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¿A qué se deben los espectaculares colores del cielo al atardecer? ¿Por qué
el cielo es azul de día y enteramente negro de noche? El cielo ofrece una
gran cantidad de fenómenos visuales: colores, espejismos, halos… Todos
ellos se deben a la interacción de la luz solar con algunos componentes de
nuestra atmósfera.
La luz solar
Fotografía de un atardecer
Cielo nublado
Las nubes están formadas por millones de moléculas de agua. Al ser tan
grandes consiguen que cuando la luz solar choca con ellas se descomponga en
todos sus colores. Esto se traduce en el color blanco que las caracteriza.
Pero en ocasiones se oscurecen y muestran tonos grises e incluso negruzcos.
Es entonces cuando nos preparamos para el chaparrón.
Este fenómeno se explica porque las nubes, además de dispersar la luz, la
reflejan: hacen que rebote sin descomponerse. Y esta reflexión es mayor
cuanto mayor son las gotas que forman la nube. Es decir, cuando la nube va
bien cargada, la luz no puede atravesarla porque sus rayos rebotan en ella.
Por eso, cuando las nubes son oscuras, amenaza lluvia.
El arco iris
Arco Iris
El arco iris aparece cuando llueve y, a la vez, los rayos de Sol se abren paso
por algún hueco entre las nubes. Para verlo debemos mirar hacia la lluvia de
espaldas al Sol. Cuando los rayos solares atraviesan las gotas de lluvia, su
color blanco se descompone en todos los colores que lo forman: rojo,
naranja, amarillo, verde, azul, añil y violeta. Estos colores se reflejan
entonces en millones de gotas en diferentes ángulos y forman la banda que
todos bien conocemos.
Cuanto más cerca está el sol del horizonte, mayor es el arco. Si el sol supera
los 42 grados con respecto al suelo, entonces el arco iris desaparece. Esto
ocurre porque en realidad el arco iris no es un arco, sino un círculo completo
centrado en el punto frente al Sol. Si no hubiera horizonte, veríamos el
círculo completo, como se puede ver desde un avión.
Halos
Cuando en el cielo hay nubes altas, como los cirros, puede parecer que el Sol
o la Luna formen un halo. Esto se debe a que su luz se refracta en los
cristales de hielo que contienen estas nubes, los cuales actúan como lentes.
En ocasiones, las finas capas de hielo de la atmósfera nos pueden hacer ver
hasta 3 soles: dos manchas muy luminosas aparecen a cada lado del Sol,
fenómeno que recibe el nombre de parhelio.
Halo
Parhelio
Espejismos