un estudiante de secundaria en la ciudad de Iguala
de la Independencia, Guerrero, México. Durante la infancia me caractericé por ser un niño callado y muy quieto; durante mi estancia en el jardín de niño conocí a muchas personas quienes todavía reconozco, sin embargo, no recuerdo alguna experiencia. Cuando curse mi educación primaria me volví un niño inquieto y muy impaciente además de que no fui una persona la cual fuera destacada en el estudio y constancia en mis trabajos. Mi familia fue un gran apoyo para mi durante mis primeros años en la primaria, ya que me sentía solo y no tenía muchos amigos. En mi último año en la primaria se convertí en uno de los estudiantes más destacados de mi generación en mi ciudad y conocí a muy buenos amigos. Cuando entré a la secundaria pensaba que literalmente mis compañeros no me merecían y mi actitud hacia ellos era de indiferencia por lo que tuve algunos problemas con ellos los primeros meses, sin embargo, con el tiempo aprendí los amigos valen más que el orgullo y la soberbia. Los acontecimientos más importantes en primer año fueron mi participación en un concurso municipal de oratoria en el cual consigue el tercer lugar, mi participación en un concurso estatal del cual conseguí una medalla de plata. Cuando llegué a segundo año mi actitud hacia mis maestros fue de rebeldía justificada e injustificada, en este año mis amigos fueron muy importantes, con ellos viví experiencias inolvidables, sin embargo, también fue un año muy complicado ya que mis padres se separaron y aunque no me afecto en lo más mínimo, fue muy complicado los primeros meses, a pesar de ello siempre conté con el apoyo incondicional de mi madre y mi abuela materna, sin embargo mi dedicación y pasión momentánea por las matemáticas me permitieron participar en concursos nacionales de matemáticas y obtener buenos resultados, una medalla de bronce en un nacional, una medalla de oro estatal y lo más importante, que mi madre se sintiera orgullosa de mi después de tiempos tan difíciles. Al final del año le tuve que decir adiós a algunos amigos míos de tercer año, a los cuales extraño mucho (tu no Ludahí) y también consolide mi amistad con mis amigos quienes son una de las pocas motivaciones que tengo para ir a la escuela; Rafa, Rodrigo, Josselyn, Fernanda, Axel, Salado, Xavi, Itzel, Hannia, los quiero mucho. Actualmente curso tercer año de secundaria, considero a mis amigos como las personas las cuales se merecen todo mi apoyo y cariño ya que son muy importantes para mi y por ayudarme cuando siempre lo he necesitado. En conclusión, puedo decir que mi etapa en la secundaria es y fue un manojo de emociones y acontecimientos diversos proporcionales a mi naciente identidad. Mi modelo a seguir es mi abuela ya que es la persona más emprendedora y mágica de todo el mundo, ella salió adelante a pesar de todas las dificultades que tuvo trabajando y teniendo mucho ingenio, pudo sacar a delante a toda una familia, sin duda mi ideal a seguir. Me gustaría ser una persona exitosa que tenga presente a su familia y amigos, que se realice y deje un legado a sus hijos, a los cuales les enseñe a ser unas personas honradas, la cual defienda a sus ideales y respete la ley y a personas que tenga opiniones diferentes. Me gustaría vivir un estilo de vida activo, que se adapte al modelo de la sociedad del siglo XXI pero que tenga siempre en cuenta que el dinero no lo es todo (o casi todo).