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se encuentra indexada en el
Publicación semestral del IESCO Índice Bibliográfico Nacional
Facultad de Ciencias Sociales, Humanidades y Arte
Publindex de Colciencias,
Ciberculturas: metáforas, prácticas sociales y colectivos en red y está registrada en los siguientes
índices internacionales:
NÓMADAS – No. 28
Abril/2008 CSA Sociological Abstracts
International Political
Consejo Superior Rector Science Abstracts (IPSA)
Jaime Posada Díaz (Presidente) Guillermo Páramo Rocha
Hispanic American
Fernando Sánchez Torres Vicerrector Académico
Rafael Santos Calderón Periodicals Index (HAPI)
Pablo Leyva Franco
Jaime Arias Ramírez Latindex
Francisco Piñeres (Repr. personal académico) Vicerrector Administrativo
Julián Lugo (Repr. estudiantil) Nelson Gnecco Iglesias
*
NÓMADAS, revista de
Decana Facultad de Ciencias Sociales, Humanidades y Arte periodicidad semestral, es el
Ligia Echeverri de Ferrufino espacio de difusión y discusión
de los avances de las distintas
Directora de IESCO y Revista Nómadas líneas de investigación en
Elssy Bonilla Castro Ciencias Sociales que vienen
consolidándose en el Instituto
Coordinadora de Comunicación
Ruth Nélida Pinilla E. de Estudios Sociales
Contemporáneos de la
Coordinador Administrativo Universidad Central, IESCO.
Víctor Manuel Moreno
Su objetivo, en primera
instancia, busca delinear
Cuerpo Editorial algunos de los principales
Coordinación editorial tema monográfico
Rocío Rueda Ortiz y Carlos Eduardo Valderrama
debates alrededor de la
generación del conocimiento en
Comité Científico Comité Editorial temas prioritarios para
Alemania: Hermann Herlinghaus Carl Langebaek, Rocío Rueda Ortiz, Latinoamérica, así como
Argentina: Eva Giberti Ingrid Bolívar, Gabriel Restrepo F.,
Brasil: Gaudencio Frigotto; Emir Sader Lya Yaneth Fuentes, Madeleine Alingue, establecer vínculos entre los
Colombia: Carlos Eduardo Valderrama, Uriel Espitia Vásquez, Santiago Castro-Gómez, desarrollos específicos de estas
Mónica Zuleta, Humberto Cubides, Stefania Gallini, Alejandro Sánchez, temáticas en la Región y las
Sonia Marsela Rojas, Silvia Borelli, Juliana Flórez, discusiones y propuestas
Colombia-USA: Arturo Escobar Sandro Jiménez
Chile: Tomás Moulián provenientes de otras partes del
España-Colombia: Jesús Martín-Barbero Corrección de Estilo mundo. En segunda instancia,
México: Guillermo Orozco G. Edicsson Quitián Hernando Clavijo quiere promover preguntas de
Documentación gráfica y diseño investigación alrededor de
Santiago Mutis Durán problemas sociales
contemporáneos desde una
Edición y Publicación Canje y Suscripciones postura crítica mediante la cual
Instituto de Estudios Sociales Instituto de Estudios Sociales Contemporáneos se asocie el saber con los
Contemporáneos - Universidad Central, Universidad Central, IESCO sistemas valorativos de los que
IESCO Carrera 15 No. 75-14 P.5° - Bogotá, D.C.,
Bogotá - Colombia Colombia se desprende. Por último,
PBX: 3266820 Ext. 5643 - 5665 NÓMADAS pretende fomentar
Distribución E-mail: nomadas@ucentral.edu.co vínculos novedosos entre el
Siglo del Hombre Editores S.A. revista.nomadas@gmail.com conocimiento y la sociedad.
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Bogotá Colombia Precio del ejemplar: Colombia $18.000.oo La revista se distribuye por
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Colombia, ARCCA.
CONTENIDO
CIBERCULTURAS: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES
Y COLECTIVOS EN RED
EDITORIAL .................................................................................................................... 4
PROCESOS DE CREACIÓN
Totó la momposina: nuestra cantadora transhumante
Gloria Triana ...................................................................................................................... 164
NUEVOS NÓMADAS
Retando las geografías de terror: estrategias culturales
para la construcción del lugar
María Angélica Garzón ...................................................................................................... 183
Notas biopolíticas. Potencia y bloqueo de la acción
Mauricio Berger ................................................................................................................. 185
N ÓMADAS 3
EDITORIAL
U na de las preocupaciones que hemos tenido en
la línea de Comunicación-Educación del IESCO ha sido
viles– se configuran hoy en dimensiones propias de la
constitución de los tejidos y prácticas sociales, así como
comprender la incorporación de medios y tecnologías de en ámbitos decisivos de creación cult ural del mundo
la información y la comunicación (TIC) en la educación. contemporáneo, esto es, en tanto cibercultura. En este
Por una parte, en el nivel macro hemos encontrado una sentido, el objetivo en este número de NÓMADAS es
retórica de las políticas económicas y educativas sustenta- comprender la estrecha relación que tienen las TIC1 con
da en un cierto desarrollismo y un determinismo tecnoló- el ejercicio del poder social ligado al capitalismo contem-
gicos, que ubican las TIC como la condición per se del poráneo en la producción de subjetividades y conocimien-
progreso social y la transformación educativa. En este con- tos, examinar las prácticas y movimientos sociales que
texto y en el juego de actores involucrados, se sustentan están cuestionando la orientación dominante del capita-
planes y programas nacionales de conectividad y de acce- lismo actual apoyadas en tecnologías de la Red, y analizar
so a computadores que se inscriben en una serie de ten- la dimensión sensible que anticipa la actual forma de pro-
siones que van desde la voluntad democratizadora estatal ducción, pero que también la resignifica, la apropia y nos
de masificación de las TIC y los intereses privados que plantea nuevas preguntas y formas de acción singular y
imponen un tipo de hardware y software, hasta el privile- colectiva. Por supuesto, no nos interesa promulgar el cam-
gio de los discursos técnicos sobre los pedagógicos, desco- bio de unas instit uciones por otras más competitivas,
nociendo los saberes tecnológicos locales y la singularidad adaptables y útiles a la economía, o el tránsito sin más
cultural de nuestro país. hacia una cultura científico-tecnológica, dominante y glo-
bal, sino problematizar dicho cambio, las categorías que
Por otra parte, si bien en el campo de la informática utilizamos para comprenderlo y las implicaciones que tie-
educativa se observa un número creciente de investiga- ne en la configuración de mundos personales y colectivos
ciones en las universidades sobre didácticas, aprendiza- en los países del Tercer Mundo. En efecto, tal como lo
je y entornos virtuales, a la escuela –incluida la misma ilustra el artículo introductorio de Rueda y en el contex-
educación superior– ha llegado principalmente el dis- to de los debates que se han planteado en el campo de los
curso que proviene del mercado del hardware y software más recientes estudios críticos ciberculturales, el interés
en su dimensión más instrumental y comercial. Tal con- que tenemos con este número de NÓMADAS es profun-
dición se traduce para nosotros en una “cultura de usua- dizar dicha dimensión crítica en la perspectiva de supe-
rios”, más que en una cultura de productores o creadores rar visiones subordinadas de uniformidad o unidad de
de/con tecnologías. Esta situación resulta particularmen- sentido, e identificar herramientas cognitivas y pragmáti-
te preocupante, pues nos enfrentamos hoy a nuevas ló- cas que permitan vislumbrar las fuerzas y poderes que
gicas de producción de verdades en la cultura, donde constit uyen los act uales entramados tecnosociales, así
los medios masivos, las industrias culturales y las TIC como entender las múltiples formas de vida posibles en
han jugado y continúan jugando un papel importante, los mismos. Estas dimensiones las hemos distribuido en
de tal manera que son múltiples los lugares y espacios cuatro ejes, a saber:
en donde se relaciona la subjetividad con la informa-
ción y el conocimiento y, en consecuencia, son diversos
los ámbitos de formación de sujetos, exploración de len- 1. Ciberculturas: teorías y metáforas
guajes, configuración de sensibilidades y emergencia de
visiones de mundo. En este apartado hemos intentado poner en juego
los debates teóricos que dan cuenta de teorías y metáfo-
Así, en esta oportunidad quisimos volver nuestra mi- ras que nos ayudan a comprender y problematizar la
rada a ese mundo que se está transformando “afuera de cibercult ura. En particular, aquí se debate la concep-
la escuela” y analizar críticamente cómo las TIC –espe- ción misma de las nuevas cualidades comunicativas de
cialmente Internet, los computadores y las tecnologías mó- las tecnologías y las transformaciones en las subjetivida-
1
Hay cierto consenso en que la cibercultura incluye tanto las tecnologías informáticas como las biotecnologías. Para efectos del
presente número sólo abordaremos las tecnologías informáticas digitales, puesto que el ámbito de las biotecnologías en sí mismo
sería objeto de un monográfico.
4 N ÓMADAS
des. Así, Sloterdijk, desde un cuestionamiento de las bién de la singularidad de las posibilidades de resisten-
formas de acción a distancia y las formas de comunica- cia, producción cultural y política que tales apropiacio-
ción –telepresencia– de los cerebros, nos plantea una tesis nes ofrecen a nuestros países. En particular, se debaten
subversiva para dilucidar la esencia y la tendencia de las aquí nuevas formas de entender y actuar políticamente,
tecnologías contemporáneas siempre y cuando y gracias al es decir, la redefinición de la relación entre política y
desvío a través de la enajenación metafísica, éstas sean cultura, como se plantea en el trabajo de Valderrama,
representadas en conceptos paleo-antropológicos y en ope- quien observa las tensiones que emergen en la dimensión
raciones de inteligencia arcaica. Tirado y Callén propo- de la esfera pública y la ciudadanía a través de las redes y
nen una nueva anatomía para las prácticas biopolíticas y movimientos sociales; también, la permanencia y las trans-
una redefinición de la noción de poder instaurado con la formaciones de ciertas prácticas comunicativas de tipo
implementación masiva de la simulación y los códigos organizacional y político, y su correlato en relación con la
informáticos. Albornoz, por su parte, analiza desde una forma o formas de participación en los escenarios propi-
aproximación sociológica del ciberespacio las paradojas ciados por las TIC y con acciones tradicionales de la polí-
de las nuevas nociones de privacidad que la cibercultura tica, como en el trabajo de Silvia Lago, y las nuevas formas
parece estar configurando. de organización diaspóricas de la sociedad, como en el
caso de los inmigrantes mexicanos a Estados Unidos, con
el texto de González.
2. Cibercultura: capitalismo cognitivo
y cultura
4. Cibercultura, estética y política
Se introduce aquí el análisis sobre el capitalismo
act ual (su naturaleza cognitiva y comunicativa), su im- En este eje, hemos querido presentar la discusión so-
bricación con la cultura y con la producción de subjetivi- bre el lugar del arte en el escenario de las tecnologías de la
dades individuales y colectivas. El trabajo de Kavita virtualización. Por una parte, Vásquez Rocca nos ofrece
Philip se pregunta sobre la autoría tecnológica y analiza nuevas metáforas para entender dicha relación como ám-
las nuevas articulaciones locales con formas de capital bito de la verdad y la cultura, mientras que Rodríguez,
global, la transformación en los modos de producción, desde una dimensión estética y política, aborda la pre-
de trabajo, y las nuevas regulaciones jurídicas en torno sencia de los lenguajes de la Red como la hipertextualidad,
a los “bienes comunes” y a la propiedad intelect ual. las narrativas de la hiperficción, en tanto apuestas que
Mariano Zukerfield cuestiona la categoría misma de ca- propenden por la creación y la invención de modalidades
pitalismo cognitivo y realiza una aproximación a los mo- narrativas que rompen con los esquemas comunicativos
dos de producción musical en la Argentina de hoy, donde tradicionales de la cultura escrita. De otro lado, se en-
teorías y prácticas sociales se ponen en tensión. El traba- cuentran los trabajos de Lucía Santaella y Andrés Fonseca,
jo de Rocío Gómez y Julián González nos ofrece, en este quienes desde prácticas artísticas vinculadas con el uso
contexto, una ref lexión sobre las subjetividades contem- intensivo de redes y tecnologías móviles se preguntan por
poráneas, particularmente las de jóvenes consumidores las apuestas políticas de creación cultural que integran
de tecnologías informáticas y sus modos de trabajo libre arte, acción política –artivismo– y tecnologías.
o liberado que realizan con estas últimas, con las pasio-
nes y frustraciones, los sentidos y sin sentidos que les Podemos decir entonces, que con este número de NÓ-
acompañan. Es importante señalar que en América La- MADAS invitamos a la ref lexión sobre la manera como
tina este debate apenas comienza y los trabajos de estos se está configurando aquello que se ha venido llamando
autores representan una novedad en las maneras como cibercultura, poniendo de presente no sólo las tendencias
lo abordan tanto concept ual como empíricamente, no de las prácticas sociales y culturales, así como las cons-
obstante, estamos en mora de estudios de largo aliento t r ucciones teór icas que las pretenden e xplicar y
que permitan una mayor profundización sobre la com- direccionar, sino también las particularidades y tensiones
plejidad y dinámica histórica de la relación capitalismo- que estas mismas prácticas y constructos abstractos ad-
cultura en las sociedades contemporáneas. quieren en el marco de un capitalismo que cada vez pro-
duce más brechas socioeconómicas y simbólicas. Dicha
ref lexión adquiere mayor relevancia en el escenario de
3. Colectivos y movimientos sociales en la red los países de Tercer Mundo, en donde hoy se juegan pro-
cesos políticos y culturales que, a pesar de los modelos
La pregunta por los usos y apropiaciones de las TIC homogenizantes de consumo y uso instrumental de las
por parte de los movimientos sociales en Colombia y tecnologías de la información y la comunicación, apues-
Latinoamérica resulta fundamental como una de las puer- tan por la invención y construcción de sociedades plura-
tas de entrada al entendimiento de la complejidad y tam- les y múltiples.
N ÓMADAS 5
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED NÓMADAS 7
Cibercultura: metáforas,
prácticas sociales
y colectivos en red nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 8-20
Considera-se como cibercultura um campo de estudo a partir do qual é possível compreender as transformações culturais
ligadas à introdução de tecnologias digitais nas sociedades contemporâneas e, em particular, as denominas de Terceiro
Mundo, através de relações complexas de enramados tecnosociais, em três âmbitos: o exercício do poder, à ação social coletiva
e a experiência estética.
Palavras-chaves: cibercultura, estudos ciberculturais, tecnologias da informação e a comunicação, capitalismo cognitivo,
movimentos em rede, estética.
Cyberculture is considered a research field where it is possible to understand the cultural transformations that are linked
to the construction of digital technologies in contemporary societies and, in particular, in those of the so-called Third World,
through complex relations of techno-social frameworks in three areas: the exercise of power, the collective social action, and
the aesthetic experience.
Key words: cyberculture, cybercultural studies, information and communication technologies, cognitive capitalism, network
movements, aesthetic.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 9
desde una profusión de prácticas En América Latina es importan- discusión desde la filosofía y las cien-
culturales en diversos ámbitos que pa- te destacar la singularidad de los es- cias en torno a la necesidad de bo-
recen incluso sobrepasarlo. La pro- tudios del campo de comunicación rrar límites disciplinares y renovar
ducción académica inicialmente y cultura y los estudios culturales. Los nociones ontológicas sobre la rela-
estuvo concentrada en los Estados trabajos de Martín-Barbero, Orozco, ción humanos-máquinas con las
Unidos y Europa, pero desde este Canclini y Hopenhayn, entre otros, consecuentes implicaciones en las
tercer estadio hay una creciente par- destacan cómo el lugar de la cultura epistemologías y metodologías de
ticipación de Asia, África y América en la sociedad cambia cuando la investigación, por fuera de las tra-
Latina. Esto responde también a los mediación tecnológica de la comu- diciones disciplinares. Aquí encon-
procesos de masificación y acceso a nicación deja de ser meramente ins- tramos los estudios sociales de
la misma infraestructura tecnológica trumental para espesarse, densificarse ciencia, tecnología y sociedad, los
en los diferentes países y a que las y convertirse estructuralmente en estudios feministas de ciencia y tec-
políticas globales han definido las nología, y las perspectivas de la so-
TIC como centro del desarrollo eco- ciología simétrica y la teoría del
nómico en las agendas de las políti- actor-red, que tienen un origen an-
cas nacionales y regionales. Es terior a los noventa pero que em-
importante señalar que en América piezan a ser incorporados a los
Latina el problema de la “brecha estudios ciberculturales (Haraway,
digital”3 surge en este contexto de Sloterdijk, Law, Callon, Latour).
política y es, de hecho, soportado por Desde estos campos se examina la
dos sub-campos de reciente creación: manera en que las tecnologías per-
la informática social (1999) y la infor- miten a grupos o actores, o grupos
mática comunitaria (2000). Éstos in- sociales relevantes, negociar formas
vestigan los usos sociales (por fuera específicas de poder, autoridad y
de la escuela) de las TIC, a través de representación en la producción de
los telecentros, los centros informá- conocimientos, así como las posi-
ticos comunitarios, las redes comu- bilidades para articulaciones poten-
nitarias, los medios alternativos de ciales entre los seres humanos, la
comunicación, los cibercafés, etc. En naturaleza y las máquinas.
estos campos, la presencia y produc-
ción académica universitaria es me- Por último, se encuentran los es-
nor que la de las ONG y otras tudios que analizan cómo el tipo de
organizaciones sociales de los países diseños tecnológicos configuran pau-
del denominado Tercer Mundo4. Si tas de interacción, allí se mira
bien estos estudios respondieron Germán Londoño: Libretas de apuntes. críticamente, por ejemplo, cómo el
–y aún lo hacen muchos de ellos– a lenguaje de la hipertextualidad
la pregunta por la brecha digital, nuevos modos de percepción y de len- reconfigura el texto, al escritor-au-
cada vez empiezan a señalar otras guaje; en nuevas sensibilidades y tor y al lector. En los años recientes
problemáticas como el ingenuo escrituras; en deslocalización de co- se está abriendo la posibilidad de na-
“etnocentrismo” que permea los de- nocimientos e instituciones del saber; rrativas participativas donde los su-
bates sobre las tecnologías; el carác- en el emborronamiento de las fron- jetos y colectivos juegan un papel
ter incuestionable del inglés como teras entre razón e imaginación, sa- crítico en el diseño de sistemas tec-
lengua franca del ciberespacio y la ber e información, naturaleza y nológicos. En este mismo grupo se
pérdida de lenguas locales; el uso ge- artificio, arte y ciencia, saber experto encuentran los estudios que integran
neralizado y estandarizado de un len- y experiencia profana (Martín-Barbe- tecnologías y arte, los movimientos
guaje despolitizado en los debates ro, 1998 y 2003). de techno-art, net-art, etc., donde se
sobre las políticas de acceso; las realizan novedosas aproximaciones
inequidades de raza, etnia, género y Otra línea de investigación que difuminan los límites entre la
sexualidad on line, etc. crucial en este tercer periodo es la tecnología y el arte en asuntos de
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 11
una economía basada en la difusión el sector de servicios y sus tareas son recombinables y reproducibles
del saber y en la cual la producción profesionales, de ocio y de estudio, con un costo cercano a cero, están
del conocimiento pasa a ser la prin- siempre presentaron fronteras di- planteando un debate donde la cul-
cipal apuesta de la valorización del fusas). Para nosotros, existen dos tura irrumpe con fuerza como un cam-
capital. Ésta se encuentra sustentada problemas adicionales: el manteni- po de batalla y de negociación del
en una nueva división internacional miento de las relaciones de poder poder social. Así, por una parte, en-
del trabajo cuya regulación se apoya entre el conocimiento válido de contramos los movimientos de cul-
en los nuevos cercamientos del saber unos (científico-técnico) y el no-co- tura libre con licenciamientos como
y en la captación de lo cognitivo en nocimiento o doxa de los otros (que el creative commons8 y, de otra, y de
provecho de lo financiero. También deben ser disciplinados o excluidos, manera paradójica, las leyes sobre la
se trata de un nuevo régimen técnico o incluidos segmentadamente), aho- legalidad y los derechos de propiedad
en la producción misma, de una nue- ra mantenidas a través de nuevos intelectual de los “bienes comunes”.
va tecnicidad (Martín-Barbero, 2005) mecanismos de producción de di- En efecto, se trata de bienes (infor-
en la que se sustituye el carácter exte- mación, servicios), cuya circulación
rior y de prótesis de la relación del es difícil de restringir, pero sobre la
cuerpo del obrero con la máquina, cual la legislación actual arremete en
inaugurando una aleación de cerebro sentido contrario. Kavita Philip
e información, a través de tecnolo- (2008), de hecho, cuestiona la nove-
gías del tiempo y de la memoria, que dad de este debate y lo contextualiza
actúan a distancia (Sloterdijk, 2008) históricamente en otras batallas por
sobre los hábitos mentales, las fuer- el poder como un fenómeno que no
zas que los componen, los deseos, los es exclusivo de la globalización del
afectos y las creencias (Lazzarato, capitalismo del siglo XXI. Por ejem-
2006). plo, la ciencia europea del Renaci-
miento no podría haber surgido sin
No obstante, ¿podemos adop- las múltiples apropiaciones de textos
tar sin más esta noción de capitalis- e ideas del saber medieval islámico.
mo –cognitivo– y la novedad que En consecuencia, para ella la manera
nos sugiere? Zukerfield (2008) plan- como hoy se enuncia qué es la “pira-
tea dos limitaciones: desconocer la tería” y quiénes son “piratas” y
centralidad del conocimiento en an- “autores”, las legalidades y contrale-
teriores formas de organización pro- galidades globales y los alegatos a fa-
ductiva a lo largo de la historia de vor y en contra de la propiedad
la humanidad y, en consecuencia, intelectual, mantiene dimensiones
soslayar la importancia de conoci- anteriores a la producción contem-
mientos que subyacen a procesos Germán Londoño: Libretas de apuntes. poránea, donde las historias premo-
productivos manuales y/o físicos; dernas, coloniales y poscoloniales de
y la falta de conceptualización so- ferencias y exclusiones en tiempos piratería y tráfico global de las ideas,
bre el conocimiento que intervie- de globalización (Castro-Gómez, nos dan una percepción más atinada
ne en los procesos productivos y de 2005). Y el dualismo mente/cuer- sobre el papel del conocimiento en
sistematización de los diversos tipos po que la enunciación capitalismo las economías globales y disipan la
del mismo –ya que se asume único “cognitivo” produce7. falacia de la supuesta novedad de la
y homogéneo– (un ejemplo de ello economía del conocimiento actual.
son ciertas formas de producción Ahora bien, cada vez es más evi- Nos preguntamos si la variación se-
ligadas al trabajo musical en grupos dente que los productos propios del ría más bien que el conocimiento
argentinos que nunca produjeron trabajo posfordista contemporáneo, hoy se entreteje con los discursos ac-
de acuerdo con patrones fordistas, sustentados en agenciamientos de in- tuales de terrorismo y seguridad –es-
pues desde años atrás ya eran traba- teligencias humanas y maquínicas, en pecialmente en Norteamérica–. Bajo
jadores inmateriales, laboraban en tecnologías digitales cuyos productos estos discursos, un hacker es en prin-
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 13
Cibercultura, prácticas, Frente a esta relación entre movi- Facebook, Flickr, MySpace,
colectivos y mientos sociales y TIC, Valderrama etc.).
movimientos sociales (2008) propone dos aspectos noda-
les: el papel mediador de estas últi- b. Las prácticas sociales se cons-
Entre los académicos de las cien- mas en los procesos comunicativos y tituyen en torno a valores cul-
cias sociales de América Latina existe las profundas transformaciones de las turales, modos de vida y
cierto acuerdo en que los movimien- dinámicas políticas de la sociedad construcciones de sentido
tos y colectivos sociales de resisten- (que pasan por la crisis estructural (más allá de intereses de clase
cia en la Red pueden imprimir un de legitimidad y de las prácticas del o sectoriales) y en oposición a
giro político en el régimen de la pro- ejercicio político tradicional). Así, modos de organización y co-
piedad social y el bien común de la municación verticales, buro-
humanidad (Tamayo, León y Bush, cráticos y rígidos, de ahí que
2005; Escobar, 2005; Finquelievich, se privilegie la adopción de un
2000; Lago et al., 2006). Para noso- tejido organizacional y comu-
tros, la novedad de estos movimien- nicativo en red.
tos sociales está en que no remiten
como antes a la lucha de clases y a la c. La presencia creciente de co-
necesaria toma del poder, sino que lectivos y movimientos socia-
anuncian, como señala Lazzarato les de carácter global en la Red
(2006), que algo ha sido creado en el que no obedecen directamen-
orden de lo posible, esto es, un acon- te a regulaciones estatales.
tecimiento que no es solución a pro-
blemas, sino apertura de posibles; Sin embargo, esto no significa
que se expresaron nuevas posibilida- que no haya acciones off-line, como
des de vida y que se trata de llevarlas lo muestra Lago (2008), sino que
a cabo. Es evidente que han empeza- hay una suerte de continuidad de re-
do a aparecer otras condiciones y lu- laciones virtuales y cara a cara que
gares por donde pasa la experiencia y mantienen y proyectan acciones po-
la acción colectiva que, según Rodrí- líticas sobre centros de toma de
guez (2008), se convierten en nuevas decisiones o en su interior, con in-
formas de capital social y comunida- tervenciones en la calle, en las plazas
des de sentido donde son otras las y, en general, en el entorno urbano.
preocupaciones políticas y sensibles En particular, los movimientos anti-
de las subjetividades sociales. Tal globalización o de resistencia global
postura nos adentra en otra atmósfe- han mostrado formas de articularse
ra social y cultural, donde las tecno- en red y capacidad de redimen-
logías por sí solas no producen Germán Londoño: Libretas de apuntes. sionamiento de sus luchas a nivel
transformaciones políticas sino que territorial, donde la intención no es
son las estructuras, las redes y las prác- son varias las características de este globalizar la experiencia a partir de
ticas sociales en las que éstas se inser- cambio: su unificación, sino recrear formas
tan las que otorgan un significado y de cooperar, y donde cada proceso
configuran tendencias de uso e inno- a. Se matiza la centralidad del local tendrá su propio lenguaje y
vación social, de dominación o de espacio público urbano de forma de coordinación. La popula-
cooperación. No obstante, ¿qué tan- interacción cara a cara, así rización de Internet está provocando
to han cambiado las prácticas de los como la llamada esfera públi- cambios de actitud en los movimien-
movimientos sociales, sus discursos ca, y se promueve una nueva tos, pues se ha comenzado a dar un
y organización al entremezclarse con provista por la inmaterialidad lugar específico a la comunicación
la nueva condición tecnológica, cuá- de las redes electrónicas (ejem- que antes no tenía (Lago et al., 2006;
les son sus formas de agenciamiento? plo de ello son espacios como Tamayo, León y Burch, 2005).
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 15
obras a través de las redes telemáticas de interfaces entre tecnología, conte- hiperficción se materializa a tal pun-
como lo plantea Adolfo Vásquez nidos emergentes, prácticas artísticas to que es imposible seguir mantenien-
(2008). y comunidades. Estas múltiples for- do las categorías de autoría y autoridad
mas artísticas y culturales creadas co- propias de la modernidad. De hecho,
Los lenguajes de la Red, como la piando y mezclando, en los samplers y Rodríguez (2008) sugiere que la es-
hipertextualidad y las narrativas de la el mixing, muestran usos “transforma- critura posmoderna promueve abier-
hiperficción como apuestas que dores” de los bienes informacionales, tamente la participación del lector,
propenden por la creación y la inven- que inciden tanto en los contenidos la “doble productividad”, ya sea a tra-
ción de modalidades narrativas que por fuera de los originales como en vés del juego o a través de la puesta
rompen con los esquemas comu- los mercados en los que compiten. en marcha de conciencias paralelas de
nicativos tradicionales de la cultura interpretación. No obstante, el reto
escrita y con el logocentrismo, abren en este campo tiene que ver con su-
también posibilidades de expresión perar una primera fase de produccio-
y acción colectiva. Aquí encontramos nes hipermediales, de múltiples
los trabajos de las redes de artistas opciones de lectura, pero que siguen
contraculturales, los movimientos net- manteniendo una “autoría” –aún si
art y digital-art, que están invocando ella está constituida por un equipo
apuestas políticas de creación cultu- amplio– y lanzarse hacia el paradig-
ral desde la integración de arte, fic- ma de la creación colectiva, máxima
ción y tecnologías. Es decir, se trata expresión de la interactividad parti-
de propuestas estéticas y políticas cipativa que abandona definitivamen-
donde emergen nuevas metáforas, te el esquema de la creación de autor
aproximaciones teóricas y prácticas para disponer ahora los medios de ex-
sociales y culturales en el campo de presión grupal, a través, por ejemplo,
los estudios ciberculturales. Quizás del proyecto Narratopedia.
el movimiento más conocido en el
campo de la estética y las TIC es el Por su parte, Lucía Santaella
del net-art que propende por la orga- (2008), desde Brasil, nos muestra
nización de nuevas prácticas micro- cómo tecnologías móviles de punta
políticas y microsociales, nuevas como las de localización (GPS por sus
solidaridades, otros contratos ciuda- siglas en inglés), pueden convertirse
danos, conjuntamente con nuevas en posibilidades de colaboración, in-
prácticas estéticas como una vía po- tercambio y búsqueda de conexiones,
sible para renovar tanto la política Germán Londoño: Libretas de apuntes. a través de prácticas espacializadoras
como el arte. En este campo también y socializadoras, que se ligan con una
se encuentran los movimientos En el campo de la escritura y la tradición estética de activismo polí-
hacktivistas y artivistas que están pro- producción literaria, la interacción tico. Se trata de un renacimiento de
moviendo, a través del software libre con la obra y su intervención es uno la experiencia singular y sensible de
y el creative commons, la creación co- de los planteamientos centrales que las personas con los lugares y sus
lectiva. La verdad del arte se descentra nos propone Jaime Alejandro Ro- historias, una suerte de reterri-
y se propicia la intervención/inter- dríguez (2008), a través de la irrup- torialización posterior a la desterri-
acción del espectador con la obra tam- ción de una nueva figura, la del torialización digital. Sin embargo, es
bién como autor. Andrés Fonseca autor-lector, o el “golpe de gracia” que una relación que no es transparente
(2008) destaca proyectos en Lati- sufre la figura tradicional del novelis- o carente de cuestionamientos. Por
noamérica y España que fomentan ta dadas las posibilidades estéticas y ejemplo, se critica a estas tecnologías
prácticas creativas, proyectos y publi- creativas propias del ciberespacio y de el que inauguren un neo-cartesianis-
caciones sobre cultura libre y digital su lenguaje hipertextual. Se trata de mo por el surgimiento de la especifi-
que animan proyectos off-line y on-line la anunciada muerte del autor de cidad temporal y local, tramitada por
y donde se promueve la generación Barthes y que en las narrativas de tecnologías de vigilancia y navegación;
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 17
(2007), hacen posible la transforma- 6 Para una mirada genealógica crítica
ción de la realidad a partir de relacio- de cómo se constituye en Colombia
Internet como campo, así como cifras
nes horizontales con otros legítimos actualizadas de acceso y conectividad
y la emancipación de agentes cómpli- en el país, ver la reciente investigación
ces de la auto-creación; aunque no sin realizada por Tamayo, Delgado y
Penagos (2007).
paradojas y destiempos en el campo
cultural. 7 Nos referimos aquí a que se manten-
dría la división metafísica entre cuer-
po y mente como si el trabajo mental y
Así, las ciencias sociales y la in- con máquinas de expresión, no causa-
vestigación en el campo de los estu- ra cansancio o no consumiera energía
dios ciberculturales tienen el reto de corporal, por lo que creemos que es
importante considerar si con dichas
desplazar los análisis totalizantes y
metáforas (sociedad de la informa-
molares de nuestras sociedades, he- ción, capitalismo cognitivo, sociedad
redados de las ciencias modernas y los informacional) no estamos invisibili-
diseños tecnosociales autoritarios y zando otras facetas de este nuevo
modo de producción económica, sub-
antidemocráticos que gestionan la jetiva y cultural.
vida para hacerla “útil”. La ciber-
8 Las licencias creative commons o CC es-
cultura requiere pluralidad, una mul- tán inspiradas en la licencia GPL (Ge-
tiplicidad de abordajes críticos y de neral Public License). Su propósito es
metáforas que nos permitan nombrar posibilitar un modelo legal ayudado
formas de vida en donde se hagan vi- Germán Londoño: Libretas de apuntes. por herramientas informáticas para
facilitar la distribución y el uso de con-
sibles los nuevos mecanismos de pro- tenidos para el dominio público. Exis-
ducción de poder (de dominación y ten una serie de licencias creative
de resistencia) a través de máquinas resante el origen doble y opuesto de la commons, cada una con diferentes con-
cibercultura y su espacio, el ciberes- figuraciones o principios, como el de-
semióticas, pero también donde sea pacio, en la contracultura cyberpunk y recho del autor original a otorgar li-
posible articular las potencias y las en la guerra, esto es, en la experimen-
bertad para citar su obra, reprodu-
singularidades en una diversidad tación social y el control de poblacio-
nes y territorios. cirla, crear obras derivadas, ofrecerla
creativa. En suma, no podemos olvi- públicamente y con diferentes restric-
dar que las metáforas que usamos 3 La brecha digital, que hoy en día cons- ciones como no permitir el uso comer-
tituye un índice para medir el desarro- cial o respetar la autoría original. Ver
para describir nuestros objetos de llo de los países, se convirtió en una <http://creativecommons.org/>.
estudio, también lo/nos crean. preocupación oficial a mediados de
los años noventa por el desequilibrio 9 Según el informe de Business Software
entre quienes tienen acceso a las TIC y Alliance (BSA), la asociación de los
quienes no lo tienen, cuando el De- principales creadores y productores de
partamento de Comercio de los Esta- programas informáticos en el mundo
Citas dos Unidos acuñó el término digital entero, entre el 2003 y el 2005, la tasa
divide (Rueda, 2005a). de piratería subió en Bolivia del 78 al
83 %; en Paraguay, el 83 % en los tres
1 En la escritura de este artículo apare- 4 Es importante señalar que de los tra- años; en Guatemala, del 77 al 81 %;
ce un nosotros que constituye este tex- bajos registrados en América Latina en Venezuela, del 72 al 82 %, y en El
to, no sólo proveniente de los diferen- en estos campos, la mayoría de ellos Salvador pasó del 79 al 81 %. Ade-
tes trabajos que hemos realizado en la recibieron algún tipo de financiación más, en Argentina pasó del 71 al 77
línea de Comunicación-Educación del del Centro Internacional de Investiga- %; en Chile, del 63 al 66 %; en Co-
IESCO en la Universidad Central, ciones para el Desarrollo (CIID) de lombia, del 53 al 57 %, y en Panamá,
sino que intenta recoger y dialogar con Canadá, o IDRC –por sus siglas en del 69 al 67%. Con estas cifras, la re-
las voces de otros articulistas del pre- inglés–. Para un estado del arte sobre gión en su conjunto se ubicó apenas
sente número. la apropiación social de TIC en Amé- dos puntos por debajo de Europa
rica Latina, ver Rueda (2005b).
2 Aunque sus antecedentes los podemos Central y del Este, que con un 68% de
rastrear en el movimiento contracul- 5 Para una revisión completa de este mo- copias ilegales fue denominada como
tural de los hackers-hippies en los años vimiento en América Latina, ver los la meca de la piratería informática. Ver
sesenta; en los desarrollos de la ciber- trabajos de los colombianos Andrés <http://www.pergaminovirtual.com.
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Germán Londoño
1. Cibercultura:
teorías y metáforas
RUEDA ORTIZ, R.: CIBERCULTURA: METÁFORAS, PRÁCTICAS SOCIALES Y COLECTIVOS EN-RED N ÓMADAS 21
Actio in distans.
Sobre los modos de formación
teleracional del mundo
nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 22-33
Peter Sloterdijk*
Traducción del alemán: Marta Kovacsics M.**
El artículo parte de la tesis según la cual, toda historia de los medios es una historia de las transferencias de pensamien-
tos. Para entender la especificidad de este proceso en relación con los nuevos fenómenos mediales, se realiza un rodeo por el
pensamiento arcaico y la metafísica clásica, a partir de la idea de que el medio primordial es el cerebro humano. Desde allí,
se analizan los fenómenos actuales de la profusión de la información, la telecomunicación global y las comunicaciones entre
medios aparáticos.
Palabras clave: pensamiento arcaico, metafísica, tele-tecnologías, telecomunicación, medios, información.
Este artigo parte da tese segundo o qual, toda história dos meios é uma história de transferências de pensamentos. Para
entender a especificação deste processo em relação com os novos fenômenos mediais, realiza-se um rodeo pelo pensamento
arcaico e a metafísica clássica, a partir da idéia de que o meio primordial é o cérebro humano. Desde aí, analisam-se os
fenômenos atuais da profusão da informação, a telecomunicação global e as comunicações entre meios de aparatos.
