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Las “locas” de la Plaza de Mayo

La lucha de las Madres de Mayo contra la


dictadura militar a favor de la vida
Edvaldo Nabuco*
Paulo Amarante*

*Filósofo, Profesor en Me-


moria Social, Investigador
Titular del Laps (Lab-
oratorio de Estudios e
Investigación en Salud
Mental y Atención Psi-
cosocial) Fiocruz – Río de
Janeiro / Brasil; Doctor
Ho-noris Causa de la
Universidad Popular de Introducción
las Madres de la Plaza de
Mayo – Buenos Aires / Para el sociólogo Boaventura de Sousa por los organismos internacionales. Sin
Argentina.
Santos, las luchas contra la hegemo- embargo, algunos movimientos sociales
*Médico Psiquiatra, nía del capitalismo se dan en diversos han conseguido demostrar lo contrario
Doutor em Saúde Pública, contextos. Para este autor, la reacción a al denunciar y contribuir a desmontar
Professor Titular do Laps
(Labo-ratório de Estudos
esas luchas empieza por la estrategia de las prácticas de violencia y terrorismo
e Pesquisa em Saúde descalificar a los sujetos sociales para de estado.
Mental e Atenção así descalificar sus prácticas sociales
Psicossocial)/ Fiocruz – (Santos, 2006). De esta manera, distintas Así sucedió con la lucha de las Madres
R i o d e J a n e i r o / Brasil;
Doutor Ho-noris Causa formas de lucha contra la opresión y la de la Plaza de Mayo, en Argentina, que
da Uni-versidade Popular tortura han sido consideradas durante fueron consideradas locas por los mili-
das Madres da Plaza de mucho tiempo no creíbles por los es- tares. Su locura fue, por una parte, asu-
Mayo- Buenos Aires/
Argentina tados nacionales de América del Sur y mir el coraje de denunciar, en pleno

XX Átopos
régimen militar, el secuestro y desapari- entraban muy jóvenes en manicomios
ción de cerca de 30 mil personas, en su de los cuales nunca saldrían. O saldrían
mayoría jóvenes, sus hijos y nietos, que arrasados, mortificados, sin proyecto de
luchaban contra la dictadura. Por otra vida, en una analogía que nos remite a
parte, su locura fue la de exigir la reapa- los Crímenes de la Paz, que nos trajera
rición con vida de los miles de militan- Franco Basaglia (2005). Vieron además
tes, cuando toda la sociedad sabía que cómo la acusación de locura, que ellas
habían sido ejecutados sumariamente, sentían en su piel, quitaba a personas su
muchos de ellos arrojados en alta mar. estatus de ciudadanía, de derechos, de
Y, por fin, estaban locas también por no construcción de sus propias vidas. Y se
haber aceptado ningún tipo de indem- dieron cuenta de que eran Madres tam-
nización, de compensación financiera bién de aquellos sujetos que, durante
por parte del Estado, pues decían: “la las dictaduras -o no-, eran víctimas de
vida ¡no tiene precio!” los estados permanentes de violencia,
de segregación, de exclusión.
El inicio de toda esta historia sucede en
un período en que toda Argentina, en Esta consciencia está en la base de la
el auge de esta lucha, se volcaba en su creación del Congreso Internacional de
gran pasión: el Campeonato Mundial de Salud Mental y Derechos Humanos, que
Fútbol de 1978, que la dictadura utilizó organizó por primera vez en noviembre
como propaganda de una Argentina su- de 2002, la Universidad Popular de las
puestamente “libre y democrática”. Madres de la Plaza de Mayo. Desde en-
tonces, el Congreso se repite todos los
A pesar del sufrimiento por la desapari- años, con participación de militantes de
ción de sus hijos y nietos y tantas otras distintas partes del mundo que discuten
víctimas del terrorismo de Estado, las estrategias de lucha contra la violencia
Madres de la Plaza de Mayo superaron de las instituciones y saberes psiquiá-
la violencia, arrogancia e indiferencia tricos y psicológicos en todo el mundo,
de los militares y llevaron la lucha hasta particularmente en América Latina.
sus últimas consecuencias. No se intimi-
daron al ser llamadas locas, decían: “sí, La toma de la Plaza de Mayo
somos locas”; y promovieron una de las
más hermosas luchas políticas de la his- Según Jean Pierre-Bousquet (1983),
toria reciente, reconocida en varias par- Argentina vive en su sociedad dos posi-
tes del mundo. ciones: de un lado un país con caracterís-
ticas europeas, orgulloso de sus hábitos
El adjetivo “locas”, llevó a las Madres de culturales, y, de otro un país donde resi-
la Plaza de Mayo a volcarse con los locos den desigualdades sociales profundas.
que poblaban los manicomios argenti- A lo largo de su historia, Argentina tuvo
nos, hacia los considerados locos que que enfrentar a gobiernos militares, has-
sufrían los problemas cotidianos de la ta cuando asume el estado Juan Perón,
humillación, del estigma, de la discrimi- en 1946, que inicia un amplio conjunto
nación. Vieron cómo muchas personas de programas sociales; medidas que

