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Las Fallas Del Mercado PDF
Las Fallas Del Mercado PDF
N° 5 - Marzo 2006
Universidad de Chile.
Leonardo Letelier S. 2
Editora
Karina Doña Molina, Académica Instructora
Departamento de Gobierno y Gestión Pública
INAP – UNIVERSIDAD DE CHILE
Comité Editorial
Sr. Alvaro Drapkin, Profesor Asociado
Sr. Omer Robles, Profesor Asistente
Sr. Thomas Griggs, Profesor Asistente
Asistente de Publicaciones
Sr. David Vilches
Administrador Público
Se autoriza la reproducción total o parcial del material publicado, previa cita de la fuente.
PALABRA CLAVE
2
Profesor Asistente del Departamento de Gobierno del Instituto de Asuntos Públicos de la
Universidad de Chile
PRESENTACIÓN
La Editora
Marzo, 2006
1. INTRODUCCIÓN
Externalidades en el consumo:
Externalidades en la producción:
P = C.Mg. + Externalidad.
(Def. 4)
Por el contrario, si las externalidades son positivas, habrá una parte de los
beneficios de la firma no internalizados por esta, en cuyo caso debemos
agregar al ingreso marginal la magnitud de la externalidad:
P + Externalidad = C.Mg.
(Def. 5)
3 Se refiere al curso de Economía del Sector Público, que se imparte a los estudiantes de V semestre
¿Qué sucedería si este no fuera el caso?. Podría suceder que uno de los
vendedores de manzanas, aprovechando la desinformación de numerosos
consumidores, cobrara un precio sustancialmente mayor al resto a cambio
de un producto de similar calidad, extrayendo indebidamente una parte
del excedente del consumidor. La intuición nos indica que el problema de
la información será más agudo cuanto más difícil sea para el comprador
evaluar las propiedades específicas de aquello que está comprando. En
esta lógica, así como el mercado de automóviles nuevos tiende a ser muy
transparente, no lo es tanto aquel de los automóviles usados. En el extremo
opuesto del espectro encontraremos el caso del mercado de los seguros, y
en particular aquel de los seguros de salud, en que el producto adquirido
contiene múltiples dimensiones difíciles de evaluar tanto para quien lo
compra como para quien lo vende. La problemática en torno al caso de
los seguros ha sido profusamente estudiada en el marco del llamado
“riesgo moral” envuelto en dicho mercado y la tendencia perversa hacia
la llamada “selección adversa” (Barr; 1992), ambos conceptos
estrechamente relacionados con el debate sobre el grado óptimo de
autonomía de los niveles descentralizados de gobierno en lo que a
endeudamiento se refiere.
Externalidades en el consumo.
¿Cuál será la pérdida social?. Todas las vacunas cuya valoración social
supere al costo privado (y social) de producirlas ($ 160), y que no se hayan
utilizado por efectos de la diferente valoración antes indicada, generarán
una pérdida social. La magnitud de dicha pérdida es usualmente
denominada “distorsión”. Puesto que el equilibrio espontáneo del mercado
es el punto B, dicha distorsión está representada por el área ABE del mismo
gráfico. Para todas las unidades de consumo que van desde la vacuna
número 2.200 y la 5.000 en el gráfico, el aporte de cada vacuna al
bienestar de la sociedad está dado por el segmento AE en la demanda
social. Por su parte, el costo marginal social sigue siendo $ 160, motivo por
el cual la diferencia corresponde a la pérdida señalada. Dado que el
demandada llegará una vez más a 2.500 unidades por mes. El equilibrio se
trasladará una vez más hasta el punto E, con un precio de $ 160 por
unidad, de los cuales solo $ 120 serán de cargo del productor, siendo la
diferencia financiada por el subsidio. Nuevamente el gasto realizado
corresponde al área FECG, la cual debe ser financiada mediante tributos.