Palavras-chaves: pensamento arcaico, metafísica, tele-tecnologias, telecomunicação, meios, informação.
The starting point of this article is the thesis that every media history is a history of thoughts transferring. We go through
the archaic thought and classic metaphysics, with the idea that the fundamental media is the human brain, in order to
understand the specificity of this process in relation to the new media phenomena. From this frame we analyze the current
phenomena of information profusion, global telecommunications, and the communications among media.
Key words: archaic though, metaphysics, tele-technologies, telecommunications, media, information.
Dibujo EMBERA: Astrid Ulloa
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 23
De estas premisas se puede de- volcados de manera inmediata sobre nicación de una sola vía, incluyendo
ducir una tesis con una cierta fuerza el suceso, que, a su vez, es el más la televisión) y los medios de teleco-
subversiva: se llega, desde un punto diseccionado en nuestra época–. El municación clásica (que corresponden
de vista teórico-cultural, a la diluci- mismo tipo de inteligencia, que has- al paradigma del teléfono y de la co-
dación de la esencia y la tendencia ta los años sesenta y setenta del siglo municación de doble vía) son fusio-
de la tecnología contemporánea, en XX quería convertirse inmediatamen- nados cada vez más mediante la
general, y de la tecnología avanzada te en la gran historia (para ser más técnica-puente, la digitalización, un
de medios, en especial, siempre y exactos, en la supuesta e inminente y fenómeno sobre el que los teóricos
cuando, y gracias al desvío a través ya existente revolución), se ha con- de moda (que hoy en día quieren más
de la enajenación metafísica, éstas vertido hoy en red y en la turbulen- bien ser llamados hacedores de ten-
sean representadas en conceptos dencias o de contra-tendencias, antes
paleo-antropológicos y en operacio- llamados críticos) reaccionaron con
nes de la inteligencia arcaica. Apli- la expresión “mediamática”2 . Esta úl-
cado todo esto al horizonte de tima resume las tendencias hacia la
intereses actual, significa que para hibridación de los distintos géneros
entender lo que mueve a los agentes mediáticos. En este proceso, la orien-
y agencias de la técnica mediática tación hacia la primacía de las tele-
actual y del diseño mediático en sus tecnologías, tanto móviles como
transacciones, es útil ocuparse de individualizadas, a expensas de los
una lógica paleolítica y de la manera medios tradicionales de una sola vía,
menos irónica posible, para luego, es cada vez más evidente.
como en un segundo impulso, ocu-
parse de la transformación del pensa- A continuación me voy a limitar
miento arcaico mediante la metafísica a explicar algunas observaciones so-
clásica. bre el segundo foco del debate
mediático-teórico. Quisiera reunir
Si mi percepción no me engaña, una serie de observaciones alrededor
existe en el discurso de los nuevos de las siguientes preguntas: ¿qué es
medios dos puntos álgidos, alrededor lo que hacen unos medios con otros?
de los cuales se organizan casi todas y ¿cuáles son las formas de coopera-
las tesis individuales mediológicas y Cultura Muisca. Figura votiva en oro de 8,4 cm ción que surgen a nivel inter-aparático
de alto (detalle). 600 a. C. - 1600 d. C.
de la sociología de los medios: en el Colección Museo del Oro. Banco de la República. e inter-programático? Referente a este
primer foco se discute principalmen- asunto se puede intuir cuál es la rela-
te ¿qué es lo que hacen los nuevos cia de lo virtual; sería ejemplar para ción entre la dimensión de lo inter-
medios con las personas que cayeron esto investigar la vida e historia del aparático con la dimensión de lo
en su campo de influencia? Aquí se pensamiento de Regis Debray, pero inter-subjetivo. Lo que será decisivo
habla de una verdadera “revolución también la de Jean Baudrillard. En en este contexto es cómo se modi-
cultural” y sobre el nuevo acondicio- el segundo foco, los debates se mue- fica la forma de la subjetividad
namiento del campo humano me- ven alrededor de la pregunta: ¿cómo mediante las tele-funciones. Como lo
diante las tele-tecnologías. En los asimilan los distintos medios su ma- anuncié, no estoy intentando un ac-
centros de formación teórica de van- nera de ser pluralista? La respuesta ceso directo a los fenómenos, sino que
guardia, surgieron nuevas disciplinas estándar de los tiempos más recien- los discuto indirectamente a través del
como la telemática, la investigación tes es: ellos convergen. Se acercan, se enajenamiento metafísico, que, a su
sobre la inteligencia artificial, la an- unen y se relacionan y se com- vez, se transforma en enajenamiento
tropología de Internet, entre otras. penetran cada vez más, tanto, que los arqueológico o paleológico.
Una escena teórica creativa agota con- hasta ahora separados núcleos prin-
tinua e ideológicamente estas inno- cipales de la tecnología mediática, los Se debería comenzar con una te-
vaciones –un indicio de la tendencia medios de transmisión (referentes al sis mediático-teórica, que parece ser
sucesiva de los intelectuales, es estar paradigma de la radio y de la comu- lo suficientemente amplia para tras-
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 25
ductora. La frase “toda la historia de y todo esto hasta un grado en el que para las arcaicas “culturas de la vergüen-
los medios es la historia de la transfe- tal vez ni siquiera bajo tortura sería za”, en las que a cada uno le habría
rencia de pensamientos” entra ahora capaz de compartir con los demás lo gustado volver invisible su interior,
inmediatamente en la tesis más pun- que yo sé: este síndrome de represen- porque sufrían bajo la exposición ex-
tual de que los cerebros son medios taciones sobre el ocultamiento de pen- trema de sus afectos ante la sensibili-
primordiales y además en primera lí- samientos en el sujeto pensante, dad de los demás. El poderoso afecto
nea, medios para la imagen y trans- cobró importancia en la historia con- de la vergüenza es en sí mismo sólo
misión de estados e ideas de otros temporánea de la ilusión privada que un sedimento evolutivo de la imposi-
cerebros. Este proceso parece trivial, nunca debe ser subestimada. Tanto bilidad de ocultar el interior ante la
mientras nos ocupemos de comuni- más provocadora resulta la osadía de sensibilidad de los otros. Los pensa-
caciones de grupos pequeños o de pensar que precisamente estas repre- mientos privados aparecen desde el
campos vecinos. Inmediatamente se sentaciones fueron las que co-crearon punto de vista paleo-psicológico como
vuelve misterioso y se presenta con la ilusión privada. En nuestro círculo un absurdo completo. La idea de que
una luz sublime en cuanto las con- cultural no sobrepasan los dos mil existe un interior protegido en el cual
versaciones locales entre los cerebros quinientos años; para los macro-his- el individuo puede cerrar la puerta tras
se transforman en conversaciones de toriadores es como un incipiente ve- de sí y logra expresarse y reflexionar a
larga distancia, porque sólo con las llo sobre las capas masivas de las sí mismo, no aparece antes del primer
telecomunicaciones simbólicas –las realidades antropológico-psicológicas giro individualista propio de la Anti-
actiones in distans (las acciones a dis- de antes. Si no fueran hoy en día las güedad. Sus publicistas fueron los
tancia) comienza lo que tradicional- ideas que dominan todo, no tendrían hombres, conocidos primero con el
mente se conoce como la historia casi importancia frente a la fuerza de nombre de sabios y luego como filó-
superior de la cultura–. Por lo tanto, gravedad de la historia de la evolución sofos, antecesores de los intelectuales
la fecha de partida en el campo de las humana. Durante la mayor parte de modernos y del single posmoderno.
cooperaciones de los medios es la la evolución, casi la totalidad de lo que Ellos, los inventores del apartheid psi-
“abertura”, condicionada neuroló- cada persona pensaba y sentía era en cológico de lo individual, dieron una
gicamente, de cerebros para cerebros tal grado transparente para su entor- nitidez revolucionaria a la idea de que
coexistentes. Una abertura, natural- no, que se asumía como si fueran vi- el pensamiento verdadero sólo es po-
mente, que no es pensable en sí mis- vencias propias. La imaginación de las sible como un pensar propio y distin-
ma sin el cierre sistemático de todo representaciones privadas (que debe- to-al-tonto-pensar-de-las-multitudes.
sistema cerebral. La exigencia bioló- rían ser transmitidas mediante formu- De sus impulsos se deduce el efectivo
gico-comunicativa de la redificación laciones explícitas) no tenía apoyo en y amplio modelo-de-la-clausura-en-la-
de varios agentes cerebrales entre ellos la experiencia o en el concepto espa- cabeza, cuya perspicacia política se co-
mismos, se satisfizo sobre todo me- cial social: aún no había para cada uno noce: los pensamientos son libres,
diante la revolución superior de la celdas o apartamentos, ni en las arqui- nadie los puede adivinar. Esta fórmu-
audiovisualidad humana en relación tecturas imaginarias, ni en las arqui- la del liberalismo alemán del siglo XIX
con una sensibilidad extrema para tecturas físicas de la “sociedad”. En significa, en consecuencia, que tan sólo
ambientes interpersonales. grupos pequeños, que viven bajo la los pensadores de pensamientos nue-
ley de la mutualidad, el quehacer del vos e inesperados son invisibles para
Aquí, sin embargo, hay que llamar uno es el quehacer del otro; también los celadores de los pensamientos con-
la atención sobre un engaño omnipre- los pensamientos de unos son gene- vencionales. En el mundo de los pen-
sente: mis pensamientos son invisibles ralmente los pensamientos del otro. samientos nuevos, el axioma de que
para los demás; mi cabeza es una caja En un mundo así de permeable, la ac- los pensamientos del uno también son
fuerte llena de imaginaciones y sueños, cesibilidad de los otros en situaciones los pensamientos del otro, pierde cada
que yacen sellados en mí; mis reflexio- estándar no suscita problemas. Teleco- vez más validez: lo que yo mismo no
nes dan para un libro que nadie más, municadores y mediamáticos literal- pienso y nunca he pensado no puedo
excepto yo, puede leer desde afuera; mente no tendrían nada que hacer, adivinarlo en los demás. En socieda-
mis ideas y conocimientos me perte- porque las antiguas hordas humanas des diferenciadas, otras personas tie-
necen exclusivamente, transparentes eran en sí mismas asociaciones media- nen en efecto otros pensamientos en
para mí, impenetrables para los demás máticas puras. Esto es también válido la cabeza. Y por eso mismo, en esta
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 27
En consecuencia, de lo expues- Me permito anticipar aquí la te- co a una reducción de información y
to hasta ahora surge una deducción sis de que la tendencia civilizatoria comunicación más o menos radical,
que modifica nuestro teorema de de la modernidad está corriendo también se podría decir de ideas nue-
base en una parte esencial. De ahora manifiestamente del ahorro de la pa- vas a ideas viejas, con el resultado tí-
en adelante también tenemos que labra a su despilfarro. Y tomo en con- pico de que el hombre antiguo no
poner atención al lado económico sideración que naturalmente son las puede pensar en preguntar lo que
de las transmisiones. Si toda la his- industrias mediáticas, especialmente piensa el otro, porque, en general,
toria de los medios es la historia de las compañías telefónicas, las que in- aún no hay aplicación para la expe-
la transmisión de pensamientos, su citan y administran nuestro derroche. riencia de que otros piensan otras
comienzo en la época de las hordas Si se sale de la base del estándar de cosas y de que esto podría ser una
está marcado inicialmente por un comunicación paleolítico, aparece otredad provechosa. Con la pregun-
principio de ahorratividad caracterís- como la meta de todas las intencio- ta por qué tiene otra persona en la
tico: las comunas cerebrales primor- nes comunicativas la provisión de cabeza, en épocas anteriores no se
diales se equilibran mutuamente varias individualidades cerebrales con pensaba en ideas, sino en un delica-
bajo la minimización intencional los mismos contenidos de la represen- do bocado. Como se sabe, hace al-
del despliegue de simbolismos explí- tación y con percepciones situa- gunos años, en el famoso sitio de
citos. Se podría decir que se infor- cionales concordantes en lo posible. excavación paleontológico de Ata-
man menos mutuamente de lo que Esto resulta bajo dos condiciones: o puerca en España, salió a la luz del
se sintonizan. Comunas cerebrales bien los miembros de un grupo es- día un fragmento de cráneo del euro-
homeostáticas, en lenguaje coloquial tán tan fuertemente ligados en la co- peo más antiguo, con la edad sensa-
“pueblos”, son conjuntos que ondu- operación técnica o simbólica, que cional de 780.000 años: diez veces
lan en redundancias sincrónicas. todos siempre saben justo lo suficien- más la edad que se le había otorgado
(Esto se puede estudiar aún hoy en te, para saber cuál pensamiento o al homo sapiens. Huellas de raspadas y
día en el famoso socialismo-de-la acción está presente en el otro –en el raeduras en los pedazos de cráneo de
carpa-de-cerveza en Munich). Lo que caso de ir a cazar juntos y en la reali- niño indican que se trata de un relicto
se conoce como “sentirse en casa”5 zación de un ritual–; o bien, ellos de un rito de antropofagia, y esto es
no es en esencia nada distinto que convergen al mirar al mismo tiempo sorprendente, porque no se esperaba
esta forma de comunicación alta- una presencia de percepción inmedia- una prueba tan temprana respecto a
mente redundante y ampliamente ta –por ejemplo, la aparición impo- la participación de hombres prehis-
libre de información. Es sentida nente del leopardo al borde del tóricos en los contenidos mentales
como una promesa de felicidad, ape- campamento–. Con esto se suminis- de sus semejantes prehistóricos o sus
nas se haya perdido ese “sentirse en tra una impresión visual inmediata, pre-semejantes.
casa” en la redundancia, es decir, que ofrece suficiente garantía para que
cuando se debe superar un exceso se presenten imaginaciones comunes El paradigma más antiguo de con-
de información no redundante, y simultáneas del leopardo en los ce- vergencia mediática (como convergen-
estresante e individualista. Aquí, en rebros de la comunidad de vida y de cia cerebral) se orienta, de esta manera,
este entrar en la comprensión sin pa- percepción. Entre otras, este último hacia una doble meta: primero, trans-
labras, aún es válido lo que todavía mecanismo es utilizado por la indus- mitir pensamientos de un cerebro a
hoy se conoce y se alaba en las últi- tria publicitaria en sociedades me- otro y esto con un despliegue míni-
mas subculturas anti-retóricas y anti- diáticas de tipo moderno, cuando mo en signos manifiestos. Segundo,
telecomunicativas aún existentes poblaciones completas perciben a la reprimir todos los nuevos pensamien-
–por ejemplo, en los ambientes cam- hora de los principales noticieros la tos potenciales y de individuación,
pesinos o en algunas comunidades presencia virtual del alce de una famo- para reducirlos así a unos que sean
espiritualistas lejanas– como la úni- sa fábrica de muebles –casos felices de antiguos y socializantes. La tenden-
ca comunión verdadera entre perso- transmisión masiva de pensamientos cia a la reducción caracteriza el esta-
nas. La persona antigua es aquella en el espacio mediático–. do mítico de todos los tiempos y
que siente la palabra que ha sido di- pueblos. El mito es desde siempre la
cha demasiadas veces como una pa- El paradigma paleolítico se orien- esponja que limpia las diferencias de
labra perdida. ta desde el punto de vista económi- individuación.
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 29
ocupa exclusivamente del trabajo de inteligente). Por el otro lado, el pro- información y la positivación del co-
recuerdos o de la anamnesis sanadora. yecto-logos del ahorro de Platón es- nocimiento nuevo, mientras que esto
La transferencia decisiva de pensa- taba condenado al fracaso, porque de era evaluado de manera afirmativa por
mientos se lleva ahora a cabo entre ninguna manera llevaba a que circu- primera vez en la historia de los siste-
un cerebro humano individual y un laran menos discursos en el mundo. mas cognitivos. De hecho, la moder-
cerebro divino central –digamos en- Por el contrario, a todas las formas nidad es aquella extraña época en la
tonces entre Platón y Agatón, sobre de juego de la charlatanería cotidia- que el bien disuelve su aparente y eter-
todo en el medio de la evidencia ló- na se le agregaba ahora el discurso fi- na alianza con lo antiguo y desde-
gica–. Sólo mediante la transferen- losófico, que generaba una infinidad siempre-válido, para aliarse a su vez
cia de pensamientos de un único y de derechos propios. En el intento con lo nuevo y aún más nuevo. Me-
mismo dios a cada persona, se pue- de reducir la información, la comu- diante la positivación de la informa-
de instalar un régimen comunicati- nicación falló en todo su ancho. Este ción, los cerebros, los medios e
vo en el que virtualmente, ya que no fracaso tuvo su lado positivo, empe- instituciones del conocimiento son
es posible en la actualidad, pueden ro, porque a pesar de que la filosofía juntados en una configuración histó-
participar todas las inteligencias hu- temprana no pudo estabilizar un sa- rica sin precedentes. Es en ella que
manas y en el cual se puede de ma- ber absoluto, dio con un producto uno debe orientarse hoy en día.
nera más o menos segura, diferenciar secundario de una obstinación con
las frases verdaderas de la charlata- consecuencias insospechadas: las cien- En este punto podemos volver a
nería pura. cias antiguas europeas. En éstas se saltar, para alcanzar el horizonte del
llegó a una acumulación de informa- problema actual. Como lo anuncia-
Los demás destinos de la revolu- ciones auténticas y a una proliferación mos, la modernidad sólo pudo en-
ción filosófica de los medios ya se desmesurada de discursos informati- contrar una conciencia ofensiva de sí
conocen: en el curso de la historia vos y pseudos-informativos. Tenien- misma desde el momento en el que
europea, el sistema platónico fue de- do en cuenta este desarrollo, no quedó claro que el proyecto metafí-
rrumbado, esencialmente mediante sorprende que la corriente filosófica sico de una dirección general de los
dos efectos colaterales no intencio- se disgregara más tarde en la rama asuntos mundiales mediante la trans-
nados o fallas de construcción, que mística –en la que dios y alma aún se ferencia vertical de pensamientos en-
eran inmanentes: por un lado, el pla- entienden sin palabras, como suele tre el dios monoteísta y el individuo
tonismo puso en el mundo un pro- ser en las comuniones arcaicas y las pensante, había fracasado. Este fraca-
blema de elite incontrolable, porque transferencias de pensamientos sin so se llevó a cabo, según la provincia
la diferenciación entre aquellos que desvíos– y en la rama científico- lógica en la que permanecía el euro-
poseen recuerdos claros de las ideas discursiva, en la que el discurso que peo inteligente de la modernidad,
prenatales y aquellos cuyos recuerdos lleva la información se sale totalmen- entre el siglo XVII y el siglo XX. En
son muy turbios para conducir a evi- te de sus cauces. En este último caso, esta época se impuso el entendimien-
dencias concluyentes, no podía ser no se puede naturalmente hablar de to de que las transferencias de pensa-
tan practicable, con el resultado de un control de la información median- mientos, que se dan en nuestra
que la ilustración moderna despidió te la comunicación. estructura mundial, no pueden pro-
el ideal del sabio y le dio oportuni- ducirse ni en la comunión arcaica de
dad al common sense8 de reivindicarse De los efectos secundarios a largo los cerebros en el tráfico (interior)
por la ofensa de más de dos mil años plazo producto de las fallas de cons- telepático-sensitivo, ni en los sutiles
de los filósofos (si no me equivoco, trucción de la metafísica clásica, sur- y anamnésicos diálogos a distancia de
la orgía de la revancha sobrepasó su gieron dos elementos característicos las almas individuales inteligentes con
clímax en el siglo XX tardío, y des- de la modernidad. Por un lado, el el dios de los filósofos. Lo que ahora
pués del overkill9 de filosofía en el igualitarismo cognitivo de la cultura cuenta es una transferencia de pensa-
vitalismo y en la ideología pos- moderna del discurso, que en el sis- mientos des-regulada de cierta mane-
moderna del entretenimiento, se vis- tema del saber no le admite a ningún ra, y mixta, en dirección horizontal y
lumbran nuevas divisiones de trabajo compañero de juego un acceso privi- vertical, a través de medios simultá-
entre el pensamiento filosófico y los legiado a las primeras o últimas razo- neamente comunicativos e informa-
demás géneros del comportamiento nes. Por otro, la emancipación de la tivos. Entre ellos, primero sobresale
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 31
de la información llega indiscutible- cerebro. Por eso mismo es que nece- diar sus propios pensamientos direc-
mente una inflación informática a los sitamos la convergencia de los medios tamente en los cerebros de personas
compañeros de juego del sistema I&C. No en vano, hoy está tan masi- lejanas. Para esto sólo sería necesario
moderno del I&C, una inflación que vamente difundida la evidencia de la un sistema neuro-telepático con una
es demasiado poderosa para poder enorme ventaja que representa para técnica avanzada de direcciones. Un
ser asimilada en el cerebro creado en todos que un aparato se dirija a otro sujeto-emisor solo necesitaría adaptar
la evolución biológica. Los cerebros, aparato. Están de entrada hechos sus intenciones lógicas a un grupo de
por tanto, retroceden cada vez más para el trabajo informático pesado, direcciones neurológicas, a quienes
del frente de la involucración median- mientras que los poseedores de ner- en la edad media mediática se les de-
te informaciones y permiten progre- vios siempre tienen algo mejor que nominaba “personas”, e inmediata-
sivamente el contacto entre los hacer que recibir información super- mente se desarrollaría en un monitor
medios, es decir, medios aparáticos flua y estresante. Estas situaciones interno del receptor, un proceso de
con medios aparáticos. Esto sucede pueden ser formuladas también en recepción, al cual el destinatario sólo
desde el reconocimiento de que des- contra de los sistemas nerviosos, al tendría que aportar lo suficiente para
pués del trabajo físico, correspondien- constatar junto con Friedrich Kittler poner su sistema en recepción. En la
te a la regla de compensación de la que las reflexiones basadas en proteí- época final de los medios, los ojos y
evolución técnica, se reduce también nas no pueden hacer frente a las re- oídos tan exigidos hoy en día serían
el pesado trabajo comunicativo, si es flexiones basadas en silicio. obviados mediante el proceso neuro-
que no se quiere abolirlo del todo. telepático del bypass12. Podríamos,
Quisiera cerrar estas observacio- con la ayuda de suaves tecnologías
Con este resultado, nuestra deri- nes tan abstractas con algunas aún rompe cabezas, dirigirnos directamen-
vación de la relación mundial tele- más abstractas, que nos regresen a una te a nuestra comunidad de nervios
comunicativa logró el umbral de la cesura platónica y al mundo de las desde cualquier distancia, y de tal
actualidad. En la forma actual del comuniones arcaicas. Si de verdad manera que ya no nos deberíamos
mundo, que cambió radicalmente del toda historia de los medios es dejar impresionar por las tan popu-
ahorro de signos a su despilfarro, no estructuralmente la historia de las lares indicaciones respecto a la reserva
quedó casi nada de la moral del aho- transferencias de pensamientos, en- de referencia propia de los neuro-sis-
rro y del ideal de las comuniones tonces la teleología de todos los actos temas. En aquellos días de los que ya
neurológicas, excepto el reconoci- telecomunicativos se deja caracterizar sólo nos separa un siglo de investiga-
miento de que los cerebros humanos a través del sueño de que un día po- ciones y desarrollo, podríamos
aún siguen sin valer la pena para la dría ser posible acercarse nuevamen- provocar técnicamente y mediático-
mayoría de aquello que los que ofre- te sin desvíos visibles, directamente masivamente, lo que hoy los sicóticos
cen información en los mercados a los cerebros de los otros. Si existe de la influencia y algunos teleco-
abiertos de I&C quisieran embutirles de verdad la tendencia a la repetición municadotes religiosos ya dan por
directamente. A este desarrollo sólo de lo arcaico en lo técnico, ésta de- hecho: nos podríamos transponer sin
se puede reaccionar con la formula- bería llegar a reproducir los antiguos encontrarnos físicamente, en estados
ción de una ontología de spam. Las diálogos locales de los sistemas neuro- maravillosos o terribles de discretas
transferencias de pensamientos del simpáticos armonizados entre sí, en obsesiones telecomunicativas; nos su-
nivel informático no pueden por el horizonte de las telecomunicacio- mergiríamos mediante circuitos
siempre dirigirse eo ipso11 a los cere- nes y las comunicaciones masivas. intercerebrales a través de grandes
bros naturales, porque éstos no tie- Esto finalmente se muestra en el enor- distancias y no solamente enviaría-
nen usos para la mayoría de las me éxito de los teléfonos celulares, mos y recibiríamos, a diferencia del
informaciones y porque de manera que aportan a la reproducción de la platonismo, imágenes originarias o
tendencial, aún están orientados a la oralidad arcaica en el nivel de la aldea ideas eternas, sino también represen-
reducción de la información, a la co- global. Sin embargo, la mediología taciones individualizadas y mensajes
munión, como en el paleolítico. Por especulativa no se puede contener de con fecha, dirección y localización.
eso mismo, la modernidad desarro- pasarse más allá de este nivel. Al final Los que hoy en día llamamos “nue-
lla su interés en procesar los ríos de de todos los días mediáticos, un vos medios” son entonces en su tota-
información liberados por fuera del comunicador debería ser capaz de irra- lidad tecnologías pesadas, externas y
SLOTERDIJK, P.: ACTIO IN DISTANS. SOBRE LOS MODOS DE FORMACIÓN TELERACIONAL DEL MUNDO N ÓMADAS 33
Simulación y códigos
informáticos:
una nueva anatomía para las
prácticas biopolíticas
nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 34-43
La implementación masiva de las nuevas tecnologías de la información ha transformado los dispositivos de vigilancia y control.
Este texto analiza las anatomías de poder que se despliegan en los entornos virtuales. Nuestra tesis sostiene que nos hemos desplazado
de un “gobierno del alma” hacia un “gobierno de la libertad”. Éste se basa en un ejercicio de codificación numérica que traduce la
realidad a simples comandos de ceros y unos.
Palabras clave: simulación, códigos informáticos, biodatas, biopolítica, gobierno de la libertad, entornos virtuales.
A implementação massiva de novas tecnologias de informação tem transformado os dispositivos de vigilância e controle. Este
texto analisa as anatomias do poder que se estendem nos ambientes virtuais. Nossa tese sugere que nos temos transitado de um
“governo de alma” a um “governo da liberdade”. Este baseia-se em um exercício de codificação numérica que traduz a realidade a
simples comandos de zeros e uns.
Palavras-chaves: simulação, códigos informáticos, biodatas, biopolítica, governo da liberdade, ambientes virtuais.
The massive implementation of new information technologies has changed the surveillance and control devices. This paper
analyses the anatomy of power deployed in virtual environments. Our thesis points to a shift from a “government of the soul” to a
“government of freedom”. This one works with a minimum codification exercise with the capacity to translate reality to simple
numeric commands of 0s and 1s.
Key words: simulation, computer codes, biodates, biopolitics, power of freedom, virtual spaces.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
TIRADO, F. Y CALLÉN, B.: SIMULACIÓN Y CÓDIGOS INFORMÁTICOS: UNA NUEVA ANATOMÍA PARA LAS PRÁCTICAS BIOPOLÍTICAS N ÓMADAS 35
por ejemplo, lo fotográfico y lo cine- tiplicación del yo por los diversos can. Las bases de datos codifican nu-
matográfico. Permite entrar en las escenarios simultáneos que desplie- méricamente, no imitan o represen-
imágenes, tocarlas, habitarlas y acer- gan las simulaciones; la administra- tan, y la codificación restringe el
carnos a otros que también están ción de toda la información que se significado, elimina el ruido y la am-
dentro. Podemos mezclarnos con acumula en bases de datos o la ges- bigüedad, y produce información rí-
ellas. En tanto que fenómeno, una tión de los flujos y movimientos que gida. La estructura o gramática de las
simulación es mucho más que imá- se generan a partir de sus cruzamien- bases de datos crea relaciones entre
genes: posee cosas más allá, debajo, tos y combinatorias. partes o posiciones de la información
delante, invita a una exploración. Es que no existen fuera de la propia base
una imagen y, al mismo tiempo, una Para profundizar en el funciona- de datos. Tal cosa les permite consti-
idea. Una “genuina imagen-sentencia” miento de las simulaciones, tomemos tuir nuevos individuos, momentá-
(Lynch, 1991: 71). Gracias a ella, lo como ejemplo una de estas prácticas. neos y precarios. Curiosamente, una
virtual, lo potencial, deviene otro De hecho, si hay algo que caracterice vez el password activa esas bases de
tipo de acceso a lo real. Nos ubica en la simulación es la cifra o password. datos y accedemos a la simulación,
una suerte de realidad inter- estamos condenados a la
media o perpetuo intersti- participación obligatoria.
cio. Es un nudo que ata lo En un entorno virtual, la no
virtual a lo real. Y, por relación, el no movimiento,
supuesto, transforma cues- la no participación es un
tiones como el número –lo absurdo, una imposibilidad
vuelve átomo de una mate- lógica. Sin la actividad que
rialidad fluida–, el espacio marcan los verbos conectar,
–deja de ser habitado para relacionar, mover, partici-
ser continuamente consti- par, la simulación no crista-
tuido–, o la mediación –se liza, no deviene existencia.
vuelve realidad– que mez- Ésta se produce en esas prác-
cla lo sensible con lo inte- ticas, no en la tecnología
ligible y remite a un lugar usada para sostenerla. La si-
sin posición física. mulación ni está en la men-
te del usuario ni en el
artefacto. Se da en un “en-
Las prácticas en tre”. En ese sentido, auto-
Cultura Cauca. Pectoral en oro de 19,5 cm de alto (detalle)
ese intersticio 1000 d. C. - 1600 d. C. Colección Museo del Oro. Banco de la República. res como Echeverría (1999)
sostienen que ese espacio fí-
¡Pero no nos confundamos! La No se trata de un número que indica sico-matemático reticular, electró-
ausencia de materialidad física no una posición individual en una masa nico, digital, representacional,
implica una carencia de prácticas o ni de una marca que identifica a un transterritorial, multisensorial (aun-
de usos. Concretamente, esta especie individuo. Es una clave que permite que la forma más extendida sea
de intersticio pone en juego toda una o prohíbe un acceso concreto a la in- bisensorial), asentado en el aire (ade-
serie de acciones que se vinculan en- formación. Restringe o facilita el más de en la tierra) e inestable, cam-
tre sí: como el password o contraseña movimiento y la interacción. Toda la bia las relaciones entre sujetos (al
que, para hacerse efectivo, necesita de información que se despliega si la ci- poderse dar también a distancia, en
la actualización y activación de bases fra es aceptada proviene de bases de red, de forma no presencial ni basada
de datos y de la participación obliga- datos. Poster (2006) ha señalado que en la proximidad física) e igualmente
toria de quienes pretenden acceder a éstas constituyen toda una nueva ex- entre sujetos y objetos (telemáti-
las simulaciones y habitarlas; prácti- periencia del lenguaje. Hacen referen- camente)1 . Y así es como habitamos
cas como la escritura electrónica; la cia a prácticas lingüísticas que el presente: entre dígitos y carne,
gestión de la velocidad que imprimen incluyen agentes que no hablan, sim- cables y pantallas, impulsos eléctricos,
los dispositivos telemáticos; la mul- plemente almacenan, contactan, bus- imágenes, información y desin-
TIRADO, F. Y CALLÉN, B.: SIMULACIÓN Y CÓDIGOS INFORMÁTICOS: UNA NUEVA ANATOMÍA PARA LAS PRÁCTICAS BIOPOLÍTICAS N ÓMADAS 37
password permite la localización mas. Frente a esto, observamos que El imperativo de la relación
permanente de su trayectoria y la en la simulación el control concier-
gestión de su trazado. Trasciende el ne al movimiento y no a la corpo- La tercera diferencia entre las dos
tiempo, lo que puede observarse ralidad. Tampoco se requiere un anatomías de poder que nos ocupan
especialmente en la capacidad de al- régimen de encierro sino la partici- reside precisamente en la cuestión de
macenamiento y recuperación de in- pación, una conexión constante. No la modulación. La lógica del disposi-
formación de las bases de datos. Los se necesita un establecimiento, es su- tivo de poder que describió Foucault
individuos ya no son conscientes de ficiente con un régimen de socia- buscaba producir subjetividades:
la vigilancia. Ésta se produce gracias a lidad, de relación con la simulación. crear almas. En nuestro caso, el pro-
un registro en dichas bases y que se da En el control nunca hay un punto pósito, la lógica de todas las prácti-
en ese nivel de materialidad fluida al final o de llegada, siempre arranca- cas que hemos mencionado, radica
que no accede el usuario. Opera con mos desde un punto medio y no en generar socialidad. Se busca la re-
un control que no es disciplinar. Y, existe un “telos” concreto que guíe lación, el contacto, la interacción. Lo
finalmente, en la simu- prohibido en una simu-
lación, vigilar implica, lación es, efectivamente,
sobre todo, un “dejar “la no relación”. Ésta no
hacer”, un permitir el existe como posibilidad.
movimiento continuo. Constituye el “afuera”
Cuanto mayor sea el del entorno virtual. No
movimiento del usua- puede ser de otra manera
rio, mayor será la pro- puesto que en la relación
babilidad de marcar y está el sentido mismo de
predecir su trayectoria. la simulación y su propia
razón de existir. Es más,
Disciplina versus en la conexión, la simu-
control lación deviene realidad.
Cultura Calima. Pectoral de oro de 16 cm de alto. 1000 d. C. - 1800 d. C. (detalle).
Colección Museo del Oro. Banco de la República.