Átopos XXI
terminan por provocar la insatisfacción acciones, los militares diseñan una estra-
de los sectores reaccionarios del ejército tegia de propaganda declarando como
argentino. Entre estas acciones constan enemigos de Argentina a aquellos que
obras sociales eficientes, un Código de luchaban por mejores condiciones de
Trabajo y una Constitución modernos, vida en el país. Esto justificó el secuestro
convenios colectivos que favorecieron a y la muerte de miles de personas. Estos
los trabajadores, la fijación de un salario secuestros y estas muertes sucedieron
mínimo, el sufragio femenino, y la obli- sin que la población y la opinión pública
gación de los empresarios de tener en internacional tuvieran conocimiento de
cuenta las demandas de los trabajado- las dimensiones de lo que estaba suce-
res. Medidas que levantaron fricciones diendo. Sin embargo, según Bousquet:
con sectores del ejército que acabaron “Cuando un jueves de abril de 1977 a las
por sacar a Perón del gobierno, bajo la cinco de la tarde, catorce mujeres entre
presión del poder económico de la oli- los 40 y los 60 años de edad, madres de
garquía, llevándolo al exilio. No obstan- desaparecidos, desafían la prohibición
te, con la clase trabajadora organizada y del derecho de reunión promulgada por
con el grupo armado, los montoneros, la todopoderosa Junta Militar y mani-
al frente de la lucha política, se realizan fiestan en la Plaza de Mayo su dolor y su
una serie de actos contra los militares rechazo a ser despedidas sin respuesta
azuzando los ánimos en los cuarteles. de tribunal en ministerio, los generales
Entre 1970 y 1973, en los últimos años pierden su primera batalla” (Idem: 43).
del gobierno militar presidido por el
general Alejandro Lanusse, los monto- La lucha de las Madres
neros inician la lucha armada, llevando
a cabo una serie de secuestros y aten- Tomar la Plaza de Mayo tiene un gran
tados dirigidos contra sindicalistas, diri- significado en la lucha emprendida por
gentes de empresas, políticos o policías las Madres de los desaparecidos políti-
considerados por los montoneros como cos. Las manifestaciones públicas habían
traidores, explotadores, agentes del im- sido prohibidas por la Junta Militar tras
perialismo o torturadores (Idem: 29). Los el golpe y la represión, y los secuestros
militares crean por su parte la Triple A eran frecuentes. La protesta significaba
(Alianza Anticomunista Argentina). romper con el silencio y el ocultamiento
que los militares impusieron a las des-
Isabel Perón asume la presidencia en apariciones. Según las Madres (1989):
1974 y sufre la presión de los montone-
ros. Entre tanto, las muertes violentas “Mucha gente se pregunta por qué
cometidas por la Triple A, desde 1974, habiendo otros organismos las ma-
se suceden dramáticamente, llegando dres fuimos la Plaza, y por qué nos
a 894 en 1975. En las primeras horas sentimos tan bien en la Plaza. Y esto
del 24 de marzo de 1976, tiene lugar un es una cosa que la pensamos ahora,
golpe de estado y los militares asumen no la pensamos ese día; y cuanto más
nuevamente el poder con la amenaza hablo con otra gente que sabe más
de atacar a la guerrilla. Para justificar sus que nosotros, más nos damos cuenta

