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En primer lugar la mente, con sus ideas incluidas, son una parte física del cuerpo, nos guste

o no. Así que


todos los aspectos mentales son físicos y dependen para su correcta función de que la sangre que circule
por el cerebro sea de la mejor calidad, y que las células que compone este órgano estén lo mas
depuradas posibles, como ocurre con los animales salvajes. Pretender disociar mente y materia es la
mayor estupidez que ha hecho el ser humano en los últimos diez mil años. No hay que ser muy listo para
darse cuenta de cómo condiciona y transforma la mente cualquier acción física que afecte a la sangre,
por ejemplo beber alcohol, drogarse, y por supuestísimo la comida que ingerimos y tratamos de hacer
digerir a nuestro estomago.

La mayoría de gente que habla de la mente no tienen cultura acerca de quien desarrollo esa forma de
pensar. Fue principalmente la Señorita Eddy, con su tan cacareada “Ciencia Cristiana” la que en USA hace
ya bastantes años, monto una secta para tratar de demostrar al mundo que el cuerpo obedecía a la
mente, y no al revés como en realidad ocurre. Tuvo un éxito importante, pero, como absolutamente
todos los terapeutas mentales y de auto ayuda que han venido después, era una vendedora de humo.
Todos estos que hablan del poder de la mente, no pueden demostrarte absolutamente nada. Mientras
que yo les introduzco una droga en su circulación sanguínea, esta pasa por el cerebro y tachan, tachan,
su personalidad, su estado mental, sus emociones, sus actos, todo se transforma, demostrando así que
es el estado físico el que condiciona absolutamente el estado mental.

Pensar, como tratan de hacernos creer ahora los seguidores de la absurda “física cuántica”, que es
nuestra mente la que crea nuestra realidad, es una absoluta gilipollez. La razón mas sencilla para
demostrarlo es esta: O bien vivimos en un mundo de masocas en masa, o a nadie le funciona, por que el
planeta esta en un estado deplorable, las personas son cada vez mas infelices, nadie tiene una vida plena
y satisfactoria, ¿Qué pasa, que pudiendo crear una realidad maravillosa, nos montamos una patética,
como es el mundo actual?, venga hombre, esto no hay quien se lo crea. Como Séneca demostró hace
dos mil años, todo aquello que afecta a un cuerpo físico, es a su vez físico. Por tanto las emociones, los
sentimientos, los malestares, todos son debidos a factores físicos, la mayoría de las veces presentes en
nuestra sangre.

Yo no creo que estoy intoxicado, yo lo he comprobado, en mi mismo y en toda la gente que me rodea, no
es una cuestión de que yo crea que lo estoy, no soy tan idiota, si mi mente pudiera crear mi realidad, yo
pensaría que soy superfeliz y crearía un entorno paradisíaco para vivir, te lo aseguro, nadie seria tan
idiota de crearse una realidad que le hace sentirse mal, nadie, todos, absolutamente todos deseamos y
buscamos en la vida el bienestar. Cuando quiera, quien quiera, puede someterse a experimentos
sencillos que yo recomiendo, para auto demostrarse que esta cargado de toxemia. Esto no es una
realidad inventada, esto es la puñetera realidad, por haber pasado muchísimos años comiendo
legumbres, cereales y animales muertos, y no hay mas, se le de las vueltas que se le de. Nadie se inventa
una realidad en la que se siente intoxicado, que tontería. Yo llevo años soñando con el paraíso y una vida
paradisíaca en el, y no se materializa ni a la de mil, al contrario, cada vez me veo mas lejos, por culpa de
la civilización.

Todos los esoterismos son vagos, y vagos son sus practicantes, porque afrontar la verdad cuesta mucho
trabajo y la gente no tiene ganas. Nosotros pensamos que nuestro cuerpo no esta preparado para vivir
de frutas, pero creemos que puede llegar a estarlo, si hacemos las cosas bien y lo depuramos de tanta
basura como le hemos metido. No es una cuestión de esoterismo barato, sino de realidades palpables y
demostrables en el cuerpo de cualquiera. Yo no vendo humo, yo hablo de realidades, si te fijas en mi
texto “Ni tu, ni Yo, Omnívoros” con todo lo que afirmo, oferto la manera de que cada uno se demuestre a
si mismo que tengo razón.

En lo único que todo esto tiene algo de esotérico (odio esta palabreja de mercaderes baratos que solo
pretenden vivir del cuento), es en el hecho de que cuanto mas depurado esta el cuerpo, mejor funciona
la mente, y esta te va llevando hacia una forma de sentir y experimentar la realidad del mundo que nos
rodea, mucho mas objetiva, mas real, y por supuesto mucho mas placentera. Llegas a estar conectado
con la esencia de la vida. Esto es algo de lo que disfrutamos muy pocos, y que no puedo llegar a expresar
con palabras. Me sucede especialmente tras ayunos de intensa depuración. Nadie puede opinar sobre
esto, que no haya sentido algo así, en un cuerpo muy depurado. Yo se bien de lo que hablo, porque no
solo lo he sentido muchísimas veces, sino que también he experimentado lo que es dejar de sentirlo de
golpe, lo que en la biblia llaman “la caída”. Yo se lo que es sentirte pletórico, conectado con el “numen”
(la esencia de Dios), y de repente tener un fuerte accidente, y que te empiecen a pinchar drogas
calmantes y desaparecer bruscamente todas tus buenas sensaciones. Y esto no es algo mental, esto es la
acción del físico sobre la mente.

Ojala todo fuera tan fácil como forzarse a pensar en positivo, o poder crear tu mismo la realidad que te
rodea. Pero solo tienes que ver la mierda de mundo que nos rodea para darse uno cuenta de que nadie
es feliz, y dudo mucho que la gente este así, porque quiere estar así.

Pero es que la mayoría de la gente se cree cualquier cosa menos la puñetera verdad. Les dices que has
visto un burro volar, y te preguntan donde, pero les dices que su estado anímico y su felicidad dependen
de su estado de toxemia interna, y te miran como si estuvieras loco. Y de veras tienen razón, porque hay
que estar loco para jalear con tanto ignorante.

Diego Conesa.

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