Otra de las princi- En definitiva, si el
pales diferencias que observamos en- el ejercicio del control. Éste siem- gobierno del alma requiere el arte del
tre el gobierno del alma y esta nueva pre se ejerce a corto plazo, es pun- cuerpo que implica la disciplina y que
anatomía de poder está relacionada tual, continuo e ilimitado. Lo más posibilita el panóptico, en la simula-
con la disciplina. Foucault nos mos- interesante del control reside en que ción se despliega un dispositivo que
tró que ésta es básicamente un arte no pretende crear sujetos, sólo mo- en lugar de basarse en la mirada so-
corporal. En la simulación, por el dularlos. No hay individuación bre el cuerpo, se asienta en el movi-
contrario, el cuerpo pierde signifi- respecto a la masa ni marca estig- miento de la información y en el
cación y la vigilancia opera por con- matizante, sólo se cifra para deter- trazado de rutas de acceso a dicha in-
trol. Concretamente, la disciplina se minar ciertas posibilidades de acceso formación. La figura material y el di-
caracteriza por: a) operar en el cuer- a la información y, por tanto, de seño tecnológico de este entramado
po; b) requerir un establecimiento; movimiento. Se establecen trayecto- ya no es la arquitectura del panóptico,
c) requerir encierro; d) entrenar el rias antes que sujección. No es ya no es la inscripción del espacio a
cuerpo desde un punto cero –recor- ficción científica pensar en un dis- partir de una edificación con una ma-
demos que en cada establecimiento positivo de control capaz de propor- terialidad dura e identificable que re-
disciplinario hay que empezar el cionar en cada instante la posición siste el paso del tiempo. Por el
entrenamiento siempre de nuevo–; de un elemento en un medio simu- contrario, tenemos una anatomía de
e) tener una duración larga, discon- lado. En este punto, las bases de poder asentada en la materialidad
tinua e infinita –siempre es posible datos son todavía más relevantes fluida de la codificación numérica;
volver a iniciar el entrenamiento–; y que el password puesto que señalan es decir, en la simulación. La mirada
f) constituir a los individuos como la posición, lícita o ilícita, y deter- sobre el cuerpo deja paso al estable-
objeto y producir sujetos, crear al- minan la modulación. cimiento de una cartografía de movi-
TIRADO, F. Y CALLÉN, B.: SIMULACIÓN Y CÓDIGOS INFORMÁTICOS: UNA NUEVA ANATOMÍA PARA LAS PRÁCTICAS BIOPOLÍTICAS N ÓMADAS 39
ría más correcto afirmar que estamos ciones. Una desigualdad que cobra posibilidad para desplegarse, tomar
ante un mecanismo que produce especial relevancia si tenemos en cuen- forma y organizarse son las mismas:
“dividuación” (Deleuze, 1999). Tanto ta que mientras en las sociedades dis- residen en la producción de las men-
es así, que la no-relación, la desco- ciplinarias eran las instituciones las cionadas superficies de ensamblaje, en
nexión, constituiría el “afuera” de la que encerraban en su interior a los la posibilidad de manipulación,
simulación, del entorno virtual, y, sujetos con el fin de moldear sus al- transmisión y conexión de informa-
mutatis mutandi, la no-participación en mas y gestionar sus vidas, ahora son ción con el fin de generar una
lo común. Así, en nuestras actuales so- los propios (in)dividuos conectados socialidad productiva cuyos frutos
ciedades pierde interés como objeti- y en movimiento quienes ejercen el creativos –en forma de nueva infor-
vo la constitución de entramados de papel de múltiples centros de inercia mación, de código y conocimiento–
categorías (mujer, preso, niño) sobre sobre los que gira y se despliega de sean, en determinadas ocasiones, o
los cuales modelar nuestras subjetivi- forma centrípeta toda la red informa- bien capturados y sobrecodificados
dades y lo que importa, fundamental- tiva biopolítica. Así, por ejemplo, si por el capital, o bien, en otros
mente, es la conexión y el movimiento en una iniciativa activista o en un gru- momentos o simultáneamente, co-
productivo por las redes de la infor- po político todas las personas tienen lectivizados y puestos en libre
mación. Dicho de otro modo, que el mismo nivel de conectividad, éste circulación4.
nuestro circular genere la información resulta, obviamente, más democráti-
suficiente –acerca de prácticas, gustos, co y deseable; pero, en el momento
formas de vida, hábitos, etc.– como de tomar decisiones aceleradas, se Las sociedades de
para desplegar tras ella un plan de aten- constata que las personas que tienen control
ción individualizado que trate nues- más conectividad son las que toman
tros problemas particulares o que la mayor parte de las decisiones Todo lo afirmado hasta el mo-
ofrezca con anticipación el producto (Callén, 2006). Sencillamente porque mento nos lleva a pensar que hemos
específico a nuestros deseos y necesi- las otras se conectan muy poco o no cruzado el umbral de otro momento
dades. Los individuos pasamos, por tienen tiempo para consultar todos epocal. Recogiendo una afirmación
tanto, a definirnos, a cobrar relevancia, los correos y sumarse al curso de la de Deleuze (1999), se podría soste-
en función de nuestra conectividad, discusión y la acción. ner que hemos pasado de una socie-
de nuestra capacidad para devenir dad disciplinaria o de normalización
biodatas y participar en una especie Las nuevas prácticas biopolíticas a una de control abierto y continuo.
de superficies de ensamblaje (Tirado, más que atrapar, encerrar y anular, En ésta se están derribando los mu-
2001). operan por “prehensión”3 (Tirado, ros de fábricas, escuelas, hospitales y
2001). Es decir, pretenden incorpo- otras instituciones normativas y au-
Y si la existencia de distintos ni- rar y capturar una potencia en un acto toritarias. La acción disciplinaria, que
veles de conectividad ya es motivo de donde a partir del aunamiento y la produce control actuando sobre los
desigualdades y relaciones de domi- conexión entre entidades hetero- cuerpos en los mencionados centros,
nación, especialmente de los países géneas (personas, palabras y com- cede terreno frente a la comunica-
“tecnologizados” del norte sobre el putadoras; códigos, comandos y ción, la producción lingüística y la
sur, esta brecha digital también se acciones; etc.) unas comuniquen su generación de deseos y afectos, o ante
traslada al interior de iniciativas po- virtud y potencia a las otras. De modo la educación permanente. Se inaugu-
líticas y espacios laborales, económi- que distintas entidades resulten su- ran formas de gobierno descentrali-
cos o sociales que tienen lugar en una bordinadas, conectadas y coordina- zadas y abiertas. Una red flexible y
misma geografía. No todos los ele- das en otra nueva. En la prehensión fluctuante que constituye a los “ciu-
mentos articulados, no todas las per- quedan afectados tanto el elemento dadanos” y los implica en estrategias
sonas que participan en una acción prehensor como el prehendido y se globales a través de tácticas locales,
social, poseen el mismo grado de constituye un nuevo plano o unidad ejerciendo un control continuo que
conectividad y, por extensión, el mis- que no existía antes. Por eso, tanto traza trayectorias, permite o impide
mo grado de velocidad, de capacidad para el ejercicio del poder y el con- accesos y singulariza sus operaciones
de respuesta y, en definitiva, de agen- trol como para las prácticas de resis- adaptándose a cada caso específico.
cia y de grados de libertad en sus ac- tencia ante éste, las condiciones de Y todo esto gracias a la gestión de la
TIRADO, F. Y CALLÉN, B.: SIMULACIÓN Y CÓDIGOS INFORMÁTICOS: UNA NUEVA ANATOMÍA PARA LAS PRÁCTICAS BIOPOLÍTICAS N ÓMADAS 41
po. Ella puede negociar con él y ha- globalización. Por otra parte, el espa- ras o representaciones acabadas. Ha-
cio electrónico ha llegado a la mayo- bla de inclusión frente a pertenencia
cer, por ejemplo, con la actualidad pre- ría de sectores sociales, aunque a unos o encierro.
sente lo que antaño sólo era posible más que a otros”. Y también a más
con la historia: contarla y cortarla en ámbitos de nuestra vida (ocio, entre- 4 El desarrollo del SL representa un
tenimiento, relaciones personales, tra- ejemplo paradigmático de esta tensión.
pedazos cada vez más pequeños o cada Sobre esta cuestión puede consultarse
bajo, etc.), “de modo que sus interfaces
vez más grandes, rehacerla y recomen- están cada vez más en torno a noso- Callén, López, Domènech y Tirado
zarla incesantemente, plegarla y guar- tros” (Echeverría, 1999). (2007).
darla. El tiempo deja de ser condición 2 La tensión territorialización-deste- 5 Por esta razón, cuando se habla de
o exigencia alguna y se torna materia rritorialización-reterritorialización “trabajo inmaterial” no se hace refe-
dúctil con la cual trabajar. Además, se está perfectamente descrita en Deleuze rencia a la desaparición de la dimen-
y Guattari (1988). Se puede sinteti- sión material de las formas de pro-
rompe el principio lógico de que lo zar ese proceso afirmando que en pri- ducción, sino más bien a la centra-
que es no puede no ser al mismo tiem- mer lugar, de las relaciones entre ele- lidad que ahora adquieren otros
po. En ella es pensable y realizable ser mentos se extrae alguna cualidad, procesos y elementos como puedan
y no ser. Permite contratiempos y una expresión que se aísla de su con- ser la información y las relaciones de
texto; en segundo lugar, se ubica en comunicación.
contracorrientes. otro diferente en el que recibe una
nueva formulación; finalmente re-
Si como sostuvo Foucault, el gresa al anterior territorio pero
análisis del poder debe pasar necesa- detentando su nueva forma. El efec-
to es una reformulación de éste. Un Bibliografía
riamente por el examen de los dis- cambio: la reterritorialización. Tal
positivos concretos de vigilancia y movimiento es un devenir natural,
BAUDRILLARD, J., 1978, Cultura y simu-
control, si éstos cambian hay que su- imparable.
lacro, Barcelona, Kairós.
poner, en buena lógica, que se trans- 3 Prehensión deriva del concepto filo-
forma el primero. En ese sentido, sófico aprehensión y hace referencia CALLEN, B. y F. Tirado, 2004, “Imperio y
simultáneamente al sustantivo “pren- multitud: la transformación de la
deseamos finalizar estas páginas in- gobernabilidad en los entornos virtua-
sión” (acto de prender) y al verbo
sistiendo en que la nueva anatomía “prender” (comunicar su virtud una les”, en: Scripta Nova, disponible en:
para las prácticas biopolíticas que se cosa a otra). La prehensión es una <http://www.ub.es/geocrit/sn/sn-170-
46.htm>.
instaura con la implementación ma- forma de relación entre entidades ac-
siva, en nuestra vida cotidiana, de la tuales. Supone o no representación. CALLÉN, B., 2006, “Tecnología... políti-
La formuló A. Whitehead y la defi- ca hecha por otros medios. Una com-
simulación y los códigos informá- nió como un vínculo, un hecho con- prensión del tecnoactivismo desde
ticos, supone, también, una redefi- creto de relacionalidad. Un tipo de Riereta. net”, proyecto de investigación
nición de la propia noción de poder. unión. Las realidades se componen presentado para la obtención de Mas-
Los principales ejes de tal ejercicio de prehensiones o maneras como una ter de Psicología Social, Universitat Au-
realidad capta o prende para sí tónoma de Barcelona.
serían, por un lado, la capacidad de otras. Por potencia de captura o
convertir algo en global y, por el otro, prensión, distintas entidades quedan CALLÉN, B.; D. López; M. Domènech y F.
la habilidad de ensamblar informa- subordinadas o coordinadas en Tirado, 2007, “Techno-activism and
otra. De hecho, cada entidad es un free software: tools for the renovation
ción y generar nuevas totalidades con of political action”, en: International
tipo de prehensión, un modelo de
sentido. Y como afirma Serres (1994), captura (y capturado). Los tipos de Journal of Feminist Technoscience, dispo-
el príncipe que adviene con semejan- captura son reales, particulares e in- nible en: <http://feministtechnoscien-
dividuales. La prehensión no es nada ce.se/journal/>.
te lógica será un piloto o un ciber-
al margen de la entidad actual CASTELLS, M., 1996, La Era de la Infor-
nauta. Curiosamente ambas palabras prehendida. Es decir, sólo es en la
tienen la misma raíz etimológica. mación, Vol. 1: La Sociedad Red, Ma-
medida en que está siempre actuali- drid, Alianza.
zada o ensamblada en una materia-
lidad de elementos actuales. Lo inte- DELEUZE, G., 1999, Conversaciones, Va-
resante de la teoría de la prehensión lencia, Pre-textos.
es un planteamiento en el que el ob- DELEUZE, G. y F. Guattari, 1988, Mil
Citas jeto es siempre previo a la constitu- mesetas. Capitalismo y esquizofrenia,
ción del sujeto. La prehensión por Valencia, Pre-textos.
1 “Geográficamente, las redes y las so- naturaleza indica una apertura al
ciedades de la información se han ido mundo, al entorno, a todo lo que la ECHEVERRÍA J., 1999, Los Señores del
superponiendo a los diversos países, rodea, y muestra una realidad cons- aire. Telépolis y el Tercer Entorno, Barce-
posibilitando los actuales procesos de tituida por capturas, nunca clausu- lona, Destino.
TIRADO, F. Y CALLÉN, B.: SIMULACIÓN Y CÓDIGOS INFORMÁTICOS: UNA NUEVA ANATOMÍA PARA LAS PRÁCTICAS BIOPOLÍTICAS N ÓMADAS 43
Cibercultura
y las nuevas nociones
de privacidad nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 44-50
Este artigo pretende analisar as singularidades das novas noções de privacidade que a cibercultura parece estar configu-
rando, desde a aproximação sociológica do ciberespaço. Enquanto fora da rede somos cada vez mais ciumentos de nossa
privacidade e reclamamos de nossos direitos perante novas políticas globais de prevenção ao terrorismo, em todos os mundos
virtuais vamos perdendo a capacidade de distinguir entre o público e privado que tanto valorizamos..
Palavras-chaves: privacidade, internet, Second Life, Youtube, Hi5, sistemas culturais.
In this article we analyze the paradoxes of the new notions of privacy that cyberculture seems to be configuring, from a
sociological approach to cyberspace. While off line we are more jealously every day of our privacy and claim our rights when
facing the new global policies against terrorism, in the virtual world we lose the capacity to differentiate between the public
and the private, aspects that we value when off line.
Key words: privacy, Internet, Second Life, Youtube, Hi5, cultural systems.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
2. Cibercultura:
capitalismo cognitivo
y cultura
ALBORNOZ, M. B.: CIBERCULTURA Y LAS NUEVAS NOCIONES DE PRIVACIDAD N ÓMADAS 51
Capitalismo cognitivo,
trabajo informacional y
un poco de música* nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 52-65
Mariano Zukerfeld**
Este artículo está organizado en torno a tres secciones. En la primera, se presenta un resumen de nuestro marco teórico para
pensar el capitalismo cognitivo, centrado en el concepto de bienes informacionales. En la segunda, utilizando los datos de un estudio
de campo, se aplican las categorías esbozadas para caracterizar algunos aspectos del trabajo de los músicos en la actualidad.
Finalmente, se extienden las ideas surgidas de la sección anterior y se propone la noción de trabajo informacional para pensar la
forma de trabajo que distingue a la presente etapa.
Palabras clave: capitalismo cognitivo, bienes informacionales, trabajo informacional, conocimiento, tecnologías digitales, música.
Este artigo é organizado em três seçãos. A primeira mostra uma apresentação breve de nosso marco teórico no Capitalismo
Cognitivo, baseada no conceito de Bens Informacionais. A segunda, usando os dados de um trabalho do campo, examina as
categorias propostas a fim de caracterizar alguns aspectos do trabalho dos músicos no presente. Por fim, desenvolve-se estas idéias em
uma definição do Trabalho Informacional para pensar o tipo do trabalho que distingue a etapa atual.
Palavras-chaves: capitalismo cognitivo, bens informacionais, trabalho informacional, conhecimento, tecnologias digitais, música.
This paper is structured as follows. The first section shows a brief presentation of our theoretical framework on Cognitive
Capitalism, based on the concept of Informational Goods. The second, using fieldwork results, examines the proposed categories in
order to characterize some aspects of musicians’ labor at present. Finally, these ideas are broadened into a definition of Informational
Labor, given to think the type of labor that distinguishes the present stage.
Key words: cognitive capitalism, informational goods, informational labor, knowledge, digital technologies, music.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
2. Ambivalencia del producto y los sujetos ni al de los objetos. Esto Nada de nuevo hay en esta idea.
de los medios de producción no haría sino reflejar la idea de Sloter- La enunciación más clara es de Coriat
dijk (2000), según lo cual, la informa- (1992). Sin embargo, aparece tan con-
Los BI que utilizan el capital en ción representa un tercer tipo de ente firmada empíricamente que no pode-
contra del trabajador informacional que nos obliga a dejar de lado la on- mos dejar de mencionarla como uno
son usados por éste para fines diver- tología que nos gobierna desde Platón. de los rasgos del trabajo informa-
sos de los de la empresa, fuera del tiem- cional. Alude, por un lado, a que el
po que pasa bajo el mando de ésta. 3. Bienes contra servicios trabajador debe tener los CSS que le
Eso significa, en la mayoría de los ca- permitan realizar varias tareas diferen-
sos (software, imágenes, música, textos), Contrariamente a lo que suele tes. En algunos casos esas tareas deben
que el trabajador que produce BI1 no suponerse, el producto del trabajo hacerse, además, simultáneamente.
se ve alienado del producto de su traba- informacional es siempre un bien y Por ejemplo, los trabajadores de los
jo: siempre se queda una copia22 . En no un servicio. No es una “actividad call centers tienen al mismo tiempo
otros casos, (como los de los emplea- sin obra”, ni es “inmaterial”, si por que atender al cliente, leer varios men-
dos de los call centers) lo que ocurre es ello se entiende que no se objetiva. sajes en la pantalla, reportar al super-
que los trabajadores utilizan las mis- Por el contrario, el trabajo infor- visor, etc. En otras ocasiones, la
mas herramientas que los subyugan en macional en todos los casos se mate- diversidad de tareas es realizada por
Kavita Phillip**
Traducción del inglés***: Ana Rita Romero****
El artículo estudia genealógicamente el debate actual sobre la apropiación de productos informáticos, a partir de las condiciones
económicas, legales y políticas de su enunciación. Para ello, rastrea la emergencia de una función pirata, homóloga al concepto
foucaultiano de función de autor, para comprender la ilegalidad, la propiedad intelectual y los derechos de autor. Desde una
mirada poscolonial se comprende la construcción de diferencias y equivalencias en los intercambios tecnológicos norte-sur.
Palabras clave: piratería, legalidad burguesa, función de autor, derechos de autor, propiedad intelectual, software.
O artigo estuda geneologicamente o debate atual sobre a apropriação de produtos informáticos, a partir das condições econômicas,
legais e políticas de sua declaração. Para isso, rasteia a emergência de uma função pirata, homológica ao conceito de função do
autor, para compreender a ilegalidade, a propriedade intelectual e os direitos do autor. Desde uma perspectiva poscolonial pode-se
compreender a construção de diferencias e equivalências nos intercâmbios tecnológicos de norte-sur.
Palavras-chaves: pirataria, legalidade burguesa, função do autor, direitos do autor, propriedade intelectual, Software.
This article shows the study of the current debate on the appropriation of informatic products, from the economical, legal, and
political conditions of its enunciation. To do so, the author tracks the emergence of a pirate function, that homologues the Foucauldian
concept of author function, to understand the illegality, the intellectual property, and the copyright. From a post-colonial point of
view, the construction of differences and equivalences in the technological trades North-South, are understood.
Key words: piracy, bourgeoisie legality, author function, copyright, intellectual property, software.
ORIGINAL RECIBIDO: 04-II-2008 – ACEPTADO: 27-II-2008
* Este texto hace parte de un nuevo proyecto de investigación que explora formas de
propiedad y conocimiento tecnocientífico. Agradezco al Center for Research on
Information Technology and Organizations (Crito) en UC Irvine por el
financiamiento, y a quienes participaron en los simposios “Critical Legalities” (UC
Irvine) y “Feminist and Queer Rearticulations of South Asian Studies” (UC Davis),
cuyos comentarios me han ayudado a reflexionar sobre los problemas actuales del
proyecto y a estimar sus posibilidades futuras. Especial agradecimiento para Bill
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
Maurer, Donald Moore, Mark Poster y Geta Patel por sus comentarios y a Rod
Fergusson por su original conversación sobre la “chica de la portada” de la revista
Wired de marzo de 2004.
** Ph.D. en Estudios de Ciencia y Tecnología de la Universidad de Cornell. Actual-
mente es profesora asociada en la Universidad de California en Irvine en el
Programa de Estudios sobre mujer y afiliada al Departamento de Antropología
e Historia de esta misma Universidad. E-mail: kavitaphilip@gmail.com
*** Este artículo fue publicado por primera vez en inglés en el Journal of Postcolonial
Studies, Vol. 8, No. 2, 2005, pp. 199-218. Agradecemos al Institute of Postcolonial
Studies la cesión de los derechos de publicación.
**** Licenciada en Filología e Idiomas de la Universidad Nacional de Colombia.
In this essay we suggest that there would be an invaluable connection between the subjective and emotional engagement of the
young users of the Internet, who invest time and desire in realizing a varied set of minor works (emailing, images of themselves in
Facebook, pieces of music, managing an online logbook), and the malaises of the urban well-being. These minor works incarnate and
objectivate the exigencies of free work –frequently repressed, postponed, administrated or regulated– that some of the new technological
repertoires vigorously canalize and mobilize.
Key words: young people, information and communication technologies, politics, urban culture.
GÓMEZ Z., R. Y GONZÁLEZ M., J.: TECNOLOGÍA Y MALESTAR URBANO ENTRE JÓVENES N ÓMADAS 83
to de coordinaciones humanas respec- 3. Uno de esos migrantes es Y.P., poca frecuencia. Suele coleccionar y
to al cual lo pueblerino, lo rural y lo un joven de capas medias, de la ciu- escuchar música y ver cine comercial
selvático aparecen como “lo otro”, el dad de Cali. Tiene veintitrés años, y de autor en la universidad donde
afuera, lo urbano comienza a conver- estudia en una universidad pública estudia. En los últimos meses se ha
tirse en el afuera de ese espacio los últimos semestres de una carrera dedicado a modelar con un software
dromosférico (veloz y en tiempo real) que de ciencias básicas. Desde los trece gráfico la imagen de la iglesia de San
es Internet, esa metaciudad (Virilio, años hace música con un sintetizador. Antonio, en Cali. Ha aprendido a
1997, 1999 y 2002) con sus propias Tiene un teléfono celular y dos chips manejar con suficiencia 3D Studio
coordenadas temporales y deslo- de diferentes operadores de telefonía Max, luego de haber tomado un bre-
calizadas. Se trata de un proceso de móvil. Un computador con conexión ve curso de diseño y animación por
creciente y aguda virtualización (Levy, a Internet. Una cámara fotográfica computador. No es un estudiante ex-
1999)4 . En el pasado reciente, los digital que usa para registrar retratos cepcional y no se considera a sí mis-
pueblos y las pequeñas villas mo un artista. Como Y.P.
(burgos) fueron el lado vir- existen muchos jóvenes en las
tualizante de la vida, un locus ciudades que hacen importan-
que dejaba por fuera el mun- tes inversiones de tiempo, de-
do real, la agreste naturaleza, seo y trabajo en la realización
la selva, el bosque, que cons- de este tipo de obras y creacio-
tituían el “lado de afuera”. nes, bienes expresivos sin preten-
Pero esos pequeños pueblos, siones, cuyo destino, gestión
al mismo tiempo, produjeron y alcance no están definidos
en su propia interioridad un ni por el ánimo de lucro, ni
polo crecientemente virtual (la por un vínculo laboral que
ciudad) respecto al cual llega- prescribe y obliga a realizar la
rían después a ser el afuera. obra, ni por las complejas di-
Hoy los pequeños pueblos námicas de cooperación y
son, para los habitantes urba- competencia que fuerzan cual-
nos, el lado de afuera, “me- quier campo de producción
nos real”, de la ciudad, un simbólica en las artes. No sue-
poco el pasado que se visita, ña con hacer música para la
recorre y añora, pero en el venta, aunque eventualmente
cual ya no se puede vivir del podría terminar implicado en
todo. Bien, la megalópolis alguna iniciativa de produc-
también generó su propia in- Cultura Zinú. Piedra tallada. s. d. ni f. (detalle). ción musical con fines comer-
Archivo fotográfico del ICC.
terioridad crecientemente vir- ciales o podría recibir alguna
tual respecto a la cual, con los días, y autorretratos, para capturar escenas remuneración futura por sus obras o,
llegará a ser el lado de afuera, el lu- de viaje y situaciones de la vida coti- incluso, podría percibir algún tipo de
gar “menos real”. No debe sorpren- diana ordinaria y extraordinaria, y salario por sus habilidades como crea-
der, entonces, que el tiempo en para tomar imágenes de la naturale- dor de imágenes simuladas. ¿Por qué
Internet se esté convirtiendo en za, en particular, especies vegetales, tantos jóvenes como Y.P. dedican
“tiempo real” contra el tiempo dada su particular inclinación por la una importante porción de sus vidas
¿irreal? de la vida urbana. De esta botánica. Durante algún periodo tra- a la creación de este tipo de obras de
forma, estamos ante algo así como bajó el carboncillo y los pasteles cuan- dudosos réditos, dado que no goza-
una nueva “urbanización” cuyos pri- do adelantó estudios de pintura en rían de prestigio y reconocimiento en
meros emigrantes tienen un pie aquí, un corto programa de formación ar- el campo artístico ni son bienes
en la ciudad, y otro allá, en ese en- tística. Ha dejado atrás su intensiva comercializables en los mercados,
tramado tecnocomunicacional. Esos afición por los videojuegos, algunos industrias y negocios culturales? Y.P.
emigrantes y primeros colonos son, de los cuales operaba con extraordi- tampoco considera su creciente do-
en general, jóvenes. naria pericia. Ahora los juega con minio de este tipo de software una
GÓMEZ Z., R. Y GONZÁLEZ M., J.: TECNOLOGÍA Y MALESTAR URBANO ENTRE JÓVENES N ÓMADAS 85
lada de producción y provisión de explotación en condiciones de abun- Hay en esto una perspectiva
bienes y servicios? Bien, en términos dancia relativa9 ? Sin duda, para res- que se ignora por completo
estrictamente técnicos hay relativo ponder este interrogante habrá que cuando se imagina la voluntad
acuerdo acerca de un dato esencial: desempolvar a Marcuse y a Marx, y de transformación, propia del
la capacidad actual de producción sus lúcidas observaciones. La tesis que marxismo, como la voluntad
permitiría eliminar el hambre, la po- podemos sugerir es más o menos la de la satisfacción de necesi-
breza y la vulnerabilidad vital del con- siguiente: la realización plena de las dades, olvidando que desde el
junto de humanidad. Es decir, el necesidades humanas pasa, no por su comienzo y en todo su desa-
problema es político, no económico: satisfacción y saciamiento en virtud rrollo Marx siempre pensó en
la sociedad contemporánea está des- del consumo y los servicios, sino por términos de multiplicación
truyendo valor y bienes (destruyen- su continuo y más amplio enriqueci- de las necesidades y de la ge-
do trabajo) en tanto no ha sido capaz miento mediante un nuevo y renova- neralización creciente de la
de convertir tal capacidad instalada do trabajo humano (entendido en el insatisfacción humana (Zule-
de producción real en bienestar ge- sentido amplio de producción huma- ta, 2002: 109).
neralizado y global8 , tal como lo evi- na). Esta idea ha sido recuperada por
dencian la obscena concentración de Zuleta (2002) en un pequeño artícu- Es esencial entonces para la argu-
la riqueza y su inequitativa distribu- lo y puede revisarse en el Marx de los mentación, sostener el vínculo entre
ción, la sobreexplotación en ciertos Grundrisse (1972). trabajo y enriquecimiento de la ne-
frentes de producción que requieren cesidad, esto es, la cualificación de
mano de obra intensiva y poco califi- Marx dice que piensa en el co- las necesidades en virtud de la pro-
cada, la existencia de formas de tra- munismo no como una socie- ducción humana. Esta idea es políti-
bajo rutinario e improductivo cuya dad de la satisfacción de las camente central porque supone que
única función consiste en ampliar la necesidades, sino como una lo racional no es extender y expandir
capacidad de compra y consumo del sociedad capaz de multiplicar el trabajo socialmente obligatorio,
conjunto de la población, la flexibi- continuamente las necesidades sino ampliar las formas de trabajo li-
lización e inestabilidad laboral con humanas y por lo tanto de berado: se trata de liberar el trabajo,
sus turbulentos ciclos de empleos a crear una insatisfacción cre- no de abolirlo. Ese tipo de trabajo
corto plazo y desempleos persisten- ciente: hacer que aquello que liberado es posible en condiciones de
tes, el despilfarro y el consumo com- es suntuario se convierta en abundancia creciente, es decir, en
pulsivo entre algunos segmentos necesario. condiciones en que el trabajo social-
poblacionales, y la existencia de dos mente necesario para la sobrevivencia
tercios de la humanidad en condicio- Quería traer a cuento la teo- vital de la especie humana se ha ido
nes de pobreza y miseria. Esta idea ría de la riqueza concreta y la reduciendo gracias al dinamismo
ha sido expuesta de manera original riqueza abstracta para desa- tecnoindustrial.
por Marcuse (1970). Puede encontrar- rrollar la idea de Marx de que
se en una versión mucho más aterri- el desarrollo de la sociedad En condiciones de vida rela-
zada y polémica en Carlos Pérez Soto (como efecto de una raciona- tivamente abundantes, ése será un
(1996 y 2001), y con menores o ma- lización de la producción y de recurso preciado por controlar: las
yores grados de esperanzada confian- un ahorro de tiempo) que era demandas de enriquecimiento de la
za en el futuro o desencantada visión para él efectivamente lo más necesidad cuya realización pasa por
del porvenir, en Bauman, (2005), racional y esencial, era una formas variadas de trabajo liberado.
Gorz (1997, 1998), Beck (2000), multiplicación de la riqueza Algunos pueden denominarle tiempo
Morin (1997), Castoriadis (1991, en el sentido de un incremen- de ocio o tiempo libre, pero estos dos
1997), Hard y Negri (2004), por men- to de la necesidad: de un in- términos ocultan el problema políti-
cionar algunos. cremento de la necesidad de co esencial: el malestar y la crisis que
arte y la necesidad de concien- deriva de la contención, aplazamien-
Teniendo en cuenta lo anterior, cia, de cultura, y de una mul- to y administración continua del en-
vale la pena volver a la pregunta: ¿qué tiplicidad de las relaciones riquecimiento de la necesidades
forma adquiere la dominación y la humanas. humanas. La estructura de produc-
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juguete infantil: nunca habían sido videomúsica, génesis de entreteni- ción general de la vida. Ese el senti-
tan bellos y complejos, y nunca ha- mientos urbanos de diferente tipo) do de las veinte horas de trabajo in-
bían sido tan perecederos y rápida- para capturar jóvenes “creativos” que vertidas por Y.P. para construir una
mente des-preciados por los niños. proveen su capacidad de trabajo y réplica virtual de la iglesia de San An-
nutren los negocios empresariales vi- tonio, y las innumerables horas de
Sin embargo, junto con las dife- gorosamente. trabajo invertidas por algunos jóve-
rentes formas de contención de las nes urbanos que atienden y actuali-
demandas de trabajo liberado, pros- Es respecto a esta situación que zan periódicamente su propio blog.
peran aquí y allá, de maneras más o se pueden entender tanto las prome- En todas estas prácticas es posible
menos inadvertidas, prácticas diver- sas como las frustraciones que los leer y descifrar la acción política di-
sas de trabajo libre. Hay lugares en nuevos repertorios tecnológicos pro- fusa, menor, que emerge del corazón
que las personas realizan un tipo de ducen en la subjetividad contempo- mismo de la frustración y del
trabajo liberado e intercambian su ránea. El joven urbano de sectores malestar de quienes, en principio, go-
producto por el trabajo li- zan de los privilegios del
berado de otros: la sola rea- bienestar.
lización de este tipo de
trabajo es social, política y Aunque las modalida-
terapéuticamente esencial des políticas más progre-
(ésa es su rentabilidad más sistas hoy están enfilando
importante) y los bienes baterías hacia algunos fren-
generados serían en un tes fundamentales y rele-
mundo así concebido pura- vantes, herencia y rezagos
mente contingentes. In- de demandas no realizadas
dagar acerca de las formas por las sociedades moder-
en que tales prácticas están nas (inclusión y reconoci-
sutilmente emergiendo en miento de diversidades
el mundo moderno es cru- culturales y sociales; re-
cial, porque son gérmenes gulaciones y control sobre
del porvenir de la política. las diversas variantes de
Uno de esos lugares de in- destrucción y amenaza
tercambio de productos de- Cultura Muisca, s. d. Archivo fotográfico del ICC, 1978. medioambiental; equidad
rivados del trabajo más o y reconocimientos iden-
menos liberado es la Red. Las pági- integrados experimenta en extremo titarios de género, etnia, raza y edad;
nas electrónicas, las inversiones en di- la frustración y algunos la transfor- pluralismo político efectivo; fin de
seño y desarrollo de blogs, la creación man y la tramitan resemantizando el la pobreza; provisión de condiciones
de música e imágenes, pueden ser for- consumo (haciendo de lo consumi- básicas de vida; defensa de los dere-
mas protoexperimentales y anticipa- do su pequeña obra), encontrando chos humanos de primera, segunda,
ciones del trabajo humano liberado nichos de producción y trabajo li- tercera y cuarta generación; derecho
del futuro. Pero también lo son el pe- bre (trabajo voluntario, obras de al cuerpo propio y a decir el final de
queño arte casero, los relatos y cor- arte, música propia, pequeños nego- la vida; derecho al consumo de bie-
tos videos articulados a través de cios, tecnoartesanía, acción política, nes ilegalizados –por ejemplo, dro-
teléfonos celulares, el diseño y explo- vida sexual experimental, interven- gas–; derecho al acceso y producción
ración de rutas y tramas turísticas no ciones sobre el cuerpo, etc.), rediri- de comunicación pública), las deman-
comerciales, los experimentos sexua- giendo las posibilidades expresivas das políticas y sociales del futuro, que
les. Por supuesto, el impulso hacia el (no instrumentales) de los nuevos re- están emergiendo en el presente, tien-
trabajo liberado puede ser aprovecha- pertorios tecnológicos (software libre, den a ser más o menos ignoradas o
do sistemáticamente por diferentes interfaces y negocios colaborativos, poco consideradas. Estas demandas
sectores de las industrias culturales flash mobs) o inaugurando en diferen- políticas contra la frustración conti-
(diseño de modas, creación de tes escenarios tentativas de poetiza- nuada en medio de la abundancia, le
GÓMEZ Z., R. Y GONZÁLEZ M., J.: TECNOLOGÍA Y MALESTAR URBANO ENTRE JÓVENES N ÓMADAS 89
mos, sino como aquello que como indicador de creciente raciona- te establecer relaciones entre los esta-
hacemos. Hay que atreverse a lidad y eficiencia en la producción. dos de ser que parecen opuestos y que,
En la actualidad, la posibilidad de co- en sentido estricto, son complementa-
tener la voluntad de apropiar- ordinar acciones en tiempo real alte- rios: lo posible con lo real y lo virtual
se del nuevo trabajo (Gorz, ra de manera radical la forma de or- con lo actual. Lo que define “lo posi-
1998: s/p). ganización de la producción, pues por ble” es su condición de “ya constitui-
cada unidad de tiempo ocurren, al do” pero aún no realizado, esto es, to-
mismo momento, un rango amplio davía “en el limbo” (1999: 17). En
Hace una semana, Y.P. descubrió de operaciones simultáneas que pue- consecuencia, lo posible se define por
que es posible hacer con su recrea- den ser coordinadas en red. Esto per- sus límites, “es estático”, no considera
ción en 3D de la iglesia de San Anto- mite que tareas que requerían mu- alternativas distintas a las predefinidas.
cho tiempo lineal (paso a paso), pue- Y la forma de concreción de lo posi-
nio, un pequeño videoclip. Piensa dan ejecutarse de manera muy breve ble, es decir, la manera en que se hace
componer en su sintetizador algunas en tiempo reticular. patente, es su realización. Para Lévy,
tonadas que articulará a la imagen “lo virtual no se opone a lo real sino a
3 Sennet (2004) destaca el abandono, en
tridimensional. Además, espera me- la ciudad contemporánea, de la pauta lo actual”, que es su complemento. “A
jorar los acabados, detalles y textura de la cuadrícula romana que aspiraba diferencia de lo posible, estático y ya
de las piedras, árboles y constituido, lo virtual viene a ser el
conjunto problemático, el
paredes de la iglesia. Con- nudo de tendencias o de fuer-
vertida en una secuencia zas que acompaña una situa-
audiovisual animada, lo ción, un acontecimiento, un ob-
que empezó siendo el rígi- jeto o cualquier entidad y que
reclama un proceso de resolu-
do modelado de uno de ción: la actualización” (1999,
los lugares emblemáticos 18). Lo virtual es sobre todo un
de la ciudad de Cali, pue- nudo de problemas, de tenden-
de quizás convertirse, con cias y fuerzas que, en un mo-
mento dado, se actualizan de
los meses, en el primer fil- una manera particular no pre-
me que hace en toda su visible ni determinable externa-
vida un joven que dedica mente. “La actualización apa-
cerca de tres horas diarias rece como la solución a un pro-
blema, una solución que no se
de su vida a pasar el tiem-
contenía en el enunciado” (18).
po en su computador. Cultura Quimbaya. Figura de cerámica de 37 cm de alto. De esta manera, la actualiza-
900 d. C. - 1600 d. C. Archivo del ICC. ción, el complemento de la
Honrosa celebración virtualización, es, sobre todo,
a una simetría extendida de manera “creación” e “invención” a partir del
de lo inútil. regular en torno a un centro claramen- nudo de fuerzas o problemas que cons-
te delimitado, para adentrarnos en la tituyen lo virtual. Entonces, mientras
megalópolis moderna, hecha de nudos. la realización es la concreción de “un
“La vaguedad de la palabra ‘nudo’ in- posible predefinido”, la virtualización
dica que ya no es posible designar un es creación o “invención de una solu-
Citas valor ambiental, mientras que el ‘cen- ción exigida por una problemática
tro’ está cargado de significados histó- compleja”. De este modo, Lévy le sale
1 Figuras antropomórficas que re- ricos y visuales, por lo que el ‘nudo’ es al paso a quienes suelen confundir vir-
presentan a cada usuario en, por algo amorfo” (Sennett, 2004: 3). Como tual con desrealización: la desrea-
ejemplo, Second Life, un portal se verá más adelante, no es casual que lización sería la transformación de un
electrónico que permite a las perso- sea la condición de ‘nudo’ (ambiguo y real, en sus diferentes posibles. Vir-
nas interactuar con otras (otros ava- problemático) lo que define –de acuer- tualizar, en cambio, consiste en encon-
tares) en tiempo real. do con Levy (1999)– lo virtual. De al- trar y construir el campo de proble-
guna manera, Internet y la Red –la mas del cual una determinada mani-
2 En la organización moderna y clásica interfaz gráfica de Internet– acentúan festación es sólo una actualización.
del trabajo, el tiempo era fundamen- y prolongan las tendencias virtualizantes
talmente lineal. Las líneas industria- de la ciudad, ese ámbito de coordina- 5 Las variantes del primer argumento se
les de montaje indicaban la naturale- ción de acciones humanas a gran escala. expresan como “placer de poder con-
za secuencial (paso a paso, segundo versar con otros libremente”, “sentir que
tras segundo) de la producción 4 Lévy diferencia cuatro estados de ser: se puede conocer otros lugares, otras
fordista. Se trataba de reducir el tiem- lo real, lo virtual, lo posible y lo ac- personas, otras culturas”, “establecer
po entre cada secuencia de pasos tual. A este autor le resulta interesan- vínculos de amistad, amor y sexo a
GÓMEZ Z., R. Y GONZÁLEZ M., J.: TECNOLOGÍA Y MALESTAR URBANO ENTRE JÓVENES N ÓMADAS 91
Educativa, No. 28, Vol. 11, enero- sente. Las ciencias cognitivas y la expe- , 2002, “Alles Fertig: se acabó”,
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3. Colectivos y
movimientos sociales
en la red
GÓMEZ Z., R. Y GONZÁLEZ M., J.: TECNOLOGÍA Y MALESTAR URBANO ENTRE JÓVENES N ÓMADAS 93
Movimientos sociales:
TIC y prácticas políticas nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 94-101
Este artigo destaca certas dimensões da relação entre os movimentos sociais com a constituição de uma esfera pública
qualitativamente diferente à que faz umas décadas existia no espaço público das sociedades modernas, assim como em
algumas práticas políticas que tem como referência a constituição de redes e o uso de tecnologias da informação e da
comunicação.
