versos puede provocar reacciones conductuales ex-
cia ante la justicia. tremas en diferentes lugares y circunstancias, que a
– Alteraciones emocionales negativas con extrema veces la familia puede que no las identifique.
irritabilidad, ansiedad o descontrol emocional, a La hiposensibilidad es un factor de riesgo para
veces desencadenado por una emocionalidad ex- las autolesiones, que pueden llegar a lesiones físicas
trema positiva (excitabilidad) [6]. importantes sin reacción aparente al dolor. La hi-
posensibilidad puede producir una disminución de
Prevalencia de problemas de conducta en TEA la identificación de percepciones físicas como son
las sensaciones de hambre, cansancio, plenitud de
Los problemas de conducta en TEA son muy fre- vejiga o intestino o plenitud gástrica, relacionándo-
cuentes, aparecen en edades tempranas, se incre- se con inanición, insomnio, alteración del control
mentan hasta la edad adulta y permanecen a lo lar- de esfínteres u obesidad [11].
go del tiempo con una prevalencia del 57-90% [8].
La agresividad es uno de los problemas más habi-
tuales. En un 69% de los casos, son agresivos contra Influencia de los síntomas comórbidos
los cuidadores, y en un 49%, contra las personas fue- del TEA en las alteraciones de conducta
ra de su círculo más cercano [9].
Cuando van creciendo, la ruptura de normas, en Otras alteraciones del neurodesarrollo
su mayoría relacionadas con dificultades de cogni- frecuentemente asociadas a TEA
ción social y empatía, puede asociarse a conducta
delincuente, con una frecuencia del 5-26% [9]. Igual- Trastornos del lenguaje
mente, entre las personas que habían delinquido y Las personas con TEA pueden presentar retrasos
estaban en régimen de internamiento, se halló una de lenguaje permanentes y graves. Algunas nunca
prevalencia de TEA del 2,3-15% [10], muy por enci- desarrollarán lenguaje, incluso a pesar de tener ca-
ma de la prevalencia en la población general. pacidades cognitivas no verbales dentro de la nor-
malidad o superiores. Esta disparidad entre una me-
jor preservada capacidad de integrar información
Influencia de los síntomas nucleares visual asociada a graves dificultades comunicativas,
de TEA en las alteraciones de conducta sin poder compensarlas suficientemente con ges-
tos, predispone a que la conducta sea su única ma-
Alteraciones sociocomunicativas nifestación expresiva.

El escaso deseo por relacionarse se asocia a la ‘no Discapacidad intelectual


respuesta’. Presionados, pueden reaccionar con es- Cerca de un 30% de personas con TEA tienen una
capismo o bien con estados de ánimo negativo. Por discapacidad intelectual asociada. En estos casos, los