XXII Átopos
por qué se crearon las Madres. Y nos a 60, 70 Madres. La policía, percibiendo
creamos porque en los otros orga- el crecimiento de las Madres, no dejó
nismos no nos sentíamos bien cerca; que ocuparan el lugar, obligándolas a
había siempre un escritorio de por “circular”. Así, obedeciendo la orden
medio, había siempre una cosa más de no quedar concentradas en los ban-
burocrática. Y en la Plaza éramos cos de la plaza, aquel conglomerado de
todas iguales. Ese “qué te paso?”, mujeres que se habían reunido para una
“Cómo fue?”. Éramos una igual a la actividad política, empezaron a “circu-
otra; a todas nos habían llevado hijos, lar” por la Plaza, y así nació la Marcha
a todas nos pasaba lo mismo, había- que, todavía hoy, se repite todas las
mos ido a los mismos lugares. Y era semanas:
como que no había ningún tipo de
distanciamiento. Por eso es que la “En estas primeras acciones, ese ca-
Plaza agrupó. Por eso es que la Plaza minar, tomándonos del brazo, afe-
consolidó” (Madres: 1989; 7). rrándonos las unas a las otras, contán-
donos, fuimos consolidando nuestro
Las Madres pasaron a ser vistas como pensamiento y creciendo y tomando
las familias de los “terroristas”. La cam- conciencia. El tema, primero, fue que
paña en su contra hizo que la lucha de nos pedían que nos fuéramos, una
las Madres de la Plaza de Mayo fuese vez que no salíamos de la Plaza, por-
vista con desagrado por parte de la po- que ellos querían sacarnos y nosotras
blación que, por falta de conocimiento, no, insistimos con dar vueltas alrede-
pensaba que no era verdad que había dor de la Pirámide; entonces un día
desaparecidos políticos en el país. La vinieron y le pidieron el documento
lucha de las Madres tuvo entonces que a una madre, y la madre se lo dio. Y
romper con ese silencio y la Plaza de ya esa madre quedaba bastante asus-
Mayo, palco de importantes manifes- tada porque nosotras creíamos - to-
taciones políticas, sería el lugar donde davía muy ingenuas - que no sabían
debería tener lugar la ruptura con ese ellos quiénes éramos. Otro día, otra
silencio. vez. Y un tercer día, un tercer jueves,
cuando le piden el documento a una
A partir de esta acción, las Madres pa- decidimos dar el documento todas;
saron a organizarse e iniciaron medidas claro, el “cana”)1 con 300 documen-
concretas junto a las autoridades: em- tos (que ya casi éramos) qué iba a ha-
pezaron a redirigir peticiones destina- cer, no le servían para nada. Y sirvió
das al Departamento de Policía, otras para que, en vez de estar muy pocos
al Ministerio del Interior, reivindicando en la Plaza - como estábamos en ese
a las autoridades información sobre el tiempo - nos quedáramos muchísimo
paradero de sus familiares. Otras iban rato, hasta que nos dio el documen-
casa por casa para convocar a Madres to una por una, identificándonos...
a ir a la Plaza de Mayo. De esta forma, Realmente para nosotras fue una ac-
la movilización fue creciendo. De las 14 ción, primero, de unidad, de mucha 1
Policia, en la jerga po-
Madres iniciales, la Plaza pasó a acoger unidad (porque todas o ninguna), y pular