Palavras-chaves: movimentos sociais, tecnologia da informação, redes sociais, práticas políticas, esfera pública.
This article highlights some dimensions of the relation among social movements, the constitution of a public scenario
qualitatively different from that that existed until a few decades ago in the political space of modern societies, and some
political practices that take the constitution of networks and the use of the communication and information technologies
as a reference point.
Key words: social movements, information technologies, social networks, political practices, public scenario.
Dibujos EMBRERA: Astrid Ulloa
VALDERRAMA H., C. E.: MOVIMIENTOS SOCIALES: TIC Y PRÁCTICAS POLÍTICAS N ÓMADAS 101
Internet y cultura digital:
la intervención política
y militante*
nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 102-111
No artigo analizam-se as transformações nas práticas sociais e a cultura política de coletivos sociais que se apropriam
das tecnologias da informação e da linguagem audiovisual na sua luta contrahegemónica. Sua atividade começa a se
centrar na comunicação e a imagem, integrando as expressões escritas, visuais, audiovisuais e gestuais da cultura contem-
poránea.
Palavras-chaves: movimentos sociais, Internet, cibercultura, contra hegemonia, comunicação, redes globais.
In this article it is analyzed the transformation of social practices and political culture of social collectives. They are
appropriated the information technologies and audiovisual languages in their counter hegemonic struggle. The centre of
activity is the communication and the image, integrating the writing, visuals, audiovisuals and gesture of the contemporary
culture.
Key words: social movements, Internet, cyber culture, counter hegemony, communication, global nets.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
LAGO MARTÍNEZ, S.: INTERNET Y CULTURA DIGITAL: LA INTERVENCIÓN POLÍTICA Y MILITANTE N ÓMADAS 103
nuevos sino que “combinan formas vimientos por los derechos civiles en Así, en la década del noventa sur-
de acción que conciernen a diferen- Estados Unidos. gen las grandes movilizaciones socia-
tes niveles o sistemas de la estructura les articuladas internacionalmente5
social, implican diferentes orientacio- La virulencia de los problemas que se expresan como la confluen-
nes y pertenecen a diferentes fases de generados por la globalización en cia de movimientos opositores al ca-
desarrollo de un sistema o a diferen- América Latina y en el mundo obra pitalismo global y a las políticas
tes sistemas históricos”. De manera como disparador para la gestación de neoliberales. Este ciclo de moviliza-
que es posible identificar las nuevas movimientos sociales en contra del ciones se inicia con el encuentro
formas de acción de los movimien- modelo neoliberal, que incluyen en intergaláctico llevado a cabo por el
tos contemporáneos como caracterís- su seno diversas expresiones de los Ejército Zapatista de Liberación
ticas de un contexto sistémico opositores al pensamiento único. Nacional (EZLN) en 1996, conside-
diferente al del capitalismo industrial. Alain Touraine (2000) alerta sobre la rado la primera convocatoria inter-
aparición de nuevas preocupaciones y nacional contra la mundialización
Clauss Offe (1992), por su parte, nuevos horizontes para los movimien- neoliberal6 . Posteriormente, la pro-
afirma que se observa la aparición de tos sociales, muchos de los cuales tan testa en la ciudad de Seattle, en no-
un nuevo paradigma de acción colec- sólo se pueden explicar a partir de las viembre de 1999, marca el comienzo
tiva a través de los nuevos movi- acciones que son capaces de propo- simbólico de las sucesivas moviliza-
mientos sociales, entendido como ner y de ejecutar en un mundo de ciones de carácter global denomina-
configuración de actores, contenidos, flujos de comunicación en red. das por sus actores contracumbres,
valores y modos de actuar en conflic- Boaventura de Sousa Santos (2001) puesto que se convocan en coinci-
tos políticos-sociales. Consecuente- indica por su parte que la actuación dencia con las reuniones de las ins-
mente establece un contraste entre el de movimientos y organizaciones so- tituciones que regulan los acuerdos
nuevo paradigma, expresado en los ciales en el contexto mundial está vin- comerciales globales (Organización
movimientos sociales emergentes, y culada, por un lado, a la emergencia Mundial del Comercio (OMC),
el viejo paradigma, analizando cuatro de temas que por su naturaleza son Fondo monetario Internacional
tipos de organizaciones: ecologistas globales (la sustentabilidad del plane- (FMI), Banco Mundial (BM), Grupo
o de protección del medio ambiente ta, la violación de derechos humanos, de los ocho países más poderosos
(entorno natural y entorno urbano); problemas ambientales, la afirmación (G8) y diversos acuerdos regionales).
movimientos por derechos humanos de identidades de sexo, etnia, nacio- En América Latina se consolidan las
(principalmente feminismo); pacifis- nalidad, etc.); y, por otro, a la posibi- luchas contra el Área de Libre Co-
mo y movimientos por la paz; movi- lidad de que grupos subordinados, mercio para las Américas (ALCA), y
mientos que propugnan formas movimientos sociales o regiones, se el Foro Social Mundial (FSM) en-
alternativas o comunitarias de pro- organicen trasnacionalmente en defen- cuentra su primer escenario en Por-
ducción y distribución de bienes y sa de intereses comunes, y usen en su to Alegre, Brasil, en el año 2001.
servicios. beneficio las posibilidades de inter-
acción creadas por el sistema mundial. Estas redes internacionales deno-
Estos movimientos adquirieron minadas movimientos antiglobalización
muchas veces relevancia internacional Con estos atributos, los movi- o de resistencia global, se organizan en
(ejemplos clásicos son el movimien- mientos sociales se apropian del es- torno a nodos, cada punto de articu-
to ecologista denominado de supervi- pacio de los flujos4 , las redes son cada lación de la red es uno de ellos y allí
vencia y el feminismo llamado de vez más amplias y comienzan a reali- se crean las posibilidades concretas
emancipación). El inicio del accionar zarse encuentros y acciones de orga- de una acción. La novedad es que
de estos “nuevos” movimientos sue- nizaciones y movimientos sociales y están conectados en red a través de
le identificarse con los movimientos sindicales mundiales. La estructura de las herramientas de Internet que re-
estudiantiles del 68 en Francia, las los mismos se plantea de forma des- sultan imprescindibles para su actua-
marchas contra la guerra de Vietnam centralizada y en red, reflejando y ción y para el rendimiento de sus
en todo el mundo, contra las armas contrarrestando la lógica de domi- territorios de influencia y acción
atómicas en Gran Bretaña y la Repú- nación –también en red– de la socie- (Castells, 2001). Aprovechan el de-
blica Federal de Alemania y los mo- dad contemporánea. sarrollo de los medios de comunica-
LAGO MARTÍNEZ, S.: INTERNET Y CULTURA DIGITAL: LA INTERVENCIÓN POLÍTICA Y MILITANTE N ÓMADAS 105
ATTAC, la Vía Campesina y muchas ción sobre el Mocase […] Los mentan estrategias de distribución y
otras, presentan los contenidos en medios lo que hacen es acom- diseminación de la información como
varios idiomas, documentos, publi- pañar o fortalecer esos espa- la impresión de los boletinos electró-
caciones, boletines electrónicos, fo- cios. El Mocase no tiene un nicos y su distribución en papel y toda
tos y otras imágenes. periódico, pero seguro hay la producción gráfica producida por
muchos periodistas alternati- los colectivos o grupos de apoyo a los
Si bien es cierto que el desarrollo vos o medios que hablan del movimientos sociales, además de las
de las tecnologías de la información y Mocase. (N.G., Movimiento reuniones, asambleas, radios, etc., don-
la comunicación ha producido una Campesino de Santiago del de circula la información.
caída en los costos tanto del equi- Estero, 2006).
pamiento informático como de Es evidente que no todos
las conexiones a Internet, el los que forman parte de los
tema de la llamada brecha digital movimientos y organizaciones
no se agota allí. Uno de los obs- sociales, menos aún los de
táculos con los que muchos mo- base popular como el movi-
vimientos sociales se encuentran miento campesino, tienen po-
a la hora de explotar las poten- sibilidades de acceso a la Red,
cialidades de las TIC, y en espe- lo importante es que el movi-
cial de Internet, es la falta de miento como tal implementa
conocimiento en el manejo de estrategias de visibilidad en
las herramientas informáticas y Internet y de apropiación co-
las posibilidades de contar con lectiva de sus beneficios.
equipamiento y conexión8 . En
este sentido, la organización en
red propia de los movimientos Relevancia de la
sociales potenciada por el uso comunicación
de la Red facilita la cooperación
entre movimientos sociales con La red de comunicación
distintas trayectorias y niveles de electrónica sustenta las articu-
entrenamiento en el uso de TIC. laciones de lucha global, de
manera que ésta no sólo se con-
Un portal como la Comu- centra en el enfrentamiento
nidad Web de Movimientos real sino que también se ubica
Sociales forma parte de varios en un plano simbólico. Como
Pedro José Figueroa. “Caycedo y Flórez”. c. 1825, óleo/tela.
ejemplos en esta vía: brinda un Museo Nacional. Fotografía F. Urbina, 1979. los movimientos se ven obli-
espacio a organizaciones que no gados a superar la frontera
pueden diseñar y sostener su propia Otro ejemplo de cooperación tec- mediática, la visibilidad del conflicto
página, al tiempo que nuclea y pro- nológica es el que brindan las organi- es tan importante como su enfrenta-
mueve las actividades más importan- zaciones que promueven el software miento. El acceso a instrumentos de
tes que organizan; cuenta además con libre; por ejemplo, el proyecto de comunicación social globalizados cam-
su propia agencia de noticias: la Minga Software Livre Mulheres de Brasil pone bió las estrategias políticas e Internet
Informativa de Movimientos Sociales. el acento en las dificultades que en- se constituyó en un centro de opera-
frentan las mujeres para acceder a ciones. La mundialización de las lu-
La experiencia es a través de Internet, de manera que opera como chas permitió el acceso a amplios
los encuentros con las demás grupo de apoyo en cuestiones tecno- públicos, además de la creación de
organizaciones, página web lógicas para varias organizaciones del servicios alternativos de noticias, ca-
no porque no hay, pero si movimiento de este grupo pobla- denas de correos electrónicos y sitios
entrás en la Vía Campesina cional, entre ellas la Marcha Mundial interactivos de información. La popu-
se van a enterar de informa- de Mujeres. Asimismo, se imple- larización de la Red provocó un cam-
LAGO MARTÍNEZ, S.: INTERNET Y CULTURA DIGITAL: LA INTERVENCIÓN POLÍTICA Y MILITANTE N ÓMADAS 107
Unidos en el año 1999; también es podría sostener. La diseminación de los de contrainformación en la Red;
un término utilizado para denotar un medios de representación por medio nodos locales de movimientos inter-
tipo de acción política. “Son aconte- de la Red es uno de los grandes cam- nacionales.
cimientos totalmente autónomos y bios que ha transformado las posibi-
multidimensionales. Estos tienen su lidades del activismo político. El incremento de las luchas so-
parte intelectual, su parte cultural, su ciales encuentra su punto más álgido
parte antagonista y su parte comu- Yo creo que básicamente en el estallido social de diciembre de
nicacional. Posiblemente estas fueron Internet es el lugar donde nos 2001, bajo el lema “que se vayan to-
las cuatro dimensiones de aquellos alimentamos, las fotos noso- dos”. La sociedad se expresa por me-
acontecimientos autoproducidos, tros las transmitimos por dio de formas inéditas y tradicionales
una forma de acción directa a medio Internet, trabajamos en un de protesta, desde el “cacerolazo”
camino entre lo violento y lo carna- 70% en digital o casi un 80 o hasta la intervención violenta del es-
valesco” (Holmes, 2005: 228). un 90%, nos organizamos no- pacio público con ataques a los sím-
sotros por Internet, nos reuni- bolos asociados al capitalismo global.
Se adoptan consignas, logos y mos cada tanto una vez por Fotos y filmaciones, tomadas por
colores, que refieren a las caracterís- semana, a veces dos a veces activistas de medios alternativos, cir-
ticas globales y universales de su lu- cada más tiempo pero Internet culan en el ciberespacio y desenmas-
cha: “Estamos en todas partes. ¡Que es el lugar que nos mantiene caran a los medios tradicionales.
nuestra resistencia sea tan global conectados estemos donde es-
como el capital!, Justicia global. Otro temos (S., Cooperativa de Fo- Avellaneda el 26 de junio de
mundo es posible”. Utilizan estrate- tógrafos- SUB, 2007). 2002, la fotografía si ahí
gias de la propaganda y la publicidad: irrumpe en la realidad políti-
ca tanto que le corta la carrera
Intervenir el espacio público su- Prácticas antagonistas al presidente Duhalde por es-
pone alterar una lógica de co- culturales, sociales y tar muy implicado y compro-
municación, por eso la mayoría políticas en Buenos metido con los dos asesinatos
de las cosas que hicimos o que Aires de Kosteki y Santillán. El he-
hacemos un poco usan el len- cho de que las imágenes ha-
guaje cotidiano de la publicidad, En Argentina, la década del no- yan aparecido y con la fuerza
por ejemplo, porque lo subvier- venta se caracteriza por un enorme que aparecieron en ese mo-
te [...] un afiche que puede ser aumento de la conflictividad social y mento marcó para mi hito de
una pared escrita que puede ser política. La virulencia de las conse- un para qué podría servir la
una acción o que puede ser un cuencias de la política neoliberal de fotografía, aunque en ese mo-
grupo de gente caminando de los años ochenta y la búsqueda de mento los medios como Clarín
determinada manera (M., Mu- justicia a los crímenes de la última que tuvo la foto y la escondió
jeres Públicas, 2007). dictadura militar (1976-1983), pro- y después la salió a mostrar al
piciaron el surgimiento de movimien- otro día en una maniobra en-
Brian Holmes (2005: 225-227) tos sociales de gran envergadura, cubierta para intentar tapar lo
señala que la dimensión estética y como el movimiento de desocupados que no se podía tapar porque
comunicativa de la acción política (piquetero) y el movimiento de dere- habían aparecido imágenes de
contemporánea es absolutamente cen- chos humanos. Son varias las vertien- fotógrafos que no trabajaban
tral y está totalmente entrelazada con tes de los grupos de referencia: grupos en el medio y que habían
la cuestión de la representación. Es- de artistas que despliegan su acción irrumpido en la realidad, se
tos medios son complementarios a en torno a la gráfica, la representa- estaba acostumbrado a que las
la acción directa y con Internet se ex- ción teatral y otras acciones de fuerte fotos aparezcan en los medios
tienden creando una representación a es- impacto visual y estético; docu- a partir de los trabajadores de
cala y una multiplicidad de significados mentalistas y video activistas; fotógra- prensa de los medios (S., Coo-
de tal dimensión que una experiencia de fos que producen reportajes, ensayos, perativa de Fotógrafos SUB,
acción directa estrictamente corpórea no noticias y fotos de archivo; agencias 2007).
LAGO MARTÍNEZ, S.: INTERNET Y CULTURA DIGITAL: LA INTERVENCIÓN POLÍTICA Y MILITANTE N ÓMADAS 109
[...] Participamos también de dia- no sólo de las TIC (especialmente de como productores de subjetividades
rios, nos manejamos con la cul- Internet), sino de los lenguajes, sím- contemporáneas. Esta es la caracte-
tura copyleft también a la gente bolos, discursos y modelos organi- rística central de la nueva cultura po-
que tiene sus publicaciones y zativos que van asociados a ellas y el lítica y la paradoja de Internet en
que estamos más o menos en intercambio translocal, caracterizan tanto espacio de circulación no-mer-
la misma movida, damos nues- los procesos de movilización y resis- cantil de signos e imágenes.
tras fotos para que las bajen sin tencia de los últimos años. Internet
problemas, las puedan utilizar brinda otro campo desde donde dar En América Latina, las formas
para sus publicaciones, nos batalla y proponer un espacio con- emergentes de práctica política, en un
manejamos por diferentes ám- tra-hegemónico, la información y la escenario de movimiento global, tu-
bitos con nuestros “standcito”, fluidez de la comunicación pasan a vieron enorme resonancia, no sólo
nuestros libros revistas y las ser un requisito indispensable para por la manera en que se difundieron
cosas que vamos juntando (G. articular la mayor parte de sus accio- estas políticas en todo el mundo, sino
SUB, 2007). nes y para la distribución de la inno- también porque han influido en
vación cultural en esta materia. Se muchas acciones y luchas. EL FSM
Su práctica cultural y social ha construyen acciones colectivas en fun- se inició en Latinoamérica, y los
modificado la cultura política del ción de problemáticas locales articu- movimientos sociales de la región
activismo local, sin desconocer que ladas con las globales, o al revés, y adquirieron visibilidad y apoyo inter-
subsiste una contradicción evidente los movimientos se valen de las redes nacional, siendo capaces de desarro-
entre los movimientos que luchan por para nivelar las relaciones de poder llar una fuerza antagónica a nivel local
un sentido de la representatividad que se dan entre ambos espacios. en articulación con otras organizacio-
política clásica de visibilidad, de in- nes, generando de tal forma un mo-
clusión, con una concepción moder- Aún con distintas formas de in- vimiento de movimientos sociales.
na de los derechos sociales, una tervención y escalas globales o loca-
comprensión delegativa en última ins- les, los colectivos y movimientos
tancia de la acción política (Holmes, sociales estudiados comparten aspec-
2005) y los colectivos objeto de nues- tos esenciales: la actividad se centra Citas
tro estudio, que se articulan y actúan en la comunicación y en la imagen;
en una nueva concepción cultural y se reapropian del espacio simbólico 1 Scott Lash (2005: 59-61) señala que
social distinta de las formas de identi- para intervenir en el imaginario do- se produce la transición de una socie-
dad industrial nacional a una cultura
dad política clásicas, como se ha de- minante y otorgar nuevos sentidos, informacional global y se pregunta
mostrado hasta aquí. Esta producción significaciones e imágenes desde prác- cuáles son las consecuencias para la
cultural con fines contra-hegemónicos, ticas comunicacionales; vinculan sus política en una era cuyos principios
constituye un núcleo generador de formas de intervención y de acción a fundamentales comienzan a ser reem-
plazados por tres nuevas lógicas: el
identidades grupales, que reemplazan la idea de contra-información (cultu- principio de lo nacional es desplazado
las identidades exhibidas por otros ral y política); la organización inter- por el principio de lo global; la lógica
movimientos a partir de su propia na está basada en el trabajo colectivo de la información desplaza la lógica
industrial; la lógica de lo cultural des-
condición; los movimientos de des- y en producciones de libre circula- plaza a la lógica de lo social.
ocupados son un ejemplo, así como ción; se apropian de Internet y sus
2 Manuel Castells (1997: 47, nota 33) es-
los movimientos sindicales, de larga herramientas y se articulan en red tablece una distinción analítica entre las
trayectoria en Argentina y con un im- construyendo acciones y proyectos nociones de sociedad de la información y
portante protagonismo en el escena- colectivos a nivel local, latinoameri- sociedad informacional: en primer térmi-
rio político actual, son otro. cano y mundial, donde lo local es el no destaca el papel de la información en
la sociedad, reconociendo que ha sido
lugar de anclaje cultural y territorial. fundamental en todas las sociedades; el
El conflicto no sólo se produce en la término informacional “indica el atribu-
A modo de síntesis esfera de lo político y social sino tam- to de una forma específica de organiza-
ción social en la que la generación, el
bién en la producción cultural, en la procesamiento y la transmisión de la in-
La incorporación del lenguaje producción de imágenes y la circula- formación se convierten en las fuentes
audiovisual, la apropiación creativa ción de signos, entendidos estos fundamentales de la productividad [...]”.
LAGO MARTÍNEZ, S.: INTERNET Y CULTURA DIGITAL: LA INTERVENCIÓN POLÍTICA Y MILITANTE N ÓMADAS 111
La diáspora mexicana
online: una lectura
en torno al capital social* nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 112-120
As diásporas em linha foram sido quase exclusivamente abordadas desde aproximações culturalistas, fato que escureceu a
necessidade de explicar sua existência como produto e determinante de estritos modelos da ação coletiva. Assim, o presente trabalho
propõe aproximar a seu estudo a aproximação do capital social, tendência teórica a ver o papel dos princípios conetivos e associativos
das redes sociais na realização dos fines dos indivíduos e seus grupos.
Palavras-chaves: diasporidade online, capital social, redes, Internet, ação coletiva.
Online diasporas have been almost exclusively approached from culturalist visions, fact that indeed has darkened the necessity
to explain its existence as product and determinant of strict models of collective action. Thus, the present work proposes to approximate
its study to the social capital approach, theoretical tendency to see the paper of the conective and associative principles of social
networks in the attainment of individual and colective aims.
Key words: online diaspory, social capital, networks, Internet, colective action.
Dibujo EMBERA: Astrid Ulloa
GONZÁLEZ REYES, R.: LA DIÁSPORA MEXICANA ONLINE: UNA LECTURA EN TORNO AL CAPITAL SOCIAL N ÓMADAS 113
posibles de alcanzar en su ausencia niveles de compromiso y responsabi- tórico dio lugar, como consecuen-
(Coleman, 1994: 302). lidad como factores de cohesión en cia, a las “comunidades a larga dis-
la agregación virtual (Hine, 2004: 31; tancia” (Wellman, 2001: 5), es
Con este trasfondo y tal como lo Lin, 2003: 212), las intuiciones ha- decir, a nuevas formas de asociación
percibiera Coleman (1994: 302), pri- yan recaído hasta ahora en el inesta- que se sustentan más en la existen-
mer re-fundador del enfoque del ca- ble concepto comunidad y no en el de cia de prácticas compartidas entre
pital social, éste se puede entender capital social. Con todo, existen pre- sujetos que en sus condiciones físi-
también como la posibilidad de los cisos y útiles cruces teóricos entre cas y localizadas de convivencia
sujetos de acceder a beneficios, en tér- ambos constructos, tal como el que (Hine, 2004: 31).
minos de recursos sociales diversos y ha operado Barry Wellman.
posibilitados por la acción colectiva, Justamente la Red de redes, a tra-
que sólo son asequibles por media- Pionero en el estudio de redes vés de sus posibilidades técnicas, po-
ción de sus redes sociales. sociales de base telemática, Wellman tenciadas por cada vez más y mejores
ha explicado de distintas formas dispositivos de intercambio de in-
Desde aquí se asume formación y la aparición
que, si no todos, al me- de cada vez más nodos, se
nos una determinada can- ha impuesto como el eje
tidad de actores dentro de esta emergente forma
de una red intuyen que de socialidad mediada
los beneficios producto (Rheingold, 1994: 7;
de esa cooperación vo- Delanty, 2006: 173), ob-
luntaria o involuntaria se- viando a gritos lo ya in-
rán superiores a los que soslayable: estamos en
se pueden obtener por red, interconectados con
medio de actos aislados un número cada vez ma-
e individuales. yor de articulaciones que
crece a una frecuencia ace-
En este sentido, el es- lerada (Da Costa, 2004).
pacio público de la Web,
desde su estructura re- Retomando todo lo
ticular, permite una serie anterior, se debe explicitar
de intercambios y acciones Victorino García, “Luisa Manuela del Sacramento”, c. 1809, óleo/tela,
que un principio axiomá-
colectivas que anterior- colección Banco de la República. tico del capital social es
mente estaban casi limita- aquel que dicta que todo
das a las interacciones presenciales, en que una de las consecuencias de la fenómeno asociativo, tanto en la vir-
tiempo real y cara a cara, perfilándose Revolución Industrial fue traer la tualidad como en la vida real (IRl)
así como un fenómeno particularmen- percepción de que el hecho comuni- (Rheingold, 1994: 16), tiene siempre
te interesante para los distintos ámbi- tario había desaparecido como un componente que determina eco-
tos teóricos y empíricos que tienen elemento de cohesión en las socie- nómicamente la acción con base en
como centro la interacción social. dades contemporáneas (Wellman, los intercambios. Éstos, si bien no
2001), cuando este hecho, hoy cla- tienen que encajar forzosamente en
ramente falso, únicamente obviaba las posturas clásicas del actor racio-
“Comunidades a larga que las formas de convivencia, de nal (en la que el sujeto siempre bus-
distancia”: Red, redes y mantener redes sociales activas y pro- ca acceder con sus posibilidades y
capital social ductivas, sólo se había transforma- recursos al mejor resultado posible),
do al utilizar los recientes medios al menos sí buscan acceder a recur-
Es interesante que si uno de los de comunicación como nueva base sos que no obran en su poder a tra-
argumentos fuertes en el debate so- de vinculación entre sujetos amplia- vés de la inserción en las redes de
bre Internet ha girado en torno a los mente dispersos. Este episodio his- intercambio de terceros.
GONZÁLEZ REYES, R.: LA DIÁSPORA MEXICANA ONLINE: UNA LECTURA EN TORNO AL CAPITAL SOCIAL N ÓMADAS 115
6. Los medios técnicos, tales como lazos cercanos entre sujetos (Put- apeguen a sus intereses, cerrando así
las tecnologías de la comunica- nam, 2000: 231). la densidad de las redes (closure) e im-
ción y sus plataformas, sólo son pidiendo el desarrollo de actividades
posibilitadoras y/o poten- Por otro lado, y atendiendo a la cívicamente comprometidas. Esta afir-
ciadoras de todas las anteriores imparcialidad, es justo exponer que mación, obviamente, tiene más que
disposiciones sociales (Wellman tampoco todas las visiones sobre re- ver con prejuicios intelectuales de
y Quan-Haase, 2004). des y capital social han visto con bue- nuestro autor que con hechos empíri-
nos ojos la plataforma Internet; caso cos, puesto que existe una pléyade de
7. La Web, desde su estructura sorprendente de esta postura ha sido estudios serios que han demostrado,
de red y a partir de con base en su propia teoría,
sus posibilidades de re- todo lo contrario (Halpern,
estructuración espa- 2005: 307).
cio-temporales (Hine,
2004: 15), potencia y Por otro lado, muchas
facilita las propiedades han sido las preguntas acer-
reticulares de otras es- ca de la duración y fuerza de
tructuras de organiza- los vínculos construidos des-
ción social que la de el ciberespacio y en él,
utilizan (Lin, 2001). por lo cual es importante re-
visar las insoslayables enun-
8. Los usos sociales que ciaciones formuladas hace
privilegian esta propie- más de treinta años por
dad, potencian tam- Granovetter, tesis que se han
bién la actuación y los revelado como centrales en
beneficios de las for- la teorización social contem-
mas de acción social poránea del espacio Web.
reticular, tales como el
compromiso grupal y Si bien este autor no
la cooperación (Lin, habló propiamente de ca-
2001; Wellman y pital social (Granovetter,
Quan-Haase, 2004). 1973) ni en su tiempo pudo
prever la existencia de la
Tomando en cuenta Red, su proposición central
este contexto y las últimas es que las relaciones sociales
premisas que tienen una más informales (redes de co-
orientación mediática, tam- nocidos, weak ties) suelen
bién es necesario aclarar comportar una importante
que otros medios, como la Pintura mural, “La Cacica”, s. XVII, iglesia de Sutatausa, Cundinamarca. fuente de recursos sociales,
televisión, han sido vistos Archivo fotográfico: Revista Desde el Jardín de Freud, 2004. incluso mayores que aque-
como potentes inhibidores llos provistos por las relacio-
de capital social positivo, enten- el mismo Putnam (2000), quien ha nes formales, fuertes y estrechas (strong
diendo, por ejemplo, que los suje- afirmado que, lejos de ser una forma ties). De la proposición de Grano-
tos que ven más televisión suelen que abra la base constructiva del capi- vetter se deduce que en tanto que las
evitar “información útil” en el pro- tal social, la acota. El argumento de relaciones débiles son una fuente im-
ceso de comprometerse cívicamen- Putnam parte del razonamiento de portante de capital social, es imposi-
te, al tiempo que el consumo que las personas puntualmente inte- ble que algún tipo de red exista sin
televisivo, solitario y unidireccional, resadas en algo tienden a relacionarse producir al menos una determinada
impide la colaboración en tareas no con “cualquier otro”, sino con forma de este capital. En este senti-
ciudadanas y el fortalecimiento de aquellos que más estrechamente se do, Internet, a través de sus distintos
GONZÁLEZ REYES, R.: LA DIÁSPORA MEXICANA ONLINE: UNA LECTURA EN TORNO AL CAPITAL SOCIAL N ÓMADAS 117
Los sitios WEB Estos sitios, en términos genera- catalizada la experiencia migratoria,
de la diáspora les, pueden definirse como sitios ofrezcan una orientación comparti-
mexicoamericana virtuales de orientación no institu- da de vida y el acceso a beneficios
cional, ideológica ni comercial que afectivos, tales como la posibilidad
A diferencia de las diásporas tienen como interés principal servir de mitigar la nostalgia a través del
procedentes de otros circuitos de vías de intercambio informal y al- sistemático contacto con familiares
migratorios, la mexicoamericana, de- ternativo de distintos tipos de infor- o conocidos, o bien, satisfacer el de-
bido a su intensa migración circular mación entre sujetos impactados por seo, por medio del chisme y el co-
y la consecuente presencia de siem- el fenómeno migratorio con un ori- tilleo, de sentirse incluidos en el
pre nuevas “primeras generaciones”, gen regional compartido. aquí y ahora de quienes han queda-
es concebida ante todo como parte do lejos.
de una comunidad transnacional, es de- En su inmensa mayoría, estos
cir, donde las dinámicas sociales de espacios virtuales están relaciona- Por lo demás, la exploración em-
los migrantes transcurren simultánea- dos con municipios o poblaciones pírica preliminar permite afirmar
mente en el país de origen y en el de pequeñas de las entidades histó- que gran parte del capital social se-
destino. Esto quiere decir, en térmi- ricamente consideradas como expul- cundario que se promueve y movili-
nos prácticos, que los sujetos que soras, tales como Oaxaca, Jalisco, za en estos sitios está en función de
forman parte de la diáspora pueden Michoacán y Zacatecas, aunque prác- atender al menos cinco necesidades,
estar establecidos o en continuo trán- ticamente existen sitios vinculados a saber:
sito a ambos lados de la frontera a todos los estados de la República.
mexicoamericana, lo cual implica, En este punto debe indicarse que son 1. Renovar contacto entre fami-
respecto de otros grupos dias- inexistentes los sitios relativos a po- liares o amigos de la juventud
póricos, un importante cambio de blaciones grandes, tales como las ca- o la infancia con distintos fi-
pitales o ciudades principales, y esto nes de socialización.
usos socializadores del espacio pú-
se debe a que las redes de socializa-
blico de la Red.
ción de los sujetos procedentes de 2. Generar o movilizar recursos
este tipo de poblaciones son más di- económicos en la localidad de
En este sentido, mientras otras
versas y, a la vez, tienden a funcionar origen.
diásporas online agrupan sujetos que
en torno a mecanismos de redes per-
tienen como común denominador sonales uno a uno entre otros mode- 3. Promover políticas públicas a
una misma identidad nacional, en el los similares (Wellman, 2001). ambos lados de la frontera.
caso mexicoamericano los sitios ge-
néricos de migrantes son inexistentes, En términos de capital social, es 4. Denostar a un personaje pú-
aunque las páginas llamadas por el necesario observar, también a diferen- blico o conocido por la comu-
autor de este trabajo como de “oriun- cia de otras diásporas online y con base nidad, ya sea de un lado o a
dos”, que agrupan a sus miembros y en otras geografías y lógicas migra- ambos de la frontera.
participantes en torno a la población torias, que estos sitios son construidos
o pueblo de origen, se cuentan por no por inmigrantes recién llegados y Es necesario decir que la presen-
decenas en la gran Red (González, desconectados de sus redes, sino por cia de estos sitios, tal como se ha lle-
2007). sujetos bien establecidos, ya en terri- gado a plantear en más de una
torio norteamericano o al otro lado ocasión, no sustituye a otro tipo de
Esto sucede pues los migrantes de la frontera, en busca no de infor- comunidades o redes sociales (grupos
mexicanos, en medio de un proceso mación de primera mano sobre el pro- de inserción, conveniencia, etcétera),
de inmigración globalizado, han en- ceso y el tránsito migratorio, sino en antes bien, en éstas últimas se poten-
tendido en términos de economía de busca de integrar una comunidad de sen- cian y se fortalecen los procesos de
redes el potencial asociativo que faci- tido (Berger y Luckmann, 1997). socialización e inserción en redes más
lita la “matria”, por oposición a aque- amplias, modificando importantes as-
lla más débil y desarticulada que Esta búsqueda incluye la expec- pectos de movilidad y cooperación
ofrece la “patria”. tativa de encontrar a otros que, tanto en los sujetos migrantes como
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4. Cibercultura,
estética y política
GONZÁLEZ REYES, R.: LA DIÁSPORA MEXICANA ONLINE: UNA LECTURA EN TORNO AL CAPITAL SOCIAL N ÓMADAS 121
Estética de la virtualidad
y deconstrucción
del museo como
proyecto ilustrado nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 122-127
Se intenta aquí superar la tradicional antinomia entre arte y tecnología. En cambio, se propone una comprensión del arte
posmoderno a partir de la inscripción del artista en el seno de una cultura de la información. Es así como asistimos a un cambio de
paradigma en el estatuto del arte, a una revolución en la escena artística y de nuestros regímenes de visibilidad, de allí la necesidad
de explorar el desarrollo de las estéticas de la virtualidad que nos instalan en nuevas lógicas de producción de verdad, emancipadas
del museo como instancia última de legitimación artística.
Palabras clave: museo, régimen de visibilidad, verdad del arte, pliegue.
Intenta-se aqui superar o tradicional contraste entre arte e tecnologia. Entretanto, propõe-se uma compreensão da arte pós-
moderna a partir da inscrição do artista em base à cultura da informação. É assim como assistimos a uma troca de paradigma no
estatuto da arte, a uma revolução na cena artística e de nossos regimes de visibilidade, daí a necessidade de explorar o desenvolvimento
das estéticas da virtualidade que nos traz novas lógicas de produção da verdade, emancipadas do museo como instância última de
legitimação artística.
Palavras-chaves: museo, regime de visibilidade, verdade da arte, pliegue.
We try to surpass the traditional antinomy between art and technology. We propose an understanding of the postmodern art from
the inscription of the artist in the core of a culture of information. We assist to a change of paradigm in the status of the art; to a
revolution in the artistic scenario, and in our visibility regimes. Hence the necessity to explore the development of the aesthetics of
virtuality that puts us in new logics of the production of truth, which are emancipated from the museum as the last instance of
artistic legitimating.
