Ingeniería en Gestión Empresarial

Grado: 1º Semestre: 1º
Grupo: “C”

Desarrollo humano

Resumen y aprendizaje de:

“El caballero de la Armadura
Oxidada”

Prof. Lic. Leticia Cervera Rodríguez

Alumna: Ángela Leticia Andrade

Aguilar
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En una tierra muy lejana, vivía un caballero que hacía todo lo que suelen
hacer los caballeros buenos. Luchaba contra enemigos, mataba dragones y
rescataba a damiselas, incluso cuando ellas no deseaban ser rescatadas. Era
famoso por su armadura.

El caballero tenía una mujer fiel, Julieta, y un hijo llamado Cristóbal. El

caballero se enamoro de su armadura, ya no se la quitaba para nada. Cristóbal
fue olvidando qué aspecto tenía su padre sin la armadura y Julieta ya estaba
cansada de la armadura y un se enfrento a su marido y le advirtió que si no se
quitaba la armadura, tomaría a su hijo y se marcharía de su vida.

El caballero amaba a su esposa y a su hijo, pero también amaba a su

armadura, pero finalmente tomo la decisión, salió hacia la tienda del herrero,
pero el herrero no podía sacar al caballero de su armadura.

Una mañana se alejo cabalgando para buscar ayuda, en el camino vio a

Bolsalegre, el le aconsejo que fuera ver a Merlín.

El caballero cabalgó solitario día tras día, noche tras noche a través de
los bosques, intentando sobrevivir en el.

Después de meses de buscar, una mañana, que despertó más débil de lo

normal y un tanto peculiar, encontró a Merlín.

Merlín le tendió una copa de plata que contenía un extraño líquido,

rompió una caña, puso un extremo en la copa y deslizó el otro por uno de los
orificios de la visera.

Al caballero los primeros sorbos le parecieron amargos, los siguientes

más agradables, y los últimos bastantes deliciosos. El caballero le pregunto a
Merlín “¿Qué era?” y Merlín le respondió “Vida ¿no os pareció amarga al
principio y, luego, a medida que la degustabais, no la encontrabais cada vez
más apetecible? Y el caballero asintió, y el mago le contesto “eso fue cuando
empezasteis a aceptar lo que estabais bebiendo”, la vida es buena cuando uno
la acepta.

Los animales alimentaban al caballero con regularidad, y Merlín le daba a

beber enormes copas de Vida con la pajita. El caballero se fue fortaleciendo y
comenzó a sentirse esperanzado.
 Cada día le preguntaba a Merlín “¿Cuando podre salir de esta
armadura?” y cada día Merlín le replicaba que tuviera paciencia, que había
llevado esa armadura durante mucho tiempo y no podía salir de ella así como
así.

Merlín le fue haciendo entender que el se había puesto la armadura por

que tenia miedo, y el caballero al principio lo negaba diciendo que la llevaba
para protegerse en las batallas, a lo que Merlín le pregunto, que quien le dijo
que tenia que ir a la batalla, y el caballero le respondió que tenia que demostrar
que era un caballero bueno, generoso y amoroso. Merlín le explico que si
realmente era eso no tenía por que demostrarlo.

Una vez que el caballero empezó a reflexionar, logro escuchar a los

animales, los cuales le explicaban que ya le habían hablado antes, pero que la
gente muchas veces no escucha. El mago le explico que no hablo con ellos con
palabras, si no que sintió sus vibraciones y las tradujo en palabras.

El caballero tenía ganas de regresar con su familia, los extrañaba, quería

ser un buen padre y marido, pero aun no podía así que decidió mandarle una
nota a Cristóbal y mandársela con Rebeca una paloma. Su hijo le respondió
con una hoja en blanco, y el mago le dijo que era por que no lo conocía
suficiente como para darle una respuesta. El caballero intento retener sus
lágrimas pero su pena lo venció hasta quedarse dormido.