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síntomas de TEA pueden ser menos compensados personas, contextos o experiencias sociales, con
por otras habilidades cognitivas más preservadas. base en sus dificultades de comprensión social, aun-
que pueden producirse episodios transitorios psi-
Trastorno por déficit de atención/hiperactividad cóticos, en ocasiones relacionados con el estrés [14].
Alrededor de un 30% de las personas con TEA tie-
nen un trastorno por déficit de atención/hiperacti- Comorbilidad médica
vidad (TDAH) asociado, es decir, síntomas de hipe-
ractividad, impulsividad o inatención. La asociación Un 20-25% de las personas con TEA tienen epilep-
de ambos trastornos potencia la gravedad tanto de sia, que frecuentemente comienza en el primer año
los síntomas del TEA como del TDAH. A las difi- de vida o en la adolescencia. A veces, su inicio se
cultades en la rigidez cognitiva y habilidad de plani- asocia a cuadros bruscos de empeoramiento con-
ficación propias del TEA se asocian las dificultades ductual antes de poder reconocerse los signos visi-
de memoria de trabajo y inhibición cognitiva pro- bles de las convulsiones. Un 40-80% de niños con
pias del TDAH, lo que afecta a las personas con autismo presentan dificultades para dormir [15].
ambas alteraciones evolutivas en su capacidad de Las alteraciones del sueño y del apetito, cansancio y
autonomía, autocontrol, explosiones conductuales, malestar también se asocian a empeoramiento con-
rendimiento escolar y aprendizaje, más allá de los ductual. En ocasiones, abruptas reacciones conduc-
logros esperados por su capacidad intelectual. tuales surgen ante el dolor de cualquier tipo, cuan-
do no son capaces de reconocer la sensación o iden-
Tics-trastorno de Tourette tificar el lugar del dolor, o no saben comunicarlo.
Aproximadamente un 15-20% de las personas con
TEA tienen tics o trastorno de Tourette asociado.
Los tics motores, fónicos, conductas compulsivas, Aspectos cognitivos del TEA
ecolalias o ecopraxias propias del trastorno de Tou­ relacionados con problemas de conducta
rette se asocian a las conductas repetitivas o ritua-
les propias del TEA, incrementando las conductas Alteración en teoría de la mente y cognición social
estereotipadas y rituales. La asociación incrementa
el riesgo de comorbilidades múltiples con trastor- Las dificultades de entender o malinterpretar in-
nos emocionales, trastorno obsesivo compulsivo o tenciones y pensamientos de otras personas, de
TDAH con grave deterioro funcional [12]. comprender y adaptarse a las necesidades del en-
torno, está en la raíz de muchos comportamientos
Comorbilidades con problemas de salud mental inadecuados de las personas con TEA [16]. La falta
de empatía y de comprensión de las repercusiones
Ansiedad emocionales que su conducta puede causar en otras
En personas con TEA es frecuente la ansiedad so- personas puede originar que los niños con TEA
cial por temor a una evaluación social negativa, an- presenten conductas inadecuadas, incluso agresi-
siedad fóbica ante estímulos a los que previamente vas, pensando que es una experiencia agradable pa­
se han sensibilizado, o ansiedad generalizada ante ra el otro niño. Cuando son más mayores, estas
situaciones nuevas que no sepan afrontar. Por las cogniciones incorrectas pueden conducir a con-
dificultades en el reconocimiento de la expresión ductas desinhibidas. En personas con TEA está al-
emocional o la tonalidad de la voz de las personas terada generalmente la empatía cognitiva, entendi-
con TEA, sus cuidadores pueden no identificar la da como la capacidad de comprender los pensa-
ansiedad, lo que dificulta que puedan recibir ayuda mientos que lleva a otras personas a determinadas
en estas situaciones. emociones, y está más preservada la empatía emo-
cional, entendida como la capacidad de sintonizar
Episodios depresivos emocionalmente con las emociones de otras perso-
Ocurre algo similar con la depresión; el único signo nas. En personas con rasgos psicopáticos ocurre lo
visible puede ser un comienzo brusco de irritabili- contrario: tienen preservada la empatía cognitiva,
dad y alteración conductual [3,13]. pero alterada la empatía emocional [17].

Episodios psicóticos Alteración de la función ejecutiva,


Ocurren también asociados a TEA. Más frecuente es hiperreactividad fisiológica y regulación emocional
la aparición de ideas sobrevaloradas autorreferen-
ciales o malinterpretación de las intenciones de otras Las personas con TEA y alteraciones de conducta