Key words: museum, visibility regime, truth of the art, fold.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
VÁSQUEZ ROCCA, A.: ESTÉTICA DE LA VIRTUALIDAD Y DECONSTRUCCIÓN DEL MUSEO COMO PROYECTO ILUSTRADO N ÓMADAS 123
ciones tecnológico-comunicativas, ni propiciar nodos capaces de introducir La consigna adorniana de museo
a los modos de producción artística en nuestra experiencia interconectada, como “mausoleo” da cuenta de este
y cultural derivados de dichas trans- reflexividad, interacción y diálogos distanciamiento de las vanguardias, así
formaciones, al modificarse las for- mínimos en el gueto de nuestra ciu- como toda la tradición del museo sin
mas de representar simbólicamente, dadanía internaútica. paredes o del arte público –sacado a
de construir la verdad y la memoria, la calle– que explicita esta desconfian-
notas identitarias que le permiten al No estamos, por tanto, ante la za creciente en el arte museográfico,
ser humano su autocomprensión y idea de un todo simultáneo y su re- concentrado cada vez más en la lógica
–con ello– su sentido de pertenencia presentación correspondiente. La del espectáculo y la industria cultural
e inclusión en las comunidades con idea de redes refiere a múltiples tra- y menos en su potencial de produc-
las que se identifica y en las que se yectos individuales –que se entre- ción cognitiva, de verdad.
reconoce (Marchán, 2006). cruzan, a menudo chocan, y otras
veces se interrelacionan– más que a Aquí no podemos dejar de apun-
En las sociedades informatizadas la pertenencia a un conjunto homo- tar lo paradojal que resulta el hecho
y globalizadas, el museo ha sido des- géneo y estable. Aquí se subraya so- de que si bien las vanguardias históri-
plazado de su papel hegemónico como bre todo el carácter constructivista cas anatematizaban el museo como
administrador del régimen de visibili- que asume la navegación por la Red. panteón del arte, ellas sólo se vieron
dad de una cultura, de dispositivo de consagradas cuando fueron acogidas
verdad, para dar paso a nuevas prácti- Esto es determinante para todo en sus salas, únicas garantes de la rele-
cas artísticas de producción simbóli- el discurso posmoderno, abierto a los vancia de la obra y, en consecuencia,
ca de imágenes y relatos –asociadas con puntos de contraste, fractura y sos- sacralizadoras del arte: exactamente la
la digitalización y la virtualidad–, es- pecha sobre todo texto y –por qué función tan denostada por los auto-
trategias de reconocimiento siempre no señalarlo– sobre el autor que lo res de las obras que colgaban de sus
provisionales propias de las identida- ha articulado. Es precisamente aquí muros. Esta observación, pese a todo,
des en fuga y del tránsito constante donde el descentramiento aparece no contradice nuestra tesis central acer-
del animal que se desplaza en asenta- como la estrategia más efectiva para ca del papel sacralizador del museo,
mientos nómadas. Este activismo a la deconstruir la lógica del discurso úni- más bien la confirma.
vez político y medial que propician los co, la tiranía del principio de no con-
dispositivos digitales de interacción tradicción y la voluntad de sistema a Ahora bien, los cimientos del
social, genera modos de comunicación él adherida. museo han sido socavados desde va-
directa entre los ciudadanos, no me- rios frentes: éste que hemos venido
diados por el interés de las industrias analizando, el desmantelamiento del
culturales o los aparatos del Estado. 3. Valor de verdad concepto de museo operado desde la
del arte y la crítica cultural, ha removido parte
La introducción en el imaginario deconstrucción del importante de las bases del panteón,
colectivo del ciberespacio, abre nue- proyecto de museo pero los procesos de banalización de
vos horizontes políticos y nuevas re- ilustrado la cultura han hecho también su par-
laciones de poder. Espacios de te; la deriva del museo al territorio
redefinición constante de las prácti- Sin duda, el cuestionamiento del de la industria cultural y el entreteni-
cas discursivas y ensayo de nuevas museo como el lugar del valor de ver- miento ha propiciado esa particular
subjetividades. dad del arte está vinculado con toda dinámica de percepción propia del
la crítica que la vanguardia realiza del turismo cultural, aquella que Benja-
Así, en ausencia de patrias, los proceso de fetichización del que el min teorizará al dar cuenta de cómo
hombres fijan sus huellas y gestan ima- propio museo forma parte (Marchán, se introduce una inclinación a la per-
ginarios tribales –en los que recono- 2006). Para las vanguardias, esta insti- cepción distraída, no reflexiva.
cen filiaciones acotadas y pertenencias tución tiende cada vez menos a ser ese
locales a determinados nichos comu- lugar de realización de la verdad del En la era digital el museo ha sido
nitarios–. De modo que nuestros des- arte y a ser concebida más como el –también– objeto de una desterritoria-
plazamientos en la Red debieran lugar de su muerte, de su falsificación. lización; con la emergencia de las gale-
VÁSQUEZ ROCCA, A.: ESTÉTICA DE LA VIRTUALIDAD Y DECONSTRUCCIÓN DEL MUSEO COMO PROYECTO ILUSTRADO N ÓMADAS 125
masificación del gusto y del juicio es- ha logrado reingresar constantemen- derosa que cualquier obra individual.
tético, así como por la pérdida de sen- te el gesto iconoclasta al inventario De allí también el protagonismo que
tido histórico hasta convertir las obras calculado (razonado) de las desviacio- han adquirido los curadores, dado que
en objetos cosméticos y ornamentos nes permitidas, neutralizando así el se les asigna el papel de editar, esto es,
superficiales, averiados en su sentido. ademán irreverente y reeducando el de dar un sentido a un conjunto de
exabrupto (Vásquez, 2005). producciones que si no fuera por la
El proceso de globalización del unidad dada por el crítico como in-
consumo de arte, donde el gusto ha térprete super-dotado, aparecerían en
devenido “elitismo de masas”, ha dado 5. El arte se repliega su radical autonomía, dispersas, sin
lugar a una “cultura estetizada” en la en sí mismo ánimo de suscribir ninguna teoría del
que proliferan las multitudes de turis- arte, ni adscribirse a tendencia alguna
tas que invaden los museos y galerías, Como lo señala Sloterdijk en “El que le reste peso de realidad a su radi-
que consumen información artística arte se repliega en sí mismo”: “Los cal voluntad expresiva –necesariamen-
con una actitud de shopping propia de museos, bienales y galerías son las ins- te individual– insurrectas y resistentes
la sociedad del espectáculo y el impe- tituciones actuales para la producción a su subsunción en un catálogo
rio de la moda, devorando las homogeneizador. La produc-
producciones artísticas –sobre ción de exposiciones, con su
todo las audiovisuales que correspondiente tranza bur-
exigen un menor esfuerzo–. Pro- sátil, su núcleo mercantil y
lifera así una estética que reivin- la puesta en escena fashion,
dica el “mundo del arte”, es son parte de las estrategias
decir, “todo lo que tiene que socializadoras con que el
ver con el arte exceptuando el mercado del arte y la socie-
arte mismo” (Gardner, 1996): dad del espectáculo coque-
la empresa cultural que gira en tean con una clase intelectual
torno al artista, desde los críti- cada vez más farandulera, se-
cos conciliadores, los curadores ducida por los flashes y la
convertidos en súper-estrellas, ocasión socialite ampliada en
pasando por los compradores, las páginas sociales de algún
hasta los snobistas, la farándu- prestigioso matutino. Esta
la y los pseudo-intelectuales corte con sus flancos publi-
(Fajardo, 1999). citarios, sus sistemas de in-
fluencia y especulación se ha
De forma paralela a estas vuelto autónoma por enci-
Luis García Hevia, “Muerte del General Santander”, óleo/tela, 1841
elitistas prácticas mercantiles (detalle). Colección del Museo Nacional. Fotografía: ICC. ma del valor de las obras ex-
y al obsceno gusto decorati- puestas y no muestra en
vo e indigesto en auge, se produce de visibilidad estética, y la misma última instancia ningún otro poder
una tendencia a aligerar el arte de producción estética se halla irremisi- creativo que el suyo propio, el de la
su contenido crítico, de su actitud blemente colonizada museística y exposición misma. Como certera-
transgresora, innovadora y –por mo- galerísticamente. Allí donde hay una mente apunta Sloterdijk (2002), el
mentos– corrosiva. Se trata de una galería, hacia ella fluye el arte de gale- negocio del arte tiene como conflicto
particular tendencia a despolitizar el ría” (Sloterdijk, 2002). hacerse visible. El negocio del arte es
arte, restándole toda fuerza de rup- así un sistema de celos y exhibicionis-
tura e innovación. El arte contempo- De este modo, la producción ar- mo. En él, el deseo de las obras con-
ráneo ha dejado de ser cáustico como tística gira en torno a la elaboración siste en convertirse en objetos de
lo fueron las vanguardias de los años de exposiciones. El aparato moderno deseo. El mercado las hace sensuales,
veinte. No se debe ser ingenuo y sub- de mediación del arte se ha instalado el hambre de deseo las hace bellas, la
estimar la habilidad con la que el sis- como una máquina de mostrar que obligación de llamar la atención gene-
tema de convenciones institucionales desde hace ya largo tiempo es más po- ra lo interesante (Ibíd.).
VÁSQUEZ ROCCA, A.: ESTÉTICA DE LA VIRTUALIDAD Y DECONSTRUCCIÓN DEL MUSEO COMO PROYECTO ILUSTRADO N ÓMADAS 127
A estética política das
mídias locativas* nomadas@ucentral.edu.co • PÁGS.: 128-137
Lucia Santaella**
Las prácticas de acceso propiciadas por los dispositivos móviles conectados al Sistema de Posicionamiento Global (GPS) están
haciendo surgir un nuevo espacio social de combinaciones inextricables entre lo virtual (el ciberespacio) y los ambientes físicos en los
que se mueve nuestro cuerpo biológico. Este trabajo busca presentar las nuevas modalidades de comunicación, conexión e interacción
que están apareciendo bajo el nombre de “medios de comunicación locativos”. Éstos son procesos que están dando origen a una
estética políticamente orientada, cuyas principales características se discutirán en el artículo.
Palabras claves: medios de comunicación locativos, espacios sociales, estética política, dispositivos móviles.
As práticas de acesso propiciadas pelos dispositivos móveis conectados ao Sistema de Posicionamento Global (GPS) estão
fazendo emergir um novo espaço social de misturas inextricáveis entre o virtual (o ciberespaço) e os ambientes físicos em que nosso
corpo biológico circula. Este trabalho visa apresentar as novas modalidades de comunicação, conexão e interação que estão surgindo
sob o nome de “mídias locativas”. São processos que estão dando origem a uma estética politicamente orientada, cujas principais
características serão discutidas neste trabalho.
Palavras-chaves: mídias locativas, espaços sociais, estética política, dispositivos móveis.
Practices of access allowed by mobile devices connected to the Global Positioning System (GPS) are bringing the emergence of a
new social space that mixes seamlessly the virtual (cyberspace) with the physical environments in which our biological body circulates.
The aim of this paper is to present the new modalities of communication, connection, and interaction appearing under the name
of “locative media”. They are processes that originate a politically oriented aesthetics whose main characteristics will be discussed in
this paper.
Key words: locative media, social spaces, political aesthetics, mobile devices.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
El presente artículo intenta describir el “golpe de gracia” que sufre la figura tradicional del autor dadas las posibilidades estéticas
y creativas propias del ciberespacio y la cibercultura. Se revisan las anticipaciones que al respecto tuvieron algunos de los llamados
posestructuralistas (Kristeva y Bajtín); se analizan las propuestas y descubrimientos provisionales de los teóricos del hipertexto
(especialmente Landow y Bolter); se describen y debaten las propuestas renovadas de un arte participativo y colectivo (Lévy), y
finalmente se proponen algunas conclusiones y acciones concretas.
Palabras clave: posmodernidad, cibercultura, autor, narrativa digital.
Este artigo tenta descrever o “golpe de graça”, que sofre a figura do autor tradicional dada às possibilidades estéticas e criativas
abertas pelo ciberespaço e pela cibercultura. Nós analisamos as expectativas que sobre o assunto tiveram alguns dos chamados pós-
estruturalistas (Kristeva e Bajtin); analisamos as propostas e as conclusões provisórias sobre o hipertexto dos teóricos (especialmente
Landow e Bolter); descrevemos e discutimos as propostas para uma renovada e participativa arte coletiva (Levy) e, finalmente,
sugerimos algumas conclusões e ações concretas.
Palavras-chaves: posmodernidade, cibercultura, autor, narrativa digital.
This article attempts the description of the fate suffered by the traditional figure of the author in front of the creative possibilities
that the cyberspace and cyberculture have opened. We review the expectations about the matter of the so-called post structuralists
(Kristeva and Bajtin), discuss the proposals and provisional findings of hypertext theorists (especially Landow and Bolter); and
describe and discuss proposals for a renewed participatory and collective art (Levy); finally we suggest some conclusions and specific
actions
Key words: postmodernism, cyberculture, author, digital narrative.
Dibujo EMBERA : Astrid Ulloa
A diferencia de Bajtín, Cultura Tumaco, Nariño. Anciana [en piedra], de 31 cm de alto. 500
a.C. 300 d. C. Colección Museo del Oro. Banco de la República.
Con la denuncia que hace
quien confía en la re-constitu- Kristeva del carácter engañoso
ción constante del género, Kristeva cionada con el socavamiento de la del proyecto de novela moderna, se
plantea su disolución en varios espa- función del autor. Esa figura que re- inaugura una visión posmoderna del
cios posibles. En primer lugar, lo que quiere la novela para su expresión es destino del discurso literario. En efec-
ella llama “el retorno a la tradición quizá el factor de mayor contradic- to, las advertencias de Kristeva sobre
carnavalesca”, lo cual se traduciría no ción que encuentra Kristeva frente a las dificultades de la novela para des-
sólo en el fin mismo de la novela, sino las dinámicas del carnaval. Si la novela prenderse de las obligaciones del sen-
en la destrucción de su mayor descu- necesita de un “principio programa- tido y del orden, han tenido una
brimiento: el signo, es decir, consti- dor”, es decir, de una voz privilegia- reacción en el ámbito de la creación
tuiría la devastación de la idea, da que recoja lo externo y lo vuelque y la crítica literarias que si bien no
presuntuosa, de que la palabra escri- en una escritura, en un signo, el car- alcanza a superar del todo esas con-
ta es la mejor estrategia para “re-pre- naval deja de existir en la novela, por trariedades denunciadas, sí ha gene-
RODRÍGUEZ, J. A.: EL MUNDO VIRTUAL COMO DISPOSITIVO PARA LA CREACIÓN ARTÍSTICA N ÓMADAS 139
rado en cambio una estética que en del proceso creativo, es decir, de meta- buena parte los defectos del proyec-
algún momento empezamos a llamar ficción. En cuarto lugar, la obra to de la novela moderna, pero en rea-
posmoderna. posmoderna admite no sólo la lidad sólo lo hacen a medias, debido
intertextualidad (es decir, el recurso principalmente a que no abandonan
En esta estética se tratan de “co- a otros textos), sino incluso el plagio el soporte físico (el dispositivo diré
rregir” las pretensiones del proyecto y la citación irónica, en un intento ahora) de la expresión libresca. Es
narrativo moderno y por eso, en pri- por relativizar el proceso mismo de cierto que el libro ha dejado de ser
mer lugar, se empiezan a dar obras que significación, entendido éste como el fetiche de la escolástica, que el
cuestionan la verdad narrativa, esto algo clausurado con la sola presenta- autor se desvanece en la simulación
es, obras que se proponen explícita- ción de la obra al lector. Finalmente, de los ejercicios de edición o detrás
mente mostrar cómo, si toda verdad la obra posmoderna promueve abier- de las voces de los testigos, que se
es relativa y no absoluta, habrá que tamente la participación del lector, han denunciado y demostrado los
incluir la relativización de la “verdad la “doble productividad”, ya sea a tra- falsos alcances de la escritura y que
narrativa” misma. Un paso definiti- vés del juego o a través de la puesta la figura del lector se ha encumbra-
vo en la deconstrucción de la verdad en marcha de conciencias paralelas de do hasta hacerse imprescindible para
narrativa es cuestionar la autoridad interpretación. el ejercicio literario; pero en reali-
del autor de novelas. La figura del dad han quedado sin resolver las li-
autor empieza a ser asumida más Ahora, si bien la “novela pos- mitaciones que ofrece el libro como
como la de un “ensamblador” de di- moderna” ejercita una “corrección” objeto y soporte de la expresión.
versos fragmentos de la cultura y de los defectos del proyecto narrati- Sólo cuando aparece un nuevo so-
como un editor de collages o textos. vo moderno, en realidad la posmo- porte, una nueva tecnología de la
El escritor posmodemo es conscien- dernidad irrumpe configurando palabra y de la expresión, es cuando
te del sentido discursivo del mundo otras alternativas narrativas, enfoca- se puede hablar de una superación
y del carácter parcial e ideológico (es das sobre todo en la exploración de cabal de las limitaciones de la novela.
decir, ficticio) que le da cualquier hibridaciones y mezclas de géneros. Esto no quiere decir que la novela (y
discursivización. Una de las más interesantes formas especialmente la novela posmoderna)
de la narrativa posmoderna de este pierda funcionalidad, sino que, en
En suma, la escritura posmo- tipo es la llamada “literatura testi- tanto sustancia narrativa, se enfren-
derna juega a romper las fronteras monio”. En ella se presenta un ta ahora a novedosas posibilidades,
entre realidad y ficción, no sólo por- estatus híbrido entre documento y abiertas por el uso estético de las
que dinamiza radicalmente el poten- ficción que la aparta de la estrechez nuevas tecnologías de la información
cial mismo de esta última (todo es de los géneros tradicionales. La ela- y la comunicación y por el aprove-
ficción, la realidad es una ficción), boración literaria le corresponde a chamiento de nuevos soportes expre-
sino porque admite como premisa un escritor que domina las técnicas sivos como el hipertexto.
ontológica la textualidad del mundo culturales requeridas, pero el traba-
(la realidad considerada como texto, jo se hace en equipo con el “testi- Ya Landow, en su libro Hipertexto.
la intertextualidad como única refe- go” no letrado, quien de esa manera La convergencia de la teoría crítica con-
rencia posible). En segundo lugar, la adquiere voz y circulación cultural temporánea y la tecnología (1995), no-
escritura posmoderna descree de la más amplia. Puesto que el “testimo- taba la diferencia de tono que existe
“autoridad narrativa” de una única nio” resulta del trabajo conjunto de entre las denuncias de autores como
voz privilegiada que da cuenta de la miembros de culturas diferentes, Kristeva y el anuncio de las nuevas
verdad y de la coherencia del relato. ofrece la posibilidad real para un diá- posibilidades expresivas y comunica-
En tercer lugar, el escritor posmo- logo intercultural, como lo querría tivas que hacen los escritores que han
derno reclama como pertinente no el credo del carnaval. tenido contacto con los nuevos so-
tanto una homogeneidad de la obra portes. Mientras que la mayoría de
como su problematización, su fractu- Los casos de la novela posmo- los autores posestructuralistas, nos
ración, y esta problematización se derna, y específicamente de la novela dice Landow, son un modelo de
introduce en la ficción misma, gene- testimonio, se pueden considerar solemnidad, desilusión extrema y va-
ralmente en forma de autoconciencia como ejercicios que subsanan en lientes sacrificios de posiciones huma-
RODRÍGUEZ, J. A.: EL MUNDO VIRTUAL COMO DISPOSITIVO PARA LA CREACIÓN ARTÍSTICA N ÓMADAS 141
y posmodernas pertenecen al espacio manencia, propios del sistema de es- gicas de la estabilidad y de la autori-
de la ficción impresa, constituyen critura ligada al libro, y pareciera que dad que ofrecen los libros.
imágenes de algo irrealizable en ese esta situación facilitara el camino
medio, pero deseado como posibili- hacia una nueva pragmática, en rea- Ahora, ¿los autores dejan de exis-
dad; 9) podemos considerar muchas lidad la mayoría de los lectores ac- tir realmente? ¿No se necesitan nue-
de estas obras como ficciones inter- tuales no están preparados para vas figuras o nuevas funciones de la
activas que operan bajo las limitacio- sustituir sus libros por computado- autoría? ¿Qué del estilo, qué de la
nes impuestas por la imprenta; 10) res (Bolter, 1998). Más allá de las di- intención como sus signos? Siempre
la ficción hipertextual pidió presta- ficultades técnicas que retardan esa hemos identificado al autor con al
do y remedió el sentido de rebeldía y sustitución, lo realmente determi- menos dos características retóricas:
logra sin esfuerzo aquello que los es- el estilo y la intención, en la medida
critores experimentales del texto im- en que nos hemos acostumbrado a
preso sólo conseguían con grandes que es el autor quien controla los
dificultades; 11) en todos estos ejem- contenidos (intención) y la forma de
plos, la ficción impresa se ve forzada su texto (estilo). ¿El hipertexto aca-
a trabajar contra su medio: surge un ba con estas condiciones? Veamos
conflicto entre el volumen como esta cuestión apoyados en las re-
marco y el texto enmarcado, conflic- flexiones de Tatiana Sorokina.
to que el computador no tiene, pues
ofrece un marco que se afloja siem-
pre que el texto lo empuja; 12) como Excurso: ¿y del estilo y
efecto, los lectores de hipertexto ya de la intención qué?
no sólo pueden escribir en él (no sólo
sobre el texto), sino que incluso pue- En el artículo “La estilística desde
den alterar o completar episodios, un punto de vista hipertextual” (1999),
todo lo cual se traduce en una cesión Tatiana Sorokina nos recuerda que la
de responsabilidad que hace el autor. idea del estilo en el texto impreso im-
Esta cesión es tanto un desafío como plica que todos los elementos que lo
una afirmación de que esta forma elec- constituyen se encuentran en armonía
trónica de lectura-escritura es más y homogeneidad, y además apuntan a
auténtica que la participación propor- reforzar la característica de originalidad
cionada a los lectores por una novela y singularidad de los textos. De otro
tradicional. lado, Sorokina considera que la pro-
pia formalización del pensamiento está
Todas estas afirmaciones se dirigen predeterminada por el estilo, en la me-
a demostrar que sólo bajo un nuevo dida en que su expresión se prepara a
dispositivo técnico (ciberespacio), partir de una producción elaborada y
enunciativo (hipertexto) y cultural reglamentada, y por esto se afirma que
(cibercultura) se pueden realizar mu- Etnia Cuna, Chocó. Madera tallada, Soal mimí (de- si la forma de una expresión no con-
chas de las anticipaciones, deseos y talle) de 55 cm de alto. Archivo fotográfico del ICC. cuerda con el tema y con el entorno
figuras de la tradición “rebelde” (pos- extralingüístico, el cuerpo textual no
moderna) de la escritura. ¿Pero eso es nante es la resistencia a valorar los alcanza el equilibrio y, por lo tanto, se
lo que quieren lectores y autores? nuevos parámetros de la interacción le considera incongruente o mal he-
comunicativa. Todo indica que el lec- cho. Esta relación entre formalización
Si bien los sistemas de escritura tor no está dispuesto a apreciar to- del pensamiento y expresión textual
electrónicos promueven la flexibili- davía la flexibilidad, la interactividad conduce a Sorokina a afirmar que la
dad y el cambio como parámetros y la velocidad de distribución que creación de textos intencionales o ideo-
de la interacción comunicativa, en proporcionan los nuevos soportes y lógicos se vinculan necesariamente con
lugar de la monumentalidad y la per- se refugia en las necesidades psicoló- el procedimiento estilístico.
RODRÍGUEZ, J. A.: EL MUNDO VIRTUAL COMO DISPOSITIVO PARA LA CREACIÓN ARTÍSTICA N ÓMADAS 143
sarrolla ahora con el fin de hacerse lidad entendida como la fijación del interactiva, recíproca, comunitaria e
más “real”, funciona como mundo sentido (clausura semántica). Así es intercomunitaria que constituye el
yuxtapuesto que también desesta- como las obras se valoran en la me- horizonte del mundo virtual; un
biliza ontológicamente y produce el dida en que sus mensajes pueden “mundo” vivo, heterogéneo e intota-
mismo efecto que la introducción de circular por todas partes, indepen- lizador en el que cada ser humano
personajes de otras novelas o de per- dientemente de su proceso de pro- puede contribuir y participar. Surgen
sonajes históricos en la ficción: ducción: la obra escrita se hace así verdaderos colectivos inteligentes
irrespetar las fronteras ontológicas autoexplicativa y la condición de uni- que no someten ni limitan las inte-
versalidad, así entendida, se extien- ligencias individuales, sino que, por
Pero eso que puede verse como de a otras dimensiones de la cultura, el contrario, las exaltan, las hacen
un recurso desesperado (destruir la en la medida en que su base se hace fructificar y les abren nuevas poten-
ilusión representacional a como dé “textual”. cias. Este sujeto transpersonal no se
lugar, con el fin de demostrar que contenta con minar inteligencias in-
toda realidad no es más que el “efec- En la tercera fase, el concepto de dividuales, sino que hace crecer una
to” del lenguaje, que el mundo es totalidad (y también las estéticas de forma de inteligencia cualitativa-
siempre representación), puede apre- la totalidad) es relativizado. Sin em- mente diferente, que viene a añadir-
ciarse desde otra perspectiva: la de la bargo, la idea de universalidad no des- se a las inteligencias personales, una
cibercultura. aparece, sino que se comprende de especie de cerebro colectivo o de
otra manera: ya no depende del cie- hipercorteza.
Pierre Lévy, en su artículo “So- rre del sentido (de la clausura
bre la cibercultura” (1998), distingue semántica), de la posibilidad de
tres momentos de la evolución cul- completar un trayecto, sino de la po- El autor y la obra en la
tural así: sibilidad de conectar muchos: la in- cibercultura
terconexión generalizada.
• El de sociedades pequeñas y La filosofía posmoderna ha des-
cerradas, de cultura oral, que En la medida en que la interco- crito muy bien el estallido de la
vivían una totalidad sin uni- nexión y el dinamismo en tiempo real totalización, cuando descubre que ya
versalidad. de las memorias en línea hacen de nue- no hay un sólo sentido sino una mul-
vo compartir el mismo contexto titud de proposiciones que luchan
• El de las sociedades “civiliza- (como en la situación anterior a la por su legitimidad (y se hace imposi-
das”, imperiales, que utilizaban escritura), se disuelve la pragmática ble entonces, la consistencia, el
la escritura e hicieron surgir una de comunicación que se había vincu- metarrelato). Pero la posmodernidad
universalidad totalizadora. lado a lo universal y a la totalidad y confundió totalidad con universali-
se empieza a dar una comunicación dad. En palabras de Lévy, “la posmo-
• El de la cibercultura, que co- recíproca, interactiva, ininterrumpi- dernidad tiró el bebé de lo universal
rresponde a la mundialización da, unida a una comunidad activa dentro del agua sucia de la totalidad”
concreta de las sociedades, e (Lévy, 2007). Emerge un nuevo uni- (Lévy, 2007: 94). Si bien la totalidad
inventa una universalidad sin versal que, en cuanto más universal puede entenderse como el consenso
totalidad. (interconectado, extendido, interac- estabilizado del sentido (discurso, si-
tivo) es menos totalizador, pues cada tuación, conjunto de acontecimien-
Lo común de estos tres tipos de conexión, cada nuevo aporte añade tos, sistema, etc.), la universalidad
cultura es la idea de universalidad. heterogeneidad, nuevas fuentes de in- debe entenderse como la presencia
Mientras en el primero era posible formación, nuevas líneas de fuga y (virtual) de la humanidad en ella mis-
el sentido, éste (la totalidad del co- nos hace participar más intensamen- ma, y esa presencia virtual, en la
nocimiento) era apenas local, restrin- te. Ya no se hace necesario fijar, ni cibercultura, aparece desligada de la
gido a la tradición, cerrado. En las construir homogéneamente. Un nue- condición de identidad global en el
sociedades modernas, debido al des- vo universal que tiene como dis- sentido (mismidad) y se define más
cubrimiento de la escritura, se hace positivo el ciberespacio, entendido bien como posibilidad de comunión
posible una práctica de la universa- como práctica de comunicación en la diferencia.
RODRÍGUEZ, J. A.: EL MUNDO VIRTUAL COMO DISPOSITIVO PARA LA CREACIÓN ARTÍSTICA N ÓMADAS 145
gunda idea complementa la primera 2. Concretamente, nuestra expe- ción de la escritura y de la lectura
al sostener que esa “encarnación” de riencia particular con la narrativa (profundidad), ¿se puede pedir algo
las ideas posestructuralistas y posmo- digital nos ha conducido por el ca- más? Sí. Y es precisamente lo que jus-
dernas se ha producido gracias a la mino de una interactividad participa- tifica el nuevo proyecto (al que le
emergencia de un nuevo dispositivo tiva creciente: desde la creación de hemos dado el nombre de narrato-
cultural, cuya infraestructura es el Gabriella infinita2 , un hipermedia para pedia4 ): dar el paso hacia el paradig-
ciberespacio y cuyo programa es la “explorar” y para “leer”, hasta Golpe ma de la creación colectiva, máxima
cibercultura. La tercera consiste en la de gracia3 , que potencia la participa- expresión de la interactividad partici-
adherencia a la mirada, según la cual, ción del usuario, permitiéndole pativa, abandonar definitivamente el
la emergencia de la cibercultura no interactuar con distintos escenarios esquema de la creación de autor para
responde tanto a un simple deter- tanto narrativos como discursivos. disponer ahora los medios de la ex-
minismo tecnológico (producto de la Sin embargo, a partir de ahí hemos presión grupal.
consolidación de las llamadas
“nuevas tecnologías de la in- Siguiendo a David Casa-
formación y la comunica- cuberta (2003), la más signi-
ción”) como a una compleja ficativa e importante de las
convergencia de ideas, pro- revoluciones de la cultura
yectos sociales, utopías, inte- digital es la creación colectiva,
reses económicos y estrategias favorecida hoy como nunca
de poder que ha encontrado por las llamadas teconologías
en ciertas condiciones del de la cooperación (Rehing-
ambiente contemporáneo pold, 2002) o software social.
una salida viable aunque no Efectivamente, el centro de la
necesariamente homogénea. cultura ha dejado de ser el
Finalmente, con la cuarta autor, el artista, para pasar a
hago mía la advertencia de ser el espectador. Las obras
Michelle Serres en su bello e culturales de la cultura digital
iluminador Atlas, según la ya no se construyen en forma
cual, ninguna técnica tiene individual, sino de forma co-
posibilidades de extenderse si lectiva. Por tanto, el artista
no reactiva una aptitud, hu- deja de ser creador stricto
mana o cultural, ya existente sensu para convertirse en pro-
(Serres, 1995). Esto es: de ductor. El artista desarrolla
nada sirve el mundo virtual Cultura Tumaco. Silbato en cerámica de 13.5 cm de alto (detalle). 500 a. una herramienta que luego
si no lo entendemos y lo po- C. al s. I d. C. (r). Archivo fotográfico del ICC. será el público el que la use,
tenciamos como el medio desarrolle y difunda según sus
para hacer posibles muchos de los llegado a un punto de quiebre: o pro- intereses, que no tienen por qué co-
sueños entrevistos en nuestras visio- ducimos obras del modo en que lo incidir ni estar influenciados por la
nes posmodernas. O, de otra forma: hemos venido haciendo (es decir, voluntad original del artista. El tra-
es tarea de los actores sociales, y en reuniendo ad-hoc equipos especiali- bajo del artista es literalmente el de
especial de los activistas culturales, la zados al estilo de los equipos cinema- un médium: ofrecer una estructura,
consolidación de una cibercultura. tográficos), lo que resulta en obras una herramienta, un medio en el que
Implícitas unas veces, evidentes otras, de “autor” para ser usadas más o sea el espectador el que se exprese,
estas cuatro ideas constituyen el so- menos pasivamente, o nos lanzamos en el que sea el espectador el que cree.
porte de la exposición que sobre la a un cambio de paradigma: es cierto,
figura del autor y sus consecuencias con Golpe de gracia logramos una alta Narratopedia quiere ser eso: una
para lo que he llamado los nuevos interactividad, una muy buena arti- plataforma, un espacio multidimen-
órdenes de la creación artística, he culación multimedial, una bella sional de representaciones dinámicas
querido plantear en este artículo. multiformidad, así como la promo- e interactivas. Parafraseando a Piérre
RODRÍGUEZ, J. A.: EL MUNDO VIRTUAL COMO DISPOSITIVO PARA LA CREACIÓN ARTÍSTICA N ÓMADAS 147
GERMÁN LONDOÑO
L AS I LUSTRACIONES
La globalización comenzó en América
con la llegada de Cristobal Colón...
y hoy el capitalismo ha hecho metástasis.
Como trazo general puede afirmarse que el arte contemporáneo colombiano ha renunciado a
una rica y milenaria tradición artística, en la que el Hombre ocupaba toda su lúcida atención,
pasando de una cosmogonía –compleja y visionaria– a una accidentada y precaria sobrevivencia
actual, en la que los valores que sustentaron a la camada humana han naufragado en un prolonga-
do proceso de deshumanización, que hoy propone como futuro inmediato sustituir la cultura por
el mercado. El Arte, testigo de esta tragedia, ha mostrado la lenta descomposición hasta registrar la
destrucción de “la figura humana”, desfiguración en la que el Hombre ha visto desaparecer su
rostro. Este es el tema de las ilustraciones de este nuevo número de la revista, donde aparece la
primera representación que conocemos del rostro humano en el territorio colombiano (2.500 años
a. C.), hasta los inquietantes y violentos dibujos del gran artista Germán Londoño (2002).
Recurriendo a nuestros lamentablemente pocos museos colombianos (no tenemos museos del
grabado, la escultura, el dibujo, la fotografía, la caricatura, la ilustración, la máscara... ni tampoco
museos de artistas), que tienen en exhibición apenas un mínimo porcentaje de las piezas que componen
sus colecciones y que en uno que otro caso prohiben la reproducción de algunas de sus piezas más
“representativas” –patrimonio histórico colombiano y de la humanidad–, se han reunido aquí un
centenar de obras, muchas de ellas de un gran valor artístico, desde nuestras culturas precolombinas,
el dramático mestizaje europeo, hasta la expansión de un sistema económico que ha generado descom-
posición social, el eclipse de la naturaleza, destrucción cultural y daño mental en quien para el escritor
Franz Kafka no es más que un patético animal: el hombrecillo moderno.
El presente artículo genera algunos modos próximos para pensar la cibercultura en el horizonte de contemporaneidad, mostrando
algunas claves críticas y poéticas que se van desprendiendo fragmentariamente. La voz del texto es plural, se contorsiona en un juego
hipertextual entre el yo y el nosotros, indistintamente fusionados, buscando en el registro de lo común elementos indispensables para
la lectura de un acontecimiento emergente, como es hoy el de la cibercultura.
Palabras clave: pensamiento cibercultural, estética, cultura, política, tecnologías.
O presente artigo gera alguns modos próximos para pensar a cibercultura em horizonte de contemporaneidade, mostrando
algumas claves críticas e poéticas que vão se desprendendo fragmentariamente. A voz do texto é plural, se contorsiona num jogo
hipertextual entre o eu e o nós, indistintamente fusionados, procurando no registro do comum elementos indispensáveis para a leitura
de um acontecimento emergente, como o é hoje o da cibercultura.
Palavras-chaves: pensamento cibercultural, estética, cultura, tecnologia.
This article generates some close ways to think about cyberculture in a contemporary horizon, showing some critic and poetic keys
that are going to give off separately. The voice of the text is a plural one, writhed in a hypertextual game between the I and the We
indistinctly merged, searching for essential elements in the record of the common to lecture an emergent event, like cyberculture.
Key words: cybercultural thought, aesthetics, culture, politics, technology.
Dibujo EMBERA: Astrid Ulloa
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 149
el espacio de espesor ontológico que como ámbito de la experiencia viva. pero que en el momento de plan-
empieza a surgir. Podrían objetar el vuelco que nos im- tearse, tiene en su diversidad una
ponemos, que nos urge en aras de un paleta de colores que convocan al
Parece ser un poco veleidoso el pensamiento cibercultural, así como mismo tiempo múltiples dimensio-
nudo en cuestión, pero lo que em- también, extrañar algunos temas de nes de la subjetividad, que han de
pezamos a ver surgir es un mar incan- la agenda política de fin de siglo; ser, contemporáneamente hablando,
descente de voces, de imágenes y de pueden del mismo modo, anatema- transversales a todo intento teórico
textos en su diferencia más abismal tizar la torsión que estamos realizan- y político. Y existen otras intuicio-
con cualquier intento de cierre, de do, percibir un excesivo entusiasmo nes, de similar fuerza, que hacen que
clasificación y axiomática capitalista. filosófico, un derroche de optimis- seamos tan incisivos en estas cuer-
El ser del acontecimiento fragua, com- mo en la riqueza pletórica de la se- das vocales del pensamiento. La cues-
bate, a partir de un sonido tión toca el corazón de los
de fondo anónimo, tanta procesos de subjetivación,
desilusión aprendida, y sin merodea el interrogante por
mucha algarabía, pone en el cual se vienen creando
entredicho los modos en otros modos de ejercer la po-
que se fabrica masivamen- lítica: configuración del no-
te la infelicidad; también es sotros, pensamiento político,
capaz de tomar el atajo, no enriquecimiento de las expe-
pide permiso y se arroja a riencias humanas, gestación
un mundo en donde las in- de nuevos lenguajes que afir-
clinaciones de las subjetivi- man realidades en donde la
dades se comparten en diferencia es destino y condi-
tiempo real. Esto sí va re- ción de posibilidad; desper-
velando un porvenir, dado tamos los que somos hijos
que estamos conversando tardíos del siglo pasado, fren-
con el presente potencial y te a la pregunta intrigante
no con realidades objetivas por el cómo asumimos exis-
que la mayoría de las veces tencialmente nuestras vidas,
otorgan cierta opacidad a lo en relación, por una parte,
magmático, al espesor da- con los problemas contem-
dor de vida. poráneos, las situaciones pla-
netarias y, por otra, con las
Las anteriores señales experiencias vitales que nos
Ruven Afanador, “Athanor Danza - Álvaro Restrepo”. Fotografía, 1986.
nos van alejando de los lu- Museo de Arte Moderno de Bogotá. fuerzan a imaginar, pensar y
gares comunes desde los actuar. Reconocemos que esta
cuales la cibercultura es estudiada por ñal, pero el asunto es de una delica- concepción del mundo desde lo que
distintas orientaciones de pensamien- deza tal, que si no lo pensamos en venimos planteando, se constituye
to, y nos tientan a surcar por otros conjunto, con toda su inclemente en parte de uno de los más profun-
parajes que sugieren nuevos riesgos. complejidad, sucumbiremos al inten- dos agujeros negros en donde toda
Quedarnos en las mismas preguntas to de problematizar el sentido de lo tentativa teórica acaba por ensom-
–cuando algunas están sedimentadas humano en el mundo y del mundo brecerse o quizá, en cierto gesto irre-
en falsas dicotomías (real/virtual, humano que para nosotros es, en “sín- verente, extravíe su mirada. Se nos
cultura/tecnología, técnica/naturale- tesis disyuntiva”, lo que nos mantie- impone una apuesta de este calado,
za, cerebro/cuerpo) y otras saturadas ne atentos y vivos en el pensar y para dimensionar la altura de lo que
por su insuficiencia ontológica y po- arrojados en el actuar. pasa y nos pasa, de cara a las cibercul-
lítica (políticas de ciencia y tecnolo- turas y su potencial profanatorio. Tal
gía)– sería obturar el ángulo y la fuerza Esta es, lo comprendemos, una perspectiva es indispensable si quere-
con la que pensamos la realidad2 : entrada no exenta de incertidumbre, mos pensar lo que viene, lo por-venir.