Átopos XXIII
después también para el “cana” para decidieron ir a las dos actividades, pero
que no nos pidiera más documentos, no sabían como identificarse:
porque el “cana” dijo si ahora en vez
de dárnoslo una nos lo dan todas ya “Entonces empezamos a ver cómo
no nos sirve más, porque era una ac- nos identificaríamos, y una dijo ‘va-
ción intimidatoria” (Madres: 1989; 9). mos a ponernos un pañuelo’. ‘Un
pañuelo..., y ¿de qué color? Porque
La Plaza de Mayo pasó a ser el lugar tiene que ser del mismo color’. ‘Y
donde las Madres se sentían unidas, bueno, blanco’ . ‘Y, che, y si nos pone-
unas a otras, con fuerza suficiente para mos un pañal de nuestros hijos’ (que
superar el dolor y seguir la lucha por la todas teníamos esa cosa de recuerdo,
“aparición con vida” de sus hijos y nie- que una guarda). Y, bueno, el primer
tos. Las manifestaciones, a pesar de las día, en esa marcha a Luján2, usamos el
intimidaciones de la Junta Militar, pasa- pañuelo blanco que no era otra cosa,
ron a tener lugar con mayor frecuencia. nada más ni nada menos, que un
Las Madres utilizaban la presencia de pañal blanco de nuestros hijos. Y así
personas muy reconocidas y populares nos encontramos, porque ese pañue-
para dar más visibilidad pública a sus lo blanco nos identificaba” (Madres:
manifestaciones. 1989; 11).

Fue así, por ejemplo, con la visita del Cuando las Madres empezaron a gritar
Embajador Terence Todman (EUA), en Luján exigiendo saber el paradero
como fueron a la Plaza agitando un pa- de sus desaparecidos, muchas personas
ñuelo y diciendo que tenían hijos des- empezaron a tener conocimiento de
aparecidos. Esta era la forma de mos- que ellas estaban buscando a sus hijos.
trarse más visibles para la prensa y la
sociedad en general. La prensa también empieza a saber,
pero se manifesta poco, por recelo ha-
A partir de estas acciones, el gobierno cia la dictadura o por connivencia con
del General Videla, aumenta la pre- ella. Solo un periódico, de circulación
sión contra las manifestaciones de las limitada, da espacio a la lucha de las
Madres, ordenando a policías armados Madres. De esta forma, sabiendo la im-
que las hiciesen dispersar de la Plaza. portancia de los medios para su lucha,
Las Madres se enfrentan a los policías. Marta, una de las Madres, invita al pe-
Cuando el Secretario de Estado Cyrus riodista Jean-Pierre Bousquet a conocer
Vance (EUA) visitó Buenos Aires, la es- lo que ocurría en Argentina. La respues-
trategia fue semejante, las Madres ta de los militares no se hizo esperar.
tomaron la Plaza de San Martín reivin- Las Madres pasaron a ser intimidadas y
dicando la aparición de sus familiares. secuestradas. Dos Madres, Mary Ponce
En cierta ocasión, las Madres prepara- y Esther Balestrino de Cariada, sufren un
ban una marcha y, al mismo tiempo, la terrible secuestro. El secuestro dejó a
Iglesia también preparaba una proce- las Madres terriblemente desesperadas.
2 Ciudad próxima a
Buenos Aires sión con miles de jóvenes. Las Madres Azucena, una de las líderes, convoca a