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suelen mostrar dificultades en su flexibilidad cogni- – Identificar las consecuencias en el entorno des-
tiva, organizarse y planificarse, anticipar situacio- pués de la conducta, cuáles se relacionan con un
nes y responder de una manera organizada y plani- incremento o descenso de la conducta.
ficada ante una situación no esperada. Todos estos – Medir la frecuencia e intensidad de la conducta.
aspectos les provoca estrés. Existe una clara inte- – Identificar una conducta alternativa que puede
racción entre demandas externas y respuestas fisio- hacer la misma función; por ejemplo, otros estí-
lógicas, y cuando las demandas del entorno supe- mulos similares que pueden ser estimuladores,
ran las respuestas posibles, la persona con TEA pero funcionalmente.
puede responder con estrés y desregulación emo- – Enseñar conductas alternativas, utilizar la dis-
cional [18]. En personas con TEA se ha descrito una tracción funcional.
alterada reactividad fisiológica, tanto hiper como – Identificar varios reforzadores que puedan utili-
hiporreactividad, con una disminución de la fre- zarse alternativamente para el uso exitoso de las
cuencia cardíaca al hablar en publico o una reduci- conductas alternativas, sobre todo reforzadores
da respuesta en la conductancia de la piel. La hiper­ naturales y sociales.
reactividad y la desregulación emocional se relacio-
nan con una menor respuesta al entorno, se encie- También es relevante identificar los factores del en-
rran en sí mismos, pudiendo llegar a estados mutis- torno que puedan relacionarse con los problemas
tas o catatónicos [19]. conductuales, entre los que se encuentran cambios
de rutina, estímulos que les provocan miedo o que
les alteran, información social compleja que no pue-
Evaluación de los problemas den procesar y ambiente hiperestimulante que les
de conducta en los TEA produce excitación o desregulación emocional [21].

Debe realizarse una exploración detallada de los sín-


tomas nucleares de TEA, de la comorbilidad aso- Tratamiento de los problemas
ciada y de los posibles factores etiológicos utilizan- de conducta asociados a TEA
do información clínica y cuestionarios o pruebas
estandarizadas. Una evaluación detallada de los El tratamiento de los problemas de conducta re-
problemas de conducta es fundamental con el fin quiere un plan detallado de intervenciones psico-
de crear la base para mejorarlos o extinguirlos. Se educativas multidisciplinares y de intervenciones
pueden utilizar cuestionarios para evaluar síntomas sociales en los diferentes contextos en los que vive
de conducta, siendo los que más fiabilidad han de- la persona con TEA. Aquellos que presentan episo-
mostrado en TEA Home Situations Questionnaire- dios de agresividad pueden requerir intervenciones
Pervasive Developmental Disorders version, Baby and farmacológicas, para las cuales existe cierta eviden-
Infant Screen for Children with Autism Traits-part 3, cia de efectividad.
Aberrant Behavior Checklist y Nisonger Child Be-
havior Rating form, y para comorbilidad general, el Intervenciones psicoeducativas
Child Behavior Checklist [20].
Sin embargo, la realización de un completo aná- Requieren un plan funcional en el que se concreten
lisis funcional de todos los componentes asociados las intervenciones específicas a realizar. Siempre de-
a la persona con TEA y a su conducta resulta esen- bemos utilizar registros de la evaluación funcional,
cial. Deberemos realizar los siguientes pasos: de las conductas que queremos extinguir y, si no
– Identificar, definir y cuantificar de manera obje- disminuyen, evaluar los posibles factores implicados
tiva la conducta problemática, aquella en la cual en la no mejora y reevaluar nuestro diagnóstico del
queremos intervenir. análisis funcional. En general, cuando los problemas
– Recoger información para determinar cuál es la de conducta se relacionan con rigidez y dificultades
función de la conducta problemática, por ejem- en el cambio, son intervenciones de preferencia
plo, si existe una autolesión que representa una cambios progresivos utilizando anticipación, estruc-
manera de comunicarse ante estímulos sensoria- tura y ayudas visuales. En aquellos casos en los que
les estresantes o, por el contrario, representa una exista una hiperreactividad y desregulación emocio-
autoestimulación relacionada con una hiposen- nal deberemos intervenir acomodando el entorno,
sibilidad ante la falta de estructura. reduciendo factores de hiperexcitación o desregula-
– Identificar antecedentes de la conducta, cuáles ción, y utilizando distractores que les conduzcan a
son los factores desencadenantes. un estado emocional más positivo y equilibrado. Si