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 151
éstas son en semántica actual tan sólo ce una experiencia mínima que des- son otras urgencias las que apremian.
claves para pensar las ciberculturas de ciende a los imperceptibles rostros de La legitimidad, escuchemos muy bien,
modos próximos, abiertos a la lo posible. Y es lo posible, por exce- es cuestión del nosotros, de la fuerza
remezcla. Con ellas, cualquier inten- lencia, el lugar intermedio, fecundo, que se conforma en medio de muchos
to de posproducción es legítimo y, en cuanto presenta también el espa- silencios que resuenan, en medio de
como señalábamos precedentemente, cio de la ingravidez y de la exteriori- tanta algarabía ensordecedora6 . Mu-
es en alianza viva entre las expresio- dad, el del abismo y la osadía. chos colectivos autogestionados, mu-
nes artísticas y el pensamiento en chas fuerzas latentes creativas que usan
donde se presenta una espléndida oca- Cierto ingenuo afán por cristali- los repertorios tecnológicos, no tienen
sión. Puede leerse asimismo lo ante- zar, por cercar lo que es sin fronteras, un sentido prefigurado, unos objeti-
rior, como un ejercicio de variación ha impedido leer los brotes de singu- vos delimitados; éstos van tejiendo
de la señal, un ritmo pecu- poco a poco sentidos de rea-
liar en el que somos fieles al lidad en la medida en que van
acontecimiento4 , una forma explorando conjuntamente
de acentuar lo que constitu- posibilidades en la complici-
ye la creación del mundo y, dad de sus trayectos. Prime-
a la par, la composición sin- ro, es la suspensión del
gular de nosotros en él. sentido, una gravitación en el
vacío del cual se van despren-
Una fuerte considera- diendo partículas que lenta-
ción a modo de excurso: el mente van constituyendo
sentido no sólo está en cada cuerpo, para luego pasar a un
uno, está entre nosotros. Dos estado de intrepidez que
pinceladas al respecto: el sen- toma la conformación de
tido del mundo es lo que mundo.
hoy nos expone a pensar; el
sentido está en una distan- Como veremos, la volun-
cia próxima donde alberga- tad de animación cultural, la
mos el instante posible. afirmación de realidades dis-
Estamos en camino de seña- tintas a las que se imponen,
les, buscando un indicador la producción de contenidos
donde pueda brotar una mú- emergentes, la disposición a
sica inaudita. Pasar y pasar, compartir los bienes co-
nunca encontrar el sentido, Jim Amaral. “Yelmo”, 1993, bronce, 56 x 56 cm (detalle). Museo Nacional. munales, las inteligencias
Archivo fotográfico del IDCT, 2006.
quizás éste siempre esté au- cooperativas, las nuevas com-
sente y pasamos de una señal a otra laridad que cada vez vemos surgir en posiciones ciudadanas de la subjeti-
como si fuésemos una Antena Mutan- los entornos ciberculturales; ya sea en vidad en el encuentro con las nuevas
te5 . Podemos en tiempo real, tanto gesto de captación o de laminación, tecnologías, hacen parte del espectro
instaurar como recoger señales que se lo diferente cada vez se ve más expues- expandido de la política de las seña-
propagan por el medio, podemos ju- to a perder la enjundia con la que es les. Si nos preceden unas pinceladas
gar y hacerle variaciones a los micro- enunciado y encarnado y, por otra en torno a las señales de vida, basta
mundos que existen en el interior de parte, tan sedimentado que aplasta los con que nos adentremos en el espa-
la señal, hasta llegar a crear ficciones ribetes que lo hacen erguir. Sobrevie- cio potencial de aquéllas que se han
comunes que serán las fiestas del fu- ne entonces la cuestión de configurar materializado como experiencias, tra-
turo. La insignificancia de la onda o legitimidades y realidades, en momen- yectos, tácticas, nuevas dimensiones
de la señal, no es un obstáculo para tos en donde crear y pensar más allá de uso y de relación con las tecnolo-
nosotros; somos el intervalo, el paso de los parámetros, de las tradiciones, gías de la virtualidad bajo la óptica
de una señal a otra, una frecuencia de la nostalgia y del conservadurismo, sugerente y sugestiva del aconteci-
modulada. Al propagarnos, aconte- se vuelve viva voz prescindible, ya que miento, y también desde la perspec-
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 153
de tres días– de otras señales que con- tura digital, destacamos los proyec- Las expresiones de la cultura con-
trastan y que afirman otras realidades tos Fin del Mundo y Compartien- temporánea que estas experiencias
diferentes a las instituidas. Este en- do Capital en Argentina, Platoniq y legitiman, muy próximas a los
cuentro tiene lugar en la frontera Joystick en España y La Cápsula10 entornos artísticos y de pensamien-
Tijuana-San Diego donde se presencia en Colombia. Todas estas cinco to, nos muestran nuevas dimensio-
una atmósfera crítica, participativa y experiencias-plataformas –sin equi- nes de uso de las tecnologías en
en red, a través de conferencias, pararlas y guardando las distancias y contextos en donde la experticia no
conversatorios, talleres, exposiciones diferencias– fomentan espacios para es condición para la experimen-
fotográficas, arte digital e interactivo el desarrollo de prácticas creativas, tación. La consigna ciberpunk y
multimedia, proyecciones de docu- proyectos, publicaciones e informa- contracultural “hazlo tú mismo” pre-
mentales y películas, de tal modo que ción sobre la cultura libre y digital y domina en muchas de las prácticas
lo significativo de la experiencia par- animan las experiencias artísticas con- sociales y activistas que tienen
te de dos aspectos: la disemina- Internet como su escenario, y
ción de una riqueza de señales es así como estas plataformas
por la atmósfera y la inter- de interacción propenden más
pelación a cierta lógica norma- que por conservar o musei-
lizada como actualmente se ficar la realidad, por arriesgar-
concibe el asunto de los inmi- se al procesamiento (Brea,
grantes. Aquí se plantea un 2007), a compartir y restituir
asunto relevante. Este alude al al uso común las fuerzas de la
paso de las señales en medio de creatividad social. Estos ras-
la frontera, hackear un espacio gos, disfrutamos al decirlo, an-
físico fronterizo y ejecutar accio- ticipan una entrada osada en
nes que alteren el rostro del pro- el siglo que apenas inicia, en
blema. Borderhack 8 forma donde empiezan a abundar
parte de la cadena de Border- lenguajes y experiencias en las
camps denominada “kein cuales las subjetividades se co-
mensch ist illegal” (“ningún ser locan ante sus contingencias
humano es ilegal”), que surgie- de modos creativos.
ron en Alemania hace cuatro
años y que continuaron en di- A medida que surgen pla-
versas fronteras de la Unión Eu- taformas en el ciberespacio
ropea con los países del antiguo para compartir no sólo infor-
bloque del Este. mación, sino como escenario
de propagación creativa y
Este modo de operar del afectiva por parte de las subje-
hacktivismo 9 se constituye Carlos Santa: Cuaderno de apuntes, 2005. tividades y las comunidades, las
como una táctica novedosa que apropiaciones que parten de
instituye nuevas formas de abordar los temporáneas a través de espacios on- estas interacciones con Internet se
problemas, de instalarse en ellos y, line y off-line. Compartiendo mutuos apoyan en experiencias situadas, po-
sobre todo, a partir de la generación intereses, todas estas apuestas con- tencialmente instaladas en ciudades
de formas de subjetividad política en tribuyen a generar otros modos de y territorios existenciales. Esto hace
relación con lo tecnológico y lo compartir, de crear reflexiones des- que gocen de mucha relevancia las
transfronterizo. de la sociedad contemporánea, y ade- apuestas de carácter pedagógico y ex-
más, asunto fascinante, promueven perimental y en su diversidad, con-
2.3. Señales en tránsito la generación de interfaces entre la noten la activación de prácticas y
tecnología, los contenidos emer- redes que van consolidando las expre-
En el ámbito de la producción gentes, las prácticas artísticas y las siones contemporáneas de la cultura
de contenidos sobre y desde la cul- comunidades. digital. Jugando en determinadas
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 155
acontecimientos que no llegan a to, es decir, connote una fuente de Red. Así como ésta es chance de ex-
solidificarse por la misma dinámica fertilidad para los artistas, pensado- perimentación, las poéticas inaugu-
abierta de conversación. Estas prácti- res, productores y creadores que en- ran una nueva posibilidad para la
cas ciberciudadanas a la par que con- tran en la escena contemporánea existencia compartida, para una hu-
figuran espacios de producción como un relámpago en medio de tan- manidad que no desdeña las suturas,
micropolítica, sortean obstáculos en- to escepticismo heredado y empobre- los vacíos e indeterminaciones que la
carnados en los modos clásicos de cidas lecturas de la realidad. componen. Para las señales poéticas,
hacer política. En este sentido, las la composición de mundo es el ras-
ciberciudadanías plantean muchos Es preciso afirmar que son seña- go esencial que resulta atravesando el
interrogantes para el pensamiento les poéticas, no sólo las que ocupan intento singular y la producción de
social, para el devenir político de la magnitudes metafóricas, sino todas las las subjetividades. Pero a esta consti-
existencia humana, y en la creación tución afirmativa de la existencia le
de disensos, multiplican los espacios precede un ethos consustancial a las
en donde la acción política14 puede relaciones que gestamos con el pre-
ser ejercida. sente y con la vida potencial. Este es
el ángulo hacia donde deriva nuestro
entusiasmo y es, al tiempo, la fragili-
3. Señales poéticas dad constitutiva de nuestro envite.
Y es la alegría de habitar el mundo y
Por cuestión de espacio, entrare- de conjugarlo lo que nos dispone en
mos brevemente en las señales vivas otras dimensiones y en un movimien-
que han surgido en la travesía del tex- to que empieza a vibrar en el cosmos.
to e intentaremos bordear de nuevo Pensamos que carecer de este espacio
la frontera, los tránsitos, la vida, las vital es profundamente perjudicial
prácticas ciberciudadanas, haciendo para el devenir humano, a la par que
variaciones y contrastando los rasgos procurar un estado de disposición
fundantes que se han espaciado en afectiva con la realidad es nuestra
este artículo. Cuando hablamos de consigna. Suponemos que “el no en-
señales poéticas nos preguntamos tusiasmado es alguien que simplemen-
por aquellas contraseñas –es decir, te no ha entendido dónde está él con
claves para entrar– que a partir de los relación a sí mismo y al todo”
usos inventivos de las nuevas tecno- (Sloterdijk, 2004: 26), alguien que
logías, la disposición común y presta poca atención a sus fuerzas y
afectiva y la creación de mundo, con- al aura que impregna su singularidad.
fieren a la realidad y a la vida de las
subjetividades nuevas dimensiones Tanto la composición de mundo,
del habitar y de la experimentación. como la habitación compartida en-
tre señales pobladas de diferencias,
Germán Londoño, escultura, c. 2000.
En ocasión de apertura, las seña- enunciados y encarnaciones de lo
les poéticas brindan en el encuentro posible, insinúan un desafío para las
con las señales precedentes, una que comparecen como poéticas del prácticas ciberculturales y, extensiva-
redefinición de la realidad y de sus mundo. Huelga a su vez señalar que mente, para las políticas de las seña-
sombras. De tal manera que el ejerci- los rasgos expuestos en el preludio les que emergen en la relación de las
cio de trazar imágenes de pensamien- del texto –Señales de vida– constitu- subjetividades con los nuevos entor-
to y un pensamiento en imágenes yen modulaciones que intentan co- nos tecnológicos. Quizá, tomar en se-
sobre la cuestión de la cuestión, la locar el problema en una perspectiva rio ontológicamente estas señales,
relación-composición de realidad, fa- existencialmente situada y conectada contribuya a una poiesis incesante de
vorezca un clima para los que acogen con los vestigios que emanan de las alternativas de diversa índole, que par-
la radical novedad del acontecimien- prácticas y los inéditos usos de la ticipan de un escenario para todos co-
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 157
escritura, sonido e imagen a través de el lugar que falta (una nueva utopía), lo que está a nuestro alcance, con
Internet, la viva inmaterialidad que sino también cultivar lo imposible, nuestras afecciones.
se gesta en una conversación, mues- lo impensable. Estos lugares han de 4 La fidelidad al acontecimiento reside
tran gérmenes de creación que sobre- cobrar entre nosotros, la posibilidad de de cierta manera en no lanzar respues-
tas determinantes y definitivas a lo que
viven al imperio de lo posible y van tornarse obra de vida, de conocimien- se abre, a lo que está en trance (la exis-
marcando diferencias que horadan la to, de ficción. tencia). “Tener respuestas ya hechas
infertilidad del presente. No es que (maoísmo, leninismo, trotskismo) fren-
no sean importantes otras señales, te a nuevos problemas es dejar escapar
el acontecimiento” (Lazzarato, 2006:
como por ejemplo las amenazas, vér- 45). Ser fiel también implica una habi-
tigos y ocasos que han planteado lú- Citas tación en las oquedades por un buen
cidamente otros teóricos de los tiempo, un ejercicio físico de tensar los
medios y las tecnologías de la virtua- 1 Nosotros figura como la encarnación vacíos y sobre todo un viaje entre sus
plural de un segmento de realidad intersticios. Ser fiel a un acontecimien-
lidad (entre ellos los más destacados to “es moverse en la situación que este
híbrida, emerge de una resonancia
son Paul Virilio, Franco Berardi y profunda en la que no hay lugar para acontecimiento ha suplementado, pen-
Jean Baudrillard). Como hemos he- la fusión, sólo interferencias, propa- sando (pero todo pensamiento es una
cho énfasis en el decurso del artícu- gaciones, composiciones. Lo genuino práctica, una puesta a prueba) la situa-
del nosotros es lo que está entre, lo que ción ‘según’ el acontecimiento. Lo que,
lo, decidimos conjugar metáforas y por supuesto, ya que el acontecimiento
condensa y lo que fuerza, dado que
señales afirmativas, con la intención aquí no hay espacio para protagonis- estaba fuera de todas las leyes regulares
de ser transportadas por ellas a otras tas; nosotros no es lo colectivo, es el de la situación, obliga a inventar una
virtualidades de la experiencia. Tene- aliento, el fuego, el clamor intenso de nueva manera de ser y de actuar en la
todo encuentro vivo. situación” (Badiou, 2004: 71). Tam-
mos la leve intuición de que las seña- bién, permitir que no se clausure –el
les y su política –una política de las 2 Realidad se refiere en la travesía del acontecimiento– hace parte de una ge-
señales– proveerá en poco tiempo texto, a los modos vitales en que nos nuina fidelidad, dado que lo que mues-
exploramos, en los que hacemos viaje tra aquél, puede ser una herida, un ta-
una serie de instrumentos, códigos, en complicidad con las fuerzas que tuaje o un cosmos latente que salta
wikis, en donde lo que aparece hoy somos; experiencia de realidad que caóticamente. En ambos casos, siempre
centelleante pueda ser constelado. va revelando pasajes, tránsitos y tran- interrumpe nuestros modos de perci-
Pero, quizá, siguiendo el rastro de la ces con la fortuna de llevarnos siem- bir y de sentir (posición–disposición),
pre a visitar inéditos modos de perci- luego la composición de mundo es fru-
señal, nos sea preciso devenir aquella bir y sentir. Existen tantas realidades to de una larga amistad e intimidad con
metáfora que somos y esto, lo sabe- como subjetividades en despliegue, en lo indeterminado.
mos, es asunto de atrevimiento. creación compartida, en poética in-
augural. Realidades constituyentes en 5 Antena Mutante no sólo es una ex-
trama, entre nosotros, en lenguaje, en presión metafórica de nuestra desti-
Para terminar, la política de las órbita, en esperanza. Otra semántica nación errante en el planeta, es tam-
señales es también hoy una experien- potente de realidad que es bastante bién un colectivo de transmisión que
cia y una condición de contempora- sugerente, alude “al conjunto oscilan- reside en la ciudad de Bogotá y que en
te de lo aprehendido como traduc- su sitio electrónico señala lo siguiente:
neidad posible. Puede ser amenaza, ción contextualizada a partir de los “Ser reconocidos como comunica-
pero también chance; un llamado a intereses de despliegue de un sujeto dores piratas sintonizados. Hackeo en
repensarla y activarla es apremiante, en autoposicionamiento” (Contreras, la calle, transmisión en vivo, para es-
porque de no hacerlo, otras fuerzas 2007: 256). cuchar, transmitir voces periféricas y
amplificar los sonidos y los ruidos de
recodificarían de modos perversos las 3 Los restos de humanidad se nos
ocultan o inicuamente son adminis- la multitud”.
señales que hoy vemos flotar entre
trados. Quizá, ha sido el arte el que 6 Un enlace para complementar lo que
nosotros. Es entonces a la generación ha puesto en un lugar intrigante lo venimos planteando como política de
de pensamiento y a la experimenta- que nos desborda, las excedencias las señales, configuración tramática
ción en las prácticas ciberculturales a de la humanidad. Lógica del resto del nosotros y de cara a la semántica
que sustrae, que introduce en un de la legitimidad en red, es el video que
lo que de nuevo nos tienta compo- sentido suspendido el movimiento
ner mundo, y a una seducción táctica está alojado en Internet en la página
tectónico de lo sensible. La remezcla de Youtube. El grupo es Funki Porcini,
(no panorámica) para abrir espacios. afectiva, la creación colaborativa, la canción, Atomic kitchen.
Eso sí, no sólo los que quedan (los las variaciones, el procesamiento de
la experiencia, la apropiación low– 7 El Proyecto Venus plantea “una ex-
restos) sino también los que pueden tech son indistintamente ejemplari- periencia en el campo de la tecno-
dotarse de vida y expresarse; no sólo zantes de lo que podemos hacer con cultura basada en la aplicación de
FONSECA DÍAZ, A. D.: POLÍTICA DE LAS SEÑALES: ESTÉTICAS Y CIBERCULTURAS N ÓMADAS 159
162 N ÓMADAS NO. 28. ABRIL 2008. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA
PROCESOS DE CREACIÓN
Gloria Triana*
Este texto hace un recorrido por los caminos vitales y creativos de una de las más grandes cantadoras de la
música popular colombiana. La autora nos relata, de primera mano, cómo su familia fue decisiva en el proceso de
hacerse artista, cómo las reuniones de estudio y de fandango en el patio de su casa la fueron despertando al canto y
al baile, y cómo el aprendizaje sobre cantos y ritmos obtenido de las mujeres, también cantadoras, de los pueblos de
la ribera del río Magdalena, fue definitivo para llevar a cabo los procesos de recuperación y creación artísticas.
Palabras clave: Totó la Momposina, música popular, cantadoras, Colombia, creación musical.
Este texto faz um recorrido pelos caminhos vitais e criativos de uma das maiores cantoras de música popular
colombiana A autora nos relata, de primeira mão, como sua família foi decisiva no processo de tornar-se artista,
como as reuniões de estúdio e de gozação no pátio de sua casa foram despertando-a ao canto e à dança, e como as
aprendizagens sobre canto e ritmos obtido por mulheres, também cantoras, de um dos povoados da beira do rio
Magdalena, foi definitivo para levar a fim os processos de recuperação e criação artística.
Palavras-chaves: Totó a Momposina, música popular, cantoras, Colômbia, criação musical.
This text walks through the vital and creative paths of one of the greatest cantadoras of the Colombian popular
music. The singer tell us how her family played a decisive role in her process of becoming an artist; how the study and
fandango meetings in the backyard of her house made her sensitive to singing and dancing; and how the knowledge of
singing and rhythms that she learned from other women who were also cantadoras, and who came from towns by the
shore of the river Magdalena, was a definitive point to the processes of recuperation and artistic creation.
Key words: Totó la Momposina, popular music, cantadoras, Colombia, musical creation.
La conocí a comienzos de los años setenta cuando La música era el lazo que mantenía unida a esta fa-
ella empezaba su carrera. Nunca la había oído mencio- milia, música que habían heredado de sus ancestros de
nar y tampoco conocía su música, hecha con percusión, la región Caribe: “bailes cantaos” de diferentes nombres
palmas y voces, donde se alternan versos repetidos o (chandé, tambora, pajarito, chalupa, bullerengue, fan-
improvisados, y los coros responden. dango de lengua, berroche), porros y cumbias de gaiteros
y cañamilleros o de bandas
Recuerdo que un sába- de viento, canciones de ju-
do en la tarde vi por televi- glares vallenatos. Todos es-
sión a una mujer con una tos músicos desfilaban por las
colorida manta wayúu que parrandas de su casa donde
cantaba con un timbre de los sancochos en el patio per-
voz en nada parecido al de mitían la prolongación de la
las cantantes de la época. Yo fiesta. En estas parrandas
me preguntaba de dónde conocí a los músicos que más
era esa música, esa manera tarde serían los protagonis-
de cantar, ese sonido de tas de mis películas.
tambores ancestrales. En ese
tiempo, cuando se hablaba Daniel Bazanta, su pa-
de música colombiana en las dre, era un ser extraordina-
emisoras, generalmente se rio, de una generosidad y
pensaba en la música andina bondad inagotables. Zapate-
y de la Costa Caribe reduci- ro de profesión, tocaba el
da esta última a los cantos tambor para acompañar los
vallenatos de Escalona y los cantos de Totó y los de sus
Disco en la que Totó interpreta música de herencia cubana arrraigada
porros y cumbias orquestados y recreada por músicos del caribe colombiano desde 1930. amigos acordeoneros, con el
de Lucho Bermúdez y Pacho rigor y la maestría que sólo
Galán, que habían sido grabados por la incipiente in- poseen aquellos que se sienten responsables de transmi-
dustria discográfica nacional y se bailaban en los clubes tir lo que otros han olvidado. Cuando Totó comenzó su
sociales de las capitales, desde los años cincuenta. carrera como cantadora profesional y lo llamaba para en-
sayar, él le decía: “No mija, a mí no me llame para eso,
Me enteré por un amigo que trabajaba en la televi- nosotros nacimos ensayados”. Nacido en Magangué, era
sión, de que se llamaba Sonia Bazanta, vivía en Bogotá hijo de un director de banda que interpretaba muy bien
con toda su familia, y estaba casada con un médico pro- el clarinete, por lo tanto, tenía los sonidos de la música
fesor de la Universidad Nacional donde yo trabajaba en su memoria desde la infancia.
también como docente.
Livia Vides, su madre, nacida en Mompox en una
Al poco tiempo, no recuerdo si fue por una visita de familia de músicos, era la que llevaba y todavía lleva la
Abel Antonio Villa o de Alejo Durán, la familia Bazanta batuta en esta familia. Su padre tocaba guitarra, y su
me invitó a una de sus parrandas a través de mi amigo. abuelo Sixto Vides Choperena era un apuesto mulato
Totó en sus comienzos, con Julio Rentería, Gilberto Martínez “Huitoto” y Roque Mancera.
Marco Vinicio Oyaga (hijo de Totó), Gilberto Martínez, Totó, Paulina Salgado “Batata” y Julio Rentería,
los músicos con los que inició sus viajes por el mundo.
Y continúa Consuelo diciendo: Así narró Consuelo Araújo, “La Cacica”, esa noche
en su crónica inédita:
No era ningún secreto para quienes como Rafael
Escalona, Nereo López o yo, que sin ser exactamen- Ya se ha dicho casi todo sobre esa noche maravillosa
te cantantes ni músicos ni bailarines estábamos, cuando sesenta “corronchos” convertidos por arte
metidos hasta el alma dentro del grupo humano so- de nuestra fuerza interior en las estrellas de ese mo-
bre el que iban a estar y estuvieron todas las miradas mento, descendimos –ahí sí– con paso de triunfado-
y sobre el que se echó, desde el primer momento, la res por las antiguas escaleras de mármol hacia el salón
responsabilidad de parir ese tan sonado oso, o no central […] Comenzaron a sonar en ese ámbito de
parirlo, que si en Estocolmo nuestro folklor y nues- deslumbrante elegancia donde ya se habían escucha-
tras manifestaciones culturales y artísticas triunfa- do las trompetas anunciando la llegada de los reyes, el
ban –como en efecto triunfaron rotundamente– el golpe seco, ronco y profundo de los tambores mar-
triunfo iba a ser, sin duda, un triunfo exclusivo de cando los compases de la cumbia y al conjuro de ese
Colombia. Y punto. Pero si en cambio había el más ritmo fueron descendiendo “como auténticas prin-
mínimo traspiés en la ejecución, por ejemplo, de cesas” que habían dormido bajo otras formas y en
cualquiera de las danzas y bailes, había un sólo com- sitios insospechados y remotos y ahora se despertaban
pás trascordado en cualquiera de los merengues o y cobraban vida y movimiento al son de nuestra mú-
paseos de Escalona o en los joropos llaneros, la cul- sica, las hermosas muchachas de Palenque que Car-
pa, la responsabilidad indiscutible iba a ser nada más los Franco tiene en sus danzas del Atlántico llevando
Paulina Salgado “Batata”, Totó, Gilberto Martínez y Marco Vinicio Oyaga en París, 1972.
La invitación a Womad significó un punto alto en A mediados de los noventa Totó fue invitada a par-
la carrera profesional de Totó porque además repre- ticipar junto a otras cuatro artistas de sendos conti-
sentó la entrada oficial en un circuito que ofrece gran- nentes, en un espectáculo llamado Las divas, que
des posibilidades de reconocimiento, permite el hace una gira de varios meses por diversos países.
contacto con otros artistas y agrupaciones que com- Con ello, el circuito del World Music le aseguraba a
parten búsquedas similares y, sobre todo, ubica a la Totó un lugar en el selecto grupo de las “divas des-
cantadora en un mercado claramente definido que ya calzas”, una estirpe universal de mujeres que tienen
entonces estaba en pleno ascenso. en su voz una fuerza terrígena y entran al escenario
con los pies desnudos. “Ellas cantan desde el cora-
Hasta ese momento, y a pesar de que llevaba casi zón”, dice John Hollis (Iriarte, 2004: 55).
veinte años cantando en casi todo el mundo, Totó era
una artista marginal para el mercado. Sólo había graba-
do un disco de tiraje corto y mala distribución, y no De la tradición a la creación de
contaba con un equipo de trabajo y de representación nuevas propuestas sonoras
que la proyectara hacia niveles superiores.
Cuando le pregunté a Livia Vides cuál era la razón
El reconocimiento ha ocurrido en los últimos quin- que había llevado a la familia Bazanta a escoger sus
ce años, y es el trabajo de John Hollis (su yerno y tradiciones musicales y danzísticas como eje fundamental
manager en Europa), de las compañías disqueras, de de su vida e instrumento de educación de sus hijos, me
las agencias y empresas de publicidad, lo que le ha contestó tajantemente:
dado a Totó el respeto a nivel artístico y la represen-
tación que ella merece. Eso conlleva también el com- Por el rechazo y discriminación de que fuimos obje-
promiso de ayudarla en la evolución de su música, to al llegar a la capital. Recuerdo muy bien que a
manteniendo la tradición pero permitiéndole res- Totó no la aceptaron en un colegio de las Cruces,
pirar y ser una fuerza creíble en el mundo contem- que fue el barrio donde llegamos primero, porque
poráneo. La respuesta de los medios y el público en puse en el formulario que mi marido era zapatero y
Europa, Estados Unidos y otros lugares ha sido muy veníamos de la Costa. La monja me sugirió que pu-
positiva y Totó se ha forjado un nombre que des- siera que éramos del interior y que mi marido era
pierta un gran respeto. comerciante. Esto me indignó y me dije: “¡Carajo,
Parece increíble pero el primer disco de larga dura- los métodos tradicionales de su infancia. Aprovechó para
ción se hizo también después del Nóbel cuando se esta- relacionarse con los percusionistas del Conjunto Folclórico
bleció en París y recibió la propuesta de un colectivo Nacional que le enseñarón los secretos de los tambores
boliviano llamado Boliviamanta. Su título Colombia. batá acompañantes de los rituales de la santería cubana.
Música de la Costa Atlántica. Totó la Momposina y sus tam- Durante la estancia de su hijo, Totó pasó una temporada
bores (1989). Esta grabación fue realizada con los músi- en Cuba investigando y aprendiendo con los composito-
cos con los que comenzó su carrera y es una combinación res de boleros, tomando clases de interpretación con los
de las tradiciones musicales de la depresión momposina cantantes más reconocidos, teniendo siempre como refe-
con las que se originan en la sabana, ejecutada con ins- rencia a Celia Cruz. En 1991 Totó fue invitada por prime-
trumentos de la región: tambores (alegre y llamador), gua- ra vez al Womad Festival, la llegada a ese espacio
che, maracas y flauta de millo. La grabación incluye los especializado de las músicas étnicas con nuevas propues-
cantos recogidos por Totó en sus viajes y los aprendidos tas sonoras, determinó un cambio de orientación en el
de su madre. Los temas restantes del disco conforman la trabajo musical, pues se dieron cuenta que no era nece-
primera entrega del resultado de veinte años de investi- sario reproducir exactamente lo que se hacía en la músi-
gación y proyección de la música tradicional. ca tradicional y que se podían introducir instrumentos
melódicos que enriquecieran estas expresiones.
En esta época el grupo interpretaba exactamente la
música tradicional sin la presencia de instrumentos me- Después de la participación en estos festivales, se
lódicos exceptuando la voz de Totó. Tras la grabación tomó la decisión de hacer una grabación sobre los
de ese disco nuestra cantadora se asentó en París, para sextetos palenqueros que a principios del siglo pasado
lo cual tuvo que desmontar el grupo que la había acom- habían llegado de Cuba y se interpretaban en el Caribe
pañado hasta ese momento. Así, transcurrieron cinco colombiano con tiple, trompeta, bongó y clave. La can-
años hasta que retornó a Colombia y recompuso de nuevo dela viva se llamó este disco que fue grabado por Real
su familia musical con su hijo Marco Vinicio. World, el sello de la fundación de Peter Gabriel.
Durante la permanencia de Totó en París, Marco A La candela viva le sigue la grabación de Carmelina,
Vinicio viajó a Cuba a estudiar percusión sinfónica des- que establece una ruptura total con lo que se había
de cero, después de haber aprendido a tocar tambor con hecho hasta el momento. Las grabaciones se hicieron
Cita
1 Consuelo Araújo Noguera estuvo presente en el Nóbel como
invitada especial. Escribió una extensa crónica que nunca fue
publicada. Conservo los manuscritos que utilicé para una
ponencia en Valledupar en el homenaje que se le rindió des-
pués de su muerte.
Bibliografía
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El presente artículo señala la forma en que las políticas de lugar movilizadas por el Cineclub Itinerante La Rosa Púrpura del
Cairo, entran a confrontar las lógicas de guerra (geografías de terror) impuestas por los actores del conflicto armado en la región de
los Montes de María. Esta experiencia cultural resulta interesante porque pone de manifiesto las relaciones entre territorio, cultura,
identidad y política en el momento de desplegar acciones territoriales que buscan proponer nuevos proyectos colectivos.
Palabras clave: lugar, políticas de lugar, geografías de terror, prácticas culturales, territorio, cineclub itinerante, Montes de
María, Colombia.
O presente artigo sinala a forma na qual políticas de lugar mobilizadas pelo Cineclube Intineirante La Rosa Púrpura do
Cairo, entram a confrontar as lógicas de guerra (geografias de terror) impostas pelos atores do conflito armado na região dos Montes
de Maria. Esta experiência cultural resulta interessante porque põe em manifesto as relações entre território, cultura, identidade e
política no momento de entender ações territoriais que procuram propor novos projetos coletivos.
Palavras-chaves: lugar, políticas de lugar, geografias de terror, práticas culturais, território, Cineclube Intineirante, Montes de
Maria, Colômbia.
This article points out the way in which the policies of place that are mobilized by the Cineclub Itinerante La Rosa Púrpura
del Cairo, confront the logics of war (terror geographies) imposed by the actors of the armed conflict in the Colombian region of
Montes de María. This cultural experience shows the relations among territory, culture, identity, and politics, when unfolding
territorial actions that new collective projects are proposing.
Key words: place, policies of place, terror geographies, cultural practices, territory, itinerant movies club, Montes de María,
Colombia.
ORIGINAL RECIBIDO: 15-I-2008 – ACEPTADO: 12-II-2008
GARZÓN, M. A.: RETANDO LAS GEOGRAFÍAS DE TERROR: ESTRATEGIAS CULTURALES PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL LUGAR N ÓMADAS 183
Imagina el día nueve de octubre de 2002, el día que dicen: rror (Oslender, 2006), proponiendo la imaginación, vi-
que van a dar una película en pantalla gigante, vencia y re-apropiación del lugar o del territorio de los
imagina la alegría que yo tenía; tenía casi diez años Montes de María.
que no veía cine aquí en El Carmen.
José Solórzano Para ello, comenzaré haciendo una reseña de lo que
Estas preguntas me condujeron al proyecto del El origen del Cineclub se remonta a la noche del 8
Cineclub Itinerante La Rosa Púrpura del Cairo del Co- de octubre de 2002. En esta fecha se presentaron cuatro
lectivo de Comunicaciones Montes de María Línea 21 atentados dinamiteros en el municipio de El Carmen de
(en adelante CCMMa). Elegí este proyecto porque creo Bolívar. Esta acción buscaba intimidar a la población ci-
que su experiencia en el territorio y con él, es una mues- vil e imponer el toque de queda, es decir, obligar a los
tra de la forma en que el CCMMa está contribuyendo a moradores a permanecer en sus casas a determinadas horas
construir una nueva región. Concretamente, indagaré de la noche. Sin embargo, la respuesta de la población
esta reconfiguración desde la noción de políticas de lu- fue diferente: al menos trescientas personas asistieron a
gar, es decir, a partir de las acciones que retan las lógicas la proyección de cine auspiciada por el CCMMa que se
que sobre el lugar tiene la confrontación armada. Por realizó como un acto de rechazo a estos hechos violen-
lo tanto, mi propósito puntual en este artículo es ex- tos: “aquella misma noche, se decide proyectar una pelí-
poner cómo las políticas de lugar producidas por el cula sobre un mantel blanco en la Plaza Central” (Bayuelo,
Cineclub Itinerante están retando las geografías de te- 2005: 2). Este hecho, vital para las apuestas del CCMMa,
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y piensa: ¿para qué me quedo aquí?” (conversación per- de acciones basadas-en-lugar que vinculan la identidad
sonal con Julio García, CCMMa, 2007). con la cultura y el territorio (Escobar, 2005: 139) en-
trando en disputa con proyectos antagónicos. Ahora bien,
Ahora bien, frente a estas desarticulaciones aparecen ¿cómo se dan esas acciones basadas en el lugar?, ¿cómo
formas de resistencia que entran a confrontar directamen- ocurre en la práctica la construcción, apropiación y vi-
te las geografías de terror: las estrategias dirigidas a rever- vencia del lugar? Para responder a estas preguntas, Arturo
tir las lógicas territoriales implementadas por la guerra. Escobar y Wendy Harcourt sugieren la noción de políti-
Ejemplo de ello son las políticas de lugar propuestas por cas de lugar. Entiendo que las políticas de lugar son acciones
el Cineclub Itinerante La Rosa Púrpura del Cairo, que movilizadas desde prácticas culturales que interpelan, retan y
mediante su práctica re-dibuja unos Montes de María controvierten lógicas homogeneizantes respecto al lugar. En el
diferentes a los planteados por la guerra. caso de esta investigación, las políticas de lugar hacen refe-
rencia a las acciones desplegadas por el Cineclub Itinerante
La pregunta por el lugar y sus posibilidades analíticas que logran interpelar, retar y controvertir las lógicas territo-
y políticas viene realizándose en las últimas décadas gra- riales impuestas por las geografías de terror.
cias a las discusiones que problematizan la hegemonía de
la globalización. Contrario a los debates sobre la moder- Para entender mejor la forma en que operan las polí-
nidad que privilegian lo global frente a lo local, estas ticas de lugar y su interpelación a las lógicas territoriales
discusiones controvierten la relación unidireccional glo- de la guerra, a continuación examinaré tres de éstas polí-
bal-local, permitiendo una concepción diferente del lu- ticas desplegadas por el Cineclub por ser las más repre-
gar. Éste ya no es entendido como marco de la vida social sentativas: apropiar, sentir e imaginar el lugar.
sino como un producto cultural y de relaciones de poder en el
que se ponen en juego proyectos colectivos (Escobar,
2005: 130). Ciertamente, desde el horizonte de estas Itinerancia: apropiar el lugar
discusiones, pensar en términos de lugar es hacerlo en
términos de cultura local y política localizada en un mar- La itinerancia es entendida como una estrategia para
co de redes globales. estar y circular en el lugar sin permanecer cotidianamente
en él, es decir, ir, venir y volver dejando en cada visita un
Varios son los referentes teóricos que han contribui- mensaje que invita a las personas a pensar, vivir y cons-
do a dirigir el debate en esta dirección, ampliando las truir su territorio:
posibilidades analíticas y políticas del lugar; entre ellos
privilegio la geografía feminista, particularmente la de La itinerancia es la posibilidad de estar en otros
Doreen Massey (1994) y tres de sus postulados clave: 1) lugares que no son exactamente la casa. Itinerancia
el lugar no es sólo escenario de las vivencias cotidianas implica movimiento, versatilidad, adaptación, es-
sino que hace parte de ellas, 2) la estructuración, gestión tar aquí hoy y mañana en otro lado llevando de
y uso del lugar se realiza a partir de atributos identitarios, manera comunitaria nuestros mensajes hasta don-
y 3) la localidad es un nivel de análisis crucial en el estu- de por limitaciones tecnológicas, pero también por
dio de la dinámica social. Desde mi perspectiva, estos características del contexto, no podrían llegar de
postulados son fundamentales en el momento de definir otro modo (entrevista con Carmen Pacheco,
el lugar como la convergencia de lo geográfico, lo vivencial, CCMMa, 2007).
lo imaginario y lo identitario en un espacio y en un tiem-
po determinados. También como el producto de la rela- El lugar, entendido como una construcción colecti-
ción entre afectos, subjetividades, sueños, etc. va que es posible a través de la interacción cotidiana, se
había perdido en los Montes de María en medio de la
Adicionalmente, estos postulados entienden el lugar guerra y la prohibición del encuentro. Así que para reali-
ya no sólo como el marco de la acción social sino desde zar acciones culturales en este contexto –uno de los ob-
su dimensión política y cultural, lo que invita a pensar la jetivos del CCMMa– se debía comenzar con “preparar el
construcción del lugar en términos de interacciones so- terreno”, es decir, generar las condiciones para que di-
ciales. Es decir, la apropiación y vivencia del lugar es con- chas acciones tuvieran resonancia e impacto. El Cineclub
cebida como una apuesta política que se realiza por medio Itinerante y sus proyecciones gratuitas y bajo las estrellas
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N ÓMADAS
La itinerancia es política de lugar porque pone en el De hecho, tomar para el Cineclub el nombre de una
escenario público la necesidad de apropiarse nuevamen- de las películas de este director norteamericano es más
te del lugar (lo territorial, cultural, público, colectivo y que un homenaje a su obra; en realidad, es una apuesta
vivencial) como punto de partida para iniciar un proyec- por generar un sentido de lugar (Agnew cit. Oslender,
to de región diferente, además porque “es participativa, 2000), aquél derivado de la experiencia de vivir en un
masiva, invita al diálogo, genera reflexión, su mismo ca- lugar particular –los Montes de María– afectado por la
rácter de callejero e itinerante nos da matices democráti- guerra y por las geografías de terror. En efecto, la ruptura
cos” (entrevista con Carmen Pacheco, CCMMa, 2007). de los lazos vecinales, municipales y regionales produce
Lo anterior, sumado a la circulación que se realiza en una ruptura en el nivel simbólico en el que se comienza
todos los municipios de los Montes de María, garantiza a estigmatizar al otro, ya sea persona o municipio, como
que las apuestas por la conformación de un escenario algo peligroso y generador de desconfianza. Esto se mate-
cotidiano diferente al propuesto por la guerra se hagan rializó en los Montes de María en el aislamiento entre
visibles y se extiendan por toda la región: municipios, en evitar ciertos lugares porque eran refu-
gios de guerrilleros o de paramilitares y en asegurar que
—¿Ustedes hacen una reconfiguración de la región? cierta población pertenecía a un bando o a otro.