XXIV Átopos
todas para no desistir, y seguir con la que combatiendo al “terrorismo”, había
demanda de encontrar a sus desapare- tenido lugar una guerra y que, a cuen-
cidos. El día 10 de diciembre de 1977, ta de ello, habían muerto personas. Los
cuando su demanda fue publicada en militares declararon que esas muertes
el periódico La Nación, Azucena es se- fueron necesarias para la defensa de
cuestrada en la esquina de su casa: Argentina. El gobierno militar estaría
dispuesto a pagar indemnizaciones a los
“Pero nos habíamos dado cuenta que parientes de aquellos que, según ellos,
Azucena nos había enseñado un ca- habían muerto en esa guerra, pero las
mino. Que en la Plaza nos sentíamos madres no aceptan. Para Marta, una de
una igual a la otra, porque éramos las madres, aceptar que su hijo estaba
iguales, porque nos pasaba lo mismo, muerto, sería matarlo dos veces. Para
porque el enemigo estaba siempre ellas, era preciso decir quiénes eran los
en el mismo lugar y estaba cada vez asesinos, porque sus hijos habían sido
más duro porque el enemigo nos ha- asesinados y los asesinos tenían que ser
bía mandado secuestrar” (Idem: 15). juzgados. Para el periodista Jean-Pierre
Bousquet, cada vez que los militares
Argentina reconoce la lucha de las intentaban esconder lo que había su-
Madres cedido, las Madres se fortalecían más.
A estas alturas, era imposible negar el
La lucha de las Madres con demandas hecho de que había miles de desapare-
al gobierno reivindicando información cidos políticos en Argentina.
sobre el paradero de sus hijos se inten-
sifica. Los militares prosiguen la serie En 1978, los militares intentan asestar
de secuestros que habían iniciado en un duro golpe a las Madres. Preparan
1976. La religiosa francesa Cathy es se- el campeonato mundial de fútbol. Las
cuestrada, lo que lleva a la Embajada de Madres inician una movilización, sin
Francia a tomar consciencia de lo que embargo, son vistas como aquellas que
sucede en Argentina aunque, sin mani- quieren manchar la imagen de Argentina
festarse firmemente contra lo que ocu- ante el mundo. Sin embargo, con la
rre. Los religiosos argentinos, aunque realización de la Copa del Mundo, va-
muchos de ellos estuviesen ligados a rios periodistas extranjeros estaban en
las Ligas Agrarias, escogen callar ante Argentina y pudieron registrar la mani-
el terrorismo de estado implantado por festación de las Madres. Argentina ganó
los militares argentinos. Además de las el Mundial y la lucha de las Madres tuvo
Madres, se constituye otro movimiento más repercusión en el exterior que en
de familiares de desaparecidos buscan- su propio país. Finalizada la Copa del
do apoyo junto a las entidades de dere- Mundo, las Madres pasan a sufrir una
chos humanos. fuerte represión, prohibiéndoseles ma-
nifestarse en plaza pública.
Sin poder seguir negando la existen-
cia de secuestros y de desaparecidos, Las Madres superan el dolor y fortale-
el gobierno del General Videla declara cen la lucha al descubrir que Anatole