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Trastornos del espectro autista

los problemas de conducta se deben a malinterpre- ner una estructura de actividades motivadoras,
taciones del entorno, historias sociales, ayudas y re- combinando actividades más tranquilas y movi-
cordatorios visuales pueden ayudarles a entender das, algunas al aire libre y trabajando también la
dicho entorno de una manera más concreta. En el autonomía. En ocasiones, son muy dependientes
caso de que sea la misma conducta la que resulta re- de la atención del adulto y cualquier retirada de
forzadora, como es el caso de las autolesiones, se atención les provoca irritabilidad, por lo que ha-
utilizará un refuerzo diferencial con actividades in- brá que trabajar paulatinamente su autonomía.
compatibles para reducir la conducta no deseada. – Utilizar instrucciones proactivas positivas. Ser
positivo cuando queremos cambiar, por ejemplo,
Estrategias para cambiar la conducta la no obediencia, recurriendo a aspectos positi-
– Adaptaciones ambientales. Retirar los estímulos vos de su interés, como bromas o juegos que les
que causan hiperestimulación sensorial, crear gusten, que los vuelva más receptivos emocio-
estructura durante el máximo tiempo, activida- nalmente. Si se bloquean, distraerlos con activi-
des motivadoras funcionales y facilitar un espa- dades placenteras y luego intentarlo de nuevo. Ir
cio para relajarse. En el entorno, los estímulos utilizando aproximaciones hacia la conducta de-
sensoriales, cambios inesperados de rutina, es- seada. La utilización de un lenguaje positivo,
trés ambiental, falta de estructura, excesivas de- claro y conciso, con un tono de voz bajo, es esen-
mandas que no pueden cumplir, negaciones, ma- cial en la disminución de conductas agresivas.
linterpretación de su entorno y situaciones que – Utilizar la distracción y situaciones de sorpresa
provocan ansiedad y miedo, suelen precipitar los para sacarles de las conductas no deseadas, cam-
problemas de conducta. Para reconducir los pro- biarles su estado emocional. Ofrecerles elección
blemas de conducta en TEA se han utilizado mo- siempre que sea posible. Cada persona con TEA
delos de hipoestimulación, es decir, reducir peti- tiene sus distracciones, que será útil conocer
ciones y órdenes, evitar situaciones hiperreactivas para poder anticipar situaciones problemáticas y
(contacto ocular, hablar alto, contacto físico, per- evitar ‘tiempos muertos’ [25].
sonas que los miran), evitar conductas no verba- – Intervenciones basadas en consecuencias. Ignorar
les que pueden llevar a un conflicto (posturas conductas que no causan daño a nadie, redirigir-
agresivas, miradas) y reducir la hiperestimula- lo para conseguir la conducta deseada, retirar cual-
ción externa mediante espacios sensoriales con quier consecuencia que refuerce la conducta.
poca estimulación. El ejercicio físico también – Respuesta a la crisis. Cuando están alterados, es
puede ser una manera de reducir la excitación fi- mejor dejarlos solos con algún distractor que
siológica, la ansiedad y las conductas estereotipa- pueda tranquilizarlos. Es necesario mantener la
das, y de mantener una estructura funcional [22]. seguridad, cerrar puertas, alejar a otras perso-
La excesiva adaptación del ambiente, evitando nas, protegerlos de objetos que puedan dañarlos,
todos los estímulos que les alteren, puede conlle- etc. Si todo ha fallado, presentan riesgo de ha-
var al aislamiento de la persona con TEA, refor- cerse daño y es necesaria la sujeción física, los
zando la no tolerancia al cambio. En estos casos, adultos que la realicen tienen que estar entrena-
la exposición al entorno debe ser gradual, antici- dos para reducir cualquier riesgo [26].
pándolos paulatinamente a cambios, nuevas ruti- – Autoevaluación. Es importante siempre analizar
nas y nuevas personas [23]. lo que funciona y lo que no funciona, planifican-
– Cambiar su estado emocional. Ante los proble- do de antemano toda actuación y ser flexible pa­
mas de regulación emocional, actividades que ra cambiar los planes.
cambian el estado emocional favorecen la auto-
rregulación positiva. Debe tenerse en cuenta su Tratamiento farmacológico
estado emocional y exponerlos a situaciones es-
tresantes o cambios cuando están más conten- Como principio general básico en cualquier pobla-
tos, y no hacerlo cuando están en un estado de ción infantil y adolescente, siempre debe instaurar-
ánimo negativo [24]. se el tratamiento farmacológico en estrecha colabo-
– Utilizar estructura, rutina y ayudas visuales. La ración con los padres. Una guía importante en esta
estructura les ayuda a entender su entorno y ade- población tan vulnerable es evitar ingresos hospita-
cuarse a las transiciones. Los horarios les ayudan larios y soluciones crónicas para problemas agudos
a anticipar secuencias y las imágenes pueden uti- ante cambios o situaciones inesperadas. Para evitar
lizarse como recordatorios o transiciones. Aquellas al máximo los efectos secundarios de la medicación
personas con problemas conductuales deben te- siempre debe comenzarse exclusivamente con un