El beneficio social neto corresponde a la incorporación de nuevos
consumidores y equivale – de igual forma que en el subsidio a la
demanda- al área ABE. No obstante que el costo privado en este caso es
$ 120, el costo social continúa siendo $ 160. Los compradores solo
observarán los $ 120, llegando a demandar una cantidad equivalente a
2.5000 unidades en el punto G.
Externalidades en la producción:
Para ser fiel al ejemplo de A. Smith supondremos que nuestro bien público
es “la justicia”. Ella tiene todas las características de un bien público puro,
toda vez que no hay posibilidad de excluir a alguien de sus beneficios, no
habiendo además rivalidad en el consumo. Cada individuo estará
dispuesto a pagar algo a cambio de vivir en una comunidad en que se
respeten los derechos colectivamente definidos. Sin embargo, dado que
cada persona por separado sabe que los beneficios del sistema son
colectivos (y no individuales), nadie estará dispuesto a revelar sus
preferencias expresadas en la disponibilidad individual a pagar por el
servicio. La no disposición a revelar las preferencias genera el problema del
“free rider”, figura mítica con que la teoría económica ha denominado a
quien profita de un beneficio sin realizar un sacrificio equivalente para
financiarlo. El free rider impide la existencia de un mercado privado, puesto
que en este caso no está expresada la intención de pago. No habrá, por
lo tanto, una demanda privada por un sistema judicial. Solo habrá una
secreta y, por lo tanto, no declarada intención de pagar a cambio de
tener dicho sistema judicial funcionando.
Equivalentemente:
Condición 1: U1 / p1 = U2 / p2
Condición 2: y = p1q1 + p2q2
Si:
Max U = U (q1, q2) (1)
Entonces:
Tabla 1
Condición 1: U1 / p 1 = U2 / p 2 U 1 / p 1 * = U2 / p 2
Condición 2: y = p1 q1 + p2 q2 y = p1 * q1 + p2 q 2
Dado que p1* > p1, el resultado anterior implica que la optimización
privada induce un sobre consumo de cigarrillos respecto del óptimo social
(Tabla 1). Lógico resulta entonces que a fin de restituir el equilibrio en el
marco de la optimalidad de Pareto (óptimo social), debemos encarecer el
consumo de cigarrillos mediante el cobro de un tributo que desaliente su
consumo.
Supondremos que existen dos individuos, cada uno de los cuales consume
una cierta cantidad de bien privado (x) y a la vez tienen acceso a los
beneficios colectivos de un bien público que llamaremos G. Las funciones
de utilidad individual serán U¹= U¹(x1, G) y U² = U²(x2, G) respectivamente,
donde xi es el consumo del bien privado por el individuo i. Sabemos que si
ambos consumidores optimizan su función de utilidad en forma
independiente, el resultado será la solución privada expresada en las
condiciones 1 y 2 de la Tabla 1.
F2/F1 = [∂U¹ / ∂UG] / [∂U¹ / ∂UX1] + [∂U²/ ∂UG] / [∂U² / ∂UX2] (3)
Donde; F2 = ∂F / ∂ X1 ; F1 = ∂F / ∂ X2
5. MEDIDAS REMEDIALES
4
www.eumed.net/cursecon/colaboraciones/Miro-Coase.htm (Nota del Autor)
6. RESUMEN
Tabla 2
I II
Se puede excluir a los El Mercado asigna los recursos El Mercado asigna los
que no pagan eficientemente. recursos
eficientemente.
IV III
Esta categoría no existe, puesto Bienes Públicos y
No se puede excluir a que si existe rivalidad en el externalidades. El
los que no pagan consumo debe poderse excluir a mercado es un mal
quienes no pagan. asignador de
recursos.
7. BIBLIOGRAFÍA
1. Barr, N. (1992) “Economic Theory and the Welfare State: A Survey and
Interpretation”,Journal of Economic Literature, Vol. XXX, 741-803.
Guía 2
Prof: Leonardo Letelier S.
INAP
Universidad de Chile
1. Explique por qué las salas de cine, en las cuales no hay rivalidad en el
consumo en la medida que hayan asientos disponibles, pueden operar
bajo el marco de la provisión privada de sus servicios.