—Totalmente [...] claro, hemos ido a todos los mu- Lo anterior deslegitima y desdibuja proyectos colec-
nicipios e incluso a algunas veredas [...] es como tivos asociados a un territorio y los sentimientos deri-
reafirmar desde los medios de comunicación los vados de allí. No obstante, con la metáfora de Woody
sentidos de pertenencia hacia el lugar (entrevista Allen, el Cineclub Itinerante cuestiona las formas que
con José Luis Oviedo, CCMMa, 2007). rompen el sentido de lugar a través de la promoción de
un reconocimiento propio diferente a los percibidos
En suma, la itinerancia como política de lugar, resis- desde afuera:
te las lógicas de guerra que intentan negar la construc-
ción de lo público. Ella posibilita la re-apropiación del El Cineclub tiene una doble intencionalidad fren-
lugar mediante un movimiento constante que la hace te a lo que significa para la región como tal: recons-
fluida, rápida y directa, y en consecuencia, inaprensible truir la imagen parcializada que los medios de
para el conflicto armado pero con repercusiones impor- comunicación han creado sobre la región hacia
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fuera, pero también hacia adentro […] o uno va a nas, los mismos sueños: construir unos Montes de María
Salado y te dicen: pa´ El Carmen de Bolívar no voy diferentes […] las artesanías, la música, sobretodo las gai-
ni llorando […] pero con este tipo de cosas tú le tas” (entrevista con José Luís Oviedo, 2007).
muestras a la gente otro Carmen de Bolívar que no
es el que te muestran los medios de comunicación En los Montes de María, las geografías de terror no
nacional (conversatorio con el equipo del Cineclub, sólo han producido limitaciones obligadas en los trán-
Carmen Pacheco, 2007). sitos y encuentros. También han dejado inscripciones
en las formas en que la población vive, siente e imagina
Entonces, la metáfora de Woody Allen puede ser su lugar. Al igual que en el caso del Pacífico colombia-
entendida como una acción simbólica dirigida al espec- no, señalado por Oslender, estas geografías han restrin-
tador con el fin de animar en él/ella una reflexión res- gido a la población, en términos espaciales y en términos
pecto a lo que significa vivir en un lugar. Dicha acción vivenciales, la imaginación y la experiencia del territo-
es intencionada, puesto que en todas las proyecciones rio (Oslender cit. Herrera y Piazzini, 2006: 163). Así,
del Cineclub Itinerante se busca generar esta reflexión las lógicas de la guerra repercuten en los niveles de mo-
mediante la interlocución que dentro de la pantalla y vilidad, de espíritus, corazones, creencias y proyectos
fuera de ella pueden hacer los espectadores con los per- colectivos. Por todo esto, la identidad entendida como
sonajes, situaciones y elementos del contexto que les el resultado de vivir y vivenciar el lugar, no es ajena al
son mostrados: conflicto armado: “si alguien afirma hoy: yo soy
montemariano, estaríamos frente a un mensaje vacío que
Se confiaba plenamente en que los personajes sal- no puede traducirse en referentes concretos, salvo en una
drían de la pantalla y establecerían diálogos e alusión a la violencia y el conflicto armado” (PNUD et al.,
interacción con el público, acto que a lo mejor po- 2003: s/p, subrayado mío).
dría ser imperceptible para los personajes de la gue-
rra. ¿De qué conversarían con estos nuevos De este modo, el llamado a recuperar tradiciones,
personajes? No importa […] Lo cierto es que en ese bailes, creencias, fiestas, celebraciones de la región como
regreso silencioso del público del cine a su casa, formas para imaginarla y sentirla, se convierte en algo
cada quien con su silla en la mano, la compañía de más que una acción para preservar el patrimonio cultu-
los personajes de la película, invisibles para otros ral. Es una práctica movilizada desde los mensajes trans-
ojos, ya estaban haciendo su trabajo (Vega y Bayuelo, mitidos por el Cineclub Itinerante, que busca rehacer el
2007: 11). tejido social y fortalecerlo mediante el reconocimiento
de lo “nuestro”, es decir, de aquellos elementos prove-
nientes de la historia, la economía, las expresiones cultu-
El ser montemariano/a: imaginar rales, etc., que configuran un ser montemariano/a
el lugar diferente del mensaje vacío que perciben otros actores
de la región: “Ser montemariano es el sentir de una po-
Esta política se dirige a la convergencia entre vivir en blación que ha vivido las cosas buenas y que ha sido azo-
el lugar y vivenciar el lugar, a la identidad, para este caso, tada por el conflicto armado […] somos como una familia
al ser montemariano/a. Tal identidad no debe ser enten- con diversas culturas y que tienen en común el color, el
dida como esencial y estática, es más bien, relacional y empeño que le ponen a las cosas, ganas de salir, el empu-
dinámica. Es decir, que a partir de los diversos sentimien- je que tenemos” (entrevista con Julio Cesar García,
tos de lugar, identificaciones, tránsitos, imaginaciones y CCMMa, 2007).
vivencias del territorio, se va configurando el ser
montemariano/a como una marca particular en el pro- Así, el Cineclub Itinerante, con su política del ser
yecto de región que se pretende movilizar. Entonces, esta montemariano/a, entra a confrontar imaginarios colec-
política se dirige a generar dicha identidad por medio de tivos que son el resultado de décadas de conflicto ar-
la exaltación, reconocimiento y puesta en práctica de mado en los Montes de María, y que apuntan a
diferentes elementos posibilitados por la región misma: desarticular la identidad como uno de los ejes principa-
“Lo que he percibido es el color de la tierra, las caracte- les para afrontar socialmente los estragos y las lógicas
rísticas de las personas, el mismo sabor, las mismas ga- de la guerra.
GARZÓN, M. A.: RETANDO LAS GEOGRAFÍAS DE TERROR: ESTRATEGIAS CULTURALES PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL LUGAR N ÓMADAS 191
funciones. También por sus mensajes, que muestran la las estrellas, sino que ha propiciado la escuela audiovisual
otra cara de los montemarianos (la persistencia, la orga- del CCMMa y la realización de encuentros, talleres y fo-
nización, la alegría y las ganas de salir adelante) y que ros con temas relevantes para la agenda pública de los
invitan soñar, imaginar y vivir unos Montes de María di- municipios y de la región. Su impacto más notable tiene
ferentes. que ver con la forma en que reta las lógicas de la guerra,
disputándole el espacio público, la noche, el derecho al
Ciertamente, al igual que en la historia de Cecilia (en encuentro, al esparcimiento, los sueños y la posibilidad
La rosa púrpura del Cairo), quien encuentra el amor de la de organización social por medio de actividades lúdicas
mano de Tom Baxter, un aventurero que salta de la pan- de formación y reflexión que se derivan de la apreciación
talla del cine para rescatarla de su tristeza, lo que preten- cinematográfica.
de el Cineclub es que los espectadores encuentren razones
para creer y sentirse parte de la región, entrando en la Por lo tanto, la experiencia del Cineclub es un claro
pantalla y entablando diálogos con las películas, sus per- ejemplo de la forma en que en medio de las inscripcio-
sonajes y situaciones. Se trata de una invitación para per- nes de la violencia, el miedo y el terror, surgen espacios
derse entre la realidad y la ficción, y en este tránsito, de la de resistencia mediante lo que he denominado aquí polí-
misma forma que Cecilia, enamorarse, esta vez no de un ticas de lugar. Así, el Cineclub resiste las lógicas de guerra
héroe, sino de un lugar y las posibilidades de vida que que intentan negar el lugar, a través de la itinerancia, la
ofrece. La invitación anterior, más la itinerancia, la circu- metáfora de Woody Allen y el ser montemariano/a. En
lación por casi todos los municipios que conforman los suma, con la toma de la calle, del espacio público, y la
Montes de María y cinco años de trabajo continuo, dan recuperación de las formas de diálogo y encuentro perdi-
como resultado cambios en la región, imperceptibles en das durante la guerra.
términos cuantitativos, pero significativos a la hora de
vivir, imaginar y sentir el lugar, sobre todo, a la hora de En general, la experiencia del Cineclub Itinerante
retar las geografías del terror: “una cosa que nosotros La Rosa Púrpura del Cairo demuestra la forma en que
hemos analizado y es el efecto que produce el cine […] las acciones culturales comunitarias tienen incidencia
cuando tú les muestras a ellos mismos, porque ese efecto en proyectos políticos territoriales que controvierten
es otro, cuando la gente se ve en una proyección de cine las formas de vivir el lugar impuestas por actores arma-
no solo se reconoce, se ve bonita y se siente que eso es lo dos. Además, existe la posibilidad de resistir a las geo-
importante” (entrevista con Carmen Pacheco, CCMMa, grafías de terror y demás lógicas de la guerra,
2007). promocionando otras formas de imaginar, sentir y vivir
el lugar.
En síntesis, la propuesta y práctica del Cineclub es la
de construir un lugar por medio de la resistencia al te-
rror, el miedo y el silencio; un lugar que se vea y se deje
ver no como un simple producto de la guerra; que sea Citas
propositivo y se encamine a un proyecto de tolerancia,
respeto y paz. Es decir, el lugar como un proyecto políti- 1 Ubicada entre los departamentos de Bolívar y Sucre. Agru-
co surgido desde apuestas culturales y territoriales: “des- pa a quince municipios: El Guamo, San Juan Nepomu-
de los Montes de María, para los Montes de María y el ceno, San Jacinto, Zambrano, El Carmen de Bolívar,
Córdoba, María la Baja, Ovejas, San Antonio de Palmi-
mundo entero” (conversación personal con Carmen to, Morroa, Colosó, Chalán, San Onofre, Toluviejo y
Pacheco, 2007). Los Palmitos.
2 AUC, Autodefensas Unidas de Colombia. FARC, Fuerzas
Armadas Revolucionarias de Colombia.
Conclusiones 3 Premio de Paz (2003); Beca de Investigación Periodística para
el Desarrollo Sostenible, Avina (2006); premio de periodis-
El Cineclub Itinerante La Rosa Púrpura del Cairo es mo de la revista Semana y Petrobrás a mejor medio comunita-
una experiencia cultural que apunta a la reconstrucción rio (2007); y Beca de Creación del Ministerio de Cultura
de un lugar desdibujado por la violencia. En sus años de (2007).
trabajo no sólo ha realizado funciones gratuitas y bajo 4 Ejército Nacional, guerrillas y paramilitares.
GARZÓN, M. A.: RETANDO LAS GEOGRAFÍAS DE TERROR: ESTRATEGIAS CULTURALES PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL LUGAR N ÓMADAS 193
F ERNANDO URBINA: Olga, aprendiz de jaibaná. Río Catrú, 1973
Mauricio Berger*
El artículo corresponde a una investigación realizada en el marco del programa regional de becas Clacso, sobre experiencias
democráticas en América Latina. En este caso se reconstruyen algunos aspectos de acciones colectivas en defensa de la salud pública
en la ciudad de Córdoba, Argentina. Los modos y posibilidades para su despliegue así como los dispositivos que capturan y reducen
su potencia son considerados aquí sobre el fondo de las discusiones contemporáneas en torno al concepto de biopolítica.
Palabras clave: acción, biopolítica, dispositivo.
O artigo corresponde a uma investigação realizada no marco do programa regional de bolsa Clacso, sobre experiências democrá-
ticas na América Latina. Neste caso reconstroem-se alguns aspectos de ações coletiva em defesa da saúde pública na cidade de
Córdoba, Argentina. As maneiras e possibilidades para seu despegue assim como os dispositivos que capturam e reduzem seu
potencial são considerados aqui sob a base de discussões contemporâneas em torno do conceito de biopolítica.
Palavras-chaves: ações, biopolítica, dispositivo.
This article is a product of a research project undertaken under the Regional Scholarships Program of CLACSO, about
democratic experiences in Latin America. Here some aspects of collective actions in defense of public health in the city of Cordoba,
Argentina, are reconstructed. The ways and possibilities for its unfolding, as well as the devises that capture and reduce its power, are
considered here in the frame of contemporary discussions about the concept of biopolitics.
Key words: action, biopolitics, devise.
La diferencia con la política que hacen ellos es que En estos registros se despliega la posibilidad de crea-
nosotros venimos de abajo y tenemos que luchar ción sobre el reconocimiento de las condiciones de la
para conseguir un lugar, ellos ya lo tienen, esa es la política actual, y sobre esas condiciones actuar, innovar,
diferencia, que estamos tratando de enfrentar, no- crear otros sentidos, otras prácticas. La afirmación “no-
sotros somos la oposición, ellos son los gobernan- sotros hacemos otra cosa” denuncia las formas de la po-
tes, y ellos lo saben, ellos saben que nosotros a la lítica tradicional de los gobernantes, en tanto formas de
larga estamos haciendo la política, y saben que si control y disciplinamiento que tienden a reducir las exis-
nosotros nos lo proponemos a ellos los sacamos, tencias políticas como vidas que no merecen vivir y se
como lo sacamos a De la Rúa en su momento, como valen de los dispositivos de configuración del campo para
se hizo en el 19 y 20 de diciembre (integrante del ello. A la vez, esta denuncia es lo que permite su crisis, y
Movimiento Teresa Rodríguez). desde allí, generar otro espacio, partiendo de la lucha
por las necesidades, la defensa del reconocimiento de los
A mí me parece que nosotros nunca representamos derechos a la vida y a las condiciones de vida.
a nadie, y eso confundió un poco a la gente, como
que están esperando que uno sea el representante, A partir de las distintas perspectivas de sus protago-
depositan en uno, que vos seas un gestor, y yo te nistas, el valor de estos registros reflexivos está en la posi-
apoyo, que seas un partido político, y nosotros no bilidad de pensar, desde una concepción de la
éramos nadie, éramos ciudadanos que queríamos performatividad del lenguaje, en las condiciones de po-
defender nuestros derechos, que estábamos ahí, yen- tencia y bloqueo de la acción. Los conceptos nacen de
do a hablar con los funcionarios sin ninguna cha- formas de vida, aquellas que los dispositivos pretenden
pa, haciendo uso de nuestros derechos políticos, reducir a vidas que no merecen vivir y sin expresión polí-
pero esa nueva práctica no fue entendida, es más, tica significativa. Reconstruir reflexivamente la acción
creo que no le interesó a la gente (integrante de la colectiva a través de sus juegos del lenguaje, ha sido una
Mesa en Defensa de la Salud Pública). de las intenciones de la investigación. Mostrar cómo la
conexión entre las palabras y los hechos expresa una gra-
El tema este de los movimientos sociales, transver- mática de la acción colectiva, y en tanto marco
sales u horizontales, como sea, si no empieza a te- interpretativo, forma parte de la misma praxis política,
ner una repercusión política, no digo política ha sido una de las características metodológicas, desde
partidaria, y la gente empiece a ver en esa lucha una posición en que la misma tarea de investigación es
política realmente concretar [...] se queda en lo so- pensada como acción política. Por último, y en sintonía
cial básico, y ese es uno de los peligros de las asam- con estas afirmaciones, Agamben propone que sólo el
bleas, que quisieron ser copadas por grupos ultra, pensamiento y su potencia pueden romper con la fractu-
pero por otro lado está el tema de cuando queda la ra biopolítica que nos convierte en vidas que no mere-
cosa así nomás (integrante de la Mesa en Defensa cen vivirse (Agamben, 2001).
de la Salud Pública).
Este documento analisa o processo de construção da rede de aprendizagem generada pelo projeto “Simas e Coolmodes no
desenvolvimento de competências básicas”, desde as referências teóricas proporcionadas pela teoria de grafos e a teoria das redes
complexas, aplicadas à redes de conhecimento. Pretende-se identificar a estrutura e a dinâmica da rede e as conexões preferenciais
ocorridas. E assim, descrever o efeito que na complexidade da rede tem estratégias adotadas pelo grupo para melhorar a conectividade
entre os participantes.
Palavras-chaves: redes de aprendizagem, ambientes digitais para o aprendizagem, trabalho colaborativo, gestão de conhecimento,
conhecimento compartilhado.
In this document we present our analysis of the construction process followed by the learning network that emerged from the
project “Simas and Coolmodes in the development of basic competencies”. In doing so, we took as our theoretical frame the graph
theory and the theory of complex networks, applied to knowledge networks. Our aim is to identify the structure and dynamic of the
network and the preferred connections that happened within it. In addition, we want to describe the effect that the strategies adopted
by the group to enhance the connectivity among the participants had on the complexity of the network.
Key words: learning networks, digital environments for learning, collaborative work, knowledge management, shared knowledge.
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 211
1. Introducción reducido. La gestión de conocimientos, entendida como
el proceso de crear, probar, debatir y usar conocimien-
Para atender a la convocatoria de Colciencias, Redes to, se convierte en objeto de estudio sistemático. Aquél
de Aprendizaje, y acorde con la práctica de investigación es activado en los procesos cognitivos y sociales incor-
adoptada de manera general, que involucra bajo un mis- porados a las estructuras, prácticas, rituales y creencias.
mo ejercicio investigadores de diferentes campos de co- La escuela comienza verse como un artefacto social in-
nocimiento, el proyecto “Simas y Coolmodes en el corporado al proceso general de gestión de conocimien-
desarrollo de competencias básicas” es adelantado por tos de las organizaciones sociales, en particular, y la
tres grupos de investigación de experiencia incipiente: sociedad en general. Los centros educativos son instan-
Tecnimat de la Universidad Central, Temas y Remas de cias del concepto de institución escolar, una de cuyas
la Universidad de Cundinamarca y Guane de la Univer- mejores representaciones es una red. Cada institución
sidad Abierta y a Distancia (Bucaramanga), que en este es portadora de conocimiento tácito y de conocimien-
documento se identifican como G2, G3 y G4, bajo la to explícito.
dirección del reconocido grupo Tecnice, G1, y el apoyo
del grupo Colide, G5, de la Unión Europea. 2.1 Las comunidades de práctica y de
conocimiento innovador
En el proceso de construcción de la red se pueden
identificar tres momentos: en el primero, sólo intervie- La relación entre comunicación y constitución de
nen los grupos de investigación participantes en el pro- comunidades es aceptada por las diferentes disciplinas
yecto; en el segundo, se incorporan a la red los docentes que estudian las organizaciones humanas, de tal manera
de tres instituciones de educación media; y en el último que podemos sostener que su vínculo es la comunica-
momento del proceso, se incluyen los estudiantes de gra- ción y que ésta asume un valor positivo o negativo: el
do décimo de estos mismos colegios. positivo, en contraste con el negativo, es generador de
comunidad.
El proyecto tiene como objetivo central, la conforma-
ción de una comunidad de aprendizaje que trabaja de La dinámica de la formación de comunidades es es-
manera conjunta en el desarrollo de competencias básicas tudiada desde la perspectiva de la construcción de co-
en cuatro áreas de conocimiento, a saber: vida ciudadana, nocimiento con la denominación de “comunidad de
español, física y matemáticas, mediante la intervención en práctica”, que inicialmente se usó para caracterizar la
las prácticas educativas de tres instituciones de educación socialización en comunidades de pertenencia como
secundaria ubicadas en ciudades diferentes. Yucatán, Costa Ivory o alcohólicos anónimos (Lave y
Wenger, 1991). Estas comunidades aparecen como es-
El análisis de la conformación de la red atiende a su tables y el conocimiento experto se transmite de una
estructura, al observar el número de nodos o participan- generación a otra sin cambios deliberados o notorios.
tes en el proyecto, el número de aristas de comunicación Esta tendencia a la estabilidad se puede observar como
entre los nodos integrantes, el peso de estas aristas o la una tendencia dominante también en las instituciones
frecuencia de la comunicación entre los nodos y los cam- escolares, y es una explicación posible de su resistencia
bios ocurridos en cada uno de los momentos señalados. al cambio aun en la edad del conocimiento (Wenger,
Así mismo, atiende a las características de una red de 1998).
conocimiento, al observar el sentido de la comunicación,
esto es, la dirección seguida por las aristas que salen de Las tecnologías contemporáneas naturalmente afec-
cada nodo cuando requieren consultar para construir tan la organización de las comunidades humanas de dife-
conocimiento. rente naturaleza, en la medida en que establecen,
fortalecen o debilitan la comunicación entre personas y
grupos. Una de sus manifestaciones se ubica en el campo
2. Antecedentes de la economía, la cual depende de la producción de
información e innovaciones. Por contraste, a las institu-
El desarrollo de Internet ha servido de catalizador ciones educativas se les pide generar cambios y producir
para una serie de fenómenos que antes eran de ámbito los expertos que requiere la sociedad global.
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 213
gan una comunicación estable o permanente y compar- a hacerse mediante algunos miembros que se vinculan
ten con los miembros de sus propias comunidades esporádica o permanentemente a otras redes. Las re-
(Marsden, 1998). des son, por su naturaleza, un fenómeno complejo y
heterogéneo. La Figura 1 muestra una red posible con
Sin embargo, existe una discusión entre los investiga- posibles sub-redes. A muestra una subred con todos
dores sobre la importancia de las relaciones fuertes o sus miembros comunicados y con un miembro que
débiles. Hakkarainen et al. (2004) hacen una compara- sirve de puente con la red T. Wenger (1998) señala
ción entre éstas: si se considera el flujo de información, que después de cierto tiempo de interacción, los miem-
en las relaciones fuertes hay redundancia, en contraste bros de la comunidad de práctica tienden a llegar a los
con las débiles, en las cuales también las relaciones tien- límites de competencia exigidos por la misma, en ese
den a ser asimétricas; en cuanto a la naturaleza del cono- momento la conexión con otra comunidad puede ge-
cimiento compartido, en las relaciones fuertes el nerar conflictos y potenciales rupturas, en tanto sur-
conocimiento es complejo, mientras que en las débiles gen nuevas visiones y competencias. En estos casos,
es simple y preciso; en cuanto a la forma de conocimien- los miembros que intentan superar los límites de su
to, en las fuertes domina el no codificado y tácito, en comunidad y entrar a otra, sufren conflictos tanto
tanto en las débiles domina el codificado; en relación emocionales como cognitivos, dependiendo de su fle-
con el entorno, la vinculación con el contexto es pro- xibilidad mental y de la intensidad de comunicación
porcional a la fuerza de las relaciones; en cuanto al tipo con cada una de las redes a las cuales pertenece
de comunicación, domina en las relaciones fuertes la es- (Engeström, 1999). Superar los límites de una red y
pecialización de términos, la expresión compacta o entrar en otra permite desarrollar competencias: el
encapsulada, en contraste con la relación débil en la cual conjunto de competencias relacionales y cognitivas que
dominan las expresiones fáciles de entender; finalmente, habilitan el trabajo en red.
las relaciones fuertes exigen más recursos que las relacio-
nes débiles.
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 215
FERNANDO URBINA: Tronco calcinado. Río Caquetá, 1982
3.1 Posiciones frente a la gestión de conocimiento 3.3 Conceptos de la teoría de grafos y de las redes
complejas
La gestión de conocimiento, entendida de manera gene-
ral como el proceso de construir, probar, representar, de- Aplicables al estudio de las relaciones construidas
batir y usar conocimiento, presenta, según Hakkarainen entre los investigadores, docentes y estudiantes que par-
et al. (2004), tres posiciones diferentes, de acuerdo con ticipan en el proyecto, para su modelado, representación
el énfasis que se dé a la adquisición, la participación o la matricial, determinación de medidas e identificación de
creación en este proceso. El enfoque orientado a la ad- los atributos que permiten determinar las características
quisición de conocimiento centra el proceso en la repre- y cambios ocurridos en la red en cada uno de los mo-
sentación y en la transmisión de contenidos expresados mentos establecidos para su observación, y así mismo,
en datos y códigos, lo cual es frecuente en instituciones para la caracterización de las propiedades emergentes que
de educación media y superior. El enfoque encaminado otorgan la calidad de complejo a la red.
a la participación centra el proceso en la construcción
del conocimiento, mediante la realización de actividades
colaborativas que comparten un sistema de referencia; y 4. Evolución de la estructura
para quienes adoptan el enfoque conducente a la crea- de la red
ción, el conocimiento como tal es el que se consolida en
comunidades o redes que enfrentan problemas cognitivos La viabilidad del proyecto se concreta gracias a los
reales y desarrollan prácticas. contactos y al trabajo previo adelantado por los grupos
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 217
de investigación G1 y G2, del cual se obtiene como re- Colciencias y la asignación de los primeros recursos.
sultado el proyecto elaborado de manera conjunta y pre- Durante ese período se realizan reuniones generales de
sentado a Colciencias, respondiendo cada uno de los investigadores, para construir la plataforma conceptual
grupos por el trabajo por realizar en las áreas de física y soporte de los futuros desarrollos teóricos en las compe-
matemáticas. tencias específicas de cada dominio de conocimiento,
reuniones que integran los grupos en una comunidad
El tiempo transcurrido en espera de los resultados que puede ser modelada como lo muestra la red de la
de la convocatoria, permite incorporar al proyecto a los Figura 2, en la cual es visible la relación construida y la
grupos G3 y G4 para atender las áreas de español y vida función de facilitadores de la comunicación asumido por
ciudadana y, así mismo, la consolidación de todos ellos algunos de los participantes, como es el caso de los nodos
mediante el trabajo realizado en sus respectivas institu- (G11 y G22).
ciones. Este hecho puede representarse usando una rela-
ción que definida sobre cada conjunto particular de
investigadores, sirve a todos los grupos de manera gene-
ral. Para ello, usamos el enunciado: “x se encuentra con
y, para compartir conocimiento”, en donde x y y son
investigadores de un grupo.
5. Modelos de redes
0,2 Serie1
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 219
Las redes complejas permiten representar la última cias se anexa una curva que aproxima lo que sería de
evolución ocurrida en la estructura de la red, con la vin- manera continua el comportamiento de las mismas, evi-
culación al proyecto de los estudiantes de grado once de denciando pocos nodos altamente conectados y muchos
los tres colegios, y la ampliación de la relación con la pobremente conectados.
inclusión de parejas de la forma investigador-estudiante,
profesor-estudiante y, por supuesto, estudiante-estudian- 5.2.2 Verificación de la condición de pequeño
te. Los obstáculos presentados por las condiciones varia- mundo
bles de conectividad de los colegios, los cruces de horario
y las dificultades enfrentadas por algunos docentes en el Para crear nuevas conexiones dentro de la red, se adop-
manejo de las tecnologías de la información, aportaron tó como referente teórico la metodología de trabajo
la dinámica de entrada y salida de grupos en el último colaborativo mediante proyectos interdisciplinarios, que
momento del proyecto, y así mismo, el papel de algunos agrupó a estudiantes de las tres instituciones participan-
estudiantes como monitores de grupo, la evidencia de tes, como fue el caso del diseño y proceso de construc-
algunos nodos dinamizadores altamente conectados tan- ción de una montaña rusa, incluyendo en el mismo, el
to con sus compañeros de grupo como con los docentes estudio de su viabilidad, su diseño, el modelo matemáti-
e investigadores. De igual forma, es notoria la conexión co que articula sus componentes, el comportamiento fí-
preferencial entre los nodos directores de los grupos sico y el impacto social. Este tipo de actividad generó la
Colide y Tecnice. La red en este último momento crece emergencia de conexiones nuevas, incidiendo en la diná-
a un promedio de 129 nodos participantes que realizan mica de la red, sin embargo, la red no alcanzó la madurez
actividades colaborativas. deseada en el desarrollo de la característica de pequeño
mundo, respecto a ella, sólo podrían adicionarse unas pocas
5.2.1 Verificación de la condición de libre escala aristas emergentes, correspondientes a vínculos genera-
dos entre estudiantes y algunos docentes de distintas ins-
Para verificar la primera condición, o libre escala en la tituciones.
red, que ahora también incluye en sus nodos a los estu-
diantes de grado once, con la definición de grado K como
la probabilidad de que un nodo elegido al azar en la red 6. Percepción de conocimiento
tenga grado K, se construye la tabla de frecuencia para compartido
los 129 nodos y su correspondiente función de distribu-
ción de probabilidad, realizada a partir de la tabla de gra- Finalizada la experiencia, con el propósito de iden-
dos –de la misma manera en que fue realizada en la red de tificar la percepción de conocimiento compartido, se
investigadores-docentes– la cual se muestra en la figura pidió a cada uno de los participantes que señalara la
5. En la gráfica, a las barras de la distribución de frecuen- primera, la segunda y la tercera persona a la cual había
consultado más durante el proyecto. Con esta infor-
mación se construyó una nueva relación asimétrica que
afirma la complejidad de la red, representada en una
Histograma
Histograma red dirigida entre los mismos nodos, con vínculos va-
15 lorados, de acuerdo con la selección hecha en la en-
cuesta.
Frecuencia
Frecuencia
10
Nos preguntamos si a partir de los vínculos de la pri-
5 mera red se pueden predecir los vínculos en la segunda.
Para responder a la pregunta, correlacionamos los valo-
0 res de conexión de cada nodo en las dos redes. El índice
de correlación es de 0.174 (p>0.051), que se ubica un
21
0
2
4
6
8
10
13
15
17
19
23
25
30
33
36
38
40
42
Clase
Clase punto por debajo del nivel de significación estándar en
estudios sociales. El nivel de varianza compartida entre
los dos conjuntos de datos es del 30% (R2=0.30) y un
Figura 5. Red ampliada con estudiantes
Función de distribución de grado valor de prueba F(1,27)=3.87.
MALDONADO GRANADOS, L. F. Y SERRANO IGLESIAS, E.: CONSTRUCCIÓN DE UNA RED DE APRENDIZAJE N ÓMADAS 221
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4 Structural holes of Information Trans mision, No. 2.
5 Gatekeepers NARDI, B., S. Whittaker; y H. Schwarz, 2002, “NetWORKers
and their activity in intentional networks”, en: The Journal of
6 Brokers Computer Supported Cooperative Work, No. 11.
7 Embebed links NISHIGUCHI, T., 2001, “Coevolution of interorganizational
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224 NÓMADAS NO. 28. ABRIL 2008. U NIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA
RESEÑAS
NÓMADAS 225
PROYECTOS EN CURSO
NÓMADAS 227
y cursos preuniversitarios, institucio- co y la construcción teórico-concep- de un taller y dos conferencias, así
nes de educación no formal y ciclos tual en la fase de fundamentación; como de la elaboración de un libro y
básicos de programas universitarios incorpora la observación y estudio dos artículos.
de música. descriptivo de propuestas innova-
doras en música en tres ciudades en En suma, el proyecto apunta a
Son objetivos específicos: 1) cons- la caracterización. En un tercer mo- que la educación musical puede avan-
truir un marco teórico-conceptual mento de diseño, con énfasis creativo, zar notoriamente si se apoya en los
que indague sobre los componentes se elabora material musical original hallazgos de otras áreas, pero al mis-
fundamentales de la inteligencia con variadas dinámicas como núcleo mo tiempo, éstos resultan insuficien-
musical. 2) Definir dispositivos de los dispositivos pedagógicos y se tes si no se convierten desde el
pedagógicos para cada uno de los articulan nuevas tecnologías para au- interior del campo, en propuestas es-
componentes. 3) Incorporar a los dis- dición, escritura y apreciación musi- pecíficas que permeen los discursos,
positivos el análisis crítico de expe- cal en un software. Las pruebas piloto las prácticas y los modelos pedagógi-
riencias innovadoras adelantadas en en cinco instituciones posibilitan la cos, elementos que convergen en la
instituciones de educación musical. definición de posibles ajustes y praxis.