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A. Hervás, et al

fármaco, e incrementarlo despacio. El profesional sos muy graves, la clozapina han demostrado algu-
debe controlar posibles efectos secundarios y facili- na evidencia de efectividad. La olanzapina, la que-
tar a los padres un rápido acceso en caso de que tiapina, la paliperidona y la clozapina no tienen in-
surjan imprevistos. Como norma, el profesional de­ dicación en el TEA por la FDA.
be intentar maximizar y esperar la efectividad de
un fármaco antes de realizar cambios, evitando la Fármacos estimulantes utilizados
politerapia. Muchas veces, un fármaco enmascara en el TDAH asociado a TEA
efectos secundarios de otro, por lo que su retirada Existe moderada evidencia de eficacia del metilfe-
puede producir reacciones no esperadas. Los pa- nidato en la comorbilidad del TEA con TDAH y en
dres deberán tener una amplia información de los el TEA asociado a agresividad y problemas de con-
efectos esperados con el tratamiento farmacológi- ducta con base impulsiva y dificultades en la inhibi-
co, de cuáles son los efectos secundarios más fre- ción conductual o emocional. Sin embargo, su efi-
cuentes, y por cuáles de estos efectos deberían sus- cacia y tolerabilidad en TEA con TDAH es menor
pender la administración del fármaco. Hay que evi- que en el TDAH puro. Siempre que se utilice el me-
tar comenzar tratamientos farmacológicos durante tilfenidato es necesario comenzar con dosis muy ba-
períodos de cambio en la vida o situaciones escola- jas, lentamente, descartando efectos secundarios de
res muy estresantes. irritabilidad, agitación, labilidad emocional, conduc-
Los fármacos más utilizados en agresión, agita- tas compulsivas y empeoramiento de conductas es-
ción y problemas conductuales son los antipsicóti- tereotipadas que, en muchas ocasiones, exige la re-
cos atípicos, metilfenidato, guanfacina, clonidina, tirada del fármaco. Derivados anfetamínicos (p. ej.,
clonacepam y, con menor evidencia de efectividad, lisdexanfetamina) se utilizan de manera similar al
propanolol, estabilizadores del estado de ánimo, N- metilfenidato.
acetilcisteína y naltrexona. Estudios recientes indi-
can que los agentes glutamatérgicos y moduladores Fármacos no estimulantes utilizados en
del ácido γ-aminobutírico (memantina, arbaclofe- el tratamiento del TDAH asociado a TEA
no, riluzol) pueden ser útiles. En las alteraciones La atomoxetina actúa como un inhibidor de la re-
del sueño con problemas de conducta, melatonina, captación de noradrenalina y tiene una moderada
clonidina, antihistamínicos y trazodona son posibi- evidencia de mejora en los síntomas del TDAH y
lidades terapéuticas. ansiedad asociados al TEA. Es menos efectivo en
Actualmente, los únicos fármacos con indicación síntomas de impulsividad e hiperactividad que en sín-
por la Food and Drug Administration (FDA) esta- tomas atencionales. Fenómenos de activación, in-
dounidense en personas con TEA son la risperido- cluyendo alteraciones del estado de ánimo, se han
na y el aripiprazol, ambos utilizados para las co- encontrado asociados al uso de inhibidores selecti-
morbilidades de conducta, sin que exista evidencia vos de la recaptación de serotonina, otros antide-
de mejora en los síntomas específicos del TEA. presivos y atomoxetina.
La guanfacina y la clonidina son fármacos no es-
Antipsicóticos atípicos timulantes, usados en el tratamiento del TDAH, que
El aripiprazol y la risperidona mejoran la irritabili- actúan como agonistas de los receptores α2-adre­
dad, agitación, labilidad emocional, hiperactividad nérgicos. Son una buena alternativa en aquellos ca-
y conducta estereotipada. Los efectos secundarios sos de TEA con gran hiperactividad e impulsividad
más frecuentes son sedación, ganancia de peso y con base de desregulación emocional. En general,
efectos extrapiramidales. El incremento de la prola- su uso es bastante seguro, requiere control de la ten-
ctina, sobre todo en edad adolescente, necesita mo- sión arterial y debe evitarse en niños con antece-
nitorizarse. Ambos actúan preferencialmente en dentes de cardiopatías. Un incremento paulatino del
receptores dopaminérgicos y serotoninérgicos, pero fármaco para asegurarse la tolerancia y la dosis efec-
también tienen efectos en receptores histamínicos, tiva necesaria minimiza los efectos secundarios. La
adrenérgicos y colinérgicos. Se han utilizado en ni- sedación es un efecto secundario ocasional. En los
ños otros antipsicóticos atípicos con alguna eviden- casos de grave impulsividad y agresividad pueden
cia de efectividad, como es el caso de la olanzapina, utilizarse conjuntamente con los estimulantes [27].
pero la ganancia de peso y los efectos metabólicos
desaconsejan su uso.
La quetiapina, por su efecto sedativo, se utiliza Conclusiones
en casos de trastornos de conducta con insomnio
resistente al tratamiento. La paliperidona y, en ca- – Los problemas de conducta ocurren con frecuen-