Al despertar, el caballero, sintió mucha pena, pero Merlín le respondió

que acababa de dar el primer paso para liberarse de su armadura. El caballero
empezaba a disfrutar estar en el bosque con Merlín y los animales. Pero Merlín
lo condujo al sendero por el que llego al bosque, le dijo que podía regresar por
ahí mismo pero ese sendero conducía a la deshonestidad, la avaricia, el odio,
los celos, el miedo y la ignorancia. Entonces el mago señalo hacia otro sendero,
el Sendero de la Verdad, el cual se vuelve mas empinado a medida que se
acerca a la sima de la montaña, pero ese lo liberaría de la armadura.

El caballero decidió arriesgar e ir por el Sendero de la Verdad, aunque

debería ir a pie, pero la ardilla y rebeca lo acompañarían. Merlín le di una llave
exquisita, dorada, esta llave abriría las puertas de los tres castillos que
bloquearían su camino. El caballero tendría que aprender a salvarse así mismo.

El primer castillo se llama Silencio; el segundo Conocimiento y el tercero

Osadía, solo encontraría la salida cuando haiga aprendido lo que tenia que
aprender. No podía rodear los castillos. La lucha es aprender a amarnos,
aprender a conocernos.
 Rebeca volaba en misión exploratoria y la ardilla le daba agua. Un pedazo
de su armadura oxidado se callo gracias a sus lágrimas que derramo después
de leer la carta de su hijos, mientras caminaban aprendió a ver las diferencias
en otras formas de vida por que estaba empezando a ver las diferencias de su
interior. Entonces llegaron a la puerta del castillo del Silencio, Rebeca le dijo
que la diferencia entre los humanos y animales es que los hombres esperan y
los animales aceptan; los animales lo esperaron del otro lado del castillo y él
entró.

El Caballero, sintió mucho miedo, abandonado a su suerte, observo que

no había ninguna puerta que lo condujera fuera de la habitación y que había
un extraordinario y aterrador silencio.

Jamás se había sentido tan solo, de repente un sonido familiar lo hizo girar, era
el rey aproximándose, el le dijo que la puerta solo se podía ver cuando uno
comprende lo que hay que ver en esa habitación, el rey le explico que todo el
mundo entiende las cruzadas, pero muy pocos comprenden la verdad, que la
mayoría de la gente podemos barreras, para protegernos de quienes creemos
que somos y nos quedamos atrapados sin poder salir.

El caballero tenía que descubrir la puerta solo, pero estaba desesperado,

que golpeo el suelo con el pie, dejándolo caer involuntariamente sobre el pie del
rey, pero el rey no lo juzgó. El rey vio la puerta para irse, pero antes le dio un
consejo al caballero, que uno nunca deja de viajar por el sendero de la Verdad,
que cada vez que iba, iba comprendiendo mas y encontraba nuevas puertas, le
dijo “si logras reunir las fuerzas necesarias y quedaros para hacer lo que tenéis
que hacer aquí, será nuestra mayor victoria” y luego se fue.

El caballero se fue envolviendo en el silencio absoluto y fue así como

lograba aprender y cada vez que fue aprendiendo lo que tenia que aprender
lograba ver la siguiente puerta, las habitaciones eran más pequeñas a la
anterior. El caballero logro admitir que tenía miedo a estar solo, empezó a
hablar consigo mismo, se dio cuenta que siempre había tenia miedo a estar
solo, que toda su vida había perdido el tiempo hablando de que había hecho y
de lo que iba a hacer, nunca había disfrutado lo que pasaba en el momento. se
quedo quieto y escucho el silencio y se dio cuenta que durante su vida no había
escuchado a nadie, ni a nada, ni a su esposa, comprendió que se dejaba la
armadura para no oír la tristeza de Julieta.