4) Elaborar ejercicios musicales, replanteamientos. La fase de sociali-
como núcleo de los dispositivos pe- zación se dirige a la comunicación de
dagógicos, con variadas dinámicas productos y trayectorias de la inves-
creativas que propongan problemas tigación en espacios académicos, Cita
sonoros a la inteligencia musical de investigativos y pedagógicos.
niños y jóvenes. 5) Diseñar un 1 Los proyectos iniciales de la Línea fue-
software que articule, con intenciona- Se prevén como resultados de la ron adelantados por un equipo de in-
vestigación conformado por Ligia
lidad pedagógica, los niveles teóri- investigación los dispositivos pedagó- Ivette Asprilla (investigadora princi-
co-conceptual, creativo-musical y gicos dirigidos al desarrollo de la pal), Gisela de la Guardia (coinvesti-
tecnológico. 6) Validar la propuesta inteligencia musical; incluyen el refe- gadora), Luis Carlos Jiménez y Jaime
y definir posibles ajustes y replantea- rente teórico, ejercicios musicales, Andrés Gutiérrez (auxiliares de inves-
tigación).
mientos a través de su aplicación pi- estrategias pedagógicas y base de da-
loto en diferentes instituciones tos. Se presentan en versión impresa
educativas y 7) difundir y generar (módulos y partituras), que incluyen
apropiación de los resultados del pro- grabaciones en disco compacto y el * Pianista del Conservatorio de la Uni-
versidad Nacional con estudios de per-
yecto en ámbitos investigativos, edu- software correspondiente, así mismo, feccionamiento en piano en Alemania.
cativos y académicos. se forman auxiliares de investigación Especialista en Comunicación-Educa-
e investigadores de campo, se valida ción y Magíster en Investigación
El objeto de investigación se lo musical como campo de investiga- Interdisciplinaria. Directora de la Ca-
rrera de Estudios Musicales de la Uni-
aborda metodológicamente a través ción interdisciplinar, se socializan los versidad Central. E-mail: ligiaivette@
de la revisión y el análisis bibliográfi- resultados a través de la realización gmail.com
Edgar Giovanni Rodríguez que uno se encuentra en la ca- lantos tecnológicos en la vida práctica
Cuberos* lle en donde dicen: “La tecno- de las personas; el segundo, con la uti-
logía cómo ha avanzado”. lización de dichos adelantos y de otras
[...] Pensemos, ¿Cuáles son los (Estudiante de V semestre de Li- aplicaciones en sentido estrictamente
desarrollos o transformaciones cenciatura en Educación Bási- pedagógico y didáctico. En ambos ca-
actuales? Brindemos una res- ca con Énfasis en Ciencias sos, el papel del docente es fundamen-
puesta local: salir a la calle y Sociales). tal, por un lado, se requiere de una
encontrarse en cada cuadra con práctica educativa que facilite la críti-
cinco estaciones de Internet, Preguntarse por la manera en que ca sobre las implicaciones de los usos
venta de llamadas a todo el se articulan los diversos avances tec- inadecuados de la tecnología y la ma-
mundo en menos de dos segun- nológicos en el espacio de la escuela, nera como ésta genera una acción par-
dos, ¿acaso también el carro que constituye una compleja trama de ele- ticular sobre el mundo constituido
anda con biogasolina?, ¿el chip mentos contemporáneos entre los por el sujeto. De otra parte, se necesi-
de las tarjetas del transporte? cuales se destacan problemáticas rela- ta de un educador actualizado que
Ahora, un panorama desde la cionadas con el poder, la comu- pueda aprovechar los adelantos comer-
escuela: software que miden la nicación, la cultura, la política, la ciales y las herramientas disponibles
rapidez mental, que enseñan imaginación, la ideología, la filosofía para imaginar y crear dispositivos y
“más simple y concreto” que un de la tecnología y la noción de subje- estrategias tecnológicamente didácticas
maestro, una sala de cómputo tividad, entre otros. Así, es posible y pedagógicamente tecnológicas.
en donde los niños hacen car- afirmar que el asunto tiene por lo
tas, cuentas y dibujos. Eso es lo menos dos ámbitos de reflexión en la En este sentido, y como se aprecia
que es el avance de la tecnolo- institución escolar: el primero tiene en el comentario inicial de la maes-
gía, esos comentarios con los que ver con la recepción de los ade- tra en formación, existe desde la uni-
NÓMADAS 229
versidad, y por supuesto desde la ex- elemento puede plantearse como una 3. ¿Bajo qué condiciones un en-
periencia, una recepción particular oportunidad para pensar y reflexio- foque de enseñanza diferente que se
y un posicionamiento específico fren- nar la manera como puede “enseñar- reconoce en el contexto de los cir-
te a la tecnología como fenómeno se tecnología sin computadores”. cuitos del discurso localizado, pue-
sociocultural1 , de los cuales se deri- de superar la tradición de las prácticas
van inquietudes, temores y expec- En efecto, se busca precisamente de enseñanza específicas?
tativas acerca de lo que estaría descentrar la enseñanza de la informá-
dispuesto a hacer el estudiante una tica del problema de la posesión de la 4. ¿Es posible que el estudiante
vez convertido en maestro. Es decir, máquina. Igualmente se debe plantear prefiera lo tradicional frente a plan-
existirían por lo menos cuatro esce- la cuestión como un asunto de gene- teamientos alternativos porque le re-
narios: un docente distante de la ración de conocimientos, en el senti- sulta más cercano a los procesos
tecnología (por convicción o desco- do del aprovechamiento de una metodológicos conocidos?
nocimiento), un docente crítico de herramienta tecnológica, en otras pa-
la tecnología, un docente estratégico labras, significa entender que la tecno- 5. ¿Cómo se articulan dichas in-
con la tecnología (pedagógica y logía no tiene aplicación si no hay un novaciones con el contexto de la es-
didácticamente) y, finalmente, un usuario que le dé sentido y que la cuela en términos de la coherencia
docente capaz de combinar estas dos aproveche en términos creativos. con el PEI y con las necesidades
últimas variantes de la práctica, o sea, locales?
crítico y a la vez posibilitador del uso, Por esta razón, y desde mi expe-
creación y administración de recursos riencia como formador de futuros La percepción compartida de és-
informáticos. educadores en esta área y en el con- tas y otras preocupaciones en insti-
texto de una universidad pública du- tuciones de educación básica, media
Estos posibles escenarios comien- rante cuatro semestres consecutivos, y superior frente al fenómeno tecno-
zan a definirse necesariamente desde tuve que reflexionar de forma perma- lógico, ha motivado que a través del
la perspectiva que el docente univer- nente sobre los siguientes aspectos: Observatorio de Informática Educa-
sitario construye para trabajar con los tiva de la Secretaría de Educación del
futuros maestros en las áreas que en 1. ¿De qué manera lo que “se en- Distrito Capital (SED), se impulsen
los currículos de las licenciaturas lle- seña” tiene relación (de oposición y/ proyectos encaminados a reconocer
van habitualmente nombres como: o sincronía) con el conjunto de las evidencias, y en términos genera-
“Informática Básica y Aplicada”, “In- saberes que circulan en el magma les, el estado del arte sobre la situa-
formática”, “Sistemas”, etc. Esta pers- discursivo al cual tienen acceso los ción de las prácticas de informática
pectiva de trabajo está atravesada en estudiantes? educativa en Bogotá.
algunos casos por la idea de que es-
tas asignaturas son “de costura o de 2. ¿Cómo puede sostenerse la ex- Una parte de estas inquietudes
relleno”, por lo que el círculo vicio- periencia incluso desde las pugnas, que impregnan la práctica de quie-
so termina por reproducirse. En tensiones y disputas propias de la nes en este momento están a cargo
otros casos, la falta de infraestructu- academia en relación con la visión de dichos cursos en universidades y
ra puede ocasionar “desaliento” fren- que se tiene sobre el problema de la colegios, encuentra en el trabajo que
te a estas asignaturas. Pero incluso este tecnología? ofrece el equipo del IESCO de la
NÓMADAS 231
de sus prácticas específicas, y las ten- reconocer prácticas de innovación o
siones y fuerzas que afectan dichos proyectos alternativos en ciencia, tec-
Somos una ONG de desarrollo, sin procesos. nología y sociedad; aplicaciones de
ánimo de lucro, creada por iniciativa plataformas virtuales; temáticas abor-
del sector privado, que a través de La lectura y estudio de este mate- dadas en los programas en torno a
procesos de formación y empo- rial que incluye un disco compacto género, resistencias, etc. Por esta ra-
deramiento, fortalece y mejora las
condiciones de vida de las mujeres y multimedia con algunas de las entre- zón, la mayoría de la información del
sus familias, generando autonomía y vistas realizadas, permite una visión estudio, si bien aporta datos deriva-
autogestión para una cultura de éxito. contextual sobre el estado, los retos dos de sondeos estadísticos de carác-
y las oportunidades de un área de tra- ter descriptivo, no permite diferenciar
Hacemos parte del Sistema Nacional bajo que en la actualidad no ha sido alternativas pedagógico-didácticas
de Bienestar Familiar y por esto propo- abordada con suficiencia, y que de- que seguramente ya se realizan en las
nemos el diseño, desarrollo e implemen-
tación de programas y proyectos en manda la atención de las comunida- instituciones y que podrían ser tema
torno a las necesidades de la mujer y la des académicas de las instituciones, de análisis como experiencias signifi-
familia, en el marco del desarrollo y la los diseñadores de políticas públicas cativas replicables. No obstante, esta
responsabilidad social empresarial de y los investigadores. investigación tiene la ventaja de de-
Colombia. jar abierta una multiplicidad de te-
A pesar de la corta duración del rritorios en disputa y bases teóricas y
NUESTRAS TRES ÁREAS DE
DIRECCIONAMIENTO SON: estudio, los resultados favorecen la ex- metodológicas para seguir desarrollan-
ploración y el interés por un campo de do nuevos diagnósticos, sondeos y
• Premio Mujeres de Éxito trabajo pedagógico y social que se ha evaluaciones que estén dirigidos a
• Talentos de Éxito descuidado por varias razones, algunas comprender esta problemática, con-
• Centro de Desarrollo Empresarial asociadas con el problema educativo virtiéndose así en un documento de
La Fundación Mujeres de Éxito cuenta del país (inequidad, cobertura, calidad) referencia local obligado.
con el Programa de Socias y otras específicamente ligadas a la
Cooperantes en donde apoyamos la au- cultura académica en que se forman
tonomía y la autogestión para una ver- nuestros docentes y a la capacidad de
dadera cultura de éxito. los formadores de formadores de
contextualizar sus saberes y contenidos * Profesor de la Universidad de la Salle
Como socia cooperante y de la Pontificia Universidad Javeriana.
puedes contribuir a frente a la mirada coyuntural que exi- Estudiante de la Maestría en Investiga-
consolidar la fundación. gen las tecnologías. ción en Problemas Sociales Contem-
poráneos–IESCO, Universidad Cen-
VINCÚLATE tral. E-mail: e-rodriguez@javeriana.
Tal y como reconocen los auto- edu.co
res, por los límites del trabajo no se
Cra. 47 No. 91-96 1
Este fenómeno puede verse con
alcanzaron a realizar acercamientos claridad en la experiencia pedagó-
PBX: 2578231 - 2578195
www.fmujeresdeexito.org comprensivos a las universidades y gica de un cibersitio como <www.
demás instituciones educativas para informaticaupn.4t.com>.
Alexis V. Pinilla Díaz* acertada Carlos Valderrama en el tex- dos apuestas fundamentales que re-
to que presentamos, la ciudadanía, sultan clave a la hora de ampliar los
Dentro de las investigaciones en como categoría analítica, ha sufrido horizontes comprensivos de la ciuda-
educación durante los últimos años, la fuertes cuestionamientos y reparos. danía. En primer lugar, la apuesta
pregunta por las posibilidades de la ciu- La idea clásica de ciudadanía, enten- metodológica se centra en analizar los
dadanía en la escuela ha ocupado un dida como un estatuto jurídico- contextos en los cuales se producen
lugar central. Para corroborarlo, basta político mediante el cual les eran significados sobre la política, la edu-
con dar una mirada a las convocatorias otorgados ciertos derechos a los in- cación, la comunicación y, por su-
y proyectos financiados por entidades dividuos, ha entrado en crisis. Hoy puesto, la ciudadanía. En un riguroso
como el Instituto Colombiano para el la ciudadanía, como muchos otros trabajo de investigación cualitativa,
Desarrollo de la Ciencia y la Tecnolo- conceptos de la modernidad occiden- se recupera la voz de los actores esco-
gía Francisco José de Caldas (Colcien- tal, se mueve en un terreno arenoso lares (padres, docentes, directivos
cias) y por el Instituto para la y movedizo, caracterizado por el cru- docentes y estudiantes), lo cual per-
Investigación Educativa y el Desarrollo ce de múltiples expectativas sociales mite mostrar la riqueza y variedad de
Pedagógico (IDEP) 1. Así mismo, una y por la expresión de las más variadas las tensiones que existen en la escue-
consulta a las líneas y grupos de investi- manifestaciones culturales y políticas. la, confirmando, de paso, que esta ins-
gación de las universidades con progra- Esta crisis lleva consigo un reto para titución “debe ser inevitablemente
mas –de pregrado y/o postgrado– la investigación social y educativa, pensada [según el autor] como un
relacionados con el ámbito educativo, cual es darle nuevos contenidos y sen- espacio de convergencia de diversos
nos muestra la amplitud de la investi- tidos a la ciudadanía y proponer rutas proyectos de formación del sujeto”
gación en temáticas como formación analíticas y metodológicas novedosas (170). Esta apuesta metodológica
ciudadana, socialización política, ética para comprender la forma como se pone en tela de juicio, además, el
y ciudadanía, educación y cultura polí- re-construye lo político y lo ciudada- prurito de neutralidad que se ha apo-
tica, subjetividad política, entre otras. no en el contexto actual. derado de la reflexión sobre el cam-
po de la formación ciudadana, y que
¿Por qué este interés por la ciu- ¿De qué manera asume este reto se ha hecho hegemónico en la políti-
dadanía? Como lo sugiere de manera Carlos Valderrama? En su texto hay ca pública al respecto, amparada en
NÓMADAS 233
enfoques que reducen lo ciudadano fundizar la reflexión pedagógica so- personas en los asuntos públicos de
al caudal de conocimientos sobre lo bre el desarrollo de competencias la institución (participación que des-
cívico y a la obediencia de la norma comunicativas y argumentativas; y, borda los mecanismos formales del
por parte de los niños, niñas y jóve- una última pista, dimensionar el ca- gobierno escolar), el excesivo protago-
nes. Alejado de este falso cientifi- rácter dialógico del ejercicio ciudada- nismo del docente en contravía del
cismo, Carlos Valderrama se arriesga no en la escuela. desarrollo de la autonomía y la falta
a exponer un ejercicio hermenéutico de actitudes reflexivas motivadas por
para comprender el carácter polifó- ¿Cómo llega el autor a estas pro- las dinámicas comunicativas. En este
nico que adquiere la ciudadanía en puestas? Las preguntas que orientan contexto, la formación de competen-
el escenario escolar, producto del cru- el texto están organizadas en tres gran- cias comunicativas, las cuales son
ce de culturas que tiene lugar en el des campos analíticos: la comunica- cruciales a la hora de pensar la forma-
mismo. ción, la ciudadanía y la educación. ción ciudadana en la escuela, resulta
En el primer campo el autor centra bastante problemática.
En segundo lugar, con base en el su interés tanto en las dinámicas
trabajo empírico y hermenéutico rea- comunicativas en el aula, como en el La pregunta por la comunicación
lizado, el autor hace un aporte clave uso de los medios de comunicación y la ciudadanía se torna un poco más
para ampliar el contenido teórico de en la escuela. Aquí resulta de interés densa con la inclusión de los medios
la ciudadanía. En esta dirección aven- la propuesta de la densidad comu- en el escenario educativo. La hipóte-
tura, desde la comunicación-educa- nicativa escolar, la cual se entiende a sis del autor en este tópico es que,
ción, una apuesta conceptual a partir partir de tres tipos de convergencia: contadas excepciones, “el lenguaje
de la cual se entiende la ciudadanía la de lenguajes, la de medios y la de audiovisual, y por extensión los me-
como una práctica “históricamente sentidos de la realidad. En el com- dios masivos, no han adquirido sufi-
contextualizada” que adquiere signi- plejo cruce de estos tres aspectos se ciente protagonismo en las […]dinámicas
ficado en contextos socio-culturales configura, por un lado, determinado comunicativas formales en el ámbito es-
específicos, y que ayuda a la interpre- tipo de actuación pública y una serie colar y especialmente en el aula de cla-
tación del mundo por parte de los de discursos sobre la comunicación, se. No adquieren presencia decidida
sujetos. La formación ciudadana, la educación y la ciudadanía, y, por en las prácticas pedagógicas ni en las
pensada desde la comunicación-edu- otro, cobran forma las dinámicas estructuras curriculares” (80). Esta
cación, ofrece cuatro pistas básicas: comunicativas específicas de la insti- hipótesis nos lleva a la inevitable con-
reconocer que “son las dinámicas y tución escolar. clusión de que hay un uso instrumen-
las estructuras de la comunicación en tal de los medios en la escuela y una
el interior de la institución escolar ¿Qué tipo de sujetos políticos apropiación acrítica de las nuevas tec-
las que facilitan un determinado tipo están agenciando las dinámicas nologías, bajo la premisa de que mo-
de formación del sujeto político” comunicativas de la escuela? Según el dernizar la educación equivale a tener
(188-189); comprender la manera en autor, las siguientes son algunas cla- un mayor número de computadores
que los medios y las nuevas tecnolo- ves para dar respuesta a esta pregun- por estudiantes. En términos genera-
gías de la información se articulan a ta: la importancia que le dan los les, los retos que los medios le plan-
la educación y a la formación políti- actores escolares a la competencia tean a la institución escolar son de tres
ca de los niños, niñas y jóvenes; pro- argumentativa, la participación de las órdenes: retos epistemológicos y pe-
NÓMADAS 235
ción negativa), el hogar y los medios de los sitúa en un diálogo permanente. docentes con la formación del pen-
comunicación, dentro de los escenarios Es importante anotar que esta plura- samiento crítico. Este hecho, sin
más destacados. lidad de la escuela cuestiona certe- duda alguna, le otorga un valor alta-
ramente el sentido monolítico y mente significativo a este texto.
En su mirada sobre la educación, vertical otorgado a la formación ciu-
la pedagogía y la formación del suje- dadana por las políticas públicas de
to político, el autor destaca la impor- los últimos años, y pone en discusión
tancia asignada a la educación moral, –según Guillermo Orozco, autor del Cita
diferenciando tres perspectivas al res- prólogo–
pecto. La primera entendida como 1 En el momento pueden mencionarse
una “adaptación heterónoma del in- otras ‘normalidades’ y otros ocho estados del arte, además de nu-
merosos encuentros nacionales e in-
dividuo a las pautas axiológicas que métodos y estrategias pedagó- ternacionales, que dan cuenta de la
predominan en el grupo social al cual gicas que rebasan esfuerzos amplitud del tema: A. Rueda, (1995);
pertenece”; la segunda, cercana a las formales para incluir el diálo- M. Mejía y G. Restrepo, (1997); Cole-
propuestas cognitivo-evolutivas, que go y procesos deliberativos que gio del Santo Ángel, (1999); G. Ho-
yos y A. Ruiz, (2001); G. Restrepo,
plantea la necesidad de promover en incluso ponen en tela de jui- (2001); J. Rodríguez, (2002); M.
el individuo un pensamiento moral cio la norma estática, y que Herrera, A. Pinilla, R. Infante y C.
autónomo; y la tercera, relacionada pueden trascender a partir de Díaz, (2005); A. Pinilla y J. Torres,
con el enfoque constructivista pro- la propuesta conciente de los (2006).
puesto por Carracedo, en donde se actores escolares sobre otros
propone un concepto de educación significados de lo que es ser
moral en cuanto autoconstitución de ciudadano en realidades con-
la persona moral. cretas contemporáneas (23). Bibliografía
En términos generales, el texto En síntesis, las investigaciones de HENRY, Giroux, 1998, La escuela y la lu-
Ciudadanía y comunicación hace un Carlos Valderrama nos colocan fren- cha por la ciudadanía, México, Siglo
aporte valioso a la comprensión del te a nuevos cuestionamientos relacio- XXI.
proceso de formación de ciudadanías nados con temas como la posibilidad
plurales en la escuela y al carácter di- de formar ciudadanos en la escuela,
verso y dinámico de esta institución. los retos para transformar las diná-
Antes que develar un sólo modelo de micas organizativas y comunicativas de
ciudadano, de educación, de comu- esta institución, el redimensiona-
* Docente del Departamento de Ciencias
nicación, o de política, el autor se miento de la política y las prácticas Sociales, Universidad Pedagógica Nacio-
acerca a la variedad de significados pro- ciudadanas, la responsabilidad de los nal. Codirector del grupo de investiga-
puestos por los actores escolares y, medios de comunicación en el con- ción en Educación y Cultura Política.
en un lúcido ejercicio hermenéutico, texto actual y el compromiso de los E-mail: apinilla@uni.pedagogica.edu.co
Fernando Zalamea* una buena idea del contenido del navegación por la pluralidad del co-
volumen: “1. Telémaco global: en- nocimiento, donde Restrepo provee
Las tramas de Telémaco. Una nueva tre la trama y la red”; “2. Telémaco múltiples orientaciones parciales.
stoa: portales y pasajes para re/significar local: de la ciudad letrada a la ciu-
la ciudad/región/nación/mundo consis- dad democrática”; “3. Telémaco Desde el título mismo del traba-
te en una cuidadosa y dinámica re- glocal: tramas teóricas para un vai- jo, empieza a emerger una enorme
flexión destinada a sostener la creación vén”; “4. En el umbral de un por- riqueza autorreferente que recorrerá
del portal virtual <www.telemaco. tal: Telémaco en perspectiva”. Los todo el texto, y que, como sabemos
fuac.edu.co>, imaginado por Gabriel movimientos y el tránsito (tanto desde Gödel, no consiste en una
Restrepo y sus colaboradores, en la general, como particular) de la cul- limitante, sino en una exponenciación
búsqueda de nuevas herramientas para tura entran a ser cuidadosamente misma del saber. De hecho, un pleno
entender las complejas fluctuaciones desbrozados por Restrepo. Desde el enlace de forma y fondo es uno de los
de la cultura contemporánea. Se trata comienzo, una lectura sui géneris de logros notables de Las tramas de
de un proyecto educativo comunitario entreveramientos entre filosofía, Telémaco: la misma noción de trama
de envergadura, con más de veinte mil metafórica, historia, sociología y –potenciadora, libre, “abriente”– se
huéspedes en su primer año de prue- educación lleva al autor a una dis- aplica tanto a la estructura del libro,
ba, pero en cuyo producto escrito – tinción crucial entre “red” –urdim- como a su propio estilo. La comple-
Las tramas de Telémaco– sobresalen, no bre centrada y cerrada, controladora ja trama de la cultura (en la acepción
obstante la idiosincrasia singular de y normativa– y “trama” –urdimbre específica introducida por Restrepo)
Restrepo, modos peculiares de pensa- múltiple y abierta, potenciadora de genera, en efecto, en el texto mismo,
miento abierto y transversal y sus for- la imaginación y de la libertad–. Las (1) una importante hondura metodo-
mas inconfundibles de expresión. tramas de Telémaco abre entonces al lógica y filosófica; (2) un análisis
lector un amplio espectro de nue- cultural multidimensional, nunca
El texto se divide en cuatro ca- vos mundos por explorar y le per- reducible a componentes aislados; (3)
pítulos, cuyos sugerentes títulos dan mite adentrarse en una oscilante una extraordinaria plasticidad en los
NÓMADAS 237
manejos metafóricos y etimológicos; integración de los saberes (43), la Las tres tramas corresponden, en su
(4) un tejido en vaivén entre múlti- contraescritura en las tramas (60), las orden, a tres de las sugerencias de
ples perspectivas, históricas, sociológi- problemáticas de la traducibilidad Calvino en sus Seis propuestas para el
cas, económicas, políticas. Tan (81), las integraciones no triviales de próximo milenio : (a) multiplicidad, (b)
cómodamente asentado en el mundo lo local y lo global (82), el lugar de exactitud, (c) visibilidad. De hecho,
griego como en las complejas torsio- las universidades como transductores la pluralidad multiplicativa de Las tra-
nes de la contemporaneidad, Restrepo de apertura/ruptura (127), la riqueza mas de Telémaco, la profundidad exac-
conduce siempre al lector más allá de de una creatividad “tramática” (mag- ta de la matemática avanzada y la
sí mismo, y le abre magníficas oportu- nífico neologismo que lleva a expo- riqueza de la imagen poética se
nidades de cuestionamiento. Toda su nenciar lo dramático) (142), el entreveran a partir de las formas más
labor, mezcla contundente de razón y péndulo pascaliano del saber y el bellas e inesperadas. El portal (a) de
de sensibilidad –“razonabilidad” diría amor, de la razón y la emoción (145), in/formación y trans/formación, que
Vaz Ferreira al juntar los dos térmi- la compleja estructura de fronteras y no es otro que el “intercambiador”
nos–, apunta a la importancia del trá- bordes en un portal (ámbitos concep- de Serres en su Atlas, corresponde,
fico, del tránsito, de la contaminación tuales, técnicos, informáticos) (182), por ejemplo, a una comprensión
cultural. etc. Incesantes ascensos y descensos, topológica (b) de las fronteras entre
permanentes mediaciones entre lo interior y exterior, a su vez formas del
Magnífico contaminante del co- genérico y lo individuado, bienveni- saber lógico (iteración y desiteración
nocimiento –y encarnación misma de das contaminaciones entre los saberes peirceanas), pero corresponde tam-
la “razonabilidad”: filósofo, sociólo- sostienen la sistemática ruptura de los bién a formas precisas de la estructu-
go, historiador y poeta a la vez– dualismos emprendida por el autor. Se ra del Ulises joyceano (c), desde la
Restrepo se abre y nos abre al regalo trata, en suma, de un “crecimiento entrada de Telémaco (capítulo 1,
de la inteligencia. Todo el libro es en continuo de la potencialidad” (el discreción, contrastación) hasta la sa-
realidad un emocionado (y emocio- summum bonum de la estética, según lida de Penélope (capítulo 18, conti-
nante) homenaje al pensar amplio, Peirce), orientado a acrecentar la in- nuidad, fusión), con toda la trama
plural, plástico, sin caer en las teligencia del lector, quien se ve intermedia de portales que van expan-
ingenuidades relativistas y acríticas avocado a recoger y reunir ( legere: raíz diendo la imposible representación
del posmodernismo. La inteligencia de la intelligentia), y, por tanto, a leer del mundo en un día dublinense. De
aparece desde el portal mismo –como y entender mejor el mundo. igual manera, la fundamental com-
pasaje de la in/formación a la trans/ prensión de la sabiduría (a) como
formación (13), como flujo que pro- Por ejemplo, la brillantez meta- integración de los saberes en Las tra-
duce un nuevo saber trans/figurador– fórico-estilístico-etimológico-poético- mas de Telémaco, corresponde a la bús-
y se refrenda a lo largo de fascinantes cognitiva de Restrepo produjo en queda de un “cálculo diferencial e
dialécticas trans/formativas en el cur- este lector/reseñador un recogimiento/ integral” abstracto (b) que enlace lo
so del trabajo: la polaridad trama/ recolección –suerte de lectura tramática múltiple y lo uno (“cálculo” provis-
red (19), el revés del revés como apun- de Las tramas de Telémaco– al llevarlo to en las últimas décadas del siglo XX
tador de libertad (24), la terceridad a entrelazar (a) el texto de Restrepo, por la teoría matemática de catego-
(y/o continuidad) como indicador (b) algunas formas de la matemática rías), pero corresponde también al
de integración (39), la sabiduría como contemporánea, (c) el Ulises de Joyce. sistema de preguntas y respuestas del
NÓMADAS 239
HACER REAL LO VIRTUAL. DISCURSOS DEL
DESARROLLO, TECNOLOGÍAS E HISTORIA DEL
INTERNET EN COLOMBIA
Dairo Andrés Sánchez Mojica * logía y libertad. De igual forma, a par- el país de al lado compró esos aviones
tir de esta actitud natural solemos dar de combate, nosotros no podemos
Vista desde la perspectiva del sen- por sentada una relación directamen- quedarnos atrás ¡ni más faltaba!
tido común, la tecnología se nos pre- te proporcional, según la cual, a
senta como un objeto inerte; al decir mayor tecnología habría mayor desa- Ahora bien, no siempre y en
de Heidegger como un ente-a-la- rrollo social, por ello se considera que todo lugar los objetos tecnológicos
mano, acaso como un instrumento siempre y cuando contemos con tec- se han concebido de tal manera, aque-
que sirve para la realización de la vo- nologías “avanzadas” podremos lla forma de valoración está asociada
luntad de las personas, que en su li- realizar de manera cada vez más con lo que Weber llama el proceso
bre albedrío deciden qué hacer y a satisfactoria nuestras necesidades so- de desencantamiento del mundo. En
través de qué recursos tecnológicos. ciales y, en consecuencia, seremos otros momentos y en otras socieda-
Sin lugar a dudas, desde esta mirada, más competitivos en el marco de la des los objetos tecnológicos no se per-
la tecnología no sería otra cosa que globalización contemporánea, más ciben como inertes y la naturaleza no
un instrumento para la realización de libres. Esta forma de pensar permiti- se considera como un polo suscep-
la intencionalidad de alguien, un ría entender, de algún modo, el fre- tible de dominio para la realización
medio para la ejecución de un fin. nético afán que tenemos por acceder de la libertad humana, lo que nos
De este modo, la tecnología se aso- a la tecnología, por entrar en el torren- permite sospechar que asumir la tec-
cia al dominio de la naturaleza y al te de los lenguajes digitales y, por qué nología como instrumento posibili-
proceso de liberación de la humani- no, la apremiante necesidad de “po- tador del tránsito hacia el progreso
dad frente al supuesto determinismo nernos al día” en términos de lo que humano por medio de la domestica-
causal de aquélla. Por lo tanto, se es- el mundo nos exige. Si mi vecino com- ción de la naturaleza es una construc-
tablece una analogía entre naturaleza pró ese televisor de plasma, yo no me ción socio-histórica localizada y no
y despotismo, así como entre tecno- puedo quedar atrás ¡ni más faltaba! Si una verdad incontrovertible.
NÓMADAS 241
nuevas tecnologías como un impor- o una mercancía, sino como un arte- Es por esto último que los au-
tante factor de desarrollo de la facto que articula dimensiones sim- tores otorgan particular importancia
economía, lo cual suponía la ma- bólicas y relaciones de poder que lo al uso que de Internet hacen los lla-
sificación del uso de Internet y el vinculan al imaginario del subdesa- mados Programas de Desarrollo y Paz
desarrollo del sector productivo a rrollo y a prácticas sociales concretas. (PDP), pues desde estos procesos
través de la modernización de las ins- En este contexto, el “discurso sociales se generan significados alter-
tituciones públicas. El tercer perio- desarrollista [que] ubica al país den- nativos del desarrollo y la paz, aso-
do (2001-2007) tiene que ver con el tro del subdesarrollo, abre la opor- ciados con una perspectiva regional,
paso del campo de Internet al ámbi- tunidad discursiva de de plantear la en contextos de conflicto social,
to de las telecomunicaciones, proce- ‘necesidad’ de aparecer en la escena político y armado, en relación con
so en el cual se consolidaron las global como espacio ‘atractivo’ para los Derechos Humanos y orientados
relaciones sociales tendientes al uso la inversión económica. Así, esta no a fortalecer la participación de las
de la tecnología y se generó un es de desarrollarse para invertir en el comunidades locales en la construc-
oligopolio de las comunicaciones, lo país, sino de crecer para hacerse atrac- ción de un desarrollo integral que
que implicó que el campo de Internet tivo a la inversión [sic], por supues- “involucra las dimensiones económi-
se diluyera en un campo más amplio to, extranjera” (76). Esta perspectiva ca, política, cultural, social, medio-
que abarca la telefonía móvil y los crea una nueva matriz de distribución ambiental y espiritual, como un
servicios de televisión por cable. Por de las poblaciones a partir del crite- todo complejo que apunta al soste-
ello, “detrás del encanto por la con- rio de acceso a la información, la lla- nimiento de procesos a largo plazo”
vergencia tecnológica, se esconde un es- mada “brecha digital”, de modo que (89). En consecuencia, con este in-
cenario menos fascinante donde los la pobreza se conceptualiza en el es- terés fueron seleccionados como
grandes grupos económicos (naciona- cenario contemporáneo como inca- muestra el Programa de Desarrollo
les y extranjeros) –aprovechando y pacidad de acceso y, por lo tanto, y Paz del Magdalena Medio, el Pro-
usufructuando las prebendas de la desconexión frente a las lógicas de grama de Desarrollo y Paz del Orien-
apertura económica llevada a cabo por inversión del capital trasnacional. En te Antioqueño y la Fundación Pro
el Estado–, se apoderan de posicio- este sentido, si se me permite una Sierra Nevada de Santa Marta. Sin
nes cada vez más dominantes dentro analogía, para desarrollarse y salir de necesidad de recurrir a idealizaciones
del campo a través de la convergencia la pobreza pareciera ser imperativo que esencializarían el lugar de los
de capitales” (45-46). conectarse a la Matrix. Hay que decir PDP, los autores analizan las agendas
que para los autores “el homogéneo de desarrollo y paz que manifiestan
De otro lado, al conceptualizar término ‘brecha digital’ desconoce las estos actores en sus páginas electró-
la tecnología como un objeto cultu- dinámicas propias de los contextos nicas. El resultado de dicho ejercicio
ral, los autores analizan la relación sociales, sus particularidades, sus rit- les permite realizar recomendaciones
entre Internet y el discurso desa- mos, y es una excusa perfecta para importantes al uso de las tecnologías
rrollista, recogiendo para ello los inducir a los países pobres a realizar de la información y la comunicación
aportes que ha efectuado Arturo Es- cambios estructurales que más que que adelantan dichos actores, y resal-
cobar a la deconstrucción del desa- generar autonomía lo que hacen es tar las particularidades de los mismos
rrollo. En este sentido, Internet no facilitar procesos de dependencia eco- en relación con sus concepciones de
se asume solamente como un objeto nómica, política y cultural” (81). desarrollo y paz.
NÓMADAS 243
Requerimientos
para la participación en NÓMADAS
Parámetros generales para la publicación de artículos Citas y bibliografía
• Inicialmente, los interesados en participar de la sección • Las citas son de carácter explicativo. Estas deben desarrollarse
monográfica de cada número, cuyo tema es anunciado en la al final del texto e identificarse con un número consecutivo.
edición anterior de NÓMADAS, pueden remitir a la revista • La citación bibliográfica debe hacerse dentro del texto, utili-
un resumen, máximo de una página, en el que identifiquen la zando paréntesis para relacionar el autor o autores, el año de
investigación en la cual se originaría su artículo, el problema a publicación y la página o páginas, así: (Freire, 1970: 123-130).
abordar, la perspectiva y los aportes que se esperan de él. La El libro de donde procede dicha citación debe relacionarse en
coordinación del número comunicará si es aceptado para que la bibliografía.
así, el proponente proceda a elaborar el texto. • La bibliografía debe elaborarse en orden alfabético siguiendo
• La recepción de los artículos no implica necesariamente su los modelos aquí descritos:
publicación en tanto los textos deben seguir un riguroso pro- – Cuando se refiere a libros:
ceso de evaluación realizado por pares académicos. WINNER, Langdon, 1987, La ballena y el reactor, una
• Los plazos para la presentación de artículos son: para el núme- búsqueda de los límites en la era de la alta tecnología, Barcelo-
na, Gedisa.
ro de abril la primera semana de septiembre; para el número
de octubre la primera semana de junio. - Cuando se refiere a artículos de publicaciones:
MUÑOZ, Darío, 2006, “Sexualidades ‘ilegítimas’. Bio-
• Si los árbitros llegaran a sugerir ajustes a un texto, los autores se
política heterosexista y política de reconocimiento”, en:
comprometerán a entregar la nueva versión en un plazo no ma-
Nómadas, No. 24, Bogotá, IESCO - Universidad Central.
yor a dos semanas (15 días), luego de recibidas las observaciones. - Cuando se trata de un capítulo de libro:
• Los artículos que se publican en NÓMADAS deben ser inédi- ROSTAGNOL, Susana, 2004, “Posibilidades y limitacio-
tos. Se eximen, como excepción, aquellos escritos en idiomas nes del activismo sociosexual en el contexto uruguayo”,
diferentes al español cuyas traducciones sean inéditas y cuyos en: Josefina Fernández y Paula Viturro (comps.), Cuerpos
planteamientos resulten fundamentales para la edición. ineludibles. Un diálogo a partir de las sexualidades en América
• Los autores de los artículos deben autorizar por escrito la Latina, Buenos Aires, Ají de pollo.
publicación de su texto en NÓMADAS en los formatos impre- - Cuando el autor es una institución:
so y virtual, así como en todos aquellos que a futuro se desarro- MINISTERIO de Educación Nacional, 1995, La Identi-
llen con el fin de que la revista llegue a diversos públicos. dad, Bogotá, Colombia.
• Es indispensable que los autores indiquen si su artículo es - Si el documento está disponible o fue consultado en
producto o desarrollo de una investigación en curso o con- Internet, debe citarse las referencia de donde fue toma-
cluida –todos han de tener origen investigativo–. Se debe do y escribirla entre signos de menor y mayor que < > y
incluir en nota a pie de página el nombre del proyecto, el señalar la fecha de consulta.
objetivo, las fechas en que se inició y terminó, la entidad que
lo financia y la que lo ejecuta. Parámetros para publicación de reseñas
• En caso de que un artículo sea objetado o rechazado por sus • Las reseñas de libros en general y de proyectos o investigacio-
pares, la revista se compromete en dar a conocer a su autor los nes del IESCO y de la Facultad de Ciencias Sociales, Humani-
resultados de la evaluación. dades y Arte de la Universidad Central, tendrán una extensión
máxima de cinco cuartillas, hoja tamaño carta, doble espacio,
Sobre la presentación del texto letra Times New Roman de 12 puntos.
• El texto debe estar escrito a doble espacio y en letra Times • Los textos de las reseñas de libros se encabezarán con los
New Roman de 12 puntos. datos generales del libro: autor, editorial, año, número de
• La extensión del artículo debe ser de máximo 18 cuartillas con páginas y ciudad.
márgenes superior, inferior y de costado de 2.5 cm. En esta • Las reseñas de proyectos e investigaciones se encabezarán con
extensión se incluyen el resumen en tres idiomas, las referen- los datos del proyecto: director(a), investigador(a) asistente,
cias biográficas del autor e investigativa del escrito, la biblio- coinvestigador(a), asesor(a) externo(a), auxiliares y entidades
grafía y las citas. cofinanciadoras.