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Trastornos del espectro autista

cia asociados a TEA; síntomas nucleares de TEA 10. Siponmaa L, Kristiansson M, Jonson C, Nydén A, Gillberg C.
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Conduct disorders in autism spectrum disorders

Introduction. Autism spectrum disorders (ASD) are neurodevelopmental disorders that affect social communication and
present stereotypic behaviours. Comorbidity associated to conduct disorders is frequent, starts in infancy and, in general,
continues into adulthood. It is sometimes associated with aggressiveness, negativism, self-harm and breaking social
norms. It causes a high degree of dysfunctionality in persons with ASD, their family, professionals and those around
them, and is the main cause of pharmacological treatment, hospitalisation and special education. Factors related to the
symptoms of ASD, comorbidity and social factors are associated with an increased risk of conduct disorders. In many
cases it would be necessary to perform a detailed examination that includes a functional analysis and a combination of
psychoeducational, social and pharmacological interventions.

www.neurologia.com  Rev Neurol 2018; 66 (Supl 1): S31-S38 S37


A. Hervás, et al

Aim. To review the precipitating factors, causes, evaluation and treatment of the conduct disorders associated with ASD.
Development. The study outlines what is understood by conduct disorders in ASD, the different clinical and cognitive
mechanisms associated with it, and the most effective strategies for intervention.
Conclusions. Comorbid ASD with conduct disorders is frequent, begins in early infancy and continues throughout life. A
detailed evaluation that includes a functional analysis of the behaviour to be eliminated and treatment with different
psychological, social educational and pharmacological strategies are essential.
Key words. Autism. Autism spectrum disorder. Behaviour.

S38 www.neurologia.com  Rev Neurol 2018; 66 (Supl 1): S31-S38

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