El caballero se puso a llorar, tanto que las lágrimas empaparon la

alfombra y apagaron el fuego, se pregunto por que las habitaciones eran cada
vez más pequeñas. Entonces una voz le respondió que era por que se estaba
acercando a si mismo y sobresaltado miro a su alrededor, había hablado su
verdadero yo.

El caballero le pregunto entonces –“¿Quién soy yo? Y la respuesta fue –

“no puedes pretender aprender todo de golpe”. Luego se sumergió en un
profundo y dulce sueño.

Al despertar, no sabia donde estaba, la ardilla y rebeca estaban sobre su

pecho, vio a su alrededor sorprendido, se encontraba sobre el sendero de la
Verdad, había logrado salir pensando. Entonces el caballero se dio cuenta de
que su yelmo había desaparecido.

El pensaba que todo había ocurrido en un a noche, pero Ardilla le dijo

que realmente no fue una noche, fue muchísimo mas tiempo.

Decidió llamar a Merlín para preguntarle y al llegar Merlín se lo confirmo

sin que aun el le preguntara, por que el lo conocía como se conocía a el, le
explico –“somos todos parte el uno del otro”. El caballero empezó a entender, ya
comprendía el dolor de Julieta, por que era parte de ella. Se sentía orgulloso.

Merlín le dijo que por que ya había empezado a oír su yo verdadero, fue
que el tiempo transcurrió sin que el se diera cuenta, pero que lo comprendería
después de pasar por el castillo del Conocimiento y entonces desapareció.

El caballero, ardilla y rebeca continuaron el viaje por el sendero de la

Verdad, en dirección al Castillo del Conocimiento. El caballero afeito su barba y
cortó su cabello, se sintió mucho mejor, más libre que antes. Sin el yelmo ya
podía comer sin la ayuda de Ardilla, nunca mas comería ninguna ave ni carne,
pues seria como comerse a sus amigos.

Antes de caer la noche, contempló el Castillo del Conocimiento, era el

castillo más grande que el caballero hubiera visto jamás, con una puerta de oro
solido. Cruzaron el puente levadizo, de detuvieron ante la dorada puerta. El
caballero cogió la llave y abrió la puerta, Rebeca y ardilla lo acompañarían, por
que como le explico Ardilla –“El silencio es para uno; el conocimiento es para
todos”.

Los tres atravesaron la puerta, penetraron en una oscuridad adensa que

no podían ver nada, el caballero busco si no había una antorcha, el caballero
tanteo el camino hasta llegar donde estaba Ardilla quien le señalo una
inscripción que brillaba en la pared. Ponía: “el conocimiento es la luz que
iluminara vuestro camino”. –“Preferiría una antorcha” pensó el caballero, y Sam
le hablo –“significa que cuantas mas cosas sepas, mas luz habrá en el interior
del castillo” –“¡Apuesto a que tienes razón Sam!” exclamo el caballero. Y un rayo
de luz se filtro en la habitación. Entonces vieron otra brillante inscripción
“¿habéis confundido la necesidad con el amor?” el caballero alardeaba que no
tenia tiempo para jugar a Preguntas y Respuestas, a lo que Rebeca le respondió
–“tal vez lo que tengáis que aprender aquí sea que tenéis todo el tiempo del
mundo”. Entonces suspiro y se sentó ante ella.

Hay con la ayuda de Sam pudo admitir que necesitaba a Julieta y a su

hijo, que no había valorado todo lo que Julieta había hecho, que había preferido
culparla por todo el vino que bebía, que le venia bien que ella bebiera, así
podría culparla de todo, incluyendo que el estuviera atrapado en la armadura.
Y así a medida que se iba dando cuenta de lo injusto que había sido, las
lágrimas iban cayendo por sus mejillas. Los había necesitado más de lo que los
había amado.