Átopos XXV
Boris y Eva Lucía Julien Grisona están sin embargo, en su edición habla de la
vivos. Según Bousquet, habían sido da- maniobra llevada a cabo por los milita-
dos por desaparecidos en Argentina en res para engañar a la CIDH. Las Madres
septiembre de 1976, al mismo tiempo fueron al encuentro del CIDH e hicieron
que sus padres. una fila doble para entregar sus deman-
das; al tiempo que, azuzadas por los
“Y esos niños, secuestrados en sep- militares varias personas insultan a las
tiembre de 1976 cerca de Buenos Madres que formaban una larga fila para
Aires, fueron encontrados casi tres entrega de las solicitudes. Pero, gracias
años más tarde en Chile. El padre esta- a la persistencia de las Madres, la pobla-
ría confinado en la cárcel de Libertad, ción comienza a increpar al gran núme-
en Uruguay, según reconoció el mis- ro de personas que estaban esperando
mo presidente del Tribunal Militar a la Comisión Internacional de Derechos
Supremo Uruguayo, el coronel Silva Humanos. Se empieza a reconocer la lu-
Ledesma. En cuanto a la madre, de la cha de las Madres.
que no se volvió a saber nada, podría
Las Madres de la Plaza haber sido herida durante el asalto También la prensa da amplia cobertura
de Mayo estiman que
hay cerca de 30 mil des-
y no haber sobrevivido” (Bousquet: a la visita de la Comisión y a la lucha de
aparecidos políticos en 1983; 135). las Madres. El resultado, tras un tiempo
Argentina. Los grandes de espera y aflicción, demostraba que
medios no difunden el
Con los relatos de la lucha de las Madres los militares del gobierno de Argentina
resultado del informe.
Pero el informe circuló alcanzando la opinión pública internacio- habían cometido violación de los dere-
entre los medios diplo- nal, el gobierno del General Videla au- chos humanos, y habían secuestrado y
máticos y políticos pro- menta la represión a la manifestación de asesinado a miles de personas durante
vocando una gran in-
quietud en los militares las Madres y articula un escenario políti- el régimen militar. En un informe realiza-
argentinos. co. Convoca a la Comisión Internacional do porla CIDH se señala “como respon-
de Derechos Humanos (CIDH) para in- sables de esta situación a ‘la acción o la
tentar demostrar que en Argentina no negligencia de las autoridades públicas’
hay desaparecidos ni represión. Cuando y agregan haber llegado a la convicción
llega la Comisión, el gobierno militar de que ‘personas pertenecientes a los
prepara a la prensa para que no se ma- organismos de seguridad gubernamen-
nifiesten sobre las Madres. La Comisión tales cometieron numerosos asesinatos
se instala en Argentina en octubre de de hombres y mujeres durante su deten-
1979. Los militares habían preparado ción”. Así como violaciones del derecho
todo un escenario que coincidiría con a la vida, a la libertad, a la seguridad e
el final del Campeonato Mundial de integridad personales y del derecho a la
Juniors, en Japón, entre Argentina y la justicia (Bousquet, 1983; 169-170)
Unión Soviética, donde el joven Diego
Maradona despunta como promesa. Conclusión: “Sembramos ideales para
cosechar esperanzas” - Hebe de Bo-
Delante de la pantomima montada, las nafini
Madres se preparan para llevar sus de-
mandas a la CIDH. El periódico Clarín, La lucha de las Madres de la Plaza de

XXVI Átopos
Mayo ha promovido hasta el momento editorial gráfica que produce material
el enjuiciamiento y condena de varios denunciando las desigualdades socia-
torturadores y asesinos militares ar- les en Argentina, en América Latina y
gentinos. Con la reorganización de los en el mundo. Tienen además un Centro
movimientos sociales y políticos y el tra- Cultural y otras actividades, como la ra-
bajo de jueces comprometidos con la dio “La Voz de las Madres” (AM 530), el
lucha por la democracia y el Estado de proyecto Misión Sueños Compartidos,
Derecho, se inició un proceso de reco- la Revista Sueños Compartidos, la TVM
nocimiento de los asesinos y su proceso (Televisión Virtual de las Madres http://
ante la justicia. Hubo mucha tensión y www.youtube.com/user/infomadres),
violencia hasta que los militares fueron muchas empresas recuperadas, come-
juzgados. dores populares, fábricas ocupadas.

Aparición con vida. Este es el lema de Las Madres consiguieron transformar el


las Madres. dolor individual, de la pérdida de sus hi-
jos, en una lucha colectiva. Pasaron de
Hebe de Bonafini, importante líder de ser sujetos individuales a sujetos colec-
las Madres, recibe a todos, todos los tivos. Transformaron su odio en vida, en
años, en la apertura del Congreso y lucha por la vida. No se quedaron en la
Fórum Internacional de Salud Mental y venganza, en el rencor, en la denuncia
Derechos Humanos, en Buenos Aires. sólo de la violencia. Aprovecharon su
Antes de la apertura se realiza una capacidad de superación, de organiza-
Marcha en la Plaza de Mayo, frente a ción, de lucha, para inventar y producir
la Casa Rosada, como todos los jueves vida. Tal vez un simple ejemplo pueda
¡desde hace 34 años! dar cuenta de tamaña dimensión: “un
pueblo pobre, en la periferia de Buenos
La lucha de las Madres, decía Marta, una Aires, era conocido como la “Ciudad
de las líderes, antes era por sus hijos, Oculta”. Era oculta porque era fruto
ahora es por todos los jóvenes argen- de una invasión de tierras al lado de un
tinos que van al Congreso y que se han gran hospital que nunca fue terminado.
convertido en sus hijos. No hay por qué Resultado de obras faraónicas cuyo ob-
recibir indemnización mientras haya una jetivo es mucho más la apariencia po-
persona pasando hambre. ¿Cuánto vale lítica y la ganancia de aquellos que las
la vida humana para recibir una indem- inician (pero que no necesariamente las
nización? Las Madres luchan para que terminan para que la población pueda
las injusticias sociales dejen de suceder disfrutar de los beneficios). Un edificio
tanto en Argentina como en el resto del enorme, con casi 15 plantas, innumera-
mundo. bles salas vacías y decadentes, que que-
dó olvidado. Y olvidada pasó a quedar
Para fortalecer su lucha, las Madres aquella región que, poco a poco, fue
han creado una Asociación de Madres siendo ocupada por gente muy pobre:
de la Plaza de Mayo, que impul- recolectores de basura, de papel, de
sa una Universidad Popular y una plástico...; gente viviendo de los restos y

Átopos XXVII
Átopos 71
como restos de la sociedad. En un terri- dificultades y de grandes luchas sociales
ble día, la villa ardió. Un incendio voraz y políticas.
acabó rápidamente con todo. Miles de
personas, en un abrir y cerrar de ojos, En la conmemoración de los 20 años de
perdieron sus casas improvisadas, y sus lucha Hebe de Bonafini nos convocó:
trabajos y materiales de venta e inter- “El pueblo comienza a comprender
cambio. Los políticos del Estado, de la que asesinaron a 30.000 jóvenes para
región (provincia) y del municipio, no saquear impunemente el país. Un día
hicieron nada. Se cruzaron de brazos, no lejano, el pueblo se levantará y
decían que era una villa ilegal, una in- nuestra tierra se estremecerá con su
vasión de tierras públicas, trabajadores clamor señalando a los que asesina-
clandestinos, marginales. Sin medios ron a mansalva al pueblo desarma-
para su supervivencia, los abandonados do. Ellos, los poderosos, tendrán que
encontraron a las Madres y ahí se hizo darse cuenta que el pueblo existe y
crecer la Misión Sueños Compartidos. que ES capaz de rebelarse cuando se
Organizando el voluntariado, distribu- lo empuja a la muerte y a la miseria”.
yendo las tareas, creando un espíritu (Bonafini; 1986:103).
de lucha y solidaridad, las Madres em-
pezaron a levantar la villa. Se construye- ¡Ni un paso atrás!
ron centenares de casas, escuelas y la
villa pasó a ser conocida como “Ciudad
Luz”. Sueños Compartidos se repite en
distintos rincones de Argentina.

Con ocasión de los congresos interna-


cionales se realizan varios encuentros y
Asociación Madres de
Plaza de Mayo. Historia
debates con distintos actores sociales
de Las Madres de Plaza de América Latina y del mundo, abor-
de Mayo. Editorial dando varios temas relacionados con los
Madres: Buenos Aires, derechos humanos, sobre varios aspec-
1986.
tos (etnia, género, sexualidad, trabajo,
Basaglia, Franco. Escritos raza, cultura y diversidad cultural, etc.).
Seleccionados de Salude Pero, principalmente es en el terreno de
Mental y Reforma Psi-
quiátrica (P. Amarante, la salud mental en el que se desarrolla
org.). Editora Garamond: el debate, pues el modelo psiquiátrico
Rio de Janeiro, 2005. asilar-manicomial todavía hegemóni-
co en América Latina, que sumado al
Bousquet, Jean-Pierre.
Las locas de la Plaza de creciente proceso de medicalización,
Mayo. Cid Editor. Buenos la falta de creación de servicios sustitu-
Aires, 1983. tivos al modelo tradicional, la ausencia
Santos, Boaventura de de redes sociales de políticas públicas
Sousa. La Gramática del para las personas en sufrimiento men-
Tiempo. Afrontamento: tal, caracterizan un campo de muchas
Porto, 2006.

XXVIII Átopos

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