El pensamiento vino a su mente:¡había necesitado el amor de Julieta y

Cristóbal por que no se amaba así mismo! Todo lo que había hecho era por que
necesitaba el amor de los demás por que no se amaba así mismo, se dio cuenta
que si no se amaba, no podía amar realmente a los otros. Al admitir esto una
hermosa y resplandeciente luz brillo a su alrededor.

Una mano se poso suavemente en su hombro, vio a Merlín que le sonreía,

-“habéis descubierto una gran verdad” le dijo el mago. –“conocéis la verdad, y la
verdad es amor”. “no hay nada mas hermoso que la luz del conocimiento”.

El caballero admiro la luz que lo rodeaba, le dio las gracias a Merlín por a
ver llegado y luego Merlín desapareció.

Entonces apareció Rebeca muy emocionada, encontró un espejo, el espejo

de la Verdad, donde el caballero se veía como un hombre encantador y vital,
cuyos ojos brillaban con amor y compasión, al grado de no reconocerse, por que
nunca se había visto así, ese era su yo verdadero le explico san, el que vive bajo
la armadura. Se dio cuenta que se había pasado la vida intentando agradar a la
gente y exclamo –“¡he desperdiciado mi vida!” y Sam le dijo –“no, necesitabas
tiempo para aprender todo lo que has aprendido”

El caballero se dio cuenta de que todo lo que tenía que hacer para tener
todas esas cualidades era reclamarlas, pues siempre había estado ahí. La
hermosa luz brillo una vez más, con más fuerza que antes. Ilumino toda la
habitación revelando, que el castillo tenía tan solo una gigantesca habitación.
 “El verdadero conocimiento no se divide en compartimientos por que
procede de una única verdad”- dijo Sam. Luego noto una inscripción grabada
en una losa junto al árbol: “por esta fruta impongo condición, pero ahora
aprenderéis acerca de la ambición” el caballero no tenia idea de lo que
significaba. Agarro una manzana y se sentó bajo el árbol. Merlín apareció
detrás de el, llevaba un laúd. Merlín le ayudo a aprender lo que era momento
de aprender. El caballero permaneció en silencio, reflexionando sobre las
palabras de Merlín. Estudio al manzano, observo a Ardilla, a Rebeca y a Merlín,
ni los arboles ni los animales tenían ambición, y la ambición de Merlín provenía
de su corazón. Eran hermosos especímenes de la vida.

Después pensó en si mismo, había adquirido todo eso por su ambición

mental y comprendía que todo eso debía cambiar. Mientras pronunciaba esas
palabras, el castillo y Merlín desaparecieron, se encontró otra ves en el Sendero
de la Verdad, con Rebeca y Ardilla. La armadura de sus brazos y piernas se
había oxidado y caído, su barba había crecido, había jugado con el tiempo.

El caballero reflexiono, se dio cuenta que Merlín estaba en lo cierto, el

tiempo transcurría con rapidez cuando uno se escucha a si mismo. Se sintió
mas ligero y mas joven de lo que se había sentido en muchos años. Con paso
firme partió había el Castillo de la Voluntad con Rebeca y Ardilla.

Hacia el amanecer del día siguiente llegaron al castillo, era más alto que
los otros y con muros mas gruesos. A medio camino se abrió de golpe la puerta
del castillo y un enorme y amenazador dragón surgió de su interior, echando
fuego por la boca. Jamás había visto un dragón como este, el caballero
temblaba, y pidió ayuda a Merlín, pero el mago no apareció.

De alguna manera el caballero dejo de temblar, y con la voz más fuerte y

potente que pudo grito: -¡fuera de mi camino, bombona de butano gigante! La
bestia lanzaba fuego en todas direcciones. Era el Dragón del Miedo y la Duda,
el caballero reconoció que eso era lo que el sentía exactamente, miedo y duda.
Rebeca le susurro al oído que Merlín dijo que solo el conocimiento de uno
mismo podía matar a ese Dragón. El caballero corrió para huir, pero Ardilla lo
convencía de que no huya. El caballero recordó que no tenia que probar nada,
era bueno, generoso y amoroso. Por lo tanto no debía ni sentir miedo ni duda,
el dragón no era más que una ilusión. Ardilla y Rebeca intentaban consolarlo, y
Sam entonces lo animo, el caballero volvió a intentarlo después de todas las
quemadas que ya llevaba. El caballero marchaba hacia el dragón cantando “el
miedo y la duda son ilusiones” y por más llamaradas que lanzaba el dragón, no
le hacían nada. A medida que el caballero se iba a cercando el dragón se hacia
cada vez mas pequeño, hasta alcanzar el tamaño de una rana. Y entonces el
Castillo desapareció, no tenia que aprender sobre la voluntad y osadía por que
ya había demostrado que ya lo poseía. Se podía ver la sima de la montaña, el
sendero parecía aun más empinado que antes, pero no importaba. Sabia que ya
nada lo podía detener.

El caballero escalo, cuando casi llegaba se encontró con un canto rodado

que bloqueaba su camino, con una inscripción: “aunque este Universo poseo,
pues no puedo conocer lo desconocido si me aferro a lo conocido”. Estaba
exhausto pero tenía que intentarlo.

El caballero miro la roca y un pensamiento horrible vino a su mente,

también conocía la roca ala cual se aferraba para seguir con vida, debía
soltarse y dejarse caer al abismo de lo desconocido y Sam le dijo que tenia que
soltarse, déjate ir y confía en la vida, la fuerza, el universo, Dios.

Pensando que moriría, se dejo ir, a medida que caía en el vacio, fue
desprendiéndose de todos los juicios que había hecho hacia los demás. Y por
primera ves en su vida contemplo su vida con claridad, sin juzgar y sin
excusas. En ese instante acepto toda la responsabilidad de su vida. Ya no tenía
miedo.

Entonces algo extraño sucedió, empezó a caer hacia arriba, surgiendo del
abismo, repentinamente dejo de caer y se encontró de pie en la sima de la
montaña y comprendió todo.

Su corazón rebosaba de amor por todos y por todo lo maravilloso del

mundo. Con tanta lágrima se termino de derretir lo que quedaba de la
armadura.

AHORA EL CABALLERO ERA EL ARROYA, ERA LA LUNA, ERA EL SOL,

PODIA SER TODAS LAS COSAS A LA VEZ, Y MAS, PORQUE ERA UNO CON EL
UNIVERSO,
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Esta historia se me hizo exquisita, tanta reflexión. Como muchas veces
nos ponemos una armadura transparente, para ocultar nuestros miedos,
queremos que la gente nos adule, nos admire y nos ame, cuando no nos
podemos amar a nosotros mismo, por que realmente no nos tomamos el tiempo
para conocernos.

El caballero tuvo que apreciar el silencio para poder conocerse y darse

cuenta de el miedo que e tenia a estar solo, para luego descubrir que el estar
solo no es tan malo, nos ayuda a conocernos a encontrarnos a nosotros mismo,
a nuestro verdadero yo.

Realmente, muchas veces por agradar a la gente no somos realmente

nosotros mismo, y estamos mal, por que no hay nada como la libertad de ser
uno mismo.

Otra reflexión que encontré, fue que muchas veces queremos que nos
vean como perfectos y no nos damos cuenta que con nuestras acciones
dañamos a los que mas nos aman, así como el caballero no veía el daño que le
hacia a Julieta y a Cristóbal. Tenemos que pasar por adversidades para darnos
cuenta lo egoístas que podemos ser.

El conocimiento es nuestra mejor arma, hay que conocernos y amarnos y

aprender a respetar los sentimientos de los demás para ser respetados, hay que
combatir nuestro miedo y duda como lo izo el caballero con el dragón. Muchas
veces nuestro miedo y duda nos hacen alucinar

Hay que aprender a confiar en el Universo. En nosotros mismo.